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SER LO QUE SOMOS

Conociendo y manifestando nuestro verdadero Ser

GILBERTO GONZÁLEZ ARANGO

PRÓLOGO DEL DOCTOR CARLOS CUELLAR CUBIDES

TODOS SOMOS UNO Y LO MISMO

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SER LO QUE SOMOS Conociendo y manifestando nuestro verdadero Ser Primera edición: Abril de 2009. © Gilberto González Arango, 2009. © Diseño de la portada: Jaqueline Díaz Martínez. © Foto de la portada: Linamaría Aristizabal González. Con el valioso apoyo de: Farmacia Homeopática Quanta. Cra. 13 No. 94 - 44. Tel: 6169393 – 6230184/83. www.homeopatiaquanta.com Bogotá, Colombia. Impreso en Bogotá, Colombia. GENTE NUEVA EDITORIAL PBX: 3202188 ISBN: 978-958-44-4933-7 Este libro es para el beneficio de la humanidad. Por lo tanto, puede ser traducido, reseñado y reproducido total o parcialmente, por cualquier medio, con el permiso previo del autor.

AMA A TODOS. SIRVE A TODOS

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INDICE OFRECIMIENTO

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AGRADECIMIENTOS

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PRÓLOGO

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ANTES DE COMENZAR

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I. INTRODUCCIÓN

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II. ALGUNOS APUNTES SOBRE LA VISIÓN DEL SER HUMANO DESDE LA PSICOLOGÍA TRANSPERSONAL

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III. ¿QUÉ SOMOS EN REALIDAD?

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a. ¿Somos el cuerpo?

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b. ¿Somos las emociones?

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c. ¿Somos la mente?

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d. ¿Somos la personalidad?

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e. Entonces ¿qué somos en realidad?

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f. Siendo lo que realmente somos.

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g. ¿Qué nos aleja de lo que somos en realidad?

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h.¿Son importantes el cuerpo, las emociones, los pensamientos y la personalidad?

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IV. LA RELACIÓN CON EL PROPIO ORGANISMO

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a. Sugerencias para relacionarse con el cuerpo.

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b. Sugerencias para relacionarse con las emociones.

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c. Sugerencias para relacionarse con la mente.

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d. Sugerencias para relacionarse con la personalidad.

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V. CUATRO CAMINOS PARA SER LO QUE SOMOS

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a. Servicio desinteresado.

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b. Devoción.

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c. Sabiduría.

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d. Amor.

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BIBLIOGRAFÍA Y REFERENCIAS

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ANEXOS

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1. Breve reseña del maestro espiritual Sathya Sai Baba.

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2. Frases de Sathya Sai Baba para la vida.

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3. Jesús también nos habló de la unidad con la Divinidad.

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4. Meditaciones guiadas del CD.

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OFRECIMIENTO Ofrezco este libro a la Divinidad que está en todas partes, que todo lo sabe, que todo lo puede, de la cual todos somos Sus instrumentos y que realmente es nuestra verdadera identidad. Especialmente, ofrezco y entrego este trabajo a una manifestación verdaderamente especial de la Divinidad: Bhagaván Sri Sathya Sai Baba, el purna avatar

1 de esta era de

la humanidad, quien con Su vida y Su mensaje está transformando la vida de millones de seres humanos hacia la práctica de los valores humanos y la espiritualidad. Doy las gracias a la Divinidad y le pido que todos los seres del universo seamos eternamente felices, amorosos y vivamos plenamente conscientes de lo que somos en realidad, a partir de ahora y por siempre. Y así es!!!

1 Purna Avatar: Encarnación de la Divinidad en forma humana con todos sus

atributos.


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AGRADECIMIENTOS Agradezco inmensamente a todas las personas que directa e indirectamente han contribuido para que este libro sea una realidad y pueda llegar a muchos para su beneficio y elevación espiritual. Inicialmente agradezco a mis padres por darme la vida y la formación personal, a mi esposa Beatriz por su infinito amor, comprensión y apoyo, y a nuestro hijo Jose Daniel por ser un gran maestro para nosotros. Agradezco a Carlos Cuellar por su excelente prólogo y la revisión del libro. Igualmente a Ana Milena Acosta, Elsa Lucía Arango y todo el Comité de Publicaciones de la Organización Sri Sathya Sai, por sus orientaciones y sugerencias con respecto al texto. A Juan Ospina y Sylvia Botero por el gran apoyo para su publicación, a Jaqueline Díaz por el hermoso diseño de la portada y el CD, y a mi prima Linamaría Aristizabal por la foto de la misma. También siento mucha gratitud hacia SASANA (Asociación de Humanismo Transpersonal) con todos sus profesores y hacia la Organización Sri Sathya Sai Baba por todo su aporte en mi formación en psicología transpersonal y en espiritualidad. Por último, agradezco nuevamente a mi amado maestro Sathya Sai Baba por TODO!


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PRÓLOGO

El ser humano busca una razón para vivir y tal vez la motivación más generalizada de la humanidad está en buscar la felicidad. Pasamos mucho tiempo ensayando todo tipo de experiencias, lo hacemos a través de los sentidos, de la búsqueda de poder, de la acumulación de objetos o relaciones, o creando muros para tener seguridad, hasta quedar exhaustos y reconocer que, en cada caso, después de alcanzar placeres momentáneos, solo queda un enorme vacío. Y seguimos lejos de la paz mental. Entonces seguimos nuestro camino, con la certeza de tener que hacer un cambio y allí empieza la búsqueda de algo que nos asegure un bienestar más permanente. El primer paso es entender quiénes somos realmente, para qué vivimos y a través de esto concluir cómo debemos vivir. Son muchas las preguntas que pueden surgir cuando uno está realmente interesado en entender el sentido de nuestra existencia. En este libro se hace un recorrido desde lo más superficial hasta lo más profundo para lograr llegar no sólo a la claridad conceptual, sino a experimentar cada uno de los puntos expuestos. El niño pequeño, inocente y espontáneo, probablemente está en unión directa con Dios y con su divinidad interior. Con el tiempo, a medida que entra en contacto con el medio, se da cuenta de la necesidad de protegerse y desarrolla un reconocimiento de su ser por un lado y de todo lo que lo rodea afuera. Descubre el cuerpo, las emociones, los sentidos, su mente y los pensamientos; y se identifica con ellos, considerando que él es estos. Así llegamos todos a ser adultos, dominados por todo aquello con lo que nos identificamos. Desde la niñez nos entregamos a las costumbres que encontramos en la familia y la sociedad que nos rodea, a las que vamos esforzándonos por adaptarnos, hasta que de


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alguna manera encajamos en el sistema y jugamos el juego que está planteado, sin cuestionarnos si es correcto o no, sólo para ser aceptados. Entregados a la vida occidental, donde el ideal es crear un fortín económico y de poder; una vida llena de afanes, de obligaciones: de “tengo que”, “me toca”; en busca de éxito. Donde la competencia es muy grande, el precio es muy alto y la satisfacción ínfima, sólo para terminar dejándonos muchos sinsabores. Todo esto nos mantiene ocupados hasta los últimos días (atrapados en el rol). Y defendemos contra viento y marea nuestra condición. Cualquier crítica nos despierta agresión desproporcionada. Y como se expresa en el libro: “nos identificamos tanto con los roles que desempeñamos, que pensamos que eso es lo que nos define, nuestra identidad; rico o pobre, director, profesor, madre, enfermo, etc”; y peor aún, con nuestra actitud a la vida: “no sirvo para nada”, “no entiendo”, “eso es para los grandes”, “tengo que demostrar lo mejor de mi”, “tengo que aparecer agradable” o lo contrario: “pertenezco a una familia importante”, “yo soy de los mejores”, etc. Vivimos atrapados en la prisión de nuestros pensamientos y conceptos. Es decir, nos auto-engañamos y permanentemente reforzamos esta ilusión. Creemos que somos individuos autónomos, separados e independientes, que llevamos a cabo las acciones por nuestra cuenta. Identificados con el cuerpo y esclavos de los sentidos. Derrochando el tiempo en la vana persecución de placeres efímeros. De unas décadas para acá, viene rondando con entusiasmo en el ambiente, la cultura oriental, la cual despierta enorme curiosidad por sus diferencias abismales. Nos llega y se acoge de ésta, la meditación, la relajación y el yoga, que dan un respiro de tranquilidad a la agitada vida de negocios. También nos plantea que todo es Dios. Llegar a conceptualizar esto para los occidentales es difícil por haber sido criados en una idea de un Dios lejano, ajeno, observador, que a veces juzga y castiga. Este documento nos lleva a revisar esta nueva interpretación (para nosotros) de la espiritualidad.


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Esa larga historia de hombres santos dedicados a la vida espiritual sincera, sus formas de vida y sus peculiaridades, nos llenan de curiosidad y le dan sentido a muchos absurdos de nuestro estilo de vida (competir, acumular, aparentar), al ver la otra cara de la moneda, el plano espiritual, la realidad que nos constituye: “somos seres espirituales teniendo una experiencia humana”. La vida del ser humano es la combinación del cuerpo, la mente y el Alma. El cuerpo lleva a cabo acciones, la mente indaga y el Alma se mantiene como testigo. Una personalidad que mantiene coherencia entre lo que piensa, lo que dice y lo que hace, es el vehículo ideal para que la propia esencia pueda expresarse plenamente: la realización del verdadero ser humano. Darse cuenta que el ego (la percepción de individualidad y separación) es una ilusión, es la Verdad más profunda. Y cuando se logra cierta muerte del ego o yo, y se identifica con el si-mismo transpersonal, se pone en movimiento la liberación interior. Se dice que trascender el ego o lograr la iluminación es el objetivo más importante de nuestro desarrollo espiritual: entendiendo que todo lo que tiene nombre y forma es transitorio, por lo tanto no es la Verdad y no será nunca la fuente de la cual podremos derivar satisfacción permanente. De esta manera, reconoceremos que no hay alguien superior o inferior, mejor o peor, ni más o menos importante. En esta búsqueda es útil conocer cómo funciona la mente, una herramienta maravillosa, que tiende a dispersarse y agitarse, causando que las emociones y los sentimientos surjan y cambien constantemente, y así obstaculiza el contacto con nuestro verdadero Ser. La mente se dedica a entender las cosas encasillándolas para compararlas con otros conceptos y poder sacar una conclusión, esto la hace muy limitada. Debemos trascenderla para sentir y experimentar lo infinito. Por esto, gran parte de lo expresado aquí genera conflicto con lo establecido en la lógica mental. Esta obra es un completo manual para conocernos y trascender, transformando la manera en que hasta el momento nos hemos concebido a nosotros mismos, a los demás y al mundo que nos rodea. Con un interesante y llamativo título


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como: SER LO QUE SOMOS, de forma progresiva y clara nos hace la invitación, para explorar y entender profundos planteamientos y el significado de lo que SOMOS EN REALIDAD. Reconociendo nuestro verdadero Ser, que no sufre alteraciones a pesar de los cambios del cuerpo, de las emociones, de los pensamientos que vienen y van, ni de las transformaciones de la personalidad, que se manifiesta en el mundo concreto y material; pero lo trasciende. Su autor, Gilberto González Arango, ha recorrido a conciencia este camino. Para ayudarnos trae un método fácil de entender, que nos permite experimentar directamente a través de ejercicios sencillos, lo que sabios y santos en la antigüedad lograron descubrir tras años dedicados a prácticas rigurosas. Desde la psicoterapia transpersonal, nos guía por el mundo del pensamiento y la estructuración de la personalidad para reconocer el valor de ir más allá y entrar en una transformación interior, un proceso para reaprender. Gilberto ha profundizado en las enseñanzas del gran maestro espiritual de la India Sathya Sai Baba. Aquí nos comparte sus conclusiones, expuestas en una forma ordenada y extensa. Un maestro cuyas palabras y acciones están marcadas por la sabiduría, el amor y el servicio desinteresado, para elevar la consciencia del ser humano hacia la plena expresión de su verdadera naturaleza. Sathya Sai Baba basa sus enseñanzas en los Vedas, probablemente las escrituras sagradas más antiguas recopiladas sobre la tierra. Él mismo ha dicho: “Mi vida es mi mensaje” y prueba de ello son las numerosas obras sociales y macro proyectos que siguen siendo realizados bajo su inspiración, en muchos países del mundo. Jesús mencionó: “el reino de Dios está dentro de vosotros.” Y la mayoría de las religiones coinciden. El camino de la Sabiduría consiste en ser consciente permanentemente de quién o qué es uno realmente. Espiritualidad es la decidida búsqueda de la conciencia que llena el universo. Significa librarse de la propia naturaleza animal y manifestar las virtudes de nuestro interior. De lo contrario permanecemos desconectados del tesoro más valioso: el amor y la paz interiores. La vida diaria en el colegio, la casa, el sitio de trabajo y la sociedad serán los campos de entrenamiento; y al final sólo


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importará: ¡cuánto amor compartimos con toda la creación en cada momento de la vida! Entender el valor de trascender lo mundano, permite concebir historias como la vida de San Francisco de Asís, quien deja todas las riquezas y comodidades mundanas para dedicarse de lleno a la vida espiritual. Solo entonces llegaremos a preguntarnos: ¿no es increíble que hayamos estado “auto-engañados” por tanto tiempo? Con el fin de “ser lo que somos” plenamente, Sathya Sai Baba nos señala los senderos espirituales que permiten contactar y manifestar nuestra esencia: “nunca lastimen y siempre ayuden”, “estén en el mundo, pero no sean del mundo.” Una sugerencia: Leer poco, reflexionar mucho y practicarlo. Haga uso de su propio discernimiento para determinar qué es lo que debe tomar para su propio proceso. Los resultados no siempre serán inmediatos, con seguridad logrará avances si usted desarrolla un verdadero interés y lo acompaña de paciencia y constancia. Este es un momento ideal para enfrentar el reto de conocernos interiormente, Sai Baba es el maestro adecuado para encontrar el camino y esta recopilación es suficiente material para lograrlo. Buen viaje. Carlos Cuellar Cubides


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ANTES DE COMENZAR… Quiero comentarle que este libro busca ser sencillo y conciso. Las ideas que se plantean son profundas; pero se han tratado de expresar de la manera más clara posible, sin recurrir a muchas elaboraciones intelectuales. Los planteamientos de este libro provienen de siglos atrás, y han sido transmitidos por grandes seres humanos que se dieron a la tarea de resolver los enigmas más profundos acerca de la naturaleza del ser humano, no sólo mediante el ejercicio intelectual sino también gracias a ciertas prácticas que les permitieron experimentar las respuestas. Lograr comprender la Divinidad que es lo supremo ilimitado, la base y la realidad última de todo, mediante la mente humana, limitada por naturaleza, es un imposible. ¿Cómo puede un instrumento limitado (la mente) abarcar lo ilimitado (Dios)? Lo máximo que podemos hacer es conocer ciertas ideas y conceptos que nos facilitarán recorrer el camino hacia una vivencia más clara de aquello que está más allá de la mente. Por tal razón, lo más importante sobre este conocimiento que va a recibir es que lo lleve a la práctica, y verifique por sí mismo qué tan útil resulta para su bienestar. Para ello, es FUNDAMENTAL que lleve a cabo los ejercicios que se proponen a lo largo del texto. Los temas tratados pueden contribuir al mejoramiento de su calidad de vida siempre y cuando pase de la lectura, a la reflexión y luego a la práctica. Recuerde que más importante que acumular información, es aplicarla en la propia transformación.

“Escuchen atentamente, y reflexionen sobre lo que hayan oído. Pongan en práctica lo que hayan absorbido…Así como preparar comidas deliciosas carece de sentido a menos que se las consuma y


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digiera, es inútil escuchar discursos a menos que pongan en práctica lo que han aprendido. Sólo entonces puede experimentarse la dicha de aprender.” (Sathya Sai Baba –S.S.B.-. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 1 de Julio de 2007)

Encontrará que algunas ideas se mencionan varias veces. Esta repetición es intencional y facilita que su mente grabe y asimile más profundamente algunos conceptos importantes. Asimismo, hallará algunos cuentos de humor distribuidos a lo largo del libro, que le ayudarán a recordar la importancia de mantenerse alegre y evitar tomarse muy en serio las cosas, porque en ese caso se vuelven una obsesión y se pierde la habilidad de ser flexible, fluir con el presente y disfrutar de la cotidianidad. Tenga en cuenta que lo bueno siempre puede mejorar. Entonces, es muy probable que se sienta cómodo con la forma en que vive; pero también es posible que pueda vivirla más plenamente y con mayor sentido. ¡Usted siempre tendrá la posibilidad de elegir algo nuevo! No me resta sino desearle un feliz viaje a través del libro, esperando que sea del mayor provecho para su vida.

¡La Vida es un juego, juégalo!

¡BE HAPPY! Va pasando la primavera y aún no ha caído una sola gota. El líder espiritual del pueblo tiene la idea de convocar a todos a una jornada de oración para pedir la lluvia. Están todos reunidos en la plaza y el líder, compungido, les dice: “¡Hombres de poca fe! Estamos reunidos para rogar que llueva y ninguno de ustedes ha traído el paraguas!”


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I. INTRODUCCIÓN En algún momento de su vida, tal vez se ha preguntado quién es realmente y cuál es la manera de vivir más plenamente. O bien, aunque no se haya hecho estas preguntas, muy seguramente ha estado buscando el sentido de su vida y la forma de vivirla con mayor armonía. Frente a estas necesidades, la gran mayoría de personas busca obtener logros o cosas relacionadas con el ambiente que nos rodea. Por esta razón, hoy en día es muy común que los seres humanos le demos una importancia desmedida al dinero, la belleza, el éxito, la fama, el poder y los objetos, entre otros aspectos. Pero a pesar de que la sociedad actual nos brinda cada vez más todos estos elementos, parece que nuestras vidas se vuelven más conflictivas, aburridas, ansiosas, deprimidas, etc., y la armonía se ve cada vez más lejana. Sin embargo, la respuesta está más cerca de lo que podemos imaginar, está en nosotros o dicho de una manera más exacta: somos nosotros mismos. Aunque muchas personas tienen conocimientos sobre distintos temas, profesiones y oficios; son muy pocas las que se conocen a sí mismas. Con frecuencia nos interesamos primero por saber sobre los demás y el mundo exterior, antes de conocer nuestro verdadero Ser y descubrir el gran potencial que tenemos.

“Hay en el mundo personas con dinero, fuerza física, erudición y virtud. Pero hay pocos que han tomado consciencia de su propio Ser. Si se ignora al Ser ¿de qué sirven todas las otras posesiones, que son temporales y evanescentes? ¿De qué sirve conocer acerca del mundo, si no se conocen a sí mismos? Por eso el Vedanta (Filosofía Védica) es un llamamiento a cada uno para que descubra la verdad sobre sí mismo. El


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conocimiento de sí mismo es la clave de todo conocimiento. Para esto deben buscar a la persona adecuada, que les enseñe la manera de descubrir su propio Ser. Si no están dispuestos a emprender esta auto-indagación, cultiven la fe; si no en Dios, por lo menos la fe en su propio Ser”. (Sathya Sai Baba –S.S.B.-. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Julio de 2006)

En este libro lo invito a descubrirse a si mismo desde una visión profunda y trascendental, mediante la teoría y la práctica, con base en aportes de la Psicología Transpersonal y las enseñanzas del maestro espiritual ecuménico Sathya Sai Baba, quien ha sido la mayor inspiración y guía en mi camino espiritual. Esto no implica que los demás caminos y tradiciones espirituales no sean absolutamente válidos. Es más, las enseñanzas de Sathya Sai Baba no son parte de una religión en particular ni son una nueva religión, sino que constituyen una fuente de enriquecimiento y motivación para cualquier aspirante espiritual.

¡La Vida es un juego, juégalo! ¡BE HAPPY!

El líder espiritual estaba en la ceremonia religiosa, justo antes de hacer la colecta y dice: “Hermanos, tenemos un problema. El tejado del templo está en mal estado y tenemos que arreglarlo. Tengo dos noticias al respecto, una buena y otra mala. ¿Cuál quieren conocer primero?”. - “¡La buena!”, responden todos en coro. “Resulta que tenemos el dinero”, dice el líder. - “¡Qué bien!” Responden todos aliviados. “¿Y cuál es la mala?” - “¡Que está en sus bolsillos!”


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II. ALGUNOS APUNTES SOBRE LA VISIÓN DEL SER HUMANO DESDE LA PSICOLOGÍA TRANSPERSONAL

“Vivimos en un mundo irreal e ilusorio. Pero el principal problema no es que el mundo o que nuestro yo sean ilusorios,

sino que la causa de la ilusión son nuestras ideas sobre la realidad y sobre nosotros mismos.”

Charles Tart

“Somos lo que pensamos. Todo lo que somos surge con nuestros pensamientos.”

Señor Buda

A finales del siglo XIX y principios del XX, la Psicología comenzó a posicionarse en el mundo científico occidental gracias al conductismo, que se enfocó principalmente en el análisis de la conducta de los organismos vivientes. Posteriormente, surgió el psicoanálisis que hizo énfasis en la influencia de los contenidos inconscientes en el psiquismo humano. Más adelante, algunos psicólogos empezaron a mostrar su desencanto con estas fuerzas o corrientes psicológicas porque consideraron que se basaban en modelos reduccionistas y ‘patologizantes’ de la naturaleza humana. Como respuesta a ellos, surgió la psicología humanista, la cual se centró especialmente en la salud y las potencialidades de las personas. Uno de los grandes teóricos de esta corriente humanista fue Abraham Maslow, quien entre otros aportes, realizó un estudio sobre las motivaciones humanas. Las jerarquizó y ubicó en cinco niveles que van desde las necesidades fisiológicas como comer, dormir, reproducirse, etc., pasando por las necesidades de seguridad, integración y autoestima, hasta llegar a las motivaciones de autorrealización, relacionadas con el desarrollo de los propios talentos y el cumplimiento de objetivos vitales personales.


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Más adelante, al estudiar la vida de algunas personas que habían llegado hasta la satisfacción de las necesidades de autorrealización, Maslow encontró que unos de ellos habían tenido “experiencias cumbre” que cambiaron radicalmente la percepción sobre si mismos y el mundo, y los motivaron a buscar un sentido más trascendente para sus vidas. Las “experiencias cumbre” típicas se caracterizan por una sensación de unidad con el entorno, acompañada de un sentimiento de plenitud y de expansión de la propia identidad, más allá de las limitaciones del cuerpo y la mente. Debido a estos hallazgos, Maslow amplió su modelo y postuló una motivación más elevada: la de trascendencia, la cual va más allá de los propios intereses egoicos y se relaciona con la ampliación de la consciencia desde la individualidad hacia la universalidad, junto con el reconocimiento de la conexión con todos los seres; dando lugar a una mayor expresión del amor y el servicio altruista (Descamps, M-A., 1998). Este tipo de experiencias no sólo ha sido una realidad momentánea en la vida de algunas personas sino que también han existido y existen otras personas en las cuales predominan estas vivencias, formando parte de su estado psicológico cotidiano; tal como sucede con ciertos maestros, santos, sabios, etc. Estos “descubrimientos” mostraron que las posibilidades de desarrollo del ser humano eran aún mayores que las que señalaban los otros enfoques psicológicos. Según Gordon Allport “las teorías psicológicas tienen el poder de dignificar o rebajar la naturaleza humana. Ciertas creencias degradan la naturaleza humana mientras que otras la ennoblecen.” (En: Vaughan, 1991, p. 43). Los aportes de Maslow y de otros teóricos, empezaron a mostrar nuevas visiones sobre el ser humano. En palabras de Cox, “Maslow nos abrió una nueva ventana para ver el universo y, al hacerlo, contribuyó a elevarnos como seres humanos, iluminando la naturaleza de nuestro potencial, animándonos a seguir adelante y recordándonos la grandeza que reside en todos y cada uno de nosotros” (En: Rowan, 1996, p. 79).


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De esta manera, empezó a surgir una nueva corriente en la Psicología Occidental, que dio mayor importancia a la dimensión trascendental del ser humano. En su momento Maslow lo expresó de la siguiente manera: “Considero que la psicología humanista, tercera fuerza, es de transición, es una preparación para una cuarta psicología, aún más elevada, transpersonal, transhumana, centrada en el cosmos más que en las necesidades e intereses humanos, yendo más allá de lo humano, de la identidad, de la autorrealización y cosas semejantes.” (En: Descamps, 1998, p. 20). Fue así como, en 1969, se fundó la Asociación de Psicología Transpersonal por parte de Abraham Maslow, Carl Rogers, Viktor Frankl, Anthony Sutich, Ch.Buhler y Stanislav Grof, entre otros. (Descamps, M-A., 1998). Según Roger Walsh, esta Psicología Transpersonal, se caracteriza por una indagación sobre la naturaleza esencial del ser y se puede definir de la siguiente manera: “La psicología transpersonal se interesa por la expansión del campo de la investigación psicológica hasta incluir el estudio de los estados de salud y bienestar psicológicos de nivel óptimo. Reconoce la potencialidad de experimentar una amplia gama de estados de conciencia, en algunos de los cuales la identidad puede ir más allá de los límites habituales del ego y de la personalidad.” (Walsh, 1989, p. 15). La psicóloga Frances Vaughan afirma que “en la psicoterapia transpersonal, los impulsos hacia el crecimiento espiritual son considerados básicos para la completa humanidad. Se asume que, adicionalmente a las necesidades básicas de alimento, refugio, y relaciones, se deben cubrir necesidades más elevadas de auto-realización, para el adecuado funcionamiento en niveles óptimos de salud” (Vaughan, 1980, p. 182). La Psicología Transpersonal no desconoce los aportes de las otras escuelas psicológicas, sino que los integra en una visión más amplia de la naturaleza humana y de sus potencialidades. El teórico Ken Wilber ha preferido hablar de “psicología integral”, para aclarar que esta psicología toma en cuenta no sólo los niveles transpersonales del desarrollo del ser humano, sino también los pre-personales y personales. Es decir, que


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incluye las etapas anteriores a la estructuración del ego, las de consolidación y las de trascendencia del mismo. Desde la Psicología Transpersonal se plantea que lo que comúnmente se considera como normalidad puede ser una forma de desarrollo estancado (Walsh, R., 1998). En este orden de ideas, Vaughan afirma que “desde una perspectiva psicológica, la salud mental depende básicamente de cuestiones relativas a la identidad existencial, el objetivo y el sentido de la vida. Sin embargo, la psicoterapia transpersonal, que amplía el campo de lo psicológico e incluye también las experiencias espirituales, afirma que el arco interno del desarrollo humano sano seguirá permaneciendo incompleto hasta que también se tengan en cuenta las aspiraciones trascendentes del ser humano” (Vaughan, 1991, p. 21). Por lo tanto, el desarrollo pleno implica ir más allá de los límites del ego, o en palabras de Houston Smith: “Los seres humanos estamos hechos para superarnos y sólo somos verdaderamente nosotros mismos cuando nos trascendemos.” (En: Vaughan, 1991, p. 43). Vaughan nos llama la atención sobre las asunciones que ha hecho la psicología occidental, indicando que “aunque durante mucho tiempo se ha considerado que un ego sano y fuerte es el rasgo distintivo de la salud mental, esa condición, por sí sola, es insuficiente. Mejorar la propia imagen y alcanzar metas personales, separadas de las dimensiones profundas del alma, puede hacernos sentir vacíos y abocarnos a la depresión más que a la felicidad.” (Vaughan, F., 1997, p. 59). Para esta autora, la salud psicológica óptima está relacionada con la integración armónica de los niveles de desarrollo físico, emocional, mental, existencial y espiritual; lo cual permite la estructuración saludable del ego y el progreso hacia los niveles transpersonales. “El desarrollo de un ego sano, de un ego seguro y autónomo en el mundo externo, parece ser un paso esencial en el camino que conduce hacia la autorrealización y la totalidad. Un ego sano, en este sentido, debe ser autónomo y capaz de establecer límites y tomar decisiones.” (Vaughan, 1997, p. 58). El objetivo entonces, no sería rechazar o negar el ego (entendido en este contexto como la personalidad), sino estructurarlo, integrarlo y trascenderlo. “En ocasiones, sin embargo, el ego es censurado por aquellos buscadores que


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acaban de descubrir el gozo de la vida espiritual. Pero condenar no es trascender. Trascender no significa rechazar ni eliminar sino incluir en una visión más amplia. Así pues, a falta de un ego lo suficientemente sano y fuerte, una persona puede ser fácil presa de la ilusión y el autoengaño. El ego sólo se convierte en un problema cuando se aliena del mundo del alma e ignora las realidades espirituales.” (Vaughan, 1997, p. 58). De esta manera, el camino de desarrollo espiritual demanda armonizar el mundo del ego con el mundo del alma. “Como ya hemos visto, los deseos del alma son diferentes de los deseos del ego. Mientras que el mundo del ego está dominado por la búsqueda de la excitación, la estimulación y el control; el alma anhela la paz, la alegría y la expresión propia. Podríamos decir que la sociedad contemporánea sufre de una enfermedad del alma, en el sentido de que el bienestar de esta última se sacrifica con demasiada frecuencia a los ideales egoicos del progreso y la ambición.” (Vaughan, 1997, p. 76). El ego se refiere a la imagen de si mismo que cada persona construye de acuerdo a sus roles, conocimientos, intereses, puntos de vista, emociones, cuerpo, etc. En palabras de Ram Dass: “Usted tiene, en este momento, muchas constelaciones de pensamiento, cada una de las cuales compone una identidad: sexual, social, cultural, educacional, económica, intelectual, histórica, filosófica, espiritual, entre otras. Una u otra de estas identidades toma el control según lo demande la situación. Usualmente usted se pierde en esa identidad cuando ella domina sus pensamientos”. (Ram Dass, 1980, p. 138) No sólo construimos nuestras identidades y las enriquecemos constantemente, sino que también nos apegamos a ellas. Ram Dass lo explica con un sencillo ejemplo: “Su ego es un conjunto de pensamientos que definen su universo. Es como un cuarto familiar construido de pensamientos; y usted ve el universo a través de sus ventanas. Usted está seguro en él, hasta el punto que usted teme salir de él y se ha convertido en su prisión. Su ego lo tiene gobernado. Usted cree que necesita sus pensamientos específicos para sobrevivir. El ego lo controla por medio de su miedo a perder la identidad. Pareciera que renunciar a estos pensamientos lo eliminaría, y entonces usted se aferra a ellos.” (Ram Dass, 1980, p. 139). Para este mismo autor, la vía hacia la liberación es a través del desapego de los


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viejos hábitos del ego. Se trata de trascender las viejas estructuras de la personalidad y desarrollar otras cada vez más amplias, sin necesidad de negar las estructuras anteriores. “Hay una alternativa. Usted no necesita destruir el ego para escapar de su tiranía. Usted puede mantener este cuarto familiar para emplearlo como quiera, y usted puede tener la libertad de ir y venir. Primero necesita saber que usted es infinitamente más que el cuarto del ego por medio del cual se define a si mismo. Una vez usted conoce esto, tiene el poder de cambiar el ego de ser una prisión a ser su lugar de base.” (Dass, R., 1980, p. 139). De manera similar, Vaughan postula que “la auténtica trascendencia parece depender de la desidentificación de los conceptos limitados acerca de uno mismo. Cuando una persona se desidentifica del ego, puede llegar a decir: ‘Tengo un ego; pero no soy mi ego’.” (Vaughan, 1997, p. 75). Todo esto puede resultar confuso o atemorizante para muchas personas, acostumbradas a confiar en la imagen que tienen de si mismos y del mundo que las rodea, basada en una visión aparentemente más “concreta y objetiva” obtenida a través de sus sentidos, muy influenciada por los métodos de conocimiento de la ciencia occidental. Precisamente para Charles Tart “la vida moderna se caracteriza por un enfrentamiento esencial entre las visiones religiosas del mundo, que consideran que los humanos somos seres espirituales inmersos en un cosmos dotado de sentido, y la visión científica del mundo, que considera a la materia y a la energía física como la única realidad” (En: Vaughan, 1997, p. 59). Casi todos nos hemos acostumbrado a pensar que lo que nos define y diferencia de las otras personas es, especialmente, nuestra personalidad. De igual manera, en la psicología occidental se le ha dado gran importancia a la personalidad e incluso en algunos enfoques se da a entender que la persona es su personalidad. Pero “desde una perspectiva transpersonal, se le asigna, relativamente, una menor importancia a la personalidad. En cambio, se le ve sólo como un aspecto del ser con el cual el individuo puede, pero no tiene que, identificarse. Se ve la salud relacionada principalmente con el cambio de la identificación exclusiva con la personalidad, más que con la modificación de ésta.” (Walsh & Vaughan, 1980, p. 56). Precisamente para James Fadiman “una asunción


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de la psicología transpersonal es que usted es más que su personalidad. Su personalidad es su sensación de una identidad separada, diferente y única. Sin embargo, su personalidad no es más que una faceta de su self

2– la

identidad total – y quizás no es una faceta central. La misma palabra transpersonal significa a través o más allá de la personalidad. Estar totalmente identificado con la propia personalidad puede evidenciar una psicopatología. Una meta terapéutica es alinear la personalidad entre la totalidad del si mismo para que funcione apropiadamente.” (Fadiman, 1980, p. 177). Según este mismo autor, la personalidad se puede describir como un drama personal, teniendo en cuenta que “los dramas personales son patrones de comportamiento predecibles, repetitivos y complejos… Son lujos innecesarios e interfieren con el funcionamiento completo. Hacen parte de nuestro equipaje emocional. Usualmente, es de gran beneficio para la persona ganar cierto desapego de sus propios dramas, a la vez que aprender a volverse más desapegado de los dramas personales de otros.” (Fadiman, 1980, p. 177). Por su parte, Ken Wilber afirma que cuando la persona se da cuenta que puede observar objetivamente su mente y su cuerpo, puede volverse consciente de que su ser es distinto de éstos. Al tener esta vivencia puede descubrir su realidad esencial y “al reconocer la profundidad de la propia identidad, que va más allá del propio ser individual y separado, la persona puede más fácilmente ir más allá de su propia neurosis individual y separada. Debido a que ella deja de estar identificada exclusivamente con su sensación de ser alguien separada y por lo tanto, ya no está aferrada exclusivamente a sus problemas personales.” (Wilber, 1980, p. 82). La desidentificación del ego es un objetivo superior muy importante para la psicoterapia transpersonal, tal como lo indican Walsh y Vaughan (1980, p. 55): “La perspectiva transpersonal sostiene que la gente está más enredada y atrapada en su condicionamiento de lo que puede apreciar, pero que la liberación de este condicionamiento es posible. El

2 Self: Si mismo. Conjunto de elementos que constituyen la individualidad o

identidad de una persona. Pueden ser conscientes o subconscientes.


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objetivo de la psicoterapia transpersonal es esencialmente la extracción de la conciencia de esta tiranía condicionada de la mente.” Para Vaughan, cuando la persona comienza a desidentificarse del ego y a identificarse con el si mismo transpersonal o el observador de sus propios procesos psicológicos, se avanza en el camino de liberación interior. “La práctica de la desidentificación que nos permite despertar el self transpersonal sólo es adecuada a partir de la identidad egoica. Para ello debemos tomar conciencia de que ‘tenemos pensamientos, sentimientos y sensaciones pero que no somos nuestros pensamientos, nuestros sentimientos ni nuestras sensaciones.’ Cuando somos capaces de diferenciar nuestras emociones, experimentarlas plenamente y desidentificarnos de ellas, podemos operar con ellas del modo adecuado, decidiendo conscientemente expresarlas o suprimirlas, atenderlas o ignorarlas.” (Vaughan, 1991, p. 68). Por lo tanto, cuando la persona se va identificando con su ser transpersonal, puede establecer una distinción entre la conciencia, y los objetos o contenidos de la conciencia. Es decir, que los pensamientos y sentimientos empiezan a ser considerados como contenidos cambiantes y pasajeros de la conciencia en si, la cual permanece siempre pura e inalterable. Cuando esto tiene lugar se avanza hacia la etapa de autotrascendencia, en la cual los melodramas personales disminuyen su importancia (Vaughan, 1989). Todo este proceso de desarrollo y evolución se puede describir de la siguiente manera: “La psicoterapia (transpersonal), en el nivel del ego, puede ser considerada como una etapa de desarrollo relacionada con la identificación. En esta etapa, el consultante probablemente esté interesado en el desarrollo de la fortaleza del ego, la elevación de la auto-estima, y el deshacerse de los patrones negativos de auto-invalidación… Una segunda etapa en el proceso de despertar transpersonal es la de desidentificación. Como mencionaba Assagioli: ‘Somos dominados por todo aquello con lo que nuestro si-mismo se identifica. Podemos dominar y controlar todo aquello de lo cual nos desidentificamos’. Wei Wu Wei dice: ‘Mientras estemos identificados con un objeto hay ataduras’… La resolución de esta etapa en la trascendencia involucra una cierta muerte del ego, que significa una más amplia desidentificación de las


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definiciones internas y externas de uno mismo… Cuando uno comienza a desidentificarse del ego e identificarse con el si-mismo transpersonal o el observador desapegado de los propios procesos psicológicos, se pone en movimiento el proceso de liberación interior.” (Vaughan, 1980, p. 186). Para avanzar en este proceso de desidentificación resulta muy útil darse cuenta de los aspectos de nuestra personalidad que normalmente son automáticos, de los cuales no nos percatamos y que nos pueden estar dominando y controlando sin que lo notemos. Al conjunto de estos elementos inconscientes, muchos de los cuales son contrarios a las cualidades y virtudes que pretendemos expresar en nuestra personalidad, se le conoce como “la sombra”

3. En vez de negar

y reprimir la sombra, se recomienda descubrirla y relacionarse conscientemente con ella para dejar de ser manipulados por ésta. “No debemos ignorar la sombra sino descubrirla y comprenderla como aquella parte de nosotros mismos que todavía no ha sido aceptada e integrada. La sombra es aquella parte del self que hemos rechazado, aquello que nuestra visión todavía no alcanza a percibir.” (Vaughan, 1991, p. 77). Cuando la persona evade la realidad de su sombra y recurre a la espiritualidad como una vía de escape, puede caer en lo que llaman el bypass espiritual, en el cual la teoría y las prácticas espirituales se convierten en una forma de negar los propios conflictos psicológicos (Wellwood, 2002). De lo que se trata entonces, es de abrirse al desarrollo espiritual desde una relación consciente y sana con la personalidad y su sombra. Siguiendo los términos empleados por Vaughan, sería como incursionar en el mundo del alma integrando el mundo del ego, puesto que “el mundo del alma afirma tanto nuestra divinidad como nuestra humanidad y, en este sentido, es más comprehensivo que el mundo del ego. El alma constituye nuestro nexo con el infinito; no es una cosa ni un proceso, sino el testigo interno de toda experiencia.” (Vaughan, 1997, p. 70). La diferencia clave entre estos dos mundos es que en el del ego, el yo se identifica con el cuerpo que sufre cambios y es transitorio, mientras que en el otro, el yo se identifica con el alma que es inmortal y trasciende al

3 Término empleado por el famoso psicólogo analítico Carl G. Jung


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mundo físico. “Este cambio en la identidad es frecuentemente asociado con un cambio en la motivación pasando de la preocupación por si mismo al servicio… Uno tiende a aceptar más todas las experiencias de vida y a desarrollar una mayor tolerancia frente a la paradoja y la ambigüedad… Aunque no hay manera de medir el aumento de la compasión, la generosidad, la paz interior, y la capacidad de amar y relacionarse con el mundo; éstas cualidades tienden a manifestarse como resultado de un trabajo transpersonal.” (Vaughan, 1980, p. 188). Adicionalmente, cuando la persona se siente frustrada con los objetivos del ego, la identificación con el alma puede proporcionar una sensación de renovación y motivación. (Vaughan, 1997). Ampliando aún más esta visión, esta autora indica que “tanto el mundo del ego como el mundo del alma pueden percibirse como existiendo dentro del Yo que es uno con el Espíritu, la Fuente de todo ser.” (Vaughan, 1991, p. 72). Un planteamiento muy similar ha sido presentado desde hace siglos por la llamada sabiduría perenne, que proviene de las grandes tradiciones espirituales, especialmente originadas en la India. “Según la filosofía perenne, los seres humanos formamos parte de una totalidad constituida por la misma substancia del universo, el sustrato del ser. Esta totalidad integral no existe como entidad separada sino que todo existe en su seno. Los distintos lenguajes y las distintas tradiciones religiosas llaman de modo diferente a esta totalidad a la que nosotros llamaremos el Absoluto.” (Vaughan, 1991, p. 14). Asimismo, desde la ciencia se han hecho aseveraciones parecidas, como la expresada por Einstein: “Los seres humanos formamos parte de la totalidad que llamamos ‘Universo’, una parte espacial y temporalmente limitada. Sin embargo, en una especie de ilusión óptica de la conciencia, nos experimentamos a nosotros mismos, a nuestros pensamientos y a nuestros sentimientos como algo separado del resto.” (En: Vaughan, 1991, p. 13). Según Wilber, algunos de los pioneros de la psicología en Occidente como Fechner (1801-1887), William James (1842-1910) y James Mark Baldwin (1861-1934) mantenían buenas relaciones con la filosofía perenne, en “una época durante la cual la conciencia era real, el yo observador interno era real y el alma era real (aunque los pormenores variasen considerablemente en cada caso)”. “Cuando se cuente la


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verdadera historia de esos grandes fundadores de la psicología, descubriremos que tienen mucho que enseñarnos respecto de lo que podría ser una visión integral, que incluya las verdades del cuerpo, la mente, el alma y el espíritu, y no pretenda reducirlas al mero despliegue de materia, bits digitales, procesos empíricos o sistemas objetivos (por más importantes que estos sean). Esos pioneros de la psicología moderna eran científicos sin dejar de ser espirituales y no parecían encontrar la menor contradicción o dificultad en esa generosa manera de abarcar todo.” (Wilber, 2000, p. 15). La espiritualidad ha sido desacreditada y subvalorada por parte de algunas perspectivas psicológicas occidentales; pero la verdad es que en varias culturas de Oriente (y en otras también de Occidente), es una fuente valiosísima de conocimiento para la comprensión de la naturaleza humana, y una guía para el desarrollo de las propias potencialidades y el logro de estados de bienestar y plenitud. Por estos motivos, vale la pena asumir una actitud de mayor apertura frente a lo que estas sabidurías ancestrales nos pueden enseñar, sin dejar de lado los logros alcanzados por nuestras psicologías occidentales. En este contexto, la Psicología Transpersonal se ha ido constituyendo en un puente entre ambos campos del conocimiento y cada día gana más reconocimiento. Precisamente para Fadiman “la Psicología transpersonal es la integración de las comprensiones de las psicologías individualistas de Occidente con las psicologías espirituales de Oriente y Medio Oriente.” (Fadiman, 1980, p. 181). Y en estas “psicologías espirituales” han tenido un papel fundamental algunos maestros o guías espirituales que con sus vivencias, conocimientos y ejemplo han mostrado caminos de evolución para la humanidad. Sus vidas han sido pruebas contundentes de que sí es posible vivir en paz, armonía y unidad consigo mismo y con todos los demás seres. Tomando en cuenta esto, algunas posturas europeas de la psicología transpersonal postulan que “el modelo de lo transpersonal se encuentra en la experiencia de los místicos”. (Descamps, 1998, p. 29). Precisamente, en este libro encontrará algunas enseñanzas y prácticas de crecimiento personal basadas en el mensaje del gran místico y maestro espiritual contemporáneo Sathya Sai


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Baba, que seguramente pueden ser una fuente de inspiración y sabiduría para muchas personas, independientemente de sus creencias o religión. Asimismo, hallará varias referencias a Dios o la Divinidad, que no son sino nombres distintos para lo que los académicos y científicos transpersonales en ocasiones llaman como el Ser Transpersonal, el Testigo, la Conciencia, el Absoluto, el Espíritu, etc.


Un misionero está en plena selva y se encuentra de repente con un león que esta casi muerto de hambre. El misionero se asusta, se pone de rodillas y empieza a rezar: “¡Padre, infunde a este pobre león sentimientos cristianos!” Y de buenas a primeras el león se pone de rodillas, diciendo: “¡Padre, bendice éstos alimentos que voy a recibir!”


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III. ¿QUÉ SOMOS EN REALIDAD?

Seguramente a lo largo de nuestra vida hemos pensado que somos un organismo compuesto de cuerpo, emociones y mente, el cual además tiene una determinada personalidad. En cierta forma se podría decir que así es; pero visto con más detalle y profundidad, podemos llegar a darnos cuenta que somos “algo” distinto de eso. Y ese “algo”, que es nuestra naturaleza, nuestra identidad real, nuestro verdadero Ser, se manifiesta en el mundo concreto y material; pero lo trasciende. A continuación lo invito a entenderlo un poco mejor, paso a paso. IMPORTANTE: Para que asimile algo profundamente es necesario que la teoría se convierta en una vivencia. De lo contrario, la información que recibe difícilmente generará una transformación en usted. Por ello, le recomiendo de manera especial que practique los ejercicios que se presentan, a medida que va avanzando por el libro, para que tenga la experiencia personal de lo que allí se plantea y reúna más elementos de juicio al respecto. Recuerde que una imagen vale más que mil palabras, y una experiencia vale más que mil imágenes. Dicen que el Buda le comentaba a sus discípulos algo similar a esto: “No crean nada de lo que les digo, experiméntenlo por ustedes mismos”.


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a. ¿Somos el cuerpo? Vamos primero a la práctica… EJERCICIO 1: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Observe y sea consciente de todo su cuerpo, desde los pies hasta la cabeza. Para una observación más detallada, toque con sus manos las distintas partes del cuerpo a medida que las mira.

