un problema de malos olores tras una...

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Un problema de malosolores tras una reforma

Una asegurada de ARAG realizó unas obras de

reforma en su domicilio.

Una vez terminadas, constató un problema de

malos olores en el baño que antes de la actua-

ción de la constructora no existían.

Se puso en contacto con ARAG para que la ase-

soraran porque no sabía qué hacer.

La compañía envió a uno de sus peritos para

que determinara el origen del problema.

El informe pericial sostenía que la empresa con-

tratada no había habilitado una fosa séptica y

que ésta era la causa de los malos olores en el

nuevo baño.

La solución de esta situación tenía un coste de

1.468,90 € que la asegurada de ARAG no estaba

dispuesta a pagar.

El comercio asume los dañospor la caída de un mueble

Un asegurado de ARAG compró un mueble pa-

ra el salón de su casa en un establecimiento es-

pecializado. El precio también incluía la

instalación de los distintos módulos que com-

ponían el conjunto.

Dos años más tarde de la adquisición, la parte

superior cedió y cayó sobre la parte inferior del

mueble. Además de los daños en la pared y en

el mobiliario, también se rompió la cristalería

que contenía el modulo superior.

Se asignó un abogado al caso y presentó una

carta de reclamación a la constructora por

mala ejecución de la instalación de fontane-

ría del cuarto de baño e inexistencia de un re-

gistro para la fosa séptica.

El letrado de la empresa se puso en contacto

con el de ARAG y le indicó que su cliente le

había explicado que instaló una válvula en el

plato de ducha para evitar malos olores y que

la fosa séptica existía aunque estaba cubierta

de tierra.

Sorprendidos por la explicación, en ARAG

decidieron realizar unas catas para comprobar

que era cierto, porque esta tesis contradecía la

de su perito.

Pero no fue necesario hacer nada más, a los

pocos días el abogado recibía una oferta de la

constructora. Estaban dispuestos a solucionar

el problema de malos olores en el baño de la

asegurada sin cobrar nada por la interven-

ción.

La cliente de ARAG aceptó y en pocos días pu-

do disfrutar de unas reformas en condiciones.

Caso Nº SJ 000 923217

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El cliente de ARAG se puso en contacto con el

comercio en el que adquirió el mueble y tras re-

latar lo sucedido, le ofrecieron la siguiente solu-

ción: le volvían a instalar el módulo superior y le

cambiaban la encimera del módulo inferior.

Sin embargo, no se hacían cargo ni de la crista-

lería rota ni del mal estado en que había que-

dado la pared tras la caída del mueble.

Consideraban que el responsable del despren-

dimiento era el fabricante o el instalador.

Pero éstos, a su vez, echaban la culpa al esta-

blecimiento comercial. En definitiva, nadie se

hacía cargo de la situación.

Como disponía de una póliza de Defensa Jurí-

dica Familiar, el asegurado cursó un parte a

ARAG para que el servicio jurídico de tramita-

ción reclamara la indemnización correspon-

diente a los desperfectos causados por la caída

del mueble.

Una bicicleta dañadadespués de un viaje a Rusia

Un asegurado de ARAG viajó a Rusia en avión.

Además del equipaje, llevaba una bicicleta.

Al llegar al destino, se dio cuenta que la bici-

cleta no había llegado. Tardó tres días en lle-

gar al aeropuerto ruso. La funda en la que la

transportaba estaba abierta y faltaban algu-

nas piezas de la bicicleta.

Al regresar a su casa, cursó un parte a ARAG pa-

ra que reclamara a la compañía aérea una in-

demnización por el retraso del equipaje y por

los daños causados.

El Servicio Jurídico de Tramitación de ARAG soli-

citó al cliente documentación para poder de-

mostrar ante la aerolínea los perjuicios.

El asegurado facilitó la factura de la bicicleta y

un presupuesto de la reparación. También apor-

tó la queja presentada en el aeropuerto de des-

tino, que estaba en ruso.

ARAG envió a uno de sus peritos para que

determinara el alcance de los daños y así po-

der cuantificar la indemnización correspon-

diente.

Se trasladó el informe pericial al estableci-

miento y se solicitó una indemnización que

también incluía los desperfectos en la pared y

en la cristalería. Pero el comercio no aceptó.

De modo que los abogados de ARAG presen-

taron una demanda en la que se solicitaba la

sustitución de los muebles o bien el precio de

adquisición de los mismos (1.985,50 euros) y

además una indemnización de 576,99 euros

por los daños causados.

Se celebró el juicio y finalmente condenaron

al establecimiento no sólo a reemplazar el

mobiliario, sino también a asumir los desper-

fectos provocados por la caída del módulo su-

perior.

Caso Nº MJ 000 879572

ARAG solicitó una traducción jurada del do-

cumento y presentó una reclamación ante la

compañía aérea en la que solicitaba una in-

demnización para el viajero de 1.215,00 .

Tras examinar toda la documentación aporta-

da por ARAG, la aerolínea aceptó indemnizar

al asegurado por la cantidad reclamada.

Caso Nº SJ 000 840216

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Daños morales porel retraso de un vuelo

Un asegurado de ARAG tenía que viajar de Bil-

bao a Madrid y de Madrid a Jerez de la Frontera,

ida y vuelta.

A la ida, el vuelo se retrasó una hora y diez

minutos de Bilbao a Madrid y una hora y me-

dia de Madrid a Jerez de la Frontera.

Al regresar también su-

frió retrasos en ambos

vuelos.

Como disponía

de un seguro de

Defensa Jurídica Familiar con ARAG decidió in-

terponer una demanda contra la aerolínea por

incumplimiento de contrato.

Cursó un parte a la compañía y se le asignó un

abogado especialista en la materia.

Modificación de unseguro sin previo aviso

Nuestro asegurado, médico pediatra de pro-

fesión, era mutualista desde 1980 en una en-

tidad de previsión social. Tenía contratadas

las coberturas básicas de defunción, jubila-

ción, incapacidad, nupcialidad y natalidad.

En 1986 amplió las prestaciones que tenía

contratadas y la mutua se obligó a abonar al

médico un subsidio económico mensual de

algo más de 100 € (18.000 pesetas de la épo-

ca), en caso de enfermedad o incapacidad.

Años más tarde, a finales de 1999, una enfer-

medad le obligó a causar baja laboral duran-

te 16 meses. Por lo que el mutualista

entendía que le correspondía una indemni-

zación de 1.730 €.

Sin embargo, cuando fue a reclamar a la mu-

tua su indemnización, le informaron que des-

de el año 1995, su seguro de enfermedad e

invalidez se había extinguido y que por tanto

no tenía derecho a percibir tal cantidad.

La entidad se amparaba en un acuerdo adop-

tado por la asamblea en 1990. En esa sesión,

se aprobó extinguir el seguro de enfermedad

e invalidez a todos los mutualistas, ofrecién-

doles la posibilidad de contratar un nuevo

seguro al vencimiento de las pólizas que tu-

vieran contratadas.

Como disponía de un seguro de Defensa Ju-

rídica Familiar con ARAG, el médico nos cur-

só un parte para que defendiéramos sus

intereses ante la mutualidad que había deci-

dido, unilateralmente, modificar su póliza de

salud.

Se interpuso una demanda ante la compañía

aérea reclamando 650 euros por los daños

morales causados al asegurado de ARAG

por los retrasos en los cuatro vuelos.

Se celebró el juicio y el juez estimó la de-

manda, condenando a la aerolínea a indem-

nizar al viajero por los daños morales

sufridos.

