1 juan
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PROGRAMA No. 1139
1 JUAN
Capítulo 4:1-3
Continuamos hoy, amigo oyente, nuestro recorrido por esta Primera Epístola del Apóstol
Juan y nos corresponde entrar a una sección bastante difícil aquí en el capítulo 4. Y es difícil por
muchas razones. Una de ellas es porque estamos tratando aquí con el mundo del espíritu, del
cual ninguno de nosotros sabe mucho.
La segunda razón, es que nos encontramos andando en territorio de Satanás. Hemos
aprendido que cada vez que uno habla en cuanto al diablo, éste siempre logra causar alguna
interrupción en el servicio. Por lo general comienza a llorar algún bebé, o alguna otra persona
causa alguna perturbación en el servicio. Es sorprendente como él obra.
También hay otras razones. Pero debemos decir que estamos entrando a una sección muy
importante, y que uno puede apartarse por la tangente en este asunto. Uno puede volverse más
bien fanático. Creemos que ha habido demasiada preocupación en el día de hoy, con esto en
particular, de parte de los creyentes. Pero es necesario saber en cuanto a esto. Ahora, el primer
versículo de este capítulo 4 de la Primera Epístola del Apóstol Juan, dice:
1Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque
muchos falsos profetas han salido por el mundo. (1 Juan 4:1)
Aquí estamos tratando con el mundo del espíritu. Y la Biblia tiene mucho que decir en
cuanto a esto. Por ejemplo, en el Salmo 104, versículo 4 leemos: El que hace a los vientos sus
mensajeros, y a las flamas de fuego sus ministros. Eso es citado otra vez allá en la epístola a los
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Hebreos, capítulo 1, versículo 7, donde dice: Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus
ángeles espíritus, y a sus ministros llama de fuego.
Hay algo más que debemos decir, que se menciona un poquito más adelante aquí en este
capítulo 1 de la epístola a los Hebreos, y queremos presentarlo para hacerle recordar de esto,
porque ya lo vimos cuando estábamos estudiando la epístola a los Hebreos. En el versículo 14 de
este capítulo 1 de la epístola a los Hebreos, dice: ¿No son todos espíritus ministradores,
enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?
Ahora, el autor de estos estudios bíblicos, El Dr. J. Vernon McGee, hablando en cuanto a este
pasaje, dice: “Yo nunca hemos visto a un ángel. Nunca he tenido la visita de uno de ellos.
Personalmente no creemos que ellos tengan algún ministerio para la iglesia. Opino que en
nosotros mora el Espíritu Santo. Y uno no puede mejorar eso. Yo prefiero tener al Espíritu
Santo, que no ha sido creado, para que nos ministre, en vez de un ángel que ha sido creado. Creo
que necesitamos dar el énfasis al ministerio del Espíritu Santo en nuestro corazón, y en nuestra
vida. Hasta aquí la cita del Dr. McGee.
Pero no sólo tenemos ángeles buenos, aquellos que sirven a Dios, sino que también hay
ángeles caídos, o espíritus. Así son llamados en la Escritura. Los evangelios enseñan mucho en
cuanto a que en los días en que Cristo estuvo en la tierra, había espíritus inmundos. Eso es lo
que se conoce en el presente como una creencia en los demonios. Nosotros los llamamos
demonios porque las Escrituras utilizan ese término. Ahora, a nosotros se nos advierte y se nos
dice que la razón por la cual debemos colocarnos toda la armadura de Dios, es porque nos
encontramos en una batalla gigante que es más allá de la carne, ya que es una batalla espiritual, y
el Apóstol Pablo dice en su epístola a los Efesios, capítulo 6, versículo 12: Porque no tenemos
lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los
gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las
regiones celestes.
Ya hablamos detalladamente de eso cuando nos tocó estudiar este libro, y también en el libro
de Daniel, así es que, no vamos a volver a entrar en este terreno. Pero, creemos que el diablo
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tiene todo muy bien organizado en este lado. En su ejército de demonios, él tiene sus generales,
sus tenientes generales, tiene sus sargentos y tiene sus soldados comunes. Ahora, creemos que
Dios tiene Su ejército también organizado de la misma manera. Tenemos un ejemplo allá en el
libro de Daniel.