B. Siéntese cómodamente y con la espalda recta, sin tensarla. Cierre los ojos, respire muy lenta y profundamente por la nariz tres veces, para relajarse. Luego, con los ojos cerrados sea consciente de todo su cuerpo de pies a cabeza, muy despacio (músculos, huesos y órganos). Al terminar el recorrido, continúe con los ojos cerrados y sea consciente de todo su cuerpo al mismo tiempo, tanto interna como externamente (la piel), por un tiempo.

C. Después de hacer los ejercicios anteriores conteste: ¿Pudo ser consciente de su cuerpo?

Como seguramente pudo ser consciente de su cuerpo físico, eso quiere decir que usted es diferente de él, porque para hacerse consciente de algo, debe haber un sujeto que conoce o percibe y un objeto que es conocido o percibido. Es decir, debe haber dos, un sujeto y un objeto. En este caso, hay “algo” o “alguien” (usted) que puede tomar consciencia de otra cosa (su cuerpo).

El lenguaje también nos ayuda a aclarar más esta idea. Decimos por ejemplo, “yo cuido mi cuerpo”, “yo siento mi


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cuerpo”, “me duele mi brazo”, “me gusta mi cara”, etc. Todas estas frases implican que uno mismo es distinto del cuerpo, que uno tiene un cuerpo, más no que uno es el cuerpo.

Por otra parte, es claro que el cuerpo que tiene ahora es distinto al que tenía cuando nació. Es un cuerpo con otras células, de otro tamaño, con características distintas (aunque similares) a las del cuerpo que tenía hace varios años. Pero, aunque su cuerpo haya cambiado constantemente, sigue siendo usted mismo(a), o ¿no es así?

Por un momento imagine que le acaban de hacer una cirugía “extrema”, y le cambiaron su cara y el resto de su cuerpo físico (en este momento, cierre los ojos y visualícese con un cuerpo totalmente distinto). Aunque se imagine con otro cuerpo, ¿siente que sigue siendo usted mismo(a)?

La respuesta seguramente será afirmativa, puesto que algo semejante aunque no tan drástico, ya le ha sucedido en su vida; pues su cuerpo físico ha cambiado de bebé a niñ@, a joven, a adulto, etc; pero usted ha seguido siendo “usted mismo(a)”.

b. ¿Somos las emociones?

EJERCICIO 2: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Cierre los ojos, y respire lenta y profundamente por la nariz tres veces, para relajarse. Recuerde una situación en su vida en la cual se sintió muy bien. Cualquier situación que lo


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haya hecho sentir así es válida, no tiene que ser un suceso extraordinario, y puede ser reciente o de tiempo atrás. Vuelva a vivir ese momento mentalmente. Sea consciente de lo que siente y conéctese con eso. Perciba con mucha atención las emociones o sentimientos que se generaron en esa situación.

B. Después de hacer el ejercicio anterior conteste: ¿Pudo ser consciente de sus emociones y sentimientos?

Seguramente sí pudo ser consciente de sus emociones y sentimientos, lo cual indica que usted es distinto de ellos. Siguiendo con el razonamiento anterior, si percibe las emociones es porque usted es diferente de ellas. Las emociones y los sentimientos vienen y van, y hay “algo” o “alguien” que las percibe. Por lo tanto, usted tiene emociones, pero no es las emociones ni los sentimientos.

Las emociones y los sentimientos cambian constantemente, pero seguimos siendo lo mismo, seguimos siendo “aquel” o “aquello” que percibe esas emociones y sentimientos. Las emociones que experimentamos son muchas y muy variadas, pero no dejamos de ser lo que somos a pesar de que en algunos momentos sintamos alegría y en otros momentos tristeza, rabia, amor, felicidad, pena, temor, etc. En el lenguaje cotidiano decimos muy sabiamente: “tengo rabia”, “siento amor”, “me da tristeza”, “estoy con miedo”, etc., lo cual claramente indica que uno tiene, siente o percibe esas emociones; y no que uno es las emociones (¡aunque a veces nos “enganchamos” tanto con ellas que pareciera que nos volvemos uno con la emoción!).

Como se menciona más adelante, el hecho de que no seamos, sino que tengamos emociones y sentimientos, no quiere decir que no sean importantes ni que no debamos prestar atención a la manera como nos relacionamos con ellas.


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c. ¿Somos la mente?


A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Cierre los ojos, visualice los números del 1 al 10 y vaya nombrándolos mentalmente al mismo tiempo.

B. Continúe con los ojos cerrados y visualice algunas figuras geométricas mientras dice el nombre de ellas mentalmente (ej. triángulo, cuadrado, círculo, rectángulo, rombo, etc.).

C. Después de hacer los ejercicios anteriores conteste: ¿Pudo ser consciente de los números y las figuras geométricas?

La mente se compone de pensamientos, los cuales pueden presentarse en imágenes y/o sonidos. En estos ejercicios usted percibió las imágenes de los números y el sonido de los mismos (ej., imagen del número “1” y sonido “uno”). Lo mismo hizo con las figuras geométricas. Entonces, lo que acaba de hacer fue observar sus pensamientos, y por lo tanto, percibir su mente. Como en los casos anteriores, si logró ser consciente de su mente, usted es distinto de ella.

Normalmente, no somos conscientes de muchos pensamientos que vienen y van, pero si afinamos nuestra atención podemos observar la mente funcionando, darnos cuenta de sus imágenes y sonidos. Y como somos capaces de hacer esto, somos distintos de la mente. Tan es así, que existen momentos en que no hay pensamientos, y por lo tanto la mente está inactiva; pero no por eso dejamos de existir. Lo invito a que cierre los ojos y empiece a observar qué pensamientos tiene durante varios segundos.


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Probablemente se dio cuenta que en ciertos momentos muy cortos no hay pensamientos. Igualmente, al dormir profundamente (sin la presencia de los sueños) tampoco hay pensamientos, pero usted continua existiendo.

d. ¿Somos la personalidad?


A. Piense por un momento: Si se lo propone, ¿podría darse cuenta de algunas de sus formas típicas de pensar, sentir y actuar?

B. ¿Tiene la tendencia a pensar, actuar y sentir exactamente de la misma manera a cómo lo hacía cuando tenía 5 o 10 años de edad?

Si lo intenta, muy posiblemente puede darse cuenta de sus maneras típicas de reaccionar mental, emocional y comportamentalmente ante ciertas situaciones que se le presentan en la vida diaria. Eso quiere decir que usted está en condiciones de tomar consciencia de lo que comúnmente se denomina la personalidad. Por lo tanto, como se ha expresado anteriormente, esto implica que usted es distinto de ella, que usted es “algo” que puede ser consciente de otra cosa: de su personalidad. Y no sólo puede darse cuenta de ella, sino que también tiene la posibilidad de hacer algunos cambios en la personalidad, y no por ello dejará de ser usted mismo(a). Con respecto a la segunda pregunta, seguramente ha cambiado su forma típica de pensar, actuar y sentir, en mayor o menor grado, desde su infancia hasta el presente. Es decir, hay aspectos de su personalidad que se han conservado a lo largo


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de su vida, mientras que otros han ido sufriendo ciertas variaciones. Aunque estos cambios de la personalidad se hayan presentado, usted permanece siendo usted mismo(a), usted no es otro(a), en el sentido literal de la palabra. En otras palabras, a pesar de que los cambios hayan sido muy grandes usted no pensará que su esencia ha dejado de ser la misma, sino que ahora piensa, siente y actúa distinto a como lo hacía en el pasado.


Un líder espiritual y un conductor de bus mueren al mismo tiempo. Llegan a las puertas del cielo donde los recibe San Pedro quien inmediatamente permite que entre el conductor a una zona privilegiada mientras que le dice al líder espiritual que tendrá que esperar un buen tiempo antes de entrar. Después de esperar por un largo rato, irritado le pregunta: “San Pedro, ¿por qué pudo el conductor de bus entrar tan rápidamente y a una zona especial, mientras que yo, que toda la vida estuve hablando de Dios, tengo que esperar todo este tiempo?” San Pedro le contesta: “Mientras que tu hablabas de Dios a las personas, todas estaban dormidas, distraídas o aburridas; pero cada vez que este hombre conducía su bus, todas las personas se ponían a orar!”


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e. Entonces ¿qué somos en realidad?


A. Recordando lo que experimentó en los ejercicios del 1 al 4. ¿Se da cuenta que usted puede ser consciente de su cuerpo, de sus emociones, de sus pensamientos y de su personalidad?

Si usted puede ser consciente de estos aspectos es porque hay un “sujeto observador” que puede percibir unos “objetos observados”. Y ¿cómo se puede definir ese “sujeto observador”?, es decir, ¿qué es lo que realmente es usted?, o ¿cuál es su yo real, su verdadera naturaleza e identidad?

La respuesta es: CONCIENCIA… usted es en realidad Conciencia Pura. Es el testigo, el/la observador(a) de su cuerpo, de sus emociones, de su mente y de su personalidad. Todo esto, que puede ser percibido por usted, son aspectos que usted tiene; pero que son diferentes de usted mismo. Mientras que todos esos aspectos (cuerpo, emociones, pensamientos y personalidad) cambian constantemente; usted permanece siendo lo mismo: la Conciencia que percibe todo esto, que se da cuenta de ellos, que permea y activa su organismo humano. Usted es esa Conciencia que no sufre alteraciones a pesar de los cambios del cuerpo, de las distintas emociones, de los pensamientos que vienen y van, y de las transformaciones de su personalidad.

“Todos nuestros sentidos funcionan debido a la Conciencia, que está presente en todos los seres. Sin esa Conciencia el ser humano sería una criatura sin sensaciones ni sentimientos.” (Sathya Sai Baba -S.S.B.- Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Diciembre de 2003)


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“¡Escuchen ustedes, cuya naturaleza verdadera es la misma que la de la Conciencia Suprema! Descubran su Ser genuino, su realidad auténtica. Alcancen el conocimiento de que ustedes son la Conciencia Suprema misma; que sólo esta alegría los transporte; prueben la ilimitada, la incomparable, la concentrada bienaventuranza de estar conscientes del Ser genuino.” (S.S.B en “La Sabiduría de Sai Baba”)

Nuestro verdadero Ser, “Conciencia”, es como la pantalla de cine, la cual a pesar de recibir la proyección de incendios o maremotos, escenas de amor o violencia, acciones de guerra o solidaridad, etc., siempre permanece inalterada, nunca se quema ni se moja, no se altera por las alegrías ni las tristezas que le proyectan. Asimismo, nuestra esencia, lo que somos en realidad, tampoco se afecta por las situaciones que vivimos en la cotidianidad. El que sí se afecta es nuestro organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad; que sufre cambios y alteraciones. Pero nosotros somos el “testigo” del organismo, y éste último es un “vehículo” o un “instrumento” a través del cual nos manifestamos.

“Recuerda, tú no eres este cuerpo; este cuerpo no puedes ser tú. Tú eres Eso. Eres la Conciencia Suprema. Esta es la enseñanza más excelsa y más sagrada. Eres la indestructible Conciencia Suprema.” (S.S.B en “La Sabiduría de Sai Baba”) “El cuerpo, la mente, el intelecto y los sentidos son meros instrumentos. Entonces surge la pregunta: ‘¿Quién eres tú?’ La respuesta es: ‘eres el amo que hace uso de estos instrumentos.’ ¿Cuando dices ‘mi mente, mi cuerpo, mis sentidos’, preguntas quién soy? Dices ‘este es mi cuerpo, esta es mi mente, etc.,’ lo que implica que eres diferente a ellos; no obstante, te identificas con el cuerpo y te haces esclavo de los sentidos, en lugar de ser su amo. Eres el Amo Supremo. Tienes el potencial de advertir esto a través de la capacidad de discernimiento del intelecto.” (S.S.B.


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Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Abril de 2006)

Esto es algo bastante importante, muy profundo, que nos indica que realmente somos algo distinto a lo que la mayoría de nosotros siempre hemos creído ser! ¿No es increíble que hayamos estado “despistados” y “auto-engañados” por tanto tiempo? Pues, no es tan asombroso que esto nos haya sucedido, puesto que lo más “natural” es que así haya sido, ya que nuestro verdadero ser (Conciencia), al manifestarse en un organismo humano, se hace consciente del mismo y se considera uno con él, se identifica automáticamente con él. Entonces creemos que somos ese organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad, porque esa es nuestra percepción más directa, nuestra vivencia más constante. Pero, al identificarnos con el organismo, sufrimos fácilmente por lo que a éste le suceda. Por ejemplo, al identificarnos con el cuerpo, podemos sufrir si otras personas (o uno mismo) no lo consideran atractivo; o si tenemos alguna emoción intensa, podemos llegar a hacernos uno con ella y dejarnos arrastrar por la misma; o si sostenemos pensamientos incómodos, podemos darles tanto poder que nos hacen sentir deprimidos o preocupados; o si no nos gustan ciertos aspectos de nuestra personalidad, podemos llegar a pensar que no somos valiosos, etc. Sólo por mencionar unos ejemplos sencillos. Al respecto Swami Sathya Sai Baba nos dice…

“Ser, Conciencia, Bienaventuranza es la naturaleza misma del ser humano. Pero éste ha olvidado su verdadera naturaleza y está derrochando su tiempo en la vana persecución de placeres efímeros. No es capaz de percibir el valor de su naturaleza innata. Una vez que comprende su valor y lo experimenta, puede alcanzar un estado de gran elevación... La principal obligación del ser humano, por lo tanto, es entender su verdadera naturaleza y ponerla en práctica.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 16 de Octubre de 2006)


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Está Jesucristo dando un sermón a sus discípulos y dice: ‘Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra’. De repente sale una mujer del público y tira una gran piedra, a lo que él responde: “¡Oye mamá!, ¿por qué siempre me tienes que estar estropeando los sermones?”

f. Siendo lo que realmente somos.

“El cuerpo está hecho de los cinco elementos y está sujeto a perecer tarde o temprano. Pero en tan transitorio cuerpo existe la eterna Divinidad, bajo la forma del Espíritu (el propio Ser). La Divinidad que todo lo impregna es conocida como la Conciencia. Una forma limitada de la cual existe en el cuerpo es el ‘estar consciente’. La Conciencia y el ‘estar consciente’ son iguales cualitativamente, sólo difieren en cantidad. Se puede recoger agua del mar en una taza, en una olla o en un gran tanque. El agua en los recipientes difiere sólo en cantidad; la salinidad es la misma en todos ellos. El cuerpo se puede comparar con una olla. En ella, la Conciencia que lo impregna todo, existe como el ‘estar consciente’.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 Octubre de 2006)


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A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Cierre los ojos y empiece a ser muy consciente de su respiración por la nariz. Perciba como entra y sale el aire por las fosas nasales a un ritmo natural. Permanezca muy atento haciendo este ejercicio, por unos 30 segundos como mínimo.

B. Continuando con los ojos cerrados, sea consciente de todo lo que escucha en el entorno, segundo tras segundo, sin interpretar los sonidos, sólo percibiéndolos, como una grabadora que registra sin analizar ni pensar. Escuche los sonidos lejanos y los cercanos, los fuertes y los suaves. Permanezca muy concentrado haciendo este ejercicio, por unos 30 segundos como mínimo.

C. ¿Pudo enfocar toda su atención a su respiración? y ¿a los sonidos? (Si no fue así, por favor vuelva a intentarlo).

D. ¿Cómo se sintió? ¿Estuvo ansioso o deprimido? ¿Tuvo más o menos pensamientos?

Si realmente dirigió toda su atención a la respiración y a lo que escuchaba, su mente pudo haber tenido pocos pensamientos y usted seguramente experimentó momentos de calma y tranquilidad. Esto se debe a que al dedicarse exclusivamente a ser consciente de la respiración y de los sonidos, usted puede aquietar su mente y sus emociones por momentos y ser lo que realmente es (Conciencia Pura). Al hacerlo, puede sentir la Paz que caracteriza su verdadero Ser, esa paz interior que tanto han mencionado maestros, místicos y religiones, que no es más que su verdadera naturaleza, su estado real y permanente. Entonces, su Ser, además de tener la característica de ser Conciencia, tiene como estado natural un sentimiento de Paz o Bienaventuranza. Desafortunadamente, la mente tiende a dispersarse y agitarse, generando que las emociones y los sentimientos surjan y


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cambien constantemente, obstaculizando el contacto con nuestro verdadero Ser: Conciencia, Paz, Bienaventuranza.

“La Paz es la más valiosa posesión del ser humano”. (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”)

“La naturaleza de la Paz es en verdad la del ser humano.” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”) “¿Cómo podrían conferirles la paz eterna los objetos efímeros? Todo lo que es visto está destinado a perecer. Los objetos transitorios no pueden darles una felicidad perdurable. Vemos variados objetos en este mundo y nos engañamos creyendo que son permanentes. Es una grave equivocación. Hasta nuestro cuerpo es visto con los ojos, por ende, tampoco es permanente. Es señal de ignorancia el que uno se identifique con el cuerpo. Por Eras el ser humano ha estado bajo la engañosa ilusión de que los objetos físicos y efímeros le darán felicidad. La verdadera felicidad resulta cuando el ser humano reconoce al eterno principio del Atma

4 que le subyace a este mundo

efímero.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Enero 2007) “Desean la dicha, la ventura. Más, ¿de dónde la consiguen? ¿De una tienda en el mercado? ¿O gozando de una suntuosa comida con una variedad de platillos, en un hotel? ¡No, en absoluto! La dicha ha de provenir desde adentro. Ustedes son de hecho, una personificación de la dicha. Eran dichosos en el momento de nacer. Más, una vez que comenzaron a desarrollar apego con el mundo, empezaron a llorar.” (S.S.B. Discurso del 28 de Julio de 2007)

Lo(a) invito a hacer otro experimento…

4 Atma: Sinónimo de Alma. También se encuentra como Atman.


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A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Esta vez con los ojos abiertos. Sin inclinar la cabeza, dirija la mirada al frente y sea consciente de todo lo que observa, de todo lo que se encuentra en su campo visual: adelante, arriba, abajo y a los lados, sin mover los ojos, ni la cabeza. Evite interpretar o nombrar lo que ve, simplemente sea consciente de todo lo que observa segundo tras segundo. Permanezca muy atento haciendo este ejercicio, por unos 30 segundos aproximadamente.

B. Continúe haciendo lo mismo y, adicionalmente, sea conciente de todo lo que escucha como lo hizo en un ejercicio anterior, sin analizar ni pensar sobre los sonidos que percibe. Permanezca haciendo este ejercicio por unos 30 segundos aproximadamente.

C. ¿Cómo se sintió? ¿Tuvo muchos pensamientos?

Al hacer estos ejercicios seguramente volvió a aquietarse, y nuevamente pudo contactar su verdadero ser: Conciencia, Paz. Cuando la mente y las emociones están en calma, además de percibir su paz, puede experimentar un Silencio interior que es característico de su esencia. El “ruido” que aparentemente también existe en su interior, proviene de su mente y no de su verdadero Ser, el cual es simplemente el “testigo” de la mente. Si presta mucha atención se dará cuenta que entre cada pensamiento hay silencio, el cual está presente en todo momento, como si fuera un telón de fondo en donde surgen y desaparecen todos los pensamientos y sonidos.

“Quietud y silencio significan la naturaleza de la Conciencia Pura. Aquel que la ha alcanzado se encontrará en la mayor Paz y la mayor Bienaventuranza. La Conciencia Pura es Verdad, Sabiduría y Bienaventuranza”. (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”)


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Como posiblemente también lo pudo sentir, la Conciencia que también es Paz y Silencio, no juzga ni desprecia; tampoco es posesiva ni se compara con otros. Todo lo percibe y nada lo rechaza, y está impregnada de apertura y aceptación. Por lo tanto, es una expresión pura de Amor, es Amor verdadero. Es un Amor que no busca recompensas (desinteresado) ni impone exigencias (incondicional). La Conciencia es Amor puro, amor que es pleno en sí mismo, que no necesita de alguien o algo externo que lo alimente, que se basta a sí mismo y que es permanente. En otras palabras, usted realmente es Amor.

“¿Cómo se expresa este principio del ‘Yo’ en el ser humano? Como Amor. El Amor es la naturaleza básica del ser humano, la que lo sustenta y fortalece su resolución para seguir adelante.” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”) “Ante todo tienen que inquirir sobre su verdadera identidad, que es el amor. El amor está presente en todos los nombres y formas. Es eterno, no dual y lleno de bienaventuranza.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Mayo de 2007)

¿No es increíble que siendo nosotros realmente Paz y Amor, busquemos estas experiencias una y otra vez fuera de nosotros sin intentar primero contactarlas en nuestro verdadero Ser? EJERCICIO 8: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Cierre los ojos, respire por la nariz lenta y profundamente 2 veces (inflando un poco la parte baja del abdomen al inhalar y desinflándola al exhalar). En la tercera oportunidad inhale mucho aire y luego exhale muy fuertemente todo el aire por la boca. Después de esta gran exhalación, deje la cabeza un poco inclinada hacia delante y manténgase sin inhalar ni exhalar por un tiempo, hasta que la respiración regrese espontáneamente.


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Mientras tanto permanezca muy consciente de lo que siente.

B. El ejercicio anterior funciona mejor al practicarlo por segunda vez. Entonces, lo(a) invito a realizarlo de nuevo.

C. ¿Cómo se sintió? ¿Tuvo muchos pensamientos después de la exhalación fuerte?

Con este ejercicio la mente se vacía y es posible percibir por momentos la propia esencia: la Conciencia, y la Paz, el Silencio y el Amor que la caracterizan. Desde hace varios siglos, nuestro verdadero Ser ha recibido muchos nombres, tales como: el Alma, el Atma(n), la Divinidad, Dios, el Ser, la Esencia, el Absoluto, la Fuente, lo Inmutable, lo Infinito, la Verdad Suprema, el Principio Fundamental, la Realidad, el Yo, la Conciencia Búdica, etc. Desde entonces, los grandes sistemas religiosos y maestros espirituales nos han invitado a darnos cuenta de nuestra naturaleza trascendental…

“El Cristianismo dice: ‘El Reino de Dios está dentro de ti’; el Budismo: ‘Mira en tu interior. Tu eres Buda’; el Siddha yoga: ‘Dios mora en tu interior como tú’; el Hinduismo: ‘Atman (la conciencia individual) y Brahman (la conciencia universal) son uno’; el Islam: ‘Quien se conoce a si mismo, conoce a su Señor’.” (Vaughan, F., 1991, p. 63)

“En primer lugar, el ser humano debe esforzarse por entender su propia naturaleza, que es Verdad, Sabiduría e Infinidad. Dios ha obsequiado al ser humano los Vedas y otras escrituras, para que abra los ojos a la verdad de que es esencialmente Divino. En este mundo, cada ser humano está dotado de verdad, rectitud y amor. El ser humano es la encarnación de Sat, Chit y Ananda (Ser - Conciencia - Bienaventuranza). Estos atributos son verdaderamente Divinos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Junio de 2007) “Todos son encarnaciones de Existencia-Conciencia-Bienaventuranza; sólo que no están


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conscientes de ello e imaginan que son un individuo sujeto a limitaciones. Este es el mito que debe ser destruido con el fin de que pueda comenzar la vida Divina. Es lo Divino que inspira, activa y genera realización en la vida de cada ser.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 27 de Febrero de 2006)

“El aceite está presente en la semilla de sésamo. El perfume está latente en cada flor. Toda fruta está saturada de su dulce néctar. En cada pedazo de madera, el fuego está latente. De la misma manera, lo Divino es inmanente en el cosmos entero de una forma sutil como Conciencia. El cosmos es la manifestación visible del Ser Supremo invisible. Lo Divino brilla de forma refulgente en cada ser humano como Sat, Chit, Ananda (Ser – Consciencia - Bienaventuranza).” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 31 de Enero de 2006)

Aunque esta enseñanza pueda parecer nueva para algunos, las grandes tradiciones espirituales de la humanidad han venido transmitiéndola desde hace miles de años. Por ejemplo en el Cristianismo, que es la corriente espiritual más influyente en nuestros países occidentales, se nos ha dicho que el Alma no muere cuando el cuerpo fallece sino que continúa existiendo por toda la eternidad. Con esto nos están indicando que realmente somos el Alma y que el cuerpo no es más que un “vehículo” transitorio a través del cual se manifiesta nuestro verdadero Ser, mientras tenemos la experiencia como seres humanos en este planeta. En los Vedas, las escrituras sagradas más antiguas de la humanidad recopiladas en la India, y que según Swami Sathya Sai Baba no son patrimonio exclusivo de una religión sino que están al servicio de toda la humanidad, al Alma se le denomina “Atma” o “Atman” y se enseña que no tiene nacimiento ni muerte y que nunca sufre cambios ni transformaciones, es decir, que es eterna, inmutable y siempre permanece inalterable.


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En muchos otros sistemas religiosos y espirituales, también se afirma que nuestro verdadero Ser es eterno. Si tomamos en cuenta y creemos en estas enseñanzas, podemos agregarle un atributo más a la definición que hemos venido construyendo acerca de nuestra esencia: la condición de eternidad. Entonces podemos ahora decir que nuestro Ser es Conciencia, Paz, Amor y Silencio Eternos.

“El Ser Divino es eterno. El Ser es la Verdad. Sin embargo, siendo que está encerrado en la carne, piel y huesos, el ser humano se engaña a sí mismo creyendo que la cubierta externa y no el núcleo interno es la fuente de bienaventuranza. El deber más importante del ser humano hacia sí mismo es por lo tanto, penetrar a través de esas cubiertas e imbuirse de la más alta bienaventuranza que sólo su Alma Divina le puede conferir.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 5 de Enero de 2006)


A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Inhale profundamente por la nariz y exhale por la boca todo el aire, en forma de suspiro (“¡Hahhh!”). Hágalo 3 veces. Cierre los ojos y preste atención al color que observa en sus párpados (negro, violeta, rojo con puntitos blancos, etc.). Imagine que todo a su alrededor es espacio, solamente espacio sin objetos. Arriba, abajo, al frente, atrás y a los lados, sólo hay espacio. Y visualice que ese espacio es del color que observa en sus párpados. Sienta que ese espacio es infinito. Ahora visualice ese mismo espacio, con el mismo color, dentro de su cuerpo. Después, sienta que el espacio interno y el externo se funden en uno solo; y que todo es espacio, solo espacio (del mismo color).


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Dese cuenta que ese espacio infinito es diferente de “la nada”, puesto que está lleno de su conciencia y de su paz, es decir, de su verdadero Ser. Permanezca todo el tiempo que pueda sintiendo su presencia en ese espacio, lleno de conciencia y paz. Trate de evitar pensar, solo perciba y sienta, tanto como pueda. Si llegan pensamientos (palabras o imágenes), retome el ejercicio las veces que sea necesario, sin sentirse mal. ¡Disfrútelo!

Si logró percibir la unidad entre el espacio interior y el exterior, entonces pudo tener la vivencia, por unos momentos, de la unidad que hay entre su verdadero Ser y lo que se encuentra más allá de su organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad. ¿Por qué esta unidad? Según los Vedas, se debe a que su Ser y el Ser que está presente en todo lo demás es el mismo, puesto que no hay distinciones ni límites para el Ser. En verdad, no hay separación ni diferencia entre nuestra Conciencia y la Conciencia que está presente en todo el Universo. Por lo tanto, en esencia somos Uno no muchos y no hay más que una sola Conciencia Divina manifestándose a través de distintos seres. La diversidad es aparente, la unidad es la realidad trascendente. Todo lo que tiene nombre y forma es transitorio, sólo la esencia es permanente. Los seres que supuestamente estamos separados, en realidad estamos conectados por la Conciencia omnipresente. En términos védicos, el Atma (el Alma individual) es uno con el Paramatma (el Alma universal). Somos uno con la Divinidad.

“Vuelvan constantemente sus pensamientos a la naturaleza del Atma, la cual es la sustancia de todo lo que existe en el mundo objetivo, la realidad básica tras la apariencia.” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”)

“Al Señor se lo experimenta como Sat – Chit - Ananda (Existencia – Conciencia - Bienaventuranza), que carece de nombre y de forma. Cuando estos tres se asocian con objetos que tiene nombre o forma, tenemos el mundo. El


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cosmos está impregnado por la Divinidad. Aunque no puedas verla, la Divinidad está presente en todo.” (S.S.B. Continuación del mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Diciembre de 2003) “Cada objeto en la creación tiene cinco aspectos, a saber, Sat, Chit, Ananda, Rupa y Nama (Existencia, Conciencia, Bienaventuranza, Forma y Nombre). Los primeros tres son principios eternos, en tanto que nombre y forma son efímeros. Existencia, Conciencia y Bienaventuranza representan la base para nombre y forma. La gente le atribuye varios nombres y formas a Dios con base en sus propios sentimientos. Se olvidan de los tres principios fundamentales y presumen que nombre y forma son la única realidad. En verdad, nombre y forma no son permanentes. Mas la gente se siente arrebatada por el nombre y la forma e ignoran los principios eternos de Sat, Chit y Ananda. Por consiguiente, son engañadas y tienden a olvidar el inmenso poder de Dios tras del nombre y la forma.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Enero de 2007) “La Divinidad es omnipresente. El cosmos entero está impregnado y sustentado por esta energía Divina. Todos deben esforzarse por experimentar la Divinidad. El ser humano debe hacer el esfuerzo y el éxito está asegurado. Debe efectuarse el necesario sacrificio. Hay que renunciar a todas las malas cualidades, en el mismo momento en que invaden la mente. La verdadera devoción significa eliminar todas las tendencias animales que hay en el ser humano. El ser humano debe tratar de percibir a la Divinidad dentro de sí. Ese es el principal propósito de la vida humana.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 de Julio de 2007)

Integrando lo expuesto anteriormente se puede decir que somos Conciencia, Paz, Amor y Silencio Infinitos y Eternos.


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También se podrían encontrar muchos más calificativos para describir el Ser; pero por el momento éstos pocos son útiles para que nuestras mentes asimilen un poco mejor la dimensión de nuestra verdadera naturaleza. Inclusive, yendo un poco más lejos, los Vedas dicen que en un nivel absoluto, el Ser está más allá de todo atributo o cualidad, siendo en sí mismo la fuente de todo lo demás. Ahora bien, si recordamos constantemente lo que somos en verdad y que todos los demás también son eso mismo, muy seguramente nuestra actitud hacia ellos será más respetuosa, porque nos daremos cuenta de la conexión que hay entre todos. Así, podremos llegar a ser conscientes que los demás son otros cuerpos a través de los cuales se manifiesta nuestro propio Ser infinito.

“A aquél que está dedicado a la contemplación del Alma interior y por ende disfruta constantemente de la bienaventuranza del Alma y santifica cada momento de su vida realizando buenas acciones, se le denomina ‘Establecido en la Conciencia de Dios’. El es consciente de que la misma Alma está presente en todos los seres como el Ser Interior y descarta todo pensamiento egoísta. Es un Conocedor de Dios, un alma realizada, quien es consciente de la verdad de que venerar a los demás es venerar al Señor y lastimar a otros es lastimar al Señor. Tales personas irradian Divinidad aunque estén en un cuerpo humano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 de Marzo de 2006)

“El ansia de progresar, de servir, de expandir el propio corazón, de abrazar a toda la humanidad con Amor, ver todo y a todos como formas de la Conciencia Divina, es Amor Verdadero.” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”) “La única forma efectiva de conquistar todas las fuentes de debilidad y enfermedad física y mental, es por la consciencia de la propia Realidad del Alma Divina. Esto traerá el crecimiento del Amor y la Luz, ya que cuando se conoce que uno es el


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Alma Divina, se reconoce la misma Alma Divina en todos. Se comparte la alegría y el dolor de todos, y se comparte la fortaleza y la debilidad de todos. Se ve a Dios en cada uno. Cada acto será una pura, sincera y sagrada ofrenda a Dios. Cuando uno anhela la felicidad y prosperidad de toda la humanidad, es bendecido con la sabiduría y la fortaleza para marcar el camino y conducir a los seres humanos por él.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Enero de 2006) “La Divinidad está presente en el ser humano como la fragancia en la flor, el fuego en la madera y el aceite en la semilla de sésamo, invisible pero latente. Sin tomar consciencia de esta verdad interna, el ser humano se deja llevar por las apariencias externas y considera que son la realidad. Resulta esencial comprender la verdad básica de que Dios está presente en todas las personas. Siendo así, ¿cómo puede beneficiarse si ofrece su adoración a Dios y a la vez inflige dolor a los demás seres humanos?” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Octubre de 2003)

En los Vedas se indica que la Conciencia Divina también se encuentra en los animales, minerales y en todos los seres del universo. Obviamente en cada ser la Conciencia se expresa de forma distinta, de acuerdo a las características de ese organismo. Por ejemplo, en una roca se manifiesta diferente que en un ser humano porque, entre otras cosas, la roca no tiene sistema nervioso como nosotros, no tiene los mismos órganos de los sentidos, ni la capacidad intelectual nuestra, etc.

“El sol que brilla en el cielo se puede ver reflejado en los mares, ríos, lagos y estanques. Aunque los reflejos son muchos, hay un solo sol. La Divinidad está presente en el ser humano como el hilo invisible que mantiene unidas a las gemas de un collar. El cosmos entero está impregnado de la Divinidad y es la manifestación visible de la


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Divinidad. No se puede hallar nada en el mundo, ningún objeto, ningún ser humano, ninguna criatura, en la que Dios no esté presente. Hay un solo Dios, que es Ser-Conciencia-Bienaventuranza.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 30 de Noviembre de 2006) “Sin Dios, no hay universo. Pedir una prueba física para comprobar la existencia de la beatitud o del amor o del perfume de una flor es irrealizable. Negar la realidad del amor basado en que este no tiene una forma reconocible es algo sin sentido. El amor puede no tener forma, pero la madre que exhibe el amor tiene una forma. Todos los seres son manifestaciones del Cósmico Divino. Las formas son diferentes, pero el espíritu que los anima es el mismo, al igual que la corriente que ilumina bombillas de diferentes voltajes y colores. Cultiva este sentimiento de unidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 de Enero de 2007) “Todo lo que ustedes no pueden ver, oír o entender, no puede ser descartado como inexistente. Aún si encienden una poderosa luz delante de un hombre ciego, él verá solamente oscuridad, porque no tiene los ojos para ver la luz. Asimismo, las personas que no tienen fe no percibirán a Dios, incluso si les muestran a Dios. Ellos no poseen los ojos para ver a la Divinidad y proclaman que no hay Divinidad. Un hombre ciego no puede ver su cuerpo ni describir su propio aspecto, pero eso no implica que él no tenga cuerpo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Noviembre de 2007)

Somos la Conciencia, que es la misma en todos y que permea toda la creación. No estamos limitados a nuestro organismo humano (cuerpo-emociones-mente-personalidad), somos diferentes de éste. En realidad somos “aquello” que le da vida a ese organismo, que lo activa y que hace uso del mismo. Somos como la energía eléctrica que permite que se iluminen los


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bombillos en la casa o que funcionen los electrodomésticos. Aunque la energía eléctrica es una sola, se manifiesta y permite el funcionamiento de distintos bombillos (grandes, pequeños, blancos, amarillos, etc.) y de variados electrodomésticos (licuadora, nevera, grabadora, televisor, etc.), cada uno con una función particular. De igual manera, somos la misma Conciencia Divina que activa y se manifiesta en todos los seres del universo, cada uno de ellos diferente del otro y con una misión distinta por cumplir en esta vida. Somos la Conciencia que nos permite ser conscientes de lo que sucede interna y externamente. Somos Conciencia, el testigo, el observador de nuestro cuerpo, de las emociones, de los pensamientos, de la personalidad y del entorno. A pesar de todo lo que le pueda suceder a nuestro organismo humano, de las situaciones que le corresponda vivir, de los logros y los fracasos, etc., siempre permanecemos inalterados, inafectados, puesto que somos el Alma, el Ser.

“El Atma es la base invisible, la sustancia de todo el mundo objetivo, la realidad detrás de la apariencia, universal e inmanente en todos los seres. Está básicamente libre de apegos, es imperecedera, no muere jamás. Es el testigo, no alterado por todo este cambio en el tiempo y el espacio, es el espíritu inmanente en el cuerpo, la fuerza motivadora de sus impulsos e intenciones. Es la propia realidad recóndita, la propia Divinidad, el Yo real: el Alma” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”) “Qué alegría es descubrir el mar de bienaventuranza dentro de ustedes mismos, bucear en las profundidades de la verdad y darse cuenta de quiénes son realmente: el Infinito. ¿Qué problemas pueden llegar a perturbarlos, a ustedes que son inmortales? Los problemas y las dificultades son escalones, no obstáculos. Cuando hayan percibido que son uno con Dios, quien todo lo ama, entonces ¿cómo podrá la preocupación volver jamás a asaltarlos? Preocuparse no es la verdadera naturaleza de ustedes. Su verdadera naturaleza es la bienaventuranza y el amor puro y


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desinteresado.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Julio de 2007)

Ahora bien, si a estas alturas del libro le pregunto “¿está de acuerdo con la afirmación: ‘tenemos alma’?”, es probable que usted me responda: “Si”. Desafortunadamente esto es incorrecto, pues la forma correcta de decirlo es “tenemos cuerpo”. Es decir, la verdad es que somos el alma y que tenemos un cuerpo; y no al contrario; porque, como ya se ha mencionado, el cuerpo es simplemente un vehículo transitorio a través del cual se manifiesta lo que realmente somos: Conciencia, el Alma. Aunque esto parezca un simple juego de palabras, en el fondo tiene una implicación muy importante, puesto que refuerza nuestra identificación, nuestras creencias, nuestra forma de percibirnos. Si está dispuesto a ir aún más lejos, la afirmación “tengo un cuerpo”, tampoco es la verdad más elevada, ya que como nuestro Ser es el mismo Ser que está en todos y en todo, que es infinito y omnipresente, entonces la frase más exacta sería “tengo todos los cuerpos (todas las formas)” o “todos los cuerpos están en mí”. Este “mi” hace referencia al verdadero “Ser”, a la Conciencia sin limites, infinita, omnipresente. Swami Sathya Sai Baba dice algo así como: Darse cuenta que uno es nada, es Verdad. Darse cuenta que uno es todo, es Amor. ¿Qué piensa al respecto? El truco para entender las frases anteriores es que en la de la Verdad, la palabra “uno” se refiere al ego (la errónea identificación con el organismo humano) y en la del Amor, “uno” se refiere al verdadero Ser (Conciencia infinita). Entonces, darse cuenta que el ego (la percepción de individualidad y separación) es una ilusión, es la Verdad más profunda, y experimentar la vivencia de la unidad con todo, es el nivel más elevado de Amor. Paralelamente a esto, pensar que el mundo objetivo, con nombres y formas, es la Verdad y la realidad últimas, es una equivocación. El Ser (sin nacimiento ni muerte y que siempre


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permanece inalterable) es la máxima verdad, la realidad absoluta que no está sujeta a cambios ni transformaciones; mientras que todo lo objetivo, concreto y perceptible a través de los sentidos, es temporal y cambiante y por lo tanto, es una realidad ilusoria y transitoria.


¿Qué pidió un Yogui cuando llegó a un restaurante de sánduches? “Hazme Uno con todo”. Cuando el Yogui recibe el emparedado, paga con un billete de más valor. El cajero lo toma y simplemente se lo guarda. Entonces el Yogui le dice: “¿Y no recibo mi cambio?”. El cajero lo mira sonriendo y le responde: “Recuerda que el cambio siempre debe venir de tu interior”.

g. ¿Qué nos aleja de lo que somos en realidad?

“El ego del ser humano es la causa de su actitud separatista. El ser humano que cae en las redes de su ego no puede reconocer a Dios. Cuando el ego se funde en el Alma, hay Liberación. El ego surge del Alma. Del ego emerge el pensamiento y el pensamiento es la fuente del habla. Todos éstos han emergido del Alma. Sólo cuando el ego se desvanece, se puede tomar consciencia de la verdad del Alma. Es el ego la causa de la esclavitud del ser humano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de Agosto de 2006)


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“Todos los que han nacido en el mundo tienen un nombre y una forma. Pero la Divinidad interior no tiene nombre ni forma. El individuo con nombre y forma está lleno de egoísmo y posesividad. Estas cualidades son la causa del placer y el dolor, la felicidad y la pena. Por lo tanto, todos deben esforzarse en poner un límite a esas dos tendencias. El conocimiento del Ser Supremo se asocia con estar totalmente libres de ego. Aquellos que no tienen siquiera un rastro de ego están totalmente libres de las consecuencias de las acciones, sin importar qué acciones ejecuten”. (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Septiembre de 2007) “El egoísmo es un arbusto espinoso, que nos hace sufrir si lo plantamos y lo cultivamos en el corazón. El egoísmo hace enemigos de los amigos más íntimos; arruina muchas buenas causas y proyectos, porque no deja que dos personas competentes trabajen juntas. La pena sigue al egoísmo como una sombra. La alegría, la paz, el coraje, la cooperación y el amor florecen sólo en ausencia del ego. Cuando el ser humano se da cuenta de que la misma Conciencia Divina que lo motiva está igualmente motivando a todos los demás, el amor desplaza al ego hacia el último plano y se hace cargo de las acciones, palabras y pensamientos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Noviembre de 2007) “Hoy el ser humano no logra reconocer el poder de la Divinidad a causa de su propio egoísmo y por estar centrado en sí mismo. Sólo cuando se libre de las impurezas incrustadas en su corazón podrá ser capaz de experimentar a la Divinidad. El ser humano y Dios son como las limaduras de hierro y el imán. Dios, por su naturaleza misma atrae al ser humano hacia Sí, porque en el ser humano está la Divinidad. Con frecuencia sentimos que Dios nos ha abandonado y nos apresuramos a culparlo, sin darnos cuenta de nuestros propios defectos. Si la limadura de hierro está cubierta por una gruesa


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capa de herrumbre y polvo, ¿puede ser atraída por el imán?” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 5 de Octubre de 2007)

En dos palabras, lo que nos aleja de lo que somos en realidad es: el ego. Y ¿qué es el ego? Sencillamente es la identificación con lo que no somos, es decir, la creencia de que somos el organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad. En vez de pensar que tenemos el organismo, pensamos que somos el organismo. Es decir, nos auto-engañamos y permanentemente reforzamos esta ilusión. Pensamos que somos el organismo y nos apegamos al cuerpo que tenemos, a las emociones que experimentamos, a las formas de pensar que hemos creado y a la personalidad que manifestamos. Entonces, ante la más mínima amenaza hacia alguno de estos aspectos podemos sentirnos tristes, iracundos, frustrados, envidiosos, etc., y reaccionamos con rechazo, agresividad, evasión, etc. Solemos invertir mucha energía y tiempo defendiendo la imagen que hemos creado de nosotros mismos y la que queremos proyectar ante los demás. Nos identificamos tanto con los roles que desempeñamos que pensamos que eso es lo que nos define, lo que constituye nuestra identidad; como por ejemplo, ser jefe, empleado, psicólogo, abogado, empresario, profesor, madre, padre, enfermo, etc. Y cuando cambian nuestros roles o se afecta la “posición” que hemos adquirido, podemos sentirnos muy mal y reaccionar agresivamente.

“Un ser humano con mente dual es medio ciego. Pone su fe en el cuerpo físico y anhela ganancias mundanas. Abandonen el apego al cuerpo. Entiendan la Verdad de que todos están en ustedes y ustedes están en todos. El Espíritu que reside en ustedes es el mismo que reside en los demás. Visualicen esta unicidad y experimenten la bienaventuranza. Al no ser capaces de experimentar esta unicidad, están dando cabida al odio y a los celos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Mayo de 2007)

Ya que somos uno con la Conciencia Omnipresente o la Divinidad; la voluntad Divina siempre se cumple y nuestros organismos son Sus instrumentos. Pero, cuando nos identificamos con el organismo humano creemos que somos


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individuos autónomos, separados e independientes que llevamos a cabo las acciones por nuestra cuenta; creemos que no dependemos de un poder superior y no nos damos cuenta que son infinitas las variables que no podemos controlar en nuestra vida, las cuales influyen para que las cosas se den tal como se dan. Esta es precisamente otra faceta importante del ego: el sentirnos hacedores y no reconocer que nuestro organismo humano es en verdad un instrumento de la Divinidad, que dependemos totalmente de Ella y que todo se cumple gracias a Ella. Gracias a la Divinidad estamos encarnados en un determinado cuerpo humano, en un momento histórico dado, con ciertas personas a nuestro alrededor, con algunas experiencias vividas y otras por vivir, etc. Al sentirnos los hacedores, también nos podemos obsesionar por conseguir ciertos resultados y cumplir los inagotables deseos de nuestra mente; entonces nos frustramos fácilmente, por un lado; y por el otro, quedamos atados a las consecuencias de nuestros actos, y tarde o temprano, en esta vida o en otras, tendremos que recoger las consecuencias de nuestras acciones y deseos.

“Cada ser humano es de hecho un instrumento de Dios. Como tal, debe llevar a cabo sus deberes dejando los resultados a Dios. Los seres humanos deben realizar sus deberes y el éxito o el fracaso es determinado por lo Divino. No se consideren a sí mismos como los hacedores. Desarrollen la convicción de que el Espíritu que habita en su interior los está dirigiendo y les permite actuar.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Febrero de 2006)

En algunas corrientes espirituales de Oriente se dice que trascender el ego o lograr la iluminación/liberación es el objetivo más importante de nuestro desarrollo espiritual. Según mi comprensión, estar iluminado quiere decir, en palabras sencillas, vivir plenamente consciente de quién es uno y quienes son los demás realmente, lo cual genera una liberación de las identificaciones erróneas y de los apegos a todo lo transitorio. De esta manera, la actitud de la persona es más


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ecuánime y de entrega total a la Voluntad Divina, disfrutando de una paz interior permanente.

