09_fitapatrickuna crítica liberal-conservadora a la revolución a propósito del libro la...

Upload: lorena-savioli

Post on 08-Aug-2018

216 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    1/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    219

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    Gran parte del campo intelectual occidental debati a lo largo del ltimo sigloen torno al ngulo desde el cual interpretar la Revolucin Rusa y su herencia.La cada de la Unin de Repblicas Socialistas Soviticas (URSS) en los aos

    89-91 y la aceleracin del proceso de restauracin capitalista por parte de sec-tores de la burocracia estatal sovitica produjeron consecuencias largamenteesperadas en el campo de las ideas conservadoras, y marcaron fuertemente lasperspectivas del debate de estrategia revolucionaria y anticapitalista en el findel siglo XX. En parte esto tuvo que ver con la forma en que triunf el procesode restauracin capitalista en los ex-Estados obreros1.

    1 En el dossier Rusia: del stalinismo a la restauracin indicbamos que la propia burocracia fue elprincipal agente de la restauracin capitalista y que esto era una posibilidad inscripta en el carctercontrarrevolucionario de la burocracia, que defendi a su modo las relaciones de propiedad establecidas

    por la revolucin, era el principal agente interno a la restauracin capitalista. Indicbamos tambin queEl carcter de los levantamientos de 1989-91 y sus consecuencias slo puede comprenderse como elltimo acto de un largo proceso de revoluciones polticas derrotadas que sacudieron los pases de Europa

    Una crtica liberal-conservadora a la revolucin

    A propsito del libroLa Revolucin Rusade Sheila Fitzpatrick

    por CECILIA FEIJOO

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    2/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    220

    DEBATES

    Por un lado, las soluciones a las que arrib el pensamiento conservadorestuvieron plagadas de conclusiones superficiales y apresuradas que dabanpor cerrado el ciclo de las revoluciones. Por otro lado, se estrech signifi-

    cativamente el horizonte de las ideas polticas de la izquierda intelectual. Elefecto contagio sobre los crculos marxistas acadmicos fue sbito y terminacompaando el proceso de supresin de la revolucin, supuesto generalizadoa inicios del siglo XXI. En su reemplazo se llam al cambio social gradual eincluso gan peso la proclamacin de una estrategia anticapitalista lo ms ale-

    jada posible de la idea y la perspectiva de la destruccin radical del capitalismo.Muchas utpicas reformas (como la tasa Tobin o el presupuesto participativode Porto Alegre), e incluso la extendida idea de cambiar el mundo sin tomarel poder propuesta por Holloway, fueron creadas para reemplazar a la viejay desdeada revolucin.

    Uno de los ms conocidos ataques fue iniciado por las afirmaciones delhistoriador francs Franois Furet, quien le dio valor proftico a la coincidenciaentre la cada de la URSS y el bicentenario de la revolucin francesa de 1789.Para Furet, tanto las ideas jacobinas como las marxistas-leninistas de lucharpor una igualdad real2, ideas mesinicas de construir una sociedad distinta,terminaron finalmente denostadas. Vamos a ver en adelante cmo el anlisisque desarrolla Sheila Fitzpatrick sobre la Revolucin Rusa comparte las ideasms extendidas de esta corriente conservadora del liberalismo, visin que sediferencia de aquella lectura liberal crtica emprendida por Hannah Arendt ensu ensayo Sobre la Revolucin. En esta ltima autora convive una idea de de-mocracia poltica como forma de autogobierno y de poder constituyente -desdela polis griega a los consejos obreros revolucionarios de 1917 en Rusia, 1919en Italia o 1956 en Hungra-, junto con la aceptacin concreta del capitalismoy la idealizacin de la democracia norteamericana, por la va de remitirla a larevolucin que le dio origen3. El imaginario comn sostenido por la corrienteliberal-conservadora, por el contrario, ve en el rgimen de los soviets, durantesus primeros aos en el poder, no formas de democracia poltica, sino lasinstituciones de la dictadura de una elite: el Partido Bolchevique. En cuanto al

    segundo aspecto, la idealizacin de la democracia capitalista y en particular dela democracia norteamericana, es un elemento comn a ambas corrientes. En

    del este, combinado con retrocesos importantes de la clase obrera occidental ante el avance la ofensivaneoliberal. Claudia Cinatti, Del stalinismo a la restauracin capitalista en la ex URSS. La actualidad delanlisis de Trotsky frente a las nuevas (y viejas) controversias sobre la transicin al socialismo, EstrategiaInternacionalN 22, noviembre de 2005.

    2 Afirmaba Furet que el marxismo-leninismo se prestigia por la liberacin del hombre frente a la explotacincapitalista, mientras por el otro se ve eximido de las obligaciones jurdicas de la democracia puesto que laemancipacin econmica lgicamente significa el ejercicio soberano de los derechos polticos mediante

    la dictadura del proletariado. Franois Furet,La revolucin en debate, Madrid, Encuentro, 2000.3 Claudia Cinatti, Emilio Albamonte, Trotsky y la democracia sovitica. Ms all de la democracia liberal

    y el totalitarismo, Estrategia Internacional N 21, septiembre de 2004.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    3/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    221

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    el caso de Fitzpatrick, afirmando que, excepto en la revolucin norteamericana,las revoluciones en las cuales se imponen los sectores radicales terminan enterribles dictaduras totalitarias sobre la sociedad.

    Recientemente publicado en castellano, el libro de la historiadora estado-unidense data del ao 1979, y se ha enriquecido en su reedicin de 1994 en elidioma ingls con el agregado de un ltimo captulo donde resalta su hiptesisinicial. sta gira en torno a dos problemticas. La primera de ellas tiene quever con la duracin del proceso revolucionario, su inicio y su final. El ncleotemporal de la revolucin es trazado por la autora desde febrero de 1917 hasta lavotacin de la constitucin stalinista y las grandes purgas de los aos 1937-38.Para otorgar coherencia interna a su hiptesis temporal la historiadora debecontrariar la historia misma y demostrar cmo dos procesos, uno ascendente yotro descendente, uno revolucionario y otro reaccionario, son agrupados bajo lamisma categora: revolucin. As, la toma del poder en octubre de 1917 por partedel soviet de obreros, soldados y campesinos de Rusia apoyada por las masas dela ciudad y el campo, la proclamacin de los derechos del pueblo trabajador, laguerra civil contra la resistencia de las antiguas clases dominantes, la fundacinde la Tercera Internacional y los debates sobre la Nueva Poltica Econmica(NEP), son agrupados junto con el ascenso y la lucha de la burocracia estatalcontra el bolchevismo y las masas de obreros y campesinos pobres, el acuerdocon los campesinos nepistas para su enriquecimiento (saltando luego a su ani-quilacin como clase con la colectivizacin forzosa), los campos de trabajoforzosos (conocidos como Gulags) y los asesinatos en masa del stalinismo.

    Necesariamente su hiptesis debe terminar afirmando que lo segundo ya seencontraba en lo primero, que Stalin es heredero de Lenin y el bolchevismo.En fin, el viejo cuento, ya desdentado y percutido, de que el stalinismo es elbolchevismo o al menos su consecuencia lgica. De esta forma, el segundo eje enel cual Fitzpatrick centra su hiptesis temporal es el anlisis entre las similitudesde ambos procesos. As, la autora proclama que no le interesa tanto saber si lasdistintas fases de la revolucin se parecen, sino el hecho de que constituyanparte de un mismo proceso. Para ello debe desentraar todas aquellas afirma-

    ciones que le permitan ubicar dentro de una misma categora al proceso dereaccin y al de la revolucin. Fenmenos polticos basados en sectores socialesantagnicos que combatirn a lo largo de esos aos son simplemente borradosy subordinados al esquema temporal de la autora. Esta opcin, como veremos,tiene un claro objetivo conservador: impugnar el intento de autogobierno delos trabajadores y campesinos en Rusia.

