coordinación general de planeación - azc.uam.mx · escolares y culturales de los jóvenes que...
Post on 20-Sep-2018
216 Views
Preview:
TRANSCRIPT
RESULTADOS DE LA ENCUESTA DE PRÁCTICAS ESCOLARES Y
ACTIVIDADES CULTURALES, 2011
Coordinación General de Planeación
Jefatura de Planeación, Prospectiva y Estudios Especiales
Noviembre de 2012
INTRODUCCIÓN
El siguiente documento proporciona un panorama de las características socioeconómicas,
escolares y culturales de los jóvenes que ingresaron a la Universidad Autónoma Metropolitana,
Unidad Azcapotzalco (UAM‐A) durante los meses de abril y septiembre de 2011, es decir, en los
trimestres 11‐P y 11‐O.
El objetivo principal de este informe es alimentar la reflexión colectiva que académicos y
autoridades realizan, desde sus espacios de trabajo, en torno a planes de estudio, perfiles de
ingreso y egreso, trayectorias académicas, perfiles de los jóvenes estudiantes y todo aquello que
se relaciona con la mejora de las condiciones institucionales para que los estudiantes transiten de
la mejor manera por la universidad.
La información que presenta este documento generó a partir de la encuesta de prácticas escolares
y actividades culturales que se aplica anualmente a los jóvenes de la UAM.
DESCRIPCIÓN DE LA ENCUESTA
La encuesta de prácticas escolares y actividades culturales forma parte del Sistema de Información
de Estudiantes, Egresados y Empleadores (SIEEE). Este sistema genera periódicamente datos sobre
los jóvenes estudiantes de la UAM en su tránsito por la universidad, los egresados y sus vicisitudes
en el mundo laboral y las características de los empleadores y mercados de trabajo.
La encuesta se aplica a todos los jóvenes de nuevo ingreso. Una vez que los jóvenes cumplen uno,
dos, tres y cuatro años en la universidad responden nuevamente la encuesta. Esto permite
reconstruir, hasta cierto punto, la trayectoria de una generación. En ella se hacen visibles
elementos que permanecen relativamente constantes y aquellos que cambian a lo largo de la
trayectoria.
La encuesta se compone de los siguientes apartados: información general, condiciones de estudio,
orientación vocacional, expectativas educativas y ocupacionales, prácticas académicas y
actividades culturales. La información obtenida a través de la encuesta se complementa con
algunas variables del Archivo General de Alumnos (AGA).
EL CONTEXTO DE LOS JÓVENES QUE INGRESARON EN 2011
En 2011, 28,552 jóvenes presentaron examen para ingresar a la UAM‐A. Después de 2010, es el
año con mayor demanda1 en la historia de la institución. A lo largo de década que terminó, el
número de jóvenes que intentó ingresar a la UAM incrementó sensiblemente.
Como reflejo de lo que sucede en otras instituciones públicas, únicamente 10.4 por ciento de los
jóvenes que presentaron examen en 2011 obtuvieron lugar en alguna de las 17 licenciaturas.
Hablamos de 2,983 jóvenes. Nueve de cada diez jóvenes que presentaron examen fueron
rechazados.
Sesenta y uno por ciento de los jóvenes aceptados son hombres y 34 por ciento mujeres. En la
División de Ciencias Básicas e Ingeniería encontramos la menor proporción de mujeres, por cada
tres hombres que lograron ingresar, sólo una mujer se incorporó a la universidad. A partir de esta
situación, observable en distintas generaciones, se puede afirmar que las ingenierías en la UAM
Azcapotzalco son un campo de conocimiento masculinizado.
También en CAD la proporción de mujeres es inferior a la de hombres, sin llegar a reproducir la
situación de CBI. De hecho, es un espacio mucho más paritario en términos de género: del total de
jóvenes que ingresaron a la división, 45.5% son mujeres. En el caso de CSH, 52.4% de las personas
de nuevo ingreso son mujeres. Esta situación refleja los procesos de feminización a que están
sujetas las ciencias sociales y las humanidades en la Unidad.
Tabla 1. Jóvenes de nuevo ingreso por división académica
CBI CSH CAD Total
Masculino Abs. 1072 492 289 1853
Rel. 74,7% 47,6% 54,5% 61,8%
Femenino Abs. 364 542 241 1147
Rel. 25,3% 52,4% 45,5% 38,2%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
1 En 2010 hubo 28,611 solicitudes de nuevo ingreso, 59 más que en 2011.
RESULTADOS DE LA ENCUESTA
Perfil sociodemográfico y actividades laborales
Dos terceras partes de los jóvenes de nuevo ingreso tienen entre 16 y 20 años. Veintisiete por
ciento tiene dieciocho años y 20% diecinueve años. Estos jóvenes han logrado construir
trayectorias continuas sin interrupciones entre el nivel de educación media superior y el nivel
superior. Veintiocho por ciento de los recién ingresados tiene entre 21 y 25 años. Este grupo
probablemente se compone de jóvenes que abandonaron el sistema de educación temporalmente
o que se incorporaron al mercado laboral antes de ingresar a la universidad. Seis por ciento tiene
entre 26 y 30 años, únicamente 2% es mayor de 30 años.
