vírgen morena -...

16
AÑO 1 e Pananá, 10 d e Febrero de 1904. Vírgen Morena A GUILLERMO ANDREVE . POR SIMON RIVAS SINTIO rumor como de muchas aguas y de muchos pueblos, acompañado en vibración remota de un bronco ruido como de alabardas, mosquetes y bombardas. Alzó el brazo mórbido oprimido suavemente por el aúreo brazalete, y poniendo su pequeñita mano por encima de sus brillantes y divinos ojos, miró lejos, muy lejos, más allá del valle apacible, más allá de la colina bermeja; pero no vió nada Y envuelto como en un suspiro, reinó el silencio en la montaña .. Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena, tendió su cuerpo so - bre una hamaca arrulladora y blanda, y allí soñó. Oh! tú, mi vírgen morena,—la dijo el Misterio con su voz sagrada—duerme así en tu juventud, duerme oh! sí mi joya, en tu dulce primavera! Tú, fresca rosa, levemente morena por la tibia sombra que arrojan tus palmares, tú mi parda paloma que en tu nido de perlas del golfo y de claveles de rubí, te aduermes con la sonrisa del candor, tú, mí virgen morena, al despertar, que no dilate tus pupilas el asombro ni la sorpresa con su daga aleve te hiera en tu indolencia y tu ilusión. ¿Conoces tú el salmo de las muertes negras y el epinicio de las dichas próximas? Nó, tu igno ras esas cosas que en ígneo torbellino se agitan en mi vientre! Pues bien ; oye! Del lado por donde surge Bóreas con su melena desgreñada y fiera, vendrá una muchedumbre de gente recia y brava . Desdeñarán tu gracia y tus encantos de vírgen tímida y sola, por la ardiente sed que sentirán de poseer tus tierras, tus perlas y tu oro . Notarás sus músculos cu- biertos por el hierro y bajo las altivas cimeras verás sus rostros de hombres bárbaros é inhumanos ; y se echarán 'sobre tí cual gavilán sobre el polluelo, y encadenarán tus manos, y luego mostrándote un signo sagrado de fé, te dirán con frenética arrogancia : CREE, y tu creerás y creerás para siempre. Después! oh mi virgen morena! conocerás lo que son las torturas, el abandono, el incendio y los combates. Después, oh! mi virgen morena! rotas, al cabo, tus cadenas crueles, nuevas gentes con nuevos dias, te vestirán de brocado y manto regio, te adularán con el laurel divino, conocerás la orgía de los placeres y con licor extraño te embriagarás en una noche que te nombrará Miseria y después en otra noche que te dirá : Tributaria. Pero tendrás hijos, prole bastante bien diestra en el pesar ; serán varones de fortaleza y esperan- za, y esa será tu salvación ; porque un día, quizás en horas de la tarde, hermosa tarde, en presencia de tu angustia y servidumbre, te alzarán en sus robustos brazos y mostrándote á la faz del vasto mundo con noble orgullo te proclamarán única, libre feliz y soberana . Y así será! ¿Dices que no me conoces tú, oh! mi virgen mo r ena? ¿qué no me conoces tú? Lo creo ; mas oye pues, mi /rase postrera, mi último acento que guarde tu casto oído y tu memoria fiel : Dios me llama EL PORVENIR y, yo á ti, te nombro PANAMA. Y á esta voz la virgen despertó medrosa ; sintió desconocida angustia, y levantando su divino ros tro miró lejos, muy lejos, más allá del valle apacible, más allá de la colina bermeja, pero no vió nada . . .. Y envuelto como en un suspiro reinó el silencio en la montaña .

Upload: nguyenduong

Post on 21-Oct-2018

217 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

AÑO 1 .°

e

Pananá, 10 d e Febrero de 1904.

Vírgen MorenaA GUILLERMO ANDREVE .POR SIMON RIVAS

SINTIO rumor como de muchas aguas y de muchos pueblos, acompañado en vibraciónremota de un bronco ruido como de alabardas, mosquetes y bombardas.

Alzó el brazo mórbido oprimido suavemente por el aúreo brazalete, y poniendo supequeñita mano por encima de sus brillantes y divinos ojos, miró lejos, muy lejos, más

allá del valle apacible, más allá de la colina bermeja; pero no vió nadaY envuelto como en un suspiro, reinó el silencio en la montaña ..Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena, tendió su cuerpo so -

bre una hamaca arrulladora y blanda, y allí soñó.

Oh! tú, mi vírgen morena,—la dijo el Misterio con su voz sagrada—duerme así en tu juventud,duerme oh! sí mi joya, en tu dulce primavera!

Tú, fresca rosa, levemente morena por la tibia sombra que arrojan tus palmares, tú mi pardapaloma que en tu nido de perlas del golfo y de claveles de rubí, te aduermes con la sonrisa del candor,tú, mí virgen morena, al despertar, que no dilate tus pupilas el asombro ni la sorpresa con su dagaaleve te hiera en tu indolencia y tu ilusión.

¿Conoces tú el salmo de las muertes negras y el epinicio de las dichas próximas? Nó, tu igno rasesas cosas que en ígneo torbellino se agitan en mi vientre!

Pues bien; oye! Del lado por donde surge Bóreas con su melena desgreñada y fiera, vendrá unamuchedumbre de gente recia y brava . Desdeñarán tu gracia y tus encantos de vírgen tímida y sola,por la ardiente sed que sentirán de poseer tus tierras, tus perlas y tu oro . Notarás sus músculos cu-biertos por el hierro y bajo las altivas cimeras verás sus rostros de hombres bárbaros é inhumanos ; y seecharán 'sobre tí cual gavilán sobre el polluelo, y encadenarán tus manos, y luego mostrándote un signosagrado de fé, te dirán con frenética arrogancia : CREE, y tu creerás y creerás para siempre.

Después! oh mi virgen morena! conocerás lo que son las torturas, el abandono, el incendio y loscombates.

Después, oh! mi virgen morena! rotas, al cabo, tus cadenas crueles, nuevas gentes con nuevosdias, te vestirán de brocado y manto regio, te adularán con el laurel divino, conocerás la orgía de losplaceres y con licor extraño te embriagarás en una noche que te nombrará Miseria y después en otranoche que te dirá : Tributaria.

Pero tendrás hijos, prole bastante bien diestra en el pesar; serán varones de fortaleza y esperan-za, y esa será tu salvación ; porque un día, quizás en horas de la tarde, hermosa tarde, en presencia detu angustia y servidumbre, te alzarán en sus robustos brazos y mostrándote á la faz del vasto mundocon noble orgullo te proclamarán única, libre feliz y soberana . Y así será!

¿Dices que no me conoces tú, oh! mi virgen morena? ¿qué no me conoces tú? Lo creo ; mas oyepues, mi /rase postrera, mi último acento que guarde tu casto oído y tu memoria fiel : Dios me llamaEL PORVENIR y, yo á ti, te nombro PANAMA.

Y á esta voz la virgen despertó medrosa ; sintió desconocida angustia, y levantando su divino rostro miró lejos, muy lejos, más allá del valle apacible, más allá de la colina bermeja, pero no vió nada . . ..

Y envuelto como en un suspiro reinó el silencio en la montaña .

Page 2: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO.

El Heraldo del IstmoDirector•Propietario : GUILLERMO ANDREVE.

PANAMA, 10 DE FEBRERO DE. 1904.

Darío HerreraTODO un juicio crítico sobre un

escritor y poeta se puede hacer endos palabras, y de DARÍOHERRERA

lo formuló José Martí diciendo que es delos que sienten la poesía natural y sonricos de color.

Darío Herrera es panameño, y tiene34 años. Hijo de tierra tan fecunda entalentos, y en la edad de las palpitacionesapresuradas, de los revoloteos de la fanta-sía, de la ambición y del ensueño, este jo-ven artífice en la prosa é inspirado cantoren la lira, se nos presenta como digno hijode su noble patria y digno de la predilec-ción con que le aman las . Musas.

Como casi todos los jóvenes de estostiempos, Darío Herrera se encariñó alprincipio con la literatura española, cuyosescritores y poetas le encantaron, mien-tras su trato fué con los clásicos de los si-glos de oro de aquellas letras ; más luegoque llegó á los de la decadencia por el in-flujo del francesismo, prefirió empaparseen la fuente en que los españoles tomabanun postizo tinte ; es decir, abandonó á Es-paña por Francia, y allí, en la linfa azulde esa adorable poesía de los sentidos, sedió un baño voluptuoso.

Fué entonces la época auroral de , lanueva escuela que su cuasi tocayo, eseotro Darío, que cualquiera diría que élmismo, sintiéndose oriental, se bautizan

con nombre judío y apellido persa, propa-gaba en Centro América.

Pero no siguió Darío Herrera la es-cuela con todo el fanatismo que las sectasexigen á los afiliados. Para él la 'mellenideal del arte, no está en un solo molde, ninuevo ni viejo, sino que está en todas par-tes en que vibre la luz, salte el color, ótreme la nota que mueve al corazón . Aesos que así piensan se les llama eclécti-cos; y el eclecticismo tiene tan estrecho pa-rentesco con la libertad, es tan de la e-sencia de la creación, de tal suerte corres-ponde al estado incierto de todas las cosasque el hombre imagina, asienta y cree,que en él se refugia al fin todo el querepugna la argolla de la expresión secta-ria, todo el que observando un poco el mo-vimiento filosófico y artístico de las eda-des, advierte que el vicio y la razón nohan podido fundar una estética abso-luta ni un criterio inmutable.

