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Por: uno de tantos siervos inútiles.

INTRODUCCION. En I R. 3:5-12 tenemos el registro bíblico que Salomón era sabio y

entendido, no ha habido otro ser humano como el en ese campo, ni antes, ni después. Pero ese merito es solo para Dios que fue el dador de tal don por su gracia. David como su padre hizo su parte ya que lo orientó. (I Crón. 22:12)

Sabemos que la vida de Salomón en su última etapa no es un ejemplo a

imitar; pero no esta de más recordar que consideremos que el autor de este formidable libro es el Espíritu Santo.

Aunque Proverbios se entrego en tiempos de La Ley, la vigencia de los

asuntos por este libro ventilados es de necesaria consideración para los que queremos tomar en serio la Palabra de Dios.

Debemos de adelantar que… ¡La Sabiduría no es teoría! …No es conocer: es vivir piadosamente según la guía que Dios ha provisto.

Una de las columnas de la iglesia primitiva nos da algunas características del sabio en Stg. 3:13-17:

El sabio tiene buena conducta.

Las obras del sabio se desarrollan en mansedumbre.

El sabio no tiene celos, ni es contencioso.

Los sabios no se jactan, ni mienten.

La sabiduría que viene de lo alto es: o Pura. o Amable. o Misericordiosa. o Pacífica. o Benigna. o Llena de buenos frutos.

La sabiduría no tiene incertidumbre ni hipocresía.

DESARROLLO DEL LIBRO: La parte azul y en negritas corresponde a la parte inspirada de Dios y que

ha sido registrada en la versión RV 1960 de la Santa Biblia; la parte de negro es la óptica de una criatura falible, débil y torpe.

No se trata de hacer un estudio exegético ni exhaustivo de este maravilloso

libro; tan solo se dan algunos puntos de vista desde la experiencia personal de una criatura que viaja como peregrino en un desierto donde el Señor acompaña a aquellos que se han rendido ante El.

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1-2. Los proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel.

Para entender sabiduría y doctrina, Para conocer razones prudentes, La razón responde a la pregunta: ¿por qué hacer o no hacer algo? La prudencia nos invita a tener cuidado en nuestro andar diario, vivir con

moderación y actuar con cautela.

3. Para recibir el consejo de prudencia, Justicia, juicio y equidad;

El consejo de los proverbios de Dios nos puede ayudar a alcanzar: Justicia: para proceder respetando la verdad. Juicio: que obra con sensatez en cada acción realizada. Equidad: la que trata con igualdad a sus semejantes.

4. Para dar sagacidad a los simples, Y a los jóvenes inteligencia y

cordura. El término sagaz se asemeja al de inteligente. Este estima por análisis y

asociación lo que puede ocurrir. Solo para Dios es posible hacer del simple una persona sagaz.

La cordura es la capacidad de pensar y obrar con prudencia, sensatez y juicio.

Es normal que la persona mayor sea madura, pero los jóvenes tienen esta posibilidad solo con la ayuda de la palabra de Dios.

5. Oirá el sabio, y aumentará el saber, Y el entendido adquirirá

consejo, El saber sigue creciendo; pero debemos oír con atención la voluntad de

Dios, de boca de su iglesia; no de los religiosos, ya que no son fuentes confiables por carecer de sana doctrina.

6. Para entender proverbio y declaración, Palabras de sabios, y sus

dichos profundos. Antes de entender las santas declaraciones debemos de escucharlas con

atención y con un corazón dócil; sabiendo que nuestras limitaciones no nos impiden crecer espiritualmente al igual que lo han hecho las personas que nos precedieron y que tomaron este camino de bien con el auxilio del Creador al seguir a su enviado: a Jesús.

7. El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos

desprecian la sabiduría y la enseñanza. La sabiduría real no es como el mundo lo piensa un cúmulo de

conocimientos y/o habilidades que adquiere la persona para su propio beneficio y seguridad; es de manera opuesta y distante la actitud hacia la Palabra de Dios y por consiguiente hacia el Dios de la Palabra.

8–9. Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, Y no desprecies la

dirección de tu madre; Porque adorno de gracia serán a tu cabeza, Y collares a tu cuello.

La sabiduría pide oír a los padres porque:

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Dios lo manda; esto debería de ser suficiente para respetar su autoridad.

Ellos nos aman y desean que nuestra marcha en la carne sea menos dolorosa que al andar a nuestra manera.

Son mayores y con experiencia para indicarnos algunos de los medios que la vida tiene para andar con propiedad y sin esfuerzos innecesarios. El problema surge cuando los padres no atienden las instrucciones del

Señor y viajan fuera de las sendas de paz; arrastrando consigo a muchos de sus seres amados, en los cuales influyen.

10-19. Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, No consientas. Si dijeren: Ven con nosotros; Pongamos asechanzas para derramar sangre, Acechemos sin motivo al inocente; Los tragaremos vivos como el Seol, Y enteros, como los que caen en un abismo; Hallaremos riquezas de toda clase, Llenaremos nuestras casas de despojos; Echa tu suerte entre nosotros; Tengamos todos una bolsa, Hijo mío, no andes en camino con ellos. Aparta tu pie de sus veredas, Porque sus pies corren hacia el mal, Y van presurosos a derramar sangre. Porque en vano se tenderá la red Ante los ojos de toda ave; Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas, Y a sus almas tienden lazo. Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, La cual quita la vida de sus poseedores.

Los pecadores nos quieren engañar para que andemos con ellos en las sendas de las codicias; las que quitan la vida de sus poseedores y de muchas víctimas. Las invitaciones pueden ser osadas y descaradas y solo serán atendidas por quienes carecen del temor a Jehová.

No podemos dejarnos influenciar por las teorías de las masas, las que incitan a incorporar como patrón de vida las sutiles pautas del mal; donde las riquezas constituyen el fin de esta breve existencia que Dios nos dio para glorificarle.

20-21. La sabiduría clama en las calles, Alza su voz en las plazas; Clama en los principales lugares de reunión; En las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones.

La sabiduría está clamando allí donde están las multitudes (en las calles, plazas, en los principales lugares de reunión,…) pero es con los jueces y con los sabios (las puertas de la ciudad) que dice sus razones.

22-30. ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza, Y los

burladores desearán el burlar, Y los insensatos aborrecerán la ciencia? Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras. Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese, Sino que desechasteis todo consejo mío Y mi reprensión no quisisteis,

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También yo me reiré en vuestra calamidad, Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis; Cuando viniere como una destrucción lo que teméis, Y vuestra calamidad llegare como un torbellino; Cuando sobre vosotros viniere tribulación y angustia. Entonces me llamarán, y no responderé; Me buscarán de mañana, y no me hallarán. Por cuanto aborrecieron la sabiduría, Y no escogieron el temor de Jehová, Ni quisieron mi consejo, Y menospreciaron toda reprensión mía,

La sabiduría exhorta a los burladores y a los insensatos a acercarse con sinceros deseos de cambiar o a seguir en su obstinación y esperar:

Calamidades.

Destrucción.

Temores.

Tribulación.

Angustia. Mañana quizás será muy tarde para recibir la ayuda que hoy ofrece la

sabiduría, ya que no escogieron tener hoy el conveniente temor de Jehová, que proporciona el consejo y la reprensión necesaria para evitar estos males.

31-32. Comerán del fruto de su camino, Y serán hastiados de sus propios consejos. Porque el desvío de los ignorantes los matará, Y la prosperidad de los necios los echará a perder;

Al tomar un camino equivocado se escoge transitar en lugares peligrosos, allí donde se arriesga de continuo la vida.

El final del camino sin Dios es de amargo gusto al ver el terrible estado donde este lleva a sus victimas; los que primero fungieron como villanos.

El segundo plato lo come el que ha prosperado; pero solo si carece de generosidad para compartirlo y de falta de control y ciencia para identificar que este abuso es el que causa la indigestión.

33. Mas el que me oyere, habitará confiadamente Y vivirá tranquilo, sin temor del mal.

Al oír lo que Dios dice con la idea de aplicarlo, se garantiza la posesión de la paz; porque esto nos aleja obligatoriamente del mal. Nosotros mismos lo debemos de buscar y de Dios se nos de la segura protección.

1-5. Hijo mío, si recibieres mis palabras, Y mis mandamientos guardares dentro de ti, Haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; Si inclinares tu corazón a la prudencia, Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; Si como a la plata la buscares, Y la escudriñares como a tesoros,

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Entonces entenderás el temor de Jehová, Y hallarás el conocimiento de Dios. Al recibir las Palabras y al buscar guardar los Mandamientos del Creador;

se entenderá el temor de Jehová y entonces podremos hallar el conocimiento de Dios, que es el Tesoro Eterno; que para nuestro día esta localizado únicamente en la Sublime persona del Señor Jesucristo.

6. Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y

la inteligencia. Dios da la sabiduría: es un regalo que no lo puede prestar o vender ningún

centro educativo por prestigioso que lo considere el mundo. Algunas recomendaciones que debemos de tener siempre presentes al

respecto son:

No envanecernos ya que lo recibido no provino de nosotros mismos, sino de Dios.

Debemos de apreciar y cultivar nuestro jardín del conocimiento divino, estudiando con frecuencia, pureza y animo la Santa Biblia

Utilizar lo adquirido para la gloria de Dios enseñando a otros y aplicándolo en nuestras vidas.

7. El provee de sana sabiduría a los rectos; Es escudo a los que

caminan rectamente. Dios provee de una sana sabiduría a los rectos, ya que supieron rendirse a

su Señorío. El escudo protege de las flechas y lanzas que vienen de largas distancias

así como de los golpes de espada que se dan en la lucha cuerpo a cuerpo.

8. Es el que guarda las veredas del juicio, Y preserva el camino de sus

santos. En las veredas de Dios los caminantes somos indestructibles cuando

somos custodiados por el Fuerte de Israel; su abandono es doloroso.

9. Entonces entenderás justicia, juicio Y equidad, y todo buen camino. La justicia, el juicio y la equidad deben de ser entendidos antes del andar

que a Dios agrada. Sólo con la sabiduría que imparte el temor Jehová tomaremos los caminos

que se sujetan a las condiciones de amor, paz, libertad y seguridad que Dios nos da en Cristo; solo allí tenemos acceso a estos grandes beneficios.

10-15. Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, Y la ciencia fuere

grata a tu alma, La discreción te guardará; Te preservará la inteligencia, Para librarte del mal camino, De los hombres que hablan perversidades, Que dejan los caminos derechos, Para andar por sendas tenebrosas; Que se alegran haciendo el mal, Que se huelgan en las perversidades del vicio; Cuyas veredas son torcidas, Y torcidos sus caminos.

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Cuando tememos a Dios y buscamos conocer su Santa Voluntad (v. 10) hemos dado el primer paso hacia la sabiduría; la que nos traerá los siguientes beneficios:

1. Seremos discretos. Esto nos guarda, porque no revelamos aquel secreto, con lo que desencadenaríamos la perdida del amigo.

2. Somos librados de los impíos. Estos que se caracterizan por:

Haber dejado a Dios.

Hablan cosas perversas.

Andan cómodamente en sendas tenebrosas.

Están satisfechos de obrar el mal.

Son personas con muchos viciosos nocivos.

Esclavizados a sus pasiones carnales.

Progresan rápidamente en hacer el mal.

Atraen a otros a su mortal error. 16-19. Serás librado de la mujer extraña, De la ajena que halaga con

sus palabras, La cual abandona al compañero de su juventud, Y se olvida del pacto de su Dios. Por lo cual su casa está inclinada a la muerte, Y sus veredas hacia los muertos; Todos los que a ella se lleguen, no volverán, Ni seguirán otra vez los senderos de la vida.

El hombre que es temeroso de Dios será librado de la mala mujer que lo atrae a sí misma para realizar practicas inmorales, esto lo hace con palabras engañosas, que son la carnada para caer en sus venenosas garras.

20-22. Así andarás por el camino de los buenos, Y seguirás las

veredas de los justos; Porque los rectos habitarán la tierra, Y los perfectos permanecerán en ella, Mas los impíos serán cortados de la tierra, Y los prevaricadores serán de ella desarraigados.

El temor de Dios nos guía por el camino en el que transitan otros seres buenos en el sentido mas básico de la palabra y en cuyas veredas han transitado muchos seres piadosos. Esto lo han hecho confiados y en paz.

La porción más dolorosa para los impíos es que serán cortados eternamente de la gloriosa presencia del Creador.

Una promesa ignorada para todos los prevaricadores (apostatas) es que serán desarraigados de la tierra; aunque esto es para ellos hoy motivo de burla y desprecio.

1. Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guarde mis mandamientos;

Solo puede olvidar la ley de Dios aquel que nunca la ha conocido a fondo, ya que no es su prioridad atender a la voz de su Superior.

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La ruta del olvido de la ley puede ser entonces:

Alejarse del área de cobertura divina. (voluntaria o involuntariamente).

No le interesó indagar acerca de la perfecta voluntad de Dios, aunque estuvo expuesto y recibió múltiples invitaciones salvíficas.

Algunas de las ventajas de guardar en el corazón la ley de Dios son:

Estamos en paz con Dios.

Vivimos la ley de libertad en Jesucristo.

Estaremos equipados para vivir en el universo que El creo y que los hombres hemos degenerado.

Tendremos auxilio en aquello inalcanzable para nosotros y fortaleza en lo que si podemos realizar.

Podremos ser canales de impacto al prójimo, al manifestar en el diario vivir el amor cristiano.

2. Porque largura de días y años de vida Y paz te aumentarán.

Los occidentales generalmente no respetamos a los ancianos, sin considerar que esto es una gran bendición.

La paz con Dios sólo la disfrutaremos si estamos viviendo bajo sus términos claramente expuestos en la Biblia.

La paz con el prójimo es más fácil de obtener al buscar ansiosamente una relación justa con todas las criaturas con las que tenemos contacto; donde no haremos aquello que no nos gustaría que nos aconteciera.

3. Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Átalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón;

El mayor ejemplo de la misericordia es el que Dios entrego a Jesucristo por los pecadores que lo reciben; debemos imitarlo.

La verdad no la posee el mundo, quien tiene falsas enseñanzas, es el enemigo quien tiene sus copias. La verdad esta en la santa revelación de Dios. (Vea el Salmo 119)

4. Y hallarás gracia y buena opinión Ante los ojos de Dios y de los hombres.

La gracia y la buena opinión no la merecemos: ni de Dios ni de otras criaturas; esta viene por misericordia.

5. Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia

prudencia. ¿Por qué debemos de fiar en Jehová?

Porque El nos hizo y nos conoce.

Porque nos quiere ayudar y proteger.

Porque El es bueno.

Porque nunca cambia. Confiar en nuestra prudencia es una gran imprudencia.

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6. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.

Todo viene a bien a los que aman a Dios. (Rom. 8.28) Los que le aman también le obedecen y lo buscan siempre. Dios endereza nuestros caminos porque por naturaleza somos torpes y erramos al blanco.

7. No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal;

¿Por qué no confiar en nuestras opiniones?