“Ustedes nacieron porque reprobaron determinadas materias; hay cierto saldo de experiencia que deben adquirir para completar el curso. Si llegan a convencerse mediante la consciencia del Ser, de que su naturaleza real es esencialmente Conciencia Suprema, entonces habrán terminado el curso, habrán sido aprobados.” (S.S.B. en “La Sabiduría de Sai Baba”)

“Todas las formas son formas de la Divinidad. Más, debido a los sentimientos mundanos, el ser humano sólo ve la multiplicidad en la unidad. El ser humano debiera emprender aquellas prácticas espirituales que le doten de la capacidad para visualizar la unidad. La base fundamental para la multiplicidad aparente es sólo una. El Atma es la corriente oculta bajo todos los nombres y formas. El Atma significa el poder de la conciencia. El ser humano, sin embargo, no está llevando a cabo esfuerzo alguno por conocer el principio del no-dualismo. Se deja encantar por la multiplicidad y, por ende, está llevando una vida de ignorancia. Dense cuenta que el mismo Atma reside en uno y en todos”. (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 28 de enero de 2007)

Asimismo, es importante aumentar la pureza en el pensamiento, la palabra y la acción, con el fin de permitir que la propia esencia Divina pueda expresarse más plenamente y sentirse más claramente. Esto básicamente se logra al mantener la coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace, con base en los valores humanos. De esta manera, el organismo humano se vuelve un vehículo o instrumento más adecuado para la manifestación de la propia Divinidad inherente.

“Dios es la totalidad inamovible, eterno, verdadero, puro y sin atributos. Así como el camino que en sí mismo no tiene movimiento permite al auto


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moverse sobre él, el principio de Dios es la base para la existencia y las actividades de los seres individuales. De hecho, hay sólo Uno que aparece como dos. Mira hacia afuera, está el individuo; mira hacia adentro, está Dios. La visión externa te hace olvidar, la visión interna te hace recordar. Cuando el ser humano busca elevarse a la Divinidad que es su realidad, lucha por recordar y experimentar su verdadera naturaleza. Cuando se humilla en los bajos niveles de consciencia y está inmerso en el mundo, es atrapado en los rollos del olvido. Remover los deseos egoístas y expandir el propio impulso de amar y servir es el camino más efectivo para ‘fundirse’ en la Conciencia Suprema.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 21 de Enero de 2006)

h. ¿Son importantes el cuerpo, las emociones, los pensamientos y la personalidad?

“Toda la miríada de diferencias que ve uno en el mundo son sólo manifestaciones distintas de la única y básica entidad, Dios. Un ser humano que busca disfrutar los frutos de un árbol no puede estar contento cuidando sólo las flores. Debe cuidar las raíces, el tronco, las ramas, las hojas y las flores. Del mismo modo, el ser humano que busca la sabiduría suprema, tiene que nutrir el cuerpo, los sentidos y los sentimientos apropiadamente. Dios es la realidad eterna, sin nacimiento, crecimiento o muerte, sin un principio o un fin, inmutable. Son sólo los cuerpos los que están sujetos a cambio. La Divinidad inmutable tiene que ser experimentada haciendo uso del cuerpo que es mutable.” (S.S.B. Mensaje de la


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pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Febrero de 2007)

Definitivamente sí son importantes el cuerpo, las emociones, la mente y la personalidad, puesto que ellas conforman el organismo a través del cual nos manifestamos e interactuamos con este mundo. Entre mejor sea nuestra relación con ellos, más pura será la manifestación de nuestro Ser, y mayor la sensación de amor y paz que experimentaremos y que podremos compartir con los demás.

“Amplíen su visión. Cultiven el espíritu del amor. Estando dotados con una forma humana, deben esforzarse por desarrollar valores humanos y no alejarse del camino de la rectitud. Llenen sus mentes con pensamientos sublimes y sus corazones con sentimientos Divinos. Consideren a todos como hermanos y hermanas. Sólo entonces se harán conscientes de su unidad con toda la creación… Estén conscientes de la Divinidad que es inherente a todo ser. De esta manera, crecerán en autoestima. Llenen sus vidas con alegría. Sean felices y hagan a otros felices.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 28 de Febrero de 2007)

A continuación se encuentran algunos elementos que considero importante tener en cuenta sobre nuestra relación con el organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad.


¡BE HAPPY! Estaban dos tontos leyendo la Biblia. Uno de ellos dice: “...Y Jesús le dijo a Lázaro: ¡Lázaro, levántate y anda! Y Lázaro se levantó y andó.” El otro le dice: “¡Anduvo! Idiota.” Y le contesta: “Bueno, anduvo idiota al principio, pero luego ya andó normal.”


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IV. LA RELACIÓN CON EL PROPIO ORGANISMO

a. Sugerencias para relacionarse con el cuerpo.

“El ser humano debiera lograr la salud física, la satisfacción mental y la ventura Atmica (dicha del sí mismo). La vida del ser humano es la combinación del cuerpo, la mente y el Atma. El cuerpo lleva a cabo acciones, la mente inquiere y el Atma se mantiene como testigo. Estos tres son esenciales para que florezca la vida humana.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Marzo de 2007)

- Salud y enfermedad

La salud del cuerpo beneficia enormemente la actividad de la mente, la motivación y el desempeño en nuestras acciones; por consiguiente, es importante que busquemos conservar una buena salud. Hoy en día, tenemos la oportunidad de hacer uso de los distintos tipos de medicina con que cuenta la humanidad para su bienestar, como por ejemplo las alopáticas y las alternativas o complementarias. Sin embargo, como las enfermedades hacen parte de la vida, vale la pena asumirlas con la mejor actitud, conscientes de que seguramente nos enseñarán algo o nos permitirán profundizar en nuestra visión espiritual.

“Todos deben equiparse con cuerpos fuertes y sanos. Cuando el cuerpo está en forma, las funciones mentales también se desenvuelven sin tropiezos; cuando el cuerpo sufre, la mente también se ve perturbada. Entonces, hay que mantener en buena forma esta balsa que


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llamamos cuerpo y que es el único medio de cruzar el mar de la existencia mundana. La devoción y la moralidad son tan importantes para el bienestar físico como para la salud mental. Libran a la mente de la agitación, la alimentan con alegría y contento, aplacan los nervios y ayudan a estimular los procesos corporales.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 21 de Julio de 2007)

Para lograr una buena salud es importante hacer una evaluación sobre el tipo de pensamientos, emociones, hábitos alimenticios y actividad física llevamos a cabo cotidianamente.

“Rehuyan sus vicios, desechen sus malos hábitos, desarrollen virtudes, cultiven hábitos buenos, tomen por la senda correcta y disfruten de una vida ideal. Si tuvieran tanto buena salud como felicidad, no necesitarían adquirir nada más. El dinero siempre podrá ser ganado, más lo que es realmente importante es ganar virtudes.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Marzo de 2007) “Es de suma importancia entender el rol y el valor del cuerpo humano. Es el cuerpo el que alberga a la Divinidad interna. El cuerpo es como una caja fuerte de hierro para guardar joyas y otros objetos de valor. En el caso del cuerpo, los objetos de valor guardados son los buenos sentimientos, los buenos pensamientos y las virtudes. Una vez que se pierden, no pueden ser fácilmente recuperados. Sólo las virtudes le confieren valía a la vida humana, y son cualidades como la compasión, la paciencia y el sacrificio las que hacen preciosa la vida humana.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Febrero de 2007) “El Señor ha dotado al ser humano con el cuerpo, y por lo tanto cada miembro y cada órgano de los sentidos es digno de atención reverente. Cada uno de ellos debe ser usado para Su Gloria. El oído debe alegrarse cuando tiene una posibilidad de oír


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las maravillosas glorias de Dios. La lengua debe alegrarse cuando puede alabarle. El cuerpo humano te ha sido dado para el gran propósito de que percibas al Señor que está dentro. Si tienes un automóvil totalmente equipado y en buenas condiciones de marcha, ¿lo tendrías en la cochera sin usarlo? El automóvil es primordialmente para ir de viaje; ¡súbete y parte! Sólo entonces vale la pena tenerlo. Así también sucede con el cuerpo. Avanza hacia la meta. Aprende a usar las facultades del cuerpo, los sentidos, el intelecto y la mente para lograr el objetivo, y ponte en marcha.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Marzo de 2008)

- Pensamientos y palabras Pensamientos constructivos y optimistas generan palabras, emociones y acciones positivas que fortalecen la salud. El científico japonés Masaru Emoto, ha demostrado en sus experimentos, que los pensamientos, las palabras, la música, las intenciones, etc., influyen directamente sobre el agua y otros elementos, como el arroz.

5 Esto es otra prueba que nos

permite darnos cuenta que todo está conectado y que tenemos la posibilidad de ejercer un efecto positivo o destructivo sobre nosotros mismos y el entorno, por medio de lo que pensamos, sentimos, decimos y hacemos. Recordemos también que, como lo postuló Einstein en su famosa fórmula de la relatividad (E=mc

2), todo es energía. Cuando la energía vibra a una mayor

velocidad es menos densa, más sutil; mientras que cuando lo hace a una velocidad lenta es más densa, más observable y palpable para nuestros sentidos. En este contexto, los pensamientos y las palabras, que son manifestaciones de energía, obviamente afectan nuestros organismos y los de los demás, porque éstos también son energía. Por lo tanto, ya que las palabras, actitudes y pensamientos tienen mucho poder, es importante hacer un buen uso de ellas.

5 En Internet se encuentra fácilmente mucha información con respecto a los

experimentos de Masaru Emoto (Ej. www.hado.net).


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“La lengua es la armadura del corazón; protege nuestra vida. La palabra estrepitosa e irresponsable, llena de ira y odio, afecta la salud del ser humano. Genera ira y odio en los demás. Del silencio se dice que es oro. La persona callada no tiene enemigos, si bien puede que no tenga tampoco muchos amigos. Tiene la oportunidad de bucear en sí misma y examinar sus propias culpas y debilidades. Ya no se siente inclinada a buscarlas en los demás. Si tu pie resbala, sufres una fractura; pero un resbalón de tu lengua fractura la fe o la alegría de alguien. Esa fractura nunca podrá repararse; esa herida estará ulcerada por siempre. Entonces, usa la lengua con gran cuidado. Cuanto más suavemente hables, cuanto menos hables, cuanto más dulcemente hables, mejor será el mundo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Mayo de 2006)

- Actividad física

Hacer ejercicio físico también ayuda notablemente a conservar la salud. Muchas clases de ejercicios pueden ser convenientes, empezando por el más sencillo que es caminar. Otro tipo de ejercicios como el yoga, tai chi, chi kung y los bioenergéticos, entre otros, trabajan directamente la conexión mente-cuerpo y generan importantes beneficios psicofísicos. Hoy en día, muchas personas se han vuelto más sedentarias, dejándose llevar por las comodidades y la pereza. La televisión y el internet son dos atracciones en las cuales algunas personas invierten mucho tiempo, descuidando otras actividades.

“Cuando mutuamente se refuerzan el vigor del cuerpo y la firmeza de la mente, el porte se torna atractivo. Hoy la gente no tiene fuerza física ni firmeza mental y así parecen viejos a muy temprana edad. Cuando el cuerpo es débil, también la mente se debilita. Deben esforzarse por el bienestar físico y la salud, porque una piedra preciosa se tiene que guardar en una caja segura y fuerte. La gema de la Divinidad, que es la realidad de ustedes, también debe ser conservada


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en una caja segura y fuerte, que es el cuerpo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Junio de 2007) “Para tener una mente sana llena de buenos pensamientos, el ser humano necesita un cuerpo saludable. Debe reconocerse que el objetivo de los deportes y la música es conferir salud y felicidad al ser humano. Hay tres beneficios a ser obtenidos de los deportes y los juegos: el espíritu de grupo, la mutua comprensión y la alegría. Incluso si las persona hablan distintas lenguas y difieren en sus hábitos y culturas, en el campo de los deportes tienen una afinidad en común, un espíritu de camaradería. La verdadera educación consiste en el cultivo de buenos pensamientos y en la adquisición de buenas cualidades como veracidad, devoción, disciplina y dedicación. Estas son también las cualidades que deberían adquirirse a través de los juegos y los deportes. Estas cualidades sirven para impartir salud y alegría al cuerpo sutil.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Enero de 2006)

Al principio del “Anexo 4” encuentra una rutina de ejercicios muy corta, que le puede ser de gran utilidad. Son ejercicios de estiramiento de hombros y cuello, y bioenergéticos que le ayudarán a soltar tensiones, despejar la mente, poner a circular la energía en todo el cuerpo, liberar bloqueos energéticos y emocionales, y profundizar la respiración. En este preciso momento, lo invito a que le regale unos minutos a su cuerpo y ensaye esa rutina, empezando por los siguientes ejercicios: Colóquese de pie y haga cada uno de los siguientes movimientos por 15 segundos como mínimo: I. Camine en el mismo lugar, sin desplazarse. II. Continúe marchando en su puesto, levantando más las

rodillas y pisando fuerte. III. Trote suavemente en el mismo lugar.


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IV. Siga trotando en el puesto llevando los talones de los pies hacia atrás.

V. Salte suavemente con ambos pies al mismo tiempo, colocando las plantas de los pies sobre el suelo.

Ahora continúe con los ejercicios indicados al principio del “Anexo 4”.

- Sueño Cambiando a otro aspecto relacionado con el mismo tema, recuerde que descansar y dormir bien son fundamentales. Como se dijo anteriormente, hoy en día algunas personas, dedican mucho tiempo en la noche a ver televisión o navegar en internet, lo cual sobrecarga su mente y les puede generar dificultades para conciliar el sueño o dormir plácidamente. Adicionalmente, cuando tenemos problemas que nos afectan bastante, el sueño suele verse alterado. De esta manera, la dificultad para dormir bien puede ser un aviso o un indicador para que le prestemos atención a lo que hay de fondo y tomemos las medidas pertinentes para afrontar los problemas de la mejor manera. Para tener un sueño más reparador, ayuda apagar y desconectar los aparatos eléctricos y los teléfonos celulares que permanecen en la habitación durante la noche, o ubicarlos lejos de la cama. De esta manera, podemos minimizar la contaminación electromagnética que generan estos aparatos, que interfiere con la energía del cuerpo y la mente. Ciertas técnicas también pueden ayudarle a dormirse más rápidamente. Por ejemplo, si no logra dormirse debido a las preocupaciones recurrentes que tiene y sobre las cuales no es necesario ni útil pensar más, le recomiendo que ensaye a cerrar los ojos y apretar fuertemente los párpados durante unos 3 segundos. Esto le ayudará a borrar los contenidos mentales rápidamente (Ensáyelo en este momento!). Si necesita algo más para alejar los pensamientos indeseados y conciliar el sueño, practique lo siguiente: Acuéstese boca arriba, con las manos a los lados del cuerpo o entrelazadas sobre su abdomen; y las piernas estiradas, sin cruzarlas. Cierre los ojos y visualícese en un lugar en la naturaleza que sea muy


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agradable para usted. Recorra el lugar por un tiempo, disfrutando todo lo que tiene para ofrecerle. Luego, identifique si es de día o de noche y ubíquese en un lugar donde pueda visualizar el sol o la luna, según sea el caso. Tome la luz proveniente del sol/luna y llévela a sus pies. Imagine que llena sus pies con esa luz y esa energía, que los relaja, limpia y sana. Continúe expandiendo esa luz y esa energía lentamente a todas las zonas de su cuerpo. Al concluir este ejercicio, seguramente se le facilitará dormirse, o en caso de que no sea así, usted puede tener la tranquilidad de saber que su cuerpo está relajado y descansado, lo cual le permitirá tener la energía suficiente para cumplir sus responsabilidades al día siguiente. Evite angustiarse si no se duerme cuando lo desea, pues esto solamente le generará más problemas. Si su insomnio continúa por varios días, recurra a un médico o a un psicoterapeuta.

- Alimentación

Pasando a otro punto, la comida que consume es clave para la salud de su cuerpo. Swami Sathya Sai Baba enseña que la alimentación balanceada, vegetariana y sin excesos en cantidad ni en condimentos, es muy conveniente para el cuerpo y la mente. Dice que la energía del alimento es recibida por la mente y, por lo tanto, al consumir animales también ingerimos sus energías instintivas, que no facilitan nuestro desarrollo espiritual. Adicionalmente, como el cuerpo humano invierte mucho tiempo y esfuerzo para digerir las carnes, se desgasta y recibe bacterias nocivas que se producen por la descomposición de las carnes en el interior del organismo. Por otra parte, al consumir carne se promueve el sacrificio de animales, quienes a diferencia de las plantas, están en un nivel evolutivo más alto y tienen un sistema nervioso más complejo que les permite ser altamente sensibles al dolor. Este sacrificio de animales no es estrictamente necesario ya que perfectamente podemos alimentarnos con muchos otros tipos de alimentos, que nos suministran todos los nutrientes que el cuerpo necesita. Sólo en la India existen más de 500 millones de personas vegetarianas, muchas de ellas muy inteligentes y con muy buena salud, lo cual es una demostración contundente de que el ser humano no necesita consumir animales. Hay mucha literatura sobre las ventajas del vegetarianismo para la


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salud física, psicológica y espiritual, que lo invito a consultar en internet. No sobra recordar que una clave para una buena dieta vegetariana es consumir comidas balanceadas. También es recomendable evitar o controlar el consumo de alimentos con preservantes, los fritos, el alcohol, el cigarrillo y las demás sustancias psicoactivas, el azúcar refinado y los productos enlatados, entre otros. Y aumentar el consumo de agua pura, frutas y verduras crudas, nueces, germinados, cereales y leguminosas, entre otras.

“El ser humano debe preferir los alimentos sátvicos a los rajásicos

6. Al consumir bebidas

intoxicantes uno pierde el control de las emociones y pasiones, los impulsos e instintos, el habla y los movimientos, y desciende al nivel de los animales. Al comer carne uno desarrolla tendencias violentas y enfermedades animales. Cuando uno se complace en los alimentos rajásicos la mente se vuelve difícil de controlar, y jamás se puede recuperar si se consume alimento tamásico con fruición. Para vivir conforme al principio de Dios uno debe vigilar el alimento y la bebida que consumen tanto el cuerpo como la mente. Coman alimento sátvico; lo mejor es el alimento crudo, las nueces y frutas y los brotes de legumbres.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 30 de Junio de 2003)

“La salud es oro…. Un cuerpo sano conduce a una mente sana. Tomen sus comidas a horario y saboreen lo que comen. También, durante la comida, alberguen pensamientos positivos; esto les otorgará buena salud. En primer lugar, abandonen todos los hábitos perniciosos; automáticamente obtendrán buena salud, lo que les conferirá un cuerpo fuerte. Entonces podrán llevar una vida ideal y meritoria, llena de felicidad y

6 Los Vedas y la medicina Ayurvédica derivada de estos textos, mencionan 3

tipos de alimentos según la energía que transmiten: Sátvicos (energía pura y equilibrada), Rajásicos (energía de impulsividad y excitación) y Tamásicos (energía de pereza e inercia).


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bienaventuranza.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Agosto de 2006)

La alimentación también incluye todo lo que ingresa al cuerpo por cualquiera de los sentidos y no sólo por la boca. Por tal motivo, es importante que evaluemos lo que observamos, escuchamos, olemos, hablamos y hacemos. Todo esto también afecta la mente, y una mente pura influye en una mayor armonía y salud.

“Purifiquen sus emociones, fortalezcan sus mentes para resistir la fuerza de la ignorancia y los engaños de los sentidos: así tendrán aseguradas la paz y la alegría. Ustedes cuidan su salud mediante el ejercicio físico; de la misma manera debe cuidarse la salud mental por medio de ciertos ejercicios espirituales, vale decir el esfuerzo espiritual. Por ejemplo, merced a los alimentos puros la mente puede volverse pura y aguda; así puede cortar a través de los obstáculos y tentaciones, y rasgar el velo del error. También deben esforzarse por estar constantemente en un ambiente bueno y en buena compañía.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Noviembre de 2006)

- Actividades en la naturaleza Otra ayuda para conservar la salud son las actividades en la naturaleza, como en los parques, las montañas, los ríos, etc. El contacto con la naturaleza nos ayuda a descargar las emociones y pensamientos destructivos, y nos revitaliza. Si algún día se siente agobiado o desesperado, le sugiero que se tome un tiempo para ir a un parque, recostarse en el pasto a descansar y recibir un poco de Sol. Después de varios minutos sentirá que retoma las fuerzas para continuar afrontando los retos que le está planteando la vida, los cuales seguramente le ayudarán a fortalecerse y evolucionar.


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- Respiración También es provechoso respirar conscientemente a lo largo del día, inhalando y exhalando por la nariz tranquilamente y ojalá llevando el aire hasta el diafragma (a la altura del abdomen). Esto armoniza el funcionamiento del cuerpo, contrarresta el estrés y calma la mente. Si su cuerpo presenta dolores, tensiones o enfermedades seguramente es un indicador de que algo está fallando en la relación que tiene con su organismo (con sus emociones, su mente, su cuerpo o su personalidad) y con el entorno. Igualmente, las sensaciones corporales normalmente se relacionan con las emociones, por tal razón, prestarle atención a las sensaciones le permite conectarse con las emociones y relacionarse mejor con ellas. La invitación es pues, a relacionarse con el cuerpo, recordando que es un instrumento extraordinario y muy valioso; pero que en realidad usted es diferente del cuerpo. Tarde o temprano tendrá que dejarlo, así que evite apegarse al mismo, y disminuya las vanidades y las preocupaciones excesivas con respecto a él.

“Es un grave error identificarse con el cuerpo. Abandona el apego al cuerpo y aprende a estar consciente del Espíritu. Sólo entonces entenderás y experimentarás tu verdadera forma, es decir, el Espíritu. En caso contrario, hasta la más pequeña dolencia te pondrá ansioso. Las dolencias físicas son como nubes pasajeras... Una vez que abandones el apego al cuerpo, sus limitaciones ya no te atarán. Cuando te sientas en meditación olvidas a tu cuerpo. La meditación consiste en abandonar el apego al cuerpo y llegar a ser consciente del Espíritu. Comprende que no eres el cuerpo. Eres ‘Yo’. Para referirse a sí mismos, todos usan el término ‘Yo’, el principio del Espíritu. Por lo tanto el cuerpo no eres tú. Es sólo un instrumento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 7 de Enero de 2007)


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“Aunque den al cuerpo todos los cuidados que son esenciales, no deben tener apego excesivo a lo que es intrínsecamente perecedero y temporal. El cuerpo debe ser cuidado con el sólo objetivo de percibir a la Divinidad que está en él. Indudablemente es necesario mantener una buena salud todo el tiempo que uno vive, pero la preocupación obsesiva por el cuerpo es un error.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Julio de 2006) “La vida humana es un viaje del ‘Yo’ al ‘Nosotros’. Este viaje es sutil y su meta está muy cerca, sin embargo, al ser humano le toma muchos nacimientos alcanzar este destino. Así como cambias tu ropa, de la misma forma tendrás que cambiar tu cuerpo un día u otro… El cuerpo es como una nube pasajera. Mientras exista vida en el cuerpo debe usarse para estar al servicio de los demás. Comprométanse a sí mismos en el servicio hasta el último aliento de vida. El servicio al ser humano es servicio a Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Agosto de 2007) “¿Para qué propósito se debería mantener una buena salud? ¿Cuál es el mejor uso que se debería dar al cuerpo? Este cuerpo con todos sus equipos, como los sentidos, el intelecto, los sentimientos y la memoria es un instrumento; sólo un implemento para alcanzar cierto objetivo. El dueño del carruaje es cada día más importante que el carruaje mismo; es por su bien que debe mantenerse en buena forma, eficiente y en buen estado. La salud es un requisito esencial para el éxito en todos los aspectos de la vida, para realizar los cuatro ideales que deberían guiar a los humanos: una vida moral, satisfacción de los deseos beneficiosos, prosperidad y liberación del sufrimiento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Junio de 2003)


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“El cuerpo está constituido por los cinco elementos y está destinado a morir tarde o temprano; mas el Morador Interno no conoce nacimiento ni muerte. El Morador Interno no tiene apego alguno y es el testigo eterno. A decir verdad, el Morador Interno que existe en la forma del Atma, es Dios mismo. El Atma no sabe de nacimiento ni de muerte. No sabe de dolor ni de sufrimiento. Sólo el cuerpo sufre y no así el Atma. El cuerpo físico viene y se va. Ustedes no son el cuerpo; son las encarnaciones del Atma. Uno habrá de liberarse del apego al cuerpo para poder disfrutar de paz y de felicidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 28 de Enero de 2007)


A. Colóquese de pie y camine por los alrededores, siendo plenamente consciente que usted tiene ropa pero no es la ropa. Después de un tiempo, siga caminando y esta vez manténgase consciente de que usted tiene el cuerpo; pero no es el cuerpo. Es Conciencia, el testigo(a) del cuerpo.

B. ¿Cómo se sintió? ¿Logró sentir por ciertos momentos que tiene un cuerpo más no es el cuerpo?

C. De lo mencionado en este capítulo, escoja lo que quiere aplicar en su vida y empiece a hacerlo desde ahora!

“Una vez que el ser humano está libre del indebido apego al cuerpo, está liberado también de las dualidades de alegría y pesar, bueno y malo, placer y dolor, etc. Está firmemente establecido en la ecuanimidad, la fortaleza y la paz imperturbable. Allí, el ser humano descubre que el mundo es uno en Dios; que todo es alegría, amor y bienaventuranza. Se da cuenta de que él mismo es todo este mundo aparente; que todas las multifacéticas manifestaciones son proyecciones de la voluntad Divina, la cual es su propia


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Realidad. Esta expansión de la propia individualidad es la meta más elevada del ser humano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Junio de 2007)


Una mujer adulta tuvo un infarto en el corazón y fue llevada al hospital. Durante la operación tuvo una experiencia cercana a la muerte, en la cual tuvo un encuentro con Dios a quien le preguntó si ese era su final. Dios le dijo que no y le explicó que ella todavía tenía unos 30 años más por vivir. Al recuperarse, ella decidió aprovechar que se encontraba en el hospital para hacerse unas cuantas operaciones adicionales: cirugía estética en la cara, liposucción, aumento de senos y de nalgas. Todo esto, pensando en que todavía le faltaba otros 30 años más de vida y podría disfrutarlos al máximo. Después de recuperarse de la última cirugía, salió del hospital y al cruzar la calle fue atropellada por una ambulancia y murió. Llegó nuevamente donde Dios y le preguntó, “¿Qué pasó?, ¿no me dijiste que tenía otros 30 años de vida?” Dios apenado le contesta, “lo siento, es que no te reconocí.”


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b. Sugerencias para relacionarse con las emociones.

Las emociones y los sentimientos son parte esencial de nuestro organismo. Surgen constantemente y nos permiten identificar qué nos agrada y qué nos molesta, qué queremos y qué rechazamos, cómo nos afecta una situación, etc. También son ellos quienes nos mueven a actuar, de una u otra manera, y están muy relacionados con los pensamientos y deseos conscientes o inconscientes acerca de uno mismo, de los demás y de las situaciones. Por ejemplo, las experiencias que hemos vivido; y las creencias, deseos y expectativas que tenemos; inciden para que determinadas personas y eventos generen en nosotros ciertas emociones y sentimientos.

- Darse cuenta Es muy importante darse cuenta qué emociones y sentimientos se presentan en nosotros, sin negarlas ni reprimirlas, porque en ese caso pueden enfermarnos, alterarnos o manejarnos desde el inconsciente. Una vez identificadas, es mejor aceptarlas, permitirles que se manifiesten en nuestro organismo y expresarlas sanamente, es decir, de tal manera que no nos generen problemas con los demás ni perjudiquen nuestra integridad.

- Sentir y escuchar la emoción En un primer momento considero importante darse la oportunidad de sentir la emoción. Tal vez, puede ser mejor buscar un lugar apartado del contexto en el cual se detonó nuestra emoción, con el fin de tomarse el tiempo para sentirla más libremente. Luego puede hacer lo siguiente: cierre los ojos y perciba en qué lugares de su cuerpo se está manifestando más intensamente la emoción. Conéctese con esa sensación en su cuerpo, permítase sentirla y obsérvela con detalle. Con la atención ubicada en esa o esas sensaciones, “escuche lo que


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ellas tienen para decir”, “lo que quieren expresar”. Suéltese y haga el intento, fluya con el ejercicio, deje a un lado la necesidad de controlar todo y permita que la sensación le hable. Por ejemplo, un nudo en la garganta le puede decir que siente que no puede decir lo que quiere, que le toca siempre quedarse callado(a) y aceptar lo que la otra persona dice; que se siente ahogado(a) con esto o aquello, que la tristeza lo está colmando, etc. De esta manera, usted establece un contacto más directo con la emoción y puede dejarla fluir y procesarla, en vez de rechazarla, reprimirla y luchar contra ella. Las emociones nos permiten conocer más nuestro organismo y relacionarnos mejor con él; nos dan pistas sobre nuestros intereses más profundos y nos permiten enfocar nuestra vida de acuerdo a ellos. También nos llaman la atención cuando estamos actuando en contra de lo que más queremos y de lo que es más importante para nosotros. Son señales e indicadores que podemos escuchar, atender e integrar a la totalidad de nuestro organismo; conectando la mente y el cuerpo con el corazón. Es decir, alineando los pensamientos, las acciones, las palabras y las emociones. De esta manera, estaremos viviendo con coherencia, lo cual nos hace verdaderos seres humanos.

- Soltar la emoción Ahora bien, después de aceptar, sentir y escuchar las emociones, es más sano permitirles que continúen su camino en vez de aferrarnos a ellas, y evitar alimentarlas indefinidamente con pensamientos perturbadores asociados a éstas. Puede emplear muchas técnicas para liberar la emoción. Usted encontrará la que más le llame la atención y le resulte efectiva. Algunas de éstas son: hablar con alguien de confianza, escribir espontáneamente todo lo que siente y piensa, percibir la sensación en el cuerpo sin juzgarla ni rechazarla hasta que vaya disminuyendo su intensidad; hablarle a Dios, al maestro espiritual, a un ángel, etc.; meditar, llorar o reír (según sea el caso), cantar, pintar, tocar un instrumento musical, caminar o hacer ejercicio, exhalar profundamente o suspirar varias veces, gritar en privado, golpear un colchón o un sofá, lavarse la cara o bañarse, tomar agua, dormir, entrar en contacto con la naturaleza, escuchar música, asistir a psicoterapia, etc. Entre


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todas estas alternativas, tal vez la más eficaz para liberar la energía contenida en una emoción y los pensamientos asociados a esta, consiste en verbalizar en voz alta lo que uno está sintiendo y pensando. Puede hacerlo comentándoselo a otra persona o en soledad dirigiéndose a Dios, una vela o simplemente expresándolo abiertamente, entre otras opciones.

- Aprender de la emoción

También es muy sano buscar la lección que puede extraer de la experiencia vivida. Por ejemplo, si tuvo un disgusto con otra persona, es mejor dejar de pensar una y otra vez sobre la situación y sobre las cosas que le dijo. En cambio, puede permitir que la emoción le muestre algo que tal vez usted no había notado sobre la relación con esa persona o sobre su personalidad. También podría ver qué originó que sus emociones se alteraran tanto, es decir, qué pensamientos, intereses, apegos, etc., hay de fondo en usted. En todo este proceso, sea absolutamente honesto con usted mismo y así podrá conocer aspectos de su organismo que puede mejorar. Para el crecimiento espiritual es muy importante que uno asuma la responsabilidad de sus emociones. Aunque es más fácil culpar a otros por las propias reacciones; es más útil hacerse consciente de lo que hay en uno que detona tales emociones, pensamientos o comportamientos. Cada persona reacciona de una u otra forma frente a las situaciones y, si se lo propone, puede ir conociendo mejor sus propias tendencias, “puntos débiles”, susceptibilidades, temores, deseos, etc. De esta manera, conocerá más su organismo, será menos dominado por las emociones y tendrá mayor libertad!

- ¿Involucrarse o dejar pasar?

Hay un cuento que ejemplifica muy bien este tema: Había un profesor muy dedicado y respetuoso; que a la vez era muy exigente para que sus estudiantes quedaran bien preparados y se convirtieran en personas competentes. A casi todos los estudiantes les gustaba recibir clase con él; pero había uno en particular a quien le parecía muy desagradable la actitud amorosa y a la vez exigente de su profesor. Él siempre trataba de hacer lo mínimo necesario para cumplir sus responsabilidades en esa clase, se mantenía bromeando para


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desviar la atención de sus compañeros y criticaba constantemente las enseñanzas del profesor. Afortunadamente para el muchacho, pasaba los exámenes aunque sus notas eran muy regulares. Todo el año alimentó su ira y resentimiento frente al maestro y cuando estaba por terminarse el curso, pensó que no se iría sin antes hacerle algo. Fue así como, en el último día de clases, llevó una carta llena de insultos, ofensas y mentiras para entregársela al profesor. Previamente se la mostró a los demás compañeros de clase para que todos se dieran cuenta de lo que estaba por realizar y pudieran presenciar su “plan” contra el maestro. Al terminar la sesión, el joven se acercó al profesor, le dijo que tenía algo para darle y le entregó la carta. Al maestro le extrañó esta actitud del muchacho, pero le agradeció y procedió a leerla. Mientras hacía esto, el muchacho y los demás compañeros se quedaron en el aula para observar su reacción. El maestro leyó con detenimiento la carta, luego la cerró y la dejó en el escritorio sin pronunciar alguna palabra ni mostrar ira, tristeza o descontrol. Los estudiantes, extrañados con la pasividad del profesor, le preguntaron porqué no reaccionaba, porqué no le decía algo al muchacho, porqué no se molestaba, etc. El, a su vez les preguntó: “¿Qué hacen ustedes cuando alguien les da un regalo que no les gusta?”. Ellos le dijeron: “Pues no lo recibimos, o si lo tomamos, después lo dejamos a un lado”. “Pues bien”, continuó el maestro, “precisamente lo que acabo de recibir es un regalo lleno de palabras negativas y ofensas, que yo, en vez de tomarlas personalmente y afectarme por ellas, prefiero dejarlas a un lado. Entonces he decidido no tomar este regalo y no afectarme por él!” Sus estudiantes quedaron sorprendidos y aprendieron esta valiosa lección, que fue de gran ayuda para el resto de sus vidas. Entonces, cuando las demás personas o la vida misma le den este tipo de “regalos”, puede evitar recibirlos. O si ya los recibió, si ya se involucró con ellos y se ha afectado, también puede entregárselos a Dios, con plena fe y confianza en que El le ayudará a afrontar esa situación y esas emociones de la manera que más convenga para su crecimiento espiritual.

“Desarrollen sentimientos sagrados, sirvan a sus padres, respeten a los mayores y adopten a Dios como su amigo. Con Dios como amigo, estarán seguros de encontrar satisfacción en la vida.


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Acepten regocijados todas las pruebas a las que Él pueda someterles, recordando que todas ellas son para su propio bien. Sin que importe lo difícil o dolorosa que sea la prueba, repítanse siempre a sí mismos: ‘Esto es bueno para mí, esto es bueno para mí’. Deben tener plena fe en que todo lo que Dios haga es por el propio bien y bienestar de ustedes. Tienen una enfermedad y son sometidos a cirugía. El médico les corta con un cuchillo filoso; no lo hace movido por el odio hacia ustedes, sino porque quiere sanarles. De igual manera, entiendan que Dios también les está curando movido por el amor hacia ustedes; de modo que no hay lugar para rezongos ni quejas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Marzo de 2007)

- Entregarle la emoción a Dios

Una manera, que desde mi experiencia y la de otras personas es particularmente efectiva para entregarle a Dios o al Universo (dependiendo de sus creencias) las emociones y preocupaciones que lo(a) agobian en un momento dado, es la siguiente: Tome consciencia de lo que está sintiendo y experimentando. Imagínese una esfera o burbuja al frente suyo y deposite en ella todas esas emociones, sensaciones y pensamientos que tiene acerca de la situación que le afecta. Luego de “vaciarse” o “desprenderse” de esto, visualice a un maestro espiritual, a un ser o símbolo especial, o al Universo, recibiendo esta esfera y quedándose con ella (también puede hacerlo frente a una foto o imagen). Al mismo tiempo que hace esto, dígale a quien se lo recibe, ya sea mental o verbalmente, que le entrega todo eso para que El/Ella se encargue del asunto, confiando totalmente en que El/Ella podrán ayudarle de la manera que más le convenga para su crecimiento espiritual. Además, exprésele su compromiso de no tomar esa esfera/burbuja de nuevo, es decir, de no seguir pensando ni preocupándose por ese tema. Si usted se la entrega no es para quitársela, sino para liberarse de ella con fe y confianza. Al final, agradezca la ayuda, dando por hecho que ya la está recibiendo y despídase.


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Es muy efectivo visualizar este proceso de entrega a la Divinidad, al maestro espiritual, a la vida, al universo, a un ángel, etc., en vez de simplemente decir mentalmente: “Dios mío te entrego esto”, lo cual, aunque pueda ser útil algunas veces, en otras ocasiones puede ser superficial, rápido e inconsciente y, por ende, menos efectivo. ¡Lo(a) invito a que ensaye esta técnica y evalúe los resultados!

- La ley del karma

Por otra parte, según Swami Sathya Sai Baba, todas las acciones que llevamos a cabo con apego a los resultados y con la sensación de ser los “hacedores”, generan unas consecuencias que debemos vivir más adelante. Como dijo Jesucristo: ¡Lo que siembres, cosecharás! Así, las situaciones que vivimos en el presente, ya sean agradables o desagradables, están ligadas a las acciones que hemos realizado en el pasado, en esta vida o en otras. Lo bueno es que esta ley de acción y reacción (ley del karma), está diseñada para nuestro beneficio, porque todas las situaciones que vivimos son, en realidad, experiencias que nos permiten aprender para evolucionar. Los errores y aciertos que cometemos o los momentos alegres y difíciles que afrontamos, nos ayudan a progresar en nuestro desarrollo. Entonces, cada vez que sienta culpa o tristeza por algún error cometido, lo primero que puede recordar es que así sucedió porque era necesario que aprendiera algo. Luego, puede pensar qué lección puede extraer de ello para aplicarla en su vida, en el único momento que existe: el presente continuo, porque el pasado ya se fue y no se puede cambiar, y el futuro aún no ha llegado y es impredecible. Cada vez que se sienta desilusionado con la vida o con resentimiento hacia Dios por lo que le está sucediendo, es importante que recuerde que todo es, en última instancia, una experiencia de aprendizaje, un paso más en su evolución; y que todo es transitorio, todo pasa, todo cambia; mientras que lo que usted es en realidad (Conciencia) nunca se altera ni se afecta por ello.


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“La bienaventuranza perdurable se puede alcanzar sólo pasando por pruebas y dificultades. El oro no puede ser transformado en una atractiva joya si no se lo somete al proceso de fundirlo en un crisol y golpearlo hasta que tome la forma requerida. Cuando me dirijo a ustedes llamándolos ‘oro’, los considero seres preciosos. Pero sólo atravesando con paciencia las vicisitudes de la vida, pueden llegar a ser joyas atractivas. No deben dejarse superar por las dificultades. Desarrollen auto confianza y tengan fe firme en Dios. Con fe inconmovible, dedíquense al servicio del prójimo y lleven vidas ejemplares.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Julio de 2007) “Cuando los obstáculos se interpongan en su camino, enfréntenlos con coraje. Ellos los endurecen y los hacen mentalmente fuertes. El sufrimiento y la adversidad son actos ineludibles de la obra teatral cósmica. Dios no decreta estas calamidades pero el ser humano las invita como retribución por sus malas acciones. Este es el castigo correctivo administrado por la naturaleza, que induce al ser humano a dejar la mala senda. Todo esto es parte de la grandiosa síntesis en que los negativos sirven para glorificar a los positivos. Así, la muerte glorifica a la inmortalidad; la ignorancia glorifica a la sabiduría; la adversidad glorifica a la bienaventuranza; la noche glorifica al amanecer.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Junio de 2007) “Cada vez que estén en dificultades, díganse a sí mismos que ellas son sólo nubes pasajeras que se disiparán, y no se aflijan. Todo lo que llega ha de irse. Todo es momentáneo.” (Discurso de Sathya Sai Baba del 28 de Julio de 2007)

Aprendiendo las lecciones de las experiencias que le corresponde vivir y con un comportamiento correcto, basado en el amor y el servicio desinteresados, puede ganar la Gracia de


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Dios y su karma puede ser “desactivado” o sus efectos pueden ser suavizados.

“Si ganas la gracia del Señor, aún el decreto del destino puede ser superado. Cuando se compra un frasco de medicamento, en la etiqueta hay una fecha impresa por el fabricante que indica el vencimiento. La droga pierde su eficacia más allá de esa fecha. A pesar de que la droga sigue estando en el frasco, ya no será efectiva. De la misma manera, la gracia de Dios puede funcionar como una fecha de vencimiento, y hacer ineficaces los efectos del destino.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 de Octubre de 2007) “Cuando los atormenta un dolor intenso, el médico les administra una inyección de morfina y entonces no sufren más. De la misma manera actúa la gracia de Dios para quitar el elemento de sufrimiento del Karma (consecuencia de acciones previas) que deben atravesar. Es incorrecto decir que el destino de uno está completamente determinado. Nada se puede interponer en el camino de la gracia del Todopoderoso.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Diciembre de 2007)

- Ecuanimidad Por otra parte, las emociones y los sentimientos se producen continuamente, casi automáticamente y de repente. Como se mencionó anteriormente, lo importante no es evitarlos sino relacionarse apropiadamente con ellos y volver a la ecuanimidad, a la armonía mental y emocional. El siguiente cuento ilustra muy bien lo que quiero decir por “ecuanimidad”. Hace muchos años existió un maestro de artes marciales muy reconocido, que tenía varios niños como estudiantes. Un día, el maestro los invitó a que fueran a observarlo en un combate que sostendría con otro maestro de artes marciales, también muy reconocido. Llegó el día del combate y todos los estudiantes fueron muy motivados a ver a


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su maestro en acción. Para los niños, este era uno de los mejores momentos de sus vidas. El combate se desarrolló tal como habría de esperarse, con una gran muestra de destreza y habilidad por parte de ambos y con pocas ventajas para el oponente. Fue una disputa muy larga y reñida. Finalmente, ¡triunfó el maestro de los niños! Obviamente, ellos estaban muy felices y orgullosos de él. Entonces, se acercaron a su maestro y le dijeron: “¡Felicitaciones! Sabíamos que usted iba a ganar porque usted es el mejor! Y a propósito, todos queremos preguntarle algo: ¿cómo hace para nunca perder el equilibrio?”. El maestro dibujó una sonrisa en su rostro, miró profundamente a cada uno de sus estudiantes y luego les respondió: “Realmente, no es que nunca pierda el equilibrio. Lo que pasa es que… …lo recupero rápidamente!” De manera similar a lo expresado por el maestro, el truco de la ecuanimidad no es evitar tener emociones, sino experimentarlas sin aferrarse a ellas, recuperando el “equilibrio” nuevamente. Recuerde que lo importante no es evitar caerse, sino levantarse y continuar recorriendo el camino.

- Poner en perspectiva

Ahora bien, otro elemento muy importante para lograr una mayor armonía emocional, consiste en ajustar las propias reacciones emocionales de acuerdo con la gravedad de las situaciones. Muchas veces tendemos a darle una mayor importancia, de la que realmente tienen, a ciertos eventos que vivimos en nuestra cotidianidad. Es muy conveniente evaluar cada situación en cuanto a qué tan “negativa” o “perjudicial” o “desastrosa” realmente es; o si simplemente es algo que no tiene tanta trascendencia o tiene una solución, y por lo tanto, no merece que le demos el poder de afectar tan intensamente nuestro estado de ánimo. Al poner en perspectiva muchas de las cosas que normalmente nos irritan, podemos relacionarnos más sanamente con ellas y mejorar enormemente nuestra calidad de vida. Algo que al parecer ponía en práctica la persona que dijo: “El secreto de mi felicidad es tratar las catástrofes como molestias y no las molestias como catástrofes”.


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- Emociones constructivas

En este caminar por la vida, las emociones más constructivas y positivas son una gran compañía y hacen más agradable el viaje. La pureza mental, que comprende los pensamientos de amor, compasión, agradecimiento, conexión con Dios, unidad con los demás, etc., es una fuente generadora de este tipo de emociones y sentimientos.

“Dejando de lado ideas y sentimientos limitados, la gente debe mostrar compasión hacia el prójimo. La compasión es el sello de la Devoción. Nadie puede esperar ser agradable a Dios sin mostrar compasión hacia sus iguales. Un corazón amoroso es el templo de Dios. Dios no puede habitar en un corazón sin compasión. No hay nada más grande en el mundo que ver todo a través del cristal del Amor. Buenos son sólo quienes ven la unidad en la aparente diversidad. Los seres humanos deben darse cuenta de que son chispas de la Divinidad. Tienen que desarrollar pensamientos sagrados y llevar vidas ideales. Deben afanarse por promover el bienestar de la sociedad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Mayo de 2007)

Y en el grupo de emociones positivas, la gratitud merece un lugar especial. Cuando hay gratitud hay más alegría, satisfacción y optimismo. Cuando no hay gratitud, puede haber más fácilmente depresión, resentimiento, ira, etc. Constantemente recibimos muchos regalos de Dios o de la vida, empezando por la oportunidad de vivir un día más para seguir evolucionando; pero por lo general, muchos tienden a enfocarse en lo que les falta, lo que perdieron, lo que les disgusta, los problemas, las preocupaciones, los rencores, etc., y no toman consciencia de todo lo positivo que tienen. Obviamente, esto genera un sentimiento de aburrimiento, hastío y sin sentido en la vida. Swami Sathya Sai Baba dice que en la mayoría de las vidas las dificultades son sólo 1/4 de las experiencias que tenemos; pero muchos se enfocan en este pequeño porcentaje y arruinan sus vidas.