En las tres divisiones hay situaciones análogas respecto a la edad: la mayor parte de los jóvenes
que se incorporó a la universidad tiene entre 16 y 20 años. Aproximadamente una cuarta parte, en
las tres divisiones, tiene entre 21 y 25 años.
Tabla 2. Edad
CBI CSH CAD Total
16 a 20 Abs. 910 668 346 1924
Rel. 63% 65% 65% 64%
21 a 25 Abs. 403 286 153 842
Rel. 28% 28% 29% 28%
26 a 30 Abs. 95 57 26 178
Rel. 7% 6% 5% 6%
31 a 55 Abs. 28 23 5 56
Rel. 2% 2% 1% 2%
Total Abs. 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
La mayoría de los jóvenes que ingresaron en 2011 son solteros. Únicamente 4% reporta
compromisos afectivos a largo plazo. Catorce jóvenes afirman estar divorciados.
En la División de CSH y CBI encontramos una proporción similar de jóvenes no solteros: cuatro por
ciento. En CAD, 99% de la población es soltera.
Tabla 3. Estado civil
CBI CSH CAD Total
Soltero Abs. 1358 985 525 2868
Rel. 95% 95% 99% 96%
Casado Abs. 42 25 2 69
Rel. 3% 2% 0% 2%
Divorciado Abs. 8 6 0 14
Rel. 1% 1% 0% 0%
Unión libre Abs. 28 18 3 49
Rel. 2% 2% 1% 2%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Únicamente 4.6% de los jóvenes tiene hijos. En la División de CBI encontramos la mayor
proporción de jóvenes en esta situación: 5.3%. En CAD, únicamente 1.7% tiene hijos.
Tabla 4. Tienes hijos
CBI CSH CAD Total
Sí Abs. 76 53 9 138
Rel. 5,3% 5,1% 1,7% 4,6%
No Abs. 1360 981 521 2862
Rel. 94,7% 94,9% 98,3% 95,4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Con base en los datos anteriores hemos de afirmar que las características sociales de los jóvenes
que ingresaron en 2011 se acercan al tipo ideal de joven para el cual están diseñados los planes de
estudio de gran parte de las universidades. Se trata de jóvenes solteros, menores de 20 años, sin
compromisos afectivos o económicos duraderos, que han postergado su ingreso en el mundo
laboral y el ejercicio de responsabilidades asociadas a los roles adultos –la paternidad, por
ejemplo‐ y finalmente, que han realizado un tránsito inmediato entre la educación media superior
y el nivel superior.
Aunque dos terceras partes de los jóvenes que ingresaron en 2011 son estudiantes de tiempo
completo, lo que en este contexto implica que no se han insertado en el mercado laboral, una
proporción importante, 28.5%, trabaja. Esto significa que una cuarta parte de recién ingresados
divide su tiempo entre actividades académicas y actividades laborales. A partir de esta situación
podemos identificar dos perfiles, en función de la distribución del tiempo entre actividades
escolares y laborales, dentro de la UAM‐A: a) estudiante de tiempo completo b) estudiante
trabajadores. En esta última categoría cabria distinguir aquellos que utilizan su tiempo
fundamentalmente en actividades escolares, estudiante trabajador propiamente dicho, de
aquellos que dedican la mayor parte de su tiempo a actividades laborales –trabajador estudiante‐.
Es en la División de CBI donde encontramos el mayor porcentaje de estudiantes trabajadores, 31%
se encuentra en esta condición. CSH se encuentra cinco puntos porcentuales por debajo de CBI y
CAD seis puntos porcentuales.
Tabla 5. Trabajas
CBI CSH CAD Total
Sí Abs. 450 271 135 856
Rel. 31,3% 26,2% 25,5% 28,5%
No Abs. 986 763 395 2144
Rel. 68,7% 73,8% 74,5% 71,5%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
La razón principal, esgrimida por los jóvenes para trabajar, es la obtención de recursos económicos
para costear los estudios. En este sentido, el trabajo crea condiciones que permiten al joven
reproducirse en su rol de estudiante. En segundo lugar aparece ayudar al gasto familiar con 22.5%,
es decir, el trabajo juvenil ayuda a reproducir las existencia del grupo familiar. En tercer lugar, el
trabajo funciona, para 19% de los jóvenes trabajadores, como un medio para lograr independencia
respecto al núcleo familiar. Únicamente 7.2% de los jóvenes que trabajan lo hacen para obtener
experiencia profesional. Esto puede implicar que los trabajos desempeñados por la mayor parte de
los jóvenes están escasamente relacionados con la formación que reciben en la UAM, con la
implicación adicional de que no contribuirán en la conformación de su trayectoria profesional.
