revista pediatria interior

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Revista Peruana de Pediatría Publicación Oficial de la Sociedad Peruana de Pediatría La Revista Peruana de Pediatría, publicación oficial de difusión científica de la Sociedad Peruana de Pediatría desde 1942, tiene como objetivo la publicación de la producción científica en el contexto pediátrico en todas las áreas, especialmente en trabajos de investigación con el fin de contribuir a mejorar la calidad de atención del paciente pediátrico en el país. Además propicia el intercambio de información con entidades similares en el país y en el extranjero, a fin de promover el avance y la aplicación de la investigación en salud. Los artículos son arbitrados por pares. Está prohibida la reproducción total o parcial de los artículos publicados en esta revista, solo se hara mediante autorización del Consejo Editorial. El contenido decada artículo es de responsabilidad exclusiva del autor o autores y no compromete la opinión de la revista. Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009 ISSN 1993-6826 FUNDADOR Dr. Carlos Krumdieck Evin DIRECTOR HONORARIO Dr. Manuel Ytahashi Córdova DIRECTOR Dr. Juan Francisco Rivera Medina Médico Pediatra-Gastroenterólogo del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN). Magíster en Nutrición Infantil. Docente de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos COMITÉ EDITORIAL Dr. Nilton Yhuri Carreazo Pariasca Pediatra del Hospital de Emergencias Pediátricas, Lima-Perú. Training Staff Oxford Centre for Evidence Based Medicine Dr. Javier Santisteban Ponce Médico Pediatra de la Unidad de Cuidados Intermedios Pediátricos Servicio de Clínica Pediátrica, Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, EsSalud, Lima- PerúDocente de la Universidad Peruana Cayetano Heredia Dr. Felipe Ricardo Lindo PérezMédico Pediatra del Instituto Nacional de Salud del Niño Jefe de la Unidad de Diseño de Proyectos de Investigación - INSNDocente de la Universidad San Martin de Porras COMITÉ HONORARIO Dr. Melitón Arce Rodríguez Dr. Alejandro Castro Franco Dr. Carlos Manuel Díaz Rodríguez Dra. Rosa Elvira Jiménez La Rosa Dra. Rebeca Kuniyoshi Kiyan Dr. Eduardo Balbín Luna Victoria Dr. Roberto Rivero Quiroz Dra. Lidia Hernández Barba

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Page 1: Revista pediatria interior

Revista Peruana de Pediatría Publicación Oficial de la Sociedad Peruana de Pediatría La Revista Peruana de Pediatría, publicación oficial de difusión científica de la Sociedad Peruana de Pediatría desde 1942, tiene como objetivo la publicación de la producción científica en el contexto pediátrico en todas las áreas, especialmente en trabajos de investigación con el fin de contribuir a mejorar la calidad de atención del paciente pediátrico en el país. Además propicia el intercambio de información con entidades similares en el país y en el extranjero, a fin de promover el avance y la aplicación de la investigación en salud. Los artículos son arbitrados por pares. Está prohibida la reproducción total o parcial de los artículos publicados en esta revista, solo se hara mediante autorización del Consejo Editorial. El contenido decada artículo es de responsabilidad exclusiva del autor o autores y no compromete la opinión de la revista.

Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009ISSN 1993-6826

FUNDADOR

Dr. Carlos Krumdieck Evin

DIRECTOR HONORARIO Dr. Manuel Ytahashi Córdova

DIRECTOR Dr. Juan Francisco Rivera Medina Médico Pediatra-Gastroenterólogo del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN). Magíster en Nutrición Infantil. Docente de la Universidad Peruana Cayetano Heredia y de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos

COMITÉ EDITORIAL Dr. Nilton Yhuri Carreazo Pariasca Pediatra del Hospital de Emergencias Pediátricas, Lima-Perú.Training Staff Oxford Centre for Evidence Based Medicine

Dr. Javier Santisteban Ponce Médico Pediatra de la Unidad de Cuidados Intermedios Pediátricos Servicio de Clínica Pediátrica, Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, EsSalud, Lima-PerúDocente de la Universidad Peruana Cayetano Heredia

Dr. Felipe Ricardo Lindo PérezMédico Pediatra del Instituto Nacional de Salud del Niño Jefe de la Unidad de Diseño de Proyectos de Investigación - INSNDocente de la Universidad San Martin de Porras

COMITÉ HONORARIO Dr. Melitón Arce RodríguezDr. Alejandro Castro FrancoDr. Carlos Manuel Díaz RodríguezDra. Rosa Elvira Jiménez La Rosa Dra. Rebeca Kuniyoshi KiyanDr. Eduardo Balbín Luna Victoria Dr. Roberto Rivero Quiroz Dra. Lidia Hernández Barba

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COMITÉ CONSULTIVO Dra. Nelly Valenzuela EspejoMedico Pediatra Nefrologa. Magister en Salud PublicaUniversidad Nacional Federico Villarreal

Dr. José Tantaleán Da Fieno Medico Pediatra Intensivista. INSN Magister en MedicinaUniversidad Nacional Federico Villarreal

Dra. Elsa Chea Woo Médico Pediatra. Magister en MedicinaUniversidad Nacional Cayetano Heredia

Dra. Angela Castillo VilelaMédico Pediatra. Magister en MedicinaHospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen

Dirección Los Geranios 151, Lince. Lima 14, Perú. Teléfono +51-1-4411570 Telefax +51 1 4226397

e-mail [email protected]

[email protected] Web http://www.pediatriaperu.org Distribución Gratuita a nivel nacional a través de correo Frecuencia Cuatrimestral, un volumen por añoTiraje 2000 Hecho el Depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú Nº 2007-01985Revista Indizada LIPECS-LILACS-LATINDEX-SCIELO PERÚ-SISBIB

Page 3: Revista pediatria interior

SOCIEDAD PERUANA DE PEDIATRÍA CARGOS DIRECTIVOS

JUNTA DIRECTIVA

Presidente Dr. Raúl Urquizo Aréstegui Vicepresidenta Dra. Carmen Maldonado Faveron Secretario General Dr. Ildauro Aguirre Sosa Secretaria de Actas Dra. Rosa Un Jan Liau Hing Tesorera Dra. Mónica Castañeda Lusich Secretaria de Acción Científica Dra. Wilda Silva Rojas Pro Secretarios de Acción Científica Dr. José Tantaleán Da Fieno Dr. Daniel Guillén Pinto Secretario de Publicaciones y BibliotecaVocales de Ética y Calificación Profesional Dr. Juan Rivera Medina Dra. Elsa Chea Woo Dra. Rosalía Ballona Chambergo Dr. Alindor Piña Pérez Secretario de Filiales Dr. José Wong Mayuri Past-Presidenta Dra. Zoila Zegarra Montes COORDINADORES DE CAPÍTULOS Capítulo de Alergia e Inmunología Dr. José Gereda Solari Capítulo de Cardiología Capítulo de Endocrinología Dra. María Lapoint MontesDr. Carlos del Águila Villar Capítulo de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Dr. Aldo Maruy Saito Capítulo de Infectología Dr. Francisco Campos Guevara Capítulo de Medicina del Adolescente Dr. Miguel Oliveros Donohue Capítulo de Neumología Dr. Francisco Mestanza Malaspina Capítulo de Neonatología Dr. Jorge Chirinos Rivera Capítulo de Neuropediatría Dr. Daniel Koc Gonzales Capítulo de Pediatría Ambulatoria Dra. Emma Obeso Ledesma Capítulo de Oncología Dra. Gloria Paredes Gutiérrez Capítulo de Terapia Intensiva Dra. Rosa Rojas Medina FILIALES

Juliaca Piura Tacna Tarapoto Trujillo Ucayali Arequipa Ayacucho Cajamarca Chiclayo Chimbote Cusco Huancayo Ica Iquitos

Dra. Liccely Aguilar Zuñiga Dr. Luis Albán Reyes Dra. Lourdes Lombardi Bacigalupo Dr. Víctor García Ramírez Dr. Segundo Cruz Bejarano Dra. Beatriz Luján Divizzia Dr. Nelson Rodríguez Velarde Dr. Pedro García Calderón

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Dr. Rubén Alvarado Revoredo Dr. José Ferrari Maurtua Dr. César Zanabria Armas Dr. Darío Escalante Guzmán Dr. Hipólito Cruz Cavero Dr. Otto Chuy Castro Dr. José Sánchez Arenas

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Revista Peruana de Pediatría

Publicación Oficial de la Sociedad Peruana de Pediatría

Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009 ISSN 1993-6826

CONTENIDO

EDITORIAL Pág.