    El libro est centrado en torno al intento de fundamentar esta continuidadentre bolchevismo y stalinismo. Las diversas fases histricas de esta lucha, consus desplazamientos y giros bruscos, se pondrn en funcin de justificar esta idea

    de calendario revolucionario. Fitzpatrick debe reconocer el apoyo de masas albolchevismo en 1917, su fuerza en las ciudades obreras de Rusia y la simpata

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    4/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    222

    DEBATES

    militante de los trabajadores y marineros. Sin embargo, identificar en la basesocial de obreros y marineros del bolchevismo el fundamento de su carcterautoritario. Su pensamiento se guiar segn la idea de que el bolchevismo,

    en especial el instinto de poder de su jefe, Lenin, es la explicacin ltima delos contornos que toma el stalinismo, su continuidad necesaria. Pero digamosque muchos son ya viejos argumentos, y que la historiografa liberal, de la co-rriente denominada revisionista, no avanza un milmetro en aclararnos lo querealmente pas, sino que ms bien lo embrolla todo. Veamos cmo establecela relacin entre sus argumentos y los procesos histricos y polticos.

    UNCUERPOSOCIALENFERMO

    Existe un instrumento analtico comn a todas las corrientes de pensamien-to a la hora de abordar las revoluciones que son derrotadas o que logran sutriunfo: la analoga. As, la dinmica de la Revolucin Rusa, su calendario yfases internas, se ha mirado reiteradamente en el espejo de las revoluciones de1789 y 1848. Marx y Engels, en su intervencin en la revolucin alemana de1848, recurrieron ampliamente a este instrumento para denostar el derroterode la burguesa alemana y el triste papel jugado por la pequeo burguesa quehaba quedado lejos de sus instintos jacobinos del siglo anterior. A su vez,Trotsky utiliz relaciones de equivalencia entre las revoluciones en su ensayoResultados y perspectivas para desentraar el contenido obrero y socialista de lafutura Revolucin Rusa luego de la derrota del levantamiento de 1905. Esteanlisis, que en un primer momento sirvi para aprehender la dinmica de lafutura revolucin, ya en 1917 fue utilizado para analizar el curso de accin quedeban emprender los soviets en el poder.

    Ms tarde, tanto Trotsky como la generacin de bolcheviques oposicionistas4,realizaron analogas entre las revoluciones para clarificar las diferencias existentesentre la contrarrevolucin clsica encarnada por las antiguas clases depuestasy el contenido social de la reaccin burocrtica sobre el partido bolchevique

    y los soviets.El mtodo de la analoga permiti as a los revolucionarios honestos diferen-

    ciar la reaccin (o contrarrevolucin burocrtica) de la contrarrevolucin clsica,creando explicaciones sobre los fenmenos de estabilizacin y conservadurismoque emergan contra la democracia sovitica. El ascenso del proceso reacciona-rio no significaba que inmediatamente las relaciones sociales retrocedieran loandado y que el poder econmico y poltico se desplazara nuevamente hacia

    4 Las distintas posiciones de Trotsky en torno a esta polmica pueden hallarse en: Notas sobre la revo-

    lucin y la contrarrevolucin (1925), Estado obrero, termidor y bonapartismo (1928), La revolucintraicionada (1936) y Stalin (1940). Cristian Rakovsky aport a este debate en: Los peligros profesionalesdel poder (1928) y Problemas de la economa de la URSS (1931).

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    5/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    223

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    las clases dominantes del antiguo rgimen. Trotsky pudo explicar as cmo elaumento del poder y la imposicin de la dominacin de la burocracia stalinistase basaba en un equilibrio imposible de consolidar duraderamente entre las

    fuerzas que pugnaban hacia la restauracin capitalista (internas y externas) ylas fuerzas que defendan la permanencia de las relaciones sociales avanzadasde la revolucin surgidas de la eliminacin de la propiedad capitalista y loselementos de control estatal sobre la economa. En este equilibrio entre fuerzasde clases enemigas se asent el bonapartismo burocrtico de los aos 30. Lacontradiccin entre las bases sociales de la revolucin y las de la burocraciasovitica, sin embargo, no poda ser eterna, y deba resolverse entre uno uotro lado de la ecuacin5.

    Para defender un anlisis opuesto a ste Fitzpatrick toma un concepto derevolucin delineado por Crene Brinton6. Este autor establece una analogaentre la revolucin y los ascensos febriles de un cuerpo enfermo. Cada nuevainfusin de virus en el cuerpo genera una nueva alza febril, nuevas agitacionesdel cuerpo doliente hasta que el mismo finalmente recupera la normalidad.

    Afirma, analizando comparativamente la revolucin inglesa de 1648, la francesade 1789 y la rusa de 1917: Todas tienen una base social o de clase ms queterritorial o nacionalista () todas empezaron esperanzadas y moderadamente,todas tienen su crisis en un reinado de Terror, y todas acaban en algo parecidoa una dictadura Cromwell, Bonaparte, Stalin-7. Tomando esta definicin,Fitzpatrick establece la temporalidad de la Revolucin Rusa como un procesoque se inicia en febrero de 1917 con la cada del zarismo por la accin de masasy termina en 1938 con el terror de las grandes purgas y la declaracin de Stalinde que el socialismo se ha instaurado definitivamente en Rusia.

    Afirma Fitzpatrick: Una revolucin es un trmino lgicamente equivalenteal perodo de trastorno e inestabilidad que media entre la cada de un viejorgimen y la consolidacin firme de uno nuevo. A fines de la dcada de 1920,los contornos permanentes del nuevo rgimen de Rusia an deban emerger8.Para ella, la revolucin, citando a Marx, se devora a sus hijos, y la reaccindel nuevo orden es su final preanunciado. Para la autora las grandes purgas que

    tienen lugar en los aos 1937-38 se explican como parte de este ciclo vital detoda revolucin, y las mismas constituyen el lmite entre el ciclo revolucio-nario y el post revolucionario. Afirma, por un lado, que se trata de un terror

    5 Claudia Cinatti, Del stalinismo a la restauracin capitalista en la ex URSS. La actualidad del anlisisde Trotsky frente a las nuevas (y viejas) controversias sobre la transicin al socialismo, op. cit.

    6 Crane Brinton, socilogo norteamericano, ha incursionado en la comparacin entre la revolucin inglesa,americana, francesa de 1789 y rusa de 1917 ya que en ellas la revolucin consigue un primer triunfoy luego la restauracin del orden. Slo la revolucin norteamericana no sigue este ciclo comn. CraneBrinton,Anatoma de la Revolucin, Mxico, FCE, 1991 (primera edicin en ingls 1938).

    7 Ibdem, pg. 30.8 Sheila Fitzpatrick, La Revolucin Rusa, Buenos Aires, SXXI, 2005 (primera edicin en ingls 1994), pg.

    14.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    6/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    224

    DEBATES

    revolucionario por su retrica, sus objetivos y su inexorable crecimiento y, porotro, que fue un terror totalitario en el sentido de que destruy a personas,no a estructuras. Definitivamente, la autora concluye que la historia de la

    revolucin rusa necesita las grandes purgas, del mismo modo que la historiade la revolucin francesa necesita del terror jacobino9.Para el pensamiento liberal-conservador la revolucin, y especialmente

    aqulla que se propone eliminar las desigualdades reales entre las clases,siempre termina en su contrario. Esto se debe a que los revolucionarios sonutopistas, poco realistas e inexpertos en materia de gobierno, sus instituciones yprocedimientos son improvisados, son maniqueos y dividen el mundo en dosbandos; de aqu que terminar en desilusin y decepcin est en la naturazade los revolucionarios. Ser una parte de estos desilusionados revolucionariosla que iniciar el camino de vuelta y, con mtodos brutales, consolidar unnuevo orden de dominacin. Pero para poder identificar revolucin y reaccinla autora debe realizar dos operaciones.