Caso Nº SJ 000 833965

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Siete años esperando unadevolución, que ARAG

consiguió en un mes

Un asegurado de ARAG compró una vivienda de

protección oficial en el año 1998.

Poco tiempo después, el asegurado pudo adqui-

rir otra vivienda de libre renta y, por tanto, debía

devolver la primera al Ayuntamiento que había

promovido el inmueble.

Por este motivo, tuvo que depositar en la adminis-

tración promotora 300,00 euros como provisión de

fondos para la posterior cancelación del préstamo.

Una vez descontados los gastos de notaría y del

registro de la vivienda, el Ayuntamiento debía

rembolsar al asegurado 189,69 euros.

Pasaban los años y pese a su insistencia, no le de-

volvían el dinero. A finales del año 2005 se com-

prometieron a reembolsarle los 189,69 euros “en

breve”.

Hasta que el pasado mes de octubre decidió no

esperar más. A pesar de que la cantidad no era

muy elevada, puso el asunto en manos de los

abogados de ARAG ya que tenía contratado un

seguro de Defensa Jurídica Familiar.

Tras intentar solucionar el asunto amisto-

samente sin éxito, nuestra asesoría jurídi-

ca consideró la posibilidad de demandar a

la mutua. Nuestro cliente estaba dispues-

to a llegar hasta el final.

Se celebró el juicio y la sentencia condenó

a la entidad a indemnizar a nuestro asegu-

rado con 1.723 euros correspondientes a

los 16 meses de subsidio por enfermedad.

El juez consideró “inaceptable” que la mu-

tua considerara extinguidas las coberturas

de enfermedad e invalidez en virtud del

acuerdo asambleario de 1990, ya que en la

misma sesión también se acordó “anunciar

anticipadamente a cada asegurado la extin-

ción del seguro de enfermedad e invalidez”.

Aunque la entidad alegó que el acuerdo se

había publicado en la revista institucional,

el juez consideró que el anuncio no era

“suficiente” para dar por extinguido el se-

guro y que por tanto, nuestro asegurado,

tenía derecho a percibir la indemnización

por enfermedad.

Caso Nº CX 000 172931

ARAG contactó con el área del Ayuntamien-

to que debía efectuar la devolución para ave-

riguar por qué no se ingresaba al asegurado.

Justificaron el retraso alegando que se había

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Un hotel de cuatro estrellas,sin aire acondicionado en el

mes de julio

Un asegurado de ARAG se hospedaba en un ho-

tel de cuatro estrellas a finales del mes de julio

del año pasado.

Una vez instalado en la habitación que le ha-

bían asignado, descubrió que no funcionaba

el sistema de aire acondicionado.

Se puso en contacto con el servicio de habi-

taciones y le indicaron que no podían solu-

cionar la avería durante su estancia.

El cliente solicitó un cambio de habitación y

tampoco accedieron.

Al regresar del hotel, decidió cursar un parte

a ARAG para que defendieran sus intereses

como consumidor.

extraviado su expediente y que si presentaba

de nuevo la documentación le pagarían in-

mediatamente.

De modo que se solicitó al asegurado que

aportara la documentación de la adjudica-

ción de la vivienda de protección oficial, así

como todos aquellos documentos que reforza-

ran su reclamación.

En un mes escaso, se presentó un escrito al

Ayuntamiento aportando de nuevo la docu-

mentación y reclamando la devolución de la

cantidad adeudada.

A los pocos días, el asegurado recibía los

189,69 euros que le debían desde hacía ya

siete años.

Caso Nº VI 001030711

El Servicio Jurídico de Tramitación de

ARAG envió un telegrama a la dirección

del hotel solicitando una indemnización

por los perjuicios causados al asegurado.

El director del establecimiento se puso en

contacto con los abogados de ARAG dis-

puesto a alcanzar un acuerdo.

En un principio el asegurado deseaba que

le reembolsaran los gastos de pernoctación

en el hotel de cuatro estrellas.

Se trasladó la petición al director del esta-

blecimiento, que decidió ofrecer otra salida

al cliente: un día de alojamiento en sus

instalaciones a cuenta del hotel.

Finalmente y tras deliberarlo, el asegura-

do aceptó el acuerdo y pudo disfrutar de

una pernoctación por cortesía del estable-

cimiento gracias a la negociación de

ARAG.

Caso Nº SJ 001006445

CASO Nº VX00430432

Seguro de Defensa Jurídica del Automovilista

O más bien un peatón conmucha suerte.

Circulaba nuestro aseguradopor una calle de Valencia,cuando de forma improvista unpeatón se le echó encima delvehículo.

A consecuencia del atropelloel peatón resultó lesionado, yaque salió despedido, cayendosobre otro coche que estabaaparcado.

El vehículo de nuestro asegu-rado también resulto dañado,ascendiendo la reparación a1.228 euros.

Un peatón temerarioSegún testigos presenciales, tal

como recoge el atestado de laguardia urbana, el accidente seprodujo cuando el peatón se bajóde un autobús y cruzó por detrásde éste sin respetar la fase roja delsemáforo.

Nuestro asegurado quiere quereclamemos el importe de la repa-ración de su coche al peatón, ver-dadero causante del accidente.

El caso no se presentaba fácil,primero porque el peatón era unapersona de 70 años que tambiénpretendía reclamar sus lesiones.Por otro lado tampoco habíamucha certeza sobre su solvencia.

Presentamos la demanda judi-cial y el juez estima todas nues-tras pretensiones y condena alpeatón a que indemnice a nues-tro cliente con el 100 % de lacantidad reclamada, intereses ycostas.

El peatón apela la sentencia,pero en segunda instancia el tri-bunal confirma íntegramente laanterior resolución, volviéndolea condenar al pago de las costasde esta instancia.

Nuestro asegurado sufrió unatraco en plena calle.

Entre los objetos que le robaronhabía un reloj “Cartier” valoradoen más de 2.500 euros.

Se da la circunstancia de quenuestro cliente tiene una póliza deseguro que garantiza el robo fuerade la vivienda hasta un máximode 3.006 euros.

Da parte a su aseguradora, alobjeto de que le reintegren elimporte del reloj, pero ante su sor-presa la compañía rechaza el pagoalegando que dicho reloj tiene lacategoría de “bien especial” y queal no detallarlo en las cláusulasparticulares de la póliza quedafuera de cobertura.

“Un bien especial”

La aseguradora sólo está dis-puesta a pagarle 328 euros por elresto de objetos que le robaron.

Afortunadamente nuestro clien-te contaba con un Seguro deDefensa Jurídica Familiar con

CASO Nº SJ00442609

Seguro de Defensa Jurídica Familiar

ARAG, por lo que sin más pre-ámbulos nos dio parte para quereclamáramos el importe de sureloj.

Nuestra asesoría jurídicaentiende que es factible la recla-mación judicial y presentamosla correspondiente demandareclamando el importe del reloj,2.542,37 euros, más 328 eurosdel resto de los objetos sustraí-dos.

Se celebra juicio y el tribunalnos da la razón condenando a laaseguradora al pago del 100%de la cantidad reclamada,2.870,37 euros, más los intereseslegales así como las costas delprocedimiento.

L A RL A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G

Roger de Flor, 16 - Teléfono 93 309 24 12 - Fax 93 485 57 46 - 08018 Barcelona e-mail: [email protected] - http://www.arag.es

Mod. 16001 (0904)

Nuestro asegurado nos infor-ma que se ha caído el techo de lacocina causando desperfectos enel mobiliario y resulta imposibleacceder desde ésta al cuarto debaño.

Nuestro cliente es arrendatariode la vivienda y ruega que nospongamos en contacto con lapropietaria a fin de que arreglela finca y le indemnice por losdesperfectos de sus muebles.