Y aquí en esta Primera Epístola del Apóstol Juan, capítulo 4, se nos dice aquí que no
debemos creer a todo espíritu. Es decir, a esos espíritus inmundos. Debemos probar a los
espíritus. Hace algunos años esto era algo un poco tétrico, pero ahora ya hemos entrado en una
área donde lo sobrenatural que antes era ridiculizado, especialmente en los círculos
universitarios, entre la gente inteligente, hoy se ha convertido en algo muy real. En efecto,
Satanás se ha convertido en algo muy real por cierto, y hasta existe la adoración a Satanás. Esto
se ha limitado mucho a las universidades y zonas aledañas. Y hasta existe en algunas ciudades
iglesias satánicas.
Ahora, hasta hace algunos años esto era algo muy extraño por cierto. Pero es algo que existe
en el presente. Se informa que, por ejemplo, en el estado de la Florida, en los Estados Unidos, un
muchacho de 17 años fue asesinado, y esto tuvo lugar para apaciguar a Satanás, porque una
sacerdotisa satánica en ese lugar, una joven de sólo 22 años de edad, dijo que este muchacho
debería morir. Y esas cosas están teniendo lugar en el presente, amigo oyente. Uno puede tomar
los periódicos del día de hoy y enterarse de lo que está ocurriendo.
Hay muchas cosas que han ocurrido en nuestros días que son realmente tétricas. Por ejemplo,
tenemos asuntos mencionados en libros, y podríamos mencionar a Juan Salvador Gaviota. Así se
llama ese libro, su autor es Ricardo Bach. Él dijo que un jovencito le había dictado esto, y que
ese no era su propio estilo de escritura. Hablando honradamente, amigo oyente, esto es algo que
muchas iglesias han comentado hoy. Y varias personas buenas han sido engañadas por esto. Es
la historia de un concepto teológico de una gaviota que tiene atributos humanos. Una gaviota
que se elevó a una perfección sin límite, y descubrió que cada uno de nosotros es nada más que
una “idea” de un gran Dios, y que el nacimiento, el pecado, las enfermedades, y la muerte no son
verdaderamente cosas reales, sino sencillamente “ilusiones”. Y que lo que los escritores bíblicos
llaman pecado, es en realidad “virtud”. Y que la libertad es en realidad hacer lo que le plazca a
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uno. Bueno, amigo oyente, eso no es algo nuevo. Pero este libro, por supuesto, es algo que ha
salido del infierno mismo, porque es satánico, ya que está en total oposición a la Palabra de Dios.
En el día de hoy estamos viendo toda clase de manifestaciones del demonio. Es algo que está
a nuestro alrededor. Y es algo extraño que esto ocurra en esta edad materialista que no quiere
tener nada que ver con lo sobrenatural. Hace algunos años esto era desaprobado en las
universidades. Si uno creía en algo como esto, era nada más que un plebeyo; no importaba cuán
inteligente fuera. No importaba si tenía buenas calificaciones en las escuelas. Si uno creía en lo
sobrenatural era una persona radicalmente equivocada. Y la gente no vacilaba en decírselo a
uno.
Pero ahora todo esto ha cambiado. Esto es algo realmente extraño y misterioso. Hay muchos
jóvenes que se han entregado a esto. Y nunca han tenido ningún estudio en la Biblia. Ahora,
Juan está hablando aquí a los hijos de Dios. Él nos ha dicho que debemos amarnos unos a otros,
y que tenemos que ayudarnos. Pero que tenemos que tener cuidado. En nuestro programa
anterior mencionamos que el Apóstol Pablo había orado por los filipenses. Él los amaba. Y él
dijo: Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aun más y más en ciencia y en todo
conocimiento. Es algo realmente maravilloso el amar; pero usted y yo nos encontramos en este
mundo malo, y este mundo en el cual vivimos nos puede devorar. Nos puede engañar. Por tanto,
necesitamos tener mucho cuidado. Así que, Juan está diciendo: Amados, no creáis a todo
espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios.
A veces escuchamos de algunas personas que parecen tener poderes sobrenaturales, quizá
puedan sanar, quizá puedan impartir dones. Pero eso no nos entusiasma. Hay personas que nos
dicen: “Y, ¿por qué no van a escuchar a Fulano de Tal?” Bueno, no queremos perder el tiempo.
Se nos dice que debemos probar los espíritus; y amigo oyente, sencillamente porque una cosa
parezca ser sobrenatural, – y hay muchos grupos que están presentándose en el día de hoy –
podemos asegurarle que no hay nada sobrenatural en todo eso. Es nada más que un cristianismo
camuflado, enmascarado. Debemos probar los espíritus si son de Dios, porque muchos falsos
profetas han salido por el mundo.