Tabla 6. Razones para trabajar
CBI CSH CAD Total
Pagarme mis estudios Abs. 179 107 57 343
Rel. 39,8% 39,5% 42,2% 40,1%
Ayudar al gasto familiar Abs. 99 67 27 193
Rel. 22,0% 24,7% 20,0% 22,5%
Sostener a mi familia Abs. 45 15 2 62
Rel. 10,0% 5,5% 1,5% 7,2%
Adquirir experiencia laboral Abs. 41 30 21 92
Rel. 9,1% 11,1% 15,6% 10,7%
Tener independencia económica de mi familia Abs. 86 52 28 166
Rel. 19,1% 19,2% 20,7% 19,4%
Total 450 271 135 856
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Líneas atrás se afirmó la existencia de tres tipos de perfiles en la UAM en función del tiempo
destinado a las actividades académicas y laborales. Setenta y uno por ciento de los jóvenes son
estudiantes de tiempo completo, 14% son estudiantes trabajadores –aquellos que trabajan veinte
horas o menos‐ y el resto son trabajadores estudiantes –trabajan más de veinte horas semanales‐.
Del total de los jóvenes que trabajan, la mitad lo hace más de 20 horas a la semana. Son
trabajadores de medio tiempo o tiempo completo. Veintiséis por ciento son trabajadores
ocasionales, es decir trabajan menos de 10 horas a la semana.
Tabla 7. Horas de trabajo a la semana
CBI CSH CAD Total
Menos de 10 horas Abs. 127 60 38 225
Rel. 28,2% 22,1% 28,1% 26,3%
De 10 a 20 horas Abs. 92 75 30 197
Rel. 20,4% 27,7% 22,2% 23,0%
De 21 a 40 horas Abs. 231 136 67 434
Rel. 51,3% 50,2% 49,6% 50,7%
Total Abs. 450 271 135 856
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Como se mencionó líneas atrás, en muchos casos las actividades laborales de los jóvenes se
relacionan escasamente con sus intereses formativos. Únicamente 14% afirmó que su trabajo se
relaciona totalmente con sus estudios. Prácticamente la mitad, 46.4%, respondió que la relación
entre trabajo y estudios es inexistente. Probablemente esta situación se vinculada con lo explicado
líneas arriba: si el trabajo juvenil contribuye exclusivamente a la reproducción del joven en su
condición de estudiante, o a la reproducción de su grupo familiar, es probable que las actividades
desempeñadas se relacionen escasamente con los intereses profesionales del joven.
Tabla 8. Relación del trabajo con los estudios
CBI CSH CAD Total
Totalmente Abs. 81 23 20 124
Rel. 18,0% 8,5% 14,8% 14,5%
Con frecuencia Abs. 42 40 16 98
Rel. 9,3% 14,8% 11,9% 11,4%
En ocasiones Abs. 115 84 38 237
Rel. 25,6% 31,0% 28,1% 27,7%
Nunca Abs. 212 124 61 397
Rel. 47,1% 45,8% 45,2% 46,4%
Total 450 271 135 856
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Tal como se ha destacado reiteradamente en los estudios sobre trayectorias y egresados, una
parte importante de los jóvenes que ingresan al sistema universitario son pioneros en sus familias
(De Vries y Navarro, 2011), es decir, constituyen la primera generación dentro de un grupo familiar
que tiene contacto con la educación superior.
En total, 54% de los jóvenes de nuevo ingreso provienen de familias en donde los padres no
cursaron estudios de nivel terciario. Estos jóvenes son los pioneros dentro del sistema de
educación superior. Cuarenta y por ciento provienen de familias donde por lo menos uno de los
padres curso estudios universitarios, en 5% de los casos por lo menos uno de los padres cursó
estudios de posgrado.
A nivel de las divisiones hay diferencias importantes. Es en los jóvenes de la División de CAD donde
encontramos mayores niveles de escolaridad en los padres. En total 57% de estos jóvenes
proviene de familias en donde por lo menos uno de los padres cursó estudios de licenciatura.
En CBI y CSH encontramos niveles de escolaridad de los padres inferiores a los de CAD. En el caso
de la primera, únicamente 41% de los jóvenes proviene de familias donde por lo menos un padre
cursó estudios post‐bachillerato, para la segunda la proporción es de 42%. En general, los jóvenes
inscritos en ingenierías provienen de familias cuyos padres tienen niveles de escolaridad
inferiores.
Tabla 9. Escolaridad de los padres
CBI CSH CAD Total
Ninguna 1% 0% 0% 0%
Primaria 13% 11% 4% 11%
Secundaria 25% 23% 16% 23%
Bachillerato 19% 21% 21% 20%
Estudios de nivel terciario 37% 38% 50% 40%
Posgrado 4% 4% 7% 5%
Lo ignoro 1% 2% 2% 2%
Total 100% 100% 100% 100%
Nota: ambos padres con el nivel de estudios o un padre con el nivel de estudios y otro con nivel inferior.