Modernista y ecléctico caben en unasola concepción literaria, porque el mo-dernismo es múltiple en sus formas y ten-dencias. Modernista es Darío Herrera,pero cincela sus versos como un parnasia-no, les dá gracia y vida, como un natura-lista, los engendra' en amores aristocráti-cos, con su Musa reina, y nacen coronadoscomo los príncipes.

Su prosa es pura, suelta, flexible;cuando lo quiere, brillante ; cuando lo ne-cesita, sencilla ; pero siempre cariñosa aloído .

N. BOLET PERAZA .

Page 3: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

3

EL HERALDO DEL ISTMO'

Un Beso__T19' OS pasajeros abandonaron el comedor, y quedamos en la sala del Chile, los cuatro amigos

1de la misma mesa, siguiendo, entre las aspiraciones del humo de los cigarros y los sorbos del

~~~1~ café, nuestra charla, mecida: cadenciosamente por los tumbos suaves del barco . En el salón.a contiguo, Alicia, la linda limeña—cuya vivacidad adorable, en la gracia ingenua de sus diezy ocho años, alegraba la monotonía del viaje—tocaba en el piano un liad de Mendelssohn.

Estábamos á la altura de Arcca. Al través de las ventanas aparecía, distante, el puerto cautivo.Su caserío se apiñaba sobre la cordillera costeña, cuya absoluta aridez, desde el comienzo del litoralperuano, se rompía ahora con frescos cuadros de verdura . Del otro lado, la vista dilatábase porla planicie marina, de trepidaciones lentas y largas, sobre la cual un sol gozoso, en el cenit, dardeaba suluz rubia . En los flancos del vapor, el manso oleaje de la rada tenía sonoridades dulces.

Y como se hablara de las mujeres de Lima, Antonio, el joven santiaguino, que venía de concluiren un colegio de New-York sus estudios de ingeniero electricista, exclamó:

—Sí,convengo en que son encantadoras ; pero pierden mucho cuando se las compara con las norte-americanas . . . .A pesar de mi profesión no soy, en lo general, partidario de ese buen país yankee . Meabruman —á mí, latino por esencia—sus maquinarias, sus puentes, sus edificios, sus diarios, sus i-éclames,todas sus creaciones enormes y desproporcionadas : ellas evidencian un dón especial para lo inarmónico,para lo inartístico . Pe-

ras, con su educación yro, en cambio, poseen

sus costumbres, me pro-algo de quo guarda mi

IIi ducen el efecto las "se-espíritu un recuerdo

mi -vírgenes." Dar losborrable .

Ah, sus mu-

labios al primer cono .jaras! . . .He besado más

sido con la impúdica fa-bocas virginales que ra-

cilidad de una cortesanayos luminosos está de-

vulgar! Eso será agra-rramando el sol en el

dable para los galantea-mar, En este ejercicio

dores de oficio ; pero esadquirí conocimientos

desilusionador para elprofundos ; y, como des

amante sincero. Eso esE, seintes en la del per-

'• '

- r

la prostitución, la vul-fume, soy un maestro

garrzación del beso, con-en la complicada cien-

vertido así en un actocía del beso. En ella re-

tan estúpidamente ma-sida el placer perfecto.

quina] como el de darsepor lo mismo que no se

• w ,

1 la mano, puesto quellega jamás á lo sacie-

pierde todo el atractivodan del goce total, con

I de lo difícil y prohibido ..su corolario de hastío .

Tiene razón, donY no creo nada tnn de-

1

Carlos, -dijo Hernán -lieiosocomo esos , firts—

dez, el emigrado vena-inofensivas farsas amo-

zola no .—Además, agro-r asas en que ojrcuths,

go palideciendo, talespanista hábil, músicas

besos serían profanado-exquisitas sobre el te-

ies para quienes sabenalado vibrante de una

que los hay mutiles.boes propicia, roja y

Y como si hablaraarena ula cual cereza

consigo mismo, con vozmadurar!

sorda, y trémula, en una—No estauros de

evocación dolorosa, con-acuerdo, Antonio—dijo

tinuó diciendo.dsn Cn rlos, diplomático

-Yo amaba á a-ecuatoriano .—Las mu-

quena nida con todo elchachas norteamerica- entusiasmo y toda la generosidad de mis veinte y cinco años . La amaba por su belleza aristocrática, por su inocencia absoluta,por su temperamento nervioso, hondamente sugestivo, que la sumergía á menudo en tristezas incons-cientes y avasalladoras.

Sobre su existencia en flor, agitaba sus alas tenebrosas una enfermedad trágica : un aneurismacardíaco . Tardo ó temprano, no lo ignoraba, la fulminaria ; pero ésto, en lugar do aminorar mi cariño,lo acrecentaba, y hacíame amarla con más ternura, pues á cada instante, me asaltaba el temor de que,por cualquier conmoción ruda estallara el terrible mal . . . .

Una noche, noche del trópico, esplendorosamente serena, suavemente tibia, fragante con todos losperfumes traídos por el viento desde las grandes selvas quedamos solos los dos en el balcón de su casa.La anciana madre leía en el salón cercano . En lo alto flotaba la luna, solitaria y radiante -en el inmen-so azul . Lejos, el océano tenía . en sus aguas un tinte de plata . Y en torno nuestro, en las casas veci-nas, y abajo, en la calle, dormía la vida.

Mi novia, Elisa, vestía de blanco. Sus cabellos negros, recogidos sobre la cabeza, temblaban al

Page 4: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

'"L HERALDO DEL ISTMO .

4

soplo fugitivo de la brisa, circuyéndole la palidez de la frente como un raro nimbo de som -bra. Y al resplandor cándido de la luna, bajo el casco azabachado de sus cabellos, en su vestido blanco,ella, tan linda, estaba maravillosa ; parecíame colocada allí para una apoteosis.

Nos encontrábamos muy juntos ; nuestros hombros se rozaban, nuestras manos se oprimían ynuestras miradas eruzábanse, cargadas de reflejos húmedos Fué aquél un momento de embriaguez,de locura, de delirio pasional, en que los labios callaban y las pupilas se decían cosas secretas y divinas.Y repentinamente, sin que ella, fascinada, hiciera resistencia alguna, la atraje, la aprisioné entre misbrazos, y nuestras bocas se confundieron en un beso, el primero, largo, sordo, quemante, supremo I . . ..

;Supremo, sí, pero fatal ! Porque de pronto la sentí estremecerse violentamente ; con un movi-miento brusco separó del mío su rostro, lívido, desencajado, y sus ojos, casi fuera de las órbitas, expre-saron no sé qué atroz martirio, qué infinita angustia . Luego, un levo soplo surgió de su boca, serená-ronse sus facciones . . . .y gravitó entre mis brazos inerte, pálida, espantosamente rígida cano una esta-tua de mármol! . . ..

—Esperan á los serrares para una partida de pocleer—dijo un sirviente, asomando su cara afeitadaen la ventana.

Los cuatro amigos nos levantamos pensativos : Hernández conmovido aun por su narración,los demás perdidos en brumas de nostalgias . Al salir, una onda más fuerte de música, percutió alegreen nuestro oídos . Alicia atacaba la, marcha nupcial de Lohengrin, y Antonio, en quien no perdurabaninguna impresión, me dijo quedo, confidencialmente:

—Es una suerte que ella no haya escuchado á Hernández, porque . . . .imagínese que para estanoche, despues do la comida, en nuestro paseo por la cubierta, me tiene prometido un beso' . . ..

ario errera.

FelinaPor León A . Soto

Tiene la . pesadez de la pantera

cuando se despereza negligente,signo fatal de que impasible espera

caer sobre su presa de repente.

Su cabeza-que encuadra la moldura.de sus cabellos finos y bermejos—

en sus arranques de altivez fulgura.

de las pieles hirsutas con reflejos.

Sus ojos do un color indefinido—fusión de la esmeralda y el topacio -

semejan los de un gato adormecido

con la pupila fija en el espacio.

Al respirar, su seno se dilata,como el de una leona en el desierto,

cuando de hallar su compañero trata

que acaso, en su cuidado, juzga muerto.

Anda, y su marcha lenta y magestuosadeja de admiración la huella leve,

como en el Polo triste deja la osala huella de su paso entre la nieve .

Para Roque 1. Franco

Corno un puñal de fuego, amenazante

muestra la tigre de su lengua el filo,y ella enseña la suya á cada instante

de sus dientes preciosos entre ol hilo.

Y si los bordes de sus labios toca,á su tacto tornándola encendida,

su boca finge la felina bocaque relame la sangre de una herida.

Tórnase á veces al amor sumisay al halago responde con su halago,pero ocultar no puede en su sonrisa

el marfil que en la loba anuncia estrago.

Acusan resistencias ignoradassus manos transparentes y sedosas,

corno bajo las pieles afelpadasse adivinan la fuerzas musculosas.

Y sus uñas—esa uña marfilina

que hace gemir las cuerdas de su harpa,denuncia en su belleza peregrina

la caricia terrible de la zarpa.

Page 5: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO

CÑROLINf MENDEZ

Yalta mi fdoolfd' n de ala&.m5ldo l neón

u et&ellent flan a l 1allenzada,

` tJ f11l. estala al olnuel a a la l lamado

laica je rola eleva jOimotaa.

ás dulce nuhall1 ezllfendojoa t

:lifaj tul Cuan Llr. lu2 intuudcul<ulsd~

'.11 ml arca,.. »tima . . enamorada

In licite

un ideal maja af.anoáa.

Tuamlo hdd &L,ID at n derteada nLMdu

4e tuno en ell. +na1!.ú del lame,

hy la agoiteo óono'nti fm.tjnu1Lal,

qre&anal em áaá lde'unoáoá ojeó,

// ¡¡~~I l I1lienb1st en aná nleLLIUM fiel áankojoá,

fl divino Lafgde de la I,eg'tia J

EL CANAL DE PANAMA1 ESTUDIO HISTORIQO 1