    Una primera operacin es de ocultamiento del contenido social de lasdistintas fuerzas que emergen una vez conquistado el Estado obrero. Aqu laautora restringe el anlisis histrico a los discursos profesados por los actoresdel drama. Slo de esta manera puede afirmar la existencia de un discurso revo-lucionario del stalinismo que apela a la hostilidad de clase bajo el apotegma deluchar contra los enemigos de clase, discurso emparentado con el imaginariodel jacobinismo10. Este anlisis es profundamente alegrico, ya que en 1928o en 1937-38 los enemigos de clase no eran la burguesa y la nobleza sinolos oposicionistas, los obreros, los campesinos, los intelectuales y todo aquelsector de la propia burocracia que se interpusiera a la dominacin de la castaestatal. Pasando por alto quin era el enemigo de clase, Fitzpatrick tomael discurso de la burocracia para presentarlo como continuidad de la luchaemprendida por los bolcheviques y las grandes masas de obreros y soldadoscontra el antiguo rgimen zarista y la clase capitalista durante los primeros aosde la revolucin y la guerra civil.

    Una segunda operacin se establece mediante la identificacin del rgimen

    stalinista consolidado en 1938 con la conclusin de la revolucin y la consti-tucin de un orden poltico estable. Los acontecimientos de 1989-91 dan portierra con su hiptesis de que la revolucin es el perodo comprendido entre

    9 Ibdem, pg. 15.

    10 El jacobinismo o terror jacobino atac fundamentalmente a instituciones personificadas como enemi-gos del pueblo, la Iglesia y el antiguo clero, las clases acomodadas de la nobleza e incluso a la propiaburguesa. En un primer momento se bas en el terror plebeyo y atac todos los smbolos de poder, enun segundo momento comenz su ataque a los sectores ms izquierdistas del pueblo, los sans culottes,iniciando as su momento de declinacin. Sin embargo, el terrorismo jacobino ofici de profundizadorde los avances de la revolucin burguesa incluso contra los intereses inmediatos de la burguesa. Qu

    nuevas relaciones sociales hizo avanzar el terror stalinista? Las grandes purgas sirvieron para proclamaruna nueva ciudadana sovitica basada en la desigualdad econmica, dando derechos polticos a las viejasclases dominantes y concentrando el poder en la nueva casta burocrtica.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    7/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    225

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    el cambio radical y la consolidacin de un nuevo rgimen (la dominacinburocrtica en la URSS), ya que el stalinismo se mostr como un fenmenotransitorio que o bien era derrotado por una revolucin poltica o conducira

    a la restauracin capitalista.

    LOSSOVIETS: UNRGIMENPOLTICOPARALANUEVASOCIEDAD

    Lejos de identificar a la revolucin como un proceso virsico sobre uncuerpo enfermo donde la nueva sociedad, pasado el traumatismo, refuerzasus defensas, o de definirla como una catalizadora de ideas poco realistas,utopas de revolucionarios maniqueos y dems adjetivos profesados por laautora, Marx identificaba en la revolucin procesos de avance de la sociedaden los cuales el protagonismo de las masas y la dinmica que stas imponenno puede ser soslayado. La identifica como impulsora del adelantamiento yel desarrollo de una poca dada. De aqu que viera que las revoluciones de1648 y 1789 no fueron simplemente revoluciones inglesa la una y francesa laotra, sino revoluciones ambas de estilo europeo. No representaron el triunfode una determinada clase de la sociedad sobre el viejo orden poltico, sino queproclamaron el orden poltico de la nueva sociedad europea. Por otro lado,aclara Marx, rompan las ilusiones evolutivas de la historia, de manera que larevolucin de 1648 fue el triunfo del siglo XVII sobre el siglo XVI; la revolu-cin de1789, el triunfo del siglo XVIII sobre el siglo XVII. Ms todava quelas necesidades de las partes del mundo en que acaecan, Inglaterra y Francia,estas revoluciones expresaban las necesidades del mundo de entonces11.

    Partiendo de esto, podemos pensar la revolucin rusa de 1917 como unade esas grandes revoluciones que contienen el doble sentido al que se referaMarx: proclamar un orden poltico de la nueva sociedad y ser expresinuniversal de las necesidades de una poca. La Revolucin Rusa emerge de lascondiciones de la Primera Guerra Mundial y de la aspiracin del proletariado ylas masas oprimidas de terminar con los padecimientos del rgimen capitalista

    y la opresin zarista. Desde el punto de vista de ser expresin, concentraciny adelantamiento del siglo XX, la Revolucin Rusa viene a demostrar que larevolucin es democrtica porque es socialista, enlazando as la experiencia delproletariado europeo del siglo anterior (de 1848 a la Comuna de Pars de 1871)con la expansin de la revolucin proletaria ms all de Europa. Es as expresinuniversal de la nueva poca, ya que mostr que la clase trabajadora, junto alas masas oprimidas, pudo no slo llegar al poder sino mantenerlo durante unperodo histrico y transformar las relaciones de produccin, imponiendo a lademocracia sovitica como rgimen de dominacin.

    11 Karl Marx, La burguesa y la contrarrevolucin, en Karl Marx y Frederich Engels, Las revoluciones de1848. Seleccin de artculos de la Nueva Gaceta Renana, Mxico, FCE, 1989, pg. 218.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    8/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    226

    DEBATES

    Los marxistas clsicos consideraban que el orden poltico conquistado eratransitorio, y la madurez de las condiciones de la revolucin socialista era pen-sada a partir de comprender la compleja unidad entre Rusia y las relaciones

    econmicas y de clase a escala mundial. As, el Estado obrero ruso era unafortificacin enlazada al avance de la revolucin internacional. An habiendoeliminado jurdicamente a las clases propietarias a nivel nacional, el Estadoobrero no poda permanecer dentro de esas fronteras, sino que deba avanzaren la alianza con el proletariado y las masas de las otras naciones para debilitarla dominacin internacional del capital.

    Era un Estado que se basaba an en la lucha de clases, y el socialismo slose poda prefigurar programticamente en medidas parciales que permitieranavanzar a la democracia sovitica dentro de esta perspectiva general. En esesentido, el multipartidismo sovitico era una anticipacin o, como RosaLuxemburgo lo calific, una anacrona12. El ruso era un rgimen poltico dedemocracia sovitica an cuando las bases sociales de esa misma democracia seencontraran en disputa con las propias condiciones rezagadas de la economarusa y con la dominacin capitalista internacional.

    Para poder comprender esta relacin, no unilateralmente sino en toda sucomplejidad, hay que destacar las precisiones tericas que Lenin ya estableceen su libro El Estado y la revolucin. En primer lugar, plantea all los funda-mentos de cmo la teora marxista, en su anlisis de las formas que adquierela transicin al socialismo y el comunismo, se modifica frente al hecho deque la dictadura del proletariado es conquistada en un pas rezagado comoRusia, algo que Marx haba planteado slo hipotticamente. En segundolugar, plantea de esta manera una distincin esencial entre el contenidosocial del Estado obrero, desde el punto de vista de la conquista de nuevasrelaciones sociales de produccin transitorias al socialismo, y la forma polticaque adquiere esa dictadura de clase (en sentido amplio) desde el punto devista de las instituciones polticas mediante las cuales el proletariado domina.