Son subjetivas y con diferentes interpretaciones.

Cambian según las necesidades y las experiencias.

Porque proceden de una naturaleza caída.

Son pobres, producidas por una mente finita.

9-10. Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus

frutos; Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto.

¿Por qué debemos de honrar a Dios con nuestros bienes?

Porque no son nuestros: todo es de Dios (Sal. 24:1)

Porque no nos deja: como lo hacen las riquezas que son un amor infiel que nos dejan o nosotros las dejamos a ellas al morir.

Porque Jesucristo lo manda (Mat. 6:19-21) No debemos de hacernos tesoros aquí; sino más allá del sol.

11. No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, Ni te fatigues de su corrección;

El menosprecio da al castigo un valor más bajo. No debemos de cansarnos de la corrección ya que busca hacer los arreglos que nuestra vida requiere.

12. Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a quien

quiere. Dios castiga al que ama porque es lo que conviene a los santos. 13-18. Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, Y que obtiene

la inteligencia; Porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, Y sus frutos más que el oro fino. Más preciosa es que las piedras preciosas; Y todo lo que puedes desear, no se puede comparar a ella. Largura de días está en su mano derecha; En su izquierda, riquezas y honra. Sus caminos son caminos deleitosos, Y todas sus veredas paz. Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, Y bienaventurados son los que la retienen.

Es muy feliz el que se sujeta a la revelación de Dios, ya que:

Vivirá mucho tiempo. (16)

Dará buenos frutos. (14)

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Tendrá provisión. (16)

Recibirá honra. (16)

Alcanzara la paz. (17)

Se deleitara en sus caminos. (17)

Tendrá sanidad procedente del árbol de vida. (18)

19-20. Jehová con sabiduría fundó la tierra; Afirmó los cielos con

inteligencia. Con su ciencia los abismos fueron divididos, Y destilan rocío los cielos.

Es sabio buscar la sabiduría del creador que él mismo utilizó para formar su universo, el primer paso es creer en la salvación que solo Jesús brinda.

21-22. Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; Guarda la ley y el consejo, Y serán vida a tu alma, Y gracia a tu cuello.

Al estar pendientes de lo eterno guardaremos solo lo de valor; lo que da vida al alma. Los creyentes renacidos no estaremos separados de Dios eternamente por la muerte, como le acontecerá al no regenerado.

23. Entonces andarás por tu camino confiadamente, Y tu pie no

tropezará. Al confiar solo en Dios no dependeremos de guardias, perros, alarmas….

No se resbalara jamás cuando el Santo nos acompaña. (Ver Sal. 15)

24. Cuando te acuestes, no tendrás temor, Sino que te acostarás, y tu sueño será grato.

En el temor nocturno las horas se asemejan a largos días; mientras que en el sueño grato el cuerpo recibe verdadero descanso.

25. No tendrás temor de pavor repentino, Ni de la ruina de los impíos

cuando viniere, Diferencia del pavor repentino:

Con razón. Por la violencia del entorno o por causa de nuestros pecados, errores o malas decisiones.

Sin razón. Son inventos locos de nuestra mente que nos hace creerle a otros que viven alejados de Dios.

26. Porque Jehová será tu confianza, Y él preservará tu pie de quedar

preso. Se tiene confianza en Dios sólo al rendirnos a El. La criatura no es apresada cuando el Creador lo evita.

27-28. No te niegues a hacer el bien a quien es debido, Cuando

tuvieres poder para hacerlo. No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, Y mañana te daré, Cuando tienes contigo qué darle.

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No debemos de negarle la ayuda al menesteroso cuando tenemos con nosotros lo solicitado, ya que este pide únicamente lo que requiere para sobrevivir.

29. No intentes mal contra tu prójimo Que habita confiado junto a ti. La traición no viene del enemigo; sino del amigo. Al dañar de manera física, emocional o espiritualmente al que nos tiene

confianza abusaremos de la oportunidad de amistad o hermandad que se nos brindo.

30. No tengas pleito con nadie sin razón, Si no te han hecho agravio. Si los cristianos tenemos que poner la otra mejilla al incrédulo que nos

golpea; ¿como podemos entonces pelear con alguien sin que nos haga algo? No debemos de ser tropiezo; sino luz.

31. No envidies al hombre injusto, Ni escojas ninguno de sus caminos.

El hombre injusto ha obtenido sus bienes sin justicia; seguir sus caminos es abandonar la piedad al dejarse dominar de la terrible avaricia.

32. Porque Jehová abomina al perverso; Mas su comunión íntima es

con los justos. Dios es muy limpio de ojos y la limpieza debe ser buscada por los creyentes

y seguidores de Jesucristo. Aunque Dios abomina al perverso, en su bondad llama a sus elegidos

cuando están en esta grave situación. 33. La maldición de Jehová está en la casa del impío, Pero bendecirá la

morada de los justos. Flota en la atmósfera del impío la maldición del Creador, lista para actuar en

el momento oportuno. También están reservadas para su entrega las bendiciones para la morada de los justos.

34. Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, Y a los humildes

dará gracia. El Dios que todo lo mira no aprecia que la criatura se burle de otras

criaturas; a su tiempo medirá así a quién tal haga, (más una cuarta) A los humildes les dará Dios un regalo, aunque inmerecido; mas, por andar

humillados en el diario caminar. 35. Los sabios heredarán honra, Mas los necios llevarán ignominia.

Los sabios que son los que temen a Dios, recibirán respeto y admiración al final del camino de la vida; mas para los necios resta una ofensa pública. (Ignominia)

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1. Oíd, hijos, la enseñanza de un padre, Y estad atentos, para que

conozcáis cordura. Al oír con atención no perderemos ningún punto de los enunciados; para

hacer lo que se nos solicita; esta manera de actuar forjara en nosotros un carácter racional.

2. Porque os doy buena enseñanza; No desamparéis mi ley.

Algunos han aceptado el error y son diligentes expositores del mismo. Para quienes hemos recibido buena sabiduría; que viene de Dios tenemos la responsabilidad de nunca abandonarla, ya que es una ley que nos guía para el bien, así como lo es un mapa en una selva desconocida.

3-6. Porque yo también fui hijo de mi padre, Delicado y único delante

de mi madre. Y él me enseñaba, y me decía: Retenga tu corazón mis razones, Guarda mis mandamientos, y vivirás. Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; No te olvides ni te apartes de las razones de mi boca; No la dejes, y ella te guardará; Amala, y te conservará.

Salomón estuvo en un entorno de piedad, instrucción y protección que no lo tienen hoy muchos; las continuas invitaciones pueden formar en los hijos el cimiento de la convicción.

Hasta que llegamos al redil de Dios empezamos a vivir según su palabra; con sabiduría; allí santos hermanos experimentados y conocedores de la doctrina Bíblica nos guían a cambiar los rudimentos del mundo. Esta es la invitación que hoy hacemos y que esperamos que mañana la harán algunos de nuestros discípulos jóvenes.

Dios quería que todos compráramos sabiduría, y al tener su Palabra amarla y conservarla, ya que nos dio la vida.

7. Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus

posesiones adquiere inteligencia. Dar prioridad a la compra de sabiduría, que es el temor de Dios; tendremos

la mejor inversión que una criatura puede hacer. Hoy solo manifestaremos la inteligencia que viene de Dios al vivir en Jesucristo.

8. Engrandécela, y ella te engrandecerá; Ella te honrará, cuando tú la

hayas abrazado. Al dar atención a la enseñanza ella nos retribuirá el bien; al igual que lo

hace nuestro Dios, quien honra a los que lo honran. Si hoy no la abrazamos y descuidamos el estudio de la Escritura… ¿al tener

problema mañana tendremos el tiempo de escudriñarla para su aplicación?

9. Adorno de gracia dará a tu cabeza; Corona de hermosura te

entregará. No merecemos tener sabiduría, pero como Dios es generoso, recibimos

este regalo de gran valor. ¿Quiénes tiene una corona hoy aparte de los reyes?

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10. Oye, hijo mío, y recibe mis razones, Y se te multiplicarán años de

vida. Si oímos a la sabiduría que viene de Dios, viviremos más por apartarnos del

peligro y del mal; ya que de esto nos advierte La Biblia.

11-12. Por el camino de la sabiduría te he encaminado, Y por veredas

derechas te he hecho andar. Cuando anduvieres, no se estrecharán tus pasos, Y si corrieres, no tropezarás.

Si andamos en la prudencia de la sabiduría y el temor de Dios:

Habrá donde pasar con seguridad.

Aun corriendo no tenderemos caída. 13. Retén el consejo, no lo dejes; Guárdalo, porque eso es tu vida. Conservarse en el temor a Dios y su palabra nos impide abandonar so

consejo, ya que se guarda lo valioso. En el Nuevo Testamento está el camino de la vida eterna en Jesucristo. 14-17. No entres por la vereda de los impíos, Ni vayas por el camino de

los malos. Déjala, no pases por ella; Apártate de ella, pasa. Porque no duermen ellos si no han hecho mal, Y pierden el sueño si no han hecho caer a alguno. Porque comen pan de maldad, y beben vino de robos;

Debemos estar lejos del camino de los impíos; ya que ellos viajan allí donde:

Pueden hacen mal.

Hacen caer a quienes tienen oportunidad.

Planifican y ejecutan sus robos.

18. Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en

aumento hasta que el día es perfecto. El camino de los justos, que son los justificados por la gracia de Jesucristo,

mejora hasta el día de la redención final. La luz de hoy será más resplandeciente porque el Maestro nos guía y enseña.

19. El camino de los impíos es como la oscuridad; No saben en qué

tropiezan. Los impíos anduvieron, andan y andarán a oscuras, tropezando hasta llegar

al Hades. A menos que cambien su naturaleza por la intervención divina. 20-22. Hijo mío, está atento a mis palabras; Inclina tu oído a mis

razones. No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu corazón; Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo.

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Donde está nuestro tesoro, allí esta nuestro corazón. La palabra de Dios es medicina para cada enfermedad espiritual…pero; después del diagnostico hay que tomar el tipo y la dosis recomendada.

23. Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana

la vida. No aceptemos nada fuera del consejo de Dios. Las nuevas teorías como la

psicología, filosofía, y la “ciencia racional” están total o parcialmente opuestas a Dios.

Dejar a Jesús es apartarse de la vida. (Ver Juan 15:5) 24-27. Aparta de ti la perversidad de la boca, Y aleja de ti la iniquidad

de los labios. Tus ojos miren lo recto, Y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. Examina la senda de tus pies, Y todos tus caminos sean rectos. No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; Aparta tu pie del mal.

El hablar del creyente no debe de incluir cosas perversas o sucias. La mirada sólo se debe de dirigir a lo que es recto y que nos edifica. El caminar de una persona piadosa se debe de realizar en rectitud; sin desvíos hacia izquierda o derecha para apartarse del bien hacia el mal.

1. Hijo mío, está atento a mi sabiduría, Y a mi inteligencia inclina tu

oído, Solo al estar atentos a quien nos quiere hacer bien podremos captar los

puntos clave de la instrucción que necesitaremos en los senderos que aun nos queda por recorrer. El inclinar el oído representa el dirigir el esfuerzo de aprendizaje hacia lo bueno.

2. Para que guardes consejo, Y tus labios conserven la ciencia.

Al conservar lo aprendido los labios pueden transmitir lo que recibimos de la Santa Palabra a quien nos demande razón de la fe que en nosotros hay.

3-6. Porque los labios de la mujer extraña destilan miel, Y su paladar

es más blando que el aceite; Mas su fin es amargo como el ajenjo, Agudo como espada de dos filos. Sus pies descienden a la muerte; Sus pasos conducen al Seol. Sus caminos son inestables; no los conocerás, Si no considerares el camino de vida.

Características de malas féminas:

Son melosas, aunque carecen de sinceridad.

Lucen blandas por fuera, pero son de un fin amargo.

Lleva a la muerte.

Es inestable; ya que “no conocerás sus caminos”.

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Vive en hipocresía, para beneficiarse de la apariencia inofensiva, que no es más que un señuelo.

Te dejará cuando no lo esperes ni desees.

No sabes por donde la lleva la carne, ya que espera los dictados de su padre: el diablo.

7. Ahora pues, hijos, oídme, Y no os apartéis de las razones de mi

boca. No debemos de buscar argumentos contra la verdad, trae solo nos tarea la

ira de Dios. (Rom. 1:18) 8-10. Aleja de ella tu camino, Y no te acerques a la puerta de su casa;

Para que no des a los extraños tu honor, Y tus años al cruel; No sea que extraños se sacien de tu fuerza, Y tus trabajos estén en casa del extraño;

Debemos de seguir la técnica de José, el hijo de Jacob: alejarnos de malas mujeres.

Otras de las características de estas “damas” son las siguientes:

La crueldad hacia sus victimas.

Envía los frutos de la labor de sus trabajos hacia la casa del extraño. La infiel dará lo que es tuyo a sus amantes. 11-13. Y gimas al final, Cuando se consuma tu carne y tu cuerpo,

Y digas: ¡Cómo aborrecí el consejo, Y mi corazón menospreció la reprensión; No oí la voz de los que me instruían, Y a los que me enseñaban no incliné mi oído!

El aborreced el consejo producirá un profundo dolor y culpa a quien lo desprecia.

14. Casi en todo mal he estado, En medio de la sociedad y de la

congregación Tanto la sociedad como la congregación reciben los males del orgullo, la

vanidad, la inmoralidad, la avaricia y otros igualmente dañinos cuando menosprecian la reprensión.

15-19. Bebe el agua de tu misma cisterna, Y los raudales de tu propio

pozo. ¿Se derramarán tus fuentes por las calles, Y tus corrientes de aguas por las plazas? Sean para ti solo, Y no para los extraños contigo. Sea bendito tu manantial, Y alégrate con la mujer de tu juventud, Como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, Y en su amor recréate siempre.

El matrimonio es sólo para dos; debemos de tomar las medidas de precaución y no confiar en todas aquellas personas con quienes nos rozamos.

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20. ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena, Y abrazarás

el seno de la extraña? Por nuestro bien debemos de respetar la mujer ajena y solicitar el respeto

hacia la nuestra, ya que un hombre ofendido puede ser el instrumento de Dios para castigar tan grave mal; aunque el mismo agente de juicio y la causante del pecado serán también responsables ante el Creador.

21. Porque los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová, Y él

considera todas sus veredas. Dios sabe lo que somos y hacia dónde vamos; sabe el resultado de

nuestras acciones y vida. Considera todas nuestras veredas. Dios no pasará por alto un tramo de nuestra vida en desorden sin un arrepentimiento genuino y con ineludibles consecuencias. Podemos sacar la piedra que lanzamos al agua, pero no deshacer las olas que esta produjo.

22. Prenderán al impío sus propias iniquidades, Y retenido será con

las cuerdas de su pecado. El impío va a tomar de su propia receta venenosa; preso en la cárcel que él

construyó. Amán mandó a hacer una horca de 50 codos para Mardoqueo, (ver la historia completa en el libro de Ester) pero fue allí donde pereció él.

