trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

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ÁREA DE SALUD TÍTULO DEL PROYECTO FINAL Los trastornos y enfermedades relacionados con la ingesta de gluten: desde la celiaquía al autismo. El rol de la alimentación libre de gluten en la prevención y terapia de los mismos. Tesis para optar al grado de: Máster Internacional en Nutrición y Dietética Presentado por: Flisi Isabella COSNMND1037625 Director: Anna Maria Costa Bogotá, Colombia 18 Noviembre 2013

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Page 1: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

ÁREA DE SALUD

TÍTULO DEL PROYECTO FINAL

Los trastornos y enfermedades relacionados con la ingesta de gluten: desde la

celiaquía al autismo. El rol de la alimentación libre de gluten en la prevención y

terapia de los mismos.

Tesis para optar al grado de:

Máster Internacional en Nutrición y Dietética

Presentado por:

Flisi Isabella

COSNMND1037625

Director:

Anna Maria Costa

Bogotá, Colombia

18 Noviembre 2013

Page 2: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

Firma:

RESUMEN o ABSTRACT

Debido al incremento significativo de la población que presenta una sintomatología

relacionada con la ingesta de gluten, este trabajo se propone, como objetivo

principal, hacer una recopilación de las informaciones académicas relativas a las

enfermedades y los trastornos que se benefician de la exclusión de los alimentos

con gluten de la dieta. Por lo tanto, se investigarán las posibles causas por las

cuales la sintomatología relacionada con la ingesta de gluten está aumentando. Se

investigarán la enfermedad celiaca, la alergia al trigo, la sensibilidad al gluten no

celiaca, el síndrome del intestino irritable y el autismo con el fin de entender mejor

la relación entre el gluten y estas patologías. Cada una de estas patologías

presenta una relación diferente con la ingesta de gluten, así como sintomatologías

y tratamientos distintos.

En el trabajo se brindan consejos y recomendaciones para llevar a cabo una dieta

libre de gluten de manera segura y garantizando una alimentación equilibrada y

saludable. También se dedicará un amplio espacio a los estudios más actuales

que proponen nuevas terapias para el tratamiento de la enfermedad celiaca.

Debido a la alta prevalencia de la enfermedad celiaca y otros trastornos

relacionados y al consumo siempre más alto de gluten, la prevención asume un

aspecto central. En conclusión, el proyecto muestra como, por una serie de

razones, el gluten está teniendo un impacto mayor hoy en día y se recomienda

cómo reducir el impacto de los trastornos relacionados. En consecuencia, se

elaboran una serie de recomendaciones con el objetivo de informar toda la

población, y especialmente a los sujetos con mayor riesgo de padecer de

enfermedad celiaca. Específicamente se recomienda: el uso de ciertas cepas de

probióticos y prebióticos, el mantenimiento la lactancia materna durante los

primeros seis meses de vida, introduciendo el gluten gradualmente, escoger

variedades de trigo menos tóxicas y limitar el consumo de gluten.

Page 3: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

La metodología utilizada es una exhaustiva investigación bibliográfica con

comparaciones de diferentes estudios científicos.

Page 4: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN .................................................................................................... 1

MARCO TEÓRICO ................................................................................................. 4

CAPÍTULO 1. EL IMPACTO DEL GLUTEN EN LA HISTORIA ............................. 5

1.1. Historia y epidemiologia de la enfermedad celiaca ................................. 5

1.1.1. Lactancia materna ................................................................................ 7

1.1.2. Toxicidad del trigo moderno ................................................................ 9

1.1.3. Aumento del consumo de gluten en la dieta moderna .................... 12

1.2. Epidemiologia de la enfermedad celiaca ................................................ 12

CAPITULO 2. LA ENFERMEDAD CELIACA ....................................................... 18

2.1. Patogenia, clasificación y cuadro clínico de la celiaquía ...................... 19

2.1.1. Clasificación de la celiaquía .............................................................. 21

2.1.2. Síntomas .............................................................................................. 22

1.2. Manifestaciones extra-digestivas de la enfermedad celíaca ................. 25

2.3. Diagnóstico de la enfermedad celiaca .................................................... 27

2.3.1. Clínica .................................................................................................. 29

2.3.2 Anticuerpos ............................................................................................ 33

2.3.3. Genética ............................................................................................... 35

2.3.4. Biopsia duodenoyeyunal ....................................................................... 36

CAPITULO 3. ENFERMEDADES Y PATOLOGIAS QUE SE PUEDEN

BENEFICIAR DE LA DIETA SIN GLUTEN .......................................................... 40

3.1. Alergia al trigo ........................................................................................... 41

3.2. Sensibilidad al gluten no celiaca (SGNC) ............................................... 46

3.3. Síndrome del intestino irritable (SII) ........................................................ 49

3.4. Autismo ...................................................................................................... 51

3.4.1. Generalidades y bases para la adopción de dietas y tratamientos

biológicos ...................................................................................................... 52

CAPITULO 4. TRATAMIENTOS Y NUEVAS PERSPECTIVAS PARA LA

ENFERMEDAD CELIACA Y OTROS TRASTORNOS RELACIONADOS CON LA

INGESTA DE GLUTEN ......................................................................................... 62

4.1. El tratamiento de la enfermedad celiaca ................................................. 62

4.1.1. Dieta sin gluten ................................................................................... 67

Page 5: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

4.2. Nuevas estrategias terapéuticas y experimentaciones ......................... 74

4.4 Probióticos y prebióticos .......................................................................... 77

4.5. Prevención ................................................................................................. 82

4.5.1. Lactancia ............................................................................................. 83

4.5.2. Parto ..................................................................................................... 83

4.5.3. Infecciones .......................................................................................... 84

4.5.4. Ingesta de gluten ................................................................................ 85

4.5.5. Microbiota ............................................................................................ 86

CAPÍTULO 5. CONCLUSIONES GENERALES ................................................... 87

CAPITULO 6. RECOMENDACIONES .................................................................. 90

BIBLIOGRAFÍA .................................................................................................... 92

Page 6: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

1

INTRODUCCIÓN

Las dietas lastimosamente a veces se vuelven una moda y las personas que no

reciben el apoyo de profesional sanitario especializado en Nutrició y Dietética

ignoran los reales beneficios o efectos negativos de las mismas.

Hoy en día, por ejemplo, se escucha mucho hablar de la dieta sin gluten. Se trata

de una dieta muy restrictiva que tiene un impacto muy grande sobre la calidad de

vida de las personas que la practican, sea por el alto coste de los productos sin

gluten, sea por la dificultad de conseguir alimentos aptos, sobre todo fuera del

hogar o en los países económicamente y tecnológicamente menos avanzados.

Cuando hablamos de dieta sin gluten la mayoría de las personas la relacionan a la

enfermedad celiaca. Sin embargo, la enfermedad celiaca no es la única patología

que implica como tratamiento la eliminación de los alimentos con gluten de la

dieta.

Se estima que la dieta sin gluten tiene (y tendrá) un impacto siempre mayor en los

próximos años. Actualmente, una de cada 100 personas sufre la celiaquía.

Mientras que las personas con sensibilidad al gluten, pero sin enfermedad celiaca,

se supone ser 5 o 6 veces mayores.

Debido al aumento significativo de los sujetos que presentan una sintomatología

relacionada con la ingesta de gluten, este trabajo se propone como objetivo

principal hacer una recopilación de las informaciones técnico-científicas existentes

hasta actualmente, sobre estas enfermedades y/o trastornos.

Como se observará más adelante, faltan aún estudios concluyentes sobre la

relación entre el gluten y los pacientes no celiacos que, sin embargo, presentan

una sintomatología relacionada con la ingesta de gluten.

En un contexto en el cual todavía faltan evidencias y consensos de las sociedades

científicas y médicas, es importante recopilar los estudios disponibles para ayudar

en el esclarecimiento de los impactos del gluten en diferentes sujetos. En

particular, debido al alto impacto no solo de la enfermedad celiaca, sino también

de otros trastornos relacionados con el consumo de gluten, se hace urgente

Page 7: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

2

analizar las terapias y las nuevas técnicas de prevención. Actualmente se está

reconociendo en el campo médico que la reacción al gluten no se encuentra solo

en la enfermedad celiaca. Hoy en día es ampliamente aceptado un espectro de

trastornos relacionados con el gluten.

El primer capítulo será dedicado al estudio de la epidemiologia de la enfermedad

celiaca y de las posibles causas que la generan. Este análisis nos permitirá

entender mejor las posibles razones que han llevado en los últimos años a hablar

de una epidemia celiaca. Este análisis servirá también para comprender, como a

través de un proceso de transformación y selección del trigo, ha aumentado la

toxicidad del mismo, lo cual puede conllevar a una menor tolerancia, no sólo por

parte de las personas con predisposición celiaca, sino también por otros sujetos.

Una de las posibles explicaciones que se plantea desde el principio de este trabajo

es la selección de variedades de trigo con mayor contenido de gluten que se ha

dado en los últimos siglos, hasta a llegar a la situación actual en la cual el

consumo de trigos es limitado principalmente a trigos de tipo esaploide.

Al parecer varios individuos tienen mayor riesgo de ser susceptibles a alguna

forma de reacción al gluten, así como muchos individuos presentan mejoras en su

estado de salud eliminando el gluten de su dieta a pesar de no presentar síntoma

o predisposición a la enfermedad celiaca.

En el segundo capítulo se dedicará enteramente al estudio de la enfermedad

celiaca. Siendo la enfermedad celiaca la enfermedad crónica autoinmune con

mayor incidencia, es importante dedicar un capitulo especifico a un análisis

detallado de la misma. Además, el diagnostico de la misma no es muy sencillo

debido a la grande gama de síntomas intestinales y extraintestinales que puede

presentar dicha enfermedad. Se dedicará mucha atención, tanto al diagnostico

como a la sintomatología.

Page 8: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

3

En el tercer capítulo, se tratará de analizar los efectos benéficos de una dieta sin

gluten en pacientes con otros trastornos y no afectados por enfermedad celiaca.

Debido a la creciente importancia que el gluten está teniendo en las dietas

modernas, recientemente se han desarrollado diferentes estudios con el fin de

determinar si la ingesta de gluten puede producir síntomas en individuos no

celiacos. Se analizan las siguientes enfermedades y trastornos: sensibilidad al

gluten no celiaca, alergia al trigo, síndrome intestino irritable y autismo.

En el cuarto y último capítulo se brindarán las indicaciones terapéuticas en caso

de enfermedad celiaca, y en los casos de los otros trastornos analizados.

Las mejoras y los avances en la medicina, sobre todo en los últimos 20 años, han

mostrado que la celiaquía es, en realidad, una enfermedad muy difusa y con un

impacto significativo sobre la salud pública.

En detalle se explicará cuáles alimentos eliminar de la dieta y cómo organizar una

dieta equilibrada y completa, a pesar de la ausencia de alimentos con gluten en la

misma.

También se dedicará un amplio espacio a los estudios más actuales que proponen

nuevas terapias para el tratamiento de la enfermedad celiaca y de las patologías

relacionadas con la ingesta de gluten. Un espacio especial se dedicará al estudio

de los efectos de los productos probióticos y los prebióticos.

El objetivo último de este trabajo es sugerir que, debido a la alta incidencia de la

enfermedad celiaca y otros trastornos relacionados y al consumo siempre más alto

de productos que contienen gluten, la prevención asume un aspecto central.

Page 9: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

4

MARCO TEÓRICO

En este trabajo se analizan las enfermedades relacionadas con la ingesta de

gluten, con el fin no sólo de entender las razones del rápido aumento de las

mismas sino, también, de sugerir estrategias de prevención para el futuro.

En el primero capitulo se define la situación epidemiológica relacionada con la

enfermedad celiaca y se estudian las distintas posibles causas de la misma.

En el segundo capítulo se estudia en detalle la enfermedad celiaca, siendo ésta

una enfermedad relacionada con la ingesta de gluten que conlleva a

consecuencias muy graves. Se dedica mucho espacio al diagnóstico de la misma

porque, a pesar de tener varias herramientas a disposición para le diagnostico, la

enfermedad celiaca sigue siendo subdiagnosticada.

En el tercer capítulo se analizar las otras enfermedades relacionadas con la

ingesta de gluten. Para el presente estudio se seleccionaron cuatro trastornos: el

síndrome del intestino irritable, el autismo, la alergia al trigo y la sensibilidad al

gluten no celiaca. Cada una tiene un diagnostico y una sintomatología específica,

por lo cual se dedica un apartado especial al estudio detallado de cada

enfermedad.

El cuarto capítulo se enfoca a la elaboración de recomendaciones para la

prevención de la enfermedad. Las recomendaciones son elaboradas tras

unestudio y valoración de las últimas técnicas disponibles y de los resultados de

las investigaciones y experimentos más recientes.

Page 10: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

5

CAPÍTULO 1. EL IMPACTO DEL GLUTEN EN LA HISTORIA

1.1. Historia y epidemiologia de la enfermedad celiaca

Para comprender completamente el impacto que puede tener en el futuro la

enfermedad celiaca es imprescindible reconstruir la epidemiologia y el impacto que

esta enfermedad ha tenido a lo largo del tiempo.

En primer lugar recordar que la enfermedad celiaca es la intolerancia permanente

al gluten.

El gluten es una es una glicoproteína que se encuentra en varios cereales. El

gluten está compuesto de gliadina y glutenina. La funcionalidad de esta molécula

es brindar elasticidad a la masa de harina, permitiendo que, a través de

la fermentación, el pan obtenga volumen. En resumen, la consistencia elástica y

esponjosa de los panes y masas horneadas se debe a la presencia del gluten. El

gluten en sí no es una sustancia dañina. Por lo contrario, el gluten contiene

cantidades muy bajas de grasa total y de tipo insaturado; conteniendo,

principalmente ácido linoleico. Además contiene vitaminas importantes para la

salud, como las vitaminas B1, B2 y niacina, y folatos. También contienen algunos

minerales, como calcio, hierro y zinc.

Los cereales que contienen gluten son:

Trigo

Espelta

Centeno

Cebada

Avena

Kanuth

Triticale

Los cereales que naturalmente no contienen gluten son:

Trigo sarraceno

Maíz

Page 11: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

6

Quinoa

Amaranto

Arroz

Mijo

La ingesta de gluten no ha sido constante en el tiempo, sino que ha variado

dependiendo de las áreas geográficas, del clima y del tipo de sociedades y de

trabajos que desarrollaban las mismas. Entender la distribución y la difusión de

esta enfermedad en la historia puede ayudarnos a entender el posible desarrollo

futuro de la misma y elaborar hipótesis y predicciones. Así mismo, nos permitirá

elaborar recomendaciones para la prevención a largo plazo.

El diagnostico de la celiaquía se basa en específicos marcadores serológicos y de

genes de predisposición, además de la lesión de la mucosa intestinal.

Lastimosamente es imposible tener estas informaciones de las poblaciones

pasadas. En consecuencia, el estudio de la epidemiologia celiaca en la antigüedad

se hará tomando en consideración a la distribución de esta enfermedad y un

análisis de los factores ambientales relacionados.

A pesar que es posible pensar que, con el aumento de las migraciones, la

redistribución de los genes de predisposición (HLA-DQ2 y/o DQ8) han producido

una redistribución significativa de la enfermedad celiaca a través de este estudio

revisaremos el impacto de la enfermedad celiaca en los siglos asumiendo que la

distribución de la componente genética de predisposición a la celiaquía no se haya

modificado en el tiempo.

En primer lugar, es importante recordar que la cantidad y el tipo de gluten ingerido

juegan un rol importante en el desarrollo de la enfermedad celiaca. Por ello, un

estudio epidemiológico debe tomar en consideración la historia de la alimentación

en los diferentes continentes y las especificidades climáticas locales.

Hoy en día el trigo es el segundo cereal más producido en el mundo (el primero es

el arroz).

Page 12: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

7

En el presente capitulo estudiaremos el impacto que tienen diferentes factores

ambientales en el desarrollo de la enfermedad celiaca. En primer lugar se tomarán

en cuenta los efectos de la lactancia materna, el aumento de las cantidades de

gluten ingeridas y las modificaciones en el tipo de gluten que es ingerido.

1.1.1. Lactancia materna

A pesar que hoy en día hay estudios distintos que confirman el efecto protector de

la lactancia materna para el desarrollo de la enfermedad celiaca, no existe una

literatura concluyente al respecto. Sin embargo, en una revisión sistemática de

trabajos relacionando la alimentación del recién nacido y el desarrollo de la

enfermedad celiaca, las conclusiones apuntan que para disminuir el riesgo de

enfermedad celiaca parece razonable evitar la introducción precoz (antes de los

cuatro meses) o tardía (después de los 7 meses) del gluten, teniendo la

precaución de introducirlo de forma gradual y manteniendo la lactancia materna al

menos hasta un mes después de la introducción del gluten ya que puede

colaborar a obtener respuestas tolerológicas a los antígenos orales.

Recientes estudios han demostrado que la leche materna contiene además cepas

del grupo bacteriano Bifidobacterium, los cuales ejercen un efecto protector frente

al desarrollo de la enfermedad celiaca (Sanchez 1 2011).

De acuerdo con Vitoria Cormanzana et al., 2013:

No está claro cuáles son los factores que confieren esta protección a la lactancia

natural. Posiblemente, moléculas inmunomoduladoras y factores de crecimiento

presentes en la leche materna, pueden mejorar la tolerancia oral al gluten.

Asimismo, la lactancia protege de infecciones gastrointestinales, que pueden

inducir un ambiente pro inflamatorio en el intestino2.

En un estudio desarrollado en un grupo de 141 niños con previa biopsia que

demostró presencia de enfermedad celiaca, se han encontrado diferencias

significativas dependiendo de la historia nutritiva del niños en los primeros meses

Page 13: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

8

y años. Exclusivamente los pacientes que habían recibido leche maternal eran

menos predispuestos a problemas de crecimiento (69% vs 88%, p<0,05) y baja

estatura (37% vs 62%, p<0,05), y presentaban una tasa más relevante de

síntomas atípicos (p<0,01). El estudio permitió concluir que la lactancia materna

puede contribuir a manifestaciones atípicas de la enfermedad celiaca y puede

causar un retraso en el diagnóstico de la misma (D’Amico3 2005).

Otro estudio llevado a cabo en Suecia ha desarrollado una investigación en dos

fases, sobre grupos de personas nacidas durante la llamada “epidemia” celiaca en

Suecia (1993) y niños nacidos después de la epidemia, a partir del 1997 (Carlssol

et al.4 2013). Entre los años 1984 y 1996, en niños menores de dos años, la

enfermedad celiaca ha tenido una incidencia 4 veces mayores a la esperada. Al

verse afectados sobre todo los niños menores de dos años empezaron a

sospechar que el aumento fuera relacionado con un cambio en las prácticas y

recomendaciones de la alimentación temprana de los recién nacidos. Han sido

analizadas muestras de sangre y los niños con resultados positivos han sido

remitidos a biopsia. En segundo lugar se han analizado las costumbres y la

historia nutritiva de los pacientes a través de cuestionarios. En total la prevalencia

de enfermedad celiaca era de 29 entre 1000, en los nacidos en 1993, y 22 entre

1000 por los nacidos en 1997. Se concluyó que los niños nacidos en 1997

presentaban un riesgo menor de padecer de enfermedad celiaca. La población

base difería en el tipo de nutrición que recibían los niños. La duración de lactancia

materna era respectivamente de 7 y 9 meses en los niños nacidos en 1993 y en

1997, respectivamente. La edad promedio de introducción del gluten en la dieta

era de 5 meses en ambos grupos de estudio. Sin embargo el porcentaje de niños

que seguían la lactancia materna después de la introducción del gluten era mayor

en el grupo de nacidos en 1997 (70% vs 78%). El estudio permitió concluir que la

menor prevalencia de la enfermedad celiaca entre los nacidos en 1997 muestra

una opción para la prevención de la enfermedad. Los datos sugieren que

mantener la lactancia materna durante la introducción del gluten en la dieta es un

elemento favorable para la prevención de la enfermedad celiaca, porque la

Page 14: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

9

continuidad de la lactancia materna reduce la cantidad total de gluten ingerida. El

cese de la epidemia sueca fue precedido por la introducción de nuevas

recomendaciones alimentarias.

Además, es importante recordar que la leche materna contiene sustancias con

actividad inmunomoduladora en la mucosa intestinal, a través de su efecto

específico supresor en células T. Hay hipótesis según las cuales los anticuerpos

IgA de la leche materna podrían disminuir la respuesta inmune frente al gluten

mediante la glutinación del antígeno a inmunocomplejos en la mucosa intestinal

(Carlssol et al.4 2013). En fin, se destaca que con la lactancia materna disminuye la

incidencia de infecciones gastrointestinales, las cuales pueden contribuir al

desarrollo de la enfermedad celiaca.

La lactancia materna está siendo sugerida como herramienta en la prevención de

la enfermedad celiaca a pesar que las evidencias concluyentes son todavía

limitadas.

Hoy en día se puede encontrar un amplio consenso sobre el efecto positivo de la

lactancia materna frente a la enfermedad celiaca, sobre todo si el gluten se

introduce poco a poco, y mientras se mantiene la lactancia materna. Sin embargo,

no se ha podido determinar si el efecto benéfico de la lactancia materna es

temporal o si protege del desarrollo de la enfermedad de por vida.

Según Castillejo de Villasante y Martinéz-Ojimaga Nodal, 2013 “cualquiera que sea

el mecanismo, a la lactancia materna se la considera el factor ambiental más

importante en el desarrollo de la enfermedad celiaca”5.

