universidad autonoma metropolitana …148.206.53.84/tesiuami/uam0121.pdf · el regimen huertista....

84
UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA UNIDAD IZTAPALAPA SEMINARIO DE INVESTIGACION 111. SERGIO MARTINEZ TORRES ( 93226612 ) LA ULTIMA TESINA TITULO : BATALLA DEL PUEBLO DE MEXICO CONTRA EL AUTORITAR ISM0 : LA SOBERANA CONVENCION REVOLUCIONARIA DE AGUASCALIENTES ( OCTUBRE DE 1914 - MAYO DE 1916 ) P~OFESOR ARTURO LOMAQ MALDONADO

Upload: phungdan

Post on 28-Sep-2018

229 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA

UNIDAD IZTAPALAPA

SEMINARIO DE INVESTIGACION 111.

SERGIO MARTINEZ TORRES ( 93226612 )

LA ULTIMA

TESINA

TITULO : BATALLA DEL PUEBLO DE MEXICO CONTRA EL AUTORITAR

ISM0 : LA SOBERANA CONVENCION REVOLUCIONARIA DE AGUASCALIENTES

( OCTUBRE DE 1914 - MAYO DE 1916 )

P~OFESOR ARTURO LOMAQ MALDONADO

Page 2: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA

UNIDAD IZTAPALAPA

SEMINARIO DE INVESTIGACION Ill.

SERGIO MARTINEZ TORRES

TESINA

!

TITULO:

LA ULTIMA BATALLA DEL PUEBLO DE MEXICO CONTRA EL A~TORITARISMO:

LA SOBERANA CONVENCION REVOLUCIONARIA DE AGUASCALIENTES

(OCTUBRE DE 1914-MAYO DE 1916).

Page 3: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

AGRADECIMIENTOS

A mi asesor el Profesor Arturo Lomas Maldonado por dedicar parte de su tiempo a esta investigación y por los momentos de aliento dados al autor de estas líneas con el objeto de no claudicar en la integración de esta investigación.

A mis lectores el Dr. Josd Rivera Castro y el Tte. Historiador y Lic. Antonio Aguilar Razo, por dedicar parte de su valioso tiempo para la revisión de este trabajo y por sus acertadas observaciones con el fin cumplir con la meta de esta investigación.

A todo ellos iGracias!

J

Page 4: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

CAPITULO I

EL REGIMEN HUERTISTA.

CAPITULO II

EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA.

I N D I C E .

2-6.

7-1 3.

1430.

CAPITULO 111

LA CONVENCION DE MÉXICO Y LA SOBERANA CONVENCI~N REVOLUCIONARIA DE AGUASCALIENTES. 31 -62.

CAPITULO IV 1 1

EL NACIMIENTO DEL AUTORITARISMO CONTEMPORANEO EN MEXICO. 63-71.

CONCLUSIONES 72-76.

FUENTES CONSULTADAS , 77-81.

Page 5: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

INTRODUCCION.

El proceso histórico de México denota la belicosidad de nuestro pueblo, pero es en el siglo XIX donde surge con fuerza indiscutible la presencia del militarismo, que se manifestaba primero en las luchas armadas y después en los gobiernos que se establecieron bajo el dominio de los caudillos triunfantes, que consideraban el poder como la recompensa obligada por su participación guerrera. Esta recompensa, es sin duda, la mecha que prende el sentir del buen ciudadano, es el factor que impulsa a los individuos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX a unirse a la lucha armada en contra del autoritarismo reinante, porque si bien, la historia como medio de enseñanza, exponía que en los siglos anteriores y en años no muy lejanos, el uso y dominio de las armas garantizaba la permanencia y el control del poder en México; un poder que se ejercía desde los niveles más altos de los puestos públicos del Estado mexicano, en especial: El de la Presidencia de la República.

Por lo anterior y motivado por la obra de Vito Alessio Robles "La Convención Revolucionaría de Aguascalientes"' en donde el autor describe y narra con gran emotividad el proceso histórico que se lleva a cabo en la "hermosa y esplendorosa ciudad de Aguascalientes" (propias palabras de Alessio), iniciando sus sesiones en el Teatro Morelos el día 6 de octubre de 1914. Este trabajo abarca del primero de octubre de 1914,2 cuando en la Ciudad de México, se reúnen los generales del Ejército Constitucionalista y los gobernadores de los Estados y Temtorios de la Federación Mexicana para discutir el proyecto de gobierno ha seguir, después del triunfo de las fuerzas constitucionalistas sobre las fuerzas del Ejército Federal y su comandante supremo Victoriano Huerta; hasta ~

la disolución de la convención por parte de las fuerzas del Ejército Libertador del Sur en el ! poblado de Jojutla en el estado de Morelos el 16 de mayo de 1916.3 !

' Tomaré como punto de partida, el acto de traición y violencia ejercido por

Victoriano Huerta en contra del Primer Mandatario de la República Mexicana Francisco I. Madero y del Vicepresidente José María Pino Suárez en Palacio Nacional; acto que provocaría el levantamiento armado de las masas y de los grupos armados que lucharon e? contra de Porfirio Díaz, resistiéndose nuevaryente a la imposición de una dictadura, reiniciándose la última lucha del pueblo de México en contra del autoritarismo, corno se expresa y se define con claridad en las sesiones de la Convención Revolucionaria celebradas del 10 de octubre de 1914 al 16 de mayo de 1916 en las ciudades de Aguascalientes, San Luis Potosí, Ciudad de México, Toluca y Morelos. Un régimen que busca mantener en el poder a Venustiano Carranza creando y desarrollando la Constitución de 1917, dando el paso inicial a las nuevas dictaduras mexicanas, respaldadas por un aparato de estado denominado democrático representativo donde el Congreso de la Unión sirve como órgano de ratificación del mandato presidencial.

I

La finalidad que persigue el presente trabajo es explicar el surgimiento, desarrollo y fin del levantamiento armado que provoca la toma del poder de Victoriano Huerta, enfocado a la Convención Revolucionaria que se celebra en México y posteriormente en

1 Alessio Robles, Vito, La Convención Revolucionaria de Aauascalientes., Méx., Instituto Nacional de Estudios

Barrera Fuentes, Florencio, Crónicas Y Debates de las Sesiones de la Soberana Convención Revolucionaria

Convención de Aquascalientes, (Cuaderno Conmemorativo No.&), Méx., Instituto Nacional de Estudios

2 Hist6ricos de la Revoluci6n Mexicana, 1979.

Tomo l., Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1964, pp. 15

Hist6ricos de la Revoluci6n Mexicana, 1985, pp. 18

2

Page 6: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

la Ciudad de Aguascalientes, como puntos principales del movimiento en materia Política, ubicando a los grupos en pugna por la lucha y dominio del poder en México, Carranza Y el grupo de los Constitucionalistas por un lado y por el otro, el grupo de los Convencionistas formado principalmente por Francisco Villa y Emiliano Zapata respaldados por su División del Norte y por el Ejército Libertador del Sur respectivamente. Un levantamiento armado con el objetivo y la firme idea de derrocar al tirano que busca imponer nuevamente la dictadura, la opresión y la miseria a un pueblo que en su mayoría se encontraba armado; después de haber participado en una revolución4 y derrocar a Porfino Diaz, retomando así . el principio de libertad, que se alcanzó con el esfuerzo, el sudor y la sangre de un pueblo que hasta esos momentos había sabido luchar por ella. En busca de sus objetivos por alcanzar la libertad, surge la Soberana Convención Revolucionaria de Aguascalientes, una.convención que lucha por mantener los derechos de igualdad social, económica pero sobre todo una igualdad política, ya que desea quitar el poder omnipotente del presidente de la República. Un poder que en el México de finales del siglo XIX y principios del XX, es sin duda, un poder absoluto respaldado por un Congreso de la Unión servicial a los mandatos y designios del presidente. Por ello, la convención quiere ser el órgano máximo de poder en México. Pero, como en todo Ids movimientos armados existen diferentes intereses así como varios personajes que destacan en el desarrollo del movimiento; intereses que siempre han perjudicado y trastocado las verdaderas metas de las luchas revolucionarias. Bajo este panorama es como se llega a la fractura y rompimiento de la convención, que lucha por integrar los intereses personales de Venustiano Carranza, Francisco Villa y Emiliano Zapata en intereses colectivos que beneficien al pueblo de México. Gracias a estos intereses personalistas se puede construir un período histórico que difiere completamente de la postura oficial, construida por los vencedores, donde se muestra que "la convención conió la suerte de un suceso vergon~oso".~ Yo creo y sostengo que es todo lo contrario, ya que este trabajo muestra con bases que lo vergonzoso no se encuentra en la convención sino en los personajes que la convocaron y posteriormente la traicionaron al grado de combatir en su contra. Además, esta organización se puede tomar como base para explicar y entender la conformación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, promulgada el 5 de febrero de 1917, por Venustiano Carranza, observando en el Capitulo Ill "Del Poder Ejecutivo" el

4 "El pueblo en marcha arrasando con la opresi6n, la explotaci6n y la injusticia: Bse es el cuadro que nos da la historia de la Revoluci6n Mexicana". La Soberana Convenci6n de Aauascalientes 1914-1918, Instituto Cultural de Aguascalientes, Mbx., 1989, pp. 130. "Campesinos, rancheros, obreros, artesanos, pequeAos propietarios; los despojados y los desarraigados hacen la Revoluci6n, sig$ficaba como la insurgencia de las masas que se enfrentaban a la decadencia y a la crisis del Estado olig8rquico, tradicional, y que pugnaban por evitar la concentraci6n del poder en un Ejecutivo Federal casi omnipotente". Lomas Maldonado, Arturo, "¿Qué Representa La Soberana Convenci6n Revolucionaria en los aiios 1914-1915?". MBx., UAM, 1998, pp. 17-18. Ram6n Puente dice: "A una revoluci6n no van generalmente los individuos apegados al orden, cualquiera que sea, ni los individuos normales en el sentido de la quietud de un régimen establecido, ni los conservadores del más mediano patrimonio, sino una minoría activa, calenturienta y rebelde, que arde en muchos esplritus, como llama devoradora, y encuentra prosélitos en donde quiera que existe un descontento" Schkmf-lan, Joseph H.L., México Tierra de Volcanes. De Hernán Cortés a Miquel Aleman., Carlos de Maria y Campos (trad.), Méx., Porrua, 1955, pp. 517. Además, "las revoluciones no siempre hacen 10 que deben, porque se ven forzadas a hacer solamente lo que pueden. Gil Robles establece que. "La revoluci6n en S[ no es mala, porque puede ser justa y oportuna cuando reúna las condiciones de rectitud por el fin y 10s medios, y además necesaria o útil, y no falta a la prudencia y a la moderation, compatibles con esos cambios y trastornos, e indispensables, bien que diflcil, en ellos. Es oportuna siempre que sea procedimiento supletorio del medio natural y de la manera ordinaria de efectuarse la tradicidn y el progreso a la vez, esto es, cuando deba y tenga que subsistir a la reforma. La cual es la mejora sucesiva, normal, proporcionada, no interrumpida ni Violenta, de las personas y de sus actos, de las instituciones y de sus leyes. De 10 cual se deduce que la revoluci6n: a.- ES un medio y vehículo extraordinario de progreso, b.- que puede ser útil 0 necesaria, lícita u obligatoria, c.- contraria a una tradici6n olala o injustificada. Y conforme y arm6nica con una tradici6n buena, Per0 imperfecta, a la Cual, con ese cambio repentino y violento, da la perfecci6n correspondiente al tiempo transcurrido, o acaso Superior a la Bpoca y el tBrmino medio y corriente de su cultura". Palavicini, Felix F., Historia de la Constituci6n de 1917 Tomo I . , M&., Gob.Edo.Tabasco, 1980, pp.46. ' OD cit., Lomas, pp. IO.

3

Page 7: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

otorgamiento absoluto de un poder que está desde estos momentos por encima de cualquier envestidura y de la misma ley, contraponiéndose radicalmente a los objetivos de la convención que es quitarle poder al ejecutivo, porque a partir de que se pone en marcha la Carta Magna, la figura presidencial se ha venido manteniendo sin que nada ni nadie pueda quitarle atribuciones y disfrazándose en una democracia representativa y popular. Gobernando a un pueblo que se canso de luchar y se conformo con migajas de normas constitucionales, ya que la ambición de imponer su autoridad y de ser el máximo poder en México, llevó a Venustiano Carranza al autoritarismo.

Tanta presión ejerció, que llegó al grado de permitirles únicamente la paz a aquellos individuos que se oponían a su mandato si se encontraban en el exilio.

* Así es como da inicio y se consolida el poder de la figura presidencial en México, respaldada por las armas y por una constitución formulada y creada para tal fin, además se entierran las aspiraciones de un pueblo que luchaba por su libertad y que se ha mantenido en la sumisión hacia un poder supremo autoritario respaldado por un Congreso de la Unión servil. Algunos podrían afirmar que la convención no representa la última batalla del pueblo de México en contra del autoritarismo, podría coincidir con ellos en algunos puntos, pero no llegaría ha afirmar lo contrario, ya que a partir de junio de 1916, no hubo en México ninguna fuerza política, ni militar, mucho menos social que pudiera derrotar al grupo carrancista, hablo de todos aquellos individuos que lucharon en contra de la convención y apoyaron al Primer Jefe en su desconocimiento y traición a la Convención Revolucionaria, porque si bien la sucesión presidencial después de Venustiano Carranza recayó en el grupo de Sonora, con los Generales Alvaro Obregón y Plutarco Elías Calles, quien fundó el partido del Estado, que gobierna hasta la fecha.

Con el objeto de alcanzar la hipótesis fije los siguientes objetivos:

Estudiar la figura presidencial después del triunfo de las fuerzas revolucionarias sobre las federales en 1914, con el fin de analizar el comportamiento político militar y social del individuo que ostenta el cargo de encargado del poder ejecutivo y con ello estar en la posibilidad de explicar el desarrollo de la lucha por el poder en México; Sin dejar de lado los enfrentamientos políticos y militares que se dan entre los grupos constitucionalistas (dirigido por Venustiano Carranza) y convencionistas (dirigidos por Francisco Villa y Emiliano Zapata) para obtener la supremacía en la dirección de la Convención Revolufionaria y así imponer sus condiciones en la Rfpública Mexicana. Y con esto, deducir que la persona que ostenta el puesto de encargado del poder ejecutivo disfraza su autoritarismo en un gobierno democrático, representativo y popular, manteniendo al pueblo gobernado en una farsa de legalidad y legitimidad.

Estudiar y analizar a Venustiano Carranza como figura máxima del poder en México, como Encargado del Poder Ejecutivo hasta que los diferentes grupos decidan la forma de gobierno que regirá en México. Por otro lado se estudia y se analiza el trabajo político de los Generales Francisco Villa y Emiliano Zapata, de los pocos que tienen la posibilidad de suprimir del cargo a Venustiano Carranza e imponer un gobierno bajo su dominio.

Analizar a la Convención Revolucionaria que se forma con el objeto de indicar el camino que seguirá el país, tomándose todas las atribuciones que una Convención Revolucionaria adquiere cuando el triunfo le favorece.

4

Estudiar y explicar como los integrantes de la Convención Revolucionaria deciden que este organismo se convierta en el contrapeso político militar de la figura presidencial o del Encargado del Poder Ejecutivo.

4

'

Page 8: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Estudiar y analizar las reformas políticas que realiza la Convención Revolucionaria, con el fin de restar poder al Encargado del Poder Ejecutivo y gracias a este análisis describir las nuevas características que.regirán al Presidente de la República a partir del día 5 de febrero de 1917. Ahora bien, se estudiaran estas características con el objeto de demostrar que la Constitución de 1917 fue creada con la finalidad de mantener a un individuo y posteriormente a un grupo en el poder.

Durante el proceso de trabajo de esta investigación histórica emplee como método de aplicación científico la deducción, porque parto de la conformación de la Convención Revolucionaria y concluyo con el análisis de la figura presidencial o el encargado del poder ejecutivo, así como la implicación en la formación de la Constitución de 1917 en lo referente a la división de poderes. Porque el trabajo histórico se crea por medio del análisis y critica de sus fuentes, dos elementos indispensables para llegar a la aproximación máxima de una explicación de la realidad histdrica.

La elaboración de este trabajo me llevó a seleccionar fuentes primarias y secundarias, a las cuales aplique la critica y el análisis, tratando de mantener la objetividad en el estudio de este proceso histórico.

Esta critica me llevó a determinar que el Archivo Histórico de la de Secretaria de la Defensa Nacional, es una fuente indispensable cuando se habla de movimientos armados en México, ya que cuenta con toda una serie de mensajes que se originan directamente en la batalla, así como el parte final de la contienda militar, además tiene documentos que giran los gobernadores al Secretario de Guerra y Marina informando diferentes avances de los rebeldes como de las tropas federales. Por otro lado el Archivo General de la Nación, tiene el fondo llamado "Convención de Aguascalientes", el cual resguarda 10 cajas de información que se generó en el período; esta bastante completa y se pude construir el proceso con estos documentos, el Único problema es que los documentos no se encuentran ordenados temáticamente, aunque guardan un cierto orden cronológico. Pero, insisto es una de las fuentes más completas para hablar del organismo de estudio. Si realmente se quiere hablar del período y precisarlo entonces se debe de consultar el Archivo Personal de Vito Alessio Robles, que desafortunadamente se encuentra ene el estado de Coahuila, pero este archivo tiene toda una colección de documentos escritos por el mismo Alessio en forma de diario donde se escribe lo más importante de las sesiones, además cuenta con un tomo que esta escrito en taquimecanografía, que habla de las sesiones que presencio cuando era secretario de la Convención. Surgió una dificultad inició cuando personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia se presentó para clasificar y catalogar el archivo para su traslado, ya que empezaron a guardar y cerrar cajas con documentación que no se pudo revisar.

Además como fuentes bibliográficas primarias hay varias obras como el libro de Florencio Barrera Fuentes, Crdnica y debates de la Soberana Convencidn Revolucionaria, que incluye la crónica de diarios de la época en los días en que no hubo sesiones y ocurrieron cosas importantes o el libro de Isidro y Josefina E. de Fabela que recopilan un gran número de periódicos de la Convención en su obra Fuentes para la Historia de la Revolución Mexicana, Volúmenes XXII al XVII.

Juan Barragán Rodriguez escribio N Ejército Consfifucionalisfa y la Revolución Mexicana es una obra completamente carrancista, ya que todo lo que se expresa, tiene la particularidad de justificar la figura y actuación de Venustiano Carranza y por otro lado la de descalificar a sus opositores: La contra parte la encontramos la obra de Federico Cervantes quien al igual que Barragán vivieron los años de la Convención pero en bandos diferentes, la obra de Cervantes La Convención Nacional Revolucionaria. Su Origen, Su

5

Page 9: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Obra y Sus Fines, nos habla de autoritarismo de Carranza y de la traición de todos sus seguidores, así como de la reprobable actitud del Primer Jefe de la Revolución en contra de los convencionistas.

Por otro lado, estoy completamente de acuerdo can el análisis que hace Felipe Arturo Avila Espinosa en su obra N Pensamiento Econbmico, Polifico y Social de la Convenci6n de Aguascalientes al libro de Vito'Alessio Robles "El libro de Vito Alessio Robles, no obstante ser el testimonio de un participante directo en la Convencidn, simpatizante del villismo -aunque con una relativa independencia de éI- y que, por lo mismo, es un alegato de reivindicacidn y defensa de lo que fue la Convenci6n y, particularmente, la Divisidn del Norte, logra superar esta situacidn y convertirse en una obra muy completa, que da una visidn muy objetiva del fendmeno convencionista; a pesar de su parcialidad, me parece el mejor libro que hay sobre el tema, con mucha solidez en

: sus apreciaciones, y con la ventaja de poder hablar sobre acontecimientos de los que fue participante y testigo, y que son pow conocidos en la historia del período. Lo lamentable es que no haya concluido su trabajo y que éste no abarque la parte final de la

: Convencion11.6

No pretendo hablar de las cosas buenas y malas que presentan las fuentes para el estudio de la revolución mexicana, ni mucho menos de sus limitaciones, lo que sí quiero es indicar que libros como el de Michel Meyer, Alessio, Barrera, Barragh, y otros fueron de gran ayuda para la conformación de este trabajo.

'

' Avila Espinosa, Felipe Arturo, El Pensamiento Econ6mico. Politico Y Social de la Convenci6n de Aquascalientes, Méx., 1986, pp. 232.

6

Page 10: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

CAPITULO I

EL REGIMEN HUERTISTA.

La población de la Ciudad de México despierta el domingo 23 de febrero de 1913 con la siguiente noticia "El señor Presidente de la República (Victoriano Huerta) ha reunido su gabinete hoy a las doce y media de la noche, para darle cuenta de que los seiíores (Francisco I.) Madero y (José María) Pino SuArez, que se encontraban detenidos en Palacio (Nacional), a la disposición de la Secretaría de Guerra, fueron conducidos a la Penitenciaría, según estaba acordado cuyo establecimiento se :había puesto bajo la dirección de un jefe del Ejército esta misma tarde, para mayores y mutuas garantías; que al llegar los automóviles en que iban los prisioneros al tramo final del camino de la Penitenciaría, fueron atacados por un grupo armado y habiendo bajado la escolta para defenderse, al mismo tiempo que el grupo se aumentaba, pretendieron huir los prisioneros; que entonces tuvo lugar un tiroteo, del que resultaron heridos dos de los agresores y muerto otro de ellos, destrozados los autos y muertos también los dos prisioneros.

El señor Presidente y su gabinete resolvieron que al punto la autoridad judicial militar, a quien compete el conocimiento de atentados contra presos militares, como de hecho lo eran los señores Madero y Pino Suárez, practicaran una estricta averiguación, con intervención directa del presidente de Justicia Militar y que en ese acto, el presidente Ministro de Justicia pidió que terminadas las averiguaciones previas y por tratarse de un

- caso tan excepcional, interviniera el Procurador General de la República. !

El Gobierno deplora lo acontecido y precisamente deseando atender las : necesidades de salud pública, había encargado esta tarde al señor Ministro de Justicia, I que presentara un proyecto el lunes próximo, para poder proceder directamente contra los

detenidos, por diversas responsabilidades, al propio tiempo que verificaba esfuerzos para que los familiares del señor Madero ayudaran a facilitar la resolución de esta difícil y peligrosa situación.

t I # Lleno el gobierno de deseos de garantizar, al mismo tiempo que el de garantizar a los prisioneros, había nombrado esta tarde director de la Penitenciaría, al coronel Luis Ballesteros, dándole severísimas instrucciones para cualquier evento.

El gobierno asegura que la sociedad quedará satisfecha. Están ya detenidos los jefes de la escolta y recogidos todos los datos previos; así quedará aclarado este desgraciado evento por lo demás muy explicable en las actuales dolorosas circunstancia~~~.~

Ante los hechos el ciudadano Heriberto Barrón presentó una acusación ante la Cámara de Diputados contra el General Victoriano Huerta, "Heriberto Barrón, ciudadano mexicano en uso de mis derechos civiles, políticos, ... respetuosamente expongo: Que por el honor de la República Mexicana, nuestra Patria, y por la justa reivindicación de su buen nombre, ultrajado y envilecido mientras gobierne en México un reo convicto ante todo el mundo civilizado de graves delitos que merecen la pena de muerte, como a continuación lo demuestra, me constituyo ante esta honorable Cámara de Diputados, acusador del

'Leander de Bekker Jean, De como vino Huerta v cdrno se fue ..., "El Caballito", Méx., 1978, pp. 189-190. 7

Page 11: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

llamado Presidente de la República Mexicana, general de división Victoriano Huerta, por los delitos de rebelión, traición, usurpación de funciones y violencias contra prisioneros o presos".8 El 9 de febrero de 1913, liberado de la prisión en que se encontraba, acusado del delito de rebelión, el general retirado Felix Díaz (sobrino del exmandatario mexicano Porfirio Díaz, derrotado por la facción revolucionaria encabezada por Francisco 1. Madero y su famoso Plan de San Luis), con un grupo de tropas y paisanos, se levantó en armas contra el gobierno constitucional de la República, ocupando el llamado edificio de la Ciudadela en la Ciudad de México y declarando el desconocimiento como Presidente electo de las últimas votaciones y a los poderes legalmente constituidos a partir de este triunfo.

El Presidente Constitucional de la República Mexicana, Francisco 1. Madero, electo durante el gobierno provisional del licenciado L. de la Barra, en elección absolutamente legal, la primera habida en México después de treinta y cuatro años del gobierno dictatorial del general Porfirio Díaz, se refugió en Palacio Nacional y encomendó el mando de las fuerras al General Victoriano Huerta en cuya lealtad confiaba la defensa de su propia :Nida y del honor y supervivencia del gobierno constituido.

Las fuerzas del gobierno constitucional al mando del general Victoriano Huerta, estuvieron desde el 9 de febrero hasta el 18 del mismo mes a medio día, combatiendo a los rebeldes sin llegar a obtener una victoria decisiva. El día 17 de febrero, las tropas leales de guarnición en Palacio Nacional, fueron sustituidas por las del traidor Aureliano Blanquet y después de una o varias conferencias del general Huerta con el embajador americano Henry Lane Wilson, aquel decidió traicionar al gobierno constituido, lo que hizo al día siguiente. El día 18 de febrero entre la una y las dos de la mañana, el general Victoriano Huerta, secundado por el de igual clase Aureliano Blanquet, se declaró en rebeldía con las tropas que tenía a su mando y ordenó, la aprehensión del Presidente Constitucional Francisco 1. Madero, del Vicepresidente José M. Pino Suárez, de algunos miembros del Gabinete, del Gobernador del Distrito Federal, del diputado al Congreso de la Unión, Gustavo Madero, poco después, cruel y cobardemente asesinado, reteniéndolos en Palacio Nacional.

"Mediante los buenos oficios del embajador americano Henry Lane Wilson, que en toda esta horrible tragedia de nuestra historia nacional, ha desempeñado un papel odioso, el general Victoriano Huerta tuvo un arreglo con el general rebelde Félix Díaz, que fue firmado o apalabrado en la Embajada Americana.

I ' I En virtud de ese arreglo, estipuló que Victoriano Huerta asumiera la Presidencia

Provisional de la República, aceptando un gabinete nombrado en parte por éI y en parte por el general Díaz y que convocaría a elecciones ayudando a Félix Díaz a obtener mediante una elección, la presidencia definiti~a".~

Mediante amenazas contra la vida del Presidente y Vicepresidente de la República, se obtuvo que estos funcionarios firmaran la renuncia de sus altos puestos, bajo la condición de que tal renuncia sería depositada en manos de dos de los plenipotenciarios residentes en la ciudad de México y presentada al Congreso hasta que el Presidente y Vicepresidente estuvieran a bordo de un vapor de guerra cubano, anclado en el puerto de Veracruz, para conducirlos al extranjero, donde quedarían en libertad. La renuncia fue puesta en manos del Secretario de Relaciones Exteriores de la República Mexicana, Licenciado Pedro Lascuráin quien se encontraba libre bajo su palabra, en la Ciudad de México. Sin cumplir loapactado y siempre valiéndose de las amenazas, de la

~

'lbid. pp. 180. 'idem., pp. 182.

~~ ~

8

Page 12: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

presión y del terror infundido por el asesinato del Diputado al Congreso de la Unión Gustavo A. Madero, cometido con lujo de crueldad en La Ciudadela, el miércoles 19 de

. febrero, el Congreso de la Unión fue comprometido a reunirse, en el edificio de la Cámara de Diputados rodeado por las fuerzas del traidor Huerta, el Secretario de Relaciones Exteriores, fue obligado con amenazas a presentar las renuncias del Presidente y Vicepresidente que se hallaban en su poder, las que fueron inmediatamente aceptadas por un Congreso acobardado;" conforme a lo prevenido en la Constitución," el Secretario de Relaciones Exteriores, que se hallaba presente en el edificio, asumió la Presidencia Provisional, nombró Secretario de Gobernación a Huerta, renuncia a la presidencia provisional y el nombrado Secretario de Gobernación, después de aceptada la renuncia de P. Lascuráin por el Congreso, quedó al frente de los destinos de nuestra Patria con el carácter de Presidente Provisional consumando así la usurpación. "He aquí como El Noti'cioso Mexicano, periódico notoriamente amigo del gobierno usurpador, da cuenta el 20 de febrero de estos acontecimientos realizados la víspera: "La Cámara en su totalidad, aceptó la renuncia de Madero y Pino Suárez y prestó la protesta de ley como Presidente interino al licenciado Lascuráin, sin derecho a salir de la Cámara de Diputados hasta que a su vez presentara la renuncia de su alto puesto, después de firmar el nombramiento de Secretario de Gobernación en favor del general Huerta para que este militar asumiera el cargo de Presidente de la República interino".'* En toda esta comedia, tratando de dar un barniz de legalidad a la traición y al crimen, sólo se ve la mano de la violencia armada como medio de asaltar el poder.

AI concluir la Decena Trágica de febrero de 1913, los habitantes de la capital se lanzaron jubilosos a las calles, adornaron las fachadas de sus casas y, en unión de la prensa, se solazaron en proclamar las glorias de los vencedores y en condenar a los caídos. La alta burguesía, integrada por terratenientes, banqueros, comerciantes e industriales, no sólo vio el fin de aquellos días de horror como la mayoría de la gente, sino el término de dos años de zozobra, pues confiaban en que el nuevo gobierno iba a restablecer las condiciones políticas, sociales y económicas en las que había prosperado.

Victoriano Huerta se instaló en Palacio Nacional el 20 de febrero. Integró su gabinete con una mayoría felicista, la cual ingenuamente pretendió primero dirigir a Huerta para después sustituirlo con Félix Díaz, pero Huerta permaneció en la presidencia 17 meses y su gobierno fue totalmente dictatorial a partir del 10 de octubre de 1913, fecha en que disolvió el Congreso de la Unión. "El pacto de la Embajada sólo le sirvió para encumbrarse en el poder y con disimulo e intrigas fue debilitando progresivamente al felicismo y engendrando al huertismo. Entre lasbrimeras medidas que tomó, estuvo la de t sustituir con sus incondicionales a los miembros del gabinete que surgieron del Pacto de la Embajada; el puesto clave de Secretario de Gobernación se lo encomendó a Aureliano Urrutia el 24 de abril de 1913. De los demás secretarios de Estado, basta decir que entre junio y octubre del mismo año se sucedieron varios hombres. Sólo Aureliano Blanquet permaneció en la de Guerra desde junio de 1913 hasta la caída de Huerta, pues ni Urrutia

'"'La cámara de diputados, bajo la presidencia del diputado Francisco Romero, pone a discusi6n la renuncia, la que despues de largos debates es aceptada por 123 votos. Votaron en contra los Diputados: Luis Manuel Rojas, Perfecto M6ndez Padilla, Leopoldo Hurtado Espinoza y Francisco Escudero L6pez Portillo" en: Sayes Helu, Jorge Sianificaci6n Histórico - Política de la CBmara de Diputados de la XXVl Leaislatura Federal., Instituto Nacional de Estudios Históricospe la Revoluci6n Mexicana, Mbx., 1979, pp. 143.

Labastida, Horacio, "Las Luchas Ideológicas en el siglo XIX y la Constituci6n de 1857" en:.Santiago Oiiate, Los Derechos del Pueblo Mexicano. México a Través de sus Constituciones. Tomo I I , Méx., Porrua, 1978, pp. 325-327, (Constituci6n Política de los Estados Unidos Mexicanos 1857). (Reproducci6n Facsimilar). l 20p cit., Leander, pp. 184.

11

9

Page 13: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

se salvó en aquel torbellino, ya que a mediados de septiembre de 1913 fue sustituido por Garza Aldape, que obviamente era el comodín para cualquiera de las secretarias"."

El nuevo gabinete, tal como lo estipulaba el Pacto de La Ciudadela, prestó juramento a su Cargo en la tarde del 20 de febrero. Sólo uno de los secretarios designado se negó a aceptar el nombramiento. Díaz y Huerta habían acordado que David de la Fuente sería Secretario de Comunicaciones. De la Fuente era oficial orozquista de modo que Huerta y Díaz creyeron que su nombramiento en el gabinete ayudaría a garantizar la sumisión de Orozco al nuevo gobierno. Aunque Orozco envió un telegrama de felicitación al nuevo Presidente, todavía no estaba dispuesto a brindarle su apoyo, por lo que De la Fuente declinó la cartera que se le ofrecía. Huerta decidió por el momento dejar este cargo vacante y tras consultarlo con Díaz llamó a Rafael Vázquez a la subsecretaría de Comunicaciones. Significativamente, el .Congreso aceptó al gabinete en masa sin mayores averiguaciones o debate en seno.

En el pacto de la Embajada no se había determinado la fecha en que se efectuarán las elecciones, pero muy pronto empezaron a presionar los felicistas para que se llevaran a cabo. Huerta osciló entre promesas y retrasos mientras no se consideró suficientemente fuerte. Primero prometió que tendrían lugar el 27 de julio, luego que el 26 de octubre de 1913. De modo que todavía los diputados de la XXVl Legislatura lanzaron la convocatoria para ellas en los últimos días de mayo y el Senado aprob6 la ley electoral que, entre otros puntos, estableció que sólo se requería la participación del 51% de los distritos electorales, para no tomar en cuenta los que estaban en el poder de los revolucionarios. Algunos partidos políticos creyeron que sería posible la contienda electoral y postularon candidatos a la presidencia: el Democrático a Félix Diaz, el Católico a Federico Gamboa, el Liberal Republicano a David de la Fuente. Otros dos partidos cayeron en la trampa, pero se retiraron antes de las elecciones: el Antirreeleccionista y el Liberal Independiente, que postularon a Francisco Vázquez Gómez y a Manuel Calero, respectivamente. "Huerta eliminó a los dos candidatos presidenciales más pbligrosos: a Diaz lo mantuvo indefinidamente en los Estado Unidos y como a su regreso :a Veracruz intentaron arrestarlo, acabó huyendo a Cuba; a León de la Barra lo mandó a Washington y a Londres en misión dipl~mática".'~

En la fecha señalada para las elecciones, Huerta ya no tenía contrincantes de peligro ni secretarios de Estado impuestos poi el Pacto de la Embajada, había disuelto el Congreso de la Unión, e) poder judicial era servil, las gobematuras de lo? estados estaban en manos de sus incondicionales y la gente vivía atemorizada. Lo que significaba que la situación era muy adecuada para efectuar una farsa de elecciones generales. "Para completar la obra, el día 26, las autoridades obligaron a los empleados del gobierno y a los militares a votar por la formula Huerta y Blanquet, para Presidente y Vicepresidente respectivamente; tuvieron a su cargo las casillas, cometieron fraude y ejercieron violencia. El Congreso que resultó "electo", tuvo una reunión preliminar el 15 de noviembre, y en la del dia 20 nulificó la elección presidencial, aduciendo que Huerta había triunfado pero estaba incapacitado legalmente para ser candidato porque ocupaba la Presidencia Provisional; además de que no se había instalado el número reglamentario de casillas. En consecuencia Huerta permaneció en el poder y el nuevo Congreso le confirmó las facultades extraordinarias que por su propia cuenta había asumido unos días antes".15

13 Ulloa, Berta "La lucha armada (1911-192Op en Daniel Cosio Villegas (Coord) Historia General de México.

Ibid. pp. 1111. &orno 2, El Colegio de México, Méx., 1981, pp. 1109.

"Gipp. 1111. 10

Page 14: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. . . . ...

Una vez debidamente constituido el gabinete, Huerta instruyó a dos de sus nuevos secretarios a comenzar el trabajo en los asuntos que a su juicio tenian prioridad. AI Secretario de Relaciones Exteriores, Francisco León de la Barra, se le pidió redactar de inmediato cartas autógrafas para solicitar el reconocimiento por parte de los jefes de Estado extranjero. El Presidente encargó a su Secretario de Gobernación, Alberto Garcia Granados, realizar el anteproyecto de una ley de amnistía destinada a animar a todos los bandos rebeldes a deponer las armas, con lo que de esa manera se contribuiría a la consolidación de la paz en toda la República. El Secretario de Gobernación, Garcia Granados, también se dediu5 de inmediato al desempeiio de su cargo. "La ley de amnistía concedía plena inmunidad por delitos políticos a todos aquellos rebeldes que depusieran sus armas en quince dias. Los cabecillas de los distintos bandos fueron llamados a presentarse ante el gobemador del estado o jefe político más cercano, a la brevedad posible, para que se acogieran a la ley de amnistía."" Desde las primeras horas de la noche, ya en su primer día de trabajo, el Presidente Huerta empezó a recibir las manifestaciones de lealtad de algunos gobernadores de los estados. Si bien la mayoría de los gobernadores, durante la Decena Trágica, habían comprometido con Madero su miis firme lealtad, uno por uno se fueron alineando con el nuevo régimen, "El Único motivo de alarma el día 19 de febrero, lo fue la actitud que asumieran el gobernador y la legislatura del estado de Coahuila. El gobernador Venustiano Carranza censuró la legitimidad del acceso de Huerta a la Presidencia Interina. El argumento fue que el Senado no tenía las facultades necesarias como para poder designar Primer Mandatario, y con apoyo en eso, Carranza exhortó a su propia legislatura a adoptar una resolución apropiada en la que se sostuviesen los "principios legales y los intereses del país". La legislatura no necesitaba de mayores acicates y fue así como ese mismo día promulgó una resolución en la que le retiraba su reconocimiento al régimen y le otorgaba al gobemador poderes extraordinarios en lo militar. Si bien Carranza les envió una circular telegráfica a todos los gobernadores en la que les instaba a seguir su ejemplo, entonces no encontró ningún eco"."