En primer lugar, enviamos a unperito al objeto de que evalúe elimporte de los daños, en suinforme confirma el desplome ycaída del falso techo de escayola

y cañizo de la planta superior.Además recomienda el abando-no de la vivienda al estar ésta enpésimo estado.

Nos ponemos en contacto conla propietaria, la cual nos indicaque debemos reclamar a su com-pañía aseguradora.

Efectivamente, la aseguradoratiene antecedentes del siniestropero entiende que los daños soncausa del pésimo mantenimientodel inmueble y no asume res-ponsabilidad alguna.

Solicitamos a nuestro asegura-do las facturas que se han de

reclamar a fin de presentar laoportuna demanda judicial.

Al no haber solución con la pro-pietaria de la vivienda, presenta-mos la correspondiente deman-da, tanto por los daños sufridoscomo por los perjuicios, y el tri-bunal acepta todas nuestras pre-tensiones condenándola al pagode 12.120 euros, cantidad quesatisface plenamente a nuestroasegurado.

Esta casa es una ruina

CASO Nº PX00560029


Nuestro asegurado se compra unordenador portátil y desde el pri-mer día no le da más que proble-mas.

Es la tercera vez que ha tenidoque mandarlo al Servicio Técnico ycomo ve que no le solucionan losproblemas solicita que le den unnuevo ordenador o le reintegren elprecio que pagó por él.

Nuestro cliente nos da parte einforma que envió el ordenador alServicio Técnico, que se lo teníanque haber devuelto hace 15 días ypese a que ha reclamado varias

CASO Nº SJ 000662904


Un portátil con problemasveces su devolución sólo le danlargas.

Enviamos un telegrama recla-mando la devolución del ordena-dor debidamente reparado o bienuno nuevo, dando un plazo deuna semana para evitar el trámitejudicial.

A los pocos días nos llama nues-tro asegurado autorizando elarchivo del expediente. El ServicioTécnico le ha devuelto el portátilreparado y además le ha regaladoun accesorio, en concreto unaconexión sin cable.

Agradece nuestra intervención eindica que hemos conseguido noso-tros más con un telegrama que élllamando por teléfono constante-mente durante tres meses.

CASO Nº SJ000517487


Nuestro cliente nos indica queparte del techo de su cocina se havenido abajo.

Se da la circunstancia que elvecino del piso superior hizoreformas en su cocina y a conse-cuencia de ello parte del techo seha desplomado.

Nos indica que su vecino noquiere hacerse cargo de los dañosque le ha producido.

Pasamos nota a nuestro perito,para que tase los daños del techode la cocina de nuestro cliente, así

Un agujero en el techocomo las posibles causas y nosinforma que ha sido imposiblecontactar con el vecino del pisosuperior por encontrarse la casacerrada, pero ante la observaciónde los daños la causa más proba-ble es la realización de las obrasen el piso superior.

Nos ponemos en contacto con eladministrador de la finca al objetode que nos facilite datos del pro-pietario del piso donde se realiza-ron las obras.

Tras conseguir el número delmóvil, nos ponemos en contacto

con el vecino y le explicamos loacontecido, nos informa que él espintor y que no tiene inconve-niente alguno en pasar por el pisode nuestro asegurado y arreglar ypintar el techo de su cocina.

A los pocos días nos llama nues-tro asegurado y nos indica quepodemos archivar el caso y que sucocina ha quedado en perfectoestado.

Que los ayuntamientos han develar por la limpieza de las calleses evidente ya que si no lo hacenpueden acontecer hechos como elque le sucedió a nuestro asegura-do.

Nuestro cliente, de 73 años deedad, caminaba por una calle deMadrid cuando a causa de la grancantidad de papeles y hojas quehabía en la calzada resbaló y cayóal suelo.

A la vista de la imposibilidad delevantarse, las personas que leatendieron se vieron obligadas allamar al SAMUR y trasladarlo alhospital, donde le diagnosticaronfractura de cadera y fémur.

Acudió la policía municipal ylevantó atestado haciendo constarla suciedad existente en dicha vía

Un resbalón en la calle

y dando aviso al servicio de lim-pieza del propio ayuntamientopara que limpiara la calle.

Era imprescindible conocer elalcance de las lesiones y posiblessecuelas de nuestro cliente, paraello pasamos nota a nuestro servi-cio médico EMA (EvaluaciónMédica de Accidentados), para

CASO Nº DCM37013602


que visitara a nuestro cliente einformara de los posibles días debaja así como las secuelas.

Nuestra asesoría presentó laoportuna reclamación administra-tiva al Ayuntamiento.

A la vista del silencio ante nues-tra reclamación entendimos quese había desestimado la misma yempezamos los trámites para elcontencioso administrativo.

Pese al gran retraso por partedel juzgado, al final se celebra jui-cio y el tribunal acepta las preten-siones de nuestro asegurado ycondena al Ayuntamiento a que leindemnice en 8.582 euros por laslesiones y secuelas sufridas máslos intereses legales desde la fechade la reclamación.

CASO Nº TX000369324


Nuestro cliente circulaba con suciclomotor por una calle de SantBoi (Barcelona), cuando un tu-rismo al invadir la calzada lecolisiona.

A consecuencia del choque nues-tro asegurado cae del ciclomotory sufre importantes lesiones.

La correcta valoración de lesiones y secuelas Sus familiares nos dan el parte ynos informan del hospital dondeestá ingresado el conductor.

A dicho centro se desplaza unmédico de EMA (EvaluaciónMédica de Accidentados) que ensu informe hace constar las gra-ves lesiones sufridas por nues-tro cliente.

Por nuestra parte, informamos anuestro asegurado que dichomédico seguirá visitándole alefecto de comprobar la evolu-ción de sus lesiones y el alcancede las secuelas.

Por otro lado solicitamos infor-me de la policía que actuó en ellugar de los hechos, donde

pudimos comprobar que laculpa del accidente recaía en elconductor del turismo.

Con carácter preventivo y al ob-jeto de que no se cumpliera elplazo que marca la ley, presenta-mos una denuncia en el juzgado.

Más de dos años tuvieron quetranscurrir hasta que nuestroasegurado fue dado definitiva-mente de alta y gracias alexhaustivo informe pericial delas lesiones y secuelas, la ase-guradora del turismo pasa unaoferta global de 222.375 euros,cantidad que se ajusta plena-mente a la tasación efectuadapor nuestros expertos.

Contar con un Seguro deDefensa Jurídica Familiar nospuede sacar de más de un pro-blema.

El piso de nuestra aseguradasufría humedades a consecuen-cia del mal estado del tejado deledificio.

La Comunidad de Propietariosacordó, en una Junta Extraor-dinaria, reparar el tejado y evi-tar así que se reprodujerandichas humedades.

Si bien el tejado está reparado,la Comunidad hace oídos sor-dos a la reclamación de nuestra

Problemas con la Comunidad asegurada de que reparen losdaños sufridos en el interior desu vivienda.

Nos cursa parte y enviamos unperito al objeto de que cuantifi-que económicamente los dañossituados en el techo y dos para-mentos verticales de una habi-tación.

Valorados los daños, estos as-cienden a 370 euros.

Nuestra asegurada nos facilitalos datos del vecino que asumela presidencia de la Comunidad,al cual remitimos una cartareclamando el importe de los

CASO Nº MJ000713704


daños causados e informandode que si no recibimos contesta-ción, en un plazo de diez días,entenderemos que no interesaun arreglo por la vía amistosa.