Con la finalidad de presentar una aproximación del estatus socioeconómico de los estudiantes de
nuevo ingreso hemos construido el índice de acceso a bienes (IAB). Este índice toma en cuenta la
posesión de bienes reportada por el alumno en la encuesta. Estos bienes son: televisión, sistema
de televisión de paga, DVD, auto de la familia, lavadora, teléfono y horno de microondas. El índice
no sitúa a los individuos en estratos sociales, únicamente permite establecer una jerarquización de
los individuos en función de la posesión de determinados bienes.
Tabla 10. Índice de acceso a bienes (IAB)
IESE CBI CSH CAD Total
1 Abs. 207 168 129 504
Rel. 14% 16% 24% 17%
0.85 Abs. 309 254 148 711
Rel. 22% 25% 28% 24%
0.71 Abs. 340 260 113 713
Rel. 24% 25% 21% 24%
0.57 Abs. 272 189 82 543
Rel. 19% 18% 15% 18%
0.42 Abs. 190 113 36 339
Rel. 13% 11% 7% 11%
0.28 Abs. 84 40 15 139
Rel. 6% 4% 3% 5%
0.14 Abs. 26 8 6 40
Rel. 2% 1% 1% 1%
0 Abs. 8 2 1 11
Rel. 1% 0% 0% 0%
Total Abs. 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Al observar al conjunto de los jóvenes matriculados en 2011 se puede concluir que constituyen un
grupo heterogéneo en términos de clase social: hay diferencias importantes en el acceso a bienes.
Diecisiete por ciento de los jóvenes tiene un índice de uno, esto significa que tienen acceso a todos
los bienes enlistados en el párrafo anterior. Diecisiete por ciento tiene un índice igual o menor a
0.42, es decir, tienen acceso a un número limitado de bienes.
En términos generales, los estudiantes de la división de CAD tienen un nivel socioeconómico
mayor que los de CBI y CSH. Casi una cuarta parte tiene un índice = 1, lo que significa que poseen
todos los bienes enlistados arriba. En el caso de CSH el porcentaje de jóvenes con un índice = 1 es
de 16 y en CBI de 14.
En la División de CBI encontramos la mayor proporción de jóvenes con un índice igual o menor a
0.42 –veintidós por ciento‐, en CAD la proporción es de 11. Para la CSH la proporción de jóvenes
con un índice menor a 0.42 es de 16.
Antecedentes académicos
Los alumnos que ingresaron en 2011 a la UAM provienen fundamentalmente del subsistema
público de educación media superior, 76% de los jóvenes realizaron estudios de bachillerato en
instituciones públicas. Casi una cuarta parte cursó el nivel medio superior en escuelas privadas.
Respecto a la generación 2004 hubo disminución en el número de jóvenes procedentes de
instituciones privadas. En la generación 2004, 35.4% provenía de instituciones privadas (Garay,
s/f:). Para el 2011 hubo un decremento de 11.5 puntos porcentuales.
Los jóvenes que se incorporaron a las licenciaturas de CBI provienen principalmente de escuelas
públicas, únicamente 20% realizó sus estudios de bachillerato en instituciones privadas. En el caso
de CAD una tercera parte de los jóvenes de nuevo ingreso proviene del subsistema privado de
educación media. En CSH, una cuarta parte cursó sus estudios en instituciones privadas.
Tabla 11. Régimen del bachillerato
CBI CSH CAD Total
Pública Abs. 1139 791 346 2276
Rel. 79% 76% 65% 76%
Privada Abs. 297 243 184 724
Rel. 21% 24% 35% 24%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
La mayor parte de los jóvenes realizó sus estudios de bachillerato en modalidad escolarizada.
Únicamente ocho por ciento cursó este nivel en modalidad abierta.
Tabla 12. Modalidad del bachillerato
CBI CSH CAD Total
Escolarizada Abs. 1335 939 487 2761
Rel. 93% 91% 92% 92%
Abierta Abs. 101 95 43 239
Rel. 7% 9% 8% 8%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Ochenta por ciento de los estudiantes cursaron el bachillerato en tres años, nueve por ciento en
cuatro años y tres por ciento tardó más de cuatro años en egresar. En general podríamos
caracterizar trayectorias de esta generación como regulares o continuas, ya que la mayoría cursó
sus estudios en el tiempo definido formalmente en el plan de estudios.
Es en la División de CAD donde encontramos el mayor porcentaje de estudiantes que tardaron
más de tres años para terminar el nivel medio superior. Por el contrario, 85% de los jóvenes que
ingresaron a CBI concluyeron sus estudios en tres años o menos.