"Carranza escogió mal el argumento de ataque, y además, tergiverso el problem4 del ascenso de Huerta a la Presidencia. El Senado no lo había designado Presidente Interino de la nación. Lo que sucedió fue que la Cámara de Diputados confirmó sg nombramiento como secretario de Gobernación y luego su acceso constitucional a la' Presidencia. Sin duda, la maniobra política constituía una escandalosa burla al espíritu de la ley, pero con el tecnicismo cumplido al pie de la letra". En la misma página de la obra de Michel Meyer (citado en la nota a pie anterior) hace una nota aclaratoria: "Felipe Tena Ramifez, decano de los abogados especialistas en Perecho constitucional mexicano, de modo alguno partidario de Victoriano Huerta, llega a la conclusión que "las formalidades constitucionales se observaron impecablemente ... de aquí que el gobierno de Huerta no haya sido producto de la usurpación. El jurista que quiera determinar con toda precisión el caso debe poner de relieve los hechos rigurosamente exactos desde el punto de vista formal, aun si a juicio moral e histórico llegase a considerar que este (régimen) es el ejemplo más tristemente célebre de traición que se haya perpetrado en nuestra historia". Tena Ramírez es cuestionado, aunque no muy convincentemente. Por una parte Amaya Morán "sostiene que la Constitución no le otorgó explícitamente al Presidente Interino (Lascuráin) las facultades necesarias para elegir al secretario de Gobernación y luego dimitir. Así, al dimitir la Presidencia tendría que haber pasado a Manuel Vázquez Tagle, el secretario de Justicia y siguiente en el orden de sucesión".'*

I6Meyer Michel C., Huerta un retrato Dolltico, Domes, MBx., 1983, pp. 74. 17

1 8- Ibid. PP. 74-75. . Aparece el siguiente comunicado "La Camara de Diputados del Congreso de los Estados Unidos Mexicanos

(sic), en ejercicio de la facultad que le confieren los articulos 72, inciso A. Fracci6n I I , y 81 y 82 de la Constituci6n General de la República (1 857) y las leyes de 13 de mayo de 1891 y 6 de mayo de 1904, decreta: Articulo lo.- Se admite la renuncia que presenta a esta honorable Camara el ciudadano licenciado

11

Page 15: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Solamente la postura belicosa de Carranza en el norte echaba a perder la espléndida iniciación de Huerta en la Presidencia; pero aun así había cierto optimismo. El 21 de febrero, dos días después de haberles retirado su reconocimiento. Carranza resolvió enviar a dos agentes a la ciudad de México para iniciar negociaciones: Eliseo Arredondo, diputado federal, y Rafael Arizpe y Ramos, ingeniero de profesión, fueron los designados. El gobernador también expresó su esperanza de que los problemas pendientes pudieran resolverse satisfactoriamente. De igual significación fue que el telegrama de Carranza, para presentar a la delegación, estuviera dirigido al señor Victoriano Huerta, Presidente de la República.

A fines de febrero de 1913, apenas una semana después de los asesinatos, Huerta y su gabinete habían llegado a la conclusión de que la prioridad número uno era la pacificación del país. Casi de inmediato recibió las protestas de lealtad de los gobernadores y aunque muchos más los seguirian, Venustiano Carranza, a pesar de lo alentador de los informes de sus dos negociadores que enviara a la ciudad de México, se resolvió a suspender las pláticas y poner a Coahuila en estado de guerra.

La resolución del gobemador Carranza de pronunciarse en contra del gobierno federal después de haber enviado a sus agentes personales a la capital, prevenidamente para concertar un acercamiento, no fue simplemente resultado de la indignación moral que le causara la noticia de los asesinatos. En el curso de la primera semana que pasara de haber asumido Huerta el poder, Carranza dejó abiertas sus opciones. Necesitaba tiempo para ver de dónde soplaban los vientos revolucionarios y las comisiones de paz, aunque aparentemente negociaban de buena fe, le estaban comprando tiempo. Con sólo un pequeña fuerza militar a su disposición en su estado natal y pocos motivos para esperar la defección en masa de los federales a su bando, la revuelta inmediata hubiera sido tan suicida como las de Bernardo Reyes y Félix Díaz en contra de Madero. Carranza sabía que los asesinatos eran de trascendencia, así que pensaba que podría posiblemente inclinar la delicada balanza a su favor. Para el primero de marzo de 1913, se había perdido toda esperanza de reconciliación. Pocos días después, el cuartel general carrancista expediría una declaración formal en la que le retiraba su reconocimiento al gobierno.

Carranza encontró sus primeros aliados en el estado de Sonora. El gobernador, José María Maytorena, maderista tibio, no estaba dispuesto a seguir el ejemplo de Carranza, pero los elementos antihuertista? del estado, encabezado por Alvaro Obregón, 1 Plutarco Elías Calles, Benjamín Hill y Salvador Alvarado, lo presionaron a fondo. A fines del mes, el gobernador Maytorena, que no deseaba tomar la resolución por sí sólo, le pidió a la legislatura del estado un permiso para ausentarse por seis meses; su sucesor el general Ignacio L. Pesqueira, accede a las exigencias de los seguidores de Obregón y se alía a los carrancistas. El 5 de marzo, la legislatura del estado hizo oficial esta resolución al aprobar un decreto que le retiraba el reconocimiento al gobierno federal.

Tres semanas después de haber desconocido Sonora a Huerta, un tercer estado norteño, Chihuahua, siguió su ejemplo. El último gobernador maderista de Chihuahua, Abraham González, había sido arrestado poco después de que Huerta tomara el poder y desde ese entonces, el gobierno estaba a cargo del general Antonio Rábago, militar de carrera, completamente leal al nuevo Presidente. Aunque el estado permanecía técnicamente en las filas de los federales, a fines de marzo Francisco Villa (Pancho Villa) había asumido la jefatura militar de una formidable insurrección en Chihuahua. "La alianza

'

Pedro Lascurhin, del cargo de Presidente interino de la República. Artlculo 20.- Llamese al ciudadano general Victoriano Huerta, Secretario de Estado y del Despacho de Gobernaci6n, para que preste la protesta de ley como Presidente interino de la República". OP cit., Leander pp. 166. Q P . Meyer pp. 75.

12

Page 16: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

de Villa con Carranza y Obregón fue sellada a mediados del mes, y la proclama de defección fue lanzada formalmente el 28 de marzo de 1913".19

t

''Op cit., Meyer, pp. 95. 13

Page 17: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

CAPITULO II

EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA.

Históricamente podemos fijar el día 23 de febrero, como la fecha en que las fuerzas coahuilenses efectuaron el primer acto hostil y en la cual Venustiano Carranza vistió el traje de campaña, que fue cuando al obscurecer salió, por primera vez de Saltillo, con rumbo a Ramos Arizpe por el camino carretero que va paralelo con la línea ferr6cam'lera que conduce a Piedras Negras, y en cuyo trayecto dictó su primera orden

: militar a Jacinto B. Treviño y Miguel M. Acosta, en el sentido de asaltar y detener el tren de pasajeros que se aproximaba a Saltillo, con instrucciones de apoderarse del convoy, haciéndolo regresar a la Estación de Ramos Arizpe a disposición del pequeño ejército

i para las primeras operaciones militares de la Revolución.*'

Venustiano Carranza estaba satisfecho con el apoyo logrado en el Estado de Sonora y Chihuahua, pero sabía que era insuficiente. El 26 de marzo de 1913, promulga el Plan de Guadalupe. "El señor Carranza, al frente de sus guerrilleros, hizo rumbo al Norte el día 23, pasando por las haciendas del Saucillo, San Diego, Estación Santa María y La Gamuza, para llegar, el 25, a la Hacienda de Guadalupe, donde se dio un descanso a las tropas. Hasta entonces el movimiento armado que reconoce como origen las resoluciones tomadas por la Legislatura de Coahuila, a raíz de consumarse la traición de Victoriano Huerta, carecía de un estatuto o plan que concretara las causas del movimiento señalando su finalidad inmediata, (como en todo el proceso de la Revolución Mexicana, se ve marcado por esta característica de conformar un plan para tener alguna identidad en especial con el pueblo y que este pueblo se vea representado e identificado con los inconformes), y aun cuando no se encontraban reunidos todos los Jefes que habían respondido en Coahuila a su llamado, por virtud de las operaciones militares que estaban desarrollando, el señor Carranza estimó necesario proceder a la formulación de dicho plan, reunidos, al efecto, el día 26, a todos los elementos que lo acompañaban, y dictó al señor Alfredo Breceda, su secretario particular, el documento que históricamente se conoce como PLAN DE GUADALUPE, por ser este nombre del lugar en que fue suscrito y que sirvió de bandera al movimiento constitu 'onalista. Dice así: 7 I

"MANIFIESTO A LA NACI0N.- Considerando: que el General Victoriano Huerta, a quien el Presidente Constitucional don Francisco I . Madero había confiado la defensa de las instituciones y legalidad de su Gobierno, al unirse a los enemigos rebeldes en armas en contra de ese mismo Gobierno, para restaurar la última dictadura, cometió el delito de traición, para escalar el poder, aprehendiendo a los CC. Presidente y Vice-Presidente, así como a sus ministros, exigiéndoles por medios violentos la renuncia de sus puestos, lo cual está comprobado por los mensajes que el mismo General Huerta dirigió a los Gobernadores de los Estados comunicándoles tener presos a los Supremos Magistrados de la Nación y su gabinete. - Considerando: que los Poderes Legislativo y Judicial han reconocido y amparado en contra de las leyes y preceptos constitucionales al General Victoriano Huerta y sus ilegales y antipatrióticos procedimientos, y Considerando por último, que algunos Gobiernos de los Estados de la Unión han reconocido al Gobierno ilegítimo impuesto por la parte del Ejército que consumó la traición, mandado por el mismo General Huerta, a pesar de haber violado la soberanía de esos mismos Estados,

%arraghn Rodriguez Juan, Historia del Ei6rcito v d e la Revoluci6n Constitucionalista Tomo I ., Méx., Instituto Nacional de Estudios Hist6ricos de la Revolucibn Mexicana, 1985.p~. 89.

14

Page 18: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

cuyos gobernantes debieron ser los primeros en desconocerlo, los suscritos, jefes y oficiales con mando de fuerzas constitucionales, hemos acordado y sostendremos con las armas, el siguiente: PLAN: Primero. Se desconoce al General Victoriano Huerta como Presidente de la República. - Segundo. Se desconoce también a los Poderes Legislativo y Judicial de la Federación. - Tercero. Se desconoce a los Gobiernos de los Estados que aún reconozcan a los Poderes Federales que forman la actual administración, treinta días después de la publicación de este Plan. - Cuarto. Para la organización del Ejército encargado de hacer cumplir nuestros propósitos, nombramos como Primer Jefe del Ejército, que se denominará "Constitucionalista", al C. Venustiano Carranza, Gobernador del Estado de Coahuila. - Quinto. AI ocupar el Ejército Constitucionalista la ciudad de México, se encargará interinamente del Poder Ejecutivo el C. Venustiano Carranza, Primer Jefe del Ejército, o quien lo hubiera substituido en el mando. - Sexto. El Presidente Interino de la República convocará a elecciones generales tan luego como se haya consolidado la paz, entregando el Poder al ciudadano que hubiera sido electo. - Séptimo. El ciudadano que funja como Primer Jefe del Ejército Constitucionalista en los Estados cuyos Gobiernos hubieren reconocido al de Huerta, asumirá el cargo de Gobernador Provisional y convocará a elecciones locales después de que hayan tomado posesión de sus cargos los ciudadanos que hubieran sido electos para desempeñar los altos Poderes de la Federación, como lo previene la base anterior. - Firmado en la Hacienda de Guadalupe, Coahuila, a los veintiséis dias del mes de marzo de mil novecientos trece".21

Con el fin de propagar su movimiento y atraerse más conversos. AI acusar de traición a Huerta,22 pero sin hacer mención de los asesinatos, el Plan. les retiraba el reconocimiento no sólo al gobierno federal, sino también a todos los gobiernos de los estados que continuaran apoyando al Presidente, una vez transcurridos treinta días de la fecha del pronunciamiento. Pocas semanas después, Carranza convocó a una conferencia de rebeldes norteños en la ciudad de Monclova. Los representantes de los movimientos de Sonora y Chihuahua (Roberto Pesqueira V., Adolfo de la Huerta y Samuel NQvarro) se reunieron con el Primer Jefe y su ayudante, Alfredo Breceda, para allanar las diferencias y formalizar la alianza. Después de tres días de negociaciones, los delegados acprdaron respaldar el Plan de Guadalupe y pelear hasta el final. Roberto Pesqueira sería

f

"Ibid. pp. 97-98. z K c i t . Leander, Acusaci6n presentada ante la Camara de Diputados contra el General Victoriano Huerta, por el ciudadano Heriberto Barr6n. Este documento fue conocido por la Cámara de Diputados en sesión secreta, y turnada a la Comisi6n Instructora del Gran, Jurado. La Comisi6n no tom6 en consideraci6n la

ahora los preceptos legales, para demostrar que tales hechos estan clasificados en el C6digo de Justicia Militar y vigente en la República Mexicana, como rebeli6n y traicidn y castigados con la pena de muerte. El c6digo de Justicia Militar, vigente en la República Mexicana, dice en el capltulo Vo.: "Rebeli6n.- Artículo 313. - Serán castigados con la pena de muerte los militares que, substrayéndose a la obediencia del gobierno y aprovechándose de las fuerzas que mande o de los elementos que hayan sido puestos a su disposición, se alcen en actitud hostil para contrariar cualquiera de los preceptos de la constituci6n federal". Ahora bien, la Constituci6n Federal de la República Mexicana, previene lo siguiente: "Artículo ochenta y cinco. - Las facultades y obligaciones del Presidente son las siguientes: - IV. - Disponer de la fuerza armada permanente de mar y tierra para la seguridad interior y defensa exterior de la federaci6n". Se ve, pues, claramente que el general Huerta, al declararse en rebeldla con las fuerzas que mandaba y los elementos que habían sido puestos a su disposición por el gobierno, contrario el precepto citado de la Constitución Federal, privando al Presidente de la República del mando de las fuerzas armadas permanentes de mar y tierra, y merecen conforme al ya citado articulo 313 del C6digo de Justicia Militar, exactamente aplicable al caso, la pena de muerte. No hay duda de que el caso expuesto: la rebeli6n cometida por el general Huerta, reviste también los caracteres de traicidn y para demostrarlo, me bastara citar las siguientes disposiciones del C6digo de Justicia Militar: Capítulo XI. - Traici6n. - Artículo 312. - Se castigara con la pena de muerte a todo el que estando al servicio de la República: VIII. - Excite upa revuelta entre las tropas nacionales, o a bordo de un buque al servicio de la Nacidn o que navegue con bandera de guerra mexicana, cuando estos hechos los lleve a cabo al frente del enemigo. No puede caber la menor duda de que el general Victoriano Huerta, no s6Io excitó, sino llev6 a cabo una revuelta con las tropas nacionales al frente del enemigo y es reo del delito de traición, castigado con la pena de muerte. pp.180-183.

15

1 requisitoria porque el autor no se present6 a ratificarla. Pero cabe hacer menci6n por su contenido. Examinar6 1

Page 19: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

enviado a Estados Unidos para obtener el reconocimiento de Washington a la beligerancia.

La respuesta inicial del gobierno huertista a la revuelta del norte fue iniciar una purga de gobemadores cuya lealtad fuera en una u otra forma sospechosa. Aunque a principios de marzo la mayoría de los gobernadores de la República habían jurado obediencia a Huerta, el caso es que muchos habían sido maderistas que no tuvieron m4s remedio que hacerlo. Temerosos de que pudieran aliarse con los constitucionalistas del norte, Huerta empezó, a fines de febrero y principios de matzo, a sustituirlos uno por uno, poniendo en su lugar a militares de fidelidad incuestionable. Los primeros tres en ser reemplazados, todos acusados de ser simpatizantes de los constitucionalistas, fueron Rafael Cepeda, de San Luis Potosí; Alberto Fuentes D., de Aguascalientes, y Felipe Rivero, de Sinaloa. La política resulto contraproducente. AI sustituir bajo cualquier pretexto a los gobernadores, Huerta los arrojaba inadvertidamente, tanto a ellos como a sus seguidores, a los brazos de la oposición.

Casi al mismo tiempo, Huerta comenzó a esforzarse por ganar para sí la obediencia de dos importantes generales revolucionarios, quienes tenían grandes contingentes de combatientes a su mando: Pascual Orozco en el norte y Emiliano Zapata, en el sur. A fines de febrero, Huerta envió al efecto tres comisionados: Ricardo Garcia Granados, Antonio Herrejón López y Esteban Maqueos Castellanos a negociar con Orozco y fijar las condiciones bajo las que reconocería al gobierno. Las pláticas tuvieron lugar en Villa Ahumada, un pueblo pequeño en la vía del Ferrocarril Central entre la ciudad de Chihuahua y Ciudad JuSrez. Como la sumisión de Orozco se consideraba vital, Huerta estuvo de acuerdo en acceder a todas sus peticiones. Una semana después, Orozco informó al gobierno que si sus hombres eran equipados con armas y municiones, éI a su vez podría aportar entre tres y cuatro mil soldados, oportunamente aprovisionados para prestar servicio, tanto en Sonora como en Coahuila.

c

Las negociaciones entre el régimen huertista y los zapatistas de Morelos no progresaban mucho, aunque algunos jefes sureños, en lo personal, habían jcrado obediencia durante la primera semana. AI día siguiente de que Huerta asumiera la Presidencia, los zapatistas manifestaron sin lugar a dudas su posición atacando el pueblo de Tlalpan en el propio Distrito Federal. Una semana más tarde, Zapata notificó a sus subordinados que el gobierno huertista intentaba usar las negociaciones como pretexto para capturar y’ ejecutar a los jefes del movimiento, suriano. Huerta, quien no se desanimaba fácilmente, envió a Pascual Orozco, el padre del general chihuahuense, en comisión de paz para entablar pláticas con Zapata. Provisto de cartas de presentación del Presidente y de su propio hijo, Pascual Orozco padre les sugirió a los zapatistas aceptar términos similares a aquellos que los orozquistas habían ya acordado como precio de su sumisión. Zapata rechazó con gran enojo tal idea y acusó a Huerta y al ejército federal de haber traicionado a la Revolución y puso bajo arresto a los comisionados del gobierno federal. Si bien los rebeldes morelenses nunca se aliaron formalmente con los constitucionalistas norteños, Huerta se vio forzado, no obstante, a enviar tropas tanto a Morelos como a los estados del norte.

AI estallar la revolución constitucionalista, el ejército federal contaba quizá con cuarenta o cincuenta mil hombres (regulares e irregulares). Debido a que la Secretaría de Guerra formulaba planes para conducir tres grandes campañas en el norte y una en el sur, así como para mantener fuertes unidades en toda la República, para que lo que pudiera ofrecerse,, a principios ‘de marzo el secretario de Guerra, general Manuel Mondragón, declaró que esperaba aumentar hacia fines de abril, a ochenta mil hombres el ejército. Sin embargo, las labores de reclutamiento no tuvieron gran éxito, aunque se

a

16

Page 20: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. . . . _ . , . . . . . . ~ . . '. . : _ . . .

recurría a métodos como la leva, por lo que el Presidente Huerta resolvió aumentar la paga del soldado de uno a un peso cincuenta centavos al día. Pese al aumento, no se logró atraer reclutas, por lo que el objetivo deseado de ochenta mil nunca pudo alcanzarse.

Pero la pacificación resultó ser mucho más esquiva en el campo de batalla que en el estrado del Congreso. A fines de marzo, Alvaro Obreg6n había obtenido dos grandes victorias en Sonora. La ciudad fronteriza de Nogales cayó en manos de las tropas constitucionales el 14 de marzo y Cananea fue capturada una semana y media después. A fin de mes, las fuerzas de los rebeldes en el noroeste alcanzaban los ocho mil hombres, mientras que el gobierno apenas contaba con la cuarta parte de esa cifra. A mediados de abril, Obregón capturó su segunda ciudad fronteriza: Naco, en tanto que su compañero Benjamín Hill tomaba Alamos.

El movimiento rebelde en Chihuahua siguió un curso similar. Para cuando Pancho Villa llegara a principios de abril al estado, Manuel Chao, Tomás Urbina, Rosalió Hemández y Toribio Ortega ya habían tomado las armas en con'tra del nuevo régimen. Sin embargo, antes de que el mes finalizara, Villa, nunca satisfecho con su subordinación, estaba firmemente al mando. AI correr de abril, alcanzó una sene de victorias sobre las tropas gubernamentales en Ciudad Camargo, Hidalgo del Parral y Ciudad Guerrero y un mes más tarde estaban amenazando a la gran y bien equipada guarnición federal del general Salvador Mercado, en la capital del

La revolución constitucionalista se inició con buenos augurios en Sonora y Chihuahua, pero el Primer Jefe se enfrentó a una situación mucho más dificil en su estado natal. El 7 de marzo, en su primer encuentro, nada más que una escaramuza con los federales en la Hacienda de Anhelo, el general Trucy Aubert obligó a Carranza a ordenar una retirada precipitada. Dos semanas después, el Primer Jefe fue derrotado decisivamente en S& ataque a Saltillo, la capital de Coahuila, donde tuvo más de cuatrocientas bajas, hcluyendo prisioneros. El curso que siguieron los acontecimientos en la primavera, se prolcjngó hasta principios del verano. El gobierno federal pudo contener a los constitucionalistk en el noreste de México, pero el movimiento rebelde seguía creciendo en el noroeste y el centro norte del país.

Pese a que las insurrecciones en lo general se les pone la etiqueta de constitucionalistas (y en algunosicasos, incluso, de zapatistas) la coordinación er) realidad fue casi siempre mínima. La distancia física que separaba los movimientos rebeldes locales de las plazas fuertes constitucionalistas, era lo que por lo general determinaba la cooperación. Carranza, ocupadísimo en tratar de movilizar sus trenes al frente del ataque en el norte, no podía ir más allá de ofrecerles apoyo moral a los brotes aislados de rebelión que existían en toda la República. Prácticamente no se puede hablar de que existiera enlace con los zapatistas de Morelos, y para colmo, en muchas ocasiones los constitucionalistas expresaban su temor de que quizá los zapatistas se vendieran a Huerta. Aunque desde el punto de vista gubernamental, la cuestión de la afiliación constitucionalista era apenas poco más que asuntos bizantinos, la cosa concreta era que cada vez que se informaba de un nuevo disturbio, había que enviar tropas, proveer de abastecimientos y de hacer frente a la nomina de pagos. Además, como casi todos los esfuerzos se dirigían a sofocar los levantamientos locales, los movimientos carrancistas y zapatistas ganaban tiempo para madurar.

AI principio, Huerta no depositó toda su confianza en la fuerza militar. En la primavera de 1913 se hicieron varios intentos por negociar las diferencias principales con

23 OD cit., Meyer, pp. 96-99. 17

Page 21: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. . . ." *. . . ..

los rebeldes. Estos intentos se iniciaron a mediados de marzo, fecha en la que el Presidente decretó una nueva ley de amnistía absoluta para revolucionarios que depusieran las armas. A fin de darle fuerza al decreto, el doctor José S. Sáenz, amigo personal de David de la Fuente, Secretario de Comunicaciones, fue enviado a Sonora con el propósito de convencer a Obregón y a su Estado Mayor de deponer las armas y negociar. La misión fue un completo fracaso. Rafael Cepeda, el primer enviado gubernamental al cuartel general carrancista, no tuvo mayor 6xito, en tanto que a Luis F. Saldatia, su sucesor en la mesa de negociaciones, le fue aún peor. Carranza no sólo le informó que no había nada que discutir, sino que lo tomó prisionero por impertinente. Con el objeto de mitigar el clamor público que produjeron el arresto de un negociador que portaba bandera blanca en la mano el cuartel general constitucionalista decretó posteriormente que todos los enviados de paz serían encarcelados en cuanto se les capturara. Los futuros emisarios de Huerta sabrían que les esperaba.

Pese a la repulsa de Zapata a los primeros sondeos del gobierno, Huerta se mantuvo firme en sus esfuerzos de lograr la paz en el estado sureño. Se hicieron vagas promesas de reforma agraria, sin resultado alguno. Zapata estaba tan disgustado que para el verano, ordenó la ejecución del padre de Pascua1 Orozco, el principal negociador de paz en el estado, a quien Zapata ya tenía prisionero.

Sin tener virtualmente ninguna esperanza de convencer ni a constitucionalistas ni a zapatistas de deponer las armas por negociación; además, con levantamientos aislados que se iban propagando por toda la República, Huerta lanzó su primera ofensiva a fines de la primavera y durante todo el verano de 1913. A mediados de abril, el gobierno organizó las campatias contra los zapatistas en manos del general Juvencio Robles, oficial de carrera cuya reputación de proclividad hacia los excesos militares innecesarios rivalizaba con la del propio Presidente. Sus órdenes especificaban que debía asumir el gobierno militar del estado, y sus modales eran de tal naturaleza, que al negarse la legislatura de Morelos a ser regidti por decreto presidencial, Robles se limitó a arrestar al gobemador Benito Tajonar y a Ids legisladores, a los que envió a la Penitenciaría del Distrito Federal. El arresto de Icjs diputados estatales y del gobernador, provocó un acalorado debate en la Cámara Federal, donde el diputado Juan Sarabia, de San Luis Potosí, encabezó el ataque contra la flagrante violación por parte del gobierno a la soberanía del estado. No obstante, Huerta persistía en sus métodos. Así que sin más ni más, se comprometió en el apoyo total del nuevo gobernador militar de Morelos.

# @ Zapata respondió con el ataque y la ocupación de la población de Jonacatepec, antes en manos del general Higinio Aguilar. El mismo Aguilar fue hecho prisionero y después de ser perdonado por Zapata, jugó breve tiempo con la idea de unirse a la causa rebelde. A pesar de la presencia de la fuerte columna de tropas federales del general Robles, el movimiento en Morelos continuó en aumento. A fines de mayo, los lugartenientes de Zapata estaban operando casi con toda libertad en el vecino estado de Guerrero, y muy pronto también lo harían en Puebla. El general Robles se condujo haciendo honor a su reputación de crueldad con una campaña de tipo devastador. Se arrasó todo lugar poblado de sospechoso de darles abrigo a "bandidos", se tomaron rehenes, en ocasiones se les ejecutó, a miles de personas se les arreó como ganado a los "campos de colonización", que no eran otra cosa que campos de concentración. Los ZapatiStas tampoco andaban mal en esto, eran francos y abiertos culpables de intimidación y terrorismo irresponsable. La consecuencia de tales procederes fue que las campañas de Morelos llegaran a contarse entre las más feroces que se padecieran en la

'

18

Page 22: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. . . ~.

Revolución Mexicana. Cuando el verano terminó, Robles sólo dominaba las poblaciones principales. Zapata era indiscutiblemente.el amo del Morelos

A principios de septiembre, Huerta hizo volver al general Robles a la ciudad de México y lo relevó del mando. A su sucesor, el general Adolfo Jiménez Castro, quien también ostentaba el título de gobernador militar, no le iría mejor. La experiencia de . Huerta, adquirida durante las campatias mayas, en Yucatán, le habían enseñado algo de las dificultades que presenta la táctica guemllera, pero no pudo idear una estrategia con la cual contrarrestar la táctica de "pega y corre" de los zapatistas.

El 9 de mayo de 1913, comenzó la ofensiva del Presidente Huerta en los estados del norte, al asignársele al general Pascua1 Orozco hijo, mil doscientos hombres y órdenes de marchar hacia el norte, librar batalla con el enemigo en donde lo encontrara y finalmente, reforzar la guarnición federal de Salvador Mercado en la ciudad de Chihuahua. Una semana después de que Orozco abandonara la capital, Carranza, en un gesto singularmente intemperante, anunció que un decreto proclamado cincuenta y un años antes por Benito Juárez, una de cuyas disposiciones era la de la ejecución sumaria de los soldados enemigos que cayeran capturados, entraba de nuevo en ~igor.~'Más convencidos que nunca de que la virtud moral toda residía en exclusiva en sus seguidores, Carranza pensó que con el decreto se apresuraría la victoria constitucionalista. Si bien en lo personal los jefes tenían facultades discrecionales respecto de su cumplimiento, los deseos del Primer Jefe eran categóricos. El decreto surtió efecto no sólo con respecto a soldados enemigos, sino también con relación a "todos los que de una manera oficial o no oficial han reconocido o apoyado, a quienes en el futuro reconozcan o apoyen, al llamado gobierno del general Victoriano Huerta". 26EI decreto era extremadamente significativo, ya que presagiaba que los rebeldes del norte no darían cuartel al enemigo ni lo esperarían de éste. Así establecida la tónica de guerra, ambas partes abusaron de los civiles, justificaban ejecuciones y se despreocupaban del derecho de propiedad.

La campaña norteiia de Orozco iba bien. Hacia principios de julio había alcanzado una serie de victorias en Jara1 Grande, Estación Dolores, Ortiz, Ciudad Juárez y Bachimba. Las victorias que se sucedieron consecutivamente en Ciudad Camargo y Santa Rosalía, le aseguraron temporalmente Chihuahua al gobierno. Todo esto le dio al régimen federal su primer motivo de optimismo fundado desde que estallara la Revolución Constitucionalista, hacía casi cinco m,eses. Sin embargo, la alegría general producto de la campaña orozquista del verano, resulto muy prematura. El territorio por el 'que atravezaban sus tropas no podía darse por seguro. Cada vez que sus fuerzas se movían hacia el norte, los rebeldes ocupaban los lugares que quedaban atrás y volvían a capturar las regiones que les habían quitado temporalmente. El 18 de junio, con Orozco acampado en Torreón, el general villista Tomas Urbina, tomó un objetivo muy preciado. La importante ciudad de Durango cayó en sus manos al romper filas y desertar sus defensores federales y contingentes voluntarios que los acompañaban.

La caída de Durango puso de manifiesto sin lugar a dudas la cruda realidad de las campañas militares en el norte, a las que Huerta respondió aplicando su criterio de "paz cueste lo que cueste". La famosa declaración se había interpretado, desde que por primera vez la enunciara, como licencia de los atropellos de todo tipo perpetrados por los federales tanto en el campo de batalla como fuera de éste. No obstante, sin negar que el

Page 23: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

ejército huertista fue culpable de sentir escandaloso desprecio por los intereses de los no combatientes y aun reconociendo que la conducta reprobable de los militares generalmente quedaba impune, !'la expresión se ha mal interpretado por años. Para Huerta, la paz a toda costa significaba que se proponía pacificar el país, aunque para lograrlo fuera necesario hacer de México el estado más militarista del

Después de la toma de Durango a principios del verano, la estrategia constitucionalista exigía un asalto a Torreón, capital algodonera de México, para luego realizar inmediatamente un rápido y enérgico ataque a la ciudad de Chihuahua. Si estas ciudades claves caían, la zona central y oeste del norte de México estarían ocupadas por los rebeldes. Después de haber sido expulsados de su cuartel general de Monclova, Venustiano Carranza resolvió dirigir el ataque a Torreón. La guarnición de esta ciudad, recientemente reforzada con tres mil hombres acabados de llegar, estaba dispuesta al combate. Benjamin Argumedo, experimentado jefe orazquista, derrotó al Primer Jefe y lo obligó a refugiarse en Durango. Carranza pasó varias semanas allí, y luego resolvió trasladar su cuartel general a Sonora, el estado más seguro del norte. Las campañas del noreste fueron confiadas al general Pablo González, j y el 19 de agosto, Carranza inició una marcha que duraría tres semanas a través de las líneas federales hacia Hermosillo, Sonora.

El cuartel general constitucionalista seguía dándole máxima importancia a Torreón y depositó la operación de tomar la ciudad en manos de Francisco Villa. En la última semana de septiembre, Villa reunió una gran fuerza, .toda montada y bien equipada, e inició un violento ataque. Se enviaron refuerzos federales al mando del general Trucy Aubert, pero Villa llegó primero. La batalla por el dominio de la ciudad se inició a las tres de la madrugada del primero de octubre y a las nueve de la noche Villa había forzado la rendición de los federales, capturando ciento veinte prisioneros y un gran volumen de pertrechos de guerra, entre los que se contaban dieciséis valiosas piezas de artillería. El bandolerismo de la siguiente semana fue peor que el que tuviera lugar tres meses antes en la toma de Durango; fueron ejecutados muchos federales de acuerdo con la letra y el espíritu del decreto del 25 de enero de 1862,

A fines de octubre, Villa inició su marcha sobre la ciudad de Chihuahua, llevando consigo más de cinco mil hombres de Torreón. El primero de noviembre pidió al general Salvador Mercado la rendición de la plaza, y al serle negada, dispuso su ejército para el asalto. El ataque eppezó cuatro días después pero la guarnición, federal de Mercado, reforzada por tropas irregulares de Pascua1 Orozco, penetraron las líneas enemigas y ahuyentaron a los villistas tras seis horas de combate continuo. En lugar de regresar a Torreón, Villa optó por seguirse al norte y sitiar la importante plaza fronteriza de Ciudad Juárez. En la mañana del 15 de noviembre, se efectuó un ataque por sorpresa y para el mediodía caía la ciudad. Cuando las noticias de la victoria de Villa llegaron a la capital del estado, Orozco quiso moverse hacia el norte inmediatamente para librar batalla con los villistas. Sin embargo, Mercado vaciló el tiempo suficiente como para que los rebeldes se repusieran de su larga marcha. En el momento que se autorizó a Orozco despachara sus tropas, Villa ya se encontraba preparado para reiniciar la lucha. El enfrentamiento tuvo lugar en el abrasador y desértico pueblo de Tierra Blanca, unos treinta kilómetros al sur del complejo Ciudad Juárez - El Paso. Los irregulares orozquistas, dirigidos por José Inés Salazar, obtuvieron la ventaja el primer día, pues la superioridad de su artillería desbarató a las líneas enemigas que estaban a unos mil quinientos metros. Pero el segundo día la caballería villista efectuó una impecable maniobra de flanco y los orozquistas, temiendo un cerco completo, empezaron a evacuar sus posiciones fortificadas. Con los federales en desorden, Villa ordenó un ataque graneado y Salazar ordenó la retirada que pronto se 27 - Ibid. pp. 106.

20

Page 24: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

convirtió en huida. Los orozquistas que cayeron en manos enemigas fueron ejecutados allí mismo. Carranza envió a Villa un inmediato y bien merecido telegrama de felicitación por su brillante conducción de la campaña.

El 25 de noviembre, el ejército orozquista regresaba a Chihuahua harapiento y desmoralizado, pero su desilusión cedió. lugar rhpidamente a la ira, al anunciar Mercado que planeaba evacuar la capital del estado sin combatir. La decisibn provocb el panico en la ciudad. La reputacidn de Villa de permitir el saqueo y el pillaje de sus tropas, ya se había convertido en leyenda, así que los comerciantes de Chihuahua imploraban al general Mercado que aceptara el desafío y que defendiera la plaza. Pese a las súplicas, Mercado no se inclinó a cambiar de opinión, de manera que el 29 de noviembre se retiró con. la guarnición federal como estaba programado, replegándose hacia Oj,inaga, en la frontera con Texas. Pocos días después Villa tomb la ciudad de Chihuahua sin oposición alguna, quedando prácticamente todo el estado de Chihuahua en manos rebeldes.28

Las fuerzas constitucionalistas se habían extendido tanto con la toma de Chihuahua que el número de sus fuerzas combinadas era insuficiente para mantener la ocupación de la enorme extensión de tierra entre la frontera con Estados Unidos en el norte y la ciudad de Torreón en el sur. El 9 de diciembre, el general federal José Refugio Velasco volvió a capturar Torreón, de manos de Calixto Contreras y de los hermanos Arrieta, y así neutralizó temporalmente la pérdida de la ciudad de Chihuahua. No obstante, al acercarse el año nuevo, la posición militar del Presidente Huerta se iba haciendo insostenible.

