sonido, musica y espiritualidad

30

Upload: jordi-a-jauset

Post on 17-Mar-2016

222 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

Extracto del libro "Sonido, música y espiritualidad" de Jordi A. Jauset

TRANSCRIPT

Page 1: Sonido, musica y espiritualidad
Page 2: Sonido, musica y espiritualidad

SONIDO, MÚSICA Y

ESPIRITUALIDAD

Un camino científico hacia la unidad

JORDI A. JAUSET BERROCAL

Page 3: Sonido, musica y espiritualidad

A Esther, la estrella que desdehace cuarenta años ilumina mi corazón.© Jordi A. Jauset Berrocal, 2010

Dibujos de mandalas: Olga AravenaFoto autor: Sandra Balsells

Diseño de cubierta: Rafael Soria

© De la presente edición:Gaia EdicionesAlquimia, 628933 Móstoles (Madrid) - EspañaTels.: 91 614 53 46 - 91 614 58 49Fax: 91 618 40 12E-mail: [email protected] - www.alfaomega.es

Primera edición: septiembre de 2010

Depósito legal: M. 31.277-2010I.S.B.N.: 978-84-8445-321-5

Impreso en España por: Artes Gráficas COFÁS, S.A. - Móstoles (Madrid)

Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de estaobra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista porla ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si nece-sita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.

Page 4: Sonido, musica y espiritualidad

Í N D I C E

Agradecimientos ................................................................ 11Prólogo, por Eduardo Punset ............................................ 15Introducción ....................................................................... 17

1. EL SONIDO: VIBRACIÓN Y ENERGÍA ............................... 23¿Qué es el sonido? ....................................................... 26Los sonidos internos .................................................... 42Efectos terapéuticos del sonido ................................... 44Curiosidades ................................................................. 50

Infrasonidos y ultrasonidos: aplicaciones .............. 50Los paisajes sonoros ............................................... 53El Nada Yoga (yoga del sonido) ............................ 57Percepción auditiva y visual. Comparativa ............ 59Equivalencias colores-sonidos ............................... 61Animales y sonidos ................................................. 64

2. MÚSICA Y NEUROCIENCIA .............................................. 67¿Qué es la música? ....................................................... 67¿Por qué nos afecta la música? .................................... 84¿Cómo nos afecta la música? ....................................... 90Los parámetros musicales y su influencia .................... 98

Page 5: Sonido, musica y espiritualidad

A G R A D E C I M I E N T O S

ESTOY EN DEUDA con todas aquellas personas que han contri-buido a la publicación de esta obra y que relaciono a conti-

nuación:A la editorial Gaia, especialmente a José M.ª Martín y a su equi-

po de producción, por su interés y facilidades para la edición deeste libro.

A todos los autores relacionados a lo largo de la obra que mehan acompañado en estos largos meses hasta primeras horas de lamadrugada. Les agradezco que me hayan facilitado sus opinionesy conocimientos a través de sus obras y artículos.

A los periodistas Imma Sanchís, Lluís Amiguet y Víctor-M.Amela. Sus entrevistas en «La Contra» ofrecen interesantes y pro-vechosos mensajes de vivencias ejemplares, algunos de los cualesse han recogido en esta publicación.

Mi gratitud a Sandra Balsells, reconocida fotoperiodista, pro-fesora y compañera de la Facultad de Comunicación Blanquer-na (URL), por la cesión de la foto publicada en la contrapor-tada.

A Olga Aravena, terapeuta multidisciplinar, por los mandalasque cariñosamente diseñó para ilustrar y acompañar estos textoscon buenas vibraciones.

3. LAS TERAPIAS MUSICALES: FUNDAMENTOS ..................... 113La musicoterapia .......................................................... 113

El musicoterapeuta ................................................. 120Desarrollo de una sesión de musicoterapia ........... 122

La sonoterapia .............................................................. 123¿Ciencia o dogma? ................................................. 126Vibraciones forzadas .............................................. 129Aplicaciones ........................................................... 130Desarrollo de una sesión de sonoterapia ............... 130

4. EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD ......................... 133Sonido, música y espiritualidad ................................... 138Neurociencia y espiritualidad ...................................... 144Salud y espiritualidad ................................................... 157La meditación y sus beneficios. Técnicas .................... 158

Epílogo ............................................................................... 179Bibliografía ......................................................................... 183Acerca del autor ................................................................. 187

10 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 6: Sonido, musica y espiritualidad

desconocidas para mí, facilitándome valiosas herramientas parami crecimiento personal.

Muy especialmente, con todo mi reconocimiento y admiración,a Eduardo Punset, mi gran referente como divulgador científico.Que aceptara redactar el prólogo de esta obra supone para mí ungran honor y distinción que me llena de orgullo y satisfacción. Lascharlas mantenidas en la cafetería, durante los descansos del pro-grama «Redes», y en el camerino del Centro de Producción deTVE en Sant Cugat, espacio que compartimos hace unos años,fueron muy fructíferas.

Finalmente, no puedo dejar de recordar a quienes me inicia-ron en la música desde muy temprana edad. Me refiero a mi abue-lo y a mi padre, cuyo legado musical ha sido la herencia más pre-ciada que he recibido. Tuve la inmensa suerte de crecer en unentorno que estimuló mis habilidades musicales, proporcionán-dome una oportunidad única para acrecentar mi sensibilidad a lasvibraciones sonoras. La paciencia y tesón de mi padre con mis her-manos y conmigo sólo se explica por su convencimiento y amorpor la música.

AGRADECIMIENTOS 13

Mi reconocimiento a Swami Muktidharmanda Saraswati, porcompartir sus profundos conocimientos sobre el Nada Yoga (yogadel sonido), y a Pablo Blanc (centro de yoga «Camí de Llum») porfacilitarme la asistencia a dicho seminario.

Debo recordar también a Astiko, por la sabia elección de lamúsica en las inmejorables prácticas de meditación que dirige.

A Mar Valverde, mi especial gratitud por sus oportunas suge-rencias que se han traducido en sutiles cambios, contribuyendo auna mejora del resultado final.

A mi hermano Xavier, músico e ingeniero, por la revisión delcapítulo «El sonido: vibración y energía». También, a M. ÀngelsArnau y a mi primo sacerdote, Xavier, por sus aportaciones al ca-pítulo «El ser humano y la espiritualidad».

Mis más sinceros agradecimientos a las siguientes personas,que fueron muy generosas con su tiempo, sus conversaciones y susopiniones. Su aportación supone un enriquecimiento del conteni-do de esta obra. Me refiero a los doctores Manuel Álvarez del Cas-tillo y Pere Berbel (director médico y anestesiólogo, respectiva-mente, del Hospital Universitario de la Mútua de Terrassa), aPablo Luna (químico, jefe de la UT de Condiciones Materiales delINSHT), a Catherine Clancy (musicoterapeuta) y a Eva Julián (et-nomusicóloga y especialista en Bioacústica).

A los terapeutas que supieron despertar en mí el deseo y lafuerza necesaria para emprender el largo, apasionante y dificulto-so viaje por la senda del autoconocimiento. Sus consejos provoca-ron un cambio cualitativo en mi vida, recuperando mi ilusión y re-conexión con la música. Quiero destacar a M. Àngels Arnau(terapeuta holística), quien me alentó para que iniciara el caminode la vivencia y experimentación, el único que realmente es capaz deproducir una verdadera transformación. También, muy especial-mente, a Lola Sanmartín (arteterapeuta y gestáltisca), por su efi-caz acompañamiento a través de la exploración de dimensiones

12 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 7: Sonido, musica y espiritualidad

P R Ó L O G O

HAY DOS ÁREAS del conocimiento que son trascendentales paraconocer: la una, cómo somos por dentro, qué decisiones to-

mamos en nuestra vida cotidiana; y para fisgar, la otra, en nuestrosorígenes, saber cómo empezó todo. La primera tiene que ver conel mundo vedado hasta hace muy poco de las emociones, y la brú-jula para discernirlas es el aprendizaje social y emocional. La se-gunda tiene que ver con el ritmo y la música; siendo la brújula eneste caso, para saber a qué atenerse, la sonoterapia y la musicote-rapia. No cabe ninguna duda, hoy día, de que sin la primera es im-posible entender al ser humano y, sin la segunda, aquilatar sus orí-genes y cómo todo empezó.

La ignorancia al respecto, no obstante, es indescriptible e inex-plicable. No sabemos nada o casi nada del aprendizaje social yemocional. Intuimos que los sonidos y la música precedieron allenguaje como medio de expresión de los humanos, pero ni siquie-ra esto lo sabemos a ciencia cierta. El neurólogo Antonio Dama-sio supo identificar el punto de partida para el estudio de las emo-ciones: no es cierto que la facultad de pensar nos hizo humanos,sino exactamente al revés. Existimos y por ello pensamos. La dua-lidad mente-cuerpo se cayó por los suelos.

Page 8: Sonido, musica y espiritualidad

I N T R O D U C C I Ó N

MI INTERÉS por el estudio de la influencia del sonido y la mú-sica en el ser humano surgió a raíz de los efectos que asidua-

mente experimentaba mientras practicaba jogging acompañadode mi reproductor mp3. Se me plantearon muchas preguntas: ¿Porqué tenía esa sensación de plenitud y felicidad en vez de sentirmedesfallecido? ¿Cómo era posible que después de escuchar cientosde veces la misma canción aún continuara estimulándome física-mente de tal manera que me permitía recorrer una cuesta pronun-ciada con energía, aplomo y, aparentemente, con menor dificul-tad?1. ¿Qué le ocurría a mi cerebro durante esos minutos deimparable bombardeo de ideas, que surgían espontáneamenteaportando nuevos enfoques y soluciones a problemas de diversaíndole, sin tan siquiera «pensar» en ellos?2. ¿Qué me impedía trans-

Jordi A. Jauset tiene todos los visos de convertirse en el Anto-nio Damasio de la expresión emocional por medio del sonido, lamelodía y la música. No es cierto que los homínidos supieran fa-bricar herramientas y que luego aprendieron a cantar. Sintieronlos sonidos como componente esencial de la belleza que necesita-ban percibir para sobrevivir. Los sonidos formaron parte desde elcomienzo de la capacidad para percibir la belleza, explicarse el universo y aprender a sobrevivir. Nunca fue —como es hoy día—una asignatura aparte.

A Jordi debemos agradecerle, además, que asumiera la modes-tia característica del método científico y que tanto lo distingue delpensamiento dogmático. El conocimiento científico, lo poco quesabemos de los sonidos y la música es a título de inventario; lo he-mos comprobado gracias a expertos como Jordi A. Jauset, perosomos conscientes de que no hay verdades absolutas, de que en elfuturo otros expertos podrían modificar o incluso sustituir lo queahora consideramos como cierto. Lo poco que descubrimos aho-ra, sin embargo, es bello y, como dicen los anglosajones, it makessense, tiene sentido.

EDUARDO PUNSET

Escritor y divulgador científicoBarcelona, diciembre de 2009

16 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

1 Es curioso comprobar la estimulación física, la sincronización del ritmo corporalal de la música y la estimulación general que se produce al escuchar determinado tipode música. En mi caso, agradezco enormemente, especialmente ante el inicio de unapronunciada cuesta, algunos compases de Get Back (Beatles) o de Jesse James (BruceSpringsteen), entre otras muchas. Aunque una de mis preferidas, desde hace muchosaños, es All right now (Free).