A los pocos días, recibimos un

telegrama del Presidente de la

Comunidad indicando que

podemos archivar el expediente,

ya que han pasado nota a una

empresa de reformas para que

arregle los daños del piso de

nuestra asegurada.

En menos de un mes, caso solu-

cionado.

CASO Nº SJ00059855


Atropellada en la vía pública

La esposa de nuestro aseguradocruzaba una calle de Avila cuan-do el conductor de un turismo nose percató de su presencia y laatropelló.

Nos facilita parte a fin de quereclamemos el importe de laslesiones sufridas por su esposa.

En estos temas es fundamentalrealizar una correcta valoración

del daño corporal, de ahí queARAG cuenta con un servicio de“Evaluación Médica deAccidentados” (EMA) formadopor un equipo de médicos espe-cializados concretamente en laevaluación, tanto de las lesionescomo de las secuelas que unapersona pueda tener derivadasde un accidente de circulación.

Tras visitar personalmente a laasegurada y tras seguir la evolu-ción de las lesiones, nuestromédico nos adjunta un informedetallando el alcance de las mis-mas, posibles días de baja asícomo las secuelas, en total la

cuantía a reclamar superaba los42.000 euros.

A fin de evitar que se cumplierael plazo que la ley otorga, presen-tamos la oportuna denuncia en eljuzgado y paralelamente recla-mamos este importe a la asegura-dora del vehículo contrario.

El informe de nuestro médico nodaba lugar a dudas de ahí que nofue necesario esperar a juicio. Laaseguradora, a la vista de ladocumentación presentada, pasauna oferta del 100% de la canti-dad reclamada, en total la esposade nuestro asegurado ha cobrado42.713 euros.

Nuestro asegurado tenía contra-tada una póliza de “vida-indivi-dual” que, entre otras prestacio-nes, le garantizaba la invalidezabsoluta y permanente.

La póliza la contrató en 1993 y elimporte de la prestación era de4.000.000 de pesetas (hoy unos24.040,48 euros).

En enero de 2003 a nuestro clien-te la Seguridad Social le declaróuna incapacidad permanente engrado de absoluta para todo tipode trabajo.

Al querer hacer efectiva la presta-ción que tenía a través de la póli-za de vida se encuentra que laaseguradora rechaza el pago dela prestación, alegando que en el

¿Preexistencias?momento de contratar el seguroél ya era conocedor de que teníauna enfermedad y no la declaróen el cuestionario.

Al tener con ARAG un seguro deDefensa Jurídica Familiar, nues-tro cliente nos cursa parte, yaque no está de acuerdo con suaseguradora y quiere que recla-memos los 24.040 euros por suinvalidez absoluta.

En primer lugar, solicitamos anuestro asegurado que nos apor-tara la póliza de vida que teníacontratada, a fin de que nuestraasesoría jurídica pudiera dicta-minar si era factible la reclama-ción judicial.

A la vista de la documentación

CASO Nº ZX000474231


presentada, vimos que la recla-mación judicial era viable por loque procedimos a presentar unademanda por incumplimiento decontrato.

Se celebra juicio y en primera ins-tancia el juez desestima nuestrademanda, absolviendo a la ase-guradora adversa y condenándo-nos al pago de las costas.

Pese a ello, entendemos que esfactible continuar y apelamos lasentencia.

Se celebra la vista de apelación yel tribunal revoca en su totalidadla anterior sentencia y condena ala aseguradora a pagar a nuestrocliente el 100% de la cantidadgarantizada, los 24.040 euros.

L A RL A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G


Mod. 16001 (1104)

Cada vez es más difícil podercaminar por nuestras ciudades.Coches que salen de los parkings,motos aparcadas encima de laacera, bicicletas que sortean a lospeatones y también obras sin nin-gún tipo de señalización.Nuestra asegurada caminaba poruna calle de Jaén cuando al pasarpor una zona que estaba en obrasse le vino encima una valla queestaba mal anclada.Al intentar parar el golpe sufrióuna lesión en el dedo pulgar desu mano derecha.Se trataba de averiguar el alcancede la lesión, para ello pasamosantecedentes a nuestro médico deEMA, el cual nos informa que

nuestra asegurada sufre unalesión en el carpo derecho lo quele provoca una tendinitis, queademás de dolor le produce unapérdida de fuerza. Evalúa unos35 días de baja y una secuela de3 puntos.Conocidas las lesiones se tratabade saber qué empresa era la queestaba realizando las obras yhabía puesto la valla.Efectuadas las oportunas pes-quisas, obtuvimos los datos dela empresa la cual no tenía cons-tancia de lo ocurrido pero nosinformó que pasaba parte a suaseguradora.Por su parte nuestra cliente nos

indica que sólo vieron el acciden-te los trabajadores de la obra yduda que quieran testificar a sufavor.Nuestra asesoría jurídica entien-de que sin testigos es difícil queprospere la reclamación judicial,pero decide presentar unademanda reclamando los 20.395euros por las lesiones y secuelasde nuestra cliente.Se celebra juicio y pese a que laaseguradora adversa se opone ala demanda el juez dicta senten-cia condenando a ésta a pagar el100% de la cantidad reclamadamás los intereses legales.Al final, nuestra cliente cobra27.954 euros.

Una obra mal señalizada

CASO Nº SJ00081439


Nuestro asegurado se compró unaparato reproductor de DVD porun importe de 119 euros y aún nohabía pasado un mes cuando se leestropea.

Lleva el aparato a la tiendadonde lo compró y le indican queno se preocupe que se lo arregla-rán sin coste ya que está engarantía.

En principio todo correcto si noes porque ya han pasado cuatromeses y el aparato aún no se lohan devuelto reparado.



Al final, le devuelven el dinero Al tener con ARAG un Segurode Defensa Jurídica Familiarnos cursa el parte para quereclamemos a la tienda, al obje-to de que le devuelvan el DVDreparado o le reintegren el dine-ro que pagó por él.

Solicitamos a nuestro clienteque nos entregue la factura decompra del aparato y pasamosel caso a nuestro abogado paraque reclame al establecimiento.

No habían pasado diez díascuando nuestro asegurado nos

llama y nos indica que podemosdar por acabada la reclamaciónya que la tienda le ha reintegradoel importe de la factura.

Agradece nuestra intervención yaque, en diez días hemos obtenidolo que él no ha podido en más decuatro meses.

L A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G

En ARAG busca-mos, sobre todo,la solución másfavorable para elasegurado, porquedefender lo suyoes lo nuestro.

Edita

ARAG Compañía Internacional

de Seguros y Reaseguros S.A.

Sede social:

Roger de Flor, 16 08018 Barcelona

Es una publicación informativa de ARAG

Enero2005Número 111

CASO Nº BXSJ0012585


Obras en la calzadaCaminaba nuestra asegurada por una calle de Badalona(Barcelona) cuando perdió el equilibrio al introducir el pie enun socavón que había en el pavimento.Se da la circunstancia que dicha calle estaba en obras, peroéstas no estaban correctamente señalizadas por lo que nues-tra cliente, poco o nada pudo hacer para evitar la caída.Al tener una póliza de Defensa Jurídica Familiar, acude a ARAGpara que estudiemos el caso y veamos la viabilidad de reclamaruna indemnización por las lesiones y secuelas sufridas.En primer lugar pasamos nota a nuestro profesional de EMA(Evaluación Médica de Accidentados) al objeto de que valo-re el alcance de las lesiones, tanto de los días de baja como lassecuelas.