A principios de 1914 la estrategia constitucionalista se propuso un avance concertado hacia la ciudad de México desde tres direcciones. Estando aseguradas las zonas norteñas, Torreón ocupaba la más alta prioridad militar, ya que después de haber sido capturada por Francisco Villa había sido perdida después. Esta ciudad no era solamente un centro ferrocamlero importante en el corazón de la región algodonera, sino una parada lógica en el camino a Zacatecas y luego a la ciudad de México. Villa empezó su empuje hacia el sur desde Chihuahua el 16 de marzo, rodeado de un grupo de jefes que incluía a algunos de los más famosos cabecillas de la Revolución: Felipe Angeles, José Trinidad Rodriguez, Maclovio Herrera, Tomás Urbina y Eugenio Aguirre Benavides. Sus 8,200 hombres tenían una vasta provisión de armas y parque, y 29 cañones, pues un mes antes el Presidente de los Estados Unidos Woodrow Wilson, había levantado el

f embargo de armas en respuesta a la tenaz insistencia de John Lind, William Bayard Hale,) el secretario Bryan y Venustiano Carranza. De inmediato, el alto mando constitucionalista fue inundado con más ofertas de armas y de municiones de las que podía hacer uso provechoso y le era posible pagar. Los frentes diplomático y militar habían incidido a favor de Villa en un momento propicio, pero la ciudad de Torreón no sería fácil de tomar, pues durante muchos meses el general José Refugio Velasco había estado preparando su defensa. Se sucedieron escaramuzas preliminares el 20 y 21 de marzo en dos puestos federales de avanzada: Mapimí y Tlahualilo; en ambos casos los federales fueron obligados a replegarse hacia los alrededores de Torreón donde estaban mejor parapetados. Un similar encuentro previo en Gómez Palacio, hacia el noroeste de la ciudad, tuvo un resultado diferente ya que aquí fue Villa el que tuvo que replegarse, aunque al día siguiente pudo retomar la plaza. La lucha continuó durante tres días más en los que cada bando puso a prueba la fuerza del otro. No fue sino hasta la noche del día 26 cuando las tropas de Villa entraron a la ciudad.*'

. "Idem. pp. 117-120. 29-

I d e m . , PP. 213-216. 21

Page 25: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

La batalla de Torreón duró cinco días y desde la Decena Trágica ninguna población de importancia había atestiguado tantos destrozos por la guerra. La lucha casa por casa expuso a los no combatientes al fuego cruzado. Los morteros arrasaron varias partes de la ciudad y veintenas de edificios incendiados iluminaron la noche. En la tarde del primero de abril, Villa retiró temporalmente sus tropas de Iá ciudad. Poco antes del crepúsculo Villa le ordenó a Felipe Angeles lanzar una imponente descarga de artillería. El resultado fue más devastador de lo que se imaginó en ese momento, al grado que esa misma noche el general Velasco empezó a hacer planes para evacuar la plaza. La tarde siguiente, en medio de una fuerte tolvanera, Velasco y sus tropas se retiraron y unas horas más tarde Villa ocupó la ciudad. Las bajas en ambos bandos fueron cuantiosas. Las tropas del gobierno tuvieron mil muertos y dos mil doscientos heridos, perdieron mil quinientos por deserción y trescientos prisioneros. Las bajas constitucionalistas fueron ..

menores, aunque considerables: quinientos cincuenta muertos y mil ciento cincuenta heridos. Dado que la retirada de Velasco se planteó y se ejecutó a la perfección, los federales sólo dejaron abandonadas muy pocas armas y municiones. Pero lo más importante fue que la victoria de Villa mostr6 palmariamente la vulnerabilidad de la maquinaria militar federal.

Si bien las presiones diplomáticas, económicas y militares concurrieron todas a favor de los constitucionalistas, la caída de Torreón el 2 de abril de 1914, no era sino un débil síntoma de lo que el régimen de Huerta tenía que encarar una semana más tarde. El escenario del siguiente drama no fue la región centro norte, en donde Villa quedó temporalmente inmovilizado a causa de sus dificultades con el Primer Jefe, sino el noreste, desde donde los constitucionalista también se habían lanzado hacia la capital. Después de un desalentador primer año, los rebeldes al mando de los generales Pablo González, Francisco Murguía y Jesús Carranza, empezaron a rendir mejores cuentas al iniciarse el año de 1914. A fines de matzo, al mismo tiempo que Villa sitiaba Torreón, los rebeldes que comandaba el general Luis Caballero empezaron su marcha hacia Tampico, el segundo puerto de México en importancia. El vigoroso ataque rebelde empezó el 5 de abril. El general Ignacio Morelos Zaragoza, a cuyo cargo estaba la defensa de la ciudad, utilizó con ventaja dos cañoneros el "Veracruz" y el "Zaragoza", disparando a las posiciones rebeldes que ocupaban los lomeríos que rodean al puerto. Dos días más tarde los rebeldes trataron de introducirse en la ciudad por el puente Iturbide, pero fueron rechazados; un segundo intento en el mismo lugar el 8 de abril también fracasó al recibir Morelos Zaragoza refuerzos de Veracruz que le permitieron ahuyentar a los atacantes.

I 1 El plan de Huerta para capitalizar la invasión fue bueno pero la respuesta de

Carranza fue todavía mejor. Se negó a permitir que el gobierno se apropiara todo el sentimiento nacionalista demostrado muy claramente que un mexicano leal podía seguir siéndolo sin tener que dar su apoyo al régimen huertista. El apoyo tan entusiasta del que disfrutó Huerta la primera semana se empezó a disipar rápidamente cuando los norteamericanos no avanzaron hacia la capital y se contentaron con la ocupación del puerto. Antes de que pasaran tres semanas después de la invasión, tanto los rebeldes como el gobierno se dedicaban normalmente a sus asuntos. La posición del régimen se había deteriorado por lo menos en un aspecto importante: En Morelos los zapatistas capturaron cuatro cabeceras municipales cuando se replegaban los federales debido a que Huerta empezó a concentrar sus tropas para defender la capital ante el temor de que los norteamericanos marcharan sobre la ciudad de México, después de la invasión de Veracruz; mientras tanto los constitucionalistas capturaron Tampico y Tepic a mediados de mayo y se prepararon para atacar Zacatecas. Villa había reunido las fuerzas suficientes hacia fines de ese me3 para capturarla, pero el Primer Jefe, temeroso de que este general rebelde avanzara hacia la ciudad de México antes de que Alvaro Obregón y Pablo González, que venían por el oeste y por el oriente, respectivamente, encomendó la

22

Page 26: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

toma de Zacatecas a Pánfilo Natera. Simultáneamente le ordenó a Villa que volviera al norte para ayudar en la campaña contra Saltillo, lo que obviamente fue un recurso político, mas que militar.30

- "Como lo habían convenido con el Primer Jefe, los Generales Natera y Arrieta iniciaron sus operaciones sobre la plaza de Zacatecas, llevando a cabo el ataque durante tres dias consecutivos; pero el enemigo, perfectamente atrincherado, contaba con fuerzas superiores a las atacantes, por haber sido reforzadas para entonces la guarnición federal con cuatro mil soldados, ascendiendo asi a cerca de diez mil los defensores, dotados de poderosa artillería, ametralladoras y todo género de implementos de boca y de guerra, lo que hacía imposible que pudieran tener éxito los revolucionarios, a no ser que, también, recibieran un refuerzo de consideración. Natera y Arrieta pidieron al Primer Jefe un refuerzo de tres mil hombres asegurando el éxito del ataque si recibían ese auxilio". El Primer Jefe, que sabía que en la plaza de Torreón, la más cercana a Zacatecas, estaba reconcentrada casi toda la Divisidn del Norte, se dirigió a Villa en esta forma:

"Cuartel General en Saltillo, Coah., junio 12 de 1914. Senor General Francisco Villa. Torre6n. Ayer ordene a usted que mandara tres mil hombres con artillería a reforzar las tropas que esthn atacando Zacatecas. Hoy me comunica General Arrieta que han ocupado magníficas posiciones en aquella ciudad y que necesita parque y artillería para ocuparla. Creo que habrh ya usted movido para aquella ciudad las fuerzas a que me refiero. Si no hubieren salido, que salgan inmediatamente bajo las 6rdenes del general Robles, pues no debe perderse todo lo ocupado de la ciudad, que con un ligero esfuerzo quedará en nuestro poder. En lugar de tres mil, puede mandar usted cinco mil hombres, y si es posible mande usted algún parque 30-30 y maúser para municionar las fuerzas de los generales Natera y Anieta que se encuentran atacando aquella capital.- El Primer Jefe del E. C. V. Carranza".

Villa contestó lo siguiente: !

"Cuartel General en Torrebn, junio 12 de 1914. SeQor V. Carranza. Saltillo, Coah. Contesto su telegrama relativo a la movilizaci6n de tropas en auxilio del general Natera. Refierome a su mensaje relativo a movilizaci6n de fuerzas sobre Zacatecas para cooperar en el ataque a dicha plaza. Permitome manifestar salvo su superior aprobacibn, la conveniencia de que hagamos desde luego el movimiento d t toda la División de mi mando, con el &objeto de asegurar el 6xito de las operaciones y aminorar tambi6n el sufrimiento de las tropas, pues al hacer el movimiento general, Ilevana conmigo todos los elementos de boca y guerra necesarios para la campaña. Si cree usted pertinente mi proposicibn, sería conveniente que ordenara al señor general Natera que suspendiera el ataque a la plaza hasta mi llegada para no sacrificar gente inútilmente, pues tengo noticias que ha sido rechazado en sus intentos de tomar la plaza. Espero sus superiores instrucciones para proceder como usted me lo ordene. Confirmo mi mensaje de ayer que dice: "Siento mucho manifestarle ademss que de momento no puede salir el general Robles por encontrarse enfermo desde hace varios dias. Tenemos además el inconveniente de que ha habido muchos deslaves en la via a causa de las constantes lluvias y esto impide el avance de mis fuerzas por ferrocarril, tan pronto como fuera de desearse. Ya ordeno las reparaciones del caso y le aseguro a usted que en breve tratar6 de obsequiar sus deseos". Saludos muy afectuosamente.- El General en Jefe, Francisco Villa".

1

.

23

Page 27: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Después de girado el anterior telegrama, Villa solicitó una conferencia telegráfica con el señor Carranza para el día siguiente, como sigue:

“Torre6n, Coah., junio 13 de 1914. Sefior V. Carranza. Saltillo, Coah. Buenos días le de Di6s.- Villa”.

El señor Carranza le contestó:

Saltillo, Coah., junio 13 de 1914. Sefior General Francisco Villa. Torre6n. Retorno a usted afectuosamente su saludo y espero me comunique el objeto de la conferencia que acaba usted de solicitar.- V. Carranza”.

‘ Empieza el General Villa:

“Yo no puedo auxiliar al general Natera antes de cinco días, por que el movimiento de tropas no se puede hacer antes de ese plazo. SeAor: ¿quien le orden6 a estos senores que fueran a meterse a lo bamdo sin tener seguridad del Bxito completo, sabiendo usted y ellos que tenemos todo para ello? El problema que usted me pone es difícil por lo siguiente: l/o., que robles est& en cama; ao., que mandando a Urbina con la gente no congeniaría con Arrieta y no podrían hacer nada en esta forma. Ahora dígame usted, sefior: si al salir yo con la Divisi6n de mi mando ¿voy a quedar bajo 6rdenes de Arrieta o Natera, y si tomo las plazas para que ellos entren? Seguramente al entrar a una plaza como esa, si las fuerzas de dichos generales cometen des6rdenes y estando yo allí no lo permitir& y en esta forma creo que todos los pasos que demos vamos para atrils. Sírvase decir c6mo vamos a hacer. Ahora si usted cree que dichos generales y quiere que alguna persona reciba las fuerzas de mi mando, desearía saber quién es ella, para que si la juzgo apta y capaz para que cuide de ellas como yo mismo, esta bien, pues yo hago a usted esta observaci6n con el Único fin de cuidar de mis soldardos, y como soldado mils fiel que rodea a usted. Sinrase contestarme sobre estos Cjuntos lo que a bien tenga.- Villa”.

I

El señor Carranza contestó:

“Orden6 a usted antes de ayer, mandara tropas a reforzar al general Natera que ataca Zacatecas, por cpnvenir así a las operaciones y porque con PI refuerzo que ordené, creo que es bastante para que se tome aquella plaza. El general Natera y sus jefes me manifestaron, cuando estuve en Sombrerete, que con las fuerzas del general Arrieta que se unieran a las de ellos, podría tomar Zacatecas y mas se afirmaron en esta creencia cuando unidas dichas fuerzas derrotaron las guarniciones de los pueblos inmediatos a aquella ciudad, haciendo que se reconcentraran los federales, que escaparon, y cortas guarniciones que no combatieron. Empezando el ataque a Zacatecas, han tomando las posiciones de Guadalupe, Las Mercedes y las pr6ximas al Grillo, habiendo sido rechazadas al intentar tomar la Bufa y la Estacibn. No es tiempo ahora de censurar a dichas fuerzas, porque sin estar seguros de 6xito atacaron Zacatecas, pues ellos, lo mismo que usted, estan inspirados en el deseo de contribuir al triunfo de la causa y adquirir del enemigo los elementos de guerra que con tantas dificultades podemos introducir ahora. Usted ha sufrido también un error semejante cuando atacó Chihuahua, y después de varios días de combate tuvo usted que retirarse; tampoco habría usted tomado Torrebn, si no hubiera yo ordenado que se pusieran bajo sus 6rdenes los generales Robles, Contreras, Urbina y fuerzas del general Natera, bajo el mando del general Carrillo, y algunas otras fuerzas bajo el mando de jefes de inferior graduacibn, y así como orden6 que todos estos jefes con sus fuerzas

24

Page 28: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. cooperaran con usted para atacar al enemigo y obtener los triunfos que usted ha obtenido, he creído conveniente ordenar ahora que parte de las fuerzas que estan bajo sus 6rdenes pasen a reforzar al general Natera para el 6xito en el ataque a Zacatecas. El hecho de que cinco mil hombre de los que usted tiene, se adelanten al resto de la columna de usted, no impide que usted siga inmediatamente despues moviendo sus fuerzas sobre Zacatecas, que con los primeros que se mandardn, unidos a los que estan atacando, tomarían dicha plaza. Indicaba a usted que al mando del refuerzo fuera el general Robles, tanto porque no tendría dificultades con el general Natera, como por el conocimiento que tiene del terreno en que va a operar, pero estando enfermo el general Robles, podría ir el general Benavides, el general Ortega, el general Contreras o cualquiera otro que usted creyera conyeniente. El general Natera me dice que podrá sostenerse dos días m8s en las posiciones que ocupa, en cuyo caso podría empezar a llegar los refuerzos y no se perdería lo que ya se tiene conquistado alrededor de Zacatecas. Por lo expuesto, :

comprender& usted que no trato de que vaya usted a ponerse bajo las 6rdenes del general Natera, sino una que parte de las fuerzas de usted cooperen con el general Natera a la toma de la plaza y se expedite el camino para el paso de usted al sur. No i

es necesario ni creo conveniente la separaci6n de usted del mando de las fuerzas que están ahora bajo sus 6rdenes; pero si tuviera que tomar tal determinacibn, procedería yo como deba en bien de la causa y del Ejercito Constitucionalista que me honro en mandar como Primer Jefe. Espero que haciendo a un lado cualquiera consideraci6n que no tenga verdadera importancia, y allanando los obstsculos para que salga el refuerzo en auxilio del general Natera, proceda usted a mandarlo, avisando al citado general la salida y probable llegada de 61 a 2acatecas.- El Primer Jefe del E.C. V. Ca~ranza”.~‘

Por una parte el General Villa molesto ante esta situación decidió dejar el mando de la División, para lo cual envió a Carranza el comunicado siguiente: ”Estoy enteramente resublto a retirarme del mando de las fuerzas. Sirvase decirme inmediatamente a huien le hago entrega de la División.- Villa”.

Carranza al ver que su propósito de eliminar a Villa se cumpliá acepto la renuncia, contestando en los siguientes términos: “General Francisco Villa. Torreh. Aunque con verdadera pena, me veo obligado a aceptar se retire usted del mando en jefe de la Divisi6n del Norte, dando a usted las gracias en nombre de la Nación, por los importantes Fervicios que ha prestado a nuestra causa, esperando pasará usted a encargarse del gobierno del Estado de Chihuahua. Antes de designar el Jefe a quien usted debe entregar las fuerzas, sírvase usted llamar inmediatamente a la oficina telegráfica de esa estacih, en donde se encuentra, a los generales Angeles, Robles, Urbina, Contreras, Aguirre Benavides, Ceniceros, T. Rodriguez, J. Rodriguez, C. Contreras, O. Pereyra, M. Herrera, Ortega, Servín, Almazan y Máximo Garcia, y una vez reunidos, espero se servirá avisar, pues espero aquí.- El Primer Jefe del E. C. V. Carranza”.

31 “El Primer Jefe ordenaba a Villa que enviara violentamente una columna de cinco mil hombres a las órdenes del General Robles en auxilio de los Generales Natera y Arrieta. Estimando que con ese refuerro caería Zacatecas y de esa manera sería el General Natera, Gobernador y Comandante Militar del Estado, el que se anotara el triunfo, con lo que aumentaría su prestigio y se haría de grandes elementos de guerra al igual que los Generales Arrieta y Triana. Con esto, según los planes del Primer Jefe, se podrla detener el avance de Villa al Sur, dando tiempo a que avawaran al centro del pals los Cuerpos de Ejercito de los Generales Obregón y Gonzhlez. Pero Villa, según se desprende de su telegrama, no admitía que fuera otro sino 61, el heroe de la toma de Zacatecas, y para no cumplir la orden del Primer Jefe ponfa varios pretextos cual m& deleznables y contradictorios. Decía, por ejemplo, que no podía enviar el refuerzo que se le ordenaba por estar deslavada la vía del ferrocarri!; pero, en cambio, proponía llevar a cabo, desde luego, el movimiento de toda la División de su mando, con 61 -Villa- al frente, para tomar la plaza”. OR cit. Barragan, Tomo I, pp. 516-517.

25

Page 29: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Para dar a conocer la renuncia del comandante de la División del Norte el Primer Jefe envió este comunicado a los generales subalternos: %altillo, Coah., junio 13 de 1914. Senores generales Angeles, Robles, Urbina, Contreras, Aguirre Benavides, Ceniceros, T. Rodríguez, J. Rodríguez, O. Pereyra, T. Ortega, Sewín, M. Herrera, Almanza y Mdximo Garcia. Torredn, Coah. Saludos a ustedes afectuosamente. Despub de una conferencia que acabo de tener con el senor general Villa, ha hecho dimisi6n del mando de las fuerzas que como Jefe de la Divisidn del Norte, estan bajo sus brdenes, y habiendo yo aceptado su dimisi6n, he llamado a ustedes para que, con el car4cter de jefe interino de la expresada Divisibn, me indiquen el jefe que entre ustedes deba substituirlo. S6 que el general Urbina esta ausente, y que el general Robles se encuentra enfermo; a &te pueden comunicarle el objeto con que he mandado reunir a ustedes, y que por escrito emita su opini6n. Si hubiera en Osa algún otro general de que no tuviere yo conocimiento, cítenlo ustedes inmediatamente para que concurra a la junta. Creo que el senor general Villa estar4 presente. Imp6ngalo ustedes del contenido de este mensaje.- El Primer Jefe del E.C. V. Carranza”.

Los subalternos de Francisco Villa contestaron: “Torre6n, Coah., junio 13 de 1914. SeAor V. Carranza. Saltillo Coah. Los seílores generales se retiraron a comer y quedaron citados para las diez a.m. manana, con objeto de resolver sobre el asunto que tiene con usted.- El coronel M. Medinaveitia”.

Los generales de la División del Norte enviaron el siguiente mensaje al Primer Jefe en relación a la renuncia de Villa: “Torrebn, junio 14 de 1914. SeAor V. Carranza. Saltillo, Coah. Le suplicamos atentamente reconsidere su resoluci6n respecto a la aceptaci6n de la renuncia del senor general Francisco Villa como Jefe de la Divisidn del Norte, pues su separaci6n de dicha jefatura en los actuales momentos sería sumamente grave y originaría muy serios trastornos tanto en el interior como en el exterior de la República.ifinnado los generales de la Divisi6n del norte”.

i

EI señor Carranza I+ contesto to siguiente:

“Siento tener que manifestar a usted que no me es posible cambiar la determinaci6n que he tomado de aceptar la dimisi6n del mando de la Divisi6n del Norte, que el senor general Villa ha presentado, por exigirlo así la disciplina del

# Ejbrcito, sin la cual vendría la anarquía en nuestras filas. Hace tres días orden? al general Villa enviara fuerzas a auiiliar al general Natera, y hasta ahora no lo ha hecho, sin tomar en consideración que bien pudo no mandar fuerzas de la División del Norte, que son las suyas, sino de los generales Contreras, Robles, Pereyra, Aguirre Benavides, Garcia y las que pertenecen al general Carrillo, que son de la Divisi6n del Norte y que agregadas a las de 61, por mi orden, han contribuido a los últimos triunfos. Espero que tanto ustedes como el general Villa sabrdn cumplir con sus deberes de soldados y acatarán las disposiciones que he dictado con motivo de la dimisi6n de mando del General Villa. Creo que ustedes habrdn tomado sus acuerdos sin la presencia del expresado general y si no hubiere sido así, lo harán despues de impuestos de io anterior.- V. Carranza”.

Con base en lo anterior los Generales de la División del Norte contestaron lo siguiente: “Torreón, junio 14 de 1914. Señor Venustiano Carranza. Saltillo. Podríamos siguiendo al señor general Villa en su proceder, dejar el mando de nuestras tropas, disolviendo con ello la División del Norte, pero no debemos privar a nuestra causa de un elemento de guerra tan valioso. En consecuencia, vamos a convencer al jefe de esta Divisi6n para que continúe la lucha contra el gobierno de

26

Page 30: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Huerta, como si ningún acontecimiento desagradable hubiera tenido lugar en este día, y amonestamos a usted para que proceda de igual manera, con objeto de vencer al enemigo común.- Generales de la Divisibn del Norte”.

Manteniéndose en su posición el señor Carranza les dio esta respuesta: “Al aceptar del seiior general Villa la dimisi6n que ha presentado del mando de la División del Norte, he tomado en consideraci6n las consecuencias que s u separaci6n pudiera traer a nuestra causa. Por lo tanto, procederan ustedes desde luego a ponerse de acuerdo acerca del jefe que he dicho me indiquen debe substituir al seAor general Villa en el mando de la Divisi6n del Norte, para que inmediatamente proceda a enviar el refuerzo a Zacatecas que a 61 le había yo ordenado. Atentamente.- El Primer Jefe del E. C.V. Carranza”.

Contestación de los Generales: “Torrebn, junio 14 de 1914. Senor V. Carranza. Saltillo, Coah. La resoluci6n irrevocable que hemos tomado de continuar luchando bajo el mando del seAor Francisco Villa, como si ningún acontecimiento desagradable hubiera tenido lugar ayer, ha sido detenidamente mediatada en ausencia del Jefe de la Divisi6n del Norte. Nuestras gestiones cerca de este jefe han tenido éxito y marcharemos prontamente al sur”.

Contestación del Primer Jefe: “Su mensaje de hoy. AI haber mandado ayer que se reunieran ustedes para que me indicaran el jefe que en su concepto debería substituir en el mando de la Divisi6n del Norte al seiior general Francisco Villa, que acababa de hacer dimisibn de 61, ante esta Primera Jefatura del Ejercito, lo hice únicamente para evitar, en lo posible dificultades que pudieran haberse suscitado entre ustedes, si el que yo hubiera designado no fuera el mas apropiado para desempeAar tal cargo, pues ustedes saben que es de las atribuciones de esta Primera Jefatura hacer tal designaci6n. En vista del contenido del mensaje de ustedes de hoy, podría yo designar el jefe que deba substituir al seAor general Villa en el mando, pero antes de hacerlo deseo aún proceder de acuerdo con ustedes, para lo cual creo conveniente que vengan a esta ciudad mañana, para tratar este asunto, los generales Angeles, Urbina, M. Herrera, Ortega, Aguirre Benavídes y R. Hernhdez”.

Los Generales contestaron lo siguiente: “Torreón, junio 14 de 1914. Señor V. Carranza. Primer Jefe del E.C. Saltillo, Coah. Su último teleprama nos hace suponer 8

que usted no ’ha entendido o no ha querido entender nuestros dos anteriores. Ellos dicen en su parte mAs importante, que nosotros no tomamos en cuenta la disposici6n de usted que ordena deje el señor general Villa el mando de la Divísi6n del Norte, y no podíamos tomar otra actitud en contra de esa disposici6n impolítica, anti-constitucional y anti-patriótica. Hemos convencido al señor general Villa de que los compromisos que tiene contraídos con la Patria lo obligan a continuar con el mando de la Divisi6n del Norte, como si usted no hubiera tomado la mal6vola resolución de privar a nuestra causa democrática de su jefe más prestigiado, en quien los liberales y dem6cratas mexicanos tienen cifradas sus mAs caras esperanzas. Si 81 lo escuchara a usted, el pueblo mexicano, que ansía el triunfo de nuestra causa, no s610 anatematizaría a usted por resolución tan disparata, sino que vituperaría también al hombre que en camino de libertad a su país de la opresión brutal de nuestros enemigos, abandonaba las armas por sujetarse a un principio de obediencia a un Jefe que va defraudando las esperanzas del pueblo por su actitud dictatorial, su labor de desuni6n en los Estados que recorre y su desacierto en la dirección de nuestras relaciones exteriores. Sabemos bien que esperaba usted la ocasión de apagar un sol que opaca el brillo de usted y contraría

21

Page 31: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

su deseo de que no haya en la Revoluci6n hombre de poder que no sea incondicional carrancista, pero sobre los intereses de usted estan los del pueblo mexicano, a quien es indispensable la prestigiada y victoriosa espada del general Villa. Por todo lo expuesto, participamos a usted que la resoluci6n de marchar hacia el sur es terminante y por consiguiente no pueden ir a bsa los generales que usted indica”.

El señor Carranza contestó lo que sigue: “Recibí el mensaje de ustedes de diez p.m. de ayer, contestando mi mensaje de la misma fecha. Como la forma en que esta redactado y su contenido, implica una grave falta de insubordinacih en grupo y dudando de la autenticidad de O1 sírvanse ustedes ratificarlo por escrito, firmando con su pufio y letra, remitihdomelo con un enviado especial”.

A los tres días llegó a Saltillo un enviado con el documento pedido por el señor Carranza, que suscribían de su puiío y letra los Generales de Villa”.32

Las tropas de Villa se aproximaron a Zacatecas el 19 de junio y Felipe Angeles dirigió el emplazamiento de sus cincuenta piezas de artillería en los cerros al norte de la ciudad. Las tropas federales del general Luis Medina Barrón estaban bien atrincheradas y aguardaban el anibo de tres mil hombres de refuerzo al mando de Pascua1 Orozco; sin esos refuerzos los federales contaban con cerca de doce mil quinientos hombres, once piezas de artillería pesada y alrededor de noventa ametralladoras, sin embargo, fueron superados en número cuando Pánfilo Natera se unió a Pancho Villa en las goteras de la ciudad haciendo que la fuerza rebelde ascendiera a más de veintiún mil hombres. Villa empezó su fragoroso ataque en la mañana del 23 de junio y al mediar la tarde ya había arrasado dos de las más fuertes avanzadas federales: la Bufa y Guadalupe. Los federales se retiraron de estas posiciones hacia la ciudad en medio del pánico. Las tropas de Orozco no habían llegado y los villistas penetraron en la ciudad desde tres direcciones y aunque tuvieron grandes pérdidas, su sola superioridad numérica abatió las posiciones federales. Ya avanzada la tarde el general Medina Barrón dió la orden de evacuar la plaza pero antes dinamitó el arsenal federal y el edificio del gobierno del estado, matando de paso a muchos civiles. La batalla de Zacatecas reclamó miles de vidas de los federales, miles más fueron heridos y varios cientos de soldados cayeron prisioneros en manos del enemigo.%

Las perdidas de los rebeldes también fuerop elevadas, pero cuando menos tuvieroA como compensación la toma de la ciudad. Los federales que pudieron escapar se dirigieron al sur hacia Aguascalientes; en el camino se encontraron con Pacual Orozco y sus tres mil hombres de refuerzo que se movían hacia el norte para ayudarlos, pero Orozco había recibido órdenes demasiado tarde.

Villa trató de demostrar que se sometía en lo posible a la orden del Primer Jefe, de enviar los refuerzos a Natera sin ir personalmente, pues primero destacó a Urbina y ya cuando estaba empeñado el ataque formal a la plaza salió éI -Villa- de Torreón, con el resto de sus tropas a asumir el mando de las operaciones militares. Por último, al ocupar Zaca te~as ,~~ dejó que Natera asumiera el mando militar y civil en su calidad de

32 Hasta aqui termina el dialogo entre el Primer Jefe Venustiano Carranza, Francisco Villa y los Generales de la Divisi6n del Norte. Como se puede observar el Primer Jefe esta buscando dividir a los militares que representen una fuerza de oposici6n a su envestidura. I d e m . , pp. 515-525.

‘M6xico, Junio 16 de 1913. Numero. 137339. Al Gobernador del Estado de Durang0.- Durango, Dgo. Enterado confirrnaci6n toma plaza de Zacatecas por rebeldes y demas que expresa. Ya salieron fuerzas para operar en esa regi6n. Firma A. Blanquet“ (Secretario de Guerra y Marina). Archivo Hist6rico de la Defensa Nacional Xl/481.5/333, ff. 131 .En lo sucesivo AHDN.

28

33

34 OP cit. Meyer, pp. 232.

Page 32: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Gobernador y Comandante Militar del Estado, habiendo rendido éste, el parte oficial correspondiente.

Varios Jefes militares hicieron presión en el ánimo del señor Carranza para que se reconciliara con Villa. Para llevar a cabo los arreglos, fue designada una comisión compuesta por los Generales Antonio I. Villarreal, Cesáreo Castro y Luis Caballero, quienes salieron de Saltillo hacia Torreón a conferenciar con los delegados de la División del Norte, ingeniero Manuel Bonilla, doctor Miguel Silva y General José Isabel Robles. Tras de varias pláticas se convino en que Villa volviera a subordinarse al Primer Jefe y que este lo designara nuevamente Jefe de la División del Norte. En realidad, el señor Carranza comprendió que no podía ser definitivo ese arreglo; pero para evitar que lo juzgaran un obstáculo a la concordia entre los revolucionarios lo aceptó, no sin que manifestara a los comisionados su incredulidad respecto a las nuevas protestas de adhesión de Villa, hechos posteriores así lo comprobaron. (No estoy de acuerdo en esta apreciación, ya que como se verá mas adelante la intransigencia y dictadura de parte del Primer Jefe se hace notar.).=La División del Norte, por su parte, nombró una comisión de Generales que pasó a Saltillo a pedir al señor Carranza: que se ascendiera a Divisionario . al General Villa, alegando que ya lo habían sido los Generales Obregón y Gonzhlez (el ascenso de los Generales Alvaro Obregón y Pablo González a la más alta jerarquía del Ejército, lo acordó el señor Carranza en los días en que Villa había desconocido la autoridad de la Primera Jefatura); que volviera a nombrase Subsecretario de Guerra al General Angeles, en la inteligencia de que inmediatamente presentaría su renuncia, y por, último, que se le entregara a Villa armamento y municiones llegados para éI por Tampico, cuyo puerto estaba ya en poder de las fuerzas constitucionalistas leales al Primer Jefe. Carranza aceptó únicamente la última petición, dando como razones para no aceptar las otras dos, que se sentiría lastimado en su prestigio como Primer Jefe del Ejército al tener que otorgar un ascenso a Villa, no obstante su reciente insubordinación, pero comprendiendo que Villa tenía méritos militares suficientes para ostentar el grado de Divisionario, ofrecía conceder el ascenso en bn plazo breve, lo cual hizo en el mes de septiembre.%

Después de las desastrosas derrotasIsufridas por lo federales en Zacatecas y Orendáin, de la ocupación de Guadalajara y de la concentración del Cuerpo de Ejército del Noreste y de la División del Centro en San Luis Potosí, la situación de Victoriano Huerta era insostenible. De no retirarse inmediatamente de México, no hubiera podido hacerlo más tarde, porque los fevolucionarios de Veracruz, alentados por la3 grandes victorias de los Ejércitos del Norte, tomaban cada día mayor impulso y constituían ya una seria amenaza para el Único camino por donde podía huir el usurpador.

Victoriano Huerta tomó la decisión de renunciar el 8 de julio, pero ya había estado pensando en ello seriamente durante la semana anterior. Para que se tuviera una sucesión en orden, se designó secretario de Relaciones Exteriores a Francisco S. Carbajal; después de las renuncias de Huerta y Aureliano Blanquet, Carbajal presidiría el gobierno hasta que los constitucionalistas llegaran a la capital. Victoriano Huerta renuncia de la siguiente forma: "El pliego de renuncia, sometido a la consideraci6n del Congreso el 15 de julio de 1914, dejaba ver un hombre amargado y derrotado, pero no carente de orgullo. Empezaba recordando que en su primer mensaje había prometido restablecer la paz a toda costa. Ahora se daba cuenta que el costo era su propia renuncia y por lo tanto se la entregaba. CC. Diputados y Senadores: Las necesidades indicadas por la Cámara de Diputados, por el Senado y por la Suprema Corte, me hicieron venir a la Primera Magistratura de la República. DespuBs, cuando

OD cit. Barragan Tomo I , pp. 538. ~ ~~

=lbid. - pp. 538-539. 29

"

Page 33: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

tuve el honor, en este mismo recinto, de dirigirme a ustedes, en virtud de un precepto Constitucional, prometí hacer la paz a todo trance. Han pasado diecidis meses y en ese corto período de tiempo, he formado un ejercito para llevar a cabo mi solemne promesa. Todos ustedes saben las inmensa dificultades con que ha

- tropezado el gobierno con motivo de la escasez de recursos, así como por la protecci6n manifiesta y decidida que un Gran poder de este Continente ha dado a los rebeldes. A mayor abundamiento, estando destruida la revolucibn, puesto que estan divididos y aún siguen estandolo, los principales directores de ella, busc6 el Poder a que me refiero un pretexto para terciar directamente en la contienda, y esto dio por resultado el atentado de Veracruz por la Armada Americana. Se consiguid, como ustedes saben, arreglar decorosamente por nuestros comisionados en Niagara Falls el fusil incidente de Tampico, y la revoluci6n queda en pie, sostenida por'quien todos sabemos. Hay mas: despues de la labor altamente patri6tica de nuestros representantes en Niagara Falls, hay quien diga que yo, a todo trance, busco mi personal inter& y no el de la República; y como este dicho necesito destruirlo con hechos, hago formal renuncia de la Presidencia de la República. Debe saber la Representaci6n Nacional que la República, por conducto de su Gobierno ha laborado con toda buena fe a la vez que con toda energía, puesto que ha conseguido acabar con un partido que se llama dem6crata en los Estados Unidos y ha ensefiado a defender un derecho. Para ser mas explícito diré a ustedes que la gestidn del Gobierno de la República, durante su corta vida, ha dado golpes de muerte a un poder injusto. Vendran mas tarde obreros mAs robustos y con herramientas, que acabaran a no dudarlo, con ese poder que tantos perjuicios y tantos atentados ha cometido en este Continente. Para concluir, digo que dejo la Presidencia de la República llevandome la mayor de las riquezas humanas, pues declaro que he depositado en el Banco que se llama Conciencia Universal, la honra de un puritano, al que yo, como caballero, le exhorto a que me quite &sa mi propiedad. Dios los bendiga a ustedes y a mí tambih. MBxico, julio 15 de 1914.- V. ~uerta,,?~ !

3 7 0 ~ cit., Meyer, pp. 234. OD cit. Barragán Tomo I, pp. 577-578.

30

f

Page 34: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

CAPITULO 111

LA CONVENCION DE MEXICO

Y

LA SOBERANA CONVENCION REVOLUCIONARIA DE AGUASCALIENTES

. Teniendo conocimiento en Primer Jefe de la renuncia de Victoriano Huerta, este nombró, previamente, Secretario de Relaciones Exteriores, al Presidente de la Suprema Corte de Justicia, licenciado Francisco S. Carbajal, para que por ministerio de la ley se encargara de la Presidencia de la República, dejando a este jurisconsulto el problema de la transmisión del Poder a la Revolución triunfante. "El licenciado Carbajal, tan pronto como se hizo cargo de la Presidencia Provisional, se puso en cohunicación con los revolucionarios para hacerles entrega del Poder, a cuyo efecto, conferenció, telegrdficamente, el día 25 del mismo mes de julio, con el General Obregón que se encontraba en Guadalajara, haciendo ver a este Jefe que por renuncia de Huerta se había encargado del Poder Ejecutivo de la República, estando dispuesto a hacer entrega del mismo a la Revolución, por lo cual le pedía que suspendiera las operaciones militares con el fin de concertar los arreglos para la transmisión del Poder. El- General Obregón contestó a Carbajal en términos poco comedidos, haciéndole ver que no estando facultado para entrar en tratos con el enemigo, no era a éI, sino al Primer Jefe, a quien debería dirigirse para el logro de sus finalidades y que lo haría, personalmente, responsable, si los federales, en su huida, continuaban destruyendo las vías del ferrocarril

y y del telégrafo".38 !

Situados el Cuerpo de Ejército del Noreste, con la División del Centro en ; Querétaro, y el del Noroeste en Irapuato, el señor Carranza ordenó proseguir su avance * sobre México. El General Obregón tomó la vanguardia del ejército expedicionario.