`h NTIISIASMADA Europa con la relaciónde los famosos viales del veneciano MarcoPolo al través del continente asiático, "un

agrande anhelo invadió á los hombres es-tudiosos y á los hombres aventureros para llegarallá por otras vías . Colón, buscando ese paso, des-cubre la América ; con igual idea Vasco de Gamadobla el cabo de Buena Esperanza ; con ese móvilhalla Magallanes las extremidades de la Patago-nia ; movido por ese impulso atraviesa Balboa elIstmo de Panamá. y descubre el mar Pacífico ."

Era una idea aceptada en el siglo XV que enAmérica debía existir el supuesto estrecho ; ideareforzada luego cuando, al hallarse el grande Océano, vióse el poco espacio de tierra que media entreNombre de Dios y Panamá.

El historiador Gómara nos cuenta que muchoshombres prácticos é instruidos—navegantes y con-quistadores—hablaban . de un, buen paso, aunquecostoso ; el cual no solamente sería de mucho pro-vecho, empero honroso para el hacedor si se hiciese.

Ya en 1520—dice el señor Bonaparte Wyse ensu magistral libro el Canal de Panamá —Saavedrahablaba de cortar el Istmo del Darién ; y en 1528 elnavegante portugués Antonio Galvao manifestaba

que se podía abrir un Canal por los Istmos de Méxi-co, de Nicaragua, de Panamá y del Darién meri-dional y proponía audazmente la ejecución á Car-los V ; asa lo atestigua un documento sometido alCongreso portugués por Pereira de Paiba ."

Acogiendo ' estas ideas Carlos V ordenó á losgobernantes de Castilla de Oro, Nicaragua y Méxi-co que observasen si en esas tierras había algún es-.trecho que pusiese en comunicación los dos mares;pues razones políticas exigían que pasaran por éllas naves castellanas, á fin de evitar los frecuenteslitigios con Portugal sobre la Espe moría . Sólo Cor-tés, deseoso de satisfacer los anhelos de su sobera-no, demostró que no había ningún estrecho sino unIstmo que une la América meridional con la sep-tentrional.

Fué durante la administración del licenciadoAntonio de la Gama, Gobernador de Panamá,cuan-do se hicieron los primeros reconocimientos cien-tíficos sobre un Canal al través del Istmo ; el planpropuesto era unir las aguas de los dos océanosaprovechando las corrientes del Chagres y Río .grande.

Por cédula fechada el 20 de Febrero de 1534 sele comunica al Adelantado Pascual de Andagoya,

Page 6: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO .

6

Regidor de Panamá, que haga un reconocimientodel terreno y presente el presupuesto de lo que, ásu juicio, crea que cueste el Canal . El menciona-do Andagoya dió un informe desfavorable porcompleto ; pues en el despacho dirigido al Empera-dor manifiesta su eonviocrón de que no existía . entoda Europa un monarca suficientemente rico quetuviese los inmensos recursos pecunarios que de-mandaba tan colosal empresa . A esto replicó elya citado Gómara:

"Dadrne . quien lo quiera hacer, que hacer sepuedo ; y no falte ánimo, que no faltará dinero, ylas Indias, donde se ha de hacer, lo dan . Para lacontratación de la Especería, para la riqueza delas Indias y para un rey de Castilla, poco es loposible . "

Los ingenieros flamencos que envió Felipe IIen prosecución del pensamiento de su padre fueronsin duda los primeros que después de prolijo exa-men juzgaron practicable la apertura do un Canalal través del Istmo del Darién ; pero el Consejo deIndias creyó ver en aquella vía abierta al comer-cio universal un peligro para la sobe r anía ó rique-za de España, y consiguió de aquel monarca queechase á un lado el grandioso proyecto,

Don Antonio de Alcedo, en su DiccionarioGeográfico de las indias Occidentales ó América,refiere que Felipe II prohibió bajo pena de muertevolver á tratar sobre corte del istmo americano;pero el señor Bonaparte Wyse, que hizo pacientesestudios en los archivos españoles, dice que no haencontrado tal cédula real sino una decisión de Fe-lipe V en la cual amenazaba con la pena capital átodos los que hiciesen investigaciones sobre esaregión. Esta providencia, agrega el doctor Posa-da, fué dada a petición del virey de Santa lié, donAntonio de la Pedrosa y Guerrero, quien la solici-tó á fin de no dejar sin defensa la Provincia deAntioquia y para impedir se defraudase la aduanade Cartagena.

En 1698 se establecieron en la costa norte del(Golfo del Darién unos gnu emigrados escoceses bajola dirección del clérigo O nillermo Patterson, perso-naje célebre en los anales británicos por haber sidouno de los fundador es del 13anco de Inglaterra.Patterson recorrió el territorio istmeño con mirasde descubrir el paso más fácil de una comunica-ción intermarina ; y fruto de este trabajo fué lamemoria intitulada Los cuatro pasos de Patterson,en la cual, después de dar cuenta de sus explora-ciones, declara que el paso llamado Paya ó do Ura--bá al sur del Darién es el más á, propósito para esta-blecer un canal interoceánico . La empresa quedófrustrada porque las balas españolas, las flechasenherboladas de los indios y las enfermedadesdiezmaron á los colonos.

"Aquel hombre extraordinario—dice un escri-tor cubano—nacido en 1666 y muerto en 1719, queenamorado de su colonia . soñaba en hacer de ellauno de los baluartes más firmes do la dominaciónbritánica, no sólo en América sino en el mundo en-tero, que para estimular su acrecentamiento ha-bía establecido como regla esencial de su Gobier-no la absoluta libertad del comercio y de la con-ciencia, y que no se decidió á abandonarla defini-

tivamente, rindiéndose de mal grado á los esfuer-zos del Rey de España y de las Compañías inglesay holandesa de la India Oriental, sino cuando yacasi no quedaba en ella ningún habitante, agotó suelocuencia procurando persuadir á Guillermo m,que el Gobierno británico debía adquirir estableposesión del Istmo americano, construir el Canalinterocéánico y asegurar preponderancia indispu-table en uno y otro lado de sus o r illas, en beneficiodel comercio y de la. civilización ."

Si la Gran Bretaña por sí sola ó en combina-ción con otras potencias maritmmas—decía Patter-son—no trabaja en favor del Darién, el día no es-tá muy distante en que América, cansada de laslentitudes del tráfico se apoderará . en primer l-agar, de aquel Istmo, y en seguida de las islasSandwich.

Años después presentó también el historiadorBryan Edwars al Gobierno británico "una memo-ria secreta sobre la practicabilidad de lascomuni-caciones intermarinas por el Istmo de Panamá" yen su Historia de las Indias Occidentales mmnifies-ta lo siguiente:

"La Bahía más hermosa de t do el continente,desde Honduras hasta Portobelo, es indudable-mente la de Bocas del Toro, pues no sólo es capazde abrigar toda la marina de la Gran Bretaña, sinoque contiene machas ensenadas excelentes, conbuenos ancladeros, protegidos del viento en todasdirecciones. Esta bahía domina un Distrito decien millas de extensión, y se comunica con unalaguna llamada la Laguna de Chiriquí, en la cualdesaguan muchos ríos, conocidos sól amente por losindios salvajes, que aseguran haber subido porellos hasta toca" con los establecimientos españo-les del interior. Estos mismos indios agregan quesobre la costa del mar del Sur, y pertectamenteenfrente de la Laguna de Chiriquí, hay otra, que secomunica con aquella por medio de los menciona-dos ríos . Lo cierto es que desde un cerrito, quese halla en las márgenes interiores de la Laguna deChiriquí, se descubre la espaciosa, perspectiva deambos mares . (Citado por Borda en su obra Limi-tes de Colombia con Costa Rica .)

Durante los albores de la independencia peu-sóse otra vez en el Canal : lo prueba la correspon-dencia del General Miranda, pues este prócer "uun memorial quo le remitió desde París al Minis-tro inglés Pitt "muestra quo Inglaterra puede em-prender esa obra colosal si ayuda á las coloniasespañolas á emanciparse de la metrópoli ."

En el año de 1824 hizo petición para abrir un ca.nal interoceánico el General Devereux, quien dosaños antes había, estado representando á Colom-bia corno Enviado Extraordinario y Ministro Ple-nipotenciario ante las Cortes de Rusia, Dinamar-ca, Suecia y Noruega ; pero las Cámaras colom-bianas archivaron la petición del ilustre irlandés,quizás por estar interesados varios colombianosde posición social y política, en .hacer el canal . Pos-teriormente el genio do Bolívar acarició también laidea de una vía interocéaniea por Aanamá . San-tander lo decía en carta de 6 de Mayo de 1825 : "Meparece que durante la Asamblea del Istmo, puede

Page 7: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO

y debe usted estar en aquel Departamento por víade paseo ó de examinar la cuestión de abrir e]Canal tan apetecido ."

Y en otra carta de Septiembre 22 del mismoaño lo escribe : "He resuelto poner á usted estacarta, en alcance del correo ordinario quo partióayer, para imponer á usted de un proyecto parti-cular y grande que tenemos algunos colombianos.Es el de abrir la comunicación de los dos mares,ó uniendo los ríos que forman el antiguo proyecto,ó por camino de hierro en el Istmo ; la obra se hacalculado en diez millones de pesos, y contamoscon algunos capitalistas extranjeros : don Jeróni-mo Torres, Domingo Caicedo, Mosquera y Baraltse ondrán al frente de la Compañía, y muchosamigos de usted tomarán parto. Nuestro interésestriba en quo sea una asociación colombiana la quetome á su cargo el negocio y no una sociedad ex-