2 Me alegra saber que el escritor Ian McEwan ha tenido experiencias similares alrespecto: «… he comprobado que dar largas caminatas en soledad despierta en el inte-

Page 9: Sonido, musica y espiritualidad

INTRODUCCIÓN 19

Después de una amplia experiencia profesional, en la que asu-mí diversas responsabilidades directivas en las áreas formativa, téc-nica y económica de las distintas sociedades del Ente Público RTVEen Cataluña y como alto cargo en la Generalitat de Catalunya, toméla decisión de priorizar y dedicar mis esfuerzos al estudio, inves-tigación y divulgación de las potencialidades terapéuticas del so-nido y la música.

Una parte del resultado de mi trabajo, durante los últimos años,es la obra que ahora tienes en tus manos 3. Está escrita con tesóny, a la vez, con ternura y pasión. En ella expongo conocimientos,comentarios, opiniones, citas, reflexiones y conclusiones acercadel sonido y de la música, de sus aspectos físicos o tangibles asícomo de aquellos más sutiles, y de cómo nos afectan holísticamen-te como seres humanos, incluso en nuestra parte más íntima, la es-piritual, la más importante y quizás la más ignorada.

El sonido, algo tan habitual y común, es el resultado de la per-cepción de una energía que se transmite a través de un medio elás-tico produciendo variaciones de la presión atmosférica. Su origenno son más que vibraciones cuyos ritmos o frecuencias de varia-ción son detectables y decodificables por nuestro cerebro. A suvez la música, según su concepción más tradicional, es una mez-cla o conjunto de sonidos organizados bajo un determinado for-mato en el que se distingue principalmente una melodía, un ritmoy una armonía. Cada una de estas partes es interpretada en distin-tas zonas de nuestros hemisferios cerebrales y nos afectan priori-tariamente en unas u otras dimensiones (física o corporal, mental,emocional y espiritual). En los últimos años, la ciencia ha explica-do cómo el cerebro es capaz de responder a estos estímulos, ela-borando algunas teorías que intentan justificar todo el entramado

3 Se complementa con la próxima obra del autor: La Terapia de Sonido. ¿Ciencia odogma? Ediciones Luciérnaga (2011).

cribir esas ideas, con la misma claridad con la que fluían por mimente mientras corría, al finalizar la sesión y llegar a casa? ¿Cuáles la razón de que me resulte más inteligible y comprensible el «in-glés» durante mis sesiones de entrenamiento que cuando estoysentado tranquilamente en el sofá?… Mi curiosidad por llegar acomprender cómo se comportaba el cerebro ante los estímulosmusicales y encontrar respuestas a las preguntas anteriores fue de-cisiva para impulsarme al estudio acerca de la influencia de las vi-braciones sonoras en el ser humano.

Nací músico, posiblemente condicionado genéticamente, y tan-to el entorno como la educación recibida facilitaron que pudieradesarrollar mi sensibilidad musical. Mi abuelo tocaba el saxofónen una orquesta municipal y mi padre —profesor de música— ha-bía conseguido destacados premios regionales y nacionales comopianista. Ambos compartían una gran pasión por la música y su-pongo que fue motivo suficiente para que desearan que la forma-ción musical fuera prioritaria en la educación de sus nietos e hi-jos, respectivamente. Así, a los tres o cuatro años ya recibía misprimeras lecciones, y a partir de los seis años simultaneaba los es-tudios oficiales musicales con los escolares . El inicio a esta precozedad me permitió finalizar la especialidad de piano dos años an-tes de ingresar en la universidad y comenzar mi formación en in-geniería de telecomunicación.

18 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

lecto ideas que están en el origen de lo que luego se convertirá en novela...». Y que elcorredor de ultrafondo Serge Girard comenta, también, que «correr tanto tiempomodifica la química cerebral, y todas las percepciones, sentimientos y emociones se teagudizan…». Creo entender ahora por qué determinadas empresas, especialmente lasmultinacionales de origen norteamericano (como Hewlett Packard, por ejemplo), dis-ponen de instalaciones deportivas y de circuitos de jogging para sus trabajadores, eincluso que se aprovechen esos minutos para reuniones informales de trabajo. Apuestoa que deben ser muy creativas y efectivas, si lo que surge en esos momentos se lleva pos-teriormente a la práctica. Recomendaría que las escuelas de negocio incluyeran estapráctica como técnica generadora de ideas (brainstorming). Estoy seguro de que seríatodo un éxito.

Page 10: Sonido, musica y espiritualidad

cia. La espiritualidad es una de nuestras dimensiones, junto con lacorporal, mental y emocional, que también resulta particularmen-te influenciada por el sonido y la música. Es nuestra parte más ínti-ma, la que realmente nos define como seres humanos, y a la vez tanmisteriosa y olvidada, quizás por el temor que manifestamos anteaquello que nos resulta desconocido. En este capítulo se citan opi-niones de científicos que, en base a sus investigaciones, consideranque la espiritualidad nace y muere con el cerebro, tema polémicode gran trascendencia y de una enorme potencialidad de investiga-ción. Me pareció oportuno finalizar el capítulo con un apartado re-lativo a la meditación y sus técnicas, exponiendo algunos sencillosejemplos que pueden ser provechosos para equilibrar nuestra aje-treada vida diaria.

Siguiendo el mismo esquema de obras anteriores, he incorpo-rado citas y comentarios de reconocidos autores y expertos tera-peutas, además de interesantes noticias divulgadas por los mediosde comunicación relacionadas con los temas expuestos.

En definitiva, este libro es una búsqueda exploratoria, un in-tento de descubrir por qué el sonido y la música nos afectan deuna forma tan especial e intensa, y cómo pueden sernos útiles,como eficaces herramientas, en nuestro camino de evolución per-sonal. Estoy convencido de que los avances de la neurociencia con-tinuarán evidenciando y constatando los numerosos efectos bene-ficiosos que las vibraciones sonoras son capaces de producir enlos seres vivos y, por tanto, en el ser humano.

Éste es, estimado lector, un breve resumen de lo que puedesencontrar en las siguientes páginas, que te agradezco compartasconmigo. Sólo por ello ya me siento enormemente recompensadoen mi esfuerzo.

Ahora, si tienes por delante un espacio de algunos minutos detranquilidad, te invito a que elijas una buena música de tu colec-ción personal, aquella que sabes que abre tu mente y te aporta paz

INTRODUCCIÓN 21

que acaece en este órgano, el más complejo del universo según losentendidos.

He creído conveniente exponer los distintos temas divididosen cuatro capítulos. El primero trata sobre los aspectos físicos delsonido. En él se definen los conceptos básicos y esenciales para sucomprensión —qué son las frecuencias, los armónicos y el espec-tro sonoro—, complementándose con algunos comentarios sobrelos sonidos internos, aquellos que nosotros generamos y que ape-nas percibimos. Se expone, también, cómo puede afectarnos físi-camente el sonido y se citan algunas curiosas aplicaciones de lasvibraciones sonoras, unas más conocidas que otras.

El segundo capítulo presenta algunas ideas acerca del signifi-cado de la música, de sus orígenes, así como esbozos de recientesteorías que intentan explicar por qué y cómo nos afecta la músicaen base a los efectos constatados por investigaciones científicas enlos últimos años.

En el tercer capítulo se citan los fundamentos de las terapias mu-sicales: la musicoterapia y la sonoterapia. Se comparan y se comen-tan, bajo mi percepción personal, las similitudes y diferencias entreambas disciplinas, que comparten objetivos pero mantienen dife-rencias metodológicas y conceptuales. La musicoterapia, por unlado, está reconocida y respaldada científicamente por numerososestudios que avalan y validan sus eficaces resultados. La sonotera-pia, por su parte, clasificada como una terapia vibracional, es cues-tionada científicamente por dirigir su actuación no sólo a la partefísica sino también hacia los denominados cuerpos energéticos o su-tiles, según una concepción holística del ser humano y cuyos oríge-nes se remontan a culturas milenarias orientales. La carencia o, po-siblemente, poca difusión de sus estudios y aplicaciones la sitúan enel límite o borderline del conocimiento científico actual.

El cuarto y último capítulo es una incursión en la espiritualidaddel ser humano y su relación con el sonido, la música y la neurocien-

20 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 11: Sonido, musica y espiritualidad

y serenidad. Bajo los armónicos compases musicales que te envol-verán, puedes iniciar la lectura de esta obra que deseo te sea fruc-tífera, agradable, entretenida y placentera. Sin más preámbulos,ya puedes pasar a la página siguiente…

22 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

1E L S O N I D O :

V I B R A C I Ó N Y E N E R G Í A

El sonido es a la música

lo que el átomo a la materia.

JORDI A. JAUSET

LA MAYOR PARTE de las civilizaciones, tradiciones y culturas an-tiguas compartían la creencia de que el sonido era la fuerza

generatriz responsable de la creación del universo y, en particular(según la interpretación de determinadas citas de textos sagrados),el sonido de la voz.

Esto puede explicar el significado mágico que los pueblosprimitivos atribuían al sonido y a la música. En el hinduismo, eltérmino «Brahma» se interpreta como «fuerza mágica», «pala-bra sagrada», «himno». Las sílabas «Om» o «Aum» son los so-nidos inmortales creadores del mundo, según citan los Upani-shad, libros sagrados del hinduismo escritos en sánscrito varioscientos de años antes de Cristo. Los egipcios, por su parte, creían que el mundo se había creado a partir de la voz de su diosThot, y otras tradiciones, como la persa, coinciden en conside-rar que el universo se originó a partir de una sustancia o vibra-ción acústica. En general, todas las escuelas antiguas de sabidu-ría (Egipto, Roma, Grecia, India) aludían a la vibración comoprincipal fuerza causal del universo. Hoy día, la ciencia nos acer-ca a estas teorías. Según el catedrático de física teórica MichioKaku, «todo es vibración, y cada partícula elemental, una nota:

Page 12: Sonido, musica y espiritualidad

lacionados con la respuesta celular a determinados tonos audiblesgenerados por diapasones terapéuticos, tal como expone y acre-dita mediante diversas fotografías en su libro The Role of Music inthe twenty-first Century (1997) 16.

Con ayuda de la bióloga Helene Grimaud, Fabien Maman ob-servó que las células de la sangre alteraban su color y forma cuan-do eran sometidas a determinadas frecuencias sonoras. En el casoparticular de células cancerígenas que afectaban a la matriz, des-cubrió que ante determinados sonidos éstas tendían a desintegrar-se 17. Según sus propias declaraciones, estos experimentos eviden-cian que la vibración del sonido desempeña un papel determinanteen la transformación de la estructura celular, ya que actúa direc-tamente en el ámbito más sutil del organismo humano.

Basándose en estos descubrimientos, Maman experimentócon dos pacientes de cáncer de mama. La terapia consistía en uti-lizar el sonido de su propia voz, tres horas y media diarias duran-te un mes. Al cabo de dicho tiempo, a una de las dos pacientes eltumor le había desaparecido. La segunda paciente decidió some-terse a una operación quirúrgica. Sorprendentemente, el ciruja-no observó que el tumor se había reducido y estaba completamen-te seco.

