villa de leyva potencia fosilifera

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Villa de Leyva: potencia fosilífera Por Ángela Posada-Swafford Julio 07 de 2014 http://www.sumamente.co/articles/detail/villa-de-leyva-potencia-fosilifera Las entrañas de la región boyacense guardan fósiles exquisitamente preservados de una era geológica que carece de muestras en todo el globo. Los 3 más Leidos La amenaza de las colas ¿Da cáncer el microondas? Hazaña o engaño El truco es más de maña que de fuerza”, me dice Mary Luz Parra enseñándome a golpear una piedra con forma de papa terracota que podría o nocontener una amonita. “Debes darle con la parte trasera del martillo, no con el pico. Y en la mitad, para que se abra en dos”. Es inútil. Mi brazo está ardiendo por los varios minutos de esfuerzo sostenido contra este increíblemente duro fragmento de roca de al menos 100 millones de años. Parra sonríe con benevolencia y, despejándose la larga cabellera negra de la cara, toma mi pedrusco y le

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  • Villa de Leyva: potencia fosilfera

    Por ngela Posada-Swafford

    Julio 07 de 2014

    http://www.sumamente.co/articles/detail/villa-de-leyva-potencia-fosilifera

    Las entraas de la regin boyacense guardan fsiles exquisitamente preservados de

    una era geolgica que carece de muestras en todo el globo.

    Los 3 ms Leidos

    La amenaza de las colas

    Da cncer el microondas?

    Hazaa o engao

    El truco es ms de maa que de fuerza, me dice Mary Luz Parra ensendome a golpear una piedra con forma de papa terracota que podra o no contener una amonita. Debes darle con la parte trasera del martillo, no con el pico. Y en la mitad, para que se abra en

    dos. Es intil. Mi brazo est ardiendo por los varios minutos de esfuerzo sostenido contra este increblemente duro fragmento de roca de al menos 100 millones de aos. Parra sonre

    con benevolencia y, despejndose la larga cabellera negra de la cara, toma mi pedrusco y le

  • asesta dos certeros golpes. En el acto la piedra se abre como un huevo, revelando el cuerpo

    anillado y negro de una amonita medio enterrada en su densa matriz de sedimentos grises.

    A los 36 aos, despus de casi 20 de andar con los ojos puestos en los suelos de arcillas

    rojas, amarillas y grises de su Villa de Leyva natal, y de estar asociada a trabajos de campo

    con paleontlogos profesionales, Parra ha desarrollado un ojo nico para encontrar fsiles.

    Es como si ella y su hermano menor, Juan de Dios, tuvieran un radar interior, una

    exasperada correcta forma de interrogar las laderas erosionadas que una vez formaran el

    lecho de un clido mar epicontinental.

    Esa sensibilidad les viene bien. No solo por-que son los curadores del nuevo Centro de

    Investigaciones Paleontolgicas (CIP) un lugar nico en su clase en Colombia, equipado con lo ltimo en tecnologa y entrenamiento profesional en materia de preparacin de

    fsiles, sino porque Villa de Leyva se perfila como la prxima potencia mundial en muestras del periodo Cretcico Inferior -o Temprano- es decir, organismos que vivieron

    entre hace 100 y 149 millones de aos.

    Los colombianos siempre hemos sabido que Villa de Leyva tiene buenos fsiles. Despus

    de todo, quin no ha ido a visitar al famoso Crono-saurio, ha parado en el Museo

    Paleontolgico que administra la Universidad Nacional, o se ha detenido ante los

    vendedores de amonitas (cuya venta, incidentalmente, se prohibi no hace mucho)?

    Pero lo que el comn de la gente no sabe es que Villa de Leyva, cuyos fsiles apenas

    comienzan a ser estudiados en serio, est demostrando ser, en palabras del paleontlogo

    britnico y profesor de la Universidad de los Andes Leslie No, un repositorio no solo de la mejor fauna de reptiles marinos de Sur Amrica, sino la mejor de su era en el mundo. Un sitio que comienza a hacerles la boca agua a los cientficos extranjeros.

