Número 30 Mayo 2011 Año XI 1 €

Un curso de cambios: hasta siempre, maestros. Bienvenidos Alberto, Ígor y Víctor. 48 años de vida del centro dan para mucho.

El presente curso ha estado marcado por la des-

pedida de varios de nuestros profesores. Se ju-

bilaron Ramón Manzano, Mari Carmen Vizcaíno

y Misuka Valentí. Mita Beutel decidió en diciem-

bre seguir su andadura profesional por otros ca-

minos. Para todos ellos, nuestro cariño y nues-

tros mejores deseos. Pág. 10 a 17

Revista hecha por socios y socias del Centro de Mayores de novacaixagalicia de A Coruña

En las fotografías, comen-

zando por la derecha y en el

sentido de las agujas del

reloj: Misuka dirigiendo al

coro, Mita en una represen-

tación, Ramón Manzano en

clase de pintura y Mari Car-

men entre los guiñoles.

Especial número 30 Más páginas, con

más información y mejores contenidos.

Desde la Dirección:

A los que os vais, gracias, siempre gracias Gracias. Siempre gracias por haber dado lo mejor de vosotros mismos. Por vuestra labor impecable, de entrega, en el equipo de este Centro de Mayores de Novacaixagalicia. En-horabuena por vuestro saber hacer profesio-nal.

Fdo: María Dolores Amor, directora del centro.

Nuevos triunfos para el Grupo de Teatro Pág. 8

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Carta de la Redacción

La Antorcha Es una publicación realizada por los socios del Centro de

Mayores novacaixagalicia de A Coruña.

Esta entidad no comparte necesariamente el contenido

de los artículos firmados por sus autores.

La Antorcha

REDACTORES: María del Carmen Anei-ros, Antonio Cachón, María Castelos,

Antonio Gago, Graciela García, Carmen Gómez, Mercedes González,

Esther López, Olga López, Pilar López, Ada Louzao, Jaime Meléndrez, Ovidio

Montoto, Rosario Pontones, Antonio Romero, Alfonso Rubio,

Marcelino Sánchez, Aurelia Segura, Matilde Varela, Amalia Villanueva

EDICIÓN, MAQUETACIÓN Y COORDINACIÓN: Esperanza Rey

DIRECCIÓN DEL CENTRO:

María Dolores Amor Nº D. L: C-858-2001

Estrenamos logotipo

Día a día

Que el paraguas de la Obra Social siga abierto por mucho tiempo

La Antorcha número 30 ve la luz bajo el prisma de dos colores, el verde y el azul, debido a la reciente fusión de Caixa Galicia y Caixanova, lo que da a nuestra publicación un radiante toque bicolor. Desde el equi-po de Redacción saludamos a novacaixagalicia y en especial al nuevo equipo de dirección de la Obra Social, del que esperamos que siga en la misma línea de apoyo para que La Antorcha siga creciendo, tanto en números como en contenidos, en difusión y en calidad.

Y no sólo La Antorcha, por supuesto. Sacamos este número en tiem-pos de incertidumbre, en los que somos muchos los que nos pregunta-mos qué va a pasar con la Obra Social. Queremos dejar aquí constancia de que somos conscientes de la importancia de su labor, de lo necesario que es para nosotros, y para miles de socios como nosotros, un centro como este que nos acoge, que nos permite seguir enriqueciéndonos, formándonos y abrir nuevas perspectivas en nuestras vidas.

Creemos que a nuestros lectores, que nos han seguido durante los veintinueve números publicados hasta el momento, les debemos muchas cosas. Hoy, llegados al número treinta, nos gustaría premiar su fidelidad ofreciéndoles lo mejor de nosotros mismos. Supone esto un gran esfuer-zo, mas la revista que ahora tienes entre tus manos ha contado con las enriquecedoras aportaciones de los nuevos compañeros. Este curso se han incorporado más voces a la Redacción. Todos ellos llegaron en octu-bre rebosantes de ideas y proyectos para la revista. Hemos intentando plasmarlo y podréis comprobar el resultado en cuanto la leáis.

El equipo de Redacción es ahora más grande. Los esfuerzos y co-nocimientos de los recién incorporados se han sumado a los de los vete-ranos. Su integración ha añadido nuevos valores y pensamos que en la revista se nota. Una vez más intentamos poner en vuestras manos una revista plural en contenidos —con artículos de opinión firmados por sus autores—, agradable y digna en su presentación.

Un afectuoso saludo a la anterior Obra Social, que desde el princi-pio confió en nosotros prestándonos todo tipo de ayuda, y un cariñoso recuerdo para los compañeros que por diversas razones hoy no se en-cuentran en la mesa con nosotros. A todos, nuestro agradecimiento.

Un número 30 que trae más

Más páginas, con más información y mejores contenidos.

Hacía un año que no nos veías porque decidimos concentrar es-fuerzos y sacar un número 30 es-pecial. Si habitualmente La Antor-cha contaba con 24 páginas, hoy tienes 40 entre tus manos. Y lo que hemos intentado aumentar no ha sido sólo la cantidad, sino por supuesto la calidad.

El precio sigue siendo simbólico. Hemos pasado de costar 50 cénti-mos a un euro, una cantidad que no sufraga los gastos de impre-sión. Gracias por leernos.

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Sumario

Para despedir el curso como se merece Agenda

CARTA DE LA REDACCIÓN. Nuestras expectativas y propósitos para animarte a que sigas acompañándonos.

AGENDA. Cerramos curso y hay un montón de actos interesantes que no debes perderte. Échale siempre un vistazo antes de salir de casa.

DÍA A DÍA. Un curso sin tregua. Repasamos algunas de las iniciativas más vistosas programadas desde el centro y realizadas fuera de él. Noticias y reportajes. Los últimos triunfos del grupo de teatro, las activi-dades nuevas y la presentación de La Antorcha número 30. Un año de cambios. Dejamos atrás un curso marcado por la marcha de varios de nuestros profesores. Les despedimos y saludamos a los nuevos con entrevistas, reportajes y semblanzas. El nuevo profesor de Musicote-rapia, Ígor Clemente, nos explica en qué consiste esta disciplina.

OPINIÓN. Los viajes, la alimentación, la familia, la mujer. Dedicamos artículos de opinión a estos y otros temas. Especial sobre La sociedad de la información. ¿Cómo la vivimos? ¿Cómo nos afecta? ¿Qué pensamos de Wikileaks?

EN MI CIUDAD. Como los cangrejos. Opinión sobre la reforma de la Avenida General Sanjurjo y recordamos como era A Coruña hace unos años.

MISCELÁNEA. Narraciones, divulgación, poemas, refranes. Artículos sobre Mario Var-gas Llosa, Julio Camba, Torrente Ballester y Lois Pereiro. Reflexiones tras la jubilación. Textos para pasar un rato agradable y estar al día. El cruci-grama de Alfonso Rubio.

BALANCE.

Cifras que hablan de la actividad durante el curso.

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de Mayo

La Antorcha ‘en vivo’. Presentamos el número 30 de la publicación.

LUGAR: Sede la Fundación novacaixagalicia.

Cantón Grande, 21-24. HORA: Siete de la tarde. CONTENIDO. Diálogos, textos informativos y lite-rarios con acompañamiento de imágenes. Inter-vención del grupo de socios del Taller de periodis-mo. Cerrará el acto una actuación de los alumnos de Musicoterapia. Algunos de los 21 miembros del Taller.

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44 La AntorchaLa Antorcha

Agenda

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de maio

A festa das nosas letras. Celebramos o Día das Letras Galegas homenaxe-ando ao poeta monfortino Lois Pereiro. LUGAR: Salón de actos do Centro de Maiores Novacaixagalicia de A Coruña. HORA: Seis da tarde. CONTIDO: Lectura e declamación de textos litera-rios con acompañamento de imaxes. Interveñen os socios do Clube de Lectura e do Obradoiro de Xornalismo. Pecha o acto o Coro do centro Algúns dos 20 membros do Clu-

be de lectura.

19

de mayo

Música en la Fundación. El Grupo de Instrumentos de Cuerda ofrecerá un concierto con piezas de su repertorio tradicional.

LUGAR: Sede la Fundación novacaixagalicia. Cantón Grande, 21-24. HORA: Siete de la tarde. CONTENIDO: Bajo la dirección del profesor Alfon-so Delgado interpretarán diversas piezas musica-les.

El Grupo de Instrumentos de Cuerda en una actuación.

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de mayo

Pintores con mucho que mostrar. Se abre la II edición de la Galería Sénior en la Sa-la de Exposiciones de la Fundación novacaixa-galicia. LUGAR: Sala de exposiciones de la Fundación

novacaixagalicia. C/ Médico Rodríguez, esquina

Juan Flórez. HORA: Siete de la tarde. CONTENIDO: Muestra de las obras realizadas por los alumnos de Dibujo y Pintura, entre ellas, una obra conjunta con fotos de todos los alumnos. La exposición estará abierta hasta el 30 de junio. La anterior edición de la Galería

Sénior estuvo muy concurrida.

Para despedir el curso

Desde el 9 de mayo

hasta final de

mes

Rastrillo solidario: Todos con El Refugio. El lunes día 9 abre sus puertas el rastrillo solida-rio. Todo lo recaudado irá para el albergue de transeúntes El Refugio, que gestiona la entidad benéfico social Padre Rubinos. LUGAR: Sala de tertulias del Centro de Mayores

de novacaixagalicia de A Coruña.

CONTENIDO: A la venta los objetos confecciona-dos por las socias del Taller Solidario del centro, bajo la batuta de Mari Carmen Vizcaíno. Parte del rastrillo del pasado año.

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de mayo

Guiñol musical. El Grupo de Guiñol vuelve a regalar una buena historia y motivos para la sonrisa.

LUGAR: Sede la Fundación novacaixagalicia. Cantón Grande, 21-24. HORA: Siete de la tarde CONTENIDO: Los muñecos del guiñol, bajo la dirección de Alberto Castellanos y manejados por los socios, representarán su zarzuela adap-tada y sus divertidas historias.

Una de las ‘actrices’ del guiñol.

1 de junio

Una tarde de risa. El Grupo de Dramatización del centro nos invita a reírnos con sus interpretaciones.

LUGAR: Sede la Fundación novacaixagalicia. Cantón Grande, 21-24. HORA: Siete de la tarde. CONTENIDO: Piezas divertidas que harán que enseñemos los dientes con las carcajadas. Actúan los miembros del Grupo de Dramatización bajo la dirección técnica de Víctor Díaz Barús.

31 de mayo

El regalo de la poesía. Tras la tarde de risa, un baño de belleza. El Grupo de Dramatización declamará piezas poéticas.

LUGAR: Sede la Fundación novacaixagalicia.

Cantón Grande, 21-24. HORA: Siete de la tarde. CONTENIDO: Una cuidada selección de piezas poéticas bajo la dirección técnica de Víctor Díaz Barús.

como se merece

Un momento de una representa-ción anterior de ‘Una tarde de risa’.

OTRAS CITAS CON EL GUIÑOL: 25 de abril: participa en el programa de festejo del 5º aniversario de la Residencia de Mayores Remanso con un atractivo musical.

2 de mayo: los muñecos del guiñol cuentan cuentos en la escuela infantil Carricanta.

13 de mayo: celebran con los niños de la Escuela Infantil Zalaeta de Novacaixagalicia O Día das Letras Gale-gas. Será una bonita fiesta intergeneracional.

23 de mayo: se van de fiesta al colegio Calasancias para celebrar el Día de los abuelos.

Cerramos el programa de actividades tras una intensa actividad en el centro y fuera de él.

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Día a día Un curso

El Taller Solidario ya nos tiene acos-tumbrados a la excelencia. El pulcro acabado de sus trabajos, la esmera-da organización de sus exposiciones y sobre todo, el cariño que se aprecia en cada uno de los objetos confeccio-nados, hace que en cada rastrillo se incremente la recaudación obtenida.

En la edición de diciembre del pasado año consiguieron 2.028,80 euros con la venta de sus objetos. Esta cantidad se donó íntegramente al albergue de transeúntes El Refugio, perteneciente a la entidad benéfico-social Padre Rubinos, que gestionan Religiosas de la Caridad.

Ahora abrirán de nuevo sus puer-tas el día 9 para otra vez donar lo recaudado a esta entidad. ¡No tardéis en visitarlo que los objetos vuelan!

Nuevo Rastrillo Solidario: apresúrate que vuela

El regalo de la música El Coro y la Agrupación Musical de cuerda no faltaron, a lo largo de todo el curso, a su cita mensual en la Re-sidencia Remanso. Allí, bajo la direc-ción de Misuka Valentí, regalaron sus interpretaciones. También actua-ron en las residencias de Padre Ru-binos, Sanitas, Caser y Esvida.

Un año más, en diciembre, interpre-taron panxoliñas en el XIII Encontro de Música no Nadal organizado por el Ayuntamiento de A Coruña en el Teatro Rosalía de Castro.

Echamos una ojeada a algunas de las más iniciativas más destacadas.

sin tregua

77 La AntorchaLa Antorcha

Un grupo de muñecos con mucho trabajo Y un año más el grupo de mu-ñecos más trabajadores que se conoce siguió cosechando aplausos y risas. En octubre estuvieron en Narón, en el cen-tro Odeón Dolce Vita. En no-viembre en la Residencia Re-manso.

En diciembre, en la Casa de Castilla la Mancha y en la Resi-dencia San Francisco Javier. Fueron todas ellas actuaciones bajo la coordinación de su prin-cipal artífice, Mari Carmen Viz-caíno, que en enero se jubiló y

pasó la batuta a Alberto Castella-nos Vizcaíno.

A lo largo del presente año han actuado en el Colegio Santiago Apóstol, en las Residencias Agari-mo Geriatros y Remanso, en la

Escuela Infantil Zalaeta de nova-caixagalicia, y en el Colegio Cala-sancias, durante la celebración del Día de los Abuelos.

La Televisión de Galicia se acercó a grabarles en dos ocasiones.

Durante una actuación.

Cuerdas en acción El Grupo de Instrumentos de Cuerda, que dirige Alfonso Delgado, ofreció un bonito concierto de Navidad en el salón de actos del centro el pasado mes de diciembre. El 19 de mayo podremos dis-frutar de nuevo de su buen hacer en la sede de la

Fundación novacaixagalicia.