Tabla 13. Años empleados en cursar el bachillerato
CBI CSH CAD Total
Dos años Abs. 36 42 14 92
Rel. 3% 4% 3% 3%
Tres años Abs. 1180 815 406 2401
Rel. 82% 79% 77% 80%
Cuatro años Abs. 121 97 62 280
Rel. 8% 9% 12% 9%
Más de cuatro años
Abs. 47 33 21 101
Rel. 3% 3% 4% 3%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
La mayoría de los jóvenes obtuvo promedios del bachillerato ubicados en el rango 8 a 8.9. Treinta
y ocho por ciento obtuvo promedios que se ubican en el rango de 7 a 7.9 y veinte por ciento
promedios situados en el rango 9 a 10.
En la División de CAD se ubica la mayor proporción de jóvenes con promedios superiores a nueve
en tanto que en CBI tenemos la menor proporción de estudiantes con estos promedios. También
en CBI encontramos la mayor proporción de jóvenes con promedios menores a ocho, en tanto que
en CAD encontramos la menor proporción de las tres divisiones.
Tabla 14. Promedio del bachillerato
CBI CSH CAD Total
7 a 7.99 Abs. 592 357 178 1127
Rel. 41% 35% 33% 38%
8 a 8.99 Abs. 576 469 242 1287
Rel. 40% 45% 46% 43%
9 a 10 Abs. 268 208 110 586
Rel. 19% 20% 21% 20%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
En lo referente a los puntajes obtenidos en el examen de selección hay diferencias importantes
por división. En CBI encontramos que 14% de los jóvenes obtuvo puntajes ubicados en el rango
500‐599. En las otras divisiones no hay estudiantes cuyos puntajes del examen se sitúen en este
rango. En CBI y CSH encontramos una proporción similar de estudiantes, cercana a 60, cuyos
puntajes se situaron en el rango 600‐699, en CAD esta proporción es apenas de 27.
En tanto que en CBI 74% de los estudiantes obtuvieron puntajes inferiores a 700, en CAD
únicamente 27% obtuvo ubicados en este rango. Los estudiantes de CAD obtuvieron los puntajes
más altos en el examen de selección en términos absolutos y relativos. Más del 70% obtuvo
puntajes superiores a 700. Únicamente 26% de los estudiantes de CBI obtuvo puntajes superiores
a 700, en el caso de CSH 38% se ubicaron en este rango.
Tabla 15. Puntaje en el examen de selección
CBI CSH CAD Total
De 500 a 599 Abs. 202 0 0 202
Rel. 14% 0% 0% 7%
De 600 a 699 Abs. 863 639 141 1643
Rel. 60% 62% 27% 55%
De 700 a 799 Abs. 324 372 366 1062
Rel. 23% 36% 69% 35%
De 800 a 899 Abs. 44 21 23 88
Rel. 3% 2% 4% 3%
De 900 a 999 Abs. 3 2 0 5
Rel. 0% 0% 0% 0%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Al analizar la relación del puntaje de examen de selección y el promedio de bachillerato hemos
encontrado una correlación positiva muy débil. El coeficiente de correlación es de 0.28. Como se
puede observar en el siguiente diagrama, apenas se puede distinguir una relación positiva entre
las dos variables. Hay varios casos donde el promedio de bachillerato es cercano a diez y el puntaje
del examen de selección inferior a 750 puntos. Por el contrario, algunos jóvenes con promedios
bajos, menores a ocho, obtuvieron puntajes cercanos o superiores a 800 puntos en el examen de
selección.
Gráfica 1. Diagrama de dispersión para promedio del bachillerato y puntaje del examen de selección
Fuente: AGA 2011. Elaboró Coplan.
500
550
600
650
700
750
800
850
900
950
1000
6 6.5 7 7.5 8 8.5 9 9.5 10
Condiciones de estudio y acceso y utilización de las tecnologías de información
La Encuesta Nacional de la Juventud 2011 (ENJ 2011) señala que durante la última década he
incrementado el número de jóvenes que tienen acceso a internet. De acuerdo con datos
proporcionados por este instrumento, al comenzar el milenio únicamente 6.2% de los jóvenes
mexicanos tenían acceso a internet; diez años después la proporción llegó a 28.5%. A pesar de
este incremento, la mayoría de los jóvenes mexicanos no tiene acceso a este medio de
comunicación.
Respecto al panorama nacional de los jóvenes en el campo de acceso a tecnologías de información
y comunicación se puede afirmar que los jóvenes que ingresaron a la UAM en 2011 son un grupo
privilegiado. Ochenta y seis por ciento cuentan con computadora en su casa y 73% tiene acceso a
internet en casa.
Tabla 16. Alumnos con computadora en casa
CBI CSH CAD Total
Sí Abs. 1211 867 495 2573
Rel. 84% 84% 93% 86%
No Abs. 225 167 35 427
Rel. 16% 16% 7% 14%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Existen diferencias en el acceso a las tecnologías de información y comunicación por división. En
tanto que 93% de los jóvenes de CAD tiene una computadora en casa y 81% acceso a internet, en
CBI sólo 84% tiene computadora y 70% acceso a internet y en CSH 84% y 72%.