1.1.2. Toxicidad del trigo moderno

Desde los años 80, se han venido introduciendo variedades de trigo modificado y

que en la actualidad copan el mercado mundial. Son plantas de trigo más

resistentes a las plagas, con mayor rendimiento, y que proporcionan harinas con

una capacidad de procesamiento muy buena para la panificación y la bollería.

Page 15: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

10

Uno de los factores que juegan un rol en el desarrollo de la enfermedad celiaca en

sujetos predispuestos es no sólo la cantidad de gluten ingerido, sino también la

calidad del mismo.

Por otro lado, se está estudiando que hay algunas variedades tanto naturales

como modernas, con una menor toxicidad que podrían ser el punto de partida para

seleccionar y crear especies con un menor contenido en gluten, lo que ayudaría a

reducir la prevalencia de la enfermedad celiaca y las reacciones alérgicas.

En este sentido, un estudio del 2010 analizó el tipo de proteínas de gluten

presentes en 36 variedades modernas y 50 naturales de trigo, con el objetivo de

averiguar si las variedades de trigo que más se utilizan en la actualidad pueden

tener algo que ver con el incremento de la prevalencia de la enfermedad.

El estudio se concentra principalmente en dos tipos de proteína, la Gli-9 y la Glia-

20 (Van Den Broeck et al. 6 2010). Como resultado, el estudio demuestra que la

presencia de Glia-9 es mucho mayor en las variedades de trigo modernas, en

comparación con las salvajes, en las que el gluten predominante es el Glia-20.

Además se aclara que la variedad genética del trigo se ha reducido en el

transcurso del tiempo.

Esto sugiere, según los autores, que las técnicas de hibridación y modificación

genética utilizadas para mejorar la resistencia, rendimiento y procesado del trigo,

han incrementado el contenido de gluten al que la mayoría de la población es

sensible (Van Den Broeck et al. 6 2010). Además se encontró que la diversidad

genética es reducida. Esto implica que pacientes no diagnosticados con

enfermedad celiaca, pueden encontrarse con una menor diversidad de las

proteínas del gluten comparado con hace varias décadas.

De acuerdo con Sánchez Valverde et al., 2013:

En un principio había dos especies de trigo, uno tetraploide Triticum turgidum

(AABB) y otro diploide Triticum tauschii (DD), y a partir de ambos se desarrolló el

Page 16: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

11

hexaploide Triticum aestivum (AABBDD), que es el que se usa ahora masivamente

en la industria del pan de trigo7.

El estudio sirvió para estudiar si es posible lograr un mejoramiento del trigo para

reducir la exposición a estimulantes epítopos de células T. En el conjunto de

variedades estudiadas de trigo, encontraron un número de candidatos que

presentan un bajo contenido de los epítopos medidos. Entre las 36 variedades

modernas, una sola variedad se identificó con una baja respuesta a la Glia-9 mAb

(el inmuno-epítopo), en comparación con 15 de las 50 razas nativas, en las cuales

las frecuencias de alta respuesta a este anticuerpo eran casi la misma. Con

respecto a la Glia-20 mAb, el resultado fue opuesto, mostrando una mayor general

respuesta de anticuerpos en las variedades locales antiguas.

Teniendo en cuenta el impacto epítopo en los pacientes con enfermedad celiaca,

se concluye a partir de estos datos que, en general, la toxicidad de variedades

modernas de trigo se ha incrementado.

Se concluyó que, como contrapartida de un mejor del rendimiento del trigo y del

incremento de sus propiedades aptas para la panificación y la boletería industrial,

el contenido de gluten del tipo más perjudicial ha aumentado.

En el trigo, las proteínas del gluten son compuestas por gliadinas y gluteninas, que

están presentes en cantidades aproximadamente iguales y forman alrededor del

80% del contenido total de proteína en el trigo, junto a las albúminas (12%) y

globulinas (8%). Las gluteninas se pueden subdividir en subunidades de glutenina

de bajo peso molecular (LMW-GS) y las de alto peso molecular (HMW-GS). El alto

contenido de prolina y glutamina hace que las proteínas del gluten sean

resistentes a la digestión. Los péptidos del gluten que resultan de la digestión

parcial de todos los grupos de proteínas del gluten pueden contener epítopos

estimuladores de células T. Sin embargo, los epítopos de la α-Gliadinas se

considera que tienen la más alta relevancia clínica con respecto a tanto la

respuesta inmune adaptativa como a la respuesta inmune innata que conducen al

desarrollo de la enfermedad celiaca (Van Den Broeck et al. 6 2010).

Page 17: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

12

El consumo de gluten en las últimas décadas ha aumentado de varias maneras:

un aumento del consumo per cápita, un aumento de células T que estimulan el

desarrollo de la enfermedad celiaca (Glia-α), un aumento del uso de gluten en las

comidas procesadas y un aumento del consumo de comidas industriales

procesadas.

1.1.3. Aumento del consumo de gluten en la dieta moderna

No solo ha aumentado el consumo de trigo en el mundo sino que también la

industria alimentaria usa una cantidad siempre más grande de productos que

contienen gluten y la normativa relativa al etiquetado de los productos, aplicable

en muchos países, permite una descripción incompleta y poco concisa de los

ingredientes. El gluten, insospechablemente por muchas personas, aparece en

aglutinantes, aromas, salsas, o como complemento proteínico en productos

cárnicos. Entre otros, algunos ingredientes que contienen o puede contener gluten

son los siguientes: almidón y almidón alimenticio modificado, aditivo cereal,

emulsionantes, estabilizantes, proteínas vegetal, proteína hidrolizada y

saponificante. Además vale la pena recordar que también muchos medicamentos

contienen gluten (Gatti y Catassi8 2006).

1.2. Epidemiologia de la enfermedad celiaca

Las investigaciones paleo-epidemiológicas tienen el objetivo de conocer la

presencia y la difusión de la enfermedad celiaca a lo largo del tiempo.

En primer lugar hay que destacar que los datos disponibles no son detallados y,

en muchas ocasiones, lo único posible es hacer hipótesis dependiendo de las

reconstrucciones disponibles (costumbres de las poblaciones, nivel de toxicidad

del gluten, etc.).

En las sociedades de hombres nómades que todavía no conocían la agricultura,

es plausible pensar que la enfermedad celiaca no existía, debido al hecho que su

dieta no contenía alimentos con gluten (Gatti y Catassi8 2006).

Page 18: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

13

En la época Neolítica, con el descubrimiento de la agricultura, y el cambio a un

estilo de vida más sedentario, las poblaciones empezar a consumir alimentos con

gluten.

La agricultura se ha originado en el Oriente, en la zona hoy cubierta por los

estados de Turquía, Siria, Irak, Irán, Líbano e Israel. Desde estos lugares la

agricultura se ha demorado, alrededor de 5000 años, para llegar hacia Europa.

Lentamente se ha difundido en diferentes áreas.

Como se ha mencionado en los subapartados anteriores, varios estudios han

demostrado que la toxicidad de los cereales antiguos no era tan alta como la de

los cereales que se usan hoy en día. Los primero cereales eran el Einkorn y el

Emmer, los cuales no contenía los epitopios más tóxicos por los celiacos, entre los

cuales destacar el 33-mer.

Los bajos niveles de toxicidad del gluten asumido por las poblaciones de la época

neolítica, y con los periodos de lactancia materna muy largos, nos pueden hacen

pensar que la incidencia de la enfermedad celiaca, en esta época, era

relativamente baja.

En el antiguo Egipto (3200 a.C. – 343 a.C.) la producción de cereales aumentó

significativamente. En esta sociedad la producción de panes fue el centro de las

actividades agrícolas. Además estas poblaciones consumían muchas bebidas

fermentadas preparadas con trigo. Sin embargo, los cereales cultivados eran

principalmente cereales de tipo tetraploides, los cuales no contienen niveles

significativos de péptidos en grados de desarrollar la enfermedad (Gatti y Catassi8

2006).

Cabe mencionar que el tipo de levadura utilizada tiene efectos diferentes en el

desarrollo de la enfermedad celiaca y se señala que las levaduras naturales

(incluidas las más antiguas) tienen un mejor nivel de tolerancia por parte de los

sujetos con predisposición celiaca. (Gatti y Catassi8 2006).

Page 19: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

14

Estos factores nos pueden hacer pensar que las poblaciones del antiguo Egipto

tenían niveles de celiaquía significativamente inferiores a los que conocemos hoy

en día. Así mismo tenemos informaciones que estas sociedades solían practicar

lactancia natural hasta los 3 años de edad.

En la región del mediterráneo la ingesta de gluten en la misma época fue

probablemente menor a la ingesta de las poblaciones de Egipto.

Sin embargo los niveles de consumo de trigo en las civilidades griegas y romana

fueron significativos. En Grecia se consumía principalmente cebada. En la antigua

Roma solían consumir trigo, pasando desde un consumo principalmente de trigo

tetraploide a un tipo de trigo esaploide (Gatti y Catassi8 2006).

Es importante subrayar que las cantidades de cereales consumidos dependían

mucho de la clase social. Por ejemplo, la cantidad común de consumo en Grecia

era alrededor de 850 g/día, mientras que las de la clase espartana era de 1400

g/día y la de un soldado en la antigua Roma era de más de 1800 g/día (Mortiz LA9

1979). Como bien muestran estas cifras, el papel de los cereales y de los panes

en la alimentación era central. Sin embargo, el trigo era acompañado por el

consumo de otros cereales, tal vez considerados más pobres pero de producción

más segura como la cebada, el farro y el trigo sarraceno.

Se destaca que en el medioevo el periodo de lactancia pasó a ser entre los 12 y

los 24 meses, con una gradual sustitución de la leche materna con otros

productos.

En todas las épocas arriba mencionadas, hasta la segunda mitad del 1800 y el

principio del 1900, la toxicidad de los cereales consumidos eran inferiores, y los

más tóxicoscomo el esaploide se consumían en cantidades menores que los otros.

La antropóloga L. Johnson-Kelly ha estudiado los huesos y los dientes de las

poblaciones que han vivido en Europa en el medioevo y ha encontrado diferentes

elementos que pueden indicar la presencia de enfermedad celiaca en esta época.

Entre las manifestaciones encontradas se destacan: anemia sideropénica, cribra

Page 20: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

15

orbitalia, ipertosis porotica, defectos del esmalte dentario y rachitismo. Ninguna de

estas manifestaciones es una señal concluyente de enfermedad celiaca, sin

embargo el conjunto de estas manifestaciones y el aumento del consumo de trigo

pueden hace pensar en una mayor incidencia de la enfermedad celiaca (Gatti y

Catassi8 2006).

Con el encuentro del nuevo continente, han llegado en las mesas europeas

nuevos productos sin gluten que han permitido disminuir sensiblemente la ingesta

de trigo: patatas y maíz.

Dos fenómenos, con efectos opuestos, se han ido delineando a partir del 1800. De

un lado la disminución de la ingesta de gluten, debido a la introducción de nuevos

productos. Por otro lado la reducción del periodo de lactancia materna y la

consecuente introducción, en épocas más tempranas, del gluten en la dieta de los

niños.

Por lo que concierne a la lactancia materna, ha habido una drástica reducción a

partir de la época industrial. Por ejemplo, en Inglaterra a finales del 1700, la

lactancia materna ya estaba reducida alrededor de 7-9 meses, y bajó más, con el

avance de la industrialización. En Berlín, entre el 1885 y el 1910, se registró una

reducción del 27% de la lactancia materna y el promedio de meses de lactancia

bajó hasta 2,1 meses. La tendencia en la disminución de la lactancia materna

siguió bajando hasta que, solo a los finales del 1900, se difundió el conocimiento

de los beneficios de la leche natural.

La disminución de la lactancia materna en época industrial se juntó con otro factor

que predispone a la manifestación de la enfermedad celiaca: la difusión de trigos

con niveles mayores de toxicidad.

Las cifras demuestran como en las últimas décadas las ingestas de alimentos con

gluten no han variado significativamente, a pesar de las diferentes tendencias a

nivel regional y local. Por ejemplo, en Italia se han reducido los consumos de pan

Page 21: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

16

y de pasta entre el 1953 y el 1996. Mientras que en Suecia y en el Europa del Este

el consumo de trigo en los últimos 40 años ha aumentado.

Lohi et al. describen como la enfermedad celiaca ha doblado en el transcurso de

las últimas dos décadas en Finlandia. Según un estudio de estos autores, un

aumento tan significativo no puede depender solamente de las mejoras de las

técnicas de diagnóstico (Lohi et al.10 2007).

En Asia, la rápida difusión de costumbres alimenticias occidentales (por ejemplo,

comida fast-food) ha generado un aumento significativo de la enfermedad celiaca

(Cummins and Roberts-Thomson11 2009).

Actualmente se están describiendo casos de enfermedad celiaca en países en

desarrollo que han visto un cambio relevante de las costumbres alimentarias,

como por ejemplo en la India, donde el consumo de arroz ha disminuido en favor

del consumo de trigo (Gatti y Catassi8 2006).

El estudio de Gatti y Catassi8 (2006) demuestra cómo se han creado factores

desfavorables que han contribuido a aumentar el impacto de la enfermedad

celiaca.

A pesar de las dificultades en la recolección de datos directos, es evidente como el

entorno y las costumbres alimentarias tienen un impacto sobre la frecuencia de la

enfermedad celiaca. Indudablemente las altas cargas y el alto nivel de toxicidad a

los cuales la población mundial ha sido expuesta en las últimas décadas han

contribuido a la rápida difusión de la enfermedad celiaca.

La percepción de la enfermedad celiaca ha cambio mucho en los últimos años, así

como han cambiado las técnicas de diagnóstico. Y por esto la enfermedad celiaca

ahora se percibe como enfermedad multiorgánica relativamente frecuente. Al

contrario, en el pasado, era considerada como una patología poco frecuente que

afectaba principalmente las personas de origen europea. Sin embargo, las

Page 22: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

17

mejoras y los avances en la medicina, sobre todo en los últimos 20 años, han

mostrado que la celiaquía es en realidad una enfermedad muy difusa y con un

impacto significativo en la salud pública.

Hoy en día se estima que la enfermedad afecta a un 1% de la población de etnias

indo-europeas, aunque se piensa que es una enfermedad considerablemente sub-

diagnosticada (Gatti y Catassi8 2006).

Este análisis será retomado en el capítulo cuarto, en el apartado dedicado a la

prevención de la enfermedad celiaca y a las buenas prácticas relacionadas. Entre

otras se tratará de la importancia de la lactancia materna, de la introducción tardía

del gluten en la dieta, de la preferencia por el consumo de gluten con bajos niveles

de toxicidad.

Page 23: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

18

CAPITULO 2. LA ENFERMEDAD CELIACA

La enfermedad celiaca es un desorden sistémico con base inmunológica que se

está difundiendo muy rápidamente y que afecta un número significativo de

personas en todo el mundo.

La enfermedad celiaca es causada por la ingestión de gluten y afecta solamente a

las personas con predisposición. Debido al alto nivel de consumo de alimentos con

gluten que se hace hoy en día en todas las sociedades, el estudio de la

enfermedad celiaca se hace más urgente. Para ilustrar, sociedades que

históricamente habían tenido impactos muy bajos de enfermedad celiaca, ahora

están manifestando un aumento significativo. En consecuencia a la

homogenización de la alimentación, es plausible pensar que la enfermedad celiaca

se seguirá difundiendo y aumentará el impacto a lo largo del tiempo.

Aún quedan muchos campos de investigaciones para explorar. La historia natural

de la celiaquía, así como los factores desencadenantes, son un tema de mucho

interés. También la genética, la epigenética y la autoinmunidad todavía deben

aportar mucha luz al respecto.

En el primer siglo después de Cristo, el físico Celsus introdujo el término latín

“celiac” para indicar una enfermedad relacionada con diarrea. En el año 250,

Areteo de Cappadocia describió los signos clínicos de una enfermedad intestinal,

muy difícil de sanar, usando la palabra griega “koiliakos” describiendo una

sintomatología parecida a lo que hoy se identifica como enfermedad celiaca

(Villanacci12 2013).

La primera descripción moderna de la enfermedad celiaca, como la consideramos

hoy en día, es en el año 1888, por parte de Samuel Gee, el cual escribió que la

regulación de la alimentación es parte importante de la terapia de la dermatitis

herpetiforme y prediciendo que el único tratamiento de la enfermedad celiaca era

la dieta. En el año 1950, el pediatra holandés Willem-Karel Dickefue demostró que

gracias a la exclusión del trigo, la avena y el centeno, la enfermedad celíaca

Page 24: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

19

mejoraba drásticamente. Algunos años después, Paully describió por primera vez

la lesión intestinal: atrofia vellositaria (Polanco Allué13 2013).

En 2012, la European Society for Pediatric Gastroenterology, Hepatology and

Nutrition (ESPGHAN) ha consensuado nuevos criterios para el diagnóstico de esta

enfermedad. Esto demuestra que el debate y la investigación alrededor de esta

enfermedad están lejos de cerrarse. En la última década no sólo ha cambiado el

concepto de la enfermedad sino también la aproximación diagnóstica (Villanacci12

2013, Polanco Allué13 2013, Argüelles y Quero14 2013).

2.1. Patogenia, clasificación y cuadro clínico de la celiaquía

Hoy en día a veces entre las personas no especializadas hay confusión alrededor

de las enfermedades relacionadas con el gluten. Por lo que concierne la

enfermedad celiaca es bien aclarar que, a pesar de que el trastorno es causado

por una reacción a las proteínas del trigo, no es lo mismo que una alergia al trigo.

El término adecuado es intolerancia al gluten, y puede utilizarse

también enteropatía sensitiva al gluten, esprue endémico no-tropical o esprue

celíaco.

La nueva definición de enfermedad celiaca, establecida en 2012 por la

ESPAGHAN (European Society of Paediatric Gastroenterology and Nutrition),

define la enfermedad celiaca como una alteración sistémica de carácter

autoinmune desencadenada por el consumo de gluten y prolaminas relacionadas

en individuos con predisposición genética (principalmente HLA) caracterizada por

una combinación variable de: manifestaciones clínicas gluten-dependientes,

anticuerpos específicos de EC, haplotipo HLA DQ2 y/o DQ8 y enteropatía.

Esta nueva definición introduce un elemento muy significativo; porque por primera

vez, en la definición de enfermedad celiaca, la enteropatía se considera como un

criterio más de diagnóstico, y no como un criterio indispensable, al contrario de la

definición clásica.

Page 25: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

20

Vale la pena subrayar que esta enfermedad afecta sólo y exclusivamente

personas con predisposición genética.

Los anticuerpos específicos de la enfermedad celiaca son los anticuerpos anti-

transglutaminasa tisular (tTG2), los anticuerpos anti-endomisio (EMA) y los

anticuerpos anti-péptidos desamidados de gliadina (DGP) (Polanco Allué13 2013).

En la actualidad el concepto de enfermedad celiaca se ha ampliado, pudiéndose

incluir pacientes en los que la interacción entre su sistema inmunológico y el

gluten puede expresarse a diferentes niveles (Polanco Allué13 2013). Es

demostrado que, en los pacientes con síntomas clásicos de enfermedad celiaca,

solo una minoría y en general los síntomas clásicos se presentan más fácilmente

en los niños que en los adultos. Otras formas en las cuales la enfermedad se

puede expresar son:

Dermatitis herpetiforme, en la cual las lesiones se manifiestan a nivel de

piel.

Estomatitis aftosa de repetición, cuando las lesiones se manifiestan a nivel

de mucosa oral.

Artritis, algunos tipos de lesiones en las articulaciones.

Nefritis, en ciertos casos de problemas y lesiones a los riñones.

El gluten es la fracción proteica principal del trigo. La mayor parte de los

componentes tóxicos son contenidos en la gliadina, la prolamina del trigo, una

fracción del gluten soluble en alcohol. Algunas moléculas de gliadina permanecen

en el lumen intestinal después de la ingesta, porque son resistentes a la

degradación gástrica, pancreática e intestinal.

Las vellosidades presentes en el intestino tienen la función de contribuir a la

absorción de alimentos. En los celiacos la longitud de la vellosidad se acorta (en

consecuencia de la intolerancia al gluten), la capacidad de absorción se reduce y

la de digestión de los nutrientes y, como consecuencia, el estado nutricional

queda seriamente comprometido.

Page 26: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

21

En los sujetos con enfermedad celiaca esta situación crea una inflamación, o sea

una respuesta inmune del organismo, frente las moléculas de gliadina. Esta

respuesta inflamatoria se genera principalmente en la parte superior del intestino

delgado.

Si los alelos de la persona codifican las moléculas HLA-DQ2 o HLA-DQ8,

entonces la enfermedad celiaca se puede desarrollar. Sin embargo, la presencia

de estos alelos no es una condición suficiente (pero es necesaria) para el

desarrollo de la enfermedad. Por ejemplo, muchas personas poseen estos alelos,

pero no desarrollan enfermedad celiaca.

De acuerdo con Polanco Allué, 2013:

La inflamación es caracterizada por la infiltración de la lamina propia y el epitelio

con células inflamatorias y atrofia vellositaria. Esta respuesta está mediada por la

inmunidad innata y adaptativa. La respuesta adaptativa es mediada por los

linfocitos T CD+ de la lámina propia que reconocen péptidos de gliadina, los cuales

se unen a moléculas HLAde clase II (DQ2 o DQ8) que se expresan en las células

presentadoras de antígeno; las células T posteriormente producen citocinas pro

inflamatoria, en particular interferón. La enzima transglutaminasa tisular desamida

los péptidos de gliadina en el intestino, aumentando su inmunogenicidad13.

