semana bÍblica septiembre de 2012. dios nuestro, padre de la luz, tú has enviado al mundo tu...
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ARQUIDIÓCESIS DE MANIZALES
SEMANA BÍBLICASEPTIEMBRE DE 2012
Dios nuestro, Padre de la luz,Tú has enviado al mundo tu Palabra,
sabiduría que sale de tu boca,y que ha reinado
sobre todos los pueblos de la tierra (Eclo 24,6-8).
Tú has querido que ella haga su morada en Israely que a través de Moisés,
los Profetas y los Salmos (Lc 24,44)manifieste tu voluntad,
y hable a tu pueblo de Jesús, el Mesías esperado.
Tú has querido que tu propio Hijo,Palabra eterna que procede de Ti (Jn 1,1-14),
se hiciera carne y plantara su tiendaen medio de nosotros.
Él fue concebido por el Espíritu Santoy nació de la Virgen María (Lc 1,35).
Envía ahora tu Espíritu sobre nosotros:Él nos dé un corazón oyente (1Re 3,9),
nos permita encontrarte en tus Santas Escriturasy engendre tu Verbo en nosotros.
El Espíritu Santo levante el velo de nuestros ojos(2Cor 3,12-16),
nos conduzca a la Verdad Completa (Jn 16,13)y nos dé inteligencia y perseverancia.
Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor,quien sea bendito y alabado
por los siglos de los siglos. Amén.
Para muchos creyentes la oración puede tornarse en algo aburrido y rutinario.
Bueno, ¡no tiene que ser así!
¿Qué tal orar con las Sagradas Escrituras?
Existe una manera práctica de hacerlo: se llama “Lectio Divina”; se trata de escuchar las Escrituras (una palabra, un verso o varios versos) como si nosotros estuviéramos en una conversación con Cristo, mientras Él brinda el tema de conversación.
“Lectio Divina” son dos palabras del Latín que significan literalmente “sagrada lectura”.
De esta manera, en la oración estamos integrando la lectura de las Escrituras a nuestra vida diaria. Es decir, es una manera auxiliar de meditación donde descubrimos cómo la Escritura puede conectarnos con Dios.
Esta perspectiva presenta la oración como un responder al llamado de Dios, en vez de “hablar con Dios” (nosotros iniciando la conversación).
“A Dios hablamos cuando oramos,a Dios escuchamos cuando leemos
su Palabra” (San Jerónimo)
La “Lectio Divina” o “Lectura Orante de la Palabra” consiste, pues, en leer la Palabra de Dios en oración y escuchar lo que Dios me dice, para después yo hablar con Él y vivir lo que su Palabra me dijo.
A continuación te presentamos esta estrategia valiosísima, que muchos santos han utilizado en su vida espiritual.
Es un método muy antiguo, práctico y sencillo, basado en la Palabra de Dios para orar y transformar la vida.
No es complicado, pero sí es de mucho provecho, aunque no tengas un gran conocimiento de la Biblia.
Lectio Divina
Es la meditación orante de la Sagrada Escritura
Orígenes (aprox. 185-254), teólogo cristiano, afirmaba que para leer la Biblia con provecho es necesario hacerlo con atención, constancia y oración.
La Lectio se convirtió en la columna vertebral de la vida monástica de santos como Pacomio, Agustín, Basilio y Benito
La sistematización de la «Lectio Divina» en cuatro peldaños proviene del siglo XII. Alrededor del año 1150, Guigo, un monje cartujo, escribió un librito titulado «La escalera de los monjes», en donde exponía la teoría de los cuatro peldaños: la lectura, la meditación, la oración y la contemplación». Afirmaba que con esta escalera los monjes suben al cielo.
La Lectio Divina ha recibido en los últimos cuarenta años un nuevo impulso en toda la Iglesia tras la publicación de la constitución dogmática «Dei Verbum» del Concilio Vaticano II (18 de noviembre de 1965).
El Papa Benedicto XVI dijoel 16 septiembre 2005:
«Si se promueve esta práctica (la
Lectio Divina) con eficacia, estoy
convencido de que producirá una
nueva primavera espiritual en la
Iglesia».
«La lectura asidua de la Sagrada Escritura, acompañada por la
oración, permite ese íntimo diálogo en el que, a través de la
lectura, se escucha a Dios que habla, y a través de
la oración, se le responde con una
confiada apertura del corazón».
«Nunca hay que
olvidar que la Palabra de Dios es lámpara
para nuestros
pasos y luz en nuestro camino».
LOS PASOS DE LA LECTIO DIVINALa Sagrada Escritura es …
Palabra de Dios escrita por inspiración del Espíritu Santo confiada a la Iglesia para la salvación
Leer
Meditar
Orar
Contemplar/practicar
¿Qué dice el texto bíblico?
¿Qué nos dice el Señor por
su Palabra?
¿Qué le decimos al Señor
motivados por su Palabra?
¿A qué conversión y acciones
nos invita el Señor?
Comprenderla Palabra…
para descubrir lo que Dios nos enseña mediante el
autor inspirado.
Actualizarla Palabra…
para interpelar la vida, conocer su sentido,
mejorar nuestra misión y fortalecer la esperanza
Orarla Palabra…
para dialogar con Dios y celebrar nuestra fe
en familia o comunidad.