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A continuación encuentra más enseñanzas de Sathya Sai Baba relacionadas con las emociones y los sentimientos…

“El ser humano es la encarnación de Sat-Chit-Ananda (Ser-Conciencia-Bienaventuranza). Pero es incapaz de reconocer su verdadera identidad porque el egoísmo y la posesividad, el lujo y la vanidad envuelven su verdadera forma de Sat-Chit-Ananda. Cuando el ser humano sea capaz de librarse del apego y el odio, del egoísmo y la codicia, reconocerá su naturaleza Divina. La Divinidad dentro de él está cubierta por esas tendencias, como la ceniza cubre una brasa ardiente. Cuando la ceniza sea aventada, se revelará el fuego.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 7 de Septiembre de 2007) “Si el ser humano quiere ser feliz, lo primero que debe hacer es sacar de su mente todos los malos pensamientos, sentimientos y hábitos. El pesar y la alegría son el anverso y reverso de la misma experiencia. Hay alegría cuando cesa el pesar y hay pesar cuando cesa la alegría. ¿Qué es exactamente el pesar? Es sólo una reacción a la pérdida de algo obtenido o a la imposibilidad de obtener algo deseado. Por lo tanto, el único modo de evitar el pesar y la tristeza es vencer el deseo de lo ilusorio.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Mayo de 2003)

“El carácter del ser humano se transforma en bueno o malo según sea su compañía. Una compañía noble otorga sentimientos nobles y una mala compañía hace surgir rasgos malvados. Lo que ustedes hablan y la conducta que tienen, se basan en sus sentimientos. Sólo merecen ser llamados seres humanos cuando cultivan buenos sentimientos. La forma por sí sola no constituye un ser humano. Un verdadero ser humano es la personificación de los buenos hábitos; siempre ayuda y nunca lastima. No deben ser sólo humanos en forma, deben volverse humanos en


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conducta. Digan lo bueno, vean lo bueno, hagan lo bueno y sean buenos. La Divinidad sólo se manifestará en ustedes cuando sea buena su conducta.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Agosto de 2007)


A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Inhale lenta y profundamente por la nariz y luego suspire por la boca largamente, como pronunciando el sonido “¡Hahhh!”. Al mismo tiempo que exhala, sienta que se libera de todas las tensiones, preocupaciones, resentimientos, etc. Hágalo unas cinco veces.

B. ¿Cómo se siente ahora? ¿Si se siente más relajado? Recuerde que puede suspirar todas la veces que lo necesite durante el día, para recuperar su armonía emocional.

Siempre tenga presente que usted es en realidad Conciencia, el observador, el testigo que permanece inalterable e inafectado y que se da cuenta de las emociones y sentimientos que surgen y desaparecen en su organismo humano. ¡Usted tiene emociones, no es las emociones! Relaciónese con ellas de la mejor manera posible, sin aferrarse a ellas.


¡BE HAPPY! Un joven le pide el carro prestado a su padre, y éste le contesta: “No. No hasta que no te cortes el pelo”. El muchacho le responde con malicia: “Pero padre…Jesús tenía pelo largo!” Y el padre le dice: “Siii, pero Jesús caminaba a todas partes!!!”


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c. Sugerencias para relacionarse con la mente. La mente es una herramienta maravillosa porque nos permite relacionarnos con el mundo, analizar, aprender, recordar, conocer, etc. Sin embargo, es una herramienta de doble filo, porque bien empleada nos permite lograr todo lo mencionado; pero cuando no la controlamos y nos dejamos llevar por sus impulsos y tendencias, podemos llegar a cometer actos incorrectos, egoístas, y generar emociones destructivas en nosotros y en los demás. Por todo esto, es conveniente emplear la mente de la mejor manera posible, utilizándola como un instrumento para el beneficio propio y de los demás, en vez de convertirnos en sus verdugos.

- El poder de la mente El poder de la mente es infinito, es mayor de lo que muchos de nosotros pensamos. La mente es creadora. Precisamente el Buda dijo: “somos lo que pensamos”. A su vez Sathya Sai Baba enseña: “Un pensamiento crea una acción. Una acción repetida crea un hábito. Los hábitos crean el carácter. Y el carácter crea nuestro destino.” Es decir, así como sean nuestros pensamientos será nuestro destino! Aquello en lo cual se enfoca la mente, cobra más fuerza y se vuelve predominante en nuestra vida. A esto se le conoce como la “ley de la atención”. Por lo tanto, si enfoca la mente hacia lo que le molesta, le falta, le preocupa o hacia los problemas, los defectos de los demás, las culpas, los rencores, etc., éstos toman más fuerza en su vida e influyen negativamente en sus emociones.

“La mente es un montón de pensamientos. Las acciones surgen de los pensamientos. De las acciones surgen los frutos resultantes. Por lo tanto, los pensamientos son las semillas que finalmente dan frutos en la forma de fortuna o


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desgracia. El ser humano es así el arquitecto de su propio destino. Dado que los pensamientos determinan las acciones, es esencial cultivar buenos pensamientos… Cuando la mente está vuelta hacia Dios, la propia vida es purificada. Cuando nuestros pensamientos son purificados, nuestras vidas serán transformadas en ideales.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Marzo de 2006)

- Observar y orientar la mente

Al observar la mente podemos descubrir los pensamientos que gobiernan nuestra vida. Al igual que en la relación con las emociones, es conveniente identificar los pensamientos que suelen cruzar por nuestra mente, relacionarse con ellos de la mejor manera y soltarlos, evitando aferrarnos a ellos o “alimentarlos” indefinidamente. Tal vez, el mejor pensamiento al que podemos aferrar nuestra mente para disminuir los pensamientos destructivos, es acerca de la Divinidad o de lo que somos realmente. En los Vedas se indica que la mente es al mismo tiempo la causa de la liberación y de la esclavitud. Si la enfocamos a nuestra verdadera naturaleza, a nuestro Ser; estamos iluminados en ese momento, libres de la ilusión y del auto-engaño. Pero, si permitimos que la mente refuerce nuestra identificación con el organismo humano y la enfocamos en la búsqueda de la satisfacción de nuestros deseos en el mundo temporal y cambiante, quedamos atados a esto y estaremos sujetos a los intervalos de placer y dolor, y al ciclo de nacimientos y muertes.

“Se dice que la mente es la causa tanto de la esclavitud como de la liberación. La mente es como una cerradura y el corazón es la llave. Cuando la llave se vuelve hacia Dios, existe el desapego. Cuando se vuelve hacia el mundo, hay apego. Por lo tanto, la mente tiene que ser dirigida hacia lo que es santo y puro. Entonces se conducirá una vida feliz, alegre y libre. De hecho, el ser humano es una encarnación de la bienaventuranza. La Divinidad no está confinada a


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una forma o lugar específico. Cada uno puede comprender que esta Divinidad, todo penetrante y todo poderosa, está dentro de uno mismo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Febrero de 2006)

- Unidad, Pureza y Divinidad

La pureza mental permite que nuestro verdadero Ser se pueda expresar más plenamente. Una mente pura es una mente estable y clara que permite el afloramiento de nuestra realidad esencial…

“Cuando la superficie del estanque está agitada, el reflejo de la luna en él se ve ondulado. Pero sobre una superficie en calma el reflejo de la luna es claro y estable. De la misma manera, si la mente del ser humano está confusa y agitada, también su amor se distorsiona. Cuando la mente es pura, desinteresada y firme, la Divinidad se manifiesta en toda Su pureza y plenitud. Debido a la contaminación de la mente por la obsesión con los múltiples objetos externos, el ser humano es hoy incapaz de experimentar a la Divinidad que está presente en él.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Agosto de 2007)

“Las personas deben saber que no hay nada más cercano a ellas que la Divinidad. Cada quien debe esforzarse por reconocer esta Divinidad que reside en su interior. La mayor parte de la gente pierde el tiempo observando rituales y formas de adoración externos. Paralelamente a estas prácticas, deben tratar de alcanzar la pureza interior. El ser humano es una combinación de hombre, animal y Dios, y en la inevitable pugna entre los tres por el predominio, deben cerciorarse de que gane Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Enero de 2008)


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La pureza va de la mano con la unidad: la unidad entre los pensamientos, las palabras y las acciones; y la visión de la unidad en la diversidad o el reconocimiento de que la misma Conciencia está en todos los seres.

“El ser humano se deja llevar por la identificación con el cuerpo, y por lo tanto percibe diversidad en la creación. De hecho, lo que subyace a la aparente diversidad es la unidad. Cualquier diferencia que ustedes vean, son sólo creaciones de sus mentes. La mente del ser humano es la única responsable, tanto de su esclavitud como de su liberación. Reconozcan la verdad de que la misma esencia divina está presente en todos, y quedarán libres de todas las diferencias y conflictos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Enero de 2008) “La mente es muy poderosa. Pero el ser humano está desviando su mente hacia objetos triviales, sin reconocer al Espíritu. Dado que son incapaces de darse cuenta de su propio Ser, ustedes experimentan las dualidades del placer y el dolor. Ellos no los afectarán más una vez que hayan conocido a su propio Ser. Todo sufrimiento se debe a la falta de moralidad en nuestros sentimientos y conducta. Nuestro destino se basa en nuestro carácter. El carácter se basa en las acciones. Las acciones se basan en los pensamientos. Por lo tanto, cultiven la moralidad y los pensamientos sagrados.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Diciembre de 2006) “Deben inquirir constantemente dentro de sí mismos, ‘¿Estoy olvidando a Dios?’ Deben estar siempre conscientes de su verdadera naturaleza y recordarse a sí mismo, ‘Yo soy Yo’. Si se establecen firmemente en esa Verdad, no quedará lugar para que alberguen algún mal pensamiento hacia otros.” (S.S.B. Extracto del discurso del 28 de Julio de 2007)


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Entonces la Pureza y la Unidad conducen hacia la Divinidad. A su vez, la práctica de los valores humanos es un camino seguro y eficaz hacia la Pureza y la Unidad.

“Las llamas de la ira, el orgullo, el odio y la envidia son más devastadoras que los otros fuegos; ellas surgen en la mente furtivamente y por rachas, y siempre demandan más y más para alimentarse de ello. ¿Cómo extinguir estas horribles llamas? Pues bien, el Sanathana Dharma (Eterna Religión Universal) tiene ciertos extintores que han sido probados por la experiencia y aprobados por los sabios. Ellos son: Sathya (verdad) Dharma (rectitud), Shanthi (paz interna), Prema (amor divino) y Ahimsa (no violencia). Saturen su corazón con éstos y se volverán a prueba de esos fuegos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Febrero de 2003)

- Alimentación de la mente La mente se alimenta a través de todo lo que entra a través de los sentidos. Es importante que sea consciente de lo que cotidianamente observa, escucha, hace, come, huele y habla; y de la gente con la que comparte su tiempo; porque todo esto influye en su mente.

“El cuerpo y la mente están estrechamente interrelacionados, y ambos se sustentan con el alimento. Por lo tanto el alimento tiene un considerable impacto en el carácter y el destino del individuo. Según sea el alimento, así será la mente; según sea la mente, así será el pensamiento; según sea el pensamiento, así será el acto. Todo lo que es percibido por los sentidos constituye ‘alimento’. Para el aspirante espiritual el alimento debe ser siempre del tipo puro y moderado. Los sonidos, las imágenes, las impresiones, las ideas, las lecciones, los contactos: todos deben promover reverencia, humildad, equilibrio, ecuanimidad y simplicidad. El alimento puro y moderado es el único capaz de mantener a la mente estable y concentrada por


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completo en el Alma, la cual debe ser objeto de contemplación si desean alcanzar la paz interior.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Junio de 2006)

“Es posible que las mentes de algunas personas sean susceptibles a algunas perturbaciones debido a cambios en los hábitos alimentarios y de recreación. También es posible que hayan sido influenciados por amistades en este sentido. Repito frecuentemente el dicho, ‘Dime con quien andas y te diré quien eres’. Por eso les aconsejo que se unan a la compañía de almas nobles.” (S.S.B. Extracto del discurso del 28 de Julio de 2007)

- Repetición de un Nombre de Dios

Una forma muy útil y práctica para alimentar adecuadamente a la mente y cultivar su pureza es recordar constante a la Divinidad. Hay una práctica espiritual que ha estado vigente desde la antigüedad y consiste en repetir (puede ser mentalmente) el nombre de alguna de las manifestaciones más especiales de la Divinidad en forma humana, como: Jesucristo, Krishna, Buda, Rama, Sai Baba, etc. Al mismo tiempo puede visualizar Su forma, con mucho amor y una actitud de conexión y entrega total a Dios. Puede acompañar esta repetición de la respiración, para obtener una mayor concentración y calma y, si lo desea, puede agregarle una melodía al nombre que repite. Sathya Sai Baba ha dicho que esta práctica espiritual denominada “Repetición del Nombre de Dios” es la más recomendada para esta Era de la humanidad, en la cual, por las características de la vida moderna, muchas personas han olvidado a Dios o fácilmente pierden contacto con El y tienen intereses desligados de la espiritualidad.

“Este Kali Yuga7 es elogiado en las escrituras

como aquel que conduce como ningún otro a la

7 Yugas: Eras de la humanidad. Son cuatro y se repiten cíclicamente: Kritha,

Threta, Dwapara y Kali. La moralidad va en decadencia a medida que cambian estas Eras, hasta que vuelve a iniciarse el ciclo. Actualmente nos encontramos


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salvación, pues se puede lograr lo más elevado mediante el solo pensamiento de Dios y el recuerdo de Su Nombre. De todos los yugas, éste es descrito como el más sagrado, el más benéfico. La meditación fue prescrita como el medio de liberación en el Kritha yuga; las austeridades como el mejor medio en el Threta yuga, y la adoración ritual en el Dwapara yuga; pero para el ser humano de este yuga, el sencillo remedio prescrito es sólo la consciencia constante del Nombre Divino. A pesar de esto, es triste que al ser humano no le interese este camino y convierta su vida en un despilfarro estéril.” (S.S.B. Mensajes de Sathya Sai. Tomo XI. Cap. 28) “En esta era de Kali, los malvados tienen que ser reformados y reconstruidos por medio del amor y la compasión. Es por esto que el Avatar ha venido desarmado. Ha venido con el mensaje del amor. El arma que puede transformar al vil y al vicioso es el Nombre del Señor expresado con amor. El Nombre tiene la fragancia de la Gloria Divina. De manera que cuando se le da vueltas en la mente, la transmuta en un instrumento para la liberación de la ilusión.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Marzo de 2003) “La mente se suele caracterizar como una serpiente. Esto se debe a que no se mueve en línea recta. Se deleita en estratagemas tortuosas y astutas maquinaciones. Evita el recto camino de la sinceridad y la veracidad. Pero esta mente de serpiente puede ser sometida al encantamiento de la inocencia. Cuando el encantador de serpientes ejecuta su instrumento, la serpiente mece fascinada su capucha; así también la mente se mecerá con la música que emana de recitar el Nombre de Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Octubre de 2007)

en el Kali Yuga; pero Sathya Sai Baba ha dicho que estamos entrando en una etapa especial intermedia en la cual reinará la espiritualidad: una Edad Dorada. En pocos años los cambios serán visibles.


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“La mente se aferra a una u otra cosa. Haz que se aferre a Dios, que todo lo dedique a Dios, la pérdida y la ganancia, el regocijo y el desaliento. Entonces poseerás el secreto de la paz y el contento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 31 de Enero de 2003) “Dharma (la acción correcta) purifica la mente y te conduce a Dios. Crea una preferencia por el Nombre y la Forma de Dios. Cuando ames el Nombre y la Forma de Dios, naturalmente respetarás y obedecerás la autoridad de Dios. Ten el Nombre en la lengua y la Forma en los ojos; y el demonio del deseo sin fin volará de tu mente, dejando en ti alegría y contento. Este tipo de contemplación constante en el Dios que mora en tu interior, promoverá el amor por todos los seres. Entonces verás el bien en los demás y procurarás hacer el bien a los demás.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Octubre de 2007).

- Recuperando el poder sobre la mente

Al igual que se planteó con respecto a las emociones, para evitar aferrarse a ciertos pensamientos destructivos, puede entregárselos a Dios y pedirle que se encargue de ellos y de la situación en general. Al hacer este acto de entrega, usted también toma distancia de los pensamientos y puede verlos como distintos de usted mismo, es decir, puede desidentificarse de ellos. De esta manera, se le facilita encontrar una manera más conveniente para manejarlos, ya sea comprendiéndolos, cuestionándolos o modificándolos, entre otras opciones. En ese orden de ideas, una buena manera para relacionarse con los pensamientos puede ser entendiéndolos mejor, analizando sus orígenes, su relación con otros temas de su vida, su importancia, etc. Otra forma puede ser cuestionándolos para descubrir si son acertados o equivocados, convenientes o inconvenientes, exactos o distorsionados, etc. Esto es útil especialmente con los pensamientos destructivos, hacia si mismo (ej. “Todo lo que hago me sale mal”) o hacia los demás


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(ej. “Esta persona siempre quiere aprovecharse de mi”). Otra opción consiste en modificarlos por otros más acordes con la realidad (ej. “Lo que hice para esta tarea en particular me salió mal”) o más amorosos (ej. “Puede ser que esté pre-juzgando a esta persona, y que realmente no siempre se quiera aprovechar de mi”).

- Enfocarse en lo bueno

Cuando los pensamientos son más compasivos hacia uno mismo y los demás, podemos acceder más fácilmente a nuestra paz interior; sin que esto quiera decir que uno debe hacerse “el ciego” frente a las malas acciones propias o ajenas. Más bien se trata de asumir una actitud menos prejuiciosa y de evitar la proyección de nuestros propios defectos sobre los demás (ej. criticar a otro por mentiroso sin darse cuenta que uno también dice mentiras). Cada vez que juzguemos a otra persona podemos “contrarrestar” este pensamiento pensando igualmente en las cualidades que percibimos en ella, de esta manera equilibraremos nuestros juicios y veremos también lo bueno.

“Uno no se debe dedicar a analizar lo bueno y lo malo de los demás. Si usamos nuestros ojos para buscar culpas en los demás y pasamos todo nuestro tiempo en este proceso, nuestro corazón también se volverá impuro y desarrollaremos malos pensamientos. El corazón es como la lente de una cámara. El objeto sobre el que concentramos nuestra atención queda impreso en la mente. Por eso tenemos que tratar de percibir lo bueno en todo lo que vemos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 4 de Julio de 2007).

- Buscar enseñanzas y alternativas

Otro de los vicios de la mente es quedarse anclada en situaciones del pasado que nos generaron algún tipo de sufrimiento. Varias veces la mente puede quedar atrapada en ciertas situaciones pensando “¿por qué me sucedió esto?”, sin encontrar una respuesta que la tranquilice. En muchos casos es difícil encontrar la razón o la causa por la cual uno tuvo que


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vivir una experiencia determinada (ej. la muerte del cuerpo de un ser querido, la terminación de una relación afectiva, etc.). En esos casos, puede ser más práctico preguntarse “¿para qué me puede servir esto?”, es decir, analizar qué puedo aprender de esa experiencia o para qué me puede ayudar en mi proceso de evolución. Pero muchas veces tampoco puede ser fácil hallar una respuesta satisfactoria para este interrogante, entonces, mi sugerencia es que avance hacia una nueva pregunta: “bueno, ¿y ahora qué puedo hacer?” En otras palabras, si no obtuvo una respuesta al “porqué” ni al “para qué”, entonces pregúntese “y ahora qué”. Al menos por el momento, busque alternativas para afrontar la situación y no quedarse estancado en el pasado. Si hace esto, evitará enfocarse exclusivamente en el problema y podrá dirigir la mente hacia las alternativas de solución o de afrontamiento, y logrará continuar su camino por la vida, con la comprensión de que las dificultades y los retos hacen parte de ella, y son oportunidades de crecimiento.

- Entregar los resultados a la Divinidad

Recuerde que usted no puede controlarlo todo, que hay muchas variables que influyen en cada evento y que no dependen exclusivamente de usted. Por ejemplo, para que sea seleccionado para un cargo laboral, seguramente se necesitará, primero que todo, que a usted le haya llegado la información sobre esa oportunidad laboral; que su perfil y hoja de vida correspondan con las necesidades de la empresa; que en la entrevista usted haya estado en un buen momento y haya generado aceptación en el/la entrevistador(a); que no se hayan presentado otros aspirantes con mayores fortalezas laborales y personales que las suyas, etc. Es decir, el hecho de que usted resulte seleccionado para el puesto no solo depende de su esfuerzo sino de un sinnúmero de variables adicionales que escapan a su control. El camino védico de la acción desinteresada (karma yoga), enseña que uno debe hacer el mejor esfuerzo en sus actividades y entregarle los resultados a Dios, a la vida o al universo, (según sean sus creencias). De esta manera, evita apegarse a las consecuencias de sus acciones y sufrir cuando el desenlace sea distinto al que hubiera deseado. Esta actitud de servir y actuar de la mejor manera, aceptando los resultados


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como actos de la Voluntad Divina, es una alternativa muy poderosa para conservar la paz mental.

- Control de si mismo Es muy cierto que muchas veces uno no puede elegir la forma en que se le presentan ciertas situaciones; pero si puede escoger la forma en que reacciona ante ellas, la actitud con la cual las afronta. Cada uno tiene una mayor posibilidad de controlar sus propias reacciones antes que controlar muchos de los eventos externos que suceden en su vida. Y, cuando la mente está en calma, es posible lograr un mayor dominio de si mismo. Una buena técnica para aquietar la mente consiste en respirar lenta y profundamente y, si lo prefiere, acompañándola de la repetición mental de una afirmación positiva (ej. “Yo soy el Testigo”, “Yo soy Conciencia”, “Hágase Tu voluntad”, “Yo soy uno con Dios”, “Paz, Calma”, “Paz, Amor”, “Todo pasa”, etc.) o de un mantra, que es una plegaria en un idioma particular, como el Sánscrito, que tiene un gran poder energético para purificar y estabilizar la mente. EJERCICIO 12: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Respire lenta y profundamente por la nariz, llevando el aire hasta el abdomen. Al tomar aire, infle un poco el abdomen y al exhalarlo, desínflelo. Escoja una afirmación, como las mencionadas anteriormente o la que usted prefiera. Pronúnciela mentalmente, de manera muy lenta, con cada inhalación y exhalación. Si lo prefiere, divídala en dos y pronuncie la primera parte al tomar aire y la segunda al soltarlo. Hágalo por 15 o 30 segundos, como mínimo.

B. ¿Cómo se sintió? ¿Su mente estuvo en calma por momentos? Aplique este ejercicio en su vida cotidiana tanto como pueda o al menos cuando se esté alterando.

- Deseos y apegos


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Unas de las principales fuentes de sufrimiento son los deseos y los apegos, como lo indicó el Buda. Es decir, podemos sufrir cuando queremos algo que aún no tenemos (deseos) o porque queremos tanto lo que tenemos o hacemos (apegos), que cuando lo perdemos nos sentimos mal. Así que vale la pena tener en cuenta lo que el gran santo San Agustín dijo en su momento: “deseo poco y lo poco que deseo, lo deseo poco”. Recuerde que la bienaventuranza y la paz permanentes están en usted mismo, son su verdadero Ser. Todo lo externo, lo que tiene nombre y forma, es pasajero y cambiante; por tal motivo, no le puede dar una felicidad permanente y estable. También se dice sabiamente que rico no es el que más tiene; sino el que menos desea. No todo lo que queremos tener es realmente una necesidad para nuestra vida. Es importante establecer la diferencia entre lo que se desea y lo que en verdad se necesita. Al hacer esto, tal vez se dé cuenta de todo lo que tiene y le suceda lo mismo que a Sócrates, quien al visitar el mercado de aquella época dijo algo así como: “al ver todo esto, me doy cuenta de tantas cosas que no necesito”. Sathya Sai Baba recomienda ponerle un límite a los deseos para evitar que ellos se multipliquen descontroladamente y perturben nuestra paz interior. Si está en sus manos satisfacer un deseo, que no es perjudicial para si mismo ni para otros, es conveniente realizarlo, puesto que, de esta manera, el deseo se consume y su mente puede dejar de aferrarse a él (consciente o inconscientemente), teniendo en cuenta evitar los excesos que pueden generar dependencias. Como le dijo Sathya Sai Baba a un par de devotos muy cercanos a él (Johnima y Kalassu), con respecto a este tema: “disfruten plenamente la vida; pero con una regla: nada de apegos”.

“La palabra ‘vairagya’ (desapego) significa literalmente lo contrario de ‘raga’ (apego). Vairagya no significa que deban abandonar todo y retirarse a una selva. Vairagya en realidad significa que deben quedarse donde están, en cualquier situación de la vida en que se encuentren, y entender la naturaleza sutil de las cosas, abandonando al mismo tiempo los deseos mundanos. Significa que usando la discriminación


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deben saber qué aceptar y qué rechazar. Deben esforzarse por reconocer la Divinidad de cada objeto que vean y disfrutarla. Vairagya no es simplemente abandonar las cosas. Consiste en disfrutar sin apego cosas que previamente se disfrutaban con apego. Eso es verdaderamente Vairagya. Ese es el signo de un verdadero ser humano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Diciembre de 2007)

Para la sociedad consumista de hoy en día, son muy pertinentes estos mensajes…

“Se ha aconsejado que los deseos han de ser gradualmente reducidos por todos. En la medida que se multiplican los deseos, aumenta el apego. Esto conduce a más y más cautiverio. Esto hace que el ser humano sufra de varias maneras. ¿De dónde proviene este cautiverio? Es creado por sus propios deseos. Son cautivos de sus sufrimientos. Reduzcan sus deseos y vivirán en paz. No enfrentarán peligro alguno. Eso les dará paz. Es por eso que es muy justo el dicho: ‘con menos equipaje, más comodidad’.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Marzo de 2007) “El ser humano siempre busca la felicidad mediante el intento de satisfacer sus deseos. Si un deseo es satisfecho se siente alegre y cuando no lo es se siente descorazonado. Pero el problema es que el deseo es una hoguera que arde cada vez con más furia, pidiendo continuamente más combustible. Un deseo lleva a diez más y el ser humano se agota tratando de satisfacer sus deseos. Tiene que ser devuelto de este camino del deseo interminable, hacia el camino del contento y la alegría internos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 7 de Junio de 2007) “El ser humano está esclavizado por el dinero. Vive una vida superficial y artificial. Esto es una verdadera lástima. El ser humano debe procurar


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poseer el dinero que sea sumamente esencial para vivir. La cantidad de riqueza que uno debe tener puede compararse a los zapatos que use: demasiado pequeños, causan dolor; demasiado grandes, son un estorbo para caminar. Asimismo, el dinero debe ser justo lo suficiente para una vida de comodidad física y mental. Cuando tenemos más, se incrementan el orgullo, la pereza y el desprecio por los demás.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Julio de 2007) “Los impulsos generan el deseo. El deseo causa el nacimiento y también la muerte. Cuando el ser humano está desprovisto de deseos no necesita pasar por el nacimiento y la muerte. El próximo nacimiento es el resultado de los deseos insatisfechos en esta vida y está determinado por ellos. Los que no tiene ningún deseo por los objetos materiales pueden alcanzar la consciencia de la realidad Átmica. De hecho, el deseo de conocer a Dios, de amar a Dios y de ser amado por Dios no es un deseo que ata.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 29 Diciembre de 2003) “La mente revolotea rápidamente de una idea a la otra; juega con un objeto por un momento y lo abandona al siguiente. Ustedes pueden lograr quedarse callados, pero es casi imposible mantener en silencio a la mente. La mente está tejida con los hilos del deseo. Su característica es aletear y revolotear, de aquí para allá, a través de las salidas que son los sentidos, hacia el mundo externo de color, sonido, sabor, olor y tacto. Pero puede ser domesticada y bien usada por el ser humano. Si la mantenemos dedicada a buenas ocupaciones y buenas acciones, especialmente en la contemplación del Absoluto, no se perderá llevando al ser humano a la ruina; porque Dios es la fuente de la paz duradera y la sabiduría.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Agosto de 2007)


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“Por medio de una disciplina especial puede calmarse la turbulencia de la mente y, como resultado de ello, será posible conocer la Bienaventuranza del Alma, libre de ataduras. La mente atrae al ser humano hacia fuera y le ofrece sólo gozos materiales y superficiales, pero el sabio sabe que tales gozos son fugaces: para él, el Alma es suficiente para colmar todos sus deseos de alegría perfecta y permanente.” (Sathya Sai Baba, 1999, p. 44) “El ser humano es la conciencia encarnada. El ser humano es el más elevado ser en la creación. Por lo tanto, no debe convertirse en una criatura instintiva como los animales. El ser humano debe progresar de lo humano a lo divino. No es el mundo lo que aprisiona al ser humano. El mundo no tiene ojos para ver, ni manos para aferrar. El ser humano es prisionero de sus propios pensamientos y deseos. En su apego a lo efímero y perecedero, el ser humano olvida su Divinidad intrínseca, y no percibe que todo en el universo ha venido de la Divinidad y no puede existir sin el poder de la Divinidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 29 de Junio de 2007)

- Discernimiento

Los seres humanos tenemos la facultad del intelecto, que nos permite discernir entre lo correcto y lo incorrecto. Desafortunadamente, no siempre nos tomamos el trabajo de reflexionar sobre las consecuencias de nuestros actos y su valor ético. Pero no es posible experimentar la paz permanente si actuamos incorrectamente.

“Vemos un gran número de seres vivientes en este mundo, mas ninguno de ellos posee la grandeza, la sabiduría y la discriminación que posee el ser humano. Es por ello que se dice ‘entre todos los seres vivientes, el nacimiento humano constituye


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una rareza’… No obstante, pese a todo su conocimiento y su sentido común, el poder de discriminación del ser humano se queda en cero. ¿Qué es bueno y qué es malo? ¿Qué habría de hacerse y qué no habría de hacerse? Este poder de razonar está en cero en el ser humano de hoy. Es por ello que la ‘humanidad’ ha sufrido una tal decadencia. El valor de la ‘humanidad’ depende únicamente del poder discriminatorio. El ser humano puede que posea cualquier cosa y todo; mas, ¿de qué le sirve si no tiene discriminación? ”. (S.S.B. Extracto del discurso del 26 de Julio de 2007)

Una gran ayuda para tomar decisiones éticamente más correctas, consiste en pensar qué sería lo que más le agradaría a Dios que yo hiciera en esta circunstancia; o qué me aconsejaría El si estuviera aquí presente. También es útil recordar el refrán: “Haz al otro lo que te gustaría que hicieran contigo”. Por su parte, Sathya Sai Baba tiene dos frases muy profundas y concretas, que sirven como una excelente guía en la vida: “Ayuda siempre, nunca lastimes”, “Ama a todos, sirve a todos”.

El intelecto también nos capacita para discriminar entre lo transitorio y lo eterno, lo real y lo ilusorio, lo manifestado (el mundo) y la fuente inmanifestada (la Divinidad), nuestro organismo cambiante y nuestro verdadero Ser permanente. Y esta capacidad es la que nos permite llegar a descubrir qué somos en realidad y ser verdaderamente libres.

“Tomar consciencia del propio Ser, debe constituir el objetivo de la existencia humana. Este objetivo tiene que lograrse a través de tres etapas: autoconfianza, autosatisfacción y autosacrificio. Los humanos deben considerarse amos del cuerpo, los sentidos y la mente. Tienen que usar el intelecto para experimentar su propia unidad con lo Divino: la Conciencia cósmica que todo lo impregna.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Mayo de 2006)


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“Mas, ustedes no son el cuerpo, ustedes no son los sentidos, ustedes no son el intelecto, ustedes son ustedes. Debieran ser conscientes de: “Yo soy Yo”. Ese principio universal ‘Yo’ es sólo uno. La Verdad es una, mas los sabios se refieren a ella por muchos nombres. El ‘yo’ individual representa al ego. Si tacharan este ‘yo’ [Se refiere al ‘I’ en inglés – N. de la T.], se convertirá en la cruz adorada por los cristianos. Esto significa que cuando desechan a su ego, se convierten en su verdadero ‘sí mismo’. Ustedes no son personas comunes – ustedes son Dios.” (S.S.B. Tomado del Discurso del 26 de Julio de 2007)

- Calmar la mente Para lograr mantenernos conscientes de nuestra verdadera naturaleza es necesario retomar el control sobre la mente para emplearla como nuestra herramienta y dejar de ser esclavos de sus tendencias. Para ello, es importante mantenerla calmada y estable, como se indicó anteriormente. A continuación encuentra otras técnicas muy sencillas que le pueden servir para este propósito. ¡Ensáyelas! EJERCICIO 13: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Siéntese en el borde de una silla. Incline su tronco hacia delante tanto como pueda, llevando la cabeza en dirección al piso. Cierre los ojos y visualice una luz desde su cabeza hasta el suelo, e imagine que deposita todos los pensamientos en la tierra. Demórese unos 10 segundos y luego, enderece su cuerpo muy despacio, de nuevo. Posteriormente, hágase consciente de cómo se encuentra su mente.

B. Sentado, con la espalda recta y sin tensarla. Hágase consciente de la respiración (no es necesario cerrar los ojos). Respire en forma lenta y profunda por la nariz, inflando levemente el abdomen al inhalar y desinflándolo al exhalar, sin forzar mucho la respiración. Lleve toda su atención


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a la entrada y salida del aire por las fosas nasales, y al movimiento de su abdomen. Después de unos 30 segundos, mire como está su mente y cómo se siente.

C. Meditación caminando: Colóquese de pie. Mantenga la cabeza erguida y la mirada hacia el piso, a 1 o 2 metros de distancia. Descuelgue sus brazos frente a usted y entrelace sus manos, sin tensar los brazos ni los hombros. Levante gradualmente la planta del pie derecho e inhale por la nariz al mismo tiempo. Luego, dé un paso muy pequeño, lentamente, y coloque la planta del pie gradualmente, comenzando por el talón, al tiempo que exhala por la nariz. Si lo prefiere, puede acompañar la inhalación y exhalación, de la repetición de un Mantra, Nombre de Dios o afirmación, para disminuir las distracciones de la mente. Continúe caminando en cámara lenta y observe cómo se aquieta su mente.

- Autoindagación

El gran santo y sabio de la India, Ramana Maharshi, quien vivió hasta mediados del siglo XX, enseñaba que el primer pensamiento que surge en nosotros es el “pensamiento yo”, es decir, el pensamiento inconsciente de ser alguien individual, distinto y separado de todo lo demás. Este pensamiento es automático y está relacionado con nuestra identificación con el organismo cuerpo-emociones-mente-personalidad. Swami Ramana sugiere ir más allá del “pensamiento yo”, buscando su origen, dirigiendo la mente hacia su fuente: el Ser. De esta manera, la mente se aquieta y queda bajo el control del Atma. Para ello se puede utilizar la pregunta “¿quién soy yo?” o “¿qué soy yo?”, y en vez de dar una respuesta intelectual, se lleva la mente hacia el silencio, para obtener una respuesta vivencial de lo que uno es en realidad y así experimentar el verdadero ser: Conciencia, Paz, Amor, Silencio. Para contactar nuestro Ser, Swami Ramana recomendaba especialmente, enfocar la atención en el corazón espiritual, es decir, internamente en el pecho, un poco hacia el lado derecho. Enseñaba que allí se encuentra “el centro” o “el asiento”, por así decirlo, de la Conciencia, del Ser. Esta técnica es una de las formas más poderosas para aquietar la mente.


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A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Inhale por la nariz y exhale por la boca, suspirando prolongadamente (¡Haahh!). Hágalo 3 veces. Después, pregúntese mentalmente “¿qué soy yo?” o “¿quién soy yo?” Cierre los ojos y dirija su atención detrás de ellos, en el interior de su cabeza. Luego empiece a descender su atención muy lentamente detrás de la nariz, de la boca, por la garganta, hasta el pecho, un poco al lado derecho, donde queda ubicado el corazón espiritual. Mantenga su mente enfocada en ese espacio o sienta su energía en ese punto, por un buen tiempo. Recuerde sentir en vez de pensar. Cada vez que se desconcentre vuelva a percibir el espacio o la energía en ese punto. Sienta lo que usted es en realidad: Conciencia, Paz, Amor, Silencio.

Nota: Como para muchos puede ser muy difícil mantener su mente en el silencio al realizar las actividades cotidianas, aquí le presento otra alternativa.

B. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin

tensarla. Inhale por la nariz y exhale por la boca, suspirando prolongadamente (¡Haahh!). Hágalo 3 veces. Después continúe respirando lenta y profundamente por la nariz. Repita mentalmente “YO” al inhalar y “SOY” al exhalar, en cámara lenta y a un volumen interno muy alto. Mantenga los ojos cerrados, dirija su atención detrás de ellos (si lo prefiere imagine que sus ojos miran hacia dentro) y empiece a descender su atención detrás de la nariz, de la boca, por la garganta, hasta el pecho, un poco al lado derecho. Sienta que el sonido del “Yo-Soy” se produce o suena en este punto interno del pecho. Para una mayor concentración, puede visualizar cada letra, a


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medida que la va pronunciando, en ese mismo lugar del pecho. Tenga presente que “Yo–Soy” es otro nombre para su Ser: Existencia-Conciencia-Bienaventuranza. Continúe haciendo este ejercicio por unos 30 segundos como mínimo.

“Cuando estás en las profundidades del mar todo es calma, todo es paz. La agitación, el ruido y la confusión se encuentran sólo en la superficie. También en lo profundo del corazón, existe un remanso de paz donde debes refugiarte. Sólo pueden garantizarse la paz y la alegría comprendiendo que forman parte de nuestra propia naturaleza. Por lo tanto, la verdadera paz solo puede encontrarse en las profundidades del espíritu, en la disciplina de la mente, teniendo fe en la base de toda esta aparente multiplicidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 29 de Enero de 2003)

Cada vez que esté alterado por los pensamientos o las situaciones recuerde preguntarse mentalmente “¿a quién le sucede esto?” A lo cual seguramente su mente responderá: “a mi”. No se contente con esto y pregúntese nuevamente: “pero ¿qué soy yo?” o “¿quién soy yo?”. Y recuerde que usted es realmente Conciencia, el Alma, el testigo y no el organismo humano que es el que está viéndose alterado con las emociones, los pensamientos, etc. Si hace este ejercicio continuamente, recordará cada vez más rápidamente su verdadera realidad y así podrá retomar el control sobre su mente y estabilizar sus emociones con mayor facilidad.

“El Señor está presente en cada corazón. La persona liberada, que ha tenido la visión de su Atma, nunca será afectada por la pena; la pena nunca puede apoderarse de ella. El Atma está en la hormiga así como en el elefante; en el átomo más pequeño así como en el aire que nos rodea. El buscador debe buscar hacia su propio interior para hallar los orígenes de las agitaciones de la mente. Este proceso bastará para librar a la mente de su actividad incesante, que la hace dudar y discutir, y estabilizará al buscador en la


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omnipresente Conciencia Universal.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Julio de 2007) “Si el ser humano hoy se balancea entre el dolor y la miseria, su mente es la responsable de esto. La felicidad y la pena, el afecto y la aversión, que el ser humano experimenta hoy surgen de su mente. Cuando la mente está entrenada para ver la unidad de toda la creación, no habrá perversiones de ninguna clase.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Enero de 2003) “El ser humano comete un gran error al olvidar su Divinidad. No logra reconocer su verdadera naturaleza, se considera a sí mismo un individuo separado, y llena su mente de deseos y odio. No debemos considerar a la existencia humana como algo lastimoso, o débil e impotente. El ser humano es la encarnacion de Sat-Chit-Ananda (Existencia-Conciencia-Bienaventuranza). La Divinidad en él está siempre irradiando luz y bienaventuranza. Pero debido a la barrera de los malos pensamientos, él es incapaz de experimentar esta bienaventuranza.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 29 de Julio de 2007)


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Estaban tres mujeres tomando un café y discutiendo sobre lo importantes que eran sus hijos. La primera le dice a sus amigas con prepotencia: “Mi hijo es un sacerdote y es muy importante porque cada vez que llega a un lugar, todas lo llaman ‘Padre’.” La segunda dice con más orgullo: “Bueno, pues mi hijo es un cardenal y es tan importante que cada vez que llega a un lugar, todas le dicen ‘Su eminencia’.” La tercera toma su café en silencio. Y entonces las otras dos la miran fijamente y le dicen. “¿Y bien?” Ella responde: “Pues mi hijo se la pasa en el gimnasio y en el club nocturno, tiene un cuerpo de película y gana mucho dinero con sus exhibiciones. Y es tan importante, que cada vez que llega a un lugar todas exclaman ‘¡Oh Dios mío!’.”


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d. Sugerencias para relacionarse con la personalidad.

Desde el nacimiento su organismo ha tenido ciertos rasgos característicos en la forma de pensar, sentir y relacionarse con el entorno. A medida que fue creciendo se fueron consolidando varios de estos patrones y aún hoy en día, siguen siendo modificados, en mayor o menor grado, por las experiencias que vive diariamente.

“En la Creación, ningún objeto es igual a otro. Nunca dos humanos son similares, pues cada uno tiene experiencias particulares. Más aún, el mismo individuo sigue cambiando con el tiempo, a medida que pasa por la infancia, la juventud, la edad mediana y finalmente la vejez. El ser humano debe buscar refugio en el invariable Paramatman (Dios), del cual emerge toda la diversidad y en el cual la diversidad se funde. Sólo entonces puede obtener paz y satisfacción perdurables.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Agosto de 2007)

Hay personas más introvertidas o extrovertidas; más intuitivas, mentales, emocionales o corporales; más impulsivas o auto-controladas; más dominantes o pasivas; más colaboradoras o egoístas, etc. En su personalidad, hay distintas tendencias relacionadas con la forma de pensar, sentir y actuar. Unas pueden serle útiles para mantener una relación armoniosa consigo mismo y con los demás; pero otras tienen el efecto contrario.


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- Tendencias conscientes y subconscientes También es muy posible que no conozca claramente algunos aspectos de su personalidad y que lo “manejen” desde el inconsciente. Estos aspectos son los que componen “su sombra”, y es importante que la descubra, para poder relacionarse con ella conscientemente y dejar de ser esclavo de su poder. Para darse cuenta de su “sombra”, usted puede hacer el ejercicio de auto-observarse constantemente y así descubrir las tendencias que posee su personalidad e identificar los deseos, motivaciones e intenciones más profundas que guían sus comportamientos. Para lograr esto, es importante que sea realmente sincero con usted mismo y que esté dispuesto a aceptar aspectos de su personalidad que le pueden desagradar o que pueden ir en contra de la imagen que le gusta proyectar ante los demás. Si observa sus pensamientos y motivaciones más “privados”, sus comportamientos más automáticos e impulsivos y sus emociones más profundas, podrá conocer más su “sombra”. Como se requiere valentía para mirar la personalidad con sinceridad, es mucho más fácil hacerlo si recuerda constantemente que usted tiene una personalidad pero que no es la personalidad, sino el Ser que se manifiesta a través de esa personalidad. De esta manera, podrá tener más tranquilidad a la hora de ver “cara a cara” ciertos aspectos de su personalidad que lo harían sentir apenado o decepcionado.

“Un poco de práctica les enseñará a aferrarse fuerte a los pies de Dios mientras vagan por el mundo, cumpliendo sus obligaciones y llevando a cabo todas las responsabilidades dedicadas a Él. Hagan todo el trabajo como actores en una obra, manteniendo su identidad separada y no apegada a su personalidad o su rol. Recuerden que todo es tan solo una obra y que el Señor les ha asignado un papel.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 25 de Noviembre de 2003)

Recuerde constantemente que usted es distinto de su personalidad y evite que la personalidad lo controle totalmente


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y perturbe su paz interior. Desde esta posición, le es más fácil hacer los ajustes en su personalidad, que sean más convenientes para su progreso espiritual.

“Mejórate a ti mismo, instrúyete, reconstrúyete y luego procede a solucionar los problemas de los demás. Esa reconstrucción te resultará muy fácil siempre que investigues serenamente tu propia personalidad, es decir, el cuerpo, los sentidos, la mente, el intelecto, etc.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Marzo de 2003)

Si hace esto, progresivamente dejará de ser “el títere” de sus tendencias, podrá relacionarse conscientemente con ellas y modificar las que usted escoja. Este es un proceso que puede tomarle algo de tiempo, teniendo en cuenta que lleva años reafirmando esos hábitos y tendencias; así que, no se frustre si los resultados no son inmediatos y continúe avanzando en el proceso con determinación. Como dijo Mark Twain: “Nadie se desembaraza de un hábito o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño”.