    Es bien sabido entre los paleontlogos que el libro de cmo era la vida en la Tierra tiene

    captulos medio vacos: periodos de tiempo que se han negado a soltar sus secretos por falta

    de fsiles qu estudiar. Una de las ms notables grietas de informacin a nivel global es la

    fauna y vegetacin de esos mares someros del Cretcico Inferior.

    Existe un buen rcord de fsiles del Jursico (en Europa) y del Cretcico Superior (e Norteamrica), pero no tenamos prcticamente nada del perodo que hay en medio de

    esos dos, salvo algunos huesos dislocados y en muy mal estado hallados en otras regiones

    del mundo, explica No, quien fue curador de reptiles marinos en el Museo de Sedgwick, uno de los ms antiguos de la Universidad de Cambridge, en Inglaterra.

    Quin nadaba con quin? Quin se coma a quin? Cmo eran esas aguas costeras y

    cmo lograban sostener a una fauna de reptiles mari-nos, monstruos intimidantes que

    rivalizaban en ferocidad y complejidad con los dinosaurios terrestres? Cmo se

    comportaba el clima? Qu sorpresas anatmicas, taxonmicas y evolutivas esconde esa

    brecha de casi 50 millones de aos que no hemos podido vislumbrar? Todos estos son

    interrogantes que tradicionalmente han frustrado a los cientficos.

    Villa de Leyva abre una ventana de oportunidad a este pasado profundo porque los

  • extravagantes fsiles de plesiosaurios de cuello largo, pliosaurios de cabezas formidables,

    ictiosaurios de ojos grandiosos y tortugas colosales que se han hallado aqu (y los muchos

    ms que an duermen arropados entre capas de geologa) estn en 3D; es decir, no estn

    aplastados como tantos otros esqueletos en excavaciones paleontolgicas. Adems estn

    articulados, cada hueso an conectado a su vecino.

    Encima de todo, yacen dentro de su contexto ambiental original, rodeados de los peces e

    invertebrados de ese gran mar de quizs unos 200 metros de profundidad, abierto al ocano

    Atlntico. Un Atlntico beb, apenas recin formado, cuando ni siquiera se haba alzado el

    macizo de los Andes. El limo endurecido de ese joven fondo marino incluso alberga hojas,

    semillas y trozos de madera de los bosques de pinos que bordeaban aquellas costas,

    ofreciendo una ventana a las condiciones climticas del pasado profundo.

    Delicado nuevo hallazgo

    Esa ventana se ensanch un poco ms hace unas semanas, con el trabajo de excavacin de

    un nuevo ictiosaurio por parte del CIP. Los hermanos Parra me llevan de improviso a verlo.

    Est en la carretera de entrada a una finca particular algo cada vez ms comn en la cada vez ms populosa regin. El animal fue descubierto hace un tiempo ya, pero solo ahora dan

    permiso para exhumarlo. Expuesto a los elementos desde hace rato, su delicado perfil,

    apenas cubierto con un plstico, est en peligro de deshacerse como la piel de un turista

    nrdico en tierra caliente.

    Los Parra me dan una rpida clase de consolidacin, y les ayudo a insertar gotitas de lo que supongo es una especie de paleogma entre las grietas de las costillas. El plan es hacer

    esta operacin con frecuencia, hasta que sea seguro traer una excavadora para sacar al

    animal de su sepultura sedimentaria y transportarlo al centro.

    Qu nuevo cuento tendr que contar este ictiosaurio? Tradicionalmente se pensaba que sus linajes se haban extinguido, dejando solo uno que sobrevivi hasta el Jursico, dice

  • No en su cubculo universitario rodeado de piedras y cerros de libros. Pero los ictiosaurios de Villa de Leyva nos estn diciendo que eso no es cierto. Que hubo ms

    diversidad.

    No est seguro de que tanto en el CIP, como debajo de la tierra, hay nuevos gneros de

    ictiosaurios que redefinirn este captulo del libro de la vida. En el CIP hay animales que apenas si han comenzado a ser estudiados, y otros que an estn entre cajas, pero que

    valdran una serie de informes cientficos para las grandes revistas indexadas

    El afable profesor habla a la carrera, con la pasin y la avidez del extranjero que ve lo que

    tan-tos otros no ven. Vino a Colombia siguiendo a su esposa Marcela Gmez, la tambin

    paleontloga y profesora de Geociencias en Los Andes, y aqu encontr su Cretcico

    mundo perdido. Compr una finca en Villa de Leyva porque en el terreno haba un fsil. Y

    siente urgencia por dar a conocer la importancia de esta regin en la comunidad cientfica

    internacional.