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Ahora, los falsos profetas de los cuales Juan está hablando aquí, son maestros. El Apóstol
Pablo lo utilizó de esa manera también. En su Primera Epístola a los Corintios, capítulo 14,
versículo 3, Pablo dice: Pero que el profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación
y consolación.
La profecía aquí indica el enseñar, el exhortar, el instruir, y hacer esa clase de cosas. Ahora,
hay muchos falsos profetas que han salido; y se nos dice aquí en el versículo 1:
1Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque
muchos falsos profetas han salido por el mundo. (1 Juan 4:1)
Amigo oyente, hay muchos que por cierto han salido. Y tenemos que tener mucho cuidado
con esto. La profecía hoy, se está convirtiendo en un tema muy interesante, y creemos que esto
es correcto; pero una vez más, debemos tener cuidado y notar lo que dijo el Señor Roberto
Anderson, que en referencia a esto dijo: “Debemos tener cuidado con las pronunciaciones
elocuentes de traficantes de profecías”. Pues bien, hay mucho de eso en el mundo en el presente.
Esta gente está diciendo más de lo que dice la Escritura. Así es que, tenemos que tener mucho
cuidado. El que un hombre venga y comience a decir: “Señor, Señor”, no quiere decir que
nosotros debamos amarle. Quizá ese hombre sea mucho más peligroso que una serpiente. Puede
estar enseñando una doctrina falsa, y no estar enseñando en realidad la Palabra de Dios. Quizá
pueda llevar hasta una gran Biblia debajo del brazo, pero aun así necesita ser observado con
mucho cuidado. Ahora, el versículo 2 de este capítulo 4 de la Primera Epístola del Apóstol Juan,
nos dice:
2En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha
venido en carne, es de Dios; (1 Juan 4:2)
Aquí es donde comienza todo. Comenzó en Belén. Él nació en Belén y allí comenzó.
Estamos hablando de la encarnación, porque el Calvario y la tumba de este jardín donde se
sepultó a Cristo, no tienen significado a no ser que Él sea quien dijo ser, a no ser que Él sea el
Dios Hombre. Y la forma en que usted puede identificar a un profeta falso, es que éste negará la
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deidad del Señor Jesucristo. Aunque esto no quiere decir que ese profeta no hable bien en cuanto
a Él. Ah, esa gente dice que Él fue una clase de joven muy destacado. Que Él era un niño que
había nacido en el mundo, y que era superior. Y la gente habla en cuanto al hecho de que Él era
un genio religioso, y de que estaba sencillamente intoxicado con Dios. Y que Él probablemente
tenía un mayor conocimiento de Dios, y que puede haber sido superior a alguna otra persona.
Algo así como un súper estrella. Esta gente puede decir cosas muy buenas y muchas cosas
lindas en cuanto a Él, pero, lo importante es: ¿fue Él el Dios manifestado en la carne? El Apóstol
Juan dice que Él era el Verbo. ¿Quién es el Verbo? Bueno, el Verbo es Dios. Él ha creado
todas las cosas, y Él se hizo carne. ¿Dónde? En Belén, en el momento de Su encarnación. Allí
vino Jesús. El gnosticismo, que es una de las primeras herejías, y Juan la enfrenta directamente,
dice que Cristo vino sobre Jesús cuando Él fue bautizado, y que le dejó en el Calvario. Bueno,
amigo oyente, eso no es lo que nos enseña la Palabra de Dios. La Palabra de Dios dice que ese
bebé en Belén era mucho más que bebé destacado. Y que Su muerte en la cruz no fue una
muerte ordinaria, y que cuando Él se levantó de entre los muertos, Él se levantó corporalmente de
entre los muertos. Él fue entregado por nuestras culpas y resucitado para nuestra justificación. Y
como dijo el profeta Isaías: Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado. Ahora ese Niño ya
ha nacido, ese Hijo ya ha sido dado. Amigo oyente, Él salió de la eternidad, el Anciano de Días.
