un día de calma tras 50 días de paro

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A2. EL COMERCIO LUNES 11 DE MAYO DEL 2015 TEMA DEL DÍA Cocachacra. Desde que se inició la protesta contra el proyecto mi- nero Tía María, los epicentros han ido variando y la intensi- dad ha ido aumentando. El 23 de marzo, las protestas comen- zaron en las localidades de Co- cachacra, Deán Valdivia y el Va- lle de Tambo. Semanas después se trasladaron a Mollendo y Ma- tarani, donde se registraron los últimos enfrentamientos entre los manifestantes y la policía. Con el ingreso de los militares a estos dos puntos de la provincia de Islay, todo volvió a una calma relativa, pero la tensión se tras- ladó nuevamente al punto ini- cial, Cocachacra. En 50 días, la violencia ha recorrido esta zona como en un círculo (vicioso). Pero hay un punto geográ- fico trascendental en todo este proceso. A cuatro kilómetros de Cocachacra se ubica el puente Pampa Blanca. Su importancia radica en que este sirve de duc- to por el cual circulan camiones cargados de productos agríco- las para alcanzar la Panameri- cana Sur y llegar a los mercados de distribución. Bloquearlo sig- nifica paralizar toda esta región. De hecho, intentos por to- marlo ha habido. El 22 de abril se registró un largo enfrenta- miento en el puente. Allí Victo- riano Huayna (62) murió de un impacto de bala (al comienzo la policía negó que se hubieran usado armas de fuego, como si una necropsia no pudiera des- mentirlo). El primero de los tres muertos que ha originado esta protesta le dio a este punto, el puente Pampa Blanca, un signi- ficado además simbólico. A un lado del puente se ex- tienden los cultivos de caña de azúcar; al otro, campos de arroz. Al cierre de esta edición, lo que había a un lado del puen- te eran, además, cientos de poli- cías, y al otro, decenas de milita- res. Todos esperando la orden. Una tregua por el Día de la Madre y la vigilancia de los militares lograron que no hubiera actos violentos en el distrito de Cocachacra. Ayer, por el Día de la Madre, hubo una tregua y no hu- bo enfrentamientos entre la policía y los opositores al proyecto Tía María. Con el ingreso de militares, el Esta- do podría retomar el control de una zona que permanece convulsionada 50 días. CENTRO DE OPERACIONES. Militares custodian el puente Pampa Blanca, un lugar que –a estas alturas del conflicto– se convirtió en un sitio estratégico. En las márgenes de la carretera el arroz espera ser cosechado. ENTIERRO Ayer fue sepultado en Arequipa el suboficial Alberto Vásquez Durand, el policía que fue atacado por una turba el 6 de mayo. ATACADO CON PIEDRAS Vásquez Durand estaba tratando de liberar una carretera cuando fue golpeado a pedradas por la turba de manifestantes. Otros tres agen- tes quedaron heridos. SERÁ DECLARADO HÉROE El viceministro de Orden Interno, Mauro Medina, informó que Vás- quez Durand será ascendido de brigadier a superior, y que sería declarado héroe de la Policía Na- cional. PIDEN JUSTICIA Los familiares del fallecido policía exigieron al Gobierno que investi- gue quiénes lo atacaron, y que los identifique y detenga. ASCENSO PÓSTUMO RICARDO LEÓN ALMENARA Texto / Enviado especial LINO CHIPANA OBREGÓN Fotos / Enviado especial CARLOS ZANABRIA HONORES PÓSTUMOS. Ayer fue enterrado Alberto Vásquez Durand. Durante la ceremonia, se anunció que sería nombrado héroe policial. LIMPIEZA. La policía se dedicó ayer a desbloquear las vías que estaban cerradas en el camino hacia los distritos de Cocachacra y Deán Valdivia. La protesta se ‘encapsula’. TREGUA. A diferencia de días anteriores ayer no se registraron enfrentamientos en Cocachacra. un comunicado firmado por el presidente del directorio de la empresa, Óscar Gonzales Ro- cha, desautorizaba al portavoz y aseguraba que el proyecto cu- prífero seguía en pie. Los agri- cultores