Los estudios en hermanos y gemelos sugieren que la contribución de los genes

HLA en el componente genético de la enfermedad celiaca es inferior al 50%. Así

mismo se han identificado otros tipos de genes HLA, que podrían influir en la

susceptibilidad para la enfermedad, pero su influencia no ha sido confirmada

(Polanco Allué13 2013).

2.1.1. Clasificación de la celiaquía

A lo largo del tiempo, varias clasificaciones han sido utilizadas para ubicar el tipo

de enfermedad celiaca. A continuación se indican las más importantes que se

destacan en la literatura actual:

Page 27: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

22

Celiaquía clásica: Predominan los trastornos intestinales. Es la más fácil de

detectar y constituye la punta del iceberg celíaco.

Celiaquía potencial: Comprende a las personas que tienen predisposición

genética (familiares en primer orden de sujetos diagnosticados como

celíacos). Presentan alteraciones inmunitarias, pero las vellosidades de su

intestino pueden estar intactas. Este patrón de presentación es hoy en día

excepcional en la edad adulta. Los pacientes pueden cursar con síntomas

digestivos o extra digestivos.

Celiaquía silente: La sintomatología es prácticamente nula pero los enfermos

tienen alterada la mucosa yeyunal (atrofia en las vellosidades).

Presentan marcadores serológicos positivos y HLA- DQ2/DQ8. Estos casos

suelen descubrirse de manera bastante fácil por una determinación de

marcadores séricos indicada por sospecha clínica o por pertenecer a alguno

de los grupos de riesgo.

Celiaquía latente: Los enfermos no tienen síntomas. En general se trata de

personas con predisposición genética. Pueden desarrollar la enfermedad de

manera súbita. Esta tipología es la más difícil de diagnosticar.

Celiaquía refractaria: La dieta libre de gluten no elimina los trastornos

intestinales. Estos enfermos tienen solo un 50% de supervivencia, ya que la

predisposición a desarrollar procesos neoformativos, como el linfoma intestinal

e infecciones concomitantes, es muy alta.

2.1.2. Síntomas

Hoy en día gracias a la mejora en el diagnostico se conoce que la celiaquía es una

enfermedad multiorgánica relativamente frecuente. En el pasado, debido a la

dificultad de diagnosticar la enfermedad celiaca, a causa de la amplia variedad de

síntomas, se pensaba que esta enfermedad era poco frecuente.

Page 28: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

23

Debido al hecho que los síntomas atípicos pueden ser muy frecuentes, tal vez más

que los síntomas típicos, la ESPGHAN (European Society of Paediatric

Gastroenterology and Nutrition), decidió usar la siguiente nomenclatura:

- Síntomas y signos gastrointestinales

- Síntomas y signos extragastrointestinales (Polanco Allué13, 2013).

Los primeros se presentan con más frecuencia en los niños, mientras que los

síntomas extra gastrointestinales son característicos de manifestaciones tardías,

en edad adulta, de la enfermedad celiaca.

Se estima que en los niños, aproximadamente el 50% de los pacientes, presenta

síntomas de estreñimiento crónico o diarrea (Argüelles y Acosta14 2013).

Todavía hay discusiones sobre el dolor abdominal como síntoma en los niños,

debido al hecho que es una manifestación muy común en la infancia que puede

ser debida a una amplia serie de factores, y no estrictamente a la enfermedad

celiaca.

Sin embargo, el dolor abdominal es un síntoma muy común, señalado por el 90%

de los niños canadienses con enfermedad celiaca.

Entre los síntomas que se han encontrado como consecuencia de la enfermedad

celiaca, se destaca también el fallo de medro (el riesgo es del 10%), el retraso en

el crecimiento (el riesgo es del 14%) y anemia por deficiencia de hierro (riesgo del

15%).

Argüelles y Acosta, 2013 señalan que “los síntomas gastrointestinales parecen

haber sido sustituidos por los síntomas gastrointestinales en niños con

enfermedad celiaca”14.

Sin embargo, siguen los autores Argüelles y Acosta, 2013:

No está claro si este hallazgo refleja una verdadera variación clínica o un mayor

conocimiento de las formas no gastrointestinales de enfermedad celiaca debido a

la disponibilidad de mejores procedimientos para el diagnóstico de la enfermedad y

de su inclusión en la elaboración del juicio clínico y diagnóstico diferencial ante

cuadros sindrómicos compatibles con enfermedad celiaca por el mejor

conocimiento de la epidemiologia y la semiología14.

Page 29: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

24

Según un estudio de D’Archivo15 (2004), con el fin de analizar como las

características de la enfermedad celiaca han ido evolucionando a lo largo de dos

décadas, y después de la introducción de los exámenes serológicos, se concluye

que la incidencia de los casos silentes y atípicos ha aumentado gracias a la

introducción de los exámenes serológicos. En consecuencia la diagnosis ha sido

más rápida y el tratamiento más eficiente.

Los síntomas típicos de la enfermedad, recopilados en las investigaciones más

recientes incluyen los siguientes (Polanco Allué13, 2013):

Retraso en el crecimiento

Pérdida de peso

Diarrea

Deficiencia de varios nutrientes, entre los cuales se destaca vitamina B

Deficiencia de acido fólico

Hipocalcemia

Osteoporosis

Anemia

Dolor abdominal

Cólicos

Distensión abdominal

Diarrea

Nauseas y vómitos

Estreñimiento crónico

Dermatitis herpetiforme

Alteración de esmalte dentario por hipoplasia

Trastornos del comportamiento

Aftas bucales

Amenorrea

Retraso en la pubertad

Estomatitis aftosa recurrente

Page 30: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

25

Hipertransaminasemia

Fatiga crónica

1.2. Manifestaciones extra-digestivas de la enfermedad celíaca

Como vimos en el subpartado, precedente la enfermedad celiaca es una

enfermedad multifactorial y presenta un espectro clínico muy amplio y numerosas

manifestaciones, más o menos de fácil identificación.

Sin duda las manifestaciones extra-digestivas, a pesar de ser más frecuentes, son

de difícil diagnostico e identificación. El número tan elevado y la heterogeneidad

de las mismas hacen más difícil el diagnostico de la enfermedad. Esta es una de

las razones por las cuelas se considera que la enfermedad celiaca sigue siendo

infra-diagnosticada.

Entre las principales manifestaciones extra-intestinales y extra digestivas se

destacan las siguientes: anemia ferropénica, osteoporosis, dermatitis herpetiforme.

Entre las manifestaciones neurológicas las más relevantes son: neuropatía

periférica, convulsiones y ataxia.

De acuerdo con Busoño Garcia, 2013: Clásicamente, se han asociado manifestaciones neurológicas con la EC. Un

estudio de Hadjivassiliou et al. demostró que el 57% de los pacientes con

enfermedades neurológicas de causa desconocida (ataxia, neuropatía periférica,

mielopatía, miopatía, neuropatía motora y mononeuritis múltiple), tenían niveles

elevados de anticuerpos anti-gliadina, siendo la prevalencia de enfermedad celiaca

en el mismo grupo de, al menos, un 16%.La ataxia es el síntoma neurológico que

más frecuentemente se ha visto asociado con la EC, aunque se han descrito otras

formas neurológicas de presentación de la EC, tales como las descritas en la tabla

II. La ataxia aparece entre un 30-40% de pacientes y su cuadro clínico puede ser

indistinguible de otras formas de ataxia cerebelosa, con las principales

características incluyendo inestabilidad progresiva de la marcha, postura y

extremidades. El mioclono puede ocurrir también en pacientes con EC con/sin

ataxia.16

Page 31: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

26

Las manifestaciones extra-digestivas de la enfermedad celíaca en el niño se

pueden dividir en diferentes tipos. Entre las más comunes de destacan (Busoño

Garcia, 2013):

Mucocutáneas:

– Dermatitis herpetiforme: erupciones cutáneas vesículo-costrosas, de carácter

simétrico, que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, agrupadas en forma

de placas, muy pruriginosas.

– Estomatitis aftosa recidivante.

Déficits nutricionales:

– Hierro y ácido fólico: anemia ferropénica y/o por carencia de ácido fólico.

Descenso común de ferritina persistente, con ferropenia, manifestada por caída

frecuente del pelo y fragilidad ungueal aumentada.

– Vitamina K: déficit de vit. K (hemorragias en forma diversa, especialmente

cutáneas, nasales, gingivales, etc.).

– Globales: fallo de medro. Edemas en piernas, calambres musculares, crisis de

tetania, etc.

Trastornos del crecimiento y desarrollo:

– Talla baja.

– Pubertad retrasada.

Trastornos neuropsiquiátricos:

– Epilepsia y crisis de hipotonía.

– Neuropatía periférica.

– Trastornos del aprendizaje.

– Cefaleas, neuropatía y trastornos del carácter, con tendencia a un aumento de la

ansiedad y depresión.

– Ataxia cerebelosa.

Defectos del esmalte dentario

Osteoarticulares:

– Osteopenia y osteoporosis.

Page 32: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

27

– Artritis.

Enfermedad hepática:

– Hepatitis reactiva (hipertransaminasemia criptogenética).

Miscelánea:

– Trastornos reproductivos y de la esfera sexual: (menarquia tardía, amenorrea

secundaria, menopausia precoz, abortos espontáneos, irregularidades

menstruales, infertilidad, impotencia, aumento de la mortalidad neonatal, etc.).

– Hipoesplenismo expresado como leucopenia y/o trombopenia.

– Afectación tiroidea frecuente, con presencia de tiroiditis autoinmune,

acompañada de hipotiroidismo y menos veces de hipertiroidismo, con molestias en

la deglución a nivel cervical asociadas.

– Diabetes mellitus.

– Astenia fácil ante pequeños y moderados esfuerzos de origen multifactorial.

– Litiasis renal.

– Pancreatitis.

La ESPGHAN (European Society of Paediatric Gastroenterology and Nutrition) ha

determinado que en casos de niños y adolescentes con las siguientes

sintomatologías no explicables por otra patología se debe proceder a realizar

pruebas serológicas: dolor abdominal crónico, cólicos, distensión abdominal,

diarrea, retraso del crecimiento, anemia por deficiencia de hierro, náuseas o

vómitos, estreñimiento crónico, pérdida de peso, baja estatura, fatiga crónica,

pubertad retrasada, estomatitis aftosas frecuente, amenorrea, dermatitis

herpetiforme, fracturas repetidas y hipertransaminasa (Polanco Allué13, 2013).

2.3. Diagnóstico de la enfermedad celiaca

En la enfermedad celiaca el diagnóstico precoz es especialmente importante

porque una alimentación exenta de gluten consigue, no sólo la normalización del

Page 33: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

28

estado de salud en tiempos relativamente cortos, sino también la recuperación de

la calidad de vida de los pacientes.

Debido a esto, es muy importante que los médicos (en particular los pediatras y

los médicos de familia) conozcan bien cuales síntomas deben hacer sospechar de

la presencia de enfermedad celíaca y cómo diagnosticarla.

El diagnostico puede ser demorado y difícil no solo porque la enfermedad celiaca

puede presentarse a cualquier edad de la vida y cursa con manifestaciones

clínicas muy variadas, sino sobre todo porque en muchos casos la enfermedad es

asintomática.

Recientes estudios han mostrado como los síntomas clásicos son menores que

los síntomas atípicos, lo cual nos hace pensar que la enfermedad celiaca, así

como lo conocemos hoy, es la punta de un iceberg.

De acuerdo con García et al., 2013:

El retraso en el diagnóstico de la enfermedad celiaca es común. La duración de los

síntomas hasta el diagnóstico es de 4,5 a 9 años. Además, por cada paciente

adulto diagnosticado, se calcula que, aproximadamente ocho casos están todavía

sin detectar17.

Con la nueva definición validada en 2012 por la ESPGHAN la lesión histológica ya

no es un elemento central en el diagnóstico de la enfermedad celiaca. Sin

embargo, el nuevo criterio diagnóstico requiere una validación a través de estudios

prospectivos y particularmente con los niveles de anticuerpos anti-trans-

glutaminasas.

La nueva definición de enfermedad celiaca, entonces ha abierto una puerta para

nuevos campos de investigación debido al hecho que se podrían investigar nuevas

propuestas de marcadores serológicos que atribuyan a la realización del

diagnóstico.

Este cambio es muy significativo porque implica que en algunos pacientes que

muestran ciertas condiciones se pueden omitir la biopsia intestinal. Sin embargo

Page 34: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

29

se han delimitado condiciones estrictas para omitir la biopsia. Esta omisión se hará

posible solo en aquellos pacientes sintomáticos con niveles de anti-TG2

superiores en más de 10 los niveles basales, EMA positivos y estudio genético

compatible.

Además esta opción siempre será evaluada por el gastroenterólogo pediátrico, y

se trata de una opción diagnóstica, y no de la regla.

Otra novedad introducida en el 2012 es la división de los enfermos celiacos en dos

grandes grupos de pacientes: sintomáticos y asintomáticos o de riesgo, a los

cuales se aplican diferentes estrategias diagnósticas. Tomar en cuenta esta

heterogeneidad de los pacientes celiacos ha permitido adaptar el diagnóstico y el

tratamiento de los pacientes a las exigencias de cada grupo, mejorando la

atención y los tiempos hasta el diagnostico final.

Estas mejoras se deben en primer lugar a los avances y a la precisión en las

pruebas inmunológicas, así como el conocimiento de la implicación y

predisposición genética en la enfermedad celíaca.

Las técnicas de diagnóstico hoy reconocidas por la ESPGHAN y utilizadas son

cuatro: clínica, anticuerpos, genética y anatomía patológica.

2.3.1. Clínica

Como mencionamos arriba, los enfermos celiacos se dividen en dos grandes

grupos, dependiendo de los síntomas que presentan: sintomáticos o

asintomáticos.

Como los pacientes sintomáticos son minoritarios, es importante hacer una

búsqueda cuidadosa en los grupos de riesgo y en las personas con enfermedades

asociadas.

Los familiares de primer grado constituyen un grupo de riesgo elevado en el que la

prevalencia de enfermedad celíaca oscila entre el 5 y el 15% (15­30% si son DQ2

positivos). Varios de estos sujetos permanecen asintomáticos. Sin embargo,

cuando se lleva a cabo una búsqueda intencionada de síntomas, con frecuencia

Page 35: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

30

se detecta astenia, flatulencia, ferropenia y osteoporosis, incluso en las formas

histológicamente leves.

Las enfermedades asociadas son relativamente numerosas. Se definen

relacionadas porque suelen preceder a la enfermedad celíaca, aunque en varios

casos se han manifestado de manera simultánea, o incluso después del

diagnóstico. Los pacientes que las padecen son considerados grupos de riesgo ya

que su asociación se produce con una frecuencia superior a la esperada.

Las enfermedades que pueden asociarse a la enfermedad celíaca se dividen en

los siguientes grupos: enfermedades autoinmunes y otras inmunopatias,

trastornos neurológicos y psiquiátricos y otras asociaciones.

En el primer grupo se encuentran las siguientes enfermedades:

- Diabetes mellitus tipo 1 (aproximadamente un 5-6% de los pacientes asocian

enfermedad celíaca),

- Tiroiditis autoinmune. La asociación de la enfermedad celíaca es alrededor del

5% y se puede presentar tanto en niños como en adultos.

- Déficit selectivo de IgA. Aparece en más o menos el 4% de los pacientes

celíacos que presentan además un déficit selectivo de IgA.

- Enfermedad inflamatoria intestinal.

- Otras enfermedades autoinmunes: Síndrome de Sjogren, lupus eritematoso

sistémico, enfermedad de Addison, nefropatía por IgA, hepatitis crónica

autoinmune, cirrosis biliar primaria, artritis reumatoide, psoriasis, vitíligo y

alopecia areata.

Entre los trastornos neurológicos y psiquiátricos, los que han sido relacionados

con la enfermedad celiaca son:

- Encefalopatía progresiva,

- Síndromes cerebelosos,

- Demencia con atrofia cerebral,

- Leucoencefalopatia,

Page 36: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

31

- Epilepsia,

- Esquizofrenia.

Otras asociaciones que frecuentemente se han manifestado con la enfermedad

celiaca son: Síndrome de Down (la asociación con la enfermedad celiaca es

superior al 12%), Síndrome de Williams, síndrome de Turner, fibrosis quística,

enfermedad de Hartnup, cistinuria, colitis microscópica, cardiomiopatía,

fibromialgia, síndrome de fatiga crónica e infertilidad (Ministerio de Salud y

Consumo18 2008).

Otra distinción importante de la clina de la enfermedad celiaca es relacionada con

la edad de los pacientes.

Ha sido destacado por Díaz et al., 2012 que:

en el niño pequeño la clínica más frecuente es la diarrea crónica, falta de apetito,

dolor abdominal recurrente, irritabilidad, apatía y tristeza. Los signos más

frecuentes son la malnutrición, la distensión abdominal, la hipotrofia muscular, el

retraso pondero-estatural, la anemia ferropénica y la hipoproteinemia19.

En el niño mayor y el adolescente pueden manifestarse algunos de los síntomas

típicos mencionado anteriormente, pero también es común una sintomatologías

extra intestinal. Por ejemplo se han señalado, anemia ferropénica, estreñimiento,

dolor abdominal, menarquia retrasada, irregularidades menstruales, cefaleas,

artralgias y hábito intestinal irregular. Además, los signos más frecuentes son talla

baja, aftas orales, hipoplasia del esmalte, distensión abdominal, debilidad

muscular, artritis, osteopenia y queratosis folicular (Díaz et al.19 2012).

La dermatitis herpetiforme es reconocida como una expresión cutánea de la

enfermedad celiaca muy común y transversal a todas las edades, a pesar que

aparezca con mayor frecuencia en niños mayores, adolescentes y adultos

jóvenes.

Page 37: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

32

En los adultos se han encontrado formas monosintomáticas de celiaquía

relacionadas con las siguientes patologías: pérdida de peso, dolores articulares,

historia de fracturas, infertilidad, síndrome del colon irritable, dispepsia, dolor

abdominal crónico, abortos recurrentes, astenia, ansiedad y depresión.

En adultos, como en niños, se recomienda descartar la enfermedad celiaca en las

siguientes situaciones: malnutrición, edemas periféricos, talla baja, neuropatía

periférica, disminución del tiempo de protrombina, déficit de ácido fólico y vitamina

B12 e hipertransaminasemia.

En resumen, los síntomas, de etiología en principio no filiada, con los cuales es

recomendado investigar el diagnostico de enfermedad celiaca en niños y

adolescentes son los siguientes:

Fallo de medro, pérdida de peso, estancamiento en el crecimiento, talla corta

Diarrea crónica o intermitente

Retraso puberal, amenorrea

Anemia por déficit de hierro

Nauseas o vómitos

Dolores abdominales crónicos

Distensión abdominal

Estreñimiento crónico

Dermatitis herpetiforme

Alteración en las pruebas de función hepática

Fatiga crónica

Aftosis bucal recurrente

Fracturas óseas ante traumatismo banales

Osteopenia

Osteoporosis

En niños y adolescentes que pertenecen a alguno de los siguientes grupos de

riesgo, a pesar de no presentar sintomatología clásica:

Familiares en primer grado de individuos con enfermedad celiaca

Page 38: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

33

Diabetes mellitus tipo 1

Síndrome de Down

Enfermedad tiroidea autoinmune

Déficit selectivo de IgA

Enfermedad hepática autoinmune

Síndrome de Turner

Síndrome de Williams

2.3.2 Anticuerpos

Los marcadores séricos son de gran utilidad en el diagnostico de la enfermedad

celiaca. En general se consideran como una primera etapa antes de la biopsia,

porque ayudan a seleccionar a los individuos con mayor probabilidad de presentar

la enfermedad. Se usan particularmente en los pacientes que presentan síntomas

gastrointestinales, en aquellos con enfermedades asociadas a la enfermedad

celiaca y sujetos en riesgo, entre los cuales los familiares de primer grado de

enfermos diagnosticados.

Es importante recordar que la negatividad de estos marcadores no excluye

definitivamente el diagnóstico de la enfermedad. Cuando la sospecha es muy

elevada y la sintomatología parece indicar la presencia de celiaquía, es

recomendable recurrir al estudio genético.

De acuerdo a un estudio del Ministerio de Salud y Consumo del Gobierno de

España, los marcadores disponibles son los siguientes:

Anticuerpos antigliadina (AGA): Fueron los primeros en utilizarse. Son tanto de

clase IgA como IgG. Se utilizan preferentemente los de clase IgA y su eficacia para

el cribado deenfermedad celiacaes mayor en niños que en adultos.

Anticuerpos antiendomisio (EMA): Son también de clase IgA. Su sensibilidad y su

especificidad son variables según la edad. Tienen el inconveniente de la

laboriosidad de su determinación y su interpretación es subjetiva.

Page 39: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

34

Anticuerpos antitransglutaminasa tisular humana de clase IgA (AAtTG). Los AAtTG

se han mostrado como los marcadores más útiles y hoy en día existe acuerdo

generalizado en utilizar sólo los AAtTG para el cribado de EC. También está

disponible la determinación de AAtTG de clase IgG, especialmente útil en caso de

déficit de IgA asociado a EC18.