Salidas ‘con mucho arte’ Los grupos de Historia del Arte, Humanidades y Literatu-ra, fieles a su inquietud por conocer más de estas disci-plinas, realizaron varias visitas a exposiciones y mues-tras en el exterior del centro. Con su profesora, Lucía Fernández, acudieron a la muestra sobre el Modernismo en el pasado mes de diciembre. Fue en el Museo de Bellas Artes de A Coruña.

En febrero visitaron la exposición sobre Luís Seoane

que estuvo en la sede de la Fundación novacaixagali-cia. Y ya en marzo, acudieron a la Fundación Barrié de

la Maza para disfrutar de la muestra Urbanidades, del arquitecto portugués Gonçalo Byrne.

Siguen triunfando sobre las ta-blas. El Grupo de Teatro del centro recogió el 27 de marzo, por tercer año consecutivo, el premio al “Mellor espectáculo para o público” en la VII Mostra de Teatro Aficionado Lugrís Freire del Concello de Sada, .

Los espectadores reconocían así su esmerado trabajo en la puesta en escena de Las brujas de Salem, de Arthur Miller. Re-pitieron éxito con esta obra el pasado 13 de abril en el Teatro Colón Novacaixagalicia de A Coruña. Un día antes, los aplau-sos atronaron con Yerma. La recaudación de la taquilla se destinó íntegramente a la Aso-ciación Parkinson Galicia.

Por OLGA LÓPEZ FERNÁNDEZ

Por tercer año, premio ‘ao mellor espectáculo’ na Mostra de Teatro Aficionado do Concello de Sada

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Un momento de la representación de ‘Las brujas de Salem’.

Día a día El público vuelve a premiar al Grupo de Teatro

E s bonito comprobar co-mo un grupo de teatro

cumple muchas expectativas. Es una terapia de memoria, ilusión, dedicación… que hace que tu vi-da sea más amena.

El teatro te permite meterte en muchas vidas. Cada personaje, cada historia, transforma tu vida cotidiana —a veces rutinaria—, en otra cosa distinta. Tratas de en-contrar la mejor forma de encarar

el personaje que te corresponde interpretar, por muy pequeño que sea el papel.

Con la ayuda del director del gru-po, Víctor Díaz Barús —que siem-pre exige lo mejor de nosotros mismos—, mejoras día a día tu memoria, tu dicción, tu expresión y tu esfuerzo. Todo ello culmina y te compensa cuando puedes mostrar tu trabajo ante la observa-ción y mirada de los demás, y es-cuchas un aplauso complacido.

Pero un grupo de teatro no es sólo eso. También es relación, compañerismo, amistad, un espa-cio donde compartes horas de tu vida con tus compañeros. Es re-cuerdo para aquellos que nos abandonaron, y desde luego para aquellos que por distintas causas lo dejaron, como por ejemplo Enri-que Alisedo. O para los que ya no actúan, como Pilar Santamaría, a

quien debemos tanto en nuestro grupo y que sigue en la brecha, preocupándose como siempre lo ha hecho de nuestro vestuario, aunque ahora necesita más ayu-da. Pero ahí está, asistiendo a los ensayos para dar su opinión so-bre nuestras actuaciones. ¡Gracias Pilar!

Trabajadores y solidarios

Cualquiera que les haya visto podrá imaginarse que no es fácil subir un día, y otro, a entregarse de ese modo a sus interpretaciones. Actuaron los días 12 y 13 de abril para entregar la recaudación a la Asociación Parkinson Gali-cia. El 8 de abril habían intervenido en el Certamen de Teatro escolar y afi-cionado Calvo Sotelo y unos días antes, el 25 de marzo, en Sada.

El trofeo ganado en Sada.

La AntorchaLa Antorcha

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La Antorcha ‘en vivo’ en la sede de la Fundación

En el taller, preparando esta edición de la revista.

Los veintiún miembros del Taller de Periodismo y la periodista Es-peranza Rey ultimaban, al cierre de esta edición, la preparación de la presentación pública de este número 30 de la revista La Antor-cha en la sede de la Fundación Novacaixagalicia, en el Cantón Grande de A Coruña. El acto contará con el inestimable apo-yo de los participantes en Musi-coterapia. Ellos cerrarán la pre-sentación bajo la batuta de su profesor, Ígor Clemente Lores.

Los veintiún redactores del taller estuvimos trabajando desde el pasado mes de marzo en este acto en el que combinamos diálo-gos, textos informativos y litera-rios con imágenes y música. In-tentamos así reproducir en una hora los contenidos habituales de

La Antorcha. Es la segunda oca-sión en que presentamos la revis-ta en un acto público en la sede de la Fundación.

En la anterior ocasión, en mayo

del pasado año, la experiencia resultó muy satisfactoria y, de nuevo en esta ocasión, espera-mos contar con vuestra presencia y vuestro apoyo. Muchas gracias.

‘Este taller es una delicia’ Descubre y disfruta la Literatura, una actividad que comenzó su andadura el presente curso.

Una delicia es preguntar a Lucía Fernández Gil, profesora del taller Descubre y disfruta la Literatura, que este curso imparte por prime-ra vez en el centro de mayores, los lunes de doce a una de la tar-de.

Lucía, una profesora joven, alegre y jovial, es licenciada en Historia del Arte; esto contribuye y facilita que el taller tenga como objetivos no sólo conocer, analizar, desme-nuzar y debatir obras literarias, sino también situar los hechos en

su contexto histórico y artístico.

Las obras son elegidas cronológi-camente. Partieron de las Canti-

gas de Alfonso X el Sabio y en este momento están en el siglo XVI.

Otro objetivo fundamental es que guste y los alumnos acudan con-tentos. Y así es: “Estoy encanta-da. Es una delicia este taller”, co-menta una de sus alumnas. “Es un disfrute”, añaden otras.

“Da gusto. Es un placer, muy enri-quecedor, demuestran gran in-terés, sus preguntas son muy ra-zonables, con mucho respeto, muy educados”. De este modo nos responde Lucía cuando le planteamos qué supone dar clase a alumnos jubilados.

De esta forma tan amena, profe-sora y alumnos disfrutan y descu-bren la Literatura.

Por MARÍA CASTELOS y AMALIA VILLANUEVA

Lucía Fernández Gil.

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Día a día Grazas por permanecer

De cómo somos quen somos grazas á forza de quen nos rodea

Ninguén marcha, todos permanecedes. É este un número da revista con contidos marcados pola despe-dida. Feliz xubilación Mari Carmen, Ramón, Misuka. Moi boa sorte Mita. Que recollades nos tempos que veñen todo o que sementastes. É o mellor que pode-mos desexarvos porque sabemos o que deixades atrás.

Este centro é o que é porque vós pasastes por aquí. E notouse. Craro que se notou. Como se nota a vosa non presenza, aínda que non a vosa ausencia. Porque seguides con nós. Cos profesores —e falo por min pero creo que tamén por todos os que vos coñece-ron— porque sodes un exemplo de traballo ben feito, de implicación, de compromiso co día a día aínda que sumárades moitas xornadas, moito esforzo, moita intelixencia e empatía para superar —uuf…— seguro que moitas complicacións.

Estivestes apoiados, iso sí, pola mellor das compañas, pola valoración sinceira de persoas —os socios e so-cias— que vos recoñeceron o esforzo, que vos que-ren, que seguro vos envolveron coas súas palabras amables e agarimosas, co cálido peso desa corporei-dade súa que se enche de sentimentos co paso dos anos. Tamén marcharon moitos deles. Este tamén é un ano, para min, para moitos, marcado polas despe-didas, polas ausencias. Mais os que se foron, por un-has ou outras razón, seguen estando aí.

A desbordante vitalidade de Maruja segue a animar o clube de lectura. A bonita candidez de María Luisa segue a traerme o sorriso cando a recordo, a inmen-sa sabiduría de Malala, a teimosía de Paco, a infantil expresión de Jesús, a escoita fondamente respectuo-sa de Carmen, a aberta delicadeza de Luisa, o valor de María José, o firme compromiso de Enrique... Van-se. Ides marchando. Pero tede sempre moi, moi pre-sente que seguides aquí. Que eu son quen son por-que estades aquí. E estaredes aínda que marchedes. Grazas por permanecer.

Por ESPERANZA REY CAO

Un curso de cambios: maestros que se

Ramón Manzano: todo un Por AURELIA SEGURA DOMÍNGUEZ

Decir clases de pintura en el Centro de Mayores No-vacaixagalicia de A Coruña es recordar a Ramón Manzano. Por eso, ahora que acaba de jubilarse, quiero empezar por agradecerle que durante todos estos años haya puesto su entusiasmo en lograr que sus alumnos pintásemos con tan buenos resultados, como se demostró en la exposición de fin de curso del pasado año.

Tuve la suerte de crecer en una familia en la que se admiraba enormemente el arte. Sobre todo la música y la pintura, pero fue una de mis amigas quien me habló de un gran profesor y artista.

Me invitó a que la acompañase a una exposición y allí lo vi. Enseguida lo reconocí y me vino a la memo-ria el recuerdo de un niño en los jardines de Méndez Núñez jugando con su hermana. El recuerdo de la infancia, unido al sabor que me dejó admirar sus cua-dros, despertó el deseo de asistir a sus clases y así lo hice durante varios años.

Cuando me ofrecieron escribir un artículo sobre Ramón Manzano se cruzaron en mi cabeza muchas ideas, pero sobre todo hay una: su condición de artis-ta y dotes de pintor, como demuestra su biografía y obra que, aunque ya conocemos, me gustaría trazar en unas líneas.

Ramón Manzano nace en La Coruña en 1945. Co-mienza a recibir enseñanza de dibujo del pintor y

Manzano, el segundo por la dcha., enseñando.

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van y profesores que llegan

lujo al que pedimos que siga pintando

académico Quintas Goyanes en la Escuela de Artes y Oficios. A par-tir de 1972 comienza su andadura personal y autodidacta. Se centra preferentemente en la figura humana y el retrato. Paulatina-mente, su obra adquiere un estilo propio.

Ha protagonizado numerosas ex-posiciones individuales y partici-pado en diversas muestras colec-tivas y conjuntas en La Coruña, Ferrol, Madrid, Santander… Ha colaborado en algunas ocasiones como ilustrador de la prensa coru-ñesa. Participó en un curso de

Grabado Calcográfico organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en 1988.

Ha sido galardonado en múltiples certámenes internacionales, des-tacando los otorgados en el Salón Internacional de Evian (Francia), el Premio Antigua Florencia con el título Arciere dell“Arte y en 2003 el concedido con motivo del XXV aniversario de la Constitución Es-pañola por el Museo Casa de la Moneda (Madrid).

Su obra se encuentra principal-mente en colecciones privadas de España, Francia y Dinamarca, así

como también en la Fundación María José Jove, Fundación San-tiago Rey Fernández Latorre y en la Fundación Torrepujales. Tam-bién en las colecciones del Pala-cio Municipal de La Coruña y del Museo Casa de la Moneda, entre otras.

Ya sólo me queda decir que ha sido un privilegio haberle tenido como profesor y pedirle que siga muchos años de creación artística pues un cuadro, aunque transmite cosas distintas según quien lo mi-re, sobre todo nos dice cómo es el autor.

E benvido Victoriano, o animoso novo profesor

O primeiro día deste curso pre-sentouse a directora do centro na aula de Debuxo e Pintura. María Dolores Amor comunicounos que don Ramón Manzano se xubilara, e presentounos a un rapaz novo que a acompañaba como o novo profesor que ía impartirnos as cla-ses.

O novo “profe” chámase Victoria-no Fernández, pero dixo que podíamos chamalo Víctor. É un xoven cunhas ideas innovadoras que nos da seguridade, ánimo e confianza nas nosas posibilida-des. É moi optimista e agarimoso. Ten moita paciencia e un carácter moi agradable.

Contounos que naceu en A Coru-ña o 25 de decembro de 1971. Comentou risoño: “Vaia Nadal pa-ra miña nai”. Tamén explicou que somentes fixo primaria e Bachare-

lato e que no seu inicio na pintura foi autodidacta. Despois perfeccio-nouse nos talleres de Eduardo Arro-yo, Agustín Ibarro-la e Manolo Teji-do.

Foi o profesor Manzano quen o puxo en contacto con María Dolo-res Amor, directora do Centro de Maiores de A Coruña. Victoriano prantexounos os seus proxectos para o curso: preparar a exposi-ción de maio e una obra conxunta con fotos antigas de tódolos alum-nos.

Da clase a catro grupos de vinte alumnos dúas horas pola mañán, catro días á semana. Ademáis, adícase a pintar, e a finais do

2010 interveu nunha exposición con outros pintores aquí, na Coru-ña.

Os seus alumnos defíneno como un estupendo profesor do que aprenderon cousas e técnicas no-vedosas. O nivel de satisfacción din que é excelente. Dámoslle a benvida e esperamos que estea contento connosco coma nosotros con él.

Por MATILDE VARELA VARELA

Traballamos nunha obra conxunta con fotos.

La AntorchaLa Antorcha

Un curso de cambios: maestros que

—ENTREVISTA: Mari Carmen Vizcaíno, coordinadora del Taller Solidario del centro,

‘Me voy a hacer socia del centro, los de Mus ya Tras cuarenta y ocho años tra-bajando, a Mari Carmen Viz-caíno se le está haciendo muy duro jubilarse. Es de esas per-sonas a las que tan pronto la conoces ya ves inmediata-mente que ’no para’. Por eso, aunque su vida profesional haya terminado, sigue embar-cada como voluntaria organi-zando el Taller solidario del centro, piensa ya en formar parte del equipo de Mus y, a tenor de lo que nos ha conta-do, seguro que tutelará a sus dos hijos ligados al centro: el real, Alberto Castellanos, que se ha hecho cargo del Grupo de guiñol, y el propio guiñol, al que siente como un hijo.

—Ahora que te acabas de jubi-lar, nos gustaría hacer un re-corrido de toda tu trayectoria profesional con nosotros y la primera pregunta pudiera ser: ¿Cómo y cuándo fue tu primer contacto con el Centro?