. tranjera .. ara conseguir el privilegio hay que ocu-rrir al Congreso, y se cuenta con que el cuerpo le-gislativo favorecerá la empresa de los hijos del país,capitalistas conocidos . Corno usted ha tomadotanto interés en la comunicación de los dos ma-res, yo he pensado que esta ocasión pudiera serfavorable á las vastas miras de usted en el par-ticular." Todo quedó en deseos ; pero á los tresaños comisionó Bolívar al ingeniero inglés Lloydy al ingeniero sueco Falmark para quo explora-sen el Istmo y propusiesen la mejor vía por don-de pudiera hacerse un camino carretero ó un ca-nal fluvial . Después de algunos reconocimientoshechos en 1828-29 (menos de dos meses del pri-mero y cerca do tres meses del segundo) dieronsu informe al Gobierno : según estos ingenieros,de la confluencia de los ríos Trinidad y Chagrespodría partir un ferrocarril hasta Panamá ó hastala Chorre ra y del mismo Trinidad un canlyd parabuques menores hasta uno de ,los ríos del Pacifico.ebrio Grande ó el río Caimito . Terminada su co-misión partió Lloyd para Inglaterra ; en la Socie-dad Real de Londres presentó informes y planosde sus trabajos, dictó una conferencia y á pesarde haber demostrado la practicabilidad del canalno tuvo apoyo ni de los banque ros ni del Gobier-no do su patria.

En virtud de una ley expedida por el Congre-so colombiano de 1 .835 obtuvo el Barón de Thierryprivilegio exclusivo para abrir un canal interoceánico por nuestra patria : el concesionario se com-prometía, entre otras cosas, á terminarlo en tresaños, pagarle á Colombia el uno por ciento de lasentradas y cedérselo después á los cincuenta añosde usufructuado . Aunque hubo muchos banque-tes, regulares discursos, amén de varios viajes delconcesionario á Europa, la triste realidad echó áun lado el proyecto del noble francés y las aspira-ciones del mundo quedaron frustradas por algúntiempo . Leyendo el contrato celebrado con Thier-ry se obse rva una cosa curiosa. : que todos los ga-jes eran para Colombia y nada para . Panamá ; esdecir, la gallina ponía los huevos de oro y el due-ño no le daba siquiera maíz.

ENIIIQIIE J . ARCE,

(Confirmara.)

Théroigne de Méricourt(CONCLUSIÓN),

El último acto nos traslada-á años posteriores.

Sieyes había desaparecido durante el Terror.Subterráneamente se había ocupado de preparar eldirectorio para destruir la demagogia . Reaparececon el Consejo de los Quinientos, y, como esa formade Gobierno no bastara para restablecer la Revo-lución en su verdadero sentido, entra en el complotdel "18 Brumario" y entrega la Francia al geniopoderoso de Bonaparte.

El Consulado fué el prólogo inmediato del Im-perio. Sieyes, uno do los padres de la democraciay de la República, el famoso destructor de los pri-vilegios, acepta el Imperio, se hace su primer Mi-nistre, y continúa bajo esa forma despótica, persi-guiendo sus ideales igualitarios . Pertenece a osaraza de hombres convencidos que, sinembargo sa-ben prescindir de sus doctrinas . y aún contrariar-las, cuando las circunstancias así lo exigen . Adap-tan formas y colores variados, pero en el fondo nohacen sino continuar la misma idea . No son losapóstoles que mueren ostensiblemente por sostenerlo que piensan . Son los hombres voluntarios yagudos, los diplomáticos incansables y prácticos,quo, á la larga, adaptan y hacen triunfar sus dog-matismos. Hervieu supo trazar admirablementeesa figura fina, mañosa, escurridiza, con faccionesambiguas, con sutilezas infinitas, semejantes á lasdo Luis XI, Enrique IV, Talleyrand y Macternich.'Y el actor Desjardins, del Teatro Sarah Bernhardt,supo hacer un Sieyes inolvidable . con toda, su ma-licia, con toda su elegancia ondeante de antiguoabate.

Ministro del Imperio, ao^.ompañando á unas se-ñoras que visitaban un día el manicomio de 1'a ris,Sieyes sabe que allí está encerrada la célebre Thé-roigne de Méricourt . Su mal consiste en una lo-cura delirante, inofensiva . El Ministro quiere ver

-la y quedarse con olla, un moinento á solas. Nopuede resistir la curiosidad de volver á ver la quefué su amiga, todo poderosa, quince años antes, enlos días candentes de la Asamblea revolucionaria:Va á reconocerlo al través de la triste neblina, d iesu enagonación . ¿Qué va á decirle? ..

Théroigne aparece, blanca, transparente, (aunóuna visión funeraria. Y, apartando -el cabello desu frente enigmática, dice:

"Ah! . . . . eres tú, Sieyes . . . ."

Se sienta á su lado, en actitud cariñosa y con-fidencial . El Ministro se estremece al contacto deeso cuerpo en parte poseído por el hielo de la muel ate. La pobre enagenada comienza una evocaciónsonambulesca y prodigiosa. Los bellos días de laRevolución le aparoeen, esas horas poéticas en queel espíritu do la democracia inspiraba á todosidea geniales, redentoras y felices . Se lo aparecon los grandes hombros, los amigos valientes,quo emprendieron la noble cruzada de la libertad.

El proscenio se llena con los fantasmas do Dan-ton, Camile Desmoul ins, Pétion, Fabre d'Eglanti no

Page 8: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO.

Barbaroux, André Chenier, Erault de Sochelles, etc.Théroigne de Méricourt se siente feliz en mediode esos héroes, de esos poetas y de esos santos ami-gos del pueblo, en su departamento de la ralleTournon . . . Más, de pronto, su delirio se obscurece

se exalta . Pronuncia el nombre de Franciscohnleau, siente la impresión de la sangre bañándoleel rostro, el trágico recuerdo del Terror, el fracasode la Revolución soñada, todas esas escenas quecristalizan su cerebro, desencadenan un temporalen sus nervios de loca . . . .9e apercibe de quo todossus amigos,—los fantasmas que está viendo, — tie-nen en el cuello un círculo rojo . Es la huella dela guillotina . Solo Sieyes no tiene esa huella quefué, durante el Terror, consagración de pureza yde bondad. Théroigne espantada le pregunta:

"¿Cómo? ¿Tú no tienes la marca que el Terrorpuso á los verdaderos revolucionarios?- . . .¿Qué hashacho entonces . . '

Y sieyes le contesta su palabra histórica:"¡Viví!"Pero Théroigne se enfurece y se exalta contra

ese filósofo de la Revolución, que no ha muerto.¿Porqué no ha muerto? Sin duda porque tuvomiedo, porque pactó con la demagogia . Ella noconcibe esas almas m tizadas, como la de Sieyes.Ella sólo admira las grandes almas provocadorasde Danton, y de Camilo Desnioulins . Llena deimproperios al sobreviviente del Terror, no com-prende que es el único que ha salvado la Revolu-ción, para ella no hay más gloria que la de lamuerto, su locura se cambia en anatema, El telóncae con esta frase, á la cual el genio trágico de Sa-rah Bernard supo dar una vibración terrible:

"Danton, d'Eglantine, Desnoulins, Barba-roux ! . . . .! Aqui está Sieyes l . . .! No lo dejeis pene-trar á la Asamblea 1 . . . El no merece sentarse ahí,entre vosotros, porque no supo morir!

En este año de 1003 todos los géneros han ob-tenido un tiiunfo, "Les deux axiles" fué el triun-fo de la comedia, "Resurrection " el triunfo de ldrama sosialista, y "Théroigne de Méricourt" elgran triunfo del drama histórico.

El omor del arre rejuveneció Sarah Bernhardt,hasta el punto de hacerla hacer una zreación quehará época. Admirablemente supo rendir esa ar,tista estupenda, los éxtasis del ensueño y los fnro-res de la, pasión, las dos bases del carácter deThéroigne de Méricourt . Todos los actores delTeatro Sarah Bernhardt estuvieron á la altura dela oba . La mise en scéne,—muy difícil en unapieza de tanta extensión y de tanto movimiento,—contribuyó al éxito con sus magnificos efectos derealidad.

La obra de Pan]. Hervieu equivale á un granesfuerzo literario . Haciendo síntesis,— esas sínte-sis sin las cuales no hay arfe posible camo unpintor consumado nos presenta los grandes cua -dros de la Revolución, esos días conmovedores,alegres ó siniestros, de renovación universal, úni-cos en la historia. Y nos muestra la odisea de unamujer célebre, grande p desgraciada.

Estos méritos bastarían para consgrar el tra-bajo de Hervieu . Pero hay en su obra otro méri-to de mayor importancia .

Después de un siglo de polémicas y contradic;ciones, sólo ahora viene á definirse sólidamente elcarácter de la Revolución de 1680. Ls Revoluciónno fue otra cosa que la acciún material y prácticade la filosofía del siglo XVIII. La Revoluciónfuá, y ha seguido siendo hasta ahora . la aspira-ción más inteligente y más sana que haya tenidola humanidad desde los tiempos bíblicos . El Te-rror se produjo en París cuando se fueron á lafrontera los hombres de mayor prestigio . comoCarnet, Hecho, el Duque de Orleans, y otros, losque eran capaces do fulminar á los demagogos y

