romanticismo y realismo

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ROMANTICISMO Y REALISMO

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Page 1: Romanticismo y realismo

ROMANTICISMO

Y REALISMO

Page 2: Romanticismo y realismo

EL ROMANTICISMO

En el Romanticismo hay un sentimiento de huida en el espacio y en el tiempo: de ahí la fascinación por los lugares exóticos y la Edad Media.

Entre 1824 y 1880 se culmina la catedral de Colonia, vivo ejemplo del gótico medieval.

Catedral de Colonia

Alhambra de Granada

La Alhambra, así como toda Granada, representó un símbolo para los artistas románticos europeos.

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EL ROMANTICISMO

Esos monstruos de la razón pueden manifestarse a través de la recreación de mitos como el del dios del Tiempo que, según Freud, está relacionado con la melancolía y la destrucción. Goya pintó este cuadro entre 1819 y 1823.

Francisco de Goya puede considerarse como el verdadero iniciador del Romanticismo histórico. Sus Caprichos son un claro ejemplo de un lenguaje interior y

subjetivo. Saturno devorando a su hijo (Goya)El sueño de la razón produce monstruos (Goya)

El romántico no sólo huye en el tiempo y en el espacio, sino también en el interior de sí mismo. De ahí, la emergencia de la subjetividad, las emociones internas, los sueños… que quieren escapar de la razón.

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EL ROMANTICISMO

Pareja contemplando el paisaje.Caspar David Friedrich

Un nuevo paisaje toma cuerpo durante el Romanticismo. Es un paisaje acorde con la nueva sensibilidad melancólica, desengañada, exaltada, apasionada.

Caminante frente al mar de niebla (Friedrich)

La representación de la naturaleza alcanza la expresión más elevada donde el hombre cumple el insignificante papel de espectador frente a la magnitud del paisaje.

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EL ROMANTICISMO

Un naufragio como el que presenta Caspar David Friedrich, puede representar un estado de destrucción interna, de angustia.

El naufragio del “Esperanza” (Caspar David Friedrich)

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EL ROMANTICISMO

Este cuadro de Eugène Delacroix, de 1830, sintetiza el ideal transgresor romántico: la libertad guiando el pueblo. El título habla por sí solo.

La libertad gritando al pueblo (Delacroix)

El héroe romántico es un ser marginal, busca la libertad ante todo, aunque ello conlleve la trasgresión de las normas sociales.

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EL ROMANTICISMO

Mary Shelley, Bram Stoker o Victor Hugo dibujaron los retratos de héroes marginales, desdeñados y temidos por la sociedad.

Frankenstein Drácula

El jorobado de Notre Dame

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EL REALISMO

Jean François Millet (1841-1875) se distinguió como paisajista, pero en sus paisajes no olvida nunca a los campesinos, humildes, cabizbajos, pesimistas y redimidos por el trabajo. Es el mejor intérprete de la vida campesina y del hambre y la miseria. Contempló de cerca la situación en la que vivía, pero no la denunció en sus pinturas, sino que la representó tal y como era, plasmó la realidad. En “Las espigadoras” tres campesinas ataviadas con la vestimenta típica normanda recogen inclinadas los restos de la cosecha, el trabajo más duro y menos reconocido entre las tareas rurales. Sus posturas reflejan la fatiga.

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EL REALISMO

En Un entierro en Ornans, Gustave Courbet transmite con el máximo realismo posible un funeral al que asiste toda la comunidad, incluso un perro perdiguero en primer plano. Por comentarios del propio pintor sabemos que toda la población de Ornans, pueblo natal del pintor quiso posar para el cuadro. Se puede decir que esta obra es un panfleto del nuevo estilo artístico defendido por Courbet considerado como un arte científico, naturalista, anticlásico, antirromántico, antiacadémico, progresista y social, cuya única fuente debía ser la observación directa del natural.

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EL REALISMO

Sus paisajes del duro paisaje castellano se convertirán en la imagen emblemática de España. Su visión de España le identifica con la Generación del 98, muestra la decadencia de las ciudades y el deseo de la vuelta a la tierra y al paisaje yermo, en busca de una autenticidad y una identidad nacional. Se sirvió de varios elementos, como son, la miseria y las costumbres tradicionales de los pueblos.

Ignacio Zuloaga. Corrida de toros en Eibar