Dicho informe nos indica que nuestra cliente sufrió unesguince en el tobillo con rotura de ligamentos.Por otro lado presentamos la correspondiente reclamación alAyuntamiento de Badalona, el cual no se considera responsa-ble. Nos indica que las obras eran competencia del AreaMetropolitana de Barcelona y, en todo caso, de la empresaconstructora encargada de las mismas.Ante esta negativa y una vez agotada la vía administrativa,nuestra asesoría jurídica dictaminó la viabilidad de ir judi-cialmente contra el Ayuntamiento a través del oportunorecurso contencioso-administrativo.Tras aportar todas las pruebas, el tribunal acepta en partenuestras pretensiones ya que por un lado, tal como refleja lasentencia, nuestra asegurada cometió un acto imprudente alatravesar la calzada por un lugar que estaba en obras, peropor otra parte entiende que el Ayuntamiento no cumplió consu deber de mantener y conservar la vía pública en las ade-cuadas condiciones de seguridad para sus usuarios.El fallo condena al Consistorio en pagar el 50% de la cantidadreclamada por nuestra cliente, es decir 3.580 euros más losintereses legales.

CASO Nº VX000500577

Seguro de Defensa Jurídica para Comercios

Problemas con la propia aseguradora A través de una ventana delcomercio asegurado entraronunos ladrones que desvalijaronla tienda y sustrayeron dineroen efectivo de la caja fuerte.

El gerente del establecimientocursó parte a su aseguradora, yaque entre otras garantías contra-tadas también tenía la de robo.

A los pocos días recibió unacarta de su aseguradora que lerechazaba las derivaciones delsiniestro.

Afortunadamente la empresa encuestión tenía un seguro deDefensa Jurídica para Comerciosen ARAG, por lo que el gerente

nos puso en antecedentes de loacontecido, nos aportó justifi-cantes del valor de lo robado asícomo el condicionado de supóliza de seguros y la carta derechace.

Toda esta documentación lapasamos a nuestra asesoría jurí-dica que, a la vista de ella, dicta-mina que procede la presenta-ción de una demanda judicialpor incumplimiento de contrato.

Antes de presentar la demandahacemos una última gestiónfrente a la aseguradora de nues-tro asegurado la cual mantieneel rechace.

Sin más demora presentamos laoportuna demanda judicialreclamando un total de 5.500euros, correspondiente al valorde lo sustraído en el comercioasegurado.

No fue necesario llegar a juicioya que nos llaman de la asegura-dora y pasan oferta del 100% dela cantidad reclamada.

La conclusión del gerente delestablecimiento es la necesidadde contar con un seguro deDefensa Jurídica en una empre-sa especializada.

Incapacidad PermanenteNuestro asegurado, una vez finali-zado el período de incapacidadtransitoria por enfermedad, solici-tó al INSS que le fuera concedidala incapacidad permanente.

El Instituto Nacional de laSeguridad Social, a la vista de losinformes médicos presentados pornuestro cliente, le deniega la pres-tación por incapacidad permanen-te alegando que las lesiones quepadece no alcanzan un grado sufi-ciente de disminución de su capa-cidad laboral.

Nuestro cliente de 57 años de edadtrabajaba como obrero en una

cadena de producción de unafábrica de automóviles, en con-creto en la preparación de amorti-guadores.

Nos cursa parte y nos presenta

los oportunos informes médicos

sobre sus dolencias y secuelas,

informe que pasamos a nuestra

asesoría jurídica, la cual determi-

na que procede ir a la vía judicial

al objeto de que se le reconozca la

prestación por incapacidad per-

manente.

Se celebra juicio y el tribunal nosda la razón. Estima nuestra

demanda en todos sus puntos ydeclara a nuestro asegurado afectoa una INCAPACIDAD PERMA-NENTE TOTAL, para su profesiónhabitual, con derecho a recibir unapensión del 75% de una base regu-ladora de 1.500,31 euros más reva-lorización.

El INSS no obstante muestra sudesacuerdo con el fallo y presentaun recurso de suplicación.

Se celebra la nueva vista en la Salade lo Social del Tribunal Superiorde Justicia de Castilla y León y lasentencia confirma el anterior falloen todos sus puntos.

CASO Nº PX000484909


L A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G

En ARAG busca-mos, sobre todo,la solución másfavorable para elasegurado, porquedefender lo suyoes lo nuestro.

Edita

ARAG Compañía Internacional

de Seguros y Reaseguros S.A.

Sede social:

Roger de Flor, 16 08018 Barcelona

Es una publicación informativa de ARAG

Febrero 2005Número 112



Un edredón desaparecidoNuestra clienta llevó un edredón a la tintorería y tal fue susorpresa que, al irlo a recoger, comprobó que se lo habíanperdido. La colcha, aunque conservada en muy buen estado,tenía ya unos meses por lo que nuestra asegurada no dispo-nía del comprobante de compra en el que se especificaba suvalor económico.La propietaria del establecimiento argumentó entonces que noestaba dispuesta a abonar el importe del edredón extraviado,que ascendía a 300 euros, y ofreció a nuestra clienta la posibi-lidad de comprar uno nuevo cuyo coste sí le sería abonado.Con la intención de no alargar más el proceso, nuestra asegu-rada acepta esta solución y opta por comprar un nuevo edre-dón cuyo precio asciende a 105 euros. Sorprendentemente, lapropietaria del establecimiento tampoco muestra su confor-midad con el nuevo importe –bastante inferior al de la colcha

extraviada- argumentando que el nuevo edredón es muchomás caro y de mejor calidad que el perdido. ¿Olvidó quizásque el error había sido suyo?Cansada de las negativas de la tintorería, nuestra aseguradadecide entonces cursarnos parte para que reclamemos elcoste de su edredón y, lo más importante, le ahorremos tiem-po, dolores de cabeza y un proceso judicial quele ocasionaría más gastos que el importe dela colcha en cuestión.Por nuestra parte, reclamamos demanera formal a la propietaria de latintorería quien, al conocer que elasunto está en manos de ARAG,acepta una nueva propuesta denuestra asegurada.Cansada de perder tiempo, nuestraclienta prefiere ahora que sea el personal del establecimientoquien se encargue de comprar un nuevo edredón.Tras recibir la colcha que han comprado en la tintorería, nues-tra asegurada está ahora conforme y agradece la intervenciónde ARAG que, en menos de veinte días, le ha solucionado elproblema sin necesidad de recurrir a la vía judicial.

Nuestra clienta circulaba con su

turismo por una carretera cuando

la conductora de otro automóvil le

colisionó causándole daños en el

lateral delantero de su coche. Hasta

aquí nada fuera de lo habitual.

Sin embargo, al ir a reclamar a la

aseguradora de la causante y

pese a haber firmado ambas con-

ductoras una declaración amisto-

sa de accidente, la compañía con-

traria rechaza cubrir las conse-

cuencias del siniestro alegando la

existencia de fraude.

Nuestra asegurada no está con-

forme por lo que decide pasarnos

parte para que estudiemos la

posibilidad de reclamar. A su

Coincidencia de apellidos, ¿fraude?favor: contamos con un testigo

del accidente. En su contra:

coincidencia de apellidos con los

del contrario y un informe peri-

cial advirtiendo que los daños

del coche no han sido provoca-

dos por colisión, según indica la

grúa que realizó el servicio de

remolque.

El importe de la reparación

asciende a 2.846 euros, cantidad

que reclamamos a la asegurado-

ra sin que ello modifique su pos-

tura contraria a indemnizar a

nuestra clienta.

Poco después, conocemos que

fue el vehículo contrario el que

requirió los servicios de una

CASO Nº MT 00 0588244


grúa y no el de nuestra asegura-da. Una información muy valiosapues nos sirve para demostrarque el informe del perito eraerróneo, puesto que hacíareferencia al turismo contrario.

