acta 30 de noviembre

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Universidad de Chile Magíster en Literatura Seminario de Literatura. Fausto: itinerario de un mito. Roberto Suazo Gómez Acta clase del 30 de Noviembre 2006 Tras su lectura, el acta de la sesión anterior es aprobada sin mayores enmiendas. Los primeros comentarios sirven para precisar levemente ciertas ideas expuestas: 1) Que la obra “Santa Juana de los Mataderos” se puede leer como una reacción visceral, salida de las entrañas de Bertold Brecht. A fin de no perturbar el mortal descanso de Bretch es preciso señalar que, antes que constituir el espontáneo producto de una reacción visceral, la obra del dramaturgo es el resultado de un trabajo altamente pensado. 2) También debemos relativizar la definición del teatro épico brechtiano como un teatro propagandístico o panfletario. Se trata, en efecto, de piezas didácticas que involucran la postulación de la temática marxista. Si bien no podemos reducir la totalidad del teatro épico a su carácter de promotor de un trasfondo doctrinario. Posteriormente, se nos entregan algunas ideas a profundizar: 1) Una de las perspectivas acentuadas en nuestro seminario es la cuestión del sujeto. En este sentido, la reinterpretación del mito fáustico realizada por Brecht nos indica una modificación que afecta al sujeto en la modernidad. Así, Mauler se erige como el Fausto del mundo urbano, identificado con las leyes del capital. 2) Sin embargo, no debemos dejar de destacar otra figura que ha sufrido una importante transformación. Se trata

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Acta 30 de Noviembre

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Universidad de Chile

Universidad de Chile

Magster en Literatura

Seminario de Literatura. Fausto: itinerario de un mito.

Roberto Suazo Gmez

Acta clase del 30 de Noviembre 2006

Tras su lectura, el acta de la sesin anterior es aprobada sin mayores enmiendas. Los primeros comentarios sirven para precisar levemente ciertas ideas expuestas:

1) Que la obra Santa Juana de los Mataderos se puede leer como una reaccin visceral, salida de las entraas de Bertold Brecht.

A fin de no perturbar el mortal descanso de Bretch es preciso sealar que, antes que constituir el espontneo producto de una reaccin visceral, la obra del dramaturgo es el resultado de un trabajo altamente pensado.2) Tambin debemos relativizar la definicin del teatro pico brechtiano como un teatro propagandstico o panfletario. Se trata, en efecto, de piezas didcticas que involucran la postulacin de la temtica marxista. Si bien no podemos reducir la totalidad del teatro pico a su carcter de promotor de un trasfondo doctrinario.

Posteriormente, se nos entregan algunas ideas a profundizar:

1) Una de las perspectivas acentuadas en nuestro seminario es la cuestin del sujeto. En este sentido, la reinterpretacin del mito fustico realizada por Brecht nos indica una modificacin que afecta al sujeto en la modernidad. As, Mauler se erige como el Fausto del mundo urbano, identificado con las leyes del capital.2) Sin embargo, no debemos dejar de destacar otra figura que ha sufrido una importante transformacin. Se trata de Margarita, ahora convertida en Juana, quien adoptar plenamente el rol de la luchadora.3) A partir del siglo XVIII, al interior de la dramaturgia alemana han proliferado una serie de figuras femeninas altamente fuertes. Y si bien es cierto que, como Juana, fracasan o tienden al fracaso, no deja de ser significativa la reiteracin de esta cualidad subversiva.4) La rebelda de Margarita es autocastradora y esto queda explicitado en el asesinato de su propio hijo. Por su parte, Santa Juana no tiene hijos mas hace un esfuerzo por asociarse a la lucha del proletariado.

5) En el drama de Brecht, Margarita ya no es una figura pasiva. Ahora aparece situada en un proceso de aprendizaje. Asimismo, lo eterno femenino goethiano aquello que concede la salvacin, acoge y redime- vuelve a actualizarse en la figura de Santa Juana.EXPOSICIONES

1. Fernando Pessoa: Primer Fausto.Fernando Pessoa es, sin duda alguna, sinnimo de la modernidad/modernismo en Portugal. Su obra desarrolla extensamente el problema de la identidad del sujeto moderno, identidad que se debate entre la unidad y la fragmentariedad del yo. Por lo dems, esta verdadera atomizacin de la identidad afecta profundamente la biografa de Pessoa quien acua el concepto de heteronimia- nombres diferentes para una misma persona- para expresar el desdoblamiento esencial de su propio ser. Esta heteronimia o tendencia a la destruccin del yo- que Fernando Pessoa descubre en su propia personalidad, lo llevar a concebir diversas facetas de s mismo, entre las cuales destacan los poetas Alberto Caeiro, lvaro de Campos y Ricardo Reis. Desde una mirada global a su obra, la expositora procura buscar los nexos entre el Fausto pessoano y las posiciones que ms tarde encarnarn los poemas atribuidos a los heternimos. As, nos propone que Fernando Pessoa se inserta en la problemtica del sujeto de la modernidad, exactamente por la multiplicidad de sus sujetos poticos que bien se pueden interpretar como salidos de su Fausto. El Fausto de Pessoa, en su calidad de obra inconclusa, en cierta forma, viene a simbolizar el hecho de que la completitud es tambin negada al hombre. Pero, asimismo, la utilizacin del mito fustico permite congregar la multitud de voces poticas que conviven en Pessoa, en tanto que alude a la propensin del sujeto moderno que aspira a poseer la totalidad: El Fausto constituira el gran proyecto literario de Pessoa, que se cristaliza a travs del nacimiento de este drama en gente, que es fragmentacin y reunin del yo.