23. El morirá por falta de corrección, Y errará por lo inmenso de su

locura. La falta de corrección mata; no la despreciemos del Padre; ni de nuestros

padres terrenales. Puesto que la sana corrección salva; entonces, es una inmensa locura no

aceptarla y escandalizar a los estorbos piadosos. Llevar el error no es libertad; hacer nuestros caprichos es caminar a la

muerte, la que representa la separación de Dios; aquí y en la eternidad.

1-5. Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, Si has empeñado tu

palabra a un extraño, Te has enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los dichos de tus labios. Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo; Ve, humíllate, y asegúrate de tu amigo. No des sueño a tus ojos, Ni a tus párpados adormecimiento; Escápate como gacela de la mano del cazador, Y como ave de la mano del que arma lazos.

No podemos responder por las acciones o deseos de otros, los cristianos debemos de defender la fe no a los pecadores.

Debemos de tener el control y además necesitamos monitorear nuestros compromisos hasta cumplirlos lo antes posible, sin caer de nuevo en semejante lazo.

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6-8. Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio;

La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor, Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento.

La creación de Dios no fue hecha como un escenario para holgazanear. Dios es trabajador y Jesucristo también; muy claramente el trabajo nos conviene ya que:

Las criaturas debemos de imitar al creador.

Tenemos que trabajar aunque no nos lo digan o nos vean.

Trabajando generaremos frutos para los momentos cuando falte para el mantenimiento.

9-11. Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás

de tu sueño? Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las manos para reposo; Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre armado.

Los perezosos tendrán que delinquir o vivir en la pobreza; esta se acerca poco a poco viene como caminante con destino claro.

12-15. El hombre malo, el hombre depravado, Es el que anda en

perversidad de boca; Que guiña los ojos, que habla con los pies, Que hace señas con los dedos. Perversidades hay en su corazón; anda pensando el mal en todo tiempo; Siembra las discordias. Por tanto, su calamidad vendrá de repente; Súbitamente será quebrantado, y no habrá remedio.

Para las personas malas no hay remedio fuera de la ofrecida por Jesucristo; si no se acepta esta divina oferta serán receptores de calamidad repentina y del quebranto.

El malo no puede hacer el bien; ya que es un depravado que no considera que su baja moral lo lleva a la guillotina.

Estos seres hablan con maldad y buscan hacer daño intencionalmente. Otra característica del personaje en mención es su desorden, lenguaje

corporal profano y un perverso corazón que siempre piensa hacer el mal, sembrando discordias.

16-19. Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma:

Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.

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Existen 7 cosas que Dios odia ya que están en contra de su Santo carácter:

Los ojos altivos. Sus propietarios se sienten criaturas superiores a los que

los rodean.

La lengua mentirosa. Siguen la guía de la serpiente antigua, quien los

gobierna y no las pautas del Dios bueno.

Las manos derramadoras de sangre inocente. En el Antiguo

Testamento, sólo se podía derramar la sangre del que Dios ordenaba exterminar como un juicio por su impenitencia. Hacer esto era tomar el lugar de Dios; mas aun cuando el asesinado era inocente.

Que maquina pensamientos inicuos. (Injustos) Estos no hacen lo que

deben pues como malvados hacen lo que daña. Al cruel le deleita causar dolor.

Los pies presurosos para hacer mal. Tienen la obsesión y diligencia en obedecer al maligno en la ejecución de sus malas obras.

El testigo falso que habla mentiras. Su participación condena al inocente

o liberta al culpable.

El que siembra discordias entre hermanos. El separar una de las

relaciones más cercanas e intimas es un reflejo de un corazón que al igual que los otros 6 males merece el aborrecimiento del Dios que ha señalado su disconformidad contra tales perversas acciones.

20. Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, Y no dejes la

enseñanza de tu madre; Guardar lo de valor es sabio, nuestros padres generalmente saben más que

nosotros al momento de formarnos, nos aman, no nos abandonaran. La enseñanza de la madre fue costosa y aunque se estime básica, es una

firme cimentación para agradar al Dios del cielo. 21. Átalos siempre en tu corazón, Enlázalos a tu cuello. Debemos de sujetar con fuerza el mandamiento y la enseñanza a aquel

miembro engañoso de conde sale con mucha frecuencia el mal, fortalecer una de las partes más débiles de nuestro cuerpo (el cuello) es estratégico en un mundo de violencia espiritual.

22. Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; Hablarán

contigo cuando despiertes. Los mandatos de Dios son la mejor enseñanza ya que:

Serán el mapa en el camino de la vida.

Nos darán protección al dormir.

Al despertar podremos poner el orden en nuestras prioridades, donde la piedad, el orden y la honra a Jesucristo sean lo prioritario.

23. Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es luz, Y

camino de vida las reprensiones que te instruyen, El mandamiento es un instrumento para la enseñanza y la dirección. Las reprensiones a pocos le gustan, pero a todos nos convienen.

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24-26. Para que te guarden de la mala mujer, De la blandura de la

lengua de la mujer extraña. No codicies su hermosura en tu corazón, Ni ella te prenda con sus ojos; Porque a causa de la mujer ramera el hombre es reducido a un bocado de pan; Y la mujer caza la preciosa alma del varón.

Las rameras son consideradas en las Escrituras del Antiguo Testamento como mujeres malas. Jesucristo las pudo salvar como lo hizo con otros grupos de maldad.

Estas mujeres son dulces de lengua, atractivas a los ojos, ¡pero mortales! Ya que atrapa el alma de los incautos pues son usadas por el maligno.

27-35. ¿Tomará el hombre fuego en su seno Sin que sus vestidos

ardan? ¿Andará el hombre sobre brasas Sin que sus pies se quemen? Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; No quedará impune ninguno que la tocare. No tienen en poco al ladrón si hurta Para saciar su apetito cuando tiene hambre; Pero si es sorprendido, pagará siete veces; Entregará todo el haber de su casa. Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; Corrompe su alma el que tal hace. Heridas y vergüenza hallará, Y su afrenta nunca será borrada. Porque los celos son el furor del hombre, Y no perdonará en el día de la venganza. No aceptará ningún rescate, Ni querrá perdonar, aunque multipliques los dones.

El que se llega a la mujer de su prójimo comete adulterio; este tiene las siguientes implicaciones:

Arderá como al tomar fuego y su ropa también se consumirá.

Caminara sobre las brasas y al quemar sus pies no se movilizara con libertad, ya que quedara preso en el regazo de esta tarántula.

No quedará impune, será castigado.

Es falto de entendimiento.

Corrompe a su alma; se pudre causando un hedor insoportable.

Heridas y vergüenza hallará.

Su afrenta nunca será borrada; ya no será una persona irreprensible o de confianza.

El ladrón pagara 7 veces lo robado, pero el ofendido se vengará, no aceptará ningún rescate o presente, ni querrá perdonar.

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1. Hijo mío, guarda mis razones, Y atesora contigo mis mandamientos.

Las razones son señalamientos para poner en un lugar seguro y especial los mandamientos que benefician a nuestra alma.

2. Guarda mis mandamientos y vivirás, Y mi ley como las niñas de tus

ojos. Obedecer trae vida, así como la ley no puede ser irritada con suciedades al

igual que la niña de los ojos. 3. Lígalos a tus dedos; Escríbelos en la tabla de tu corazón. Al confirmar y remendar la Palabra de Dios a nuestras vidas los dedos no

tendrán dificultad en poner por obra los mandamientos de la suave carga del yugo de Jesús.

Del corazón solo brotara lo que allí sembremos. 4. Di a la sabiduría: Tú eres mi hermana, Y a la inteligencia llama

parienta; En poesía se da aquí un lenguaje figurado:

Sabiduría: Nos trae ciencia en buen sentido. Inteligencia: Proporciona entendimiento, cordura y prudencia. Bebemos de buscar esta familiaridad; manteniendo una continua, sana y estrecha relación con estas virtudes.

5. Para que te guarden de la mujer ajena, Y de la extraña que ablanda sus palabras.

La sabiduría y la inteligencia nos guardan de la mujer ajena y de la extraña, ya que es una locura buscarlas.

6-23. Porque mirando yo por la ventana de mi casa, Por mi celosía,

Vi entre los simples, Consideré entre los jóvenes, A un joven falto de entendimiento, El cual pasaba por la calle, junto a la esquina, E iba camino a la casa de ella, A la tarde del día, cuando ya oscurecía, En la oscuridad y tinieblas de la noche. Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón. Alborotadora y rencillosa, Sus pies no pueden estar en casa; Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas, Acechando por todas las esquinas. Se asió de él, y le besó. Con semblante descarado le dijo: Sacrificios de paz había prometido, Hoy he pagado mis votos; Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado. He adornado mi cama con colchas Recamadas con cordoncillo de Egipto; He perfumado mi cámara Con mirra, áloes y canela. Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; Alegrémonos en amores. Porque el marido no está en casa; Se ha ido a un largo viaje.

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La bolsa de dinero llevó en su mano; El día señalado volverá a su casa. Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, Le obligó con la zalamería de sus labios. Al punto se marchó tras ella, Como va el buey al degolladero, Y como el necio a las prisiones para ser castigado; Como el ave que se apresura a la red, Y no sabe que es contra su vida, Hasta que la saeta traspasa su corazón.

La mujer adultera y la ramera se identifican por:

Su astucia de corazón, con ello solo obtienen un beneficio temporal.

Utilizan un atavío que se caracteriza por la carencia de pudor.

Son alborotadoras y rencillosas.

No pueden estar en casa, aman tanto el mundo que su lejanía les agobia.

Sus acechanzas para los incautos, que buscando intercambiar placer, intercambian el mal que pronto pagan.

Les gustan los perfumes y los adornos; así, pueden atraer hacia si mismas nuevas victimas.

Son zalameras; con lisonjas y con la suavidad de su lengua conducen a la muerte. Amigo: Debemos de alejarnos de ellas. Amiga: Asegurare de no poseer ninguno de estos distintivos.

24-25. Ahora pues, hijos, oídme, Y estad atentos a las razones de mi

boca. No se aparte tu corazón a sus caminos; No yerres en sus veredas.

Un padre que se interesa en su hijo oíd lo exhorta a no andar con ella. Muchos hombres impíos y con una mente torcida buscan una temprana

experiencia de sus descendientes con estas mujeres para asegurar la “hombría” de los mismos.

26-27. Porque a muchos ha hecho caer heridos, Y aun los más fuertes

han sido muertos por ella. Camino al Seol es su casa, Que conduce a las cámaras de la muerte.

Aún los más fuertes han sido severamente afectados por no ordenar sus relaciones con las mujeres:

El más espiritual: David (ante Betsabé)

El más sabio: Salomón (por sus esposas paganas)

El más fuerte: Sansón (con Dalila y otras filisteas)

Tanto peor nos resultara a nosotros si acercamos nuestro corazón hacia la guarida de una ramera o una mujer adultera.

1-3. ¿No clama la sabiduría, Y da su voz la inteligencia? En las alturas junto al camino, A las encrucijadas de las veredas se para; En el lugar de las puertas, a la entrada de la ciudad, A la entrada de las puertas da voces:

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Aquí se nos menciona algunos de los lugares donde necesitaremos aplicar la sabiduría (ciencia y buen sentido) y la inteligencia (entendimiento, cordura y prudencia)

1. En las alturas junto al camino. La vista panorámica se puede utilizar para planificar algunas de nuestras acciones, donde no haga una agresión contra la fe, así no actuaremos bajo la prueba y el error; nos tocara entonces obedecer a Dios y dejarle a Él el resto.

2. En las encrucijadas de las veredas. Debemos de conducir con cuidado ya que en los caminos hay muchos peligros: animales, ladrones, precipicios, atajos engañosos, etc.

3. En las puertas. Así se le llamaba a los lugares donde los ancianos de las ciudades antiguas ventilaban los desordenes sociales y morales para proteger a sus asentamientos humanos.

4. Oh hombres, a vosotros clamo; Dirijo mi voz a los hijos de los

hombres. Invitación de la sabiduría es para toda la raza humana; no sólo es para los

padres, maestros, gobernantes, ricos, etc. Se da la paradoja que los que profesan ser sabios se hacen ignorantes.

(Ro. 1:22)

5. Entended, oh simples, discreción; Y vosotros, necios, entrad en cordura.

Al simple que ignora la sabiduría le proporciona discreción, para hablar lo necesario cuando sea adecuado. Incluso para el necio (loco) quien no se interesa en Dios, ni en conocer ni vivir su voluntado existe la oferta de cordura donde podrá pensar con prudencia y actuar con sensatez y buen juicio.

6-7. Oíd, porque hablaré cosas excelentes, Y abriré mis labios para cosas rectas. Porque mi boca hablará verdad, Y la impiedad abominan mis labios.

La verdadera sabiduría es veraz y objetiva. La pseudo ciencia “prueba” con astucia lo que quiere; un claro ejemplo de ello es la “teoría de la evolución”.

8. Justas son todas las razones de mi boca; No hay en ellas cosa perversa ni torcida.

Las razones de la sabiduría respetan la verdad, nunca se tuercen los designios de Dios. No pervierte intencionalmente la revelación divina; que es una característica del diablo y de sus ministros.

9. Todas ellas son rectas al que entiende, Y razonables a los que han hallado sabiduría.

El que entiende es porque ha recibido este don inmerecido de parte de Dios; el fue además el que cayó en buena tierra (Mt. 13.23)

El hombre natural no entiende sus razones. (1 Cor. 2:14)

22

10-11. Recibid mi enseñanza, y no plata; Y ciencia antes que el oro

escogido. Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se puede desear, no es de compararse con ella.

Vale más la sabiduría que la riqueza porque la sabiduría:

Nos aparta del mal.

Nos permite contemplar la creación.

Busca hombres piadosos.

Nos hace personas conformes. Mientras que las riquezas:

Traen mal.

Nos llevan corriendo por una vida que es corta y penosa.

Traen impiedad y vanidad.

Despierta la terrible codicia.

12. Yo, la sabiduría, habito con la cordura, Y hallo la ciencia de los consejos.

A la cordura siempre la acompaña la discreción. El diccionario Vine define en el original la palabra “prudente”: en su cabal juicio, dar en el blanco.

Los buenos consejos traen ciencia y conocimiento, útiles para llevar una vida que agrade al Creador.

13. El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la

arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco. El temor a Dios es aborrecer el mal por las siguientes razones:

El mal nos afecta.

El mal es contrario a la naturaleza Divina, si esta se nos injerta, la parte espiritual en nosotros busca la santidad.

Dios lo manda; esto debería de ser más que suficiente para obedecer. Lo que Dios aborrece:

La soberbia / arrogancia. Es la altivez de espíritu, (aunque es prestado) la

vanagloria, charlatanería, arrogancia, el orgullo, ser hinchado, engrandecido y vano. (vació)

El mal camino. Impiedad, ser sagaz como cualquier hijo de este mundo.

Quien lleva un mal camino vive contra los designios de Dios; no ve hoy por lo de Jesucristo, si muere en esa condición mañana no recibirá la libertad en el juicio.