e contener las excitaciones inherentes á todo mo-vimiento de ese tamaño . El Terror hizo mal á laRevolución, le mató á sus mejores hombres, perono la manchó . A pesar de los esfuerzos de la mo-narquía y del clero, ningún espíritu honrado pue-de confundir á la revolución con el Terror . Eneste sentido la obra de Hervieu es la última y au-torizada palabra . Théroigne de Méricourt, la poe-tiza, y Sieyes, el creador de constituciones ideales,son los símbolos en que Hervieu nos presenta elalma de ese movimiento grandioso y permanente.Théroigne es la Revolución que se devora el Te-rror ; Sieyes es la Revolución que se ealva parapara continuos su obra benéfica.

El Gobierno franeé decretó una serie de repre-sentaciones de Théroigne de Méricourt, gratuitaspara los estudiantes de París . "No es posible--di-jo el Ministro de Instrucción Pública—hacerles verun reflejo más exacto do la Revolución ." No creoque pueda haber para un literato patriota y proboun honor más alto, una mejor recompensa . Erael premio que más enorgullecía á los escritores deGrecia y de la antigua Roma.

OIT

Fue en la alta noche : lenta vagabaspor los senderos de tu jardín,y á cada ruido refugio hallabasbajo la alfombra de albo jazmín.

Tus blancas manos como dos liriosasían tu falda de seda azul,porque hasta el roce de tu vestidotemblar te hacía con inquietud.

Llegué á tu lado ; tu cabelleracomo un torrente dorado víque acariciaba las curvas griegasde tu gallardo talle gentil.

Besé tu boca tibia y bermeja;contra mi pecho te dí calor,y entre las flores tu chal de sedafue grato nido de nuestro amor.

Los jardineros absortos dicenque en aquel sitio vieron despuésel alabastro de los jazminesenrojecido por el clavel.

POR EDUARDO TALERO

Page 9: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL . HERALDO DEL ISTMO

DORE ZfCI-IRISSON

El pálido mavfl, pulido y bello

no tiene de su frente la blancura,ni la rosa de Lima su hermosura,

ni el regio cisne su nervioso cuello.

Ni el rojo sol el vívido destelloque en su mirada lánguida fulgura,

cuando despliega, enamorada y pura,

la cascada de luz de su cabello.

No tiene la paloma su inocencia;

ni el amable jazmín la tibia esencia

conque perfuma su encendida boca.

No tiene su contorno el nuErmal griego,ni amante queja de su voz el ruego ..;ni su adorable impavidez la roca! . ..

Impresiones Artísticas de Flandesotoño último comenzaba . Llegados los

ríos, hice como las golondrinas : pleguélas alas y me recogí en el nido.

Trabajé al amor de la lumbre de lamañana á la tarde, hasta que regresó la primave-ra atemperando el ambiente, cargando los árbolesde savia nueva y de verdura, vistiendo de mieseslas campiñas, y añadiendo una sonrisa á cadasemblante- Ansias crueles de libertad y expan-sión renacieron en mi pecho ; tras largos meses dereclusión, agui,joneábame por fin la nostalgia (lelos grandes espacios, sentí las alas crecidas y tor-né á volar.

Cerca de casa existe un lindo rincón de laciudad que incita como ninguno otro á la medítación y al estudio. El ocasiona un bienestar indecible al alma soñadora quo gusta de vivir enmedio de una naturaleza hermosa y apacible. Esel jardín botánico, rico de tintes vívidos, con lasgrandes amapolas que so incendian de rojo y lasfranjas tupidas de verde musgo que caen sobrelos ojos fatigados y los calman como un colirio.

Sobre ese risueño abigarramiento de coloresnmtmales, las estatuas de bronce se levantan des-tacando su negro contorno sobre el azul infinito .

Esos bronces me decían interiormente mil cosa s.sugestivas y misteriosas ; ellos ejercían sobre m respíritu una fascinación cada vez mayor . No séde cierto lo que fuera, pero yo sentía algo comola sensación de lo inmutable y de lo eterno, can-tando en los aires el himno truinfal de la esta-tuaria.

Envidio las clásicas testas que lanzan en ple-no aire los reflejos austeros del verde mate ; envidiolos bustos de bronce que enfrían sin helar los cier-zos invernales . y calientan sin fundir los soles delestío ; los envidio porque se inc figuran espíritusdormidos en el sueño del Nirvana, y envidio losensueños serenos que deben de arrullar sus almasfrías y los ámbitos infinitos que parecen abrirse álas miradas do sus ojos sin pupilas

Bajo un castaño rojo, lejos de los rumores dela mudad, oprimía afanoso el lápiz entre los dedosy sentía . resonar dentro del cerebro las notas ma-gestuosas de un coral protestante, evocando sinadvertirlo, el espíritu excelso de Sebastián Bach,el mago de la polifonía, cuya manera sentía infil-trarse en mi propia sangre ,d cabo de un estudiopacientey entusiasta de su obra, que degeneraba.ya en asimilación involuntaria de sds recursos yartificios .

Page 10: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO,

10

Qué fue de mí despuést Ah sil des-rués fueron las pruebas de los concursos anuales y'la ansiosa espectativa de un fallo que tardó unmes en proclamarse : después fueron los viajes átravés del país, rnis aventuras de turista, la es-tación á orillas del mar en una costa normanda,aquel conjunto riquísimo y vario de impresionesintensas que nunca morirán en mi recuerdo.

He destinado en gran parte esas vacaciones al,conocimiento y estudio de la obra artística de laraza belga en sus diferentes manifestaciones. Hevisitado museos, bibliotecas, catedrales, asistido á.teatros y conciertos, entrado á cabarets históricos, y por dondequiera me ha sosprendido la admirable fidelidad con que el arte nacional reflejalas virtudes y los vicios, las idiosincracias y has- .ta las particularidades étnicas del pueblo,

i

Dos razas distintas, iguales en número y fuerza., forman la población - de los antiguos Países-',Bajos meridionales, y crean dos influencias dite-rentes que impresionan de diverso modo todos losórdenes de la actividad nacional : la raza walonay la raza flamenca, de extracción latina y genanánica respectivamente.

Consecuente con sus afinidades de origen ysus relaciones de parentesco espiritual, el arte dela Walonia ha tendido en todas sus realizaciones'históricas á resolverse en el arte francés . Seme- j;junto á los rios caudalosos que arrastran sus aguasal mar y las confunden con él, la corriente de ar-te originaria de la Walonia ha vertido siempresus caudales en el alma madre del arte francés . Las .personificaciones capitales del arte valón : Gossec,Grétry, César Francic, compelidas por una fuerzade atracción irresistible, emigraron á Francia y laadoptaron cono patria intelectual . Estos valones¡encales ejercieron una influencia decisiva sobrela orientación del arte francés, dando nacimientocon Gossec, á mediados del siglo XVIII, á las pri-meras formas de la sinfonía. ; croando con Grétry, áfines del propio siglo, la ópera cómica genuinamentefrancesa, respetuosa de la prosodia del poema y delsentido dramático de la música . ; fundando con Cé-sar Franek, á fines del siglo XIX, la escuela modo•-na del arte musical francés, caracterizada por lagrandeza de sus concepciones, la elevación de lasideas, el respeto de las formas tradicionales ó mol-des clásicos en que so vierte el pensamiento musi-cal, la riqueza y libertad de los procedimientos téc-nicos . La escuela frankista, de cuyo seno surgie-ron Vincent D'Indy, Chausson, Bruneau, ha dadoen Francia la floración artística más exhubcranteque nación alguna jamás alanzó.

Fruto de una raza acaso más personal, anima-da por uu principio más vigoroso, sajona de ori.gen, pero bastante independiente para conservarvida propia en sus desarrollos esenciales, la escuelaflamenca aparece en Bélgica como el único pro-ducto artístico propio del suelo. Su jefe reconoci-do é indiscutible se llama Peter Benoit.

Bonoit es un innovador osado y el apóstol in-fatigable de una causa en cuya defensa ha desple-gado el entusiasmo y la abnegación de los queconsagran su vida entera á la propagación de unaverdad y á. la irradiación de una nueva luz . Hom-bracho fornido como un atleta, prodigiosamente

fuerte en lo físico y en lo intelectual, dotado depasmosa actividad manifestada en innúmeras can-tatas, oratorios, sinfonías. oberturas, dramás líri-cos, óperas, trozos instrumantales y vocales, artínu-los de periódicos, conferencias, discursos, etc .,fué llamado á Amberes hace treinta años á dirigirla Escuela de música flamenca creada en ese en-tonces por el Concejo Comunal y elevada por el Go-bierno Nacional el año pasado á la categoría deConservatorio . Allí ha sentado el maestro las ba-ses de una nueva teoría. estética, y establecido, deacuerdo con ella, un sistema de enseñanza com-pleto y perfectamente racional.

Desarrollando en el pueblo el sentimiento in-dividual y el espíritu nacional, vapulando Jura-mento el eclecticismo, el cosmopolitismo y el utilii-tarismo, tres plagas que, según él, acaban con lafuerza vital y la o r iginalidad de una nación, Be-noit quiere devolver la educación musical á suprincipio natural

•`Sin embargo, agrega, existe un cosmopolitis-mo razonable ; aquel que partiendo de la .Idea denacionalidad, reconoce á cada pueblo su facultadcreadora, sin subordinarla á condiciones de desa-rrollo basadas cobre un principio uniforme,-incom-patible con el genio particular de cada pueblo.Ese cosmopolitismo es aún recomendable : es elreconocimiento de la acción libre y del libre desa-rrollo de una raza por todas las otras razas.