El Primer Jefe había logrado vencer todas las dificultades presentadas en el seno mismo de la Revolución, haciendo que se cumplieran sus propósitos de que no fuera el

tuvieran la encomienda de avanzar sobre la capital. La situación de Carranza en esos momentos era diferente a la que enfrentó con de Francisco Villa respaldado por la División del Norte.jg

t insubordinado General Villa sino otros elqmentos del Ejército Constitucionalista los que 1

Los elementos del régimen huertista, pensaban, sin duda, que la Revolución iba a reincidir en el error de 191 1, dejando en sus plazas al Ejército Federal y a todos los demás organismos que lo sostenían, pero que esta vez la Revolución venía arrolladora, no quedando en consecuencia, otro recurso al enemigo que la rendición incondicional. Esto era un hecho incontrastable y la nota del General Obregón fechada en El Salto, distante sólo sesenta kilómetros de la metrópoli, puso fin a las vacilaciones del licenciado Carbajal, quien no pudo menos que aceptar la exigencia revolucionaria. Este profesionista, para justificar su actitud, lanzó un manifiesto: "En medio de la más penosa situación que atravesamos desde hace algún tiempo, enconados los ánimos al calor de la

' =OP cit. Barragan Tomo I, pp. 579-580. %lbid. pp. 588. OD cit., Schlarman, pp. 537. -

3 1

Page 35: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

guerra civil que divide a la familia mexicana y personificada la contienda en un hombre - el general don Victoriano Huerta -, se imponía la separaci6n de este sefior de la Presidencia de la República, como la única fórmula que calmara las pasiones en los dos bandos contendientes y permitirá buscar una solución pacífica al grave problema político que tanto ha ensangrentado al país. El señor General Huerta, comprendió al fin, la necesidad de abandonar el Poder y, al efecto, se dirigió a mí, que desempeñaba la Presidencia de la Suprema corte de Justicia de la Nacibn, haciéndome entrega de su alta investidura, previo el respectivo nombramiento de Secretario de Relaciones ... Desgraciadamente la Revoluci6n no correspondió a mis esfuerzos. Desde que los Delegados llegaron a Tampico, han estado incomunicados de hecho con esta capital, sin poder dirigirse a mí o a sus familias, y en todo el tiempo que han permanecido en el campo revolucionario, sólo recibí de ellos un mensaje que dejó pasar, con su aprobación, la censura revolucionaria, el cual se me manifestaba que a las proposiciones amistosas que llevaba la Revolución contestó con exigir una rendición absoluta e incondicional. Ninguna voz conciliadora ha salido de los campos revolucionarios. A mis deseos de quitar a la Revolución todo. lo que pudiera tener de vengadora, para hacerla sencillamente justiciera y, si es posible, humana, la Revolución respondió con una intransigencia absoluta, amenaza deidaños graves y de posibles perturbaciones futuras en el país. Por eso, desgraciadamente, el resultado no ha correspondido a mis esfuerzos, pero ofrezco a la Nación la seguridad de que éstos han sido patrióticos y bien intencionados".40

La rendición a la que se llegó y se conocen como los Tratados de Teoloyucan. Se dio en los términos siguientes: "Principia por la siguiente declaratoria del señor Iturbide, que aprueban los generales Obregón y Velasco: Como consecuencia de la partida del señor licenciado don Francisco S. Carbajal, que fue hasta anoche el depositario interino del Poder Ejecutivo de la República, he asumido la autoridad (Eduardo Iturbide), con mi carácter de Gobernador del Distrito Federal y Jefe de la Policía. Es mi deber principal, procurar a:todo trance, que no se altere el orden de la ciudad y que todos sus pobladores gocen de tranquilidad y garantías. Para el logro de tales fines, he pactado solemnemente con el s e k r General en Jefe del Cuerpo de Ejército Constitucionalista del Noroeste, don Alvaro Obiegón, debidamente autorizado por quienes corresponde, para la ocupaci6n de la Capital bor las Fuerzas de su mando, las bases que enseguida se puntualizan:

1.- La entrada de dichas fuerzas en la ciudad de México se llevará a cabo, tan luego como se hayan retirado (conforme vayan retirándose) los federales, al punto de común acuerdo fijado eptre el señor don José Refugio Velasco, Geqeral en Jefe del Ejército federal, y el señor General don Alvaro Obregón.

2.- Una vez ocupada la plaza, haré entrega de todos los cuerpos de policía, quienes desde luego quedarán al servicio de las nuevas autoridades y gozarán de toda clase de garantías.

3.- El Ejército al mando del General Obregón, consumará la entrada a la ciudad de México en perfecto orden, y los habitantes de la misma no serán molestados en ningún sentido.

El señor General Obregón se ha servido ofrecer, además, que castigará con la mayor energía a cualquier soldado o individuo civil que allane o maltrate cualquier domicilio, y advertirá al pueblo, en su oportunidad, que ningún militar podrá permitirse, sin autorización expresa del General en Jefe, solicitar ni obtener nada de lo que sea de la pertenencia de particulares.

~

cit., BarragAn Tomo I , pp. 596. 32

Page 36: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

El segundo documento firmado por el General Gustavo A. Salas, en representación del Ejército Federal; por el Vice-Almirante Othón P. Blanco, por parte de la Armada Nacional, y por los Generales Alvaro Obregón y Lucio Blanco, representantes del Ejercito Constitucionalista, (en su parte medular) dice así:

1.- Las tropas dejarán la plaza de México, distribuyéndose en las poblaciones a lo largo del ferrocarril de México a Puebla, en grupos no mayores de cinco mil hombres. No llevarán artillería ni municiones de reserva. Para el efecto de su desarme, el nuevo Gobierno mandará representaciones que reciben el armamento ...

... X.- Los generales, jefes y oficiales del Ejército y de la Armada, quedarán a disposición del Primer Jefe de las fuerzas constitucionalistas, quien, a la entrada a la Cap'ital, queda investido con el carácter de Presidente Provisional de la Repúbli m...

... Sobre el Camino Nacional de Cuautitlán a Teoloyucan, a trece de agosto de 1914.- Por el Ejército Constitucionalista: General Alvaro Obregón. L. Blanco (firmados).- Por el E ercito i Federal: G. A. Salas.- Por la Armada Nacional: Vice-Almirante O.P. Blanco.'' j '

Llevándose a cabo la firma de la rendición de las tropas del gobierno federal el General Alvaro Obregón informa su entrada a la Ciudad de México "Palacio Nacional, agosto 15 de 1914. Primer Jefe del E. C., don Venustiano Carranza. Tlalnepantla. Hónrome comunicar a usted que 2 y 30 de la tarde de hoy el Cuerpo de Ejército a mi mando hizo su entrada a esta Capital en medio de delirante entusiasmo. He tomado posesión del Palacio Nacional y he dictado medidas para conservar orden. Más tarde daré a usted mayores informes. Respetuosamente. General Jefe del C. de E. del N.O., Alvaro Obregón".42Así Venustiano Carranza hizo su entrada triunfal a la ciudad de México, el 20 de agosto de 1914, acompañado del General Obregón y de otros muchos Jefes revolucionarios de primer rango pertenecientes todos al Ejército Constitucionalista con la excepción de los miembros de la División del Norte."

En septiembre de 1914, presumiendo que Villa y Zapata acabarían por declararse en abierta rebelión contra la causa constitucionalista, Carranza empezó a prepararse para la nueva lucha, a cuyo efecto proporcionó grandes elementos de guerra, de los recogidos a los federales, a los jefes más adictos a él.

# f Estando en el estado de Chihuahua el General Obregón se entrevista con Villa para resolver los problemas del estado de Sonora y las diferencias entre el Gobernador Maytorena y el coronel Plutarco Elías Calles, por lo que aprovechando la ocasión, Obregón convenció a Villa de su buena disposición para que todas las dificultades tuvieran fin y reinara la más completa armonía entre todos los hombres del constitucionalismo, "le indiqué que si estaba resuelto a solicitar de la Primera Jefatura, en forma comedida y respetuosa, algún cambio en el Gabinete o en la investidura que debiera tener el señor Carranza, como Encargado del Poder Ejecutivo o como Presidente Provisional de la República, o alguna modificación en la política de nuestro Gobierno, no tenía yo ningún inconveniente en discutir las bases para dichas modificaciones,

41 Idem. pp. 599-602.

OR at., Barragán Tomo I , pp. 602. ~ L J cit.! Schlarman, pp. 538.

4"'EI hecho es que Venustiano Carranza, Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista, ejercla los plenos poderes ejecutivos desde el dia en que Francisco S. Carbajal se le había rendido incondicionalmente, por mandato del gobierno de Wilson". Op cit., Schlarman, pp. 539, 544

33

Page 37: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

formulando un memorial que firmaría juntamente con éI, para elevarlo a la Primera Jefatura".44

Proposiciones de los Generales Villa y Obregón, sometidas a la consideración del C. Primer Jefe del Ejército Constitucionalista.

"Primera.- El Primer Jefe del Ejército Constitucionalista tomara, desde luego, el título de Presidente Interino de la República, e integrará su Gabinete con Secretarios de Estado.. .

... Sexta.- Instaladas las Cámaras Federales y las Legislaturas de los Estados, las primeras, en sesiones extraordinarias, se ocuparán preferentemente en el estudio de las reformas constitucionales siguientes, que propondrh el Presidente Interino:

A.- Supresión de la Vicepresidencia de la República y manera de suplir las faltas absolutas o temporales del Presidente;

B.- Modificar'la computación del período durante el cual debe desempeñar sus funciones el Presidente de la República;

C.- La organización de la corte Suprema de Justicia y la manera de proceder a la designación de sus Ministros;

D.- La declaración de inhabilidad de todos los Jefes que formen parte del nuevo Ejército Nacional, para desempeñar los cargos de Presidente de la República, Gobernadores de los Estados y demás de elección popular, a menos que se hayan retirado seis meses antes de lanzar su candidatura ...

.... Séptima.- Inmediatamente que se conozca el resultado de la discusión relativa a las reformas constitucionales, el Presidente Interino expedirá la convocatoria para las elecciones del Presidente Constitucional y para la designación de los Magistrados de la Corte, en los términos que establezca la Constitución Política de la República.

Octava.- No podrán ser electos para Presidente de la República, ni para Gobernadores de los Estados, los ciudadanos que hayan desempeñado estos cargos, con carácter de provisiqnales, al triunfo de la Revolución, ni los que los,desempeñen desde la fecha de la convocatoria hasta el momento de la elección ... Chihuahua, septiembre 3 de 1914P

Venustiano Carranza contestó al documento en los siguientes términos:

"Con la atención y escrupulosidad que la trascendencia de la materia lo exige, me he impuesto del contenido de las proposiciones presentadas en nombre del Cuerpo del Ejército del Noroeste y de la División del Norte, ya que se me hizo el honor, como Jefe Supremo de la Revolución, de someterlos a mi criterio.

En general, cuestiones de tan profunda importancia, no pueden ser discutidas ni aprobadas por un reducido número de personas, ya que ellas deben trascender a la Nación entera, y son, por lo mismo de su soberana competencia.

' 44 Obregón Alvaro, Ocho Mil Kilómetros en CamDaña, FCE., Méx., 1960, pp. 199-208. Vid.. OD cit.. Barraghn Tomo II. pp. 67 &Op cit., Barrera Tomo I, pp. 8-10.

34

Page 38: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

... De las nueve proposiciones contenidas en el estudio a que me refiero, la primera debe considerarse como definitiva aprobada; ... Las demás proposiciones, de trascendentalísima importancia, no pueden considerarse objeto de discusión y aprobación entre tres o cuatro personas, sino que deben discutirse y aprobarse, en concepto, por una asamblea que pueda tener invívita la representación del país.

Inspirado en este espíritu democrático práctico, además, he creído de altísima conveniencia la convocación a una junta, en que deban discutirse y aprobarse, no solamente las proposiciones a que me refiero, sino todas aquellas de la trascendencia de éSta y de interés general. Esta junta deberá celebrarse en esta ciudad, el día primero del próximo octubre, y es seguro que de ella surgirá la cimentación definitiva de la futura marcha política y económica de la Nación, ya que tendr6 que ser ilustrada con los más firmes criterios y los más enérgicos espíritus que han sabido sostener los ideales revolucionarios. Palacio Nacional, D.F., a 13 de septiembre de 1914".*

El General Obregón se empeñó en ir personalmente a Chihuahua a invitar al General Villa y a los Jefes de la División del Norte a la Convención de México. A la llegada de Obregón a Chihuahua, Villa mandó reunir los Generales de su División y se convino en asistir a la Junta de México. Ya para salir todos ellos, o sus delegados, hacia la Capital, Villa recibió un aviso del Gobernador Maytorena en que le decía que las tropas del General Hill, avanzaban desde la Estación del Río sobre Nogales, plaza en poder de Maytorena. Esto puso fuera de sus casillas al impulsivo Jefe de la División del Norte, a tal extremo, de obligar, por medio de la violencia, a que el General Obreg6n le ordenara a Hill la retirada con sus tropas, a Casas Grandes. Como el General Obregón se resistió a dar la orden, Villa insultó al General Obregón y pretendió fusilarlo; así es que ante tan inusitado procedimiento empleado por Francisco Villa, no tuvo más recurso el General Obregón, que acceder a los deseos de su inhospitalario camarada, dando la orden de retirada al General Hill. Entonces, Villa, suspendió la ejecución.

!

"Al enterarse el señor Carranza de la conducta de Villa hacia el General Obregón, le dirigió un enérgico telegrama, siendo esta reprimenda el pretexto del rhpimiento definitivo con la Primera Jefatura. Efectivamente, Villa envió al señor Cirranza un telegrama que decía lo que sigue:

Cuartel General en Chihuahua. Septiembre 22 de 1914. Señor Venustiano Carranza. México, D.F. En contestacióv a su mensaje, le manifiesto que el Genera! Obregón y otros Generales de esta División, salieron anoche para esa Capital con el objeto de tratar importantes asuntos relacionados con la situación general de la República; pero en vista de los procedimientos de usted que revelan un deseo premeditado de poner obstáculos para el arreglo satisfactorio de todas las dificultades y llegar a la paz que tanto deseamos, he ordenado que suspendan su viaje y se detengan en Torreón. En consecuencia, le participo que esta División no concumrá a la Convención que ha convocado y desde luego le manifiesto su desconocimiento como Primer Jefe de la República, quedando usted en libertad de proceder como le convenga. El general en Jefe, Francisco Villa".47

I

Tras de informar a la Primera Jefatura de sus gestiones, la noche del 27 de septiembre Obregón se reunió con los jefes constitucionalistas en el cuartel general de Lucio Blanco y después de comunicarles sus impresiones personales sobre aquellos difíciles momentos y la necesidad de atraer al constitucionalismo a los mejores hombres

6

48 4701) "'f., BarragQn Tomo I I , pp. 68-72. cfr., OP cit., Barrera Tomo I , pp. 10.

540. OR a t . , Barragán Tomo II, pp.78-80. Cfr., OD cit., Barrera Tomo I, pp.11-12. m., 90 cit., Schlarman, pp.

35

Page 39: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

de la División del Norte, tomaron el siguiente acuerdo: "Se nombra en comisión, para que vayan a Aguascalientes a tratar con los jefes de la División del Norte, a los siguientes CC.: generales Alvaro Obregón, Ramón F. Iturbe, Guillermo Garcia Aragón, Ernesto Santos Coy, Ramón V. Sosa, Jesús Trujillo y coronel Luis Santoyo. Se acordó designar también como miembro de la comisión que irá al Norte, al C. General Eduardo Hay y agregar a dicha comisión al general Andr6s Saucedo. Se autoriza a esta comisión para trasladarse inmediatamente al punto más hacia el norte que pueda alcanzar, y ponerse en contacto con el mayor número de jefes de la División del Norte, a fin de dar cerca de ellos, todos los pasos que se estimen prudentes, para lograr, desde luego, la suspensión de hostilidades y, subsecuentemente, un acuerdo con ellos para evitar el conflicto armado inminente. Esta comisión queda especialmente facultada para preparar un acuerdo con los jefes del Norte, respecto a las condiciones en que pudiera reunirse una Convención General de Jefes Revolucionarios, que solucione debidamente todas las diferencias existentes, y traten los principales problemas políticos que ofrece la situación actual en México".'@ El señor Carranza autorizó a la Comisión para salir a Zacatecas y en esta ciudad se reunieron, Obregón y sus acompañantes, con los generales Aguirre Benavides, Robles, Natera, Bañuelos y otros jefes constitucionalistas. En tanto, Villa, que avanzaba de Chihuahua hacia Zacatecas, fue avisado por Robles de la presencia de la Comisión para conferenciar con los de la División del Norte, lo que hicieron luego del ambo de Villa, quienes les manifestaron sus temores de concumr a la Convención que se reuniría en la ciudad de México, tomando en cuenta que ya existía una situación de rompimiento entre la División de Villa y la Primera Jefatura; por tal motivo, los Jefes constitucionalistas les ofrecieron que la Convención podría reunirse en Aguascalientes, punto intermedio entre las ciudades de México y Chihuahua.

Después de este ofrecimiento, los jefes constitucionalistas partieron con destino a Aguascalientes para reunirse con Obregón, y el día 30 de septiembre tomaron el siguiente acuerdo: "...Resultado de conferencias, fue en definitiva el siguiente acuerdo: suspensión de actitud hostil por ambas partes, cesando desde luego todo movimiento de tropas. !Para día cinco octubre, deberá reunirse en Aguascalientes mayor número posible de genehles Constitucionalistas, para Convención General, que verificaráse empezando día 10. Objeto reunirse desde día 5, es establecer intercambio de ideas entre todos los jefes, para qhe al celebrarse las juntas, llevemos ya unificado, en lo posible, nuestro criterio".49

En los últimos días del mes de septiembre ya se encontraban en la Capital de la República la mayoría de los militares y civiles de más significacipn dentro del movimiento revolucionario que acudían a la Junta que convocaba el Primer Jefe de conformidad con el Plan de Guadalupe. Los únicos Generales cuya ausencia se notaba, era la de aquellos que pertenecían a la División del Norte.

El primero de octubre de Aguascalientes regresó a México la Comisión nombrada por los generales constitucionalistas y posteriormente reuniéndose con el señor Carranza, trabajaron empeñosamente porque éste accediera a que se trasladara a Aguascalientes, lo que finalmente aceptó.

Como lo había dispuesto originalmente el señor Carranza, la Convención inició sus trabajos en la ciudad de México, esa misma tarde, sesionando en el local de la Cámara de Diputados; pero a esta reunión únicamente concurrieron por sí o por medio de representantes, los gobernadores de Estado y jefes con mando de fuerza adictas a la Primera Jefatura de la revolución; las sesiones celebradas en la Capital se efectuaron hasta el 5 de octubre, fecha esta última en que se acordó tras caluroso debate,

@OR cit, Barrera Tomo I , pp.12-13. 49m, pp. 13-14.

36

Page 40: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

trasladarse a Aguascalientes, donde según el delgado licenciado Luis Cabrera, se continuarían las sesiones.50

Principiaron las sesiones en el edificio de la Cgmara de Diputados, a cuya solemne apertura asistió el Primer Jefe. El señor Carranza dio lectura a un informe sobre el desarrollo de la Revolución que había encabezado, terminando con estas palabras: "Ustedes me confiaron el mando del Ejército, ustedes pusieron en mis manos el Poder Ejecutivo de la Unión; estos dos depósitos sagrados no pueden ser entregados por mí sin mengua de mi honor, y sin ruina del país, a solicitud de un grupo de jefes descarriados, dominados por un bandido y algunos políticos ambiciosos, a quienes nada debe la Patria en la presente lucha. S610 puedo entregarlo y lo entrego en estos momentos, a los jefes aquí reunidos. Espero la inmediata resolución de ustedes, manifestándoles que desde este momento me retiro de la Convención para dejarlos en com leta libertad y seguro de que su decisión será inspirada en el supremo bien de la patria". R

El licenciado Luis Cabrera, pidió el uso de la palabra antes que nadie, para aclarar el final del discurso de Carranza, quien debido a la emocibn que lo embargaba, expresó i los últimos conceptos con un débil acento, que la mayoría de la asamblea, no pudo enterarse con certeza de su idea. Cabrera dijo que Carranza no había pedido su retiro, sino que había hecho entrega de la Jefatura del Ejército, y como consecuencia, estaban en esos momentos sin ninguna autoridad, no quedando después del señor Carranza más jefe fuerte que Francisco Villa, por lo cual deberían en ese mismo acto elegir nuevo jefe, para evitar las responsabilidades que caería sobre ellos si quedaba acéfala la revolución. Terminó diciendo que había que proceder a la votación y, tomando éI un papel, dijo en alta voz: "aquí está mi voto en favor del señor Carranza". Tras de este habilísimo recurso político de Cabrera, que acusaba un profundo conocimiento de la psicología parlamentaria, se puso de pie el general Murguía para decir que no debería admitirse por ningún motivo, la renuncia del señor Carranza; siguiendo el general Coss en términos parecidos, y, finalmente, el coronel Marciano González, con frases elocuentes, acabó de convencer a la Asamblea de que no debía ser admitida la renuncia. Después de algunos minutos la Asamblea qecidió rechazar la renuncia y se ratificó Carranza el cargo de Jefe Supremo de la Revolución, que le fue conferido por el Plan de Guadalupe al iniciarse la lucha, subscrito por un pequeño grupo de patriotas; ahora le era confirmada aquella autoridad por una abrumadora mayoría de revolucionarios, exceptuando a los pocos jefes que integraban la División del Norte."

z t t A pesar de ser día festivo el 4 de octubre, se celebró una larga sesión. En ella se aprobó por gran mayoría que los delegados que deberían asistir en Aguascalientes serían

50 Ibid., pp. 14. E s p o r t a n t e hacer mención de la figura del Licenciado Luis Cabrera, Se expresa lo siguiente: "Si hemos mencionado en este capítulo, por primera vez, figurando ya dentro de la Revolucibn Constitucionalista, al licenciado Luis Cabrera, refiriendo su h2bil maniobra política para evitar aue la Revoluci6n quedara acefala, si se admitía la renuncia del seilor Carranza como Primer Jefe del Ejército Constitucionalista y encargado del Poder Ejecutivo de la Nación ... Yo recuerdo que sólo en dos ocaciones visitó al señor Carranza, una en el Estado de Sonora y la otra, en C. Juhrez (sic), permaneciendo all2 DOCOS días con 61. rearesAndose a los Estados Unidos donde desempeñaba una comisión de secundaria importancia aue le había conferido el señor Carranza. En cambio. al producirse la lucha contra las facciones villista Y zapatista, sí tomó una resuelta y brillante participaci6n al lado del Primer Jefe...", OD cit. Barragan Tomo II, pp. 96-97, la duda que me surge al respecto es ¿Qué Estado de la República.Mexicana estaba representando o era un General Constitucionalista con mando militar no definido? Pero, ¿Qué estaba haciendo en la Convención del primero de octubre en MOxico?. 5 1 0 ~ cit., Alessio, pp.105-107. 520p cit.. BarragBn Tomo 11, pp. 94-95.

37

Page 41: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. .. . "

generales, o militares representantes de éstos. "Coroneles o sargentos agregó con énfasis el general Qbregón"53

AI terminar la sesión del 5 de octubre, el general Lucio Blanco anunció que al día siguiente, estaría listo un tren especial en la estación de Buenavista para conducir a los delegados a la ciudad de Aguascalientes.54

El día 6 de octubre por la tarde debería efectuarse en el Teatro Morelos de la Ciudad de Aguascalientes, la primera junta previa de la Convención. Las bases para integrarla eran las mismas aprobadas por la junta que se reunió en la ciudad de México. Desde luego, hubo exclusión absoluta de civiles, pues allí se estipuló claramente que sólo serían admitidos como delegados los que hubieran luchado con las armas en la mano. Allí 'se expresó también que todos los que militaban en el ejército eran civiles antes de que estallaran los movimientos revolucionarios y hasta se registraron con este motivo desagradables incidentes entre los generales Obregón y Coss, por una parte, y el licenciado Luis Cabrera, por la otra.

También se convino que sólo asistirían a la Convención los generales y los gobernadores de los Estados y Territorios, ya fuera personalmente, o por medio de representantes debidamente autorizados, debiendo ser estos últimos, precisamente, militares. Tal convenio concedía desde luego, una enorme ventaja para los intereses de Carranza, ya que la mayoría de los gobernadores habían sido designado por éI, y las fuerzas que todavía lo reconocían como jefe contaban con un gran número de generales. "Puede afirmarse que los generales y representantes que podían llamarse adictos a don Venustiano constituían más de las dos terceras parte del total de los delegados".55 En los acuerdos tomados con anterioridad en la ciudad de Torreón, se convino en que la Convención se integraría con representantes que serían electos a razón de uno por cada millar de soldados.

Los principales delegados de la Convención fueron: Venustiano Carranza se negó a enviar representante. El general Lucio Blanco asistió a las primeras juntas, nombrando al marcharse a la ciudad de México; al coronel Ramón Oyervides. Los demás generales y gobernadores estuvieron, respectivamente representados por los siguientes militares: Alfredo Elizondo: coronel Salvador R. Alcaraz; Eduardo Carrera G.: coronel Alessio Robles; Herminio Alvarez: coronel Isabel P. Balderas; Alfredo Ricaut: coronel Atilo Barrera; licenciado Jests Acuña, gobernador de Coahuila: capitán frfncisco Betanzos; Alfredo Fuentes D.: gobernador de Aguascalientes: coronel David Berianga; J.M. Acosta: mayor José Casta; A. Medina: teniente coronel Rafael Cárdenas; Abraham Cepeda: teniente coronel Guillermo Castillo Tapia, Felipe Riveros, gobernador de Sinaloa: mayor Mauricio Contreras; Pedro C. Colorado: mayor José T. Cantú; Victor Monter: capitán Elfego Chargoy; Benjamín Garza: capitán Félix Durán; Gonzalo Novoa: coronel Carlos Domínguez; Isidro Cortés: capitán Valentin R. Flores Garza; Juan Lechuga: teniente coronel Agustín Garcia Balderrama; Alejo González: mayor Guillermo Gaona Salazar.

Francisco Villa: coronel Roque González Garza; Juan Dosal: capitán Jesús M. Garza; Gustavo Elizondo: teniente coronel Eduardo C. González; licenciado Pablo A. De la Garza, gobernador de Guanajuato: mayor Ramón Gámez; ingeniero Eleuterio Avila, gobernador de Yucatán: coronel Ricardo González; Tomás Ornelas: capitán Luis González; Carlos C. Echeverría, jefe político del Territorio de Tepic: coronel Felipe Gutiérrez de Lara; Jesús Dávila Sánchez: coronel Lázaro J. Hernández; Fortunato

%OD _ . cit., Alessio, pp. 11 l. M OP cit. Barragan-Tomo I I , pp. 112. ?bid., - pp. 124.

38

Page 42: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Maycotte: coronel Juan Hernández Garcia; Martin Castrejón: coronel Encarnación León; Benjamín G. Hill: teniente coronel Julio Madero; Ernesto Santos Coy: mayor Dionisio Marines Valero; Eugenio Aviña: mayor Francisco Mancilla; Francisco Cossío Robelo: teniente coronel Renato Miranda; Máximo Rojas: coronel Pedro M. Morales; Ramón F. Iturbe: teniente Alberto Montaño.

Angel Flores: coronel Félix Ortega; José María R. Cabanillas: capitán Manuel Ortega; Francisco Urbalejo: capitán José H. Osterman; José de la Luz Romero: teniente coronel Miguel Peralta; Sergio Pazuengo: mayor Rafael Pérez; José María Maytorena, gobernador de Sonora: capitán Alberto B. Piña; Emiliano P. Nafarrete: mayor Jacinto Ramirez; Abel Menchaca: coronel Daniel Ríos Zertuche; Juan Carrasco: mayor Manuel Roncal; Pablo González: coronel Alfredo Rodriguez; A. Garcilazo, Jefe político del territorio de Quintana Roo: coronel José Rodriguez Cabo; P. Hemández: coronel Adolfo Francisco Salinas; Alejo Mastache: coronel: Rosario L. Santana; Jesús Agustín Castro, gobernador de Chiapas: teniente coronel Filiberto Sánchez; A. Portas: coronel Guadalupe Sánchez; Alfredo Aburto Landero: teniente coronel Manuel Serrano Tamez; Federico Montes: mayor José Siurob; J. Mucel, gdbernador de Campeche: teniente coronel Benjamin C. Silva; Antonio de P. Magaña: mayor Josué Sainz.

Francisco Coss, gobernador de Puebla: coronel Rafael de la Torre; Gertrudis Sánchez, gobernador de Michoacán: coronel Sabás Valladares; Miguel M. Acosta: coronel Samuel G. Vázquez; Jacinto B. Treviño: coronel Samuel M. Santos; Ignacio Pesqueira: coronel Joaquín V. Cazarín; Anastacio Pantoja: mayor Alejandro Aceves; Manuel M. Diéguez: teniente coronel Fermín Carpio; Francisco Murguía: teniente coronel Carlos S. Fierros; Rómulo Figueroa: coronel Francisco Figueroa; Trinidad Rojas: capitán German Garcia Lozano; Abraham Garcia: coronel Alfonso J. Herrera; Pilar R. Sánchez: mayor Alfredo M. Jaimes; Heriberto Jara, gobernador de Distrito Federal: coronel Marcelino Murrieta; A. Camacho: coronel Félix Neira Barragán; Agustín M. Galindo: coronel Enrique W. Paniagua; Joaquín Amaro: coronel Miguel M. Ramos; Nicolás Flores, gobemador del estado de Hidalgo: mayor Leopoldo Ruiz; Cesáreo Castro: coronel Federico Silva; T. Gómez: coronel Ignacio Vallejo; Luis F. Domínguez: capitán Francisco Vela, y Luis Caballero, gobemador de Tamaulipas: coronel Bibiano Saldívar y Cervantes.=

En un ambiente de fraternidad se terminó la discusión de credenciales en la sesión matutina del 14 de octubre de 1914, en una serie de juntas previas presididas por el general Eulalio Gutiérrez. AI final se presentó una propuesta de transición que fue &probada: la asamblea se erigiría desde luego en Convención y Soberana.57

En la sesión del 19 de octubre de 1914, 'l... era imposible contener la indignación de la mayoría de los delegados. Las expresiones contra el Primer Jefe eran demasiado acres, y lo curioso del caso es que gran parte de ellas provenían de los delegados que se le consideraban adictos. Con diversos pretextos pueriles, algunos de los más encumbrados representantes carrancistas trataron de que la sesión fuera suspendida sin llegar a tomar ningún acuerdo sobre el espinoso asunto de los presos políticos. Ya Obregón había tratado de que el presidente Villarreal conferenciara telegráficamente con Carranza, cuando los presos políticos ya estaban en marcha hacia la frontera. El general Hay, que pretendía ser el sucesor del Primer Jefe, fue más explícito; insistió sobre la inútil conferencia telegráfica y pidió desde luego se suspendiera la sesión ... El joven jefe

O cit., Barrera Tomo I , pp. 19-23. V i d . , OR cit., Alessio, pp. 125-126. '*. Venustiano Carranza, Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista, encargado del Poder Ejecutivo. H6nrome comunicar a usted haberse inagurado (sic.) con fecha de ayer, la gran convención de gobernadores y generales declarandose Soberana. Ruego se sirva comunicarlo a todas las autoridades civiles y militares del país. Aguascalientes., octubre 15 de 1914'. Archivo General de la N a c i h , Fondo Convenci6n Revolucionaria de Aguascalientes Caja 1, Exp.5 F, lo . , en adelante AGN. (C.R.A.).

39

Page 43: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

zacatecano José Isabel Robles, uno de los generales más queridos de la División del Norte, y primer vicepresidente de la Convención, exigió que se mandaran detener los trenes en que viajaban con escolta los presos políticos para evitar que llegaran a Laredo ... Y fueran detenidos en Laredo Texas E.U., por las autoridades ... AI final, se leyó la proposición concreta de González Garza, contenida en los siguientes términos: Ordénese por la vía más rápida y con el carácter de urgente a los comandantes militares de Saltillo, Monterrey y Laredo que tan luego como llegue el tren que conduce a los reos políticos, sean remitidos inmediatamente a esta ciudad de Aguascalientes. AI mismo tiempo, notifiquesele al Primer Jefe del Ejército Constitucionalista, encargado del Poder Ejecutivo, la presente resolución a fin de evitar dificultades".58 Dos días después se presentaron en la Convención los presos políticos. Fueron vitoreados con entusiasmo desbordante. Se les Consideraba como símbolos tangibles de la soberanía de la asamblea, que se había impuesto sobre la voluntad terca de Carranza.

El 22 de octubre de 1914, se anunció que el general Francisco Villa, jefe de la División del Norte, había llegado la noche anterior a la ciudad de Aguascalientes y expresó sus deseos de presentarse en la Convencion para estampar su firma en la bandera patria, en señal de acatamiento a todas las decisiones de la asamblea. Con todos los delegados puestos de pie. Lo mismo que el público, Villa prestó la protesta reglamentaria, que le fue tomada por el general Antonio I. Villarreal, presidente de la asamblea, y estampó su firma en la banda blanca de la enseña tricolor. "Villa de pie en el escenario, emocionado en grado sumo, cuando se acallaron las ovaciones que fueron estruendosas, dirigiéndose al presidente de la asamblea, dijo: - Con su venia, quiero decir unas cuantas palabras a mis hermanos de lucha y de ideales. Concedido el permiso, se adelantó hasta las candilejas del escenario. Con voz fuerte en que se traslucía la emoción, expresó: - Señores generales, señores oficiales que han sabido estar a la altura del deber para que todos unidos derrocáremos una tiranía como fue la del llamado gobierno de Huerta: Ustedes van oír de labios enteramente inculto, ... En manos de ustedes están los destinos de la patria, y si la patria se pierde, sobre la conciencia de ustedes que son hombres conscientes, pesará eso ... Porque Francisco Villa les abre su corazón para decirles que nada quiere para éI; sólo quiere mirar claro en los destinos de su patria~~.59

Memorables y tormentosas fueron las sesiones matutina y vespertina del 28 de octubre de 1914. Esta fecha representa uno de los principales fastos de la revolución mexicana. Desde entonces \a revolución aparentemente unificada, tuvo ya ,un contenido hondamente social al adoptar la Convención, en forma clamorosa, los principios contenidos en el Plan de Ayala, auspiciándolos como un mínimo de las reivindicaciones

58 'La comisi6n de gobernaci6n tiene la honra de dictaminar ante esta H. Asamblea, con relacidn a la proposici6n suscrita por los CC. D. Ríos Zertuche, R. Miranda, A. Rodriguez y R. De la Torre, relativa al nombramiento de una Comisión de cinco personas que estudie cuales son los derechos y obligaciones que tiene la Convenci6n Militar ante la Nación para saber cuales son sus atribuciones de una manera clara, dictamina lo siguiente: En vista de que esta Convención se ha reunido para resolver todo lo relativo al Gobierno de la República, y se ha declarado soberana, no es /asible (sic) (posible) de limitar sus atribuciones, que por su naturaleza deben ser amplísimas, porque esto podría ocasionar que se entorpecieran sus trabajos, y por tanto que se restringiera esa soberanla, que debe ser suprema y abarcar todos las cuestiones y todos los problemas que afectan al inter& general de la Naci6n. Por lo expuesto, opinamos que debe desecharse la proposición citada. Firma la comisi6n de gobernación". AGN. (C.R.A.) Caja 1, Exp. 4, F. 61. "Desde la hora y punto en que habeis asumido el ejercicio de la soberanía nacional, el pals entero ha debido entender, y ha entendido en efecto, que solamente nosotros estáis capacitados para expedir leyes obligatorias para toda la Naci6n Mexicana, porque la potestad de legislar es el más genuino atributo de la soberanía. Con verdadero estupor se ha visto que, con posterioridad a la solemne declaraci6n de que se trata, el Primer Jefe Encargado del Poder Ejecutivo (solamente del Ejecutivo, no del Legislativo) ha seguido expidiendo leyes de un alcance trascendental, como puede verse en el Peri6dico Oficial de la Federaci6n". AGN. (C.R.A.) Caja 1, Exp. 5, F. 20. m., Or, cit., Alessio., pp.151-156. Y OD cit., Barrera Tomo I, pp. 227-231, -0p cit., Alessio, pp. 176-177.

40

. .

.