La boca perversa. Es maliciosa, sólo refleja lo que hay en el corazón, en

este caso le gusta dañar a su prójimo. Lo que Dios aborrece pronto juzgará. “y que da el pago en persona al que le aborrece, destruyéndolo; y no se demora con el que le odia, en persona le dará el pago.” Deuteronomio 7:10

14. Conmigo está el consejo y el buen juicio; Yo soy la inteligencia; mío es el poder.

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Solo el consejo que conviene y se acepta y un buen juicio (cordura) dan el entendimiento, (Mt. 13:23), la prudencia y el conocimiento. El uso recto de la mente que considera a Dios da poder y fortaleza.

15-16. Por mí reinan los reyes, Y los príncipes determinan justicia.

Por mí dominan los príncipes, Y todos los gobernadores juzgan la tierra. Los reyes tienen el compromiso de gestionar apropiadamente los asuntos

públicos, por lo que requieren del apoyo Divino para hacerlo con justicia. Los príncipes o principales deben de tomar decisiones conforme a la verdad

y con prudencia.

17. Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan.

La inteligencia da bien al que la aprecia. Los que la buscan tarde no la alcanzan porque al desearla ya va muy lejos.

18. Las riquezas y la honra están conmigo; Riquezas duraderas, y

justicia. Al tomar buenas decisiones se pueden hacer (si Dios lo permite) buenos

negocios y al vivir transparentemente en un mundo sucio daremos honra a nuestro Padre.

Las riquezas duraderas son los tesoros en los cielos, ¡que pocos los buscan hoy!

La justicia es tratar de dar a Dios lo que se merece: la suprema honra, dedicación, fidelidad y profundo amor.

19. Mejor es mi fruto que el oro, y que el oro refinado; Y mi rédito

mejor que la plata escogida. Las buenas obras son el resultado de la inteligencia aplicada por considerar

la Palabra de Dios; son mejor que el oro ya que resuelven problemas que el oro solo puede incrementar.

El rédito viene al tener una vida temporal ordenada y en paz y la mayor de las ganancias viene al fin de nuestros días, la salvación del alma por gracia.

20. Por vereda de justicia guiaré, Por en medio de sendas de juicio,

El camino sin vanidades ni error le es mostrado solamente a aquellos que tienen sus ojos en los estatutos del Padre y no en los lineamientos del mundo.

21. Para hacer que los que me aman tengan su heredad, Y que yo llene

sus tesoros. La posesión que da seguridad y se puede usufructuar para trabajar en lo

que conviene esta en el valle de la sabiduría Divina. No podemos por nuestra cuenta recibir la inteligencia que produzca

beneficios eternos. Sólo por Jesucristo y por la guía del Espíritu Santo damos frutos comestibles. (Jn. 15.5)

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22-31. Jehová me poseía en el principio, Ya de antiguo, antes de sus

obras. Eternamente tuve el principado, desde el principio, Antes de la tierra. Antes de los abismos fui engendrada; Antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas. Antes que los montes fuesen formados, Antes de los collados, ya había sido yo engendrada; No había aún hecho la tierra, ni los campos, Ni el principio del polvo del mundo. Cuando formaba los cielos, allí estaba yo; Cuando trazaba el círculo sobre la faz del abismo; Cuando afirmaba los cielos arriba, Cuando afirmaba las fuentes del abismo; Cuando ponía al mar su estatuto, Para que las aguas no traspasasen su mandamiento; Cuando establecía los fundamentos de la tierra, Con él estaba yo ordenándolo todo, Y era su delicia de día en día, Teniendo solaz delante de él en todo tiempo. Me regocijo en la parte habitable de su tierra; Y mis delicias son con los hijos de los hombres.

Dios es omnisciente y eternamente inteligente. Jesús mostró que cuenta con los mismos atributos; incluso antes de su glorificación.

La creación da testimonio de la inmensa inteligencia del creador. Dios la tuvo incluso antes de formar todo lo que hoy vemos.

Dios dio leyes a su creación, que hoy aún no se pueden explicar plenamente por los llamados “hombres de ciencia”.

Dios es ordenado; así lo es también la obra de su ingenio; esta esta balanceada y en perfecta armonía, a pesar de que tiene unos malos mayordomos.

Dios se deleita en obrar inteligentemente, así como la inteligencia se alegra que los hombres la poseamos.

32. Ahora, pues, hijos, oídme, Y bienaventurados los que guardan mis

caminos. La inteligencia que viene de lo alto les pide a sus hijos oír. Muy feliz será

quien considera obrar respetando la verdad de Jesucristo para su vida: es lo único que nos puede dar un propósito.

33. Atended el consejo, y sed sabios, Y no lo menospreciéis. Algunos se toman la molestia de decirnos lo que nos conviene, el sabio

tiene un buen sentido (la dirección correcta) y al considerar lo que ve el buen ojo externo que lo guía, lo valora como necesario y de inmediata aplicación.

34. Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas

cada día, Aguardando a los postes de mis puertas. El que escucha a Dios, lo hace porque le teme y es para su beneficio.

35. Porque el que me halle, hallará la vida, Y alcanzará el favor de

Jehová. El que cree las promesas de Jehová recibirá el regalo de la vida eterna.

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36. Mas el que peca contra mí, defrauda su alma; Todos los que me

aborrecen aman la muerte. Quien falla al blanco; no l importa acertar a su propio bien. Este blanco es el

timbre de la vida.

1. La sabiduría edificó su casa, Labró sus siete columnas.

La sabiduría da protección, seguridad y privacidad en casa fuerte; esto lo debemos de buscar a nivel personal, familiar y de iglesia.

2. Mató sus víctimas, mezcló su vino, Y puso su mesa.

Como solo la sabiduría puede hacerlo, esta preparó el sustento que mantiene el cuerpo y deleita el paladar.

3-6. Envió sus criadas; Sobre lo más alto de la ciudad clamó.

Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dice: Venid, comed mi pan, Y bebed del vino que yo he mezclado. Dejad las simplezas, y vivid, Y andad por el camino de la inteligencia.

La sabiduría invita a los que carecen de ella a dejar las simplezas, con las que se pierde el bien al andar por la vida; esta, invita a cambiar al camino de la inteligencia; hoy lo tenemos en el vivir del cristiano, el cual:

Tiene un Salvador vivo.

Tiene normas infalibles y perfectas.

Hay hermanos que nos alimentan, ayudan y que nos aman.

Posee un destino final: el Reino de Dios.

7-9. El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; El que reprende

al impío, se atrae mancha. No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; Corrige al sabio, y te amará. Da al sabio, y será más sabio; Enseña al justo, y aumentará su saber.

Al burlador no se le pueden dar los tesoros de Dios para que haga escarnio de ellos y de nosotros. Por el contrario; hay que corregir al sabio para que llegue a ser más sabio. El nos amara por este beneficio.

10-11. El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. Porque por mí se aumentarán tus días, Y años de vida se te añadirán.

Conocer y temer a Dios es un regalo Divino, la verdadera inteligencia y la sabiduría no son propias de la naturaleza caída del ser humano.

Ya que Dios nos hizo y al mundo, el nos puede ayudar a vivir aquí de la manera que Él quiere y con la esperanza de reunirnos eternamente en la Nueva Jerusalén.

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12. Si fueres sabio, para ti lo serás; Y si fueres escarnecedor, pagarás

tú solo. El sabio vivirá y el burlador pagará por su maldad. Quien le quiso ayudar y

su Creador no podrán ayudarle después de pasada la actual oportunidad de vida; el mismo pagara su rechazo al medio salvífico ofrecido en Jesucristo.

13-18. La mujer insensata es alborotadora; Es simple e ignorante.

Se sienta en una silla a la puerta de su casa, En los lugares altos de la ciudad, Para llamar a los que pasan por el camino, Que van por sus caminos derechos. Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dijo: Las aguas hurtadas son dulces, Y el pan comido en oculto es sabroso. Y no saben que allí están los muertos; Que sus convidados están en lo profundo del Seol.

La mujer que no piensa en la majestad de Jehová es conocida por:

Tener una fuerte predilección por estar en la calle.

Llamar a los simples, que son faltos de cordura o locos a su venenosa tela de araña.

Invita a pecar; es la muerte (física y espiritual) envuelta de placer. Ap. 22:15. “Mas los perros estarán fuera,... los fornicarios,...”

1. Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre, Pero el

hijo necio es tristeza de su madre. Si por el sabio se alegra el padre, cuanto no la satisfará más a una madre

piadosa. Pero es la madre que descuido la educación y la disciplina del hijo la que se entristecerá mucho cuando éste necio inicie la abundante cosecha a su extravió.

2. Los tesoros de maldad no serán de provecho; Mas la justicia libra

de muerte. Los tesoros traen enemigos peligrosos; cuanto más los que se amasaron

con impiedad. Algunas de las posibles repercusiones son:

No hay paz interna, ya que la conciencia acusa del mal.

Muchas riquezas se pierden cuando se prueba que estas son ilícitas. Afortunadamente las medidas de auditoria son cada día más efectivas, para desenmascarar a muchos de estos pillos.

Lo que fácil viene, fácil se va; estas personas no están preparados para gestionar dichos fondos. Un tonto y su dinero fácil se separan.

Cuando se hicieron, se aprendieron malas artes, vicios y pecados. Al proceder respetando la verdad y la justicia nos libramos de la muerte,

pues el Dios Santo protege a los que quieren vivir piadosamente. Juan Bunyan lo dijo acertadamente:

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“Quien quiera frente al mal fuerte mostrarse, En el Señor podrá siempre ampararse”

3. Jehová no dejará padecer hambre al justo; Mas la iniquidad lanzará a los impíos.

Para el dueño de todo (ver Sal. 24:1) es muy fácil proveer de sustento a los que le imitan y son por el adoptados.

Los impíos serán lanzados: al Lago de fuego. (Ap. 20:15)

4. La mano negligente empobrece; Mas la mano de los diligentes enriquece.

El negligente no hace las cosas, no las hace bien, ni lo hace rápido; con todas las combinaciones que estas tres características generan. Eso le hace ser un mal productor, hijo, alumno o empleado; cuando llega a tener trabajo por un corto tiempo.

El diligente hace cada actividad que se le asigna adecuadamente y en un plazo menor al requerido, con lo que se gana el aprecio de sus jefes, padres, maestros y clientes. Esto le trae en muchos casos riquezas materiales y emocionales.

Los creyentes debemos de ser diligentes, trabajando como para Dios; aunque las riquezas no vengan.

5. El que recoge en el verano es hombre entendido; El que duerme en

el tiempo de la siega es hijo que avergüenza. Cuando se puede almacenar y se toma sin pecar; esto es de los

inteligentes, en el verano se puede crear una provisión para el invierno. Aquel hijo que no trabajaba en la obra de su padre cuando todos lo hacían, avergonzaba a quienes no le aplicaron la disciplina oportuna.

Hoy el que se llama cristiano y no trabaja en la obra: o no lo es, o avergüenza al Padre que pronto nos llamará a cuentas.

6. Hay bendiciones sobre la cabeza del justo; Pero violencia cubrirá la boca de los impíos.

Hoy también tenemos el bien de parte de Dios; en toda época todo lo bueno ha venido de él. A diferencia del Dios bueno; la boca del impío esta cubierta por la violencia, misma que el ama, siembra y cosecha (v. 11b)

7. La memoria del justo será bendita; Mas el nombre de los impíos se pudrirá.

No sólo aquí será recordado el justo, su nombre estará por siempre en el libro de la vida. Mientras que el nombre del impío, dura lo mismo que una fruta en el trópico abrasador.

8. El sabio de corazón recibirá los mandamientos; Mas el necio de labios caerá.

El que tiene ciencia o buen sentido espiritual, toma lo ofrecido por Dios (todos sus mandamientos) y no los que le gustan o que se le haga fácil cumplirlos.

28

El sabio de corazón no siempre lo publica; pero, Dios lo conoce. Por eso no debemos de juzgar las motivaciones de las actuaciones de otros.

El necio es de labios descuidados y refleja lo sucio que abunda en lo interno de su ser; por lo que caerá y será castigado.

9. El que camina en integridad anda confiado; Mas el que pervierte sus caminos será quebrantado.

El individuo puro anda confiado; el corrupto será quebrantado ya que no vende leche pura, y esta será inspeccionada.

10. El que guiña el ojo acarrea tristeza; Y el necio de labios será

castigado. El castigo vendrá por complicidad o por coquetería en relaciones ilícitas;

cuando se descubra el asunto vendrá la tristeza.

11. Manantial de vida es la boca del justo; Pero violencia cubrirá la boca de los impíos.

Los consejos sabios pueden evitar la muerte; aumentan la salud espiritual y pueden llevar a la vida eterna, dando paz y la alegría de tener a Jesucristo.

12. El odio despierta rencillas; Pero el amor cubrirá todas las faltas.

Cuando se odia a alguien; si este calla o habla, mira o aparta la vista, ría o se abstenga de hacer expresión alguna, vendrá el pleito. Peleamos no por lo que se nos dice o se nos hace; sino porque odiamos a aquel de donde viene el dicho o hecho.

El amor cubrirá todas las faltas por ser “el máximo bien” que podemos tener al imitar a Dios. El amor es mayor que la fe y que la esperanza. Si amamos perdonaremos como Dios lo hizo; y esto, cuando nosotros sólo le habíamos dado mal al prójimo, que es su creación y nos habíamos revelado contra su santa voluntad.

13. En los labios del prudente se halla sabiduría; Mas la vara es para las espaldas del falto de cordura.

El prudente es cuidadoso transmite la sabiduría de Dios sin egoísmo. El castigo lo recibirá el alocado para vivir.

14. Los sabios guardan la sabiduría; Mas la boca del necio es

calamidad cercana. No se es sabio quien solo lo es por algún tiempo; pues el sabio guarda la

sabiduría; esta, sigue en su boca. A corto tiempo el mal será una consecuencia para el necio.

15. Las riquezas del rico son su ciudad fortificada; Y el desmayo de los pobres es su pobreza.

Los ricos en el libro de los Salmos denunciados generalmente como los malos. Cuando se dice “los pobres” es casi equivalente a los buenos.

29

Muchos se esmeran en buscar las riquezas; mientras lo logran traen además consigo a la maldad.

No es pecaminoso el alcanzar cierta comodidad básica; lo malo realmente es la confianza en las riquezas que apartan a sus poseedores de la piedad y aleja la autentica fe en Dios.

Los pobres tienen como aparente problema la falta de amigos, aliento, recursos, fuerza y otros soportes terrenales; pero, es mas fácil que este aumente su confianza en el creador para una ganancia eterna.

16. La obra del justo es para vida; Mas el fruto del impío es para pecado.

El trabajo de quien teme a Dios es para vida, ya que este:

Protege. (a uno mismo, a la familia, a la iglesia)

Da crecimiento espiritual.

Nos tranquiliza. (defendiéndonos cuando somos perseguidos por el testimonio de Jesucristo)

Nos alista para buscar mas galardones.