TRAbAJOS ORIGINALES:

Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños. Trujillo-Perú Cecilia V. Romero Goicochea, Santiago Benites Castillo, Milciades Chávez Castillo 1

Dolor agudo neonatal con estímulos dolorosos repetitivos, estudio randomizado comparando tres métodos analgésicos no farmacológicos

Gustavo Rivara Dávila, Sonia Huaipar Rodríguez, Debbie Miyasato Higa, Cynthia Liu Bejarano, Diego Briceño Clemens, Andrea Bucher Oliva, Ximena de Noriega Madalengoitia, Sandra Viale Paez, Patrick Pendavis Heksner, Pamela García Corrochano Medina, Gabriela García Nores, Miguel Juárez Salcedo, Fiorella Iglesias Cárdenas, Carmen Medina Quiñones, Carlos Herrera Tipacti 8

Curva de referencia peruana de Índice ponderal neonatal para la edad gestacional

Manuel Ticona Rendón, Diana Huanco Apaza, Miguel Oliveros Donohue, Percy Pacora Portella 15

TEmAS DE REVISIóN

Solución salina hipertónica en el tratamiento de la enfermedad pulmonar en fibrosis quística Manuel Arteta 24

Adenopatías cervicales en niños

Gloria Paredes Guerra, Fernando Huerta Mesones, Jenny Gerónimo Meza, Mónica Oscanoa Gutiérrez,Ciro Liberato Ramón 28

CASO CLÍNICO

Síndrome Weaver: crecimiento postnatal acelerado con edad ósea avanzada Jorge Arturo Aviña Fierro, Daniel Alejandro Hernández Aviña. 33

Características clínicas de un adolescente con obesidad e inicio de debut de diabetes mellitus tipo 2 con cetoacidosis. Reporte

de un caso

Helard Manrique Hurtado, Pedro Aro Guardia, Carlos Calle Müller, Giancarlo Romero Rivas. 37

SALUD mENTAL: TRAbAJO ORIGINAL

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Estudio fenomenológico en 90 pacientes menores de 18 años con trastorno obsesivo compulsivo Roxana Vivar, Zoila Pacheco, Cecilia Adrianzen, Beatricce Macciotta, Giannina Moron. 41

ÉTICA

Ética y medicamentos Hugo Peña Camarena 48

CULTURAL

Pisco sour del Perú Carmen del Pilar Lazo Rivera 52

REGLAmENTO DE PUbLICACIóN

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Revista Peruana de Pediatría

Publicación Oficial de la Sociedad Peruana de Pediatría

Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009 ISSN 1993-6826 CONTENT EDITORIAL Pag. ORIGINAL ARTICLES Association between respiratory virus and asthma exacerbation in children. Trujillo-Perú Cecilia V. Romero Goicochea, Santiago Benites Castillo, Milciades Chávez Castillo 1 Neonatal acute pain with repeated painful stimuli, randomized trial comparing three analgesic non pharmacological methods Gustavo Rivara Dávila, Sonia Huaipar Rodriguez, Debbie Miyasato Higa, Cynthia Liu Bejarano, Diego Briceño Clemens, Andrea Bucher Oliva, Ximena de Noriega Madalengoitia, Sandra Viale Paez, Patrick Pendavis Heksner, Pamela García Corrochano Medina, Gabriela García Nores, Miguel Juárez Salcedo, Fiorella Iglesias Cárdenas, Carmen Medina Quiñones, Carlos Herrera Tipacti Peruvian neonatal ponderal index reference according to gestational age Manuel Ticona Rendón, Diana Huanco Apaza, Miguel Oliveros Donohue, Percy Pacora Portella 8 15 REVIEW ARTICLES Treatment of cystic fibrosis pulmonary disease with hypertonic saline solution Manuel Arteta Neck ´s adenopathies in children Gloria Paredes Guerra, Fernando Huerta Mesones, Jenny Gerónimo Meza, Mónica Oscanoa Gutiérrez, Ciro Liberato Ramón 24 28 CASE REPORT Weaver syndrome: postnatal overgrowth with increased bone maturation Jorge Arturo Aviña Fierro, Daniel Alejandro Hernández Aviña. Clinical characteristics of a teenager with obesity and an early debut with type 2 diabetes mellitus ketoacidosis: A case report Helard Manrique Hurtado, Pedro Aro Guardia, Carlos Calle Müller, Giancarlo Romero Rivas. 33 mENTAL HEALTH: ORIGINAL ARTICLE Phenomenological study in 90 patients younger than 18 years old with Obsessive Compulsive Disorder Roxana Vivar, Zoila Pacheco, Cecilia Adrianzen, Beatricce Macciotta, Giannina Moron. 37 ETHICS Ethics and drugs Hugo Peña Camarena. 41 CULTURAL Pisco sour from Perú Carmen del Pilar Lazo Rivera. 48 PUbLICATION GUIDELINES 52

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Editorial

Uno de los objetivos de la Sociedad Peruana de Pediatría es brindar información científica

actualizada a los médicos pediatras, publicando temas de mayor interés e importancia para la especialidad, como son las patologías más frecuentes del niño, niña y del adolescente de nuestro país, tratadas en nuestra revista institucional.

La revista de la Sociedad Peruana de Pediatría se viene publicando regularmente desde el año 1942, a través de la Secretaría de Publicaciones y del Comité Editorial. Su

publicación se realiza de acuerdo a las condiciones establecidas por Scielo y Lilacs, cuatro veces al año; por esta razón solicitamos a todos nuestros médicos pediatras a participar enviando sus artículos de revisión sobre la práctica clínica e investigación nacional, haciendo énfasis en la morbilidad

� mortalidad infantil, desnutrición de los niños, niñas y de los adolescentes como aporte importante para la comunidad científica.

La Sociedad Peruana de Pediatría tiene el compromiso de velar por la salud infantil del niño, niña y del adolescente de hoy, pensando en los ciudadanos del mañana como base de una sociedad saludable. En

ese sentido, tenemos la oportunidad de participar en la revista, dando propuestas técnicas específicas que

incidirán así en la reducción de la morbilidad, mortalidad y en la desnutrición crónica de los niños menores de cinco años, que en el año 2007 alcanzó la cifra de 29.1% (OMS) de nuestra población infantil, llegando al 43.5% (OMS) que en las zonas rurales.

Cabe recordar la otra gran tarea es participar como Sociedad Civil para contribuir en los logros de los objetivos del Desarrollo del Milenio para el 2015. Para entonces el país debe reducir en dos terceras partes la mortalidad infantil, y en pos de ello nuestra revista servirá como un espacio de difusión de las investigaciones en estos temas.

Los pediatras debemos orientar a los padres en el cuidado de la salud de sus hijos, debemos trabajar con la familia en la prevención de las enfermedades, en el cuidado de la alimentación, en la orientación sobre el crecimiento y desarrollo de sus niños.

Esperamos que nuestra revista sea el mejor medio de difusión del nuevo conocimiento y el estrecho vínculo de comunicación entre todos nuestros asociados.

Dr. Raúl Urquizo Aréstegui Presidente de la Sociedad Peruana de Pediatría

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

TRABAJOS ORIGINALES Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños. Trujillo-Perú Association between respiratory virus and asthma exacerbation in children. Trujillo-Perú

Cecilia V. Romero Goicochea 1, Santiago Benites Castillo 2, Milciades Chávez Castillo 3

RESUmEN

Objetivo: Los virus respiratorios son la principal causa de morbilidad en niños y el asma que afecta a todos los grupos de edad constituye el objetivo de diversas intervenciones clínicas y de salud pública. El objetivo de la investigación fue determinar si existe asociación entre virus respiratorios y la exacerbación del asma en niños menores de 14 años atendidos en el Hospital Florencia de Mora, Trujillo, Perú. Material y métodos: Se estudió 167 secreciones nasofaríngeas de niños con asma. El estudio virológico

comprendió la detección de virus respiratorios con el sistema inmunocromatográfico Coris BioConcept-Bélgica, detectándose virus sincicial respiratorio, adenovirus, influenza virus A y B. Para el estudio de la exacerbación de asma se midió el flujo espiratorio pico basal y el puntaje de Bierman y Pierson modificado

por Tal. Resultados: El virus con mayor frecuencia fue el de influenza A en un 46.7%, seguido de influenza B con 19.2%. Se observó que la exacerbación más importante fue la de tipo leve en ambos sexos. La presencia

de sibilancias fue el síntoma más frecuente (100%), seguido de fiebre (97.0%) y cefalea (95.8%).

