revista_cultura y desarrollo (museos y patrimonio)

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MUSEOS y Patrimonio NÚMERO 8 2012

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museologia

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  • M U S E O Sy Patrimonio

    NMERO 82012

  • Editorial

    La contribucin de los museos al desarrollo

    La misin del museo

    La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturales

    Museo, centro cultural o ambos?

    Los objetivos de los museos: educacin,estudio y recreo

    El impacto de las instituciones culturales en el desarrollo local

    Palacio del Segundo Cabo: un puente intercultural en La Habana

    Estado del Museo del Panten Nacional de Hait, MUPANAH

    Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba. Edificio de Arte Universal

    La evolucin de los museos y su adaptacin

    Conclusiones

    Colaboradores

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    abo

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    , 201

    2

    CULTURA Y DESARROLLO ES UNA REVISTA PERIDICA QUE LA OFICINA REGIONAL DE CULTURA DE LA UNESCO PARA AMRICA LATINA Y EL CARIBE PUBLICA DESDE EL AO 2000. ES UN ESPACIO DE REFLEXIN,

    INTERCAMBIO Y DIFUSIN DE IDEAS Y TEMAS QUE ABORDAN LA CULTURA COMO ELEMENTO PRIORITARIO PARA EL DESARROLLO INTEGRAL DE PERSONAS Y COMUNIDADES DE NUESTRA REGIN. LA REVISTA

    EN SU VERSIN DIGITAL SE ENCUENTRA DISPONIBLE EN WWW.LACULT.ORG, EN ESPAOL E INGLS. ESTE NMERO 8, DEDICADO A MUSEOS Y PATRIMONIO, RECOGE LAS IDEAS, EXPERIENCIAS E INTERCAMBIOS

    DEL TALLER TRANSFORMACIN DE EDIFICIOS HISTRICOS EN MUSEOS: GESTIN CULTURAL, EDUCACIN Y DESARROLLO, QUE TUVO LUGAR EN LA HABANA DEL 5 AL 7 DE DICIEMBRE DE 2011, ORGANIZADO

    POR LA OFICINA REGIONAL DE CULTURA PARA AMRICA LATINA Y EL CARIBE DE LA UNESCO EN LA HABANA, JUNTO A LAS AUTORIDADES CUBANAS Y CON EL APOYO DE LA EMBAJADA DE NORUEGA EN CUBA.

    CONTACTOUNESCO LA HABANAwww.unesco.org.cu www.lacult.org [email protected] Calle Calzada No. 551, entre C y D, Vedado, La Habana. CP 10400 Telef.: +537 833 3438, 832 2840, 832 7741, 832 7638. Fax: +537 833 3144

    EQUIPO EDITORIALOFICINA REGIONAL DE CULTURA DE LA UNESCO PARA AMRICA LATINA Y EL CARIBE, LA HABANA, CUBAwww.unesco.org.cu Herman van Hooff, Fernando Brugman, Gilda Betancourt, Begoa Guzmn,Elsa Martn

    OFICINA UNESCO KINGSTON

    Himalchuli Gurung

    AGRADECIMIENTOS:

    Embajada de Noruega en Cuba

    Los artculos firmados expresan el criterio de sus autores y no comprometen en modo alguno a la UNESCO. Las imgenes, excepto cuando se indican, son proporcionadas por los propios autores, quienes son responsables de las mismas.

    CULTURA Y DESARROLLO 8

    EDICIN: Begoa GuzmnDIRECTOR DE ARTE: Arnulfo Espinosa

    [email protected]

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    Inauguracin del taller UNESCO

    Cpula del Palacio del Segundo CaboOHCH,2010

    Museo Guggenheim de Bilbao. Arquitecto Frank Gehry

  • C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    E sta edicin especial de Cultura y Desarrollo gira en torno a los museos y centros culturales como espacios de transmisin de valores cultu-rales que conservan y difunden el patrimonio, invi-tan al conocimiento de otras culturas, promocionan la diversidad cultural y refuerzan la participacin y la identidad de la comunidad donde se ubican. Sin olvidar que, adems, son activos del sector cultural que contribuyen a las inversiones, a los beneficios econmicos y a la generacin de empleo.

    Partiendo de esta idea, en el mes de diciembre del 2011, la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de Noruega en Cuba, y en colaboracin con la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural y la Comisin Nacional Cubana para la UNESCO, organiz en La Habana Vieja el taller Transformacin de edificios hist-ricos en museos: gestin cultural, educacin y desarrollo. Dicho evento congreg a expertos en museos y patrimonio de Amrica Latina, Caribe y Europa con el objetivo de analizar y debatir el desafo que supone la restauracin de un inmue-ble histrico al que se ha proyectado su reutiliza-cin como museo o centro cultural, el cual debe ser conservado a la vez que cumple su misin y funciones de educacin, investigacin y ocio aso-ciadas a una institucin de estas caractersticas.

    Aunque el tema no es nuevo y frecuentemente nos encontramos con restauraciones de edificios antiguos los cuales albergarn un uso cultural, no siempre nos hallamos ante acciones que respon-dan por igual inters a lo anteriormente descrito, conservar el inmueble y cumplir con las funciones musesticas.

    Los actores decisorios en la creacin de un mu-seo, la idoneidad del edificio, la necesidad de una coleccin fsica, el empleo de la tecnologa en la museografa, la programacin de activida-des paralelas a las expositivas o el impacto en el desarrollo local fueron discutidos por los expertos y asistentes al taller. Tambin compartieron las fortalezas y debilidades que presentan estas insti-tuciones culturales en el Caribe, mostrndose de acuerdo en la necesidad de estrechar sus relacio-nes y de una mayor capacitacin en materia de museos, reconociendo que este tipo de encuentros ayudan a mejorar ambos aspectos.

    Este nmero resume las sesiones temticas con sus respectivos debates y conclusiones, y presenta como caso de estudio una iniciativa de coopera-cin internacional desarrollada por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana conjuntamente con la UNESCO y la Unin Europea, la restauracin del Palacio del Segundo Cabo, exponente del ba-rroco cubano localizado en La Habana Vieja, para su futuro uso como centro de encuentro cultural entre Cuba y Europa.

    Agradecer a los expertos y asistentes al taller su activa participacin y sus valiosas contribuciones al debate sobre museos y patrimonio, en el que la implicacin de estas instituciones en el desarrollo integral de personas y comunidades cobra espe-cial relevancia en un momento, como el actual, en el que se estn cuestionando los modelos estable-cidos y la cultura surge como factor clave en las polticas de desarrollo

    Herman van Hooff

    Director, Oficina Regional de Cultura

    para Amrica Latina y el Caribe

    Representante de la UNESCO en Cuba,

    Repblica Dominicana y Aruba

    C on el objetivo de intercambiar ideas, debatir y expresar experiencias sobre el estado actual en la regin de Amrica Latina y el Caribe de la restauracin de edificios antiguos para su reutilizacin con fines culturales y su posterior gestin, la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de Noruega en Cuba, y en colaboracin con la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, la Comisin Nacional Cubana para la UNESCO y el Museo Nacional de Bellas Artes, organiz en La Habana Vieja el taller Transformacin de edificios histricos en museos: gestin cultural,

    educacin y desarrollo, del 5 al 7 de diciembre de 2011.

    Trabajos de rehabilita-cin de la cubierta del Palacio del Segundo Cabo, La Habana Vieja. Proyecto de coope-racin multilateral de la UNESCO, Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y la Unin Europea que tiene como objetivo restaurar el inmueble y su concepcin y trans-formacin en centro cultural. OHCH

    Fernando BrugmanEspecialista de Programa, Coordinador del equipo de cultura de la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO, La Habana

    La contribucin de los museos al desarrollo

  • C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    E sta edicin especial de Cultura y Desarrollo gira en torno a los museos y centros culturales como espacios de transmisin de valores cultu-rales que conservan y difunden el patrimonio, invi-tan al conocimiento de otras culturas, promocionan la diversidad cultural y refuerzan la participacin y la identidad de la comunidad donde se ubican. Sin olvidar que, adems, son activos del sector cultural que contribuyen a las inversiones, a los beneficios econmicos y a la generacin de empleo.

    Partiendo de esta idea, en el mes de diciembre del 2011, la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de Noruega en Cuba, y en colaboracin con la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural y la Comisin Nacional Cubana para la UNESCO, organiz en La Habana Vieja el taller Transformacin de edificios hist-ricos en museos: gestin cultural, educacin y desarrollo. Dicho evento congreg a expertos en museos y patrimonio de Amrica Latina, Caribe y Europa con el objetivo de analizar y debatir el desafo que supone la restauracin de un inmue-ble histrico al que se ha proyectado su reutiliza-cin como museo o centro cultural, el cual debe ser conservado a la vez que cumple su misin y funciones de educacin, investigacin y ocio aso-ciadas a una institucin de estas caractersticas.

    Aunque el tema no es nuevo y frecuentemente nos encontramos con restauraciones de edificios antiguos los cuales albergarn un uso cultural, no siempre nos hallamos ante acciones que respon-dan por igual inters a lo anteriormente descrito, conservar el inmueble y cumplir con las funciones musesticas.

    Los actores decisorios en la creacin de un mu-seo, la idoneidad del edificio, la necesidad de una coleccin fsica, el empleo de la tecnologa en la museografa, la programacin de activida-des paralelas a las expositivas o el impacto en el desarrollo local fueron discutidos por los expertos y asistentes al taller. Tambin compartieron las fortalezas y debilidades que presentan estas insti-tuciones culturales en el Caribe, mostrndose de acuerdo en la necesidad de estrechar sus relacio-nes y de una mayor capacitacin en materia de museos, reconociendo que este tipo de encuentros ayudan a mejorar ambos aspectos.

    Este nmero resume las sesiones temticas con sus respectivos debates y conclusiones, y presenta como caso de estudio una iniciativa de coopera-cin internacional desarrollada por la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana conjuntamente con la UNESCO y la Unin Europea, la restauracin del Palacio del Segundo Cabo, exponente del ba-rroco cubano localizado en La Habana Vieja, para su futuro uso como centro de encuentro cultural entre Cuba y Europa.