EL SONIDO: VIBRACIÓN Y ENERGÍA 47

16 A principios de los ochenta, Fabien Maman realizó revolucionarios experimen-tos biológicos en la Universidad de Jussieu en París, que demostraron el impacto delos sonidos acústicos sobre células humanas y sus campos de energía. Fabien descu-brió que, utilizando una serie de sonidos acústicos (400 Hz, 480 Hz), podía hacerestallar las células cancerígenas a la vez que se activaban y fortalecían las células sanas(http://www.tama-do.com/spanish/roothtmls/sp-aboutfabien.html).

17 Hay que tener en cuenta que los resultados obtenidos en experimentos con célulasaisladas, «in vitro», no pueden extrapolarse para las células en estado y condiciones nor-males que forman parte de los tejidos y órganos del cuerpo humano. Éstas están someti-das a infinidad de estímulos difícilmente replicables en los experimentos «in vitro».

percepción de ese tono en particular produjera una respuesta demi actividad cerebral que fuera tanto o más predominante que losefectos físicos derivados de la transmisión y propagación de la pro-pia vibración a través del cuerpo. El resultado habitual suele seruna combinación de ambos efectos, el físico y el perceptivo.

Resulta casi imposible establecer reglas o comportamientosgenerales debido a nuestra individualidad. Todos somos portado-res de nuestras propias «mochilas» llenas de recuerdos, de expe-riencias, de aspectos genéticos que acentúan nuestras diferenciasindividuales. Ésa es para mí, entre otras, la grandeza del ser hu-mano: somos prácticamente iguales, pero totalmente diferentes.Nuestro «hardware» es similar (cuerpo físico), pero el «softwa-re» (emociones, mente, espíritu) es distinto, autoconfigurable enparte y, por tanto, individual y personal.

La vibración sonora que impacta en nuestro cuerpo ¿podríallegar a producir cambios en los tejidos y en las células, compor-tándose como un posible catalizador de determinadas reaccionesquímicas que favoreciera un estado de normalidad actuando po-sitivamente ante situaciones de desequilibrio o enfermedad? Po-siblemente ésta sea la pregunta del millón. Ya sabemos, como co-mentaremos más adelante, que las denominadas «armas sónicas»,con elevadas potencias y determinadas frecuencias, producen efec-tos que pueden llegar a ser letales. Pero lo que interesa a los tera-peutas de sonido son los efectos beneficiosos de las vibracionesaudibles, es decir, los que proceden de los instrumentos musica-les, incluida la voz.

A este respecto, son muy interesantes, a la vez que controver-tidos, las investigaciones y los experimentos de Fabien Maman re-

46 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 13: Sonido, musica y espiritualidad

«La importancia del sonido es clave por sus propiedades cura-tivas. Creo que el sonido puede desempeñar un papel en virtualmen-te cualquier desorden médico, puesto que repara los desequilibriosa cualquier nivel de funcionamiento fisiológico. En mi experiencia,el sonido es un instrumento tan poderoso para la relajación y la cu-ración cuerpo/mente, como lo ha demostrado serlo la visualizaciónguiada en los últimos veinte años. Además, creo que el sonido fun-ciona en el nivel físico porque nos toca y transforma profundamen-te en los planos emocionales y espirituales.

El sonido influye en el proceso de curación de diversas mane-ras: altera las funciones celulares mediante efectos energéticos; haceque los sistemas biológicos funcionen con más homeostasis; calmala mente y con ello el cuerpo, y tiene efectos emocionales que influ-yen en los neurotransmisores y los neuropéptidos, que a su vez ayu-darán a regular el sistema inmunitario…»

A nivel físico el sonido no tiene secretos. Con las tecnologíasactuales y el procesado digital se sabe a ciencia cierta qué es,cómo se transmite y cuáles son sus propiedades físicas. Por tan-to, el sonido, como tal, no supone ningún misterio para la cien-cia. El gran desconocido es y continúa siendo el cerebro; en de-finitiva, el ser humano.

Profesionales reconocidos como el doctor John J. Ratey, pro-fesor de psiquiatría en la Harvard Medical School y autor del li-bro A user’s guide to the brain (2002), afirman que el sonido, aligual que otros elementos que forman parte de nuestro entor-no, es capaz de cambiar la interconexión física de las sinapsisen el cerebro.

EL SONIDO: VIBRACIÓN Y ENERGÍA 49

No cabe duda de que en este experimento, así como en mu-chos otros, la intención y el deseo de las pacientes, involucradasdirectamente en su propio proceso de curación, pudo ser muy im-portante, otorgando un mayor efecto a las frecuencias emitidaspor su propia voz.

Me he preguntado muchas veces por qué no se divulgan máslos estudios e investigaciones acerca de los efectos beneficiososdel sonido en el ser humano, aludiendo, por ejemplo, a los cita-dos experimentos de Fabien Maman. Si la comunidad científicalos analiza, los investiga y constata que pueden contribuir positi-vamente a nuevas terapias, opciones o alternativas para mejorarnuestra salud, ¿por qué no se divulgan y se aplican? Si, por el con-trario, de su investigación no puede concluirse un resultado po-sitivo pero se observan indicios de que pueda existir alguna inter-acción positiva, ¿no deberían dedicarse más recursos a suinvestigación? Y si finalmente se comprueba que son hechos queno pueden replicarse y se demuestra que no pueden aportar losbeneficios que se citan, con más razón aún deberían divulgarsesus resultados para prevenir e informar a todos aquellos que con-fían en nuevos métodos o terapias para mejorar la salud, contri-buyendo a evitar los posibles fraudes al respecto.

Uno de los profesionales médicos que más defiende las capa-cidades terapéuticas del sonido es el doctor Gaynor, director deldepartamento de Medicina Oncológica e Integrativa del CentroStrang-Cornell para la prevención del cáncer (Nueva York). Desu conocido libro Los sonidos que curan (2001) extraigo los siguien-tes e interesantes párrafos:

48 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 14: Sonido, musica y espiritualidad

miento de tumores sólidos de mama, renales, de vejiga, de pán-creas, hepáticos y de próstata. Consiste en un tratamiento no in-vasivo que provoca la ablación térmica de tumores sólidos. En po-cas palabras, el proceso es el siguiente: un haz de ultrasonidos deelevada frecuencia e intensidad se dirige a las diversas zonas deltumor, divididas en pequeños volúmenes (1 a 3 mm de diámetroy 8 a 15 mm de longitud). En tan sólo un segundo se alcanza, enel punto de impacto, una temperatura superior a 55ºC (puede lle-gar a más de 80ºC), causando una necrosis coagulativa de las cé-lulas impactadas. Es importante resaltar que los tejidos adyacen-tes no resultan dañados pues el área tratada es muy selectiva yprecisa. Al terminar la sesión (2-3 horas), el tumor ya se ha redu-cido de tamaño y a los pocos meses, en el caso de tumores benig-nos, el tumor prácticamente ha desaparecido 18.

Según puntualiza el doctor Manuel Álvarez del Castillo, direc-tor médico de la Mútua de Terrassa, con relación a la tecnologíaHIFU, «el tratamiento ante los tumores malignos ofrece dos víasde actuación. En unos casos el objetivo es curativo, mediante laablación total, con lo cual el tumor desaparece, y en otros casos seopta por un tratamiento paliativo, reduciendo el tamaño del tu-mor y mejorando la calidad de vida y alargamiento de ésta. Refe-rente a los tumores benignos, la finalidad es su desaparición, porejemplo en los adenomas de mama, y en otros casos la actuaciónse dirige hacia la reducción de su tamaño, evitando cirugías másagresivas (miomas, etc.), y su posterior “shrink” tumoral o reduc-ción por contracción».

EL SONIDO: VIBRACIÓN Y ENERGÍA 51

18 L. Navarro, Ultrasò focalitzat d’alta intensitat (HIFU) en el tractament del càncerhepàtic. Barcelona: Agència d’Avaluació de Tecnologia i Recerca Mèdiques ServeiCatalà de la Salut, Departament de Salut, Generalitat de Catalunya, 2008.

CURIOSIDADES

Infrasonidos y ultrasonidos: aplicaciones

Las vibraciones acústicas son un poderoso instrumento, másde lo que por sí pueden aparentar. Determinadas aplicaciones sonbeneficiosas para nuestra salud, pero otras son perjudiciales y da-ñinas, pudiendo, en casos extremos, llegar a causar la muerte.

Aplicaciones médicas

Un ejemplo altamente beneficioso para la salud, en la gama delos ultrasonidos, es su aplicación como alternativa a la cirugía, enparticular para el tratamiento de determinados tumores benignosy malignos. Es la tecnología conocida como High Intensity Focu-sed Ultrasound (HIFU).

La medicina convencional también hace uso de las propieda-des energéticas de las ondas acústicas (ultrasonidos) en algunasaplicaciones de diagnóstico (ecografías) y terapéuticas (destruc-ción de los cálculos en riñón, vejiga y vesícula).

Con los últimos avances médicos, hoy día también se tratantumores benignos y malignos con métodos menos invasivos (nose introduce ningún dispositivo ni agujas en el cuerpo del pacien-te) y sin apenas efectos secundarios. Es el caso de la tecnología deultrasonidos High Intensity Focused Ultrasound (HIFU). Implan-tada en algunos países del mundo, ha sido la Mútua de Terrassa(Barcelona) la pionera en nuestro país, iniciando sus primeros exi-tosos tratamientos en el año 2008.

HIFU es una tecnología terapéutica emergente para el trata-

50 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 15: Sonido, musica y espiritualidad

cos están empezando a desvelar

este misterio. Una investigación lle-

vada a cabo por el proyecto

EmCAP de la Unión Europea ha re-

velado que los bebés tienen sen-

sibilidad para distinguir tonos mu-

sicales desde que nacen, es decir,

que la capacidad musical humana

no se deriva de la experiencia,

como se creía hasta ahora, sino

que tiene un componente innato.

Utilizando el encefalograma, los in-

vestigadores comprobaron que los

cerebros de los recién nacidos

reaccionaban a cualquier variación

en las expectativas rítmicas presen-

tadas, esto es, que eran sensibles

a los cambios en la música. Co-

nocer a fondo cómo procesa el

cerebro humano la música per-

mitirá desarrollar nuevos trata-

mientos para problemas de au-

dición, y también crear sistemas

artificiales inteligentes capaces de

procesar la música como nuestro

cerebro.

Hasta hace poco, no se sabía

casi nada sobre la percepción de

los humanos cuando nacemos y, a

pesar de que la percepción de los

adultos ha sido investigada am-

pliamente, los patrones de percep-

ción de los bebés recién nacidos

seguían siendo un misterio

Gracias al proyecto EmCAP

de la Unión Europea se ha podi-

do desentrañar en parte este mis-

terio. EmCAP (siglas de Emergent

Cognition through Active Percep-

tion) es un proyecto de investiga-

ción desarrollado entre 2005 y

2008, que ha aunado los esfuer-

zos de neurocientíficos y técnicos

musicales para realizar experi-

mentos con bebés y música.