—Llevo aquí no sé si 27 ó 30 años. Yo soy maestra y empecé con manualidades. En principio, la cafetería estaba aquí donde esta-mos (en la planta baja) y aquí fue donde empezamos las clases. Más tarde pasamos al sótano. Después de iniciar manualidades, las pro-pias alumnas demandaron una clase de cultura general, por lo que se puso un día más de clase. —¿Existía el guiñol cuando tu empezaste? —Fue en Eirís donde empecé. Cuando inicie las clases decidí for-mar un grupo de guiñol. En el año noventa abrimos un guiñol experi-

baja muy a gusto. Es muy impor-tante el guiñol para la psicomotri-cidad. Los muñecos no tienen vida propia y es necesario darles movi-miento. Es difícil y cansado mane-jarlos. —¿De dónde proceden las obras que representáis? —El guiñol llegó a nosotros a través del camino de Santiago, allí se hacían actuaciones en las pla-zas de los pueblos para poder co-mer. Cuando imaginé el guiñol pensé en quien era la persona idónea para contárselo a los niños y decidí que nadie mejor que su abuelo. Hay que tener en cuenta que son ellos quienes transmiten el guiñol. En cuanto a los cuentos, son los tradicionales. —¿En que lugares actuáis? —Vamos a donde nos llaman y lo hacemos desinteresadamente.

mental que llegó a ser una familia supernumerosa. —¿Cuántos muñecos compo-nen el elenco de personajes?—Hay dos tipos de muñecos, los de cabeza dura y los “bocones”, que son muñecos de tela que ma-nipulamos nosotros. Los de cabe-za dura son más fáciles de contar, pero los otros son alrededor de cien muñecos. Tenemos un arcón lleno de utillaje, sobre todo de animales. —¿Y cuantas personas compo-nen el elenco de “artistas”, pues es un arte darles voz y movimiento? —Para dar vida a los muñecos so-lo contamos con un hombre, a veces dos, por lo que algunas se-ñoras hacen papeles de hombres si tienen una voz grave. El grupo de guiñol es muy unido y se tra-

Entrevista

Mari Carmen, una más entre sus muñecos.

1212 La AntorchaLa Antorcha

se van y profesores que llegan

recién jubilada como directora del Grupo de Guiñol y profesora de Manualidades—

pueden contar conmigo’

Hemos viajado fuera de La Coru-ña, a lugares de Orense y Lugo. —¿Tenéis muchas horas de ensayo? —Sí, dedicamos mucho tiempo al ensayo y esto es un problema pues solo disponemos de dos horas y media por la mañana. Al-gunas veces no podemos ensayar, aunque siempre encontramos un hueco. Actualmente tenemos tres obras de estreno. —¿Quién disfruta más, los ma-yores o los niños? —Creo que por igual. En cuanto a mí, disfruto por partida doble, cuando en mi cabeza se está ges-tando el espectáculo y después en la actuación, que me lo paso en grande. Os contaré una anécdota: Yo estaba ingresada en el Sanato-rio Belén, me habían operado. Y todavía entre la bruma de la anes-tesia, le dije a mi marido: “Se me está ocurriendo una zarzuela con muñecos, como si los pariera yo”. Cuando ves tus ideas llevadas a la realidad piensas que el proyecto nació en el Sanatorio Belén. —¿Ahora que tú lo dejas, quien se hace cargo? —El guiñol es mi hijo, yo lo gesté y ha ido creciendo conmigo. Aho-ra, ya jubilada, el guiñol no puedo dejarlo en manos ajenas. Mi hijo s e e n c a r g a r á d e e l . Ya hizo una actividad parecida pero enfocada al fondo marino. Salió muy contento el primer día. Me pareció la persona idónea para heredarlo. Yo estoy tutelándolo ¡Se les coge mucho cariño a los muñecos!

Por PILAR LÓPEZ PENA y ALFONSO RUBIO

Ahora que está “al otro lado”, que la profesora es una jubila-da más, se aprecia que este paso le está costando, pero Mari Carmen no se arredra. Sus proyectos para esta re-cién iniciada etapa están mar-cados por su gran vitalidad y por su compromiso solidario. —¿En qué otras actividades participas? —Voy a seguir participando en el Taller Solidario como una socia más, desinteresadamente. Lo que hacemos es muy importante, hay mucha gente a la que hay que ayudar. En realidad lo que reparti-mos es felicidad. Para mí el eje central es la familia y mi trabajo, ahí conecto mi alegría. La familia se ve reforzada cuando te jubilas pero para mí fue muy

traumático, ya que llevo cuarenta y ocho años trabajando y no sé hacer otra cosa. El trabajo sociali-zado fue muy importante para mí. Es muy fuerte romper con todo, aunque ahora dedicaré más tiem-po a mi familia. Al menos tengo la oportunidad de seguir aquí como una jubilada más, entre compañe-ros a los que tengo mucho cariño. También he escrito muchos cuen-tos, uno de ellos trata sobre un tren y otro sobre un dialogo entre un lacón y una hamburguesa. Además, yo suelo viajar mucho al extranjero y siempre traigo ideas nuevas. —¿Sigues siendo buena juga-dora de Mus? —Sí, me voy a hacer socia del centro y entonces ya puede el equipo contar conmigo.

‘Seguiré como una jubilada más, entre compañeros a los que tengo cariño’

Entre algunas de las piezas confeccionadas en el Taller Solidario.

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Día a día

Un curso de cambios: maestros que

Misuka, energía y positividad ‘Deseo que el coro siga triunfando y sea siempre fiel a si mismo’

Por ANTONIO CACHÓN V.

“A los 17 años yo ya estaba en el mundo de la música, y a los 22 tenía un grupo musical llamado Los Misukos”. Así se expresa Mi-suka Valentí. Integraban Los Mi-sukos varios jóvenes, entre ellos cuatro religiosas y un hermano suyo que era el solista.

“Actuábamos en un programa de TVE dirigido por Boby Deglané, llamado Club Mediodía. Estos fue-ron mis primeros pasos en el am-biente musical”, relata esta vete-ranísima directora de corales. “Cuando tenía 24 años fue cuan-do comencé a dirigir este coro, concretamente en el año 1987, aunque ya hacía unos años que estaba formado”. Misuka destaca el extraordinario comportamiento de los coralistas desde aquel en-tonces.

“Yo ya daba clases de música y canto en el colegio de Las Escla-vas, que todavía sigo dando, además de algún otro coro, cuan-do me llamó la directora del cen-tro, María Dolores Amor, para lle-var esta coral”, explica Misuka,

Misuka Valentí sostiene su guitarra durante una actuación.

para luego añadir: “Siempre que-dará en mi mente la suerte que tuve por haber aceptado, por lo que significó para mis ambiciones y por la calidad de las personas que siempre actuaron en el coro”.

La recién jubilada directora del coro destaca “la compenetración y la concordia” existentes entre la coral y ella. La relación, dice, es “excelente” y esto, considera Mi-

suka, se transmite en el ambiente de alegría y entusiasmo que se aprecia en sus actuaciones. “Damos —así lo creemos—, como una sensación de felicidad para todos los residentes que visitamos y nos escuchan. Ellos nos acom-pañan en canciones ya prepara-das para que canten con noso-tros”.

“La verdad es que de estas perso-nas mayores ¡y muy mayores! una aprende muchísimo. Tienen sabiduría y es un lujo trabajar con ellos. Ya en los ensayos son una auténtica gozada, por el entusias-mo que ponen”, asegura enfática Misuka para luego añadir: “Yo tengo muy cerca la jubilación y para mí será triste tener que de-jarles, pero la vida es así. Tendré un recuerdo imborrable de ellos, y espero ser también recordada con cariño.

Ya en la coral se comenta que su puesto será muy difícil de llenar. “Deseo que el coro siga triunfando y que sea siempre fiel a sí mis-mo”, subraya Misuka.

Una coral con garra donde la unión hace la fuerza En un constante ir y venir, la veterana Coral del Centro de Mayores de Novacaixagalicia de A Co-

ruña da satisfacción a todos aquellos que tienen la suerte de escucharla.

Fundada hace 36 años, y formada por socios y so-cias del centro tiene una repercusión tan grande que allá por donde va suele dejar una estela de felicidad con sus canciones y acompañamiento de instrumen-tos de cuerda comenta esto una de las fundadoras del coro, Perla Torreiro. También quiere dejar cons-

tancia de que la primera causante de este triunfo es su directora, Misuka Valentí. “Es una persona muy comprometida, sociable y humana. Se concentra mu-cho con nosotros y es un ejemplo de coordinación, sobriedad y también alegría. Los ensayos —añade Perla—, son muy relajantes. Todos deseamos que

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se van y profesores que llegan

lleguen los martes y viernes para venir”. Perla confie-sa que están un poco preocupados ante la pronta jubilación de Misuka: “La echaremos mucho de me-nos; no en balde hace muchos años que comparti-mos escenario”.

Esta veterana miembro del coro afirma también: “Aunque somos jubilados, los años no son motivo para dejar de cantar si a uno le gusta, porque si bien las voces no son tan frescas como en nuestra juven-tud, hay aquel refrán que dice que el que tuvo siem-pre retuvo”. El coro se atreve con un repertorio muy amplio y diverso: “canciones gallegas, de otras regio-nes e incluso melódicas, como tangos, boleros… de nuestra juventud”, apunta Perla.

Actúan con frecuencia en residencias y fundaciones además de en algún escenario teatral. “Aquí en la coral suele haber muy buenos cantantes. Muchos de nosotros estuvimos en corales muy famosas como El Eco y Cántigas da Terra. Incluso tenemos un pande-retero que actuó con el Ballet Gallego Rey de Viana”.

Perla no quiere dejar de mencionar a esta persona que, considera, es el “alma” de la misma, Lolo, el panderetero, que anima muchísimo al grupo. La vete-rana coralista subraya por último la felicidad que pro-duce cantar con los demás compañeros. “Es algo que supera nuestra imaginación. La música y el canto son un medio que hace que las personas, tanto las que cantan como las que escuchan, se integren en algo que nos hace olvidar, aunque sólo sea por un mo-mento, nuestras preocupaciones”.

Añoranza Por ANTONIO ROMERO RAMOS

En el salón de la música hermosa del centro de mayores, donde cantamos, todos esperamos, mujeres y hombres, a nuestra amable directora del coro, Misuka Valentí García, muy castellana. Nacida en el barrio de Chamberí, del famoso Madrid, de la alegría, ciudad de simpatía universal, de las zarzuelas y la música clásica, el chotis, la bombilla y la Gran Vía. Por ser de la ciudad de la sonrisa tiene en su mirada la bonita picardía. Con sus ojitos verdes, color de oliva, de un amor de mirar y de caricias que nos hace felices cuando nos mira. Le acompaña el arte de su música y la dulzura de su sonora guitarra. Es como una dulce y hermosa sirena que en las noches serenas cuando canta el mar se suaviza para escucharla. Todos te contemplamos cuando cantas. Las canciones al son de tu guitarra son el renacer de la fe y esperanza. Expresas el sentir de la confianza a través de tus canciones amadas. Cántanos, Misuka, como cantas, con esas hermosas notas melódicas a veces de presagios y añoranzas, o de alegrías y lágrimas y a las que tú sabes darles nostalgia. Hay en ti un sentimiento muy humano de los que a la vida también cantan sin temores a lo que venga mañana. Como los compañeros que cantaban junto a nosotros cuando estaban. Y en el silencio de los recuerdos tienes el sentir del ansia humana. Rezad por ellos y por sus almas. Volvamos a cantar de nuevo juntos los cantos de las dulces palabras. Cuando los caminos nos separen a través de sus rutas tan humanas, sabemos que nos llevarás contigo y nuestras voces quedarán grabadas cantando a las libertades amadas. Seguirán cantando otros compañeros los cantos que todos cantábamos para las hermosas y dulces palabras. Y otros te dirán en la distancia: eres Misuka, la compañera del alma.

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El ‘corito’ en una actuación con Misuka al frente.

La AntorchaLa Antorcha

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Día a día

C uando me preguntan por mi trabajo y digo que soy musicotera-peuta se produce un

corto silencio; sólo dura un segun-do o a lo sumo dos, pero es tiem-po suficiente para indicarme que la musicoterapia todavía no acaba de presentarse al mundo.

Como su nombre indica, "musicoterapia" consiste en reali-zar una terapia a través de la música. Pero, obviamente (no tan obvio para muchas, demasiadas personas), la musicoterapia es más que eso, empezando porque la musicoterapia no se imparte solo a aquellos individuos que ne-cesitan ayuda o que tienen algún tipo de patología sino que es una disciplina que necesitamos todos a lo largo de nuestra vida.

La música es un lenguaje univer-sal que destaca por su poder sub-jetivo. La música es capaz de transmitir sentimientos e ideas que las palabras no alcanzan. Cuando trabajamos con música estamos aprendiendo a escuchar, a reflexionar, a controlarnos, a ser críticos con el medio que nos ro-dea y con nosotros mismos, pero sobre todo a expresarnos. Estas

son habilidades que, en estos tiempos que vivimos, azotados por una crisis, no sólo económica, sino de moral y de conciencia, son tremendamente necesarias e, irónicamente, han caído en el desuso.

En este centro tengo la suerte de impartir dos actividades que me sumergen en la música; Musico-terapia y Canciones de nuestra vida.

El objetivo de las sesiones de mu-sicoterapia que imparto es lograr el bienestar personal en todas sus formas posibles. Para ello me val-go de otras disciplinas como la “arteterapia”, la “risoterapia,” el “psicodrama” (teatro-terapia)... ya que la musicoterapia está conec-tada con todas. Además, en estas sesiones se fomenta el contacto entre las personas, lo que ayuda a disminuir el sentimiento de ais-lamiento y soledad que sentimos en muchos momentos de la vida. La mayoría de actividades que realizamos son grupales y coope-

rativas. Los grupos son siempre diferentes para que todos trate-mos con todos.

Particularmente, me gusta mez-clarme con las personas de mis sesiones hasta llegar a ser uno más de ellos y de esta forma con-vertir las sesiones en "reuniones de amigos". No he tenido proble-ma alguno para lograrlo. Desde el primer momento me he sentido arropado y querido por todos.