    Agradecer a los expertos y asistentes al taller su activa participacin y sus valiosas contribuciones al debate sobre museos y patrimonio, en el que la implicacin de estas instituciones en el desarrollo integral de personas y comunidades cobra espe-cial relevancia en un momento, como el actual, en el que se estn cuestionando los modelos estable-cidos y la cultura surge como factor clave en las polticas de desarrollo

    Herman van Hooff

    Director, Oficina Regional de Cultura

    para Amrica Latina y el Caribe

    Representante de la UNESCO en Cuba,

    Repblica Dominicana y Aruba

    C on el objetivo de intercambiar ideas, debatir y expresar experiencias sobre el estado actual en la regin de Amrica Latina y el Caribe de la restauracin de edificios antiguos para su reutilizacin con fines culturales y su posterior gestin, la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de Noruega en Cuba, y en colaboracin con la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH), el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, la Comisin Nacional Cubana para la UNESCO y el Museo Nacional de Bellas Artes, organiz en La Habana Vieja el taller Transformacin de edificios histricos en museos: gestin cultural,

    educacin y desarrollo, del 5 al 7 de diciembre de 2011.

    Trabajos de rehabilita-cin de la cubierta del Palacio del Segundo Cabo, La Habana Vieja. Proyecto de coope-racin multilateral de la UNESCO, Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y la Unin Europea que tiene como objetivo restaurar el inmueble y su concepcin y trans-formacin en centro cultural. OHCH

    Fernando BrugmanEspecialista de Programa, Coordinador del equipo de cultura de la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO, La Habana

    La contribucin de los museos al desarrollo

  • 4 5Fernando Brugman LA CONTRIBUCIN DE LOS MUSEOS AL DESARROLLOC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Las infraestructuras culturales y su contribucin al desarrolloDentro del sector de la cultura, los museos juegan un importante papel en la transmisin del cono-cimiento, en el aprendizaje y en la comprensin de las identidades culturales. El Consejo Interna-cional de Museos (ICOM) define al museo como una institucin permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y abierta al pblico, que adquiere, conserva, estudia, expone y difunde el patrimonio material e inmaterial de la humanidad con fines de estudio, educacin y recreo. (2007).

    El logro de los objetivos de investigacin, educa-cin y ocio en un museo depende de la correcta definicin de su misin y la correcta gestin de la institucin de acuerdo con el cdigo deontolgico para museos acordado internacionalmente. La misin del museo define el conocimiento que va a ser transmitido y puesto en valor; el exitoso logro de esta misin depender de que la coleccin expuesta sea la apropiada, as como de la correcta gestin de las colecciones y de los medios para transmitirlas.

    El museo posee muchos medios para comunicar su misin, incluyendo equipamientos para la investigacin, actividades didcticas, organiza-cin de espacios expositivos y el uso de avanzadas tecnologas de comunicacin e informacin. La localizacin de los museos, sea en un espacio abierto o en un inmueble, tambin juega un importante papel en la forma en que ser trans-mitida la informacin. A menudo, la ubicacin es fijada de acuerdo con los objetivos y la misin del museo que va a fundarse. En otros casos, edificios existentes son adaptados para albergar un museo.

    Cuando un espacio abierto o un edificio son construidos para alojar un museo, el lugar servir para los objetivos y misin del museo por un determinado tiempo. La organizacin del mu-seo para facilitar los objetivos de investigacin, educacin y ocio, y el uso de tecnologas debe ser prevista en el plan de instalacin y construccin del museo. No obstante, si la misin del museo vara o la coleccin es ampliada, sera necesario adaptar el espacio y las tecnologas a las nuevas necesidades del museo.

    Cuando un espacio o inmueble existente es adap-tado para albergar un museo, la organizacin del espacio y los medios a emplear depender de ml-tiples factores, no solo de la misin del museo. Por ejemplo, la inclusin de un inmueble en la lista de patrimonio cultural protegido debe asegurar que

    el valor por el cual ese edificio ha sido incluido en la lista no se vea afectado negativamente por su reutilizacin como museo. Al mismo tiempo, la adaptacin del edificio en museo debe ser la forma de asegurar su conservacin y permitir la preservacin de su valor. Este tambin debe ser el caso para que los objetivos de conservacin del edificio prevalezcan sobre el uso del museo con una misin especfica.

    El valor de un monumento no lo determinan solo los criterios ya mencionados de genialidad, excepcionalidad, autenticidad o integridad, sino sobre todo su valor como smbolo que transmi-te la complejidad de conocimientos que dieron como resultado su construccin. Desde el punto de vista financiero, el valor de mercado actual de esa construccin, o lo que quede de ella, puede que sea no slo menor a su valor simblico sino tambin al valor acumulado de la inversin ya realizada desde su construccin y mantenimiento hasta nuestros das.

    En numerosas ocasiones, en particular cuando se restauran reas urbanas histricas, algunos in-muebles monumentales, por su tamao y carcter emblemtico, son considerados espacios ideales para acoger un museo. La razn para realizar esto est normalmente ligada a la necesidad de recaudar los fondos necesarios para restaurar el edificio, el cual, por s mismo, ya transmite cierto conocimiento y, lo que es aun ms importante, el sentido de identidad y orgullo entre la comuni-dad. El edificio debe ser tambin visto como un producto de calidad excepcional perteneciente a la sociedad que debe atraer visitantes y contri-buir al desarrollo local por sus efectos en el rea urbana histrica.

    En muchos casos, la restauracin de estos edi-ficios forma parte de un mayor plan de restau-racin y gestin de un centro histrico. En estos casos, el objetivo de la restauracin no es solo el de transmitir la misin del museo que albergar, sino que contribuye tambin a la mejora del esta-do de conservacin y de su propio valor, as como para el rea histrica. Este nuevo uso de museo o institucin cultural ayudar a preservar su valor simblico y arquitectnico.

    La intervencin en el edificio tiene tres propsi-tos:

    - su conservacin, - educacin e investigacin y- ocio para los locales y turistas a travs de las actividades del museo y su valor arquitectnico.

    Sin embargo, estos objetivos no siempre estn conectados de un modo evidente. Las restriccio-nes relacionadas con la restauracin del edificio tienen como objetivo preservar y realzar su valor histrico, pudiendo entrar en conflicto con la mi-sin del museo. De hecho, si la misin del museo no est directamente relacionada con los procesos culturales que guiaron la construccin y refor-mas del edificio (que es la base para determinar su autenticidad), el edificio no ser apropiado ni para lograr sus objetivos ni su misin. El reto es vislumbrar cmo su uso como institucin cultural podra beneficiar a la conservacin del inmueble y cmo el edificio puede ser empleado de manera eficiente para lograr la misin del museo.

    Actualmente, en una poca en la que se estn tomando medidas desafortunadas para reducir el impacto de la crisis financiera, es importante ser eficiente en los costos y mostrar cmo no solo los productos culturales sino tambin los procesos culturales son la base para el desarrollo social y econmico. La conservacin y gestin de edificios histricos gracias a su uso como museos puede contribuir de manera sustancial al desarrollo social y econmico local, ya que tanto el edificio y la coleccin que alberga, por los altos valores sim-blicos de ambos, son medios ideales de transmi-sin y adquisicin sinttica de conocimiento.

    El taller, organizado por la Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de No-ruega en Cuba, y en colabora-cin con la Oficina del Historia-dor de la Ciudad de La Habana (OHCH), el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, la Comi-sin Nacional Cubana para la UNESCO y el Museo Nacional de Bellas Artes, congreg a expertos en museologa, museo-grafa, arquitectura y gestin cultural de Aruba, Antigua y Barbuda, Barbados, Costa Rica,

    Cuba, Hait, Italia, Jamaica y Repblica Dominicana.

    Entre ellos, haba representantes de las instituciones museolgi-cas internacionales Fundacin ILAM (Instituto Latinoameri-cano de Museos y Parques) y Goppion. El encuentro tambin reuni a funcionarios de insti-tuciones culturales cubanas y de expertos de la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO.

    El objetivo general del taller fue identificar y debatir los retos a

    Expertos y asistentes al taller visitando la

    obras de restauracin del Palacio del Segun-

    do Cabo (La Habana Vieja). UNESCO

    Sesin de trabajo durante el taller.

    UNESCO

    Taller Transformacin de edificios histricos en museos: gestin cultural, educacin y desarrollo

    L a Habana , de l 5 a l 7 de d i c i embre de 2011

  • 4 5Fernando Brugman LA CONTRIBUCIN DE LOS MUSEOS AL DESARROLLOC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Las infraestructuras culturales y su contribucin al desarrolloDentro del sector de la cultura, los museos juegan un importante papel en la transmisin del cono-cimiento, en el aprendizaje y en la comprensin de las identidades culturales. El Consejo Interna-cional de Museos (ICOM) define al museo como una institucin permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y abierta al pblico, que adquiere, conserva, estudia, expone y difunde el patrimonio material e inmaterial de la humanidad con fines de estudio, educacin y recreo. (2007).

    El logro de los objetivos de investigacin, educa-cin y ocio en un museo depende de la correcta definicin de su misin y la correcta gestin de la institucin de acuerdo con el cdigo deontolgico para museos acordado internacionalmente. La misin del museo define el conocimiento que va a ser transmitido y puesto en valor; el exitoso logro de esta misin depender de que la coleccin expuesta sea la apropiada, as como de la correcta gestin de las colecciones y de los medios para transmitirlas.

    El museo posee muchos medios para comunicar su misin, incluyendo equipamientos para la investigacin, actividades didcticas, organiza-cin de espacios expositivos y el uso de avanzadas tecnologas de comunicacin e informacin. La localizacin de los museos, sea en un espacio abierto o en un inmueble, tambin juega un importante papel en la forma en que ser trans-mitida la informacin. A menudo, la ubicacin es fijada de acuerdo con los objetivos y la misin del museo que va a fundarse. En otros casos, edificios existentes son adaptados para albergar un museo.

    Cuando un espacio abierto o un edificio son construidos para alojar un museo, el lugar servir para los objetivos y misin del museo por un determinado tiempo. La organizacin del mu-seo para facilitar los objetivos de investigacin, educacin y ocio, y el uso de tecnologas debe ser prevista en el plan de instalacin y construccin del museo. No obstante, si la misin del museo vara o la coleccin es ampliada, sera necesario adaptar el espacio y las tecnologas a las nuevas necesidades del museo.

    Cuando un espacio o inmueble existente es adap-tado para albergar un museo, la organizacin del espacio y los medios a emplear depender de ml-tiples factores, no solo de la misin del museo. Por ejemplo, la inclusin de un inmueble en la lista de patrimonio cultural protegido debe asegurar que

    el valor por el cual ese edificio ha sido incluido en la lista no se vea afectado negativamente por su reutilizacin como museo. Al mismo tiempo, la adaptacin del edificio en museo debe ser la forma de asegurar su conservacin y permitir la preservacin de su valor. Este tambin debe ser el caso para que los objetivos de conservacin del edificio prevalezcan sobre el uso del museo con una misin especfica.