Lleva a otros a la luz. Los resultados de los planes de los impíos, son para que ellos y sus seres

cercanos y afines pequen con mayor frecuencia e intensidad.

17. Camino a la vida es guardar la instrucción; Pero quien desecha la

reprensión, yerra. Bien hace quien oye y obedece todo el consejo de Dios, este vivirá; mas

quien desecha un segundo aviso, comete el grave error de viajar sin mapa ni brújula.

18. El que encubre el odio es de labios mentirosos; Y el que propaga

calumnia es necio. Quien hipócritamente aparenta amistad, sintiendo en lo interno de su ser

desprecio por su semejante; tiene que fingir con una máscara y con sus labios decir lo que no siente. La principal razón de esta conducta es la de esperar una oportunidad para atacar al despreciado o alcanzar beneficios materiales o emocionales del mismo.

Sólo un loco puede darse a la tarea de difundir lo que no ha comprobado con el fin de destruir la reputación de su prójimo. Si el hecho es verídico; esto no justifica el transmitir los errores ajenos que nosotros también cometemos.

19. En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus

labios es prudente.

Jesucristo dijo que nuestro hablar sea sí, sí, no, no para que no faltemos a nuestros dichos. Santiago por su parte escribió que nuestro sí debe de ser sí y el no ser un autentico no.

Al hablar mucho buscamos:

Protagonismo con fines egoístas.

Hacer valer con soberbia nuestras ideas sobre las de otros.

30

Divertir.

Llevar a otros por nuestras veredas; esto trae desorden y caos cuando no conocemos camino de paz. Intencional o no los demonios y el mundo hablan por parlantes humanos

que se lo permiten por no tener una nueva naturaleza implantada por Dios. Refrenar los labios es de prudentes, es negarse a uno mismo, es resistir al

plan del maligno que quiere hablar por nosotros, como lo hizo con Pedro. ¿Qué debemos de hablar?

Lo que esté de acuerdo al mensaje de la Biblia.

La verdad.

Lo que edifica a los oyentes.

Lo que proviene del amor.

Aquello con lo que no pecamos.

20. Plata escogida es la lengua del justo; Mas el corazón de los impíos es como nada.

De gran valor es la lengua del que habla la verdad; el justo edifica con sus palabras a sus semejantes. El corazón del impío no tiene ningún valor, como lo tienen los metales conocidos.

21. Los labios del justo apacientan a muchos, Mas los necios mueren por falta de entendimiento.

El corazón entendido y entrenado en la voluntad de Dios como le teme y transmite a muchos su palabra puede apacentar a un gran número de beneficiarios.

Los necios mueren por no entender ni aplicar aquello a lo que nunca han prestado atención ni cuidado.

22. La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza

con ella. Lo que Dios nos da es de incalculable valor; aunque parezca a primera vista

ser una pesada carga. No trae el bien de Dios tristeza; ya lo veremos al final cuando será evidente que lo que vino de Dios nos convino.

23. El hacer maldad es como una diversión al insensato; Mas la sabiduría recrea al hombre de entendimiento.

El “sin sesos” se alegra y distraen al hacer lo que a Dios le desagrada; ya que no es de su padre el dar la sabiduría, el descanso, gozo y aliento que recibe quien entiende la santa instrucción.

24. Lo que el impío teme, eso le vendrá; Pero a los justos les será dado lo que desean.

Dios tiene el control y en su paciencia dará a su tiempo: Al impío lo que teme como un juicio por no temer a Dios. Al justo lo que desea, que es lo que Dios desea; el justo no pedirá caprichos ya que sus deseos se alinean a los del Padre.

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25. Como pasa el torbellino, así el malo no permanece; Mas el justo

permanece para siempre. El malo sólo aquí y hoy podrá hacer lo opuesto a lo que Dios ya dicto que

nos conviene. Mañana estará confinado al lugar donde Dios lo envíe (primero al infierno y luego al lago de fuego) y en las condiciones en que Dios lo tenga.

El justo permanecerá para siempre en un lugar de solaz junto a Dios.

26. Como el vinagre a los dientes, y como el humo a los ojos, Así es el

perezoso a los que lo envían. Es una molestia el enviar al perezoso ya que este:

Se ha alejado mucho de la imagen del laborioso Creador. “Dios trabaja y yo trabajo” dijo Jesucristo.

Uno planifica y desea realizar una actividad y no se cumplirá por haber involucrado a quien no cumplirá su parte en el tiempo solicitado ni con la calidad requerida.

Da un mal ejemplo a los que lo observan y están trabajando o lo harán próximamente; esto sienta un mal precedente.

27. El temor de Jehová aumentará los días; Mas los años de los impíos

serán acortados. Los que temen a Jehová obedecen sus palabras; esas nos dicen como vivir

en la tierra que él creo; además, al honrarlo El nos puede honrar con más y mejores días sobre este mundo.

Los impíos vivirán menos y esto lo harán en zozobra por despreciar la bondad y la sabiduría de Dios; ya que ellos no cuidan su cuerpo, sus relaciones humanas y pelean en contra de su hacedor. (Ver Is. 45:9)

28. La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los

impíos perecerá. Los justos se alegrarán cuando sus esperanzas se cumplan. No pasará así

con los impíos. Dios tiene el control para que esto suceda con estos grupos que se ubican en polos opuestos.

29. El camino de Jehová es fortaleza al perfecto; Pero es destrucción a

los que hacen maldad. Tomar el camino de Jehová ayudara al que en Él constructor del camino

confía; ya que tendrá el auxilio en cada área y asunto que nos acontezca. Los que hacen maldad no acuden a ninguno de los recursos divinos, por

ello es que serán destruidos.

30. El justo no será removido jamás; Pero los impíos no habitarán la tierra.

El justo no será removido de donde Dios lo situé. Este será llevado a una relación más cercana, placentera y segura con Él.

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Los impíos no habitarán la tierra nueva donde mora Dios y el Señor Jesucristo; serán llevados a un lugar donde tendrán una mayor que separación de Dios, solo que con un profundo terror e incertidumbre, ya que desconocerán la cantidad de días que cumplirán en el infierno.

31. La boca del justo producirá sabiduría; Mas la lengua perversa será cortada.

Como la sabiduría es de Dios; nosotros sólo debemos de recomendar y hacer aquello que edifique al oyente. La lengua perversa no fue creada para el uso actual; por ello, Dios la soporta por un breve tiempo antes de cortarla junto con su portador.

32. Los labios del justo saben hablar lo que agrada; Mas la boca de los

impíos habla perversidades. El justo está acostumbrado a hablar lo que agrada al creador y a la criatura

que es espiritualmente sana; esto, sin contradecir lo que Dios ya ha revelado para nuestro beneficio.

Los impíos hablan perversidades, es decir un fraude que les condena y a aquellos que consideran sus palabras como normas de interés.

1. El peso falso es abominación a Jehová; Mas la pesa cabal le agrada. Hay justicia sólo en Dios para todos, por ello el detesta el fraude en

nuestros negocios, en nuestras pruebas escolares y sobre todo en el servicio a Dios. (Jer. 48:10)

2. Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra; Mas con los

humildes está la sabiduría. El soberbio busca la honra y le viene lo contrario, Dios da la sabiduría solo

a los humildes.

3. La integridad de los rectos los encaminará; Pero destruirá a los pecadores la perversidad de ellos.

El mundo llama “tontos” a los que son honrados (Is. 5:20). Pero es así y solo así que se puede caminar con Dios. Los pecadores no caminan como Dios lo demanda. Esta perversidad los destruirá; pues trae:

Cárcel para los infractores de las leyes que son descubiertos.

Enemigos peligrosos.

Locura repentina y merecida.

Persecución continúa por la culpa, si queda algo de la conciencia.

Tortura a los seres “queridos”

Muerte.

4. No aprovecharán las riquezas en el día de la ira; Mas la justicia

librará de muerte.

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33

¿Por qué viene la ira a los poseedores de riquezas? Porque no practico la justicia por su mano.

Jesucristo pide a los suyos no hacer tesoros en la tierra. ¿Somos mayores que Jesucristo para cambiar ese mandato?

Al desecharlo le decimos:

No confío en Usted.

No confío en su Palabra. Cuando la justicia se va...viene la ira. Aunque el cristiano no es acético (renuncia a lo terrenal) y no hacemos

votos de pobreza; tenemos que darle a lo temporal su lugar; buscando lo eterno como primordial. No amemos el dinero, es solo una herramienta o siervo; que se puede convertir en un amo despiadado si nos descuidamos.

5. La justicia del perfecto enderezará su camino; Mas el impío por su

impiedad caerá. El hombre íntegro no es como un remiendo en vestido antiguo; trata de

llevar a su vida todo el consejo de Dios; por lo que corrige su conducta cuando se lo solicita la Revelación Divina. Pero el impío no endereza el camino por el cual no viaja, ya que no lo considera bueno para él mismo.

Todo ser que viaja sin la guía divina caerá tarde o temprano. 6. La justicia de los rectos los librará; Mas los pecadores serán

atrapados en su pecado. Se ratifica lo enunciado en el versículo 11:4b. De acuerdo a la voluntad de Dios el recto vive en su temor; pero, los

pecadores caerán en el foso que cavaron. Aunque ellos crean poder realizar el crimen perfecto; Dios traerá al final toda obra a juicio, lo que no impide que se den adelantos a esta justicia.

7. Cuando muere el hombre impío, perece su esperanza; Y la

expectación de los malos perecerá. El impío no tiene ni hace depósitos eternos. La expectación de los malos

será infiel...lo dejará.

8. El justo es librado de la tribulación; Mas el impío entra en lugar suyo.

El justo no cae en la tribulación porque:

Confía en el Dios que libra a los suyos.

Obedece las recomendaciones que le da Dios en su palabra. El Impío toma su lugar porque no atiende las exhortaciones de aquel que lo

creo.

9. El hipócrita con la boca daña a su prójimo; Mas los justos son

librados con la sabiduría. El que posee dos caras destruye la reputación de su prójimo. Este daño

Dios lo sana si el afectado es inocente.

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El hombre justo escapa de las situaciones producidas por el hipócrita ya que el se aleja de su presencia como Dios lo recomienda.

10. En el bien de los justos la ciudad se alegra; Mas cuando los impíos perecen hay fiesta.

Todos aprecian cuando el piadoso recibe el beneficio que aparentemente merece. La muerte de la raíz del mal trae fiesta colectiva.

11. Por la bendición de los rectos la ciudad será engrandecida; Mas

por la boca de los impíos será trastornada. Si gobiernan los que no roban, mienten ni matan para su beneficio,... se ve

un progreso significativo. La boca de los impíos dice diferentes mentiras que salen a la luz y le

desenmascaran para ser trastornado.

12. El que carece de entendimiento menosprecia a su prójimo; Mas el hombre prudente calla.

Quien tiene complejo de superioridad no podrá entender lo que le conviene, ya que supone que no hay quien le aconseje.

El prudente calla porque así considerara otra óptica para atender los asuntos delicados.

13. El que anda en chismes descubre el secreto; Mas el de espíritu fiel

lo guarda todo. El chismoso que prometió guardar lo que hace público manifiesta que:

No tiene dominio propio.

Busca beneficios y aprobación de todos los frentes. El hombre de espíritu fiel no es un periodista para publicar los errores del

prójimo. 14. Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud

de consejeros hay seguridad. La dirección sabia toma en cuenta la voluntad de Dios. Sin ella el pueblo

caerá por no tener un derrotero que lo oriente. En la multitud de consejeros hay seguridad de acertar, ya que es más difícil

que muchos se equivoquen al analizar un caso de interés común.

15. Con ansiedad será afligido el que sale por fiador de un extraño;

Mas el que aborreciere las fianzas vivirá seguro. Quien da testimonio de quien no conoce… dará testimonio de del dolor. No

será atribulado quien no responde por los desconocidos.

16. La mujer agraciada tendrá honra, Y los fuertes tendrán riquezas. Son seguros los dones recibidos por las hermanas que se conducen con

pudor de la misma manera que un fuerte obtendrá bienes.

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17. A su alma hace bien el hombre misericordioso; Mas el cruel se

atormenta a sí mismo. Quien tiene misericordia se hace bien, ya que Dios le otorgara la paz por

imitar este atributo que lo caracteriza. El cruel se atormenta a sí mismo por no recibir la aprobación que viene de

Dios, ya que el no justificara el ser cruel.

18. El impío hace obra falsa; Mas el que siembra justicia tendrá galardón firme.

La labor del impío no es confiable. Son ejemplos de ello:

Aparenta trabajar con interés sin una dedicación autentica.

Ofrece en venta mayores ventajas que lo que el bien posee.

Aparenta espiritualidad en la obra del Señor. Al sembrar justicia se producirá una recompensa imperecedera. 19. Como la justicia conduce a la vida, Así el que sigue el mal lo hace

para su muerte. El camino del justo lleva hacia el Padre de Justicia. Seguir el mal lleva a la

separación del que es toda bondad.

20. Abominación son a Jehová los perversos de corazón; Mas los perfectos de camino le son agradables.

Dios abomina a los de corazón perverso, que en oculto maquinan el mal; mas se agrada de los que caminan íntegramente por dentro y por fuera.

21. Tarde o temprano, el malo será castigado; Mas la descendencia de

los justos será librada. El malo será con seguridad castigo en el tiempo de Dios. Los justos serán

librados de la ira venidera que viene sobre este mundo y de la condenación eterna, así como Dios se acordó de aquellas 8 personas que estaban listas en el arca. (1 P. 3:19-20)

22. Como zarcillo de oro en el hocico de un cerdo Es la mujer hermosa y apartada de razón.

En ambos casos; el oro y la razón no son apreciadas por sus portadores, ni viene de ellos portarla.

23. El deseo de los justos es solamente el bien; Mas la esperanza de

los impíos es el enojo. Aquí se indica el carácter de ambas personas:

Los justos desean lo mismo que Dios desea: el bien

La esperanza de los impíos es enojo, ya que patalean cuando no les salen las cosas como su mente torcida lo estimo.

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24. Hay quienes reparten, y les es añadido más; Y hay quienes

retienen más de lo que es justo, pero vienen a pobreza. Dios puede controlar el recibir y el perder según la actitud que tengamos

hacia El y hacia el prójimo.

25. El alma generosa será prosperada; Y el que saciare, él también será saciado.

No es economía lógica, es misericordia divina que el generoso prospere si esta en los planes de Dios. El saciar también se puede aplicar a la parte espiritual, por aquellos que se dedican a la enseñanza de la verdad.

26. Al que acapara el grano, el pueblo lo maldecirá; Pero bendición será sobre la cabeza del que lo vende.

Las repercusiones divinas para castigo o bendición se generan a quienes trafican o suplen modificando el hambre de las criaturas que Dios creo.

27. El que procura el bien buscará favor; Mas al que busca el mal, éste

le vendrá. Madrugar el bien (RV 1602) para iniciar lo antes posible a actuar justamente

con cada uno. El malo siembra mala semilla, y cosecha en su época con abundancia.