Canciones de nuestra vida es un espacio en donde nos reuni-mos para cantar aquellas cancio-nes con las que los participantes han convivido a lo largo de su vi-da. Estas sesiones también son un tipo de musicoterapia sólo que más centradas en el canto. Las canciones, al igual que los olores, pueden hacernos rememorar bo-nitos momentos de nuestro pasa-do.

En canciones de nuestra vida la música y la lírica se fusionan para formar un lenguaje directo y sin fisuras. He de admitirlo: he tenido que documentarme bastante debi-do a que la mayoría de las cancio-nes que cantamos son de una época en la que aún no había na-cido. Este hecho hace que tenga que sumergirme en la cultura de aquellos tiempos, conocer un po-co más nuestra historia, lo que también me permite conocer y entender un poco más a las per-sonas con las que trato. Esto es francamente para mí y para todos

Musicoterapia, ¿qué es eso?

Por ÍGOR CLEMENTE LORES Profesor de Musicoterapia

Con la música aprendemos a escuchar,

a reflexionar, a controlarnos, a ser críticos y, sobre todo, a

expresarnos

La AntorchaLa Antorcha

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muy importante.

Dicen que si uno trabaja en lo que le gusta, ya no tiene que trabajar nunca más, en mi caso también me veo directamente beneficiado de él porque cada sesión de musi-

coterapia o de canciones de nues-tra vida que imparto a los demás también me la imparto a mí mis-mo.

Con esto concluyo. Me gustaría despedirme dando las gracias a

‘Una pérdida tremenda’

Mita Beutel, la cuarta, durante una actuación.

“La echamos muchísimo de menos. Fue una pérdida tremenda. Yo nunca en mi vida habría actuado como ella logró que lo hiciera. En sus clases me sentía totalmente distinta”. Quien habla es Mila Gallego. Asistía a las clases que impartía Mita Beutel en el centro. En diciem-bre, Mita decidió recorrer otro camino profesional y dejar de impartir Musicoterapia y Danza Natural en el centro.

Todos sus alumnos le desean mucha suerte a pesar de que sienten su falta. “Por supuesto que Igor —el profesor que ha sustituido a Mita—, es muy bueno y reconocemos que se lo ponemos difícil por sustituir a alguien tan valioso como Mita”, apunta otra de las alumnas.

“Ella es muy dulce. Muy comprensiva”, señala Casi Araujo sobre Mita. “Estaba siempre pendiente de todas. Yo nunca habría salido a bailar y con ella lo hacía”, subraya Mila con la sonrisa que evoca el recuerdo en los labios. Mita Beutel abrió nuevas vías en el centro: llevaba casi una década impartiendo Cuerpo y salud, Danza Natural y Musicotera-pia. Las tres actividades hubieron de desdoblarse en varios grupos an-te la demanda de los socios.

Sus alumnas de Danza Natural colaboraron con el Grupo de Teatro en varias de sus representaciones. Aportaban armonía y belleza con sus delicados movimientos. Desde La Antorcha todos deseamos a Mita lo mejor en su nueva andadura y le agradecemos lo que aquí aportó, del mismo modo que saludamos a Ígor y esperamos para él lo mejor.

Por LA REDACCIÓN

Me piden unas líneas para La An-torcha. Debería serme fácil plas-mar en sus páginas los recuerdos de tantos años. En este periódico he puesto mis ilusiones literarias, mis inquietudes periodísticas. He pertenecido a su equipo de redac-ción desde el número 2 de la re-vista y he tenido en las clases de periodismo magníficos compañe-ros y compañeras bajo la tutoría magistral de Esperanza.

Han sido unos años magníficos que me han servido para formar una faceta desconocida de mi per-sona. La amistad, la camaradería, el intercambio de opiniones y pa-receres creo que nos han enrique-cido. Todos somos algo distintos cuando pasamos por el Taller de periodismo. Con ilusión y el traba-jo en equipo hemos visto crecer esta revista y hemos dejado en ella nuestras vivencias.

Es un magnífico trabajo. Ahora que no puedo compartir con voso-tros el día a día de la redacción tengo que confesar que os echo de menos; estad seguros de que procuraré ayudaros siempre en lo que pueda con la amistad y el compañerismo de siempre. Creo que debo finalizar; los recuerdos siempre traen nostalgia y esto quiere se un hasta luego, amigos.

Por ENRIQUE ALISEDO

La Antorcha por hacerme un hue-co en su revista, espero que siga con más y más números, y con una cita del célebre filósofo Frie-drich Nietzsche: ‘La vida sin música sería un error’

Siempre con vosotros

Opinión Concepción Arenal Siento que es para mí un deber ineludible dar las gracias y mostrar mi reconocimiento a un grupo de mujeres que nos precedieron en el tiempo y cuyo trabajo no ha sido suficientemente valorado.

Por PILAR LÓPEZ PENA

E llas alzaron su voz, enfrentándose a cir-cunstancias adversas, con el propósito de

abrir una puerta para que, a través de ella, las muje-res pudieran incorporarse a la vida pública y reclamar sus derechos. Eran tiempos difíciles. Concepción Arenal, nacida en el año 1820 en Ferrol, se vio obli-gada a vestir ropas masculinas para poder acudir co-mo oyente a la Universidad Complutense de Madrid, ya que en esa época la educación universitaria esta-ba vedada a la mujer.

Desde muy joven luchó por romper las normas esta-blecidas contra la mujer, a la que consideraba un ser marginado a quien había que ayudar y educar, reivin-dicando la igualdad de derechos. Su vida fue una lu-cha constante. Con ella nace el feminismo en Espa-ña.

Mi reconocimiento a Concepción Arenal y a todas las mujeres que con su valentía y decisión consiguieron romper las cadenas que atenazaban a la mujer. A ellas les debemos los derechos que actualmente dis-frutamos. Trabajaron con firmeza por un cambio en el Código Civil, por el derecho al voto y, sobre todo, en contra de la violencia de género, que todavía un siglo más tarde no hemos conseguido erradicar. ¡Nunca se lo agradeceremos bastante!

‘Abrid escuelas y se cerrarán cárceles’ Concepción Arenal

1818

Poema La Pera Verde Y Podrida de Concepción Arenal

Iba un día con su abuelo paseando un colegial y debajo de un peral halló una pera en el suelo. Mírala, cógela, muerde; mas presto arroja el bocado, que muy podrida de un lado estaba y del otro verde. Abuelo, ¿cómo será decía el chico escupiendo, que esta pera que estoy viendo podrida, aunque verde, está? El anciano con dulzura dijo: vínole ese mal por caerse del peral sin que estuviera madura. Lo propio sucede al necio que, estando en la adolescencia, desatiende la prudencia de sus padres con desprecio; al que en sí propio confía como en recurso fecundo e ignorando lo que es mundo engólfase en él sin gúia. Quien así intenta negar la veneración debida en el campo de la vida se pudre sin madurar.

Madre, hija y abuela Por MARÍA CASTELOS

S e habla y se escribe con frecuencia sobre la con-veniencia de que las per-sonas mayores, jubiladas,

realicen actividades físicas e inte-lectuales que les permitan man-tenerse saludables, y al mismo tiempo disfrutar de aquello que tal vez no han podido hacer a lo largo de su vida de trabajo. De hecho, hoy en día existe una va-riada oferta encaminada a este fin.

Hoy quisiera recordar a aquellas mujeres que no pueden ni pen-sar en ninguno de estos temas pues su vida discurre con una actividad frenética de trabajo que asumen con grandes dosis de amor, paciencia, prudencia, tolerancia y adaptación, mucha adaptación.

Me refiero a aquellas mujeres que al mismo tiempo deben ser hijas, madres y abuelas:

—Hijas, porque muchas veces

tienen a su cargo a personas ma-yores, bien padres, suegros u otros familiares.

—Madres, porque sus hijos con-tinúan viviendo en casa por va-rias razones o, si no viven, en casa de mamá no hay que coci-nar y la comida es gratis.

—Abuelas, porque son las guar-derías más baratas, aunque se pueda pagar otra. Es más cómo-

‘La vida de muchas mujeres discurre con una actividad

frenética de trabajo que asumen con grandes dosis

de amor y adaptación’

1919 La AntorchaLa Antorcha

do y queda más dinero para pagar el piso, el coche, el alquiler o irse de vacaciones a Cancún, que también los hay.

Tengo en mi entorno casos como estos y me pregunto quiénes son los responsables de estas situacio-nes; la educación que dimos a nuestros hijos, su egoísmo, no sa-ber decir no, o que ya está asumido que somos las que podemos con todo lo que se nos ponga encima.

Me gustaría que algún días estas mujeres pudieran, supieran o deci-dieran decir BASTA YA.

2020

Pero… ¿no será que no se sabe vivir? Por JAIME MELÉNDEZ ZINCKE

¡Cuánta gente amargada, triste, preocupada y transmitiendo sus problemas a los que viven en su entorno! ¿Por qué? Pues porque no saben vivir bien. Así de senci-llo.

Cuando una persona tiene una salud aceptable y están cubiertas sus necesidades perentorias, si no vive alegre, optimista, con ilu-sión por todo, es culpa de ella y no del Gobierno, la crisis y otras zarandajas que se inventa para justificar su fracaso. En definitiva, no sabe vivir bien; solamente ve-geta.

Tampoco vale el decir: “Es que tengo este problema”. No, porque vivir sin problemas es imposible. No te hagas ilusiones. Tendrás siempre problemas y, si no los sabes superar correctamente, vi-virás amargado todos los días. Aprende a vivir con ellos. Además, tanto las cosas negati-vas como las positivas son leccio-nes que nos da la vida.

¿Qué circunstancias influyen en que tanta gente parece que siem-pre esté triste? Pues sobre todo el no saber cambiar el carácter cuando ven que “no funciona”. (Me considero experto en esto, pues lo experimenté en mí). O no hacer frente con decisión al

“monstruo” del consu-mismo y por eso “te devora”. El decir que el dinero no te llega cuando más de la mi-tad de las cosas que adquieres son total-mente innecesarias para tu felicidad.

Lo que proporciona felicidad casi nunca se compra con dinero —el amor, la amistad, la ilusión, la fantas-ía…—.

Alguien dijo: “Solamente lo barato se compra con dinero”. También influye en tu melancolía el ir con la cabeza inclinada, mirando al suelo. Pero ¿qué ves en unas aceras grises, sucias? Mira al cie-lo, que nunca lo haces; observa las estrellas, el sol, la luna, las palomas, las gaviotas, las precio-sas fachadas y balcones de nues-tra ciudad. No las conoces porque nunca miras hacia arriba; siempre hacia abajo.

Para ser feliz es imprescindible estar abierto absolutamente a to-do y a todos. Con espíritu alegre, positivo. Hablar con todo el mun-do, aunque sean personas que no conoces. ¡Cuántas cosas intere-santes te pueden proporcionar

Opinión

esas nuevas fuentes, no las de siempre! Pero también: qué bue-na es la soledad a ratos; cuántas cosas preciosas “vives”, recuer-das y proyectas. No pienses que no puedes hacer nada; mejor o peor se puede hacer casi de todo. Hay que estar lo más activo que puedas de cuerpo y de cabeza.

¡Qué maravillas nos rodean en este bello mundo! Que es bello si tú lo quieres ver así. Olvídate de las cosas desagradables. Ni si-quiera la muerte es tan desagra-dable. Además, es necesaria e inevitable. El pensar que hay que morirse puede incluso ser un aci-cate para vivir lo más intensamen-te el día de hoy, que es lo que de verdad cuenta porque ¿qué es la

La AntorchaLa Antorcha

El devastador terremoto de 9 grados de magnitud en la escala abierta de Richter que sacudió Japón el pasado 11 de marzo cam-bió el eje de la Tierra y acortó la duración del día en 1,8 microse-gundos, afirmaron científicos de la NASA.

¿Sabías que...

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El silencio Por ANTONIO ROMERO

Respeta tu silencio. Él te dará cada atardecer y cada mañana hermo-sos recuerdos de los felices años de la plenitud; de las hermosas prima-veras de tiempos pasados. Seguirán estando contigo si los evocas en tu silencio ahora que vives tu jubilación en plena libertad.

Procura que no cambien para ti las formas de convivencia con los demás. Contribuye a crear una gran familia de compañeros y compañe-ras en las que triunfen el cariño y el respeto.

Aléjate de la soledad. Continua caminando cada día como cuando te dirigías al trabajo cotidiano de la añorada vida laboral. Tú serás el mismo trabajador de siempre. Sólo cambia el horario para poder seguir traba-jando en lo que más te guste.

Tienes una gran variedad de cosas hermosas con las que entrete-ner tu mente, y en los horarios que más te convenga. Tenemos una gran gama de entretenimientos, que van desde las manualidades a los encantos del arte.

No te quedes en casa esperando a que pase el tiempo. Tenemos tan-to que hacer. No podemos perder la gran oportunidad de poder decir que disfrutamos del mundo moderno.

Cada momento que pasa habrá siempre una nueva ilusión. Pinta cuadros hermosos; interpreta partituras musicales y atrévete con tantas cosas buenas que tienes la oportunidad de realizar, cada día. Lleva en tu pensamiento algo nuevo siempre. Verás que feliz te encontrarás.

‘Pinta cuadros hermosos.’.

vida? Pues hoy y aquí, nada más.

Vive con alguna esperanza en algo más. Así se vive mejor y so-bre todo, se muere con más paz, aunque después no haya nada, que esto de si hay o no hay no lo sabe nadie con certeza, al pare-cer.

Vive a tu aire, sin importarte los demás que te llamarán, quizá, ra-ro. No sabes lo bien que se siente uno cuando llega al grado de raro (yo ya estoy en él y aspirando a ascender a rarísimo). Eres el amo del mundo, no te importa absolu-tamente nada; eres totalmente libre.

La moda es la que tú eliges, no la que te imponen. Sí, te van a es-quivar alguna vez ¿qué te impor-ta? Al revés, te dejarán más tiem-po para vivir en tu “paraíso” de solitario y entonces, sin contami-nación humana, tú solo vas a en-contrarte a ti con optimismo y haciendo y pensando cosas mara-villosas, con los objetos y seres más sencillos; oyendo música, meditando siempre en positivo; leyendo… ¡Muy importante! Vol-ver a nuestra madre, la Naturale-za; olvidarse de tantas máquinas que nos convierten en otra más.