De acuerdo con García et al., 2013:

La detección inicial de los individuos con enfermedad celiaca se puede realizar

utilizando cualquiera/ambos anticuerpos anti-endomisio y anti-transglutaminasa

tisular (TTG). El valor predictivo positivo de estas pruebas serológicas es superior

al 90%17.

Según en el estudio de Díaz et al., 2012:

Los Anticuerpos anti endomisio (EMA) y los Anticuerpos anti transglutaminasa tipo

2 (anti-TG2) son considerados de gran especificidad. Otros anticuerpos son

considerados relativamente específicos, como es el caso de los anticuerpos anti

péptidos de gliadina deaminada (anti-DGP). Aunque su sensibilidad es mayor que

la de EMA o anti-TG2 en pacientes menores de dos años su baja especificidad por

encima de esta edad no ayuda en el diagnóstico19.

Los resultados que brindan los anticuerpos pueden considerarse bastante fiables

sin embargo, Díaz et el., 2012 destacan que a la hora de determinar el nivel de

anticuerpos:

Es necesario tener en cuenta las siguientes premisas:

– Nivel de inmunoglobulina A (IgA): valores inferiores a 0,2 gr/L obligan a

considerar el resultado y solicitar anticuerpos del tipo inmunoglobulina G (IgG).

– Administración de inmunosupresores o corticoides que puedan condicionar la

respuesta inmunológica.

– Contenido de gluten en la dieta, ya que un bajo aporte puede ocasionar falsos

negativos19.

Page 40: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

35

2.3.3. Genética

Como se observa, la enfermedad celiaca se desarrolla en sujetos genéticamente

predispuestos. Sin embargo, la condición genética es necesaria, pero no

suficiente, al desarrollo de la enfermedad. Esto explica la importancia del examen

genético como condición necesaria de una posible enfermedad celiaca. Esta

prueba permite excluir la enfermedad celiaca con una certeza del 99%.

Se considera que el 90% de los pacientes con enfermedad celíaca son HLA-DQ2

positivos, mientras que sólo lo expresan un 20-30% de los individuos de la

población general. El resto de pacientes celíacos poseen variantes alélicas que

codifican HLA-DQ8 sin HLA-DQ2 (6% del total) o un solo alelo del HLA-DQ2. Por

tanto, la ausencia de HLA-DQ2 y HLA-DQ8 hace que el diagnóstico de

enfermedad celiaca sea muy poco probable (García et al. 17 2013).

Así mismo cabe destacar que los marcadores genéticos están asumiendo un

papel siempre importante en el diagnóstico, a pesar de no ser tan común su

utilización, sobre todo en países de bajos recursos. El HLA DQ2/DQ8 se presenta

en la mayoría de los sujetos celíacos y siguen brindando informaciones

importantes para el diagnóstico.

Este estudio es muy relevante, sobre todo en situaciones en las cuales la

sospecha clínica es bien fundada, pero el estudio serológico resulta negativo. En

estos casos se pueden plantear dos escenarios. Si el estudio genético es

negativo, el médico debería plantearse un diagnóstico alternativo. Pero, en caso

de un resultado positivo (con previa serología negativa), se hace necesario realizar

una biopsia duodenal para completar el diagnostico.

De acuerdo con Díaz et al., 2012:

La susceptibilidad genética para el desarrollo de la enfermedad celiaca está

asociada a genes del complejo mayor de histocompatibilidad, HLA tipo II,

codificados en el cromosoma 6. Así más del 95% de los pacientes celíacos

expresan el heterodímero, cis o trans, del HLA-DQ2 y el resto el heterodímero

HLA-DQ8. Los pacientes homozigotos para el HLA-DQ2 presentan al menos cinco

veces más riesgo de desarrollar la enfermedad celiaca que los heterocigotos19.

Page 41: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

36

Debido al alto riesgo que tienen los familiares de personas celiacas de padecer la

misma enfermedad, el diagnostico genético es muy útil con el fin de excluir del

diagnóstico a otros miembros de la familia. Así mismo, puede ser una herramienta

necesaria para asesorar a aquellos pacientes que no tienen un diagnóstico inicial

correcto pero realizan una dieta sin gluten y quieren volver a reintroducir el mismo.

2.3.4. Biopsia duodenoyeyunal

A pesar del cambio mencionado en la ESPGHAN en 2012, la biopsia sigue siendo

el pilar del diagnóstico de la enfermedad celiaca. Los casos en los cuales esta no

se considera necesaria son muy limitados como se ha observado.

Los expertos recomiendan tomar al menos 4 (otros recomiendan 5) muestras para

el análisis histológico porque las lesiones pueden ser parcheadas.

El resultado del estudio anatómico-patológico permite confirmar la existencia de

lesiones compatibles y establecer el estadio de la lesión. Hoy en día para este fin

se usa la Clasificación de Marsh (Villanicci7, 2013). Estos criterios fueron

establecidos en 1992 y clasifican la enfermedad en 4 estadios:

Estadio 0. Se trata de biopsias duodenales normales o que presentan

cambios mínimos. Se llama mucosa preinfiltrativa. Investigaciones destacan

que el 5% de los pacientes con dermatitis herpetiforme presentan piezas de

biopsia de intestino delgado que parecen normales.

Estadio 1. Se presentan únicamente un aumento en el porcentaje de

linfocitos intraepiteliales por encima del 30% en relación con el número de

células epiteliales.

Estadio 2. Este estadio ocurre cuando el paciente presenta una hiperplasia

de las criptas junto con un aumento en el infiltrado inflamatorio de la

submucosa. Se destaca por un aumento de la profundidad de las criptas sin

una reducción de la altura de las vellosidades.

Page 42: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

37

Estadio 3. En este caso se habla de atrofia vellositaria. Esta es una lesión

celíaca clásica y se divide en tres sub categorías: A parcial, B subtotal, C

total. Se encuentra en 40% de los pacientes con dermatitis herpetifrome y

10-20% de los parientes de primer grado de enfermos celiacos. A pesar de

los cambios marcados en la mucosa muchos individuos son asintomáticos y

por lo tanto son clasificados como casos subclínicos o silentes.

Estadio 4. Este caso se conoce con el nombre de hipoplasia. Se trata de

lesione muy avanzadas y se considera como la presentación terminal de la

enfermedad. Se encuentra solo en un muy pequeño grupo de pacientes que

no responden a la suspensión del gluten y pueden desarrollar

complicaciones malignas. En la biopsia se puede encontrar depósito de

colágeno en la mucosa y submucosa (esprue del colágeno, un trastorno

que puede estar Relacionado con la EC). Los pacientes con lesiones tipo 4

habitualmente no responden al tratamiento con corticoides, agentes

inmunosupresores o quimioterapia.

Se destaca que mientras que los estadios 0, 1 y 2 presentan una morfología

vellositaria bien conservada, los estadios 3 y 4 presentan lesiones marcadas.

Solo las lesiones 2 y 3 se consideran consistentes con el diagnostico de

enfermedad celiaca mientras que las lesiones de grado 1 no son específicas de

esta enfermedad y necesitarán pruebas adicionales para confirmar el diagnóstico.

Además del estadio de la lesión, el informe anatómico-patológico debe recoger:

orientación y grado de atrofia vellositaria, profundidad de las criptas, relación

vellosidad/cripta, número de linfocitos intraepiteliales observados.

El espectro de lesiones histológicas que presentan estos pacientes es amplio.

Como vimos arriba existen diferentes opciones de diagnóstico y el médico puede

escoger entre distintos exámenes, más o menos invasivos. El estudio a realizar en

Page 43: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

38

cada paciente varía en función del grupo de sospecha diagnóstica en el que se

encuentre el paciente.

De acuerdo con Díaz et al., 2012, la ESPGHAN recomienda:

en pacientes sintomáticos debe solicitarse en primer lugar los anticuerpos anti-

TG2 de tipo IgA con obtención del nivel de IgA total en suero. Los anti-DGP

pueden usarse inicialmente o conjuntamente cuando otros anticuerpos son

negativos o el paciente es menor de dos años de edad. Cuando existe deficiencia

primaria o secundaria de IgA deben determinarse los títulos de anti-TG2, anti-DGP

y/o EMA de tipo IgG.

Dependiendo de los resultados de los mismos hay dos opciones.

Si los anticuerpos son negativos en un paciente con niveles adecuados de IgA y

sin otras inmunodeficiencias, ingesta de inmunosupresores y adecuada ingesta de

gluten es muy poco probable que los síntomas que presenta se deban a la

EC. No obstante en aquellos casos en los que se exista una alta sospecha debe

completarse el estudio con la determinación de HLA DQ2/DQ8 y obtención de

biopsia intestinal. Si los anticuerpos son positivos debe remitirse al especialista en

gastroenterología pediátrica para completar el diagnóstico. Éste valorará la

determinación de títulos de EMA, estudio HLA DQ2/DQ8 y biopsia intestinal. En

aquellos pacientes con síntomas y signos compatibles con EC, niveles de veces

anti-TG2 superiores en más de 10 los niveles basales la correlación con atrofia

vellositaria (March 3) es muy elevada. Así un reciente estudio establece que anti-

TG2 superiores en más de 7 veces los niveles de corte para ser considerado

positivos se correlacionan con atrofia vellositaria superior igual a March 2 en el

100% de los casos. Por este motivo el gastroenterólogo pediátrico puede decidir

completar el estudio, en estos casos seleccionados, con la determinación de EMA

y estudio HLA DQ2/DQ8 y obviar la biopsia intestinal si ambas pruebas apoyan el

diagnóstico de enfermedad celiaca19.

En caso de pacientes asintomáticos o sujetos pertenecientes a grupos de riesgos,

la ruta a seguir es diferente. En estos casos se recomienda hacer en primer lugar

Page 44: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

39

el estudio genético, porque si este es negativo se puede excluir la enfermedad sin

proceder a otros exámenes.

En caso que el examen genético sea positivo el siguiente paso es determinarlos

niveles de anti-TG2 y de IgA total.

Asimismo, de acuerdo con Díaz et al., 2012:

Si los niveles de anti-TG2 son negativos se deben repetir a lo largo del

seguimiento al menos en otra ocasión. Si presenta niveles de anti-TG2 fluctuantes

o inferiores en tres veces los basales debe realizarse EMA y si estos son positivos

obtener biopsia intestinal. Si los EMA son negativos es recomendable el

seguimiento clínico y serológico del paciente. Si los niveles de anti-TG2 son

superiores en tres veces a los basales debe obtenerse biopsia intestinal19.

En algunos casos puede ser necesario realizar una prueba de provocación para

confirmar el diagnóstico.

En el caso de la enfermedad celiaca la prueba de provocación se limita a los

casos en los cuales persiste la duda. Por ejemplo en caso de lesión de bajo grado

(Marsh 1) o en caso de individuos con marcadores genéticos negativos.

En todos los otros trastornos la prueba de provocación tiene un valor mayor para

el diagnóstico. Especialmente en los casos de síndrome del intestino irritable y en

los casos de SGNC, como se expondrá en el siguiente capítulo. La prueba de

provocación debe realizarse bajo directo control médico. La eventual recaída

clínica confirma el diagnostico de un trastorno relacionado con la ingesta de

gluten.

Sin embargo la prueba de provocación está indicada solo en los casos de dudas

del diagnóstico y no en todos los casos de sospecha que pueden todavía usar

otros medios de diagnóstico más técnicos.

Page 45: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

40

CAPITULO 3. ENFERMEDADES Y PATOLOGIAS QUE SE PUEDEN

BENEFICIAR DE LA DIETA SIN GLUTEN

El consumo de gluten se ha relacionado con diferentes patologías. Todavía faltan

estudios concluyentes e investigaciones exhaustivas al respecto de las

enfermedades y/o de los trastornos que pueden beneficiarse de una dieta sin

gluten. En este capítulo se pretende hacer una recopilación detallada y exhaustiva

de la literatura al respecto, con el fin de ayudar en la elaboración de un cuadro

general de los efectos del gluten en distintos pacientes.

Entre otras, el consumo de gluten ha sido relacionado con las siguientes

patologías: dermatitis herpetiforme, ataxia por gluten, neuropatía periférica,

sensibilidad al gluten no celiaca, síndrome del intestino irritable, autismo.

Sin embargo aún son muchas las cuestiones por resolver y este tema requerirá

seguir siendo investigado en el futuro con el fin de aclarar las pautas de

alimentación más apropiadas para cada paciente y no enviar mensajes

contradictorios.

Debido a la creciente conciencia que el gluten induce síntomas gastrointestinales

sin tener relación con el diagnostico positivo de enfermedad celiaca y de alergia al

trigo, un grupo de expertos se reunió en 2011 en Londres con el objetivo de

revisar y sistematizar las trastornos relacionados con la ingesta de gluten y

actualiza la nomenclatura relacionada.

Las tres categorías que se crearon fueron: la enfermedad celiaca, la alergia al trigo

y la sensibilidad al gluten no celiaca. En las tres patologías los pacientes

reaccionan y desarrollan una sintomatología en consecuencia a la ingesta de

gluten. Sin embargo, hay diferencias relevantes en los síntomas, así como en las

consecuencias a la ingesta del gluten. Así mismo, el diagnostico en las 3

patologías es muy diferentes.

Page 46: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

41

3.1. Alergia al trigo

Está demostrado que las alergias a alimentos están aumentando, por lo menos en

algunas áreas geográficas, comparado con las décadas anteriores. La

Organización Mundial de la Salud, estima que la prevalencia de las alergias

alimentarias en el mundo es del 1% al 3% en los adultos, y del 4% al 6% en los

niños. La alergia al trigo tiene una prevalencia mayor en los Países del norte de

Europa que en los del Sur (Polanco Allué13 2013). Además se señala que el trigo

es uno de los alimentos que causa el mayor número de alergias.

La alergia al trigo se define como una enfermedad no relacionada con la celiaquía.

Todavía no hay muchos estudios que tomen en cuenta una posible relación entre

las dos.

La alergia al trigo (así como las alergias alimenticias en general) es una respuesta

anormal y excesiva del sistema inmunológico ante ciertas sustancias alimenticias

que las considera una amenaza. Es importante no confundirá la alergia con la

intolerancia porque en el segundo caso se trata de una reacción no compromete al

sistema inmunológico (Sapone et al.20 2012).

Para explicar de manera simple es suficiente decir que en caso de alergia el

sistema inmunológico es muy sensitivo a alguna de las proteínas del trigo, y por

ello, el organismo reacciona como si se tratara de un agente invasor.

La reacción alérgica al trigo puede presentarse no solamente cuando se come

trigo, sino también cuando se huele harina de trigo.

Un diagnóstico de la alergia al trigo puede desarrollarse con diferentes técnicas,

que pueden ser utilizadas de manera complementaria si el especialista lo valora

necesario.

En primer lugar es importante tener en cuenta la historia clínica y en las pruebas

de alergia.

Page 47: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

42

Las pruebas de alergias hoy en día son diferentes. Entre las más destacadas y

reconocidos se encuentran:

Pruebas cutáneas. Se distinguen el diferentes tipos:

o Pick test: se aplica una gota de alérgeno sobre la piel

o Test intradérmico: se inocula una pequeña cantidad de alérgeno

en la piel.

o Parche: diferentes alérgenos en forma de parches adhesivos se

aplican sobre la piel de la espalda durante 48 horas.

o Rub test

Pruebas en sangre, determinando IgE o Inmunoglobulina E, específica

frente a los alimentos en cuestión.

Provocación controlada con el alimento alérgeno.

Al contrario que en la enfermedad celiaca, en la alergia al trigo el diagnostico

depende de la observación de la manifestaciones clínicas después del contacto

controlado con el alérgeno.

Los síntomas en algunos casos son parecidos a los de la enfermedad celiaca.

Estudios demuestran que los niños suelen reaccionar a cantidades menores de

trigo comparado con los adultos.

La alergia al trigo puede provocar síntomas inmediatos o no inmediatos. En el

primer caso se trata de reacciones instantáneas a la ingesta o al contacto con el

alérgeno. En el segundo caso, la reacción se puede demorar hasta 2 o 3 días. Sin

embargo, en la mayoría de los sujetos la reacción se demora unas horas después

de la ingesta.

Los síntomas más frecuentes incluyen:

Anafilaxia (en los casos más graves)

Angio-oedema

Page 48: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

43

Bajada de la tensión arterial, que puede provocar mareos y/o pérdida de la

conciencia

Dermatitis atópica

Diarrea

Distensión abdominal

Dolor de cabeza frecuentes

Dolor de estómago

Nausea y/o vomito

Obstrucción de las vías respiratorias (opresión de garganta, resuello o

respiración sibilante, dificultad para respirar, tos, ronque

Urticaria

Rinitis

Los resultados en general indican que los niños reaccionan a cantidades menores

de trigo, y que manifiestan, por lo general, síntomas como la dermatitis atópica,

mientras que los adultos reaccionan con cantidades mayores y en ellos son más

frecuentes los casos de anafilaxis.

Los casos de respuestas no inmediatas suelen manifestarse a través de dermatitis

atópica y diarrea.

Roher et al. 21 (2001) han demostrado que las pruebas cutáneas Patch llevaban a

un resultado positivo en el 94% de los casos examinados. Además se estima que

los casos de falsos positivos en los exámenes cutáneos son alrededor del 6% de

los pacientes.

Los estudios de Moneret-Vautrin et al.22 (2003), en muestras de 38 niños y 41

adultos con alergia al trigo, observaron diferencias entre las reacciones de las dos

categorías. Mientras que el 80% reaccionaba con una ingesta menor de 2 g, en los

niños solo un 20% necesitaba más de 2 g de alérgeno para reaccionar. En los

adultos la situación era muy diferente porque la mitad del grupo necesitaba más

de 6 gramos para desarrollar una respuesta alérgica.

Page 49: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

44

Al parecer recopilando los estudios sobre alergia al trigo se nota que la respuesta

necesita de cantidades mayores en caso de alergia que en el caso de enfermedad

celiaca.

Los pacientes con alergia al trigo parecen tolerar los cereales sin gluten como el

arroz y el maíz, a pesar que en algunos casos se han identificado respuestas

cruzadas.

Los rasgos clínicos de la alergia al trigo son parecidos a los de las demás alergias

a alimentos. Sin embrago, la alergia al trigo presenta algunas características

únicas. En primer lugar se destaca que la dermatitis atópica es uno de los

síntomas principales en niños y adolescentes. En la mayoría de los niños el

margen de reacción es bajo el nivel del miligramo de alérgeno, pero con el

desarrollo a veces la alergia logra una mejora. En el caso de los adultos, la alergia

al trigo es más persistente y las manifestaciones son a veces asociadas con el

ejercicio físico. Las cantidades de ingesta que provocan alergia en los adultos son

mayores y por lo tanto difícilmente se pueden ingerir sin darse cuenta. El trigo

también conlleva una respuesta inmunitaria adaptativa mediada por linfocitos T,

inmunidad celular, pero esta requiere unas cantidades aun mayores para generar

una respuesta (aproximadamente 10 mg).

La gliadina es la proteína implicada principalmente en la fisiopatología de la

enfermedad celíaca y también es reconocida como el principal alérgenos en casos

de alergia al trigo: por esto la gliadina representa un buen marcador para medir

trazas de gluten tanto con respecto a la alergia al trigo como en la enfermedad

celíaca. La cuantificación de los niveles de gliadina, por lo tanto, podría

proporcionar una herramienta adecuada para la definición de un límite aceptable

para los alimentos sin gluten por el Codex Alimentarius y las autoridades

nacionales de reglamentación. Sin embargo, debido a la complejidad de las

fracciones de gluten, la definición de un material de referencia ha resultado difícil.

Page 50: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

45

El tratamiento de la alergia al trigo es el mismo tratamiento que se recomienda en

casos de alergias a alimentos: la eliminación total del alérgeno de la dieta. Esto

implica que el tratamiento de los pacientes con alergia al trigo es el mismo que el

de los pacientes celiacos. En este caso también, evidentemente, la dieta sin gluten

es el pilar de la terapia. Se estudiará en detalle la dieta sin gluten en el siguiente

capítulo.

Tomados en su conjunto, la evidencia obtenida a través de estudios recientes

indica que la dosis diaria máxima tolerada de gluten para pacientes con

enfermedad celíaca también constituiría una base para un límite superior seguro

que pueden consumir también la gran mayoría de los pacientes con alergia al

trigo.

A pesar que la dieta sin gluten, por ahora, sigue siendo la única solución viable en

ambos casos. Sin embargo los pacientes tienen a su disposición diferentes tipos

de tratamientos que pueden ayudar a aliviar los síntomas o a recuperarse en caso

de ingesta involuntaria de trigo. Entre estos medicamentos indicar los

antihistamínicos, corticoesteroides, ketotifeno, cromoglicato de sodio,

broncodilatadores y epinefrina auto inyectable, en caso de reacciones

anafilácticas.

En caso de alergias muy graves, es recomendable que el sujeto se identifique a

través de brazaletes o collares, que indiquen que el paciente es gravemente

alérgico a determinado alimento. En caso de accidentes o pérdida de conciencia

estas herramientas pueden ser muy útiles.

Todavía no está indicada la inmunoterapia específica a alimentos, células B,

epitopes alterados de células T, todos ellos en fase de experimentación en

modelos.

Hoy en día en el mercado se están presentando productos que quieren prevenir

los síntomas previos a la ingesta del alérgeno. Sin embargo, no se recomienda

tomar estos tipos de medicamentos ya que los síntomas pueden ser casi fatales

en algunas personas y todavía faltan estudios concluyentes.