Partiendo del punto de vista de que la libertadconsiste en el respeto del individuo por el indivi-duo, tomada--por base de las . .relaciones mutuasentre los diversos miembros de la colectividad, elcosmopolitismo bien entendido establece el mismoprincipio para la personalidad colectiva, y recla-ma para los pueblos el mismo derecho á la autono-rmía que para los individuos Así como el co-nocimiento de sí mismo y de sus prógimos es laclave del conocimiento do la humanidad, así laidea patrial es el comienzo de la idea universal."Disertación ,sobre la música nacional,--18'7,5 .)

Su teoría docente reconoce tres grados : inforios, medio y superior . En el grado inferio r seinicio al alumno en la melodía, el ritmo y el colorde la lengua maternal, haciéndole cantar melodíaspopulares . En el grado medio, que comprendelos cursos de canto y' de instrumentos, además delos ejercicios técnicos, el alumno ejecuta trans-cripciones de canciones y danzas populares au-tóctonas . Esos mismos temas sirven de `•motivos"á los alumnos de armonía y contrapunto . Elprofesor enseña á los alumnos en una escala supe-rior la prosodia de la lengua materna, la estructu-ra natural del verso y el corte del motivo de lascanciones populares.

En el grado superior este mismo programaadquiere mayor amplitud . Los alumnos de fugay composicion trabajan sobre los mismos motivos-tipos, Al mismo tiempo que la música nacional,el alumno estudia la de las demás razas, comen-zando por las congéneres . Bencit las clasifica entres grupos : el germánico, el eslavo y el latino.El sistema de educación es dable, y consiste:primero, en la interpretación de los cantos y danzaspopulares de cada pueblo ; segundo, en el estudio

e las obras artísticas superiores do las razas cuya

Page 11: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

11

EL HERALDO DEL ISTMO

naturaleza musical y poética se ha aprendido á co-nocer en sus tenias populares.

Para tener una idea del genio de Benoit hayque figurarse algo muy luminoso, muy decorativo,muy fecundo, muy flamenco . Grandes líneas,grandes masas, grande inspiración, todo grande,animado por un potente soplo patriótico que resul-ta en el compositor un hecho psíquico espontáneoy volitivo. Su amor al fasto, al colorido, al efectoteatral, se revela continuamente en sus produc-ciones.

Ha hecho intervenir en la orquesta más deuna vez el carrillón y el bourdon de las catedra-les ; introdujo un disparo de canon en mitad desu cantata La Musa de la Historia, innovan-do de un modo singular la batería de laorquesta . Al dirigir la ejecución de sus obrasen las plazas públicas, hace apostar en los campa-narios de las Iglesias las masas de cobres para que,al caer de lo alto, las harmonías metálicas cau-sen en la multitud una impresión nueva y másvivaz de grandeza y sublimidad.

Resuenan todavía en mi oído los magestuosostemas de la Cantata de hubevs, su obra maestra porexcelencia . Cerrando los ojos y trasponiendo alnervio óptico las sensaciones del oído, veo desfilarlos reflejos sanguinolentos de las paletas de Ru-bens y Jordaens, aquellos dos divinos cantores dela carne flamenca, blanca y mórbida, cuyos lienzossoberanos irradian no sé qué mágico esplendor desalud, no sé qué excelsa gloria de vida I ..

xx x

Las primicias de este amplio sistema de edu-cación artística, no han podido ser más lozanas.Elocuentes demostraciones de este hecho son losnombres de Frank von der Stuckon, EdouardKeurvels y, sobre todo, dan Blockx.

Blockx es realmente un espíritu superior.Aquí, donde se pesa mucho el valor de las palabras, todavía no ha sido llamado genio. Tal vez nolosen ; á menos que en las futuras expansiones de susentimiento y su inteligencia se elevo á la . altura delas concepciones geniales . Como quiera, ya puedo éltenerse por afortunado con sólo haber logrado im-presionar á la moderna sociedad pensante siquierasea á la manera de los Massenet, Délibes o Bru-neau . Los super-hombres no nacen todos losdías .

Su partición Prineesse d' Auberpe ha sido sa-ludada con ruidoso éxito en más de una escenaextranjera y se anuncia non gran bombo pa ra latemporada venidera del Teatro do la Moneda. Laacción de Prineeese d' Auberge pasa en Bruselasen el período de la dominación austriaca, por losaños de 1750. El poema respira la atmósfera puradel Brabante, saturada de un olor popular que seexpande generosamente de sus páginas.

Es altamente humano y moral . Merlín en-carna el arte, la juventud, la gloria ; Rita, la pa-sión insana, desordenada, que ciega las fuentes do

la vida y arrastra al abismo ; Rinilda es el ser cas-to y fuerte, el amor puro que llama al caído á laredención ; Katelync, la abnegación, el amo r ma-ternal, que todo lo perdona en su dulzura infinita;Marcus, el falso amigo, el instigador maligno ; Ra-bo, el espíritu de la venganza y de los celos, lasierpe que babea el veneno mortal.

Merlín, elegido de la Musa devoto del Arte,cae en las redes de un amor funesto . La eternahistoria ! Merlín se olvida del arte por los encan-tos de Rita, bella cantinera de la gran Plaza dekruselas. Trocada en abyección su pasada alti-vez, ahogados sus ensueños de inmortalidad en unnaufragio de fango, trábase en su alma un reciocombate en que el instinto del honor, la hombríade bien del antiguo sér se debaten por forzar el cír-culo de hierro de su depravación actual . Estérillucha! Rabo, el antiguo amante de Rita, hundesu cuchillo en el pecho del artista amado, á tiem-po que éste es aclamado vencedor en el concursodel Principe de Lorena.

Pero es necesario haber vivido algún tiempoen el Brabante para saborear las minucias del dra-ma. su colorido local, la exactitud de la pincela-da ea las carretillas de leche tiradas por perros ja-deantes, encollarados de cascabeles, en las notasargentinas que lanza á los cuatro vientos el carri-llón alegre desde la alto del campanario gótico, enlas campesinas regordetas que instalan de madru-gada sus anchetas de legumbres y flores en elmercado de la Gran Plaza, en las locas y ruidosas bacanales de la multitud durante los días deCarnaval, mientras Flora y Céfiro se ofrecen á lavista del pueblo en toda la esplendidez de su ju.ventud y su hermosura . Es preciso conocer algúntanto el carácter flamenco, rozarse á diario conmás de un Bluts vulgar y caduco, cliente asiduode botillerías y consumidor incansable de jíca-ras de lambic; tropezar á la ventura con un ins-pirado pálido, de blondos rizos y ojos azules á loMerlín ; hallarse de manos á boca con Rita la man-caba, desertora del barrio mariolano dl,) la CalloAlta, con más de un litro de sangre española en-tre las venas, para experimentar en su totalidadla emoción intensa que la obra es capaz de pro-ducir en el sujeto.

Nobles frases musicales cantan en boca de Me r-lín la supremacia del divino Arte; un tema entre

frívolo y pueril, con ribetes de felino, se adapta ámaravilla al alma versátil do la mujer perniciosa;Bults se retrata de alma entera, si así puede de-cirse, en las cuatro coplas de la vieja canción fla-menca ; Rinilda carga de esplendor es y armoníasla orquesta, cual si de ésta se elevase en átomosluminosos su alma fuerte, hermoseada por el prea-tigio inefable de un amor ideal ; y entre las claridades deslumbrantes de la sinfonía ruge implaca-ble y amenazador el motivo de la venganza deRabo.

IIé aquíelucidado en pocos términos el sentidodramático de la parte musical . No hay para quéentrar en consideraciones técnicas ; que 131ockx armoniza con una abundancia y una novedad sor

Tendentes, que instrumenta con la maestría des modernos, quo maneja diestramente la técni-

ca del arte, por sabido se calla : un autor quecomprendo é interpreta el carácter de sus petiso-

Page 12: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO.

najes hasta rendir por el sólo efecto musical elconcepto drámático del poema., forzosamente hade poseer cualidades de escuela de que no care-cen ni aun aquellos desheredados de la Inspira-ción á quienes nunca favorecieron las musas conun soplo vivificante.

Sin embargo, á pesar de ser ésta la obra demás aliento que ha llevado á término en su cortacarrera el joven compositor, su temperamento deflamenco pur sang, ufano de su raza y su condi-ción, se espacia con mayor abundancia y fluidez enla pantomima Milenka, admirable de colorido y desabor á terruño. La nota popular, tenaz é incisiva,la atraviesa de un extremo al otro, arrollándola enuna onda genuinamente nacional . Bien lo dicen lascampesinas rollizas que bailan la ronda flamen-ca y la bourrée, calzados los pies de enormes zue-cos ; los violineros ambulantes y tocadores de cor-namusa, encaramados sobre toneles de cervezabajo el alero verde de tilos y castaños ; la frituraque se cocina en plena Kermesse al aire libre ychisporrotea al sacarse de la caldera bañada engrasa hirviente ; la turba de saltimbanquis y degitanos que improvisan grotescos espectáculos,venden amuletos y leen en los naipes el porvenirde los hombres, todo ese conjunto amable y pinto-resco, anegado en un ambiente embriagador dealegría sana que trasciende á satisfacción mate-rial de la vida y refleja sobre el cuadro generallos tonos íntimos y cálidos de las escenas rústicasde Teniers!