    El valor de un monumento no lo determinan solo los criterios ya mencionados de genialidad, excepcionalidad, autenticidad o integridad, sino sobre todo su valor como smbolo que transmi-te la complejidad de conocimientos que dieron como resultado su construccin. Desde el punto de vista financiero, el valor de mercado actual de esa construccin, o lo que quede de ella, puede que sea no slo menor a su valor simblico sino tambin al valor acumulado de la inversin ya realizada desde su construccin y mantenimiento hasta nuestros das.

    En numerosas ocasiones, en particular cuando se restauran reas urbanas histricas, algunos in-muebles monumentales, por su tamao y carcter emblemtico, son considerados espacios ideales para acoger un museo. La razn para realizar esto est normalmente ligada a la necesidad de recaudar los fondos necesarios para restaurar el edificio, el cual, por s mismo, ya transmite cierto conocimiento y, lo que es aun ms importante, el sentido de identidad y orgullo entre la comuni-dad. El edificio debe ser tambin visto como un producto de calidad excepcional perteneciente a la sociedad que debe atraer visitantes y contri-buir al desarrollo local por sus efectos en el rea urbana histrica.

    En muchos casos, la restauracin de estos edi-ficios forma parte de un mayor plan de restau-racin y gestin de un centro histrico. En estos casos, el objetivo de la restauracin no es solo el de transmitir la misin del museo que albergar, sino que contribuye tambin a la mejora del esta-do de conservacin y de su propio valor, as como para el rea histrica. Este nuevo uso de museo o institucin cultural ayudar a preservar su valor simblico y arquitectnico.

    La intervencin en el edificio tiene tres propsi-tos:

    - su conservacin, - educacin e investigacin y- ocio para los locales y turistas a travs de las actividades del museo y su valor arquitectnico.

    Sin embargo, estos objetivos no siempre estn conectados de un modo evidente. Las restriccio-nes relacionadas con la restauracin del edificio tienen como objetivo preservar y realzar su valor histrico, pudiendo entrar en conflicto con la mi-sin del museo. De hecho, si la misin del museo no est directamente relacionada con los procesos culturales que guiaron la construccin y refor-mas del edificio (que es la base para determinar su autenticidad), el edificio no ser apropiado ni para lograr sus objetivos ni su misin. El reto es vislumbrar cmo su uso como institucin cultural podra beneficiar a la conservacin del inmueble y cmo el edificio puede ser empleado de manera eficiente para lograr la misin del museo.

    Actualmente, en una poca en la que se estn tomando medidas desafortunadas para reducir el impacto de la crisis financiera, es importante ser eficiente en los costos y mostrar cmo no solo los productos culturales sino tambin los procesos culturales son la base para el desarrollo social y econmico. La conservacin y gestin de edificios histricos gracias a su uso como museos puede contribuir de manera sustancial al desarrollo social y econmico local, ya que tanto el edificio y la coleccin que alberga, por los altos valores sim-blicos de ambos, son medios ideales de transmi-sin y adquisicin sinttica de conocimiento.

    El taller, organizado por la Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO en La Habana, con el apoyo de la Embajada de No-ruega en Cuba, y en colabora-cin con la Oficina del Historia-dor de la Ciudad de La Habana (OHCH), el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, la Comi-sin Nacional Cubana para la UNESCO y el Museo Nacional de Bellas Artes, congreg a expertos en museologa, museo-grafa, arquitectura y gestin cultural de Aruba, Antigua y Barbuda, Barbados, Costa Rica,

    Cuba, Hait, Italia, Jamaica y Repblica Dominicana.

    Entre ellos, haba representantes de las instituciones museolgi-cas internacionales Fundacin ILAM (Instituto Latinoameri-cano de Museos y Parques) y Goppion. El encuentro tambin reuni a funcionarios de insti-tuciones culturales cubanas y de expertos de la Oficina Regional de Cultura para Amrica Latina y el Caribe de la UNESCO.

    El objetivo general del taller fue identificar y debatir los retos a

    Expertos y asistentes al taller visitando la

    obras de restauracin del Palacio del Segun-

    do Cabo (La Habana Vieja). UNESCO

    Sesin de trabajo durante el taller.

    UNESCO

    Taller Transformacin de edificios histricos en museos: gestin cultural, educacin y desarrollo

    L a Habana , de l 5 a l 7 de d i c i embre de 2011

  • C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 26 C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Notas 1El fomento y consoli-dacin de las institu-ciones musesticas fue

    una de las prioridades

    del Programa de

    Cultura de la UNESCO

    durante el anterior

    bienio 2010-2011.

    los que se enfrenta una institu-cin al restaurar un inmueble histrico para ser reutilizado como museo o centro cultural y para garantizar tanto la conser-vacin del edificio como el logro eficaz de la misin del museo, a travs de las funciones de edu-cacin, investigacin y ocio1.

    Asimismo, se trazaron varios objetivos especficos:

    - Propiciar el dilogo entre expertos del Caribe y otras regiones para intercambiar conocimientos y experiencias, identificar puntos fuertes y dbiles y concluir mejoras en el mbito de los museos. - Reflexionar sobre el impacto de la conservacin del patri-monio y las infraestructuras culturales en el desarrollo de la comunidad donde se ubican. - Analizar el Palacio del Seg-undo Cabo2, sito en la Plaza de Armas de La Habana Vieja, como caso de estudio durante el taller y apoyar a la OHCH en su concepcin cultural.

    La agenda del taller se organiz en torno a cinco debates tem-

    ticos, cada uno de los cuales fue introducido y moderado por un experto y su relatora facilitada por otro de los expertos. Las sesiones de trabajo se plantea-ron a los participantes como preguntas que responder y a las que intentar llegar a unas con-clusiones de manera colectiva.

    Las sesiones de trabajo y debate fueron las siguientes:

    I. La misin del museo.II. La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturales.III. Museo, centro cultural o ambos? IV. Los objetivos de los museos: educacin, estudio y recreo.V. Instituciones culturales y su impacto en el desarrollo local.

    Adems de las sesiones de tra-bajo, los expertos y asistentes al taller disfrutaron de dos visitas culturales guiadas, donde pudie-ron ver el proceso y el resultado de restauracin de un edificio histrico para su reconversin en un espacio cultural.

    La misin del museo

    Arthur Reginald Murphy Kevin FarmerDirector del Nelsons Dockyard Museum (Antigua y Barbuda) Subdirector del Barbados Museum & Historical Society (Barbados)

    En la primera de ellas, el equipo de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) les abri las puertas del Palacio del Segundo Cabo, inmueble ubicado en plena La Habana Vieja, objeto de restau-racin para su posterior recon-versin en instalacin cultural.

    La segunda, al Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes, estuvo magnfi-camente liderada por el arqui-tecto Jos Linares, responsable de la restauracin y rehabili-tacin de ese edificio para su posterior uso museal.

    A continuacin, les presentamos las exposiciones y debates que centraron cada sesin temtica, una serie de casos prcticos localizados en Cuba y Hait, un breve estudio sobre la evolucin de los museos, y para finalizar, unas conclusiones generales

    Jason Ramsay, Fernan-do Brugman, Kevin

    Farmer, Arthur Regi-nald Murphy y Luckner

    Christophe durante la visita guiada por el Edificio de Arte

    Universal del Museo Nacional de Bellas Ar-

    tes (La Habana, Cuba). UNESCO

    Muse Lalique P.O. Deschamps

    En primer plano, Jason Ramsay, experto del Museo de Historia y

    Etnografa de Jamaica, junto a l, Georgina

    DeCarli, presidenta del Instituto Latinoame-

    ricano de Museos. UNESCO

    2Proyecto de cooper-

    acin multilateral de

    la UNESCO, Oficina

    del Historiador de la

    Ciudad de La Habana y

    la Unin Europea que

    tiene como objetivo

    restaurar el inmueble

    y su concepcin y

    transformacin en

    centro cultural.

    D E B A T E I

    IntroduccinLa primera sesin temtica estuvo moderada por Arthur Reginald Murphy, Director del Nelsons Dockyard Museum y la relatora estuvo a cargo de Kevin Farmer, Subdirector del Barbados Museum & Historical Society.

    El debate gir en torno al posible conflicto que surge entre la misin del museo y las necesidades de restauracin y conservacin del edificio que lo albergar. De esta manera se abordaron cuestio-nes como el momento en que se debe definir la misin, quin lo decide, la idoneidad y las razo-nes para que un inmueble pueda reconvertirse en una institucin cultural, entre otros temas.

    Arthur Reginald Murphy inici la sesin de traba-jo planteando una serie de preguntas para iniciar su exposicin y provocar el posterior debate.

    - Debe la misin definir las necesidades del museo antes de su restauracin?

    - Siendo realistas, nos podemos dar el lujo de escoger o estamos obligados a aceptar un punto de partida?

    - Debe la misin del museo determinar el valor del edificio como propiedad patrimonial?

    - Debe el edificio determinar la misin?

    - Cuando existe la posibilidad, debe hacerse una seleccin del edificio ms apropiado para llevar a cabo la misin del museo?

  • C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 26 C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Notas 1El fomento y consoli-dacin de las institu-ciones musesticas fue

    una de las prioridades

    del Programa de

    Cultura de la UNESCO

    durante el anterior

    bienio 2010-2011.

    los que se enfrenta una institu-cin al restaurar un inmueble histrico para ser reutilizado como museo o centro cultural y para garantizar tanto la conser-vacin del edificio como el logro eficaz de la misin del museo, a travs de las funciones de edu-cacin, investigacin y ocio1.

    Asimismo, se trazaron varios objetivos especficos:

    - Propiciar el dilogo entre expertos del Caribe y otras regiones para intercambiar conocimientos y experiencias, identificar puntos fuertes y dbiles y concluir mejoras en el mbito de los museos. - Reflexionar sobre el impacto de la conservacin del patri-monio y las infraestructuras culturales en el desarrollo de la comunidad donde se ubican. - Analizar el Palacio del Seg-undo Cabo2, sito en la Plaza de Armas de La Habana Vieja, como caso de estudio durante el taller y apoyar a la OHCH en su concepcin cultural.

    La agenda del taller se organiz en torno a cinco debates tem-

    ticos, cada uno de los cuales fue introducido y moderado por un experto y su relatora facilitada por otro de los expertos. Las sesiones de trabajo se plantea-ron a los participantes como preguntas que responder y a las que intentar llegar a unas con-clusiones de manera colectiva.