28. El que confía en sus riquezas caerá; Mas los justos reverdecerán

como ramas. Un amor infiel son las riqueza y sus poseedores; ya que nos dejan cuando

más las necesitamos (en enfermedad,...) y las dejamos al morir; es mejor confiar en el dueño y dador de estas. Los justos siempre retornarán a la vitalidad que produce un buen fruto.

29. El que turba su casa heredará viento; Y el necio será siervo del sabio de corazón.

No dejará bienes ni ejemplos éticos quien no crea ambiente de paz en su hogar. Los alocados tendrán como resultado final de su necedad la servidumbre ante el ponderado.

30. El fruto del justo es árbol de vida; Y el que gana almas es sabio. El que obedece a Dios producirá siempre bienes espirituales en su entorno

y glorificara a Dios. Es sabio ganar almas porque:

Estaremos rodeados de más hermanos que nos alienten, enseñen, edifiquen,...

Es una auto limpieza para el que lleva el mensaje, ya que al mostrar las verdades de Dios las repasa para su propio beneficio.

Se tendrán recompensas; aunque no es un móvil en sí mismo, ya que no somos mercenarios de la fe.

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31. Ciertamente el justo será recompensado en la tierra; ¡Cuánto más

el impío y el pecador! Dios pagará a cada uno conforme a sus obras (buenas y malas). Él dará en

su tiempo lo que su justicia, su santidad y su gracia dicten por Jesucristo.

1. El que ama la instrucción ama la sabiduría; Mas el que aborrece la reprensión es ignorante.

La sabiduría que es la aplicación de las normas de Dios empezó al dedicarse a recibir instrucción. Un esfuerzo en esa ruta trae recompensa.

Quien no desee que se le muestre la manera de hacer bien las cosas y de vivir en orden y paz seguirá en su obstinada ignorancia y su error crecerá para su propio mal.

2. El bueno alcanzará favor de Jehová; Mas él condenará al hombre de malos pensamientos.

Dios es el único bueno y ampara al que lo imita. Como el Señor todo lo sabe condenará a aquellas personas que piensan

maldad en lo oculto; aunque estén aparentando poseer piedad.

3. El hombre no se afirmará por medio de la impiedad; Mas la raíz de

los justos no será removida. La receta de los dictadores y de los perversos no tendrá a la postre los

resultados que parecen obvios “donde el más fuerte sobrevive”. Dios es el único que puede plantar y hacer crecer con seguridad al hombre

justo (en el sentido más básico) en los prados de la paz y de la justicia.

4. La mujer virtuosa es corona de su marido; Mas la mala, como carcoma en sus huesos.

La esposa es corona pues:

Lo honra para su satisfacción.

Le da aliento para hacer lo que nos conviene espiritualmente.

Aconseja a su esposo sin buscar que su punto de vista se imponga de manera caprichosa.

Le ayuda a desarrollar su agenda diaria y de vida.

Alegra la existencia de toda su familia.

Respeta los votos que estimo un día poder sobrellevar. En contraste la mujer mala es carcoma para su desafortunado marido ya que:

No apoya sus planes; mismos que en la mayoría de los casos incluían su beneficio.

Pelea para imponer su criterio; mismo que es pocas veces juicioso.

Es rencillosa por vocación y muy constante en esta acción.

Actúa con soberbia, incluso en aquellos momentos donde el sentido común dicta que se necesita de la mansedumbre.

Es egoísta y no respeta el derecho ajeno.

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Se burla de lo sagrado; principalmente porque lo ignora y contradice su vana manera de vivir.

Frecuenta de malas compañías que secundan su torcido camino.

Honra al ocio y denigra toda labor excelente que demando de entereza de carácter.

Envidia cualquier otro atributo superior; pero, no busca a desarrollar dichas virtudes. Por tanto; nos evitaríamos muchos disgustos los varones con la simple pregunta: ¿Qué chica elegir?; y para las damas seria de notable ayuda el preguntarse: ¿Qué chica ser? Y todo según la perspectiva divina.

5. Los pensamientos de los justos son rectitud; Mas los consejos de

los impíos, engaño. Los que temen a Dios piensan en hacer el bien; por lo que buscan vivir

preparándose para la última y definitiva rendición de cuentas. Por otro lado los impíos aconsejan el error con un disfraz de sabiduría e

interés; donde la conveniencia es solo para el consejero y lleva al aconsejado a una caída inminente.

6. Las palabras de los impíos son asechanzas para derramar sangre;

Mas la boca de los rectos los librará. Como un anzuelo con carnada atractiva son las maquinaciones de los

impíos. Los consejos de los cristianos fieles salvan vidas; cuando estos se toman

en cuenta. No debemos dejar de decir que el principal ámbito de conserjería para una no creyente es el evangelístico.

7. Dios trastornará a los impíos, y no serán más; Pero la casa de los

justos permanecerá firme. Es loco ser enemigo del todopoderoso que paga justamente y en su tiempo. La casa de los justos será iluminada contra el peligro y su protección viene

del único Dios fuerte y fiel.

8. Según su sabiduría es alabado el hombre; Mas el perverso de

corazón será menospreciado. Aunque no es lo que busca el hombre piadoso, la alabanza acompaña a la

sabiduría divina. Esta debe de ser devuelta al que le corresponde y merece: al único sabio...nuestro Dios.

El perverso de corazón será tazado a un precio menor del ya menguado que posee.

9. Más vale el despreciado que tiene servidores, Que el que se jacta, y carece de pan.

Esto se ve en los creyentes que son despreciados por el mundo; que no sabe que a estos les asisten ángeles ministradores.

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Este mundo que se jacta de servirse platillos suculentos; cuando la realidad es que carece del principal alimento: el pan de vida que es Jesucristo.

10. El justo cuida de la vida de su bestia; Mas el corazón de los impíos es cruel.

La criatura superior que Dios creo en la tierra debe de cuidar de las criaturas menores por respeto al creador común y como un agradecimiento a ambos; pues esta bestia es para su beneficio.

El corazón de los impíos daña y se regocija al hacerlo.

11. El que labra su tierra se saciará de pan; Mas el que sigue a los

vagabundos es falto de entendimiento. Dios trabaja al igual que Jesucristo trabajo por nuestra libertad; nosotros

debemos de ser muy trabajadores; pero este trabajo:

No debe llevarnos a pecar.

No debe tomar el tiempo dedicado a Dios.

No debe arriesgar la vida.

No debe despertar la codicia. Quien se asocia a los ociosos será un parásito para su familia y para la sociedad. No solo será una persona improductiva; sino que llenará su mente de basura.

12. Codicia el impío la red de los malvados; Mas la raíz de los justos

dará fruto. El malo desea ser más malvado y admira del que lo aventajan sus métodos

de “pesca” con los cuales toma lo inapropiado Los justos darán frutos para bendición; aunque esto parezca distante; así

como lo esta la raíz de los frutos en muchas especies que el señor creo.

13. El impío es enredado en la prevaricación de sus labios; Mas el justo saldrá de la tribulación.

Ya que el impío hoy dice algo que mañana cambiara, hace malabares para armonizar las diferentes versiones; en las cuales se enreda y a sus “vecinos”.

Por la lengua, es decir hasta por una palabra ha habido muertos, separaciones, pérdidas; en fin...tribulación ya que es el trampolín del pecado.

El justo saldrá de la tribulación por no abrir tanto la boca; y cuando la abre generalmente es para edificación.

14. El hombre será saciado de bien del fruto de su boca; Y le será pagado según la obra de sus manos.

Lo que sembramos segaremos; será la misma semilla, sólo que multiplicada. Ya que no cambiaremos la “ley de la siembra” lo que nos urge hacer es cambiar la mala semilla, si consideramos que ya estamos cosechando malos frutos.

15. El camino del necio es derecho en su opinión; Mas el que obedece

al consejo es sabio.

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Necio está enloquecido al ver lo malo como bueno; mas aun si este camino torcido que lo perderá no estima obedecer el oportuno consejo que Dios le da en su santa palabra o a través de su pueblo.

El sabio sabe que es para vida el obedecer a Dios; por eso no complica su existencia contradiciendo este camino derecho con argumentos terrenales procedentes de vanas criaturas y del mismo abismo.

16. El necio al punto da a conocer su ira; Mas el que no hace caso de la injuria es prudente.

Por más que trate o que crea poseer dominio propio el necio explotará en su ira; ya que no esta dotado por el Espíritu Santo para responder con paz en los momentos de prueba.

Para dar el fruto del Espíritu que incluye la paciencia hay que buscar la pertenencia al pueblo redimido por Dios; a este se le instruye de quien alejarse e ignorar los agravios.

17. El que habla verdad declara justicia; Mas el testigo mentiroso,

engaño. Aunque no les convenga terrenalmente a los hijos de Dios debemos de ser

veraces; ya que la verdad va de la mano con la justicia. Al imitar al Diablo al “testigo” mentiroso solo le queda una opción en sus

relaciones humanas: el engaño.

18. Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina.

Las palabras pueden ser intencionalmente dolorosas, así como el impacto de una espada que hiere o hasta mata a su prójimo.

La lengua del sabio contrasta con la del hombre que hiere con la misma en que resulta como una medicina que sana para prolongar la vida.

19. El labio veraz permanecerá para siempre; Mas la lengua mentirosa

sólo por un momento. Dios conservará al ser que confiese lo mismo que Él ha revelado. Quien imite al Padre de mentira no recibirá la gracia que lleva a la vida

eterna; ya que hasta su mentor acabara en el Lago de fuego.

20. Engaño hay en el corazón de los que piensan el mal; Pero alegría

en el de los que piensan el bien. Quien piensa mal, se trastorna y su siguiente paso es el engaño. (Ver Ro.

1:28) Los que piensan bien serán al final de todo dichosos ya que el Padre de

todo bien prevalece y recompensa.

21. Ninguna adversidad acontecerá al justo; Mas los impíos serán

colmados de males.

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Nada va a la larga en contra del justo, (Ro. 8:28) aunque se vivan momentos dolorosos; Dios no tiene despropósito en su actuar para con sus hijos. Hasta los azotes nos convienen a los hijos del Altísimo.

Para los impíos esta segura la promesa que recibirán todo el mal que colme su andar que desprecia el camino de la vida piadosa.

22. Los labios mentirosos son abominación a Jehová; Pero los que

hacen verdad son su contentamiento. Únicamente quien ama la verdad por ser Dios su padre, odiara la mentira.

Dios se alegra y apoya a quienes hacen verdad.

23. El hombre cuerdo encubre su saber; Mas el corazón de los necios publica la necedad.

Quien ha recibido la sabiduría de lo alto, debe de vivirla sin presumir de ella. Los necios son humillados cuando buscan exhibir aquello que les hace falta.

24. La mano de los diligentes señoreará; Mas la negligencia será

tributaria. Quien hace rápido y bien las cosas, ascenderá y señoreará a sus

consiervos; mientras que el desinteresado por sus malos resultados, tendrá que vivir recibiendo instrucciones de aquellos de los cuales seguirá dependiendo.

25. La congoja en el corazón del hombre lo abate; Mas la buena

palabra lo alegra. Afligirnos nos vence, ya que al preocuparnos se transportan los problemas

de los fuertes hombros de Dios a los nuestros. Es vivir una derrota futura. Existe una preocupación buena: es la que cuida lo que puede y debe. La

preocupación mala es aquella que nos aflige por lo que no podemos controlar. Si la buena palabra alegra, entonces es la que debemos de hablar; pero, sin

decir mentiras, o aquello que es impropio.

26. El justo sirve de guía a su prójimo; Mas el camino de los impíos les hace errar.

Quien mira puede guiar, pues ha sido guiado por la justicia de Dios. Los impíos tropiezan en el camino porque van sin Dios y sin Ley.

27. El indolente ni aun asará lo que ha cazado; Pero haber precioso del

hombre es la diligencia. El perezoso puede obtener medias victorias, que son grandes derrotas.

La diligencia es una posesión que nos conviene practicar en la parte espiritual y secular en segunda instancia.

28. En el camino de la justicia está la vida; Y en sus caminos no hay muerte.

Hacer lo que conviene (lo justo) es lo que Dios pide, allí no hay castigo y Él dará la protección contra el error doctrinal para sus ovejitas.

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1. El hijo sabio recibe el consejo del padre; Mas el burlador no

escucha las reprensiones. El que teme a Dios considera la autoridad que dio a sus padres, por ello sus

palabras son valiosas como un tipo del que:

Sabe todo.

Lo puede todo.

Tiene el control.

Es bueno. El burlador se cree muy sabio y fuerte; ya que su impiedad lo ha cegado. No

cree ni teme lo que Dios anuncia como de firme acontecimiento.

2. Del fruto de su boca el hombre comerá el bien; Mas el alma de los prevaricadores hallará el mal.

Lo que sembramos; eso cosechamos. La ley de la siembra respeta la especie sembrada, el crecimiento irreversible y la cantidad multiplicada; a 30, a 60 o hasta el 100 por unidad invertida.

3. El que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad.

La boca es el portal del alma: quien mucho habla, peca. Las palabras hacen eco posterior en nuestra mente, corazón y en nuestra alma y nos persiguen como un amigo interesado o como un enemigo despiadado.

4. El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas el alma de los

diligentes será prosperada. Los perezosos no pueden alcanzar por no extender su mano. La persona

diligente obtiene buenos y abundantes frutos en el momento apropiado.

5. El justo aborrece la palabra de mentira; Mas el impío se hace odioso

e infame. El hombre y la mujer justo(a) esta sincronizada con el Padre de verdad y

por eso odia lo que Dios odia:… la mentira. El impío se hace odioso cuando es conocida su actitud nociva. Tarde o

temprano su infamia lo deshonrara.

6. La justicia guarda al de perfecto camino; Mas la impiedad trastornará al pecador.

Obrar respetando la verdad nos protege y mantiene el buen andar del que teme a Dios.

La impiedad pervierte y tuerce más al que ya está fallando en las claras ordenanzas del Único Dios.

7. Hay quienes pretenden ser ricos, y no tienen nada; Y hay quienes

pretenden ser pobres, y tienen muchas riquezas.

13

43

En la feria de las vanidades, donde asisten con mucha frecuencia los impíos se presume de lo que se desea aunque se carezca de todo buen don.

En cambio los que pretenden ser pobres siendo poseedores de riquezas terrenales tienen que mentir para recibir mejores condiciones o precios; o para que no se les solicite ayuda alguna, ya que son unos mezquinos hasta con ellos mismos.

El cristiano debe de tener mucha humildad aunque sepamos que estamos completos y enriquecidos en Cristo.

8. El rescate de la vida del hombre está en sus riquezas; Pero el pobre

no oye censuras. El rico corre con frecuencia el riesgo de ser hecho prisionero por sus

propios bienes; mientras que al pobre no se le puede amenazar por aquello que no posee.

9. La luz de los justos se alegrará; Mas se apagará la lámpara de los impíos.

Los justos tendrán periódicamente de parte de Dios el avivamiento que requerimos para acabar la carrera de la fe que tenemos por delante. A los impíos la poca luz que tienen se les extinguirá.