    Las tortugas, por ejemplo. Hay una que tiene an huevos en el vientre! Es prcticamente la primera vez que se ha encontrado eso en el mundo. Eso solo ya es un paper para Nature, Science o el Journal of Vertebrate Paleontology. Es importante que cualquier

    equipo de investigadores que se dedique a esos animales incluya expertos mundialmente

    reconocidos en estos reptiles, trabajando en conjunto con los colombianos para que este

    repositorio sea reconocido en las revistas ms prestigiosas.

    Segn el mdico y empresario Santiago Padilla, co-fundador del CIP con su fallecido

    hermano Carlos Bernardo, quien fue un Mecenas de la paleontologa en Boyac, eso es algo

    que intenta hacer el centro de investigaciones en Villa de Leyva. Tenemos convenios y trabajamos con paleontlogos de Argentina, Alemania y Estados Unidos, incluyen-do

    tambin a investigadores colombianos que estn en esos pases, como Edwin Cadena, de

    North Carolina State University, que se ha dedicado a las tortugas, justamente, me dice por Skype desde su oficina en Bogot. Luego me muestra una esplndida cabeza de

    plesiosaurio.

    Esta la sometimos a una tomografa computarizada un CT scan para tratar de ver algo de su es-tructura interna. Y aunque las imgenes no tienen la cantidad de cortes necesarios

    en paleontologa, nos ayudan visualizando mejor el fsil a la hora de prepararlo

    La criatura tenebrosa de Schica

  • Despus de haber dominado la tierra firme y el aire, los reptiles completaron su supremaca

    del mundo mesozoico convirtindose tambin en los mayores depredadores de los ocanos.

    Estos matones marinos no estn relacionados con los dinosaurios, pero igualmente son

    gigantes; y aunque todos respiraban aire, desarrollaron un montn de formas diferentes. Es

    fcil imaginar, estando en presencia de estos fsiles, a elegantes ictiosaurios en forma de

    pez persiguiendo cala-mares en las profundidades o triturando amonitas acorazadas, y

    plesiosaurios de cuello largo emboscando peces o barriendo el suelo con el hocico en busca

    de bocados.

    Pero sin duda, los depredadores ms grandes y agresivos de estos mares crueles eran los

    pliosaurios. Sus mandbulas espectacularmente grandes y desordenados hbitos

    alimenticios son visibles en ictiosaurios comidos a medias y mordeduras en las aletas de

    plesiosaurios.

    Probablemente merecedor de cualquiera de las grandes publicaciones cientficas mundiales

    es un suntuoso pliosaurio hallado en de Schica en 2009. Excavado a comienzos de este

    ao, est siendo estudiado por la reconocida paleontloga de vertebrados Mara Eurdice

    Pramo, profesora de la Universidad Nacional.

    La tenebrosa criatura de cerca de diez metros de largo est en casi perfecto estado de

    conservacin (solo le faltan las aletas del lado derecho, que se perdieron en aos pasados

    durante la ex-traccin del yeso, abundante en esas montaas). Ostenta una cabezota

    triangular de 2,7 metros de largo flanqueada por mandbulas armadas con dientes de 20

    centmetros; el grosor y forma de su crneo demuestran claramente que all se insertaban

  • msculos sumamente poderosos, capaces de imprimir una mordedura de miles de libras de

    fuerza por pulgada cuadrada.

    En 2009 un equipo de investigadores del Museo de Historia Natural de Oslo calcul que un

    pliosaurio de 13 metros hallado en el archipilago noruego de Svalvard habra sido capaz

    de hincar los dientes sobre sus vctimas con una fuerza de 33,000 libras.