En los experimentos, publica

la agencia CORDIS de la UE, los

bebés dormidos fueron conecta-

dos a un encefalograma (EEG),

que es un instrumento que regis-

tra la actividad eléctrica del cere-

bro mediante electrodos coloca-

dos en el cuero cabelludo.

Después, se hizo sonar una

música, en concreto secuencias to-

nales simplificadas, para saber a

qué tipo de patrones eran sensi-

bles los recién nacidos, y si éstos

predecirían qué tono o secuencia

sería la siguiente, basándose en las

escuchadas hasta el momento.

Tal y como explica Susan Den-

ham, una de las autoras de esta in-

vestigación, en el comunicado de

MÚSICA Y NEUROCIENCIA 89

Todos los seres humanos «sentimos» la música. Excepto aque-llas personas que presentan determinadas deficiencias neurológi-cas, todos apreciamos la música: los tonos, los timbres, la melo-día, la armonía, el ritmo. Es algo innato o genético, de forma similaral lenguaje, por lo que podríamos afirmar que los humanos somosuna especie tan lingüística como musical. El doctor Mark Tramo,músico, compositor, neurólogo y director del Institute for Music& Brain Science Harvard Medical School, está convencido de que«la música está en nuestros genes» 14.

La música no es sólo parte de nuestra cultura sino que formaparte también de nuestra naturaleza, por eso todos tenemos el donde la música. No se trata de tener más o menos habilidades musi-cales, sino de considerarla como un medio o nexo de unión conlos otros, tal como ocurría en las antiguas sociedades ancestralesdonde todos, sin exclusión, participaban de ella cantando y bai-lando sin importar las destrezas individuales. Lo importante erala celebración, potenciar el sentimiento de grupo, a través del mo-vimiento y de la música.

Las últimas investigaciones apuntan a que los bebés ya vienenal mundo con preferencias musicales. Comienzan a responder a lamúsica desde el útero materno y a los cuatro meses se retuercencuando perciben notas disonantes al final de una melodía. Loscientíficos consideran que estas respuestas son evidencias de queciertas reglas de la música están ya conectadas, cableadas en el ce-rebro.

88 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

14 Esta institución se dedica a investigar la relación de la melodía, la armonía y elritmo con las emociones y sentimientos que producen, a nivel de las células cerebrales.

Los bebés distinguen patrones

y variaciones musicales

mientras duermen

Poco se sabía hasta ahora sobre la

percepción de los bebés recién na-

cidos, pero los avances tecnológi-

Page 16: Sonido, musica y espiritualidad

«... la música, desde luego, es sonido organizado y tiene poten-tes efectos emocionales que estimulan recuerdos, asociaciones y es-tados psicológicos altamente desarrollados con un claro impacto ennuestros sistemas de curación» (Gaynor, 2001).

Esta influencia ha sido objeto de estudio a lo largo de la histo-ria de la música, y es la base de su aplicación para tratamientos,entre otros muchos, de determinados trastornos depresivos, esta-dos de agitación y de ansiedad. Según Ibarrola (2008), «la músicaes una forma de sonido profundamente comunicativa, que tienepoderes terapéuticos aplicados desde la antigüedad». Es eviden-te que no respondemos todos de la misma forma. Las reaccionesemocionales varían incluso entre los propios músicos o entre aque-llos, como los melómanos, para quienes la música es una parteesencial en sus vidas.

Se ha comprobado con neuroimágenes que la música activalas mismas áreas cerebrales que las que intervienen en el trata-miento de las emociones. De ahí surge la tesis de que la músicano evoca simplemente emociones en función de nuestra experien-cia personal, sino que las provoca de forma intrínseca.

La música afecta a todas nuestras dimensiones: la física o cor-poral, la mental, la emocional y la espiritual.

Eric Jensen, educador y escritor especializado en el cerebro, opi-na que la música eleva la estructura molecular de nuestro cuerpo. Lamúsica tiene sus propias frecuencias vibratorias que o resuenan ochocan con los propios ritmos de nuestro cuerpo. Cuando los dosresuenan en la misma frecuencia nos sentimos «en sintonía», y es en-tonces cuando aprendemos mejor y estamos más conscientes y aler-tas. Resume, muy adecuadamente, los efectos potenciales de la mú-

MÚSICA Y NEUROCIENCIA 91

CORDIS, las secuencias de sonido

presentadas a los bebés variaban

en el «color», como si las emitiesen

diversos instrumentos, pero man-

tenían siempre el mismo tono.

De vez en cuando, se hacía so-

nar un tono diferente, y se compro-

baba con el EEG si los cerebros de

los bebés habían producido una

reacción distinta como consecuen-

cia del desvío en el sonido. Prue-

bas similares fueron realizadas para

analizar también el grado de sen-

sibilidad de los niños a patrones

melódicos y rítmicos.

Según Denham, mientras que

este tipo de técnica se ha usado

durante años con adultos para

medir la detección preconscien-

te de hechos inesperados, rara

vez se había utilizado con bebés

recién nacidos. La gran ventaja de

esta técnica es que se puede uti-

lizar incluso cuando la persona es-

tudiada está inconsciente.

Por eso no resultó un proble-

ma para averiguar la actividad ce-

rebral de los pequeños que éstos

estuvieran durmiendo durante las

pruebas.

Y. MARTÍNEZ,

http://gipemblog.wordpress.com/

5 de octubre de 2009

90 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

¿CÓMO NOS AFECTA LA MÚSICA?

La música es un estímulo que enriquece los procesos sensoria-les, cognitivos (como el pensamiento, el aprendizaje y la memo-ria) y motores, además de fomentar la creatividad. Pero quizás elmayor poder de la música sea el afectivo, su capacidad para influiry provocar determinados estados emotivos en los oyentes: evocarecuerdos, infunde alegría, induce a estados de relajación y de se-renidad, despierta nuestra espiritualidad… Éstos son algunos delos efectos que seguramente habremos experimentado en másde una ocasión, y por ello resulta casi imposible impedir que lamúsica llegue a nuestro corazón.

Page 17: Sonido, musica y espiritualidad

dad de atención y favorece la imaginación y la capacidad creado-ra; estimula la habilidad de concentración y la memoria a corto ylargo plazo y desarrolla el sentido del orden y del análisis. Facili-ta el aprendizaje al mantener en actividad las neuronas cerebrales,y ejercita la inteligencia, ya que favorece el uso de varios razona-mientos a la vez al percibir diferenciadamente sus elementos y sin-tetizarlos en la captación de un mensaje integrado, lógico y bello»(Poch, 1999).

Otras investigaciones explican el estado que se alcanza debienestar y hasta de euforia por el aumento de los opiáceos pro-pios del cerebro, las endorfinas. El sistema nervioso central au-menta su producción así como la de otros neurotransmisores (do-pamina, acetilcolina, oxitocina). De las endorfinas se ha descubiertoque dan motivación y energía ante la vida, que producen alegría yoptimismo, que disminuyen el dolor y contribuyen a la sensaciónde bienestar, a la vez que estimulan los sentimientos de gratitud ysatisfacción existencial.

MÚSICA Y NEUROCIENCIA 93

sica en la mente y en el cuerpo: aumenta la energía muscular y laenergía molecular, afecta al ritmo cardiaco, altera el metabolismo,reduce el dolor; acelera la sanación y la recuperación de pacientesque han pasado por el quirófano, ayuda en la descarga de emocio-nes, y estimula la creatividad, la sensibilidad y el pensamiento 15.

Son conocidos los cambios que afectan al pulso, a la presiónsanguínea y a la respiración. Quizás por ello, la neurolingüista Bea-triz Cés afirma que es muy relajante leer con música barroca defondo, ya que sus compases tienen los mismos ritmos internos delcuerpo: la respiración y el latido del corazón.

Igualmente, se han constatado cambios en la función endocri-na que afectan al metabolismo en la biosíntesis de algunos proce-sos enzimáticos 16.

La reacción de los fetos cambia según el tipo de música. «Se ve enlas ecografías que les gustan Mozart y Vivaldi. En cambio, no les gustanel rock, el hard rock o el jazz», afirma el psiquiatra Thomas Verny17.

Si experimentamos sensaciones de alegría o tristeza al escu-char música, el sistema nervioso actúa aumentando o disminuyendola sudoración, lo cual puede detectarse midiendo la conductivi-dad eléctrica de la piel. Estas reacciones fisiológicas son indepen-dientes de juicios subjetivos, por lo que puede deducirse que elreceptor no necesariamente tiene conciencia del efecto que la mú-sica produce en él.

Sus efectos sobre determinados procesos cognitivos son, tam-bién, aceptados universalmente: «La música desarrolla la capaci-

92 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

15 M. Seleme, «El efecto de la música en nuestro cerebro», http://www.childrenof-thenewearth.com, 13 de agosto de 2009.

16 J. Jarque, «Más que nanas», La Vanguardia, Es, p. 30, 7 de marzo de 2009.17 http://www.elpais.com/articulo/salud/fetos/prefieren/Mozart/les/gustan/jazz/rock/

elpepusal/20100518elpepisal_2/Tes.

Varios estudios, por ejemplo, han

demostrado que escuchar una

canción durante el ejercicio físico

aumenta la resistencia y el rendi-

miento. Así se constató en una in-

vestigación realizada en Londres,

por científicos de la Brunel Uni-

versity, a un grupo de 30 personas

que corrían en una cinta desliza-

dora mientras escuchaban una se-

lección de canciones (Queen, Red

Hot Chile Peppers y Madonna).

Los resultados mostraron que

hubo un aumento individual de

hasta el 15 por ciento de resisten-

cia y un mejor estado de ánimo,

ocasionando que la experiencia

del ejercicio fuera más placente-

ra. La investigación fue coordina-

da por el psicólogo experto en

deporte Costas Karageorghis,

quien en experimentos pasados

también demostró que los atletas

que corrían mientras escuchaban

música «sincrónica», es decir,

aquella en la que el ritmo se ajus-

Page 18: Sonido, musica y espiritualidad

«Escuchar música te vuelve agresivo cuando necesitas estarlo.Sabes que vas a salir y te van a disparar. No importa si no pasa nada,es sólo estar preparado para una eventualidad», dijo el sargento pri-mero C. J. Grisham en una de las entrevistas para el estudio dirigi-do por Jonathan Pieslak, investigador del City College de NuevaYork. Otro soldado dijo que escuchaba a Slayer, un grupo de trashmetal, porque el sonido le recordaba el de un arma. El poder de lamúsica era tal que algunos dijeron que ciertos temas los convertíanen monstruos, y que los llevaban a cometer actos inhumanos 18.

La utilización de la música en la guerra no es una práctica nue-va. Desde la antigüedad, los ejércitos han utilizado tambores ycuernos en el campo de batalla para guiar y motivar a las tropas.Recordemos cómo, en el siglo pasado, los soldados nazis eran es-timulados con música de Wagner.

Pero, además, la música no afecta únicamente al ser humano,sino a todos los seres vivos, tal como se ha demostrado en multi-tud de experimentos con animales y plantas.

Con música clásica las gallinas ponen más huevos y las vacasdan más leche. Si se experimenta con música rock, se observa unadisminución tanto de la puesta de huevos como de la producciónde leche 19.