Conclusiones:Se determinó que existe asociación entre la presencia de virus respiratorios y la exacerbación

del asma, siendo los virus influenza los de presentación más frecuente.

Palabras clave: Virus respiratorios, exacerbación asmática.

AbSTRACT

Objective: The respiratory viruses are the main cause of morbidity in children and asthma is a very common chronic disease that affects all the groups of age and is the objective of diverse clinical interventions and public health. The objective of the present investigation was to determine the association between the virus respiratory and the exacerbation of asthma in children under 14 years, taken care of at Florencia de Mora Hospital, Trujillo, Perú. Material and methods: We studied 167 nasopharyngeal secretions of children with asthma. The virology study included the respiratory

1 Médico Pediatra. Maestría en Salud Pública y Doctora en Medicina; Docente de la Facultad de Medicina, en el Departamento de

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Pediatría en pregrado y postgrado de la Universidad Nacional de Trujillo. 2 Master in Sciences y Doctor en Ciencias Biomédicas. Docente de postgrado de la Facultad de Medicina en la Universidad César Vallejo, actual Director

de la Revista Medica Vallejiana. 3 Master in Sciences y Doctor en Microbiología, docente de pre y postgrado

en la Universidad Nacional de Trujillo

and the Bierman-Pierson score. Results: The virus most frequently found were influenza A in 46, 7%, followed by influenza B with 19, 2%. It was observed that the most important exacerbation was the light in both sexes. The whistling was the most important symptom (100%); follow by fever (97%), headache (95.8%), sputum (93.4%), and nasal congestion (88.6%). Conclusions: We conclude that the association between some respiratory virus and crisis of asthma exists. Key words: Respiratory virus, asthma exacerbation

INTRODUCCIóN

Los virus respiratorios son la principal causa de morbilidad en niños e infantes y se considera que es un problema de salud pública mundial, pueden ocasionar epidemias de carácter estacional (1, 2). Por otro lado, el asma es una enfermedad crónica muy común que afecta a todos los grupos de edad y constituye el objetivo de diversas intervenciones clínicas y de salud pública (3-5).

detection of virus with an inmunocromatographic system

El virus sincicial respiratorio (VSR) es la causa más

Coris BioConcept Belgium, detecting respiratory syncytial

importante de enfermedad de vías respiratorias, siendo una de

virus, adenovirus, Influenza virus A and influenza virus B. For

las primeras causas de bronquiolitis y neumonía en menores,

the study of exacerbation of asthma we used the peak flow

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Cecilia V. Romero Goicochea y col.

constituido por 11 proteínas (6). Las glucoproteínas G y F desempeñan funciones de adhesión y fusión (6, 7). Numerosos estudios describen la asociación entre la infección por este virus en la infancia y el desarrollo posterior de sibilancias recurrentes e hiperreactividad bronquial (8, 9). Se realizaron estudios donde se hizo seguimiento hasta los 7 años de vida a pacientes diagnosticados de bronquiolitis por VSR en la época de lactante. Observaron que el 57% de los pacientes desarrollaron posteriormente episodios de sibilancias recurrentes y, entre ellos, el 71% tenían antecedentes familiares de asma. Existe evidencia reciente que la infección por VSR se asocia de forma significativa con un riesgo aumentado de padecer sibilancias

recurrentes (5, 10, 11).

Los rinovirus humanos son la causa de un tercio a la mitad de todas las infecciones agudas del tracto respiratorio (12,13). Pueden ser transmitidos por aerosoles o por contacto directo. Estos virus atacan el epitelio respiratorio y se difunden localmente, siendo los receptores celulares las Moléculas de Adhesión Intercelular tipo 1 (ICAM-1). La respuesta natural de la defensa involucra ICAM-1, la cual ayuda a la unión entre las células endoteliales y leucocitos (12-15). Kotaniemy-Syrjanem, A. y col demostraron que los niños con asma en edad escolar tuvieron rinovirus en un 33% de casos, los que se asociaron principalmente con dermatitis atópica de la infancia (16).

Los adenovirus causan con más frecuencia enfermedades del tracto respiratorio. El espectro clínico de la enfermedad del tracto respiratorio va desde un cuadro de rinofaringitis hasta un cuadro de neumonía fulminante (17,18). López G. encontró en México que el adenovirus estaba asociado en 13% de los casos con exacerbaciones del asma en niños (9).

Los virus influenza A y B son virus mutantes, razón por la cual las personas pueden sufrir varios episodios de gripe (19,20). La influenza se caracteriza por la súbita aparición de fiebre, mialgias, cefalea, escalofríos, decaimiento, tos no productiva, faringitis y rinitis (1, 21). Las complicaciones incluyen enfermedad obstructiva crónica, crisis asmáticas, bronquitis, bronquiolitis, etc (10). Los brotes epidémicos por virus influenza ocurren durante los meses de otoño e invierno. La morbimortalidad asociada a esta patología afecta a todos los grupos etáreos (21) y es reconocido como agente de brotes de infección intrahospitalaria. Los niños son fuente importante de diseminación viral en la comunidad con una alta tasa de incidencia, su asociación con asma y exacerbaciones ha sido reportada de 20% a 21% (8, 9).

Según la OMS el asma afecta a casi 5% de la población en los Estados Unidos. De 1982 a 1992, la prevalencia de la enfermedad aumentó en 42% y su tasa anual de mortalidad en 40%. Entre los niños, el 80% de las muertes por asma ocurren en residentes de centros urbanos, por lo que se

considera al asma como un problema urbano ocasionado por la mala calidad del aire. Se define como una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por inflamación, obstrucción variable y reversible de las vías aéreas, como respuesta a la

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exposición de algunos factores de riesgo (22). Se estima que en la población mundial están afectados entre 10% a 33% de niños y 5% a 10% en adultos (8).

La exacerbación asmática aguda es la crisis asmática aguda que cursa con taquipnea, taquicardia y dificultad respiratoria de intensidad variable, cuyo volumen espiratorio máximo en el primer segundo o pico espiratorio máximo es menor en más del 20% al basal para el paciente (3). La exposición a alergenos e infecciones virales causan exacerbaciones (22), y se ha demostrado, que el 80% a 85% de exacerbaciones de asma de tipo agudo está dado por infecciones por virus (8), por lo que es primordial la vigilancia del asma (9).

En el asma se observa: a) obstrucción reversible de la vía aérea, incompleta en algunos pacientes; b) inflamación, caracterizada por hipersecreción de moco, edema de la mucosa, infiltración celular y descamación epitelial;

(20, 23)

y c) hiperreactividad bronquial . Las alteraciones inmunológicas son múltiples y complejas, la patología incluye daño al epitelio de la vía aérea, fibrosis de la membrana basal, infiltración multicelular y edema. Los hallazgos incluyen: activación y degranulación de los mastocitos, activación de eosinófilos, linfocitos y, en algunas circunstancias, de los neutrófilos (3, 20).

A diferencia de los países anglosajones, la prevalencia del asma en España es relativamente baja; aproximadamente un 9% de los niños de 13-14 años reconocen haber tenido síntomas durante el año anterior; y el 10% de padres de niños de 6-7 años informan que sus hijos han padecido sibilancias en el mismo período. Las sibilancias graves son mucho menos frecuentes en ambas edades y también han aumentado en el grupo de 6-7 años, mientras se mantienen en el grupo de 13-14 años (24).

Papadopuolus, N. y col. confirman que los virus detectados en infecciones respiratorias corresponden a 73.7%, de los cuales el 72.4% fueron a VSR y el 29% a rinovirus, demostrándose asociación entre ambos virus con exacerbaciones asmáticas (25). Coronel C. demuestra que los factores desencadenantes de la crisis asmática en niños en un 84% fueron las infecciones respiratorias (3), y López, G. demostró que los factores desencadenantes de la crisis asmática en niños fueron en un 79% (9). Machado I.y col., en el 2004, muestran que los virus respiratorios se pueden encontrar en un 12.2% en pacientes pediátricos con asma aguda (17).

En el Perú se sabe que uno de cada cinco consultantes a los servicios de salud tiene antecedentes de asma o cuadros de obstrucción bronquial, y uno de cada 10, por lo menos, tiene

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Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños. Trujillo-Perú

asma actual. Según el estudio International Study of Asthma and Allergies in Childhood (ISAAC) en el Perú, en 1998, la prevalencia de asma infantil fue de 27%, incrementándose paulatinamente año a año (26). En Lima se notifica una tasa de incidencia de 13.42/1000 habitantes, manteniéndose los casos en promedio de 34 por semana que mostraron que el 16% de niños con crisis de asma presentaron una infección por VSR (27). Según la Oficina General de Epidemiología del Perú entre el 10 al 15% de la población total en la ciudad de Trujillo es asmática (28), siendo la prevalencia de asma diagnosticada en la población infantil de 11.2% hasta el 2003 (26, 27).