    Con un crneo de ms de tres metros de largo es de esperar que la mordedura sea mucho ms poderosa que la de un tiranosaurio rex, dice el paleontlogo Joern Hurum. El anlisis de la fuerza de la mordedura de un animal extinto se calcula usando frmulas matemticas

    basadas en la composicin del crneo, la morfologa de los dientes y las inserciones de los

    msculos en las quijadas. Luego se hacen comparaciones con los animales vivos. Por

    ejemplo, un len puede generar hasta 1,000 libras de fuerza por pulgada cuadrada, un

    caimn imprime 3,000, un ser humano 250, y un tiranosaurio lograba 15,000.

    Segn el bilogo evolutivo Greg Erickson, del Museo de Oslo, la de este gran pliosaurio de

    Svalvard, del cual solo hay unos cuantos fragmentos de hueso, parece ser la mordedura ms

    fuerte calculada en paleontologa. El pliosauro de Schica no se quedara muy atrs.

    Hace un tiempo, durante su doctorado en la Universidad de Cambridge (donde conoci a

    No), Marcela Gmez trabaj en la mordedura de otro pliosaurio colombiano. Mi estudio sugiere que este reptil era capaz de perseguir y capturar su presa usando sus poderosas

    mandbulas, escribe en un reporte cientfico que est por publicarse. No obstante, su crneo est mal adaptado para la mordedura asimtrica, lo cual sugiere que el pliosaurio

    seleccionaba presas que podan desmembrarse sin tener que usar movimientos de torsin

    con la mandbula inferior. Por su parte, a Mara Pramo le interesa saber las razones detrs de la exquisita preservacin del monstruo de Schica.

    Estamos en esa discusin, dice la experta en una entrevista telefnica. Hay quienes opinan que esas rocas estn formadas por elementos que se depositaron muy lejos de la

    costa. Otra corriente opina que fue cerca de la costa. Para tener una buena preservacin

    son necesarias unas condiciones especiales: Que no haya oxgeno en el lecho marino para

    que no se d una descomposicin rpida del cadver. Que no haya carroeros, y que no

    haya muchas corrientes en el fondo que disturben los huesos. Pero lo interesante es que la

    roca en s, sus caractersticas, son de ambiente con oxgeno: hay muchos xidos de hierro

    y arcillolitas, que son rocas de arcilla de colores y esos colores indican oxidacin de

    origen. Cmo entonces se preservaron as de bien, en presencia de oxgeno? Es un

    rompecabezas fascinante.

    No muy lejos de all hay otro pliosaurio ms pequeo. Estamos tratando de ver si se trata de un joven y un adulto de la misma especie; porque si yo tengo jvenes y adultos que

    murieron simultneamente eso podra haber significado un evento geolgico importante

    que matara toda la poblacin. Pero si tengo solo adultos, puedo hacer otras propuestas

    distintas. Falta todava mucho trabajo, pues este es un yacimiento que est abriendo una

    cantidad de panoramas que van a aportar importante informacin al mundo, por lo menos

    en ese rango de tiempo geolgico.

  • La experiencia de Pramo en campo y en laboratorio con los fsiles colombianos es

    profunda. Quizs es la nica colombiana con un doctorado en paleontologa de vertebrados

    (en la Universidad de Poitiers, Francia).Ella me da una estupenda introduccin a la

    taxonoma de este bestiario fantstico, matizada con su opinin sobre el estado de la

    paleontologa en Colombia.

    El pas no destina recursos para una ctedra en paleontologa porque no se le ve una aplicacin direc-ta econmica. Pero s la tiene, porque todo esto tiene relacin con los

    sedimentos que dieron origen al petrleo. Ecopetrol ha ayudado con financiacin para las

    excavaciones de Schica. Eso es estupendo. Pero necesitamos formar nuestros propios

    paleontlogos para que no sigamos cargndole la maletas al investigador extranjero.

    Con la piedra afuera

    Encontrar y estudiar un fsil in situ es una cosa. Otra, es excavarlo y limpiarlo: sacarlo de

    la piedra, y sacarle la piedra. De regreso al CIP, Mary Luz Parra me conduce, con mi

    amonita en la mano, a una estacin de trabajo detrs de un amplio y bien iluminado

    ventanal donde los visitantes del centro pueden ver a los tcnicos manejando el martillo

    neumtico.