MÚSICA Y NEUROCIENCIA 95

18 Investigación que comenzó en el año 2004, entrevistando a varios soldados esta-dounidenses de la primera generación de combatientes con reproductores portátiles,como iPods o mp3, sobre la música que escuchaban durante su permanencia en Irak.Los resultados de este trabajo fueron publicados en el libro Sound targets: american sol-diers and music in the Iraq War.

19 Música clásica, como la Sinfonía Pastoral de Beethoven, y canciones popularescomo Bridge Over Troubled Water (de Simon & Garfunkel), Moon River (DannyWilliams), Everybody Hurts (del grupo REM), What a difference a day makes (ArethaFranklin) y Perfect Day (Lou Reed) incrementan la producción lechera, según investiga-ciones de Adrian North y Liam Mackenzie de la Universidad de Leicester, Inglaterra(http://www.le.ac.uk/).

ta con los movimientos de su

cuerpo, podían soportar cinco ve-

ces más esfuerzo que quienes no

escuchaban nada. «El tono ade-

cuado puede ayudar a cualquier

persona a correr más rápido o a

levantar pesas más pesadas», dijo

Karageorghis al periódico inglés

Times.

http://www.semana.com/noti-

cias-vida-moderna/todo-volu-

men/135893.aspx

94 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Según afirma Olivia Dewhurst-Maddock (1993) en su obra Ellibro de la terapia del sonido. Cómo curarse con la música y la voz,«la música puede saltarse los filtros lógicos y analíticos de la men-te, para establecer un contacto directo con sentimientos y pasionesescondidos en lo más profundo de la memoria y de la imaginación.Esto provoca, a su vez, unas reacciones físicas». ¿Será ésta la razónde que aquellas personas que han padecido accidentes cerebrovas-culares y no pueden hablar pero sí cantar, cuando escuchan deter-minadas canciones, no pueden reprimir sus lágrimas al ser conscien-tes de ello? La música, como se observa, puede alcanzar zonas oniveles cerebrales más profundos que el lenguaje.

Recordemos que Platón afirmaba que «la música era para elalma lo que la gimnasia para el cuerpo», reconociendo que poseíadeterminadas cualidades o propiedades que incidían en nuestrasdimensiones emocional y espiritual. La música puede tener unefecto relajante y apaciguar nuestro espíritu. Así lo recoge la Bi-blia en el Primer Libro de Samuel (16, 16-23) cuando cita el con-sejo que le dieron a Saúl: «Ordene usted a estos servidores suyosque busquen a alguien que sepa tocar la cítara, para que, cuandole ataque a usted el espíritu maligno, él toque el arpa y usted sesienta mejor».

Pero la música también puede ser enérgica, provocar nervio-sismo y agresividad, utilizándose para estimular y preparar a lossoldados en combate:

Page 19: Sonido, musica y espiritualidad

3L A S T E R A P I A S

M U S I C A L E S : F U N D A M E N T O S

Aquel que conoce el secreto del sonido,

conoce el misterio de todo el universo.

HAZRAT INAYAT KHAN

LA MUSICOTERAPIA

La American Music Therapy Association (AMTA) define lamusicoterapia como «una profesión, en el campo de la salud, queutiliza la música y actividades musicales para tratar las necesida-des físicas, psicológicas y sociales de personas de todas las edades.La musicoterapia mejora la calidad de vida de las personas sanasy cubre las necesidades de niños y adultos con discapacidades oenfermedades. Sus intervenciones pueden diseñarse para mejorarel bienestar, controlar el estrés, disminuir el dolor, expresar senti-mientos, potenciar la memoria, mejorar la comunicación y facili-tar la rehabilitación física».

Otras interesantes definiciones que podemos encontrar en lasobras de diversos autores son las siguientes:

«La musicoterapia es una especialidad orientada a la aperturade los canales de comunicación por medio del sonido, la música, elgesto, el movimiento, el silencio, en un contexto no-verbal de la te-rapia, situando estas técnicas en relación al contexto verbal» (Mut-ti, 1998).

insoportable. Necesitamos de una cierta dosis de sonidos paranuestro equilibrio físico y psíquico».

No estamos preparados ni diseñados para vivir en completosilencio. El ser humano siempre ha vivido en un entorno de vibra-ciones, con un sistema de percepción capaz de percibir «sonidos».Posiblemente, para adaptarnos a una vida en constante silencio,deberíamos sufrir un proceso de evolución de cientos o miles deaños. Aun así, creo que podría llegar a ser excesivamente monó-tono y aburrido, ¿no te parece?

112 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 20: Sonido, musica y espiritualidad

Como ya hemos dicho en el capítulo anterior, el cerebro res-ponde a los estímulos musicales mediante cambios bioquímicos ypsicofisiológicos. En función de cómo sean dichos estímulos y enbase a nuestras experiencias personales (culturales, formativas, ex-pectativas), respondemos con emociones que, actuando sobre elsistema nervioso central, llegan a afectar a todo nuestro ser (porejemplo, un aumento de la segregación de neurotransmisores, ode endorfinas, que incrementan nuestra «energía» y nos produ-cen un gran bienestar). Las emociones actúan como catalizadoresde los efectos, y éste es, según los expertos, el principal fundamen-to de la base terapéutica de la musicoterapia.

La aplicación terapéutica de la música tiene una larga historia,pues prácticamente se inició con la aparición del hombre en el pla-neta. Es conocido que las grandes culturas ancestrales hacían usode bases rítmicas y sonidos repetitivos como medio para inducirestados de conciencia con fines terapéuticos. En aquellos tiempos,los sonidos y la música tenían un carácter mágico-religioso y se uti-lizaban como una herramienta medicinal.

En la actualidad, la musicoterapia abarca un amplio campo deaplicaciones en relación con diversos trastornos, desequilibrios yenfermedades, dirigidas a personas de todas las edades. Sus efec-tos terapéuticos son el resultado de una aplicación profesional,metodológica o sistemática de la misma.

Existen muchas ventajas en la práctica correcta de esta disci-plina terapéutica. Su aplicación es indolora, con pocas contrain-dicaciones, apenas presenta efectos secundarios y resulta altamenterentable en comparación con otros tratamientos más convencio-nales.

«Cuando los recursos físicos o psíquicos de una persona no lepermiten comunicarse con facilidad ni llevar una vida normal, supapel en su entorno social se ve afectado. Y cuando esta dificultad

LAS TERAPIAS MUSICALES: FUNDAMENTOS 115

«La musicoterapia consiste en la aplicación de sonidos y músi-ca en el desarrollo de una relación entre paciente y terapeuta parafavorecer y posibilitar el bienestar físico, mental y emocional» (Bunt,1994).

Una de las diferencias que he observado en las definiciones an-teriores es la mención explícita del uso de sonidos, además de lamúsica, lo cual no siempre aparece claramente diferenciado. Qui-zás sea una de las causas de que, en la práctica, existan dos disci-plinas paralelas, idénticas en cuanto a los objetivos a conseguirpero diferenciadas en cuanto a su materia «prima» (sonido o mú-sica) y a la metodología aplicada. Son conocidas como musicote-rapia y sonoterapia, y esta última también como vibroacústica, so-nidoterapia o terapia de sonido. Aunque personalmente consideroque la musicoterapia debería abarcar cualquier procedimiento te-rapéutico que utilice la vibración audible, ya sea sonido o música,hay distintas opiniones que consideran como musicoterapia úni-camente aquellas técnicas terapéuticas basadas en «música» (so-nido organizado con ritmo, armonía, pausas...), y remiten a la so-noterapia el uso exclusivo de «sonidos». Existen, sin embargo,otras diferencias cualitativas que ampliaremos y comentaremosmás adelante.

La música es un medio de comunicación que asocia, integra yevoca. A través de ella se establece una conexión con nuestra par-te más interna facilitando que seamos conscientes de lo que sen-timos. Si consideramos la enfermedad o la ausencia de salud comoun bloqueo, una ruptura o una falta de comunicación, la músicapuede ayudar a tender los puentes para que fluya esa comunica-ción que se ha interrumpido y contribuir así al restablecimiento omejora de la salud. Éste es el objetivo de la musicoterapia, disci-plina científica joven y de gran complejidad, dado su objetivo deestudio, que repercute positivamente en nuestra parte física y psí-quica.

114 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 21: Sonido, musica y espiritualidad

de Valium», afirma el doctor Raymond Bahr, director de la unidadcoronaria 2.

Estudios similares, con conclusiones parecidas, han sido efec-tuados en Barcelona (Hospital Universitario de la Mútua de Terra-sa) a cargo del anestesiólogo doctor Pere Berbel.

Uno de los mayores logros de la musicoterapia es la capacidadde evocación de recuerdos a través de las melodías. Por ello es su-mamente útil para estimular recuerdos aparentemente olvidadospor aquellos que padecen pérdida de memoria, como los afecta-dos por la enfermedad de Alzheimer.

«Los beneficios de la música a veces se exageran y otras se nie-gan. Puede ser clave para un espectro de pacientes muy amplio, aque-jados de demencia o Alzheimer, entre otras enfermedades. Lo des-cubrí por primera vez durante el tratamiento de mis pacientes quereflejé en mi libro Despertares, los cuales sólo se liberaban y adqui-rían movilidad cantando y danzando bajo el estímulo de las notasmusicales» (Oliver Sacks, neurólogo).

A grandes rasgos, otros factores en los que se basa la efectividadde la musicoterapia, al margen del emocional, son: el atencional (útilen el tratamiento del autismo y la hiperactividad por déficit atencio-nal), el conductual (la estimulación rítmica se aplica en la mejora deproblemas motores o para facilitar el aprendizaje de nuevas conduc-tas), el comunicativo (facilita competencias de interacción interper-sonal y de cohesión grupal) y el cognitivo (puede favorecer el cam-bio de determinadas cogniciones subjetivas y significados mediantetécnicas de musicoterapia de imaginación guiada) 3.

LAS TERAPIAS MUSICALES: FUNDAMENTOS 117

2 M. Prieto, http://www.sanacenter.com/2009/09/la-entonacion-y-la-musicoterapia.html, 1 de octubre de 2009.

3 M. Moreno y P. Flores, «Música y emoción», en D. Alonso et al. (2008), El cere-bro musical, Universidad de Almería.

es grave, su personalidad queda con muy poca capacidad de ex-presión. Sin embargo, cualquier sonido o movimiento que puedaproducir puede convertirse en protagonista musical. De allí sur-gen diálogos, aparecen chistes y florecen las ganas de disfrutar yde experimentar. En este contexto, donde la música aporta alegríay capacidad donde hace falta, es un privilegio ser musicoterapeu-ta» (Catherine Clancy, musicoterapeuta especialista en parálisis ce-rebral).

En España existen referencias de sus primeras aplicacionesdurante los años veinte, en algunos sanatorios psiquiátricos deMadrid, pues en su inicio se aplicó a determinados tratamientospsíquicos. Sin embargo, fue a partir de los años setenta cuandoempezó a extenderse gradualmente por todo el país, ampliándo-se los horizontes y ámbitos de sus aplicaciones hasta abarcar losactuales (educación, geriatría o salud mental, entre otros).