    Las sesiones de trabajo y debate fueron las siguientes:

    I. La misin del museo.II. La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturales.III. Museo, centro cultural o ambos? IV. Los objetivos de los museos: educacin, estudio y recreo.V. Instituciones culturales y su impacto en el desarrollo local.

    Adems de las sesiones de tra-bajo, los expertos y asistentes al taller disfrutaron de dos visitas culturales guiadas, donde pudie-ron ver el proceso y el resultado de restauracin de un edificio histrico para su reconversin en un espacio cultural.

    La misin del museo

    Arthur Reginald Murphy Kevin FarmerDirector del Nelsons Dockyard Museum (Antigua y Barbuda) Subdirector del Barbados Museum & Historical Society (Barbados)

    En la primera de ellas, el equipo de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) les abri las puertas del Palacio del Segundo Cabo, inmueble ubicado en plena La Habana Vieja, objeto de restau-racin para su posterior recon-versin en instalacin cultural.

    La segunda, al Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes, estuvo magnfi-camente liderada por el arqui-tecto Jos Linares, responsable de la restauracin y rehabili-tacin de ese edificio para su posterior uso museal.

    A continuacin, les presentamos las exposiciones y debates que centraron cada sesin temtica, una serie de casos prcticos localizados en Cuba y Hait, un breve estudio sobre la evolucin de los museos, y para finalizar, unas conclusiones generales

    Jason Ramsay, Fernan-do Brugman, Kevin

    Farmer, Arthur Regi-nald Murphy y Luckner

    Christophe durante la visita guiada por el Edificio de Arte

    Universal del Museo Nacional de Bellas Ar-

    tes (La Habana, Cuba). UNESCO

    Muse Lalique P.O. Deschamps

    En primer plano, Jason Ramsay, experto del Museo de Historia y

    Etnografa de Jamaica, junto a l, Georgina

    DeCarli, presidenta del Instituto Latinoame-

    ricano de Museos. UNESCO

    2Proyecto de cooper-

    acin multilateral de

    la UNESCO, Oficina

    del Historiador de la

    Ciudad de La Habana y

    la Unin Europea que

    tiene como objetivo

    restaurar el inmueble

    y su concepcin y

    transformacin en

    centro cultural.

    D E B A T E I

    IntroduccinLa primera sesin temtica estuvo moderada por Arthur Reginald Murphy, Director del Nelsons Dockyard Museum y la relatora estuvo a cargo de Kevin Farmer, Subdirector del Barbados Museum & Historical Society.

    El debate gir en torno al posible conflicto que surge entre la misin del museo y las necesidades de restauracin y conservacin del edificio que lo albergar. De esta manera se abordaron cuestio-nes como el momento en que se debe definir la misin, quin lo decide, la idoneidad y las razo-nes para que un inmueble pueda reconvertirse en una institucin cultural, entre otros temas.

    Arthur Reginald Murphy inici la sesin de traba-jo planteando una serie de preguntas para iniciar su exposicin y provocar el posterior debate.

    - Debe la misin definir las necesidades del museo antes de su restauracin?

    - Siendo realistas, nos podemos dar el lujo de escoger o estamos obligados a aceptar un punto de partida?

    - Debe la misin del museo determinar el valor del edificio como propiedad patrimonial?

    - Debe el edificio determinar la misin?

    - Cuando existe la posibilidad, debe hacerse una seleccin del edificio ms apropiado para llevar a cabo la misin del museo?

  • 8 9Arthur Reginald Murphy y Kevin Farmer La misin del museoC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Antes de profundizar en la situacin actual del los museos en el Caribe este, lanz una ltima y controvertida pregunta:

    quin define la misin? el gobierno, el donante, los directivos del museo, el dueo de la coleccin o los visitantes?

    La situacin en el Caribe OrientalEl surgimiento de las socieda-des histricas y arqueolgicas en el Caribe oriental entre 1960 y 1990 crearon las bases para la creacin de los museos en esta regin. Las personas que trabajaban en dichas sociedades y en los primeros museos eran, por lo general, amateurs y/o arquelogos improvisados que tenan a su cargo el depsito, gestin y exhibicin de piezas halladas en los yacimientos arqueolgicos.

    Como resultado del inters que suscitaba este periodo de la his-toria y de las muchas excavacio-nes que se realizaron, la mayo-ra de las islas de Caribe oriental poseen numerosas colecciones de artefactos precolombinos localizadas en pequeos edifi-cios patrimoniales restaurados y reutilizados como museos. Sin embargo, las condiciones de dichas instalaciones no son siempre las ms apropiadas, ya que no disponen de dep-sitos adecuados, ni equipos de control ambiental ni tampoco cuentan con recursos econmi-cos para paliar esta situacin.

    Adicionalmente tambin care-cen de equipos de investigacin y restauracin y estn faltos de medidas de prevencin contra los desastres naturales, como huracanes y terremotos, fenmenos tan comunes en el Caribe.

    Tambin refiere un dficit en personal cualificado provocado por los escasos efectivos que en el Caribe Oriental estudian carreras artsticas u otra disci-plina relacionada con la gestin cultural y los museos. Adems apunt que los marcos legales en el mbito cultural son dbiles y no logran corregir la realidad descrita anteriormente.

    Nelsons Dockyard Museum El Arsenal de Nelson, estuvo al servicio de la Marina britnica en el Caribe hasta su decomiso en 1890, sirviendo como base portuaria dadas las buenas caractersticas de seguridad y la presencia de un astillero para la reparacin de los barcos. Cinco dcadas despus, en 1950, se iniciaron los trabajos de restauracin.

    Hoy en da, el edificio alberga un museo que posee una coleccin de artefactos de poca precolombi-na y el centro de interpretacin del Parque Nacio-nal. Cuenta, adems, con un equipo de investiga-cin sobre la historia precolombina de Antigua.

    Sin embargo, el uso actual del edificio requiere de mayores necesidades. Falta espacio para depsito, sobre todo para guardar los bienes de gran tama-o, como locomotoras o maquinaria propia de los ingenios azucareros, urge una mejor asistencia tcnica y un plan de prevencin de riesgos.

    Para mejorar esta situacin, la Asociacin de Museos del Caribe (MAC) y la Asociacin Inter-nacional de Arqueologa del Caribe han ofrecido recomendaciones para la mejora de la gestin de los museos de menor escala en la regin. El MAC pretende establecer estndares y crear capacida-des en las pequeas islas de las Antillas Menores. Ante esta informacin, los expertos procedentes del Caribe expresaron y solicitaron la creacin de redes para el intercambio de colecciones entre los museos y alianzas para mejorar la capacitacin en museografa y en tcnicas de restauracin.

    Las deficiencias identificadas dan una visin de la problemtica a la que se enfrentan muchos museos. Se suma igualmente el hecho de que en la mayora de los casos el anlisis de la misin del museo estuvo totalmente ausente durante el proceso de concepcin y restauracin del espacio. En la mayora de los casos, se ignor por comple-to que la misin podra ser la gua o luz directiva para establecer los objetivos y focalizar la institu-cin cultural.

    Arthur Reginald Murphy

    Museo del Jardn Botnico de Saint

    Vincent (Antigua y Barbuda), su estado

    antes y tras la muerte de su propietario.

    Nelsons Dockyard Museum

    Cuando el nacimiento de un museo parte de

    una iniciativa personal o de un colectivo redu-

    cido (...), siendo ellos mismos sus gestores

    y sin el respaldo de la administracin pblica

    o de empresas privadas, la sostenibilidad

    del museo corre peligro

  • 8 9Arthur Reginald Murphy y Kevin Farmer La misin del museoC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Antes de profundizar en la situacin actual del los museos en el Caribe este, lanz una ltima y controvertida pregunta:

    quin define la misin? el gobierno, el donante, los directivos del museo, el dueo de la coleccin o los visitantes?

    La situacin en el Caribe OrientalEl surgimiento de las socieda-des histricas y arqueolgicas en el Caribe oriental entre 1960 y 1990 crearon las bases para la creacin de los museos en esta regin. Las personas que trabajaban en dichas sociedades y en los primeros museos eran, por lo general, amateurs y/o arquelogos improvisados que tenan a su cargo el depsito, gestin y exhibicin de piezas halladas en los yacimientos arqueolgicos.

    Como resultado del inters que suscitaba este periodo de la his-toria y de las muchas excavacio-nes que se realizaron, la mayo-ra de las islas de Caribe oriental poseen numerosas colecciones de artefactos precolombinos localizadas en pequeos edifi-cios patrimoniales restaurados y reutilizados como museos. Sin embargo, las condiciones de dichas instalaciones no son siempre las ms apropiadas, ya que no disponen de dep-sitos adecuados, ni equipos de control ambiental ni tampoco cuentan con recursos econmi-cos para paliar esta situacin.

    Adicionalmente tambin care-cen de equipos de investigacin y restauracin y estn faltos de medidas de prevencin contra los desastres naturales, como huracanes y terremotos, fenmenos tan comunes en el Caribe.

    Tambin refiere un dficit en personal cualificado provocado por los escasos efectivos que en el Caribe Oriental estudian carreras artsticas u otra disci-plina relacionada con la gestin cultural y los museos. Adems apunt que los marcos legales en el mbito cultural son dbiles y no logran corregir la realidad descrita anteriormente.

    Nelsons Dockyard Museum El Arsenal de Nelson, estuvo al servicio de la Marina britnica en el Caribe hasta su decomiso en 1890, sirviendo como base portuaria dadas las buenas caractersticas de seguridad y la presencia de un astillero para la reparacin de los barcos. Cinco dcadas despus, en 1950, se iniciaron los trabajos de restauracin.

    Hoy en da, el edificio alberga un museo que posee una coleccin de artefactos de poca precolombi-na y el centro de interpretacin del Parque Nacio-nal. Cuenta, adems, con un equipo de investiga-cin sobre la historia precolombina de Antigua.

    Sin embargo, el uso actual del edificio requiere de mayores necesidades. Falta espacio para depsito, sobre todo para guardar los bienes de gran tama-o, como locomotoras o maquinaria propia de los ingenios azucareros, urge una mejor asistencia tcnica y un plan de prevencin de riesgos.

    Para mejorar esta situacin, la Asociacin de Museos del Caribe (MAC) y la Asociacin Inter-nacional de Arqueologa del Caribe han ofrecido recomendaciones para la mejora de la gestin de los museos de menor escala en la regin. El MAC pretende establecer estndares y crear capacida-des en las pequeas islas de las Antillas Menores. Ante esta informacin, los expertos procedentes del Caribe expresaron y solicitaron la creacin de redes para el intercambio de colecciones entre los museos y alianzas para mejorar la capacitacin en museografa y en tcnicas de restauracin.