En fin, convéncete, saber vivir bien depende de ti mismo ¿Y unos talleres de enseñar a vivir?

Opinión

Por ANTONIO CACHÓN VILLAR

A veces es muy difícil saber de dónde emana el poder en las fa-milias. Es complicado ver si está en manos de los padres —que deberían ostentar la verdadera autoridad—, o en manos de los hijos. Tengo la impresión de que los jóvenes tienen hoy demasiado poder, y estoy pensando en aque-llos que se hacen dueños y jefes de todo lo que desean, exigiendo a los suyos lo que les apetece, de tal modo que si no lo consiguen responden con amenazas.

Informes de estos hechos hay su-ficientes ante el Defensor del pue-blo. Este tipo de casos poco a po-co van apareciendo con mayor intensidad. Los padres se ven así en la necesidad de pedir ayuda ante este poder excesivo de los hijos.

Ahora que mejoró nuestra forma de vivir y que todo disfrute es po-co, apenas se atiende a la educa-ción de los hijos, aunque no les falten estudios que los llevan a la Universidad. No todos lo consi-guen; y si lo logran: ¿con cuántos sacrificios? Pero siempre fue así, quizás ahora más todavía. Los padres se ven muchas veces des-bordados al buscar el bienestar de la familia. Las exigencias de los hijos pueden llegar a abrumar-les y estos se hacen así verdade-ros dueños del poder.

Para evitarlo sería necesaria más educación. No se imparte la sufi-ciente porque la mayoría de las veces la forma de vivir es aislada;

La autoridad en la familia

Alimentación y contaminación

C ada vez vivimos más años y está demostra-

do que las generaciones que cre-cimos en la posguerra, con una alimentación poco variada y a ve-ces escasa, estamos dando que-braderos de cabeza a los gobier-nos. Desconocemos si las futuras generaciones, sobrealimentadas y con productos muy variados —la mayor parte de ellos contamina-dos, sin hablar del alcohol y del tabaco—, podrán llegar a jubilar-se.

La preocupación por llevar una

vida sana nos ha llevado a practi-car actividades físicas y cultura-les, pero ¿qué comemos? ¿Nos preocupa si la carne que come-mos está cargada de antibióticos o si ha sido alimentada con pien-sos manipulados? ¿Y nuestras frutas y verduras? ¿Cuántos in-secticidas llevan encima? Claro que la gran respuesta es: “Si lo pensamos, no comemos nada”. Pues tal vez deberíamos pensar-lo, y mucho, y seleccionar los ali-mentos que tomamos. En ello va nuestra salud y también la salud del medioambiente.

Los sulfatos que van a nuestras frutas y verduras y a nues-tros estómagos contaminan. Empobrecen nuestras tie-rras para futuras cosechas y obligan a sobre abonarlas para nuevas producciones. Las frutas que aparecen en nuestras mesas cruzan a veces mares y océanos, contaminando y consumien-do un petróleo que se agota y esto, a veces, solo para tomar cerezas en invierno y naranjas en verano.

Según datos emitidos por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimenta-ción) en 2006, la producción de carne para alimentación

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los hijos con sus ordenadores o juegos de consola, y los padres todo el día trabajando o disfrutan-

do de su tiempo libre. Y esto sigue pasando hasta que ambas menta-lidades chocan y pasa lo que pa-

¿Contaminan el medioambiente los alimentos que comemos?

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Por MARÍA CASTELOS

es responsable del 18% del efecto invernadero por sus emisiones de gas, superiores a las del transpor-te. Los grupos ecologistas siguen alertando a los políticos sobre la enorme incidencia de la produc-ción ganadera intensiva sobre el fenómeno del calentamiento glo-bal.

Los actuales sistemas de pro-ducción mantienen al ganado estabulado en stocks de alta den-sidad, una medida que atenta contra cualquier comportamiento natural de su especie. Millones de pollos y gallinas pasan la vida en jaulas del tamaño de poco más de un folio. Los cerdos viven hacina-dos y las vacas, las mayores pro-ductoras de metano del mundo animal, han de producir cada día más.

Son solo algunos detalles del complejo mundo de la alimenta-ción. Tal vez deberíamos parar-nos a reflexionar y optar por una mejor alimentación y menos con-taminación. Esto es posible.

sa, que se ve entonces quien manda en el hogar.

Según datos de la FAO la producción de carne

para alimentación es responsable del 18% del efecto invernadero

Viajar es placer Por ANTONIO CACHÓN VILLAR

El viajar, y principalmente si lo hacemos en plan de ocio, es un aliciente más que nos ofrece la vida, ya sea en nuestra adoles-cencia, juventud o madurez. En esta última etapa nos parecía que hacerlo tendría sus inconvenien-tes, precisamente por estar en esas edades en las que uno llega a decir aquello de “No estamos para estos trotes”. Luego la reali-dad se encarga de desmentirlo, como así se demuestra en los via-jes del IMSERSO, donde se pro-cura “sacarle jugo” a todo lo que se propone.

Ello viene a cuento a raíz de va-rios viajes que yo hice con este organismo del estado. Observé que la transformación de la gente, ya mayor, es total; su afán por disfrutar y conocer las perspecti-vas de lo que el viaje ofrece es algo que nunca hubiésemos ima-ginado. El vuelco que la sociedad ha dado en este aspecto ha sido tremendo.

Nunca pensamos que hubiera

tantos deseos de conocimiento, de acercarse a otras ciudades, a sus monumentos, costumbres, historia, al tipismo de los pueblos a su gastronomía. Luego, una vez satisfecha esta curiosidad, los vi-sitantes disfrutan de otros pasa-tiempos, como juegos de mesa o algún bailoteo que nos hace re-cordar nuestra juventud.

Y uno piensa: ¿por qué sucede esto, precisamente en una época absorbida por la crisis? Se ve que las ocasiones hay que aprove-charlas y que, si en otro tiempo hubiésemos tenido oportunidad de hacerlo lo habríamos hecho también, porque este país no es tan inculto como quisieron hacer-nos ver. Si hubiésemos tenido medios a este país… ¡otro gallo le habría cantado!”.

En marzo, las vacaciones programadas por el IMSER-SO, cumplieron 25 años. Más de doce millones de personas han utilizado desde entonces este servicio.

La AntorchaLa Antorcha

Hoy nadie se mueve sin información: los gobiernos, las empresas, los particulares.

Gobiernos y empresas basan sus actuaciones en los informes que reciben. Hay centenares de agencias que se dedican a sacar encuestas y estadísticas so-bre todo tipo de actividades. Todo se compra, se ven-de o se cambia, según sea ese tanto por ciento de opinión favorable o negativo.

Los ciudadanos, cuando planean unas vacaciones o un simple fin de semana, lo primero que hacen es informarse: si el traslado es por tierra, del estado de las carreteras; si es por aire, del estado de los aero-puertos. Previamente se habrán informado para hacer la reserva del hotel, sobre los lugares de in-terés que se pueden visitar, de lo típico de la zona, el tiempo que hará en los siguientes días…

La tierra está rodeada de satélites. Consultamos In-ternet, vemos televisión, leemos prensa, escuchamos radio y mientras, a través del móvil, cerramos un acuerdo.

Pero todo se nos viene abajo con un simple apagón. Unas horas sin luz eléctrica nos hunden en la más triste miseria. Nos convierte en niños indefensos. En el mundo de la energía nuclear, la oscuridad nos asusta. Encontrar y encender una vela nos devuelve la vida.

Opinión Especial ‘Sociedad de la información’:

Sin poder dejar la vela

Por ALFONSO RUBIO YELMO

Quiero un filtro mágico

Por OLGA LÓPEZ FERNÁNDEZ

Decía Larra: “La verdad es como el agua filtrada, que no llega a los labios sino a través del cieno”. Se debería tener un filtro mágico como en el agua, para que al leer o escuchar una noticia, dejara en él lo superfluo y solamente saliera a la luz lo importante, lo cierto, lo que de ver-dad interesa de esa noticia, o la mentira que encubre.

¡Bienvenida la comunicación! Pero la buena, la que nos lleva al entendimiento de las cosas y no al odio entre las personas, la que nos descubre a los que nos engañan, la que no nos conduce al desprestigio y a la calumnia de personas por el simple hecho de que no son de nuestro bando o de nuestra creencia; la que nos empuja a ser mejores cada día, más com-prensivos, más solidarios, más habitantes de un mun-do que compartimos con los demás.

¡Bienvenida la tecnología que nos acerca! Pero bien utilizada, porque de lo contrario nos separa y nos destruye.

Época de información sí; pero ojo: que no sea para conducirnos como una manada de borregos ante los intereses desconocidos y encubiertos de algunos. Sepamos filtrar las comunicaciones que nos invaden cada día, para sacar un agua limpia y cristalina que nos refleje y conduzca hacia horizontes mejores.

Larra y Julián Assange, dos renovadores ¿Qué nos sugieren estos dos personajes dedicados al mundo de la información,

la faceta de escritor en varios géneros. Como periodista, muy comprometido con su época, gran crítico, irónico en sus artículos y un referente en el mundo pe-riodístico.

Julián Assange, fundador de una

página web muy especial, un ci-beractivista de este siglo, compro-metido con está época. En 2009 recibió un premio de Amnistía Internacional por destapar viola-ciones de los Derechos Humanos en Kenia. En 2010 y 2011 ha re-

Don Mariano José de Larra, re-dactor en el periódico El Español y El mundo en el año 1825 y Ju-lián Assange, fundador y editor de Wikileaks en el año 2010. Larra, un gran intelectual, muy prepara-do en varias disciplinas, desarrolla

2424 La AntorchaLa Antorcha

¿Cómo la vivimos? ¿Cómo nos afecta?

N u e s t r a “profe” de periodismo, en un fla-grante abuso

de autoridad, nos ha encargado en dos clases correlativas que expresemos opiniones acerca de dos asuntos tan espinosos como Wikileaks y la sociedad de la in-formación. ¡Toma ya! Juraría que en su crueldad mental lo ha hecho para que nos hagamos un taco y entremezclemos los dos concep-tos en una ininteligible barahúnda.

Recordando aquellas infernales lecciones de Matemática Moderna de los libros de mis hijos acerca de Conjuntos numéricos: Si Wiki-leaks es el conjunto “A” y la socie-dad de la información el conjunto “B”; y si, como brillantemente ex-ponían aquellas inefables fuentes de sabiduría, todo elemento de un conjunto A es elemento de un conjunto B; se tiene que A es un subconjunto de B. Hasta aquí to-do claro como el agua (ejem).

Pero cuando me tiemblan las me-ninges es al intentar establecer si la “sociedad de la información” es un subconjunto de la “sociedad de

la comunicación” o viceversa, o si ambas forman un solo conjunto.

Como todo esto me suena a Tec-nología, Internet, E-mails, Blogs, Wikipedia, Face-book, Twitter, etc., recurro a la sabiduría de mi nieto buscando algo de luz. Vano intento. El ga-lopín, tecleando fieramente y sin apartar la vista de la pantalla de su portátil, me sentencia: “Paso de ti, abuelo. Baja al parque a echar pan a las palomas”.

Inasequible al desaliento recurro a la Wikipedia. El famoso estudioso italiano Ruggero Cognazzi me ilu-mina: “Las sociedades de la infor-mación emergen de la implanta-ción de las tecnologías de infor-mación y comunicación (TIC) en la cotidianeidad de las relaciones sociales, culturales y económicas en el seno de una comunidad, y de forma más amplia, eliminando las barreras de del espacio y el tiempo en ellas, facilitando una comunicación ubicua y asíncro-na”. Ya he visto la luz pero, más

que nada por seguir clarificando, recurro al teórico pos-marxista Dimitri Ra-canovich: “En este juego tipológico la información y la co-municación son la clave de la percep-ción de la organiza-ción de lo social. El punto por desarro-llar es como sucede

esa configuración en variantes típicas. La cibercultura, la forma social de asociación de percep-ción, comportamiento y tecnología de información y comunicación, puede ser una guía aclaradora. Y así será propuesta en el siguiente punto […]

Tras estas diáfanas reflexiones, tengo que declarar que con esto de la sociedad de la información-comunicación y de la tecnología estoy muy documentado: me en-tero puntualmente de los resulta-dos de la liga de fútbol en Malasia y del precio de los caracoles en el mercado de Cochabamba.

A veces, como cada siete u ocho días me tomo un respiro para hablar del tiempo con mi mujer. A mi nieto le he retirado la palabra.

A mi nieto le he retirado la palabra

Por OVIDIO MONTOTO

RODRÍGUEZ

Veámoslo con humor...

de la comunicación pero con 200 años de diferencia?

volucionado la política, la diploma-cia, las relaciones entre países… al descubrir a la sociedad civil lo que ya intuía: cómo muchas ve-ces la realidad no coincide con la información que nos proporcio-nan.

Un nuevo escenario ha surgido en el campo de la información. No sabemos cuál será su futuro; pero en este momento está claro que el periodismo trata de ser más responsable, transparente, libre y riguroso; de lo cual todos saldre-

mos benefi-ciados.

Larra y Assange, distintos pero similares: los dos están ligados por su contribución a la creación de una sociedad más crítica, bien informada y más justa.

Por AMALIA VILLANUEVA PAREDES

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Especial ‘Sociedad de la información’: ¿Cómo la vivimos? ¿Cómo nos afecta?

Opinión Wikileaks: ¿Qué hacemos con la verdad?

Por OVIDIO MONTOTO RODRÍGUEZ

Que Wikileaks y sus colabo-radores de la prensa conven-cional hagan públicas las vergüenzas del Departamen-to de Estado y del Ejército de los Estados Unidos y por añadidura las de sus “países satélites” ¿es un buen servi-cio a los ciudadanos? A pri-mera vista es evidente que cualquier cosa que aproxime al individuo a la verdad es buena.

Que la organización haya re-sistido el acoso al que se la ha sometido en la Red, inten-tando privarla de sus canales de financiación y difu-sión; que Julián Assange haya salido airoso, al me-nos hasta ahora, de la persecución judicial por unos nebulosos delitos sexuales en Suecia, se trata sin duda de una victoria de la libertad de expresión.