Hoy día comienza a ser frecuente la presencia de la musicote-rapia en clínicas, hospitales y centros de salud donde los musico-terapeutas colaboran junto a los profesionales médicos en diver-sos tratamientos para una amplia gama de enfermedades. Porejemplo, en disfunciones neurológicas, mentales y cerebrovascu-lares, en trastornos de comunicación, autismo, hiperactividad yproblemas de aprendizaje, en estados depresivos y de ansiedad,como herramienta de mejora para el estrés y el dolor, para el tra-tamiento de problemas emocionales y discapacidades motrices,así como en neonatología y oncología, entre otras 1.

En el Hospital Saint Agnes de Baltimore, los enfermos de la uni-dad de cuidados intensivos escuchan música clásica. «Media horade música clásica ha producido el mismo efecto que diez miligramos

116 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

1 Una descripción más detallada de la musicoterapia y sus efectos puede consultar-se en mi obra Música y neurociencia: la musicoterapia. Sus fundamentos, efectos y aplica-ciones terapeúticas (UOC, 2008).

Page 22: Sonido, musica y espiritualidad

bienestar de los pacientes. La mu-

sicoterapia ha cuajado bastante

últimamente en hospitales pediá-

tricos y geriáticos como trata-

miento coadyuvante a la terapéu-

tica», dice Francisco Ruza, jefe del

Servicio de Cuidados Intensivos

Pediátricos y Urgencias del Hos-

pital Infantil de La Paz, en cuyo

servicio se ha implantado esta téc-

nica y se han realizado varios es-

tudios para demostrar si efectiva-

mente produce beneficios en la

salud y mejora la situación de los

pacientes.

Uno de los trabajos realizados

en La Paz, y tema de una tesis

doctoral recién presentada en la

Universidad Autónoma de Ma-

drid, ha analizado la aplicación de

la música en lactantes entre 0 y 6

meses ingresados en cuidados in-

tensivos por patologías muy gra-

ves. «Los resultados demuestran

que sí mejora la situación de los

niños, ya que se registró una me-

jora de la frecuencia cardiaca y de

la frecuencia respiratoria, e inclu-

so de la saturación de oxígeno,

que se incrementa. Hay una serie

de parámetros objetivos y unos

test de confort que se aplican en

la unidad de cuidados intensivos

que demuestran que los pacien-

tes se encontraban mejor y más

relajados. Por tanto, es una tera-

péutica útil y que puede ser coad-

yuvante de las terapéuticas están-

dar», concluye Ruza.

En función del estado de áni-

mo del niño se le aplicaban tera-

péuticas musicales tranquilizantes,

con una música suave y pausada

destinada a reducir su grado de

irritabilidad, o por el contrario si

estaban deprimidos se le ponía

una música estimulante para ani-

marle y mejorar las ganas de vivir

y de colaborar. La música también

se ha implantado en los servicios

pediátricos de oncología, tras-

plantes, hemodiálisis y hemato-

oncología, y ha comenzado a apli-

carse en adultos con problemas

neurológicos.

Otras aplicaciones

Según Hernáez, los efectos

son multidimensionales: «Sus be-

neficios físicos pueden dirigirse a

pacientes que necesitan realizar

una rehabilitación física, que pa-

decen dolor crónico o traumas fí-

sicos. La música puede ayudar des-

LAS TERAPIAS MUSICALES: FUNDAMENTOS 119

Existen muchísimos estudios e investigaciones que avalan yconstatan los resultados beneficiosos de la musicoterapia, que esreconocida y aceptada como disciplina terapéutica por la comu-nidad científica.

En rehabilitación de pacientes que han perdido la capacidadde hablar (afasia de Broca) por una lesión de determinadas zonasdel hemisferio izquierdo (lóbulo frontal), se les ayuda con terapiamelódica entonacional a readquirir de nuevo el lenguaje a travésdel canto, aumentando así la participación del hemisferio dere-cho en el habla 4.

118 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

4 J. Ramos, «El cerebro y la música», http://www.avizora.com/publicaciones/musi-ca/textos/0029_cerebro_musica.htm, 29 de abril de 2008 (consultado el 8 de mayo de2010).

La música sumada a la terapia

mejora el confort del paciente

La musicoterapia como coadyu-

vante de las terapias médicas ayu-

da a mejorar el estado del pacien-

te, su confort y la calidad de vida,

e influye en su rehabilitación, se-

gún explican Francisco Ruza, del

Hospital La Paz, y Miguel Hernáez,

musicoterapeuta.

La musicoterapia utiliza las pie-

zas musicales para conseguir dife-

rentes resultados terapéuticos en

los ámbitos psicológico, físico,

emocional, social y cognitivo. Se

trata, por tanto, de conseguir que

la música tenga una aplicación te-

rapéutica aunque no curativa, se-

gún explica Miguel Hernáez, musi-

coterapeuta, a propósito de su

conferencia «La música como tera-

pia medicinal», como primera po-

nencia del ciclo cultural El Arte de

la Medicina, que comenzó ayer en

el Colegio de Médicos de La Rioja.

«Es una herramienta más que

colabora a mejorar el estado de

Page 23: Sonido, musica y espiritualidad

central, de tal manera que si se quiere comprender la forma en quela música actúa sobre el ser humano, es importante conocer cuálesson los mecanismos psicofisiológicos que subyacen a su percepción,reconocimiento e interpretación. En realidad, pues, todas aquellasdisciplinas relacionadas con el conocimiento del ser humano seríanlas aconsejables para la formación de un buen especialista.

El musicoterapeuta tiene una gran responsabilidad, pues comoprofesional de la salud se relaciona y trata con el ser humano, entodos sus niveles o dimensiones. Es importante que posea sensi-bilidad, que sea respetuoso y muestre una buena disposición, ac-titud e intención en todos sus actos. Pensemos que los instrumen-tos musicales y las distintas técnicas que utiliza son un «medio»,un vehículo por el que se canaliza la comunicación verbal y no ver-bal en toda su amplitud y contenido.

Como en todo proceso de relación humana, y especialmenterelevante en el campo de la salud, es necesario que exista una bue-na dosis de confianza entre el profesional y su paciente, ya que éstaactúa como fuerza dinamizadora de cambio facilitando y contri-buyendo positivamente a una mejora del proceso terapéutico.

Según relata Boyce, citando a Condon (1980), «el establecimien-to de la comunicación entre terapeuta y paciente es esencial para laeficacia de la terapia. Esto se consigue gracias al proceso de sincro-nización interactiva, característico de la comunicación humana engeneral. Puesto que el ritmo es la forma en que se organiza esta sin-cronía, la música juega un papel muy importante».

En su aplicación terapéutica, un sonido, una canción o una me-lodía pueden producir distintas respuestas: motriz (bailar), emotiva(llorar), física u orgánica (relajación), de comunicación verbal o noverbal (grito, gesto) o de conducta (aprendizaje). Todas ellas se inte-rrelacionan y es función del musicoterapeuta activar todas o cadauna de ellas para obtener en cada caso la respuesta deseada.

LAS TERAPIAS MUSICALES: FUNDAMENTOS 121

inhibiendo a la persona para que

trabaje mejor con su cuerpo y se

sienta mejor o realizando determi-

nados ejercicios y movimientos».

En función del tipo de músi-

ca, los pacientes experimentan un

aumento o reducción de la respi-

ración, del pulso, de las ondas ce-

rebrales y de la actividad muscu-

lar. Por otro lado, «con pacientes

autistas se consiguen grandes

progresos en la comunicación ver-

bal y no verbal y en el comporta-

miento; en hiperactividad se con-

sigue que los pacientes canalicen

la energía y las emociones. Salen

relajados de las sesiones y se en-

cuentran mejor. En el aspecto

cognitivo, en pacientes con Alz-

heimer ayuda a trabajar la memo-

ria y mejora la comunicación».

Muchos servicios hospitalarios

ya utilizan la musicoterapia para

la rehabilitación o terapia de sus

pacientes, como el Hospital de

Día del Servicio de Geriatría del

Hospital Clínico (ver DM 5-II-

2009), mientras que en el Hospi-

tal General de Valencia se aplica

unida a psicoterapia y a ejercicios

de relajación para ayudar a los pa-

cientes con enfermedad inflama-

toria intestinal a canalizar sus

emociones, a mejorar su calidad

de vida y a asumir su patología.

I. GALLARDO, Diario Médico,

http://www.ericlegras.word-

press.com/2009/09/22/la-musica-su-

mada-a-la-terapia-mejora-el-confort-

del-paciente/,

22 de septiembre de 2009

120 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

El musicoterapeuta

Es el profesional especializado en la aplicación terapéutica de lamúsica, por lo que debe estar formado adecuadamente en las dis-tintas disciplinas objeto de su ámbito de actuación. Son imprescin-dibles conocimientos musicales (instrumentos, voz), de psicología,y considero muy convenientes nociones básicas sobre determina-dos aspectos médicos. No olvidemos que el procesamiento de lamúsica y sus efectos dependen de la actividad del sistema nervioso

Page 24: Sonido, musica y espiritualidad

4E L S E R H U M A N O

Y L A E S P I R I T U A L I D A D

La música es el principal medio para despertar

el alma, no existe nada mejor. La música es

el camino más corto y más directo hacia Dios.

HAZRAT INAYAT

EXISTEN MUCHAS definiciones acerca de qué es la espirituali-dad. Etimológicamente, la palabra proviene de la raíz latina

spiritus, que significa «aliento», en referencia al aliento de la vida.Koening et al. (2001), en su libro Handbook of Religion and Health, definen la espiritualidad como «la búsqueda de lo sagra-do y lo divino a través de cualquier experiencia de la vida», es de-cir, la habilidad de encontrar lo sagrado en lo ordinario, y tambiéncomo «la búsqueda personal para encontrar respuestas a pregun-tas esenciales de la vida acerca del significado y relaciones con losagrado y trascendente».

En términos más prácticos y cotidianos podemos interpretarla espiritualidad como el sentido que damos a las cosas. Es lo quenos ayuda a valorar lo esencial que une a las personas, más allá desus diferencias. La espiritualidad es la manera como la gente en-tiende y vive su vida, en la búsqueda de su significado y valor, in-cluyendo un estado de paz y armonía. Así, cualquier actividad po-demos contemplarla como tal, sin más, o por el contrario, formandoparte de algo más grandioso.

Page 25: Sonido, musica y espiritualidad

turaleza. Los nativos americanos, por ejemplo, manifiestan su es-piritualidad con un profundo respeto hacia la naturaleza, hacia lamadre Tierra y a todo lo que ha sido creado. Para ellos todo es sa-grado —según palabras de Mónica Ferrer-Vidal, arqueóloga y pin-tora—, pues consideran que las cosas, los animales y las personasestán relacionados o conectados física y espiritualmente.

Lo que parece que está claro —afirma el neurocientífico espa-ñol Francisco Rubia— es nuestra tendencia genética a la espiri-tualidad. La sensación de trascendencia y de unicidad es inheren-te al ser humano. En cada uno de nosotros, cualquiera que seanuestra denominación confesional (ateo, cristiano, musulmán, bu-dista…), existe el potencial de acceder a niveles más evoluciona-dos o elevados de la conciencia espiritual.