3tarciso &aray.

Bruselas, Mayo de 1898

IlusiónYo adoro en sueños la virgencita

más hechicera, la más bonita,

la de albo rostro de querubín:un amorcito de porcelana

hecho con rayos de la mañanay con aromas de su jardín.

Paso mi vida pensando en ella,

miro su imagen graciosa y belladonde la vista torno á girar:

ya en la alta nube del firmamento,

ya en el inquieto giro del viento,

ya en las azules olas del mar .

La hallo á mi lado cuando el sol arde,cuando ende noche, cuando la tardese acerca . Nunca me abandonó:á los crepúsculos y á las auroras,en todas partes y á todas horassu dulce imagen contemplo yo.

Cuando la nube de la tristezabogando pasa por mi cabezacomo fantástica evocación;cuando una mano de hierro ardienteposa sus dedos sobre mi frenteó airada estruja mi corazón;

Cuando oprimido por el quebranto,desesperado, siento que el llantode mis pupilas á brotar vá,miro su imagen, que está conmigo,la pido amparo, la pido abrigo,y, adiós pesares, huyeron ya.

¡ Quien conocerla no pretendiera!:Es su carita más hechiceraque los botones de rosa thé;y de su blanco busto de Palassobre los hombros, como dos alasde encage rosa, batir se ve.

Sus frescos labios brindan antojos,profundos miran sus dulces ojos,griego es el corte de su nariz;su dulce gracia robó á la Gracia,y es tal su garbo y aristocraciaque yo la llamo : mi Emperatriz.

Si la consagro yo uni existencia,más la bendigo por su inocencia,pues ella ignora lo que es querer;catorce, abriles aún no ha cumplidoy la alta fimbria de su vestidolas piernecitas permite ver.

Es juguetona, viva, traviesa,la alegre risa sus labios besay sus mejillas tiñe el carmín,tierna es con todos y cariñosa.y es caprichosa,inuy caprichosa,como las aves de su jardín.

Vivo tan sólo pensando en ella,su faz de rosa, graciosa y bella,jamás mis sueños abandonó:á los crepúsculos y á las auroras,en todas partes y á todas horassu dulce imagen contemplo yo.

Josü E . LORA Y LORA.

Linea, 1904.

12

Page 13: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

13

EL HERALDO DEL ISTMO.

Sonetos continentales ._.Por JOSE S. ChOCANO

x

€gin ef Ganaf.

Contra natura en formidable guerra.triunfa la eucaris tía del trabajo:

antes de unir dos mares con un tajo,se unen todas las razas de la tierra.

Cruje el taladro : .el garfio que se aferradestroza el pedernal ; salta el cascajo:y a cada són que repercute abajo,lo que va:abriendo el hombre, el mar lo cierra

El agua se hace fango y miasma luego;y envuelta en esa miasma se desprende,como una irradiación do las montañas,

la fiebre tropical, gar ra de fuego,con que la Madre Tierra se defiendodelque ]o va arrancando las entrañas! . . . .

xxx

Pos Jantanos.

El río es como un 1uipetu salvaje;el lago es cono un fondo de tristeza;el pantano, cubierto de maleza,es como un vicio entre el pudor de un traje ..

'Espeso ca•rizal, flores de encaje.,viento que arrulla, abismo que bosteza,el pantano es un sueño de perezaque duerme el fango en medio del boscaje . ..

Tumba abierta do pronto en el camino,es á modo de un golpe repentinoenvuelta en el disfraz de una asechanza;

porque en el corazón de lo espesura,sobre el fango se extiende la verduracomo sobre un dolor una esperanza . . ..

xvxx

&.f 9lleáioáía en ef eistnlo.

Como placa bruñida por la ola,fulge la arena ; el agua se retira;miasma sutil la ciénaga respira;y_ en ese hálito . el sol pinta su aureola ..

En la pizarra de la playa sola,una tortuga aletargada expira;y, al redor de un lagarto que se estira,baten cien peces su encorvada cola.

El aire quieto está ; ni un ave pasa;sólo óyense en el mar, quo el sol abrasa,murmuraciones con temblor de rezo;

y en la revererbante lejanía,

en medio del sopor del mediodía,se abre la inmensidad como un bostezo . .

Sf ~ánif.

(ASUNTO PICTÓRICO)

Brinda al pintor el índigo cambiantescon que luce en la sedas y en las flores,prodigando el azul con los vigoresde ocasos regios cuanto más brillantes.

Ya es el añil zafiro entre diamantes,ya lazo para atar cartas de amores,ya vestidos de tul quo entre fulgoresgiran en una danza de bacantes . . ..

Tiembla en el lago, como un brillo apenas;Porro bajo la piel de terciopeloy se trasluce en perfiladas venas . . ..

Pero nunca es más noble en sus antojosque cuando, en un pincel, recoge el cielo;; ;y en dos lo parte, para hacer dos ojos!

Page 14: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL 1STM

lA

aplauso que él y Guadalupe—su digna compañera- hacen repetir al público á cada momento . hastael final del acto. Quien consigue sin gran esfuer-zo inspirar tal entusiasmo, quien logra sugestionaral auditorio y obtener ese éxito, es por razón lógi-ea, todo un actor que sabe lo que hace.

Y no se crea que sólo en el género cómico es élbueno, nó ; en lo serio, lo trágico, allí donde se ne-cesita fuerza en el alma y luz en ol cerebro, tam-bién divierte verlo. Dígalo si nó, el desempeñode los dos papeles perfectamente opuestos que letocaron en el reparto de El Anillo de Hierro : elde Tiburón y el do Monje . Variaba de carácterpor completo, sin perder un detalle, con la mismafacilidad con que se cambiaba de traje y el pú-blico, admirando el mérito de tal trabajo, no leescatimó sus muy mareadas muestras de aproba-ción .

Hay en Leonardo, á más de la gran posesiónde escena de que es dueño, una vocalización claray sonora ; se esmera en hacerse oir, detalle estede gran importancia en el Teatro, y sobre todo ac-ciona de un modo adecuado y propio, fruto de es-tudio del papel que desempeña, no del recuerdo dela manera como lo hacía tal ó cual artista : es de-cir trata de formarse escuela propia y este deseoes muy digno de aplauso, con tanta mayor razóncuanto que él lo está realizando de manera paula-tina poro firme.

Argüelles es un tenor muy joven ; de voz, sino poderosa, sí justa, finase y agradable . Creernosque si él continúa estudiando surgirá de fijo . EnTempestad, El Anillo de Hierro y La Traviatalas obras del género grande en que lo hemos vis-to trabajar, cantó de una manera agradable y es-to le ha valido nutridos aplausos del auditorio.

Rubín do Celis tiene buena voz de barítono,pero debo seguir estudiando la declamación y elrecitado. El resulta frío en las principales asee .nas y pierde así mucho la ejecución de la parteque á él se le confía ; pero este defecto se le debeperdonar en gracia del poco tiempo que tiene dehaberse dedicado á las tablas.

El maestro don Eduardo Unda. es violinistaadmirable. Para ; juzgarlo con toda exactitud nonos consideramos aptos y por esto nos limitare-mos á enviarle junto con nuestras felicitaciones,una sincera voz do aplauso. La señora linda, co-mo característica., hase captado con sobra de ra-zón, las simpatías del público y otro tanto debe-mos decir do la petit Lola.

Carmen, como tiple ligera es buena ; casi unaniña, no se debo exigir por ahora de ella más, pues-t i que seguramente se irá perfeccionando y aseendiendo.

Para todos nuestros aplauso y voces de aliento.

En el TeatroAS funciones que en nuestro pobre teatroha dado en estos últimos días la Compa-ñía de Zarzuela que dirige el maestroliuda, han venido á dar más firmeza al

concepto elevado en quo tenernos á las partes prin-cipales de esa troupe.

Ya hemos dicho que Guadalupe conTo tiplecómica, es toda una artista, que dá mérito y real-ce á sus compañeros de teatro y hoy debemosagregar que es estrella brillante en el cielo delArte y de la Gracia . Tiene una voz dulce y afi-nada, dice bien, mejora con su posesión escénicalos papeles que se le corfian y en la acción mode-rada y justa denota, no sólo el estudio del géneroque cultiva sino también disposición natural y lasmuchas y buenas aptitudes que posee.

Todos estos méritos se agigantan en ella por-que van acompañados de un cuerpo bien forma-do y un rostro muy bello y muy simpático . Edu-cada con esmero, conoce el secreto de agradar éinspira, desde el momento en que so tiene la dichade tratarla, respeto y amistad sincera.

De su hermana Mercedes, primera tiple delgénero serio, podemos decir, sin temor de equivo-carnos, que es una de las mejores de zarzuela quehan pisado el templo que Thalia tiene en esta ca-pital . Tanto en La Tempestad, como en El Ani-llo de Hierro y sobre todo en La Traviata, el des-empeño de sus roles fué obra acabada . Voz pode-rosa, educada y agradable, perfecto dominio so-bre sí misma, arte de fingir sin exagerar buscan .do el justo medio que es el todo y una declama.ción clara y sonora, son las dotes principales quela adornan . Ella, muy joven todavía, está llama-da á ser una gran artista, si continúa en el tea-tro, ya que hoy merece con sobrado motivo losaplausos y la admiración del público que la com-prende.

De Leonardo Ulula, el primer actor cómicodebemos hablar, pero no autos de hacer presenteque no nos muevo la amistad que con él cultiva-mos, á escribir estas líneas ; tenemos por norma,como cronistas, ser francos y justos y no nos ha-rán decir lo contrario de lo que sintamos, ni el te-mor de desagradar ni el afán de captarnos sim-patias.