Pessoa trabaj cerca de 20 aos en su Fausto; el poema dramtico Primer Fausto comienza a ser fechado en 1908, antes de la invencin de los heternimos. Esta obra por dems ambiciosa, comparte con el Fausto de Valery el hecho de haber quedado incompleta. Si bien, ms all de las afinidades e innovaciones respecto a los anteriores Faustos, la versin de Pessoa pone de manifiesto el afn del artista, recurrente en la tradicin literaria en torno al mito fustico, de elaborar un proyecto esttico monumental. As, mientras que el Doktor Faustus de Thomas Mann expresaba la propensin fustica en la integracin de todas las msicas, Pessoa concebir un proyecto en el cual sea posible la realizacin de todas las voces, de todos los sentimientos.

En cuanto a las variaciones introducidas por Pessoa, vemos que en su Fausto la figura de Margarita no existe. No obstante, aparece un personaje femenino Mara- que de cierta forma viene a ocupar el lugar de Margarita, la amada de Fausto. Asimismo, Mefistfeles se manifiesta nicamente de manera elptica; no aparece como personaje, ni siquiera se le nombra, aunque bien podra decirse que se encuentra presente en cada lugar de la obra. Esto porque Fausto se identificar con l, al menos parcialmente:

Yo soy el infierno/ Soy el cristo negro/ Clavado a la cruz gnea de mi mismo

Por lo tanto, Fausto tendra algo del diablo habitando en su interior. Lo que s desaparece totalmente en el Fausto de Pessoa es el tema del pacto.

Ahora bien, en el conjunto de la produccin pessoana, resalta una particular concepcin de lo demonaco. Su imagen del diablo se aleja de la figura negativa caracterstica de la tradicin cristiana. Se trata de un diablo heterodoxo, cercano a la tradicin literaria portuguesa, en las que frases como El diablo no estn feo como lo pintan y Dios es bueno, pero el diablo no es malo expresan un compromiso simultneo tanto con Dios como con el diablo. Anteriormente, Pessoa haba expresado su preferencia por el demonio; incluso, un ao antes de comenzar su Fausto, y usando el heternimo del angloparlante Alexander Search, celebr su propio pacto con el diablo. Si bien, se trata de un pacto del todo positivo ya que, entre otras cosas, el diablo lo conminaba a nunca abandonar el propsito de hacer el bien. Por otra parte, Pessoa no comparte la imagen del diablo de Goethe: el demonio pessoano no aparece ya como el espritu que todo lo niega. Ahora se trata, en cambio, de un diablo que todo lo contrara -lo contrapone a su contrario- lo cual se puede desprender de la lectura del dilogo La hora del diablo. En este sentido, el demonio pessoano comparte la actitud propuesta por lvaro de Campos, heternimo de Pessoa: sentir todo de todas las maneras, tener todas las opiniones, ser sincero contradicindome a cada minutoEn cuanto a la figura de Fausto, vemos en Pessoa un tratamiento igualmente innovador. Su Fausto ha abandonado la avidez por el poder y, aun cuando se siente atrado por la aventura del conocimiento, es conciente de su carcter ilusorio. La personalidad de Fausto es ahora la de un intelecto sensible capaz de reconocer el profundo horror que procede de la fantasa del mundo. A diferencia del Fausto de Goethe, que desprecia la ociosidad y apuntala la accin como principio y motor de lo existente, el Fausto pessoano aparece abrumado con este monstruoso culto a la actividad. De ah su lamento: Ah, el horror metafsico de la accin! Asimismo, mientras que en Goethe Fausto deseara la detencin del instante bello en el cual viera realizadas todas sus ambiciones desarrollistas, el Fausto pessoano desear la cesacin del tiempo, la permanencia del momento, con la finalidad de procurarse la detencin de su yo: un estado de ensimismamiento desde el cual poder conjurar la muerte.Posteriormente, se identifican dos problemas fundamentales para la lectura y el anlisis del Fausto pessoano: su carcter fragmentario de texto inacabado y su hibridez genrica. La obra se compone de una serie de poemas organizados en forma de escenas, lo que indica que es un proyecto dramtico. Sin embargo, algunos trozos presentan un grado significativo de lirismo, cuyo anlisis podra tender a minimizar los aspectos dramticos.