Dadas las circunstancias, la solu-ción más favorable a los interesesde nuestra asegurada pasa porpresentar una demanda judicial alo que procedemos sin demora.

Sin embargo, no fue preciso lle-

gar a juicio. A los pocos días la

aseguradora contraria ofrece a

nuestra clienta la totalidad de la

cantidad demandada: 2.846

euros, que nuestra asegurada

acepta satisfecha.

Todos sabemos lo que suponereclamar a grandes compañíasaunque el error sea suyo: tiempoy dolores de cabeza que no siem-pre se traducen en resultadossatisfactorios. A causa de un fallo en el suminis-tro de la energía eléctrica –unasobrecarga- nuestro cliente sufriódaños importantes en varios elec-trodomésticos de su vivienda. Como es natural, optó por darparte a su aseguradora y presen-tar las correspondientes facturasde reparación a la espera de quele reintegrasen su importe. Pero poco tiempo después, sucompañía de seguros le comunicaque no piensa cubrir el importetotal de los daños causados por lacompañía eléctrica.

Una sobrecarga estropea mis electrodomésticosNuestro asegurado decideentonces contactar con ARAGpara que reclamemos el resto dela indemnización –598 euros- ala compañía eléctrica que come-tió el error.Por nuestra parte, hacemos tasarlos daños causados por la avería–un total de 1.861 euros- y solici-tamos a nuestro cliente fotogra-fías de los electrodomésticosdañados con el fin de disponerde pruebas en caso de que seanecesario acudir a la vía judicial.Efectivamente, nuestros aboga-dos ven posibilidades de éxito yestiman oportuna la presenta-ción de una demanda, a lo queprocedemos de inmediato. Pasados unos días, la compañíaeléctrica en cuestión nos llama

CASO Nº SJ 00 0644835


para ofertarnos la totalidad de lacantidad reclamada: los 598 eurosque no ha cubierto la asegurado-ra de nuestro cliente.Nuestro cliente tenía claro quepor la cantidad reclamada éldirectamente no hubiera acudidoal juzgado, pero gracias a suseguro de Defensa Jurídica hapodido cobrar el 100% sin necesi-dad de llegar a juicio.

L AL A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G


Mod. 16001 (0205)

Frenazo del autobús: fractura de fémur

CASO Nº TX 00 0619677


No hay dudas de que el transportepúblico es el modo más rápido,económico y seguro de moversedentro de una gran ciudad. Sinembargo, hoy por hoy existen aúnciertos comportamientos que sonmejorables en lo que a seguridadde los usuarios se refiere.Frenar de manera brusca, realizarparadas a demasiada distancia de laacera o tomar curvas a una veloci-dad inadecuada son formas de con-ducción que, además de entorpecerla vía, pueden provocar lesiones enlos usuarios de autobuses.Es el caso de nuestra clienta quien,

a consecuencia de un brusco fre-nazo que realizó el conductor delautobús en el que viajaba, perdióel equilibrio y cayó al suelo contan mala fortuna que se fracturó elfémur.Nada más conocer el caso, desdeARAG pasamos antecedentes anuestro servicio médico EMA(Evaluación Médica de Acciden-tados) con el fin de comprobar elalcance de las lesiones y sus posi-bles secuelas.Días después, el médico nos infor-ma de que nuestra asegurada esta-rá 180 días de baja impeditiva y 60

más de baja no impeditiva, conunas secuelas valoradas en docepuntos según baremo.Pese a que la aseguradora contrariaaceptó culpa, presentamos la opor-tuna denuncia en el juzgado. Sinembargo, no fue necesario llegar ajuicio ya que la aseguradora delautobús pasó una oferta de 37.341euros, que satisfizo plenamente laspretensiones de nuestra asegurada.

Más allá de la indemnización económica

CASO Nº SJ 00 0705855


Como cada noche, nuestra asegu-rada salió a la calle para pasear asu cachorro por un parque cerca-no a su domicilio donde es habi-tual encontrarse con otros anima-les.

Allí fue mordida por un pastoralemán que, de no haberse ellainterpuesto, habría malherido asu perro.

Nuestra clienta no quería denun-ciar a la dueña del animal pues setrataba de una chica joven sin tra-bajo con la que tenía buena rela-ción a raíz de verse cada nocheen el barrio. Sin embargo, desea-

ba asegurarse de que el inciden-te no volvería a ocurrir.

Al contar con un Seguro deDefensa Jurídica Familiar, dejael asunto en manos de ARAGsolicitándonos una soluciónamistosa que no implique elpago de indemnización alguna.

Dadas las peculiaridades delcaso, estimamos oportuno elenvío de un telegrama a ladueña del pastor alemán en elque exigimos que lleve al animalatado y con bozal.

A los pocos días, la joven sepone en contacto con nosotros y

nos asegura que su perro va

siempre atado y que el incidente

no volverá a ocurrir.

Nuestra clienta nos agradece la

gestión y nos confirma que su

vecina cumple lo acordado. Todo

ello sin necesidad de llegar a la

vía judicial.

Nuestro asegurado compró unmonitor para su ordenador que,desde el primer día, no funcionabacorrectamente puesto que uno delos píxeles venía con un error defábrica.

Como es natural, cuando nuestrocliente percibe el fallo procede areclamar al establecimiento ven-dedor. Sin embargo, sólo recibelargas y una actitud reacia a cual-quier cambio o reparación pese aque la pantalla está en período degarantía.

Cansado de las negativas delcomercio, nuestro asegurado noscursa parte y nos entrega la factura

Problemas desde el día de la compra

de compra, por valor de 1.167euros, a fin de que reclamemos uncambio o bien el importe de lapantalla.

En primer lugar, pasamos antece-dentes a nuestro perito para verifi-car que el monitor no funciona deforma correcta y, efectivamente,confirmamos que existe un defec-to de fábrica que obliga al vende-dor a la sustitución del equipo.

Acto seguido, desde ARAG envia-mos un telegrama al estableci-miento vendedor en el que recla-mamos una pantalla nueva y ofre-cemos un plazo de un mes paraevitar el trámite judicial.

CASO Nº SJ 000636469


No obstante, el contrario no res-ponde en el plazo previsto porlo que nos vemos obligados aacudir a la vía judicial.

Como era de esperar, el tribunalacepta nuestra reclamación ycondena al comercio a sustituirel monitor en cuestión por unoigual o de características idénti-cas al que compró.

A los pocos días, nuestro clienterecibe en su domicilio una pan-talla nueva e idéntica a la quecompró en su día, y compruebalas ventajas de contar con unSeguro de Defensa JurídicaFamiliar.

Los pactos entre compañías, la falta

de tiempo, las cláusulas o la letra

pequeña de las pólizas de seguro

son algunos de los condicionantes

que a menudo motivan la descon-

fianza de quien se dispone a recla-

mar a su aseguradora.

Una indefensión que sólo puede

tratarse con las mismas armas: pro-

fesionales que conozcan bien el

sector y que consigan indemniza-

ciones en tiempo y cantidad justas.

Nuestro cliente tuvo una avería en

su coche que producía un fuerte

La letra pequeña en las pólizas de seguroolor a quemado. Si bien llamó de

inmediato a su compañía de segu-

ros donde le indicaron que la repa-

ración entraba dentro de su cober-

tura de incendio, a la hora de

indemnizarle su aseguradora no

se hace cargo.

Alega que no hubo combustión y

abrasamiento por llama sino reca-

lentamiento, y por ello entiende

que la avería, cuya reparación

asciende a 511 euros, no entra den-

tro de la cobertura de incendio.