Practicarla Palabra…
para conducir la vida (practicar) según los
criterios de Dios (conversión).
Palabras, frases o acontecimientos que marco con mi lápiz
Para Leer Con el Signo de interrogación (?)y el subrayado (ej.: salvar)
cuando no entiendo.cuando considero que se trata del
mensaje central del texto.
Para Meditar Con el Signo de exclamación (¡) cuando interpelan intenciones y acciones.
Para Orar Con el Asterisco (*) cuando me ayudan a orar.
Para Actuar Palabra al margen del texto escribo una palabra (ej. “diálogo”) que me indique el camino a seguir.
Para alimentarnos de la Palabra mediante la Lectio Divina podemos ayudarnos con varios signos:
El objetivo de la Lectio Divina
Conducir al lector-orante
Le abre al mundo
y le apremia
a la misión.
A un itinerario espiritual
que le configura con Cristo
"El amor de Cristo nos apremia“
(2 Cor 5,14)
No soy yo quien vive; es Cristo
quien vive en mí“
(Gál 2,20)
LOS PASOS DE LALECTIO DIVINA
O LECTURA ORANTE
DE LA PALABRADE DIOS
1. LEER LA PALABRA(Lectio)
Haz una lectura lenta y atenta, con la seguridad de que estás escuchando al Señor.
Lee sin prisa, y no digas: “Esta palabra ya me la sé”. Lee y relee (2, 3 ó 4 veces), incluso, si te ayuda, en voz alta.
Si quieres mirar con la imaginación: personajes, ambiente, sentimientos, acciones... Puedes subrayar con lápiz una idea o frase que te impacte o si llegas a una frase que te pegue, detente ahí. Esa frase se llama “eco” (porque resuena dentro de tu interior).
2. MEDITAR LA PALABRA (Meditatio)
Deja que la Palabra resuene en lo íntimo de tu corazón, que puedas rumiarla y asimilarla.
Si quieres cierra los ojos. En esa frase “eco” ¿Qué te dice el Señor?
Te sugiero que escribas ese eco: debe ser una frase no tan larga (puedes tener un cuaderno para escribir lo que diario te dice el Señor).
“Mastica” esa Palabra confrontándola con tu vida.
3. ORAR LA PALABRA(Oratio)
En su Palabra Dios ya te habló. Ahora es el momento de responderle. Es conversar con Dios Padre, o con Jesús, o con el Espíritu Santo, o con los tres.
Es alabanza, acción de gracias, petición de perdón, súplica, intercesión... Orar es lo que tú le dices al Señor. Con confianza pídele fuerza, entrégate a Él. Deja que afloren tus sentimientos y busca la Voluntad de Dios para tu vida.
4. CONTEMPLA LA PALABRA(Contemplatio)
No es una técnica, es un don del Espíritu que brota de la Lectio bien hecha.
Aquí tú eres pasivo, la acción le corresponde a Dios. Cierra tu cuaderno y tus ojos. No hables. Descubrirás con el corazón, no con la mente, el misterio divino: “Yo lo miro, Él me mira”.
Descansa en Él, ábrete a su amor, en silencio acoge su Reino dentro de ti. Todo es don y gratuidad.
5. ACTÚA Y CONSERVA LA PALABRAEN LA VIDA (Actio)
¿Qué vas a hacer hoy con esta Palabra?
Hacerla realidad, transformarla en vida vivida, como Jesús.
Decidir actuar en concreto según los valores evangélicos.
Trazar una línea de acción a la luz de esta Palabra.
Si haces este paso siempre, tu vida será cada vez más coherente, con frutos del Espíritu: amor, paz, gozo, servicio...
Para tener en cuenta…1. El domingo 23 de septiembre se dará apertura a
la Semana Bíblica con la entronización solemne de la Biblia en la Eucaristía del medio día.
2. Es necesario propiciar un buen ambiente, de amabilidad y confianza entre los participantes.
3. El primer día, entronizar la Biblia, de forma sencilla, en las casas de las asambleas.
4. Motivar a los participantes a que consigan la Biblia y la tengan en sus casas en un lugar destacado.
5. Llevar la Biblia a las asambleas.6. Enseñar muy bien la Lectio Divina, para que lo
continúen haciendo, ojalá todos los días.
METODOLOGÍA
1. Tener preparada una cartelera con el cuadro de los pasos de la Lectio Divina o entregar la guía a cada persona.
2. Se entroniza la Biblia el primer día y se adorna con flores y/o un cirio encendido durante el tiempo de las asambleas, en un lugar destacado.
3. Durante la semana se enseñará a hacer Lectio Divina de modo teórico–práctico, así:
Invocación al Espíritu Santo, puede ser espontánea o con una oración o canto especial.
La práctica de Lectio Divina se hace preferiblemente con el Evangelio del domingo.
Enseñar a manejar la guía de los pasos de la Lectio Divina.
Para garantizar que todos tengan la misma traducción, se puede emplear, al inicio, una fotocopia con el texto (no es el ideal; pero se hará así por cuestiones prácticas. El ideal es que la lectura sea siempre directamente de la Biblia).
Terminar invocando a la Santísima Virgen María.