«Por la fe Abraham, que había recibido las promesas, fue puesto a prueba y ofreció a Isaac, su hijo único»

(Hebreos 11:17 NVI).

Recuerda, Dios prometió que los descendientes de

Abraham serían más numerosos que las

estrellas.

Isaac es el hijo por medio de

quien tus descendientes serán contados1.

Pero después de años de esperar al hijo prometido, Dios le pide a

Abraham que se lo devuelva.

¡Dios mío!

Requiere mucha confianza hacer lo que alguien te pide, en especial si no sabes cuáles son las razones de ese pedido.

Abraham tenía tanta confianza en la fidelidad y verdad de Dios que sabía que Dios podría traer a Isaac de vuelta a la vida si fuera necesario para que Dios cumpliera Sus promesas a Abraham. (Ver Hebreos 11:19.)

¡Detente! Ahora sé que obedecerás lo

que sea que te diga, habiendo visto que estabas dispuesto a entregar a tu único hijo.

(Génesis 22:12)

Lee el relato completo en Génesis 22:1–18.

1 Ver Hebreos 11:17.

Aventuras en Hebreos 11, 3a parteLos versículos fueron tomados de la versión Reina Valera Contemporánea, o bien será especificada la fuente.

«Por la fe, cuando Moisés nació, sus padres lo escondieron

durante tres meses» (Hebreos 11:23).

Yo sé que Dios quiere que

protejamos a los hijos que Él nos

da.

No tememos las órdenes de

Faraón.

Miriam, sigue la canasta.

¡Oh, mira!¿Busco a alguien que

pueda alimentar y cuidar al bebé por ti?

¡Por supuesto!

Lee este relato en Éxodo 1:22, 2:1–10.

«Por la fe, cuando Moisés ya era adulto, rehusó llamarse hijo de la hija del

faraón, y prefirió ser maltratado junto con el pueblo de Dios, antes que gozar de los deleites temporales del pecado»

(Hebreos 11:24–25).

Es mejor sufrir ahora, aun si eso significa no disponer de los lujos que tenía en el

palacio.

¡Qué tonto eres! ¡Mira todo lo que

estás dejando!¡Prefiero

esperar a tener las riquezas

eternas!

«Por la fe salió de Egipto, sin temor a la ira del rey, y se

mantuvo firme, como si estuviera viendo al Invisible»

(Hebreos 11:27).

Escuché que el Faraón

está muy enojado contigo.

Temo más a Dios que al Faraón.

EGIPTODESIERTO

Hebreos 11 está lleno de relatos de personas que creyeron que Dios

podía y quería cuidarlos tal como se lo había

prometido.

Está la historia de la vez que Dios dividió el Mar Rojo

para Moisés.

Y para el pueblo de

Israel.

¿Nos trajiste hasta el desierto para morir aquí?

Este… ¿una

ayudita?

Bueno. Levanta tu cayado y dividiré el mar

por ti.

Lee el relato completo en Éxodo 14:10–23.

También está la historia de los muros de Jericó que se cayeron

después de que Josué guiara a los Israelitas a caminar alrededor de

los muros durante siete días.

Lee Josué 6:1–20.

Está también Rajab, que escondió a los espías de Josué cuando fueron a vigilar Jericó.

Me enteré de los milagros que su Dios

hizo por ustedes, y yo respeto a su Dios.

Lee este emocionante relato en Josué 2.

No hay suficiente tiempo para contar todas las increíbles historias de Gedeón, Barac,

Sansón, Jefté, David, Samuel y de todos los profetas que

tuvieron fe en que Dios haría milagros por ellos2. Gedeón

Te veo luego, Rufus.

Barac

Sansón

Jefté David Samuel

2. Hebreos 11:32

«Por la fe conquistaron reinos, impartieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones, apagaron fuegos impetuosos, escaparon del filo de la espada, sacaron fuerzas de flaqueza, llegaron a ser poderosos en batallas y pusieron en fuga a ejércitos extranjeros»

(Hebreos 11:33–34).

Pero debemos tener en cuenta que todas las hazañas increíbles

de estos héroes de la Biblia fueron posibles gracias a su fe

en un Dios poderoso.

¡La fe es poderosa!

¡Me pregunto qué puede hacer

nuestra fe!

¡Solo hay una manera de

averiguarlo!¡Seguir a

Dios!

Haré grandes cosas por

aquellos que creen en Mí y me siguen de

cerca.

Fin

Se encuadra en: Fe y vida cristiana: Fundamentos de la Biblia y el cristianismo: La fe-2b; Fe y vida cristiana: Fundamentos de la Biblia y el cristianismo: La fe-2fTexto: R. A. Watterson. Ilustraciones: Zeb. Diseño: Christia Copeland. Traducción: Adriana Vera y Antonia López.

Publicado por Rincón de las maravillas. © La Familia Internacional, 2012