    As, Lenin planteaba que: la esencia de la teora de Marx sobre el Estadoslo la ha asimilado quien haya comprendido que la dictadura de una clase

    es necesaria, no slo para toda sociedad de clases en general, no slo para elproletariadodespus de derrocar a la burguesa, sino tambin para todo elperodo histricoque separa al capitalismo de la sociedad sin clases, delcomunismo. Las formas de los estados burgueses son extraordinariamentediversas, pero su esencia es la misma: todos esos estados son -bajo una formao bajo otra, pero, en ltima instancia, necesariamente- una dictadura de laburguesa. La transicin del capitalismo al comunismo no puede, natural-

    12 Si bien Rosa Luxemburgo pronto abandona esta posicin crtica respecto a la relacin que los bolcheviques

    establecan entre democracia parlamentaria (Asamblea Constituyente) y democracia de clase (los Soviets)su anlisis es til a la hora de pensar cmo los bolcheviques rompan las relaciones mecnicas establecidasentre la base econmica y social nacional y el programa poltico internacional del proletariado.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    9/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    227

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    mente, por menos de proporcionar una enorme abundancia y diversidad deformas polticas, pero la esencia de todas ellas ser, necesariamente, una: ladictadura del proletariado13.

    La repblica sovitica (o democracia sovitica) fue la forma poltica al findescubierta que adopt en Rusia la dictadura del proletariado como estadonecesario para la destruccin de las relaciones sociales capitalistas. El proletaria-do, ms an que la burguesa en su momento ascendente, necesita centralizar elpoder poltico en un nuevo tipo de Estado para avanzar en desarrollar las nuevasrelaciones sociales mediante la expropiacin de los capitalistas y terratenientes.Esto es as porque el proletariado no puede desarrollar estas nuevas relacionesen toda su amplitud durante un perodo prolongado en los mrgenes de laantigua formacin social como s ocurri con las relaciones capitalistas bajo elfeudalismo. Las posibilidades de ampliar, avanzar o retroceder en las formaspolticas democrticas de la dictadura del proletariado tenan que ver con eldesarrollo de la revolucin internacional, a la cual apostaban los bolcheviques,as como con los grados y fortaleza de la reaccin interna a las que estuvierasometido el poder sovitico.

    La autora norteamericana, desde el punto de vista de su interpretacin libe-ral, no toma en cuenta esta distincin esencial entre rgimen social y rgimenpoltico que surge de la Revolucin Rusa. Ella, cuando habla de dictadura,se refiere especficamente a la forma poltica que adquiere el nuevo rgimenen sus inicios, ya que ste adopta medidas contrarias a la democracia formalque rige bajo la dictadura de la burguesa. El nuevo Estado obrero suprime lalibertad poltica de los partidos de la burguesa y los terratenientes, impone lacensura en sus medios de prensa y difusin y expropia sus propiedades y capital.Desde este ngulo es que la autora ubica la imposicin del rgimen poltico dela dictadura de la burocracia sovitica, del stalinismo, como continuidad delrgimen poltico de la democracia sovitica de la cual la burocracia es sepul-turera. El punto de sutura de la revolucin se encuentra as para el liberalismoya en el inicio del proceso.

    Para la autora, la revolucin de 1905 es el modelo de revolucin, ya que

    combina dos movimientos, uno de elite (la burguesa liberal) y otro de masas.Por el contrario, en febrero de 1917 la democracia liberal se ve encerrada en lascontradicciones del doble poder que, segn la autora, se pareca mucho alvaco de poder14. Para sta coincidi la imposibilidad de la burguesa de aspirara una salida independiente de las viejas clases dominantes y del proletariado,con determinadas tendencias antagonistas entre las masas que posibilitaron laimposicin de una dictadura por parte del Partido Bolchevique15. Si bien

    13 Vladimir Ilich Lenin,El Estado y la revolucin, Buenos Aires, Ed. Polmica, 1975, pg. 47.

    14 Sheila Fitzpatrick, op. cit., pg. 58.15 Respecto a la dinmica de la revolucin definida por Fitzpatrick que ve un primer momento donde priman

    los elementos moderados y un segundo de radicalizacin. Engels deca: Toda revolucin tiene por destino

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    10/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    228

    DEBATES

    reconoce que el bolchevismo es apoyado por la mayora del proletariado de lasciudades y una minora significativa en el campo en el momento de la tomadel poder, la autora califica a la insurreccin como golpe de mano de los

    bolcheviques en un momento de debilidad institucional (agrega por otro ladoque fue un acontecimiento carente de herosmo).A lo largo del libro la autora identifica dos tendencias que terminan en la

    imposicin de una dictadura de elite sobre el proletariado y las masas rurales.La primera de estas tendencias es identificada en la poltica de Lenin. Este,indica la autora, tiende al unicato contra el multipartidismo, de manera queel acuerdo con los SR de izquierda es provisorio16. En base a su visin poneen entredicho la posicin de Lenin contraria a la creacin de una burocraciaestatal separada del pueblo y de la necesidad de que los comunistas mantuvieranindependencia de la administracin del Estado, tal como haba establecido en ElEstado y la revolucin. La autora objeta una porcin de incredulidad ya que sedaba por sentado que la organizacin del partido se mantendra independientedel gobierno y libre de toda funcin administrativa, tal como habra ocurridosi los bolcheviques hubieran llegado a ser partido gobernante en un sistemapoltico multipartidario17.

    La segunda tendencia est relacionada con las caractersticas de clase delrgimen de democracia sovitica. As, la inclinacin autoritaria natural delbolchevismo se ver reforzada por la instauracin de un rgimen poltico quebasa su legitimidad en las masas explotadas. El intento de la clase obrera y elcampesinado pobre, impulsados por el bolchevismo, de imponer su gobiernoa travs de los soviets, es una de las caractersticas que posibilitar el desplaza-miento de los idearios igualitaristas y democrticos de los primeros tiemposhacia la dictadura totalitaria. Esta idea ser una constante en la argumentacinde la autora. Fitzpatrick afirma que los obreros y marineros sentan menosinclinacin a la persuasin que los intelectuales18, lo cual facult al bolche-vismo para adoptar medidas represivas y a consolidar la tendencia persistentede subordinar los soviets al partido, tendencia que se vioreforzada por laguerra civil19. As, nuevamente, la autora debe afirmar, buscando las causas

    del autoritarismo sovitico de los primero aos, que: Bien puede ser que losrasgos autoritarios antiliberales, duros y represivos del partido hayan sido re-

    que la unin de las diferentes clases, que en cierto sentido es condicin necesaria de toda revolucin, nopueda subsistir mucho tiempo () Precisamente este rpido y pasional desarrollo del antagonismo entrelas clases en los viejos y complicados organismos sociales hace que la revolucin sea un poderoso agentedel progreso social y poltico, y precisamente ese continuo y rpido crecer de los nuevos partidos acorta laexperiencia de las masas. Frederich Engels, Revolucin y contrarrevolucin en Alemania,Obras Escogidas,Buenos Aires, Cartago, 1987.

    16 Sheila Fitzpatrick, op.cit., pg. 86-87.

    17 Ibdem, pg. 115.

    18 Ibdem, pg. 95.

    19 Ibdem, pg. 116.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    11/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    229

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    forzados por el influjo de afiliados obreros y campesinos en 1917 y en los aosde la guerra civil20.

    El impulso destructor del antiguo rgimen de parte del movimiento de masas

    en la Revolucin Rusa fue impetuoso, precisamente porque la revolucin, ainstancia de los bolcheviques y con su impulso definitorio, sancion que el poderse encontraba ahora en manos de las masas. A la resistencia del viejo aparatoadministrativo, las masas le opusieron la conformacin de nuevos centros degobierno basados en los soviets locales. A la resistencia del viejo ejrcito, lossoldados impusieron su completa disolucin, como deca Lenin, con los pies.Imaginemos un ejrcito completo y desmovilizado en plena guerra imperialistay con el pas rodeado de ejrcitos enemigos. Esta idea revolucionaria no sermuy acertada para nuestra historiadora, pero como deca Trotsky: La revo-lucin desde el punto de vista de la psicologa de las masas, es una aplicacindel criterio de la razn a las tradiciones e instituciones heredadas21. Y esto eslo que hicieron los bolcheviques decretando la disolucin de la gran propiedadterrateniente, del viejo ejrcito y del aparato de Estado de la autocracia man-tenido por la Repblica de febrero.