se sintieron burlados, el diálogo con Yamila Osorio se quebró y la protesta arreció. Si este episodio empañó la imagen de la empresa, el si- guiente error de la cadena man- chó la de la policía. El 22 de abril murió desangrado Victoriano Huayna tras recibir un balazo. Y ese mismo día, un agente de la Dinoes –en su esquela se leía el seudónimo ‘Filosofexxx’ y no su nombre, como correspon- de– intentó burdamente hacer parecer que el manifestante An- tonio Coasaca lo había atacado con un ‘miguelito’, luego se su- po que el arma fue sembrada. Frente a la acusación de abuso policial, el ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe, or- denó el repliegue de la Dinoes. Esta vez el error del Estado fue fatal: apenas se supo que en las protestas solo participarían policías sin armas –solo bom- bas lacrimógenas y escudos–, la violencia subió a otro nivel. El 6 de mayo, una turba convirtió la protesta contra una minera en el salvaje linchamiento contra cuatro policías. A uno de ellos, el suboficial Alberto Vásquez Du- rand, lo golpearon en la cabe- za con piedras y cadenas hasta abrirle el cráneo. Luego lo lanza- ron a una hondonada. Lo resca- taron inconsciente y luego mu- “Southern deberá explicar su intervención durante el conflicto”. ROSA MARÍA ORTIZ Ministra de Energía y Minas Se refirió a negociado sobre el le- vantamiento del paro. “Ofrecí una revisión independiente del EIA del proyecto Tía María”. YAMILA OSORIO Gobernadora regional de Arequipa Al ser acusada de negociar con los dirigentes. LAS FRASES Ensayos y errores En 50 días, lo que ha habido también es una larga cadena de errores. Errores que, por cierto, han sabido aprovechar los que quieren convertir la oposición a Tía María en un buen pretexto para la mala política y la violen- cia extrema. El primer error lo cometió la propia empresa Southern Perú. El 27 de marzo, cuando la protesta aún no era masiva y los dirigentes habían aceptado conversar con la gobernadora regional de Arequipa, Yamila Osorio, el director de Relacio- nes Institucionales de la mina, Julio Morriberón, anunció en RPP que el proyecto Tía María se cancelaba. Lo inaudito llegó pocas horas después, cuando rió la madrugada del 9 de mayo. La incertidumbre Mientras Vásquez Durand esta- ba en cuidados intensivos, ocu- rrió otro hecho que manchó es- ta vez la imagen de uno de los principales protagonistas de esta protesta, el dirigente del Frente de Defensa del Valle de Tambo, Pepe Julio Gutiérrez. En un audio propalado por Wi- llax TV, Gutiérrez conversa con un antiguo aliado suyo, el abo- gado Jesús Gómez Urquizo, so- bre un pago de US$1,5 millones a cambio de acabar con las pro- testas. Gómez Urquizo aseguró que nunca pagó dicho monto y que solo quiso jalarle la lengua a Gutiérrez. La empresa Southern, por su parte, negó haber enviado a al- guien a negociar con el dirigen- te. Este audio cambió el panora- ma en Cocachacra, donde vive el dirigente. Ayer, este Diario lo buscó en su casa, pero sus fami- liares aseguraron que había via- jado a Arequipa. La muerte del policía y los audios derivaron en el episo- dio más reciente de este conflic- to social: la llegada, ayer, de un contingente de militares a Coca- chacra. El ministro del Interior ha sido enfático en señalar que la policía y los militares no están ahí para “defender un proyecto minero, sino para garantizar el orden en una zona bloqueada por más de un mes”. No se ha de- clarado estado de emergencia, pero en la práctica lo es. PROTESTAS CONTRA TÍA MARÍA Un día de calma tras 50 días de paro

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Ayer, por el Día de la Madre, hubo una tregua y no hubo enfrentamientos entre la policía y los opositores al proyecto Tía María. Con el ingreso de militares, el Estado podría retomar el control de una zona que permanece convulsionada 50 días.