- Jugando el rol de… En la vida cotidiana todos jugamos diferentes roles como: padre/madre, hij@, niet@, amig@, espos@, jefe/subalterno, compañer@ de trabajo, vecin@, médico/paciente, vendedor/comprador, etc. Cuando estamos desempeñando cada uno de estos papeles manifestamos más unas características de nuestra personalidad que otras. Por ejemplo, es diferente la forma en que nos comportamos con nuestra pareja que con un compañer@de trabajo, un vecin@ o un vendedor; lo mismo sucede cuando nos relacionamos con nuestros padres, hijos y amigos. Igualmente, con ciertas personas y en determinadas situaciones manifestamos más unos valores o virtudes como la generosidad, la paciencia, la sinceridad, la solidaridad, etc., en vez de otros. Con algunos nos comportamos casi como unos “santos”, mientras que con otros somos más indiferentes; o cuando estamos de buen humor podemos ser muy amables y cuando estamos de mal genio podemos ser hasta displicentes con los demás. Todo


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esto nos demuestra que tenemos una gama de posibilidades en nuestra personalidad, de la cual podemos seleccionar diferentes características para actuar de una manera u otra. Es importante que cada uno se auto-observe e identifique los aspectos en los cuales podría y quisiera mejorar para ser una persona con mejores relaciones consigo mismo, los demás y el entorno. Podemos mirar qué valores o virtudes nos ayudarían a tener una vida más armoniosa. Cada uno tiene fortalezas en su personalidad y también debilidades, que corresponden en este caso, a valores que no estamos expresando más plenamente. Por ejemplo, puede ser que no estemos siendo lo suficientemente generosos, sinceros, empáticos, agradecidos, optimistas, pacientes, etc., y que exista entonces un desequilibrio que nos genera cierto malestar o dificultades en la vida diaria. Seguramente si expresáramos más las virtudes que no hemos desarrollado lo suficiente, nuestra personalidad tendría una mayor armonía y nos sentiríamos más a gusto. Seamos conscientes que no estamos “condenados” a continuar con ciertas “falencias” en nuestra personalidad y, por el contrario, tenemos la posibilidad de manifestar más ciertas facetas o valores. Para avanzar en este propósito lo invito a ensayar una estrategia que consiste en “jugar el rol”, “hacer el papel” o “representar el personaje”. Se trata de que usted determine qué virtud(es) quisiera expresar más, como por ejemplo ser más colaborador; luego piense las características que tiene este tipo de persona (ej. Una persona colaboradora está pendiente de la necesidad del otro, le ofrece su ayuda, se interesa por apoyarlo de la mejor manera, es diligente, etc.) y finalmente empiece a poner en práctica estos comportamientos como si estuviera representando le papel de una persona colaboradora. Entonces, aunque usted no le fluya espontáneamente ser colaborador, seguramente podrá empezar a “desempeñar el rol” de una persona colaboradora progresivamente, hasta que el valor de la colaboración o de la solidaridad se manifieste más automáticamente en su personalidad. Para muchos tal vez haya sido difícil ser menos: malgeniados, impulsivos, mentirosos, egoístas, etc., a pesar de que se han propuesto varias veces cambiar. La diferencia en este ejercicio radica en que no se le pide a usted que controle o disminuya


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estas tendencias, sino que “represente el papel” de una persona que tiene las virtudes opuestas a esos “defectos”. Entonces se trata de un juego en el cual usted se puede “salir” un poco de si mism@ y de su programación, para generar cambios de una manera más lúdica y sencilla. Como dice Swami Sathya Sai Baba: “¡La vida es un juego, juégalo!”. También El nos enseña que en nuestro verdadero Ser están latentes todos los valores humanos y, por lo tanto, no necesitamos aprenderlos sino facilitarles que fluyan cada vez más libremente en nuestros pensamientos, palabras y acciones. Así que todos tenemos la capacidad de actuar con cortesía, honestidad, respeto, tolerancia, paciencia, etc., si realmente nos lo proponemos y lo practicamos, porque son parte de nuestra esencia.

- Coherencia y valores humanos En este contexto, una personalidad con coherencia entre pensamiento, palabra y acción, y guiada por los valores humanos es un vehículo o instrumento ideal para la manifestación de nuestra Divinidad.

“Cualquiera que sea la instrucción que uno pueda adquirir, cualquiera sea la posición de autoridad que uno ocupe, todo lo grande que uno pueda ser, si uno carece de valores humanos, de ningún modo puede ser llamado un ser humano. ¿Qué es la humanidad? Esencialmente significa unidad de pensamiento, palabra y acción. Cuando los pensamientos son diferentes de lo que dice o hace, uno deja de ser humano. Hoy, lo que los seres humanos tienen que cultivar es la unidad y la pureza en pensamiento, palabra y acción. Las verdaderas cualidades humanas sólo pueden prosperar en un corazón lleno de aspiraciones espirituales; las semillas deben sembrarse en tierra fértil, no en una parcela de roca. Por lo tanto, para desarrollar estas cualidades, el ser humano tiene que desarrollar compasión y ecuanimidad, en medio de las vicisitudes de la vida.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 31 de Julio de 2007)


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“La moralidad no significa simplemente observar ciertas reglas en el mundo de las actividades rutinarias. Moralidad es la adopción del camino recto y sagrado de la virtud. El honor de la comunidad descansa en la moralidad. Sin moral, una comunidad decae. La personalidad humana encuentra su mejor expresión sólo en un individuo moralmente fuerte. El término ‘persona’ sólo puede aplicarse a quien manifiesta, por su conducta, la Divinidad inmanifestada oculta en su interior. El solo hecho de tener forma humana no hace que uno sea una persona humana. Lo que cuenta es el comportamiento. Solamente aquellos que llevan una vida bien regulada y manifiestan su verdadera naturaleza Divina pueden ser considerados auténticos seres humanos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Julio de 2006)

- Los demás le permiten descubrir rasgos de su personalidad

Las otras personas pueden serle de gran ayuda para que conozca tendencias de su personalidad que no ha descubierto o que se niega a ver o aceptar. Si una o varias personas le han hecho comentarios similares sobre ciertos aspectos de su personalidad, es muy conveniente que se dé la oportunidad de reflexionar si es posible que tengan razón, aunque sea doloroso reconocerlo. Es mejor tener la valentía de mirarse a si mismo, que la cobardía de defenderse o contra-atacar sin haberse observado; pues de esta manera evitará continuar siendo el títere de lo que no quiere reconocer. Por otra parte, si le molestan o le incomodan ciertas conductas de otras personas, analice si usted algunas veces también hace algo semejante, aunque sea en una forma más leve. Por ejemplo, si le molesta que alguien lo juzgue sin escucharlo, es probable que también usted a veces haga lo mismo con otros y no se haya dado cuenta (ej. con un hijo, la pareja, la madre, el compañero, etc.) En otras palabras, los demás muchas veces son espejos para nosotros, y lo que criticamos en ellos muy


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posiblemente lo hacemos nosotros también, en mayor o menor grado. Otra posibilidad es que aquello que usted critica en otro, puede ser lo que a usted, inconscientemente, le gustaría poder hacer, aunque tal vez en una forma menos notoria. Es decir, puede ser que un comportamiento que usted considera exagerado en otro, sea un indicador de que usted tiene carencias en ese mismo comportamiento y le gustaría que no fuera así. Por ejemplo, si critica a otra persona por ser “demasiado franca” o imprudente, puede ser que usted tenga dificultades para expresar con sinceridad y seguridad lo que siente y piensa frente a otras personas. Entonces vale la pena que se analice a sí mismo cuando critica a otros. En la sociedad es muy común criticar a los demás. Muchas veces lo hacemos para, consciente o inconscientemente, elevar nuestra propia autoestima, porque al señalar el defecto del otro, nos ubicamos tácitamente en una posición más elevada frente a él/ella. Pero, como cada uno tiene sus propias cualidades, no es necesario resaltar los defectos del otro para destacarse: no hay que afirmarse negando al otro. Tampoco es propicio compararse con los demás; puesto que al ser todos diferentes, no tiene sentido hacerlo; y esto puede hacernos sentir superiores o inferiores, lo cual fortalece la identificación errónea con el organismo humano (el instrumento, el vehículo); olvidando que realmente, en esencia, todos somos iguales: somos el mismo Ser. Además, al enfocarnos en las debilidades de los demás, podemos estar evadiendo las propias.

- Dime con quién andas y … De otro modo, es bueno tener en cuenta que de las personas con las que compartimos a diario, adquirimos ciertas ideas, comportamientos, actitudes, sentimientos, etc., casi sin darnos cuenta. Es muy notorio el efecto de la influencia social sobre las personas, proveniente de las amistades, los compañeros, las instituciones, la sociedad y la cultura. Todos ellos influyen en nosotros, limitándonos en ciertos aspectos y potenciándonos en otros. Entonces, es muy importante tener una posición reflexiva frente a las influencias externas que recibimos, discernir entre lo conveniente y lo inconveniente


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para nuestro desarrollo y escoger muy bien las personas con las cuales buscamos una relación más cercana: “Dime con quién andas y te diré quien eres”.

“La ilusión hace surgir malos sentimientos en sus corazones y mentes. Uno puede tener una tendencia al mal, pero aún así, con las bendiciones de los mayores y en compañía de almas nobles, puede librarse de las malas tendencias y desarrollar virtudes. Las personas emprenden diversas prácticas espirituales para alcanzar la Divinidad. Evita las malas compañías; busca las buenas compañías, haz siempre buenas acciones, y discierne entre lo permanente y lo efímero.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 20 de Junio de 2007)

El objetivo no es aislarse de los demás ni dejar a un lado las actividades que desempeñamos en la sociedad. Lo ideal es vincular la vida cotidiana con la espiritualidad, basar los pensamientos, palabras y acciones en valores humanos, y orientar la propia vida hacia el máximo desarrollo y la plena expresión de nuestro potencial.

“Cuando un escultor transforma un trozo de roca en un hermoso ídolo, para que sea adorado en un santuario, lo que era inerte se convierte en sagrado. De la misma manera, todo lo que es insignificante y mundano debe ser transformado con el tiempo, en algo sagrado y Divino. Esa es la verdadera transformación a la que debe aspirar todo ser humano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Octubre de 2007) “Las virtudes son más importantes que la belleza física. Observando lo bueno y lo malo en el mundo, debemos desarrollar el discernimiento, para elegir lo primero. Uno debe esforzarse intensamente para cultivar las virtudes. Desde temprana edad se deben incorporar buenas cualidades y desarrollar un buen carácter. Dondequiera que vayamos, el carácter es de la máxima importancia. Son las virtudes las que dan


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grandeza a una persona. Si todos desarrollan un buen carácter, el mundo entero se hará bueno.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 28 de Febrero de 2008)


A. Tome un lápiz/color y un papel. Cierre los ojos y piense en 3 virtudes o cualidades que le gustaría desarrollar más en su personalidad, para convertirla en un mejor instrumento de su Divinidad inherente. Luego, abra los ojos y dibuje un triángulo. En el centro escriba en mayúsculas “SER”, y en las puntas del triángulo escriba cada una de las virtudes que quiere fortalecer. Ubique este dibujo en un lugar donde lo pueda revisar frecuentemente (ojalá diariamente) y empiece a trabajar en el desarrollo de estas cualidades con la estrategia de “jugar el rol” o la que usted escoja. Ore pidiendo la ayuda Divina o de la vida (según sean sus creencias) para avanzar en este proceso, ya que la oración sincera es realmente poderosa. Nota: Aunque los cambios no sean visibles inmediatamente, el sólo hecho de querer cambiarlos conscientemente y darse cuenta cuando hace lo contrario a lo deseado, es ya un gran avance, puesto que lo que antes era automático ahora empieza a ser más consciente, y por lo tanto, va perdiendo el poder de dominarlo.

B. Cuando las demás personas le digan algo sobre su personalidad, permítase la oportunidad de reflexionar si son acertadas las observaciones que recibe.

C. Observe las críticas que hace de otras personas, ya sea mental o verbalmente, y mire si a veces usted hace algo similar a lo que está criticando, aunque sea en forma “más leve”.


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- Seguir el ejemplo de grandes personas Recuerde que los grandes santos, sabios y Avatares, han señalado con su vida distintos caminos que permiten llevar la personalidad a su máxima expresión. Seguir su ejemplo es una decisión sabia y una oportunidad que podemos aprovechar.

“Se celebran los aniversarios de las grandes personalidades pero no se recuerdan ni se siguen los ideales por los cuales vivieron. Si no te preocupas por seguir sus enseñanzas, las celebraciones pierden su significado y se convierten en prácticas artificiales. Cristo enseñó a la gente a amar a todos los seres y a servir a todos con compasión. Es sólo mediante la práctica de estos ideales que uno puede celebrar verdaderamente su aniversario. La Divinidad interior debe reflejarse en cada acción.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Diciembre de 2003)

“Jesús santificó su cuerpo al sacrificarlo para salvar a los demás. Era consciente de ese supremo propósito y deber. Con fe en la unidad de la humanidad, se mantuvo firme ante a sus oponentes y críticos, y resistió sus embates. Todo santo y profeta que se haya esforzado por mejorar la situación de los oprimidos y abrir los ojos de quienes están ciegos al esplendor de Dios, estuvo dispuesto y decidido para el máximo sacrificio. Uno tiene que dar la bienvenida a los problemas, ya que proveen la posibilidad de sacrificarlo todo para el mantenimiento de la verdad y la rectitud. Considérense encarnaciones del Amor y dediquen sus vidas, como lo hizo Jesús, al servicio de su prójimo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 25 de Diciembre de 2007)


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- El camino más directo

Finalmente, recuerde que el camino más directo para la transformación de las tendencias destructivas y el fomento de las cualidades, es la consciencia constante de la propia realidad y naturaleza.

“Es una dura tarea reformar las propias tendencias y el carácter. Una persona puede estudiar todos los textos sobre Sadhana (práctica espiritual) y todas las escrituras, e incluso puede disertar sobre ellos durante horas, pero se extraviará cuando la tentación lo confronte. ¿Cuál es la verdadera cura para esto? Es la creencia inquebrantable que tú eres Brahmán (la Divinidad que trasciende los nombres y las formas) en todo momento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 27 de Septiembre de 2007)


Un sacerdote está dando misa y va a empezar su sermón: “Hermanos, hoy vamos a hablar de la mentira. ¿Quiénes recuerdan precisamente lo que dice el capítulo 32 de San Lucas?” Todo el mundo levanta la mano y el cura continúa: “Bueno, a eso me refería. El evangelio de San Lucas sólo tiene 24 capítulos mis queridos hermanos.”


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V. CUATRO CAMINOS PARA SER LO QUE SOMOS Hasta este punto del libro, espero que sea más claro que en realidad usted es Conciencia (el Alma, el Espíritu) que no tiene límites, puesto que esa misma Conciencia está presente en todos y en todo, y es Infinita. Que esa Conciencia que no ha tenido nacimiento tampoco tendrá muerte: es Eterna. Que nada ni nadie puede alterarla o dañarla y que siempre conserva su estado natural, que es el de bienaventuranza o Paz. Que no tiene apegos, deseos, aversiones, prejuicios, odios, rencores, etc., que mantiene una apertura total frente a todo, una actitud de aceptación y un sentimiento de unidad con todos: es decir, que es Amor puro, desinteresado y sin condiciones. Que esa Conciencia percibe lo que le sucede a su organismo y al entorno, y siempre permanece en Silencio, inalterada, como el testigo de todo. En resumen, usted es en realidad Conciencia, Paz, Amor y Silencio Infinitos y Eternos. Usted es el Ser, el Alma, el Espíritu, la Divinidad. A pesar de ser eso, muchas veces sufrimos, deseamos obtener más cosas para lograr la felicidad, nos quejamos por lo que vivimos, nos dejamos envolver por la tristeza, la ansiedad, la ira, etc. Todas las dificultades, errores y dolores hacen parte de la experiencia como seres humanos; pero es importante ser conscientes que tenemos la capacidad de lograr una mayor conexión con nuestra esencia y vivir una vida más armoniosa, más llena de amor, paz y sabiduría.

“¿Qué es la espiritualidad? Es la decidida búsqueda de la conciencia cósmica. La espiritualidad apunta a habilitar a una persona para que manifieste en toda su plenitud la conciencia cósmica Divina, que está presente tanto dentro de sí misma como afuera. Significa librarse de la propia naturaleza animal y desarrollar las tendencias Divinas en nuestro


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interior. Significa romper las barreras entre Dios y la Naturaleza, y establecer su unidad esencial.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Enero de 2008)

Con el fin de “ser lo que somos” más plenamente, Swami Sathya Sai Baba nos regala Sus enseñanzas y nos señala principalmente cuatro caminos o senderos espirituales. Estos senderos nos permiten encauzar nuestras vidas hacia la trascendencia de nuestra identificación errónea con el organismo humano, y dejar a un lado los intereses y acciones egoístas; para conectar y expresar nuestro verdadero Ser. Estos cuatro caminos son: servicio desinteresado, devoción, sabiduría y amor. En realidad, Swami los agrupa únicamente en los tres primeros; pero, teniendo en cuenta que El hace mucho énfasis en el amor y le otorga un lugar privilegiado, lo he ubicado como un cuarto camino, con el fin de explicarlo con más detalle. Este sendero del amor tiene la particularidad de ser parte fundamental e imprescindible de los otros tres. Los senderos del servicio, la devoción y la sabiduría han sido expuestos desde la antigüedad por los Vedas y enseñados por muchos maestros espirituales; y se explican de una manera muy hermosa en el gran texto sagrado del “Bhagavad Gita”. Estos caminos, incluido el del amor, se relacionan entre si y usted puede poner todos en práctica, profundizando en aquel que más le interese.

“El ser humano viene de Dios, crece en Dios y se funde en Dios. El objetivo del esfuerzo espiritual es reconocer la unidad que subyace en la totalidad de la creación y hacer consciente al ser humano del éxtasis de la unión con la Divinidad. Esto sólo puede lograrse a través de la acción correcta, la devoción y la sabiduría espiritual.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de agosto de 2006)

Cuando se remita directamente a los escritos de Swami Sathya Sai Baba, tenga en cuenta que debe emplear su discernimiento para determinar cuáles, entre la amplia gama de enseñanzas que encontrará, son más comprensibles y pertinentes para el


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momento que está atravesando en su vida. Esto lo digo porque muchas veces su mente podrá encontrar afirmaciones que le pueden parecer “contradictorias” y lo pueden desanimar. Pero este fenómeno se debe a que Swami dirige sus mensajes a públicos muy distintos (mujeres, hombres, jóvenes, ancianos, niños, iletrados, eruditos, científicos, artistas, comerciantes, religiosos, etc.) y son millones sus seguidores en todos los continentes del planeta, cada cual con un desarrollo espiritual particular y con unas necesidades distintas. Entonces, una enseñanza puede ser la indicada para una persona, pero no para otra que vive en un contexto distinto y está en otras condiciones. Por esa razón se dice que Swami Sathya Sai Baba habla a “distintos niveles de consciencia”. Adicionalmente, es importante indicar que nuestra mente, siendo limitada, es un instrumento que nos sirve para avanzar hacia la consciencia del Ser; pero en un momento dado tenemos que trascenderla para sentir y experimentar lo infinito, lo supremo, lo inconmensurable, lo inefable, es decir, nuestro verdadero Ser (la Divinidad). Entonces, es común encontrarse con maestros espirituales verdaderos que le dicen ciertas cosas al devoto, que pueden generar un conflicto en su lógica mental; pero que finalmente pueden ayudarlo a soltar el apego que tiene por ciertos pensamientos, ideas, creencias, juicios, etc.; y le permiten abrirse a la posibilidad de sentir y experimentar, en vez de quedarse atrapado en el mundo de las ideas. Por otra parte, al acercarse a las enseñanzas de Swami Sathya Sai Baba es importante que tenga en cuenta su recomendación: leer, reflexionar y luego practicar. Haga uso de su discernimiento para determinar qué es lo que debe integrar a su propio proceso. Igualmente, sea consciente que logrará avances si usted desarrolla un verdadero interés y lo acompaña de 3 Ps: Práctica Perseverante y Paciente, aunque le pueda parecer más cómodo seguir haciendo todo como hasta el momento lo ha hecho. Asimismo, recuerde que la mente es un instrumento para su progreso; pero es limitada y, por lo tanto, es necesario que vaya más allá de las ideas y las teorías, para “conectarse” con su verdadero Ser y experimentar su paz, amor y sabiduría.


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A. SERVICIO DESINTERESADO

“Toda naturaleza es un anhelo de servicio.

Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú;

Donde hay un error que enmendar, enmiéndalo tú; Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú.

Sé el que apartó la piedra del camino, El odio entre los corazones

Y las dificultades de un problema. Hay la alegría de ser sano y la alegría de ser justo; pero

Hay sobre todo, la hermosa, la inmensa alegría de servir. ¡Qué triste seria el mundo si todo estuviera hecho, sino

Hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender! Que no te llamen solamente los trabajos fáciles, ¡Es tan bello

Hacer lo que otros esquivan! Pero no caigas en el error de que solo se hacen méritos con Los grandes trabajos; hay pequeños servicios: adornar una

Mesa, ordenar unos libros, peinar un niño, en tu hogar. Aquel es el que critica, éste es el que destruye; se tú el que

Sirve. El servir no es solo la faena de seres inferiores.

Dios, que da el fruto, la luz, sirve. Pudiera llamársele así: EL QUE SIRVE.

Y tiene sus ojos fijos en nuestras manos y nos pregunta Cada día: ¿serviste hoy?¿a quién?¿al árbol, al amigo, a la

madre?”

EL PLACER DE SERVIR Gabriela Mistral

Este camino consiste en servir sin esperar algo a cambio. Servir sin preocuparse por los resultados que obtendrá, dejando a un lado los intereses egoístas y con una actitud de amor hacia quien recibe el servicio. Servir con la consciencia


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de que, en esencia, somos uno y lo mismo con quien recibe el servicio. Se trata de reconocer que el otro es realmente igual que usted, que es la misma Conciencia, el mismo Espíritu, que las diferencias son aparentes, que no hay alguien superior o inferior, mejor o peor, más o menos importante. Por lo tanto, al servir desinteresadamente se está sirviendo a usted mismo y puede verse a si mismo en el otro ser. Nuestros organismos humanos son instrumentos diferentes de una única Divinidad omnipresente. Todos existimos gracias a la misma corriente Divina que le da vida a nuestros organismos. Somos como los miles de bombillos: unos grandes, otros pequeños; unos alargados, otros circulares; unos blancos, otros rojos, azules, amarillos, etc. A pesar de ser distintos, todos funcionan gracias a la misma energía que fluye por los cables de la ciudad y de las casas. Es decir, la energía es una aunque los bombillos son muchos. No somos más que instrumentos (“bombillos”), que sirven para que la única Divinidad se manifieste y se exprese. Por consiguiente, recuerde que usted no es el hacedor sino un instrumento de la Divinidad. Es gracias a Ella que el servicio se hace realidad, puesto que es la Divinidad la que activa y da vida a su organismo; y es la que permite que usted se encuentre en el lugar y la hora indicados, sienta la motivación para servir, cuente con ciertos recursos para hacerlo (habilidades, tiempo, conocimientos, etc.) y muchas otras cosas más que confluyen y permiten que el servicio se lleve a cabo, a través de su organismo. Entonces, todo sucede gracias a esa Conciencia Suprema o Inteligencia Divina y, por lo tanto, los resultados también le pertenecen a Ella. En este contexto, no tiene sentido que se obsesione por conseguir los resultados que usted desea. La actitud subyacente más apropiada es: “¡Hágase Tu voluntad!”. Es claro que cuando uno realiza una acción, muchas veces tiene el interés de lograr algo en particular. Pero al practicar el servicio desinteresado, la invitación es a que, sea cual sea el resultado final, lo acepte y, si es contrario al esperado, usted puede estar tranquilo de haber hecho lo mejor posible o evaluar la lección que puede aprender de esa situación (ej. ser más cuidadoso, más humilde, más generoso, etc.).


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Es de gran ayuda ofrecerle el servicio a Dios y entregarle los resultados. De esta manera, no hay apego a las consecuencias ni hay intereses egoístas; tan solo la expresión de un impulso por ayudar que surge en usted, nacido del amor que es su verdadera esencia y del reconocimiento de la hermandad con los demás. Cuando sirve de esta manera, considerándose un instrumento de la Divinidad, entregándole los resultados de sus acciones y viendo la misma Divinidad en todos, entonces, en ese preciso momento usted está más allá de su ego, libre de los deseos egocéntricos; y está conectando y expresando su verdadera naturaleza. Está siendo y compartiendo el amor que realmente es; experimentando la paz que realmente es, y fortaleciendo la consciencia de unidad con los demás. Es decir, al servir desinteresadamente, está siendo lo que es! Tenga en cuenta emplear su discernimiento en el momento de servir. Seguramente Jesucristo, Buda, Sai Baba, la Madre Teresa de Calcuta, San Francisco de Asis o cualquiera de los otros grandes santos y sabios de la humanidad, no necesariamente decían “si” a toda solicitud ni hacían los servicios irreflexivamente. En este sentido, es clave que piense cuál servicio puede cumplir, empezando por atender sus propias necesidades tanto como le sea posible, antes de hacer a otros responsables por ellas. Continúe sirviendo a los más cercanos y luego podrá ocuparse de otros. Con esto quiero decir que no sería lo más apropiado regalar dinero y alimento a un servicio social, si en su propia casa escasean ambos y usted tiene conocimiento de ello. Asimismo, en el momento de servir es importante tratar de aportar aquello que es más necesario para quien recibe la ayuda y en el momento más oportuno; antes que dar sólo lo que le es más fácil brindar y en el momento en que es más cómodo para usted. Ahora lo(a) invito a que lea y reflexione sobre las siguientes palabras de Swami Sathya Sai Baba sobre el servicio desinteresado…

“El servicio, en todas sus formas, es principalmente una disciplina espiritual. Sin la inspiración que da esa actitud, el impulso de servir


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está destinado a menguar y secarse, o podría desviarse a vanidad y ostentación. Reflexionen por un momento: ¿Están sirviendo a Dios? ¿O Dios está sirviendo a través de ustedes? Cuando ofrecen leche a un niño hambriento o una frazada a una persona que tirita sobre la vereda, ustedes están simplemente colocando un regalo de Dios en un depósito del Principio Divino. Dios sirve y les permite a ustedes afirmar que han servido. Sin Su voluntad, ni siquiera puede agitarse una hoja de hierba. Llenen cada momento con gratitud al Dador y Destinatario de todos los regalos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Octubre de 2007) “La felicidad es la unión con Dios. No hay lugar donde no esté Dios. Hagas lo que hagas, debes sentir que es el trabajo de Dios. Dios está actuando a través de tu cuerpo, está pensando a través de tu mente, está trabajando a través de tus manos. Si trabajas con este sentimiento no dejarás que se infle el ego…Tu no eres el cuerpo ni eres la mente; sino que eres el Atma.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Agosto de 2004) “Un ser humano común se transforma en un 'Gran Sabio' al prestar servicio desinteresado. En realidad, el mérito adquirido a través del servicio no puede lograrse ni aún con la práctica de rigurosas austeridades. El servicio trae a los seres humanos más cerca unos de otros, y promueve el afecto y la amistad. Sin este sentimiento de amistad y amor hacia nuestro prójimo, no podemos conseguir intimidad con el Señor. Instalen en sus corazones la convicción de que el servicio que prestan a los demás es servicio a Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 1 de Junio de 2007) “Dios está cubierto y obstruido por las nubes del egoísmo. Liberarse de este egoísmo es lo que deben practicar. La mejor cura para el egoísmo es


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el servicio. Por ende, comprométanse con él para aliviar hasta donde puedan el dolor y las penas de otros.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Enero de 2007) “Por sí solas, las actividades de servicio y los cantos devocionales que llevan a cabo no son suficientes. Deben renunciar al sentimiento de estar sirviendo a otros. Esto es muy importante. Están sirviéndose a sí mismos cuando prestan servicio a otros. Debieran considerar a todos como suyos. De hecho, los otros no son otros, sino son las mismísimas formas de Dios. Por ende, el servicio prestado a la humanidad es servicio prestado a Dios. Todas las actividades de servicio están destinadas a fomentar en ustedes este sentimiento. Debieran zambullirse en el campo del servicio con amor desinteresado. Eso únicamente es verdadero servicio. Todas las demás actividades de servicio son mundanas y momentáneas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Febrero de 2007) “El ser humano se justifica como tal y comprueba su aseveración de ser un individuo digno, únicamente a través del servicio que preste sincera y desinteresadamente, sin pensar en absoluto en una recompensa terrenal. El servicio es la máxima expresión del amor y del sacrificio que el amor implica. Habrán de entregarse al servicio en verdad hasta su último aliento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Marzo de 2007) “Hoy en día, en todas partes se da primacía al espectáculo y la publicidad. Puede que una persona gaste cinco rupias8 en caridad, mas está dispuesta a gastar quinientas rupias para publicitar este acto en los periódicos. ¿Esto no es espectáculo? Sólo aquel que busca fama, necesita publicidad; por otra parte, aquel que se interesa

8 Rupia: Moneda de la India.


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genuinamente en el servicio, no tiene necesidad de ella. Nunca ansíen publicidad. Mientras anden tras la pompa, nunca podrán experimentar la Ventura Atmica.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Marzo de 2007)

“Quienquiera que llegue solicitando un servicio de ustedes, será el mejor de los individuos en ese momento. Cualquier satisfacción que puedan darle al prestarle servicio, será el deber de ustedes y el mejor trabajo que puedan llevar a cabo. El presente, cuando pueden hacer algo, será el más sagrado de los tiempos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 30 de Abril de 2007) “Es sólo cuando el apego a los frutos de las acciones es descartado, que la acción se transforma en un medio para alcanzar la comunión Divina. Aquellos que emprenden actividades de servicio deberían superar el sentido de "mío" y "tuyo"; deberían considerar un privilegio el servir a otros y verlo como una forma de adoración de lo Divino. Deberían considerar el servicio a la sociedad como la manera de encontrar autorrealización en esta vida. Deberían enfrentar cualquier problema que surja con fe y coraje, y continuar sus actividades de servicio sin exhibicionismos, con un espíritu de humildad y dedicación.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 Enero de 2006)

“El espíritu de sacrificio es esencial para realizar servicio. Eliminar las malas cualidades es el verdadero sacrificio y también es yoga. Comprendan que quienquiera que sea a quien sirvan, están de hecho sirviendo a lo Divino en forma humana. Aquellos que sirven deben tener este sentimiento sublime y sagrado. Deben esforzarse por ver a Dios en todos. Deben comprender que las actividades de servicio son realizadas con el fin de su propia purificación y elevación espiritual. Todas las acciones deberían


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ser hechas para purificar la mente y remover todas las impurezas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 Febrero de 2006) “Aunque hachados y mutilados por el ser humano, los árboles le dan servicio, al proveerle frutas y sombra. Los ríos le llevan agua para saciar su sed y lavar su cuerpo. La vaca también le sirve desinteresadamente, dándole leche. El ser humano debe, en primer lugar, darse cuenta de una verdad: ha sido dotado con el cuerpo no para perseguir sus fines egoístas sino para servir a los demás. Dado que las personas han ganado su riqueza, saber y habilidades gracias a la sociedad, tienen que saldar su deuda hacia la sociedad, haciendo el bien como contrapartida. Un ser humano desprovisto de esta suprema virtud de la gratitud es peor que un animal feroz; su educación y habilidades son un completo desperdicio. Estas adquieren esplendor y significado, por supuesto, al servir a la sociedad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Abril de 2006) “Todos los seres humanos están hechos de la misma esencia Divina. El servicio al ser humano ayudará a que florezca tu Divinidad, ya que alegrará tu corazón y te hará sentir que la vida ha valido la pena. El servicio al ser humano es servicio a Dios, porque Él está en todo ser humano; más aún, en todo ser viviente, roca y trozo. Dedica tus talentos a Dios; que cada acto sea una flor, libre de los rastreros gusanos de la envidia y el egoísmo, y llena de la fragancia del amor y el sacrificio.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de Octubre de 2007) “Evita el egoísmo, dedícate al servicio altruista. Deja el apego al cuerpo. Apégate a tu propio Ser. Comprende que en todos existe el mismo Espíritu. Aunque encuentres miles de focos que brillan, la corriente que pasa por ellos es la misma. Los cuerpos son como focos y el principio del Espíritu es la corriente que hay en ellos. Con este sentido


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de unicidad, esfuérzate por aliviar el sufrimiento de tu prójimo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 7 de Octubre de 2006)


A. Si le interesa practicar este camino, tómese unos segundos y piense: ¿cómo, cuándo y dónde puede servir desinteresadamente en su vida actual?

B. Pase a la práctica. Ayude y sirva desinteresadamente constantemente. Recuerde que cada oportunidad para servir es un regalo que puede aprovechar.


14. Una mujer agonizando decide preparar su testamento y hacer sus peticiones finales. Le cuenta a su guía espiritual que tiene 2 solicitudes. Primero, quiere ser cremada al morir, y segundo, quiere que sus cenizas sean esparcidas por todo el centro comercial. “¿Por qué en el centro comercial?”, le preguntó el guía espiritual. “¡Para asegurarme de que mis hijas me visiten al menos dos veces a la semana!”


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B. DEVOCIÓN En pocas palabras: Devoción es amar a Dios (¡su verdadero Ser omnipresente!). Aunque la Divinidad está presente en todos y en todo, se ha manifestado de una manera especial y plena a través de algunos seres humanos, que se han convertido en guías espirituales para los demás. Precisamente, para muchas personas resulta más fácil relacionarse con Dios, comunicarle sus pensamientos y sentimientos, y ofrecerle sus acciones, cuando lo conciben manifestado en un ser dotado de nombre y forma. Es decir, se les facilita más amar una manifestación concreta de Dios, que a la Divinidad sin forma. Como constantemente nos relacionamos con otros seres compuestos de nombre y forma, le puede ser más sencillo o agradable quizás, entablar una relación con alguna manifestación particular de la Divinidad como Jesucristo, la Virgen María, Krishna, Rama, Buda, Zoroastro, Mahavirá, Gurú Nanak, Sai Baba o algún otro. Sin embargo, el paso que necesariamente debe dar un devoto verdadero, de la religión o corriente espiritual que sea, es ver a Dios en todos los demás y tratarlos con el respeto que merecen, y hacer del amor y el servicio desinteresados, los ejes principales de la vida. La manifestación de la Divinidad a través de estos seres humanos con tal poder y pureza, ha permitido a las personas percibir más claramente su familiaridad y semejanza con Dios, al tiempo que les ha mostrado las alturas a las que pueden aspirar en su desarrollo espiritual y el enorme potencial que permanece “dormido” o latente en su interior. En el camino de la Devoción puede llegar un momento en que es tanto el amor que el devoto expresa hacia Dios, que básicamente “se convierte” en el amor que es y logra experimentar su unidad con El. Se hace consciente de su


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conexión con Dios y se da cuenta que es imagen y semejanza de Dios: que es Amor. Un aspecto muy importante que debe tener en cuenta al recorrer el camino de la Devoción, es que el amor debe respaldarlo con acciones. Como dice el refrán: “obras son amores, y no buenas razones”. Una cosa es decir “te amo” y otra muy distinta es actuar, pensar, sentir y compartir ese amor en la vida cotidiana. La mayor muestra de amor que puede darle a Dios es practicar Sus enseñanzas; de lo contrario, se estará auto-engañando pensando que está amándolo. Ahora bien, esto no quiere decir que usted actuará perfectamente en todo lugar y en toda situación, pues está en un proceso de aprendizaje constante; pero si implica que debe intentar hacer lo mejor posible día a día. En este contexto, una estrategia que puede serle muy útil cuando tenga una duda sobre cómo actuar o qué decisión tomar, consiste en preguntarse “¿qué es lo que más le complacería a Dios que yo hiciera en esa situación?”, y luego pase a la acción, dejando a un lado los deseos egoístas o la presión de los demás.

“El año se vuelve nuevo y el día se vuelve santo sólo cuando lo santificas con la práctica espiritual. La práctica espiritual puede florecer sólo en un campo fertilizado por el amor. El amor es la condición sine qua non de la Devoción. El amor que ahora tienes hacia objetos materiales, nombre, fama, esposo/a, hijos, etc. debería ser santificado siendo incorporado al más trascendente Amor de Dios. Deja que las pequeñas gotas de tu amor por las cosas materiales se fundan con la corriente de amor por Dios y que de esta forma sea elevado. Ten el amor de Dios llenando y estremeciendo tu corazón; entonces no odiarás a nadie, no te involucrarás en rivalidades no saludables, ni buscarás faltas en los demás. La vida se volverá una dulce y satisfactoria experiencia.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 1 de Enero de 2006) “La Devoción no debe estar confinada a las cuatro paredes del santuario, ni a los pocos minutos en


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que haces meditación. Este Sadhana (disciplina espiritual) es de todo el día. Tu devoción tiene que expresarse como adoración a todos, como encarnaciones vivientes de la Divinidad. Ve a Dios en cada uno, aún en las personas a quienes consideras tus enemigos. Practica este Amor tolerante y omnímodo. ¿Cómo podrás obtener felicidad si sólo muestras amor y reverencia a un ídolo de piedra, que no te responde ni refleja tus sentimientos? Los seres vivientes te devolverán aprecio y gratitud, y te desearán el bien. Puedes ver la alegría brillando en sus rostros. Eso te otorgará satisfacción. Si no puedes enseñarte a ti mismo a amar a tu prójimo, ¿cómo podrás seguir el camino de la dedicación a Dios?” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Agosto de 2007) “La Devoción no puede estar confinada a observancias como la adoración, el peregrinaje o el ir a templos. Estas son meras acciones que indican la Devoción. Hay un poder que provee un impulso básico para estas acciones. Este es el amor de Dios. La Devoción significa un amor todo penetrante. Este amor es sin motivos. El amor basado en un motivo ulterior no puede ser un verdadero amor. Como un río busca unirse al océano por un impulso natural, como una enredadera se trepa naturalmente alrededor de un árbol para ir hacia arriba, el amor del devoto es una expresión espontánea del esfuerzo para hacerse consciente de Dios, libre de deseos mundanos de todo tipo. Proclama que no necesita a nadie excepto a Dios. Es ignorante de toda otra cosa. Considera a lo Divino como el Uno que permea todo. Debes darte cuenta que lo Divino está presente en todo. Sólo cuando reconozcas la omnipresencia de lo Divino serás capaz de experimentarlo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Febrero de 2006)

En el camino de la Devoción se ama tanto a Dios que se le ofrece todo, se le agradece todo, se le recuerda


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constantemente y se mantiene una comunicación constante con El. Adicionalmente, y más importante que todo lo demás, hay una entrega total a Dios basada en la fe y la confianza, con la seguridad de que todo lo que nos sucede es por Su Divina voluntad, es lo mejor para nuestro crecimiento espiritual y por lo tanto, es perfecto. Hay una convicción de que la Divinidad es la que nos ha dado la vida, nos ha permitido vivir todas las experiencias y nos seguirá llevando de “Su mano”. Hemos dependido, estamos dependiendo y seguiremos dependiendo de Ella: somos Sus instrumentos. Entonces, cuando nos entregamos de esta manera, somos más conscientes de nuestra unidad con la Divinidad y estamos trascendiendo el ego. Al llegar a este nivel de entrega, los intereses egocéntricos pierden importancia y la vida se dedica a Dios. Hay una rendición a la Divinidad en la forma de: “Hágase Tu voluntad” o “No yo (el ego), solo tú Señor”. Entonces, la propia vida se considera guiada por Dios y donde hay obstáculos se ven retos, donde hay errores se identifican aprendizajes, donde hay problemas se perciben soluciones. De esta manera, la Devoción se convierte en un ingrediente que embellece nuestra vida, la llena de sentido y nos genera un sentimiento permanente de gratitud hacia Dios por todo lo recibido.

“Consideramos como Devoción unos pocos minutos dedicados a la adoración, el ir a un santuario y cosas por el estilo. Mas la verdadera devoción es una expresión de gratitud hacia Dios por todo lo que Él nos ha dado – el cuerpo humano con sus diferentes capacidades, la inteligencia con la que estamos dotados y las muchas conveniencias naturales puestas a nuestra disposición como el aire, el agua y la luz del sol. Desarrollen el amor por Dios. No hay nada más poderoso que el amor Divino.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Abril de 2007) “Dios decidirá qué dar, cuándo y dónde darlo. Por lo tanto, toda acción debe ser dedicada a Dios y Él decidirá lo que el devoto esté en condiciones de recibir. Cuando se deja todo a Dios por amor puro


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y con fe total, Dios cuidará del devoto. Hoy la gente carece de esta fe firme. En la senda de la Devoción hay que superar muchas pruebas. Grandes devotos enfrentaron en el pasado tales pruebas con fe y fortaleza. Finalmente ganaron la gracia de la Divinidad y experimentaron la bienaventuranza. Para lograr cualquier cosa en la vida, dos cosas son esenciales: fe firme y amor puro.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Julio de 2007)

Como hay un amor puro hacia Dios y una fe firme en que El se encargará de nuestro bienestar, los deseos egoístas empiezan a disminuir.

“¿Cuáles son las características de un auténtico devoto? La primera es la ausencia de deseos. Un verdadero devoto no debe tener deseos. Pero ¿es posible para ustedes, ligados como están a un cuerpo, una mente y los sentidos, vivir sin deseos? Es inevitable tener algún deseo. Por un lado están los deseos relacionados con los sentidos, que confieren sólo momentánea alegría. Por el otro, hay un deseo de trascender los sentidos. De modo que la gente está llena de deseos. Entonces ¿qué se necesita para llevar una vida sin deseos? No hay nada malo en tener deseos, pero todos ellos deben ser agradables a Dios. Deben practicar los principios eternos, basados en la Realidad Suprema, y dedicar todas sus actividades a Dios. Vivan sin los sentimientos de "yo" y "mío", y ofrezcan todo a Dios. Sólo entonces podrán alcanzar el estado de ausencia de deseos.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 16 de Julio de 2007)

En el momento en que hay Devoción, amor puro y completa entrega a Dios, estamos experimentando nuestra conexión con El, manifestando nuestra naturaleza de amor, percibiendo nuestra unidad con los demás, superando los deseos individualistas, contactando nuestra paz interior y por ende, estamos siendo lo que realmente somos: Conciencia amorosa,


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en paz y unidad con todos los seres, a quienes vemos como manifestaciones del Dios al que amamos. Una historia muy bonita que ilustra la riqueza de la verdadera Devoción y la sensación de plenitud que se logra con ella es la siguiente. Krishna, quien fue un Avatar completo (manifestación plena de la Divinidad) vivió en India hace más de 5000 años y tenía una consorte llamada Radha. Debido a ciertas tareas importantes que debió realizar, Krishna tuvo que ausentarse de su hogar y de Radha por un largo tiempo. Al regresar, Krishna le dijo, algo así como: ‘Yo sé que has estado anhelando mi amor. Ya no debes estar afligida, nuevamente estoy contigo, para darte mi amor’ A lo cual Radha, quien reconocía y amaba la Divinidad manifestada en su esposo, le contestó: ‘Te equivocas, yo no he estado afligida ni necesito Tu amor, porque con el amor que te tengo me basta para ser feliz!’ Qué ejemplo tan grande de Devoción, en el cual no se le pide a Dios que nos dé Su amor o alguna cosa como demostración de su amor hacia nosotros o como condición para amarlo, sino que, con el amor que tenemos hacia El/Ella, podemos sentirnos felices y plenos. Ojalá pudiéramos desarrollar este tipo de relación con Dios y tener un amor tan intenso hacia El que, aún en los momentos más difíciles, dijéramos: “¡No importa nada de esto, porque con el amor que tengo hacia Ti me basta para seguir adelante y ser feliz!”.

“Apegarse a personas y posesiones es la causa de todo dolor. Mediante la reducción de los apegos y el aumento del amor hacia Dios, uno puede disminuir las penurias y experimentar más felicidad. Cuanto más ama uno a Dios, más es la dicha que se experimenta. Los seres humanos están sumergidos en la adversidad porque anhelan lo físico en vez de añorar a Dios. Si transforman su ansia de objetos materiales en deseo por el Supremo, disfrutarán de inmensa felicidad. Esto es verdadera Devoción. Entonces el trabajo se convertirá en adoración y cada acto se volverá sagrado.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Mayo de 2006)


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En este camino de la Devoción hay varias prácticas espirituales (sadhana), que son herramientas muy valiosas para fortalecer nuestro amor hacia Dios y aumentar la pureza mental, lo cual nos permite tener una vivencia más profunda de la unidad con El.

“El Uno es la base de los muchos. Para reconocer esta unidad se requiere práctica y esfuerzo. Para que crezca la maleza, no hace falta ningún esfuerzo de nuestra parte. Pero para poder cosechar grano, el terreno debe ser arado, desmalezado, regado, abonado y cercado. Así también, para lograr una cosecha de virtud, se necesita un intenso Sadhana (práctica espiritual), aunque no es necesario tal esfuerzo para contraer vicios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 7 de Octubre de 2007) “Mediante Sadhana (prácticas espirituales) ustedes pueden corregir sus faltas y hacer que emerjan sus buenas cualidades, y así asegurar la paz para ustedes, su sociedad y su país. Cada uno de ustedes tiene el tremendo poder del Atma dentro de sí. Algunos son capaces de servirse de esa energía, otros sólo saben que existe, y algunos ignoran el método para aprovecharla o hasta su misma existencia. Con el tiempo esa capacidad llegará a través del constante Sadhana.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Septiembre de 2007) “Los seres humanos, en su ignorancia, preguntan: "Si Dios es omnipresente y lo impregna todo, ¿por qué no es visible para nosotros?" Cuando el sol brilla, las nubes formadas por el calor del sol ocultan los rayos del sol. Cuando el sol no es visible debido a las nubes, ¿pueden ustedes decir que el sol no existe? Cuando sopla un viento fuerte, las nubes se disipan y el sol es nuevamente visible. De la misma manera, cuando soplan los vientos del amor y la fe, las nubes de la duda y el egoísmo se dispersan, y Dios se revela. Si bien Dios es omnipresente, la falta de fe que


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padece el ser humano y su vanidad, le impiden ver a Dios. Para que uno pueda librarse de esta naturaleza dubitativa y del egoísmo, tienen que observarse ciertas disciplinas espirituales.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 24 de Junio de 2007) “El Amor Divino es diferente de los apegos humanos. Es atemporal. Es omnipresente. Hagan de él su único ideal. Les es inherente. Manifiéstenlo de manera correcta. Cuando hay azúcar en el fondo de un vaso lleno de agua, pueden endulzar toda el agua revolviendo el azúcar y disolviéndola. De manera similar, su corazón es un vaso. En el fondo de él hay Divinidad. Tomen la cuchara del intelecto, revuelvan el corazón con el proceso de la práctica espiritual. Así, la Divinidad presente en el corazón, circulará por el cuerpo entero. Entonces, cada acción suya será dulce, será dulce su lenguaje, su caminar, su apariencia y sus pensamientos. Serán enteramente dulces.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Marzo de 2007)

Swami Sathya Sai Baba nos recomienda varias prácticas espirituales, de las cuales puede escoger las que considere más adecuadas para su camino espiritual. Es importante que las practique con decisión y constancia por un buen tiempo, en vez de saltar de una práctica a otra permanentemente, y así podrá ver resultados más claros. Para lograr avances se requieren las 3 Ps: Práctica, Perseverancia y Paciencia. Por lo demás, no se preocupe, puesto que la Divinidad le irá indicando el camino, a través de su intuición. Algunas de estas prácticas espirituales son

9:

9 Una explicación más completa sobre las prácticas espirituales recomendadas

por Swami Sathya Sai Baba se encuentra en el libro “Sadhana: Práctica

espiritual de acuerdo con las enseñanzas de Sathya Sai Baba.” (2005) de la doctora Elsa Lucía Arango. Mayor información en Fundasai Colombia (2266969) o al correo [email protected].

mailto:[email protected]


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A) Oración: Orar es hablar con Dios. Puede hacerse para agradecerle, ofrecerle, pedirle o simplemente para comunicarse con El/Ella. Cuando se hacen peticiones, considero que es preferible solicitar la expresión de ciertas virtudes que aún permanecen bloqueadas en nuestro interior (ej. tolerancia, paciencia, sabiduría, etc.) o pedir la vivencia de ciertos estados (ej. paz, amor, unidad, etc.), más que solicitar objetos o cuestiones materiales, que son temporales, que tal vez no son una verdadera necesidad para nuestra vida, o que realmente no podemos saber si nos traerán más perjuicios que beneficios, en el momento en que se hagan realidad. Como se mencionó, también se puede orar para ofrecerle algo (¡o todo!) a Dios, para entregarse con plena fe y confianza a Su Divina voluntad, para expresarle lo que nos afecta o nos preocupa, para agradecerle, para pedirle guía y orientación, para solicitar el bienestar de todos los seres, etc.