Por todo lo expuesto, la identificación temprana de los virus respiratorios involucrados en las crisis asmáticas de la población infantil, es sumamente importante y útil, pues siendo el asma una enfermedad de alta prevalencia, catalogada como una de las pandemias no infecciosas del siglo XXI, es muy importante conocer la asociación entre los virus respiratorios y la presentación de la exacerbación de asma, lo que permitirá la implementación de medidas profilácticas que contribuyan a disminuir las exacerbaciones de asma. Por tanto el objetivo principal del presente estudio fue determinar la asociación entre la infección por algunos virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños menores de 14 años.

mATERIAL Y mÉTODOS

El material estudiado estuvo conformado por 167 muestras de secreciones nasofaríngeas de niños con asma menores de 14 años, atendidos en el Hospital I EsSalud Florencia de Mora, Trujillo-Perú. La selección muestral se hizo de manera aleatoria, aplicándose una hoja de consentimiento informado.

El presente estudio fue de tipo transversal de una sola casilla.

Las muestras fueron recolectadas por duplicado, entre el segundo y quinto día de enfermedad, colocando en tubos que contenían medios de transporte para el estudio virológico. A cada paciente se le llenó la ficha de recolección de datos, diseñada para la investigación (31).

Se utilizó la prueba de detección de virus respiratorios: Coris BioConcept -Bélgica para su uso basado en un sistema Inmunocromatográfico (Gráfica 1) homogéneo con partículas de oro coloidal. La muestra nasofaríngea (tomada con un hisopo de alginato de calcio) se diluye en el tampón previsto con el reactivo. Una membrana de nitrocelulosa se sensibilizó con anticuerpos dirigidos frente a antígenos del virus buscado. La especificidad de la prueba quedó asegurada mediante el uso de anticuerpos monoclonales frente a antígenos de este virus que se encuentran conjugados con partículas de oro coloidal. Este conjugado fue inmovilizado en una membrana de poliéster. Cuando se introduce la varilla en la fase líquida

de la suspensión de secreciones nasofaríngeas o extractos de cultivo, el conjugado solubilizado migra por difusión pasiva con la muestra y el conjunto encuentra el anticuerpo adsorbido en la nitrocelulosa. El resultado puede verse al cabo de un período

Page 15: Revista pediatria interior

de extracción de 15 minutos cuando aparece una raya rojiza en la varilla. La migración continua y la solución encuentra un segundo reactivo (un anticuerpo anti-IgG de ratón) que fija el exceso de conjugado, generando otra raya rojiza (31).

Se utilizaron los ensayos para la detección de VSR (Especificidad 93.33%; Sensibilidad 90.0%), adenovirus (Especificidad 100.0%; Sensibilidad 83.3%), virus Influenza A(Especificidad 97.5%; Sensibilidad 100.0%), virus Influenza B (Especificidad 94.8%; Sensibilidad 100.0%), de la marca Coris BioConcept - Bélgica. Las muestras fueron procesadas en el laboratorio de Microbiología de la Universidad Nacional de Trujillo.

Gráfica 1. Reactivos utilizados para hacer el estudio de virus respiratorios, flujómetros Vitalograh y realización de las pruebas. Hospital I EsSalud Florencia de Mora, 2007, Trujillo-Perú.

El estudio de exacerbación de asma se midió por disminución del flujo espiratorio pico basal con una disminución del 20%

o más, utilizando flujómetros Vitalograph, Inc. Irlanda. En aquellos que no pudieron usar el flujómetro, se realizó la medición de la exacerbación según el Score de Bierman y Pierson modificado por Tal (4, 17). Los resultados fueron procesados usando el paquete estadístico para computadora personal SPSS v. 14.0 y expresados en tablas de distribución de frecuencias de acuerdo a las variables edad y sexo, analizados a través de la prueba de X2 considerándose un valor p<0,05 para la significancia.

RESULTADOS

Page 16: Revista pediatria interior

Cecilia V. Romero Goicochea y col.

La población más afectada fue la menor de 4 años, con predominio del sexo masculino (Gráfica 2). Los signos y síntomas más frecuentes hallados fueron sibilancias, fiebre, cefalea, tos, expectoración y congestión nasal (Gráfica 3). La etiología del proceso respiratorio fue dado por los siguientes virus: influenza A (46.7%), influenza B (19.2%), VSR (17.4%), adenovirus (10.2%), otros en menor porcentaje (Gráfica 4). El tipo de exacerbación encontrada fue leve en 80.2% y moderada en 13.1% (Gráfica 5). La asociación entre virus respiratorios y la exacerbación asmática tuvo un p de 0.0049 (Tabla 1).

10 A14

5A9

0A4

0 51015225335445 000

0A 4 5 A9 10 A14 Hombres 35 40 19 Mujeres 41 18 14

Gráfica 2. Distribución de grupos de edad según sexo en pacientes con exacerbación de asma.

0 20 40 60 80 100 120 140 160 Serie1 160 Cefale a 112 Coriza 148 Congestion142 Dolorgargant a 102 Otalgi a 84 Disf onia144 Mialgi a 156 To s 162 Fiebr e

Page 17: Revista pediatria interior

156 Ex pectoración 167 Sibila ncias 148 134 Subcrepitante Roncan tes

SIGNOS Y SINTOMAS

Gráfica 3. Signos y síntomas de pacientes menores de 14 años, con exacerbación de asma.

PORCENT

50 40 30

AJE

20 10 0

Virus sincicial

Influenza A

Influenza B

Adenovirus

Otros

respiratorio

17.4

46.7

19.2

10.2

6.6

Serie1

VIRUSIDENTIFICADOGráfica 4. Tipo de virus identificado en pacientes con exacerbación de asma.

62

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79 11 15 0 0 20 40 60 80 100 120 140 160 Hombres 79 15 0 Mujeres 62 11 0 Leve Moderada Severo Gráfica 5. Tipo de exacerbación de asma en pacientes menores de 14 años. Tabla 1. Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación del asma en pacientes menores de 14 años. Hospital EsSalud Florencia de Mora, 2007, Trujillo-Perú Presencia Exacerbación Total de virus Leve moderada Si 134 22 156 No 7 4 11 Total 141 26 167

X2 = 3.85 p= 0.049

DISCUSIóN

Se evidencia que no hay relevancia en cuanto a edad y sexo en lo que respecta a la exacerbación asmática, es bien conocido que el asma es una patología alérgica que afecta diferentes grupos etáreos y diferentes sexos, sin ninguna predilección y esto se evidencia en los diferentes estudios llevados a cabo hasta el día de hoy (5).

En cuanto al tipo de crisis, podemos apreciar que la mayoría de pacientes acudió con una exacerbación de tipo leve, y esto evidencia la importancia del manejo en EsSalud de

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Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños. Trujillo-Perú

un programa que controla pacientes con padecimientos crónicos como es asma bronquial, ya que esto permite que los pacientes asmáticos acudan precozmente a la consulta, evitando así, complicaciones en la evolución de la enfermedad. La frecuencia de presentación de los signos y síntomas concuerda con lo publicado por los diferentes autores cuando el paciente asmático va cursando con infecciones virales asociadas y exacerbación del cuadro asmático propiamente dicho (8, 17). Al ocurrir la infección viral se desencadenaría un aumento de respuesta a la histamina y de los eosinófilos epiteliales, lo cual vendría a ser una de las principales explicaciones para generar la exacerbación del asma durante la misma, ya que los niveles de estos se mantienen altos aun durante la convalecencia. Para justificar este concepto, la infección de las células epiteliales humanas con virus respiratorios llevan a la liberación de una variedad de quimoquinas proinflamatorias como IL-8 (CXCL8), ENA-78 (CXCL5), IP-10 (CXCL10), RANTES (CCL5), tanto como IL-1ß, IL-6, GM-CSF, y IL-11 que contribuyen al reclutamiento y a la activación de células inflamatorias durante la infección, y por ende activan la cascada inflamatoria, base de la exacerbación asmática (32, 33).