Asimismo, la composicin de la obra presenta una estructura (o falta de estructura) organizada a partir de cuatro grandes temas:

El misterio del mundo.

El horror de conocer.

La carencia del placer y del amor.

El miedo a la muerteDichos temas son tambin tratados en los poemas compuestos por los heternimos, quienes los elaboran desde sus muy particulares perspectivas. As, por ejemplo, mientras que la imposibilidad de conocer el misterio del mundo, el significado oculto de las cosas, no deja de abrumar a Fausto, el heternimo Alberto Caeiro declara lisa y llanamente que las cosas tienen existencia y no significacin. Asimismo, manifiesta su desprecio por toda mstica bastante metafsica hay en no pensar en nada- dice. No obstante, de la controversia Pessoa/Caeiros (o Pessoa/l mismo) surge un punto de acuerdo: la irreversibilidad del dolor que resulta de la bsqueda, puesto que, como seala Fausto: El secreto de la bsqueda es que no se encuentra.

Por ltimo, la expositora entrega un esquema de la bsqueda de Fausto. Los grandes temas del poema dramtico de Pessoa se organizan en cinco actos, seguidos de entreactos lricos que, a semejanza del coro de las tragedias griegas, comentan la accin dramtica.

Acto I : Conflicto de la inteligencia consigo misma

Pensamiento y su dolor

Querer saber, conocer la verdad

El cansancio de nada saber- el elixir de la ciencia

Entreacto I

Acto II: Conflicto de la inteligencia con otras inteligencia

Querer conocer la vida

Entreacto II

Acto III : Conflicto de la inteligencia con la emocin

Querer conocer el amor

Querer sentir la vida y abdicar de la individualidad en la vida

Entreacto III

Acto IV : Conflicto de la inteligencia con la accin

Cansancio final

Entreacto IV

Acto V : Derrota de la inteligencia

Abdicacin de la individualidad en la muerte

Final

Pessoa retoma el mito de Fausto para plantear el enfrentamiento entre la inteligencia personificada en Fausto y la vida, con el triunfo constante de esta ltima. Fausto lucha por entender la vida, por adaptarse a ella, por captar emociones como el amor, y siempre pierde. Comentarios Mucha informacin! Fernando Pessoa desarroll, en lugar de seudnimos, heternimos que escriban con total independencia y en diferentes estilos. El fin del sujeto aparece en la propia biografa de Pessoa. As, los heternimos constituyen la marca de un proyecto individual en el cual el autor no consigue presentarse como un sujeto nico.

As tambin el Fausto pessoano simboliza la bsqueda de un sujeto pleno, no obstante fracasa en cada camino que toma para conseguirlo.

Pregunta: Su propuesta de los heternimos es una respuesta al fracaso de Fausto?

La salida escogida por Pessoa es construirse en muchos sujetos, presentarse en sujetos diferentes.

Pessoa, al igual que Fausto, llev una vida asctica. Los heternimos lo hicieron sentir y vivir. Asimismo, vemos en los textos de Brecht, Valery y Pessoa una reaccin al desafo de la modernidad exaltada, accidentada, que surge tanto en Alemania, como en Francia y tambin en Portugal. El Portugal de la segunda dcada del siglo XX experimenta un proceso de modernizacin violento. En este contexto, surge la vanguardia portuguesa de la que Pessoa forma parte. El heternimo lvaro de Campos es la figura en Pessoa que reacciona ms fuertemente contra la modernizacin. Al final de su proyecto de fracaso de la individuacin, Pessoa abrazar lo mstico. Su ltima obra Mensagem, publicada antes de su muerte, es una especulacin mtica- mstica del Portugal del futuro. El Primer Fausto es, sin duda, un texto muy denso, complejo en conceptos metafsicos sobre la vida, la inteligencia y la reflexin. Esta obra debe su nombre a la intencin original de Pessoa de escribir otros Faustos. Asimismo, el Primer Fausto, aqul que est antes de los otros Faustos, constituira el espejo en el que se reflejan los Faustos anteriores.