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  • A2. el comercio lunes 11 de mayo del 2015

    Tema del da

    Cocachacra. Desde que se inici la protesta contra el proyecto mi-nero Ta Mara, los epicentros han ido variando y la intensi-dad ha ido aumentando. El 23 de marzo, las protestas comen-zaron en las localidades de Co-cachacra, Den Valdivia y el Va-lle de Tambo. Semanas despus se trasladaron a Mollendo y Ma-tarani, donde se registraron los ltimos enfrentamientos entre los manifestantes y la polica. Con el ingreso de los militares a estos dos puntos de la provincia de Islay, todo volvi a una calma relativa, pero la tensin se tras-lad nuevamente al punto ini-cial, Cocachacra. En 50 das, la violencia ha recorrido esta zona como en un crculo (vicioso).

    Pero hay un punto geogr-fico trascendental en todo este proceso. A cuatro kilmetros de Cocachacra se ubica el puente Pampa Blanca. Su importancia radica en que este sirve de duc-to por el cual circulan camiones cargados de productos agrco-las para alcanzar la Panameri-cana Sur y llegar a los mercados de distribucin. Bloquearlo sig-nifica paralizar toda esta regin.

    De hecho, intentos por to-marlo ha habido. El 22 de abril se registr un largo enfrenta-miento en el puente. All Victo-riano Huayna (62) muri de un impacto de bala (al comienzo la polica neg que se hubieran usado armas de fuego, como si una necropsia no pudiera des-mentirlo). El primero de los tres muertos que ha originado esta protesta le dio a este punto, el puente Pampa Blanca, un signi-ficado adems simblico.

    A un lado del puente se ex-tienden los cultivos de caa de azcar; al otro, campos de arroz. Al cierre de esta edicin, lo que haba a un lado del puen-te eran, adems, cientos de poli-cas, y al otro, decenas de milita-res. Todos esperando la orden.

    Una tregua por el Da de la Madre y la vigilancia de los militares lograron que no hubiera actos violentos en el distrito de Cocachacra.

    Ayer, por el Da de la Madre, hubo una tregua y no hu-bo enfrentamientos entre la polica y los opositores al proyecto Ta Mara. Con el ingreso de militares, el Esta-do podra retomar el control de una zona que permanece convulsionada 50 das.

    Centro de operaCiones. Militares custodian el puente Pampa Blanca, un lugar que a estas alturas del conflicto se convirti en un sitio estratgico. En las mrgenes de la carretera el arroz espera ser cosechado.

    entierroAyer fue sepultado en Arequipa el suboficial Alberto Vsquez Durand, el polica que fue atacado por una turba el 6 de mayo. ataCado Con piedrasVsquez Durand estaba tratando de liberar una carretera cuando fue golpeado a pedradas por la turba de manifestantes. Otros tres agen-tes quedaron heridos.ser deClarado hroeEl viceministro de Orden Interno, Mauro Medina, inform que Vs-quez Durand ser ascendido de brigadier a superior, y que sera declarado hroe de la Polica Na-cional.piden justiCiaLos familiares del fallecido polica exigieron al Gobierno que investi-gue quines lo atacaron, y que los identifique y detenga.

    Ascenso pstumo

    ricardo len almenaraTexto / Enviado especial

    lino chipana obregnFotos / Enviado especial

    carlos zanaBria

    honores pstumos. ayer fue enterrado alberto Vsquez Durand. Durante la ceremonia, se anunci que sera nombrado hroe policial.

    limpieza. la polica se dedic ayer a desbloquear las vas que estaban cerradas en el camino hacia los distritos de cocachacra y Den Valdivia. la protesta se encapsula.

    tregua. a diferencia de das anteriores ayer no se registraron enfrentamientos en cocachacra.

    un comunicado firmado por el presidente del directorio de la empresa, scar Gonzales Ro-cha, desautorizaba al portavoz y aseguraba que el proyecto cu-prfero segua en pie. Los agri-cultores se sintieron burlados, el dilogo con Yamila Osorio se quebr y la protesta arreci.