    Las deficiencias identificadas dan una visin de la problemtica a la que se enfrentan muchos museos. Se suma igualmente el hecho de que en la mayora de los casos el anlisis de la misin del museo estuvo totalmente ausente durante el proceso de concepcin y restauracin del espacio. En la mayora de los casos, se ignor por comple-to que la misin podra ser la gua o luz directiva para establecer los objetivos y focalizar la institu-cin cultural.

    Arthur Reginald Murphy

    Museo del Jardn Botnico de Saint

    Vincent (Antigua y Barbuda), su estado

    antes y tras la muerte de su propietario.

    Nelsons Dockyard Museum

    Cuando el nacimiento de un museo parte de

    una iniciativa personal o de un colectivo redu-

    cido (...), siendo ellos mismos sus gestores

    y sin el respaldo de la administracin pblica

    o de empresas privadas, la sostenibilidad

    del museo corre peligro

  • 10 11Arthur Reginald Murphy y Kevin Farmer La misin del museoC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    La misin del museoEn ocasiones nace una con-frontacin entre la misin y la restauracin y conservacin del edificio, principalmente porque normalmente la idea de ubicar un museo en un edificio histrico responde a sus necesi-dades de restauracin. De esta manera, el edificio es la priori-dad y acaba convirtindose en el elemento ms costoso de la coleccin.

    Edificios restaurados ubicados en los centros urbanos son seleccionados por la adminis-tracin pblica y los inversores privados para ser reutilizados como centros culturales o museos. Gracias a sus carac-tersticas monumentales y su privilegiada localizacin, pueden atraer turistas y favo-recer la recuperacin de zonas degradadas que, al contar con instituciones culturales, sociales y de salud, mejoren el vecinda-rio y se conviertan en vectores de desarrollo. Con frecuencia y cada vez ms a menudo, se con-voca a arquitectos reconocidos para asegurar la restauracin de estos edificios.

    Paralelamente a los trabajos de restauracin, se inicia al proceso de formar la colec-cin, buscando en depsitos y recolectando piezas de otras instituciones para llenar el espacio recientemente creado. Esta labor no siempre se realiza con coherencia, dando lugar a colecciones heterogneas, inconexas, sin relacin alguna entre las piezas. En estos casos es difcil establecer la misin del museo ya que su origen est basado en la restauracin del edificio con el fin de recuperar o promocionar una zona espec-fica. El contenido del museo y

    su rol en el campo patrimonial, investigativo o educativo no se ha tenido en cuenta en el origen del proyecto.

    Adicionalmente, en estas instituciones, la relacin entre el edificio y la coleccin que albergan es inexistente y no se evidencia una conexin directa entre la historia del edificio y las piezas que all se exponen. Se convierte en un contenedor que debe ser restaurado y conser-vado pero que no tiene relacin con lo que contiene y exhibe. Esta es la razn por la cual exis-te un sin nmero de museos sin una misin especfica reflejada en su plan de trabajo, porque antes de ubicar la coleccin en sus salas, no hubo un plan-teamiento sobre su rol para el desarrollo del conocimiento, la investigacin y ocio en relacin con su patrimonio cultural en beneficio de la comunidad don-de se ubican y de los visitantes forneos.

    En ocasiones nace

    una confrontacin

    entre la misin

    y la restauracin

    y conservacin

    del edificio

    Algunos ejemplos de la concepcin de la misin del museo

    Cuando el nacimiento de un museo parte de una iniciati-va personal o de un colectivo reducido que deciden crear un espacio para albergar una coleccin determinada, siendo ellos mismos sus gestores y sin el respaldo de la administracin pblica o de empresas privadas, la sostenibilidad del museo corre peligro.

    Este es el caso del museo loca-lizado en el Jardn Botnico de Saint Vincent, localizado en un edificio victoriano, que exhiba piezas pre-colombinas pertene-cientes a su dueo y coleccio-nista. Al fallecer el propietario, el museo cerr sus puestas y la coleccin fue objeto del pillaje y del robo.

    No siempre este tipo de iniciati-vas sufre el mismo destino. Este el caso del Museo de la Minera del Pas Vasco localizado en Gallarta (Espaa), pequeo mu-nicipio con una larga tradicin en la industria minera, rodeada de paisajes, edificios e instala-ciones industriales que evocan su historia ms reciente.

    Los jubilados de las empre-sas de explotacin minera de la zona decidieron crear una asociacin con el fin de recupe-rar y preservar la maquinaria, herramientas y documentos asociados a este sector. Estos bienes componen hoy en da la coleccin del museo creada gra-cias al valor reconocido por las autoridades locales, entre otros factores. A esto se sum el inte-rs de la poblacin, que evalu como muy positiva la creacin del museo para la recuperacin de la historia y la identidad de la zona, as como el impacto en el desarrollo turstico. Gracias

    a todos los apoyos recibidos, la coleccin fue ubicada en uno de los edificios relacionados con la industria minera, restaurado para el propsito y se redact, con ayuda de expertos, un plan de trabajo sobre la misin, ob-jetivos y directrices de la nueva institucin musestica.

    En este caso, la misin del museo fue concertada entre las autoridades y la colectividad, a travs de la asociacin, y en consulta con expertos cultura-les que tomaron los objetivos y deseos de la comunidad como punto de partida para la restau-racin del edificio y la creacin del museo.

    En otras ocasiones el edificio, la coleccin y el inters de la comunidad y de las autorida-des convergen para lograr la concepcin de un nuevo museo. Es el caso del Museo Lalique en Wingen-sur-Moder (Francia).

    El museo se encuentra en una localidad donde durante los siglos XVIII y XIX oper

    la empresa de produccin de vidrio Hochberg, clasificada desde 1996 como monumento histrico. La coleccin de joyas Lalique se encuentra esparcida por el mundo, as que el museo concentra su coleccin en las joyas que fueron producidas por Lalique en la localidad de Wingen-sur-Moder.

    Este proyecto cont con un excelente plan de financiacin acordado por polticos, comuni-dad local, especialistas de cultu-ra y administradores de museos que posean piezas fabricadas por Lalique.

    Se lanz una convocatoria internacional para seleccionar al arquitecto que asumira la restauracin de las instalaciones y se llev a cabo una extensa investigacin sobre la historia del lugar, lo cual ayud a recupe-rar importantes elementos de la identidad cultural de la comuni-dad local. Hoy en da, es un lugar de orgullo para los residentes y una visita obligada para los turistas que se acercan a la zona.

    Conclusiones Se puede afirmar que no existe una frmula precisa para definir la misin de un museo, sin em-bargo, se deben tener en cuenta los siguientes elementos:

    - Participacin de la comuni-dad local en los procesos de decisin, creacin y desarrollo, para detectar sus necesidades e intereses, con el fin de que la inversin realizada en la restauracin y posterior uso cultural contribuya directa-mente al desarrollo de esta poblacin local.- Apoyo de las autoridades y/o entidades privadas para gar-antizar su sostenibilidad.- Establecimiento de alianzas con otras instituciones cul-turales.- Planificacin de un proyecto de conservacin, un programa de actividades a largo plazo y un programa de prevencin de riesgos que aseguren su sostenibilidad.- Contribucin a sus objetivos como museo: educacin, in-vestigacin y ocio.- Planificacin o existencia de la coleccin antes de crear el museo.- Concepcin del edificio his-trico como elemento tangible que forma parte de la colec-cin o como contenedor de los fondos museogrficos

    Muse Lalique P.O. Deschamps

  • 10 11Arthur Reginald Murphy y Kevin Farmer La misin del museoC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    La misin del museoEn ocasiones nace una con-frontacin entre la misin y la restauracin y conservacin del edificio, principalmente porque normalmente la idea de ubicar un museo en un edificio histrico responde a sus necesi-dades de restauracin. De esta manera, el edificio es la priori-dad y acaba convirtindose en el elemento ms costoso de la coleccin.

    Edificios restaurados ubicados en los centros urbanos son seleccionados por la adminis-tracin pblica y los inversores privados para ser reutilizados como centros culturales o museos. Gracias a sus carac-tersticas monumentales y su privilegiada localizacin, pueden atraer turistas y favo-recer la recuperacin de zonas degradadas que, al contar con instituciones culturales, sociales y de salud, mejoren el vecinda-rio y se conviertan en vectores de desarrollo. Con frecuencia y cada vez ms a menudo, se con-voca a arquitectos reconocidos para asegurar la restauracin de estos edificios.

    Paralelamente a los trabajos de restauracin, se inicia al proceso de formar la colec-cin, buscando en depsitos y recolectando piezas de otras instituciones para llenar el espacio recientemente creado. Esta labor no siempre se realiza con coherencia, dando lugar a colecciones heterogneas, inconexas, sin relacin alguna entre las piezas. En estos casos es difcil establecer la misin del museo ya que su origen est basado en la restauracin del edificio con el fin de recuperar o promocionar una zona espec-fica. El contenido del museo y

    su rol en el campo patrimonial, investigativo o educativo no se ha tenido en cuenta en el origen del proyecto.

    Adicionalmente, en estas instituciones, la relacin entre el edificio y la coleccin que albergan es inexistente y no se evidencia una conexin directa entre la historia del edificio y las piezas que all se exponen. Se convierte en un contenedor que debe ser restaurado y conser-vado pero que no tiene relacin con lo que contiene y exhibe. Esta es la razn por la cual exis-te un sin nmero de museos sin una misin especfica reflejada en su plan de trabajo, porque antes de ubicar la coleccin en sus salas, no hubo un plan-teamiento sobre su rol para el desarrollo del conocimiento, la investigacin y ocio en relacin con su patrimonio cultural en beneficio de la comunidad don-de se ubican y de los visitantes forneos.

    En ocasiones nace

    una confrontacin

    entre la misin

    y la restauracin

    y conservacin

    del edificio

    Algunos ejemplos de la concepcin de la misin del museo

    Cuando el nacimiento de un museo parte de una iniciati-va personal o de un colectivo reducido que deciden crear un espacio para albergar una coleccin determinada, siendo ellos mismos sus gestores y sin el respaldo de la administracin pblica o de empresas privadas, la sostenibilidad del museo corre peligro.

    Este es el caso del museo loca-lizado en el Jardn Botnico de Saint Vincent, localizado en un edificio victoriano, que exhiba piezas pre-colombinas pertene-cientes a su dueo y coleccio-nista. Al fallecer el propietario, el museo cerr sus puestas y la coleccin fue objeto del pillaje y del robo.