Pero a mi entender es una victoria pírrica porque, aunque el conocimiento nunca puede ser perjudicial, en unos tiempos en que el Poder es cada vez más cínico y miente con mayor descaro, cabe preguntarse qué consecuencias prácticas pueden derivarse de que la gente de a pie vea tan nítidamente la realidad. Lo único que ha hecho Wikileaks ha sido quitar la ta-pa a unos cubos de basura de los que ya percibía-mos el hedor desde lejos. Probablemente la irritación del Gobierno estadounidense provenga más de la constatación de su ineficiencia en el mantenimiento de sus secretos, que en el hecho de que sean revela-dos. Y más cuando lo que queda al descubierto es su coherencia en la voluntad “imperial” que rige, más o menos disimulada, su política exterior, dejando en evidencia a sus “aliados”.

Lo que me obsesiona son las consecuencias que puede tener el mayor conocimiento de la falsedad de los gobiernos. ¿Habrá algún tipo de reacción? ¿Consecuencias electorales? ¿Y qué? ¿Existe algu-

na diferencia entre las alternativas que se ofre-cen a los ciudadanos? ¿No parece que esta-mos regidos por algo cuya naturaleza se nos escapa, pero que no son los gobiernos ni los políticos?

En el mundo que nos muestran las filtraciones de documentos prevale-cen los intereses económicos sobre los derechos humanos, la fuerza sobre la razón, la

mentira sobre la verdad. Pero todo esto ya lo sabía-mos antes de Wkileaks. La pregunta fundamental es ¿qué clase de mundo queremos? Y si no es este ¿cómo podemos cambiarlo? Es más… ¿queremos cambiarlo?

Como, quizás por la edad, soy receloso con la tecno-logía, dudo que algunos movimientos que se dan desde la Red como “Anonymous” y otros sean capa-ces de cambiar nada. El sistema tiende a fagocitar y hasta a comercializar todos los movimientos de re-beldía que he conocido hasta ahora. Es improbable que tras tragarse el anarquismo, el comunismo, el maoísmo, los movimientos contraculturales de los sesenta-setenta y otros, vaya a indigestarse ahora por las “travesuras” de un grupo más o menos nume-roso de disidentes instalados tras la pantalla de un ordenador. Sería paradójico que una herramienta co-mo Internet, al decir de algunos rancios ideólogos, instaurada para consolidar y extender el capitalismo (palabreja antigua pero vigente), cual monstruo de Frankestein, se volviera contra su creador.

En conclusión: victoria de la libertad de expresión e información. Ahora bien, la libertad de expresión e información sin consecuencias en el tejido del poder me parece puro entretenimiento.

Las repercusiones de la información revelada por Wikileaks llenaron páginas y páginas de la prensa.

Por MARCELINO SÁNCHEZ RODRÍGUEZ

En mi ciudad —Avenida General Sanjurjo—

Como los cangrejos

Pongamos como ejemplo la aveni-da General Sanjurjo, que se re-abrió al tráfico el día 4 de febrero. Me hace pensar que podría ser una “ratonera” con un solo carril o vial circulatorio en cada dirección, con una mediana ajardinada y unas aceras anchísimas. ¿Qué puede llegar a suceder si un au-tobús se avería? Se creará un gran caos circulatorio.

¿Cuándo una ambulancia tenga que ir a buscar a un enfermo? Será necesario llevarlo en camilla hasta el lugar donde hayan podido estacionar el vehículo o ¿bastará con llevarlo “en el colo”?

¿Y si hay que llevar mercancía a algún comercio de la zona? Será preciso contar con porteadores. Otros problemas pueden surgir.

Planteada de otro modo pienso

que esta avenida o bulevar podría servir para descongestionar un poco la avenida de Alfonso Molina. Después de mucho pensar he lle-gado a la conclusión de que la an-chura de las aceras ha sido una gran idea y, con antelación a la salida de la ley que prohíbe fumar en establecimientos públicos, nuestros ediles ya habían previsto la instalación de terrazas para fu-madores, pero las que existen no parecen ser para cigarrillos, sino para grandes puros habanos (creo que no pensaron en la crisis).

También viene a mi modesta ima-ginación que podría anularse el impuesto de circulación de los vehículos y entrar en vigor en su lugar el “Impuesto de Caminar Peatonal”. Existe la posibilidad de que parte de las aceras se cubran con plástico para que los fumado-

res se puedan resguardar de la lluvia. Habría, claro, que satisfacer una pequeña cantidad, cual si fue-ra aparcamiento.

Un tramo de la calle visto desde el ventanal de un autobús.

Siento gran pesar y tristeza viendo como la hermosa ciudad en la que nací y a la que tanto

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quiero, La Coruña, va para atrás en muchos aspectos, como si fuéramos cangrejos.

Retazos de La Coruña Por CHARO PONTONES CARBONELL

Y el cielo parecía blanco de tanto como brillaba el sol. Y si bajaba la mirada poco a poco, a medida que mi vista se perdía en la línea del horizonte, veía el mar desde su principio hasta que muere, convirtiéndose en espuma al ro-zar la orilla.

Y nunca olvidaré tu olor a brisa marina. Y yo me pregunto: ¿qué fue de ese olor? Se perdió, y con tanto echarle tierra del monte, hasta la arena se volvió desagradable para la piel. Con la are-na bonita que teníamos, ¡Qué pena!

Tú eras la reina entre las reinas, luminosa, con tus ojos azules y tu pelo rubio como tus playas. Tu Torre de Hércules, tus Cantones, tú diciendo tan contenta: ¡Esa soy yo!

Ahora estarás orgullosa de tener un Paseo Marítimo tan largo y bonito, con nuevas construcciones… No pareces la misma: serás más grande, pero un poco menos alegre. Riazor y Orzán: ¿dónde están vues-tros peces? Antes, cuando te acercabas a la orilla, veías montones de estrellas de mar, caballitos… Los han matado con tanta modernidad.

El día de San Juan, era como un hervidero de hogue-ras. También pasa igual, pero no es lo mismo. Antes se bebía vino. Ahora se beben mezclas como el “calimocho” y hay muchas drogas que vuelven a la gente loca.

A pesar del paso del tiempo, sigues siendo hermosa y brava como tu mar impetuoso. Ojalá no te estrope-en con tanta inmundicia.

Todos te queremos. ¡Viva La Coruña!

La AntorchaLa Antorcha

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Miscelánea Un cantar a Rosalía

Un canto á túa tristura que nota lle da a cor, que brebaxe feiticeiro acougará a túa dor. Ai! Pombiña branca e tenra que chora de outros os males, xorden bágoas nos teus ollos, como fontes, como mares. Faste eco do lamento que motiva a emigración, deixando nos campos ermos tristeza e desolación. Doce e agarimosa ánima todo en ti é poesía, mesturas toxos e flores poñendo ó dor armonía. Cando a túa vida te alonxa do corazón que é a túa terra choras a campos e a ríos algo de ti, dentro, berra. Galicia enraíza en ti un profundo sentimento seu abandono e pobreza demandas cada momento. Ese berro compunxido a espertar as conciencias, os séculos de servidume a mal ferida inocencia. Reflictes todos os medos que están no teu ser profundo, envólvelos en poesía e xorde algo fermoso e profundo. Aínda con pouquiñas forzas traballas con fé e ardor, mesturas língoa e poema dando de ti o mellor. ¡Galicia verde e fermosa! de brétema e melancolía, eres fonte inagotable que inspirou a Rosalía.

Por ESTHER LÓPEZ CASTRO

A señora María e os supermercados

Por Mª DEL CARMEN ANEIROS LÓPEZ

A SEÑORA MARÍA era viúva sen fillos, con boa saúde e vivía nun pri-meiro piso, sen ascensor, de toda a vida. Unha vivenda bastante ben axeitada aos tempos de agora, nunha rúa perto do centro da cidade on-de o seu defunto Antón viñera destinado cando casaran había xa máis de cincuenta anos.

As casas que estaban arredor da súa ían caendo unha tras doutra para faceren bloques de pisos modernos con piscina, e nos baixos nos que antes había tendas, agora había garaxes. Non tiñan unha tenda nin para un remedio. Todo eran cambios.

Tres ou catro supermercados á redonda, iso si, pero nada de tendas. Digamos que no “súper” había de todo o que se precisara mercar, pero era unha leria pillar as cousas das estanterías máis altas e ás veces tiña que valerse do puño do bastón para baixalas ou pedir axuda a quen esti-vese por alí.

Tamén lle resultaba difícil ver os prezos, pois non se daba de conta se as etiquetas que estaban na beira correspondían ás latas de sardiñas colocadas na parte de arriba ou ás de polbo ordenadas na parte de abaixo.

Dos repolos e verduras, que estaban todos xuntos nun lado, mellor non falar. Tivo que preguntar canto valían e xa daba vergonza.

Á hora de pagar, todos en ringleira, ás presas, sen falar unha palabra. A caixeira dicía ola a todos, porque debía de entrar no contrato. Se polo menos estivesen sempre as mesmas… Pero non. Cambiábanas cada pouco. E de levar algo fiado, nin pensar; alí había que pagar sempre.

Por outra banda, cáseque nunca vía coñecidos. A xente das casas vellas marchara, pero ela non quixo marchar cando as sobriñas viñeron busca-la para levala a vivir na casa da aldea. Non, aquel non era o seu mundo.

De súpeto, nunha das casas novas, un baixiño que levaba tempo pecha-do abriu. A señora María achegouse a ver que había no escaparate, e alí había pan, leite e queixo. Botou unha ollada á porta e viu caixas con pa-tacas, repolos e pimentos. Entrou. Dentro estaban de parola tres ou ca-tro clientas e máis a tendeira. Mentres a despachaban dixo unha das mulleres: Canta falta nos facía unha tendiña así! E a señora María re-puxo: Pois si.

La AntorchaLa Antorcha

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Loa al mudo poeta rural

H ay en Galicia muchos vates que cantan a esta tierra, o cantaron, con más o menos acierto.

Muchos de ellos son muy conoci-dos o famosos, tales son los casos de Rosalía, Curros, Castelao, La-barta, Añón y otros muchos; cu-yos libros, olvidados un par de generaciones, han resurgido con energía últimamente.

Aparte de los anteriores, conta-mos hoy con una nueva ola de literatos y escritores que, están aprovechando el actual momento, el nuevo despertar de un naciona-lismo galaico y el renacimiento de un vocabulario novedoso, sin raí-ces, que yo observo con profun-das dudas y desconfianzas.

Para mí, el verdadero poeta, el clásico, el profundo, el permanen-te, el que habla sin palabras, el que verdaderamente ama y siente a su patria, es ese poeta mudo; el hombre cabal y honrado que nace en Galicia, en Galicia vive y muere y se entierra en la misma parro-quia en que fue bautizado.

El gallego que sueña en solitario, asido a la “rabela” de su arado; el que cultiva la tierra; ama a su ca-sa y a sus fincas tanto como a su familia y a sus hijos. Que planta en invierno, ve crecer en primave-ra las semillas por él plantadas y

observa como espigan en verano.

Resignado a los avatares del tiem-po y siempre con fe y esperanza en Dios, se somete a sus desig-nios con escondida alegría. El poe-ta mudo que no exterioriza la po-esía de su alma. Se cría bajo el cariño y la observancia de sus pa-dres; crece, se enamora y se casa en su pueblo. Cría a sus hijos, cui-da a sus padres viejos que mue-ren en su casa, respetados, queri-dos; rodeados de su familia y de

Por ANTONIO GAGO

Esos hombres silenciosos son los verdaderos poetas, profundos y llenos de amor

a cuanto les rodea.

Calendario de refráns

todos los objetos que con él convivie-ron.

Estos hombres silenciosos son los verdaderos poetas, profundos y lle-nos de amor a cuanto les rodea; amor que recobran en su senectud. Su fiel compañía es la naturaleza que los envuelve, los absorbe y los satis-face.

Cada mañana, su espíritu se dispone a entregarse tranquilo a la lucha dia-ria y cada noche se acuesta cansado, con el alma en paz, esperando un nuevo amanecer. En su vida no hay grandes sobresaltos, ni riquezas ni grandes goces, pero perdura la paz y el sosiego que valen más que el po-der y las riquezas y se eleva por enci-ma de todos los poemas.

1. En XANEIRO o mero sabe a carneiro.

2. FEBREIRIÑO corto, cos teus días 28, que se tive-ras mais catro, non quedaba can nin gato.

3. MARZO marzolán, pola mañá cara de risa e á tar-de cara de can.

4. Polo ABRIL sae o cuco do cubil.

5. Por MAIO aínda a vella queima o tallo.

6. En SAN XOÁN a sardiña molla o pan.

7. Por SANTA MARIÑA deixa a eixada e pilla a fouci-ña.

8. Despois do 15 de agosto xa a vella tapa o rostro.

9. SETEMBRO ou seca as fontes ou leva as pontes.

10.No OUTUBRO o millo á eira e as castañas á pa-rrumeira.

11. NOVEMBRO. Ditoso mes que empeza con tódo-los Santos e remata con San Andrés.

12. O mes de SANTA LUCÍA quítalle á noite e auméntalle ó día.

3030

Miscelánea

La conocía de verla siempre en el jardín, camino de mi despacho. La mirada perdida o siguiendo aten-tamente los juegos de los niños. A veces se dirigía a ellos para animarlos en sus correrías, para animarlos, o incluso con frecuencia les regañaba cariñosamente por el comportamiento entre ellos o por arrancar furti-vamente alguna flor. Uno de esos días la oí murmu-rar: “No cabe duda… ¡deformación profesional!

Me di cuenta de que era una profesional de la en-señanza y justamente me hizo recordar que mi jefe, en el periódico, me había pedido una entrevista a una persona sencilla, profesional, sin nombre famoso y sin un especial atractivo periodístico.

Me dirigí a ella, preguntándole por su forma de tra-tar a unos niños que se veía que no eran suyos y tampoco unos angelitos atractivos. Efectivamente me confesó que desde muy joven se había dedicado a la enseñanza y que, a pesar de haber ejercido durante 45 años, jamás se le había pasado por la imaginación el jubilarse anticipadamente. Sentía pena —aclaró— por aquellas personas que continuamente se queja-ban de su trabajo y soñaban que las leyes cam-biarían en algún momento para poder dejarlo pronto. “Para mí, lo más gratificante de la vida —apuntaba—, es trabajar con gusto en tu profesión”.