En estudios experimentales, en ratones, diversos investigadores demuestran el disbalance entre la función de los leucocitos cooperadores Th1 y Th2, por lo que se va a relacionar con infecciones más severas y exacerbaciones de asma, puesto que su función final es limitar la infección (32-34). Los linfocitos Th1 se caracterizan por producir interferón y por participar en las reacciones de hipersensibilidad tardía, reclutar monocitos y macrófagos en infecciones intracelulares y por inducir la producción de linfocitos T citotóxicos. Por su parte, los Th2 sintetizan interleuquinas 4, 5 y 13, promueven la síntesis de IgE, así como la maduración y liberación de eosinófilos al torrente circulatorio. En los pacientes asmáticos se ha observado un predominio de los linfocitos Th2 con el consiguiente incremento de los síntomas alérgicos (20).

La presencia de procesos infecciosos de tipo viral pueden constituirse en desencadenantes de exacerbaciones asmáticas; en este estudio se ha podido identificar que esta causa asciende a 94%, y en este grupo se ha podido comprobar que el 46.7% correspondió a virus influenza Ay el 19% a virus influenza B, lo que difiere con los estudios de Johnston S. y col. que encontraron una frecuencia del 20% (8), y Blasi F. encuentra un 21%(2). La frecuencia de infecciones por virus influenza tipo A y tipo B puede verse afectada por factores estacionales, ya que se conoce que la presentación es en brotes epidémicos y por lo que influencian la presencia y desarrollo de estos virus. Sin embargo, López G. reporta que en época de brote estos porcentajes pueden elevarse hasta el 40%, lo cual concuerda con nuestro estudio, donde nuestra frecuencia asciende a 46.7% (9).

En la presente investigación se realizó la identificación de VSR, adenovirus, virus influenza

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A y B. El VSR fue hallado en un 17.3%, mientras que en estudios de Schwarze y col. en un 57%, lo cual puede ser explicado debido a que aquel estudio fue realizado en pacientes menores de un año, mientras que la población en nuestro estudio abarca una población mayor que va hasta los catorce años. Asimismo, Rodríguez y col. en Cuba encontraron asociación con VSR en menores de 2 años en 70%, y en mayores de 2 años en 31%. Estudios de Johnston S. y López G. revelaron frecuencias mayores (8, 9).

ElVSRva a producir alteraciones en las uniones intercelulares

de la mucosa bronquial y un aumento de la sensibilidad de los receptores vagales, que a su vez conducen a un incremento de la penetración de irritantes, así como una respuesta exagerada a los mismos, desencadenando finalmente el broncoespasmo responsable de la exacerbación asmática (6,

8).

Se encontró adenovirus en un 10.1%, que coincide con los estudios mexicanos de López G. y Coronel C., quienes además, encontraron una asociación con exacerbación asmática en un 13% (5, 14); valores semejantes encontraron Machado I. y col. en estudios realizados en sala de emergencias en Brasil con frecuencias de 12.2% (17), y Reina y col en España hasta un 11% (34).

En cuanto a la asociación propiamente de los virus respiratorios con exacerbaciones asmáticas, comprobamos que, según este estudio, existe esta asociación (p=0.049), que coincide con lo descrito por diferentes autores en mayor o menor proporción. Así, para Duff, en su estudio en niños mayores de 2 años encuentra que el riesgo de mayor exacerbación asmática fue en el grupo con infección viral, y en niños menores de 2 años la infección viral es también significativa.

Jonhston S. y col. en un grupo de niños escolares, encontraron una asociación 80-85%. Rakes G. y col. hicieron un estudio de corte transversal de 70 niños con infección respiratoria y exacerbación asmática encontrando un 80% de asociación, predominando, en menores de 2 años el VSR con 68% y en niños mayores 71% de rinovirus según Cámara A. y col. en Brasil, esta asociación asciende a un 80% en poblaciones de preescolares, predominando VSR, influenza A, y B. En poblaciones escolares la asociación fue algo menor hasta un 50%, predominando rinovirus y adenovirus (35) lo cual también coincide con nuestro estudio, probablemente por encontrarnos en latitudes semejantes.

El desarrollo de la presente investigación permite ver la necesidad de realizar estudios en los que se valoren aspectos no revisados, tales como: el estudio de poblaciones sin diagnóstico de asma y que por causa de la infección

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Cecilia V. Romero Goicochea y col.

respiratoria viral desencadenan procesos obstructivos

bronquiales; para así poder determinar la asociación en pacientes asmáticos y en aquellos que no lo son, por tanto hay la necesidad de realizar estudios sistemáticos de casos y controles a fin de complementar la presente investigación.

CONCLUSIONES

1. El virus respiratorio hallado con mayor frecuencia fue el virus influenza A. 2. El virus respiratorio hallado con menor frecuencia fue el adenovirus. 3. Existe asociación entre algunas infecciones respiratorias virales y la exacerbación del asma en niños menores de 14 años. REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Asociación entre virus respiratorios y la exacerbación de asma en niños. Trujillo-Perú

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Recibido: 22-10-08

Aceptado: 12-03-09

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

Dolor agudo neonatal con estímulos dolorosos repetitivos, estudio randomizado comparando tres métodos analgésicos no farmacológicos

Neonatal acute pain with repeated painful stimuli, randomized trial comparing three analgesic non pharmacological methods

Gustavo Rivara Dávila 1, Sonia Huaipar Rodríguez 2, Debbie Miyasato Higa 1, Cynthia Liu Bejarano 2, Diego Briceño Clemens 3, Andrea Bucher Oliva 3, Ximena de Noriega Madalengoitia 4, Sandra Viale Paez 4, Patrick Pendavis Heksner 4, Pamela García Corrochano Medina 4, Gabriela García Nores 5, Miguel Juárez Salcedo 5, Fiorella Iglesias Cárdenas 5, Carmen Medina Quiñones 5, Carlos Herrera Tipacti 6

RESUmEN

Introducción: La analgesia no farmacológica es raramente utilizada en las unidades de neonatología. Los estímulos dolorosos repetitivos tienen efectos negativos a largo plazo. Objetivo: Verificar que los métodos analgésicos no farmacológicos son efectivos en estímulos dolorosos repetitivos; determinar cuál método es más efectivo. Material y métodos: Se realizó un ensayo clínico, randomizado, con tres grupos formados de manera aleatoria, con 40 recién nacidos sanos a término por grupo. Fueron sometidos a tres estímulos dolorosos durante los 3 primeros días de vida (vacuna contra hepatitis B, BCG y muestra para grupo sanguíneo). El primer grupo (A) recibió lactancia materna y contacto piel a piel como método analgésico no farmacológico durante el estímulo doloroso, el grupo (B) recibió dextrosa al 10% y el grupo (C) una tetina sin nada. Se utilizó la Escala para Dolor Agudo Neonatal (DAN, Carbajal y col.) y la Escala ABC (Bellieni y col.) para la

cuantificación del dolor. Fueron comparados los 3 grupos en cada uno de los tres estímulos para determinar

no sólo cuál método es más efectivo, sino si el efecto analgésico se mantiene con estímulos repetitivos. Resultados: Para ambas escalas el grupo B expresó menor dolor en los tres estímulos, con 97,5% de NO

DOLOR vs 87,5% (A) y 85% (C) (p<0.036) en la escala ABC, y 95% vs 85%(A) y 70%(C) para la categoría NO DOLOR con la Escala DAN (p<0.022). Esta diferencia se mantuvo en las otras categorías de dolor.

Se observó que el efecto analgésico es mayor con estímulos repetitivos. Siendo la categoría NO DOLOR

en el grupo B para el primer estímulo 70%, 85% en el segundo y 95% en el tercero (p<0.020). Este efecto

se observó también en los grupos A y C. Conclusiones: la dextrosa al 10% tuvo mayor efecto analgésico comparada con los otros grupos. Los métodos analgésicos no farmacológicos estudiados aumentan su efectividad con estímulos dolorosos

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repetitivos. Palabras clave: Dolor neonatal, métodos analgésicos no farmacológicos, estímulos dolorosos repetitivos.