    Los obreros, soldados y campesinos racionalmente haban hecho granparte del trabajo. En la etapa siguiente tuvo que surgir un nuevo ejrcito, yste fue uno de los lugares donde una nueva generacin de bolcheviques hizosus primeras armas polticas. Paralelamente a este impulso, el gobierno tuvoque contar con la colaboracin de los antiguos especialistas, mostrando cundificultoso era para los bolcheviques avanzar en mantener un nuevo ordenrevolucionario en un momento de particular aislamiento.

    El intento de que las masas ejercieran su gobierno por los soviets, posicinque es impulsada desde abril por el bolchevismo, y que en octubre se concretarmediante una alianza entre stos con los SR de izquierda, luego del ao 1918ser una posicin sostenida en soledad. Ninguno de los partidos que apoyarona las masas en su primer intento de gobierno, con excepcin del bolchevismo,mantuviera una oposicin leal al nuevo rgimen de los soviets22. En este hechose reflejaban sin duda las concepciones e ideas que estos agrupamientos posean

    en torno a cules eran las tareas que deba conquistar la Revolucin Rusa, debateque atraves tambin al Partido Bolchevique.

    En el caso de los SR de izquierda, dubitativos del impulso revolucionario,debieron atravesar los primeros meses de su experiencia revolucionaria comopartidos integrantes del gobierno de coalicin con la burguesa, enfrascados

    20 Ibdem, pg. 118.

    21 Len Trotsky, Qu sigue?,en 1917. Escritos en la revolucin, Buenos Aires, Ediciones del IPS. CEIPLen Trotsky, 2007.

    22 Trotsky llama bloque poltico de octubre a la alianza entre el bolchevismo, los SR de izquierda y el

    anarquismo, alianza que se enfrent al gobierno provisional y se proclam a favor del poder de los consejosen octubre de 1917. Ver Len Trotsky, Cmo se arm la revolucin, Buenos Aires, CEIP Len Trotsky,2006.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    12/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    230

    DEBATES

    en el rgimen de la dualidad de poderes. El impulso y radicalizacin delcampesinado pobre y sin tierra dio como resultado la divisin del eserismoen un ala derecha y otra de izquierda. A su vez, la poltica de los bolche-

    viques, que concentr la atencin de gran parte de la poblacin obrera delas ciudades, termin por arrastrar al ala izquierda a la participacin en elgobierno revolucionario. Sin embargo, sus aspiraciones volvan una y otravez a la idea de una coalicin de todos los partidos socialistas, incluidoslos viejos mencheviques y SR de derecha. Idea sta enfrentada a aqulla degobierno de los soviets.

    La posicin sostenida por los SR de izquierda ante la firma de la paz conAlemania en Brest-Litovsk marc el momento de ruptura y distanciamientocon el rgimen sovitico23, no por voluntad de Lenin o por sus tendencias alunicato24. La diferencia est dada para Lenin y Trotsky por la base socialde la alianza o del multipartidismo: el gobierno de los soviets o la unidad detodos los socialistas, incluidos aqullos que representaban la defensa de losintereses de la burguesa y los aliados por encima de los soviets y sus decretosya conquistados.

    Desde el punto de vista de la alianza de clases interna, tenemos por unlado la ruptura del bloque poltico de octubre que lleva, en el marco delinicio de la resistencia de las clases depuestas, a una restriccin de la demo-cracia sovitica. Por otro lado, uno de los elementos vitales que posibilita laextensin o restriccin de las formas polticas democrticas de la dictaduradel proletariado para los bolcheviques tena que ver con el desarrollo de larevolucin internacional, particularmente con la revolucin alemana a la cualapostaban. Ambos elementos, internos y fundamentalmente externos, seranlos que limitarn o potenciarn los grados de reaccin interna a los que estarsometido el poder sovitico.

    23 Los SR de Izquierda queran depositar sobre las espaldas del proletariado ruso la tarea que slo corres-ponda al proletariado internacional. Contrarios a la firma de una paz por separado con Alemania, a lacual consideraban una traicin y una capitulacin ante el imperialismo alemn utilizaron los recursosdel rgimen sovitico, del cual eran parte, para perpetrar un acto terrorista contra el embajador alemn

    en Petrogrado. Luego de este acto sigui una insurreccin de los SR contra el Comit ejecutivo de lossoviets. El rgimen sovitico sofoca el levantamiento y el partido eserista de izquierda es ilegalizado, susdirigentes apresados como acto de autodefensa del Estado obrero. Ver a este respecto el discurso emitidopor Trotsky en la sesin conjunta del Soviet de obreros y campesinos en el mes de julio de 1918. ParaTrotsky este actitud rompe el bloque poltico de octubre y deja en soledad a los bolcheviques en elpoder. La Sublevacinen Len Trotsky, Cmo se arm la revolucin, op. cit.

    24 Durante la noche del 26 de octubre de 1917 Lenin invita a tres integrantes de los SR de izquierda aparticipar de la discusin del Comit Central de los bolcheviques. All les propone integrar en comn elnuevo gobierno, cuestin que los eseristas rechazan. De esta manera Lenin es partidario de un gobiernoslo de los bolcheviques. El Comit Ejecutivo del Soviet, despus de octubre, es integrado por ambospartidos (106 representantes bolcheviques y 25 de los SR de izquierda). Tanto la integracin del CongresoCampesino al Comit Ejecutivo del Gobierno de los Soviets como la disolucin de la Constituyente es

    un acuerdo de ambas corrientes. El III Congreso de los Soviets, que vota La declaracin de los derechosdel pueblo trabajador en enero de 1918, est integrado por 707 delegados: el 62%, 441 delegados per-tenecan a los bolcheviques, 266 pertenecan a los SR de izquierda (48%).

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    13/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    231

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    En este sentido, las afirmaciones que Fitzpatrick realiza sobre el perodoextenso de guerra civil, al cual estuvo sometido el rgimen sovitico resultandesconcertantes y profundamente falsas. Ella plantea: Al considerar la rela-

    cin entre la guerra civil y el gobierno autoritario, debe recordarse que habauna relacin de reciprocidad entre los bolcheviques y el ambiente poltico de1918-1920. La guerra civil no fue un imprevisible acto de Dios en el que losbolcheviques no tenan responsabilidad alguna. Por el contrario, los bolche-viques se asociaron al enfrentamiento armado y la violencia en los meses quemediaron entre febrero y octubre de 1917; y como los lderes bolcheviques biensaban antes de que ocurriera, su golpe de octubre fue percibido por muchoscomo una provocacin directa a la guerra civil. La guerra civil ciertamente le dioal nuevo rgimen su bautismo de fuego, influenciando as su futuro desarrollo.Pero los bolcheviques se haban arriesgado y tal vez incluso haban buscado unbautismo de esa ndole25.

    Los bolcheviques no se hacan ilusiones sobre la posibilidad de un trnsitopacfico al socialismo, y crean certeramente que la resistencia de las clasesenemigas impona a la nueva clase dominante, el proletariado en alianza conlos campesinos, aplastar tal resistencia mediante el poder armado. Si bien losbolcheviques partan de esta afirmacin ampliamente comprobada, es errneoafirmar que buscaron y desearon el extenso y doloroso perodo de guerracivil (1918 a 1921). De hecho, consideraban certeramente que la revolucinalemana, al romper el frente nico de Aliados-Entente que comenzaba a ac-tuar en comunidad con las clases depuestas rusas contra el rgimen sovitico,hubiera acortado y hecho infinitamente ms benvolo el perodo de guerracivil que tuvieron que atravesar. La hostilidad de la socialdemocracia alemanay sus habilidades para derrotar el ascenso de un gobierno de los consejos deobreros y soldados (dicho de paso mediante la guerra civil abierta contra elala revolucionaria y las masas de obreros y soldados) termin en la derrota delproceso y en el fortalecimiento del frente imperialista contra los revoluciona-rios rusos. La apuesta bolchevique, y ligado a sta el avance o las restriccionesde la democracia sovitica, estaba enlazada a la dinmica de la lucha de clases

    que una la toma y defensa del poder obrero en Rusia con el desarrollo de larevolucin en Alemania como efectivamente pas. Si triunfaba el poder obreroen ese pas central de Europa, el trnsito de la dictadura del proletariado alsocialismo se facilitara hacindose menos cruenta la guerra civil y por lo tantomenos necesarias las restricciones a la democracia sovitica.