Había tenido muy buena salud y en su larga trayec-toria profesional sólo había contado con tres permi-sos para ser madre y estar con sus hijos. Sacando tiempo al tiempo y al sueño, asistió a cursos de per-feccionamiento, encuentros pedagógicos y se aplicó

con lecturas de todo tipo.

Los años fueron pasando; sus hijas ya vuelan por su cuenta; sus nietos crecen y ella sigue pendiente de mantenerse al día: lee periódicos locales y nacio-nales, participa en conferencias, cursos y clases pa-ra personas que, como ella, están libres de compro-misos profesionales.

Le gustaría emprender una nueva carrera pero te-me que le llegue a pasar lo que reza aquella canción de Los Panchos: “Si tú me dices: ¡Ven! Lo dejo to-do” . Piensa que el hacerse cargo de sus nietos le podría impedir seguirla como debiera.

Ella siempre había soñado con escribir; ser perio-dista o mejor, quizá, novelista. Pero no fueron los su-yos tiempos para perderlos a la espera de una opor-tunidad. Por eso había estudiado Magisterio y siem-pre se había dedicado a la enseñanza.

Al contarme esto me acuerdo de mi compañera Esperanza, que imparte un curso de periodismo en el Centro de Mayores de Novacaixagalicia de A Coruña, y así se lo hago saber. Los ojos de esta experimenta-da profesora jubilada se abren ilusionados y me pre-guntan: “¿Tú crees que podría estar bien para mí?”.

Mi respuesta afirmativa actúa como un resorte y “mi persona sencilla, profesional y sin nombre famo-so” se levanta con especial agilidad del banco del jardín y, mientras me dice adiós con la mano, decla-ra: “Me voy rápidamente para hacerme socia de ese centro y poder ir al taller de periodismo la próxima semana”.

Siempre hay tiempo para las inquietudes Por ADA LOUZAO

“La mirada perdida o siguiendo atentamente los juegos de los niños…”

Unas frases magistrales, llenas de experiencias, gran humanidad y mucha sabiduría sirvieron al ma-estro Vargas Llosa para contarnos su vida en su discurso ante la Academia Sueca. Nos desgranó sus raíces, cómo aprendió a leer —lo más importante que le ha pa-sado en su vida—, sus primeros secretos, los maestros que le sir-vieron de guía, su evolución res-pecto a las ideologías, sus agra-decimientos y deudas, en especial a España, país que tanto le ayudó.

Su intervención ante la Acade-mia es extensa, su discurso rico, variado y llega a un párrafo… emocionante, especial, explosivo, porque es el súmmum de senti-mientos, afectos, vivencias, de realidades donde el autor le hace a su pareja, Patricia, una Declara-ción de Amor.

Mario Vargas Llosa acepta sus limitaciones, confiesa su valora-ción y reconocimiento hacia ella y crea, con sus maravillosas pala-bras, un clima de emociones que provoca su llanto y el del audito-rio.

Es un momento apasionante donde todos acaban llorando emocionados. Merece la pena transcribir el párrafo:

El Perú es Patricia, la prima de naricita respingona y carácter in-domable con la que tuve la fortu-na de casarme hace 45 años, y que todavía soporta las manías, neurosis y rabietas que me ayu-dan a escribir.

Sin ella mi vida se hubiera disuel-to hace tiempo en un torbellino caótico y no hubieran nacido Álva-ro, Gonzalo, Morgana, ni los seis nietos que nos prolongan y ale-gran la existencia.

Ella hace todo, y todo lo hace bien. Resuelve los problemas, ad-ministra la economía, pone orden en el caos, mantiene a raya a los periodistas y a los intrusos, de-fiende mi tiempo, decide las citas y los viajes, hace y deshace las maletas y es tan generosa que hasta cuando cree que me riñe, me hace el mejor de los elogios:

“Mario, para lo único que tú sirves es para escribir”.

Me gustaría aprender de este gran maestro de la Literatura his-panoamericana y poder escribir un párrafo tan bello, sencillo y ma-ravilloso para expresarle mi agra-decimiento como persona y espe-cialmente como mujer, por esta lección de valentía, coraje, huma-nidad y reconocimiento hacia la mujer en general.

En estos momentos difíciles de lucha por la igualdad, en los que diariamente sabemos de un nue-vo caso de violencia de género. Su ejemplo espero y deseo sea ejemplarizante para muchos hom-bres y nos ayude en este proble-ma tan grave. ¡Los hombres tam-bién lloran y se emocionan!

Las lágrimas de un hombre

Por AMALIA VILLANUEVA PAREDES

¡Y yo que nunca lloro…! Exclamó el Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa

3131 La AntorchaLa Antorcha

Piensa, piensa Tres personas apellidadas Blanco, Rubio y casta-ño se conocen en una reunión. Poco después de hacerse las presentaciones, la dama hace notar:

—Es muy curioso que nuestros apellidos sean Blan-co, Rubio y Castaño, y que nos hayamos reunido aquí tres personas con ese color de cabello.

—Sí que lo es, dijo la persona que tenía el cabello

rubio, pero habrá observado que nadie tiene el color de pelo que corresponde a su apellido.

—Es verdad, exclamó quien se apellidaba Blanco. Si la dama tiene el pelo castaño, ¿de qué color es el pelo de Rubio?

P asou por ser a casa máis forte da aldea —

contábame José do Fidalgo acer-ca da miña desaparecida fami-lia—. Era de pedra amourentada pola choiva, grandísima, e cunhas reixas de ferro nas fiestras que non deixaban entrar á canalla que xa o tentara moitas veces. Eu tería oito anos —seguiu dicíndo-me—, e servía pola comida e a cama; pero a túa avoa mercárame para o día da festa un traxe de dril que lle Valera dous reais na tenda das Candelas en Rábade.

Fun o neno máis feliz do mun-do, e todos os días ía miralo, es-tendido riba dunha pila de sacos baleiros no sobrado. Dúas veces ó mes xunguíamos a parella ó ca-rro para levar á feira animais cria-dos na corte ou no curral, e so-bras da colleita. Era unha casa de moita vida —José poñía énfase nas palabras, porque lembraba con saudade os tempos da súa crianza nos Fieitás, a carón do meu pai e dos meus tíos —facíanse perras, e nunca faltou o compango tras do caldo—.

Unha tarde de inverno apareceu polo carreiro unha muller ben por-tada, nova pero xa non moza, montada nunha egua rubia, e díxolle á ama que andaba pola aira: “¡Ai, señora!, ¿e non me verían unha vaquiña que me anda extraviada”. “Non —respondeulle a túa avoa—, pero dígame cómo é”. “Marela, e leva choca ó pesco-

zo —informou a descoñecida—. Se ma ven, fagan o favor de reco-llela e avisen na casa do Conce-llo, que xa deixei alí as señas”. E foise.

Ós dous días, aló a noite, men-tres ceábamos, sentimos tocar unha campaíña arredor do verte-doiro. “Aí está a vaca da señora, que anda a pacer no prado” —dixo a ama—. E abrímoslle a por-ta á gavilla de ladróns máis temi-da que houbo na Terra Chá, capi-taneada pola Loba de Damil, va-lente coma ningún dos seus homes. Botárase ó monte porque ós dezaoito anos matou dunha coitelada ó amo que a maltrataba. Era alta coma un castelo, cun pei-to de cabalo e unha ferocidade nos ollos tan grande que acovar-daba. Segundo dicían, na escuri-dade alumeábanlle imitando ós dun lobo, e por iso a alcumaron dese xeito.

Recuamos para a cociña e o amo ordenou ós fillos mozos que non se movesen, porque de todos era sabido que asasinaban ó que se enfrontaba a eles. Eu tremía co medo sen saber onde agocharme, ata que vin o meu traxiño. “Son criado da casa, non mo leven”, rogueille á Loba, acordándome que non parecía tan mala o día que falara ca ama na aira.

Mirou para min sorprendida da miña ousadía para deseguido arrincar o traxe da man ó facine-roso que o levaba. “Toma, rapaz”, díxome. E doumo.

Foi moito o que roubaron aque-la noite, pero non houbo sangue e a casa repúxose. Durante anos escoitei falar atrocidades da Loba de Damil, pero a min sempre se me presentou nos miolos unha faciana ben feita e cun aquel xeneroso.

A casa ‘dos Fieitás’ Por CARMEN GÓMEZ

3232 La AntorchaLa Antorcha

Miscelánea

Descripción do mundo visto dende a perspectiva dunha vaca

Por MARÍA PILAR LÓPEZ PENA

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Aínda que non o pareza, pois falo o idioma do país, eu nacín en Suiza, logo eu son una vaca estranxeira que ficou aquí dende hai una morea de anos.

Eu vivo nunha aldea preto dunha vila, mais non saberia decírvolo seu nome. Lémbrome de cando cheguei aquí e tódalas vacas dicíanme: “Abofé que ti es ben diferente a nós. Nós non temos visto nin ren coma ti”.

Elas preguntábanme a cotío co-mo tiña sido a miña vida, e sobor a miña viaxe dende tan lonxe. Pensaban que tiña que ser moi canso vir dende outro país. Mais eu dicíalles:

Que nós, as vacas, sempre viaxábamos nun vagón só para nós. Non eramos coma esas xentes que van a cachón dentro dos vagóns e cada quen se sen-ta enriba das súas maletas ou a carón do chan. Non, nós viaxa-mos sempre en primeira clase,

as nosas comidas están moi frescas, o noso vagón leva as fiestras abertas cando vai calor e o home do tren sempre está ollándonos.

A min góstame viaxar no tren, síntome moi leda, pois non tóda-

las vacas poden coñecer outros países e levar una vida tan fer-mosa.

Coido que son unha vaca erudita a quen gosta de coñece-lo mun-do e as viaxes axudan a ve-las cousas doutra maneira.

‘Caparruchiña’ hoxe Por MUXIANA

O probe “Lobo feroz” do abraio non saía. O conto ó que el acordaba en nada se parecía. —Onde irá “Caparruchiña” con esa “facha” tan rara? Con vaqueiros e un top e con aretes… ¡na cara! —Lobo, non sexas inxenuo hoxe os tempos van cambiados,

as aboas non fan “ponto” vanse de troula ós “saraos”. As nenas van “por aí” e voltan ó amencer, e berran desaforadas —Non hai nada pra comer? Por iso bota o teu conto, vaite ós teus tempos pasados que as rapaciñas de agora sonche… de moito coidado!

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Miscelánea “Toda civilización no es más que una lucha desesperada por no tener que trabajar”.

“El español es poco amigo de pensar, pero si piensa no hay otro pensamiento más que el suyo”.

Julio Camba,Julio Camba,Julio Camba, con sorna,con sorna,con sorna, con humorcon humorcon humor

Estas dos frases del maestro periodista Julio Camba nos recuerdan que nos reconocemos en su ácida visión del mundo, en su brillante des-cripción de las cosas traspasada, siempre, por su

fino humor y escepticismo. Otro maestro, Torren-te Ballester, dijo de él que tenía ‘el secreto de la prosa ligera y centelleante’.

Por ANTONIO CACHÓN VILLAR

N acido en Vilanova de Arousa en 1884, era un periodista muy singular. Sus artículos

eran muy celebrados por su sátira, ironía, agilidad y humor combinados con una cierta melancolía. Tam-bién fue un buen literato, aunque sin llegar a la altura de su periodismo. Dejó obras como La rana viajera (1920), Aventuras de una peseta (1923) o La casa de Lúpulo (1929), esta última sobre gastronomía, a la que era muy aficionado.

Fue pionero del llamado artículo corto, textos que se leían con facilidad al ser ágiles y decir cosas intere-santes, con elegancia y sin ninguna superficialidad, consciente de que escribía para que los demás le leyeran con satisfacción. Se le considera uno de los periodistas más originales y creativos del siglo XX.

Se crió en el seno de una familia de clase media de Vilanova. Desde muy temprano hizo gala de espíritu aventurero, yéndose a los 16 años como polizón para Buenos Aires. Volvió a España deportado por sus actividades anarquistas.

Camba logró irse a Madrid y se fue introduciendo en-tre la bohemia de los más famosos personajes litera-rios, entre los que se encontraba su paisano Valle Inclán. Comenzó a escribir en ciertos periódicos ácra-tas. A pesar de que decía odiar a “cierta burguesía” le gustaba su forma de vida. Odiaba a las masas.

Se hizo un viajero infatigable. Todos sus artículos conquistaron a los españoles y se hizo también un hueco en Hispanoamérica. En 1916 entra a escribir en ABC. Ya es considerado un maestro. Sus artículos

son devorados por el público.

Es un hombre sencillo. Escribe con agilidad y sin-ceridad. En EEUU recibe un gran homenaje en 1929. Al estallar la Guerra Civil española se va a In-glaterra y luego a Portu-gal. Regresa para escribir en ABC.

Le nombran socio de honor del Círculo de Bellas Ar-tes. Torrente Ballester llegó a decir de él que tenía “el secreto de la prosa ligera y centelleante”. Le gustaba pasar inadvertido por el mundo. Los artículos de Camba sirven como base para la enseñanza del pe-riodismo. Murió en la clínica Covesa de Madrid el 28 de febrero de 1962.

Un día el director de un periódico donde yo trabajaba me metió algunos billetes en el bolsillo y me mandó a París. Mis artículos de entonces, co-mo los que más tarde escribí desde otras capitales, tenían la pretensión de estudiar experimentalmen-te el carácter nacional; pero el único sujeto de ex-perimentación que había en ellos era yo mismo. Yo estoy en mis colecciones de crónicas extranjeras como una rana que estuviese en un frasco de alco-hol. El lector puede verme girar los ojos y estirar y

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Cariño de madre

Cariño profundo, amor sin cesar brota de tu pecho querida mamá.

Yo mucho te debo, no puedo pagar tanto cariño que me diste ya. Tus besos y mimo me hacen pensar, que tanto desvelo no he de compensar. Por mucho que haga con todo mi afán, a ti mucho debo querida mamá. Pero si no pago mi buena mamá, alguien debe hacerlo y El Señor será. Qué dulce me suena decir ¡Madre mía! Creo que sonríe la Virgen María.