1 Médico pediatra neonatólogo del Hospital Nacional Arzobispo Loayza 2 Médico pediatra del Hospital Nacional Arzobispo Loayza 3 Médico residente de pediatría, Hospital Nacional Arzobispo Loayza 4 Médico cirujano 5 Internos de Medicina de la Universidad San Martín de Porres (Facultad

de Medicina) 6 Técnico de laboratorio del Hospital Nacional Arzobispo Loayza

Segundo Premio Iberoamericano de Neonatología 2008 al mejor trabajo clínico-epidemiológico (V Congreso Iberoamericano de Neonatología, Mar del Plata, Argentina, setiembre 2008)

AbSTRACT

Introduction: Non pharmacological methods are rarely

used in neonatal units. repeated painful stimuli have long noxious effects. Objective:To verify the effectiveness of non pharmacological methods in repeated painful procedures; to determine which method is more effective. Material and methods: We conducted a randomized controlled trial. Newborns were randomly assigned into 3 groups (n=40 per group). All of them underwent painful procedures during the first 3 days of life (hepatitis B, BCG and blood sample for determine group and factor). Group A received breast feeding and skin to skin contact as non pharmacological method during the painful stimuli, group B

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Dolor agudo neonatal con estímulos dolorosos repetitivos, estudio randomizado comparando tres métodos analgésicos no farmacológicos

received dextrose 10% and group C only suction. Douleur Aigue Nouveau-ne scores (DAN, Carvajal et al.) and ABC scale (Bellieni et al.) were used to assess neonatal pain. The 3 groups were compared in each stimulus to determine the most effective method, and the effectiveness in repeated painful stimuli. Results: Group B showed the most analgesic effect in the 3 stimuli, with 97, 5% for NO PAIN vs. 87, 5% (A) and 85%

(C) (p<0,036) with ABC scale, and 95% vs. 85% (A) and 70% (C) for NO PAIN with DAN scale (p<0,022). This difference was constant with all categories of pain. We observed that analgesic effect is greater in repeated painful stimuli. NO PAIN category was 70% in group B in the first stimuli, 85% in the second and 95% in third (p<0,020). This effect was also observed in groups A and C. Conclusions: Dextrose 10% seems to offer the best analgesic effect compared with breast feeding and suction. Non pharmacological methods studied increase their effectiveness in repeated painful stimuli. Key words: Neonatal pain, nonpharmacologic analgesic methods, repetitive painful stimuli. INTRODUCCIóN

Los recién nacidos (RN) admitidos en una unidad de cuidados intensivos neonatales son expuestos frecuentemente al dolor. Sin embargo, y a pesar de que son más sensibles al dolor que los adultos, la analgesia fue raramente utilizada durante muchos años, incluso en los procedimientos quirúrgicos, siendo recién en los años ochenta cuando se toma conciencia de que los neonatos sienten dolor y que éste tiene efectos nocivos inmediatos así como a largo plazo (1, 2).

Los repetitivos estímulos dolorosos tienen consecuencias severas, generando numerosos cambios en el niño, como el incremento del umbral del dolor y daño cerebral excitotóxico por sobreestimulación de los receptores N-Metil-de-Aspartato (1, 3, 4). Así también, el llanto producido por dolor tiene consecuencias psicológicas y orgánicas en el RN, causando hipoxemia, hipertensión, taquicardia, incremento de la variabilidad del latido cardíaco y aumento de la presión intracraneal (5). Todos estos eventos son particularmente peligrosos en el prematuro, por la vasorregulación cerebral inmadura (6 - 8).

La punción de talón, la manera más común de obtener sangre para los análisis en los RN, causa dolor intenso, así como los diversos procedimientos invasivos a los que los RN son sometidos (9, 10, 11). Debido a que la analgesia clásica

RN, (12) han

(farmacológica) tiene efectos colaterales en sido propuestos métodos no farmacológicos de analgesia, los cuales incluyen diferentes estrategias como succión no nutricional, instilación de glucosa u otros líquidos dulces sobre la lengua del recién nacido. El efecto analgésico de la glucosa se piensa que actuaría estimulando las beta endorfinas por un mecanismo pre-absortivo (12-19).

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Existen numerosos trabajos que reafirman el efecto analgésico del contacto piel a piel, lactancia materna, soluciones orales dulces y otros estímulos sensoriales, (20-27) pero no se ha establecido la efectividad analgésica de dichas terapias no farmacológicas frente a procedimientos dolorosos repetitivos en el tiempo, quiere decir, no está muy preciso si estos métodos utilizados varias veces en el mismo RN van a tener un efecto aún más analgésico, o si su eficacia se pierde estímulo a estímulo (28).

En este estudio hemos aprovechado tres estímulos dolorosos a los que rutinariamente los RN son sometidos, y utilizado tres métodos analgésicos no farmacológicos, para verificar de esta manera, no sólo cuál de los tres confiere mayor analgesia, sino, si estímulo a estímulo tenemos mayor o menor efecto analgésico.

mATERIAL Y mÉTODOS

Este ensayo clínico randomizado y prospectivo fue diseñado para comparar tres métodos analgésicos no farmacológicos y verificar su efecto en el tiempo, a través de estímulos repetitivos. Fueron conformados 3 grupos de manera aleatoria, y se utilizó tres estímulos dolorosos a los que normalmente los RN son sometidos: la administración de la vacuna contra la hepatitis B, administración de la BCG y muestra sanguínea para la determinación del grupo sanguíneo y factor Rh, los cuales fueron realizados ordenadamente a las 6, 24 y 48 horas de vida respectivamente.

Fueron estudiados 120 RN sanos, a término (37-41 semanas), separados de manera aleatoria alternada en tres grupos de 40 cada uno (grupos A, B y C). Cada grupo recibió un método distinto de analgesia: A: Contacto piel a piel y lactancia materna, B: succión de dextrosa al 10% y, C: succión sola. Todos los neonatos incluidos fueron sometidos a los estímulos dolorosos descritos y recibieron uno de los tres métodos analgésicos no farmacológicos. Para la determinación de la intensidad del dolor fueron utilizadas dos escalas para medir el dolor agudo neonatal, las cuales se basan fundamentalmente en la expresión corporal del RN, ya sea la expresión facial (1), el llanto (29), y la reacción motora de las extremidades. Existen diversas escalas, sin embargo, en este estudio hemos utilizado las escalas: Escala de DAN (Doleur Aigue du Nouveau-Né DAN scale), Carbajal y col. 1997 (30) y, Escala ABC para la medición del dolor agudo neonatal (Carlo V. Bellieni et al., Italia, 2005) (31-33) debido a que en diversos estudios han sido validadas y son de fácil interpretación y uso.

Los RN participantes ingresaron al estudio luego de que las madres firmaran el consentimiento informado y que cumplieran con los criterios de selección: RN sanos, a término, Apgar al minuto 7 o más, peso al nacer entre 2500 y 4000 gramos, dos horas de ayuno previo al estímulo y menores de 72 horas de vida.

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Gustavo Rivara Dávila y col.

Protocolo: los RN seleccionados fueron agrupados en tres grupos de manera aleatoria, siendo los estímulos dolorosos los siguientes: Hepatitis B intramuscular, BCG intradérmica y toma de muestra endovenosa para la determinación del grupo sanguíneo. Los tres grupos randomizados como A, B y C recibieron los siguientes métodos no farmacológicos:

A: Lactancia materna y contacto piel a piel 2 minutos antes y después del estímulo doloroso B: Dextrosa al 10% por succión a través de una tetina 2 minutos antes y después del estímulo doloroso C: Succión sin estímulo gustativo a través de una tetina 2 minutos antes y después del estímulo doloroso Los 360 estímulos dolorosos, 3 por cada recién nacido, fueron realizados siempre por el mismo equipo humano, y filmados desde 30 segundos antes hasta 30 segundos luego de terminado el procedimiento, siendo evaluados posteriormente por parte del equipo investigador. El procedimiento se hizo siempre por las mañanas.

Instrumentos: Escala de DAN (Doleur Aigue du Nouveau-Né DAN scale), la cual se basa en la evaluación de la expresión facial, los movimientos de las extremidades y expresión vocal (llanto), confiere niveles de dolor que van del 1 al 10, confiriendo 7 categorías de dolor: No dolor, mínimo, leve, moderado, moderado-severo, severo y extremo (30). La Escala ABC (ABC pain scale for healthy full-term babies) se basa en las características acústicas del llanto utilizando 3 parámetros: agudeza del primer llanto, ritmicidad y constancia. Confiere 3 niveles de dolor: no dolor, moderado y fuerte (31-33).

Se estructuró una base de datos en Excel Office 2000, la cual fue analizada con el software SPSS 14.0, utilizándose las pruebas: Prueba no paramétrica de U - Mann Whitney y Prueba no paramétrica de Kruswall-Wallis.