Page 44: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

agrarias. El Plan de Guadalupe no auspiciaba ninguna reforma social. Fue un plan meramente político, quizá el más pobre en materia social de los que se han expedido en el país. Era muy inferior en todos sentidos al Plan de San Luis Potosí. El Plan de Ayala de 25 de noviembre de 1911 constituía el grito de guerra de los campesinos. Repercutió vigorosamente en el Norte. La cláusula octava de los-convenios de Torreón, aprobada el 7 de julio de 1914, obligaba a los jefes y a todos los generales de las Divisiones del Noreste y del Norte "a procurar el bienestar de los obreros; a emancipar económicamente a los campesinos haciendo una distribución equitativa de las tierras".@

El presidente Villarreal declara abierta la sesión. El secretario, Marciano González repitió la lectura de la comunicación de Emiliano Zapata en que pedía que, para no retardar la solución de los graves problemas nacionales, se concediera voz y voto a sus representantes. El delegado José Siurob expresó que para conceder voz y voto a los zapatistas (quienes habían llegado procedentes de Morelos en día 26 de octubre 1914), era imprescindible que previamente fueran aceptados corno delegados, para lo cual deberían llenar todas las condiciones establecidas en un acuerdo expreso de la asamblea ya que firmaron en el lienzo de la bandera. Interpelados los zapatistas para que expresaran cuáles eran las razones fundamentales para desear tener voz y voto, Antonio Díaz Soto y Gama abordó la tribuna para decir: "Las dos razones que tenemos son tan claras, que mis compañeros no quieren una inconsecuencia: la primera es que se acepte el Plan de Ayala, y la segunda, que se quite al hombre estorbo, como yo califico al ciudadano Venustiano Carranza, al cual no hemos reconocido ni reconoceremos; se trata de las condiciones sine qua non de la pacificación: ustedes tienen dos en la cartera; se va a rendir dictamen sobre ellas y nosotros, los más interesados, los más castigados por Carranza, los más interesados en la defensa del Plan de Ayala no tendremos voto. Dejamos al criterio de ustedes, al criterio honrado, sereno, para que digan si eso es racional, si esa razón es de sentido común, si esa razón tan clara y tan lógica no es superior a las razones que han invocado muchos de los miembros de la asamblea". AI fin y después de una larga discusión la secretaría dió lectura a la siguiente proposición: "Proponemos: que por ser unánime la opinión de la asamblea, se declare que se aceptan los principios contenidos en el Plan de Ayala y que según el mismo Plan, están contenidos en los artículos 4/0., 6/0., 7/0., 8/0., 9/0., 12/0. y 13/0., excluyéndose los otros por no entrañar ningún principio revolucionario ... Soto y Gama expresó que el Plan podría

60 I d e m . , pp.231.

"Ma'nifiesto a la Naci6n. Mexicanos:- La Convenci6n militar del 10 de octubre se ha reunido con el objeto de unificar el criterio revolucionario, para determinar las bases y orientaciones del nuevo gobierno de la república inspiradas en la opini6n de la mayoria del ejercito constitucionalista, para que ese gobierno realice los ideales de la revolución y las instituciones democrhticas, pues de este modo cumpliremos con el compromiso solemne contraído con la Naci6n de sustituir a la tirania por un gobierno que satisfaga las necesidades públicas actuales. Y esa misma Convenci6n se ha declarado Soberana, para hacer efectivas y obligatorias sus resoluciones para todos los jefes del Ejército evitándose de esta manera la guerra, la dictadura y la anarquia que podrían resultar de permitir que dichos Jefes trataran de imponer aisladamente su voluntad y su opini6n al resto de los CC. De la República. Somos el poder supremos Nacional, porque hemos sido el Supremo Poder del revolución .- El movimiento Constitucional no ha triunfado de la reacci6n debido al esfuerzo de uno solo de sus jefes, sino en virtud del concurso que hemos prestado todos para ello. Y..., nos hemos reunido hoy ya no para derrocar ni para destruir, sino para organizar y construir el nuevo gobierno Republicano en el cual se han de sintetizar todos nuestros ideales y todos nuestras tendencias. Esta Convenci6n / (sic.) (es) Soberana, porque en ella están sintetizados toda la fuerza y una gran parte del pensamiento de la Revolución. Constituidos asi en mayoria para ser escuchados, y en Poder Supremo de la Naci6n para ser obedecidos podremos acabar para siempre con las criminales ambiciones individuales de poder, con las funestas intrigas de Gabinete y con la inmoral y antipatri6tica labor de la prensa. La República ... Debemos hacer respetar nuestras resoluciones, no precisamente porque contamos con la fuerza de las armas para ello, sino porque tenemos la inquebrantable fuerza de la opini6n pública. Hemos protestado una bandera y por medio de las firmas puestas en ella hemos contraido el compromiso solemne ante la Patria de nombrar, organizar e instalar el Nuevo Gobierno de la República que ha de servir de eslab6n para elecci6n del gobierno definitivo Constitucional". AGN (C.R.A.) Caja 1, Exp. 7, F. 1-3.

41

' 1 1

Page 45: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

dividirse en dos partes: la cuestión social, o más bien dicho la cuestión agraria, y la cuestión política.,.; la cuestión política quiere evitar la imposición; es el reverso del Plan de Guadalupe. El Plan de Guadalupe llama a la Presidencia de la República, con anticipación, con una anticipación peligrosa, a un hombre a quien la República todavía no conoce, a un hombre que puede variar durante el curso de la revolúción, y que de hecho ha variado. El Plan de Guadalupe llamó al poder a don Venustiano Carranza; con sólo ochenta firmas de sus principales jefes, por sorpresa llegó al poder. Los resultados de esa sorpresa son tan notorias que casi no es preciso señalarlos. Don Venustiano Carranza, al poco tiempo de ser el Primer Jefe, empezó a descuidarse y por algunas dificultades en la cuestión agraria tuvo que refugiarse en Sonora. Don Venustiano Carranza ha resultado cada vez menos afín con la revolución ... Podría haber sucedido, comp ha sucedido, como ha acontecido realmente, que al fin de la revolución hubiera otras personalidades revolucionarias más vigorosas y más robustas que la elegida al principio, y es racional y es justo y es político lo que prevé el Plan de Ayala; permitir a todos los revolucionarios reunirse en una convención, después de la revolución, después de los hechos consumados, cuando se ha visto el proceder y la conducta de todos los revolukionarios, decir entonces: de todos los revolucionarios del país, el que nos conviene para la primera magistratura es Fulano...’”‘

El día 29 de octubre de 1914, sé sabia que en esa sesión se iba a abrir el misterioso pliego que envió don Venustiano Carranza con la comisión que presidida por el general Obregón, fue a entrevistarlo para transmitirle la atenta invitación que la asamblea le hizo para que concurriera personalmente a las sesiones o para que enviase un representante debidamente acreditado. A esta invitación Venustiano Carranza contesta: “He recibido la atenta invitación que ustedes se sirvieron hacerme para que concurra a Aguascalientes a tomar parte en las discusiones que allá se están verificando. Entiendo que esta invitación se me hace por creerse que mi presencia contribuirá a decidir con más facilidad, las cuestiones que están pendientes de tratarse ante esa junta, y sobre todo la relativa al personal del gobierno que debe regir los destinos del país. Tengo la pena de no poder aceptar la invitación que se me hace, pero al mismo tiempo deseo que la Convención entienda que al rehusar mi concurrencia a esa junta, lo hago precisamente con el propósito de facilitar hasta de donde mí dependa la mencionada resolución de las cuestiones pendientes”.

“Yo no podría, en efecto, concurrir a esa reunión más que con uno de estos dos caracteres: o como individuo o como Jefe del Ejército Constitucionalista, a men9s que abandonado mi cargo de Primer Jdfe, tomara la denominación de General, o concurriera como Gobernador del Estado de Coahuila, pero en uno y otro caso tendría necesidad de asumir un carácter igual al de los demás miembros de esa conferencia, lo cual me colocaría en condiciones de no poder desempeñar el cargo de Jefe del Ejército Constitucionalista y de encargado del Poder Ejecutivo que ustedes (en la Convención de México, fueron únicamente los constitucionalistas, quienes le confiaron nuevamente el mando y en la Convención de Aguascalientes están representantes de Villa y Zapata), mismos me confiaron”.

“Como Jefe del Ejército Constitucionalista, mi presencia en la asamblea de Aguascalientes podría ser interpretada como un intento de coartar la libertad de deliberación, de la cual he dado pruebas de ser muy respetuoso. Por otra parte, para el mejor logro de los propósitos de la Convención y especialmente para que no se frustre el objeto Único que tuvo la traslación de la Junta a la ciudad de Aguascalientes, donde fuera posible el contacto con la Divisiórl del Norte, a fin de llegar a una pronta solución de las dificultades entre el Jefe de esa División y yo, creo que es prudente mi alejamiento de ese

”OD cit., Alessio, pp. 233-236. 42

Page 46: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

lugar. La ausencia mía así como la del general Villa personalmente, contribuirán a facilitar la solución que patrióticamente está tratando de buscarse...*.

"Tengo la convicción de que la verdadera causa de las dificultades por las cuales atraviésa el país, en estos momentos, es la reacción que siempre sobreviene al día siguiente del triunfo de toda revolución, es decir, los intentos de defensa que se hacen con el objeto de evitar que las consecuencia del triunfo revolucionario recaigan con toda la fuerza de su peso sobre los elementos del régimen derrocado. Estos elementos reaccionarios casi siempre procuran rodear a alguno de los jefes revolucionarios más conspicuos, sugiriéndole ambiciones personales de mando para agruparse a su rededor y obtener así protección...".

' "Hay una ambición más'grande que la de ser presidente de la República y es la de tener una omnipotencia militar tal, que permita a un hombre dominar a todos los poderes de la Unión. La insistencia del general Villa en conservar el mando de una división a la cual se supone omnipotente, pretendiendo al mismo tiempo restablecer desde luego un orden constitucional sobre las bases del antiguo régimen y designando para la presidencia de la República a un civil, indica claramente que el sueiio de este jefe es el de convertirse en árbitro de los destinos de México; con facultades de nombrar presidente, elegir cámaras, designar la Suprema Corte de Justicia, dominar los gobiernos de todos los Estados y, en general, abarcar todos los poderes de la República...".

"Ignoro cuáles sean las pretensiones del general Zapata; pero creo que no diferirán mucho de las del general Villa ... Deseo declarar solemnemente que estoy dispuesto a abandonar mi cargo de Primer Jefe del Ejército Constitucionalista y mi puesto de Encargado del Poder Ejecutivo de la Unión, y si es necesario, a ausentarme del país, siempre que estos actos míos sean considerados por la Convención como necesarios y se tomen las medidas adecuadas para que ese sacrificio de mi personalidad produzca los efectos que de éI debe esperar el país para recobrar su tranquilidad. Deseo, por lo tanto, que la Convención de Aguascalientes manifieste claramente su opihión, expresándose en concreto: Primero: Si la convención de Aguascalientes cree necesafio que yo me retire del poder, como el medio más efectivo de que se restablezca inmediatamente la armonía entre los elementos revolucionarios. Segundo: Si la Convención de Aguascalientes cree necesario que yo me retire del poder, para que pueda lograrse el triunfo completo de la revolución y el subyugamiento de los elementos hostiles a ella, cosas ambas que aún no se han aca9ado de obtener. Tercero: Si la Convención de qguascalientes cree necesario que yo me retire del poder, para que puedan hacerse las reformas sociales y políticas que exige el país para la conquista de la paz definitiva. Cuarto: Si la Convención de Aguascalientes cree en suma, que mi permanencia en el poder es un obstáculo para la realización de los ideales revolucionarios. Tales son las razones de necesidad que la Junta de Aguascalientes debe pensar, y si después de pensarlo serena y patrióticamente, encuentra que mi persona no es ya necesaria para la revolución, sino un obstáculo para el bien de la Patria, estoy dispuesto a retirarme".

"Las únicas condiciones que pondría para ese retiro, no serán absolutamente de carácter personal ni tendrán por objeto preparar un futuro regreso al puesto que hoy ocupo, ni mucho menos esconderán intenciones de quedarme con una parte del poder que ahora tengo en las manos, sino que serán todas enteramente desinteresadas. Estas condiciones tienen por objeto garantizarme de que mi retiro del poder no será estéril y de que no voy meramente a ceder el campo a los enemigos de la revolución o a jefes militares con ambiciones persondes. Si yo me retirara pura y simplemente, mi retirada equivaldría a abandonar el poder en manos de los que ahora quieren adueñarse de éI, o

43

Page 47: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

entregarlo a cualquiera otra personalidad que pudiera fácilmente convertirse en instrumento de los conservadores enemigos de la revolución".

"Mi retirada no debe tener tampoco por objeto escombrar el camino para una restauración ni para una dictadura militar; tampoco debe tener por objeto restablecer inmediatamente un régimen de apariencia constitucional en el cual la revolución volvería a fracasar. Por lo tanto, manifiesto a la Convención que me encuentro dispuesto a entregar en manos del Ejército Constitucionalista el Poder Ejecutivo de la Nación, y si es necesario, a retirarme del país bajo las siguiente condiciones: Primera: Se establecerá un gobierno constitucional apoyado por el ejército constitucionalista, que se encargue de realizar las reformas sociales y políticas que necesita el país, antes que se establezca un gobierno plenamente constitucional. Segundo: El general Villa renunciará, no su candidatura a la presidencia o vicepresidencia de la República, que nadie le ha ofrecido, sino la jefatura de la División del Norte, retirándose, como yo, a la vida privada, y renunciando a toda injerencia en los asuntos públicos del país y a toda pretensión de dominio político de éI, saliendo de la República si la Convención acuerda que yo también deba expatriarme. Tercera: El general Zapata renunciará al mando de sus fuerzas y toda pretensión a puestos públicos locales o federales que ahora lo reconocen como jefe, al gobierno que la Convención constituya".

"Tal es la forma de solucionar el conflicto existente, que someto a la consideración de ustedes y que estoy dispuesto a cumplir. Más si lo Único que se desea es alejarme de la Jefatura del Revolución y del Poder Ejecutivo de la Unión para que las ambiciones personales o la reacción encuentren escombrado los caminos, entonces, desde ahora, declaró que estoy firmemente resuelto a servir a la causa por que he venido luchando. Mientras la junta de Aguascalientes encuentre la posibilidad de solucionar patrióticamente las dificultades existentes, marcharé de acuerdo con ella; pero si llegare un momento en que dicha Junta no pudiere seguir adelante porque en otros no hay el mismo espíritu de abnegación y de patriotismo que en mí, entonces, si la salvación del país y el triunfo de la revolución así lo exigen, en mi carácter de jefe llamaré a mi ladb al Ejército Constitucionalista que me reconoce como tal, para luchar contra los eFmigos de la libertad del pueblo mexicano. V. Carranza.'m

Para el día 30 de octubre por la noche, "muchos delegados tenían en su poder dos copias de dos telegramas enviados por Carranza. Decía el Primero: A los Ciudadanos

1 Generales de la Convención. Por Ips informes publicados en la prensa, he vist? el dictamen rendido por la comisión encargada de estudiar mi nota de fecha 23 del actual, dirigida a esa Junta. Por el mismo conducto, me he enterado del sesgo de las discusiones verificadas con motivo de ella. He de agradecer a los jefes militares que integran esa Junta, se sirvan fijar su atención detenidamente en los términos de mí referida nota, con el fin de que no se interprete en un sentido distinto del que verdaderamente tiene. El propósito de mi nota, como claramente se expresa en ella, fue dar a conocer a esa Junta las condiciones previas bajo las cuales estaría yo dispuesto a presentar mi renuncia, que aún no he formulado ... Suplico, por tanto a ustedes, se sirvan darme aviso oportuno de haber obtenido de los generales Villa y Zapata su aceptación con los términos de mi nota y de haberse discutido y aprobado la forma de gobierno para presentar entonces mi renuncia. V. Car ran~a" .~~

Muchos delegados a la hora de la cena comentaban en forma pesimista los últimos mensajes de Carranza, que algunos calificaban como mañosos subterfugios para no abandonar el poder. Se referían a sus condiciones previas, casi imposibles de llenar en

@Idem., pp.245-250. cfr., O p . , Barrera Tomo I , pp. 645-648. m G t . , Alessio, pp. 264-265.

44

Page 48: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

lo atañadero al retiro del general Zapata, cuyos delegados exigían mucho y no se habían comprometido a nada. La abstrusa condición sobre la forma de gobierno para realizar las reformas sociales de la revolución, eran difícil de barruntarse su alcance y significación, pues el dictamen ya la preveía con la designación de un presidente provisional, con el establecimiento de un régimen preconstitucional y con la adopción de los principios sustentados por el Plan de Ayala.

Todo estaba preparado para la sesión del 31 de octubre de 1914, que inexplicablemente había sido citada por el presidente de la asamblea general Antonio I. Villarreal, para las cuatro de la tarde, cuando pudo y debió haberlo hecho para una sesión matutina. "A la hora de la comida pudo saberse que en la misma mañana se reunieron secretamente todos los adictos a Carranza para presentarse en la tarde como un gran grupo compacto y disciplinado, con la finalidad de hacer triunfar sus decisiones, que ellos afirmaban, tenían el apoya de muchos generales con mando de fuenras y especialmente, el del general Pablo González y el de todos sus subordinados.

Esta parecía una trampa que comenzó a prepararse desde las primeras sesiones de la Convención, como puede verse en una carta que el teniente coronel Filiberto Sánchez dirigió a su representado, el general Jesús Agustín Castro, entonces gobernador de Chiapas. Ella aparece publicada en el libro de don Francisco Ramírez Plancarte titulado La ciudad de México durante la revolución constitucionalista, página 216. En ella expresa que en vista de la renuencia de los partidarios de Villa y Maytorena para reconocer a Carranza como Primer Jefe, "todo el partido nuestro ha resuelto secretamente que hay que acceder a esto, para evitar ya el derramamiento de sangre. Y agregaba: Han acordado, como ya dije antes, en secreto, dándonos a conocer sólo a nosotros, que para cubrir el interinato se nombrara al general Antonio I. Villarreal, lo que aceptará la División del Norte y que una vez que se convoque a elecciones populares para elegir presidente constitucional, se nombrará al señor don Venustiano Carranza ... Que si acaso, ellos proponen cualquier candidato por su parte, nunca pueden ganar al ponerse a votación por mayoría de votos, porque el número de delegados por parte nuestra es completamente superior al de ellos. Ya seguiré informando. En otros términos, pretendían imponer un presidente pelele, enteramente subordinado a don Venustiano Carranza. Y como todos habíamos firmado en la bandera que llevó el general Obregón, estábamos obligados a sostener a Villarreal".64

f En esta misma sesión se pusieron sycesivamente a discusión la respuesta a las preguntas del cuestionario de Carranza. Casi sin discusión fueron aprobadas las tres respuestas. La segunda pregunta de Carranza versaba sobre si la Convención creía necesaria su eliminación del poder para que se pudiese lograr el triunfo completo de la revolución y el subyugamiento de los grupos hostiles a ella. La respectiva respuesta quedó aprobada en la siguiente forma: "Como hemos asentado en la respuesta anterior que la unificación de la revolución depende de la renuncia del Primer Jefe y como dicha unificación es condición sine qua non para el completo triunfo de la revolución, creemos que es necesario el retiro del ciudadano Carranza. Como la segunda parte de su pregunta es en esencia, diferente de la primera parte; puesto que habla de los elementos hostiles a ella, de la revolución, creemos de justicia declarar que no entra en nuestras convicciones que la renuncia del ciudadano Primer Jefe sea indispensable para el subyugamiento de ellos. En la tercera, Carranza preguntaba a la asamblea si creía necesario que se retirara del poder para que pudieran hacerse las reformas sociales y políticas que exigía el país para la conquista de la paz definitiva".

"., pp. 267-268. 45

Page 49: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

"La respuesta relativa fue: Respecto a la tercera pregunta, nos referimos a la respuesta de la primera, en que asentamos que para la unificación de la revolución es necesaria su renuncia, y como sin dicha unificación no podrán realizarse las reformas sociales y políticas que exige el país para que la conquista de la paz definitiva, creemos de las aspiraciones nacionales. En la cuarta pregunta el Primer jefe pedía que la Convención expresara si creía que su permanencia en el poder constituía un obstáculo para la realización de los ideales revolucionarios. La respuesta aprobada quedó concebida en estos términos: Creemos que el ciudadano Venustiano Carranza no es un obstáculo para la realización de los ideales revolucionarios y que, al contrario, sería un gran factor si estuvieran agrupados y en perfecta armonía todos los elementos hoy disidentes; pero como esto, desgraciadamente, no es así, tenemos que ser consecuentes con.Ia respuesta a la primera

En los mismos momentos en que la Convención discutía las respuestas que deberían darse a las preguntas de Carranza, que parecían excepciones dilatorias preparadas por algún leguleyo, el Primer Jefe continuaba en su doble juego, iniciando el 25 de octubre con su visita a Toluca. Efectivamente, el sábado 31 del mismo mes, el propio Primer Jefe mandaba preparar un tren especial con escolta de soldados a las órdenes del coronel Francisco R. Manzo, diciendo que a hora muy temprana del día siguiente marcharía a visitar las pirámides de San Juan Teotihuacan. Ya no regresaría a la capital. De San Juan Teotihuacan se dirigió a Apizaco y Tlaxcala, siguiendo hasta Puebla, en donde logró que los generales Francisco Coss, Cesáreo Castro, Pilar R. Sánchez, Abraham Cepeda y otros que le eran adictos, desconocieran a la Convención.

El 31 de octubre de 1914 por la noche, se comenzó a discutir el citado artículo que rezaba: "Por convenir así a los intereses de la Revolución, cesan en sus funciones como Primer Jefe del Ejército Constitucionalista Encargado del Poder Ejecutivo, el C. Venustiano Carranza, y como Jefe de la División del Norte, el C. General Francisco: Villat4.66 !

"Habló en contra el coronel González Garza, expresó que el artículo puesto a; debate constaba de dos proposiciones, una relativa a la eliminación de Carranza y otra a; la dejación del mando por parte del general Villa, comprendida esta última en el artículo sexto que consultaba la supresión de los Cuerpos de Ejército y de las Divisiones, ya que sus jefes deberían pasar a depender de la Secretaría de' Guerra. Se setialó la ambición incontenible del Primer defe, cuyos únicos títulos para aferrarse al pode! consistían en las firmas, cuyos únicos j6fes y oficiales que habían suscrito el Plan de Guadalupe, y en aquellos momentos osaba imponer condiciones a una asamblea en que estaba representada toda la Revolución".

"Se dijo que en la junta efectuada en México, Carranza, sin condiciones de ninguna clase, se presentó a la asamblea e hizo entrega del poder, pero que aquel acto sólo constituyó una farsa bien preparada. Censuróse al Primer Jefe el hecho de haberse rodeado de un grupo de efebos rapaces e intrigantes, de haber sembrado la división entre los revolucionarios y de no haber ganado ni una sola escaramuza. Los adeptos a Carranza arremetieron contra Villa señalando su ignorancia, su impulsivismo, sus asesinatos, sus raptos de ira, su afán de sobreponerse a todo el mundo y lo peligroso que para el país entrañaba el encumbramiento del Centauro del Norte".67 Los dos ceses

B51dem., pp.271-272. u., Op.., Barrera Tomo I , pp. 651-652. "=t.. Alessio, pp.275.

cit., Barraghn Tomo 1 1 , pp.122-123. Cfr.., O p . , Barrera Tomo I , pp. 667-668. OD cit., Alessio, pp. 276.

46

Page 50: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

fueron aprobados por una enorme mayoría de noventa y siete votos. Sólo votaron por la negativa veinte delegados

Entre una tempestad de aplausos fue hecho conocer el resultado de la votación. "En casi todos los semblantes se -retrataba una gran ufanía, y principalmente en los rostros del general Villarreal y de sus amigos que ya consideraban que la silla presidencial estaba segura en manos del primero. Los villistas y zapatistas no ocultaban su satisfacción. Pero los más empeñados en que se procediera desde luego a la elección de un Presidente Interino eran precisamente aquellos a quienes considerábanse como incondicionalmente adictos a Carranza. Y por un contrasentido, los delegados de la División del Norte, los representantes del general Zapata y unos pocos verdaderamente adictos al Primer Jefe, eran los que se oponían resue1tamente.a la inmediata designación. Y para nadie era un secreto que Carranza no entregaría voluntariamente el poder, que ya se preparaba a resistir y que trataba, por todos lo medios posibles de disgregar a la Convenciono1.68

El día primero de noviembre de 1914, el presidente general Antonio I. Villarreal declaró abierta la sesión ... Uno de los secretarios anunció que continuaba a discusión el articulo dos del dictamen de las comisiones unidas de Gobernación y Guerra, que ya había sido discutido durante seis horas. Este decía: "Procédase a nombrar por esta Convención un Presidente interino de la Repúbli ca... Don Paulino Martinez echó por tierra la candidatura de Villarreal. Manifestó que le habían sido presentados los nombres de varios candidatos y que ellos estarían absolutamente conformes con tres de ellos ... Los generales Juan C. Cabral, José Isabel Robles y Eugenio Aguirre Benavides. El vicepresidente Robles invitó a la asamblea que sus miembros presentaran candidatos presidenciales. La ansiedad era enorme. La delegación de la División del Norte, por boca de uno de sus más serios delegados, el general Eugenio Aguirre Benavides, manifestó que ellos, de acuerdo con el general Villa, no estaban dispuestos a ser candidatos, y en prueba de desinterés, proponían como candidatos a la Presidencia de la República al general Juan C. Cabral ... Pidid la palabra el general Obregón. Manifestó que la elección no debería hacerse por sorpresa, que era indispensable que los delegados cambiasen impresiones y proponía que la mesa dispusiera un receso de treinta minutos ... Pudo verse que Obregón conferenció con don Paulino Martinez y con Soto y Gama ... Convenció a los zapatistas de que no deberían presentar objeciones a la candidatura del general Eulalio Gutiérrez y se ganó fácilmente los votos de los comprometidos previamente con V$larreal ... Hecho el cómputo; resulto electo el general Eulalio Gutiérrez por ochenta y ocho votos ... El vicepresidente general Pánfilo Natera, hizo la declaratoria: "Es Presidente Provisional de la República Mexicana el general Eulalio Gutiérrez, que obtuvo la mayoría de votos". . .

: !

3

"El licenciado Soto y Gama, a nombre de la delegación suriana, declaró que el Ejército Libertador del Sur aceptaba con toda lealtad al candidato triunfante. Eulalio Gutiérrez, visiblemente conmovido, ascendió al escenario. Antes de que pudiera hablar fue ruidosamente ovacionado. AI fin, con frases entrecortadas por la emoción, expresó: "Agradezco la muestra de confianza que se me ha dispensado; y protesto aquí, en este lugar, cumplir y hacer cumplir todas las disposiciones que emanen de esta honorable a~amblea".~'

681dem, pp. 280.

OD cit., Barrera Tomo I, pp. 668-669. "Manifiesto a la Naci6n. .Nov-6-1914. Para alcanzar la unificaci6n de los ideales revolucionarios y el establecimiento de un gobierno ... Con este objeto se reuni6 en esta Ciudad de Aguascalientes la Convención Militar Revolucionaria que con apoyo en nuestra Carta Fundamental y en la Fuelza armada que representa,

47

69- I b i d . , Alessio, pp. 283-288. '

Page 51: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

El día 2 de noviembre de 1914 se logró reunir por la tarde el número suficiente de ciudadanos delegados para abrir la sesión, que presidió el general Pánfilo Natera. Se puso a debate el artículo tercero del dictamen de las comisiones unidas de Gobernación y Guerra, Decía así: "Reconózcase el grado de General de División, con la antigüedad de la fecha del Plan de Guadalupe, el ciudadano Venustiano Carran~a" .~~ Los delegados Lug0 y Siurob propusieron por escrito el nombramiento de una comisión que oficialmente notificara al señor Carranza el acuerdo tomado por la asamblea en lo atañadero a su cese y que a la vez le hiciera conocer la designación del nuevo Presidente Provisional y del texto de los demás artículos aprobados, quedando facultada dicha comisión para arreglar la entrega del poder ejecutivo y la entrada a la ciudad de México del Presidente Provisional electo por la Convención. Esta proposición fue aprobada sin discusión.

Luego la presidencia, por conducto de uno de los secretarios propuso los nombres de los delegados que deberían integrar la comisión encargada de entrevistar a Carranza para los fines señalados antes. "Por votación fueron nombrados como integrantes de la misma los delegados Antonio I. Villarreal, Eugenio Aguirre Benavides, Alvaro Obregón, Eduardo Hay y Felipe Gutiérrez de Lara ... Y para comunicarle al general Villa los acuerdos tomados por la Convención. Esta quedó integrada por los delegados Juan G. Cabral, Martin Espinosa, Fidel Avila, Enrique W. Paniagua, Samuel Vázquez y Miguel A. ~era~tal l .~'

El general Villa después de conocer el dictamen de la asamblea dirigió el siguiente telegrama ' l . . . Quedo enterado de lo que se sirven manifestarme sobre las condiciones que trata de imponer el señor Carranza para retirarse del poder, y yo, por mi parte, propongo para la salvación de la patria, no sólo retirarme de la División, sino que presto mi consentimiento para que la Convención, que tiene los destinos de mi patria en sus manos, ordene que nos pasen por las armas tanto a mí como al señor Carranza, para que los que quedan a salvar a la patria-conozcan los sentimientos de sus verdaderos hijos. Francisco Por su parte Venustiano Carranza, mandó detener en Querétaro a la comisión encargada de notificarle ios acuerdos de la Convención. "Allí consta que se cambiaron varios telegramas entreicarranza y el general Alvaro Obregón, jefe de la comisión antes citada, y que al fin,;el propio Carranza, después de recibir un mensaje maquiavélico de Obregón, en el que le daba a entender que la designación presidencial del general Eulalio Gutiérrez, por un periodo de veinte días, sólo tuvo por finalidad restarle elementos a Villa y asegurar ' l . . . por que tenemos una mayoría ... nuestro candidato para el periodo preconstitucional ...[ Tras un breve interinato de Eulalio Gutiérrez, qor veinte días, Villa quedaría sin fuerzas y don Venustiano sería designado Presidente".n

"A las 12 del día 6 de noviembre de 1914, en un acto lleno de solemnidad en el que no se registraron explosiones de entusiasmo, el general de división Eulalio Gutiérrez prestó la protesta de ley como Presidente provisional de la República. Le tomó la protesta el general José Isabel Robles".74

se ha declarado soberana y poder legal Único de la República. De nuestra soberanla ha emanado un gobierno genuinamente legal y revolucionario, que regir3 los destinos del pals mientras se verifican las elecciones que hagan conocer la voluntad del pueblo. Este mismo gobierno deberá Poner en Dráctica todas aauellas reformas politicas y sociales que la actual revoluci6n ha venido defendiendo'.' AGN. (C.R.A.) Caja 2, E ip. 3 , F. 2-3. 'OD Cit., Alessio, pp.299-300.

O cit Barrera Tomo I, pp. 682-683. cfr., OD cit., Barragán Tomo II, pp. 117. &;t., Alessio, pp. 303-304. L

gp cit.! Barrera Tomo I , pp. 687-688.

731dem, pp. 321. 7 4 F p p . 3 2 4 . -

OD a t . , Alessio, pp. 31 1.

48

-

Page 52: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

La comisión que designó la Convención para comunicar su conclusión en el mando a don Venustiano Carranza, estaba integrada por los generales Alvaro Obregón, Eduardo Hay, Antonio I. Villarreal y Eugenio Aguirre Benavides y el teniente coronel médico cirujano Gutiérrez de Lara. El último, detenido en Querétaro por el general Pablo González, regresó a la ciudad de Aguascalientes. Los cuatro restantes siguieron su camino hasta Córdoba y aunque nadie les puso obstáculos para que de allí regresaran sólo lo hizo el general Aguirre Benavides. Ni Obregón, ni Villarreal ni Hay volvieron a la Convención, a pesar de sus encendidas protestas de lealtad a la misma, y nunca rindieron un informe sobre el resultado de la comisión que se les había encomendado. Informando Benavides que "Carranza estaba decidido a no dejar el poder".75

El Presidente Gutiérrez en su afán de evitar un rompimiento, solicitó de la Convención que diera un plazo que fenecería a las 6 de la tarde del día 10 de noviembre, para que Carranza y todos los carrancistas que habían manifestado su rebeldía, reconocieran al gobierno emanado de la Convención.

El Primer Jefe se negó rotundamente a entregar el poder, en los términos siguientes:

"Los anteriores hechos serían suficientes para no reconocer la resolución de la asamblea ni entregar el poder:

A. Porque no lo he renunciado y en consecuencia la Junta de Jefes y gobernadores no podría quitármelo sin cometer una insubordinación y desconocer las estipulaciones del Plan de Guadalupe.

B. Por no haberse llenado la primera de las condiciones fijadas por mí. No puedo, en efecto, entregar el poder a un Gobierno que carece en absoluto de bases constitutivas y que no tenga lineamientos de ninguna clase, ni facultades determinadas. Dicho gobierno seria o enteramente personalista y dictatorial, puesto que el general Gutiérrez tendría que obrar a su enter6 albedrío, o la Junta tendría que ser realmente la que gobernara, siendo este último caso el que temo más; pues de entregar el poder al general Gutiérrez en las condiciones y tiempo para que fue nombrado, el resultado final sería que la Convención continuaría funcionando indebidaqente y bien sabemos cuáles son los inconvenientes de que la jefatura de un ejército y el poder ejecutivo de una nación quedaran en manos de una asamblea, por ilustrada, id6nea y capaz de que se le suponga. Como cuerpo deliberativo, la Junta de Aguascalientes sería tal vez deficiente y de ello ha dado pruebas; pero como cuerpo administrativo y ejecutivo, sería un instrumento de tiranía desastroso para el país. Como Jefe del Ejecutivo, como encargado del Poder Ejecutivo, como caudillo de una Revolución que aún no termina, tengo muy serias responsabilidades ante la Nación, y la Historia jamás

I

"Acuerdo. 3 O Hágase saber el anterior nombramiento así como la protesta que en día de hoy otorg6 como Presidente Provisional de la República el C. General Eulalio Gutiérrez, ante la Soberana Convenci6n, en Aguascalientes, por medio de bando solemne que se publicare en toda la República, a fin de que surta efecto legales desde luego". AGN. (C.R.A.) Caja 2, Exp. 3, F. l. OD cit., Barrera Tomo I, pp. 704-706. O cit. Barraghn Tomo 1 1 , pp. 119. *It., Alessio, pp. 334. L

'Dictamen. 110 .- Nov-1914 ... El retiro del C. Venustiano Carranza de la Primera Jefatura del Ejército Constitucionalista y del Ejecutivo del República, es uno de los Requisitos Indispensables para obtener inmediatamente la unidad política de la Revoluci6n.- Comisiones de Gobernaci6n y Guerra'. AGN. (C.R.A.) Caja 2, Exp. 1, F. 1 .

49

.. .. .

Page 53: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

me perdonaría la debilidad de haber entregado el Poder Ejecutivo en manos de una asamblea que no tiene las condiciones necesarias para realizar la. inmensa tarea que pesa sobre el Ejército Constitucionalista.

C. No podría yo reconocer el carácter de Presidente provisional al C. General Eulalio Gutiérrez, por haber sido nombrado antes de que yo presentara mi renuncia.

D. Nadie creo que me reprocharía que como Jefe del Ejército Constitucionalista, como encargado del Poder Ejecutivo y como Jefe de la Revolución, me niegue a entregar el mando, sabiendo que el Presidente designado lo ha sido solamente por veinte días, término insuficiente para incautarse de los más urgentes negocios de Gobierno, pues destruiría la cohesión del ejército y la organización del Gobierno, que no podrían rehacerse por el general Gutiérrez en el perentorio término para que fue nombrado. La condición relativa al retiro de Villa, que parece haber sido considerada como única por la Junta, <<no fue estudiada debidamente, ni lo fue como condición previa; si no que se resolvió que cesaría en el cargo de Jefe de la División del Norte, al mismo tiempo que yo>>.

E. El artículo transitorio de la resolución aprobada el día 3 del corriente, dice <<que los acuerdos tomados comenzarán a surgir sus efectos el día 6 del actual-; Ahora bien, estamos a 8 de noviembre, y el general Villa, a quien la Convención no ha prorrogado el plazo de la entrega de su División, se encuentra todavía apoderado de las aduanas, los correos, los telégrafos y los ferrocarriles y en general, de todas las oficinas públicas del gobierno civil y militar de la región dominada por él.

F. Tampoco creo que debería retirarme del poder en los momentos en que Zapata le concede a la Convención una importancia capital, sancionando la debilidad y las condescendencias que con éI tiene la Junta.

G. Por último, las resoluciones de la asamblea eligiendo al general Gutié4rrez han provocado serias protestas de goberqadores y de jefes militares, quienes han retirado a sus representantes. Esta nueva complicación sería una causa más para no retirarme del Poder, puesto que aparentemente la votación la causó una mayoría de representantes convencionistas que deseaban mi separación”.

“Los hechos han demostrado que no hay una mayoría de jefes y gobernadores que deseen mi separación incondicional. Todas las razones anteriores serían más que suficientes para no retirarme del Poder, para no acatar los acuerdos de la Convención y para desconocer a esta llamando a los jefes y gobernadores a resumir las funciones de sus respectivos cargos; mas deseando que mi actitud no se interprete como un mero subterfugio para eludir el cumplimiento de mi promesa para retirarme del Poder y que no se dude de la sinceridad de mis actos y con el fin de evitar un conflicto entre las fuerzas constitucionalistas que me son adictas y aquellas que creyeron un deber apoyar a la Convención, engañadas por un erróneo sentimiento del deber, por una falsa noción de las obligaciones que les impone la palabra de honor y deseando por último, abrir las puertas de la Convención para que reconsidere sus determinaciones, propongo que ésta tome los siguientes acuerdos:

Page 54: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Primero. El C. Venustiano Carranza entregarA el Poder Ejecutivo de la Nación y la Jefatura del Ejército Constitucionalista, al Presidente que la Junta de Generales Y Gobernadores designe en definitiva para gobernar la República durante todo el período pre-constitucional que sea necesario para llevar a cabo las reformas políticas y sociales que exige la Revolución.

Segundo. Dicha entrega se efectuará tan luego como el nuevo Presidente tenga bien definidas sus funciones y haya recibido efectivamente el mando de la División del Norte y las oficinas públicas federales y locales de la región dominada ahora por dicha División”.