Eso sí, alcanzar esos estados requiere un proceso que cada cualinicia cuando «siente» esa necesidad de búsqueda, de introspec-ción hacia su dimensión más sutil y desconocida. Es un itinerariono exento de dificultades que habrá que sortear a medida que nosafianzamos en las distintas etapas del recorrido hasta alcanzar, silo conseguimos, al destino final. La espiritualidad es un caminoque, como tantos otros, se hace andando..., palabras que recuer-dan el famoso poema de Antonio Machado, tantas veces citadopor Joan Manuel Serrat en sus conciertos («Caminante no hay ca-mino, se hace camino al andar...). Pero es así. Se necesita volun-tad, constancia, altruismo, sacrificio, desapego y otras muchas vir-tudes para avanzar paso tras paso, sin desistir en el empeño. Es unproceso largo que requiere de toda una vida para la mayoría de losmortales.

Según M.ª Àngels Arnau, terapeuta holística, «podemos hablarde trascendencia o espiritualidad cuando se produce una vivenciainterior difícil de expresar con palabras. Los rituales y la música sonlas herramientas que mejor pueden expresar los aspectos espiritua-

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 135

Según Xavier Jauset, sacerdote, doctor en derecho canónico yrector de la Parroquia del Pilar de Lleida, la espiritualidad podríaentenderse, de forma generalizada, como una actitud frente a la vidaque le da sentido y unifica la propia existencia. De forma similar, elpadre Laurence Freeman, monje benedictino, define la espirituali-dad como «una manera de vivir con el corazón abierto las veinticua-tro horas del día»1.

Si bien muchas personas creen que para ser «espiritual» hayque ser religioso, no es realmente así. No hay que confundir am-bos términos. La religión es un fenómeno social pero la espiritua-lidad es una actitud individual. La espiritualidad puede existir sinreligión, pues no es patrimonio de ésta, pero la religión no puedeexistir sin espiritualidad. Un ateo puede ser espiritual y un monjefranciscano es espiritual, pues la religión implica, de facto, la es-piritualidad. Sin embargo, para ser espiritual no se requiere seguiruna determinada religión, ni tener ciertas creencias, ni tener un«maestro», ni ser fanático de alguna idea en particular, ni tan si-quiera formar parte de un grupo místico o de una asociación eso-térica.

«No hace falta tener fe en un Dios para participar de lo sobre-natural. La mayoría de la gente, según multitud de encuestas efec-tuadas, cree en algo indemostrable, ya sean ateos o no», apunta Bru-ce Hood, psicólogo de la universidad de Bristol.

Los seres humanos tenemos una predisposición universal alaprendizaje del lenguaje, de la música y de la religión, estando con-dicionada por el lugar de nacimiento, por nuestro entorno y pornuestra cultura. No cabe duda de que el hombre es religioso por na-

134 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

1 http://susanatopasso.blogspot.com/2010/01/una-charla-con-el-padre-laurence.html (consultado el 6 de enero de 2010).

Page 26: Sonido, musica y espiritualidad

Tal como afirma Crandall (2003) en su obra Musicoterapia, la au-totransformación por medio de la música, «esa conciencia nos hace atodos iguales, sin jerarquías terrenales: no existen intérpretes ni oyen-tes, sólo una música que une las divinidades de ambos; tampoco exis-ten maestros ni estudiantes, sino el intercambio de conocimientosentre dos alumnos, profesor y estudiante. Es un ideal a alcanzar queva en contra de nuestro propio ego y uno de los pasos en nuestraevolución y crecimiento espiritual».

En aquellas ocasiones que me he planteado las típicas pregun-tas existenciales de qué hacemos aquí y qué hay más allá de estemundo terrenal, preguntas que nos unen a todos (porque todosnos las hacemos) pero cuyas respuestas nos separan, me cuestio-no: ¿cómo es posible que después de miles de años de existenciadel ser humano, con tantos profetas, sabios, eruditos y científicosque han habitado este planeta, no haya una única respuesta? Qui-zás porque no exista una única respuesta sino muchas, y todasellas con su parte de verdad. Creo que cada uno de nosotros tie-ne su propia respuesta y ésa es la única que nos sirve. Si estamosconvencidos de ella, si realmente la creemos, si tenemos fe, ésa esnuestra verdad, la que nos ayudará a seguir y avanzar día a día,sorteando todas las dificultades que aparecen y que, en definiti-va, forman parte del itinerario de nuestra vida.

Existen otros caminos que el método hipotético-deductivopara llegar a la verdad, y posiblemente una prospección hacianuestro interior podría explicarnos muchas cosas. Quizás por ello,Raimon Panikkar, metafísico y teólogo, reivindica los tres ojos delconocimiento, el sensorial, el racional y el místico, para obteneruna visión completa de lo real 2.

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 137

2 J. Pigem, La Vanguardia, Cultura, p. 3, 5 de noviembre de 2008.

les, ya que conectan directamente con la vivencia y transmiten la in-formación despertándola y no explicándola. En este tipo de expe-riencias la mente lógica queda en un plano secundario».

Hay precisos instantes en nuestras vidas, durante la juventud,en la madurez o por periodos de crisis personales, en los que re-flexionamos acerca del sentido de la vida. Necesitamos tener lasensación de que hay alguna dimensión adicional, ese espacio so-brenatural, algo que trasciende y va más allá de la razón y que endefinitiva lo hace todo más humano. Nos preguntamos, ¡cómono!, sobre la existencia de Dios, si ésta es externa y cómo pode-mos llegar a Él.

A veces, es mejor esperar que buscar. Es lo que decía Krishna-murti, tal como cita Riso (2008) en su libro Pensar bien, sentirse bien:«… para encontrar a Dios no hay que salir a buscarlo, más bien hayque esperarlo: dejar la casa en orden (mente), abrir las puertas y ven-tanas (sentidos limpios y sin distorsiones), y entonces, sólo enton-ces, si somos afortunados, lo otro, lo sagrado, hará su aparición».

Pero quizás este Ser Supremo se encuentra más cerca de lo quecreemos, y está en cada uno de nosotros. Recordemos aquella fa-mosa frase de Jesús: «El Reino de Dios está dentro de vosotros», obien observemos cómo determinadas filosofías propician la bús-queda y el crecimiento interior para encontrar ese origen común,nexo de unión de todos los mortales. Si reconocemos humildemen-te esa posibilidad, nos facilitará que aceptemos también la parte di-vina que existe en todas y cada una de las personas. Eso nos harámejores, aumentando nuestra propia responsabilidad y la que te-nemos con los demás. De alguna forma, esto es lo que expresan de-terminadas protocolarias fórmulas de cortesía: Shalom, saludo ju-dío que puede traducirse como «el Dios que hay en mí saluda alDios que hay en ti», y el famoso Namasté de los hindúes, con el quereconocen el Buda que subyace en todos y cada uno de nosotros.

136 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 27: Sonido, musica y espiritualidad

Creador alcancen un nivel mucho más elevado al que hubieran lle-gado por sí solas las palabras por sublimes que sean».

La música y la vida espiritual van juntas, se complementan. A través de la música, podemos profundizar en nosotros mismos,en la búsqueda del autoconocimiento y de la verdad, pues ésta tie-ne su origen en nuestro interior. La música favorece que se alcan-ce un estado de mente y espíritu superior al normal, por eso se hadefinido, también, como «el lenguaje del alma». Quizás fuera estasensación la que tuvo el pianista y compositor alemán Robert Schu-mann cuando expresó que «la música es el lenguaje que me per-mite comunicarme con el más allá».

Nicholas Wade, periodista científico del New York Times y delas revistas Nature y Science, en su obra The Faith Instinct relataque las primeras manifestaciones religiosas del Homo sapiens se evi-dencian en los hallazgos arqueológicos que datan de hace 50.000años. De ellos puede desprenderse que a través de la música y la dan-za expresaban su religiosidad. Eran, sin duda, instrumentos paraafianzar una necesaria cohesión entre las distintas comunidades decazadores y recolectoras que les permitía enfrentarse a las amenazasexternas y, en definitiva, les ayudaba en su necesidad prioritaria, lasupervivencia.

La música, según expone Storr (2007) en su obra La música yla mente, «siempre expresa algo que trasciende lo personal por-que depende de un proceso de ordenación interna que es, en granparte, inconsciente y que, por tanto, no ha sido dispuesto de for-ma deliberada por el compositor».

«Los armónicos de todos los sonidos musicales progresan des-de el mundo físico al espiritual. Por ello la música generalmente siem-pre forma parte de los servicios religiosos. Sea un mantra hindú, la

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 139

SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

El sonido y la música, desde los tiempos más remotos, han sidomecanismos o instrumentos comunes a todas las religiones quehan facilitado, a través de ceremonias y rituales, la intensificaciónde la comunión del creyente con el poder divino, sin importar conqué nombre lo definamos.

Ninguna cultura de nuestro mundo puede negar la divini-dad de la música. Los cantos, rezos y plegarias, junto con la mú-sica instrumental, constituyen ingredientes comunes integradosen cualquier sistema de creencia espiritual y mística. ¿Acaso nonos hemos dado cuenta de que se canta rezando y se reza can-tando?

La constitución «Sacrosanctum Concilium» del Concilio Vati-cano II cita los siguientes párrafos con relación a la sagrada liturgia,según expone el sacerdote Xavier Jauset: «La tradición musical dela Iglesia universal constituye un tesoro de valor inestimable, que so-bresale entre las demás expresiones artísticas, principalmente por-que el canto sagrado, unido a las palabras, constituye una parte ne-cesaria e integral de la liturgia solemne. En efecto –continúa el textoconciliar—, el canto sagrado ha sido ensalzado por la Sagrada Escri-tura, como por los Santos Padres, los Romanos Pontífices, los cua-les, en los últimos tiempos, empezando por San Pío X, han expues-to con mayor precisión la función ministerial de la música sacra enel servicio divino». A su vez, el Catecismo de la Iglesia Católica, ci-tando este texto conciliar, realza el sentido de la música: «El cantoy la música cumplen su función de signos de una manera tanto mássignificativa cuanto más estrechamente estén vinculados a la acción li-túrgica según tres criterios principales: la belleza expresiva de la ora-ción, la participación unánime de la asamblea en los momentos pre-vistos y el carácter solemne de la celebración. Participan así de lafinalidad de las palabras y de las acciones litúrgicas: la gloria de Diosy la santificación de los fieles. Los cantos y la música son, concluye,como la lanzadera que hace que las manifestaciones de amor al

138 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 28: Sonido, musica y espiritualidad

da que los seres humanos. Balducci estaba tan convencido que in-vitó a la Iglesia católica a reflexionar sobre la cuestión.

Es indudable que existen muchas incógnitas que difícilmentela ciencia podrá explicar. Tal como hemos citado, hay científicosque defienden que Dios no existe como algo externo e indepen-diente de nosotros, sino que es producto de una percepción inhe-rente, quizás la manifestación de una adaptación evolutiva queexiste exclusivamente dentro del cerebro humano. Para otros,como el neurocientífico Mario Beauregard, de la Universidad deMontreal, se trata de un Ser Supremo que nos proveyó de una es-pecie de «antena receptora» en el cerebro para captar su presen-cia. ¿La existencia de Dios es el resultado de una percepción ce-rebral? Lo que sí puede constatarse es que determinadas conductasasociadas a la espiritualidad, como la oración, la meditación, elyoga o los cantos, nos hacen evocar percepciones y sensaciones in-terpretadas, por la mayoría de los integrantes de todas las cultu-ras, como la evidencia de una realidad divina, espiritual y trascen-dental 19.