10. Ciertamente la soberbia concebirá contienda; Mas con los avisados está la sabiduría.

Los soberbios son resistidos por hombres de su misma condición, lo que trae se cierto pleitos.

Los avisados han considerado las ordenanzas de Dios vigentes para su generación y se han propuesto acatarlas; lo que les trae como resultado un andar sabio.

11. Las riquezas de vanidad disminuirán; Pero el que recoge con mano laboriosa las aumenta.

Los beneficios materiales temporales que son el fruto de la realización de actividades vanas (vacías) no serán bendecidos por un Dios que actúa con limpieza, bondad y propósito.

Las labores que se desempeñan dignamente pueden aumentar, en la voluntad de Dios los frutos y su provecho.

12. La esperanza que se demora es tormento del corazón; Pero árbol

de vida es el deseo cumplido. El mundo vive atormentado porque su “esperanza” que es vana e ilusoria

tarda o nunca llega; esto, por negar tomar la verdadera esperanza ofrecida por Dios en la persona del Señor Jesucristo.

El buen deseo que es cumplido alegra el corazón. Pero, cuidémonos de no desear lo que nos afecta. Como toda buena dádiva viene de Dios, los cristianos debemos desear aquello que Dios desea; aunque no luzca fácil o atractivo; Además, si lo esperado tarda, solamente nos resta confiar en la soberanía de Dios.

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13. El que menosprecia el precepto perecerá por ello; Mas el que teme

el mandamiento será recompensado. Despreciar los mandamientos del creador trae la muerte de la criatura;

como le paso a nuestro padre Adán. Dios recompensará a quien teme su palabra; ya que el que le teme,

aprecia y guarda sus justas demandas.

14. La ley del sabio es manantial de vida Para apartarse de los lazos de

la muerte. Quien incorpora intencionalmente y con reverencia a su vida, en la medida

de sus posibilidades, todo aquello que Dios ordena, recibirá vida abundante; la que salpica también a otros. Es más que prudente que busquemos alejarnos de las trampas mortales, las que frecuentemente se ocultan detrás de atractivas carnadas.

15. El buen entendimiento da gracia; Mas el camino de los

transgresores es duro. No solo debemos de oír la verdad, busquemos entenderla para alcanzar el

mayor beneficio de la fabulosa Palabra de Dios. Dios después que nos regala el deseo de cumplir su voluntad para nosotros nos da la fuerza para hacerlo.

Los transgresores de seguro que sufrirán por sobrepasar los claros límites que Dios ha puesto por su amor y para nuestra protección.

16. Todo hombre prudente procede con sabiduría; Mas el necio

manifestará necedad. Por obsequio inmerecido de Dios es la naturaleza del hombre prudente y

equilibrado proceder con temor a su gran benefactor: Dios. Los necios no pueden ocultar por mucho tiempo y ante todos su locura; por

más que traten de aparentar ser criaturas cuerdas. 17. El mal mensajero acarrea desgracia; Mas el mensajero fiel acarrea

salud. No podemos como mensajeros de Dios editar, desestimar o añadir al limpio

y claro mensaje divino; salvo saber que llevaremos si tal acto delictivo hacemos un merecido castigo (Ap. 22:18-19).

El mensajero fiel recibirá salvación; y esto por gracia.

18. Pobreza y vergüenza tendrá el que menosprecia el consejo; Mas el

que guarda la corrección recibirá honra. El mal vendrá con la carencia de lo necesario y con la vergüenza y esto

ante muchos que presencien la ruina de aquel que no consideró el buen consejo que Dios nos da para nuestra felicidad terrena y eterna.

La honra futura de Dios solo será para aquel que toma en serio en su vida la corrección que Dios nos hace (ver 2 Tim. 3:16) en las claras demandas de todo su consejo.

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19. El deseo cumplido regocija el alma; Pero apartarse del mal es

abominación a los necios. Ver el comentario del versículo 12 de este capitulo relacionado con la

primera parte de este. Los necios o locos espirituales odian el salir del lodo moral; al cual están

muy habituados.

20. El que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será quebrantado.

Por simbiosis recibimos la sabiduría; solo cuando estamos interesados en adquirirla.

Al juntarse con los necios nos arriesgamos; ya es peligroso solo acercarnos con el interés de cultivar una amistad con ellos. Lo que le vendrá, de forma inminente, al que tiene estas impropias asociaciones con el necio es un quebranto, por haber hecho una elección que obedece a buscar la afinidad con el error.

21. El mal perseguirá a los pecadores, Mas los justos serán premiados

con el bien. A los que violan los mandamientos de Dios, un justo mal los perseguirá

hasta que sean juzgados para su castigo eterno; salvo que arreglen sus cuentas con Dios por medio de Jesucristo.

22. El bueno dejará herederos a los hijos de sus hijos; Pero la riqueza

del pecador está guardada para el justo. Muchos piensan que solo haciendo el mal se puede lograr hoy ser rico o

respetado. En el Antiguo Testamento se miraba socialmente la riqueza como una bendición; aunque esto era una apreciación superficial; aquí se nos aclara que el pecador también podía custodiar temporalmente las riquezas que el mismo Dios cambiara daría a otro mas digno que él.

23. En el barbecho de los pobres hay mucho pan; Mas se pierde por

falta de juicio. La pobreza muchas veces es el resultado de malas decisiones; y auque los

cristianos no podemos venerar al dinero; si tenemos que ser buenos mayordomos, así contaremos para nuestro sustento básico; para compartir con otros mas necesitados; y sobre todo para la obra del Señor

24. El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; Mas el que lo ama, desde temprano lo corrige.

No solo trata con detener; sino también con retrasar. A quien se odia se le desea el mal y el mal les vendrá si no los disciplinamos; si lo hacemos temprano en amor todos tendremos un buen fin en los caminos de Dios.

25. El justo come hasta saciar su alma; Mas el vientre de los impíos

tendrá necesidad. Hoy los creyentes tenemos respuestas claras en las escrituras; mas los

impíos siempre desconocerán la voluntad y la ciencia de Dios, van sin rumbo.

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1. La mujer sabia edifica su casa; Mas la necia con sus manos la derriba.

La mujer que teme a Dios construye su casa; es decir que da un alberque seguro y placentero a los integrantes de ese hogar que Dios formo para auxilio y cuidado de los que debemos de ser su pueblo. La mujer loca o necia tumba la casa que tiene y queda en el lugar que se merece: en la calle.

2. El que camina en su rectitud teme a Jehová; Mas el de caminos

pervertidos lo menosprecia. Andar en los caminos de Dios da todo el beneficio que un ser pueda

esperar ya que da respeto al dueño y diseñador de dichos caminos; al final podrá caminar en las calles de oro por haber transitado en el más sublime camino: el propio Señor Jesucristo.

El que cambia los caminos de Dios es un pervertido que vive justificando su mal actuar y es uno que no valora a Dios; lo que desencadena en un mal destino, ya que cambio las coordenadas y la ruta de salvación que le pudo dar el escape a su trágica muerte espiritual.

3. En la boca del necio está la vara de la soberbia; Mas los labios de

los sabios los guardarán. Los locos se sienten soberanos y quieren hacer su reino con mentiras,

traiciones, golpes y con maldad; mientras que los labios de los sabios se guardan de los azotes porque no se abren mucho. (Ver prov. 10:19)

4. Sin bueyes el granero está vacío; Mas por la fuerza del buey hay

abundancia de pan. Los medios de producción pueden ser básicamente:

El capital.

El ser humano.

La tecnología. En la antigüedad el hombre y el buey eran un equipo de trabajo; así hoy, se

necesita en la iglesia del apoyo de todos sus miembros; imagine un cuerpo en el que penda inútil un brazo. ¿Somos parte de dicho organismo vivo, útil, funcional y productivo?

5. El testigo verdadero no mentirá; Mas el testigo falso hablará

mentiras. Los creyentes debemos de ser testigos verdaderos al exponer fielmente La

Escritura; aunque suframos por decir la verdad. El testigo falso miente porque busca un beneficio por su mal servicio.

6. Busca el escarnecedor la sabiduría y no la halla; Mas al hombre

entendido la sabiduría le es fácil.

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El burlador no busca un cimiento firme para apoyar sus ideas o conocimientos, solo busca detalles para tener esos “chistecitos” que le ayudan a tener un transito entretenido en su transito hacia el infierno.

El entendido es objetivo; busca razones, pero Dios le da el entendimiento en el Señor Jesucristo en lo que le trae vida eterna y le da paz mientras se encuentra con su Creador.

7. Vete de delante del hombre necio, Porque en él no hallarás labios de ciencia.

No recibimos provecho ni beneficio en nuestro andar espiritual al compartir interioridades con el no creyente; él ya rechazó a Dios; al que tenemos que seguir nosotros. Cualquier roce con el hombre necio debe tener visualizado una ruta de escape si no esta interesado en escuchar las nuevas de salvación. Estas podrán ser suyas en el futuro por la buena gracia de Dios.

8. La ciencia del prudente está en entender su camino; Mas la indiscreción de los necios es engaño.

Suponemos que el testigo vio y escuchó algo trascendental; él no puede añadir ni omitir los detalles que dan vida a esa narración que debe de ser revelada. Los cristianos somos testigos de la experiencia de Cristo y de su Santa Palabra y debemos de dar este anuncio a todo el sector del mundo al que tenemos acceso.

Los testigos falsos dicen que Dios dijo lo que ellos quieren que haya dicho para tomar de su gloria y de las riquezas de sus seguidores.

Digerir lo bueno es prudente y es algo solo del prudente; mas el necio no es digno de confianza.

9. Los necios se mofan del pecado; Mas entre los rectos hay buena voluntad.

La incredulidad que es una locura en ignorancia no ve la gravedad del pecado; pues, no le cree a Dios y no estima las terribles consecuencias que traerá; ya que por el pecado nos ha venido:

Fatiga: Con sudor trabajamos para ganar el pan con que nos alimentamos y a nuestra familia.

Dolor: Los espinos que ahora produce la tierra bajo maldición causan dolor a los que tenemos que arrancarlos.

Separación: Tenemos que dejar familia, amigos y hermanos por nuestro trabajo, por enfermedad y por buscarnos la vida; lo que no siempre nos resultara fácil.

Muerte: Los leones que eran vegetarianos (Gen. 1:29-30) por nuestro pecado ahora son cazadores; incluso de hombres, si tienen la oportunidad. Seamos rectos y tengamos una buena voluntad; al hacer el bien como

nuestro Señor Jesucristo y veamos el pecado como lo ve Dios: repugnante.

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10. El corazón conoce la amargura de su alma; Y extraño no se

entremeterá en su alegría. Los totalmente convencidos del dolor y la alegría y no puede producir

cambios por palabras o acciones de superficialidad externa. Sólo las palabras profundas y sinceras hacen un cambio para bien.

Los cristianos cuando andamos como Dios lo pide e imitando a nuestro querido Señor Jesucristo solemos entristecer a los que tienen una alegría vana y alegrar a quienes tienen tristeza piadosa.

11. La casa de los impíos será asolada; Pero florecerá la tienda de los rectos.

La casa de los impíos es asolada y queda sola por:

Huyó el impío por temor. (ver 28:1)

Murió y los descendientes no pudieron seguirla habitando; ya que su vida y ejemplo no dieron sostenibilidad a sus posesiones.

Cayó en desgracia y su habitación fue grotesca para ser habitada.

Otras causas que lo hacen indigno de un espacio seguro en un mundo que el hace inseguro. La tienda de los rectos florecerá porque:

Dios le permitió sembrar y regar su bello jardín.

Dios da la belleza y el perfume. Recordemos que las flores se transformaran en sanos y deliciosos frutos.

12. Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es

camino de muerte. La mente finita se equivoca, al considerar su opinión sobre su propio andar

mejor que la guía que Dios le da en su Santa Palabra.

13. Aun en la risa tendrá dolor el corazón; Y el término de la alegría es

congoja. La risa es efímera cuando no viene de un placer valido, el dolor es de una

mayor duración entre los que no sabemos dar ni recibir consuelo. La alegría temporal muchas veces no considera las leyes de las

desventajas que la acompañan.

14. De sus caminos será hastiado el necio de corazón; Pero el hombre de bien estará contento del suyo.

Quien con arrogancia defendió su torpe anda al cabo del tiempo que no se detiene podrá ver sus tristes resultados; entonces esos caminos otrora tan amados serán motivo de asco y vergüenza.

El hombre de bien vera al sentarse en el banquete de las consecuencias que Dios le ha aparejado tanta razón para estar contento y agradecido con su Divino benefactor.

15. El simple todo lo cree; Mas el avisado mira bien sus pasos.

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El simple no tiene criterio propio y vive confundido entre las opiniones antagónicas que a diario recibe.

El avisado considera el como y el donde andar, a pesar de todo lo que escuche, pues el ya tiene definido un destino que Dios le fijó y se lleva bien y de manera objetiva con la guía del Santo Espíritu.

16. El sabio teme y se aparta del mal; Mas el insensato se muestra

insolente y confiado. El sabio se aparta del mal pues sabe que éste es contrario a la naturaleza

de Dios, a quien no quiere ofender. El insensato confía puerilmente en que no se le pedirá cuentas por sus

acciones descuidadas y pecaminosas. 17. El que fácilmente se enoja hará locuras; Y el hombre perverso será

aborrecido. Las personas que somos de mecha corta corremos el riesgo de explotar

fácilmente; en tales casos vienen las locuras pues:

Ya no prensamos con cordura lo que decimos o hacemos.

No estimamos todas las consecuencias; como lo son: o La pérdida de los amigos y hermanos; muchas veces

permanentemente. o Nos ganamos la desconfianza. o Sembramos hostilidad, que después nos tocara segar. o Iniciamos una o varias guerras abiertas contra otras personas que

pueden ser tan duras como nosotros lo somos. El hombre perverso será aborrecido por una natural respuesta que busca la

protección propia de esos seres que no quieren recibir mas daños. (Ver Tito 3:3)

18. Los simples heredarán necedad; Mas los prudentes se coronarán de sabiduría.

Entendemos como una herencia aquello de valor que nos deja nuestra familia, nación, una persona con quien nos hemos relacionado y que tiene algún interés en nuestro bienestar; pero, este mundo necio deja a sus hijos y seguidores una filosofía que lejos de ayudarles en su bienestar espiritual; que es lo mas valioso del hombre; le traen perdición y condena eterna.

Los simples aceptan las normas que se le dan masticadas; estas son etiquetadas por el mundo como valiosas y necesarias.

Los prudentes; por el contrario, se coronarán de sabiduría, pues ellos indagarán diligentemente en la ley de Dios, ya que están convencidos por el Creador, a quien aman y temen; que esto es lo que les traerá felicidad, ya que antes esta misma Palabra les dio esa gran salvación de la que gozamos los creyentes renacidos.