Tabla 17. Alumnos con internet en casa
CBI CSH CAD Total
Sí Abs. 1012 747 430 2189
Rel. 70% 72% 81% 73%
No Abs. 424 287 100 811
Rel. 30% 28% 19% 27%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
El uso que los jóvenes le dan a las tecnologías de información y comunicación tiene un carácter
lúdico y diverso. Además, no está centrado en la obtención de información. Nuevamente la ENJ
2011 arroja luz sobre el uso y la apropiación que los jóvenes hacen de la tecnología. Internet se
utiliza principalmente como medio de comunicación y de interacción con amigos a través de las
redes sociales. La búsqueda de información aparece relegada a segundo término.
En el caso de los jóvenes que se incorporaron a la UAM, solamente 33% reportaron siempre
obtener sus materiales de lectura en internet. Casi una cuarta parte casi nunca y nunca utilizan
este medio para obtener textos escolares.
Tabla 18. Alumnos que obtenían sus materiales de lectura de internet
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 490 319 188 997
Rel. 34% 31% 35% 33%
Casi siempre Abs. 548 430 199 1177
Rel. 38% 42% 38% 39%
Casi nunca Abs. 254 176 94 524
Rel. 18% 17% 18% 17%
Nunca Abs. 92 62 22 176
Rel. 6% 6% 4% 6%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Prácticas académicas
En la siguiente sección se describen las prácticas académicas desplegadas por los jóvenes durante
el bachillerato. Las preguntas de esta sección de la encuesta nos permiten distinguir entre aquellos
componentes del aprendizaje que demandan una participación activa del estudiante, como el
hecho de formular preguntas, interpelar a los profesores, exponer, elaborar diagramas, y aquellos
componentes pasivos como el hecho de escuchar las exposiciones tradicionales de los profesores,
elaborar resúmenes y tomar dictado. A partir de estas preguntas es posible reconstruir el modelo
de aprendizaje en que se formaron la mayoría de los jóvenes.
La mayor parte de los jóvenes asistía frecuentemente a clases. En total 95% reportaron siempre y
casi siempre asistir a clases, menos del uno por ciento reportó nunca y casi nunca asistir. Los
porcentajes de los que asistían a clases son casi idénticos para las tres divisiones: noventa y cinco.
Tabla 19. Frecuencia con que asistías a clases en bachillerato
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 1191 870 434 2495
Rel. 83% 84% 82% 83%
Casi siempre Abs. 179 111 68 358
Rel. 12% 11% 13% 12%
Casi nunca Abs. 10 4 0 14
Rel. 1% 0% 0% 0%
Nunca Abs. 3 2 1 6
Rel. 0% 0% 0% 0%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1435 1034 530 2999
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Sesenta por ciento de los jóvenes reportaron siempre escuchar a los profesores en tanto que 36%
respondieron casi siempre. En la División de Ciencias Sociales sesenta y tres por ciento afirmaron
siempre escuchar al profesor, en el caso de CAD la proporción de jóvenes en esta situación es de
cincuenta y cinco.
Tabla 20. Frecuencia con que escuchabas a los profesores en el bachillerato
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 840 655 290 1785
Rel. 58% 63% 55% 60%
Casi siempre Abs. 534 326 207 1067
Rel. 37% 32% 39% 36%
Casi nunca Abs. 7 3 5 15
Rel. 0% 0% 1% 1%
Nunca Abs. 3 3 1 7
Rel. 0% 0% 0% 0%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Más de 50% de los jóvenes afirmaron siempre tomar apuntes o dictado durante las clases de
bachillerato. Únicamente 5% respondió nunca y casi nunca recurrir a esta práctica. Nuevamente
en la División de CSH encontramos la mayor proporción de jóvenes que refirieron tomar apuntes
siempre.
Tabla 21. Frecuencia con que tomabas apuntes o dictado en el bachillerato
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 830 632 285 1747
Rel. 58% 61% 54% 58%
Casi siempre Abs. 485 319 191 995
Rel. 34% 31% 36% 33%
Casi nunca Abs. 59 32 23 114
Rel. 4% 3% 4% 4%
Nunca Abs. 10 4 4 18
Rel. 1% 0% 1% 1%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Aunque la formulación de preguntas es un recurso fundamental en la construcción del
conocimiento y la discusión de los saberes, es una práctica ajena a una parte importante de los
estudiantes. En total 21% afirmaron que casi nunca y nunca realizaban preguntas en el salón,
siendo CAD la división con mayor proporción de jóvenes en esta situación. Sólo 30% reportaron
siempre realizar preguntas.
Son los jóvenes inscritos en la CSH los que realizaban preguntas con mayor frecuencia ‐79% que
siempre o casi siempre realizaban preguntas‐. El porcentaje de jóvenes en esta situación para CAD
es de sesenta y nueve.