Page 51: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

46

3.2. Sensibilidad al gluten no celiaca (SGNC)

Es importante hacer una distinción entre la enfermedad celiaca y la sensibilidad al

gluten no celiaca. La necesidad de esta diferenciación es siempre más urgente

debido al hecho que en la práctica clínica se están generando casos de dudoso y

difícil diagnóstico. El manejo de los pacientes intolerantes al gluten que tienen

síntomas en ausencia de marcadores diagnósticos de enfermedad celiaca, como

la serología negativa para enfermedad celiaca, las biopsias duodenales normales

también es un desafío y es una realidad clínica al respecto de la cual todavía hay

pocos estudios concluyentes. Estos pacientes sensibles al gluten, pero no

celiacos, presentan un dilema clínico para los especialistas de la salud, tanto que

algunos investigadores han definido esta enfermedad como la “tierra de nadie”,

debido a la incertidumbre diagnóstica y a la falta de conclusiones ciertas.

La definición de sensibilidad al gluten no celiaca incluye sujetos que a pesar de no

cumplir con los criterios de enfermedad celiaca, presentan una sintomatología

intestinal y extra intestinal cuando consumen gluten y mejoran una vez que

eliminan el gluten de la dieta. A diferencia de los celiacos, los pacientes con SGNC

no presentan enteropatía y atrofia vellositaria, ni resultan positivos a las pruebas

de anticuerpos característicos de la enfermedad, como los anticuerpos anti-

transglutaminasa tisular.

Los síntomas gastrointestinales suelen ser muy parecidos a los síntomas

indicados en la SII (dolor y distensión abdominal, alteraciones de los hábitos

intestinales). Debido a la dificultad de reconocer los síntomas clínicos el

diagnostico resulta muy difícil y puede tardar años.

Los síntomas gastrointestinales más comunes son la falta de concentración,

cansancio, eccema y erupción cutánea, cefalea, artralgias, mialgias, calambres

musculares, depresión y anemia.

De acuerdo con Díaz Marugán et al., 2013: “se estima que la prevalencia de la

SGNC es mayor que la de la enfermedad celiaca, con una relación de seis o siete

pacientes con SGCN por cada celiaco” 23.

Page 52: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

47

Si estos datos fueran confirmados, entonces las personas con problemas

relacionados al gluten (entre enfermedad celiaca y SGNC, sin añadir otras

enfermedades y trastornos que se benefician de una dieta sin gluten) serán

alrededor del 10% de la población mundial.

La SGNC, así como la enfermedad celiaca, es más frecuente en las mujeres que

en los hombres. Así mismo, es significativo destacar que la SGCN afecta con más

frecuencia los familiares de personas celiacas de primer grado.

Los criterios diagnósticos que han sido establecidos para definir la SGNC son los

siguientes:

La ingesta de gluten produce rápidamente síntomas intestinales y extra-

intestinales,

Las manifestaciones clínica desaparece precozmente tras la exclusión del

gluten de la dieta y reaparece rápidamente tras su reinserción,

Se ha descartado alergia de tipo inmediato al trigo y al gluten mediante las

siguientes pruebas: IgE especifica al gluten y al trigo y test cutáneos

negativos,

Se ha descartado enfermedad celiaca a través de las siguientes pruebas:

serología anticuerpos antiendomisio IgA, antitransglutaminasa IgA y

antipeptidos deaminados de gliadina IgG,

La histopatología suele mostrar una mucosa intestinal normal o con un leve

incremento en el numero de linfocitos intrapiteliales,

Los HLA-DQ2 y/o HLA-DQ8 pueden ser positivos (son positivos en el 40%

de los pacientes).

Según Díaz Marguán et al., 2013:

El patrón oro para el diagnóstico de la SGNC sería la provocación en doble ciego

controlada con placebo, ya que la reiterada del gluten de la dieta podría producir

un efecto placebo que explicase la mejoría o desaparición de los síntomas. Al fin

de lograr un diagnostico eficiente “al paciente con sospecha de SGCN se les debe

realizar una biopsia intestinal mientras se está consumiendo dieta con gluten, para

Page 53: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

48

descartar enfermedad celiaca. Un 60% de los pacientes con SGCN tiene una

mucosa normal (<25% de linfocitos intrapiteliales, grado 0 de la clasificación de

Marsh-Oberhüber). El 40% restante tiene un leve aumento de los linfocitos

intrapiteliales hasta un 40%, o sea un grado 1 de la clasificación de Marsh-

Oberhüber23.

Kaukinen et al.24 (2000) valoraron 94 adultos con síntomas abdominales en

relación con la ingesta de cereales. En este grupo el 9% fue diagnosticado de

enfermedad celiaca, el 8% de enfermedad celiaca latente y el 20% de alergia al

gluten. Sin embargo el estudio es relevante porque muestra que en el restante

63% de los sujetos, a pesar de no ser clasificados como enfermedad celiaca o

como alergia, presentaban síntomas en relación con la ingesta de gluten. Más

relevante aún es que los sujetos se beneficiaron de una dieta sin gluten. ().

Estudios como este abrieron la puerta a la posibilidad de considerar otras

patologías relacionadas con la ingesta de gluten que no fueran enfermedad

celiaca o alergia.

Todavía queda por definir si algunas de las consecuencias malignas y neoplasias

gastrointestinales de la enfermedad celiaca son relacionadas con la SGNC, entre

otras el linfoma intestinal. Del resultado de estas investigaciones dependerá el

futuro de la dieta y del estilo de vida de los numerosos sujetos que están

afectados por la SGNC. Hasta que no se aclare la duda es aun más importante

para los pacientes con SGNC eliminar el gluten de la dieta y evitar

contaminaciones. Sin embargo, no hay recomendaciones específicas sobre cuánto

debe ser estricta la eliminación. Tampoco se ha aclarado si la SGNC es una

condición permanente o transitoria. Por el cuidado del paciente y por evitar riesgos

y complicaciones es mejor aplicar una dieta estricta, así como por los pacientes

celiacos, mientras que se aclaren estas dudas.

Page 54: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

49

En los pacientes con SGNC, la dieta libre de gluten sigue siendo la única terapia

disponible y recomendada.

3.3. Síndrome del intestino irritable (SII)

El síndrome del intestino irritable, también llamado a veces colon irritable, colitis

funcional o neurosis intestinal es un trastorno que bastante común, cuyo

diagnóstico la mayoría de las veces es por exclusión. Cifras recientes indican que

en Estados Unidos afecta alrededor del 14% de la población (Molina y Ortega25

2012 ). Por la difusión tan amplia de este trastorno y por la falta de conocimientos y

seguridades al respecto de las causas de la misma enfermedad es importante

analizar cuales dietas pueden beneficiar los pacientes.

El SII se caracteriza por molestias o dolor abdominal con intensidades y

frecuencias variables dependiendo de los pacientes. Por lo general, el dolor puede

ser aliviado con movimientos intestinales.

Otro síntoma muy común es el cambio en la frecuencia o consistencia de las

heces, que pueden ser diarrea crónica o recurrente, estreñimiento o ambos

ocurriendo alternativamente.

No existe aún un examen o diagnóstico exacto que determine el SII, otra razón por

la cual es importante estudiar los efectos de dieta para aliviar los síntomas.

Un estudio, demuestra que en sujetos con síndrome del intestino irritable sin

daños ni inflamaciones intestinales, pueden controlar su sintomatología a través

de una dieta libre de gluten (Molina y Ortega25 2012 ). Así mismo, se destaca la

existencia de pacientes con SII que mejora a través de una dieta sin gluten, a

pesar de no cumplir con diagnósticos de enfermedad celiaca o sensibilidad al

gluten no celiaca (Molina y Ortega25 2012 ).

La investigación de Molina y Ortega25 (2012) fue realizada en Melbourne,

Australia, utilizando una población estudio de mayores de 16 años con SII

diagnosticada según los criterios de Roma y con exclusión de pacientes con

Page 55: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

50

enfermedad celiaca y enfermedad inflamatoria intestinal, cirrosis y excesiva

ingesta de alcohol o antinflamatorios. La población estudio se dividió en dos

grupos. Un primer grupo de 19 sujetos recibió durante seis semanas pan con

gluten, mientras que el grupo placebo compuesto por 20 sujetos recibía pan sin

gluten. A lo largo del estudio a los pacientes le fue preguntado si durante la

semana antecedente los síntomas fueron controlados adecuadamente, en el grupo

de personas que recibía pan con gluten respondieron “no” un 65% de los sujetos,

mientras que en el grupo placebo respondieron no el 40%. El estudio ha

demostrado que el grupo que consumía gluten ha empeorado significativamente,

más que los otros sujetos en la primera semana, en síntomas generales como

dolor abdominal, distensión abdominal, consistencia de la heces y astenia.

En el estudio de García et al.26, 2013 se hace referencia a un estudio de

Wahnschaffe en el cual ha sido sugerido:

que los niveles séricos de anticuerpos asociados a la enfermedad celiaca el patrón

HLA DQ2 o DQ8 pueden ser predictivos de la respuesta a una dieta sin gluten en

los pacientes diagnosticados de SII con tendencia a la diarrea. Estos autores

investigaron 41 pacientes con estas características que aceptaron participar en un

ensayo de 6 meses de duración de dieta sin gluten. La positividad para los

anticuerpos IgG anti-gliadina o anti-tTG y el HLA DQ2 resultaron como factores

independientes en relación con la respuesta a la dieta sin gluten.

Este tipo de estudios recientes permiten avanzar en la identificación del gluten

como factor potencialmente negativo en la dieta de pacientes con trastornos no

relacionados con la enfermedad celiaca.

Volviendo a lo dicho en el capítulo primero, todavía faltan estudios que puedan

demostrar si el aumento de la toxicidad del gluten puede ser una causa de la

sintomatología relacionada con la ingesta del mismo. Todavía se necesitan

ensayos clínicos bien diseñados, con tamaño y muestra adecuados y con criterios

de inclusión diagnóstica estrictos, para determinar que grupo de pacientes con

Page 56: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

51

sintomatología digestiva funcional podría beneficiarse de una alimentación sin

gluten.

3.4. Autismo

El autismo se define como un espectro de trastornos caracterizados por

grave déficit del desarrollo, profundo y crónico. Afecta numerosas esferas del

sujeto entre las cuales están la socialización, la comunicación, la imaginación, la

planificación y la reciprocidad emocional, y evidencia conductas repetitivas o

inusuales. Los síntomas más comunes son la incapacidad de interacción social, el

aislamiento y las estereotipias (movimientos incontrolados de alguna extremidad,

generalmente las manos). Así mismo, se destaca que con el tiempo, la frecuencia

de estos trastornos suele aumentar. Los síntomas pueden variar de moderados a

graves.

De acuerdo a un estudio coordinado por coordinado por Shattock, 2000:

Los estudios convergen a la hora de establecer que en todo el mundo 5 de cada

10.000 personas presentan un cuadro de autismo clásico, y de que si tomamos en

consideración todo el espectro del síndrome, éste afecta aproximadamente a 1 de

cada 700 o 1.000 personas. La población masculina en comparación a la femenina

está sobre-representada en una proporción de 4 a 1. Se encuentra la misma

proporción de casos de autismo en todas las clases sociales y en las diferentes

culturas estudiadas27.

En general el sujeto autista puede pasar desapercibido hasta el cuarto mes de

vida. Solo a partir del momento de la evolución lingüística se puede notar que no

hay reciprocidad con el interlocutor y no aparecen las conductas de comunicación

intencionadas como, por ejemplo, miradas, echar los brazos, señalar y otras

expresiones del rostro. Sin embargo la demora en detectar los rasgos típicos del

autismo puede ser muy larga y se estima que la mayoría de los padres de niños

autistas empiezan a sospechar que algo no está bien cuando el niño tiene 18

meses.

Page 57: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

52

Lastimosamente, a pesar de ser el autismo un trastorno que tiene una

epidemiologia muy significativa, todavía no existen estudios concluyentes sobre

las causas del mismo. Así mismo todavía no se han logrado tener tratamientos

que sean beneficios a largo plazo y de manera sostenible. El trastorno se ha

manifestado muy resistente tanto a los tratamientos psicoeducativos como

biológicos. Por esta razón en los últimos años los investigadores han aumentado

el número de estudios alrededor de nuevas posibles terapias y muchos familiares

han decidido de optar por técnicas alternativas de terapias que no han sido

totalmente reconocidas o sobre las cuales no hay estudios concluyentes. En este

sentido, la dieta ha estado el centro de estas investigaciones. Hasta la fecha sigue

siendo una terapia bastante reconocida, y que se está difundiendo ampliamente a

pesar de no tener soportes científicos concluyentes al respecto.

Por lo que concierne el diagnostico de autismo, todavía no se ha logrado el

descubrimiento de marcadores biológicos específicos. Por esta falta de certezas el

autismo actualmente se diagnostica sobre la base del comportamiento observable

en la persona bajo consideración. Las características conductuales se recogen en

los manuales internacionales de diagnóstico y clasificación, entre los cuales

señalamos: el DSM IV, de la Asociación Psiquiátrica Norteamericana, y el CIE 10,

creado por la Organización Mundial de la Salud.

Por estas razones, y debido a la rápida difusión de la dieta y al impacto grande

que tiene la misma en la calidad de vida, no solo del paciente autista, sino de toda

la familia, es urgente y necesaria una revisión detallada y empírica de los soportes

de las terapias dietéticas. El objetivo de este subapartado es de recopilar las

informaciones en relación a la creciente adopción de dietas.

3.4.1. Generalidades y bases para la adopción de dietas y tratamientos

biológicos

En estos últimos años se han alternado varias teorías que buscan dar explicación

a este trastorno.

Page 58: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

53

Dos grandes bloques de teorías son las “ambientalistas” y las “biologicistas”.

Las primeras, como implica la palabra misma, encuentran en el entorno ambiental

la causa principal del padecimiento, argumentando que los agentes de tipo psico-

social son los que originan la afectación del desarrollo infantil. Al contrario, en las

teorías "biologicistas", se afirma que son las fallas resultantes en los procesos

bioquímicos internos del individuo, las que afectan su desarrollo al regularlo de un

modo inadecuado.

Entre las perspectivas “biologicistas”, se destacan dos grandes ramas. Por un lado

se sostiene que el autismo podría ser un trastorno funcional no orgánico, debido al

hecho que en algunos casos se han encontrado signos y rasgos que hacen pensar

en lesiones y anomalías cerebrales.

Aunque todavía no hay acuerdos y explicaciones concluyentes sobre las causas

del autismo, no hay duda que en el autismo existe un elemento genético o

hereditario multifactorial y el que su origen tiene que ver con causas orgánicas

(Grafodatskaya et al. 28 2010). Sobre estas causas orgánicas hoy se está

investigando intensamente y se están sugiriendo diferentes teorías.

No es relevante por el fin de este estudio analizar todas las posibles hipótesis y

teorías que se han alternado para explicar el origen del autismo. Solo es

importante tomar en cuenta que debido a la falta de acuerdo entre los expertos no

se puede comprobar de manera segura la eficacia de la dieta sin gluten y sin

caseína en el tratamiento del autismo.

Saber que existen diferentes teorías nos sirve, en el marco de este estudio, solo

para entender que la relación entre gluten y caseína y autismo parte de la

hipótesis de que las alteraciones endorfínicas son la causa del autismo. Se sabe, y

queda demostrado, que dos productos intermedios de la degradación enzimática

del gluten y la caseína son opiáceos. Se trata de la glutenmorfina y la beta –

casomorfina. La mayoría de las personas logra procesar estas moléculas y estas

no entran en el torrente sanguíneo.

Page 59: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

54

Así mismo, en estas teorías se asume que en los sujetos con autismo hay

mayores dificultades para degradar estas moléculas, y que por problemas de

permeabilidad en la pared intestinal, estas sustancias podrían llegar hasta el

cerebro, pasando las barreras naturales. Una vez que estas llegan al cerebro

serían responsables de alterar las funciones de cognición y lenguaje, generando lo

que hoy conocemos como el espectro del trastorno autista. Este daño se supone

ser de tipo cumulativo e irreversible (Miguel Higuera29 2010).

Debido a lo arriba mencionado, varios autores han desarrollado un enfoque que

propone y sugiere la regulación de la acción hiperendorfínica a través del control

dietético.

Whiteley et al., 1999 señala que:

Muchos niños del espectro autista presentan alergias, intolerancia o

hipersensibilidad a diversos alimentos, incluyendo los colorantes de dulces y

diversos productos de fantasía, los cuales provocan una serie de alteraciones

intestinales, manifestaciones cutáneas y fiebres inexplicables, entre otras. También

se han descrito alteraciones de las estructura del intestino, similares a la de los

celíacos, en un alto porcentaje de casos, según informan algunos autores30.

Por estas razones hoy en día ya es ampliamente recomendado eliminar

sustancias colorantes de la dieta de los niños con trastornos del comportamiento.

Whiteley at al. 30 (1999) experimentaron la introducción de la dieta sin gluten en

niños con autismo. El monitoreo que se llevó a cabo durante 5 meses se realizó a

través de cuestionarios y entrevistas a las familias y a los profesores. También se

usaron test psicométricos y exámenes de orina. A pesar que no hubo una

disminución significativa de los valores en las orinas, el estudio concluye que ha

habido una mejora en diferentes comportamientos gracias a la dieta sin gluten. El

estudio se basó en la premisa que el autismo deriva de las acciones de unos

péptidos de origen exógena que afectan la neurotransmisión del sistema nervioso

central. Por esto, los péptidos que se forman por la incompleta degradación del

Page 60: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

55

gluten y de la caseína tienen una acción opiácea directa. Además el pasaje de

estos péptido al cerebro sería favorecido por un estado anormal de los poros de la

mucosa intestinal. Algunos estudios han mostrado como en la orina de las

personas con autismo se presenta un nivel elevado de péptidos.

En el experimento participó un grupo compuesto por 5 niños, que reintrodujo el

gluten después de 6 meses de dieta sin gluten. Así mismo se tomó en cuenta un

grupo control, compuesto por 6 niños que no habían participado en ninguna dieta

previa. Los resultados de las entrevistas y los cuestionarios a los familiares y a

profesores mostraron que un grupo de pacientes presentaron mejoras en el

comportamiento después de 3 meses de dieta sin gluten.

Los participantes señalaron:

Mejoras en la comunicación vocal y no vocal (11/22)

Aumento en el nivel de concentración y atención (10/11)

Disminución en los episodios de agresividad hacia los otros (10/22) y de auto

agresividad (9/22)

Aumento actitudes afectivas (8/22)

Mejora de la movilidad física y coordinación (8/22)

Aumento percepción del entorno (7/22)

Mejora del sueño (7/22)

En el grupo que reintrodujo el gluten muchos aspectos del comportamiento

restaron iguales. Sin embargo se notó un empeoramiento de comportamientos

impulsivos (3/5), aumento de actitudes estereotipadas y agresivas (3/5),

empeoramiento del lenguaje y de la comunicación (3/5). Esto empeoramiento ha

sido valorado como gradual a lo largo del estudio.

Muchos familiares que participaron al estudio han señalado un empeoramiento

inicial de los comportamientos de los niños al introducir la dieta sin gluten (16/22).

Esta regresión se caracterizó por: llantos improvisos, cambios repentinos de

humor, malestar evidente. Por lo general el periodo de regresión duraba entre 7 y

21 días.

Page 61: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

56

Las respuestas que dieron los familiares a las encuestas sugieren que todas las

áreas examinadas mejoraron, o por lo menos se quedaron estables en los

pacientes que implementaron la dieta sin gluten. La mayoría de los indicadores

mejoraron por el grupos que experimentó la dieta sin gluten (aun sea con una

mejora leve). Entre otros se destacan: aumento del deseo de interactuar, aumento

de la curiosidad e interés, contacto visual, actitudes de juego, intentos de

comunicación y aumento del número de principio de interacciones. Al final del

estudio, el 67% de los familiares señalaron, después de 5 meses de dieta sin

gluten, una clara y substancial mejora de los comportamientos relacionados con el

trastorno autista.

Además, el 94% indicaron que sus niños continuarán con una dieta libre de gluten

después del estudio. Al contrario, el 60% de los padres de los niños que

reintrodujeron alimentos con gluten después de una dieta libre de gluten,

señalaron un ligero empeoramiento de las manifestaciones atípicas del autismo.

Los exámenes urinarios que se analizaron en el estudio fueron completados en 6

niños que participaron en la dieta sin gluten, 4 niños del grupo que volvió a

introducir el gluten y 3 niños del grupo control. Los exámenes mostraron una

reducción en IAG en los niños con dieta sin gluten, comparado con un aumento

del 1,93% en el grupo que ha reintroducido el gluten y un 25,33% del grupo

control.

Las conclusiones del estudio de Whiteley at al.30 (1999) sugieren que las mejoras

que se han señalado en los niños autistas tienen sus orígenes en la bioquímica y

en la neurología, en lugar que en terapias educativas y psicológicas. Así mismo la

variabilidad de los resultados puede depender de los diferentes mecanismos

biológicos que corresponden a diferentes pacientes.

Sin embargo, como subrayan los autores mismos, esta investigación tiene muchas

limitaciones. En primer lugar el estudio tiene un grupo muy pequeño de sujetos. En

segundo lugar no se ha examinado una posible presencia de insensibilidad al

gluten o alergia al trigo en los pacientes que participaron al estudio. Además es

importante tomar en cuenta los cambios de las manifestaciones del autismo que

se suelen relacionarse sea con el cambio de las estaciones que con el cambio de

Page 62: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

57

ritmo cardiaco. Cabe destacar que los pacientes de este estudio fueron tratados

con una dieta sin gluten, y no con una dieta sin gluten y caseína. Todos estos

elementos pueden afectar los resultados de la investigación y es importante

tomarlos en cuenta a la hora de valorar la eficacia de una dieta sin gluten en el

tratamiento del trastorno autista.