39,1 0,8 39,1

RESULTADOS

Luego de 2 meses de estudio fueron conformados 3 grupos de 40 recién nacidos cada uno, con características generales similares, las cuales se encuentran descritas en la Tabla 1. Tabla 1. Características generales de los tres grupos

CPP y lactancia Dextrosa 10% Succión sola

materna (n=40)

y succión (n=40) (n=40) Datos del RN Media SD Media SD Media SD Peso (g) 3318,8 278,2 Talla (cm)

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49,1 1,9 PC (cm) 34,3 1,1 Apgar 1 8,7 3365,9 324,3 49,1 1,3 33,9 1,1 8,5 --335,1 3366,6 2,1 49,5 1,1 34,2 --8,8 ---Apgar 5 9 9 ----9 --EG (sem) 39,1 0,9

0,9

Los tres grupos (A, B y C) recibieron los tres procedimientos dolorosos a las 6, 24 y 48 horas, utilizando en cada uno de ellos uno de los tres métodos analgésicos no farmacológicos descritos. En los tres grupos estudiados se encontró cada vez menos dolor, estímulo tras estímulo, registrándose cada vez menos intensidad de dolor al utilizar ambas escalas: Escala de Dan y Escala ABC. Los valores se hallan en las Gráficas 1 y 2, y en las Tablas 2 y 3. Se observa que el grupo que mantuvo menor intensidad de dolor en los tres estímulos fue el grupo B (succión de dextrosa al 10%), seguido del grupo A (lactancia materna y contacto piel a piel) y, finalmente, el grupo con succión sola (grupo C). La diferencia fue estadísticamente significativa en los tres momentos (comparación de los métodos no farmacológicos entre los tres grupos), así como estímulo tras estímulo, en los tres grupos. Dicha diferencia se mantuvo significativa para ambas escalas.

Tabla 2. Comparación de los tres grupos según Escala ABC

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Dolor agudo neonatal con estímulos dolorosos repetitivos, estudio randomizado comparando tres métodos analgésicos no farmacológicos

GRUPOS Lactancia materna y CPP 6 h 1.10 24 h 0.98 48 h 0.53 Valor-p Valor-p 6-48h 0.072 0.033 Dextrosa al 10% 0.65 0.33 0.08 0.016 0.006 Succión sola 1.43 1.15 0.53 0.008 0.002

Promedio de la intensidad del dolor

1.50 LACTANCIA 1.00

DEXTROSA PLACEBO

0.50

0.00

Tiempo Tiempo

6H 24H 48H

Gráfica 1. Comparación de los tres grupos según Escala ABC Tabla 3. Comparación de los tres grupos según Escala DAN

GRUPOS 6 h 24 h 48 h Valor �p 6-48h Lactancia 1.05 0.85 0.45 0.02 materna y CPP Dextrosa al 10% 0.70 0.33 0.13 0.02

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Succión sola 1.60 1.33 0.75 0.033

Promedio de la intensidad del dolor

1.50

LACTANCIA DEXTROSA

1.00

PLACEBO

0.50

0.00

Tiempo

6H 24H 48H

Tiempo

Así también, fue evaluado el dolor no como valor absoluto, sino según las categorías de dolor determinadas por cada una de las escalas; hallándose que la categoría de NO DOLOR fue cada vez mayor en los tres grupos al comparar los estímulos en el tiempo. Diferencia que se mantuvo para ambas escalas.

ESCALA AB C: Lactancia Matern ay CPP

87.50%

72.5% 67.5%

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NO DOLOR MODERADO

32.5% 25%

FUERTE

10% 2.5%

2.5%

1° 2° 3°

ESTÍMULOS DOLOROSOS EN EL TIEMPO

Gráfica 3. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,072 (comparando los tres estímulos)

ESCALA AB C: Dextrosa 10%

97.5%

92.5%

82.5%

NO DOLOR MODERADO FUERTE

17.5%

7.5%

2.5%

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1° 2° 3°

ESTÍMULOS DOLOROSOS EN EL TIEMPO

Grafica 4. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,016 (comparando los tres estímulos)

Gráfica 2. Comparación de los tres grupos según Escala DAN

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Gustavo Rivara Dávila y col.

ESCALA AB C: succión sol a

85% 65% 65%

NO DOLOR MODERADO

32.5%

32.5%

FUERTE

15%

2.5%

2.5% 1°2° 3°

ESTÍMULOS DOLOROSOS EN EL TIEMPO

Gráfica 5. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,008 (comparando los tres estímulos)

ESTÍMULOSDOLOROSOSENELTIEMPOESCALADAN:LactanciaMaternayCPP57.5%7.5%32.5%2.5%60%7.5%32.5%85%5%7.5%2.5%

Page 35: Revista pediatria interior

1°2°3°NODOLORMINIMOLEVEMODERADOMOD/SEVSEVEROEXTREMOGráfica 6. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,019 (comparando los tres estímulos) 70%5%25%85%15%95%2.5%2.5%1°2°3°ESTÍMULOSDOLOROSOSENELTIEMPOESCALADAN:Dextrosa10%NODOLORMINIMOLEVEMODERADOMOD/SEVSEVEROEXTREMOGráfica 7. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,020 (comparando los tres estímulos)

ESCALA DA N: Succión sol a

70%

15%2.5%15%2.5%7.5%NO DOLOR

47.5%

MINIMO

40% 32.5%

LEVE

25% MODERADO

15%

10%

10%

7.5%

MOD/SEV SEVERO

Page 36: Revista pediatria interior

1°2° 3°

EXTREMO

ESTÍMULOS DOLOROSOS EN EL TIEMPO

Gráfica 8. Valoración por niveles de dolor: NO DOLOR: p <0,033 (comparando los tres estímulos)

Al comparar la categoría NO DOLOR entre los tres métodos no farmacológicos (comparación entre los tres grupos A, B y C), en cada uno de los estímulos realizados, se halló diferencia estadísticamente significativa para cada uno de ellos: Escala ABC: a las 6 horas (p<0,024), a las 24 horas (p<0,003) y a las 48 horas (p<0,036) Escala DAN: a las 6 horas (p<0,028), a las 24 horas (p<0,002) y a las 48 horas (p<0,022)

Siendo el grupo B (succión de dextrosa al 10%) el que tuvo mayor porcentaje de RN con la categoría NO DOLOR, seguido del grupo A (lactancia materna y contacto piel a piel) y del grupo C (succión sola), respectivamente.

En síntesis, se observó que estímulo a estímulo los métodos analgésicos no farmacológicos confieren cada vez mayor analgesia, y que la dextrosa al 10% parece ser la de mayor efecto analgésico al ser comparada con la lactancia materna con contacto piel a piel y la succión sola.

DISCUSIóN

Los procedimientos invasivos son frecuentemente necesarios en los RN, y la manera en que éstos son realizados, o la utilización de métodos analgésicos no farmacológicos, van a influenciar sobre su futura respuesta al dolor y sobre el daño neurológico que podría generarse (1). En nuestro estudio hemos analizado 3 métodos no farmacológicos simples y fáciles de realizar para minimizar la respuesta dolorosa en los neonatos, y de esta manera disminuir los efectos nocivos. Estudios previos ya han demostrado como el dolor es disminuido a través de la utilización de diversas estrategias no farmacológicas (2, 3, 7, 8, 12), describiéndose resultados que pueden diferir quizás en la eficacia de un método sobre otro, pero con el común denominador de que todos capturan de alguna manera el estímulo doloroso, generando menores niveles de dolor al ser valorados mediante las escalas diseñadas para este fin (29-33).

Nuestros resultados confirman el efecto analgésico de la dextrosa al ser administrada oralmente, obteniendo menores rangos de dolor al ser comparada con los otros dos grupos

Page 37: Revista pediatria interior

estudiados; sin embargo, en todos los niños estudiados, cualquiera sea el grupo, se observa como la respuesta al dolor es minimizada de alguna manera. La interrogante era si con estímulos repetitivos, los métodos no farmacológicos, ya sea la dextrosa o la lactancia materna, mantendrían su eficacia,

o si esta se perdería en el tiempo estímulo a estímulo. En

Page 38: Revista pediatria interior

Dolor agudo neonatal con estímulos dolorosos repetitivos, estudio randomizado comparando tres métodos analgésicos no farmacológicos

la revisión hecha por Shah PS y colaboradores (Cochrane, 2006) concluyen que la lactancia materna es efectiva para reducir el dolor en los RN, pero que no se ha establecido su efectividad para los procedimientos dolorosos repetitivos (21,

28).

En nuestro estudio hemos observado que los tres métodos analgésicos no farmacológicos, al ser evaluados con estímulos dolorosos repetitivos, no sólo continúan minimizando el dolor agudo, sino que además, confieren mayor efecto analgésico estímulo tras estímulo. Estos resultados se hacen evidentes con ambas escalas utilizadas, y con diferencias estadísticamente significativas en los tres momentos estudiados, lo que sugiere que los métodos evaluados parecen elevar su efectividad en el tiempo.