    Si este episodio empa la imagen de la empresa, el si-guiente error de la cadena man-ch la de la polica. El 22 de abril muri desangrado Victoriano Huayna tras recibir un balazo. Y ese mismo da, un agente de la Dinoes en su esquela se lea el seudnimo Filosofexxx y no su nombre, como correspon-de intent burdamente hacer parecer que el manifestante An-tonio Coasaca lo haba atacado

    con un miguelito, luego se su-po que el arma fue sembrada. Frente a la acusacin de abuso policial, el ministro del Interior, Jos Luis Prez Guadalupe, or-den el repliegue de la Dinoes.

    Esta vez el error del Estado fue fatal: apenas se supo que en las protestas solo participaran policas sin armas solo bom-bas lacrimgenas y escudos, la violencia subi a otro nivel. El 6 de mayo, una turba convirti la protesta contra una minera en el salvaje linchamiento contra cuatro policas. A uno de ellos, el suboficial Alberto Vsquez Du-rand, lo golpearon en la cabe-za con piedras y cadenas hasta abrirle el crneo. Luego lo lanza-ron a una hondonada. Lo resca-taron inconsciente y luego mu-

    Southern deber explicar su intervencin durante el conflicto.rosa mara ortiz Ministra de Energa y MinasSe refiri a negociado sobre el le-vantamiento del paro.

    Ofrec una revisin independiente del EIA del proyecto Ta Mara.Yamila osorio Gobernadora regional de ArequipaAl ser acusada de negociar con los dirigentes.

    lAs frAsesEnsayos y erroresEn 50 das, lo que ha habido tambin es una larga cadena de errores. Errores que, por cierto, han sabido aprovechar los que quieren convertir la oposicin a Ta Mara en un buen pretexto para la mala poltica y la violen-cia extrema.

    El primer error lo cometi la propia empresa Southern Per. El 27 de marzo, cuando la protesta an no era masiva y los dirigentes haban aceptado conversar con la gobernadora regional de Arequipa, Yamila Osorio, el director de Relacio-nes Institucionales de la mina, Julio Morribern, anunci en RPP que el proyecto Ta Mara se cancelaba. Lo inaudito lleg pocas horas despus, cuando

    ri la madrugada del 9 de mayo.

    La incertidumbreMientras Vsquez Durand esta-ba en cuidados intensivos, ocu-rri otro hecho que manch es-ta vez la imagen de uno de los principales protagonistas de esta protesta, el dirigente del Frente de Defensa del Valle de Tambo, Pepe Julio Gutirrez. En un audio propalado por Wi-llax TV, Gutirrez conversa con un antiguo aliado suyo, el abo-gado Jess Gmez Urquizo, so-bre un pago de US$1,5 millones a cambio de acabar con las pro-testas. Gmez Urquizo asegur que nunca pag dicho monto y que solo quiso jalarle la lengua a Gutirrez.

    La empresa Southern, por su parte, neg haber enviado a al-guien a negociar con el dirigen-te. Este audio cambi el panora-ma en Cocachacra, donde vive el dirigente. Ayer, este Diario lo busc en su casa, pero sus fami-liares aseguraron que haba via-jado a Arequipa.

    La muerte del polica y los audios derivaron en el episo-dio ms reciente de este conflic-to social: la llegada, ayer, de un contingente de militares a Coca-chacra. El ministro del Interior ha sido enftico en sealar que la polica y los militares no estn ah para defender un proyecto minero, sino para garantizar el orden en una zona bloqueada por ms de un mes. No se ha de-clarado estado de emergencia, pero en la prctica lo es.

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