    Por el contrario, Fitzpatrick afirma que los bolcheviques buscaron laguerra civil para imponer un gobierno autoritario. Al ignorar concientementela estrategia internacional de los bolcheviques la autora finalmente sentenciaque el poder autoritario del rgimen se fundamenta en el deseo conciente de

    25 Sheila Fitzpatrick, op. cit., pgs. 93-94.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    14/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    232

    DEBATES

    los bolcheviques, en su apelacin a la violencia y a la guerra civil por fuera detoda consideracin histrica.

    Si bien la historiadora aclarar que, a diferencia de Stalin, a Lenin no le

    interesaba tanto la concentracin del poder per se sino qu clase social oalianza de clases detentaba ese poder, deduce de las circunstancias que atraviesael poder de los soviets durante los primeros aos la tendencia que lleva por lanaturaleza del Partido Bolchevique a determinar la naturaleza del rgimenpoltico que consolida la revolucin: el stalinismo. Tal vez no haya partidopoltico en la historia del siglo XX que haya manejado las contradicciones dela sociedad y fundamentalmente de una sociedad atravesada por la crisis y larevolucin de una manera tan maniquea, tan directa y voluntariamente pro-gramada por los lderes. Sin duda, en este cuento hay mucha tela stalinista.Sin embargo, como esta visin del proceso no se puede sostener, nuevamentese debe buscar algn sustrato social donde apoyar tales tendencias autoritarias.

    As, nuevamente es el intento de los trabajadores y los campesinos de generarsus propias instituciones y tradiciones polticas el que viene a reforzar la na-turaleza autoritaria del partido, de su lder y del rgimen ideado a su imageny semejanza.

    LALUCHADELABUROCRACIASOVITICA CONTRAELPARTIDOBOLCHEVIQUEYLAHERENCIADELAREVOLUCIN

    Ceida la revolucin a sucesivas convulsiones que dan como resultadonecesario el establecimiento y consolidacin de un dictador, la historiadoraenumera las diversas fases de la lucha de la nueva burocracia sovitica contrala revolucin como sucesivas fases de la revolucin misma. Tanto es as quedenomina la ltima convulsin como la revolucin de Stalin. Bajo esta ltimaagrupa el proceso de colectivizacin forzosa iniciado en el ao 1928, la indus-trializacin acelerada, la constitucin de los campos de trabajo forzado haciafines de 1932-33 y las grandes purgas de 1937-38. Luego de estas sacudidas,

    la sociedad sovitica parece recobrar la calma.El ascenso de la burocracia sovitica es explicado como una continuidad

    del bolchevismo, centralmente a travs de la utilizacin por parte del stalinismode una retrica y animosidad fundada en la lucha de clases. As, la colectivi-zacin forzosa impuesta al campesinado se fundamenta en la tradicin comnde los bolcheviques de desconfiar de la pequeo burguesa, de ver tras el ne-

    pistaa un futuro capitalista. Por otro lado, el impulso superindustrializadoremprendido por la burocracia de Stalin, luego de romper su bloque con losnepistasy un sector del Partido Bolchevique del perodo previo, es explicado

    como la imposicin de una tradicin modernizadora extendida entre losbolcheviques, llegando incluso a afirmar que para stos el socialismo era igual

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    15/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    233

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    a la sociedad industrial moderna26. Olvida la autora que si comparamos alstalinismo con la frmula popularizada por Lenin que defina al Estado obrerocomo electrificacin ms soviets, el ngulo de la democracia sovitica est

    ausente en la orientacin modernizadora de la burocracia stalinista. Por suparte, Trotsky, quien haba planteado un programa de industrializacin en 1923,critica el giro superindustrializador del stalinismo, ya que ste se impona nopor medio de la democracia sovitica sino por mtodos burocrticos y que porlo tanto, esta medida no aade nada nuevo al peso especfico del proletariadodentro de la vida poltica del pas27.

    Si la opcin patritica de avanzar en la industrializacin sin ayuda del co-mercio exterior, como haba planteado Trotsky, fue la que finalmente se llevadelante, esto demuestra para la autora que el camino a recorrer por el rgimen,en una u otra de las opciones en pugna, comparta un imaginario comn tantoas como resultados similares28. De esta manera, las contiendas entre las perso-nalidades del Partido Bolchevique son confinadas a simples luchas personalesdesestimando cules eran las fuerzas sociales que estaban en disputa.

    Clarificar estos proyectos y el poder que haban adquirido las fuerzas enconflicto era dificultoso para los marxistas en 1924. Pero, para la autora, queescribe su ensayo varias dcadas despus, se trata de elaborar un discurso ideo-lgico que basa su fundamento en que las libertades conquistadas por las masasde obreros y campesinos pobres bajo la democracia sovitica no eran tales, yque el proyecto marxista de erigir un Estado de transicin, una dictadura delproletariado, es sinnimo de restriccin de las libertades polticas y de dictaduratotalitaria.

    Para establecer esta genealoga de la dictadura stalinista debe periodizar eltiempo de la reaccin como tiempo de la revolucin. Sin embargo, Fitzpatrickespecifica que el perodo stalinista es una etapa ubicada en el lmite entreambos procesos, entre la revolucin y la post revolucin. Si la revolucin es laintervencin racional de las masas en la vida poltica, si cada impulso de larevolucin cont con su participacin activa o se hizo sopesando su rol pol-tico en el nuevo rgimen, cmo se puede definir aquel impulso que se hizo

    sin su apoyo y movilizacin e incluso contra la participacin de estas mismasmasas?

    El enfrentamiento entre revolucin y contrarrevolucin en el rgimen socialimpuesto por la revolucin debe ser subsumido por Fitzpatrick recurriendo alargumento del carcter dual del stalinismo. De esta manera, la revolucin de

    26 Ibdem, pg.143.

    27 Len Trotsky, Stalin, Tomo II, Buenos Aires, Yunque, 1975.

    28 La autora trae a colacin que al inicio de los aos 20 en los debates en la militancia comunista era Trotskyy no Stalin el candidato a Bonaparte. Su carisma, popularidad y rol en la revolucin lo predispona a

    un papel clave en una supuesta dictadura carismtica. El bolchevismo era propenso a pensar las contra-dicciones de la Revolucin Rusa y a ver sus tendencias en lucha, en esos momentos el papel dominantede Stalin era impensado.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    16/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    234

    DEBATES

    Stalin se compone de un impulso proveniente de una revolucin desde arri-ba con elementos de una revolucin desde abajo. Sin embargo, la primeraargumentacin, aqulla de una transformacin impuesta desde el aparato del

    Estado, es ms convincente que aqulla del apoyo popular desde abajo queposee el stalinismo y del cual nos habla la autora. sta afirma: El invierno de1929-30 fue una poca de frenes, en la cual el nimo apocalptico y la retricaencendidamente revolucionaria del perodo realmente recordaba a la del perodoheroico previo, la desesperada culminacin de la guerra civil y el comunismode guerra en 192029.