    No siempre este tipo de iniciati-vas sufre el mismo destino. Este el caso del Museo de la Minera del Pas Vasco localizado en Gallarta (Espaa), pequeo mu-nicipio con una larga tradicin en la industria minera, rodeada de paisajes, edificios e instala-ciones industriales que evocan su historia ms reciente.

    Los jubilados de las empre-sas de explotacin minera de la zona decidieron crear una asociacin con el fin de recupe-rar y preservar la maquinaria, herramientas y documentos asociados a este sector. Estos bienes componen hoy en da la coleccin del museo creada gra-cias al valor reconocido por las autoridades locales, entre otros factores. A esto se sum el inte-rs de la poblacin, que evalu como muy positiva la creacin del museo para la recuperacin de la historia y la identidad de la zona, as como el impacto en el desarrollo turstico. Gracias

    a todos los apoyos recibidos, la coleccin fue ubicada en uno de los edificios relacionados con la industria minera, restaurado para el propsito y se redact, con ayuda de expertos, un plan de trabajo sobre la misin, ob-jetivos y directrices de la nueva institucin musestica.

    En este caso, la misin del museo fue concertada entre las autoridades y la colectividad, a travs de la asociacin, y en consulta con expertos cultura-les que tomaron los objetivos y deseos de la comunidad como punto de partida para la restau-racin del edificio y la creacin del museo.

    En otras ocasiones el edificio, la coleccin y el inters de la comunidad y de las autorida-des convergen para lograr la concepcin de un nuevo museo. Es el caso del Museo Lalique en Wingen-sur-Moder (Francia).

    El museo se encuentra en una localidad donde durante los siglos XVIII y XIX oper

    la empresa de produccin de vidrio Hochberg, clasificada desde 1996 como monumento histrico. La coleccin de joyas Lalique se encuentra esparcida por el mundo, as que el museo concentra su coleccin en las joyas que fueron producidas por Lalique en la localidad de Wingen-sur-Moder.

    Este proyecto cont con un excelente plan de financiacin acordado por polticos, comuni-dad local, especialistas de cultu-ra y administradores de museos que posean piezas fabricadas por Lalique.

    Se lanz una convocatoria internacional para seleccionar al arquitecto que asumira la restauracin de las instalaciones y se llev a cabo una extensa investigacin sobre la historia del lugar, lo cual ayud a recupe-rar importantes elementos de la identidad cultural de la comuni-dad local. Hoy en da, es un lugar de orgullo para los residentes y una visita obligada para los turistas que se acercan a la zona.

    Conclusiones Se puede afirmar que no existe una frmula precisa para definir la misin de un museo, sin em-bargo, se deben tener en cuenta los siguientes elementos:

    - Participacin de la comuni-dad local en los procesos de decisin, creacin y desarrollo, para detectar sus necesidades e intereses, con el fin de que la inversin realizada en la restauracin y posterior uso cultural contribuya directa-mente al desarrollo de esta poblacin local.- Apoyo de las autoridades y/o entidades privadas para gar-antizar su sostenibilidad.- Establecimiento de alianzas con otras instituciones cul-turales.- Planificacin de un proyecto de conservacin, un programa de actividades a largo plazo y un programa de prevencin de riesgos que aseguren su sostenibilidad.- Contribucin a sus objetivos como museo: educacin, in-vestigacin y ocio.- Planificacin o existencia de la coleccin antes de crear el museo.- Concepcin del edificio his-trico como elemento tangible que forma parte de la colec-cin o como contenedor de los fondos museogrficos

    Muse Lalique P.O. Deschamps

  • 13Cecilia Hugony y Jason Ramsay La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturalesC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    IntroduccinLa segunda de las sesiones de trabajo se centr en la restauracin, rehabilitacin y adaptacin de edificios histricos antiguos para su nuevo uso museolgico, partiendo de una preexistencia arquitectnica que contendr o ya contiene una coleccin, realidades ambas a preservar y conservar.

    En ese sentido, la concepcin de un museo genera demandas propias que habr que satisfacer para que la institucin pueda asumir sus funciones de colec-cionismo, conservacin, investigacin, exhibicin y educacin.

    Para ello, habr que tener en cuenta qu zonas del edificio pueden ser modificadas para contribuir de manera eficiente a la misin, qu debera hacerse con las reas del edificio que no pueden ser alteradas o cmo puede el valor arquitectnico e histrico de un edificio contribuir a lograr la misin de un museo.

    La moderadora de la sesin fue Cecilia Hugony pro-fesional del Laboratorio Goppion (Italia), mientras que el experto Jason Ramsay, del Museum of History and Ethnography de Jamaica, fue el encargado de la relatora del debate.

    Distribucin de los espacios En un museo siempre deben privilegiarse las salas expositi-vas permanentes y temporales, los depsitos de la coleccin y los accesos para garantizar un adecuado movimiento del pblico.

    Ninguno de estos requerimien-tos constituye un inconveniente en s mismo, ya que un arqui-tecto creativo y que mantenga buena comunicacin con los musegrafos, encuentra solu-ciones adecuadas para poner en valor la coleccin y el edificio sin que tenga que intervenir de modo agresivo.

    La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturales

    Cecilia HugonyMarketing manager del Laboratorio Goppion (Italia)

    Jason RamsayConservador en Museums of History and Ethnography (Jamaica)

    Preservacin de la coleccinUn conjunto de demandas vinculadas a la conservacin preventiva de las colecciones; igualmente importantes pero ms rgidas en su solucin y que requieren mayores niveles de conciliacin entre arquitectos, restauradores y musegrafos, son las siguientes:

    Condiciones climticas.La mayora de las piezas de una coleccin tienen exigencias de conservacin muy especficas en cuanto a humedad relativa y temperatura. Ello supone la instalacin de equipos que suelen ser muy costosos, a los que se suman los gastos ener-gticos y de mantenimiento que requieren. Es objeto de debate actualmente en Europa cuando se alude a la sostenibilidad.

    Capacidad de carga del suelo. El peso que suman los ele-mentos expositivos (vitrinas, peanas, etc.), junto con las piezas mismas de la coleccin, as como el flujo abundante de pblico, pueden rebasar la capacidad de carga de suelos y paredes. Se crea entonces la necesidad de erigir refuerzos estructurales que, en cierto sentido, implican una interven-cin fuerte para el inmueble. Este fue el caso del Museo de Historia Natural e Burdeos1 (Francia), donde lo arquitectos rechazaron la idea de interve-nir en la estructura original, teniendo que buscar soluciones alternativas al pesado montaje museogrfico.

    Condiciones de iluminacin. Muchos elementos de las colec-ciones requieren poca ilumina-cin para su conservacin, sin embargo entra en contradiccin con las necesidades de ilumina-cin del espacio en general, las grandes ventanas que poseen los edificios histricos y la apre-ciacin de las piezas por parte del pblico.

    A esto se suman cuestiones estticas y de eficiencia energ-tica. As ocurri en el proyecto reciente del arquitecto francs Jean Nouvel para el Instituto del Mundo rabe en Pars2, con-cebido con grandes ventanales y una bellsima perspectiva sobre la ciudad, pero que requiri de acciones concretas para la con-servacin de las piezas expues-tas a la luz solar.

    Instalaciones de control de fuego, el cual junto al agua, es una de las principales fuentes de peligro. La infraestructu-ra necesaria tiene un fuerte impacto sobre la estructura arquitectnica.

    En el mes de mayo de 2011, tuvo lu-gar en Pars una reunin de expertos bajo el lema Museos y Desarrollo Sostenible, que gir en torno a la disyuntiva de apostar por interven-ciones arquitectnicas que privile-gien la conservacin y exhibicin de las colecciones o por intervenciones ms discretas y especficas, centra-das en la preservacin del edificio y a su vez en la proteccin de las piezas.

    D E B A T E I I

    Sin embargo, a menudo los edificios histricos poseen grandes

    ventanas que dificultan la iluminacin del espacio en general y

    la apreciacin de las piezas por parte del pblico

    Estudios de iluminacin del antiguo centro Asturiano, actual Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares. Museo Nacional de Bellas Artes

    Museo Nacional de Bellas Artes

  • 13Cecilia Hugony y Jason Ramsay La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturalesC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    IntroduccinLa segunda de las sesiones de trabajo se centr en la restauracin, rehabilitacin y adaptacin de edificios histricos antiguos para su nuevo uso museolgico, partiendo de una preexistencia arquitectnica que contendr o ya contiene una coleccin, realidades ambas a preservar y conservar.

    En ese sentido, la concepcin de un museo genera demandas propias que habr que satisfacer para que la institucin pueda asumir sus funciones de colec-cionismo, conservacin, investigacin, exhibicin y educacin.

    Para ello, habr que tener en cuenta qu zonas del edificio pueden ser modificadas para contribuir de manera eficiente a la misin, qu debera hacerse con las reas del edificio que no pueden ser alteradas o cmo puede el valor arquitectnico e histrico de un edificio contribuir a lograr la misin de un museo.

    La moderadora de la sesin fue Cecilia Hugony pro-fesional del Laboratorio Goppion (Italia), mientras que el experto Jason Ramsay, del Museum of History and Ethnography de Jamaica, fue el encargado de la relatora del debate.

    Distribucin de los espacios En un museo siempre deben privilegiarse las salas expositi-vas permanentes y temporales, los depsitos de la coleccin y los accesos para garantizar un adecuado movimiento del pblico.

    Ninguno de estos requerimien-tos constituye un inconveniente en s mismo, ya que un arqui-tecto creativo y que mantenga buena comunicacin con los musegrafos, encuentra solu-ciones adecuadas para poner en valor la coleccin y el edificio sin que tenga que intervenir de modo agresivo.

    La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturales

    Cecilia HugonyMarketing manager del Laboratorio Goppion (Italia)

    Jason RamsayConservador en Museums of History and Ethnography (Jamaica)

    Preservacin de la coleccinUn conjunto de demandas vinculadas a la conservacin preventiva de las colecciones; igualmente importantes pero ms rgidas en su solucin y que requieren mayores niveles de conciliacin entre arquitectos, restauradores y musegrafos, son las siguientes:

    Condiciones climticas.La mayora de las piezas de una coleccin tienen exigencias de conservacin muy especficas en cuanto a humedad relativa y temperatura. Ello supone la instalacin de equipos que suelen ser muy costosos, a los que se suman los gastos ener-gticos y de mantenimiento que requieren. Es objeto de debate actualmente en Europa cuando se alude a la sostenibilidad.