    Aqu trabajamos no solo los fsiles locales, sino los que nos llegan de todo el pas, me dice Parra entregndome el martillo, un instrumento sospechosa-mente parecido a una

    fresa de dentistera. Tienes que ir despacio, aprendiendo cundo hacer fuerza. Es un trabajo de concentracin total. Un paso en falso y adis fsil. Mi amonita demostr ser sumamente dura. Era obvio que eso iba a tomar tiempo.

    La preparacin de un fsil de los grandes toma varios meses, a veces ms de un ao de trabajo continuo, comenta Parra tomando la fresa de mis manos y cincelando la pieza con una destreza envidiable.

    Despus de todo, es la primera persona en Colombia profesionalmente entrenada como pre-

    paradora de fsiles. Gracias al apoyo de los Padilla, ha trabajado al lado de los expertos del

    Museo Egidio Feruglio en la Patagonia Argentina; y prepar algunos de los especmenes

    ms emblemticos del CIP, como el plesiosaurio de cuello largo que se convirti en el logo

    del centro. Tambin limpi la descomunal tortuga negra. El animal de 115 millones de aos

    recibir este ao el nombre de Colombiachelys padillaii, en honor a los hermanos Padilla.

    Tambin sometemos a algunos fsiles a baos con cidos para disolver la piedra en partes demasiado delicadas; usamos especficamente el cido sulfmico, una tcnica que

    inventamos aqu en el CIP porque es ms suave, segura y no produce vapores peligrosos, aade con evidente orgullo.

    La buena fama del CIP se ha extendido hasta el mismsimo Smithsonian Institution.

    Los hermanos Padilla siempre entendieron la importancia de la paleontologa de Villa de Leyva, y le apostaron a convertir el lugar en un centro de clase mundial, dice el gelogo y botnico colombiano Car-los Jaramillo del Smithsonian Tropical Research Insitute, en

  • Panam. Yo les envo los fsiles que colecto en lugares como El Cerrejn. Eso ahorra tiempo y dinero, y los especmenes se quedan en el pas para que cada cientfico venga

    despus y los estudie.

    Jaramillo dice que desde hace 10 aos se est creando una masa crtica de estudiosos de

    fsiles colombianos tanto dentro, como fuera del pas. Pero coincide con Pramo en la

    absoluta necesidad de abrir una ctedra paleontolgica ahora ms que nunca.

    Alas submarinas

    Por su parte, Leslie No no desperdicia oportunidad de trabajar con cuanto fsil de Villa de

    Leyva caiga en sus manos.

    Amo los plesiosaurios y los pliosaurios, dice hablando a borbotones y saltando de la silla para dibujar uno de los de cuello largo en el tablero de su oficina. Me interesa estudiar cmo eran cuando vivan, reconstruir su anatoma. Son difciles de entender porque no

    tenemos con qu compararlos. Los de cuello largo tienen una apariencia genialmente

    ridcula, un cuerpo redondeado con cuatro aletas des-proporcionadas que funcionan, no

    como remos sino como alas de un avin, con todo y borde de ataque, para crear

    sustentacin tanto positiva como negativa (para hundirse).

    Y hay muchas teoras acerca de cmo se movan estas alas. Por ejemplo, haciendo una

    figura de ocho hacia adelante y hacia atrs, un poco como los colibres. La otra pregunta

    es, cmo dos pares de alas evitan los remolinos de agua sucia que se crean cuando se mueven al tiempo? Quiz tenan que estar cambiando constantemente el ritmo, como un

    caballo que galopa y corre. Todo esto necesita investigacin y hacer modelos en tanques

    de agua.

    Igualmente intrigante es el movimiento de esos cuellos eternos. Las vrtebras estn

    engarzadas entre s de tal manera, que no permiten un rango amplio de movimiento hacia

    arriba o hacia los lados, sino hacia abajo, dice No. Esto hace suponer que su alimento

    estaba en el fondo, ms que en la superficie. Es posible que un grueso tendn controlara la

    parte superior de las vrtebras, estirndose como un caucho para bajar la cabeza, y

    distensionndose para permitirles nadar en lnea recta.