Tabla 22. Frecuencia con que realizabas preguntas en el bachillerato
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 416 362 128 906
Rel. 29% 35% 24% 30%
Casi siempre Abs. 662 453 238 1353
Rel. 46% 44% 45% 45%
Casi nunca Abs. 299 164 133 596
Rel. 21% 16% 25% 20%
Nunca Abs. 7 8 4 19
Rel. 0% 1% 1% 1%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Los jóvenes que ingresaron a la UAM en 2011 solían asistir a clases sin conocimientos previos del
tema, lo que probablemente limitaba su capacidad de formular preguntas y entablar discusiones
con los profesores. Únicamente 13% se preparaba siempre y 39% se preparaba casi siempre.
Prácticamente la mitad de los jóvenes casi nunca y nunca preparaban la clase. El porcentaje de
jóvenes que no preparaban la clase es más alto en CAD que en las otras divisiones.
Cincuenta por ciento de los jóvenes de CAD solía asistir a clase sin conocimientos previos; para CBI
y CSH las proporciones son de 46 y 39, respectivamente.
Tabla 23. Frecuencia con que preparabas la clase
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 172 156 59 387
Rel. 12% 15% 11% 13%
Casi siempre Abs. 552 428 183 1163
Rel. 38% 41% 35% 39%
Casi nunca Abs. 586 371 229 1186
Rel. 41% 36% 43% 40%
Nunca Abs. 74 32 32 138
Rel. 5% 3% 6% 5%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
La discusión de puntos de vista del profesor tampoco era una práctica ejercida por todos los
estudiantes. Solamente 30% afirmaron siempre discutir los puntos de vista del profesor, en tanto
que 26% respondió nunca y casi nunca.
Es en los jóvenes de CSH donde esta práctica estaba más generalizada: 34% afirmaron siempre
discutir los puntos de vista del profesor. En el caso de CBI y CAD la proporción de jóvenes en esta
situación es de 28 y 26 por ciento.
Tabla 24. Frecuencia con que discutías los puntos de vista del profesor
CBI CSH CAD Total
Siempre Abs. 399 350 137 886
Rel. 28% 34% 26% 30%
Casi siempre Abs. 576 424 212 1212
Rel. 40% 41% 40% 40%
Casi nunca Abs. 357 196 140 693
Rel. 25% 19% 26% 23%
Nunca Abs. 52 17 14 83
Rel. 4% 2% 3% 3%
Perdidos Abs. 52 47 27 126
Rel. 4% 5% 5% 4%
Total 1436 1034 530 3000
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Los datos anteriores permiten formular un conjunto de hipótesis respecto a los ambientes y
modelos de aprendizaje en que se desarrollaron jóvenes antes de ingresar a la UAM. La mayoría
cursó un bachillerato tradicional, donde el profesor y las actividades que realizaba eran
fundamentales en la transmisión y adquisición del conocimiento. Este ambiente enfatizó aquellas
acciones como la escucha al profesor, la toma de notas o dictado en donde el profesor define el
ámbito de lo significativo y relevante.
Este modelo tradicional desincentivo aquellos comportamientos activos de los estudiantes como
la formulación de preguntas, la preparación de la clase y la discusión de los puntos de vista del
profesor. En suma, se trata de jóvenes que enfrentaron ambientes de aprendizaje que difícilmente
materializan las aspiraciones de los enfoques pedagógicos centrados en el alumno.
La imagen anterior se corrobora con otro grupo de preguntas del cuestionario relativas a los
elementos tomados en cuenta para integrar la calificación final. En la siguiente tabla aparecen
ordenados por importancia los elementos tomados en cuenta para integrar las calificaciones
finales2.
En general, las actividades escritas eran más valoradas para integrar la calificación, en primer lugar
aparecen los exámenes escritos con 70% y en segundo los trabajos con 58%. Actividades que
implican una participación activa y observable de los alumnos aparecen a partir del cuarto lugar,
por ejemplo, sólo 46% de los estudiantes refirieron que la participación en clase siempre se
tomaba en cuenta para la calificación final, 36% afirmó que las exposiciones grupales o
individuales siempre se tomaban en cuenta. Otras actividades, prácticas de campo o realización de
prototipos, aparecen en los últimos lugares de la tabla.