Es muy valioso orar a Dios pidiéndole que sea El quien piense, hable, sienta y actúe a través de nuestro organismo y del de todos los demás; que Su infinito Amor, Sabiduría y Servicio Desinteresado fluyan a través nuestro; y que, mientras esto sucede, seamos plenamente conscientes que El es el hacedor y nuestros organismos son Sus instrumentos, y que en esencia somos uno con El/Ella. Y asi es!!!

Es importante que la oración sea realizada con fe, sinceridad y pureza. Adicionalmente, suele ser más efectiva cuando estamos seguros de que será efectiva. Para reforzar esta seguridad, podemos concluir cada oración agradeciéndole a Dios por estar atendiendo nuestro ruego a partir de ese mismo momento, y finalizándola con un ¡¡¡Y así es!!!, es decir, dando por hecho que se están empezando a dar las cosas tal como las pedimos, para el bienestar de todos. (Haga el ensayo por si mismo y observe qué pasa).

B) Cantos devocionales: Son cantos entonados y dedicados

a las diferentes formas de Dios, a Sus atributos o enseñanzas, o al Dios omnipresente (más allá de todo nombre y forma). El canto devocional es una manifestación de amor, y las vibraciones energéticas positivas que genera se expanden a nuestro alrededor y a todo el planeta,


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convirtiéndose en un servicio que beneficia no solo a uno mismo sino a todos los demás. Los cantos devocionales purifican nuestra mente y el entorno, y, al hacerlos grupalmente, generan un sentimiento de unidad con los demás asistentes. Esta práctica es un “derroche” de amor y alegría que nos motiva para vivir la vida plenamente y con la mejor actitud.

C) Meditación: Hay muchas formas de meditar y, en casi todas

ellas, se busca calmar la mente y las emociones, para entrar en contacto con la propia esencia, nuestro verdadero Ser. Se suele hacer un trabajo especial con la mente, ya sea enfocándola en uno o varios objetos de concentración o manteniéndose como el observador de la misma. Swami Sathya Sai Baba ha dicho que la verdadera meditación se da en cualquier momento en que nos conectamos con Dios.

Swami promueve especialmente la Meditación en la Luz para este momento de la humanidad. Es una meditación sencilla, que no requiere detener el pensamiento sino enfocarlo en una visualización, lo cual puede resultar más fácil para muchos. Trabaja con la luz, que es un elemento que no está relacionado con una religión en particular, sino que tiene una connotación espiritual universal. Además de ser una práctica para el propio progreso espiritual es un servicio de expansión de luz y amor a todos los demás seres del planeta y el universo, que tanto lo necesitan. Ahora mismo, el planeta Tierra está sufriendo grandes problemas ecológicos, sociales, políticos, militares, etc. Por tal razón, la expansión de la luz y el amor se convierten en una gran herramienta para contribuir con la superación de las crisis actuales y la elevación de la consciencia espiritual de la humanidad.

A continuación se presenta una versión de ésta meditación:

Meditación en la Luz Posición

Siéntese con la espalda recta. Puede hacerlo sobre un cojín con las piernas cruzadas, o en una silla.

Cierre suavemente la boca sin apretar los dientes. Puede ubicar la punta de su lengua en el paladar, detrás de los dientes superiores.


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Las manos las puede colocar sobre los muslos, o unirlas en su regazo, con las palmas hacia arriba, colocando la mano derecha sobre la izquierda y uniendo la punta de los dedos pulgares. (Si prefiere alguna otra postura para las manos, puede realizarla).

Duración y frecuencia

Al principio puede hacer la meditación durante 5 o 10 minutos e ir aumentando el tiempo progresivamente en los días siguientes.

Realice el ejercicio preferiblemente todos los días, ojalá a la misma hora.

Las horas más recomendadas son temprano en la mañana (entre las 3 a.m. y las 6 a.m.). También son buenos momentos, hacia las 6 de la tarde o antes de acostarse.

Evite consumir alimentos una hora y media antes, preferiblemente.

Observaciones generales

Use ropa cómoda, que no apriete su cuerpo.

Al principio puede tener alguna dificultad para concentrarse; pero a medida que practica con frecuencia, irá adquiriendo mayor habilidad (“la práctica hace al maestro”).

En caso de que aparezcan muchos pensamientos durante la meditación, no se preocupe ni se sienta mal. Sencillamente, enfoque la atención en el ejercicio nuevamente.

Pasos

Antes de empezar, puede encender una vela frente a usted, a 1 metro de distancia aproximadamente, para que se le facilite la visualización de la luz al principio del ejercicio.

Para comenzar, cierre los ojos y, según sean sus creencias, pídale a Dios que lo acompañe y lo guíe durante el ejercicio; y que la meditación beneficie a todos los seres del universo.

Respire por la nariz en forma lenta, profunda y tranquila. Si lo prefiere puede acompañarla de la repetición mental de un Mantra o un Nombre de Dios.


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Hágalo en cámara lenta y a un volumen interno alto, para lograr una mayor concentración.

Continúe realizando este ejercicio por unos segundos o a lo largo de toda la meditación, si lo desea.

Ahora, imagine una luz muy brillante, muy cerca de su frente. En caso de que haya encendido una vela frente a usted, abra los ojos y mire fijamente la llama de la vela por unos segundos y después cierre los ojos e imagine esa misma llama a corta distancia de su frente.

Una vez que ha visualizado la llama o una luz brillante muy cerca de su frente, aunque no sea muy nítidamente, imagine que entra en su cabeza por la frente y empieza a descender lentamente detrás de los ojos, la nariz, la boca, por el cuello, hasta el centro del pecho.

En este punto, visualice que la llama o luz se convierte en una flor con los pétalos cerrados, los cuales se van abriendo uno por uno progresivamente. Imagine que todos los pétalos son radiantes, y de ellos emana mucha luz y amor.

Observe cómo la luz que brota de esta flor llena todo su pecho y sienta esa energía de amor en esta zona de su cuerpo.

Ahora la luz sigue expandiéndose y llena sus hombros… brazos… y manos.

Sienta sus manos llenas de luz y energía. Estas manos luminosas le permitirán hacer todo con amor y rectitud, y servir desinteresadamente.

La luz que llena sus manos, brazos, hombros y pecho, se expande también por el abdomen y llena todos los órganos internos para que funcionen con total armonía, vitalidad y salud.

La luz continúa ampliándose, llenando su cadera…, piernas… y pies. Sienta sus pies llenos de luz y energía. Estos pies luminosos le mostrarán el mejor camino a seguir, y lo conducirán a lugares donde pueda amar y servir desinteresadamente.

Ahora la luz que está presente en sus pies, piernas, cadera, tronco, hombros, brazos y manos, se expande también por la garganta y el cuello, y llena su boca. Esta boca luminosa le permitirá alimentarse sabiamente, y hablar con amor, respeto y verdad.


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La luz llena también su nariz y sus ojos. Estos ojos luminosos le permitirán ver a todos con amor y ver lo bueno en todo momento.

Ahora sus oídos reciben la luz. Estos oídos luminosos le permitirán escuchar lo bueno, con amor.

La luz avanza y llena su mente. Esta mente luminosa le permitirá tener pensamientos llenos de amor y luz en su diario vivir.

Ahora visualice y sienta que todo su cuerpo está lleno de luz y energía, y se vuelve cada vez más brillante.

Usted es un ser de Luz y de Amor.

Poco a poco, empiece a expandir esa luz y ese amor a su alrededor como si fuera una esfera que va aumentando su tamaño.

Visualice que su luz llega hasta los que están más cerca y se une a la de ellos, formando una luz aún más grande y potente. Una luz de paz y de amor.

Expanda aún más esa luz amorosa, llenando todo el lugar donde se encuentra… el barrio… y la ciudad.

Compártala con sus familiares…amigos…compañeros de estudio o trabajo.

Envíe mucha luz y amor especialmente a las personas con quienes ha tenido algún conflicto, con el fin de sanar estas relaciones y conservar su armonía interior.

También puede enviarla a alguna población en particular. Como por ejemplo, los niños, los habitantes de la calle, los desplazados, los secuestrados, los gobernantes, etc.

Ahora dirija la luz y el amor a todo el país.

Expanda la luz cada vez más y llene todo el planeta. Visualice que se llenan de luz y amor todos los seres humanos, los océanos, la naturaleza, los animales y el aire.

El planeta es ahora una gran esfera de luz y amor.

Observe como la luz continúa ampliándose y llena todo el sistema solar y todo el universo.

Visualice que todo es luz, paz y amor.

Repita mentalmente: “Estoy en la luz, la luz está en mi, yo soy la Luz”. “Yo soy Luz y Amor” (3 veces) “Todo es Luz y Amor” (3 veces).

Disfrute por un buen tiempo de esta gran sensación de luz, amor, paz, expansión y unidad.


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Más adelante, cuando ya desee terminar, agradezca a la Divinidad por la experiencia vivida y pida mentalmente que todos los seres del universo sean eternamente felices.

Perciba nuevamente la luz y la energía en su pecho, y recuerde que ahí siempre están a su disposición para que los experimente y comparta con los demás, en su diario vivir.

Por último, tome consciencia de su cuerpo, mueva un poco los pies, manos y hombros, y abra los ojos.

NOTA: Recuerde que meditar es “conectarse” con la Divinidad, con su verdadero Ser. Entonces en cualquier momento en que esté conectado con el Amor estará meditando, porque la Divinidad y su Ser son Amor. Así que la invitación es a estar meditando en todo momento: Viviendo el presente con amor.

D) Mantras: Los mantras son palabras, frases o plegarias que tienen una vibración energética muy poderosa y un significado espiritual muy profundo. Ayudan enormemente a concentrar y purificar la mente, e incluso nos permiten ir más allá de ella, facilitando que nuestra esencia Divina se pueda manifestar más plenamente a través de nuestro organismo. Los mantras pueden pronunciarse verbal o mentalmente y acompasados con la respiración. Existen muchos mantras muy auspiciosos. Cuatro de ellos, son: - OM: Representa el sonido original de la creación, es la

semilla de los demás sonidos y mantras. Aún resuena sutilmente en todo el Universo. (En este momento tape sus oídos con sus manos y perciba el sonido que allí resuena: el Om). Este mantra simboliza la Divinidad omnipresente que todo lo permea. Para pronunciarlo en voz alta siga estos pasos: tome aire, luego empiece vocalizando la letra “O” desde un volumen muy bajo hasta llegar a un volumen alto. En este punto, empiece a pronunciar la letra “M” a ese mismo volumen (alto) y gradualmente vaya disminuyendo el volumen hasta llegar al silencio, el cual puede disfrutar por un corto momento antes de iniciar nuevamente la vocalización del mantra. Se recomienda que la pronunciación de la “O” y de la “M” tengan la misma duración.


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Este mantra le permite armonizar sus emociones, calmar su mente, y sentir su unidad con la Divinidad.

- Gayatri Mantra: De acuerdo con los Vedas, es la madre

de todos los mantras. Es un mantra que invoca la energía Divina presente en el Sol y pide la purificación del intelecto, para tener una mayor capacidad de discernimiento que nos facilita ser conscientes de la propia esencia Divina, y distinguir entre lo correcto y lo incorrecto. Tiene una forma particular de ser pronunciado y, por lo tanto, lo invito a escucharlo en el siguiente enlace de internet, en la voz de Swami Sathya Sai Baba: http://www.sathyasai.org/audio/audio1/gayatri3x.mp3 Se puede escribir así:

OM

BHUR BHUVAH SWAHA

TAT SAVITUR VARENIAM

BHARGO DEVASIA DHIMAHI

DIYO YO NAH PRACHODAYAT

- So-ham: “So-Ham” es el sonido, casi imperceptible, que pronunciamos cuando respiramos por la nariz. Al inhalar, se produce el “So” y al exhalar, el “Ham”. Estas palabras significan “Yo soy El” o “Yo soy Aquello”, es decir: “Yo soy la Divinidad”. Entonces, cada vez que respiramos, nuestro cuerpo está expresando la unidad de nuestra alma con la gran Alma (Dios). Para trabajar con este mantra, puede repetir consciente y mentalmente “So” al inhalar y “Ham” al exhalar, concentrándose en su profundo significado. De esta manera, recordará constantemente su conexión e identidad con Dios.

- Loka Samastha Sukhino Bhavantu: Este mantra es una

plegaria por el bienestar de todos los seres. Recientemente Swami Sathya Sai Baba ha invitado a

http://www.sathyasai.org/audio/audio1/gayatri3x.mp3


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las personas interesadas, a repetir este mantra variando un poco su orden, con el fin de enfatizar la intención de que la felicidad llegue a todos los seres de todos los planos de existencia en el universo. El orden es así: “Samastha Loka Sukhino Bhavantu” y pueden escuchar su pronunciación en este enlace: http://www.sathyasai.org/files2008/080831SAMASTA_LOKA.mp3 Otra alternativa muy buena, que le permite aprovechar los beneficios de los mantras, es dormir acompañado del sonido de un mantra durante toda la noche, colocándolo en una grabadora, a un volumen muy bajo para que no perturbe su sueño. Igualmente, durante el día puede mantener un mantra sonando suavemente en el lugar donde trabaja o en su casa, y de esta manera ese ambiente se llenará de vibraciones espirituales y usted también recibirá esta energía que influirá positivamente en su campo electromágnético (aura), sus chakras, su mente, sus emociones y su cuerpo.

E) Afirmaciones: Son parecidas a los mantras y se realizan en el idioma propio. Le permiten reprogramar su mente y afianzar ciertos aspectos en su forma de pensar, sentir y actuar. Usted mismo las puede construir, de acuerdo con las cualidades o valores que quiera reforzar (ej. sabiduría, respeto, prudencia, alegría). Repítalas mentalmente, preferiblemente acompañándolas de la respiración nasal lenta, con el fin de que pueda concentrarse más. Formúlelas afirmativamente (en positivo) y en tiempo presente. Por ejemplo, “Soy conciencia y amor”, “Soy amor y paz”, “Soy paciente y tolerante”, “Soy uno con Dios”, “Soy alegre y generoso”, “Yo soy el Alma”, “Ya soy lo que quiero ser”, “Yo soy Espíritu”, etc.

En la medida en que usted repita estas afirmaciones con convicción, recordando que todas las virtudes están en su Ser y que solamente es necesario que les permita expresarse a través suyo, logrará obtener resultados positivos progresivamente. Recuerde que, según el Buda, nos convertimos en lo que pensamos.

http://www.sathyasai.org/files2008/080831SAMASTA_LOKA.mp3

http://www.sathyasai.org/files2008/080831SAMASTA_LOKA.mp3


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F) Lectura de textos espirituales: Consiste en leer frecuentemente escritos espirituales, los cuales le permiten tener enfocar sus pensamientos entorno a la Divinidad y a Sus enseñanzas. En la sociedad actual, donde constantemente recibimos información muy variada de los medios de comunicación y de las personas con las que compartimos, es fácil que nuestra mente se enfoque en cosas que no son las más adecuadas para potenciar nuestro crecimiento espiritual. Por tal razón, así como es recomendable hacer ejercicio físico con frecuencia para mantener la salud del cuerpo, es importante nutrir constantemente nuestra mente con la información que más nos convenga para nuestra salud psicológica y espiritual.

Recuerde que las escrituras sagradas y los textos espirituales son mapas que lo pueden orientar en el terreno de la vida, pero no son el territorio en sí. Es decir, sus enseñanzas deben contextualizarse y aplicarse con discernimiento, y con respeto hacia las otras creencias. Además, más importante que acumular conocimiento es pasar de la teoría a la práctica y emplear la información para la transformación personal; de lo contrario, el conocimiento libresco no es más que una carga, y fortalece su identificación con la mente y aumenta su orgullo al creerse más sabio que otros.

G) Buenas compañías: Comparta su tiempo con personas

que expresen virtudes y valores humanos en su diario vivir y, de esta manera, se verá motivado a hacer lo mismo. Recuerde el sabio aforismo que dice: “Dime con quién andas y te diré quién eres”.

Cada uno de nosotros se ve muy influenciado por las palabras, acciones, intereses, ideas, prejuicios, etc., de las personas con quienes comparte su tiempo. Asimismo, la presión social es una fuerza “invisible” que tiene efectos muy notorios en nuestros pensamientos, palabras y comportamientos. Por lo tanto, tenga en cuenta que los demás lo pueden limitar en ciertos aspectos y potenciar en otros. Depende de usted asumir una actitud reflexiva sobre estas influencias y escoger bien la gente con la que quiere estrechar sus vínculos. Rodéese de gente que le aporte para su desarrollo espiritual.


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H) La repetición de un Nombre de Dios: Esta es precisamente la práctica devocional que más recomienda Swami Sathya Sai Baba para esta Era de la humanidad. Consiste en recordar constantemente a una de las encarnaciones humanas especiales de Dios (ej. Jesucristo, Krishna, Rama, Buda, Sai Baba, etc.), pronunciando Su nombre (internamente) y preferiblemente, visualizando Su forma, conscientes de la unidad con El/Ella y con una actitud de entrega total a Su Divina voluntad. De esta manera, al repetir constantemente el Nombre de Dios, usted podrá mantener la consciencia de la conexión con la Divinidad, recordando que Ella no está en algún lugar alejado sino que está presente en usted, como su verdadero Ser y dirige su vida.

Para lograr una mayor relajación, puede acompañar la repetición del Nombre de la respiración nasal y/o agregarle una melodía. También puede dividirlo en dos y pronunciar una parte con la inhalación y la otra con la exhalación.

En el libro “La Repetición del Nombre de Dios: la práctica devocional más recomendada para esta Era”

10, encuentra

más información sobre esta práctica espiritual que es muy sencilla y a la vez poderosa.

I) Transformar el carácter y actuar correctamente: No vale

de nada tener devoción y hacer prácticas espirituales si no se comporta correctamente en su vida cotidiana. Es más importante “practicar la espiritualidad” que realizar mecánicamente prácticas espirituales. Es fundamental expresar los valores humanos en la propia conducta. Para ello, le sugiero que observe su personalidad y, descubra y trabaje en las características que limitan la manifestación de su naturaleza Divina. También es importante que cultive la coherencia entre lo que piensa, dice y hace, basándose en la rectitud y las demás virtudes. Estas citas de Swami le pueden ser de gran ayuda para orientar su comportamiento: “Ayuda siempre, nunca lastimes” y “Ama a todos, sirve a todos”.

J) Ofrecerle todo a Dios: Consiste en hacer todo como una

ofrenda a la Divinidad, practicando Sus enseñanzas y con la

10

Gilberto González Arango (2007). Mayor información en Fundasai Colombia (2266969) o al correo [email protected].

mailto:[email protected]


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intención de “agradarla” con nuestras acciones (Nota: realmente quien se agrada es uno). Lo que se hace de esta manera, se convierte en un acto sagrado que nos purifica, llena de sentido nuestra existencia y contribuye a generar un ambiente de mayor armonía.

K) Entrega a Dios: Este es una manera directa de lograr la

trascendencia del ego. Consiste en reconocer que la propia vida surgió gracias a la Divinidad y desde entonces ha dependido totalmente de Ella, y lo continuará haciendo hasta que alcancemos la meta de nuestra evolución espiritual. Esta convicción le permite al devoto confiar en que todo lo que le sucede se debe a la voluntad Divina y tiene como finalidad permitirle aprender y progresar. De ello se deriva una actitud de mayor aceptación frente a las distintas experiencias que vive, unida a un sentimiento de gratitud hacia Dios. La entrega implica recordar constantemente que El es el hacedor y nuestros organismos son Sus instrumentos.

Entonces, al mantener esta consciencia, necesariamente se va debilitando el ego.

Ahora encontrará algunas palabras de Swami Sathya Sai Baba con relación a algunas prácticas espirituales, que sirven para complementar lo que se ha mencionado:

“Las vibraciones espirituales producidas por los cantos devocionales confieren gran alegría a quienes los cantan y a quienes los escuchan. Los cantos devocionales eliminan todos los pensamientos negativos, calman los nervios, purifican la mente, y llenan el cuerpo y el corazón de dulce amor por la Divinidad. Cuando uno canta Bhajans, la mente se satura de la consciencia de Dios y un gran éxtasis surge desde adentro. No se necesita ningún esfuerzo mental o intelectual para ello, pues no hay necesidad de entender nada mientras se pronuncian los santos nombres de Dios y se canta Su gloria. Los cantos y la atmósfera creada por ellos lo lleva a uno más allá del ámbito del cuerpo, la mente y el intelecto, y ayuda a establecer la comunión con el Ser Superior (Conciencia) interior.” (S.S.B. Mensaje de


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la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Noviembre de 2007) “Deben advertir que los cantos devocionales, el cantar los nombres de Dios y la adoración ritual, no son para agradar o calmar a Dios, sino para su propio progreso espiritual. Frecuentemente la gente adula a los ricos y poderosos, especialmente cuando son sus empleadores o se les debe alguna valiosa ayuda, para inducirlos a que otorguen regalos. Pero Dios no derrama gracia sobre la gente por las alabanzas que le cantan; ni se enoja con ellos porque no lo deifican. La contemplación de los atributos divinos los capacita para dedicarse a ideales elevados y los acerca a la Divinidad que es nuestra verdadera naturaleza.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Junio de 2006) “Cualquiera sea la religión que se tenga, se debe cultivar el respeto por los demás credos. Quien no tiene esa actitud de tolerancia y respeto hacia las otras religiones no es un verdadero seguidor de su propia religión. No es suficiente con la sola adherencia estricta a las prácticas de la religión propia; también se debe tratar de ver la unidad esencial de todas las religiones. Sólo así será capaz el ser humano de experimentar la unidad de la Divinidad. Una vez que se reconoce la Verdad del Espíritu Interior, amanece la percepción de que el mundo entero es una sola familia. Entonces uno es colmado del Amor Divino, el cual pasa a ser la fuerza motivadora de todas sus acciones.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Julio de 2007) “Muchos oran a Dios en todo el mundo. Ruegan por la realización de deseos mundanos de una u otra clase. Este no es el tipo apropiado de oración. Deben orar a Dios por Su gracia y amor. Ese amor es para siempre. Dios es Sat-Chit-Ananda (Ser - Conciencia - Bienaventuranza). Entonces, rueguen que les confiera esa bienaventuranza. La


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bienaventuranza de Dios es para siempre, mientras que los placeres mundanos son transitorios. Sólo es un verdadero devoto quien ora por el amor y la bienaventuranza de Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de Junio de 2007) “¿Qué se entiende por nacimiento y muerte? Tomar un cuerpo es nacimiento y abandonarlo es muerte. Es debido a la ilusión que el ser humano experimenta las dualidades llamadas nacimiento y muerte. Cuando inhalamos con el sonido "So", el principio vital ingresa en nuestro cuerpo y cuando exhalamos "Ham", sale. A cada momento, este proceso de inhalación y exhalación nos recuerda nuestra Divinidad intrínseca: "So Ham" (Soy Dios). En tanto hay aliento vital, el cuerpo es considerado auspicioso. Una vez que el aliento vital se retira, el cuerpo se convierte en un cadáver. Tanto el nacimiento como la muerte están relacionados con el cuerpo y no con el principio vital. El ser humano experimenta el nacimiento y la muerte debido a este apego al cuerpo. Estará libre del ciclo de nacimiento y muerte tan sólo cuando abandone el apego al cuerpo y se rinda completamente a la Voluntad de Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Enero de 2007) “El carácter del ser humano se transforma en bueno o malo según sea su compañía. Una compañía noble otorga sentimientos nobles y una mala compañía hace surgir rasgos malvados.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Agosto de 2006) “Algunos preguntan:’"¿Cómo podemos hallar tiempo para hacer práctica espiritual si tenemos que trabajar todo el tiempo para alimentarnos y vestirnos?’ Olvidan que el Señor otorgará estas comodidades materiales y hasta la inmortalidad, si tan sólo confían completamente en Él. Hagan lo que hagan, tengan siempre en sus labios el Nombre del Señor; no necesitan gastar tiempo ni


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energía adicionales para eso. Cuando se levantan por la mañana y cuando se sumergen en el sueño por la noche, háganlo con el Nombre del Señor en los labios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Agosto de 2007) “Uno puede proclamar haber rendido toda su fortuna, poder y posición a Dios. Pero, cuando uno realmente se entrega, se comprende la propia relación con Dios diciendo "yo estoy en Ti, Tú estás en mí". El sentido de separación entre Dios y el individuo debería desvanecerse. La Devoción no consiste meramente en ofrecer adoración de varias maneras. Significa ofrecerse a sí mismo al Señor con dedicación y amor puro. Has venido desde la Divinidad quien es la encarnación del amor. Por lo tanto, basa tu vida en este amor.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 27 de Enero de 2006) “El devoto considera tanto a las personas virtuosas como a las personas viles, actores en la obra teatral divina. Cuando insulta o daña a alguien, en realidad está infligiendo insultos o daños al Dios que adora. No puede recoger la cosecha de la gracia o la bienaventuranza del Espíritu, si siembra el fervor espiritual en un corazón lleno de semillas de codicia y odio. El precepto moral básico para el devoto que aspira a ser entrañable para el Avatar (Encarnación Divina) es: adora a Dios y ofrécele amor, en todo ser viviente.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Octubre de 2007) “Practiquen la actitud de ofrecer todo acto a los pies de Dios, como se ofrece una flor en adoración. Hagan de cada respiración una ofrenda para El. No se sientan mal por las calamidades; tómenlas como actos de la Gracia. Entiendan que nada sucede sin Su Voluntad; todo lo que ocurre tiene adosado un significado más profundo. Cuando sepan que el Señor es la Causa Ultima, la fuente de todo, tratarán a todos de manera


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humilde y respetuosa.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Septiembre de 2007) “La actitud correcta del devoto debe ser aquella de la entrega total. Como un devoto declaró, "Te estoy ofreciendo el corazón que Tú me diste. No tengo nada que pueda llamar mío. Todo es tuyo. Te ofrezco aquello que ya es tuyo". Mientras no se desarrolle este espíritu de entrega total, el ser humano tendrá que nacer una y otra vez. Uno debería ofrecer su corazón a la Divinidad y no conformarse con realizar ofrendas tales como flores y frutas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de Noviembre de 2007) “La tristeza y el dolor surgen del egoísmo; cuando éste desaparece, la tristeza y el dolor se desvanecen. Cada uno de ustedes debe esforzarse por eliminar el ego; entonces el Señor les tomará como Su flauta.” (Sathya Sai Baba en “La Sabiduría de Sai Baba”)

En el momento en que ama a Dios y se entrega totalmente a El, está siendo el amor que usted es, reconociendo su conexión con Dios y trascendiendo las tendencias egoístas y el ego mismo. Al hacer esto puede experimentar su real naturaleza de paz y plenitud. En pocas palabras, en el momento en que vive la devoción plenamente, está siendo lo que es! A continuación encontrará más mensajes sobre la Devoción, que pueden resultar inspiradores para usted.

“(El devoto)…Debe estar siempre ansioso por hallar qué comportamiento suyo, cuáles de sus actos, serán más agradables al Señor, llenarán de felicidad al Señor. Averigüen eso, anhelen eso, hagan cosas que aseguren ese objetivo. Dedíquense a los actos que conduzcan a ganarlo; ésa es la verdadera Devoción.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Julio de 2007)


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“No necesitan ir a otra parte en busca del amor. Está todo dentro de ustedes. La gente hace cualquier esfuerzo para acumular riqueza. Un esfuerzo igual se necesita para adquirir la riqueza del amor. Los seres humanos deben invertir todo su amor en el banco Divino de la Devoción. Este depósito no sólo es seguro sino que además les otorgará crecientes intereses en términos de bienaventuranza. El corazón de ustedes es el banco donde el amor por Dios debe ser depositado. Los depósitos en otros lugares son inseguros porque se pueden perder. Pero el depósito en su corazón es inmune a cualquier clase de robo o pérdida. Este amor es nectarino. El néctar es agradable sólo al paladar, pero el amor Divino confiere eterno éxtasis, que es más dulce que el néctar. Todos deben decidirse a adquirir este nectarino Amor.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Abril de 2006) “Dejando de lado ideas y sentimientos limitados, la gente debe mostrar compasión hacia el prójimo. La compasión es el sello de la Devoción. Nadie puede esperar ser agradable a Dios sin mostrar compasión hacia sus iguales. Un corazón amoroso es el templo de Dios. Dios no puede habitar en un corazón sin compasión. No hay nada más grande en el mundo que ver todo a través del cristal del Amor. Buenos son sólo quienes ven la unidad en la aparente diversidad. Los seres humanos deben darse cuenta de que son chispas de la Divinidad. Tienen que desarrollar pensamientos sagrados y llevar vidas ideales. Deben afanarse por promover el bienestar de la sociedad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Mayo de 2006) “Para percatarse de Dios no es necesario tener riqueza, oro, lujos ni comodidades; tampoco es un requisito la erudición. Lo único que se necesita es una Devoción pura. Sin pureza de pensamiento,


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palabra y obra, es imposible experimentar la Divinidad. Dios no puede ser percibido a través de la ostentación y el engreimiento. El requisito básico es despojarse del egoísmo y la posesividad, para dedicarse a acciones efectuadas con espíritu desinteresado. Cualquier persona tiene derecho a embarcarse en esta búsqueda, sin que importe su edad, ni su posición en la sociedad, ni su género.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Mayo de 2006). “Muchos aspirantes espirituales tienen hoy un error de concepto. Si se les pregunta porqué están haciendo diversas formas de prácticas espirituales, ellos responden que las hacen para fusionarse con Dios. No piensen que ustedes son humanos y tienen que alcanzar el estado de lo Divino. Sepan que han descendido de Dios como seres humanos y que finalmente volverán a su origen. No consideren a Dios como alguien separado y diferente de ustedes; Dios está ciertamente dentro de ustedes.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Octubre de 2007)


A. Si le interesa recorrer este camino de la Devoción, seleccione las prácticas espirituales que quisiera realizar, comience a hacerlo y persista en ello. Practique con amor y entréguele los resultados a la Divinidad.

B. Trabaje la Entrega total a Dios, con plena fe y confianza en El, en todo momento y en todo lugar.


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¡BE HAPPY! Un señor entra al autobús y se sienta cerca de un guía espiritual. El señor tiene su corbata mal puesta, la cara manchada con labial de mujer, lleva una botella de licor medio vacía en su bolsillo y sostiene con dificultad un periódico en sus manos. Después de unos minutos de estar leyendo el periódico, el señor le dice al guía espiritual: “Oiga, ¿usted me podría decir cuál es la causa de la artritis?” “Si claro, la vida irresponsable con mujeres de mala reputación, la vagancia, el alcohol y la suciedad, entre otras!”, le contestó con rudeza. “¡No puede ser!”, fue lo único que musitó el señor. El guía espiritual le dice nuevamente: “Y dígame, ¿hace cuánto tiempo que tiene artritis?” “Oh, no señor. Es que acabo de leer en el periódico que el santo maestro tiene artritis!!!”


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C. SABIDURÍA Muchas personas tienen amplios conocimientos sobre ciertas materias u oficios, y son eruditos o maestros en ello. Hay otros que incluso saben mucho sobre distintos temas y se les considera portadores de una amplia cultura general. Pero desafortunadamente, la mayoría de ellos desconoce quiénes son en realidad. Es decir, no han descubierto lo más fundamental, importante y trascendental: su Ser; y por lo tanto, permanecen desconectados del tesoro más valioso: su amor y paz interiores. Al desconocer esto, dirigen su vida hacia la consecución de conocimientos, objetos, relaciones y experiencias en su entorno, pensando que allí encontrarán la plenitud; pero todo esto no puede sino generarles sensaciones pasajeras de placer y dolor, alegría y tristeza, más no la bienaventuranza permanente.

“Hoy el ser humano está golpeando otras puertas, en vez de la de Dios. Está orando a Dios sólo para pedir posesiones mundanas. El ser humano debe buscar el regalo del conocimiento espiritual, el cual puede darle plenitud a la vida. En cambio, la gente ha adquirido pericia en diversas habilidades y ha dominado muchos campos del conocimiento, sin lograr adquirir la paz interior a la que tiene derecho. La ciencia puede ofrecer tan sólo temporarias comodidades mundanas; la espiritualidad es lo único que puede darles felicidad duradera.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 11 de Junio de 2006) “Considerando al mundo material como la única realidad, el ser humano se pierde en la persecución de objetos materiales. Pero si se explora a fondo la verdad acerca de esos objetos materiales, se encontrará que no tienen realidad en absoluto. Son temporarios y efímeros. No tienen el sello de la realidad permanente. No


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confieren felicidad duradera. Todo ser humano busca disfrutar de la bienaventuranza. Para lograr la bienaventuranza eterna, el ser humano tiene que hacer el esfuerzo requerido. Debe averiguar ‘¿Quién soy?’.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 6 de Octubre de 2006) “El regalo más precioso y sagrado que el ser humano recibe de Dios es el intelecto. El intelecto, que se debería utilizar para buscar el Atma, es actualmente utilizado por el ser humano para buscar Annam (alimento). Cuando a ustedes les dan un espejo, si lo giran hacia el lado contrario, ¿cómo pueden ver su cara? Utilicen el espejo del intelecto para reconocer su ser verdadero. Esto es conocido como ‘la visión directa de nuestro Ser verdadero’. Desgraciadamente, el ser humano de hoy procura saber acerca de todo, menos acerca de su propia naturaleza verdadera. El le pregunta a todo el mundo: "¿quién es usted?", pero no se pregunta a si mismo, "¿quién soy yo?" Aquel que no se conoce a si mismo, ¿qué derecho tiene de inquirir acerca de otros? Tal pregunta proviene de la ignorancia. Sin el conocimiento acerca de su propio Ser verdadero, el ser humano nunca puede alcanzar la beatitud.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Marzo de 2006)

Precisamente, el camino de la Sabiduría consiste en ser consciente permanentemente de quién o qué es uno realmente. Para ello es muy útil que empiece por recordar quién o qué no es usted en verdad, teniendo claro que usted tiene un organismo humano compuesto de cuerpo, emociones, pensamientos y personalidad; pero que usted no es ese organismo. Esa claridad de lo que usted no es, lo lleva a preguntarse: “Entonces ¿quién o qué soy yo?” Para lo cual usted ya conoce la respuesta: Conciencia, el Alma, el Ser (¡como lo quiera llamar!). Conciencia sin límites, Infinita; sin nacimiento ni muerte, Eterna; cuyo estado natural es Paz y Amor desinteresado e incondicional; y que permanece como el testigo de todo en un tranquilo Silencio.


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“Todos pueden alcanzar la liberación. ¿Mas cuándo? En el momento en que se establezcan en la verdad de “Yo soy el Atma”, alcanzarán la liberación.” (S.S.B. Extracto del discurso del 28 de Julio de 2007)

Recordemos que Jesucristo nos dijo: “La Verdad os hará libres”. Y la verdad más elevada es la Verdad acerca de nuestra real naturaleza Divina, la cual nunca está atada o esclavizada y nunca se ve afectada o disminuida. Por lo tanto, al vivir en la Verdad, vivimos en Libertad.

“La liberación es simplemente el estar conscientes de la Verdad, es la caída de las escamas de ilusión que cubrían los ojos; no es privilegio de unos pocos expertos aspirantes espirituales. Como el río, que pierde su forma, su nombre y su sabor en el mar, la liberación disuelve nombre y forma, aptitudes y actitudes. Ya no eres más un individuo separado. La gota de lluvia se ha mezclado con el mar, del cual antes se había elevado. Obviamente no hubo esclavitud en ningún momento, ni prisión; hubo sólo una fijación en la mente, de que uno era esclavo, de que estaba en prisión, ¡de que uno era limitado y finito!” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 23 de Mayo de 2006)

“La mejor manera de librarse de la debilidad es golpearla en su misma raíz: la errónea noción de que eres el cuerpo, con un nombre y una forma, los cinco sentidos, el intelecto y la mente. En realidad, todos estos son como un equipaje. ¿No dices ‘mi nariz, mi mente, mi mano, mi razón’, lo mismo que ‘mi libro, mi paraguas’? ¿Quién es el 'yo' que llama 'mías' a todas estas cosas? Ése es el verdadero ‘tú’. Estaba allí cuando naciste y también cuando dormías ajeno a todo, incluso a tu cuerpo. Ese 'yo' no puede ser dañado; no cambia, no sabe de nacimiento ni de muerte. Aprende la disciplina que te hace consciente de esta Verdad y serás para siempre libre y osado. Ése es el verdadero conocimiento, el conocimiento del


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propio Ser, que los sabios han cosechado para ti después de intensa penitencia y contemplación.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 22 de Mayo de 2006) “Para librarse de las cualidades demoníacas, el ser humano tiene que embarcarse en la siguiente indagación: "¿Quién soy?". Para esta indagación no sirve ser un erudito en las escrituras. Sólo se puede tomar conciencia de la bienaventuranza del Ser si se reconoce que el mismo espíritu reside en todos los seres. Esta percepción sólo puede obtenerse mediante la indagación espiritual. Recitar los himnos de las escrituras no aliviará de su pena al ser humano. La transformación debe tener lugar en su interior.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Septiembre de 2007)

Precisamente, hace un tiempo encontré esta cita del gran sabio vedantino Adi Shankara, que indica muy bien el objetivo central del aspirante espiritual: “Habla tanta filosofía como te plazca, adora a tantos Dioses como quieras, participa en todas las ceremonias que deseas, canta devotas alabanzas a cuantos seres Divinos te parezca, pero la liberación no llegará ni al final de un centenar de años sin la muerte del ego o yo.” Asimismo, Swami Sathya Sai Baba nos enseña que la auto-indagación (la investigación de nuestra verdadera naturaleza) debe abarcar ¾ partes de nuestro trabajo espiritual y el cuarto restante debe emplearse en las otras prácticas que uno escoja. Tomando en cuenta todo esto, para obtener la Sabiduría es importante que permanezca atento al momento en que erróneamente se identifica con el organismo. Entonces, en ese instante, pregúntese: “¿de quién es este cuerpo, esta emoción, estos pensamientos o esta personalidad?” Seguramente la respuesta será “Mío(s)” y esto le dará la oportunidad de hacerse otra pregunta: “Y ¿quién soy yo?” o “¿qué soy yo?” Inmediatamente haga esta pregunta con total sinceridad, podrá recordar que usted es el testigo de su organismo, la Conciencia pura e inalterable, la energía Divina que le da vida al cuerpo, el Alma eterna.


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“Todos ustedes consideran a un ser humano simplemente un ser humano. Es por eso que están cometiendo tantos errores. No son meramente un ser humano. En verdad, son Dios. Piensen que son Dios y se convertirán en Dios. Según sean los sentimientos será el resultado.” (S.S.B. Extracto del discurso del 28 de Julio de 2007) “Si escucharan la voz de Dios dentro de sí mismos, ella les diría que no existe diferencia entre ustedes y Él. Nunca hubo una diferencia. Sólo la imaginaron – la sensación de diferencia no estaba más que en sus mentes. No existe un Yo separado de Dios que ha de convertirse en uno – nunca lo hubo, siempre existió el Uno sin segundo. Para alcanzar esta altísima Verdad, no piensen que Dios y ustedes están separados. Piensen siempre, ‘Dios está conmigo, está dentro de mí, está a mi alrededor, está por encima mío. Todo lo que existe es Dios. También yo soy Dios. Soy lo infinito. Soy lo eterno. No soy dos – soy uno, solamente uno. No hay nadie más fuera de mí. Dios y yo somos uno solo y lo mismo’. Esto se denomina confianza en uno mismo, es confianza en que uno es el Atma, el Sí mismo único. Desarrollen esta confianza pensando en todo momento, ‘Dios lo está haciendo todo, sin Dios no soy nada’. Cuando llegan a ser conscientes que Dios no está afuera ni separado de ustedes, ganan confianza en sí mismos. Entonces, está la paz, está la verdad, está Dios. De modo que primero deberá haber confianza en uno mismo y amor a Dios.” (Tomado de una conferencia de Swami Sathya Sai Baba a un grupo de devotos occidentales en Kodaikanal, en Abril de 1983).

La Sabiduría no se logra solamente con la respuesta mental a la pregunta “¿quién o qué soy yo?” sino mediante la convicción y la vivencia de nuestra real naturaleza, que se logra cuando estamos “conectados” con la paz y el amor del propio Ser. Para ello es importante conservar la calma mental, dejar de ser la


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víctima de sus “ires y venires”, de sus caprichos y tendencias, y hacer de ella el instrumento y convertirnos en su amo. Recuerde que puede serenar su mente de muchas maneras, algunas de ellas son: enfocarla en la respiración, percibir su cuerpo internamente, repetir mentalmente un Nombre de Dios, mantra o afirmación; dirigir su atención al corazón espiritual (internamente al lado derecho del pecho), ser consciente de todo lo que percibe sin juzgar ni criticar y otras más que están mencionadas en el capítulo de la relación con la mente. Adicionalmente, puede observar su mente, sin identificarse con los pensamientos, con la consciencia de que usted es el testigo inalterable de ellos.

“El cuerpo y la mente son sólo instrumentos. Deben estar bajo nuestro control. No se identifiquen con estos instrumentos. Ustedes son el amo. ‘Dominen a la mente y sean genios’. Es el invisible Espíritu quien hace funcionar al cuerpo. La gente olvida al amo (el Espíritu) y se deja engañar por su apego al cuerpo. Ustedes son el Sí Mismo, el Ser, que es eterno. Por lo tanto, abandonen el apego al cuerpo y vivan en la consciencia del Espíritu.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 1 de Diciembre de 2006)

La Sabiduría también se ve reflejada en la visión que tiene sobre el mundo que lo rodea. Todo lo que tiene nombre y forma es transitorio y, por lo tanto, no es la Verdad, no es la realidad absoluta y no será nunca la fuente de la cual podremos derivar la satisfacción permanente. Swami Sathya Sai Baba nos aclara la forma más propicia para relacionarnos con el mundo…

Devoto: “Swami ¿Cuál es la mejor manera de relacionarse con el mundo?” Sathya Sai Baba: “(…) Presten atención a lo que dura, a lo permanente. Todas las cosas que involucran al mundo y a las relaciones humanas tienen que ver únicamente con el cuerpo. El cuerpo es como una burbuja de agua. La mente es como un mono loco. De modo que no sigan al cuerpo ni a la mente. Sigan la voz de Dios. Ella es


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la voz de la Verdad, invariable dentro de sí mismos. Ella les dirigirá hacia su más alto bien.” (Tomado de una conferencia de Swami Sathya Sai Baba a un grupo de devotos occidentales en Kodaikanal, en Abril de 1983).

Entonces, vale la pena que nos preguntemos cómo nos estamos relacionando con el mundo y hagamos los ajustes necesarios.

“Creyendo que el mundo, tal como se lo conoce durante el estado de vigilia, es real, y que el mayor logro es alcanzar la felicidad en ese mundo, el ser humano acumula los instrumentos y símbolos de esa felicidad; adapta a su gusto y preferencia las leyes, ideales, instituciones y principios que refuercen esa felicidad. Pero ¿puede ser tan sólo eso el objetivo de la vida? ¿Forcejear entre las olas de la alegría y la pena, que se alzan y caen en este mundo objetivo visible; ser arrastrados por la corriente del deseo, acumulando alimento, refugio, comodidades y placeres; y finalmente debatirse en las fauces de la muerte?” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 13 de Agosto de 2007)

Si aplicamos progresiva y constantemente esta Sabiduría espiritual en nuestras vidas, el mundo empezará a disminuir su poder para afectarnos y dejará de ser el lugar donde busquemos vanamente la felicidad, porque cada vez seremos más conscientes de que el universo es realmente una creación transitoria y cambiante, en la cual encontramos dualidades como alegrías y tristezas, éxitos y fracasos, placeres y dolores, salud y enfermedad, etc. Mientras que la Divinidad omnipresente (nuestro verdadero Ser) es la fuente invariable y eterna de la cual todo surge y en la cual todo se disuelve, que permanece inalterada y en bienaventuranza.