Leonardo es actor bueno porque nació para elarte, porque ha estudiado y sigue estudiando, por-que se esmera en progresar y porque tiene talen .to. Lo hemos visto en Las niñas desenvueltashacer un papel dificilísimo, darle realee y méritoá eso mismo papel, sin caer en ridículo ni exagera-ciones tristes. Antes de hablar, por el Silo barde-ter con que se presenta al público, at'rahea un

~I

Page 15: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

15

Himno Nacional

Salve, oh! egregios varones que al IstmoSegregásteis de pérfida unión;Con valor ejemplar, y el civismoQue conviene á los hombres de honor.

Hoy se cumple la misma epopeya.Que en remotas edades se vió:Es que el Istmo es heróico y descuellaPor su audacia, firmeza y valor.

Luengos años sufrimos el yugoQue Colombia nos quiso imponer;Pues creímos hermano al verdugoQue alevoso nos daba la hiel.

Mas, caída la venda culpable

Que encubriera perfidia y doblez,Resolvimos el lazo execrable

En pedazos, por siempre, romper.

El ACERO y la CIENCIA asociados,En consorcio sublime y viril,Por el PUEBLO del IsTMo apoyados,Consumaron el hecho feliz

Fueron HURTAS, el GRANDE en los hechos.Y AMADOR, el HERÓICO Civil,LoS TITANES que PATRIA y DERECHOsConquistáronle al NUEvo PAís.

Veneremos por siempre los nombresDe los HÉROES que PATRIA nos dán;Y probemos al mundo ser hombrosMuy capaces del Cielo escalar.

Y blandiendo el acero forjadoCon el fin del HoNoR sustentar,Profiramos el grito sagrado:LIBERTAD! LIBERTAD! LIBERTAD!

ALBETRO V . DE ICAZA.

Panamá, Noviembre de 1903 .

EL HERALDO DEL ISTMO

Ecos de la Quincena

4ASTAS líneas deben ser cortas ya que elq tiempo de que podernos disponer es esca-

so . No siempre es posible realizar todo—anhelo ni Lampo se debe abusar de la ge-

nerosidad con que se nos trata al juzgar el frutode nuestra labor intelectual.

Largas y cansadas han sido indudablementenuestras cronicas anteriores y aho ra hay que dar,á los amigos que leen EL HERALDO, un descanso enseñal de agradecimiento por sus bondades.

Demos pues, en estilo telegráfico, cuenta ála ligera de los acontecimientos de la quincenaúltima

k*De acuerdo con lo prometido á nuestros lec-

toros publicamos hoy tres fotograbados recibi-dos de los Estados Unidos por el último correo.Van, en consorcio admirable, el retrato de DaríoHerrera, delicado poeta del Istmo, y los de dospreciosfsimas hijas del Ancón que adunan á unabelleza admirable, méritos de gran valía.

En nuestro próximo número publicaremos los 'fotograbados de ,otras dos bellas señoritas y unacopia de la última página del Tratado Buneau-Va-rilla-Hay en la cual figuran las firmas de losmiembros de la junta de Gobierno Provisional yde los Ministros de Estado que ratificaron ese no-table compromiso .

x *DORh ZACirR[ssox, nuestra espiritual y virtuo-

sa amiga, cuyo fotograbado ofrecemos en otra pá-gina de esta Revista, acaba de unir su destino conlazos sagrados, al de nuestro buen amigo el caba-lloroso JUAN B . CHEVALICR.

No hay duda que ellos fo rman una simpáticapareja llena de atractivo y prendas personales devalía, y así no es extraño que la N'elicidad, quesiempre sonr íe á los buenos, les sea generosa . otor-gándoles con mano pródiga, todos sus bienes.

*

En el Teatro, la noche del 27 del pasado Enero,se verificó el Certamen del Colegio de "San José"para señoritas. El acto ese fuc una alta nota quedice mucho tanto en favor de las educandas conodo la Directora. y profesoras del Colegio. El pro-grama se llenó admirablemente y hubo para todaslas alumnas una buena cosecha de aplausos, desimpatía y de justicia. No quisiéramos hacermención especial de ninguna, puesto que todas lle-naron su cometido ; pero ¿cómo no recordar losnombres de las inteligentes señoritas Silvia R . Pé-rez, María C . Arosemena, Berta Arias, Isolina Sa-sso, María Quinzada, Ana M. F. del Río, Luisa E.Cervera, Matilde do Icaza y Adriana Orillac, quotanto cautivaron con su gracia. y su talento? y có-mo no enviar nuestro aplauso sincero á la patitaMercedes Zubieta, toda viveza y salero en su cortaedad? Para ellas todas, para las profesoras y pa .ra la señorita Ucrós, Directora del Colegio, nues-tras felicitaciones.

José E . Lora y Lora es el nombre de un nuevocompañero recién llegado á esta capital . á doma, .

Page 16: Vírgen Morena - bdigital.binal.ac.pabdigital.binal.ac.pa/bdp/revistas/heraldo/heraldofebrero1904.pdf · Después la virgen morena con una sombra en el rostro de indolencia y pena,

EL HERALDO DEL ISTMO.

viene con el cargo de corresponsal de una notablerevista literaria de Lima.

Lora y Lora es un inteligente joven, amable ysimpático, cuyas producciones literarias hallaránsiempre buena acogida en estas páginas . El noshablará mucho, seguramente, de Chocano, nues-tro amigo, y de elemento Palma, López Albújar,Larrañaga, Fianson, y demás intelectuales de lajuventud peruana . Nos relatará, así mismo, his-torias de la Ciudad de los Reyes y, al saber nues-tra decidida afición por la Belleza en todas sus ma-nifestaciones, nos hará confidencias do las hijasdel Rímac, esas mujeres adorables que unen á lhbelleza de las germanas, la gracia de las francesasy el ardor de las españolas.

**i.Don José María Fernández ha-lanzado en un

periódico de la localidad el generoso pensamientode levantar, mediante suscripción voluntaria, unmonumento á la memoria de nuestro itntiguo com-pañero de afanes, el nunca olvidado amigo LeónA. Soto.

Al acoger la noble idea del señor Fernández,aplaudimos su iniciativa, y excitamos á nuestroscolegas de la capital á que se sirvan. propagarla., yaque digno do encomio y aplauso será todo esfuerzohecho en el sentido de honrar á quien reunió, á sustítulos de poeta y patriota, la aureola de primermártir de la causa de la República.

* * aDos de nuestras mejores amigas han abando-

nado estas playas con rumbo á El Lino (Chiriquí)en busca de un clima más saludable y do paisajesnuevos con que recrear la mirada.

Al despedirse de nosotros prometieron regre-sar dentro do dos meses ; y creemos que cumpliránsu promesa, ya que mucho echarán de n anos lascomodidades de sus pintorescas casas de La Sa-bana.

El siguiente soneto, dedicado á una artista quoha sabido captarse todas las simpatías del público,ha sido escrito en ún momento do entusiasmo.

Las dos primeras estrofas son de Aurelio Máxi-mo ; los tercetos, de Romeo ; y ojalá esto humildehomenaje de dos bohemios, merezca el agrado dequien lo inspiró:

aliñas iesensueftasPARA GUADALUPE ONDA

Cuando la capa con donaire tirasy das un capotazo con salero,mereces que te aplauda el mundo enteropor esa gracia con quo alegre giras.

El fulgor de tus ojos cuando miras,es dulce irradiación de algún lucero;y el timbre de tu voz es hechicerotrémolo pasional de ocultas liras.

Que en Aliñas Desenvueltas tu figurade mujer y de artista crece tanto,que merece el honor de una escultura;

y al mirarte en la escena con espada,se aplaude el Arte en tí„ bajo el encantoque produce el fulgor de tu mirada

La emigración de las familias capitalinas hacomenzado ya en grande escala : La Chorrera consu admirable salto, Taboga con sus agradables ba-ños y sus espléndidos paisajes y La Sabana con sucielo tan puro, sus matices espejean tes, y su agra-dable temperatura, llaman a disfrutar lejos delruido avasallador do la ciudad, del delicioso en-canto del campo.

Sola y triste, cada voz más, qu eda nuestra que-rida ciudad, y el calor sofocante y el polvo quenos envuelve á diario en columnas abrasadoras yasfixiantes, nos dan también á nosotros deseos demarcharnos á vivir algún tiempo en plena naturaleza, para sentirnos, llenos de filosofía piadosa."hermanos de todos los seres y todas las cosas,"como decía Ma upasSant .

foeneo.

Algunocorre el riesgo.

Quién corre el riesgo si vuestra vida no estáasegurada? Indudablemente vuestra esposa y vues-tros hijos . Suponiendo que el incendio destruyavuestra casa ó vuestro almacén, sin estar asegura-radas, vos mismo habríais corrido el rica(,oy ten(Iríais que sobrellevar la pérdida . Si falleciéreissin un seguro de vida, vuestra familia tendría. quesufrir la pérdida . No dejéis quo corran ese riesgopor más tiempo ; no se hallan en estado de sopor ..tarlo .

ama muchas oomp„Sias buenas,Pean sólo una os LA ME jOR .

LA EQUITATIVAde los Estados Unidos.

Arturo Rivera,Agente Especial.

El Heraldo del lstmoQuincenario Ilustrado.

Director=&ropietario : iluiffernl o andreVe.

Esta Revista constará do 1G páginas de tarimasy se publicará dos veces al mes.

La suscripción por trimestre vale UN PESOCONCINCUENTA Cl'I .V AVOS (E(1 50, y cadaejemplar suelto TREINTA CENTAVOS.

No se admite nula colaboración gas la que seasolicitado ll nn se devuelven, en ningún caso losoriginales.

Pasa todo lo relacionado con la Revista diri-girse á su Director-Propietario ó á la TipografíaCasis y Cia.

Por Caneo: Apartado No . 21,5.

rsig-La Dirección do EL Imítame) laza Istmo haorganizado una Junta de Censura encaegada doexaminar todo trabajo que sea remitido para supublicación, la cual no se efectuará sin la aproba-ción de dicha junta .