“Las anteriores se encuentran aceptadas en principio, por la Junta de Aguascalientes y su resolución no implicaría un gran sacrificio de amor propio de parte de la Convención, por lo cual espero del patriotismo de los miembros de ella que harán un esfuerzo para acogerlas con el espíritu con que han sido propuestas, que es el de ahorrar al país un nuevo sacrificio de sangre. Constitución y Reformas. Córdoba, noviembre 8 de 1914. Venustiano Carranza”.

“Ese mismo día Carranza había lanzado una circular en la que ordenaba a todos los jefes militares presentes o representados en la Convención se pusieran al frente de sus tropas, disponiendo que los generales y jefes que no acataran sus órdenes serían relevados de sus cargos, y asumirían el mando de las tropas los que les siguieran en grado. Es decir, declaraba rebelde a los que continuaran en la asamblea. La Convención en la junta del 10 de noviembre, consideró que este mensaje no encerraba otra cosa que una serie de añagazas para no dejar el poder. A las 6 de la tarde, fecha en que fenecía el plazo que se le había dejado para atacar los acuerdos de la asamblea, el vicepresidente Pánfilo Natera, declaró que don Venustiano Carranza era rebelde a la C~nvención”.~~

Sin embargo, antes de romperse las hostilidades, el general Eulalio Gutiérrez, investido ya por la Convención de facultades extraordinarias en los ramos de Gobernación, Hacienda y Guerra, intentó varias gestiones para evitar el rompimiento de hostilidades. En la misma tarde pidió y obtuvo una conferencia telegráfica con Carranza, que se encontraba en Córdoba, Veracruz. El general Gutiérrez transmitió lo siguiente: “La Convención ha resuelto su separación del Poder y su designación como Presidente, y no puede usted, sin perder su serenidad y su prestigio, reconsiderar acuerdos que son del dominio público, y de los cuales están pendientes la nación y el extranjero ... Debo hacerle notar que aunque mi elección es por vehte días, necesarios, según el texto de mi t nombramiento, no cesaré en sus funciones sino hasta que la asamblea ratifique mí nombramiento. Mientras esta rectificación no se verifique en la asamblea, seguiré siendo presidente provisional, aunque expire el plazo de veinte días ... Mi gobierno no será jamás instrumento de facción alguna; acepté el poder, porque en la Convención estaban representados todos los elementos revolucionarios, y se comprometieron a sostener su voto y los acuerdos de la mayoría”.

“Es por esto completamente injustificada la actitud de los que hoy protestan por los acuerdos de la Convención y me desconocen. No habría aceptado el cargo que represento, si no estuviera seguro de que mi nombramiento no se debe a maquinaciones