“Maya (la ilusión), por medio de su poder de esconder la naturaleza del Alma sobreponiendo lo irreal a lo real, hace que el único y solo Dios aparezca como el individuo, el Creador y el Universo, tres entidades, cuando en realidad es


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solamente una… A la pregunta de cómo puede una cosa aparecer como dos, la respuesta debe ser que antes del discernimiento, Dios aparece como Universo, aunque su naturaleza real no ha sufrido ningún cambio; justamente como un jarrón es percibido como jarrón antes de que al examinarlo se revele básicamente como lo que es: barro. Una corona, unos aretes y un collar parecen ser diferentes, hasta que un análisis concluye que son, básica y fundamentalmente, oro. Así también, el Dios único aparenta ser muchas formas bajo varios nombres y da la impresión de multiplicidad. Sólo Dios es, fue y será. La convicción de que este Universo no es sino una superposición, es la característica que distingue a la genuina Sabiduría y ésta es el final de toda ignorancia.” (S.S.B.,1999, p. 46 y 48)

“El Alma está presente en todo lugar y en todas las cosas, inalterada, omnipresente como el éter. El Alma está aún más allá del éter… El Alma no es afectada ni tocada por nada; desprovista de agitación o de actividad, está más allá de todo. Ustedes no deberían dudar si es ilimitada o no. Ella está más allá de los tres límites de espacio, tiempo y causa. Ustedes no pueden afirmar que el Alma esté en un lugar y en otro no, puesto que ella no está limitada por el espacio. Tampoco pueden afirmar que ella existe en un momento y en otro no, puesto que no está limitada por el tiempo. El Alma lo es todo, no hay nada que no sea Alma y no tiene limitación de objetividad, nombre o forma. El Alma es plena y libre. Comprender esto es el más completo Conocimiento, la Verdad Suprema.” (S.S.B., 1999a, p. 51) “Cuando se afirma que el Alma es ‘sin cambios’ significa que algunas otras cosas están sujetas a modificaciones, razón por la cual puede surgir otra pregunta: ¿Cómo puede entonces usarse la expresión ‘no dualidad’?... ¿Cómo puede decirse que no hay nada fuera del Alma? La razón es que ella es la causa de todo lo que existe y, desde este


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punto de vista, no puede haber distinción entre la causa y el efecto: la causa no puede ‘ser’ sin el efecto y el efecto, a su vez, no puede existir sin la causa.” (S.S.B., 1999a. p. 51-52)

Las tradiciones espirituales y los grandes místicos enseñan que en los momentos en que uno es consciente y experimenta su verdadero Ser; se le facilita reconocer ese mismo Ser en los demás; lo cual da lugar a la gran Sabiduría de ver la unidad en la diversidad, de percibir la misma Divinidad en todos los demás y actuar en consecuencia, guiado por el amor, la compasión y el altruismo.

“La mirada que ahora está dirigida hacia afuera, hacia el universo fenoménico, debe volverse hacia adentro, hacia el espíritu que allí habita. Uno debe manifestar la Conciencia Divina que le es inherente. Debe someterse a esa Conciencia, como disciplina espiritual. Esto se llama ‘Percepción consciente de la Divinidad interna’. El primer paso es tomar consciencia de la Divinidad dentro de uno mismo. El paso siguiente es darse cuenta de que la Divinidad que está dentro del propio Ser, está presente por igual en todos los demás. Uno debe reconocer que el velo que parece separarlo de los otros nace de la ilusión, y debe hacer todos los esfuerzos por quitarlo. Sólo entonces será posible experimentar la unidad de todos los seres vivientes.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 16 de Agosto de 2007) “En terminología vedántica la definición de Sabiduría es ‘reconocer al Uno sin segundo’. Es decir, ver al Uno en los muchos, a la unidad en la diversidad. Puede haber muchos nombres y formas, pero ustedes deben reconocer que en todos ellos el principio del Alma es uno y el mismo. No es suficiente decirlo; deben vivirlo como experiencia. Sólo entonces se puede llegar al éxtasis constante. Sólo una persona así puede llamarse auténticamente sabia, conocedora de lo


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Supremo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Julio de 2006) “La vista determina el apego, el pesar, la pasión, etc. Ustedes son los más nobles seres jamás creados, y por lo tanto tienen que desarrollar la visión que no ve altos ni bajos, que ve a todos impregnados de Divinidad, y carentes de diferencias entre unos y otros. Adi Shankara declaró ‘Hagan que su vista esté cargada de Sabiduría; entonces todo lo visto aparecerá, bajo esta luz de la Verdad, como la Divinidad Absoluta’. Dios, que está en ustedes, está también en cada uno de ellos. No crean que los demás son distintos; son sólo ustedes en tantas formas diferentes. El mundo está lleno de sus parientes; son todas chispas del mismo fuego.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Julio de 2006)

Como ha podido notarlo, la Sabiduría a la que se refiere este camino es diferente de la erudición o del conocimiento libresco. De todas maneras, la claridad en los conceptos y en estos temas espirituales, seguramente le es de gran utilidad para su compresión y evolución. Pero lo más importante es que los ponga en práctica para su transformación, o si no, se convierten en una carga más que puede generarle orgullo y reforzar su identificación con la mente: fortalecer su ego.

“Hay diferentes clases de conocimiento. El que importa es el conocimiento del Alma. No tiene relación con el conocimiento físico, sensorial o mundano. El conocimiento del Alma sólo puede obtenerse averiguando la naturaleza del Alma, no por otros medios. No puede ser enseñado por preceptores o aprendido por el estudio de textos. No puede ser recibido de alguien u ofrecido a alguien. Tiene que emerger de la conciencia interna. Los preceptores y los textos pueden sólo ayudar en algún grado. Pero el aspirante que busca el Conocimiento del Alma tiene que embarcarse en la auto-indagación para experimentar esta auto-conciencia. Debe explorar


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e investigar toda la gama de la experiencia espiritual y llegar a la Realidad última. Tal como un niño aprende a hablar observando a su madre, el aspirante espiritual tiene que hacer el esfuerzo por sí mismo, además de escuchar al preceptor o estudiar las escrituras sagradas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Julio de 2006) “Todo el conocimiento adquirido por medio de la mente es ilusorio… Puede servir para ganar puntos controvertidos, no obstante tales debates sólo promueven la discordia. El conocimiento que sobrepasa todas las disputas y está relacionado con las verdades eternas es el Conocimiento del Ser Interno... Sólo por medio de la experiencia directa y de la práctica espiritual realizada por uno mismo es que este conocimiento del Ser puede ser concientizado.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 15 de Abril de 2006)

Por todo lo anterior, es importante que pase de la razón al corazón, del pensar al sentir, de las ideas a las vivencias, del discurso a la acción. Precisamente los Lightstorm, quienes han dedicado su vida a transmitir el mensaje de Swami Sathya Sai Baba con gran claridad para todos (especialmente para los occidentales), han dicho que una vez que uno está aplicando en su diario vivir el amor y el servicio desinteresados, si quiere tener la vivencia del Ser, debe dedicar ciertos momentos para liberarse de todo tipo de pensamientos y percepciones, y mantenerse por el tiempo que pueda como Conciencia pura, sin contenido y en paz. Por tal razón, lo invito a que ahora mismo practique nuevamente los siguientes ejercicios que son muy efectivos para aquietar la mente y mantenerse, por momentos, en el estado de Conciencia libre de pensamientos. EJERCICIO 18: Lea detenidamente cada instrucción. Si es necesario, lea dos veces el ejercicio antes de practicarlo. Permítase experimentarlo.

A. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Inhale por la nariz y exhale por la boca, con un suspiro prolongado (¡Haahh!). Hágalo 3


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veces. Pregúntese mentalmente “¿qué soy yo?” o “¿quién soy yo?” Cierre los ojos y dirija su atención detrás de ellos, en el interior de su cabeza. Luego empiece a descender su atención muy lentamente detrás de la nariz, de la boca, por la garganta, hasta el pecho, un poco al lado derecho, donde queda ubicado el corazón espiritual. Mantenga su mente enfocada en ese espacio o sienta su energía en ese punto, por un buen tiempo. Recuerde sentir más y pensar menos. Cada vez que se desconcentre vuelva a sentir el espacio o la energía en ese punto.

B. Siéntese cómodamente, con la espalda recta y sin tensarla. Inhale profundamente por la nariz y exhale por la boca todo el aire, en forma de suspiro (“¡Hahhh!”). Hágalo 3 veces. Cierre los ojos y preste atención al color que observa en sus párpados (negro, violeta, rojo con puntitos blancos, etc.). Imagine que todo a su alrededor es espacio, solamente espacio sin objetos. Arriba, abajo, al frente, atrás y a los lados, sólo hay espacio. Y visualice que ese espacio es del color que observa en sus párpados. Sienta que ese espacio es infinito. Ahora visualice ese mismo espacio, con el mismo

color, dentro de su cuerpo. Después, sienta que el espacio interno y el externo se funden en uno solo; y que todo es espacio, solo espacio (del mismo color). Dese cuenta que ese espacio infinito es diferente de “la nada”, puesto que está lleno de su conciencia y de su paz, es decir, de su verdadero Ser. Permanezca todo el tiempo que pueda sintiendo su presencia en ese espacio, lleno de conciencia y paz. Trate de evitar pensar, solo perciba y sienta, tanto como pueda. Si llegan pensamientos (palabras o imágenes), retome el ejercicio las veces que sea necesario, sin sentirse mal. ¡Disfrútelo!

C. Evalúe si en algunos pequeños momentos logró mantenerse libre de pensamientos; y tenga en cuenta que, a diferencia del sueño profundo, usted estaba despierto siendo Conciencia pura.


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Al ser conscientes constantemente de lo que somos en realidad podremos vivir el presente tal como se nos presenta, relacionarnos mejor con las emociones y pensamientos que aparecen en nuestro organismo, sabiendo que somos distintos de él; mantener una actitud de mayor aceptación y fluir más fácilmente con lo que sucede, tal como sucede. Recordando que somos lo que somos, que somos el Ser, que somos Conciencia, que somos el testigo inalterable de nuestro organismo y del entorno, podremos aumentar nuestra capacidad para vivir plenamente el aquí y el ahora, dejando a un lado miedos, prejuicios y preconceptos que perturban la relación con nosotros mismos y los demás. Podremos empezar a dejar de vivir en un pasado que no volverá y en un futuro que no se sabe cómo será, liberando las culpas, frustraciones y resentimientos sobre lo que quedó atrás y las preocupaciones, deseos y fantasías sobre lo que aún no ha llegado. Para concluir este sendero de la Sabiduría lo(a) invito a leer con detenimiento estas enseñanzas y asimilarlas profundamente…

“El conocimiento obtenido en los estados de vigilia y de sueño no es permanente, va y viene. El conocimiento que se pierde no es verdadero conocimiento. El conocimiento de la Realidad Suprema una vez que es obtenido, nunca se va. Por otro lado, no volverá la ignorancia una vez que ésta abandona al ser humano. Por lo tanto, aquello que es permanente es el Principio del Alma Divina. Este Divino Principio está en todas partes; no hay lugar donde lo Divino no esté presente.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 16 de Marzo de 2006) “Dense cuenta que tienen dentro de sí la fuente del poder, de la sabiduría y de la alegría. Anuncien que son inconquistables y libres, que no pueden ser tentados o amenazados para que se dirijan al mal. Mientras persista en ustedes un rastro de identificación con el cuerpo, la búsqueda de Dios debe continuar. No queden atrapados en los pegajosos enredos del mundo exterior. No endurezcan sus corazones con codicia ni odio. En


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cambio, háganlo tierno con amor. Límpienlo con hábitos puros de vida y de pensamiento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 21 de Abril de 2006) “La envidia y la codicia emanan del ego y tienen que ser cuidadosamente vigiladas y controladas. Cuando uno crezca en Sabiduría, el ego caerá como cae la cola del renacuajo. Debe caer sola; ya que si la cola es cortada, el pobre renacuajo morirá. Así que no se preocupen por el ego; desarrollen su Sabiduría y contemplen la efímera naturaleza del mundo objetivo. Entonces la cola del ego dejará de ser evidente.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 5 de Junio de 2006) “No tienen necesidad de correr por todas partes en busca de Dios, porque ustedes mismos son Dios. Dios reside en sus corazones. Él es la omnipresente fuerza motriz. Confíen firmemente en esta verdad. Como el fuego en un fósforo, la Divinidad está latente en el ser humano. El fuego en el fósforo se hace manifiesto cuando lo frotan contra el costado de la caja. De la misma manera, cuando el individuo contacta a Dios, la llama de la Sabiduría brilla resplandeciente.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 20 de Julio de 2006) “La Sabiduría no significa simplemente tener una relación con los libros. Tampoco se trata del conocimiento mundano. Sólo quien ha reconocido que el individuo no es diferente de lo universal, es un verdadero sabio. La verdadera Sabiduría consiste en ser consciente de la unidad entre el individuo y el todo colectivo.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Septiembre de 2006) “El ser humano debe poner bajo su control a la fuente del placer y del dolor. Más que el placer es el dolor lo que despierta la Sabiduría en el ser


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humano. Si estudian la vida de los grandes seres humanos encontrarán que es de los problemas y del dolor de donde obtuvieron Sabiduría. Sin pesar no puede haber Sabiduría. El dolor le enseña al ser humano muchas lecciones. Sin comprender esta profunda verdad, el ser humano persigue sin pausa el placer. Indudablemente, el ser humano necesita ser feliz. Pero ¿cómo se logra la felicidad? El ser humano sólo alcanza la felicidad si supera el pesar.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 4 de Octubre de 2006) “El pecado más grande que comete el ser humano es olvidarse de su Divinidad. Sin reconocer su verdadera naturaleza, se considera a sí mismo como un individuo separado y llena su mente de deseo y odio. No debemos ver la existencia humana como algo lamentable o débil e impotente. El ser humano es la encarnación de la Divinidad; él es Sat-Chit-Ananda (Ser-Conciencia-Dicha). La Divinidad en él está siempre irradiando luz y dicha. Sin embargo, debido al velo de los malos pensamientos que cubren su mente, él no es capaz de experimentar esta dicha.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 31 de Octubre de 2007) “El dormir es la principal causa del soñar. Si no se duerme, no hay posibilidad de soñar. La ignorancia, que es como un sueño, tiene como causa la falta de conocimiento acerca de la Verdad. Por lo tanto no se duerman en esa falta de conocimiento. Abandonen este apego al mundo y despierten de la ilusión en la que están durmiendo. Esa ilusión les da la impresión errónea llamada realidad física. El apego les hace olvidar la verdadera forma que ustedes poseen. Ustedes no son este cuerpo físico. No cometan el error de creer que las cosas físicas son las realidades espirituales. Así como el soñar desaparece cuando despiertan, la ilusión causada por el apego desaparece cuando despiertan a la Sabiduría.”


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(S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 5 Noviembre de 2006) “Este mundo es Su juego; no es un sueño vacío. Tiene su propio propósito y utilidad. Es el medio por el que uno puede descubrir a Dios; véanle en la belleza, la grandeza, el orden y la majestuosidad de la naturaleza. Estos no son sino sombras de Su Gloria y Su Esplendor. La adoración a Dios conduce al conocimiento de que Él es todo. Cuando experimenten que no hay Segundo, ¡eso es sabiduría!” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 25 de Noviembre de 2006) “La educación debe conducir a la iluminación; ante ese esplendor huirán la oscuridad de la ignorancia y la penumbra de la duda. Entonces, en el corazón así iluminado, será fácil cultivar buenos pensamientos y sentimientos. La educación no termina con la acumulación de información; debe resultar en la transformación de los hábitos, el carácter y las aspiraciones del individuo. El conocimiento se tiene que poner a prueba en la vida diaria. Actualmente el ser humano no sospecha la preciosísima herencia que tiene dentro de sí. Se interesa por todos, excepto por su propio Ser. Con sólo darse cuenta de su Ser, puede tener por añadidura vastas fuerzas, permanente tranquilidad y gran alegría.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 25 de Junio de 2006) “El cero obtiene valor sólo cuando el número uno se asocia a él. Después tenemos que cuanto mayor sea el número de ceros, mayor será el valor. Si eliminamos el número uno, todos los ceros perderán su valor. El amor hacia el Ser puede compararse al número uno. La vida humana obtiene valor únicamente cuando tiene amor hacia el Ser. Es el Atma el que confiere todos los poderes al ser humano. Aquellos que se lamentan de su debilidad, no son conscientes de


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su potencial inherente y no le están dando un uso adecuado.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 4 de Diciembre de 2006)


A. Si le interesa practicar este camino de la Sabiduría, empiece por auto-observarse continuamente y recordar que usted tiene un organismo humano; pero es distinto de él; que usted es el Alma, el Ser, Conciencia, el Espíritu, la Divinidad.

B. Cada vez que viva situaciones que afecten su cuerpo, sus emociones, su mente o su personalidad, pregúntese: “¿A quién le sucede esto?”, y luego: “¿quién soy yo?” o ¿qué soy yo?”. Después de recordar que usted es diferente de su organismo, que es realmente el Testigo (el Alma), relaciónese con lo que siente o piensa de la manera más sana posible. (Puede tomar en cuenta las sugerencias expresadas en capítulos anteriores acerca de la relación con el cuerpo, las emociones, la mente y la personalidad).

C. Enfoque su mente en su verdadero Ser y vea al mismo Ser en todos. Distinga entre lo transitorio y lo permanente. Viva en el mundo sin que el mundo viva en usted, viva plenamente desde el amor y el servicio, con alegría y sin apego (dependencias). Y recuerde que la fuente de la paz permanente está en usted, es usted, es su verdadero Ser.

D. Cada día, dedique algunos momentos para aquietar su mente. Para ello, puede realizar alguno de los ejercicios descritos.


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Un maestro y su discípulo se encuentran sentados en postura del loto a la orilla del río, filosofando acerca de la vida, de la muerte, de la transitoriedad, etc. Habla el discípulo: “Maestro... esta vida es tan frágil... ¿Qué ocurriría si echase una hoja de aquel árbol al río?” El Maestro contesta: “Mi querido alumno, si echases una hoja de aquel árbol al río flotaría como una pluma flota en el aire.” (Hay un silencio) “Entonces... mi maestro, ¿Qué ocurriría si echase una de estas minúsculas piedras al río?” (Hay otro silencio) “Mi amado discípulo, si echases una de estas piedras minúsculas al río se hundiría como se hunden los viejos barcos en el océano.” (Otro silencio más) “Maestro, ¿Y si echase un trozo de tela al río, qué ocurriría?” (De nuevo un silencio) “Mi estimado alumno, la tela flotaría y después se hundiría, como flota y se hunde el agua de la lluvia en las nubes y en la tierra.” “Mi amado maestro... ¿y si echase al río mis suaves sandalias?” (Silencio) “Estas flotarían.” “¿Y si echásemos las llaves del monasterio?” “Se hundirían.” “¿Y si echásemos una varilla de hierro?” “También se hundiría.” “¿Y si echásemos un cigarro?” “¡Ya párala antes de que te eche a ti al agua!”


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D. AMOR

El avatar Sathya Sai Baba dice: “si desarrollan amor, no necesitan desarrollar nada más”. Creo que esta sola cita demuestra la gran importancia del amor. Más que ser un camino independiente de los otros tres, el amor es realmente el vehículo necesario para recorrer cualquiera de los otros senderos. Por tal razón, es fundamental aplicar el amor en cada momento de nuestra vida, para que ella sea realmente significativa y agradable de vivir.

“El Amor es Luz. Ilumina su senda y les ayuda a alcanzar la meta. Harán a salvo y seguros su viaje por la vida, si llevan la luz del amor con ustedes. El Amor es Dios. Vivan en el Amor. A decir verdad, ustedes son las personificaciones mismas del amor. Permitan que la corriente del amor fluya de un corazón al otro. Consideren al amor como su vida. Este es el primerísimo deber de cada uno. Pueden buscar en cualquier lugar del mundo, no encontrarán nada más grande que el amor... El amor es el poder supremo. El genuino valor humano radica en compartir y experimentar el amor supremo. El poder del amor no tiene par. Cuando llenan su corazón de amor, todas las personas pasarán a ser sus hermanos y hermanas.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 9 de Enero de 2007) “En este mundo, no hay mayor virtud que el amor. El amor es verdad, el amor es rectitud y el amor es riqueza. Este mundo se originó del amor, es sustentado por el amor y, al final, se fundirá en el amor. Cada átomo tiene su origen en el amor. Existen innumerables poderes en este mundo, como el poder atómico, el poder magnético, etc., mas el poder del amor los supera a todos. La vida privada de fe y de amor carece de sentido y es


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inútil.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 3 de Marzo de 2007)

El amor al que se refiere este camino, es el amor que no busca intereses personales, contraprestaciones ni impone condiciones, es decir, es un amor desinteresado e incondicional. Se trata de amar por el hecho de que uno es Amor y porque, en realidad, todos somos uno y lo mismo. Precisamente en Sus discursos, Swami Sathya Sai Baba se dirige al auditorio como “Encarnaciones del Amor”.

“El amor existe por causa del amor y por nada más. Es espontáneo y esparce deleite. Todo está impregnado de amor. El amor lo puede conquistar todo. El amor desinteresado, puro y sin mezcla, conduce al ser humano hasta Dios. El amor egoísta y constreñido ata al ser humano al mundo. Incapaz de comprender la naturaleza pura y sagrada del amor, el ser humano es hoy presa de interminables preocupaciones debido al apego a los objetos mundanos. El principal deber del ser humano es entender la verdad acerca del principio del amor. Una vez que entienda la naturaleza del amor, ya no se perderá.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 16 de Julio de 2007) “En este mundo ven muchos nombres y formas. ¿Significa esto que son todos diferentes entre sí? No. Todos y todas son uno. Es únicamente la Divinidad la que se expresa a sí misma como madre, padre, hermano, hermana, etc. Puede que diferentes personas le adscriban distintos nombres a la Realidad Átmica y que traten de definirla de diferentes maneras. Mas el principio Átmico subyacente es el mismo y uno solo. Cuando mantengan ante la vista este principio de la verdad, el amor fluirá desde ustedes de manera incesante. Sumérjanse en el océano del amor. No renuncien al amor bajo ninguna circunstancia. Aunque alguien les odiara, trátenlo como a su propio hermano.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 10 de Enero de 2007)


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“El cuerpo es el templo y Dios es el Morador. Si este cuerpo es un templo, también lo será aquel cuerpo y todo otro cuerpo. Todos los cuerpos son templos y el mismo Dios reside en cada uno de ellos. Por lo tanto, ¿tendrá algún sentido decir que les gusta tal o cual y que tal o cual les disgusta? El mismo Dios está presente en todos. Por ende, consideren al universo entero como una gran familia y amen a todos sin excepción. Si odiaran a alguien, equivaldría a odiarse a sí mismos. De modo que nunca lastimen y siempre ayuden. Más allá del Amor no hay Dios. Dios es Amor y el Amor es Dios. ¡Vivan en el Amor!”. (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Abril de 2007) “¿Qué es amor verdadero? Es un amor puro y desinteresado por todos los seres vivientes, considerados como encarnaciones de lo Divino, sin esperar retribución alguna. Únicamente cuando uno considera la Divinidad como presente en todos los seres, podrá quedar libre de todo desagrado, y ser amigable y compasivo para con todos. Sean cuales sean las vicisitudes que uno pueda enfrentar, los pesares y privaciones personales que uno pueda sufrir, el amor verdadero permanecerá inalterado. Hoy en día, cuando surge cualquier dificultad o afloran problemas, el amor se convierte en odio. El amor es el dulce fruto que se desarrolla a partir de la fragante flor de las buenas obras. El amor reina sin recurrir a la espada. Obliga sin necesidad de leyes. Sólo una persona que posea un amor tan puro y desinteresado podrá ser descrita como humana. El amor Divino representa la cualidad básica de un verdadero ser humano” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 14 de Febrero de 2007)

Hay una historia que nos da un ejemplo de lo que es el amor desinteresado e incondicional: El hijo de una pareja norteamericana devota de Sai Baba (Jack y Louise Hawley),


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tenía 6 años de edad aproximadamente y mantenía una amistad muy cercana con uno de sus compañeros de clase. Para el cumpleaños de su amiguito, se organizó una fiesta infantil y, desafortunadamente, no invitaron al hijo de Jack y Louise. Ellos, al darse cuenta de esto, se preocuparon por la reacción que podría tener su hijo. Sin embargo, parecía que el niño no estaba afectado por esto y continuaba su vida normalmente. Llegó el día de la fiesta y el niño le dijo a su madre, Louise, que lo llevara a la casa de su amiguito, donde se estaba realizando la fiesta. Ella, con tristeza por lo que podía estar sintiendo su hijo, le explicó que no era apropiado que fuera, ya que no había sido invitado a la reunión. A pesar de estas observaciones, el niño le siguió insistiendo que lo llevara, diciendo que quería ir a llevarle el regalo. La mamá, tratando de no herir los sentimientos de su hijo, le dijo que era mejor llevárselo después cuando ya hubiera pasado la fiesta. Él siguió insistiendo, ante lo cual ella accedió a llevarlo a la casa de su amiguito. Cuando llegaron, él se bajó del carro y timbró en la casa. Abrió la mamá y luego apareció su compañero. Entonces, muy amorosamente y con mucha naturalidad, le entregó el regalo a su amigo, le dijo que le deseaba un muy feliz cumpleaños y se devolvió para el carro, muy emocionado por haberle podido dar el regalo a su amiguito el día de su cumpleaños! Que gran demostración de amor puro, sin rencores, condiciones ni intereses egoístas. Aunque los niños también manifiestan comportamientos no amorosos, y necesitan aprender y pulir algunas de sus tendencias, como los adultos, podemos aprender muchas cosas de ellos ya que suelen ser muy transparentes y generalmente expresan su afecto y gratitud espontáneamente. Quiero compartirle este mensaje difundido a través de los correos electrónicos, que contiene las respuestas de varios niñ@s frente a la pregunta: ¿Qué es el amor? Estas son sus inspiradoras respuestas. “Amor es cuando alguien te incomoda, y tú, aunque estás muy enojado, no gritas, porque sabes que hieres sus sentimientos”. Mateo, 6 años.


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“Cuando mi abuela se enfermó de artritis, ella no se podía agachar para pintarse las uñas de los pies, entonces mi abuelo le pinta las uñas, aunque él también tiene artritis”. Rebeca, 8 años. “Yo sé que mi hermana mayor me ama porque me dio toda su ropa vieja y tuvo que salir a comprar ropa nueva”. Lorena, 4 años. “Amor es como una viejita y un viejito que son muy amigos todavía, aunque se conocen desde hace mucho tiempo.” Tomás, 6 años. “Cuando alguien te ama, la forma de decir tu nombre es diferente”. Patricio, 4 años. “Amor es cuando tu sales a comer y ofreces tus papas fritas, sin esperar que la otra persona te ofrezca las papas fritas de ella.” Cristina, 6 años. “Amor es cuando tu perro te lame la cara aunque lo hayas dejado sólo todo el día”. Anita, 4 años. ¡Hermosas respuestas! Pues bien, desafortunadamente es posible que ciertas tendencias altruistas que hemos tenido en nuestra vida, las hayamos dejado marchitar. Sin embargo, no olvidemos que la capacidad de amar nunca la hemos perdido ni la perderemos, pues nuestra verdadera naturaleza es el Amor mismo. Tengamos plena fe en esta Verdad y confiemos en nuestra capacidad para dar y recibir amor. Hasta los delincuentes más violentos de la historia de la humanidad han demostrado amor hacia alguien (ej. su pareja, madre, hijos, mascota, etc). Depende de cada uno, hacer el trabajo espiritual que le permita purificar su mente y generar una mayor conexión con la propia esencia, superar los intereses egocéntricos y las actitudes destructivas hacia si mismo y los demás, para de esta manera permitir que se exprese más libremente nuestro amor.

“Sólo el amor puede revelar a la Divinidad que está latente en todos. El amor es Dios. Vivan en Amor. El amor vive dando y perdonando; el ego vive tomando y olvidando. El amor es desinteresado. No malgasten sus vidas en pos de


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los estrechos intereses del ego. ¡Amen, amen! Conviértanse en lo que realmente son - encarnaciones del Amor. No importa como los demás los traten, o lo que piensen de ustedes, no se preocupen. Sus propios corazones, resplandecientes de Amor, son el Amor de Dios. Deben recordarse constantemente a sí mismos: ‘Soy Dios’. El día en que se vean como Dios, se convertirán en Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 18 de Febrero de 2008) “No existe ser humano a quien le falte la chispa del amor; hasta un loco ama intensamente a alguien o a algo. Pero debes darte cuenta de que este amor es tan sólo un reflejo de tu realidad; del Dios que habita en tu corazón. Sin esa fuente de Amor surgiendo de tu corazón, no te sentirías en absoluto inclinado a amar. Reconoce esa fuente, confía en ella cada vez más, y envuelve en ella al mundo entero, desechando todo rastro de egoísmo. No esperes nada en recompensa de aquellos a quienes se la haces llegar.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Febrero de 2008)

El obstáculo para amar está en su organismo y la solución también. No espere que los otros lo amen para comenzar a amar. Dé el primer paso y brinde amor sin importar cuál sea la reacción de los demás. Esta sola acción le traerá satisfacción y paz interior; porque el hecho de brindar amor lo beneficia a usted mismo en primer lugar, tal como lo dice Swami en esta cita: “El amor no busca recompensas. ¡El amor es su propia recompensa!”.

“Crean que Dios reside en todos los seres; digan aquellas palabras que difundan bondad, verdad y belleza; ejecuten aquellos actos que promuevan la felicidad y la prosperidad de todos; rueguen que el mundo entero disfrute de felicidad. Expándanse; no se contraigan en su propia individualidad pequeña. Expándanse hasta el amor universal, la ecuanimidad inalterable y la virtud siempre activa. Ese es el camino que hará surgir en ustedes la


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Divinidad en su máxima expresión.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 31 de Agosto de 2007)

“Estén siempre saturados de amor. No usen palabras venenosas contra nadie, porque las palabras son más fatales que las mismas flechas. Hablen suave y dulcemente. Simpaticen con los que sufren y con los ignorantes. Hagan todo lo posible para aplicar el bálsamo de las palabras calmantes y prestar la ayuda oportuna. No perjudiquen la fe de nadie en la virtud y la Divinidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 21 de Septiembre de 2007).

Swami Sathya Sai Baba nos dice que los valores humanos surgen del amor. Y como el amor es nuestra verdadera esencia, todos los valores son nuestra herencia, nuestra riqueza. Todos residen en nuestro Ser y brotan de él. Desafortunadamente, en muchos casos las impurezas de la mente los opacan y no les permiten expresarse plenamente a través de nuestros organismos. Por ello es necesario buscar una mayor pureza mental y fortalecer la unidad entre nuestros pensamientos, palabras y acciones, con lo cual seres verdaderamente humanos y así se podrán manifestar nuestros valores. Swami explica que hay cinco valores humanos fundamentales de los cuales se derivan todos los demás. Estos son Verdad, Rectitud, Paz, Amor y No violencia, los cuales, explicados en palabras muy sencillas, quieren decir lo siguiente: Verdad: Es lo que nunca cambia, lo que siempre permanece inalterable, lo que es eterno. Es decir, es la Divinidad omnipresente que es nuestra verdadera naturaleza. Rectitud: Es el comportamiento que se deriva de percibir y ser conscientes de la Verdad, y por lo tanto, es un actuar virtuoso. Paz: Es el sentimiento interior, propio de nuestro Ser, que se experimenta al vivir en la Verdad y con Rectitud. Amor: Cuando hay Verdad, Rectitud y Paz, se expresa nuestra verdadera naturaleza en forma de amor puro hacia si mismo y los demás. No Violencia: Como resultado de la expresión de los valores anteriores, el ser humano evita hacer daño de pensamiento,


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palabra o acción. Además, se interesa y promueve el bienestar de los demás, recordando que, en esencia, somos uno y lo mismo: la Divinidad (¡la Verdad!). Y entre estos valores, Swami Sathya Sai Baba destaca el amor como la fuente de los demás: “El Amor como pensamiento es la Verdad, el Amor en la acción es Rectitud, el Amor como sentimiento es Paz, el Amor como comprensión es No Violencia”. Una historia que ilustra la importancia de este valor es la siguiente: Los devotos Johnima y Kalassu (dúo músical Lightstorm), estaban hace varios años visitando a Swami Sathya Sai Baba en la India. De repente Swami llegó al sitio donde se encontraban y les preguntó: “¿Quieren saber El Secreto de la creación?” Y ellos respondieron muy emocionados: “Si Swami, ¡claro que si!”. El se acercó más, se agachó cerca de ellos y les dijo algo así como: “Cuando lleguen al final de sus vidas y miren hacia atrás, no importará si fueron los más ricos o los más pobres, los más famosos o desconocidos, los más poderosos o desvalidos, los más bonitos o feos, los más inteligentes o ignorantes. En fin, nada de esto importará. Lo único que realmente importará es… (y en ese momento bajó el volumen de su voz y les susurró): ¡Cuanto amor compartieron con toda la creación en cada momento de sus vidas!”

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Repito: “Cuanto amor compartieron con toda la creación en cada momento de sus vidas”. Ahora que ya conocemos El Secreto podemos escoger si hacemos uso de él o no. ¡Qué afortunados somos! En otra ocasión, Jhon Hislop, un devoto norteamericano que tuvo la oportunidad de compartir mucho tiempo cerca del Avatar, le preguntó:

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Tomado de charlas dictadas por Lightstorm en Bogotá, 2005.


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Jhon Hislop: “¿Cuál es el punto más sutil en las enseñanzas de Swami? Y luego, en el círculo que rodea ese punto, ¿qué es lo que hay que hacer para tomar consciencia de ese aspecto más sutil?” Sathya Sai Baba: “El aspecto más sutil de la enseñanza de Swami es el amor. El círculo en torno a este punto, con el objetivo de entenderlo, lo forman las prácticas espirituales como la meditación, la repetición del Nombre del Señor, el conversar con gente buena, el apartar la mente de los pensamientos perjudiciales y cosas de este tipo. Por sí mismas, estas prácticas espirituales no tienen valor. La única cosa valiosa en si misma es el amor... El núcleo de la enseñanza de Swami en lo que respecta a vivir en el mundo, es el ver en la gente esa cualidad esencial que es Dios y amar esa cualidad, sin que interfieran las acciones, características, conducta u otras cualidades de la persona. Y el amor a Dios en la persona con la que uno está tratando, es un amor espiritual y no físico. Esto no significa, en términos de la naturaleza física del ser en que uno ve a Dios, que uno perdone, admire o no reprima la conducta errada de la parte terrenal de esa persona. Incluso, aunque uno vea, ame y ponga realmente atención a Dios en esa persona, esto no implica que no se la pueda increpar, ni llamar su atención sobre sus acciones equivocadas, sus faltas, sus culpas, etc. Y esto no es crueldad. El factor importante aquí es la intención…Swami considera a veces necesario ‘operar’ una persona, decirle algo que tal vez la lastime o revelarle alguno de sus aspectos negativos en lugar de pasarlos por alto y destacar sólo los positivos. Pero cuando Swami lo hace, Su intención es la de ayudar a la persona, y no la de herirla o lastimarla.” (Hislop, 1990, p. 53)

Ahora encontrará más enseñanzas profundas y motivadoras sobre el Amor.

“Sólo si siguen el camino del amor pueden ustedes experimentar la bienaventuranza. Así


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como la sola recitación de los nombres de las comidas no puede calmar el hambre, tampoco pueden ustedes disfrutar de la dulzura de la vida ni ser felices, a menos que hablen palabras dulces y hagan acciones sagradas. Ustedes son hijos de la inmortalidad y encarnaciones de la bienaventuranza. Es porque han emergido de la bienaventuranza, que buscan retornar a esa fuente, la bienaventuranza. Así como un pez nacido en el agua no puede vivir fuera de ella, el ser humano anhela siempre la felicidad, dondequiera que él se halle o cualquiera sea su ocupación. El ser humano está inquieto hasta que vuelve a la bienaventuranza, de donde emergió. La verdadera bienaventuranza no se encuentra en este mundo. Mantengan la mente siempre en Dios, sólo entonces tendrán paz y felicidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 17 de Septiembre de 2007)

“Sean lámparas del amor, no hay necesidad de ninguna otra práctica espiritual. El amor y el servicio amoroso a los demás les otorgarán la gracia de Dios.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 26 de Septiembre de 2007) “¡Encarnaciones del Amor! Si desean tomar consciencia de Dios, si desean experimentar la Divinidad dentro de ustedes, si quieren conocer el verdadero Ser de ustedes mismos, tienen que desarrollar un amor puro e inmaculado. Desarrollen amor a Dios. Todas las otras formas de amor no son amor en absoluto, sino fugaces apegos. La mayor insensatez del ser humano es olvidar su Divinidad.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 19 de Abril de 2006) “Amen a todos los seres, eso basta. Amor sin esperar reciprocidad; amor por el amor; amor porque la naturaleza misma de ustedes es amor; amor porque es la forma de devoción que conocen y prefieren. Cuando otros están felices, siéntanse felices también. Cuando otros se sienten infelices,


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traten de aliviar su problema lo mejor que puedan. Practiquen el amor a través del servicio. Por este medio llegarán a tomar consciencia de la Unidad y eliminarán el ego perjudicial.” (Sathya Sai Baba en “La Sabiduría de Sai Baba”) “En esta vasta extensión del Universo, desde el más diminuto átomo hasta lo más grandioso, todo está impregnado por la realidad del Espíritu. Aparece como lo más pequeño de lo pequeño y lo más grande de lo grande. De hecho, el principio de unicidad que satura al microcosmos y el macrocosmos, es la realidad fundamental que ustedes deben indagar. Deben dirigir su amor hacia el invariable principio del Espíritu, no hacia el cuerpo que está sujeto a nacimiento y muerte. El principio del Espíritu no sufre cambios en absoluto. Nada puede añadírsele o sustraérsele. Por lo tanto ustedes deben desarrollar una fe firme en ese principio invariable. El principio del Espíritu es la única realidad. Hagan del principio del Espíritu su meta, en el viaje de la vida.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 4 de Enero de 2007) “Una vez que hayan saboreado el amor, verán al mundo en su forma verdadera... Hagan que el amor fluya incesante de sus corazones. Sumérjanse en el flujo de amor. Del amor emergen la verdad y la rectitud. Hablen con la verdad, practiquen la rectitud. La verdad y la rectitud son los dos pilares sobre los que descansa la mansión de la vida humana. El que hace surgir estos dos principios es el amor. No hay conocimiento más grande que el conocimiento del amor. Ustedes pueden leer una cantidad de libros, pero de esos libros no se puede adquirir amor. ¿De qué sirve leer libros cuando ustedes tienen la cabeza llena de ‘suciedad’? Es por causa de esa ‘suciedad’ que ustedes se convierten en animales, perdiendo la capacidad de discernimiento.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 5 de Enero de 2007)


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“Bondad, compasión, tolerancia; a través de estas virtudes uno puede percibir la Divinidad en sí mismo y en los demás. La bondad de corazón es a menudo condenada como debilidad, cobardía y falta de inteligencia; dicen que el corazón tiene que endurecerse en contra de la compasión y la caridad, pero en ese camino yace la guerra, la destrucción y la ruina. Sólo el amor confiere felicidad y paz duraderas. Solamente el compartir puede disminuir la aflicción y multiplicar la alegría. La gente nace para compartir, para servir, para dar y no para tomar.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 12 de Noviembre de 2007) “No den lugar a diferencias basadas en lenguaje, religión, casta o nacionalidad. Cultiven el sentimiento de que todos son hijos de Dios. Ustedes pueden adorar a Dios en cualquier forma que escojan, pero siempre recuerden que Dios es uno. Cultiven amor hacia todos los seres, y promuevan la unidad y la armonía.” (S.S.B. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 8 de Noviembre de 2007)


Un pobre habla con Dios diciendo: “Oye Dios, ¿para ti cuánto son 100 años?” Dios le responde: “Hijo mío, 100 años para mí son un simple minuto”. De nuevo le pregunta: “Y para ti, ¿cuánto es un millón de dólares?” El le responde: “Hijo mío, un centavo”. Entonces el pobre rápidamente le dice: “Padre bondadoso, ¿me regalas un centavito?” Dios se sonríe y le dice: “¡Espérame un minutico!”


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* 15 ESTRATEGIAS PARA AMAR MÁS *

Después de reconocer la importancia del amor desinteresado e incondicional, pueden surgir las siguientes preguntas: ¿cómo puedo llevarlo a la práctica?, ¿cómo puedo expresar más el amor en mi vida? A continuación se encuentran 15 estrategias que pueden serle muy útiles para poder practicar más el amor, muchas de las cuales recogen elementos mencionados en el texto, que vale la pena repasar.

1. Recuerde constantemente lo que usted es en realidad.

Recuerde permanentemente que usted es realmente Conciencia Amorosa. Usted es esa Conciencia, ese testigo que nunca sufre ni se afecta, y cuyo estado es de paz y amor. Usted siempre ha sido y siempre será el Alma, el Espíritu; y nunca perderá la capacidad de amar, porque usted es Amor.

2. Recuerde que los demás también son lo mismo que usted.

Tenga presente que los demás son iguales a usted, que todos somos lo mismo, que somos Uno, que somos la Gran Alma, la Conciencia omnipresente. Entonces, al amar a los demás se está amando a si mismo. Con esta visión es más fácil entender a Jesucristo cuando nos dijo: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Igualmente, resulta inspirador recordar que la Madre Teresa de Calcuta confesaba que, al servir a los moribundos, desvalidos, habitantes de la calle, etc.; veía a Cristo en cada uno de ellos. Seguramente por eso podía amar y servir desinteresadamente a estas personas a quienes muchos rechazaban.


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3. Ore a la Divinidad pidiendo que se manifieste más el amor a través de su organismo.

Ore y pídale a la Divinidad que le ayude a expresar más el Amor, que es su verdadero Ser. Parafraseando a San Francisco de Asis podría orar: “Señor, has de mi un instrumento de tu Paz y de tu Amor”. Otra plegaria muy bonita es la siguiente: “Dios, que seas Tú quien piense, hable, sienta y actúe a través de este ser humano y de todos los demás, en todo momento. Que Tu infinito Amor, Sabiduría y Servicio Desinteresado fluyan a través nuestro, en todo momento. Y, mientras haces esto, por favor que seamos siempre conscientes que Tu eres el hacedor y nosotros Tus instrumentos, y que en esencia, somos uno contigo y el universo entero, ahora y siempre, ¡y así es!”. Adicionalmente, puede orar por la felicidad de todos los seres del universo. De esta manera, contribuirá con el bienestar de los demás, fortalecerá sus tendencias altruistas y recordará la unidad que existe entre todos. Cuando se interesa por la felicidad de los demás, el primero en sentirse mejor es usted mismo. Precisamente, hay un mantra (fórmula sagrada) muy poderoso y reconocido que sirve para este fin: Loka Samastha Sukino Bhavantu, que quiere decir: que todos los seres sean eternamente felices.

4. Acepte el presente, mantenga una buena actitud y aprenda lecciones de sus experiencias.

Tenga en cuenta que todas las situaciones que vivimos son en realidad experiencias de aprendizaje, que nos permiten evolucionar espiritualmente. Si mantiene esta comprensión, podrá tener una actitud de aceptación frente a lo que le ha sucedido y le sucede continuamente. Una de las mayores fuentes de sufrimiento consiste en rechazar los eventos tal cual se nos presentan. Pero es más sensato aceptar la realidad; y, con base en esta actitud, luego puede tomar las decisiones y actuar más serenamente y posiblemente más acertadamente. En lugar de darle el poder a la situación para dominar totalmente su estado de ánimo, acéptela primero y luego piense cómo la va a afrontar. Entonces, la aceptación es diferente de la resignación; es más, a partir de la aceptación


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usted puede tomar una buena decisión y pasar a la acción. Queda claro pues, que aceptación no es resignación ni inacción. Por otra parte, esta forma de asumir las situaciones le permite enfocarse en las alternativas de solución y no en el problema, la queja o la crítica, y así puede superar las dificultades con mayor facilidad. La Madre Teresa de Calcuta decía: “Es mejor encender una luz, que maldecir la oscuridad”. De todas maneras, si en ciertos casos siente que la situación no es tolerable y le queda muy difícil actuar amorosamente, otra alternativa es retirarse del lugar sin rencores (con amor), sabiendo que esa experiencia era algo que tenía que vivir. Recuerde que la Ley del Karma (la ley de la acción y la reacción), nos lleva a vivir ciertas situaciones para compensar lo que hemos realizado en el pasado y aprender la lección correspondiente. Por tal motivo, si quiere consumir más rápidamente su Karma pendiente, es necesario que tenga una actitud de auto-observación constante y busque aprender las lecciones que las distintas situaciones de la vida le pueden enseñar (ej. ser más generoso, tolerante, respetuoso, calmado, humilde, etc.).

5. Entréguele todo a Dios. Entréguele a Dios todo lo que siente, lo que piensa y lo que vive. Si la situación que afronta es difícil, al entregarle a Dios sus pensamientos y emociones, se enfocará más en Dios y menos en el problema. Confíe en que todo depende de la Divinidad y entréguese a Su voluntad. Evite guardar rencores, preocupaciones, rabias, miedos, frustraciones, etc., y más bien, entrégueselos a Dios, pidiéndole que se encargue de ellos y que le permita aprender lo que necesita de esa experiencia. Al hacer esta entrega, que puede ser con la técnica de la burbuja/esfera descrita anteriormente, usted se “quita peso de encima” y tiene más capacidad para amar.


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6. Ofrézcale y dedíquele todo a Dios. Ofrézcale y dedíquele sus palabras, pensamientos y acciones a Dios. Que todo lo que haga sea para Su agrado, para el beneficio propio y de los demás, sabiendo que, en esencia, todos somos Uno y lo mismo. Actúe por amor a Dios y entréguele los resultados a El, no se apegue a ellos y sufrirá menos. Si todo lo que hace lo convierte en una ofrenda a Dios, seguramente será más agradable su cotidianidad, sentirá el amor en usted, lo compartirá con los demás, y percibirá que su vida adquiere más sentido.