Tabla 25. Elementos tomados en cuenta para integrar la calificación final (frecuencia = siempre)
CBI CSH CAD Total
Exámenes escritos 71% 71% 68% 70%
Trabajos 54% 59% 63% 58%
Asistencia 54% 58% 56% 56%
Participación en clase 46% 48% 45% 46%
Puntualidad 39% 43% 36% 40%
Exposiciones individuales 35% 39% 36% 36%
Exposiciones grupales 34% 39% 36% 36%
Conducta 32% 34% 29% 32%
Autoevaluación 20% 21% 14% 19%
Realización de prototipos 21% 16% 14% 18%
Elaboración de planos y maquetas 18% 14% 20% 17%
Exámenes orales 17% 17% 13% 16%
Prácticas de campo 19% 14% 10% 16%
Evaluación colectiva 16% 17% 12% 16%
Controles de lectura 11% 12% 11% 12%
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
2 Cada una de estas preguntas se ha jerarquizado con base en el porcentaje de alumnos que respondió siempre.
Actividades culturales
En la última sección se describen los hábitos de consumo cultural de los jóvenes, para ello, se ha
jerarquizado a las distintas actividades de consumo cultural de acuerdo con el porcentaje de
jóvenes que afirmaron realizarla frecuentemente. Ello nos permite elaborar una imagen de la
importancia que tienen los distintos bienes culturales para la generación 2011 y los jóvenes de las
tres divisiones.
Para la generación de jóvenes que ingresó en 2011, el cine es el principal bien cultural consumido.
En total 40% de los jóvenes reportó asistir frecuentemente al cine. En segundo lugar aparecen los
museos, 35% afirmó asistir frecuentemente. En tercer lugar aparecen los eventos deportivos: 31%
señaló que asiste frecuentemente. A continuación aparece la asistencia a exposiciones artísticas
con 23% de jóvenes que asisten frecuentemente. El consumo de música, fundamental en la
estructuración de la identidad de algunos colectivos juveniles aparece en quinto lugar, sólo 21%
reportó asistir frecuentemente a conciertos de rock, salsa, música grupera u otros géneros
populares. A pesar de esta situación, donde la música popular aparece relegada en el consumo
cultural de esta generación, su consumo es superior a la música culta o clásica. Únicamente 11%
de los jóvenes aseguran asistir frecuentemente a este tipo de eventos.
Existen diferencias importantes por divisiones. Estas reflejan múltiples formas de consumir
cultura. En el caso de los jóvenes que ingresaron a la división de CBI los eventos deportivos ocupan
el primer lugar en la asistencia, en segundo lugar se encuentra el cine y en tercero la visita a
museos.
En el caso de los estudiantes de CAD más del 50% asisten frecuentemente al cine. Cuarenta y seis
por ciento reporta asistir frecuentemente a museos y 40% a exposiciones artísticas. La asistencia a
eventos deportivos, central en el consumo cultural de los jóvenes de CBI, se ubica en 5º lugar con
23% de jóvenes que aseguraron asistir frecuentemente. El consumo de música aparece relegado a
la cuarta posición de la tabla.
El principal bien cultural consumido por los jóvenes de CSH es el cine, ‐42% reportó asistir
frecuentemente‐, en segundo lugar aparece la asistencia a museos, en tercero el consumo de
eventos deportivos. La música aparece en quinto lugar.
Para esta generación el consumo cultural se estructura alrededor de los espectáculos de masas.
Otros bienes, de corte popular por ejemplo, han perdido terreno frente al cine o los eventos
deportivos. Los productos de alta cultura, también aparecen relegados en las preferencias de los
jóvenes estudiantes.
Tabla 26. Porcentaje de jóvenes que reportaron consumir frecuentemente distintos tipos de manifestaciones
culturales
CBI CSH CAD Total
Cine 33% 42% 54% 40%
Museos 27% 41% 46% 35%
Eventos deportivos 34% 31% 23% 31%
Exposiciones artísticas 16% 24% 40% 23%
Rock, salsa, grupera u otros 19% 21% 26% 21%
Teatro 16% 23% 20% 19%
Conferencias 16% 23% 17% 19%
Danza 10% 14% 16% 12%
Conciertos de música clásica o sinfónica 10% 11% 11% 11%
Fiestas del pueblo o barrio 10% 10% 8% 10%
Presentaciones de libros 7% 10% 8% 8%
Fuente: Encuesta de Prácticas Escolares y Actividades Culturales 2011. Elaboró Coplan.
Bibliografía
Garay, Adrián de (s/f). Resultados de la encuesta socioeconómica, hábitos de estudio y prácticas de
consumo cultural de los alumnos de nuevo ingreso. Trimestre 04‐O.
http://www.azc.uam.mx/sieee/Respaldo/index_archivos/Resultados/SisInfEEE/Estudiantes/nuevoi
ngreso04‐O.pdf [consulta: 04/10/2012].
Instituto Mexicano de la Juventud (2011). Encuesta nacional de la juventud 2010. Resultados
generales. Imjuve, México.
http://cendoc.imjuventud.gob.mx/sin_registro/Cuestionarios/CuadernilloENJ2010FINAL9DIC.pdf
[consulta: 04/10/2012].
De Vries, Wietse y Yadira Navarro (2011). “¿Profesionistas del futuro o futuros taxistas? Los
egresados universitarios y el mercado laboral en México” en Revista Iberoamericana de Educación
Superior, vol. II, núm. 4, pp.3‐27, http://ries.universia.net/index.php/ries/article/view/71
[consulta: 04/10/2012].
top related