Pero ese Niño en Su humanidad fue concebido en la virgen María, y Él nació en Belén. Unos
cuantos pastores, unos hombres sabios llegaron a adorarle. Él era mucho más que un niño
precoz. Él era el Príncipe de Paz. Él logró la paz por la sangre derramada sobre la cruz, y un día
Él traerá la paz a este mundo ya cansado de guerras, en el cual vivimos. Lo importante de notar
de nuestra parte es que esta es la señal, esta es la forma en que usted puede saber, puede probar
los espíritus para saber si son de Dios. Tenemos que averiguar qué es lo que ellos creen en
cuanto a Jesucristo. Luego Juan agrega aquí en el versículo 3 del capítulo 4 de su primera
epístola:
3y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este
es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está
en el mundo. (1 Juan 4:3)
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Esta es la tercera vez que Juan menciona al anticristo, y él es el único escritor que menciona
al anticristo, y sólo lo menciona en esta epístola. Aquí tenemos esto ante nosotros otra vez, y no
vamos a poder desarrollar todas las grandes verdades que hay aquí; pero, Dios mediante, en la
próxima ocasión, vamos a hablar un poquito más en cuanto al anticristo. Ya hemos visto en esta
misma Primera Epístola del Apóstol Juan, capítulo 2, versículo 22, que es un mentiroso, un
engañador, que niega que Jesús sea el Cristo. Este es el anticristo, el que niega al Padre y al
Hijo. Eso lo encontramos nuevamente en este pasaje de las Escrituras, pero creemos que ya
hemos tenido una referencia a él antes; y en el mismo capítulo 2, versículo 18, leemos: Hijitos,
ya es el último tiempo; y según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido
muchos anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo.
Ahora, como ya explicamos anteriormente, la palabra anti puede significar dos cosas
diferentes, ya que anti puede ser contra o también puede ser en lugar de. O sea, una imitación.
Hemos presentado esto tomándolo de las Escrituras. El Señor Jesucristo había dicho que muchos
iban a venir en Su nombre. Es decir, que lo iban a imitar. Y podemos decir que es anticristo en
ese sentido, pretendiendo ser Cristo.
El otro significado es contra Cristo. Tenemos dos bestias mencionadas en el capítulo 13 del
libro de Apocalipsis. La primera bestia es un gran líder político que viene. El anticristo va a
gobernar al mundo. Será un dictador mundial. Luego, tenemos a un líder religioso que vendrá y
es llamado el falso profeta. Él hará que el mundo adore a la primera bestia. El viene disfrazado
como un cordero, pero dentro de sí, es un lobo. Así es que, imita a Cristo.
Y creemos que habrá dos hombres, y que hacen falta dos hombres para cumplir todo lo que se
dice en cuanto al anticristo. Usted tendrá un gran líder político al fin del tiempo, y luego tendrá
un gran líder religioso.
La civilización en la cual vivimos está preparando todo para la venida del anticristo. Es
decir, que vendrá un gran líder religioso. Todas las religiones del mundo se van a unir, y existe
ya esa clase de movimiento en esa dirección, en el presente. Y también tenemos cierta clase de
movimiento político porque se está andando hoy hacia esto de tener un solo líder en el mundo.
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Él traerá paz, pero será algo temporal para este mundo; y esa será la época más terrible que haya
visto este planeta. Hablamos en cuanto a este líder cuando estuvimos estudiando allá el libro de
Daniel, usted recordará.
Ese es pues el cuadro que se nos da aquí en cuanto al anticristo. Y ya han surgido muchos
anticristos. Pero esos no son el anticristo. Esos son maestros que están llevando al mundo, cada
vez más cerca al día cuando el mundo estará preparado para aquel que finalmente aparecerá.
Y bien, amigo oyente, vamos a dejar aquí por hoy. Volveremos, Dios mediante, en nuestro
próximo programa, en la continuación de esta Primera Epístola del Apóstol Juan. Como siempre
lo hacemos, le sugerimos ahora leer los siguientes versículos de este capítulo 4, para estar así
mejor informado de lo que consideraremos en nuestro próximo estudio. Creemos que las notas y
bosquejos que enviamos a nuestros oyentes, le serán de gran ayuda en este estudio. Si no las ha
pedido todavía, hoy tiene la oportunidad de solicitarlas a la dirección que daremos en contados
minutos. Le recordamos que este material es sin costo alguno para usted. Solo le recomendamos
que nos escriba con letra clara y legible, de ser posible con letra de molde o imprenta, indicando
sus nombres y dirección completos y en orden, sin que falte ningún detalle, pues de esta manera
le aseguramos que el envío de este material, llegará a sus manos sin ningún contratiempo.
Debemos añadir que recibir su carta compartiendo la forma cómo el Señor le está bendiciendo
mediante este programa, será de aliento y bendición para nosotros, además de motivar a otros
oyentes a que nos escriban. Quedamos, pues, en espera de sus prontas noticias. Será, entonces,
hasta nuestro próximo programa, amigo oyente, es nuestra oración ¡que el Señor derrame sobre
usted Sus ricas bendiciones!