Cantos suaves y repetitivos, melodías litúrgicas y oraciones ri-tuales susurradas actúan activando el hipocampo y bloqueandoel tráfico neuronal, es decir, limitando la información sensorial, aciertas áreas del cerebro, como la relacionada con la orientación.Ello provoca que el cerebro pierda su capacidad de reconocerdónde termina el cuerpo y dónde empieza el mundo exterior,abriendo la puerta a estados de «unidad absoluta», que es el ob-jetivo de los rituales religiosos y místicos.

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 153

19 F. Ostrosky y V. Guerrero, «¿Existe una inteligencia espiritual?», http://www.cnnexpansion.com/actualidad/2009/12/14/iq-de-la-fe, 2 de enero de 2010.

Espiritualidad y ciencia no deberían ir por caminos distintos.Max Born (1882-1970), premio Nobel de Física por sus investiga-ciones en torno a la mecánica cuántica, afirmaba que «sólo la gen-te boba dice que el estudio de la ciencia lleva al ateísmo». Un re-paso por la historia nos recuerda que han existido grandescientíficos que han hecho compatible la ciencia con sus creenciasreligiosas. Podemos citar, entre otros, a los físicos Faraday, Max-well, Compton, Oersted, Heisenberg y Einstein, a quien se le atri-buyen las siguientes frases:

«La emoción más hermosa y profunda que podemos experimen-tar es la sensación de lo místico. Es la fuente de toda ciencia verda-dera».

«Hay dos maneras de vivir una vida. La primera es pensar quenada es un milagro. La segunda es pensar que todo es un milagro.De lo que estoy seguro es de que Dios existe».

Ramentol (2004), en su obra Déu és raonable. La ciència con-tra les religions? [Dios es razonable. ¿La ciencia contra las religio-nes?], recuerda que «el obispo de Birmingham Ernesto WilliamBarnes, doctor en ciencias, miembro de la Royal Society y un buenmatemático, creía que una Mente Universal (Dios) habita en lamateria del universo y que había creado el cosmos con la inten-ción de hacer evolucionar la consciencia y proporcionar bondady belleza. Nadie debería temer a la ciencia —escribía en el año1933— porque la ciencia conduce a Dios».

Con referencia a la posibilidad de la existencia de otros esta-dos de inteligencia de mayor evolución espiritual que la nuestra,teólogos de reputado prestigio como Corrado Balducci, expertoen ángeles y demonios y exorcista de la diócesis de Roma (falleci-do en 2008), han defendido la posibilidad de que existiera vidaextraterrestre inteligente, quizás espiritualmente más evoluciona-

152 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

Page 29: Sonido, musica y espiritualidad

o desmentir la existencia de Dios a partir del estudio del cerebro dealguien. Una correlación neurológica no es equivalente a la causali-dad o última explicación. Cada pensamiento que tenemos, inclusolos pensamientos científicos, tienen sus estados cerebrales mensura-bles. Podemos estudiar el cerebro de un físico mientras trabaja conecuaciones utilizando el escáner SPECT. Aprenderíamos muchas co-sas interesantes sobre el cerebro de esa persona, tal vez generaliza-bles a todos los físicos, quizá a todas las ecuaciones, pero no apren-deríamos nada sobre la verdad o no de la física.

Pero, como dice el filósofo budista Alan Wallace en su libro TheTaboo of Subjectivity, aún no entendemos la mente: “A pesar de si-glos de investigación científica y filosófica en la naturaleza de la men-te, en el presente no existe una tecnología que pueda detectar la pre-sencia o ausencia de ningún tipo de conciencia, porque los científicosincluso desconocen qué ha de ser medido exactamente. Más concre-tamente: en el presente no existe ninguna evidencia científica ni si-quiera de la existencia de la conciencia. Todas las evidencias direc-tas consisten en testimonios no científicos, en primera persona, sobreel ser consciente”.

Los testimonios en primera persona no cuentan como evidenciapara la ciencia. Se necesita la correlación y la corroboración por partede otra evidencia. No se le puede dar crédito al “yo”. Quizá debamosrepensar la ciencia, y con ella la neurociencia, desde el principio.»

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 155

Transcribo a continuación un extracto de un interesante ar-tículo en el que se comentan algunos problemas y limitaciones re-lacionados con los estudios neurocientíficos y la espiritualidad 20:

«William Grassie alude a diversos problemas inherentes a los es-tudios neurocientíficos sobre los fenómenos religiosos y espiritua-les. Ante todo, cita, la religión es una experiencia neurocognosciti-va compleja que incluye rituales, grupos sociales y otras dimensionesque no pueden ser fácilmente reproducidas en laboratorios o aislar-se en las mentes humanas. Tampoco está claro que todas las expe-riencias religiosas sean comparables desde el punto de vista neuro-nal (no son lo mismo el estudio del Talmud que las prácticascontemplativas budistas o que las autoflagelaciones cristianas). Por eso, la ciencia necesariamente intenta simplificar estas experien-cias para poder realizar investigaciones manejables. La mayoría delos estudios de neuroimagen se centran en las prácticas meditativaso contemplativas, simplemente porque sería difícil estudiar cualquierotro aspecto en el departamento de radiología de un hospital.

Una taxonomía completa de la experiencia religiosa debiera serdesarrollada, detallada y relacionada con diferentes estados del ce-rebro: las experiencias interpretativas (circunstancias religiosamen-te significativas, como la sincronicidad o la buena o mala suerte), lasexperiencias casi-sensoriales (visión o escucha de la divinidad); ex-periencias de revelaciones, experiencias regenerativas (curaciones ocatarsis); experiencias éticas y morales, experiencias estéticas, expe-riencias luminosas y experiencias de unidad (pérdida de distinciónentre uno mismo y lo que le rodea).

Otro problema en el estudio neurocientífico de los fenómenosreligiosos y espirituales es la tendencia a extraer conclusiones onto-lógicas de estas investigaciones, normalmente bien para validar obien para desmentir alguna doctrina religiosa. Nadie puede probar

154 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD

20 «La neurociencia puede contribuir a la comprensión de la espiritualidad huma-na», Global Spiral, revista editada por el Instituto Metanexus y publicada en www.ten-dencias21.net, traducida del inglés por Yaiza Martínez, 22 de febrero de 2008 (consul-tado el 16 de enero de 2010).

01/Sep/06

¿El cerebro se comunica con Dios?

Científicos canadiensesestudian si existe una zonaespecífica en el cerebro paracomunicarse con Dios.

(BBC Mundo) – Un equipo de la

Universidad de Montreal encon-

tró que las experiencias místicas

cristianas son mediadas por varias

regiones cerebrales.

Según informó la publicación

científica Neuroscience Letters, los

investigadores le pidieron a quince

monjas, de entre 23 y 64 años, que

les contaran sus experiencias reli-

giosas mientras las pacientes eran

sujeto de estudio a través de escá-

neres de resonancia magnética.

Page 30: Sonido, musica y espiritualidad

SALUD Y ESPIRITUALIDAD

¿Afectan las prácticas espirituales a la salud física? Esta cues-tión ha sido evitada durante mucho tiempo por la medicina occi-dental, pero los descubrimientos en los últimos años evidencianque la religión y la fe pueden promover una buena salud y ayudana combatir la enfermedad (Koenig et al., 2001).

Algunas investigaciones empíricas demuestran dichos efec-tos beneficiosos, especialmente sobre el sistema nervioso y elsistema inmunológico 21. El bienestar que producen es debido alas creencias religiosas o bien porque se acrecienta la espiritua-lidad a través de la práctica de la meditación o determinadasdisciplinas orientales como el yoga, el Tai-chi y el Qi gong, en-tre otras.

Diversos estudios indican la posible influencia de las oracio-nes en enfermos que, sin que éstos lo supieran, les dedicaban otraspersonas:

En el hospital general de San Francisco se obtuvo una mejoríamayor en un grupo de pacientes que recibía oración exterior, ade-más del tratamiento convencional, en relación a un grupo controlque sólo recibía tratamiento convencional. El grupo de personas queno sabía que estaban orando por ellos presentó menos fallos conges-tivos, menos paros cardíacos y una mortalidad significativamentemenor que el grupo control 22.

Un estudio, también citado por Navas (2006), indica que en unensayo clínico doble ciego aleatorio se estudió la influencia de la ora-ción en el éxito de la fertilización in vitro. El grupo de parejas que

EL SER HUMANO Y LA ESPIRITUALIDAD 157

21 Jeffrey Levin, epidemiólogo de la Eastern Virginia School of Medicine, citado enC. Navas y H. Villegas (2006).

22 El estudio duró diez meses y está citado en R. C. Byrd (1988), «Positive therapeu-tic effects of intercessory prayer ina a coronay care unit poplation», Southern MedicalJournal 81 (7), pp. 826-829.

Se dice que las monjas expe-

rimentaron la noción cristiana del

acto místico de unión con Dios

cuando tenían entre 20 y 29 años.

Cómo el cerebro reacciona

mientras el ser humano se conec-

ta con Dios es un tema que ha sido

objeto de debate entre los segui-

dores religiosos. Algunas personas

incluso habían sugerido que había

una región específica en el cere-

bro designada para comunicarse

con Dios. Sin embargo, los inves-

tigadores sostienen que este estu-

dio desacredita esas teorías.

Los investigadores encontra-

ron que mientras las religiosas les

contaban sus experiencias se re-

gistró un incremento en la activi-

dad de al menos 12 regiones del

cerebro, entre ellas áreas normal-

mente involucradas en el registro

de las emociones y la consciencia.

Experiencias

El jefe de la investigación, el

doctor Mario Beauregard, indicó

que «la principal meta del estudio

fue identificar las correlaciones neu-

rales de una experiencia mística».

«En vez de encontrar una zona

en el cerebro para comunicarse

con Dios, que se relaciona con ex-

periencias místicas, encontramos

que hay varias áreas cerebrales in-

volucradas», dijo.

«El hallazgo no disminuye el

significado y el valor de esas ex-

periencias ni tampoco confirma o

descarta la existencia de Dios».

Stephen Wang, padre católi-

co que enseña en el Seminario

Allen Hall de Londres, señaló que

«esos estudios del cerebro nos

brindan un entendimiento fasci-

nante en torno a cómo el cuerpo

humano, la mente y el espíritu se

interconectan, pero no deben ha-

cernos pensar que las oraciones

y la experiencia religiosa son sólo

una actividad cerebral».

«Es cierto que el misticismo

cristiano es un encuentro con

Dios. Nos encontramos con él en

las profundidades de nuestra

alma».

«Es una experiencia que va

más allá de los límites normales

de la psicología humana y de la

consciencia», concluyó.

Aportado por

EDUARDO J. CARLETTI

156 SONIDO, MÚSICA Y ESPIRITUALIDAD