Nostalgia. Madrid 1956 Por CHARO PONTONES CARBONELL

R e c o r d a n d o aquellas cosas

que nos hicieron vivir tiempos de rosas… me pregunto ¿Cómo antes vivíamos sin televisión, móviles, internet?

Creo que valorábamos más todas las emociones, “las veíamos”, las sentía-mos. Hacer un viaje: ¡Oh! dios… qué ilusión. Ibas en un seiscien-tos, con baca, todos apretujados, con montones de paquetes, male-tas de cartón, pájaros, gatos. ¡Y qué!

Aquello era maravilloso. Nos sentíamos como en un sueño. ¡Y cuando veíamos el mar! Con sus olas blanquitas, su arena finita, sus conchitas. Todos corríamos a cogerlas entusiasmados.

No importaba que el dinero que

llevábamos fuese justito. Tenía-mos algo; ilusión por vivir. Ahora, por desgracia, no se piensa. Se fía uno de lo que dicen los anuncios de la tele o internet.

Entonces mirabas hacia delante con dinero o sin él, pero con mu-cho Amor. ¿Dónde está ahora el Amor? Se perdió. Es muy difícil encontrarlo, raspando un poco a lo mejor ves algunos destellos bo-rrosos. Pero tengamos esperanza y valoremos los sentimientos que aún quedan sin apagar.

Por MARCELINO SÁNCHEZ RODRÍGUEZ

encoger las patas a cada momento. Lo que parecen críticas o comentarios no son más que reacciones contra el ambiente extraño y hostil (...) Y si lo que quería mi director era observar el efecto directo de la civilización europea sobre un español de nuestros días, ahí tiene el resultado: una serie constante de movimientos absurdos y de actitudes grotescas.

[J. Camba · Mi nombre de charca... · de La rana via-jera - 1921]

Tomado de www.juliocamba.com/itaca/

La AntorchaLa Antorcha

Amigo mío Amigo mío… ¡Qué vacías mis manos sin tu risa en mi camino! ¡Que lentamente mis pies caminan sin ningún sentido! ¡Y qué estremecimiento siento en este pecho tan frío! ¿Recuerdas? Las mañanas domingueras henchidas de torbellinos, con colgantes de ilusiones y globitos de chiquillos? Tus pasos rimando mis pasos. La tarde, lloviendo infinitos. Tus ojos, desgranando voces. Tu boca, callando los gritos. Y esa alegría mansa como un pez escurridizo. Y mi sed de beber tu paz. Y tu paz volviéndose río. Amigo mío… ¿Oyes? La campana toca. Tal vez un ángel ha huido.

Evocando a Torrente Ballester

Permítaseme hablar de Torrente desde la emoción que me produce la obra tan magnífica, ponderada, irónica y con ese regusto que nos deja de hogar, de tierra, de humedad, de olor a hierba recién cortada, a taza de café, mientras nos imaginamos que en nues-tros cristales gallegos el viento susurra lejanías.

Su narración, mágica y potente, nos lleva a lugares conocidos, por donde pasamos todos los días en nuestra ru-tina. Y me quedo sor-prendida al no ver a Clara en su mercería bajo los soportales de la Plaza del Teucro de Pontevedra —la rotun-da Clara de Los Gozos y las Sombras—.

Pero… qué decir del laberinto que arma en Santiago de Compostela, cuando la menciona de forma solapa-da (Villasanta de la Estrella) en su obra Fragmentos del Apocalipsis. ¿Cómo no perderme en el recuerdo de un día entero buscando puertas, rincones, calles tapiadas y castigadas, recovecos inquietantes de la Catedral de Santiago, con mi pobre prima Elsa, amiga suya, que preparaba un trabajo para sus alumnos italianos de su Cátedra de Florencia. ¡Qué día! ¿Qué regalo inolvidable nos dio a las dos con su fragmento del Apocalipsis!

En el recuerdo, esos recuerdos que se acarician y nos hacen sonreír, me queda Torrente Ballester; su humanidad, su humildad y mi queridísima Elsa, des-entrañando el misterio de la obra de su buen amigo y compañero de oficio.

Por GRACIELA GARCÍA RIVAS

Para disfrutar El rincón de la lectura

Por GRACIELA GARCÍA RIVAS

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Es imposible que chupes tu codo.

Un cocodrilo no puede sacar la lengua

El encendedor fue inventado antes que la cerilla.

Tal como las huellas digitales, las marcas de tu lengua son únicas

Más del 75% de la gente que lee esto, tra-tará de chupar su codo

¿Será verdad?

La AntorchaLa Antorcha

CRUCIGRAMA nº 19 Por Alfonso Rubio

HORIZONTALES: 1.– Tela clara y sutil. Forme. 2.– Inventara. Célebre colegio inglés. 3.– Pez acantopterigio. Se atre-va. Radio. 4.- Al revés, corto por el pie. Engendrar. 5.– Embarcación larga y estre-cha. Al revés, saludable. 6.– Vocal. Oasis del Sahara cen-tral. Cosa que retiene. 7.– Cien. Mar de las Antillas. Tonelada. 8.– Río cántabro. Matronas. 9.– Uno de los tres mosquete-ros. Al revés, despreciable. 10.– Fuerte. Corte las ramas superfluas. Área. 11.– Letra griega. Ente. Río alemán.

12.– Entregar. Emperador roma-no. Onda. VERTICALES: 1.– A galope. Tabique. 2.– Al revés, engañada. Mascara. 3.– Al revés, labrabas. Extraer. 4.– Al revés, perteneciente a la cadera. Apócope de mío. 5.– Apócope de santo. Chistoso. 6.– Al revés, aupar. Antiguo gorro militar. Extraterrestre. 7.– Repetido, madre. Al revés, observar. Provecho. 8.– Oeste. Doble vocal. Árbol de madera negra. Norte. 9.– Exagerado. 10.– Que dura siempre. Coso tau-rino. 11.– Articulo neutro. Al revés, vol-ver a traer. Artículo. 12.– Pone a nivel . Sur. Labra.

SOLUCION AL Nº 18. (Sólo horizontales ) 1.– SOASE. MODERE. 2.– ENCANTE. IRIS. 3.– SALTEE. EVA. T.

4.– IMAN. SETERPA. 5.– LIMATÓN. RIAD. 6.– A. ALO. ALGOSO. 7.– M. PREMIE. I. 8.– GAS. NOICNETA.

9.– AGADIR. OCIO. 10.– FINAL. ERID. M. 11.– ACO. LAS. AASE. 12.– SOS. OLER. RAS.

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Dende a superficie dun novo e imprevisto salvamento Sería a luz que me alagaba os ollos da vida roubada á morte veciña pero todos me apalpaban incrédulos colléndome das mans. Todos aqueles que me amaran morto amábanme máis vivo. Abríranse dúas portas en direccións opostas e escollín a que se abría cara á vida co sol entrando a eito polas fiestras. Tería que reanudarme e regresar á miña propia vida sen contaxiarme outra vez de min mesmo. Retocaría o guión e mudaría outra vez de personaxe retomando a perdida aprendizaxe. (Poesía última de amor e enfermidade, 1992-1995, nadal 94) Tomado de loispereiro.blogaliza.org/vento-lois/

O Día das Letras Galegas deste ano homenaxea ao poeta Lois Pereiro (Monforte 1958, A Coruña 1996), o artífi-ce dunha obra breve pero intensa que se move no fío da navalla, entre os anceios de vida e amor e a morte, que reclama-ba a Pereiro desde que foi infectado polo aceite de colza en 1982.

Os membros do Clube de lectura do centro e do Obradoiro de xornalismo homenaxearán ao autor o día 16 de maio, no salón de actos do centro. Recitarán algún dos seus poemas xunto con outras pezas de autores galegos.

Por ESTHER LÓPEZ CASTRO ¡Llegó la jubilación!

Todo depende del cristal con que se mire. Unos piensan que se les trunca la vida. Otros ven ante si un panorama de posibilidades. Hoy, gracias a los centros cívicos y sociales, se abre una puerta a la esperanza y esas personas mayo-res ven colmadas sus aspiracio-nes e ilusión. Siguen sintiéndose útiles y vivas.

Cuando por primera vez franqueé la puerta de uno de estos centros hoy llamados “de mayores” vi con asombro que entraba en un nuevo mundo que nada tenía que ver con el sedentarismo o con lo que vulgarmente llamamos “fábrica de viejos”. Aquello parecía una pe-queña universidad. Las personas mayores podían beneficiarse, gra-cias a la entonces Obra Social de Caixa Galicia, de unas importan-tes ventajas.

Para mí, lo más importante fue el

abrir una puerta a la ilusión. Aquí, en el centro, están todas abiertas.

Hay un gran abanico de posibili-dades: un taller de dramatización donde, trabajando la memoria y bajo la experta dirección de Víctor Díaz Barús, se logra llegar al co-razón con los más bellos y tiernos poemas. O desarrollar esa faceta de actor que muchos llevan es-condida, queriendo asomar duran-te años.

También esa oportunidad de tra-bajar y educar la voz, que durante años sólo se podía oír tímida y soterrada bajo el chorro de la du-cha. Igual que el Taller de danza, donde se practican, ya con seguri-dad, esos pasos de baile que a escondidas dábamos por el pasi-llo de casa.

Y qué decir de una de las mayo-res necesidades del ser humano:

la comunicación. El poder trans-mitir nuestras ideas, proyectos, experiencias… por medio de una publicación. Colmar esa faceta de periodista que casi todos llevamos dentro. La Antorcha es la revista que nos da esa gran oportunidad junto con un largo etcétera de di-versas e interesantes opciones.

Gracias por tan importante labor social.

Esta frase pende sobre nuestras vidas como espada de Damo-cles. Para muchos es sinónimo de vejez; para otros de libera-

ción, el fin de una vida de es-fuerzo, de cotidiana rutina, de un dejar escapar horas desapro-vechadas en aras de un salario.

Tu voluntad pone los límites Por OLGA LÓPEZ FERNÁNDEZ

Hay demasiada gente convencida de que tras la jubi-lación sólo sirves para la vida contemplativa, para hacer calceta o para empaparte de los dimes y dire-tes de una televisión poco ilusionante.

Gran equivocación. Mi opinión es que te ha llegado el momento de poder desarrollar muchas de las opcio-nes que las circunstancias de la vida que te tocó vivir te impidieron. Cierto, tenemos unas limitaciones físi-cas con las que antes no contábamos pero ¿tu cabe-za funciona? No dejes de aprovecharla: viaja, escri-be, pinta y haz también calceta si te gusta. Estudia, dale magnitud a la experiencia que llevas encima.

Creo que los límites no existen, sólo tu voluntad los define. No pretendas lograr cosas imposibles. Apro-vecha lo que puedes hacer. ¡Vive!

¡Podemos danzar!

¡Aquí estamos! Por MARCELINO SÁNCHEZ RODRÍGUEZ

Sí. Somos personas mayores, jubiladas, pero con ganas de vivir y demostrar a muchas personas que nos consideran viejos —es decir, que no servimos para nada y que somos un estorbo— que no es así. Nuestro cuerpo ha sufrido un desgaste pero la Uni-versidad de la vida nos enseñó asignaturas muy difí-ciles, que no se imparten en ninguna otra Facultad y las seguiremos cursando hasta el final de nuestros días.

Así que podemos seguir haciendo muchas cosas, interviniendo en muchas actividades creativas y enri-quecedoras, ser útiles, acompañando por ejemplo a personas enfermas. Animándolas a que, como noso-tros, hagan todo aquello que no pudieron hacer en su juventud.

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Algunas cifras para hacer balance

Sintiendo ‘el calor’ del mar Los socios y socias que acuden a Termaria Casa del Agua se benefician de las virtudes de la Talasoterapia, que emplea los efectos saludables del agua del mar en sus tratamientos. A una temperatura muy agradable y bajo la supervisión de profesionales los socios también pueden participar en otras actividades como Aquasenior, Pilates y Taichi.

Todas las personas que emplean estas instalaciones coinci-den en manifestar su satisfacción, tanto por los resultados de los ejercicios y terapias practicados, como por la calidad de las instalaciones. Algunos hablan de que sienten “verdadera adicción”.

2.000 personas participa-ron durante el presente curso de las diferentes actividades.

19 grupos de Informática se constituyeron para pro-porcionar formación a los socios en este ámbito.

31 actos de proyección al exterior se realizaron, entre actuaciones de los grupos de teatro y drama-tización, guiñol, coro, gru-pos instrumentales, sali-das y visitas guiadas.

12 actos de fin de curso se organizaron para cerrar la programación de activi-dades.

(Viene de la CONTRAPORTADA)

Arriba: a la izquierda, imagen de la peluquería de caballe-ros. A la derecha, una parte de la biblioteca.

Abajo: a la izquierda, las vitrinas de la entrada con los tro-feos, premios y objetos conmemorativos que dan fe de la gran actividad en el exterior. A la derecha: los aficionados al ajedrez cuentan con una sala tranquila.

Al cierre

3939 La AntorchaLa Antorcha

El centro: mucho que ofrecer En la contra...

Revista elaborada por socios y socias del Taller de periodismo del

Centro de Mayores de novacaixagalicia de A Coruña

Por dentro…

Y por fuera…

11.252 socios pueden beneficiarse de su programación, de sus servicios y de sus confortables instalaciones. Una media de 4.934 personas cada mes acudieron a alguno de los servicios ofertados: Podología, Asesoría jurídica, Psicología o Peluquería. De hecho, el servicio de podo-logía cuenta ahora con dos profesionales. La podóloga Victoria Souto ha contratado a otra compañera ante la in-capacidad para atender al gran número de pacientes.

30 socios del Centro de Mayores de A Coruña disfrutan cada semana de Termaria Casa del Agua en condiciones ventajosas, gracias a un concierto firmado con la Obra So-cial de Novacaixagalicia.

Una parte de la biblioteca, minutos antes de que se abra el centro. La peluquería de señoras.

Uno de los dos puestos de atención de podología.

Disfrutando de Termaria Casa del Agua.