Otra investigación interesante presenta un estudio de caso de un niño afectó por

autismo que a los 42 meses empezó una dieta libre de gluten y de caseína. El

estudio señala que después de 2,5 meses de tratamiento ha habido una mejora de

la comunicación, incluyendo contacto visual y comunicación verbal. Después 5,5

meses el paciente mejora la capacidad de juego y compartir juegos con otras

personas (Chia-Lin Hsu et al. 31 2009).

Miguel Higuera29 (2010) presenta un listado de signos que permiten sugerir que hay

un beneficio a través de una dieta de eliminación. Entre estos signos se destacan:

alergias e intolerancias alimentarias, cambios de comportamiento asociados a

ingesta de ciertos alimentos, trastorno de sueño asociado a alimentación,

regresiones comportamentales o afectivas, preferencia excesiva por ciertos

alimentos (lácteos, masas de trigo, centeno o avena), exceso de sed, sudoración,

pigmentación de la piel y olor extraño (corporal o en la orina); antecedentes

familiares de enfermedades metabólicas, enfermedad celíaca o trastornos del

desarrollo, heces blandas o con comida sin digerir (asociadas a cambio de dieta o

que se mantienen en el tiempo) y bajo peso, a pesar de mantener una ingesta

alimenticia.

Más allá de los estudios sobre los efectos del gluten en sujetos con autismo,

algunos autores han analizado la relación entre autismo y enfermedad celiaca

(Shattock y Savery32 1996). Según estos autores, no solamente un porcentaje de

niños con autismo presenta también la enfermedad celiaca y que este número es

más grande comparado con la población en general. Además, las lesiones

Page 63: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

58

histológicas que han mostrado una excesiva porosidad de la paredes intestinales,

en el caso de enfermos celiacos, es parecida a la situación que se presenta en

algunos sujetos celiacos (Shattock y Savery32 1996).

Sin embargo, hay varios estudios que niegan el rol de las sustancias opiáceas en

el trastorno del espectro autista. Entre otros señalamos el estudio de Cass H. et

al. 33 (2008) en el cual no se encuentra evidencia de peptiduria opioides, ni

evidencia de cualquier otra diferencia en los perfiles urinarios en los sujetos

analizados: niños varones con autismo o síndrome de Asperger. Por lo tanto, el

estudio en cuestión concluye que no hay evidencia de que los opioides se puedan

usar como un marcador de biomédica en los pacientes con autismo, ni que éstos

se puedan emplear para valorar la respuesta de los pacientes a la dieta libre de

caseína y de gluten. El grupo de estudio era compuesto por 65 niños con autismo,

con una edad media 7,4 años (rango 5-11) y 158 niños de control, con una edad

media 7,8 años (rango 4,2-11). El estudio ha analizado las muestras de orina

fueron examinadas para averiguar la presencia de un número de posibles péptidos

opioides. Se examinaron HPLC y MALDI-TOF MS. Los resultados no mostraron

diferencias significativas entre los perfiles de HPLC urinario de los niños afectados

por el autismo y el grupo control. En los casos en los cuales el examen HPLC

mostró picos en los lugares en los la cuales se esperaban encontrar péptido

opiáceos, el examen MALDI-TOF estableció de hecho, que estos picos no

representan sustancias opiáceas ().

Por lo que concierne relación entre autismo y celiaquía hay opiniones diferentes y

varios investigadores han analizado si existe una relación entre las dos patologías.

En el estudio de Camargo Batista et al. 34(2008) fue desarrollado con el objetivo de

evaluar una posible asociación entre la enfermedad celiaca y/o la sensibilidad al

gluten no celiaca y el espectro autista. En el estudio fue analizada la recurrencia

de la enfermedad celiaca en un grupo de niños y jóvenes con autismo y, al

contrario la recurrencia de autismo fue averiguada en niños con enfermedad

Page 64: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

59

celiaca diagnosticada a través de biopsia. Para determinar la posible presencia de

enfermedad célica los niveles de anticuerpos antigliadina fueron mesurados y

comparados con los niveles de los mismos anticuerpos en un grupo de pacientes

no celiacos.

El resultado del estudio mostró que la presencia de enfermedad celiaca o

sensibilidad al gluten en pacientes con autismo no era mayor que en el grupo

control de la misma área geográfica. De manera parecida, la prevalencia de

autismo en el grupo de sujetos celiacos no era mayor. Este estudio concluye que

no es demostrable con estadísticas una asociación entre enfermedad celiaca y/o

sensibilidad al gluten y autismo.

Todavía no existe un número suficientemente representativo de investigaciones

que permitan sacar conclusiones al respecto del impacto de la dieta sin gluten en

niños celiacos con certeza.

El reporte de las familias, que sigue siendo una herramienta de primera

importancia, a pesar de no responder a criterios de investigación empírica, señala

con siempre mayor frecuencia casos de niños que han observado mejoras

significativas gracias a la dieta libre de gluten (y de caseína).

Entre las principales mejoras se han señalado: incremento de la atención, mejora

de la capacidad de vincularse al entorno, disminución del comportamiento

agresivo, disminución de los movimientos repetitivos y constantes.

A pesar de los estudios a favor de la terapia dietética, los especialistas

recomiendan en todos los casos de seguir el tratamiento con las terapias

lingüísticas y psicoeducativas. Nunca hay que olvidar que este tipo de trastorno

del desarrollo implica un factor genético que permanece por toda la vida.

En casos de aplicación de la dieta vale la pena recordar que muchos de los

componentes del gluten y de la caseína se demoran varios meses en ser

eliminados por el organismo. Por esto, la dieta si efectuada debe ser mantenida a

lo largo del tiempo. No sería de todas maneras posibles valorar la eficacia de la

misma si esta se practica de manera no constante e incompleta.

Page 65: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

60

Es fundamental antes de comenzar una dieta de eliminación, consultar médicos

especializados. Se recomienda entre otros consultar un gastroenterólogo

especializado en trastornos del desarrollo, para determinar si el paciente presenta

conjuntamente enfermedad celíaca o problemas de permeabilidad intestinal.

También el especialista debería averiguar si hay presencia de Cándida o de

hongos. Así mismo es importante la realización de exámenes sanguíneos para

determinar alergias o intolerancias alimentarias (algunas con base genética como

las intolerancias a la lactosa o al gluten). No se puede excluir que en algunos

casos de pacientes que se han beneficiado de una dieta libre de gluten era por

presencia concomitante de enfermedad celiaca o de alergia al trigo no

diagnosticada.

El diferente impacto de la dieta es posiblemente el reflejo de diferentes

mecanismos biológicos asociados con diferentes subcategorías de autismo

(Higuera29 2010).

Hay casos en los cuales el uso de medicamentos que bloquean los opiáceos,

como el Naltrexone, ha mostrado una acción que estimula ciertos aspectos del

comportamiento como la comunicación y las relaciones sociales y producen una

disminución de la hiperactividad y de los comportamientos auto destructivos. Esto

demostraría un soporte en favor de la hipótesis que relaciona algunos síntomas

del autismo con una reacción opiácea por ingestión de alimentos.

Se reconoce universalmente que la intervención precoz bien adaptada a las

necesidades individuales constituye un paso esencial hacia la integración social.

Por esto, la dieta como otros tratamientos que la familia y los médicos decidan

usar para el tratamiento del paciente, es importante empezar de manera rápida.

En las disciplinas científicas se considera que los aspectos básicos para que un

estudio sea considerado relevante son que cumpla, al menos, las siguientes

condiciones: una muestra amplia y significativa de sujetos, tener claridad en el

diagnóstico inicial y conocer el cuadro clínico de los sujetos, utilizar observadores

independientes (que no sean familiares) y preparados. Además es importante

utilizar grupos de tratamiento y grupos de control, para comparar los resultados,

Page 66: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

61

utilizar procedimientos tales como el placebo, utilizar técnicas de “doble ciego” y

utilizar análisis cualitativo y estadístico. Lastimosamente en las investigaciones

relacionadas con los efectos del gluten y de la caseína en el autismo no siempre

han sido respectados estos criterios.

Page 67: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

62

CAPITULO 4. TRATAMIENTOS Y NUEVAS PERSPECTIVAS PARA LA

ENFERMEDAD CELIACA Y OTROS TRASTORNOS RELACIONADOS CON LA

INGESTA DE GLUTEN

4.1. El tratamiento de la enfermedad celiaca

La afectación de la calidad de vida en pacientes con enfermedades crónicas suele

ser muy grande, sobre todo en las fases iniciales que implican adaptarse a un

estilo de vida nuevo y acomodar las propias costumbres a la patología. La

enfermedad celiaca tiene un impacto muy grande en la vida de los sujetos

afectados.

Sin embargo, el impacto en la vida de los pacientes depende mucho del entorno

social, familiar y laboral. Hoy en día varios países occidentales se están equipando

para poder disponer de comida sin gluten en lugares públicos y de grande

afluencia: escuelas, hospitales, museos, cafés, restaurantes se están adaptando

siempre más a las exigencias de la miles de persona que necesitan una dieta libre

de gluten.

En general se puede concluir que la calidad de vida de los pacientes con alergia al

trigo o con sensibilidad al gluten no celiaca es ligeramente mejor de la de los

pacientes celiacos. A pesar que el tratamiento dietético es lo mismo, como vimos

en el capítulo precedente todavía no queda claro si la ingesta inadvertida de

pequeñas cantidades de gluten puede provocar consecuencias tan graves como

en los pacientes celiacos, lo cual disminuye el estrés, la presión y los miedos

sobre los sujetos.

De acuerdo con Varea Calderón et al., 2013:

Es difícil definir el concepto de calidad de vida, puesto que engloba factores de la

propia persona y de las circunstancias que influyen sobre ella, así como aspectos

médicos y no médicos. Cada individuo tiene su propia perspectiva sobre su calidad

de vida, que depende de su estilo de vida en un momento dado, experiencias

pasadas, esperanzas de futuro, sueños y ambiciones. Es necesario llegar a un

acuerdo en su definición operativa en lo que respecta al campo de la salud, para

Page 68: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

63

poder aplicar este concepto de una forma práctica. La Organización Mundial de la

Salud define la calidad de vida como una percepción del individuo de su posición

en la vida en el contexto de la cultura y los sistemas de valores en el que vive y en

relación con sus metas, expectativas, modelos y preocupaciones. Es un concepto

amplio, influenciado de forma compleja por la salud física de la persona, el estado

psicológico, las creencias personales, las relaciones sociales y su relación con el

entorno. Es una percepción personal que denota la forma en la que una persona

siente su estado de salud y los aspectos no médicos de su vida35.

Varias investigaciones han mostrado que hay diferencias significativas entre niños

y adultos al respecto de la calidad de vida y la alimentación sin gluten. Así mismo

en los grupos de niños y adolescente hay varios factores que tomar en cuenta a la

hora de analizar la calidad de vida. Con el paso del tiempo cambia la percepción

que las personas y sobre todo los niños tienen de una enfermedad crónica.

En la medición de la calidad de vida de los niños hay una dificultad muy grande y

es la incapacidad de los niños muy pequeños de responder directamente a los

cuestionarios. Se ha demostrado que la mediación de los padres a veces no

refleja la percepción de los pacientes más pequeños.

En fin se destaca que cada sujeto entiende la salud, las causas de la enfermedad

y la actuación de los tratamientos de forma diferente, dependiendo de su carácter,

de su entorno y de su formación.

Debido a las grandes dificultades que implica tener una enfermedad crónica y

atenerse a una dieta tan restrictiva, se debe recomendar al paciente con

enfermedad celíaca el contacto con la asociación de pacientes celíacos de su

comunidad y a los familiares de un paciente con autismo se recomiendo el

contacto con asociaciones y grupos de apoyo. Las asociaciones de apoyo a

enfermos de alergias no son tan numerosas como las asociaciones de celiacos.

Sin embrago los pacientes con alergia al trigo y con sensibilidad al gluten no

celiaca, pueden encontrar en la comunidad y en las asociaciones de celiacos un

apoyo importante, un grupo de ayuda y un entorno que permita mantenerse

Page 69: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

64

informado sobre los productos libres de gluten y las mejores prácticas para llevar a

cabo la dieta.

Las asociaciones de celiacos realizan una gran labor de asesoramiento sobre la

dieta sin gluten. Además tienen cursos y consejos prácticos sobre la preparación

de alimentos. Toda la familia y las personas cercanas a pacientes celiacos pueden

atender a estas asociaciones para recibir informaciones y apoyo. Las

asociaciones, no solo ayudan a lidiar con problemas particos como la búsqueda y

la preparación de alimentos, sino también son de gran ayuda para la superación

de los problemas sociales, profesionales y psicológicos relacionados con la

enfermedad.

El seguimiento clínico/analítico es recomendado en todos los casos. La asesoría

de un experto en nutrición es un elemento importante que debe asesorar el

paciente hacia una alimentación completa y equilibrada a pesar de la eliminación

del gluten. Asimismo, es importante que el paciente se apodere de su tratamiento

y conozca en detalle las consecuencias que implica una trasgresión de la dieta.

Las alergias e intolerancias alimentarías tienen gran importancia dentro del ámbito

de la seguridad alimentaria, por ello las autoridades sanitarias tanto a nivel

europeo como nacional, han establecido normas que obligan a informar de la

presencia de alérgenos cuando se incorporan como ingredientes a los alimentos

preparados. El etiquetado pasa a ser una herramienta imprescindible en seguridad

alimentaria con el fin de evitar problemas de salud a la población que sufre

alergias e intolerancias alimentarías.

La norma del Codex para el gluten se decide por un organismo internacional

llamado la Comisión del Codex Alimentarius, que trabaja para proteger la salud de

los consumidores y garantizar prácticas comerciales equitativas en el comercio de

alimentos. Las normas del Codex se basan en información de científicos, expertos

técnicos y los reguladores del gobierno para proporcionar directrices y códigos de

prácticos sobre temas específicos.

Page 70: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

65

En 2008, reunidos en Ginebra, los expertos de la Comisión del Codex

Alimentariusa, establecieron nuevos puntos de referencia para la producción de

alimentos sin gluten. El nuevo código establece que los alimentos etiquetados

como ‘sin gluten’ no puede contener trigo, centeno, cebada o avena, y su

contenido de gluten no podrá ser superior a 20 partes por millón (ppm). Hasta el

2008, el límite del Codex era 200 ppm. Sin embargo el límite máximo de gluten en

algunos países es menor de lo establecido por el Codex (por ejemplo, en Canadá

el límite es de menos de 20 ppm). En Europa los fabricantes se han adherido

hasta el límite superior del Codex.

Se espera que los países miembros adopten los nuevos límites de gluten en su

legislación nacional (a menos que, como en algunos casos, ya hayan introducido

límites aún más bajos del límite Codex). El límite también se aplica a las

exportaciones de alimentos de acuerdo con normas de la Organización Mundial

del Comercio.

La norma del Codex tiene ahora dos categorías.

La primera categoría incluye los alimentos que contienen menos de 20 ppm de

gluten. Estos alimentos pueden ser etiquetados como ‘sin gluten’. Esta etiqueta

puede aplicarse a los productos terapéuticos sin gluten, como panes, harinas y

galleta, así como a los productos naturalmente libres de gluten. El etiquetado 'sin

gluten' también puede ser usado para productos de avena no contaminada y

puros.

Los alimentos que contienen entre 20 y 100 ppm de gluten se etiquetan como

‘muy reducido de gluten’. Se trata de Productos sustitutivos especializados (tales

como panes y mezclas de harinas) que contengan almidón de trigo cuyo contenido

de gluten esté por encima de 20 y hasta un máximo de 100 ppm.

a La Comisión del Codex Alimentarius fue creada en 1963 por la Organización Mundial de la Salud

(OMS) y la Organización de Alimentos y Agricultura (FAO), con el objetivo de desarrollar normas y directrices que sirvan de referencia mundial para los consumidores, productores y procesadores de alimentos y sobre todo para las agencias del estado con obligación de control nacional y internacionales de alimentos.

Page 71: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

66

El término "libre de gluten" implica sin contenido de gluten, pero en la práctica no

existe un nivel cero de gluten. Es imposible comer con nivel de gluten igual a cero,

porque incluso los cereales que naturalmente son sin gluten, por ejemplo como el

arroz, pueden contener hasta 20 ppm o 20mg/kg de gluten. Las investigaciones

han mostrado que esta pequeña cantidad de gluten no es tóxica para las personas

con enfermedad celíaca. Se calcula que los celiacos pueden ingerir cantidades de

productos con gluten a un nivel menor de 20 ppm sin reportar daños.

Esta división que ha establecido el Codex permite una clara elección de los

productos para las personas con enfermedad celíaca. La Comisión Europea ha

decidido utilizar la nueva norma del Codex como base para una ley sobre el

etiquetado de los alimentos para las personas que son intolerantes al gluten. La

ley entró en vigor en enero de 2009 pero los fabricantes tenían plazo hasta enero

de 2012 para cumplir con la ley implementando los cambios necesarios para los

productos y las etiquetas.

La necesidad de esta distinción en dos categorías viene del hecho que no todas

las personas celiacas o alérgicas tienen el mismo nivel de sensibilidad al gluten.

La mayoría de las personas con enfermedad celíaca pueden tolerar un cierto nivel

de gluten y sin efectos nocivos. Sin embargo, algunas personas son más sensibles

y pueden comer sólo los alimentos de forma segura con menos de 20 ppm de

gluten. De esta manera se toman en cuenta las exigencias de distintos grupos

permitiendo una mejora de la calidad de vida a las personas con trastornos

relacionados con la ingesta de gluten. La nueva norma dual proporciona límites

más seguros y también permite a las personas con enfermedad relacionadas con

el gluten a tomar una decisión más clara sobre los productos que van a consumir.

Concluyendo, el Codex establece que el término "libre de gluten" sólo se utiliza en

los productos con menos de 20 ppm, y este límite es considerado seguro para las

personas con mayor sensibilidad al gluten. Además, según el Codex, los alimentos

que contienen trigo, centeno, cebada, avena, espelta, kamut o variedades de

trigos que han sido elaborados específicamente para reducir el gluten a niveles no

superiores a 20 ppm pueden considerarse "libre de gluten". Para poner esto en

Page 72: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

67

perspectiva, 20 ppm de gluten es equivalente a 20 miligramos (mg) de gluten por

kilo o por litro de producto.

4.1.1. Dieta sin gluten

Una vez que se ha diagnosticado la enfermedad celíaca u otros trastornos

relacionados con la ingesta de gluten, el único tratamiento efectivo y seguro del

cual se dispone es respectar una dieta estricta sin gluten. En caso de la

enfermedad celiaca esta debe ser respetada de por vida. En caso de sensibilidad

al gluten y no celiaca es importante valorar a lo largo del tiempo, con el apoyo de

médicos especializados, si la alergia o la sensibilidad desaparecen. En caso de

autismo, como vimos todavía faltan estudios concluyentes y los familiares de los

pacientes autistas que decidan seguir esta dieta deben ser conscientes que es

importante seguirla de manera estricta por varios meses consecutivos antes de

poder valorar los resultados de la misma. Lo mismo vale por los pacientes con

síndrome del intestino irritable, mientras que no se establezca más claridad al

respecto.

En caso de celiaquía mantener una dieta estricta permite la normalización de los

síntomas a partir de las dos semanas, la normalización serológica entre los 6 y 12

meses y la recuperación de las vellosidades intestinales en torno a los 2 años

(Calvo Romero36 2013). En los casos de alergia al trigo y sensibilidad al gluten no

celiaca la sintomatología desaparece respectando una dieta estricta sin gluten. Sin

embargo faltan estudios claros al respecto de las posibles consecuencias en caso

de reiteradas trasgresiones o de falta de tratamiento. En el caso del autismo, como

vimos en el capitulo precedente, no se dispone todavía de informaciones

concluyentes al respecto.

Es importante resaltar que en la enfermedad celiaca está demostrado que la

ingestión aun sea de muy pequeñas cantidades de gluten de forma continuada

puede dañar las vellosidades intestinales o provocar otros trastornos y

Page 73: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

68

consecuencias no deseables y posiblemente muy graves, incluso en ausencia de

síntomas evidentes tras la ingesta. En caso de sensibilidad al gluten no celiaca y

de alergia al trigo todavía no está probado si la ingesta de pequeñas cantidades

puede generar consecuencias graves.

Como la dieta sin gluten es actualmente el único tratamiento disponible vale la

pena dedicar atención y cuidado a las normas y las recomendaciones para llevarla

a cabo de manera correcta.

En primer lugar, vale la pena recordar que los útiles de cocina utilizados para la

comida de los pacientes deben ser diferentes para evitar que los alimentos se

contaminen con gluten de forma indirecta, sea a través de utensilios contaminados

o durante el proceso de preparación. Recordamos que pequeñas cantidades de

gluten, aun invisibles a los ojos pueden causar daños mayores. Es recomendable,

tras el diagnostico de celiaca comprar nuevos utensilios, platos, cubiertos y ollas

que serán utilizadas exclusivamente para la comida libre de gluten.