19. Los malos se inclinarán delante de los buenos, Y los impíos a las

puertas del justo. El verdadero creyente no se inclina ante los malos, ya que este sólo lo hace

ante su majestuoso Dios; pero, los impíos reconocerán quizá tardíamente en su

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condenación que se les oferto residir en las mansiones de bondad; los pobres entonces solo podrán llegar hasta la puerta; sin posibilidad de ingresar.

20. El pobre es odioso aun a su amigo; Pero muchos son los que aman al rico.

El egoísta no quiere compartir lo que Dios le da; por eso, a quien poco tiene hay que apoyarle.

En Sal. 123:4 vemos que los están en holgura nos escarnecerán si llevamos una vida piadosa; ya que la comodidad los envanece y los hace abusivos.

Los que aman al rico son los aduladores que lo engañan para buscar algún despojo de ellos.

21. Peca el que menosprecia a su prójimo; Mas el que tiene misericordia de los pobres es bienaventurado.

No debemos valorar a las personas por lo que tienen, ya que es una condición en la que Dios los tiene.

Quien se siente más por tener más no estima la fragilidad de esas riquezas que lo envanecen y sigue el modelo del mundo caído, el que idolatra al falso dios Mamón.

Muy feliz será quien hace bien a los que Dios protege y se compadece de su prójimo.

22. ¿No yerran los que piensan el mal? Misericordia y verdad alcanzarán los que piensan el bien.

Los que piensan continuamente en el mal y se deleitan en ello; se equivocan; ya que Dios rige el universo que Él creo con sus propias leyes y con el bien; que al final prevalecerá.

La parte de Dios ha sido definir y entregar la verdad y el tener misericordia para con los hijos de Adán, por medio de la obra perfecta y completa que nuestro Señor Jesucristo con su vida santa y su muerte vicaria por nosotros. La parte nuestra es estudiar su verdad, aplicarla, vivirla y transferirla.

Vemos en Jn. 1:14 al Señor Jesucristo lleno de Gracia y verdad. En Sal 115:1 se señala que la misericordia y verdad de Dios lo glorifican y

no queda nada de resplandor propio para sus criaturas. A pesar de la confusión en éste mundo Dios deja entender su palabra para

glorificarle a las ovejitas sencillas que le siguen. La misericordia y la verdad de Dios es todo lo que necesita el pecador para

salvarse.

23. En toda labor hay fruto; Mas las vanas palabras de los labios

empobrecen. Las obras buenas son para vida y las malas para muerte. Las vanas palabras o vacías no sólo no aportan para el bien de nadie; sino

que empobrecen por quitar el tiempo; el que debemos de redimir. (Col. 4:5)

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24. Las riquezas de los sabios son su corona; Pero la insensatez de

los necios es infatuación. Los sabios están contentos con el conocimiento que Dios les ha dado; este

les fue dado por gracia y por temerle y valorarlo como se valora una corona con valiosas joyas incrustadas.

La Insensatez; que es locura e indiscreción es solo para los que son necios a las demandas de Dios. El termino “infatuación” aquí es la única vez en toda la Biblia. La locura trae más locura; por la simple ley de la siembra.

25. El testigo verdadero libra las almas; Mas el engañoso hablará mentiras.

El testigo verdadero libra las almas porque no busca su provecho; solo relata fielmente lo sucedido como en un documental que es provechoso observar. Así debemos los cristianos relatar la gran obra del Señor Jesucristo; para que las almas de los cautivos en sus delitos y pecados sean libradas de la condena eterna.

El testigo engañoso habla mentiras para sacar provecho de ello. El peor de los mentirosos es el religioso que usa su “servicio” a Dios y al prójimo para pasar esta vida; aunque si no se arrepiente pasará la eternidad en la peor de las condenas.

26. En el temor de Jehová está la fuerte confianza; Y esperanza tendrán sus hijos.

Si tememos y confiamos en el todo poderoso tendremos una mejor perspectiva de los poco poderosos; que son el resto de las criaturas. Esa condición puede ser la mejor de las herencias que les podemos dejar a nuestros hijos.

27. El temor de Jehová es manantial de vida Para apartarse de los

lazos de la muerte. Hay que alejar de inmediato de nuestras vidas, toda elección que nos

pueda conducir hacia el mal; que es aquello que contradice la voluntad de Dios expresada en la Biblia; nos alejaremos así de la muerte en franca dirección hacia la vida en plenitud; aunque al inicio lucíamos como amedrentados.

28. En la multitud del pueblo está la gloria del rey; Y en la falta de pueblo la debilidad del príncipe.

Un pueblo grande hace un reino grande; lo mismo ha acontecido con el gran ejército que somos los redimidos por la persona de nuestro Señor Jesucristo; nuestro fuerte gobernante que no perderá ni uno de sus súbditos elegidos.

29. El que tarda en airarse es grande de entendimiento; Mas el que es

impaciente de espíritu enaltece la necedad. Quien tarda en airarse ha entendido después probar y errar en esta área,

que lo mejor es prolongar la respuesta al airarse. Dios no lo prohíbe (Ef. 4:26); pero; solicita que no pequemos en ese momento de ebullición.

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Dominar la ira es uno de los más grandes conocimientos que podemos recibir en nuestro paso por esta tierra de sequedales y de relaciones difíciles; pero, que aunque no siempre las escogimos, son necesarias.

El ser impaciente levanta la locura en un pedestal, pues la venera con su practica diaria.

30. El corazón apacible es vida de la carne; Mas la envidia es carcoma

de los huesos. Un corazón en paz mantiene al cuerpo funcionando bien. La envidia al desear lo de otros mantiene al cuerpo funcionando de una

manera quebrantada; así como lo seria la carcoma para los huesos. Hoy los problemas ocasionados por la presión arterial, los infartos y tantas enfermedades obedecen en muchas ocasiones a la bajeza espiritual de envidiar lo que Dios en su misericordia y sabiduría no nos ha querido dar por los momentos.

31. El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor; Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra.

Oprimir al pobre es insultar y pelear con Dios. Parece fácil dañar y humillar al humillado; peros Dios juzgará su causa.

Al tener misericordia del pobre se da resplandor al Dios que lo mantiene a él y a nosotros; porque imita sus propósitos. Stg. 2:5 nos enseña que Dios hace fácilmente ricos espiritualmente a muchos que son pobres en cuanto a lo material.

32. Por su maldad será lanzado el impío; Mas el justo en su muerte tiene esperanza.

El impío será lanzado la lago de Fuego (Ap. 20:15). Por la maldad de no recibir al Señor Jesucristo para cambiar sus torcidos caminos; como Dios se lo ordenó tantas veces y con tanta claridad.

El justo al morir tiene esperanza; y esto por los méritos que el Divino Jesús tiene y ha obrado en su favor, ya que en el ha puesto su total confianza.

33. En el corazón del prudente reposa la sabiduría; Pero no es conocida en medio de los necios.

La sabiduría se queda en quien teme a Dios; mas no puede permanecer ni por un minuto en los pobres locos que lo desprecian.

34. La justicia engrandece a la nación; Mas el pecado es afrenta de las

naciones. La justicia da su merecido a cada uno; ya sea de manera personal como en

una forma corporativa. Toda injusticia contribuirá acumulativamente con una nación dañada; por

dar más a quienes menos lo merecen, especialmente al no dar la honra al Dios que les ofrece buenos mandamientos.

35. La benevolencia del rey es para con el servidor entendido; Mas su enojo contra el que lo avergüenza.

Nuestro gran Rey; el Señor Jesucristo hará bien al servidor entendido.

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El servidor debe de estar sirviendo en aquello que le ha sido solicitado por su Señor.

Como servidor entendido ha comprendido a cabalidad la plenitud de las órdenes de su Rey.

Nuestro Señor Jesucristo se molesta hoy con los hermanos indisciplinados que no sirven en la viña, ni comprenden sus estatutos a los que no se han dedicado; ya que esto le produce vergüenza.

El mañana del no regenerado será desgarrador al ser apartado eternamente de aquel a quien debió servir con dignidad.

1. La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el

furor. Dos no pelean si uno no lo desea; o por lo menos si uno lo evita. Dos

errores no hacen un acierto. Lo que sembramos cosecharemos casi de inmediato.

2. La lengua de los sabios adornará la sabiduría; Mas la boca de los necios hablará sandeces.

Los sabios aportan a la sabiduría; ya que hicieron lo adecuado: creerle a Dios; solo entonces podremos obedecerle y ser útiles en su Reino.

Los necios que solo pueden vivir hablando sandeces serán la maquinaria que seguirá produciendo en este mundo difícil mas necedades y locuras.

3. Los ojos de Jehová están en todo lugar, Mirando a los malos y a los buenos.

Dios no puede ser engañado ni burlado. Dios ve nuestras obras. Dios lleva un fiel registro de nuestros pensamientos palabras y obras; los que serán expuestos en el Tribunal de Cristo en el caso de los cristianos o en el Juicio ante el Gran Trono Blanco para los no salvos.

Dios recompensa a quien hizo lo bueno; lo principal es el recibir a Jesucristo como Señor y Salvador.

4. La lengua apacible es árbol de vida; Mas la perversidad de ella es

quebrantamiento de espíritu. La lengua toma del corazón; el que es parte de nuestro ser. (Comparar con

Mt. 12:34 y Stg. 3:8). La tranquilidad que da vida puede venir por:

Contar con sombra que nos permite un placido descanso.

Poseer una constante fuente de frutos para nuestro alimento.

Disponer de medicinas confiables que sean bálsamo y remedio para las dolencias que surjan en nuestra vida personal y familiar.

Al ser perversos quebrantamos el espíritu de los que nos rodean por el egoísmo de negar los beneficios del árbol que Dios puso bajo nuestra mayordomía, a lo que se suma el temor para acercarse al buen árbol; pero, con un propietario venenoso.

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5. El necio menosprecia el consejo de su padre; Mas el que guarda la

corrección vendrá a ser prudente. Es imprudente el no valora el consejo del padre quien:

Lo ama

Ha vivido más

Desea lo mejor para ese hijo/a.

Lo conoce; sabe entonces, que es lo que le conviene. El necio también desprecia el consejo de Dios; de su Creador que lo ama, que

es sabio y que lo conoce. Los que guardan de corrección serán en su momento prudentes, ya que verán

los frutos del consejo y de la disciplina de sus autoridades terrenales y sobre todo de la divina.

6. En la casa del justo hay gran provisión; Pero turbación en las ganancias del impío.

La provisión del justo no viene de la impiedad; ni su fuente es de vanidad ni de mentira, mas es de parte del Dios justo y bueno que lo sostiene.

La “ganancia” del impío es turbación como el pago por haber quebrantado la Ley del dios que le aviso oportunamente de su mal proceder. Un buen ejemplo de ello lo podemos ver en el quebranto que le aconteció al malvado Amán. (Ester 3:1-2; 5:10-14; 6:11-13; 7:4-9).

7. La boca de los sabios esparce sabiduría; No así el corazón de los

necios. Los sabios, aún sin darse cuenta de ello, distribuyen el buen conocimiento

que han adquirido por temer a Dios y estudiar diligentemente su santa Palabra; bendiciendo a los que lo rodean.

Es boca de locos no da nada bueno a los escuchas que consideran sus aberraciones.

8. El sacrificio de los impíos es abominación a Jehová; Mas la oración

de los rectos es su gozo. El sacrificio debe tener un propósito; el propósito de los impíos le da asco al

Dios limpio y santo; aunque sean muy sinceros. Quizás son aplaudidos, animados y hasta admirados por el mundo que rechazo al Salvador. Dios no soporta entonces las ofrendas hipócritas, vanas y contaminadas de paganos.

Por otra parte Dios se goza en la sinceridad de los que la temen y le invocan con devoción y con sustento de las escrituras, para que los acompañe y esto a través de la obra perfecta del Señor Jesucristo.

9. Abominación es a Jehová el camino del impío; Mas él ama al que sigue justicia.

También le da asco a Dios que el impío planifique y empiece a andar, ya que es una criatura rebelde que no lo considera y anda en soberbia y la vanidad de su mente.

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Dios ama a quien sigue sus caminos de justicia; ya que reconoce su dependencia y confía en que su galardonador lo dirige. (Ver Sal. 58:11)

10. La reconvención es molesta al que deja el camino; Y el que aborrece la corrección morirá.

Quien se aparta del camino quiere seguir sin rumbo y es ofendido cuando se le señala el desvío de retorno.

Odiar la instrucción es más que molestarse al ser alertado, es empeorar y endurecerse espiritualmente; esto solo acarrea una muerte inminente.

11. El Seol y el Abadón están delante de Jehová; ¡Cuánto más los

corazones de los hombres! El Señor nos hace rayos-x a en nuestros corazones y conoce las

motivaciones de todas nuestras acciones.

12. El escarnecedor no ama al que le reprende, Ni se junta con los sabios.

Como el burlador odia al que le hace ver sus desvaríos; esa misma necedad le hace buscar su par igual y entonces su locura sumada a su compañía homogénea, lo lleva a alejase de los sabios.

13. El corazón alegre hermosea el rostro; Mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.

La alegría interna no se puede ocultar y hace lucir al portador. El dolor interior abate y vence al hombre y mujer que no se acepta que Dios

tiene un plan que puede incluir el dolor para los suyos.

14. El corazón entendido busca la sabiduría; Mas la boca de los necios se alimenta de necedades.

Quien sabe lo apropiado para esta vida y la venidera, es porque ha buscado la fuente del saber: La Palabra de Dios.

Los locos meten basura a su interior, que después esparcirán por doquier.

15. Todos los días del afligido son difíciles; Mas el de corazón contento tiene un banquete continuo.

Al afligido se cansa y le es difícil llevar sus cargas; ya sea que estas le vinieron por su propio pecado o por el de otro(s).

Al no ver el desenlace a corto plazo, también parece ser más difícil esperar al día siguiente para arrancar la siguiente hoja del calendario.

El de corazón contento no es que no tenga sus oportunas pruebas; pero, él sabe que vienen del Dios en quien confían y que son para bien.

Se puede tener un continuo banquete emocional y espiritual al estar contentos con lo que tiene, al ayudar a otros con sus cargas y sobre todo al vivir en el amor del Señor Jesucristo; ya que en el amor no hay temor.

Con similares situaciones uno puede estar afligido y otro en un banquete; la diferencia es su confianza en el Dios que gobierna nuestras vidas.

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AMIGO(A):

AQUÍ SOLO SE PUDO DECIR ALGO MUY BÁSICO SOBRE EL LIBRO DE LOS PROVERBIOS…

¡SIGUE BUSCANDO LA SABIDURÍA DE DIOS EN LA

BIBLIA…PARA TU PROPIO BENEFICIO ETERNO!

Y RECUERDA: SOLO CRISTO SALVA DEL INFIERNO…

¿QUÉ HARAS ENTONCES?

SI AÚN NO LO HAS HECHO…MUY BUENO TE SERÁ: ¡ARREPENTIRTE Y RECIBIR A JESUCRISTO COMO TU

ÚNICO Y SUFICIENTE SALVADOR!