    Capacidad de carga del suelo. El peso que suman los ele-mentos expositivos (vitrinas, peanas, etc.), junto con las piezas mismas de la coleccin, as como el flujo abundante de pblico, pueden rebasar la capacidad de carga de suelos y paredes. Se crea entonces la necesidad de erigir refuerzos estructurales que, en cierto sentido, implican una interven-cin fuerte para el inmueble. Este fue el caso del Museo de Historia Natural e Burdeos1 (Francia), donde lo arquitectos rechazaron la idea de interve-nir en la estructura original, teniendo que buscar soluciones alternativas al pesado montaje museogrfico.

    Condiciones de iluminacin. Muchos elementos de las colec-ciones requieren poca ilumina-cin para su conservacin, sin embargo entra en contradiccin con las necesidades de ilumina-cin del espacio en general, las grandes ventanas que poseen los edificios histricos y la apre-ciacin de las piezas por parte del pblico.

    A esto se suman cuestiones estticas y de eficiencia energ-tica. As ocurri en el proyecto reciente del arquitecto francs Jean Nouvel para el Instituto del Mundo rabe en Pars2, con-cebido con grandes ventanales y una bellsima perspectiva sobre la ciudad, pero que requiri de acciones concretas para la con-servacin de las piezas expues-tas a la luz solar.

    Instalaciones de control de fuego, el cual junto al agua, es una de las principales fuentes de peligro. La infraestructu-ra necesaria tiene un fuerte impacto sobre la estructura arquitectnica.

    En el mes de mayo de 2011, tuvo lu-gar en Pars una reunin de expertos bajo el lema Museos y Desarrollo Sostenible, que gir en torno a la disyuntiva de apostar por interven-ciones arquitectnicas que privile-gien la conservacin y exhibicin de las colecciones o por intervenciones ms discretas y especficas, centra-das en la preservacin del edificio y a su vez en la proteccin de las piezas.

    D E B A T E I I

    Sin embargo, a menudo los edificios histricos poseen grandes

    ventanas que dificultan la iluminacin del espacio en general y

    la apreciacin de las piezas por parte del pblico

    Estudios de iluminacin del antiguo centro Asturiano, actual Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares. Museo Nacional de Bellas Artes

    Museo Nacional de Bellas Artes

  • 14 15Cecilia Hugony y Jason Ramsay La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturalesC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Para tomar este tipo de de-cisiones, desde el inicio del proyecto, debera plantearse la restauracin del edificio en pa-ralelo a su adaptacin a museo, visualizndose la coleccin o teniendo alguna idea precisa de su naturaleza y volumen para poder actuar sobre ella.

    La Direccin General de Museos de Francia, a partir de todos los debates surgidos alrededor de dicha cuestin, tom la decisin de flexibilizar los requerimientos fijados para la concepcin de un museo, en asuntos tales como el manejo de las condiciones de clima, ilumi-nacin y seguridad. Ello no im-plica que no se tomen medidas puntuales para la proteccin de las piezas, sino que se ejecuten intervenciones ms especiali-zadas de conservacin de las colecciones, menos agresivas para los edificios histricos.

    Normativa sobre preservacin del patrimonio. Los casos de Cuba y Costa Rica. En el caso de Cuba, el grado de las intervenciones depende bsicamente de la importancia histrica del edificio, sus valo-res arquitectnicos y su estado de conservacin.

    El arquitecto cubano Jos Linares pun-tualiz que, en su opinin, cualquier restauracin

    y adaptacin arquitectnica implica cierta intervencin. Cualquier operacin de readap-tacin de un edificio histrico a museo tiene que constituir un ejercicio de conciliacin entre los requerimientos del edificio, la coleccin y el pblico, siendo los resultados ideales casi impo-sibles. Consider, no obstante, muy alentadoras las soluciones que ofrecen las nuevas tecnolo-gas y los caminos que se abren a la experimentacin.

    Kevin Farmer, subdirector de Barbados Museum & Historical Society3, coment a propsito que la arquitectura tradicional a veces sola ser ms resistente a todas estas amenazas que los edi-ficios de reciente construccin y que ello poda constituir tambin una fuente de aprendizaje.

    Puntualiz que la institucin cultural que dirige tiene un plan de emergencia contra desastres naturales que incluye desde la identificacin de las vulnera-bilidades del edificio (reas de posibles inundaciones, ventanas y puertas en mal estado) pasan-do por un plan de evacuacin de la coleccin, trabajadores y pblico, hasta un mtodo de mi-tigacin y recuperacin. Enfatiz que la prioridad nmero uno siempre debe ser la proteccin de las personas.

    Ana Cristina Perera, Vicepre-sidenta de Museos del Consejo Nacional de Patrimonio de Cuba, se refiri a los planes contra desastres naturales que cada

    institucin musestica cubana posee, de acuerdo a lo establecido por los rganos de la Defensa Civil en cada territorio. Estos planes incluyen la evacua-cin y proteccin de las coleccio-nes atendiendo a su categoriza-cin. An siendo la cultura una prioridad para el gobierno cuba-no, la situacin del pas conlleva que los recursos no son suficien-tes para afrontar las condiciones de climatizacin y proteccin lumnicas requeridas en la gran cantidad de museos existentes en la isla. Para contrarrestar esa si-tuacin, los especialistas cubanos acuden a mtodos muy tradicio-nales de limpieza, fumigacin y proteccin de las colecciones y de los edificios histricos que alber-gan museos, en la mayora de los casos con resultados positivos.

    Sin embargo, y aun salvando las circunstancias, la situacin en Europa tambin es cada vez ms complicada en relacin con los recursos financieros para aco-meter intervenciones adecuadas de restauracin y conservacin

    Por su parte, Georgina De-Carli, directora del ILAM, explic que en Costa Rica exis-

    te una normativa muy rgida de proteccin de edificios patrimo-niales, debido a anteriores perio-dos en los que se actuaba bajo la ausencia de un marco legal.

    Adems, apunt que el problema no es solo la defensa y el rescate de los edificios pblicos patrimo-niales, sino tambin de los priva-dos, cuyos dueos privilegian los intereses econmicos en detri-mento de su valor patrimonial.

    Prevencin de riesgosUn tema de crucial importancia es la prevencin de riesgos que afectan a la regin de Amrica Latina y el Caribe, huracanes, ciclones y movimientos ss-micos, teniendo en cuenta la situacin que comportan los edificios histricos restaurados devenidos en museos.

    (...) desde el inicio del proyecto, debera plantearse la restauracin del edificio en paralelo a su adaptacin a museo, visualizndose la coleccin o teniendo alguna idea precisa de su naturaleza y volumen para poder actuar sobre ella

    Notas1http://www.bordeaux.fr

    2http://www.imarabe.org

    3http://www.barbmuse.org.bb

    Manual de Proteccin del Patrimonio Cultural, n 1. La seguridad en los museos. UNESCO, Pars, 2006 UNESCO

    Manual de Proteccin del Patrimonio Cultural, n 4. Gestin de los riesgos de catstrofe para los museos. UNESCO, Pars, 2008. UNESCO

    Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares.

    Estudios de espacios del antiguo centro Asturiano, actual Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares.

  • 14 15Cecilia Hugony y Jason Ramsay La adaptabilidad de edificios histricos a usos culturalesC U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Para tomar este tipo de de-cisiones, desde el inicio del proyecto, debera plantearse la restauracin del edificio en pa-ralelo a su adaptacin a museo, visualizndose la coleccin o teniendo alguna idea precisa de su naturaleza y volumen para poder actuar sobre ella.

    La Direccin General de Museos de Francia, a partir de todos los debates surgidos alrededor de dicha cuestin, tom la decisin de flexibilizar los requerimientos fijados para la concepcin de un museo, en asuntos tales como el manejo de las condiciones de clima, ilumi-nacin y seguridad. Ello no im-plica que no se tomen medidas puntuales para la proteccin de las piezas, sino que se ejecuten intervenciones ms especiali-zadas de conservacin de las colecciones, menos agresivas para los edificios histricos.

    Normativa sobre preservacin del patrimonio. Los casos de Cuba y Costa Rica. En el caso de Cuba, el grado de las intervenciones depende bsicamente de la importancia histrica del edificio, sus valo-res arquitectnicos y su estado de conservacin.

    El arquitecto cubano Jos Linares pun-tualiz que, en su opinin, cualquier restauracin

    y adaptacin arquitectnica implica cierta intervencin. Cualquier operacin de readap-tacin de un edificio histrico a museo tiene que constituir un ejercicio de conciliacin entre los requerimientos del edificio, la coleccin y el pblico, siendo los resultados ideales casi impo-sibles. Consider, no obstante, muy alentadoras las soluciones que ofrecen las nuevas tecnolo-gas y los caminos que se abren a la experimentacin.

    Kevin Farmer, subdirector de Barbados Museum & Historical Society3, coment a propsito que la arquitectura tradicional a veces sola ser ms resistente a todas estas amenazas que los edi-ficios de reciente construccin y que ello poda constituir tambin una fuente de aprendizaje.

    Puntualiz que la institucin cultural que dirige tiene un plan de emergencia contra desastres naturales que incluye desde la identificacin de las vulnera-bilidades del edificio (reas de posibles inundaciones, ventanas y puertas en mal estado) pasan-do por un plan de evacuacin de la coleccin, trabajadores y pblico, hasta un mtodo de mi-tigacin y recuperacin. Enfatiz que la prioridad nmero uno siempre debe ser la proteccin de las personas.

    Ana Cristina Perera, Vicepre-sidenta de Museos del Consejo Nacional de Patrimonio de Cuba, se refiri a los planes contra desastres naturales que cada

    institucin musestica cubana posee, de acuerdo a lo establecido por los rganos de la Defensa Civil en cada territorio. Estos planes incluyen la evacua-cin y proteccin de las coleccio-nes atendiendo a su categoriza-cin. An siendo la cultura una prioridad para el gobierno cuba-no, la situacin del pas conlleva que los recursos no son suficien-tes para afrontar las condiciones de climatizacin y proteccin lumnicas requeridas en la gran cantidad de museos existentes en la isla. Para contrarrestar esa si-tuacin, los especialistas cubanos acuden a mtodos muy tradicio-nales de limpieza, fumigacin y proteccin de las colecciones y de los edificios histricos que alber-gan museos, en la mayora de los casos con resultados positivos.