Así mismo las superficies donde se manipulan estos alimentos han de ser

diferentes. Se recomienda que en la dispensa los alimentos ocupen lugares

diferentes que sean claramente reconocibles. Todos los productos de uso común,

como por ejemplo mermeladas, enlatados, aceites, patés, sal, azúcar, aceites

deben ser limpios para evitar que puedan tener restos de harinas, o que sean

utilizados con utensilios de cocina que han sido previamente contaminados con

gluten.

La parte más difícil de la dieta consiste en identificar los alimentos aptos y los

alimentos prohibidos. Lastimosamente cualquier listado de alimentos no es

exhaustivo y nunca será suficiente, sobre todo hoy en día que en los

supermercados llegan continuamente nuevos productos y nuevas marcas. Por los

pacientes con trastornos relacionados a la ingesta de gluten es necesario leer las

etiquetas de los ingredientes. El gluten se puede encontrar de manera escondida

Page 74: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

69

en muchos alimentos que no sospechamos. Por esto, en todos los productos

nuevos y que no están en el listado oficial difundido por las asociaciones de

celiacos es importante leer detenidamente la etiqueta. Es importante recordar que

el gluten puede estar escondido en ingredientes que tienen otro nombra. Si el

productos contienen ingredientes de dudosa origen y en los cuales es difícil

conocer determinar la presencia de gluten es mejor evitar de consumirlos. Con el

tiempo es importante conocer cuales marcas y establecimientos proveen los

productos aptos y compatibles con la exigencia de la dieta. Así mismo es

importante estar al día de los cambios en estas recomendaciones, sea a través de

asociaciones y grupos de apoyo, sea informándose personalmente.

De acuerdo con Varea Calderón et al., 2013:

Un estudio reciente analiza la transparencia y la exactitud de la información sobre

enfermedad celíaca expuesta en 63 páginas web. El 66% de ellas tienen una

puntuación menor del 50% en cuanto a exactitud de la información, sobre todo

debido a información incompleta, pero en el 16% es además incorrecta (Varea

Calderón et al.37 2013).

ALIMENTOS QUE PUEDEN CONTENER GLUTEN

Almidones modificados (E-1404, E-1410, E-1412, E-1413, E-1414, E-1420, E-

1422, E1440, E-1442, E-1450).

Amiláceos, fécula, fibra, espesantes, sémola.

Caramelos y otros dulces.

Colorante alimentario.

Conservas de carnes.

Conservas de pescado con distintas salsas, mayonesas y vinagretas.

Embutidos: chorizo, morcilla y otros.

Frutos secos fritos y tostados con sal.

Helados.

Malta, extracto de malta, levadura.

Page 75: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

70

Patés y algunas mermeladas.

Productos de charcutería.

Proteína, proteína vegetal, hidrolizado de proteína.

Quesos fundidos, en porciones, de sabores.

Sucedáneos de café y otras bebidas de máquina.

Sucedáneos de chocolate y algunos tipos de chocolates.

Yogures de sabores y con trocitos de fruta.

Los cereales y las legumbres que son considerados libre de gluten son: arroz,

maíz, soja, papas, tapioca, frijoles, sorgo, lentejas, garbanzos, quínoa, mijo,

alforfón, amaranto.

La dieta sin gluten debe basarse, fundamentalmente, en alimentos naturales que

no contienen gluten: leche y derivados, carnes, pescados y mariscos frescos,

congelados sin rebozar o en conserva en aceite, huevos, frutas, verduras,

legumbres. Cuanto más los alimentos son elaborados y con un número

significativo de ingredientes, mayor es el riesgo de contaminación. El consumo de

productos manufacturados conlleva riesgos potenciales. Como norma general,

deben eliminarse de la dieta los productos a granel, los elaborados

artesanalmente o los que no estén etiquetados, donde no se pueda comprobar el

listado de ingredientes.

Los siguientes productos son generalmente considerados libre de gluten: azúcar,

miel, aceites vegetales, mantequillas, café, infusiones, vinos y bebidas

espumosas, frutos secos naturales y fritos (con o sin sal), sal, vinagre de vino,

especias naturales en rama y grano. Sin embargo, es recomendable asegurarse

que los productos libres de gluten sean producidos y empacados en

establecimiento que estén libres de contaminación.

La avena es un alimento contradictorio. Algunos estudios ponen en entredicho la

toxicidad de este cereal, por lo cual, por seguridad se recomienda de evitar el

consumo.

Page 76: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

71

La conferencia episcopal ha reconocido en años recientes un trato diferente para

las personas celiacas, lo cual implica usar una ostia sin gluten y un vaso distinto

para celebrar el sacramento de la comunión.

Los productos específicos para celiacos tienen la identificación de la espiga

barrada para todos los países europeos.

Hay que poner mucho cuidado a las siguientes situaciones:

- posible falta de veracidad de los etiquetados de productos de fabricación

industrial,

- posible falta de informaciones completad en los etiquetados,

- riesgo de contaminación de los productos sin gluten con harinas de trigo o con

gluten,

- medicamentos que pueden llevar gluten en el excipiente.

La causa más frecuente de falta de respuesta al tratamiento es el incumplimiento

de la dieta o la ingesta insospechada de pequeñas cantidades de gluten en la

alimentación. Los estudios han demostrado que alimentos que contiene una

cantidad de gluten muy baja (inferior al nivel establecido por el Codex) y los

alimentos naturalmente libres de gluten permiten una lenta recuperación de la

mocosa. Fue a través de numerosos estudios que fue establecido el límite de

gluten permitido y tolerado. Sin embargo vale la pena recordar que no hay ninguna

evidencia a sustento de una definición de “alimentos completamente libre de

gluten” o sea que el nivel de gluten sea igual al 0%.

Para mejorar la identificación de los alimentos sin gluten serían recomendables

actuaciones dirigidas a mejorar el etiquetado de los productos alimentarios,

perfeccionar los métodos analíticos de detección de gluten, formar a los

manipuladores de alimentos y hosteleros sobre la naturaleza de la enfermedad y

las características de la dieta sin gluten, mejorar la disponibilidad de menús sin

gluten en comedores escolares, universitarios, de empresas, de los centros de

tercera edad y hospitales. Toda la sociedad en general necesita una mejor

Page 77: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

72

formación en materia de dieta sin gluten y es recomendable que los gobiernos

desarrollen una política pública y campañas de sensibilización. En las escuelas y

en los jardines esta capacitación sumen una importancia relevante, debido al

hecho que los niños no son todavía capaces de determinar independientemente

los productos que contienen gluten o que pueden estar contaminados.

El apoyo de un nutricionista es fundamental, sobre todo al principio de la dieta

para asesorar el paciente o la familia y garantizar una adecuada nutrición.

En algunos casos, el especialista valora si es necesario complementar la dieta con

un complejo multivitamínico sin gluten. En pacientes con diagnostico reciente y en

pacientes con enfermedad celiaca sin tratamiento pueden encontrarse varias

deficiencias importantes, entre las cuales se destacan deficiencias de: hierro,

folatos, vitamina B12, calcio, magnesio y vitaminas hidrosolubles (A, D, E y K).

El especialista se encargará también de la evaluación nutricional completa,

tomando en consideración la talla, el peso, el IMC, del paciente y comparándolos

con patrones de crecimiento. Además se recomiendan estudios de laboratorios.

Es importante variar la dieta entre los alimentos permitidos y garantizar que estos

sean combinados de manera variada y equilibrada. Hay que cuidar el aporte de

carbohidratos diarios porque, siendo difícil conseguir carbohidratos sin gluten

afuera de la casa, la dieta del paciente puede sufrir una deficiencia de los mismos.

Además productos alternativos libres de gluten no están fortificados y contienen

menos vitaminas, minerales y fibra.

Las dietas libres de gluten son generalmente bajas en fibra y por ende es

recomendable aconsejarle al paciente que consuma una dieta alta en fibras

suplementada con arroz de grano entero, maíz, frutas y verduras abundantes.

En fin, vale la pena recordar que las dietas se justifican sobre la base de

exámenes médicos y no por el hecho de haber sido recomendados por amigos,

conocidos o revistas. En caso de dudas de enfermedad celiaca o de otros

trastornos relacionados con la ingesta de gluten la recomendación es consultar un

especialista y no empezar una dieta de eliminación sin asesoría especializada.

Page 78: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

73

Solo los profesionales de la salud tienen la competencia para guiar los pacientes a

través de una dieta de eliminación. Cualquier dieta tiene el objetivo central de

promover el equilibrio del cuerpo y mantener una nutrición completa sin carencias.

Por lo tanto cuando existen alergias u otras enfermedades que crean muchas

limitaciones a la nutrición es necesario consultar un experto con el fin de valorar si

es necesario utilizar suplementos de vitaminas o minerales para re-establecer el

equilibrio necesario. Así mismo, las dietas deben ser revisadas de manera

constante y permanente para evitar que se generen déficit nutricionales. En el

caso de los niños es importante que la dieta permita el crecimiento y el desarrollo

sin que existan deficiencias nutricionales.

En conclusión podemos decir que la dieta sin gluten puede ser muy variada y

brindar un aporte equilibrado de nutrientes. Sin embargo es importante resaltar

que en los países más industrializados es más fácil acceder a los productos dieto

terapéuticos y algunos estados brindan una ayuda financiera a los pacientes

celiacos. Sin embargo la situación puede ser mucho más complicada en estados

subdesarrollados donde todavía no hay empresas que se dedican a producir

productos gluten free y no llegan las importaciones de estos productos.

Lastimosamente ser celiaco en el primer mundo es muy fácil comparado con

países donde todavía no está garantizado el equilibrio alimentario.

Sin embargo también en los países más desarrollados falta todavía mucho

conocimiento al respecto de los trastornos relacionados con la ingesta de gluten y

los establecimientos públicos y privados no siempre están equipados para atender

clientes celiacos. El número de restaurantes especializados sigue siendo

relativamente bajo comparado con la tasa de población que requiere una

alimentación libre de gluten y de contaminaciones. Las asociaciones de celiacos

brindan informaciones al respecto de los establecimientos especializados en un

menú gluten free que respete todas las normas de preparación.

Page 79: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

74

Para el buen éxito del tratamiento es importante que la alimentación sigua siendo

agradable y que se brinden diferentes opciones con sabores atractivos. Una

alimentación monótona y priva de variedad puede perjudicar el éxito de la misma.

4.2. Nuevas estrategias terapéuticas y experimentaciones

Este capítulo se pone como objetivo hacer una recopilación de las posibles

terapias y tratamientos que están siendo investigadas para la enfermedad celiaca.

Algunas de estas pueden tener un efecto positivo también en las otras patologías

y trastornos que hemos analizado en el capítulo precedente, debido al hecho que

el buen éxito de las mismas podría anular los efectos negativos del gluten en los

pacientes.

Sin embrago a la fecha la mayoría de los estudios que se presentarán están

todavía en una fase preclínica y incluso algunas se encuentran todavía en la fase

teórica previa al desarrollo.

Sin embargo, independientemente del éxito de las nuevas estrategias terapéuticas

la dieta sin gluten es y seguirá siendo un tratamiento efectivo para la enfermedad

celiaca, la sensibilidad al gluten no celiaca y la alergia al trigo.

En el caso del autismo, estas nuevas invenciones terapéuticas no han sido

analizadas y los estudios relacionados con el efecto del gluten faltan todavía de un

acuerdo científico.

A pesar de ser eficaz y efectiva la dieta sin gluten implica una presión constante

sobre el paciente y un riesgo de incumplimiento muy elevado (sea voluntario que

involuntario). Los pacientes cuyo único tratamiento es la dieta destacan que

preferirían poder realizar el tratamiento a través de una pastilla, un medicamento o

una vacuna, con el fin de evitar de realizar a diario una rutina difícil que afecta su

calidad de vida y las relaciones sociales.

TIPO DE ESTRATEGIA: DIETA

En base a los conocimientos actuales están avanzando diversas investigaciones

están tratando de modificar el agente ambiental desencadenante: el gluten. Entre

estas estrategias se destacan:

Page 80: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

75

- Modificación del gluten

Se están realizando estudios con el objetivo de bajar la cantidad de alfa-

gliadinas y beta-gliadinas, de manera tal que la gliadina pierda su

inmunogenicidad para los enfermos celiacos.

- Disminución de la capacidad antigénica del gluten

Se están realizando estudios con el fin de anular la capacidad antigénica de

los péptidos tóxicos de gliadina antes que lleguen a la mucosa intestinal.

- Detoxificación mediante bacterias probioticos.

A través de experimentaciones con Lactobacilos se ha mostrado que

añadiendo estas bacterias a la harina de trigo disminuye la toxicidad de los

péptidos.

- Fijación del gluten con poliméricos.

Se trata de polímeros sintéticos que pueden originar una estructura estable

que evita la acción de los enzimas favorecedores de la absorción de los

péptidos tóxicos.

TIPO DE ESTRATEGIA: ENZIMATICA

- Hidrolisis de péptidos tóxicos de la gliadina.

Se han realizado estudios preliminares al respecto del efecto de los

enzimas proteolíticos. Estos enzimas son capaces de digerir polipéptidos

ricos en prolina y romperlos en pequeños péptidos que logran ser

absorbidos por la mucosa intestinal.

TIPO DE ESTRATEGIA: PÉPTIDOS

- Prevención de la absorción de los péptidos tóxicos de la gliadina.

Estudios que están en desarrollo muestran el efecto protector de barrera

que tiene la Larazotida y la consecuente reducción de la producción de

citoquinas. Al parecer la Larazotida ha demostrado la capacidad de reducir

la sintomatología y los anticuerpos de la enfermedad celiaca.

Page 81: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

76

- Bloqueo de la presentación del antígeno: inhibición de la trasglutaminasa

tisular.

Se trata de una inhibición de la transglutaminasa tisular. Sin embargo la

experiencia in vitro ha demostrado muchos efectos negativos por ahora.

TIPO DE ESTRATEGIA: MOLECULAR

- Bloqueo de la presentación del antígeno: bloqueadores del reclutamiento de

linfocitos.

Todavía no ha estudios concluyentes y se señalan numerosos efectos

secundarios.

- Bloqueo de la activación de los linfocitos NK

Los antagonistas NKG2D y los anticuerpos anti-NKG2D están siendo

estudiados como posibles agentes terapéuticos en caso de enfermedad

celiaca.

- Interferencia en la unión entre HLA-DQ y linfocitos T

Esta terapia ha sido previamente utilizada en pacientes con diabetes

mellitus y artritis reumatoide. Todavía no hay certezas en el caso de una

posible aplicación a los enfermos celiacos.

- Anticitoquinas

La modulación de la producción de citoquinas está siendo valorado no solo

por el caso de enfermedad celiaca sino en el tratamiento de diferentes

enfermedades autoinmunes. Diversos trabajos son en fase de

experimentación. Se destacan:

Anti-TNF-α

Anti-TNF-γ

Anti-IL.15

Il-10

TIPO DE ESTRATEGIA: DROGA

Page 82: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

77

- Activación de la cascada proinflamatoria: antiinflamatorios generales. En el

caso del tratamiento de la enfermedad celiaca se han probado corticoides,

budesonida y mesalanzian.

TIPO DE ESTRATEGIA: VACUNA

- Vacuna para recuperar la tolerancia oral a la gliadina. El estudio ha sido

realizado en fase I con una mezcla de gliadinas toxicas modificadas α-γ-ω

gliadinas y β-hordeina.

Otras estrategias son en fase de estudio. Hoy en día la mayoría de los estudios

arriba mencionados están en fase preclínica y varias posibilidades se encuentran

todavía en fase de hipótesis. (Sánchez-Valverd et al. 7 2013)

Vale la pena recordar que por ahora la única terapia eficaz en caso de enfermedad

celiaca, alergia al trigo y sensibilidad al gluten no celiaca es la dieta libre de gluten.

4.4 Probióticos y prebióticos

La composición de la flora bacteriana intestinal está tomando un rol de mayor

importancia en los estudios relacionados con la enfermedad celiaca y otras

patologías relacionadas con la ingesta de gluten. Al parecer este elemento puede

contribuir significativamente no solo al entendimiento de los factores que

favorecen la manifestación de la enfermedad y/o de la sintomatología sino también

puede tener un rol importante en el futuro tratamiento de la misma (Sanchez

Sanchez1 2011).

Varios resultados demuestran la prevalencia de desequilibrios en la composición

de la microbiotita intestinal de sujetos celiacos en comparación con individuos

controles. Se supone que las alteraciones y el predominio de bacterias con mayor

potencial patogénico, son una consecuencia secundaria del proceso inflamatorio y

podrían tener un rol activo en la atiopatogenesis de la enfermedad. Hoy en día se

sabe que el proceso de constitución de la flora bacteriana es predominante en los

Page 83: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

78

primeros meses de vida. Por ejemplo, entre los factores principales que afectan la

flora hay el parto y la lactancia.

Todavía faltan estudios concluyentes que revelen si el desequilibrio de la flora

bacteriana puede considerarse un factor que pueda contribuir al desarrollo de la

enfermedad celiaca, pero varios estudios recientes demuestran que existe una

relación entre la flora intestinal y la enfermedad celiaca. Uno de los elementos

principales que llevan a esta conclusión es el hecho que las alteraciones de la

micorbiotica bacteriana no se restablecen totalmente tras el seguimiento de un

tratamiento de dieta sin gluten (Palma et al.38 2012, Sánchez et al.39 2011,

Sánchez et al.40 2012, Sanz et al.41 2011)

De acuerdo con Sánz Herranz et al.:

El análisis microbiológico de biopsias duodenales por técnicas de hibridación in

situ y citometría de flujo demostró que la relación entre bacterias Gram-positivas y

Gram-negativas en pacientes celíacos, en el momento del diagnóstico y tras el

tratamiento con una dieta exenta de gluten durante al menos 2 años, era inferior a

la detectada en individuos control, así como la relación entre bacterias

potencialmente beneficiosas (Bifidobacterium + Lactobacillus) y potencialmente

perjudiciales (E. coli + Bacteroides). Análisis realizados por PCR a tiempo real, han

demostrado que el número de Bacteroides spp. de la microbiota duodenal y fecal

de individuos con enfermedad celíaca, antes y tras el seguimiento de una dieta

exenta de gluten, era superior a los detectados en individuos control. Las

concentraciones de Bifidobacterium spp. y B. longum en heces y biopsias de

pacientes celíacos fueron inferiores a las de controles, aunque en biopsias las

diferencias fueron estadísticamente significativas solo entre pacientes en el

momento del diagnóstico y controles. El número de E. coli y Staphylococcus spp.

también fue superior en pacientes no tratados en comparación con controles, pero

sus concentraciones se normalizaron tras el seguimiento de una dieta exenta de

gluten. Estudios realizados con aislados de diversos grupos microbianos en

medios de cultivo selectivos e identificados posteriormente por técnicas

moleculares han puesto de manifiesto tendencias similares. El análisis de los

grupos filogenéticos y la prevalencia de genes que codifican factores de virulencia

Page 84: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

79

en enterobacterias aisladas de heces de niños celíacos y sanos también han

mostrado diferencias significativas entre individuos celíacos y sanos42.

Las bacterias de la cepa Bifidobacterium constituyen la mayoría de la microflora

intestinal. En los niños que reciben lactancia materna llegan hasta el 91%.

(Harmsen et al.43 2000).

Por lo general se reconoce que las cepas del género Bifidobacterium son

inductoras de respuestas inmunológicas reguladoras, con un carácter menos pro-

inflamatorio que los lactobacilos (Zeuthen et al.44 2006). Además como se ha visto

se ha visto en trabajos realizados con niños prematuros alimentados con fórmulas

infantiles suplementadas con Bifidobacterium lactis, la incorporación de esta

bifidobacteria contribuyó a reducir significativamente la permeabilidad intestinal

reduciendo las posibilidades de acceso de patógenos y antígenos de la dieta

(Stratiki et al.45 2007).

Vale la pena recordar que como vimos en el primer capítulo varios estudios han

demostrado que la lactancia materna tiene un efecto protector frente la

enfermedad celiaca. Se puede entonces hacer la hipótesis que este efecto sea

una consecuencia de la protección que brindan las bifodbacterias. (Sanchez

Sanchez et al.1 2011).

La oficina española de patentes y marcas el 10 de junio 2011 ha anunciado la

concesión de una patente para una nueva cepa del genero Bifidobacterium, sus

componentes celulares, moléculas secretadas y compuestos metabólicos y las

combinaciones de estos entre sí y con otras bifidobacterias y bacterias lácticas en

forma de diversos preparados con el fin de mejorar la salud de los pacientes que

sufren de enfermedad celiaca y otros desordenes relacionados con la ingesta de

gluten. El objetivo de la investigación es hacer una selección específica de

bifidobacterias para elaborar formulaciones destinadas a mejorar el estado de

salud y riesgos de individuos con enfermedad celiaca.

Page 85: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

80

La nueva cepa objeto de patente se denomina IATA-ES1 y es una cepa del genero

Bifiodobacteria. La cepa fue aislada a partir de lactantes sanos e identificada por

secuencia del gen del ARNr 16S.

De acuerdo con la patente de invención:

La nueva cepa posee propiedades inmunomoduladoras deseables para regular las

respuestas pro-inflamatorias de tipo Th1 características de la enfermedad celíaca

y enfermedades asociadas (esclerosis múltiple, diabetes, ataxia, etc.), así como de

las reacciones alérgicas de tipo Th2 que pueden originarse como consecuencia de

la ingesta de proteínas de trigo y otros cereales. La cepa se caracterizan por

inducir baja producción de la citoquina Th1 IFN- y de la citoquina pro-inflamatoria

IL-1 y alta producción de las citoquinas reguladoras IL10 y TGF- βen células

mononucleares de sangre periférica (PBMCs).