”OR cit., Alessio, pp. 336-341. ‘Nov-14-1914. Por mi parte (V. Carranza) aseguro que no habrh dificultad ninguna pero la resoluci6n de la junta de desconocerme como jefe y corgo encargado del poder ejecutivo, en vez de allanar el camino ha venido a complicar la situaci6n pues estoy recibiendo avisos de generales y gobernadores que desaprueban y rechazan lo resuelto por ustedes y retiran sus representantes, lo cual necesariamente entorpecerh m8s las labores de esa Junta”. AGN. (C.R.A.) Caja 2, Exp. 6, F. 13-15. OD cit., Barrera Tomo I , pp. 707.

~~~ ~~

51

Page 55: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

de la reacción, sino al acuerdo de todos los revolucionarios. Si la obra de la Revolución quedare destruida, el país se vería destrozado por una lucha de meras ambiciones personales ... Yo esperaba que usted no vacilaría en aceptar la soberanía de la Convención, toda vez que usted reconoció la soberanía de la Convención de México, al presentar usted ante ella su renuncia; y si a esa Convención la reconoció usted, mayor razón hay para que reconozca a la de Aguascalientes, en la cual están representados todos los elementos revolucionarios, mientras que en la de México sólo estaban presentes unos cuantos de los generales invitados por usted". El Primer Jefe contesta lo siguiente: "... Considero ilegal el nombramiento de usted, porque fue hecho por la Junta antes de que yo presentara mi renuncia. También es ilegal, porque se le nombra Presidente por una Junta que no puede nombrar Presidente. Usted recordará que yo mismo he procurado no llamarme Presidente, sino Encargado del Poder Ejecutivo, conforme al Plan de G~ada lupe .~~ No hay ley que autorizara a la Junta a designar un Presidente de la República, ni Plan o documento o tratado en qué fundarse, pues ustedes fueron convocados como cuerpo consultivo, y al declararse juzgaron que con esto habían adquirido el derecho de hacer lo que quisieran, y aun de nombrar Presidente. No puedo reconocer el gobierno que pretende establecer la Convención, porque carece de bases legales y de facultades para gobernar ... Para concluir, le diré que yo no esto dispuesto a entregar el poder ... Yo nunca he reconocido la soberanía de la Convención". Finalmente aconsejaba al general Gutiérrez que renunciara a la Presidencia.

J

Carranza, que había sido declarado rebelde a la Convención dos dias antes, hizo nuevas proporciones absurdas, que no fueron aceptadas por la asamblea, temiendo que encerraran una nueva trampa. Estas que están fechadas en Córdoba, el 15 del mismo mes, implicaban un indebido orden de ostracismo a dos revolucionarios que habían prestado eminentes servicios a la Revolución. Rezaba dichas condiciones: "Carranza depositará efectivamente el mando de sus fuerzas y la administración pública del territorio dominado por éI, al general Eulalio Gutiérrez. Carranza y Villa saldrán fuera del país, debiendo encontrarse ambos en La Habana para el día 25 de noviembre. Se reunirá en

77 En los tratados de Teoloyucan antes citados en el pairrafo X dice: Los generales, jefes y oficiales del Ejercito y de la Armada quedara a disposici6n del Primer Jefe de las fuerzas constitucionalistas, quien, a la entrada a la capital, queda investido con el caracter de Presidente Provisional de la República. "El Primer Jefe dispens6, entonces, al General Obregbn, una de las mas altas y honrosas distinciones a que podia aspirar cualquiera de los Jefes militares de la Revolución: lo autoriz6 a que pactara la rendici6n del enemigo sefialindole las bases sobre las cuales debefia hacerse los correspondientes arreglos". Porque la firTa de Alvaro Obreg6n esta respaldada por Venustlano Carranza. OD cit., Barragan Tomo I , pp. 580. Ademas del pliego de proposiciones que presentan en nombre del Cuerpo del Ejército del Noroeste y de la División del Norte, los generales Obregón y Villa respectivamente, Carranza contesta: "De las nueve proposiciones contenidas en el estudio a que me refiero, la primera debe considerarse como definitiva y aprobada". Esta primera proposici6n decia asi: "El Primer Jefe del Ejército Constitucionalista tomari, desde luego, el título de Presidente Interino de la República, e integrari su Gabinete con Secretarios de Estado". Entonces, ¡Se hace llamar Encargado del Poder Ejecutivo cuando le conviene! 78La Soberana Convenci6n Revolucionaria de Aguascalientes busca constituir un "...Cuerpo que represente a toda la revolución y que fuera capaz de fijar metas en la reforma social. Constituir una autoridad revolucionaria superior, por encima de los distintos jefes. Una autoridad suprema cuyos mandatos sean intachables. Crear una entidad distinta de la primera jefatura a la cual someter a todos los caudillos. En suma, delegar en ellos la representación popular y asumir facultades soberanas". Medellin M., Jose de Jesús, Las Ideas Aararias en la Convencidn de Aauascalientes., MBx., CEHAM., 1986, pp.57-58.

Organización de Estado. ' 5O . Creaci6n de una JUNTA CONSULTIVA para asesorar al Ejecutivo. 8O. Que se forme un programa de todos los problemas que debera resolver el Ejecutivo en el lapso de tiempo que debe fungir, acordado pro esta Convenci6n. Q0. Que el ejecutivo no debera aceptar candidatura alguna a la Presidencia de la República en las prbimas elecciones, sin que el candidato proteste solnemente (sic) (solemnemente), de antemano, sancionar todo lo llevado a cabo por esta Convencidn y por el mismo Ejecutivo, IOo. Que esta Convenci6n nombre un Cuerpo legislativo que deber6 estudiar, resolver y elevar a categoría de leyes, todos los problemas que son objeto de la revoluci6n, especialmente el Agrario mediante el reparto de tierras. 28-Oct-1914. Firma. General Ram6n V. Sosa". AGN. (C.R.A.) Caja 1 , Exp. 4, F. 76.

52

cit., Alessio, pp. 341-346.

Page 56: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

México la Convención de Generales y procederá a elegir un Presidente para todo el período preconstitucional. González y Gutiérrez entregarhn sus respectivas fuerzas en manos del nuevo Presidente designado. Si para el 30 de noviembre no estuvieren llenadas todas las condiciones mencionadas, Carranza reasumirá su carhcter de Primer Jefe del Ejército Constitucionalista".80 Ya nadie tenía fe ni én Carranza, ni en Obregón y mucho menos en el general Pablo González. E l Presidente Gutiérrez dio la orden para que las fuerzas de la División del Norte marcharan hacia el sur.

El 16 de noviembre resolvió la Convención clausurar su período de sesiones, designando a los miembros de la Comisión Permanente que debería representar durante su receso. El Presidente Gutiérrez acompañado por los miembros de la Comisión Permanente, se trasladó a la ciudad de San Luis, el 18 de noviembre.

Por la mañana del 30 de noviembre, el Presidente Gutiérrez, con los miembros de su gabinete: el general José Isabel Robles, Ministro de Guerra, y el licenciado José Vasconcelos, Ministro de Instrucción Pública y los delegados que integraban la Comisión

i Permanente de la Convención arribaron a la estación del ferrocarril de Tacuba. "...El 3 de diciembre de 1914, el general Gutiérrez, sin anuncio previo y sin boato, hizo su entrada a la capital. El recorrido de su comitiva fue: calzada de Tacuba, calle de Rosales, avenida Juárez y Madero y Plaza de la Constitución hasta llegar al Palacio Nacional ... AI llegar el Presidente y su comitiva, la guardia de la puerta central, integrada por soldados del Ejército Libertador del Sur, le hizo los honores correspondientes'&'.

Apenas transcurrida una semana del ambo del Presidente, general Eulalio Gutiérrez, a la capital de la República, la situación era de tal manera dificil que nadie

cit., Alessio, pp. 346. "Tocando a esta H. Asamblea, disentir e implantar una forma de gobierno mas conveniente para que rija los destinos del país en el periodo que preceder$ al constitucional, mientras se llevan a efecto los problemas cuyo cumplimiento ofreci6 la Revolución, debe considerarse que la mayoría de las veces, hasta antes de ahora, en que la presidencia interina de la República ha sido desempenada por un solo hombre, ha dado malos resultados, pues la historia nos demuestra, que dichos individuos abusan del puesto que se les confia, haciendo cuantas medidas estan a su alcance, por retrasar que la República entre en un periodo legal ... Aquel presidente interino en el puesto que al saborear le ha gustado, por no ser nada despreciable, y que no quiere dejar ya, importhndole poco que a sus fines corra un torrente de sangre, sangre de hermanos sacrificados por un capricho. Por lo que esta H. Asamblea debe evitar esos abusos, hoy que en sus manos est6 hacerlo ... Los siguientes puntos: lo. Debe pedirse y aceptarse la renuncia del puesto de Presidente Interino de la República al Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista C. Venustiapo Carranza. 20. El poder Ejecutivo de la República,

posesión el electo libremente por el pueblo. 3O. Esta Junta Ejecutiva se compondra de nueve miembros que seran electos por la Asamblea de entre los generales emanados de la Revoluci6n. 4 O . Debiendo llevar un miembro la representaci6n de la Junta, para el orden administrativo, la asamblea designara de entre los electos al que como tal funja, pero ningún acuerdo de importancia de los que la Junta este llevada a tratar, sera resuelto sin el acuerdo de todos los miembros. 5 O . Los ocho miembros restantes de la Junta Ejecutiva, tendrim a su cargo los diversas secretarías de Estado, debiendo tambih la asamblea designar a cada uno la que respectivamente ocupe. 1 1 O . Verificando las elecciones presidenciales y hecha entrega por la Junta Ejecutiva al elegido por el pueblo...". AGN. (C.R.A.) Caja 1, Exp. 5, F. 30-31. "Dictamen. Nov-10-1914. La primera Comisión de la Comisi6n Permanente se honra en proponer que la moci6n presentada por el seiior Angel G. E n fecha diez de noviembre sobre la implantación de penas que deberán aplicarse a los que violen o asuman actitud rebelde contra el gobierno emanado de la Convención Soberana, sea turnada a la Comisión de Programa pues opina que solamente dicha Comisi6n se encuentra autorizada, para resolver al formar el Programa de gobierno de la gran Convenci6n Soberana. - Pena de muerte y encarcelamiento para quienes se opongan". AGN. (C.R.A.) Caja 2, Exp. 5, F. 18-19.

Nov-3-1914. Proponemos el siguiente Acuerdo: Unica: E l Sr. Gral. E. Gutierrez continuarti, como presidente provisional de la República, hasta que las fuerzas de la Convenci6n ocupen la ciudad de México y entonces la comisión permanente citara dentró de log diez dlas siguientes a todos los miembros de esta Convenci6n para que concurran en el termino de 20 días, a fin de ratificar o elegir al presidente preconstitucional". AGN. (C.R.A.)Caja 1 , Exp.4, F. 98. O p . , Alessio, pp. 376. Or, cit., Barrera Tomo 1 1 , pp. 47.

testara a cargo de una Junta que se denominara 'Junta Ejecutiva' hasta no verificarse las elecciones y tome 1

81.

53

Page 57: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

podía entenderla. Una situación verdaderamente inesperada para éI y para todos IO había arrojado en brazos de los villistas y zapatistas. Casi todos los carrancistas que lo habían encumbrado lo abandonaron y las deserciones se sucedían unas a otras. Muchos pretendían que nulificara a Villa y a Zapata. Le decían que Obregón se pondría a sus

-6rdenes con todas las tropas que mandaba si 61 desconocía a Villa y Zapata.

Ni llamó a Villa ni llamó a Zapata. Eulalio estaba sometido a la presión de muchos complejos: las recriminaciones de su hermano mayor, el general Luis Gutiérrez, de muchos de sus subalternos, entre ellos el general Herminio Alvarez, a quien el mismo Eulalio había dejado como gobernador de San Luis Potosí, y los ofrecimientos de los generales Obregón y Antonio I . Villarreal, quienes desde Orizaba y Monterrey, respectivamente, le ofrecían con insistencia el ponerse a sus órdenes en el caso de que desconociera a Villa y a Zapata.

Vito Alessio Robles comenta que el día 10 de diciembre de 1914, escucho lo siguiente. "Por casualidad me tocó estar presente en una entrevista que tuvo gran importancia en los destinos de México y que cambió la secuela de las operaciones militares pactadas entre Villa y Zapata. Villa mostró unos telegramas del general Emilio Madero procedentes de Torreón, en que le hacía saber que algunas fuerzas carrancistas a las órdenes del general ldelfonso Vazquez habían llegado hasta las cercanías de San Pedro de las Colonias y de Viesca, Coahuila, manifestando que en Torreón disponía de pocas fuerzas para defender esta plaza. Y agregó, dirigiéndose a Angeles: - Mande usted embarcar inmediatamente todas sus fuerzas y le voy a dar dos brigadas más para que marche inmediatamente a Torreón, que es mi base de operaciones y de aprovisionamientos, a batir esas fuerzas carrancistas, y si es posible para que me tome Saltillo y Monterrey. Angeles, visiblemente contrariado, aunque con toda mesura, objetó aquella orden con las palabras siguientes: Mi general, nuestra base es ahora la capital y no Torreón. Con las fuerzas que tiene Emilio Madero basta-y sobra para defenderlo. Lo importante para nosotros es atacar a Carranza, que es la catjeza. Siempre hay que pegar a la cabeza ... Villa insistió en el cumplimiento de su orden. Y Angeles se despidió diciendo que sería inmediatamente acatada".82 ,

En toda la República luchaban revolucionarios contra revolucionarios. Por un lado, los soldados del Ejército Libertador del Sur intensificaban sus ataques a la plaza de Puebla, que defendían los carrancistas a las órdenes del general Salvador Alvarado. Tras un breve asalto la plazatde Guadalajara, defendida por el general Manyel M. Diéguez, caía en poder de las fuerzas adictas a la Convención. En Naco, Sonora, las fuerzas convencionistas del gobernador Maytorena luchaban sin tregua contra los carrancistas mandados por el general Hill. Murguía, que había evacuado la ciudad de Toluca, se dirigió a Michoacán. Gertrudis Sánchez simuló adherirse a las fuerzas carrancistas de Murguía, y cuando este último se dirigió por el rumbo de Uruapan para unirse a las de Diéguez en Jalisco, fue atacada por soldados del general Sánchez, a las órdenes del general Jaoquín Amaro. Las fuerzas del general Villarreal amagaban la plaza de Torreón. El general Maclovio Herrera, que había reconocido a Carranza, fue decisivamente batido en Parral por las fuerzas de la División del Norte.

Los zapatistas no estaban conformes con Eulalio Gutiérrez, se quejaban de que ninguno de los suyos formaban parte del gabinete presidencial y de que en la Secretaría de Guerra les ponían miles de trabas, negándoles dinero para el pago de haberes, pertrechos para activar las operaciones militares contra la plaza de Puebla y trenes militares para la pronta conducción de tropas, alegando el general Robles que se carecía de carbón de piedra y de petróleo, por estar los carrancistas en posesión de las minas. El

820p cit., Alessio, pp.408-409.

Page 58: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

general Villa también comenzaba a desconfiar de las negociaciones del Presidente Gutiérrez y de la buena fe del mismo. AI resppecto Vito Alessio Robles dice "Conversé largo rato con el Presidente Gutiérrez el día 24 de diciembre por la tarde. Estaba radiante de júbilo. La alegría aparecía retratada en su rostro. AI saludarlo hizo que me sentara a su ladó. Expresó: Estoy muy contento, hermano. He logrado la pacificación sin derramamiento de sangre. Ya todos seremos hermanos, los revolucionarios, se entiende. Obregón ya está conmigo. Lucio Blanco ya está aquí y muy pronto llegarán todas las tropas, que están en El Oro, a la capital. Veinte mil Hombres, imagínate. Mi hermano Luis, Antonio I. Villarreal, lldefonso Vázquez, el general Caballero, Jesús Dávila Sánchez, hasta Salinas, el cuAado de don Venus. Están comprometidos a reconocer mi gobierno. También Maclovio Herrera. Ya se logró la paz compldta sin derramamiento de sangre. Ya no seremos prisioneros de Villa y de Zapata. Escuchaba con atencibn. Francamente me causaron mala impresión las últimas palabras de Eulalio. Interrogué: c Y don Venustiano? Don Venus, contestó Eulalio, o se va al extranjero o tendrá que rendirse. En el último caso lo amnistiaremos tratándolo con toda clase de consideraciones. Villa y Zapata tendrán que dejar sus mandos. Los trataremos bien"."

Todos desconfiaban de todos a mediados del mes de diciembre de 1914. Don Pablo González creía que el general Francisco Murguía había. reconocido al gobierno emanado de la Convención y a tal creencia atribuía su decisión del abandono de la plaza de Pachuca a los villistas sin la menor resistencia. Tres jefes de corporaciones de las fuerzas a las órdenes de Murguía, entre ellos los generales Fortunato Zuazua y Benjamín Garza, se pusieron a las órdenes del Presidente general Eulalio Gutiérrez. El general Lucio Blanco, tras muchas pláticas, se presentó en la ciudad de México y reconoció al gobierno de la Convención, con las fuerzas que están a sus órdenes y que, descontadas las deserciones, ascendían a unos diez mil hombres.

"Todos sabíamos de las gestiones emprendidas por el general Gutiérrez cerca de los generales carrancistas para que reconocieran su autoridad! Hasta éI mismo no las ocultaba y había hecho que se publicaran por la prensa. Sabíamos que su correspondencia era muy activa con el general Alvaro ObregQn y que los correos de ambos iban y venían. Lo mismo acontecía con el general Antonid I. Villarreal. Además los villistas tenían plena confianza en los generales José Isabel Robles y Eugenio Aguirre Benavides que ocupaban, respectivamente, la Secretaría y Subsecretaría de Guerra y Marina. Gutiérrez era muy astuto y creía ganarse a todos los generales carrancistas, de

Villarreal se pondrían incondicionalmente a sus órdenes ... En la noche del 26 al 27 de diciembre ocurrió algo insólito en todas las estaciones ferroviarias. Los andenes estaban ocupados por fuertes destacamentos de más de cien hombres de la División del Norte...".

110s cuales había sido compañero de armas. qtaba seguro de que tanto Obregón como t

¿A qué se deben estas medidas? (Preguntó Alessio Robles a un soldado villista). "Se deben a que el presidente Gutiérrez pretendía pelarse para San Luis Potosí. Lo supo el general Villa y mandó apostar destacamentos en todas las estaciones para impedirlo ..." Un poco antes de las 10 de aquella mañana decembrina fría y nublada llegué a la Cámara de Diputados. Ahí, en el salón verde, se encontraban Roque González Garza, Manuel Zevada, Alejandro R. Aceves, Mauricio Contreras, Luis González, Dionisio Marines Valero, Alberto B. Piña y Carlos de la Vega, todos miembros de la Comisión Permanente ... Sin preámbulos, con los ojos flameantes, con espumarajos en las comisuras de los labios y accionando con gran violencia, el general Villa dijo con voz ronca: "Señores, los he mandado llamar a ustedes, como representantes de la Convención, que es el poder superior del país, para darles la queja de que ese tal por cual de Eulalio Gutiérrez nos está traicionando y que anoche intentó fugarse de la capital para

=Idem., - pp.416. 55

Page 59: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

unirse con Obregón. Ya todo estaba listo para la juida en un tren especial, con algunos de sus "gabinetes", pero yo lo supe oportunamente por el general Manuel Chao, gobernador del Distrito, y mandé ocupar con fuerzas todas las estaciones y todas las garitas, y desde la madrugada hay fuerzas mías que rodean la casa de ese traidor. Cuando todos lo abandonaron, yo me puse a sus órdenes. De mí no se burla ningún tal por cual, y vengo a decirles que en este momento lo voy a desenmascarar y a castigarlo como se merece ..." "Dos o tres minutos después los miembros de la Comisión Permanente nos dirigimos violentamente a la casa en que se hallaba alojado el Presidente, la que encontramos rodeada por soldados villistas. Todavía mediaron otras explicaciones. Intervenimos para calmar los ánimos del general Robles y algunos de los miembros de la Comisión Permanente de la Convención. Villa ofreció obedecer en todo y por todo al Presidente Guti.érrez".84

Con el inició del año de 1915, precisamente el primero de enero, el Presidente general Eulalio Gutiérrez tomó la protesta a los nuevos ministros, que lo fueron el general Lucio Blanco, de Gobernación; el licenciado Rodriguez Gómez, de Justicia; el general Manuel Palafox, de Agricultura y Colonización, y el licenciado José Ortiz Rodriguez, como subsecretario de Relaciones. Estuvieron presentes en el acto solemne, los ministros anteriormente designados: general José Isabel Robles, de Guerra; Ingeniero Felicito Villarreal, de Hacienda; Ingeniero Valentin Gama, de Fomento, y José Rodriguez Cabo, de Comunicaciones. El general Francisco Villa salió de la capital para conferenciar con el general Scott, Jefe del Estado Mayor del ejército Americano, sobre la situación que prevalecía en las plazas de Naco y Agua Prieta, inmediatas a la línea divisoria. En todas partes se combatía. Muchos generales de la División del Norte que habían concurrido personalmente a las sesiones de la asamblea de Aguascalientes, por encontrarse muchos de ellos a la cabeza de sus tropas, habían designado representantes. En la Convención reinaba la más completa armonía entre los zapatistas y los villistas. El general Roque González Garza, había sido designado Presidente de la Convención y el ameritado gen'eral Otilio Montaño, Vicepresidente de la misma. Sin embargo, el choque registrado entie los generales Gutiérrez y Villa había trascendido al público, y entre los delegados de la C$nvención había hecho surgir un sentimiento de desconfianza en la lealtad de Eulalio, y la; suspicacia se acrecentaba entre los zapatistas por el hecho notorio de que en la Secretaría de Guerra se ponían miles de trabas para suministrar haberes, provisiones, armas y cartuchos a los soldados del Ejército Libertador del Sur.%

La actitud demasiado ambigua del Presidente Gutiérrez daba @gar a muchas suspicacias. AI recogerse el archivo del general Antonio I. Villarreal en Ramos Arizpe, se hallaron documentos que probaban la convivencia entre éste y Eulalio. La convención se congregó en una sesión que duró toda la noche y en ella se habló de la conveniencia de que la misma asamblea, en acatamiento a lo dispuesto en Aguascalientes, debería estudiar la ratificación o rectificación de la designación de Eulalio Gutiérrez como Presidente de la República. Los zapatistas se inclinaban por la medida del nombramiento inmediato de otro Encargado del Poder Ejecutivo. Los de la División del Norte sugirieron que se aplazara por unos cuantos días más el asunto. Mientras tanto, en las sesiones públicas de la Convención, se aprobaba el establecimiento del sistema parlamentario, con ministros responsables y no simples refrendarios de los acuerdos presidenciales. Y se autorizaba a la convención y a los congresos que deberian sucederla a destituir a todos los Presidentes que no cumplieran con su deber. A Eulalio Gutiérrez no le agradaba la implantación del sistema parlamentario y lo consideraba como una amenaza y hasta como un agravio a su investidura. Sin embargo, casi todos los días aparecían declaraciones conciliadoras suya$ en las que aseguraba que todo andaba muy bien y

841bid., pp.423-425. 85z., pp. 432-436.

56

Page 60: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

que éI mantenía cordialísimas relaciones con los geneiales Villa y Zapata. "A las 03:30 de la mañana del 16 de enero de 1915, el Presidente Gutiérrez abandonó la capital de la República acompañado por algunas tropas".=

El general Roque González Garza, Presidente de la Convención, hacía saber a los habitantes del Distrito Federal, que el Jefe Provisional del Ejecutivo había abandonado la ciudad de México sin conocimiento de la Suprema convención y sin dictar las órdenes necesarias para evitar cualquier trastorno público, por lo que consideraba su obligación, como presidente de la Soberana Convención Revolucionaria y como ciudadano, dar garantías a la sociedad y evitar que se causaran perjuicios a los particulares, con motivo de dichas condiciones, y con tal objeto, mientras la soberana asamblea en su próxima acordara lo conveniente, con apoyo de las fuerzas de la División del Norte que estaban en la &pita1 y con las del Ejército Libertador; además asumió el mando provisional de la ciudad de México y poblaciones que constituyen el Distrito Federal.

Continuando con la asamblea en la magna sala del Congreso, hablaron los coroneles Orozco y Soto y Gama, los dos del Ejército Libertador del Sur. Lanzaron duros cargos al general Gutiérrez y presentaron la siguientes mociónes: "Artículo 1.- En virtud de la incidencia del C. General Eulalio Gutiérrez, que hasta aquí había desempeñado el Poder Ejecutivo, por delegación de la H. Convención Revolucionaria, se declara que cesa dicho ciudadano en su cargo de presidente provisional. Artículo 2.- En consecuencia, y en tanto se elige persona que lo sustituya, la Convención reasume el Poder Ejecutivo, que

Jose Isabel Robles, dirigibndose a Vito Alessio Robles, dice: "Villa nos comi6 el mandado a Eulalio o a mí. Descubri6 nuestros tratos con Obreg6n y si nos encuentra aquí, nos fusila. Nos vamos para Pachuca". "El 12 de diciembre de 1914, el caudillo sonorense dirigió desde Veracruz, una carta al general Gutibrrez en la que lo incitaba a desconocer a Villa ... Eulalio mordi6 en anzuelo. Con fecha 7 de enero de 1915, dirigi6 una carta a los generales Alvaro Obreg6n y Candido Aguilar, en que les decía: "Por acuerdo tomado entre los generales J.;lsabel Robles, Ministro de Guerra; Lucio Blanco, Ministro de Gobernaci6n; Eugenio Aguirre Benavides, Subsecretario de Guerra, y yo, hemos creído patri6tico y honrado, dirigirnos a ustedes, para indicarles la conveniencia de suspender su avance hacia esta capital, mientras nosotros seguimos dandole forma al pla? de campaiia que pretendemos dirigir contra el general Francisco Villa, a quien siempre hemos tenido la intensi6n de separarlo en lo absoluto del Ejercito Constitucionalista, y hasta de toda clase de asuntos políticos de nuestro país ... El día 13, en la noche, lleg6 a mi (General Alvaro Obregbn) Cuartel General una comisi6n integrada por el Ingeniero Rodriguez Cabo, el teniente coronel Aguirre Escobar y tres personas mas, que de Mbxico habian salido con instrucciones del general Eulalio Gutihrrez, para conferenciar conmigo. La comisi6n enviada ante ml por Gutibrrez, tenia por objeto exponerme de viva voz, los proyectos de este y de algunos de los miembros de su gabinete, de abrir una $ampaha contra Villa, lanzando previamente un Mánifiesto a la Nacibn, en el que se denunciaría la conducta arbitraria de Villa para con el llamado Gobierno 1 de la Convencih, así como los innumerables e inauditos atentados que el mismo jefe había perpetrado en la ciudad de México y en otros lugares que estaban bajo el dominio de sus fuerzas, a despecho del mismo Gobierno de Gutiérrez, y sin hacer caso de la pretendida autoridad de &te. Para esos planes, pretendían Gutibrrez y los suyos contar con mi adhesión y la de algunos otros jefes del constitucionalismo, enviandome una copia de su proyecto Manifiesto a la Nación". "Manifiesto a la Nación ... Pero al fin, de acuerdo con las personas que integran mi gabinete y el sentir de algunos patriotas honrados a quienes también he consultado, me resuelvo a tomar un camino que puede no ser el del triunfo, pero sí el de la honradez, y pidiendo a todos los mexicanos que cumplan con su deber apoyándome en esta decisi6n que el gobierno nacional ha tomado, he tenido a bien acordar los siguiente: I . Cesa en el mando de la Divisidn del Norte y de todas las demás fuerzas que hayan estado bajo sus órdenes, el CC. General Francisco Villa, así como los generales Tomas Urbina y Rodolfo Fierro. I I . Cesa igualmente en el mando de las fuerzas que sean leales a la Convención y que estén bajo sus órdenes, el general Emiliano Zapata. I l l . El Gobierno seguir6 exigiendo el retiro absoluto del senor Carranza y aceptará el concurso de los jefes militares que hasta hoy le han secundado si desisten de seguirlo sosteniendo. IV. Se hace saber a todos los jefes y militares y a todos los elementos armados del país que sean leales al gobierno emanado de la Convención de Aguascalientes, que sólo deberán cumplir las 6rdenes que emanen directa o indirectamente de la Secretaria de Guerra. V. Desde luego saldr6n comisiones que informen de estos acuerdos a las fuerzas que no han querido reconocer a mi gobierno porque exigían el retiro del general Francisco Villa, con el objeto de pedirles su concurso, si fuere necesario para que Sean cumplidos. Constituci6n y Reformas. Eado en el Palacio Nacional, en la Ciudad de MBxico, ... 13 días del mes de enero de 1915. E l Presidente Provisional. General Eulalio GutiBrr&.Idem. pp. 436438, 445-447 y 454- 455,

57

Page 61: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

ejercerá por conducto de su Presidente el C. General Roque González Garza, quien se sujetará en todos sus actos a los acuerdos de la Soberana Conven~ión".~~ Las propuestas fueron discutidas con amplitud y puestas a votación, resultando aprobadas por ochenta y tres votos. El general Otilio Montaño, vicepresidente de la asamblea, le tomó la protesta de ley.

El 18 de enero de 1915, González Garza integró su gabinete. Ratificó los nombramientos de los ministros de Justicia y Agricultura que desempeñaban, respectivamente, el licenciado Rodrigo Gómez y el general Manuel Palafox, y para las demás secretarias designó oficiales mayores encargados del Despacho, repartidos en la forma que sigue: Alfredo Guichenné, Gobernación; Joaquin Ramos Roa, Instrucción Pública; José Vázquez Schiaffino, Comunicaciones; Enrique Rodiles Maniau, Hacienda, y general Alfredo Serratos, Guerra y Marina. Ese mismo dia se ratificó el nombramiento de general en jefe de las fuerzas convencionistas en favor del general Francisco Villa, que acababa de obtener otra gran victoria en Sayula, Jalisco, contra las fuerzas adictas a Carranza que mandaban los generales Diéguez y Murguía.@

El nuevo Presidente convencionista, establecido en la Ciudad de México, destacó dos mil hombres de la División del Norte a las órdenes del general Agustin Estrada, en persecución del prófugo expresidente, los que derrotaron a una fuerza de gutierristas que había evacuado la capital potosina, en San Felipe Torres Mochas, Guanajuato. El general Gutiérrez después de haber sido herido en la celada de las Antonias, que le tendió Carrera Torres, se amnistió en Ciénega del Toro y lanzó un manifiesto el 15 de junio de 1915, por el cual renunciaba a la Presidencia de la República.-

González Garza se presentó ante la Convención el dia 25 de enero de 1915 y habló con entera franqueza y gran claridad sobre la situación. Expreso: "Ya es tiempo de que el pueblo sepa la verdad y no se le engañe: la verdad debe resplandecer en el Gobierno y yo no quiero ocultaros que las fuerzas convencionistas han sufrido un revés. Estas fuerzas no pudieron resistir el avance de las tropas del general carrancista Diéguez y del general Murguía, que se le unió a inmediaciones de Guadalajara. Mi Gobierno confía en que, en vista de este fracaso, se reunirán prontamente tropas y se recuperará la capital tapatia ... Y esta es la verdad, que no me causa rubor decir: las fuerzas del Sur, en las cuales el Ejecutivo se apoya por acuerdos que tomó esta Convención, no se hallan acostumbradas a luchar a campo abierto ¡El enemigo avanza, avanza, avanza...!""

En la noche de 25 de enero de 1915, se inició la evacuación 4 ' e la ciudad de México por las fuerzas zapatistas, acompañadas del personal del Gobierno, se dirigieron a Morelos pasando por Tacubaya, San Angel, Contreras, Tlalpan, Xochimilco, estribaciones de la serranía del Ajusco. Sin embargo, la entrada de las fuerzas adictas a Carranza no se efectuó sino hasta el día 28 de enero ... Cuando Obregón, a la cabeza de sus soldados, ocupó la ~apital.~'

1

El Gobierno de la Convención y los miembros de ésta se trasladaron a la ciudad de Cuernavaca. Ahí siguieron discutiendo los miembros de la asamblea el Plan de Reformas Sociales y el general González Garza dispuso que las fuerzas zapatistas hostilizaron a las tropas del general Obregón que ocupaban la ciudad de México. Inmediatamente después de la evacuación de las fuerzas carrancistas, los soldados de la

*'OD cit., Alessio, pp. 442. Idem pp. 443.

89E 'pp .455-456 . wG., pp.458. "G., pp.458-459.

88

58

Page 62: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Convención volvieron a la capital de la República. El general González Garza con los miembros de su gabinete y los de la Convención, regresaron a la ciudad de México el 12 de marzo. Pero, desdichadamente, ya desde su estadía en Cuernavaca, advertíase un distanciamiento entre los elementos del Norte y los del Sur. Apenas efectuado el retorno a la capital, se reanudaron las hostilidades con la exigencia por parte de la Convenciórl, de que el Presidente González Garza presentara a la asamblea, en un plazo perentorio, una lista de las personas que deberían integrar su gabinete. González Garza pretendió cortar por lo sano y urgió la necesidad de una entrevista con el general Zapata, que se encontraba en el pueblo de Los Reyes. Allí convenció a Zapata de que era necesario que lo acompañara a la capital y en Palacio Nacional convinieron en que la lista de colaboradores del Ejecutivo debería formarse del siguiente modo: Relaciones, licenciado Miguel Díaz Lombardo; Gobernación, Francisco Lagos Cházaro; Justicia, licenciado Miguel Mendoza López; Instrucción Pública, profesor Otilio Montaño; Fomento, ingeniero Valentín Gama; Comunicaciones, licenciado Francisco Escudero; Guerra, general Francisco V. Pacheco; Agricultura, general Manuel Palafox.92

Para el 15 de marzo de 1915, las fuerzas adictas a las Convención dominaban en lo absoluto los Estados de Chihuahua y Coahuila, porciones de Puebla, Hidalgo, Jalisco, Nuevo León y Tamaulipas, la mayor parte de San Luis Potosí, casi todo Sonora, Sinaloa y Nayarit y la totalidad de los Estados de Durango, Zacatecas, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, México, Morelos y Guerrero. El general Felipe Angeles en posesión de Monterrey, preparaba sus fuerzas para apoderarse de Matamoros, Ciudad Victoria y Tampico. Ya podía disponer la División del Norte del combustible extraído de las minas de carbón del norte de Coahuila. El general Tomás Urbina, con una poderosa columna, había emprendido la ofensiva sobre las posiciones que los carrancistas habían fortificado en El Ebano, Tamaulipas, para adueñarse de la región petrolera, toda ella en poder de las fuerzas que sostenían a Venustiano Carranza. La importante ciudad de Guadalajara había vuelto a quedar en manos de los generales Diéguez y Murguía. En Michoacán continuaba el juego de estira y afloja en el que las fuerzas que habían estado a las órdenes del general Gertrudis Sánchez, reconocían alternativamente al bando cuyas tropas se encontraban más cercanas y en aquellos días parecían inclinarse del lado de Carranza. Para esas fechas, las fuerzas del Primer Jefe dominaban en la región del Sureste y controlaban los estados de Veracruz y Oaxaca, dominio que les permitía el envío de pertrechos por la vía de Salina Cruz y Manzanillo, a los elementos que en Jalisco sostenían al dicho Primer Jefe, fuertemente amagados por las fuerzas de la División del Norte a las órdenes directas del general Villa.'; 1 1

Villa atacó a Obregón en Celaya, población que Obregón mando fortificar y que además se encuentra en una llanura en donde los canales y acequias de riego, cuyos bordos que podían utilizarse como trincheras, constituían un serio obstáculo para las cargas de caballería. Angeles opinó que por ningún motivo debería hacerlo y le sugirió que se replegara hacia el Norte lo más lejos posible, con el objeto de que Obregón se debilitara, alargando todavía más su línea de comunicaciones, con la cual se derrotaría éI sólo. Tula, la antigua capital de los toltecas, se convirtió en aquellos días, en la clave de la situación. Para asegurar su posesión, el general Obregón situó en esa plaza una fuerza de tres mil hombres a las órdenes del general Agustín Millán. Se efectuó el primer combate de Celaya en los días 6 y 7 de abril, Villa fue rechazado con graves pérdidas, pero las fuerzas de Obregón quedaron maltrechas y sobre todo escasas de municiones. El 13 de abril se inició nuevo combate. Las caballerías de Villa, reforzadas, atacaron con impetu. Obregón había recibido por la vía de Tula gran cantidad de pertrechos, sin que las fuerzas de guarnición en la capitat hubieran puesto el menor obstáculo a ese convoy. Las

921bid., pp.462. "Em. , - pp.463

59

Page 63: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

embestidas fueron furiosas. Para el día 15 de abril la División del Norte había sido derrotada en forma decisiva, con graves pérdidas en hombres, cañones y municiones. Villa, por medio de correos especiales, urgía a Gonzalez Garza, con gran apremio, a que fuerzas de la capital cortaran las comunicaciones de Obregón con el puerto de Veracruz. Como en la capital no habían quedado tropas de la Divisi6n del Norte, González Garza apremiaba, a su vez, a los zapatistas, y estos apremios provocaron un gran distanciamiento entre el Presidente Provisional y algunos jefes del Ejército Libertador del Sur. Cuatro días después de las acciones de Celaya, el general Obregón emprendió su marcha hacia el norte. A su maravillosa intuición en asuntos guerreros no podía escapársele que el talón de Aquiles, es decir, el punto vulnerable de sus operaciones, se encontraba en la porción de la vía férrea que se extiende entre Tula y Ometusco. Una interrupción de cierta importancia en este trayecto, hubiera dejado a las tropas de Obregón sin municiones y sin víveres. Villa confió esta misión a las fuerzas del Ejército Libertador del Sur, pero éstas, solamente en forma esporádica y sin llevar a cabo destrucciones a fondo, interrumpieron sólo por breves lapsos, las comunicaciones entre Veracruz y la región del

La marcha de Obregón hacia el norte fue extremadamente cautelosa. Las tropas bajo su mando ocuparon el día 21 de abril las plazas de Silao y Guanajuato. AI fin logró la incorporación de las fuerzas que estaban a las órdenes de Diéguez y Murguía. Hizo que las del general Fortunato Maycotte, como extrema vanguardia, ocuparan la hacienda de los Sauces, en donde sostuvo un combate con una fuerza exploradora destacada en León. Estos combates se repitieron casi todos los días del mes de mayo. En los últimos días del mes de mayo se incorporó el general Angeles a las fuerzas que a las órdenes de Villa, se encontraban en León. Angeles, opinó que no debería tomarse la ofensiva contra las fuerzas de Obregón, manteniéndolas en las posiciones que ocupaban, sujetas siempre a consecutivos ataques para producir en ellas una labor de desgaste, a fin de obligarlas a consumir sus víveres y municiones, mientras se destacaba una fuerza villista a retaguardia de Obregón para que destruyera a fondo la vía férrea, cortando! la línea de comunicaciones del enemigo.

Cuando las fuerzas de Obregón avanzaban desde León en dkección de Aguascalientes, se le dio parte en la noche del 2 de julio de que las comunicaciones habían sido cortadas al sur de Lagos Tres mil hombres a las órdenes de los generales Canuto Reyes y Rodolfo Fierro, se habían apoderado, por sorpresa, de la Estación Pedrito, eGtre Lqgos y León, y obligaron al telegrafista a transyitir mensajes en nombre del general Obregón, al general Novoa y a otros jefes carrancistas, ordenándoles que no opusieran resistencia a la columna de Reyes y Fierro, y que evacuaran León y demás puntos de línea férrea, replegándose a lugares seguros.

Esta columna se apoderó de León sin resistencia, y continuó su marcha hacia el sur, destruyendo todas las vías de comunicación, sin excluir las bombas, los tinacos y los cambios de la vía férrea. Prosiguió su destructora marcha, primero hasta Celaya y luego

04" Celaya Gto. 8-abril-1915. Primer Jefe del E.C. Honrome transcribir a usted el mensaje que con esta fecha dirigió al C. Francisco S. Elias, New York: E l tremendo fracaso que acaba de sufrir en esta el Ganfarr6n (sic.) (Fanfarrt~n), Francisco Villa obedece en gran parte a la torpeza con que dicho bandolero dirigi6 su combate ... Dejd la infanteria A (sic) la retaguardia y 61 huy6 A (sic.) la vanguardia con los famosos "Dorados'. Respetuosamente. ral (sic.) (Gral.) en jefe Alvaro Obregón". AHDN X1/481.5/118, ff. 30-31. Además, AHDN

Sánchez Lamego, Miguel A., Historia Militar de la Revolución en la época de la Convencibn., MBx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revoluci6n Mexicana, 1983, pp.158.168. OD cit., Obregbn, pp.299-305. Ulloa, Berta, Historia de la Revoluci6n Mexicana. Tomo 5., MBx., COLMEX., 1979, pp. 93-102. OD cit., Alessio, pp. 465-467.

X1/481.5/118, f f , 22-25, 28-29, 33-34 y 37-38. X1/481.5/119, f f , 144-156.

60

Page 64: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. .

avanzó por Querétaro y San Juan del Río, hastaTula, en donde a tad ,y derrotó a una fuerza de carrancistas, a las órdenes del general Agustín Millán. Ahí se reunieron con esta columna algunas fuerzas de la convención que. había organizado el general Roque González Garza. La presencia de esta columna en Tula, hizo que el general Pablo González, con sus tropas, evacuaran la plaza de México, que había sido ocupada por 61 el día 11 de julio, obligando al Gobierno de la Convención, presidido por el licenciado Lagos Cházaro a establederse en la ciudad de Toluca. Cuando la columna de Reyes y Fierro se dirigió nuevamente al norte, el general González ocupó nuevamente la capital. La atrevida actividad de la columna de los generales villistas, empleada tardíamente, no dio el resultado apetecido. Villa con los restos de sus fuerzas, hubo de marchar a Sonora, en donde experimentó nuevos reveses. Uno de ellos, el de Agua Prieta, se debió al oportuno refuerzo que recibieron las tropas carrancistas, gracias a que el Gobierno norteamericano dio permiso al presidido por Carranza para que enviaran tropas mexicanas por temtorio de los Estados Unidos, a salvar a la maltrecha guarnición de aquel poblado fronterizo.95

Para terminar con aquellas estériles reyertas, los delegados nortefios consintieron en la separación de González Garza siempre que en su lugar fuese nombrado el licenciado Francisco Lagos Cházaro, que era el secretario particular del presidente. Se hizo la substitución el 10 de junio de 191 5, y debiendo integrar el gabinete de acuerdo con la Convención, según la ley aprobada del gobierno parlamentario, fueron designados ministros: de Relaciones, licenciados Ignacio Borrego; de Gobernación, José Quevedo; de Hacienda, licenciado Luis Zubiria y Campa; de Guerra, general Francisco V. Pacheco; de Comunicaciones, general Federico Cervantes; de Instrucción Pública, profesor y general Otilio Montaño; de Agricultura, general Manuel Palafox. Con el carácter de subsecretario, quedó encargado del Ministerio de Justicia el licenciado J. Mendoza López. El día 11 prestó la protesta de ley el nuevo Presidente y ante éI, lo hicieron los nuevos ministros.

El 10 de octubre de 1915 fue reconocido el gobierno de facto de don Venustiano - Carranza por el gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica.g6 El mismo día, el i gobierno emanado de la Convención, sin saber la noticia del citado reconocimiento, i decidió abandonar la ciudad de Toluca y marchar con los elementos que le quedaban a la ; ciudad de Chihuahua. AI principio seguían a la caravana unos tres mil soldados. Ixtlahuca, Maravillas, Tasquillo, Río Verde, Tablas, Tula de Tamaulipas y Gruñidora en el Estado de Zacatecas, fueron las principales etapas. La columna tuvo que sostener varios combates. De Gruñidora se dirigieron los convencionistas al Estado de*Durango. Le llegó la noticia al ljcenciado Lagos Cházatio y a los funcionarios que lo acompañaban, de que la ciudad de Chihuahua había sido ocupada por los carranastas. En Cuencamé deliberaron sobre su situación. El general Calixto Contreras les ofreció su protección y les indico que la sierra

I

95

6 6 , Or, cit, Sanchez, pp. 187-200. Cfr., OD cit., Obreg6n, pp, 306-330. m., OD cit., Alessio, pp.468-473.

Washington, D.C., 19 de octubre de 1915. Señor V. Carranza. Torre6n, Coah.- A continuaci6n transcribo a usted, textualmente, la nota que con fecha de hoy recibl del señor Roberto Lansing, Secretario de Estado del Gobierno de los Estados Unidos.- "Querido seAor Arredondo: Tengo el placer de informarle que el Presidente de los Estados Unidos aprovecha esta oportunidad para extender su reconocimiento al Gobierno de "Facto" de México, en el cual el señor don Venustiano Carranza, figura como Jefe del Ejecutivo. El Gobierno de los Estados Unidos tendrh placer en recibir formalmente, en Washington, al representante diplomatico de dicho Gobierno de "Facto" tan pronto como plazca al seAor Carranza designarlo y extenderle su nombramiento; y reciprocamente el Gobierno de los Estados Unidos acreditará ante el Gobierno de "Facto" un representante diplomhtico, tan pronto como el Presidente tenga oportunidad para nombrarlo. Agradecer6 a usted que se sirva anunciar esta noticia al seAor Carrapza, con la brevedad que usted considere posible y oportuna.- Quedo de usted sinceramente, R. Lansing". OD cit., Barragan Tomo II, pp. 486-487. 'Los Estados Unidos precisaban un gobierno protonorteamericano para resolver sus propios problemas de abasto de materias primas en los proleg6menos de la primera guerra (mundial), un gobierno unipersonal resultaba la vla adecuada para conseguirlo". OD cit., Lomas. pp.10.

61

Page 65: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

de Durango sería su abrigo. A principio de enero de 1916, el presidente Lagos Cházaro, tras penosa peregrinación, pudo llegar a la tierra del exilio en el Estado de Durang~.'~

'

e70p cit., Alessio, pp. 472-474. ViJ., Op cit., Barrera Tomo 111, pp. 86.

62

Page 66: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

CAPITULO IV

EL NACIMIENTO DEL AUTORITARISMO CONTEMPORANEO EN MEXICO.

El día 10 de octubre los villistas se separaron definitivamente de los zapatistas y apoyados por una débil columna militar, emprendieron una penosa odisea hacia los territorios del norte. En el trayecto se desmembró casi por completo la expedición y sólo algunos consiguieron llegar a territorios seguros. Pocos delegados villistas lograron reincorporarse a las actividades guerrilleras que los restos del villismo, comandados por Villa, organizaban en el estado de Chihuahua. Otros consiguieron ponerse a salvo de la persecución constitucionalista exiliándose en los Estados Unidos. Por su parte, los delegados zapatistas tomaron camino hacia zonas dominadas por ellos y que consideraban más seguras, en el estado de Morelos, estableciéndose primero en Cuemavaca y luego en Jojutla, donde se incorporaron algunos a la resistencia armada contra el constitucionalismo que por entonces se recrudeció asombradamente en el estado. Otros delegados, de acuerdo con Zapata y los principales jefes surianos, emprendieron la tarea de sostener el proyecto de la Convención. Con la partida de los villistas, la Convención se convertía ya en un proyecto exclusivamente zapatista, su influencia era meramente local y aunque, no se despojaba de aspiraciones nacionales ni de ser un gobierno parlamentario ni de su contenido como una asamblea constituyente, si se reducía drásticamente la posibilidad de ser un poder efectivo. En el mes de febrero, Zapata recomendaba que la Convención continuará sus esfuerzos y que funcionara a los ojos de la población como órgano efectivo para resolver los problemas políticos, administrativos y que pudieran cumplir con las funciones que antes correspondían a las legislaturas; urgía también el nombramiento de las personas que se encargarían de los ministerios vacantes. El último acto de la Convención zapatista fue el día 18 de abril de 1916 en Jojutla, Morelos, publicando el Programa de Reformas Político Sociales de la Revolución, con ligeras modificaciones y agrupado temáticamente por secciones: cuestión agrícola, cuestión obrera, reformas sociales, reformas administrativas, reformas políticas y artículos transitorios. Después de esto se disolvió formalmente el 16 de mayo de 1916.98

La Sogerana Convención Revolucionaria buscaba cymo fue expresado en el Manifiesto a la Nación del 6 de noviembre de 1914 " ... Nos hemos reunido en esta Convencibn, ya no para derrocar y para destruir, sino para organizar y construir el nuevo Gobierno Republicano, en el cual se han de sintetizar todos nuestros ideales y todas nuestras tendencias".% Este nuevo gobierno como se observa lucha en contra del autoritarismo y se manifiesta con claridad al decretarse parlamentario,'w "La Soberana Convencibn Revolucionaria decreta: Artículo 1" El Presidente provisional de la República que resulte nombrado en sustitución del general Eulalio Gutierrez,

%'los zapatistas deciden la disolución de lo que ellos seguían llamando Soberana Convención Revolucionaria" en: OD cit., Espinosa, pp.209-229. OP cit., Ulloa, Historia Tomo 4, pp. 161-164. O&cit., Convención de Aauascalientes, No.45, pp. 18

O cit , Barrera Tomo I l l , pp. 227-231. '+ntear el establecimiento de un regimen parlamentario, son meritos innegables, de tal forma que si no por parte de ellos, de ahí en adelante cualquier otro grupo social podría perfectamente vislumbrar la necesidad de la revolución industrial, para sacar al pak de la miseria, del atraso y la rnarainación. con el sólo hecho de que a partir de ahí las decisiones serían tomadas colectivamente, en-el parlahento". .en: OP cit., Lomas pp. 3.

63

Page 67: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

lol permanecer& en su encargo hasta el día 31 de diciembre del año en curso, Y entregando el poder al día siguiente, al Presidente COnStitUCiOnal que resulte electo conforme a la convocatoria que, en su oportunidad, expida la Convenci6n. Artículo 2 O En caso de falta absoluta-o temporal del Presidente provisional, lo sustituir& en sus funciones el Ministro de Relaciones Exteriores, o el que siga en el orden del Protocolo, mientras la Convenci6n designa al nuevo Presidente. Artículo 3 o La Convenci6n, constituida en Gran Jurado, y mediante el voto de las dos terceras partes de los delegados presentes, podr& destituir al Presidente provisional de la República, por algunas de las causas siguientes: l. Si el referido funcionario viola o deja de cumplir los acuerdos de la Soberana Convencibn, y entre ellos, los principios del Plan de Ayala, que fueron aceptados por la misma, en Aguascalientes. II. Sí el Presidente atenta contra la Soberanía y la integridad de la Convencibn. 111. Si se separa de la residencia oficial de la Convención, sin permiso de esta o de la Comisi6n Permanente, en su caso. Artículo 4 o Los ministros son solidariamente responsables de la política general del Gobierno, e individualmente, de los acuerdos que dicten en sus respectivos ramos. Para hacer efectiva dicha responsabilidad, se constituir3 la Convenci6n en Gran Jurado. Artículo 5 O Ningunos de los acuerdos del Presidente ser&n v&lidos si no llevan la firma del Ministro del ramo, o del Consejo de Ministros, en su caso. Artículo 6 O Cuando alguno de los Ministros niegue su aprobaci6n a un acuerdo presidencial, o viceversa, se someter& el conflicto a la decisi6n del Consejo de Ministros, y la resoluci6n de 6ste serh definitiva. Artículo 7 O El Presidente someter& el nombramiento a la separaci6n de sus Ministros, a la ratificaci6n de la Convenci6n. Artículo 8 o La Convenci6n podrh separar a cualquiera de los Ministros, mediante el acuerdo de las dos terceras partes de los miembros presentes, y en sesi6n de la Asamblea. Artículo 9 o El Presidente de la República deber& nombrar, dentro de los ocho días siguientes a aquel en que de hecho o derecho cese un Ministro en el ejercicio de su encargo, al . Ministro sucesor. Transitorio. UNICO. El Ejecutivo someter& desde luego a la ratificaci6n de la Soberana Convenci6n el nombramiento de los actuales Secretarios de Estado, quienes, una vez admitidos, protestarin desde luego ante el Encargado de dicho Poder como Ministros, y el mismo Ejecutivo nombrar& a los que falten de la promulgación de esta ley, a la cual quedan sujetos los actuales miembros del Poder Ejecutivo y cualquiera otros funcionarios que los sustituyan en el período preconstitucional. Salón de Sesiones de .la Soberana Convenci6n Revolucionaria, M6xico, veintid6s de enero de mil novecientos quince. El Presidente, Otilo Montafio, El Secretario, Genaro Palacios Moreno. El Secietario, Lecuona".102 Ademhs en el Programa de Reformas Político Sociales en el apartado a las reformas políticas se expresa: "Reformas Políticas. Artículo 32. Realizar la independencia de los municipios, procurando a éstos una amplia libertad de acción que les permita atender eficazmente a los intereses comunales y los preserve de los ataques y sujeciones de los gobiernos federales y locales. Artículo 33. Adoptar el parlamentarismo como forma de Gobierno de la República. Artículo 34. Suprimir la Vicepresidencia de la República y las Jefaturas Políticas. Artículo 35. Suprimir el Senado, institución aristocrática y conservadora por excelencia. Articulo 36. Reorganizar sobre nuevas bases el Poder Judicial para obtener la independencia, aptitud y responsabilidad de sus funcionarios y hacer efectivas también las responsabilidades en que incurran los demas funcionarios públicos que falten al Cumplimiento de sus deberes. Artículo 37. Implantar el sistema de voto directo, tanto en las elecciones federales como en las locales, y reformar las leyes electorales de la Federación y 4e los estados, a fin de evitar que se falsifique el voto

"'Recordemos que para estos momentos el C. Gral. Eulalio Gutikrrez ejercia el Cargo de Presidente Provisional de la República. loZOp cit., Convención de Auuascalientes, No.45, pp. 93-94.

64

Page 68: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

de los ciudadanos que no saben leer ni escribir. Artículo 38. Castigar a los enemigos de la causa revolucionaria, por medio de la confiscaci6n de sus bienes y con arreglo a procedimientos justicieros . II 103