Nos pasa parte y desde ARAG

CASO Nº CX 000594940


reunimos la documentación nece-

saria para poder presentar una

demanda judicial. Además, cono-

cemos por nuestro servicio jurídico

la existencia de distinta jurispru-

dencia que ofrece garantías de

ganar el caso.

Finalmente presentamos la

demanda y, como era de esperar,

el juez condena al contrario a

pagar la totalidad del importe de

la reparación: una cantidad de

543 euros que deja satisfecho a

nuestro cliente.

L AL A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R I D I C A A R A G


Mod. 16001 (0305)

Solución rápida para un sofá con problemas

CASO Nº SJ 00 0663161


Hace unos meses la señoraMontserrat quiso renovar el mobi-liario de su casa y decidió sustituira su viejo tresillo por un sofá máscómodo y de más plazas.

Encantada con su nueva adquisi-ción y justo después de que dostrabajadores del establecimientodonde realizó la compra le dejaranel sofá en su domicilio, nuestraasegurada se sentó en él a fin decomprobar su comodidad.

Nada más sentarse se produjo undesgarro en la tapicería del mismoy, para su sorpresa, al comunicár-selo al propietario del estableci-miento éste le dio largas. Pasados

más de veinte días el tema estabatodavía por solucionar.

Cansada de esperar, nuestraclienta nos cursa parte a fin deque reclamemos de manera for-mal la sustitución del sofá o elimporte de su reparación, puesno confía en que la tienda leofrezca solución alguna.

Por nuestra parte, pasamos ante-cedentes a nuestro perito a fin deque compruebe el alcance de losdaños y determine si deben ir acargo del establecimiento en cues-tión, al estar el sofá en garantía.

Como era de esperar, el informepericial verifica que la tapicería

está rota, confirma que procede lasustitución del sofá y tasa losdaños en 319 euros.

Una cantidad que de inmediatoreclamamos al propietario delestablecimiento quien, al conocerque el asunto está en manos deARAG, se compromete por escritoa solucionar el asunto antes de quefinalice el mes.

En menos una semana, nuestraasegurada nos llama para comuni-carnos que ya le han entregado unnuevo sofá al tiempo que nosagradece la rapidez con quehemos solventado su problema.

Daños al vehículo en la prestación de un servicio

CASO Nº SD 000660545


Los consumidores tienen derecho aser indemnizados por los dañosque un taller, túnel de lavado, apar-cacoches o cualquier otro servicioocasione en su vehículo, con laexcepción de que la avería o des-perfecto causados tengan su origenen un mal uso de la prestación porparte del usuario.

Nuestro cliente llevó su vehículo a untúnel de lavado y, debido a un fallode la maquinaria, un rodillo le dañóel techo y el frontal de su automóvil.

Quedaba claro que el prestadordel servicio era responsable de losdaños ocasionados, sin embargo,era imprescindible poder demos-trarlo en caso de llegar a arbitrajeo a juicio.

Desde ARAG solicitamos a nuestroasegurado que nos facilite la hojade reclamación elaborada con laparte adversa, además del parteamistoso realizado y varias fotogra-fías del estado del automóvil, cuyareparación asciende a 977 euros.

Por su parte, la compañía asegura-

dora del túnel de lavado rechaza la

reclamación alegando que no existe

cobertura para los daños causados

por la propia actividad de la

empresa.

Dadas las circunstancias, nos pone-

mos en contacto con el propietario

del túnel de lavado quien ofrece a

nuestro cliente la cantidad de 1.000

euros, que nuestro asegurado acep-

ta satisfecho.

CASO Nº PX 000745633


Un perro agresivoNuestra asegurada paseaba poruna calle de Palencia cuando fueagredida por un perro que lecausó heridas leves además dedaños en sus gafas y en la ropaque vestía.

Con el objetivo de que reclamáse-mos al propietario del animal losdaños y las lesiones que éste lehabía causado, nuestra clienta nospasa parte de lo sucedido deinmediato.

Desde ARAG, la primera gestiónconsiste en enviar una carta a la

aseguradora del propietario delperro en la que reclamamos losdaños sufridos por nuestra asegu-rada a consecuencia de la agre-sión.

Pero la aseguradora contrariarechaza nuestra reclamación ale-gando que no consta ningúndocumento de baja de la lesiona-da, y que su asegurado no recono-ce daños en las gafas de nuestracliente.

Dadas las circunstancias, nuestrosabogados estiman oportuno acu-

dir a la vía penal y presentar una

denuncia, para lo que reunimos la

documentación necesaria.

Sin embargo, finalmente no fue

necesario acudir a los juzgados

pues la aseguradora contraria

ofreció a nuestro cliente 894 euros.

Una cantidad que satisfizo total-

mente a nuestra asegurada.

Denunciada por enseñar el himno de AndalucíaLos profesionales de la educa-ción constituyen uno de los sec-tores con un índice de estrésmás elevado en su trabajo, debi-do en buena parte a los riesgosde violencia, amenazas y veja-ciones de que pueden ser objetoen algunas ocasiones, tanto porparte de alumnos como de suspadres.

Es el caso de nuestra asegurada,profesora de música en un cole-gio de Granada, a quien el padrede un alumno denunció porhaber "coaccionado" a su hijo denueve años a cantar el himno deAndalucía.

Perpleja, la docente nos pasaparte a fin de que nos encargue-mos de su defensa, explicándo-

nos que daba clase de música almenor y que la enseñanza delhimno formaba parte del conte-nido de su asignatura para pre-parar la celebración del Día deAndalucía, que se conmemorabapoco después.

Sorprendentemente, el padre dedicho alumno no había formula-do queja alguna al centro deenseñanza ni a la Delegación deEducación, ni por el comporta-miento de la denunciada, ni con-tra el ideario ideológico delcolegio público, aunque sí habíapresentado una denuncia contrala profesora.

Se celebra el juicio y, como erade esperar a la vista de lasdeclaraciones y pruebas pre-

sentadas, el juez absuelve anuestra asegurada.

No consta acreditado que endicha clase de música se produ-jera ningún incidente con elmenor, ni la negativa de éste arealizar dicha actividad. Tam-poco consta que la docenteadoptara ninguna medida coac-tiva o represiva.

Además, el tutor del menor señalóque ni el niño en cuestión ni nin-gún otro alumno le comunicaronque hubiera ocurrido incidentealguno durante esa clase de músi-ca. Como era de esperar, nuestraasegurada quedó libre de todaacusación comprobando las ven-tajas de contar con un Seguro deDefensa Jurídica.

CASO Nº SE 000791855

Seguro de Defensa Jurídica del Personal Docente


L A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R Í D I C A A R A GL A R E A L I D A D D E L A D E F E N S A J U R Í D I C A A R A G

Mod. 16001 (0505)

Número 116

Nuestro asegurado paseaba por una calle de Valladolid cuando, a consecuencia del mal estado en que se encon-traba un contenedor de obras, se enganchó la cazadora de piel que vestía con tan mala fortuna que la prenda se rompió.

A consecuencia de lo ocurrido, nuestro cliente se ve obligado a presentar una denuncia a

través de la policía municipal y nos pasa parte de lo sucedi-do a fin de que reclamemos el importe de la cazadora estro-peada.

Por nuestra parte, hacemos tasar la prenda para valo-rar los daños ocasionados y procedemos a presentar una demanda en el juzgado.