    Sin embargo, y aun salvando las circunstancias, la situacin en Europa tambin es cada vez ms complicada en relacin con los recursos financieros para aco-meter intervenciones adecuadas de restauracin y conservacin

    Por su parte, Georgina De-Carli, directora del ILAM, explic que en Costa Rica exis-

    te una normativa muy rgida de proteccin de edificios patrimo-niales, debido a anteriores perio-dos en los que se actuaba bajo la ausencia de un marco legal.

    Adems, apunt que el problema no es solo la defensa y el rescate de los edificios pblicos patrimo-niales, sino tambin de los priva-dos, cuyos dueos privilegian los intereses econmicos en detri-mento de su valor patrimonial.

    Prevencin de riesgosUn tema de crucial importancia es la prevencin de riesgos que afectan a la regin de Amrica Latina y el Caribe, huracanes, ciclones y movimientos ss-micos, teniendo en cuenta la situacin que comportan los edificios histricos restaurados devenidos en museos.

    (...) desde el inicio del proyecto, debera plantearse la restauracin del edificio en paralelo a su adaptacin a museo, visualizndose la coleccin o teniendo alguna idea precisa de su naturaleza y volumen para poder actuar sobre ella

    Notas1http://www.bordeaux.fr

    2http://www.imarabe.org

    3http://www.barbmuse.org.bb

    Manual de Proteccin del Patrimonio Cultural, n 1. La seguridad en los museos. UNESCO, Pars, 2006 UNESCO

    Manual de Proteccin del Patrimonio Cultural, n 4. Gestin de los riesgos de catstrofe para los museos. UNESCO, Pars, 2008. UNESCO

    Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares.

    Estudios de espacios del antiguo centro Asturiano, actual Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes. La Habana (Cuba). Arquitecto Jos Linares.

  • 17Georgina DeCarli y Luckner Christophe Museo, centro cultural o ambos?C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Museo, centro cultural o ambos?

    Georgina DeCarliDirectora del Instituto Latinoamericano de Museos y Parques, ILAM (Costa Rica)

    Introduccin Qu significa coleccin? Si no se expone una coleccin fsica, significa esto que ya no es un museo y debera ser centro cultural? Puede un centro cultural incluir un museo? Es el conteni-do apropiado para comunicar el valor histrico y arquitectnico del edificio? Deberan las exposi-ciones temporales y las actividades que no estn directamente relacionadas con la coleccin del museo tener lugar si no contribuyen a la misin del museo? Deberan programarse si no contri-buyen a ello?

    Estas y otras cuestiones fueron abordadas durante esta sesin de trabajo moderada por Georgina DeCarli, Presidenta del Instituto Latinoamericano de Museos (ILAM, Costa Rica) mientras que el

    experto haitiano Luckner Christophe, del Muse du Panthon National Hatien, fue el encargado de la redaccin de la relatora.

    La Fundacin ILAM (Instituto Latinoamericano de Museos y Parques), dirigida en la actualidad por Georgina DeCarli, es una organizacin no guberna-mental establecida en Costa Rica desde 1997.

    Su funcin es la de dar apoyo a las instituciones museolgicas de Amrica Latina y el Caribe por medio de la difusin de su trabajo (Directorio Lati-noamericano de Museos y Parques), la capacitacin de su personal (talleres presenciales y virtuales), el acceso a documentacin especializada y el desarro-llo de investigaciones, proyectos y asesoras.

    En la definicin de museo anterior al ao 2007 se hablaba de evidencia material no de patrimo-nio material e inmaterial de la humanidad. Esta incorporacin ampla la concepcin de colec-cin a patrimonio, la institucin cultural deja de girar en torno a la coleccin para dar paso al patrimonio.

    Este avance repercute en la concepcin misma de la institucin cultural, donde el inmueble, la coleccin o la ausencia de la misma, el progra-ma de actividades y las investigaciones sobre el contenido expuesto adquieren tanta importan-cia como antes poda tener la misma coleccin, desde la visin ms tradicional de museo.

    Los contenidos del museoEl fin de un museo es poner en valor el patrimonio material, cultural y natural, e inmaterial de la humanidad. Para lograr este objetivo el museo trabaja en torno a varias funciones: preservacin, investigacin y comunicacin.

    A travs de la preservacin se asegura la conservacin de las colecciones, la investigacin est en relacin a la curadura de las mismas y la comuni-cacin implica la difusin del contenido y las actividades dirigidas al pblico.

    En la actualidad, el uso de internet y las redes sociales (Fa-cebook, Twitter, etc.) adquiere especial relevancia a la hora de comunicar e informar sobre

    COLECCIN VS. PATRIMONIO

    La definicin de museo ha ido evolucionado a lo largo del tiempo. Hoy, conforme a los

    estatutos del ICOM adoptados durante la 22 Conferencia general de Viena (Austria)

    en 2007 un museo es una institucin permanente, sin fines de lucro, al servicio de la

    sociedad y abierta al pblico, que adquiere, conserva, estudia, expone y difunde el patri-

    monio material e inmaterial de la humanidad con fines de estudio, educacin y recreo.

    Centro Cultural Eduardo Len Jimenes

    Luckner ChristopheResponsable de educacin y animacin cultural del Museo del Panten Nacional, MUPANAH (Hait)

    D E B A T E I I I

  • 17Georgina DeCarli y Luckner Christophe Museo, centro cultural o ambos?C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    Museo, centro cultural o ambos?

    Georgina DeCarliDirectora del Instituto Latinoamericano de Museos y Parques, ILAM (Costa Rica)

    Introduccin Qu significa coleccin? Si no se expone una coleccin fsica, significa esto que ya no es un museo y debera ser centro cultural? Puede un centro cultural incluir un museo? Es el conteni-do apropiado para comunicar el valor histrico y arquitectnico del edificio? Deberan las exposi-ciones temporales y las actividades que no estn directamente relacionadas con la coleccin del museo tener lugar si no contribuyen a la misin del museo? Deberan programarse si no contri-buyen a ello?

    Estas y otras cuestiones fueron abordadas durante esta sesin de trabajo moderada por Georgina DeCarli, Presidenta del Instituto Latinoamericano de Museos (ILAM, Costa Rica) mientras que el

    experto haitiano Luckner Christophe, del Muse du Panthon National Hatien, fue el encargado de la redaccin de la relatora.

    La Fundacin ILAM (Instituto Latinoamericano de Museos y Parques), dirigida en la actualidad por Georgina DeCarli, es una organizacin no guberna-mental establecida en Costa Rica desde 1997.

    Su funcin es la de dar apoyo a las instituciones museolgicas de Amrica Latina y el Caribe por medio de la difusin de su trabajo (Directorio Lati-noamericano de Museos y Parques), la capacitacin de su personal (talleres presenciales y virtuales), el acceso a documentacin especializada y el desarro-llo de investigaciones, proyectos y asesoras.

    En la definicin de museo anterior al ao 2007 se hablaba de evidencia material no de patrimo-nio material e inmaterial de la humanidad. Esta incorporacin ampla la concepcin de colec-cin a patrimonio, la institucin cultural deja de girar en torno a la coleccin para dar paso al patrimonio.

    Este avance repercute en la concepcin misma de la institucin cultural, donde el inmueble, la coleccin o la ausencia de la misma, el progra-ma de actividades y las investigaciones sobre el contenido expuesto adquieren tanta importan-cia como antes poda tener la misma coleccin, desde la visin ms tradicional de museo.

    Los contenidos del museoEl fin de un museo es poner en valor el patrimonio material, cultural y natural, e inmaterial de la humanidad. Para lograr este objetivo el museo trabaja en torno a varias funciones: preservacin, investigacin y comunicacin.

    A travs de la preservacin se asegura la conservacin de las colecciones, la investigacin est en relacin a la curadura de las mismas y la comuni-cacin implica la difusin del contenido y las actividades dirigidas al pblico.

    En la actualidad, el uso de internet y las redes sociales (Fa-cebook, Twitter, etc.) adquiere especial relevancia a la hora de comunicar e informar sobre

    COLECCIN VS. PATRIMONIO

    La definicin de museo ha ido evolucionado a lo largo del tiempo. Hoy, conforme a los

    estatutos del ICOM adoptados durante la 22 Conferencia general de Viena (Austria)

    en 2007 un museo es una institucin permanente, sin fines de lucro, al servicio de la

    sociedad y abierta al pblico, que adquiere, conserva, estudia, expone y difunde el patri-

    monio material e inmaterial de la humanidad con fines de estudio, educacin y recreo.

    Centro Cultural Eduardo Len Jimenes

    Luckner ChristopheResponsable de educacin y animacin cultural del Museo del Panten Nacional, MUPANAH (Hait)

    D E B A T E I I I

  • 18 19Georgina DeCarli y Luckner Christophe Museo, centro cultural o ambos?C U L T U R A Y D E S S A R R O L L O N O 8 A O 2 0 1 2

    las exposiciones y el programa cultural a los usuarios habi-tuales y potenciales del museo. En el caso de Cuba el acceso a este tipo de plataformas de informacin no tiene carcter mayoritario. La coleccin, an siendo importante, no hace vivo al museo, es la gestin de las funciones de las que est dotada la institucin cultural la que lo hace dinmico y activo.

    Los contenidos del centro culturalEl objetivo de un centro cultural es promover los valores cultu-rales entre los miembros de la comunidad donde se localiza. Se estructura en torno a es-pacios amplios donde tienen lugar diferentes manifestacio-nes culturales que enriquecen y animan la vida cultural de la poblacin local.

    Atendiendo a la estructura pue-den diferenciarse los siguientes tipos:

    -Centro Cultural (universi-tario o de un pas).Son edificios amplios que cuen-tan, en general, con un audi-torio con escenario para teatro o cine, biblioteca y videoteca, sala de ordenadores, salones para actividades acadmicas o talleres, laboratorio de idiomas, galeras y, a veces, memorial o exposicin permanente.

    -Centro Cultural Comunita-rio o Casa de Cultura.Son espacios ms modestos, ubicados normalmente en edificios pblicos. Cuentan con biblioteca, rea para talleres y pequeas presentaciones cul-turales y sala para exposiciones temporales. Son de gran impor-tancia para la comunidad, sobre todo en zonas rurales, por ser el nico espacio para promover actividades culturales.

    Museo o centro cultural?Tantos los museos como los centros culturales son institu-ciones culturales de carcter permanente, sin nimo de lucro, abiertas al pblico y al servicio de la sociedad y su desarrollo.

    El hecho de que un museo posea un programa de activida-des paralelo a las exposiciones permanentes y temporales, no lo convierte en un centro cultural. Contina siendo un museo pero vivo,