7. Piense positivamente. A todo lo que analice puede encontrarle aspectos positivos y negativos, y es conveniente que vea ambas caras de la moneda. Sin embargo, siempre será mejor que se enfoque y le de más importancia a lo positivo. Por ejemplo, ante una situación aparentemente negativa puede reflexionar sobre lo que puede aprender o lo que puede hacer para afrontarla. También puede reconocer sus fortalezas y recursos, y apoyarse en ellos para su relación con los demás y el desempeño de sus tareas. Recuerde que aquello en lo que enfoca su atención adquiere mayor importancia, fuerza y poder sobre usted. Esto es lo que se conoce como la “Ley de la atención”. Swami Sathya Sai Baba recomienda: “ver lo bueno, escuchar lo bueno, pensar lo bueno, hablar lo bueno y hacer el bueno”. Así, al estar enfocado en lo positivo, tendrá una mejor actitud y podrá amarse a si mismo y a los demás, con mayor facilidad; sin desconocer lo que aún le falta por mejorar o trabajar. Igualmente, es importante tener un pensamiento positivo hacia los demás, y disminuir o evitar las críticas y los prejuicios. Criticar es muchas veces, una manera facilista de fortalecer erróneamente la autoestima sintiéndose superior a otros. Al hacerlo, también evitamos observar nuestra personalidad con detalle y detectar aquello que podríamos cambiar.


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8. Agradezca constantemente. Siempre puede estar agradecido por muchas cosas, simplemente se requiere que tenga la disposición de hacerlo. Por ejemplo, en este momento podría darle las gracias a Dios o al Universo (como lo prefiera) por estar vivo, por tener la capacidad para leer y el tiempo para hacerlo, por querer seguir aprendiendo y evolucionando, por tener ropa, alimento, techo, etc. Una manera entretenida de agradecerle a Dios, a la Vida o al Universo, es conservando una piedra pequeña en el bolsillo y cada vez que la toque recordará dar gracias por algo. En la noche, cuando la saque de su bolsillo, agradezca varias experiencias del día; y en la mañana cuando se despierte y la vea, agradezca por un nuevo día y ofrezca todo lo que vendrá a Dios, el Infinito, etc. Si mantiene esta actitud de agradecimiento constantemente, apreciará más los detalles de la vida que muchas veces le pasan inadvertidos, se sentirá bien por todo lo que a diario recibe y así podrá mantener una actitud amorosa.

9. Conecte la mente con el corazón. Conecte la mente con el corazón, la razón con la emoción. Muchas veces nos dejamos llevar por la frialdad de algunos pensamientos y no los mezclamos con la energía del amor; entonces, podemos ser muy rudos, injustos u ofensivos. Trate de mantener la conexión entre las 3 H: “Head, Heart and Hands” (Cabeza, Corazón y Manos)

12. Entonces, habrá

coherencia entre el pensar, el sentir y el actuar, con base en el amor, y vivirá plenamente su humanidad. Recuerde hacer a los demás lo que le gustaría que hicieran con usted. Pregúntese constantemente: “¿Trato al otro como espero que me traten?”

10. Expanda su energía de amor hacia los demás. Sea consciente que todos estamos “conectados” y que lo que usted piensa, siente y hace, genera vibraciones y consecuencias que reciben los demás. Aunque usted no lo crea, sus sentimientos y pensamientos influyen en su entorno.

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Podría plantearse también como 3 C: Cabeza, Corazón y Cuerpo.


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Recuerde que Einstein postuló que todo es energía. Entonces, si todo es energía, los pensamientos (que también son energía), influyen en todo lo demás. Son energía influyendo en energía. A su vez, el científico japonés Masaru Emoto, demostró con sus experimentos que los pensamientos, las emociones y las palabras influyen en elementos físicos (ej. el agua, el arroz). Por consiguiente, es bueno que revise lo que siente, piensa y dice; porque esto afecta (positiva o negativamente) su organismo y el de los demás. Precisamente, Johnima y Kalassu (“Lightstorm”), conscientes del poder del pensamiento, promueven una práctica relacionada con este tema. Se trata de “cargar” o “programar” mentalmente cualquier objeto que uno toque o acción que realice, con la intención de que todas las personas que tengan que ver con ello, se llenen de amor y alegría, y sus corazones se abran a la verdad de que son, en esencia, la Divinidad misma (ej. al entregar dinero, al limpiar la casa, al manejar el carro, al bailar, al comer, al caminar, etc.). Este ejercicio fue compartido por ellos en una de sus giras por Suramérica. Después de varias semanas, al regresar a uno de estos países, les sucedió lo siguiente. En medio una de sus charlas, una señora pidió la palabra y contó su experiencia. Dijo que había puesto en práctica el ejercicio en su oficina, donde el ambiente era realmente muy desagradable y estresante. Después de algunos días de estar “cargando” con amor muchos de los objetos de la oficina y las acciones que desempeñaba, las relaciones en su trabajo empezaron a mejorar notablemente y el ambiente laboral se tornó mucho más agradable. Fue tan visible e increíble el cambio, que algunos compañeros de la oficina le preguntaron si estaba teniendo alguna relación sentimental con el jefe, pues no se explicaban la nueva actitud del señor!

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11. Oriente su vida hacia lo que es más significativo para usted.

Enfoque su vida hacia lo que es más importante para usted, hacia lo que tiene más sentido. No piense solo en lo material ni se deje llevar por las opiniones de los demás, los estereotipos

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Tomado de charlas dictadas por Lightstorm en Bogotá, 2005.


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culturales o los temores personales. Consulte su corazón para escoger su camino en la vida, obviamente, respetando el de los demás (Escoja un camino con corazón). Y si, como suele suceder, de todas maneras le corresponde realizar algo que no le gusta, que no lo “llena”, hágalo con amor y seguramente será más placentero. (Póngale corazón al camino). Puede realizar aquello que no le brinda total satisfacción, bajo la visión de un ideal mayor, por ejemplo, por el bienestar de su familia, el progreso de su país, el amor a Dios, etc. De esta manera, la tarea, que en un principio era insignificante y despreciable para usted, se llenará de sentido y hará parte de un objetivo superior que lo motiva en su vida; todo lo cual le permitirá tener una mayor disposición para amar. Hay una historia (¿falsa o verdadera? no lo sé) que ilustra bien este punto: “Un alto ejecutivo de una empresa de la industria de la informática de los Estados Unidos se hallaba en un viaje de negocios en Tokio. A pesar de su cargo, era un hombre humilde y compartía sus éxitos con sus empleados. Al finalizar todas sus reuniones, se dirigió a un centro comercial para comprar chocolates y regalos para sus empleados en su país. Al entrar en el centro comercial, una diminuta dama le regaló una cálida sonrisa y le dio la bienvenida. Esto lo tocó mucho y se sintió bien. No pudiendo olvidar la calidez en su sonrisa, se fijaba en ella mientras compraba. Ella daba la misma sonrisa a todos los clientes que entraban al centro comercial. El ejecutivo comenzó a preguntarse si alguna vez ella se sentiría cansada de hacer lo mismo en todo momento, así que se dirigió hacia ella y le preguntó: - “Señora, ¿no está usted cansada de hacer este trabajo y cuánto tiempo ha estado haciéndolo?” La mujer sonrió y dijo: - “No, señor, yo he estado trabajando aquí por los últimos 10 años y me gusta mi trabajo”. El ejecutivo quedó asombrado con la respuesta y peguntó de nuevo: - “¿Cómo es que ha estado haciendo esto por 10 años y por qué le gusta su trabajo?” La señora sonrió de nuevo y dijo: - “Señor, es porque así sirvo a mi país”. La respuesta le pareció un tanto divertida al ejecutivo y le dijo: - “¿Sirves a tu país sonriendo?” La diminuta mujer dijo:


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- “Sí, señor. Yo sonrío y todos los clientes que llegan al centro comercial se sienten felices y relajados. Compran más, mi jefe está feliz y me paga más. Y como me paga más, yo puedo atender mejor a mi familia. Y ya que yo puedo atender mejor a mi familia, ellos están felices. Además, cuando los clientes compran, la demanda por los productos aumenta, y al hacerlo, hay más fábricas. Y cuando hay más fábricas, hay más empleos. Y cuando hay más empleos, la gente en el país está feliz. Como la mayoría de nuestros clientes son extranjeros, hay entrada de divisas, y como hay entrada de divisas, nuestro país tiene mucho dinero y se vuelve más rico cada día. La gente como usted, que le agrada nuestro servicio, visita nuestro país más a menudo y le contará a su familia y amigos. Así, mi país consigue más visitantes, más dinero, más empleos y más gente feliz. Así es como sirvo a mi familia, mi empresa y mi país”.

12. Empiece por “actuar como si”. Si le es difícil comportarse con amor, empiece por “actuar como si”…”como si sintiera amor”. Es decir, hable amorosamente, sirva de forma amorosa, realice actos de amor, tenga pensamientos amorosos; aunque realmente no sienta el amor. De esta manera entrenará su organismo para amar, y de tanto actuar “como si fuera amoroso”, sin darse cuenta empezará a ser amoroso espontáneamente y a sentir el amor de su Ser. Recuerde que el amor está en usted, que es su verdadera esencia; entonces, haga lo posible por facilitar la expresión de ese amor. Un sabio aforismo dice “la práctica hace el maestro”. Así que si quiere ser amoroso, empiece a practicarlo constantemente, recordando que “la constancia vence lo que la dicha no alcanza”.

13. Respetar también es amar.

Como complemento al punto anterior, cuando le cueste amar, cuando “no le nazca” o no lo sienta, por lo menos respete y evite hacer daño mental, verbal y físicamente. Esto ya es una gran ayuda y es un acto de amor que evita que la situación se empeore y se torne violenta. Recuerde que “respetar también es amar”.


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Cuando se encuentre en ambientes donde esté rodeado de personas que sean ofensivas, cínicas o manipuladoras; puede actuar con inteligencia, firmeza y amor, sin ser ingenuo. Es decir, hay momentos en que puede y debe ser firme, pero esto no implica ser irrespetuoso u ofensivo. Es importante que sea asertivo, haciendo valer sus derechos sin violentar los de los demás. Swami Sathya Sai Baba dice que no siempre debemos acceder a hacer lo que los demás quieren; pero siempre podemos hacérselos saber con amor.

14. Sea consciente que el amor lo hace más fuerte. El amor todo lo puede, el amor es la fuerza más poderosa, el amor es Dios. El amor lo hace fuerte porque le permite ser flexible como el bambú, el cual se dobla frente a los vendavales sin que puedan romperlo y luego retoma su posición original. El amor le da la flexibilidad necesaria para afrontar las situaciones difíciles y seguir adelante a pesar de los obstáculos. Muchas veces el orgullo nos lleva a asumir posiciones que finalmente terminan perjudicándonos o hiriendo a otros, a pesar del aprecio que les podemos tener. Pero el amor implica humildad, facilita la posibilidad de ponerse en los zapatos del otro y tratar de comprender su sentir y pensar; y nos permite tener la disposición de buscar acuerdos en vez de reforzar las diferencias. El amor permite tender puentes para lograr acercamientos y superar los abismos. Cuando tenemos una actitud amorosa en las relaciones con los demás, sentimos paz interior a pesar de la suerte que puedan correr esas relaciones. En las relaciones de pareja, lo más importante es que el amor esté por encima de todo lo demás, de las opiniones, visiones de vida, intereses, condiciones socio-económicas, etc. Si esto se aplica realmente, los conflictos y las diferencias que siempre se pueden presentar en la convivencia, más fácilmente podrán ser afrontados desde la comunicación y la buena disposición. Por lo tanto, el amor es realmente la fuerza más poderosa. La no violencia, que es una expresión del amor, ha demostrado ser un camino extremadamente poderoso para obtener victorias frente a adversarios que parecían invencibles, como lo demostraron Mahatma Gandhi y Martin Luther King. Si piensa que ser amoroso es ser débil, lo invito a que reflexione sobre


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esa creencia y tenga en cuenta este par de ejemplos que nos ha dado la historia (entre muchos otros). Además, evalúe si cuando usted se encuentra frente a una persona asertiva y amorosa, usted la percibe débil o fuerte.

15. Permítase amar y disfrutar, sin miedos ni apegos. No le de miedo ni se sienta culpable por amar y ser feliz. ¡Disfrute cada momento tanto como pueda y compártalo con los demás! Esto tendrá efectos positivos en los demás y los contagiará progresivamente. Cuando usted se siente feliz, puede amar con naturalidad. Disfrute los momentos de su vida tanto como pueda, teniendo en cuenta no apegarse, no generar dependencias de las personas ni de las cosas. Una buena manera de hacer esto realidad, es ofreciéndole todo a Dios y entregándole sus relaciones, posesiones y actividades; recordando constantemente que todo es temporal (¡incluso el propio organismo!). Adicionalmente, le sugiero que evite añadir mucha carga emocional a sus planes o expectativas; porque, sencillamente, es muy posible que no se cumplan todos ellos, o que se cumplan de una manera diferente a la que usted deseaba. Si tiene deseos o expectativas muy fuertes, podrá encontrar la frustración en cualquier momento. Muchas veces uno quiere que la voluntad de Dios se acomode a la de uno y no al revés, lo cual genera más sufrimiento. Viva el presente continuo que es lo único que realmente existe, puesto que el pasado ya es historia y el futuro es incierto. Cumpla los deseos (que no atenten contra usted u otros) que estén a su alcance, y sin excesos para evitar dependencias o desequilibrios. Cuando esté disfrutando algo, puede decretar mentalmente que todos los seres del universo también se beneficien de su felicidad, con la convicción de que así será, ya que todos estamos “conectados”. Por otra parte, las citas, aforismos, proverbios y similares, son una fuente de inspiración para nuestras vidas. A continuación encontrará algunas de las frases más conocidas de Swami Sathya Sai Baba sobre el amor:


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“Empieza el día con amor, pasa el día con amor, llena el día con amor,

termina el día con amor. Este es el camino hacia Dios.”

“Dios es Amor.

El Amor es Dios. Vivan en el Amor”.

“Ayuda siempre, nunca lastimes”.

“Ama a todos, sirve a todos”.

“El amor no busca recompensas.

El amor es su propia recompensa”.

“El amor es dar y perdonar. El egoísmo, tomar y olvidar”.

“El amor es expansión.

El egoísmo, contracción”.

“Hay una sola religión, la religión del Amor”

“La felicidad y el amor que compartan,

serán sus únicas posesiones duraderas”.

“Olvida el mal que te han hecho. Olvida el bien que has hecho.”

“La vida sin amor, es vida sin Dios”.

“Mientras no experimenten el amor verdadero,

no habrán conocido nada”.

“Si desarrollan amor, no necesitan desarrollar nada más”.

“Vivan con amor, en amor, para el amor. Entonces, El Señor, que es la manifestación del más elevado amor, les otorgará


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todo lo que necesitan, a pesar de que ustedes no le pidan nada.”

Estas otras de Jesucristo:

Los dos mandamientos que resumen toda la ley son: “Ama a Dios sobre todas las cosas” y “Ama a tu prójimo como a

ti mismo”. Y otras más de autores desconocidos:

“Haz el bien y no mires a quién”.

“Trata a los demás como te gusta que traten a ti”.

“Obras son amores y no buenas razones”.


A. Si le interesa practicar este camino del Amor, propóngase agregar la energía del amor a sus pensamientos, palabras y acciones en todo momento.

B. Seleccione las 3 estrategias que más le llamaron la atención y piense ¿cómo, cuándo y dónde puede practicarlas?


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BIBLIOGRAFÍA Y REFERENCIAS

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http://www.sathyasai.org/

http://www.srisathyasai.org.in/

http://www.eternoconductor.org/


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¡BE HAPPY! Ejemplo de oración sincera: “¡Señor, ayúdame a ser la persona que mi perro cree que soy!” ¿Quieres hacer reír a Dios? ¡Cuéntale tus planes!


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ANEXOS

1. BREVE RESEÑA DEL MAESTRO ESPIRITUAL SATHYA SAI BABA

“En cualquier situación en la que aparece el Avatar (Encarnación Divina), la plenitud de Su Divinidad no tiene límites. El Nombre y la Forma no limitan la Divinidad que manifiesta el Avatar. El Nombre y la Forma son los atributos elegidos por la Conciencia Universal infinita, eterna y pura”. (Sathya Sai Baba – S.S.B. -. Mensaje de la pizarra de Prashanti Nilayam del 2 de Diciembre de 2003)

Sathya Sai Baba es un maestro espiritual que no está ligado a una religión en particular, y sus palabras y acciones están llenas de sabiduría, amor y servicio desinteresado. Teniendo en cuenta que el libro tiene como eje conductor sus enseñanzas, a continuación encuentra una reseña con aspectos centrales de sus primeros años de vida y de su obra humanitaria. ASPECTOS DE SU VIDA. Según los Vedas, considerados como las escrituras sagradas más antiguas de la humanidad, en los periodos de crisis espiritual aparece un Purna Avatar, es decir, una manifestación completa de la Divinidad (con todos Sus atributos) en forma humana, que cumple con la misión de orientarla nuevamente por el camino de la virtud, los valores humanos y la espiritualidad. Precisamente Swami

14 Sathya Sai Baba es

considerado por millones de seguidores en la India y en todo el mundo, como esta manifestación de la Divinidad que tiene como objetivo elevar la consciencia del ser humano hacia la plena expresión de su verdadera naturaleza Divina. A principios del siglo XX, en una pequeña aldea llamada Puttaparthi, localizada al sur de la India, vivía una pareja conformada por Easwarama (esposa) y Pedda Venkappa (esposo), que se caracterizaban por su gran devoción a Dios.

14

Swami: Maestro espiritual.


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Durante la gestación de su nuevo hijo, se escucharon melodías que provenían inexplicablemente de los instrumentos musicales de la casa. Tomando en cuenta que la música era muy armoniosa y agradable, se llegó a la conclusión de que podía ser una señal muy auspiciosa con relación al niño que estaba por nacer. El 23 de Noviembre de 1926, nació el niño quien fue bautizado como Sathyanarayana Rajú. Durante la infancia demostró ser muy diferente de los demás niños y fue muy apreciado por sus compañeros. Era vegetariano por convicción y tenía mucho respeto por los animales, tanto así, que les pedía a los demás niños que no asistieran a las carreras de bueyes ni a las riñas de gallos. Era muy bondadoso y, a pesar de que su familia era de bajos recursos económicos, frecuentemente llevaba a pobres y desamparados a su casa para ofrecerles alimento, aunque esto implicara que él mismo se quedara sin comer. Era muy respetuoso con sus mayores y obedecía fielmente a sus padres. Solía cargar con una bolsa de la cual materializaba milagrosamente borradores, lápices, dulces y otros objetos que le regalaba a sus compañeros, otorgándoles grandes alegrías sin esperar nada a cambio. Antes de cumplir los 10 años ya demostraba una habilidad especial para bailar, cantar y componer canciones, obras de teatro y poemas con contenidos sociales y espirituales. Su padre se preocupaba bastante porque sus comportamientos no eran como los de los demás niños y lo sometía a rigurosos castigos. Como esto no modificaba la actitud de su hijo, decidió enviarlo donde su hijo mayor, quien vivía en otro pueblo llamado Uravakonda. Un día, cuando Sathya tenía catorce años, cayó en un estado de inconsciencia que alarmó a su familia. Al recobrar el conocimiento, comenzó a manifestar nuevas conductas, tales como recitar largas estrofas de textos sagrados, predecir hechos que estaban por ocurrir y mostrarse ausente o ensimismado. Sus padres viajaron a ver a su hijo y, preocupados por estas conductas lo llevaron con ellos nuevamente, presentándolo ante médicos, curanderos y hasta un exorcista, para que “curaran” a Sathyanarayana; pero nada de esto surtió el efecto que buscaban.


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Semanas después, el joven se levantó como de costumbre, llamó a varias personas y les ofreció caramelos y flores materializados milagrosamente por él. Al poco tiempo comenzaron a llegar los vecinos, y a cada uno le dio una bola de arroz cocido en leche, dulces y flores, que aparecían de su mano. Entonces, alguien llamó a su padre para que fuera a ver lo que estaba haciendo. Su padre llegó rápidamente y pensando que su hijo estaba engañando a la multitud, avanzó hacia él, amenazó con golpearlo y le gritó: "¿Qué es lo que eres: un dios, un espíritu o un loco? ¡Dímelo!". La respuesta fue: "Yo soy Sai Baba". Venkappa Raju quedó asombrado y después pudo comprender que su hijo le estaba indicando que era la reencarnación de un santo del norte de India, conocido como Sai Baba de Shirdi. Sai Baba de Shirdi fue un santo que vivió hacia finales del siglo XIX y comienzos del XX, en un pueblo al norte de la India. Fue un gran maestro espiritual y fomentó la armonía entre hindúes y musulmanes. Al morir le dijo a algunos de sus devotos que volvería a nacer 8 años después. Efectivamente, cuando se cumplió ese plazo, nació Sathyanarayana Raju, conocido actualmente como Sathya Sai Baba. El ha explicado que su misión está distribuida en tres encarnaciones de las cuales ésta es la segunda. Con el fin de concluir su misión espiritual, después de esta encarnación nacerá como Prema Sai Baba en un lugar que ya especificó y con un aspecto físico que ya reveló gracias a una imagen que él mismo produjo. Retomando la historia, días después de este anuncio, alguien desafió a Sathyanarayana y le dijo que si realmente era Sai Baba, le diera alguna prueba. El joven tomó unas flores de jazmín, las tiró al aire y cuando cayeron al suelo formaron unas letras en el dialecto telugú que decían: "Sai Baba". Ante la negativa del muchacho para cambiar y vivir una vida común, los padres lo enviaron nuevamente a Uravakonda. El 20 de octubre de 1940, el joven Sathya llegó a la escuela como era habitual; pero a los pocos minutos regresó a la casa. Parado en la puerta, dejó caer los libros que traía y dijo: "Me voy. Ya no les pertenezco. Maya (la ilusión) se ha ido. Mis devotos me llaman. Tengo que realizar mi labor. No puedo quedarme más". Y diciendo esto, se marchó de la casa de sus


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familiares a la edad de 14 años, para comenzar formalmente su misión. Sathya se fue al jardín de un vecino y se sentó sobre una roca en medio de los árboles. De todas partes comenzó a llegar gente que le llevaba flores y frutas, y todas entonaban en coro los cantos que el joven les enseñaba. También explicó que su nombre verdadero era “Sathya Sai Baba”, cuyas palabras traducen “Sathya”, Verdad y “Sai Baba”, Madre y Padre Divinos. Pocos días después, Sathya Sai Baba abandonó el pueblo de su hermano, ya que sus padres lograron persuadirlo para que volviera a Puttaparthi con ellos, asegurándole que no lo incomodarían ni interferirían con sus actividades espirituales. Para despedirlo, los aldeanos organizaron una procesión con música y lo acompañaron hasta los límites del pueblo. Al retornar a Puttaparthi, vivió un tiempo en casa de sus padres y, posteriormente, decidió trasladarse a otra casa donde se instaló en una habitación muy pequeña. Este espacio se fue ampliando a medida que aumentaban los visitantes que buscaban guía y orientación espiritual por parte de Sathya Sai Baba. Como el número de personas se incrementaba día a día, el 23 de Noviembre de 1950 se inauguró un nuevo ashram (residencia de un líder espiritual), a cuatro cuadras de distancia, con el nombre de Prashanti Nilayam (La Morada de la Paz Suprema), el cual actualmente tiene una gran extensión y se asemeja a una ciudadela. Desde allí y otros 2 ashrams más, Swami Sathya Sai Baba recibe a las personas que van a visitarlo, provenientes de todo el mundo y de distintas religiones. ASPECTOS DE SU OBRA. Swami Sathya Sai Baba no sólo brinda enseñanzas espirituales muy profundas y a la vez prácticas, sino que también predica con su ejemplo, por medio de una vida dedicada al amor y el servicio desinteresado. El mismo ha dicho: “Mi vida es mi mensaje” y prueba de ello son las numerosas obras sociales que ha liderado y que siguen siendo realizadas bajo su inspiración, tanto en la India como en muchos otros países del mundo. Algunas de estas obras son:


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Educación. Ha establecido un sistema educativo de gran calidad, que incluye escuelas primarias, secundarias y una reconocida universidad con tres sedes, que ofrece títulos universitarios, maestrías y doctorados. Los estudiantes no deben pagar por esta educación y la admisión está abierta a todos, sin importar raza o religión. Además de buscar la excelencia académica, este sistema está diseñado para fomentar la auto-disciplina y el servicio. Los estudiantes toman cursos de moralidad y espiritualidad, y regularmente dedican tiempo a alguna forma de servicio comunitario. En otros países del mundo también se han construido algunas escuelas con la misma filosofía y orientación. Adicionalmente, Swami Sathya Sai Baba es el creador de un programa de educación en Valores Humanos adoptado por el gobierno Indio y replicado en muchos países del mundo. Este programa no está alineado con alguna religión en particular y reconoce la importancia de la práctica de los valores humanos en la vida de cada persona, con el objetivo de lograr la transformación en el planeta. Salud. Swami Sathya Sai Baba ha liderado la construcción de hospitales generales y de especialidades médicas en la India, donde se realizan diariamente operaciones avanzadas, como cirugías de corazón y transplantes de riñón. Los pacientes también son atendidos en forma gratuita. Doctores, enfermeras y trabajadores del hospital prestan un cuidado compasivo y amoroso a todos los pacientes, generando un ambiente propicio para una recuperación integral. Igualmente, en India y en muchos otros países, se realizan periódicamente actividades y campamentos de salud y psicología, para beneficiar a los más necesitados, con servicios gratuitos y de gran calidad. Servicio a los necesitados. Frecuentemente Swami Sathya Sai Baba ofrece alimento, ropa y medicinas sin costo alguno, a una gran cantidad de personas de escasos recursos. Además,


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se interesó por facilitar el acceso al agua potable a los habitantes de la región, dado que en muchos pueblos del sur de la India no había servicio de acueducto y las personas sufrían dificultades a causa de esto. El agua que extraían de los pozos tenía mucho más arsénico de lo normal y una gran cantidad de flúor que les generaban enfermedades y fuertes dolores. En la década de los noventa lideró un proyecto con el fin de llevar el agua potable a dicha región, sin ningún costo para los habitantes. Actualmente más de 700 pueblos (1.000.000 de personas aproximadamente) del sur de la India han sido beneficiados con esta obra, la cual se financió con donaciones particulares y el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas. Hace poco también promovió la construcción de un canal, para llevar agua potable a la ciudad de Chennai, al sur de la India, donde los servicios de acueducto eran insuficientes para cubrir las necesidades de sus más de 4 millones de habitantes. Estas obras y todas las demás de las áreas de salud y educación, son financiadas voluntariamente por personas que confían plenamente en la transparencia y la eficiencia de Swami Sathya Sai Baba y de las personas lideradas por él para estos fines sociales.

BIBLIOGRAFÍA Berenstein, Marcelo & Scenna, Miguel Angel. (2001) Sai Baba

para principiantes. Buenos Aires, Argentina: Longseller. Murphet, Howard. (1971) Sai Baba: El hombre milagroso.

Buenos Aires: Errepar S.A.


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2. FRASES DE SATHYA SAI BABA PARA LA VIDA

“Hay una sola religión, la religión del amor. Hay una sola raza, la raza de la humanidad.

Hay un solo lenguaje, el lenguaje del corazón. Hay un solo Dios y es omnipresente.”

“¡La vida es un desafío, enfréntalo!

¡La vida es un sueño, realízalo! ¡La vida es un juego, juégalo! ¡La vida es amor, disfrútala!”

“El fin de la educación es el carácter. El fin de la cultura es la perfección. El fin de la sabiduría es la libertad. El fin del conocimiento es el amor.”

“El deber sin amor es deplorable. El deber con amor es deseable. Y el amor sin deber es Divino.”

“La política sin principios, la educación sin carácter, la ciencia sin humanidad

y el comercio sin moralidad; no solamente son inútiles sino peligrosos.”

“Dejen que su barca flote sobre las aguas; pero no permitan

que el agua entre en ella. Estén en el mundo, pero no sean del mundo. Ese es el secreto de una vida exitosa.”

“Tengan el Nombre de Dios en sus labios, la Forma en sus ojos

y la Gloria en su corazón; entonces, todos los relámpagos cruzarán a su lado sin dañarlos.”

“El colérico no va al infierno. El colérico enciende el infierno

donde quiera que va.”

“La distancia entre Dios y tú, es la misma distancia entre tú y tu Ser.”


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“Aprende a dar en lugar de tomar. Aprende a servir en lugar de mandar.”

“¡Sé feliz, sé feliz, sé feliz!”

BIBLIOGRAFÍA

Arango, Elsa Lucía. (2005). Sadhana. Práctica espiritual de

acuerdo con las enseñanzas de Sathya Sai Baba. Bogotá, Colombia: Fundasai. (p. 106 a 108).


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3. JESÚS TAMBIÉN NOS HABLÓ DE LA UNIDAD CON LA DIVINIDAD

Todas las religiones y movimientos espirituales sinceros se basan en el mismo mensaje que promovió Jesús, el amor: “Os doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros. Que como yo os he amado, así también os améis entre vosotros. En esto reconocerán todos que sois mis discípulos, en que os amáis unos a otros.” (Juan 13, 34-35). También está escrito en la Biblia: “Cuando los fariseos oyeron que (Jesús) había tapado la boca a los saduceos, se reunieron, y uno de ellos, doctor en la ley, le preguntó para tentarlo: ‘Maestro, ¿Cuál es el mandamiento principal de la ley?” El le dijo: “Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el principal y primer mandamiento. El segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En estos dos mandamientos se resume toda la ley y los profetas.” (Mateo 22, 34-40). De estas dos citas se deduce claramente que quien ama a Dios y a su prójimo como a sí mismo cumple las enseñanzas de Cristo, sin importar la religión que profese, porque estos mandamientos resumen todos los demás. Jesucristo también nos habló de la identidad entre Dios, El y el prójimo, enseñándonos que en realidad no hay dualidad ni separación, solo UNIDAD, tal como se aprecia en estas citas: “Le dice Felipe (a Cristo): ‘Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta.’ Le responde Jesús: ‘¿Tanto tiempo hace que estoy con ustedes y no me conoces, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: Muéstranos al Padre? ¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre está en mí? Las palabras que les digo, no las digo por mi cuenta; el Padre que permanece en mí es el que realiza las obras. Créanme: yo estoy en el Padre y el Padre está en mi’.” (S Juan 14, 8-11). De lo anterior podemos concluir que Jesucristo no está aparte de “Dios Padre”, sino que El está en el Padre, y el Padre está en El. Y esto no es un privilegio exclusivo de Jesús, puesto que Cristo indicó que todos nosotros también somos uno con El y con el Padre: “Y tomando un niño, (Jesús) le puso en medio de ellos, le estrechó entre sus brazos y les dijo: ‘El que reciba a


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un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe; y el que me reciba a mí, no me recibe a mí sino a Aquel que me ha enviado’.” (San Marcos 9, 35-37). Entonces quien recibe a un niño o a cualquier ser humano, ya sea anciano, joven, hombre o mujer, etc.; está recibiendo a Jesús y a “Dios Padre”. Y si todavía nos quedan dudas sobre el mensaje de unidad con la Divinidad que Cristo nos enseñó, recordemos que en la Biblia también se indica que al final de los tiempos Jesús premiará a los justos que le dieron de comer y de beber cuando tuvo hambre y sed, que lo acogieron cuando fue forastero, que lo vistieron cuando estaba desnudo y que lo visitaron cuando enfermó o estuvo preso. Ante estas palabras, los justos le dirán que no recuerdan haber hecho esto con El. Y Jesús les responderá: “cuando lo hicieron con uno de sus hermanos lo hicieron conmigo” (Ver Mateo 25, 31-40). Así que, Cristo y Dios Padre están presentes en todos nosotros! Ahora bien, Jesús también nos explicó que el reino de Dios no es un lugar alejado al que solamente se puede acceder después de la muerte: “Interrogado por los fariseos sobre cómo llegaría el Reino de Dios, (Jesús) respondió: ‘No será espectacular la llegada del Reino de Dios. Ni se dirá vedlo aquí o allá, porque el reino de Dios está dentro de vosotros.” (Lucas 17, 20-21). Al respecto también nos habló del valor y la importancia de encontrar este Reino de Dios en nosotros, por encima de cualquier otro deseo que podamos albergar en esta vida… “El reino de Dios es semejante a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuentra lo esconde y, lleno de alegría va, vende todo lo que tiene y compra aquel campo. El reino de Dios es semejante a un mercader que busca perlas preciosas. Cuando encuentra una de gran valor, va, vende todo lo que tiene y la compra.” (Mateo 13, 44-46) Y si aún pensamos que primero debemos asegurar ciertas comodidades económicas y físicas para luego empezar consciente y decididamente la búsqueda de nuestra propia Divinidad, los invito a que reflexionemos sobre lo que El nos dijo…“No os inquietéis pues diciendo ‘¿qué comeremos? O ¿cómo nos vestiremos?’ Por todas esas cosas se afanan los gentiles. Vuestro Padre celestial sabe que las necesitáis. Buscad primero el Reino y su justicia, y todo eso se os dará por añadidura.” (Mateo 6, 31-33).


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4. MEDITACIONES GUIADAS DEL CD

Ejercicio de Identificación con el Ser

Ejercicio de Identificación con el Alma

PISTAS 1 Y 2 EN EL CD

PISTAS 3 Y 4 EN EL CD

Este es un ejercicio meditativo basado en enseñanzas de la no-dualidad inspiradas en los Vedas (textos espirituales revelados en la India). Estas enseñanzas subrayan la omnipresencia de la Divinidad y, por lo tanto, la no separación entre uno y Dios, la identidad entre ambos.

Este es un ejercicio meditativo basado en enseñanzas Cristianas, las cuales subrayan el carácter eterno, puro y bondadoso del Alma, que es nuestra verdadera naturaleza y realidad. Somos el Alma que no deja de existir con la muerte del cuerpo.

En este ejercicio se emplea la repetición de algunas afirmaciones con el fin de que las asimile profundamente y, por lo tanto, es muy importante que las pronuncie mentalmente las veces que se le indica, concentrándose en su significado. Puede acomodar el género de las palabras de acuerdo a su sexo (femenino o masculino). Si se desconcentra, no se preocupe ni se sienta culpable; simplemente vuelva a enfocar su atención en el ejercicio, tantas veces como sea necesario. Antes de comenzar es muy importante que realice los ejercicios de estiramiento de hombros y cuello, y de bioenergética, los cuales le servirán para soltar tensiones, despejar la mente, permitir que la energía fluya por todo el cuerpo, liberar bloqueos energéticos y emocionales, y profundizar la respiración. Estos ejercicios le tomarán unos 7 a 10 minutos únicamente y le serán muy útiles. Contraindicaciones: Especialmente personas con problemas graves de columna (ej. discopatía, hernia discal) y con vértigo. Importante: Lea cada ejercicio detenidamente dos veces antes de realizarlo.


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1. Suba los hombros, como si quisiera tocar las orejas y bájelos nuevamente (5 veces como mínimo).

2. Mueva los hombros al tiempo, hacia delante, en círculos muy amplios, y luego hacia atrás, en círculos también (5 veces como mínimo, en cada dirección).

3. Mueva la cabeza como haciendo el gesto de “Si” (hacia abajo y hacia arriba), de forma amplia y muy lenta (5 veces como mínimo). 4. Lleve el mentón hacia el hombro derecho. Desde allí, desplácelo hacia el otro hombro, con la cabeza hacia abajo y pegando el mentón al pecho, como haciendo un semi-círculo por debajo. Luego, haga el mismo recorrido en sentido contrario. (Haga estos movimientos 5 veces como mínimo). Luego, haga lo mismo girando la cabeza por encima, llevando el mentón de hombro a hombro con la cabeza inclinada hacia atrás, como haciendo un semi-círculo por arriba (5 veces como mínimo).

5. Gire la cabeza muy lentamente haciendo círculos completos, integrando los 2 movimientos del ejercicio anterior (3 círculos completos para cada lado). 6. Incline la cabeza, llevando la oreja derecha muy cerca del hombro derecho (como si quisiera recostar la oreja en ese hombro). Con la mano derecha, empuje suavemente la


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cabeza hacia abajo. Sostenga el estiramiento contando hasta 5 lentamente. Luego, hágalo hacia el otro hombro.

7. Ubique las yemas de tres dedos de ambas manos (los que quiera menos el pulgar) en la parte de atrás del cuello (en la nuca). Presionando, hágase un masaje realizando nueve círculos en una dirección y nueve en la otra. Después, manteniendo la presión sobre el cuello, con las yemas de los dedos, baje y suba la cabeza completamente, tres veces (como haciendo el gesto de “Si”). Nota: Recuerde respirar naturalmente mientras realiza los ejercicios. 8. Estando de pie, separe los pies entre sí unos 25 cms. aproximadamente. Doble las rodillas, agáchese y ubique las yemas de los dedos de las manos en el piso, unos 20 o 30 cms adelante (si se le dificulta, puede colocar las manos sobre un cojín ubicado en el piso frente a usted). Deje que la cabeza caiga (que se “descuelgue”) relajando el cuello. Estando en esta “posición inicial”, inclínese un poco hacia delante hasta quedar parado en puntas de pies y luego hacia atrás, parándose en los talones (No levante las manos del piso). Haga este balanceo de los pies suavemente, unas 10 veces aproximadamente. Después, colóquese de pie muy, muy lentamente. 9. Siéntese, en el borde de una silla sin cruzar las piernas, o en el piso con las piernas cruzadas (posición de loto). Coloque las manos detrás de su cuerpo, sobre el piso o la


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silla, con las puntas de los dedos apuntando hacia su cola. Lentamente y sin levantar la cola, recueste su espalda y cabeza hacia atrás y abra la boca. Mantenga esta posición por unos 10 segundos aprox. Luego, vuelva a enderezar la columna muy lentamente. 10. Agachado, en la misma “posición inicial” del ejercicio “8”, simplemente trate de enderezar o estirar las piernas tanto como pueda, sin despegar las plantas de los pies del piso ni levantar las yemas de los dedos del suelo (o del cojín). Sostenga el estiramiento de las piernas, aunque haya temblor en ellas, durante unos 10 segundos aprox. Visualice una luz desde su cabeza hasta la Tierra, a través de la cual imagina que deposita todos sus pensamientos en la Tierra. Note que en este ejercicio no se realiza el balanceo de los pies. Después, colóquese de pie muy, muy lentamente.

Siéntese con la espalda recta, sin tensarla y cierre los ojos. Puede sentarse en una silla; o en un cojín en el piso, con las piernas cruzadas. Las manos las puede ubicar sobre los muslos; o en su regazo, colocando la mano derecha sobre la izquierda con las palmas hacia arriba y uniendo las puntas de los dedos pulgares. Si prefiere otra postura para las manos, puede realizarla. La respiración que realizará en este ejercicio es tranquila y profunda, sintiendo como se infla un poco el abdomen al inhalar y se desinfla al exhalar. En un principio y según sean sus creencias, ofrézcale el ejercicio a la Divinidad y pídale que beneficie a todos los seres del Universo, y así es!!! Respire profunda y concientemente por la nariz tres veces. En la siguiente respiración, exhale fuertemente por la boca todo el aire.


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Manténgase sin inhalar ni exhalar por unos segundos hasta que la respiración regrese espontáneamente. Luego, con una sonrisa en el rostro, empiece a repetir mentalmente “Yo” al inhalar y “Soy” al exhalar, pronunciando en “cámara lenta” cada palabra y a un volumen interno muy alto, para lograr una mayor concentración. (30 segundos aproximadamente). Continuando con la respiración “Yo” – “Soy”, pronunciando mentalmente cada palabra en “cámara lenta”, a un volumen interno muy alto y con una sonrisa en el rostro, sea consciente del cuerpo y de las sensaciones del cuerpo, de pies a cabeza, en cámara lenta. Ahora sea consciente de todo su cuerpo al mismo tiempo, interna y externamente. Diga mentalmente “Yo soy consciente del cuerpo y de las sensaciones del cuerpo, y por lo tanto, soy más que el cuerpo y las sensaciones del cuerpo” Continuando con la respiración “Yo” – “Soy”, pronunciando mentalmente cada palabra en “cámara lenta”, a un volumen interno muy alto y con una sonrisa en el rostro, sea consciente de las emociones y de los sentimientos. Diga mentalmente “Yo soy consciente de las emociones y de los sentimientos, y por lo tanto, soy más que las emociones y los sentimientos”. Continuando con la respiración “Yo” – “Soy”, pronunciando mentalmente cada palabra en “cámara lenta”, a un volumen interno muy alto y con una sonrisa en el rostro, sea consciente de la mente y de los pensamientos. Diga mentalmente “Yo soy consciente de la mente y de los pensamientos, y por lo tanto, soy más que la mente y los pensamientos”. Ahora repita mentalmente las siguientes afirmaciones, concentrándose en su significado: “Yo soy más que el cuerpo y las sensaciones del cuerpo, que las emociones y los sentimientos, que la mente y los pensamientos.” (3 veces) “Yo soy Conciencia, el/la Observador(a), el/la Testigo del cuerpo y de las sensaciones del cuerpo, de las emociones y de los sentimientos, de la mente y de los pensamientos”. (3 veces) “El cuerpo y las sensaciones del cuerpo, las emociones y los sentimientos, la mente y los pensamientos son cambiantes y pasajeros; y no es necesario que me aferre a ellos, que sufra por ellos, ni que evite ser consciente de ellos; porque yo soy


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diferente de ellos”. (3 veces) “Yo soy, Conciencia, el/la Observador(a), el/la Testigo que siempre estoy presente, que siempre permanezco inalterable, que nada ni nadie puede afectarme” (3 veces). “Yo soy Conciencia, en sí misma, de mi organismo y del entorno” (3 veces)

ESPECÍFICO PARA EL EJERCICIO DEL SER

ESPECÍFICO PARA EL EJERCICIO DEL ALMA

“Yo soy Conciencia sin limites: Infinita” (3 veces) “Yo soy Conciencia sin nacimiento ni muerte: Eterna” (3 veces) “Yo soy Conciencia que es Paz y Amor.” (3 veces) “Yo soy Conciencia: Infinita, Eterna, que es Paz y Amor” (3 veces) “YA soy, lo que la mente puede pensar, que todavía no soy” (3 veces) “YA soy Conciencia: Infinita, Eterna, que es Paz y Amor” (3 veces) “Todos y Todo somos Uno y lo mismo” (3 veces) “Todos y Todo somos Conciencia” (6 veces) “Yo soy Conciencia” (9 veces)

“Yo soy Conciencia, el Alma, sin nacimiento ni muerte: Eterna” (3 veces) “Yo soy Conciencia, el Alma, a imagen y semejanza de Dios: Perfecta” (3 veces) “Yo soy Conciencia, el Alma, que es Paz y Amor.” (3 veces) “Yo soy Conciencia, el Alma: Eterna, Perfecta, que es Paz y Amor” (3 veces) “YA soy, lo que la mente puede pensar, que todavía no soy” (3 veces) “YA soy Conciencia, el Alma: Eterna, Perfecta, que es Paz y Amor” (3 veces) “Todos somos lo mismo” (3 veces) “Todos somos el Alma” (6 veces) “Yo soy el Alma” (9 veces)

CONTINUACIÓN PARA AMBOS EJERCICIOS

En este momento, respire profundamente por la nariz tres veces. En la siguiente respiración, exhale fuertemente por la boca todo el aire. Manténgase sin inhalar ni exhalar por unos segundos hasta que la respiración regrese espontáneamente. Conservando los ojos cerrados y la sonrisa en el rostro, dirija la atención detrás de los ojos y lentamente empiece a descenderla detrás de la


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nariz, de la boca, por la garganta, hasta el pecho, un poco hacia el lado derecho. Mantenga la atención dirigida internamente al lado derecho del pecho, donde queda ubicado el corazón espiritual, según las enseñanzas del santo Ramana Maharshi. Continúe respirando por la nariz “Yo” al inhalar y “Soy” al exhalar, especialmente sintiendo que el sonido se produce o nace de este lugar del pecho. Simultáneamente, puede hacer una de estas dos visualizaciones: 1. Visualice cada letra del “Yo” – “Soy”, internamente al lado derecho del pecho, a medida que la va pronunciando. 2. Visualice internamente, al lado derecho del pecho, la “Forma de Dios” hacia la cual usted siente mayor devoción (Por ejemplo: Jesús, Buda, Krishna, Sai Baba, etc.) siendo consciente que, en esencia, usted y esa forma de Dios, son uno y lo mismo: la Conciencia Omnipresente, llena de Amor y Paz. Si se desconcentra, sencillamente dirija la atención nuevamente a la práctica de la respiración y la visualización, tantas veces como sea necesario. Más adelante, cuando desee terminar, agradézcale a la Divinidad por haberle permitido realizar el ejercicio y pídale que todos los seres del Universo sean eternamente felices y conscientes de su verdadera naturaleza, a partir de ahora y por siempre, y así es! Posteriormente, tome conciencia de su cuerpo y abra los ojos. Durante el día, continúe siendo consciente permanentemente que usted es en realidad Conciencia, el/la Observador(a), el/la Testigo lleno de Paz y Amor, que siempre permanece inalterable. Para recordar esto en todo momento y calmar la mente, puede respirar el “Yo” – “Soy” tranquila y constantemente. Antes de finalizar, continúe practicando el YO – SOY, acompañado de la respiración y la visualización, por el tiempo que desee.


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VIVE EL PRESENTE

CON AMOR, CALMA

Y ACTITUD POSITIVA

ser lo que somos - inicio · 2019. 8. 9. · todos somos uno y lo mismo 12 como: ser lo que somos,...

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