Días después, el juez nos da la razón y obliga a la asegura-

Un árbol encima de mi cocheSeguro de Defensa Jurídica del Automovilista

Nadie espera que un árbol caiga encima de su coche mientras con-duce por la carretera. Sin embar-go, esto mismo fue lo que le ocu-rrió a nuestro asegurado como consecuencia de una fuerte tor-menta.

Un árbol se desplomó justo enci-ma de su vehículo causándole daños por valor de 2.073 euros en la carrocería del mismo.

Afortunadamente, contaba con un Seguro de Defensa Jurídica de

ARAG, por lo que solicitó nues-tra intervención a fin de que sus derechos le fuesen reconocidos.

Desde ARAG nos ponemos en contacto con la policía local de Palencia a fin de que nos facili-ten el atestado del accidente.

A la vista del mismo nuestra asesoría dictamina que es fac-tible reclamar al Ayuntamiento los daños sufridos en el vehículo de nuestro cliente.

Una vez resuelto este trámite,

desde el consistorio palentino nos informan que precisan de un informe técnico de Medio Ambiente para proceder a comu-nicar el parte a su aseguradora, y nos solicitan un espacio de tiem-po para disponer del mismo.

Pasados unos días, nos llaman desde el Ayuntamiento y nos comunican que aceptan la recla-mación. Nuestro cliente cobra 2.073 euros, la totalidad del importe reclamado, sin necesidad de llegar a juicio.

Caso Nº PX 000708188

Indemnizado por daños en su cazadora de piel


Caso Nº VA 000476021

dora de la empresa responsa-ble de las obras a indemnizar a nuestro cliente. A pesar de que la constructora en cues-tión recurrió la sentencia, la sentencia de apelación resulta también favorable a nuestros intereses.

Finalmente, nuestro cliente recibe una indemnización de 468 euros que cubren la repa-ración de los daños ocasiona-dos en su cazadora.

Caminar por las calles de una gran ciudad resulta cada vez más complicado. El vaivén de la gente, motos estacionadas encima de la acera, vehículos que salen de sus aparcamientos de forma inespe-rada o patinadores que sortean a los peatones son algunos de los obstáculos que los viandantes debemos superar a diario. Pero no los únicos.

Nuestra clienta paseaba por una calle de Santander cuando trope-zó con un felpudo que alguien había dejado olvidado en medio de la acera y sufrió un esguince cervical.

De buenas a primeras, nuestra asegurada no cayó en la cuenta de que podía reclamar a alguien por las lesiones sufridas, pues pen-

saba que la esterilla en cuestión había sido abandonada.

Sin embargo, tras el susto inicial descubrió que el felpudo pertene-cía a una portería cercana y que, por tanto, alguien había cometido un descuido que a ella le había costado caro.

Nuestro servicio de Evaluación Médica de Accidentados (EMA), comprueba que nuestra cliente ha sufrido un esguince cervical con 21 días de baja impeditiva y otros 45 de baja no impediti-va. Además, el informe estima cuatro puntos de secuelas según baremo.

Tras intentar sin éxito un acuerdo con la compañía de seguros de la señora de la limpieza que cometió el olvido, desde ARAG procede-

mos a presentar la correspondien-te demanda judicial.

En una primera sentencia, el juez estima que existe culpa compar-tida y concede a nuestra clienta tan sólo la mitad de la cantidad reclamada.

No obstante, nuestros abogados no se dan por vencidos y pre-sentan un recurso de apelación. Finalmente, el juez nos da la razón y nuestra asegurada recibe la totalidad del importe reclamado: 11.666 euros.

Circulaba nuestro cliente por una autopista catalana cuando, por culpa de unas barras de hierro que había en la calzada, sufrió un accidente de tráfico.

A consecuencia de la colisión el vehículo de nuestro asegurado tuvo que ser remolcado a un taller donde, una vez valorados los daños, le indicaron que la reparación ascendía a 1.195 euros.

Desde ARAG, nada más recibir el parte nos ponemos en con-

tacto con la concesionaria de la autopista. Allí nos indican que el siniestro no consta en sus registros por lo que debe-mos presentar una reclamación escrita, a lo que procedemos sin demora.

Con las pruebas de que dispo-nemos –fotografías del hierro y lugar del accidente, un testigo presencial y el atestado de la policía autonómica- nuestra ase-soría jurídica ve posibilidades de éxito.

Tras un prudencial compás de espera, informamos a la conce-sionaria de la autopista que si no indemniza a nuestro cliente, nos veremos obligados a reclamar judicialmente.

Pero pese a tener todo prepa-rado y contar con las pruebas necesarias, no fue necesario lle-gar a juicio pues la aseguradora contraria, a la vista de nuestra reclamación, ofrece a nuestro cliente la totalidad del importe reclamado: 1.195 euros.

Pasear ¿Una actividad arriesgada?


Caso Nº SX 00 0338659

Obstáculos en la autopistaSeguro de Defensa Jurídica del Automovilista

Caso Nº VX 000648409

Hace dos veranos nuestra ase-gurada decidió hacer reformas en su casa. Además de susti-tuir algunos muebles, pintar todo el piso y reformar por completo la cocina y el baño, también optó por cambiar las puertas.

Pero una vez montadas y pagadas, se dio cuenta que su instalación era defectuosa, por lo que decidió enviar a la empresa en cuestión una carta de reclamación comunicándo-les lo sucedido.

Para su sorpresa, la compañía hizo caso omiso del escrito por lo que nuestra clienta decide pasarnos parte a fin de que

defendamos sus intereses y reclamemos la devolución del importe de las puertas o bien su correcta instalación.

Por nuestra parte, enviamos un perito al domicilio de nues-tra asegurada con la inten-ción de verificar el estado de las puertas. Efectivamente, nuestra asegurada tenía razón: el informe valora en 3.973 euros el daño causado en las mismas.

A partir de aquí, desde ARAG procedemos a presentar una demanda ante el juzgado, des-pués de que la empresa en cues-tión haya rechazado indemni-zar a nuestra asegurada.

Finalmente y como era de esperar, la sentencia obliga a la empresa de carpintería a realizar los ajustes y susti-tuciones determinadas por el perito judicial en las puer-tas. Asunto resuelto y cliente satisfecho.

Nuestro asegurado circulaba por una carretera local cuando un jabalí se cruzó por su camino, sin percatarse de su presencia, y lo embistió causándole daños importantes en su vehículo y en otro automóvil que circulaba en sentido contrario.

No era la primera vez que nues-tro cliente vivía una situación de este tipo, por lo que rápidamente nos pasó parte a fin de que recla-másemos a la administración per-tinente los daños causados en su coche.

Además, conocedor del proceso y de las necesidades del mismo, nuestro cliente también nos faci-litó varias fotografías del estado de su automóvil después del accidente.

Por nuestra parte hacemos tasar los daños causados, que ascien-den a 2.062 euros, y consegui-mos el atestado levantado por la policía que se muestra favorable a nuestro cliente.

Así, con las pruebas a nuestro favor, enviamos una reclama-ción formal a la compañía ase-

guradora del coto de caza del que procedía el jabalí, en la que solicitamos una oferta que, poco tiempo después, se materializa en 2.062 euros.

Posteriormente, nuestro asegu-rado acepta la oferta satisfecho y comprueba las ventajas econó-micas y de ahorro de tiempo que supone contar con un Seguro de Defensa Jurídica: tan sólo una llamada ha sido necesaria para que le indemnizaran por la totali-dad de los daños causados en su vehículo.

Un jabalí inoportuno Seguro de Defensa Jurídica del Automovilista

Caso Nº MT 000719433

Puertas defectuosasSeguro de Defensa Jurídica Familiar

Caso Nº VA 000530301

un problema de malos olores tras una...

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