2. Jorge Edwards: El AnfitrinEn la novela de Jorge Edwards ningn elemento ha sido escogido al azar. De ah que, en el anlisis, las alusiones al mito de Fausto (principalmente al Fausto de Goethe) resulten ms que evidentes. Edwards slo cambiar las situaciones.Faustino Joaqun Piedrabuena el Fausto criollo- abogado, militante comunista y crtico de artes, vive su exilio en Berln oriental. Sin embargo, flucta entre dos mundos representados en el pas escindido; hay dos berlines: una capitalista, a la cual en ocasiones Faustino se aventura, y la otra Berln, la socialista, donde habita la confortabilidad de su covacha, sin sobresaltos ni ambiciones. Las dualidades sern la tnica de esta novela; as, Faustino aparece como un personaje dividido entre el capitalismo y el socialismo, pero tambin entre la ambicin de poder y la morosidad. Asimismo, esta dualidad alude al escenario chileno en los prolegmenos del golpe militar y afecta a la familia de Faustino: su mujer es de derecha, l de izquierda y su hija aparece vinculada con ciertos grupos extremistas. Por otra parte, al retornar a Chile, hacia el ao 1987, Faustino se encontrar con un escenario muy distinto, en el que, sin embargo, persisten las dualidades ahora bajo la forma de un mundo de arriba, un Santiago ms limpio y ordenado, y un mundo de abajo, un mundo que conspira y donde an se pretende obtener beneficios de un posible nuevo gobierno.Faustino es un Fausto diferente; de poco carcter, dependiente de los dems, se define a s mismo como un mediocre. A diferencia de los otros Faustos- hombres estudiosos, magos vidos de saber- Faustino no tiene el menor inters por el conocimiento. Demuestra, sin embargo, una particular dileccin por el dinero y por los placeres mundanos, lo que queda de manifiesto en sus escapadas al otro lado de Berln.

Faustino no ofrecer mayores resistencias a las tentaciones. De hecho, quedar encantado con el suntuoso mundo que su anfitrin le presenta. Precisamente, la cualidad que lo hace ser elegido por el diablo es su secreta ansia de poder. Y de ms est decir que no es el conocimiento la herramienta que el poder necesita.Pero, cmo es el diablo en Edwards? Un sibarita artero, de psimo gusto al vestir, el dueo de una notaria que dice llamarse Apolinario Canales. Este diablo tiene sus poderes, si bien no se trata de poderes mgicos o sobrenaturales pues los maneja a travs de la tecnologa y el dinero. Y, claro est, no es cualquier demonio. Se trata de un demonio chileno, folclrico, que procura no acercarse demasiado a las animitas. Un diablo desprovisto de trucos mgicos, que se vale de disfraces para montar sus engaos. Este diablo, adems, demuestra ser un gran entendido en lo que a poltica se refiere, lo cual no impide que condimente sus anlisis con una implacable irona: la poltica, como el diablo la entiende, corresponde al mundo de la simulacin y el pacto que propondr es lo que permitir a Faustino ingresar a ese mundo. En la novela de Edwards, reaparece el pacto con el diablo, no obstante se le da una intencionalidad muy distinta. El alma no tiene aqu ninguna importancia; de hecho, la religiosidad se presta para la broma. Lo que realmente le interesa a Apolinario es la historia. En efecto, el demonio quiere apoderarse de la identidad de Faustino y el pacto que le propone es el siguiente: Apolinario se quedar con la historia personal de Faustino para proporcionarle otra que no llame la atencin. El pas, segn el lcido diagnstico de Apolinario, necesita de un lder renovado, uno que, no siendo nada, sea capaz de representar a toda una sociedad que se encuentra dividida. Esta solucin respondera a un problema de cultura: la idea de que las ideologas contrarias no aceptan el entrecruzamiento es objeto de una cruda revisin, segn la cual, el fin justifica los medios. Comentarios

A modo de crtica, puede decirse que no se trata de una gran novela puesto que depende demasiado de un contexto poltico determinado: el de la transicin hacia la democracia mediante la celebracin de un pacto que deje tranquilo a moros y cristianos. Esto es, naturalmente, la Concertacin. Sin embargo, hay que destacar la providencial mirada de Edwards respecto al desarrollo posterior del pacto concertacionista.

Asimismo, la novela representa una parodia feroz de la vida de los exiliados chilenos en la RDA. A pesar de todo, ellos valorarn el inslito pacto y buscarn sacarle el mejor provecho. Queda as perfilado el silabario del izquierdismo renovado.

Como en la cita de Unamuno perder tu pasado, perder lo que eres- en el Anfitrin se sustituye la cuestin del alma por la de la identidad. Pero, asimismo, la prdida de la identidad afecta la misma doctrina comunista, que posee un carcter historicista. Lo que se anula con el pacto es la doctrina, los principios, los ideales, la historia como ellos la conciben. En Goethe el modelo de salvacin divina- la redencin por lo eterno femenino- est garantizada. En Edwards, los socialistas y comunistas aconsejan a Faustino para que pacte, puesto que de esta manera podrn ser salvados. En resumidas, cuentas se trata de una reactualizacin del famoso pacto Hitler-Stalin. En ciertas circunstancias, la salvacin demanda sacrificar la historia a la abyeccin de pactos convenientes, aunque profundamente insinceros.