    La autora encuentra, en la prosa inflamada de la burocracia y en el apoyourbano a la colectivizacin forzosa a la cual adheran los jvenes comunis-tas de la Komsomol30, razones suficientes para clasificar los movimientosconvulsivos de la sociedad rusa en la dcada del 30 como movimientos deuna revolucin cultural que terminar finalmente imponiendo los objetivosoriginarios de la Revolucin de Octubre. Los fines explcitos de la Revolucinde Octubre son as conquistados en el momento de mayor reaccin polticacontra estos objetivos y los hombres y mujeres que los encarnaron.

    Esta identidad supuesta entre los principios proclamados en 1917 y aqu-llos de la dcada del 30 se cimientan para la autora en su interpretacin delmarxismo como un esencialismo de clase. Los bolcheviques promueven laidea de un Estado en manos de las clases explotadas, de un Estado con hege-mona de los trabajadores en unidad con los campesinos pobres. Este objetivo,para la autora, es el que finalmente se impone mediante la revolucin deStalin. Para ella es durante los aos 30 cuando la administracin estatal esdefinitivamente conquistada, ya que 1/6 del personal administrativo eran,haca 5 aos, obreros manuales31.

    La historiadora, de esta manera, indicar que el propsito de la revolucincultural era establecer la hegemona comunista y proletaria, lo que en trminosprcticos significaba tanto afirmar el control del partido sobre la vida culturalcomo abrir la elite administrativa y profesional a una nueva cohorte de jve-nes comunistas y trabajadores32. La nueva generacin de jvenes comunistas

    estuvo dispuesta a enfrentar polticas de confrontacin cultural ms agresivas(concretamente a imponer el reinado del silencio en las universidades y entre

    29 Sheila Fitzpatrick, op. cit., pg. 173.

    30 Organizacin de la juventud, en un inicio autnoma del Partido Comunista de la URSS, sufri rpida-mente la influencia de los giros que tom el rgimen sovitico. Esto se expres claramente en la lucha contrael peso que Trotsky ejerci sobre los jvenes en un inicio. Luego de las purgas contra los oposicionistasla organizacin sufri un cambio en su composicin y el nmero de sus adeptos. Por ejemplo a partir de1925 se incit a la afiliacin masiva, se redujo el perodo de prueba de sus postulantes y se impuls laadhesin de jvenes campesinos, perdiendo el carcter obrero y urbano que en un inicio pretendi poseer.Ver E.H. Carr, El socialismo en un solo pas (1924-1926), Vol. 2, Madrid, Alianza Editorial, 1975.

    31 Sheila Fitzpatrick, op. cit., pg. 184.

    32 Ibdem., pg. 180.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    17/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    235

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    los jvenes obreros). As, Fitzpatrick se apoya en la existencia del denominadoejrcito cultural del Komsomol, que profesaba una fuerte retrica antibur-guesa y modernizante, para deducir el apoyo popular al stalinismo.

    La burocracia sovitica, que ya en la dcada de los 30 haba aplastado alproletariado primero, y luego al campesinado, tambin deba aplastar a losrestos sobrantes de la vieja guardia bolchevique y a la antigua intelligentzia.

    A esta tarea se abocaron febrilmente los jvenes stalinistas de la Komsomol.Lejos de los objetivos del bolchevismo de una democracia proletaria basadaen los soviets y de un aparato de Estado donde la clase obrera (hasta unacocinera, deca Lenin) pudiera cumplir tareas de administracin, el ascensode un sector de obreros y campesinos a las funciones estatales no agreg nadaal peso especfico que el proletariado cumpla bajo el rgimen de la dictaduraburocrtica. En realidad, el papel real jugado por los jvenes de la Komsomolen las universidades (y el sistema de enseanza) as como en la administracinestatal fue parte de la consolidacin de una elite adicta a la burocracia. En esesentido, el ascenso del stalinismo marca la paralizacin terica de la inteli-gencia, incluso de aquellos que la apoyaban (a la revolucin) pero no as a losbolcheviques, la tradicin de tolerancia de stos es destruida33.

    A travs de esta serie de amalgamas entre la visin y los objetivos polticospropuestos por los marxistas en la Revolucin Rusa y el fenmeno de reaccin,Fitzpatrick periodiza el calendario revolucionario. Enfrentando esta visinlineal y superficial de la revolucin, Trotsky, quien jug un rol protagnico enesta lucha, coloca las convulsiones que atraviesa el rgimen sovitico comodiversos momentos del ascenso de la reaccin termidoriana que concluye en lacoronacin de la burocracia sovitica y la dictadura stalinista.

    As, Trotsky establece tres tendencias, puntos ideolgicos en torno a loscuales se agruparon las distintas fuerzas polticas: Eran tres en conjunto, y a sutiempo se suplieron y reemplazaron en parte unas a otras. Su anlisis marxistatrata de establecer las relaciones existentes entre representaciones ideolgicasy polticas, los discursos de los actores y las clases y fracciones de clase a loscuales estn asociados. De esta manera, no se conforma con el ropaje que gusta

    vestir la burocracia sino que penetra su cobertura y devela los intereses socialesreales de la sociedad en convulsin. Devela la alegora a la cual es propensa laburocracia sovitica para penetrar en el anlisis marxista. El hecho de que hayasido un hombre del propio Partido Bolchevique el que haya personificado lareaccin no es un impedimento para aproximarse al fenmeno de ruptura enel proceso revolucionario abierto por octubre.

    As, tres nudos ideolgicos centrales fueron levantados en distintos mo-mentos por distintas fracciones en pugna. El punto ideolgico central, el proceso

    33 Boris Kagarlitsky,Los intelectuales y el estado sovitico. De 1917 al presente,Buenos Aires, Prometeo, 2006.Por otro lado Trotsky llama a la Komsomol de los aos 30, la juventud dorada del stalinismo, haciendouna analoga con la juventud dorada del movimiento nazi en Alemania.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    18/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    236

    DEBATES

    de industrializacin, es rechazado, en el ao 1923-24, por la alianza entre losviejos bolcheviques, la an insegura burocracia sovitica y los campesinosnepistas,cuyo basamento central era la posibilidad de adoptar una posicin

    autosuficiente respecto al progreso econmico del socialismo34

    . Esta alianzaeconmica y poltica inicial permiti a la burocracia sovitica quebrantar laresistencia de las masas obreras y a sus portavoces en la oposicin de izquierda35.La alianza es inicial, lo que la obliga a oscilar. En esta lucha, un sector del Par-tido Bolchevique ayuda a la burocracia a aplastar al proletariado y descabezarsu direccin. El bolchevismo como partido revolucionario, dice Trotsky, se hacomenzado a descomponer36.

    En una segunda fase, la reaccin sobre la democracia sovitica emprendesu lucha contra sus antiguos aliados nepistaspero en funcin de asentar supropia cuota en el reparto de la renta y el poder. De aqu que deben hablaren nombre del proletariado para quebrar la resistencia de sus antiguosaliados. La burocracia sovitica ve amenazada su propia existencia y medianteun giro brusco rompe con los campesinos nepistasy pega un salto violento ala superindustrializacin, por desgracia, predominantemente en el papel yen los discursos37.

    El segundo nudo ideolgico de la reaccin aparece expresado mediante unanueva alianza compuesta por un sector nacionalista del Partido Bolchevique yla burocracia sovitica. La campaa contra la teora de la revolucin perma-nente, carente de valor terico intrnseco, sirvi de expresin a una desviacinconservadora nacionalista del bolchevismo38. Aqu Trotsky especifica que estalucha se inici ayudada por la poltica de autodefensa conservadora de la viejaguardia bolchevique encarnada por Zinoviev y Kamenev, pero pronto se volvicontra ella misma. As, ayudada inconscientemente por sectores revolucionariosse impuls la teora del socialismo en un solo pas. Los viejos bolcheviques slodespus cayeron en la cuenta del proceso que se haba iniciado39.

