ROSA Y SU GRAN SUEÑO

Había una vez una niña llamada Rosa, quien era la menor de tres hermanas ella desde pequeña siempre decía que quería ser maestra y sus padres quisieron apoyarla en sus sueños y cerca de la ciudad donde ella vivía había un colegio en donde formaban para ser maestros, en ese lugar o en ese mismo pueblo vivían sus abuelos, los papas pensaron que quizás ella podría quedarse donde ellos, al comentarle a los abuelos los planes que tenían con Rosa, la abuelita muy tierna y hermosa les dijo que si pero el abuelo enseguida dijo que no porque ella era una negra y no podía vivir en su casa, los papas y rosa se pusieron muy triste porque no contaban con el dinero suficiente para pagarle un pensionado. Al pasar los días una mañana la madre de rosa despertó y encontró a rosa muy triste, entonces la mama muy preocupado por el estado de la niña ella misma se dijo mi hija va a estudiar allá como sea y empezó a hacer rifas a realizar actividades para recoger fondos y poder pagarle a rosa el pensionado y el colegio, al fin la mama pudo reunir todo el dinero y envió a rosa a

estudiar donde ella quería, a rosa al comienzo le dio muy duro separarse de sus padres y no hacia si no llorar y la mama la motivaba para que ella siguiera adelante, al pasar un año el abuelito de rosa se enfermó y cayó en cama y la mando a llamar a rosa y ella así lo hizo y el abuelito llorando le pidió perdón por como la había tratado, rosa lo abrazo y le dijo abuelito yo te quiero mucho no te preocupes al pasar unos días el abuelito murió y rosa pudo irse a vivir con su abuela, rosa ya no lloraba ni se sentía sola porque su abuelita la consentía mucho, la niña siguió estudiando y le hacía compañía a su abuelita y ya hoy en día es una profesional y todo gracias al esfuerzo que hicieron sus padres para que ella cumpliera un sueño y ser una gran maestra. Hay que aprender a perdonar y saber sobre llevar las cosas porque a pesar de que el abuelito no la dejo vivir en su casa los padres de rosa lucharon para poder mandarla a estudiar.

AUTORA: LILIBETH TORRES