Por lo anterior la Convención se declaró parlamentaria, porque sin duda ellos creían que "El Parlamentarismo es la mejor tribuna de un país para tratar sus más graves problemas. En su seno deben plantearse, debatirse y sugerir los temas de la actualidad política. De este modo se logra una importante colaboración política y se hace participar al pueblo en forma responsable y consciente"," Porque como dice el doctor José María Luis Mora: "El poder ejecutivo es un ramo de la soberanía, y se puede decir que es el eje sobre el que gira toda la maquinaria política, que recibe de éI todo su movimiento y acción, pues de nada sirve las mejores leyes, ni las sentencias más justas y acertadas, si aquéllas no se ejecutan, y éstas no se ponen en prácticas. La actividad y la fuerza son los atributos esenciales de este poder, que jamás podrá constituirse de otra manera . El poder ejecutivo tiene, por medios directos o indirectos, en sus manos la política internacional, hacendaría, monetaria y crediticia, educativa, laboral, agraria y.de seguridad social. Todas estas atribuciones hacen que el poder ejecutivo sea el más fuerte de los poderes, el verdadero centro de poder del sistema de gobierno"'06 Imaginarnos un poder ejecutivo independiente de la acción del poder legislativo es aludir a regímenes de concentracibn del poder, muchos de los cuales llevan a la dictadura. El peligro, pues, de la invasión que altere la estabilidad de las instituciones, dice Rabasa, "está principalmente en el abuso que el Congreso pueda hacer de sus atribuciones legítimas, por más que esto parezca paradójico en nuestro país, porque nunca hemos vivido bajo el régimen constitucional y por consiguiente, la preponderancia ha estado en el Ejecutivo . Pero, esta preponderancia en el ejecutivo "en tiempos normales cuando los pueblos viven, no es una paz sofisticada, sino en la tranquilidad del devenir social, acumular excesivamente atribuciones al Poder Ejecutivo-'OB o restarle importancia a los otros poderes, es entregarlo a una acción personal caprichosa, que lleva necesariamente a la dictadura".'w

II 105 I1

II 107

!

103 - Idem., pp. 105-106. O cit., Ulloa, Historia Tomo 5, pp. 247-249. *rra Rojas, Andres, Pensamiento Político: Antoloda., MBx., Porrua, 1988, pp.131. "Desde luego, hay que advertir que los convencionalistas no estaban, pensando, de ninguna manera, en el parlamentarismo europeo, sino en las propias condiciones sociales, pollticas y econ6micas generadas en MBxico a raizpe la lucha revolucionaria. No se partia del parlamentarsiyo como un ideal democrdtico al cual podia arribarse, sino de la critica devastadora que la Revoluci6n había hecho de las instituciones de la dictadura ... Pero la instituci6n en contra de la cual se descarga el odio acumulado durante cerca de cuarenta aiios hacia la dictadura es la presidencia de la República". OD cit., La Soberana Convenci6n de Aquascalientes 1914-1918, pp.131. Ademds, adoptan el parlamentarismo "...s610 para someter a su autoridad al Presidente de la República y para pretender sancionar sus actos, limitando su autoridad. No podrían aceptar sus integrantes ninguna limitaci6n pues eran hombres que acababan de dejar el campo de batalla y que estaban pidiendo una participaci6n ilimitada en las cuestiones políticas del país ..." en: OR cit., Medellin,

'karpizo, Jorge, Estudios Constitucionales, M ~ x . , Porrua-UNAM, 1994, pp.305. 'O6 Idem., pp. 305.

''&'Los villistas intentaron defenderla y justificarla. Federico Cervantes, por ejemplo, afirmaba: "Yo no podre aceptar nunca, como lo pretenden los seiiores delegados, que el representante del poder Ejecutivo sea un monigote; siempre creeré que es un hombre a quien el voto de una Asamblea Legislativa o del pueblo, que es perfectamente respetable, lo eligió en vista de múltiples y reconocidas cualidades ... en ese concepto yo no puedo concebir que al Ejecutivo se le suprima todo género de facultades y no se convertfa mds que en un empleado, en un instrumento de las decisiones de una Asamblea". Cervantes, por supuesto, rechaza el parlamentarismo, pero lo hacía en los terpinos en que era usual descalificar ese regimen político en Mexico, vale decir, contraponihdolo a la "dictadura de un solo hombre" como la "dictadura de varios", lo que sonaba todavía más siniestro. Decía Cervantes, en ese sentido: "...Yo me yergo contra la tendencia dictatorial de una Asamblea; como lo he dicho mil veces, prefiero la dictadura de un hombre a la de una colectividad, que es siempre despreciable. La Asamblea revolucionaria francesa lleg6 a cometer excesos incalificables, por esa tendencia". Por otro lado "...Antonio Díaz Soto y Gama quien marc6 la pauta y el rumbo del debate. Para el

65

. 53.

107 - OD cit., Serra, pp. 132-133.

Page 69: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. .. . ... . . . . . .

Este capricho personalista llevó a ratificar el autoritarismo al ponerse en marcha la convocatoria a un nuevo congreso constituyente lanzada el 14 de septiembre de 1916."0

El Primer Jefe del Ejército Constitucionalista y Encargado del Poder Ejecutivo C. Venustiano Carranza hizo las consideraciones siguientes: O ' . . . Que en vista de esto, es seguro que los enemigos de la Revolución, que son los enemigos de la Nación, no. quedarían conformes conque el Gobierno que se establezca se rigiera por las reformas que ha expedido o expidiere esta primera Jefatura; pues de seguro lo combatirían como resultante de cánones que no han tenido la soberana y expresa sanción de la voluntad nacional..."' Que para salvar ese escollo, quitando así a los enemigos del orden todo

representante de Zapata, "el Ejecutivo es como una ave de presa, que anda volando en el espacio y quiere caer a todo trance sobre su víctima ... que, en este caso, es el pueblo, con el fin de chuparle la sangre, de aniquilarlo, y una vez que lo agarra no lo suelta: No se ha dado hasta hoy un solo caso en nuestra historia, de un presidente que entregue por la buena, voluntariamente, el poder; desde el gran Juarez, desde el gran Lerdo, el ilustre Lerdo. AI gran Juarez s6Io la muerte lo quit6, y al colosal Lerdo hubo necesidad de que lo echaran a patadas de la presidencia. Respecto,al seAor Madero, sus actos mostraron que tenía intensiones de aferrarse por muchos aAos a la silla presidencial". El presidente, concluyó Días Soto y Gama, "es la calamidad mas grande, el monstruo mas horroroso que se ha colocado en nuestro pais ... La presidencia es una verdadera enfermedad: el hombre mhs bueno, el hombre mas simptltico, el hombre mds patriota, apenas sueha con la presidencia y le entra una especie de epilepsia: empieza a temblar, y para no caerse se aferra fuertemente a la silla y no la suelta". Ahora bien "al hacer la defensa del parlamentarismo, los convencionalistas no sentían que estuviesen copiando instituciones de otros países. Pensaban mQs bien que estaban innovando la política nacional. En el fondo, el parlamentarismo europeo, con sus grandes sistemas de partidos políticos, les resultaba extrano y no. lo reclamaban para M6xico. Para ellos el objetivo de la reorganizacidn política de la República era claro y preciso: se trataba de preservar el poder que la sociedad rural había ganado a traves de las armas. No postulaban tampoco un Estado nacional debil frente a esa sociedad, sino un Estado fuerte por el apoyo que en ella encontrara; pero sería un poder no venido desde arriba, sino generada en el seno mismo de la sociedad. Se trataba de un parlamentarismo que ya estaba desarrollhdose, que ya estaba en acto en el propio organismo de la Convención, con su representatividad de los grupos campesinos armados, con su forma de debatir y resolver los problemas y de ejercer el gobierno de la sociedad. en: Op cit., La Soberana Convenci6n de Aquascalientes 1914-1918, pp. 130-131. 'O9 OD cit., Serra, pp. 133.

Arnaldo Cordova dice: "Desde mi punto de vista, ni siquiera el Congreso Constituyente de 1916 a 1917 presenta la pasmosa riqueza de ideas y de planteamientos que ofrece la Convención". OD cit., La Soberana Convenci6n de Aquascalientes 1914-1918, pp.131.) comparti6 este punto de vista, ya que lo que se discute en el Congreso Constituyente representa una síntesis de lo que la Convenci6n Revolucionaria de Aguascalientes se venia discutiendo y recordemos que en los momentos en que se encuentra en la ciudad de Aguascalientes, estan reunidos todo los revolucionarios triunfantes.

Palavacini declara: "Los conspicuos abogados reaccionarios dedicaron voluminosos estudios para demostrar que aquella reuni6n sería ilegal y que la nueva Constituci6n era el producto espurio de u," partido político, que por la fuerza de las armas dominaba al país y que, al no concurrir representantes de todas las ideas, aquella Constituci6n no sería la constitución de México sino la de un partido." en: OD cit. Palavicini, pp.46, y con justa raz6n. Vasconcelos en un escrito sostiene: "...La verdadera soberanía popular actualmente reside y ha venido residiendo, desde febrero de 1913 en los ciudadanos rebeldes a la ursurpación huertista, en el Ejército Constitucionalista que es el ejército del pueblo soberano". Y continua: "La Convenci6n (de Aguascalientes hasta el rompimiento Villa - Carranza), -se ha afirmado-, representa s610 al Ejercito Constitucionalista, y no a los 15 millones de mexicanos que están, sin voz ni voto contemplando c6mo se deciden los destinos nacionales por una Asamblea que no tiene la suficiente representación. Pero si es verdad que la Convenci6n no puede aspirar a las facultades de un Congreso Constituyente, (porque recordemos que la convenci6n no busca hacer una constituci6n, busca restablecer el orden constitucional agregando nuevas normas acordes a todos los habitantes del territorio nacional), debe insistirse en que la Convención es el único poder legítimo del país, pues representa al pueblo armado en quien recayó la soberanía al desaparecer los poderes legales. Además, nadie mejor que la Convención puede en los actuales momentos interpretar las aspiraciones generales". OP cit., Medellin, pp.60-61. Además, Arturo Lomas ratifica lo antes expuesto: " En cuanto al problema de la soberanía o no de la Convenci6n, no faltan las discuciones inútiles acerca de cuestiones legales que nada tenian que ver, pues el orden constitucional simplemente estaba roto, sin embargo se dice que "En la ciudad de México el general Pablo González declara a los periódicos "El Liberal", "El Pueblo" y "El Dem6crata", que "residiendo la soberanía en el pueblo y ejerciéndolo &te por medio de su representante, ¿Por qu6 la Convenci6n no teniendo ninguna representación del pueblo se declara soberana? ¿Dónde y cuándo le dio el pueblo esa representación? ¿A qué ciudadanos representaban .los convencionales? Los convencionales representaban únicamente a los ciudadanos armados y &te no tiene el derecho de imponerse a la República", en donde queda la duda acerca de si Pablo Gonzalez le hizo a

66

110

111

Page 70: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

pretexto para seguir alterando la paz pública y conspirando contra la autonomía de la Nación y evitar a la vez el aplazamiento de las reformas políticas indispensables para obtener la concordia de todas las voluntades y la coordinación de todos los intereses, por una organización más adaptada- a la actual situación del país, y, por lo mismo, más conforme al origen, antecedentes y estado intelectual, moral y económico de nuestro pueblo, a efecto de conseguir una paz estable implantando de una manera sólida al reinado de la ley, es decir, el respeto de los derechos fundamentales"* para la vida de los pueblos, y el estímulo a todas las actividades sociales, se hace indispensable buscar un medio que satisfaciendo a las dos necesidades que se acaban de indicar, no mantenga indefinidamente la situación extraordinaria en que se encuentra el país a consecuencia de los cuartelazos que produjeron la caída del gobierno legítimo, los asesinatos de los supremos mandatarios, la usurpación huertista y los trastornos que causó la defección del ejército del Norte y que todavía está fomentando los restos dispersos del huertismo y del villismo ... Que planteado así el problema, desde luego ve que el Único medio de alcanzar los fines indicados es un Congreso Constituyente por cuyo conducto la Nación entera exprese de manera indubitable su soberana ~oluntad;"~ pues de esto modo, a la vez se discutirán y resolverán en la forma y vía más adecuadas todas las cuestiones que hace tiempo están reclamando solución que satisfaga ampliamente las necesidades públicas, se obtendrá que el régimen legal se implante sobre bases sólidas en tiempo relativamente breve, y en términos de tal manera legítimos que nadie se atreverá a impugnarlos II . 114

Las sesiones del Congreso Constituyente se celebraron en el Teatro lturbide de la ciudad de Querétaro del 20 de noviembre de 1916 al 31 de enero de 1917, dedicaron los primeros diez días a la discusión de las credenciales de los diputados. En los debates se hizo patente que los constituyentes eran hombres independientes y que tenían toda una gama de actitudes políticas y sociales revolucionarias, pero con un punto de vista más moderado o de derecha y más radical o de izquierda. Entre los primeros se destacaron . los antiguos renovadores que además eran seguidores de Carranza, Alfonso Cravioto, Felix F. Palavicini, José N. Macias, Luis M. Rojas y Gerzayn Ugarte. Entre los más : radicales y a la vez obregonistas estuvieron Francisco J. Múgica, Enrique Colunga, Enrique Recio, Luis G. Monzón, Alberto Román, Heriberto J. Jara y Esteban Baca I Calderón. Pero Pastor Rouaix no se identificó ni con la derecha ni con la Izq~ierda."~ Venustiano Carranza promulgó la Constitución el 5 de febrero de 1917 y anunció que las elecciones presidenciales y del Congreso de la Unión se efectuarían el día 11 del mes marzo. En las elecciones Rara integrar la XXVlI Legislatura del Congreso de la Unión

!

t I Carranza en su momento el mismo cuestionamiento, pues 83 firmas en su Plan de Guadalupe, en un país de quince millones de personas, con lo menos la mitad mayores de 18 aiios, no significa nada, ni legal ni moral, ni patri6ticamente. ¿De donde entonces emergía en 61, ese su mandato "soberano"? Opa cit., Lomas, pp.11. Con seguridad, ese mandato soberano esta sostenido y respaldado por los constitucionalistas por las armas.

"En tanto que a d , en el destierro, muchos hombres honrados, viejos defensores del ideal, sufren con entereza la nostalgía del terruiio, y comparten de todo coraz6n las ansias de libertad y los dolores acervos e infinitos de sus hermanos ausentes. En el destierro, Estados Unidos de América, Enero 1916. José G. Nieto, Federico Cervantes, Alberto B. PiAa y Francisco R. Velázquez"(partidarios convencionalistas). en: Federico Cervantes e t . , La Convenci6n Nacional Revolucionaria. Su Orisen. Su Obra v Sus Fines., Méx., 1918, pp. 109.

¿Cuál soberana voluntad? Si únicamente asistieron simpatizantes del constitucionalismo, porque recordemos que los opositores al regimen eran perseguidos, se encontraban levantados en armas en contra de los carrancistas o exiliados en Estados Unidos.

112

113 .

114

115 OP cit., Palavicini, pp.44. OD cit., Ulloa, La Lucha, pp.1150. "Unicamente se discuti6 el "proyecto del primer jefe, con 132 artículos y

9 transitorios ... Son las leyes que dieron forma y vida al Congreso", Medina, Hilario, Diario de los Debates del Conareso Constituvente 1916-1917 Tom6 l., Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revoluci6n Mexicana, 1985, pp. 16, 18, 24. '...Fue firmada y jurada.el 31 de enero de 1917 con el título de 'Constituci6n Política de los Estados Unidos Mexicanos", y el 5 de febrero la proclamó Carranza con el de 'Constituci6n Política de los Estados Unidos Mexicanos" que Reforma al del 5 de febrero de 1857". OD cit., Ulloa Historia Tomo 6, pp. 536.

67

t

Page 71: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

obtuvo la mayoría el Partido Liberal Constitucionalista y se instaló el 14 de abril de 1917, un día después Venustiano Carranza le rindió su informe sobre los cuatro años que había ejercido el Poder Ejecutivo."' En las elecciones presidenciales de marzo de 1917, Venustiano Carranza ganó por mayoría absoluta y el 110. de mayo de 1917 tomó posesión de la Presidencia para el período 1917 - 19120.

El resultado de este Congreso Constituyente en materia de la división de poderes en el Capitulo Ill Del Poder Ejecutivo quedó conformado de la siguiente manera: " Artículo 80.- Se deposita el ejercicio del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión "Presidente de los Estados Unidos Mexicanos".

- Artículo 81 .- La elección del presidente será directa y en los términos que disponga la ley electoral.

Artículo 82.- Para ser Presidente se requiere: 1.- Ser ciudadano mexicano por nacimiento, en pleno goce de sus derechos, e hijo de padres mexicanos por nacimiento. 11.- Tener 35 años cumplidos al tiempo de la elección. 111.- Haber residido en el país durante todo el año anterior al día de la elección. IV.- No pertenecer al estado eclesiástico ni ser ministro de algún culto. V.- No estar en servicio activo en caso de pertenecer al Ej&cito, noventa días antes del día de la elección. VI.- No ser secretario o subsecretario de Estado, a menos que se separe de su puesto noventa días antes de la elección. VIL- No haber figurado, directa o indirectamente, en alguna asonada motín o c~artelazo."~

Artículo 83.- El presidente entrará a ejercer su encargo el lo. de diciembre, durará en el cuatro años y nunca podrá ser reelecto. El ciudadano que subsituyere al presidente constitucional, en caso de falta absoluta de éste, no podrá ser electo presidente para el período inmediato. Tampoco podrá ser reelecto presidente para el período inmediato, el ciudadano que fuere nombrado presidente constitucional.

!

Artículo 84.- En caso de falta :absoluta del presidente de la República, ocurrida en los dos primeros años del período respectivo, si el Congreso estuviese en sesiones, se constituirá inmediatamente en Colegio Electoral, y concurriendo cuando menos las dos terceras partes del número total de sus miembros, nombrará en escrutinio secreto y por mayoría absoluta de votos, un presidente; el mismo Congreso expedirá la convocatoria a elecciones presidenciales, procurando que la fecha señalada para este caso coinfida en lo posible con la fecha de las próxhas elecciones de diputados y senadores al Congreso de la Unión. Si el Congreso no estuviere en sesiones, la Comisión Permanente nombrará desde luego un presidente provisional, quien convocará a sesiones extraordinarias del Congreso, para que a su vez expida la convocatoria a elecciones presidenciales en los mismo términos del artículo anterior. Cuando la falta del presidente ocurriese en los dos últimos años del período respectivo, si el Congreso de la Unión se encontrase en

.OD cit., Ulloa, La Lucha, pp. 1158. "'Este artículo 81, en sus apartados V, VI y VII, ratifican que esta constitución fue hecha única y exclusivamente para un sólo fin, dar el poder a un individuo Venustiano Carranza; si no es así, entonces porque declara que las elecciones presidenciales se realizaran el día 1 1 de marzo y la constituci6n es promulgada el 5 de febrero y se reanuda el orden constitucional el l /o. de mayo de 1917, dejando fuera de la candidatura a militares que podrían disputarle el puesto a la presidencia como Alvaro Obregh, Antonio I. Villarreal, no estaban en disponibilidad de cubrir los requisitos, ya que no tenían o no les dieron la oportunidad de cubrir los noventa días de separación del cargo para estar en posibilidad de ser contendientes a la presidencia de la República, pero existe'una posibilidad favorable única y exclusivamente para Venustiano Carranza, 61 no era militar, porque nunca ostento un grado jerArquico, ni tampoco, un cargo de funcionario; 81 se manejaba como Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista y Encargado del Poder Ejecutivo por tal motivo iCarranza si reunía los requisitos para ser candidato a la Presidencia! Además, Venustiano Carranza en caso de que fuera otro individuo el postulado a la Presidencia se convertiría seguramente en Juez y Parte para aplicar el apartado VI1 del mencionado artículo.

68

Page 72: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. . .

sesiones, elegirá al presidente substituto que deberá concluir el período; si el Congreso no estuviere reunido, la Comisión Permanente nombrará un presidente provisional y convocará al Congreso d e la Unión a sesiones extraordinarias, para que se erija en Colegio Electoral y haga la elección del presidente substituto. El presidente provisional no podrá ser electo por el Congreso como substituto. El ciudadano que hubiese sido designado presidente provisional para convocar a elecciones, en el caso de falta del presidente en los dos primeros años del período respectivo, no podrá ser electo en las elecciones que se celebren con motivo de la falta del presidente, para cubrir la cual fue designado.

Artículo 85.- Si al comenzar un período constitucional no se presentase el presidente electo, o la elección no estuviese hecha y declarada, el primero de diciembre cesará, sin embargo, el presidente cuyo período haya concluido y se encargará desde luego del Poder Ejecutivo, en calidad de presidente provisional, el que designe el Congreso de la Unión, o en su falta, la Comisión Permanente, y se procederá conforme a lo dispuesto en el artículo anterior. Cuando l a falta del presidente fuese temporal, el Congreso de la Unión, si estuviere reunido, o 'en su defecto la Comisión Permanente, designará un presidente interino"* para que funcione durante el tiempo que dure dicha falta. Si la falta, de temporal se convirtiere en absoluta, se procederá como dispone el artículo anterior. En el caso de licencia al presidente de la República, no quedará impedido el interino para ser electo en el período inmediato, siempre que no estuviere en funciones al celebrarse las elecciones.

Artículo 86.- El cargo de presidente de la República sólo es renunciable por causa grave, que calificará el Congreso de la Unión, ante el que se presentará la renuncia.

Artículo 87.- El presidente, al tomar posesión de su cargo, prestará ante el Congreso de la Unión o ante la Comisión Permanente, en los recesos de aquél, la siguiente protesta: "Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de presidente de la República que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión; y si así no lo hiciere, que la Nación me lo demande".

Artículo 88.- El presidente de la República no podrá ausentarse del temtorio nacional sin$ermiso del Congreso de la Unión. 5

Artículo 89.- Las facultades y obligaciones del presidente son las siguientes:

1.- Promulgar y ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión, proveyendo en la esfera administrativa a su exacta observancia.

11.- Nombrar y remover libremente a los secretarios del Despacho, al procurador general de la República, al gobernador del Distrito Federal y a los gobernadores de los Territorios, al Procurador General de Justicia del Distrito Federal y Territorios, remover a los agentes diplomáticos y empleados de la Unión, cuyo nombramiento o remoción no éste determinado de otro modo en la Constitución o en las leyes.

118 Obs6rvese con que cuidado, es redacfado este artículo, ya que se encierra en el, el cabo suelto que tenía Venustiano Carranza cuando al entrar a la Ciudad de M6xico como Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista quedaba investido como Presidente Interino, pero como en el párrafo siguiente dice: "no quedare impedido el interino para ser electo en el período inmediato" y el período inmediato era 1917-19120 con ello queda fuera toda posibilidad de protesta sobre su elección a la presidencia de la República.

69

Page 73: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

111.- Nombrar y remover los' ministros, agentes diplomáticos y cónsules generales, con aprobación del Senado.

IV.- Nombrar, con aprobación del Senado, los coroneles y demás oficiales superiores del Ejército y Armada Nacional y los empleados superiores de Hacienda.

V.- Nombrar a los demás oficiales del Ejército y Armada Nacional, con arreglo a las leyes.

VI.- Disponer de la fuerza armada permanente de mar y tierra para la . seguridad y defensa de la Federación.

VIL- Disponer de la Guardia Nacional para los mismos objetivos, en los términos que previene la fracción IV del artículo 76.

VIII.- Declarar la guerra en nombre de los Estado Unidos Mexicanos, previa ley del Congreso de la Unión.

IX.- Conceder patentes de curso con sujeción a las bases fijadas por el Congreso.

X.- Dirigir las negociaciones diplomáticas y celebrar tratados con las potencias extranjeras, sometiéndolos a la ratificación del Congreso Federal.

XI.- Convocar al Congreso o a alguna de las Cámaras a sesiones extraordinarias, cada vez que lo estime conveniente.

XII.- Facilitar al Poder Judicial los auxilios que necesite para el ejercicio expedito de sus funciones.

xIII.- Habilitar toda clase de puertos, establecer aduanas marítimas y fronterizas, y designar su ubicación.

XIV.- Conceder, conforme a las leyes, indultos a los reos sentenciados por delitos de competencia de 109 tribunales federales y a los sentenciados por qelitos del orden común, en el Distrito Federal y Territorios.

XV.- Conceder privilegios exclusivos por tiempo limitado, con arreglo a la ley respectiva, a los descubrimientos, inventores o perfeccionadores de algún ramo de la industria.

XVL- Cuando la Cámara de Senadores no esté, el presidente de la República podrá hacer provisionalmente los nombramientos de que hablan las fracciones I l l y IV, a reserva de someterlos a la aprobación de dicha Cámara cuando esté reunida.

XVII.- Nombrar magistrados del Tribunal Superior de Justicia y someter los nombramientos a la aprobación de la Cámara de Diputados o de la Comisión Permanente, en su caso.

70

" . . " .. . . .

Page 74: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

XIX.- Y las demás que le confiere expresamente esta Constit~ción"."~

Así es como se llega a la consolidación y nacimiento de una base jurídica constitucional para ejercer un autoritarismo disfrazado en un gobierno democrático representativo y popular en el México contemporáneo.

!

6

"' De la Madrid Hurtado, Miguel, "El Congreso Constituyente de 1916-1917" en: Santiago Ofiate, Los Derechos del Pueblo Mexicano. Mexico a Traves de sus Constituciones. Tomo 1 1 , M ~ x . , Porrua, 1978, pp.654- 668 (Constituci6n Política de los Estados Unidos Mexicanos 1917). (Reproducci6n Facsimilar). O p cit., Palavicini, pp. 680-685.

71

Page 75: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

. .. . . . . . . . .. .

CONCLUSIONES.

#

El presente trabajo muestra que la traición, el crimen y la violencia armada, son el uso necesario y requerido para asaltar el poder. Un poder presidencial que tiene el dominio de todo el Estado, de toda política, de la economía y de una sociedad pasiva que frente a un poder tan grande, recurre y reclama a su pasado, y encuentra que la única vía para contrarrestar ese poder es el uso de las armas.

Con esta idea entendemos a un Venustiano Carranza en la historia oficial, la cual nos muestra al héroe que logró derrotar al usurpador Victoriano Huerta, quien impulsado por la vieja oligarquía mexicana y como representante de los intereses extranjeros en México, se lanza a la aventura.de derrocar a un gobierno elegido democráticamente y es derrotado por la facción constitucionalista. Una facción constitucionalista que en su seno, lo Único que buscaba era adueñarse del poder, porque desde que se iniciaronn las platicas con el Presidente Victoriano Huerta (porque así se dirige Venustiano Carranza) y se espera con atención que en otros lugares de la República se levanten en armas para así poder decidir que rumbo tomar, si las negociaciones o la ruptura total contra el régimen usurpador. Este doble juego que se manifiesta desde el inicio de la lucha anti- huertista hasta la lucha entre constitucionalistas y convencionistas, donde Venustiano Carranza estaba buscando ser TRIUNFADOR UNICO DEL MOVIMIENTO ANTI- HUERTISTA; esta idea de tener la supremacía se ve plasmada en la Convención de México, cuando al termino de la entrega del cargo de Encargado del Poder Ejecutivo y Primer Jefe del Ejército Constitucionalista, por parte de Venustiano Carranza, en la junta convocada para Generales y Gobernadores de los Estados, recurre al nefasto y enredado recurso parlamentario, preparado y actuado por el Licenciado Luis Cabrera para no dejar acéfalo al movimiento revolucionario y culpar a los ausentes a esa junta, que se ve presionada, primero por la presencia de Venustiano Carranza, segundo por la necesidad de resolver con urgencia la entrega de un cargo político - militar y tercero no tener el tiempo necesario para deliberar, ya que el Primer Jefe esperaba una respuesta rápida y concreta, una decisión por demás apresurada que resulto ser, sin lugar a dudas, una burla al pueblo de México que derramó su sa!gre, pasó hambres y cansancio por respaldar ur;la idea de libertad y opresión que en un pnncipio se identificó con éI, pero en el fondo estaba lleno de envidias y pugnas por alcanzar el poder presidencial y logrando el objetivo, olvidar y pisotear a quienes respaldaron y apoyaron el movimiento cuando éste se encontraba sin más aspiraciones que el rotundo fracaso, pero su doble juego les permitió: por un lado lograr alcanzar sus intereses personales y por el otro mantener subyugado al pueblo de México.

Dentro de este marco de intereses personales podemos entender la idea que los constitucionalistas tenían de la Soberana Convención Revolucionaria de Aguascalientes " ... Esa Convención fue un fracaso, pues en ella, lejos de restar a Villa, como nosotros pretendíamos, la mayor parte de sus elementos, pusimos a éstos en condiciones difíciles de abandonarlo, porque Villa quedó investido de una aparente legalidad, y esto dio margen también a que muchos de los Jefes, que sin la Convención hubieran permanecido leales a la Primera Jefatura, defeccionaran y se incorporaran a Villa, aparentando sostener al Gobierno de la Convención, representado por el General Eulalio Gutiérrez, aunque la verdadera causa de esas defecciones era, por lo general, lo halagadora que se presentaba para esos elementos, la bandera de libertinaje que Villa tremolaba como

72 -. . .

Page 76: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

divisa de su partido".'20 En esta declaración lo Único que se vislumbra es el fracaso y la negativa de parte de los constitucionalistas de resolver los problemas revolucionarios con la participación de todos los grupos levantados en armas y que apoyaron al Plan de Guadalupe. Además como se puede ver Carranza y su grupo estaban buscando derrotar en el campo político a un Francisco Villa que se formo en el campo militar, también es claro que la lucha se centra única y definitivamente en contra del General Villa, claro esta que Emiliano Zapata no presentaba una fuerza tan grande como la del Jefe de la División del Norte, pero esto nos permite comprender que el grupo constitucionalista buscaba Única y exclusivamente sacar ventajas de su posición para lograr cumplir con sus intereses personales y no los colectivos como lo buscaba la Convención. Ahora, hablar de fracasos, como lo expresa Barragán, es hablar de un partidismo al Primer Jefe: "Por mi parte, voy a limitarme a hacer algunas consideraciones sobre los principales factores que en concepto mío, contribuyeron de manera directa al fracaso de la Convención. Primero. La insidia con que venían obrando los directores intelectuales de la División del Norte, en convivencia con la que hábilmente manejaban los directores intelectuales del zapatismo. Segundo. La falta del conocimiento del medio, por parte de nosotros. Tercero. La mala fe de Villa y de sus jefes, evidenciada al invadir con sus tropas la Ciudad de Aguascalientes que había sido declarada neutral por la Convención; y, en consecuencia, la presión que con ello empezaron a hacer sobre los Delegados; presión que llegó a ser brutal, registrándose casos en que fueron asaltados a mano armada, los Delegados que representaban a la Primera Jefatura por los que estaban de parte de la División del Norte. Cuarto. La mayor parte de los Generales Constitucionalistas, en lugar de concurrir personalmente a la Convención, mandaron representantes, aunque de honorabilidad reconocida, carecían de la personalidad y prestigio de sus representados. Y por último, la debilidad criminal del General Gutiérrez, al nombrar Jefe de Operaciones al General Villa, cediendo a la presión que éste ejerciera sobre é1".12'Puede ser verdad que a algunos delegados constitucionalistas pudieran haber sido objeto de asaltos, pero es mentira que se les presionara en las asambleas convocadas, prueba de ello, es la votación favorable y por amplio margen que se obtuvo con la destitución de Francisco Villa al mando de la División del Norte y que el mismo Villa acepto estando en Aguascalientes y no así el Primer Jefe Venustiano Carranza. Existen documentos en el Archivo General de la Nación, en el Fondo Convención Revolucionaría de Aguascalientes que demuestran todo lo contrario a una presión o represión por parte de la División del Norte hacia los delegados. Por otro lado Barragán habla de una debilidad de parte del General Gutiérrez al nombrar a Francisco Villa Jefe de Operaciones,, según los acuerdos de la convención el General Villa tal igual que todos los individuos que ostentaban un grado en la escala jerárquica militar de todas las divisiones de las que formaba parte el Ejército Constitucionalista, la División del Norte y el Ejército Libertador del Sur, serían incorporados y estarían bajo el mando del Ministerio de Guerra, entonces, si estaban bajo dominio del Ministerio de Guerra y el general Eulalio Gutiérrez como Presidente Interino de la República tenía todas las facultades para nombrar a quien mejor considerara, además quien mejor que Francisco Villa para ocupar el cargo, porque si bien, éI era la figura militar mas impresionante del momento, solo bastaba recordar las batallas de Torreón y Zacatecas, donde reafirmaba esa grandeza guerrera que Venustiano Carranza reconoce desde el inicio de la contienda militar en contra de Victoriano Huerta, razón por la que trata de restarle importancia a la figura de Villa y por ello se da el rompimiento entre la División del Norte y el Ejército Constitucionalista, en otras palabras, el rompimiento personal Carranza - Villa. Retrocedamos un poco y hagamos memoria, al hecho de que Venustiano Carranza y su grupo (Alvaro Obregón, A.I. Villarreal y otros) le retiraran su apoyo militar y político a Eulalio Gutiérrez, entonces, tenemos que la única forma y opción

BarragBn Tomo II, pp. 98. ' 2 ' ldem. , pp.98-99.

73

Page 77: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

cit., Medellin, pp. 64. O cit , La Soberana Convenci6n de Aaudscalientes 1914-1918, Instituto Cultural de Aguascalientes, pp. 130. km., pp.5980. 124"Fdictadura se hace patente cuando en lugar de pedir al propio pueblo la consideraci6n de la nueva constituci6n la pone en marcha declinando el derecho de referendo que todo pueblo tiene cuando se pone en marcha una constituci6n o proyecto de constituci6n' en m c i t . , Carpizo, pp.5474.

74

de sostener su gobierno emanado de la Convención de Aguascalientes era buscar la fuerza de la División del Norte y del Ejército Libertador del Sur.

Cuando Carranza, abandona la ciudad de México y se dirige a Puebla. Desde esta ciudad los generales Francisco Coss, Máximo Rojas, Alejo González y Pilar R. Sánchez, posiblemente asesorados por los cerebros de Carranza, dirigen un telegrama a la Convención en el que le participan varias resoluciones, siendo las tres primeras éstas:

"Primera. Residiendo en un país democrático como el nuestro, en donde la soberanía nacional reside original y esencialmente en el pueblo, declaramos que la llamada Convención Soberana de Aguascalientes ha usurpado esa soberanía".

"La Convención al declararse soberana. Liberó definitivamente al pensamiento revolucionario, rompió las ligaduras que la ataban con el antiguo orden y permitió por primera vez, que surgiera un nuevo orden del espíritu revolucionario, señalándose nuevos fines". "La Convención se declaró soberana. Rompió definitivamente todas las cadenas, se elevó a la categoría de soberana absoluta, nada ni nadie quedó encima de ella, fue el árbitro y el autor de su destino, de su estilo de vida y de su orden ético y jurídico. La Revolución, iniciada en 1910, alcanzó su más alto sentido, no volvió a reconocer ninguna autoridad superior, se convirtió en creadora de un orden jurídico y ético, en hacedora de su propia historia; puede decirse, por ello, que en cuanto a representatividad política la Convención fue un auténtico poder nacional sólo cuando estuvo en Aguascalientes . II 122

"Segunda. Declaramos que la llamada Convención de Aguascalientes no tiene otro carácter que el de una Junta Militar, convocada por el Primer Jefe del Ejército Constitucionalista para los efectos expresados en la convocatoria respectiva".

"Tercera. Declaramos que, estando todos los generales reunidos en la Junta de Aguascalientes, subordinados del Primer Jefe de[ Ejército Constitucionalistas, aquellos que saliéndose de las funciones que les están enminendadas pretenden desconocer a su superior, cometen el delito de rebelión que penan Severamente las leyes milita re^".'^^

t

Recordemos que estamos en un período donde el orden constitucional estaba roto y México se encontraba en un estado revolucionario donde las leyes militares dejaron de funcionar cuando 'el ejército federal fue disuelto por el Primer Jefe Constitucionalista y Encargado del Poder Ejecutivo en)los tratados de Teoloyucan. Además, la Convención celebrada en México tenia libertad de acción, porque estaba presidida por Carranza, hay que recordar que la Convención se trasladó a la Ciudad de Aguascalientes bajo la autorización del Primer Jefe y que declinó la invitación a esa asamblea. Ahora bien, se le desconoció no por sedición, ni por rebelión sino por su propia actitud de apropiarse del poder en México.

Con una dictadura disfrazada con el cargo de Encargado del Poder Ejecutivo.

Carranza ejerció el poder revolucionario desde el 26 de marzo de 191 3, fecha del Plan de Guadalupe, hasta el l /o. de mayo de 1917, en que reanudando el orden constitucional, dejó de ser el Primer Jefe de la Revolución para convertirse en el Presidente Constitucional de la República.'24 Según la Constitución Política de los

Page 78: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Estados Unidos Mexicanos en su artículo 78 "El presidente entrará á (sic) ejercer sus funciones el primero de Diciembre y durará en su encargo cuatro añ~s".'~~Como podemos ver Carranza a estado ejerciendo el Poder Ejecutivo cuatro años, pero si ha esto le sumamos su período Presidencial entonces tenemos como resultado que ejerció el Poder por más de ocho años consecutivos, imponiendo su ley. Para reafirmar la dictadura del Ejecutivo en la Constitución de 1917 se escribe:

"Al Ejecutivo se asignan atribuciones y facultades que lo hacen preponderante, para que sea capaz de llevar adelante la gran reforma social, sin los entraves que significa la dispersión del poder, la fragmentación de poder y porque la nueva Constitución es un instrumento de Federico Cervantes por su parte, expone su propio punto de vista: "La intransigencia de Carranza a dejar el poder y su rebeldía a las decisiones de la Convención; pero, sobre todo, el hecho de que muchos convencionistas faltando a su juramento, regresando a su lado, fue de grave trascendencia porque sirvió para establecer la preeminencia de un hombre sobre los ideales de democracia que tanto se preconizaban ... La Conveneón significaba un gran papo en el orden de los principios democráticos y habría sido el mejor medio de unifikación dentro de los ideales revolucionarios. De allí hubiera salido (como posteriormente salió) un programa de principios y reformas políticos sociales, y tras del gobierno provisional, habrían venido las elecciones generales que reivindicaran el régimen constitucional, como una nueva era de legitimidad, de paz legal y de realización y triunfo en la ideología revolucionaria. Con ello se habría reanudado la era democrática de don Francisco I. Madero. La Convención - se dice - "puso en claro los ideales de la gente de México", pero resulta que quienes tenían ideales no se ajustaban a la realidad del país en 1914-1 5, 1 los que triunfaron tenían como Único ideal la consagración de su única y real persona".' La Soberana Convención Revolucionaria de Aguascalientes busca constituir un 'l... Cuerpo que represente a toda la revolución y que fuera capaz de fijar metas en la reforma social. Constituir una autoridad revolucionaria superior, por encima de los distintos jefes. Una autoridad suprema cuyos mandatos sean intachables. Crear una entidad distinta de la primera jefatura a la cual someter a todos los caudillos. En suma, delegar en ellos la representación popular y asumir facultades soberanas".'28

Sobre el Congreso Constituyente Medina afirma " ... Que fue más acertada la revolución convocando un Congreso Constituyente que tenía por objeto: legalizar la obra revolucionaria, cortar toda disputa sobre el valor de las reformas, establecer los cuadros de la nueva organización política y social y asegurar permanentemente las conquistas hechas por el pueblo en aquella sangrienta lucha. La misma revolución se fundaba en los principios de la soberanía popular: "El pueblo tiene en todo tiempo el derecho de alterar o modificar la forma de su g~bierno".'~~Al igual que en 1856, cuando se suscitaron la guerra de tres años y las leyes de reforma, el país quedó en manos de un sólo grupo "los liberales" para 1916 los ganadores son los constitucionalistas que al mando de su jefe Venustiano Carranza formulan y crean la Constitución de 1917; porque es lógico lo que afirma Palavicini "programa que abierta y francamente formuló Carranza en sus adicciones al Plan de Guadalupe y en su Proyecto de Constitución de 1917 y que ampliaron y perfeccionaron los diputados constituyentes, en debates libres, fuera de toda presión gubernativa y cuya obra, una vez terminada, fue promulgada sin observaciones por el señor Carranza".130iCómo va hacer observaciones! A un "proyecto con 132 artículos

O cit Medina, pp. 8. "=.dit., Labastida, pp. 350.

cit , Medina, pp. 19-20. I 2 & k t : , Lomas, pp. 8-9, 15. 1280~ cit., Medellin, pp.57-58. l B 0 p cit., Medina, pp. 16. '%OD cit., Palavicini, pp. 52.

'

75

Page 79: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

y 9 transit~rios~~'~'que el mismo Carranza formulo y envio al Congreso Constituyente para ser deliberado, además todos lo que asistieron al Constituyente de 1916 eran partidarios de Venustiano Carranza, porque los que se oponían al carrancismo se mantenían en lucha permanente contra el régimen o exiliados en otros países. "...Al convocar a un nuevo congreso constituyente, bastaría la experiencia de veinte años en los que la carta de Querétaro ha estado en vigor, para confirmar lo atinado y recto de su pr~cedet".'~~Ha estado en vigor no por su grandeza sino por su flexibilidad en el Congreso de la Unión'33 que gira y se conforma por un sólo individuo que gobierna y dirige al partido político en el poder, que si bien es el de la mayoría, no es por su popularidad, más bien, por su propia autoridad," que le brinda el mismo encargado del Poder Ejecutivo. "Es indudable que si las circunstancias se los hubiera permitido y los elementos componentes tuvieran conciencia de su importancia, la asamblea se habría convertido en un. "poder constituyente. Posiblemente la Convención, es decir, sus miembros, hombres rudos e ¡letrados, que no conocieron las aulas de una universidad, ni pasaron por una escuela de Derecho, no saben lo que significa en el rigor de la doctrina jurídica el término Soberanía; pero sí saben a ciencia cierta lo que pretenden al declararse soberanos. Hacen recaer en ellos todo el poder popular y están dispuestos a ejercitar su derecho a decidir su destino; no reconocen ningún otro poder o autoridad por encima de ellos; no admiten limitaciones a su acción, ni más determinaciones que las que ellos mismos dictan para facilitar su función. Suben a la tribuna y hablan cuanto tiempo quieren, cuantas veces quieren, diciendo lo que piensan y en la forma en que lo piensan y lo pueden expresar, con una libertad incondicional. Nada hay que coarte esta libertad de expresión ni de pensamiento".'35 Lo que en la actualidad ya no se da, ahora se habla y se piensa en favor del interés personal, el del partido político y queda de lado el interés colectivo, subyugando con ello al pueblo de México.

"La Constitución de 1917 está en marcha a pesar de que se la desconoce y se la viola con frecuencia. Queda como un programa por realizar, como un supremo ideal que es digno de llevarse adelante. El Municipio libre, la soberanía de los Estados, la resurrección del Poder Legislativo hoy anulado y entorpecido, la efectividad del sufragio, la abolición de los monopolios, la responsabilidad de los funcionarios, la limitación de facultades al Ejecutivo y una administración fiscal pura y responsable, son todavía las mismas cosas porque debemos luchar los Constituyentes y los gobiernos, y que no han perdido actualidad desde que fueron formuladas por el Primer Jefe de la Revolución Constitucionalista en sus Refoyas al Plan de Guadalupe".'JG En mí opinión t e sigue gobernando con esas deficiencias, manteniendo continuidad y disfrazando un autoritarismo en gobiernos democráticos representativos. Con esta idea considero conveniente y necesario que para el nuevo milenio, se debe de conformar un nuevo Congreso Constituyente, con el fin de crear una Constitución que cubra las expectativas y el ideal del Estado Jurídico para alcanzar las aspiraciones sociales del pueblo de México.

131

132 OP cit., Medina, pp. 18. OP cit., Palavicini, pp.53.

13''EI Congreso libre es el que se da cuenta de su importante papel que estudia sus facultades, que se siente el primero de los poderes y se hace en seguida invasor, provocador y agresivo" en: Op cit., Serra, pp. 130. '%'La concentraci6n del poder en el Estado de Partido Único, permite que grupos sociales como: altos funcionarios del partido que frecuentemente forman parte del gobierno, los principales empleados de la burocracia del Estado, los altos militares, los grandes accionistas, los administradores de industrias, los importantes funcionarios sindicales, los titulares de altos cargos eclesiMicos, los zares de la prensa, se encuentran bajo el control y la coordinaci6n del partido de Estado" en: Zippelius, Reinhold, Teoria General del Estado. Ciencia de la Política., Héctor Fix-Fierro (trad.), Méx., Porrúa-UNAM, 1989, pp. 147-196. n50~ cit., Medellin, pp.66, 53. '=OP cit., Medina, pp. 21.

76

Page 80: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

FUENTES CONSULTADAS.

Archivos.

Archivo General de la Nación: Fondo Manuel González Ramírez. Fondo Soberana Convención Revolucionaria.

Periódicos: La Convención 1914-1 91 5.

Archivo del Centro de Estudios de Historia de México CONDUMEX. Fondo Colección Revolucionaria.

Archivo Sonoro de la Revolución Mexicana, INAH, Departamento de Investigaciones Históricas.

Archivo de Vito Alessio Robles, propiedad de la familia Alessio Robles. Memorias manuscritas por el autor (inéditas) Tomo 11.

Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional. Revolución Mexicana 191 0-1 920.

Gobierno Constitucionalista de Venustiano Carranza. Gobiernos y Ejércitos de la Convención.

Eulalio Gutiérrez. Roque González Garza. !

Alvaro Obregón. Francisco Villa. Emiliano Zapata. I

Aguascalientes. Estado de México. Distrito Federal.

Cancelados.

Por estados:

’ Morelos. t

Bibliografía.

Alessio Robles, Vito, La Convención Revolucionaria de Aauascalientes., Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1979.

Amaya C., Luis Fernando, La Soberana Convención Revolucionaria., Méx., Trillas, 1966.

Avila Espinosa, Felipe Arturo, El Pensamiento Económico, Político y Social de la Convención de Aauascalientes, Méx., 1986.

Barragán Rodriguez, Juan, Historia del Eiército y de la Revolución Constitucionalista. Tomo I y H., Méx., Instituto Nacidnal de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1985.

Page 81: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Barrera Fuentes, Florencio, Cronicas y Debates de las Sesiones de la Soberana Convención Revolucionaria. Tomo I, II y Ill., Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1964.

Calvert, Peter, La Revolución Mexicana 1910-1914., Méx., El Caballito, 1978.

Casasola, Gustavo, Historia GrAfica de la Revolución Mexicana Tomo II., Méx., Trillas, 1970, (Edición Conmemorativa).

Carpizo, Jorge, Estudios Constitucionales, Méx., Pomja-UNAM, 1994.

Cervantes, Federico et. al., La Convención Nacional Revolucionaria. Su Oriaen. Su Obra y Sus Fines., Méx., 1918.

Cockcroft, James D., Precursores Intelectuales de la Revolución Mexicana., Méx., ERA., 1980.

, 'I La Soberana Convención Revolucionaria. La Búsqueda de una Alternativa Política", en: Así fue la Revolución Mexicana, Tomo V., Méx., SEP, 1986.

Constitución Política de los Estado Unidos Mexicanos 1857. Méx., Ponua, 1980.

Constitución Política de los Estado Unidos Mexicanos 1917. Méx., Porrua, 1989.

Convención de AQuascalientes, (Cuaderno Conmemorativo No.45), Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1985.

Cosio Villegas, Daniel, La Constitución de 1857 Y Sus Críticos., Méx., 1957.

Cumberland, Charles C., La Revolución Mexicana. Los Años Constitucionalistas., Méx., FCE., 1972.

Díaz, Lilia, "El Liberalismo Militante", en: Daniel Cosio Villegas Coord., Historia General de México. Tomo II., Méx., COLMEX., 1981, pp.819-897.

Díaz Soto y Gama, Antonio, La Revolución Aararia del Sur Y su Caudillo Emiliano Zapata., Méx., Ed.Autor, 1961. t

Diccionario Universal de Términos Parlamentarios, Vol. l., Tomo I., Méx., 1997.

De la Madrid Hurtado, Miguel, "El Congreso Constituyente de 1916-1 917" en: Santiago Oñate, Los Derechos del Pueblo Mexicano. México a Través de sus Constituciones. Tomo II, Méx., Porrua, 1978, pp. 593-842 (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 191 7). (Reproducción Facsimilar).

Fabela, Isidro y Josefina E. De Fabela, fundadores, Documentos Históricos de la Revolución Mexicana. Vols.XXIII al XXVII, "Debates de la Soberana Convención Revolucionaria 1914-1916, Méx., Jus.1973.

González Ramírez, Manuel, La Revolución Social de México., Méx., FCE., 1974.

Guzmán, Martin Luis, Memorias de Pancho Villa., Méx., Cía. General de Ediciones, 1968. '

78

__ . . . . ,

Page 82: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Katz, Friedric, La Guerra Secreta en México. Tomo I y II., Méx., Era.1982.

Labastida, Horacio, "Las Luchas Ideológicas en el siglo XIX y la Constitución de 1857" en: Santiago Oñate, Los Derechos del Pueblo Mexicano, México a Través de sus Constituciones. Tomo II, Méx., Poma, 1978, pp. 199-398 (Constitucih Política de los Estados Unidos Mexicanos 1857). (Reproducción Facsimilar).

La Soberana Convención de Aguascalientes 1914-1918, Instituto Cultural de Aguascalientes, Méx., 1989.

Leander de Bekker, Jean, De Como Vino Huerta y Cómo se Fue ... Apuntes para la Historia de un Régimen Militar., Méx., Ediciones "El Caballito", 1978.

: Le Goff, Jacques, "Progreso / Reacción", en: Jacques Le Goff, Pensar la Historia. Modernidad, Presente, Progreso., Barcelona, Paisdós, 1991 , pp.195-233.

i Lomas Maldonado, Arturo, "¿Qué Representa La Soberana Convención Revolucionaria en los años 1914-1915". Méx., UAM, 1998.

Medina, Hiiario, Diario de los Debates del Congreso Constituyente 1916-1917. Tomo I y II., Méx., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1985.

Medellin M., José de Jesús, Las Ideas AQrarias en la Convención de Aguascalientes., Méx., CEHAM., 1986.

Memorias de la Secretaría de Guerra y Marina del Período Revolucionario, Méx. S.D.N., 1997.

Meyer, Lorenzo, "El Primer Tramo del Camino"., en: Daniel Cosio Villegas Coord., Historia General de México. Tomo II., Méx., COLMEX., 1981, pp.1183-1272.

Meyer, Michel C., Huerta un Retrato Político., Méx., Domes, 1983.

Nuestra Constitución, Historia de la libertad y soberanía del pueblo Mexicano, Constitución Federal Mexicana de 1857, (Cuadernillo NO.^), Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1990.

Nuestra Constitución, Historia de la libertad y soberanía del pueblo Mexicano, Introducción, antecedentes y explicación general de la constitución de 1917, (Cuadernillo No.?), Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, 1990.

t 6 t

Obregón, Alvaro., Ocho Mil Kilómetros en Campaña., Méx., FCE., 1960.

Quirk, Robert E., La Revolución Mexicana. La Convención de Aguascalientes 1914-191 5 , Méx., Editorial Azteca, 1960.

Palavicini, Felix F., Historia de la Constitución de 1917. Tomo I y II., Méx., Gob.Edo.Tabasco, 1980.

Reyes Heroles, Federico, "De la Junta a la Soberana Convención", en: Así fue la Revolución Mexicana. Tomo V., Méx., SEP, 1986.

79

.. . " ""

Page 83: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

, El Estado Social de Derecho. Algunos Orígenes: La Convención de Aauascalientes, mecanografiado.

, La Convención de Aauascalientes (derrota o crisol de las fuerzas revolucionarias), mecanografiado.

Rojas, Basilio, La Soberana Convención de Aauascalientes, Méx., Comaval., 1961.

Roman, Richard, ldeoloaía v Clase en la Revolución Mexicana. La Convención v el Congreso Constituyente., Méx., SEP., 1976, (SepSetentas 31 1).

Rudé, George, "Ideología y Conciencia de Clase" y "La Ideología de la Protesta Popular", en: George Rude Revuelta Popular v Conciencia de Clase., Barcelona, Crítica, 1981, 15- 48.

Salinas de Gortari, Carlos, La Convenci6n de Acluascalientes., Méx., Gob.Edo.Ags., 1989 (Folleto).

Sánchez Lamego, Miguel A., Historia Militar de la Revolución en la época de la Convención., Méx., Instituto Nacional de Estudios Histdricos de la Revolución Mexicana, 1983.

Sayes Helu, Jorge, Significación Histórico - Política de la Cámara de Diputados de la XXVl Legislatura Federal., Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, Méx. , 1979.

Schlarman, Joseph H.L., México Tierra de Volcanes. De Hemán Cortés a Miguel Alemán., Carlos de María y Campos (trad.), Méx., Poma, 1955. 1

!

Serra Rojas, Andres, Pensamiento Político: Antología., Méx., Poma, 1988.

Silva Herzog, Jesús, Breve Historia de la Revolución Mexickna., Méx., FCE., 1973.

Thompson, E.P., Costumbres en Común., Barcelona, Crítica, 1995.

Ulloa, Berta, Historia de la Revolución Mexicana., Méx., COLMEX., 1979, (Volumén 4, 5 y 6).

, "La Lucha Armada (1 91 1-1920)", en: Daniel Cosio Villegas Coord., Historia General de México. Tomo II., Méx., COLMEX., 1981, pp.1073-1183.

Vasconselos, José, La Tormenta., Méx., JUS., 1978.

William Taylor, "La Rebelión", en: William B. Taylor, Embriaauez. Homicidio Y Rebelión en las Poblaciones Coloniales Mexicanas., Méx., FCE., 1987, pp.172-223.

Womack, Jhon Jr., Zapata Y la Revolución Mexicana., Méx., S.XXI, 1969.

Zippelius, Reinhold, Teoría General del Estado. Ciencia de la Política., Héctor Fix-Fierro (trad.), Méx., Porrúa-UNAM, 1989.

80

Page 84: UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA …148.206.53.84/tesiuami/UAM0121.pdf · EL REGIMEN HUERTISTA. CAPITULO II EL MOVIMIENTO ANTI - HUERTISTA. INDICE. 2-6. 7-1 3. 1430. CAPITULO 111

Revistas.

Unzueta, Gerardo, "La Soberana Convención Revolucionaria y la Lucha por la Democracia en México", Boletín del CEMOS., Vol. I , No.2, junio-julio de 1983.

Audiovisuales.

Convención de Aguascalientes, Méx., Canal 6 de julio 1994.

i

81 " . .