    Otra cosa que me interesa es el tamao de las glndulas que controlaban el exceso de sal. Deban ser grandes porque los reptiles marinos no tienen riones muy eficientes. Las

    iguanas marinas, por ejemplo, tienen dentro de su cabeza rganos que sacan la sal de su

    corriente sangunea y la expulsan por la nariz. Pienso que los plesiosaurios haran algo

    parecido. Las formas de sus crneos tienen mucho espacio para albergar estas glndulas;

    y su tamao nos indica mucho sobre su dieta porque entre ms salado el alimento ms sal

    tendran que expulsar.

    Ambos reptiles (los de cuello corto y los de cuello largo) tienen adems un sistema

    sensorial potencialmente muy interesante, que segn No se observa en el hocico, el cual

    est punteado de pequeos agujeros; quizs eran terminales para nervios que sentan la

    presin del agua, la temperatura y los qumicos disueltos en su entorno. Como los

  • tiburones.

    Poco a poco, los fsiles sin precedentes de esta regin van haciendo ms factible imaginar

    esos mares crueles del Cretcico Temprano. Las semillas de conferas tridimensionales,

    hermosas impresiones de hojas primitivas y trozos de madera encapsulados dentro de la

    roca como almendras en una barra de chocolate hablan de bosques prsperos, climas ms

    clidos que el presente, y alimento a granel.

    Cmo animales tan grandes se mantenan durante una poca de calentamiento global

    mucho ms intensa de la que tenemos ahora, cuando los niveles de CO2 alcanzaban las mil

    partes por milln y el fondo del mar era pobre en oxgeno? Las preguntas se abren como

    flores, esperando ser estudiadas.

    Villa de Leyva guarda muchas sorpresas, ms de las que nos imaginamos, dice No. Siento que en esas cajas en el stano del CIP hay fsiles capaces de dar un sacudn a algunos pilares de la paleontologa del Cretcico Inferior.

    En cuanto a mi hermosa amonita negra, aun-que s que no va a sacudir nada, igual opt por

    donarla a la coleccin del CIP.

    El nico dinosaurio que existe en Colombia

    Estas vrtebras de dinosaurio saurpodo titanosauriforme de 130 millones de aos fueron

    halladas en Villa de Leyva hace aos, y son especialmente importantes porque se trata de

    una enorme criatura herbvora terrestre, que habitaba en los alrededores del gran mar que

  • cubra toda esta regin.

    Las vrtebras estn siendo estudiadas por Diego Pol, del Museo Egidio Feruglio en de

    Trelew, en Argentina. Es muy interesante dado que no conocemos prcticamente nada sobre la fauna de dinosaurios del norte de Amrica del Sur, dice Pol, quien trabaja en el dinosaurio ms grande que existe hasta el momento, un herbvoro de 20 metros de alto

    recin descrito, en Argentina.

    Las faunas de dinosaurios del Jursico y Cretcico de Amrica del Sur se conocen principalmente del cono sur (sobre todo en Patagonia) y por lo tanto no sabemos si los

    dinosaurios que habitaban en el norte de Amrica del Sur tenan ms vinculacin con los

    del cono sur o con los del Norteamrica. Las vrtebras del saurpodo de Villa de Leyva

    poseen semejanzas muy marcadas con algunos dinosaurios saurpodos de Amrica del

    Norte, lo cual es sumamente interesante. Nos sugiere que la diversidad de linajes

    evolutivos que habitaron en Amrica del Sur era ms grande de lo que sospechbamos. Sin

    duda, descubrimientos como este nos podrn ayudar a comprender mejor la historia de los

    dinosaurios del norte de Amrica del Sur, un complejo rompecabezas que recin estamos

    comenzando a descubrir.

    La publicacin de la descripcin cientfica de estas vrtebras en el Journal of Vertebrate

    Paleontology est bajo revisin, con Mary Luz Parra como autora secundaria. Adems de

    las vrtebras, que se encuentran en el Museo del Fsil, existen dos cabezas de fmur de otro

    saurpodo, que estn en el Centro de Investigaciones Paleontolgicas.