El perfil de citoquinas inducido por esta cepa no es una característica común a

todas las bifidobacterias y bacterias lácticas intestinales humanas y la hace

especialmente idónea para modular la anómala respuesta inmune que originan las

proteínas del gluten en individuos susceptibles. Su combinación con otros

microorganismos como por ejemplo la cepa B. longum ATCC15707 puede

potenciar la síntesis de la citoquina reguladora IL-10 beneficiosa para controlar el

proceso de inflamación característico de estas patologías. Las bacterias no viables

(inactivadas por diversos procedimientos como calor, congelación-descongelación,

radiación, etc.) mantienen las características inmunomoduladoras. Esta cepa es

capaz de transportar e hidrolizar los péptidos del gluten responsables de estos

desórdenes reduciendo la concentración de los epitopos tóxicos y su poder

patogénico. La bifidobacteria objeto de la patente posee peptidasas específicas

para hidrolizar sustratos que contienen prolina comunes en las proteínas del

gluten. La combinación de cepas de bifidobacterias que poseen peptidasas de

distinta especificidad permite que se complemente su acción, favoreciendo la

degradación de epitopos tóxicos. Las combinaciones de bifidobacterias con otros

microorganismos como Lactococcus lactis NCD0712, que posee una proteinasa

anclada a la superpie celular, también potencia los efectos hidrolíticos debidos

exclusivamente a la acción de las bifidobacterias (Sanchez Sanchez et al. 1 2011).

Page 86: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

81

Concluyendo se destacan en el estudio cuatro capacidades y propiedades

peculiares de esta cepa:

La capacidad de modular la respuesta inmune provocada por los péptidos

del gluten mediante a través de la inducción de la síntesis de citoquinas

reguladoras (IL-10), la reducción de la producción de las citoquinas IFN-, IL-

1, IL-8 e IL-15 derivadas de la respuesta inmune innata y adaptativa y la

inhibición de vía pro-inflamatoria mediada por el factor nuclear ĸB.

La capacidad de inhibir bacterias patógenas que se encuentran en la

microbiota intestinal de sujetos celíacos y que tienen un potencial pro-

inflamatorio y factores de virulencia, restableciendo así el equilibrio

intestinal. Así mismo tienen la capacidad de inhibir la respuesta pro-

inflamatoria de las bacterias intestinales de paciente celíacos activos y con

dieta exenta de gluten, reduciendo la síntesis de citoquinas pro-

inflamatorias.

Gracias a las actividades metabólicas (por ejemplo: fosfatasa, esterasa,

lipasa, galactosidasa, glucosidasa y N-acetil-glucosaminidasa) las cepas

tienen la capacidad de favorecen la digestión de nutrientes y mejoran el

síndrome de malabsorción y desnutrición propio de pacientes celíacos.

En fin, la cepa posee la capacidad de adhesión a mucina (1-4%) y es

estable en las condiciones de estrés gastrointestinal como en caso de pH

ácido y alta concentración de bilis y en las condiciones de los procesos

tecnológicos de conservación y elaboración de alimentos (refrigeración,

liofilización, fermentación, etc.). el estudio ha demostrado que in vivo es

capaz de sobrevivir el tránsito intestinal en humanos tras su administración

por vía oral, garantizando así su capacidad de llegar hacia el intestino

intetacta garantizando persistencia y efectividad.

(Sanchez Sanchez et al. 1 2011).

Page 87: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

82

Como se demuestra en el estudio esta cepa puede garantizar su uso en forma de

alimentos funcionales, alimentos nuevos, suplementos, nutracéuticos, y fármacos

para la reducción de riesgos y mejora del estado de salud y calidad de vida de los

sujetos con enfermedad celíaca así como el de otros trastornos asociados a la

ingesta de gluten.

Todos los estudios arriba mencionados que establece una relación entre la

microbiota intestinal y la enfermedad al gluten o sensibilidad y alergia al gluten

constituyen una base importante que nos lleva a sugerir y recomendar el uso de

probióticos como posible estrategia no solo para mejorar el estado de salud de

individuos celíacos y para reducir el riesgo de sufrir esta enfermedad, sino también

para mejorar la tolerancia al gluten en pacientes no celiacos.

4.5. Prevención

A raíz de los estudios analizados podemos recomendar diferentes estrategias

preventivas que permitan disminuir el riesgo de padecer de trastornos

relacionados con la ingesta de gluten.

Hoy en día, mientras faltan todavía respuestas concluyentes al respecto de

posibles vacunas o medicamentos, las únicas estrategias a nuestro alcance en

caso de trastornos relacionados con la ingesta de gluten son la prevención y la

dieta sin gluten.

Es importante subrayar que mientras que por la enfermedad celiaca ya se pueden

encontrar numerosos estudios al respecto de la prevención no es lo mismo por lo

que concierne la alergia al trigo, la sensibilidad al gluten no celiaca y la síndrome

del intestino irritable.

Sin embargo, todas las estrategias preventivas que permiten disminuir la

permeabilidad de la mocosa intestinal, reducir la toxicidad del trigo y mejorar la

flora intestinal se pueden aplicar como estrategias preventivas también en los

trastornos arriba mencionados.

Una vez más, en caso de autismo no es lo mismo y faltan estudios concluyentes al

respecto.

Page 88: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

83

4.5.1. Lactancia

Los conocimientos y las investigaciones desarrollados hasta la fecha han

permitido fortalecer la hipótesis que existe una relación directa entre el periodo de

la lactancia materna y el riesgo de desarrollar la enfermedad celiaca. Así mismo

por la acción de la leche materna y las sustancias con efecto protector contenidas

en ella, es posible plantear la hipótesis que esta tenga una relación directa y

preventiva también frente las otras enfermedades relacionadas con la ingesta de

gluten: alergia, colon irritable y sensibilidad al gluten no celiaca. Con el autismo

hasta hoy no se han identificado estudios que relaciones la lactancia materna con

el desarrollo de esta enfermedad.

El caso de la epidemia sueca que tratamos en el primer capítulo es el ejemplo más

reconocido de la relación entre el tiempo de lactancia materna y la enfermedad

celiaca.

La lecha materna tiene un reconocido efecto protector que permite disminuir el

riesgo de infecciones de tipo gastrointestinales, mejorando de esta manera la

resistencia a la permeabilidad intestinal. Como consecuencia la lámina intestinal

sería más resistente a la acción el gluten y a ciertos estímulos que permiten el

inicio de la enfermedad celiaca en las personas genéticamente predispuestas.

Además hay acuerdo sobre el alto contenido de IgA de la leche materna, la cual a

través de la aglutinación del antígeno a inmunocomplejos permite mejorar la

respuesta inmune de la mucosa intestinal contra el factor externo estimulante: el

gluten (Henriksson et al.46 2012, Myleus et al.47 2009, Szajewska et al.48 2012).

Hay evidencia que introducir el gluten durante la lactancia materna permite una

reducción del riesgo alrededor del 50% (Norris et al.49 2005).

En fin recordamos que todavía queda por establecer si la lactancia confiere una

protección por toda la vida o solo retrasa la aparición de la enfermedad celiaca y

otros trastornos.

4.5.2. Parto

El parto natural es relacionado con un menor riesgo de desarrollar la enfermedad

celiaca. Un reciente estudio muestra que el parto por cesárea presenta un riesgo

Page 89: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

84

del 1,8 más alto comparado con el parto natural. Esta es una diferencia

significativa entre la enfermedad celiaca y otras enfermedades crónicas que no

presentan el aumento del riesgo de ser padecidas dependiendo del tipo de parto.

Sabemos que el parto natural y la cesárea implican dos maneras totalmente

diferentes de entrar en contacto con gérmenes y microflora. En consecuencia se

piensa que la cesárea se relaciona con un ambiente por inflamatorio y un aumento

de la permeabilidad intestinal debido al hecho que el este tipo de parto afecta la

capacidad de respuesta antimicrobiana del huésped, con una predisposición para

un tipo de regulación inmune de respuesta Th1.

Hoy en día está siendo valorada la hipótesis según la cual el feto, que vive

protegido en un ambiente estéril, a través de la cesárea se expone a diferentes

especies de microbianas y a una colonización bacteriana diferente respecto al

parto natural. Todos estos elementos tendría como consecuencia directa una

diferente respuesta del sistema inmune del sujeto y de función epitelial de barrera

(Decker et al.50 2010).

4.5.3. Infecciones

Un estudio reciente muestra como padecer de infecciones y enfermedades

relacionadas a virus en la primera época de la vida aumenta el riesgo de padecer

de enfermedad celiaca en sujetos predispuestos. Un estudio ha analizado casos

de niños que tuvieron desde 3 hacia más infecciones antes de los 6 meses de vida

y encontró que en estos pacientes había aumentado significativamente el riesgo

de padecer de enfermedad celiaca antes de los 2 años (Stene at al.51 2006).

Por lo que concierne el tipo de infecciones al parecer los virus adenovirus y

rotavirus son los principales factores que pueden aumentar dicho riesgo. También

las infecciones gastrointestinal a través de su acción y el aumento de la

permeabilidad intestinal pueden favorecer la entrada de antígenos y en

consecuencia una respuesta Th1 que favorece la enfermedad celiaca (Stene et

al.51 2006 y Mayleus et al.52 2012).

Page 90: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

85

Para disminuir el riesgo de padecer de enfermedad celiaca y hacer prevención en

los sujetos con riesgo alto podría ser útil hacer una vacunación en contra del

rotavirus (Castillejo de Villasante et al.53 2013).

La exposición a los gérmenes varía dependiendo de la temporada del año, sea por

las gestantes que por lo recién nacidos. Algunos estudio demuestran que los niños

que nacen en verano tienen mayor riesgo de desarrollar enfermedad celiaca que

los que nacen en invierno. Sin embargo faltan más estudios concluyentes al

respecto (Mayleus et al.54 2009).

4.5.4. Ingesta de gluten

Como vimos en el primer capítulo la difusión y la epidemiologia de la enfermedad

celiaca ha sido relacionado con las cantidades de gluten ingeridas a lo largo del

tiempo. Este fenómeno que se ha dado con la celiaquía podemos hacer la

hipótesis que aparezca también para la alergia al trigo, la sensibilidad al gluten no

celiaca y el síndrome del intestino irritable debido al hecho que la relación directa

con el antígeno es presente en todas estas patologías.

Estudios demuestra que el riesgo de padecer de enfermedad celiaca es 5 veces

mayor si se introduce el gluten a los 3 meses comparado con la introducción del

gluten a los 7 meses, en pacientes con riesgo genético (Norris et al.49 2005).

A través de estudios como esto se ha desarrollado la teoría de la “ventana

inmunológica”, la cual se considera como un periodo del recién nacido en el cual

se puede alcanzar la tolerancia a nuevos alimentos. Este periodo se suele

considerar que sea entre las 17 y las 26 semanas del bebe. Las recomendaciones

indican que es importante seguir la lactancia materna durante el periodo de la

ventana inmunológica.

En el 2008 la ESPGHAN recomendó de evitar la introducción del gluten a antes de

los 4 meses de vida pero de introducirlo antes de los 6 meses para disminuir el

riesgo de desarrollar enfermedad celiaca y alergia.

Con el tema de la ingesta de gluten las investigaciones son todavía limitadas (sea

al respecto de las cantidades recomendadas que al respecto de los tiempos e

Page 91: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

86

introducción). Sin embargo es un sector de investigación que está atrayendo

mucho interés y que seguramente se desarrollará más en un futuro cercano.

4.5.5. Microbiota

Mientras los estudios y las experimentaciones de nuevas estrategias de terapia y

prevención de la enfermedad celiaca y otras patologías relacionadas con el gluten

sigan avanzando, el uso de prebióticos en la dieta para restablecer una flora

intestinal equilibrada puede ser una estrategia de uso inmediato en pacientes que

presentan enfermedad celiaca y/o sintomatologías relacionadas con la ingesta de

gluten. Los efectos inmunomoduladores y anti-inflamatorios de las cepas de

probióticos arriba mencionadas puede brindar un apoyo inmediato y seguro para

hidrolizar y reducir la toxicidad de péptidos derivados del gluten modulando la

respuesta innata.

De acuerdo con Castillejo de Villasante, 2013:

Los lactantes con alto riesgo genético de desarrollar celiaquia tienen un aumento de

prevalencia de B. bulgatus y una reducida prevalencia de Bacteroides sp, cuya

prevalencia es elevada en lactantes con bajo riesgo genético y niños que son

alimentados al pecho. Esto sugiere que tanto el tipo de alimentación como el fenotipo

HLA-DQ influyen en el proceso de colonización de las especies de Bacteroides en

lactantes a edad precoz y, posiblemente, el riesgo de enfermedad celiaca 53.

Page 92: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

87

CAPÍTULO 5. CONCLUSIONES GENERALES

Actualmente se reconoce ampliamente que existe un espectro amplio de

trastornos relacionados con el gluten y que la celiaquía es solo la punta de un

iceberg.

La enfermedad celiaca hoy en día representa la enfermedad crónica más común,

con una prevalencia del 0,7 al 2,0% en la población general y del 15 al 20% en

familiares de primer grado (Book et al.55 2003, Fasano y Catassi56 2005). Además,

la ingesta de gluten y la enfermedad celíaca está asociada al desarrollo de otros

desórdenes, como por ejemplo el síndrome de Down, la diabetes mellitus tipo 1, la

dermatitis herpetiforme, la miopatía, la esclerosis múltiple, la artritis, el autismo, la

esquizofrenia, la depresión, los linfomas, y la ataxia (Hernández y Green57 2006).

La alergia al trigo, la sensibilidad al gluten no celiaca y la enfermedad celiaca son

directamente relacionadas con la ingesta de gluten. La proteína del gluten, que

procede de trigo, cebada y centeno, es rica de glutamina y prolina cuya digestión

en el tracto gastrointestinal superior es difícil.

Esta situación nos lleva a preguntarnos porque esta proteína, aparentemente

inocua y saludable, resulta ser tóxica y nociva para un numero en incremento de la

población. Además de las enfermedades arriba mencionadas, se están realizando

estudios sobre otras enfermedades que podrían beneficiarse de la dieta sin gluten;

entre otras se destaca el síndrome del intestino irritable y el autismo. A pesar que

estas dos enfermedades no son originadas por la ingesta de gluten, parecen

beneficiarse de la eliminación del mismo.

En el primer capítulo se ha analizado una serie de factores importantes que

permiten avanzar en el entendimiento de las razones que llevan a la elevada

toxicidad del gluten.

Destacar que, en los últimos 10.000 años los cambios tecnológicos han llevado a

una selección de las variedades de trigo con un mayor contenido de gluten. El

trigo hexaploide Tricticum aestivum es el más empleado hoy en día en la industria

alimentaria (Sánchez Valverde et al.7 2013).

En conclusión, se observa que un número significativo de individuos, y no sólo los

que presentan una predisposición genética para la enfermedad celiaca, son

Page 93: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

88

susceptibles de sufrir algún tipo de trastorno o sintomatología relacionada con la

ingesta de gluten.

En este escenario, en el cual el gluten viene utilizado en innumerables productos

industriales, es importante enfocarse en la prevención.

Se han presentado varias estrategias y investigaciones en los últimos años y que

abren la posibilidad para los enfermos celiacos de conseguir un tratamiento que no

sea de por vida. Lastimosamente como se observa, ninguno de estos estudios ha

llevado a una terapia definitiva. Todavía quedan muchas dudas por aclarar y

muchas pruebas para efectuar hasta que se pueda conseguir un tratamiento

parala enfermedad celiaca. Por el momento, la dieta exentada de gluten es la

única terapia disponible, tanto para los enfermos celiacos como para los sujetos

con sensibilidad al gluten no celiaca y alergia al trigo.

En el caso del autismo, como se observa, existen estudios muy contradictorios al

respecto. Se señala que mientras las investigaciones científicas no lleven a

resultados concluyentes, aumenta el número de familiares de niños autistas que

señalan que el paciente se ha beneficiado mucho de la dieta sin gluten. Estudios

al respecto siguen desarrollándose y se espera que en los próximos años puedan

llegar a conclusiones evidentes y concluyentes.

En el caso de síndrome del intestino irritable, estudios prueban el beneficio de la

dieta sin gluten, sin embargo es importante señalar que la eliminación del gluten

no es la única recomendación dietética para el tratamiento de esta enfermedad.

Siendo la dieta sin gluten una dieta muy estricta, es importante tener el apoyo

sanitario constante y recibir el monitoreo regular por parte de especialistas

médicos.

Además es útil apoyarse a asociaciones de enfermos o de familiares sea para

recibir informaciones actualizadas sobre los productos y los lugares que respectan

las normas de la dieta libre de gluten sea para recibir un apoyo emotivo que puede

revelarse muy útil cuando se trata de enfrentar tratamientos que implican un

cambio radical del estilo de vida.

La dieta libre de gluten requiere no sólo la eliminación de los productos que

contienen gluten, sino también el respecto de algunas normas en la preparación y

Page 94: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

89

manipulación de los alimentos. Debido a las dificultades de la dieta se dedicó un

capitulo para explicar los principios básicos.

Todavía faltan muchos conocimientos y avances en las disciplinas científicas para

que se pueda formular una receta segura para la prevención, no sólo de la

enfermedad celiaca, sino también de los otros trastornos relacionados con la

ingesta de gluten. Sin embargo, se han evidenciado diferentes estrategias

preventivas. En primer lugar se destaca la lactancia materna, que ha sido

demostrado que brinda un factor de protección importante. Así mismo, la ingesta

de algunas cepas de probióticos en los niños aporta una prevención significativa.

Las evidencias expuestas en el capitulo precedente, ponen de manifiesto la

importancia del género Bifidobacterium y especialmente de la cepa IATA-ES1 para

el adecuado funcionamiento de la fisiología intestinal y de los procesos digestivos

y defensivos involucrados en la tolerancia a las proteínas del gluten. En

conclusiones esta bacteria puede evitar el desarrollo de trastornos asociados a la

ingesta de gluten.

Page 95: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

90

CAPITULO 6. RECOMENDACIONES

Como se observa, al respecto de las investigaciones que se están desarrollando

para encontrar una terapia para la enfermedad celiaca que no implique una dieta

de por vida todavía no hay resultado concluyentes a pesar que se están

investigando diferentes maneras de tratar la enfermedad al gluten. A pesar que

existen numerosas investigaciones e intentos de búsqueda de terapias para la

enfermedad celiaca todavía no hay estudios concluyentes y se está lejos de

encontrar un medicamento óptimo que se pueda tomar en un régimen cómodo y

que tenga efectos de larga duración. Una de las dificultades principales en el

desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas es establecer un sistema rápido y

práctico para medir la eficacia de los resultados que no requiera biopsia.

En este escenario, la recomendación principal es de concentrarse a nivel de

prevención, sobre todo en el caso de los sujetos que presentan un mayor riesgo

de desarrollar la enfermedad, como los familiares de los enfermos celiacos.

Los estudios con ciertas cepas de probióticos han demostrado excelentes

resultados. En este sentido, se recomienda que el futuro las investigaciones se

deben concentrar en la combinación de bifidobacterias con otros microorganismos

de forma complementaria o sinergia, con el objetivo de potenciar los beneficios

que estos aportan.

Así mismo, las autoridades gubernamentales y las instituciones públicas,

especialmente las educativas, deben mejorar la formación y la difusión de

informaciones acerca de la enfermedad celiaca y del tratamiento de la misma.

Las asociaciones de celiacos ya están desarrollando una importante labor

informativa y de acompañamiento de los pacientes. Sin embargo se necesita que

sean apoyadas por amplias campanas públicas.

La enfermedad celiaca, que hoy en día afecta alrededor del 1% de la población

mundial, se está imponiendo como un problema de salud pública que necesita

atención.

Page 96: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

91

Mientras que las ciencias puedan brindar soluciones sostenibles, se recomienda

que los individuos con enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten,

asuman compuestos prebióticos y probióticos que contengan las cepas que tienen

un efecto protector y ejercen un efecto benéfico mejorando el estado de salud

general. Por esta razón se recomienda de enriquecer la dieta de los sujetos

predispuestos a enfermedad celiaca con las bifidobacterias. Los beneficios

relacionados son:

- Regulación de la respuesta inmunológica adaptativa e innata

- Reducción de la concentración de epítopos tóxicos en la luz intestinal

- Fortalecimiento de la función barrera defensiva frente a bacterias

perjudiciales

- Aportes de actividades enzimáticas que favorecen la digestión

Así mismo se recomienda fuertemente de mantener la lactancia materna por lo

menos hasta los primeros 6 meses de vida y de introducir el gluten durante la

llamada “ventana inmunológica”, mientras se mantiene la lactancia materna.

Además, se recomienda a las personas que no tienen enfermedades relacionadas

con la ingesta de gluten de preferir tipos de trigos que tienen un bajo contenido de

gluten y de no excederse con el consumo del mismo.

En fin, se recomenda a los pacientes que deben seguir la dieta libre de gluten de

apoyarse a las asociaciones de enfermos para recibir consejos y apoyo emotivo

en un tratamiento que afecta significativamente la calidad de vida. Así mismo se

recomienda el apoyo constante y el monitoreo de médicos especializados y

nutricionistas.

Page 97: Trastornos y enfermedades relacionadas con la ingesta de gluten

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