    Trotsky define estos desplazamientos en las alianzas polticas, estos cam-

    34 La alianza de los triunviros, Zinoviev, Kamenev y Stalin, de 1923-25 se fundamenta en la defensa de

    las polticas de liberalizacin centrada en la posibilidad de acumular de sectores del campesinado ruso.En 1925 Zinoviev y Kamenev rompen con su postura anterior y la alianza de Stalin se realiza con Bujarinquien cree que la NEP es el fundamento de la economa socialista. En 1928 Stalin romper con Bunjarine impulsar el Primer Plan Quinquenal.

    35 Len Trotsky, Stalin, op. cit.

    36 Slo quienes se mueren en discusiones obtusas pueden pedir de un partido poltico que sojuzgue yelimine los factores, mucho ms poderosos, de masas y clases hostiles a l. La limitacin del partido comoinstrumento histrico se manifiesta por el hecho de que al llegar a cierto punto, en un determinado mo-mento, comienza a disgregarse. Bajo la influencia de presiones internas y externas se resquebraja y agrieta,y sus rganos comienzan a atrofiarse. Iniciado este proceso de descomposicin, lentamente al principio,en 1923, su ritmo aument rpidamente. Len Trotsky, Stalin, op. cit., pg 282.

    37 Idem.

    38 Idem.

    39 Idem.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    19/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    237

    A PROPSITODELLIBROLAREVOLUCINRUSADESHEILAFITZPATRICK

    bios en la base de sustentacin del rgimen, bajo el concepto de centrismoburocrtico. Debajo de estas modificaciones se suceden dos giros, al primerode retrica moderada y procampesino le sucede la prosa inflamada del tercer

    perodo y la industrializacin. El primer giro termidoriano, indica Trotsky, separece al termidor francs: all la casta termidoriana se apoya en los campesinosacomodados para aplastar la masa revolucionaria de las ciudades, para descabezaral proletariado. La lucha contra el jacobinismo se impulsa no como luchacontra l sino como aniquilamiento de los terroristas, de los montaeses, aligual que la lucha contra el bolchevismo se lleva adelante como lucha contra eltrotskismo, obrerismo, etc. La segunda fase del termidor, iniciada en 1927-28, es impulsada por la lucha descarnada de la burocracia sovitica contra suantiguo aliado, la pequeo burguesa rural. Aqu, dice Trotsky, terminan lasanalogas con el caso francs, ya que las bases sociales de la Unin Sovitica sehacen intangibles.

    La posicin dominante de la burocracia parte de parasitar los logros delestado obrero, las conquistas del proletariado sobre la sociedad capitalista.Slo manteniendo el equilibrio entre stas y los impulsos a la restauracincapitalista directa, es que poda la burocracia sostener su posicin y preservarsus privilegios de casta. En 1927, acompaando las consecuencias de la ca-tastrfica derrota de la revolucin china, la burocracia lleg a asustarse de suaislamiento, de su divorcio del proletariado. Sola no poda derrotar al kulak,a la pequeo burguesa, que haba crecido y continuaba creciendo sobre labase de la N.E.P.; tenia que contar con la ayuda del proletariado. De ah suesfuerzo concertado por presentar su lucha contra la pequeo burguesa, porlos productos sobrantes y por el poder, como la lucha del proletariado contralas tentativas de restauracin capitalista40.

    Luego de estos giros sucesivos, indica Trotsky, surge el bonapartismo bu-rocrtico. El momento de ascenso y consolidacin del bonapartismo se basa,segn Marx, en la postracin comn de los partidos antagnicos. Sobre eldescabezamiento de las clases enemigas el rgimen pretoriano impone eldominio de las armas sobre la sociedad41. Pero el caso ruso es un bonapartis-

    mo muy especial, ya que posee el control de toda la economa en sus manos,de manera que el tercer punto ideolgico de la burocracia en su lucha contrael trotskismo se desarrolla como lucha contra la nivelacin y la igualdad.Contra la tradicin puritana y austera de los bolcheviques se produce latransformacin de la desigualdad social inevitable que persiste bajo un estado

    40 Ibdem, pg. 228.

    41 El bonapartismo, indicaba Marx analizando al Segundo Imperio Napolenico, debe representar al

    Estado en su antagonismo con la Sociedad, o como dir en El 18 brumario de Luis Bonaparte: reflejacon esplendor el antagonismo entre el poder del Estado y la sociedad. Ver Maximilien Rubel, Karl Marxdevant le bonapartisme, Pars, Mouton, 1960, pg. 50.

  • 8/21/2019 09_fitapatrickUna crtica liberal-conservadora a la revolucin A propsito del libro La Revolucin Rusa de Sheila Fit

    20/20

    EstrategiaInternacional

    N 24

    diciembre 2007

    enero 2008

    238

    DEBATES

    de transicin en desigualdad econmica a favor de la casta burocrtica42.Las consecuencias sociales aparejadas por la colectivizacin forzosa fueron

    impensadas y profundas. Sus repersecuciones en el campo generaron una pri-

    mera corriente migratoria hacia la ciudad, especialmente entre los jvenes, queingresaron como mano de obra del impulso industrializador del primer planquinquenal. Una segunda corriente migratoria se gener luego del fracaso de losplanes de colectivizacin en el campo, que hicieron descender la productividaddel trabajo y originaron las hambrunas de 1932-33. Existi adems la corrienteinversa, obreros e intelectuales que huan de la persecucin de las ciudades haciael campo o hacia las nuevas ciudades-fbricas implantadas por la planificacin.Isaac Deutscher indica que en este momento de desplazamientos impuestosdesde arriba la vieja clase obrera se ve reforzada por campesinos emigrados,mientras que los lazos de vida de stos son resquebrajados.

    De esta manera, el bonapartismo burocrtico no slo haba descabezado alproletariado y a las fracciones directamente restauracionistas, sino que tambinmediante su control sobre el conjunto de la sociedad, haba desorganizado loslazos de solidaridad de clase ms elementales. De all su componente totali-tario. De modo que: En consecuencia, los cuadros de la vieja clase obrera sediluyeron en la masa marginal de aquellos campesinos que haban perdido suspropias tradiciones, sus hbitos de trabajo y sus ideales sociales. En un pasdonde la poblacin entera haba sido convertida, hasta un punto considerable,en una masa desclasada, la burocracia quedaba como la nica fuerza socialmenteorganizada. El terror cumplira el mismo papel sobre la intelligentzia que lacolectivizacin jug con el campesinado. La relativamente vieja intelligentziafue reemplazada por una masa desclasada de nuevos especialistas43.

    Es justo en este momento de ascenso del terror reaccionario cuando la autoraplantea que se logra una nueva inteligencia sovitica extrada de obreros ycampesinos que llega a la administracin del Estado y al gobierno, cumpliendoas los objetivos planteados por Lenin y el bolchevismo. Este es el momentofijado por la autora para cerrar el calendario revolucionario. Como vimos, elanlisis que hace Trotsky es mucho ms complejo que la secuencia lineal que

    traza la visin liberal en la cual el stalinismo es la continuidad necesaria delbolchevismo, de manera tal que el primero lleva adelante como su continuidadlos objetivos concientes del segundo. Un abismo se abre entre el desarrollo de laRevolucin Rusa y el marco conceptual de la historiadora. Abismo que, comovimos a lo largo de esta nota, deja afuera la apreciacin de la verdad histricaen la revolucin proletaria.

    42 En 1932 el viejo principio comunista de mxima del partido, en virtud del cual un miembro, conindependencia de su cargo en la jerarqua, no poda ganar ms que un obrero cualificado fue eliminado,

    como sucedi tambin con otros residuos del igualitarismo inicial. Moshe Lewin,El Siglo Sovitico. Qusucedi realmente en la Unin Sovitica?, Barcelona, Ed. Crtica Barcelona, 2006, pg. 111.

    43 Boris Kagarlitsky, op. cit., pg. 119.