En conclusión, los métodos analgésicos no farmacológicos son efectivos para disminuir el dolor agudo neonatal, siendo en nuestro estudio la dextrosa al 10% la que parece otorgar mayor analgesia al ser comparada con la lactancia materna con contacto piel a piel y la succión sola. Del mismo modo, estos métodos parecen elevar su efectividad al ser utilizados en procedimientos dolorosos repetitivos, hallándose menores niveles de dolor estímulo tras estímulo. Dada la evidencia de los efectos nocivos que produce el dolor en los recién nacidos, (1) y existiendo métodos no farmacológicos simples y fáciles de hacer, sugerimos la necesidad de generar en

nuestras unidades neonatales una conciencia para establecer

herramientas simples y eficaces para mitigar el dolor y de esta manera disminuir los efectos patológicos del mismo.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Page 40: Revista pediatria interior

Gustavo Rivara Dávila y col.

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Recibido: 18-02-09

Aceptado: 12-03-09

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

Curva de referencia peruana de índice ponderal neonatal para la edad gestacional

Peruvian neonatal ponderal index reference according to gestational age

Manuel Ticona Rendón 1, Diana Huanco Apaza 2, Miguel Oliveros Donohue 3, Percy Pacora Portella 4

RESUmEN

Introducción: La definición tradicional de peso pequeño, adecuado o grande para la edad gestacional, no permite identificar las alteraciones nutricionales de la composición corporal. El índice ponderal para la edad gestacional ha sido establecido para identificar alteraciones en el crecimiento corporal tomando

como variables el peso y la talla. Objetivo: Establecer los valores del índice ponderal de un grupo de recién nacidos sanos proveniente de embarazos simples sin patología de regiones de la costa, sierra y selva del Perú. Material y métodos: Estudio retrospectivo, transversal y descriptivo, en el que se crea una sola curva de índice ponderal según la edad gestacional, que incluye las semanas 34 a 42 de vida intrauterina y determina los percentiles 10, 50 y 90. Para su elaboración se analizaron 99 439 registros de nacimientos del Sistema Informático Perinatal de los nacimientos ocurridos en 29 hospitales del Ministerio de Salud del Perú en el año 2005. Se seleccionó los embarazos simples de mujeres sin patología y neonatos

sanos, nacidos mediante parto vaginal espontáneo. Se definió IP como el peso al nacer en gramos

x 100/[talla en cm]3.

Resultados: Hubieron 8 844 (8,9%) recién nacidos sanos de madres sin patología que presentaron parto vaginal espontáneo. El índice ponderal percentil 50 [percentil 10 - percentil 90] para gestaciones de 34,35,36,37,38,39,40,41 y 42 semanas fueron: 2,45 (2,15-2.78), 2,50 (2,18-2,85), 2,55 (2,23-2,90), 2,59 (2,28-2,95), 2,63 (2,33- 2,98), 2,67 (2,37-3,00), 2,69 (2,40-3,00), 2,69 (2,41-2,99), 2,68 (2,40-2,96)

g/cm3, respectivamente. El IP neonatal a término varía de 2,3 a 3,0 g/cm3, valores fuera de estos límites nos permiten determinar estados de malnutrición fetal. En los fetos sanos no existe diferencia del IP de acuerdo al sexo. Conclusiones: El feto sano en el Perú crece en forma simétrica conforme aumenta el tiempo de gestación. El IP normal en recién nacidos a término varía entre 2,3 y 3,0 g/cm3. Valores fuera de estos límites nos

permiten determinar estados de malnutrición fetal. El índice ponderal del feto sano no es influenciado por

el sexo.

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Palabras clave: Índice ponderal, peso por estatura, malnutrición fetal, peso para la edad gestacional, recién nacido.

AbSTRACT

Introduction: The traditional classification of fetal growth according to birthweight for gestational age, classified as small, adequate or large- for- gestational- age infant, does not allow us to identify disorders of the body composition. The neonatal ponderal index, using birthweight and height as variables, has been established to identify growth disorders.

1 Profesor principal de Pediatría. Universidad Nacional Jorge Basadre de Tacna.

2 Obstetriz. Hospital Hipólito Unánue de Tacna

3 Profesor principal de Pediatría. Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

4 Profesor asociado de Ginecología y Obstetricia. Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

Objective: To establish the reference value of Peruvian

neonatal ponderal index in a group of healthy neonates born in the coast, high-land and jungle of Peru. Material and Methods: prospective, cross-sectional and descriptive study was conducted to establish a reference chart of ponderal index according to gestational age of neonates born through spontaneous vaginal deliveries from 34 to 42 gestational weeks. We calculated the percentiles 10, 50 and 90 of 99 439 deliveries from the Perinatal Data System of 29 hospitals located at the coast, high-land and jungle of Peru in 2005. We selected singleton pregnancies of healthy women and healthy neonates born by spontaneous vaginal delivery. PI was calculated by the following formula: (birthweight in grams) x 100/[crown-heel height in cm]3. Results: There were 8 844 (8,9%) healthy neonates born by spontaneous vaginal delivery. Values of PI percentile 50 (10- 90 centile] at gestational age 34,35, 36,37,38,39,40,41 and 42 were: 2,45 (2,15-2.78), 2,50 (2,18-2,85), 2,55 (2,23

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Manuel Ticona Rendón y col.

2,90), 2,59 (2,28-2,95), 2,63 (2,33-2,98), 2,67 (2,37-3,00), 2,69 (2,40-3,00), 2,69 (2,41-2,99), 2,68 (2,40-2,96) g/cm3, respectively. Neonatal PI at term were in the range 2,3 to 3,0 g/cm3, values out of this range allow us to identify fetal malnutrition. There was no difference of PI according fetal gender. Conclusions: Peruvian healthy fetus grows symmetrically as long as it is maintained in the uterus and reaches to term. The neonatal ponderal index at term range between 2,3 and 3,0 g/ cm3. Values out of this range allow us suspect fetal malnutrition. Fetal gender does not affect ponderal index. Key words: Ponderal index, weight for height, fetal malnutrition, weight for gestational age, neonate.

INTRODUCCIóN

El crecimiento intrauterino es una manifestación del bienestar fetal, y el oportuno diagnóstico antenatal detecta alteraciones del crecimiento y permite corregir el curso natural de la enfermedad fetal, y el nacimiento programado en forma interdisciplinaria asegura un mejor pronóstico de estos niños antes de nacer. Por este motivo, la antropometría es un valioso instrumento que nos permite establecer la normalidad del crecimiento intrauterino. Las variables antropométricas que usualmente se emplean son: peso, talla, perímetro cefálico; los diferentes índices derivados de la combinación de estas variables, cuando se relacionan con la edad gestacional, proporcionan mayor información (1, 2).

En neonatología es muy usado el índice ponderal (IP) (peso al nacimiento en gramos/talla en centímetros al cubo por 100), propuesto por Rohrer, en 1960, cuando este índice se aplica a los recién nacidos (RN) estima que tan pesado es un niño con respecto a su talla. Este índice puede ser de mayor utilidad para identificar a los niños desnutridos que se escapan al diagnóstico, cuando se usa en ellos la medición del peso con respecto a su edad gestacional (3-5).

La restricción del crecimiento fetal simétrico y asimétrico debe ser diagnosticada desde el nacimiento, ya que la mayoría de la morbilidad está íntimamente relacionada con esta diferencia. El IP se ha empleado como un indicador del estado nutricional de deterioro del recién nacido, ya que es útil para valorar el retardo de crecimiento intrauterino (RCIU) asimétrico (3, 6-10).

Nieto y col. (7) encontraron que la morbilidad era significativamente más elevada en los RN con restricción de crecimiento fetal asimétrico clasificados con el IP, tales como: asfixia perinatal y complicaciones médicas neonatales tempranas, principalmente hipoglicemia.

Estudios recientes señalan que el índice ponderal al nacer alto, predice niveles elevados de estradiol en la mujer adulta,

siendo este, uno de los factores asociados con un riesgo incrementado de cáncer de mama en la adultez (11). Además, el índice ponderal bajo se asocia con un mayor riesgo para la presencia de síndrome metabólico en adultos jóvenes, debido a la elevación de la concentración de triglicéridos en plasma

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y la presión arterial sistólica alta (12). En Karachi, Pakistan, se ha reportado que el 40% de los recién nacidos de peso bajo eran asimétricos, este grupo de RN presentan predisposición para diabetes mellitus, hipertensión arterial y enfermedades

coronarias (6).

La identificación temprana de la alteración del crecimiento fetal (restricción del crecimiento u obesidad) permitiría el diseño de estrategias de seguimiento para evitar los posibles riesgos metabólicos, infecciosos o del desarrollo neurológico y conductual durante el período neonatal e infantil de estos niños (1, 3).

A pesar de que se conoce de la utilidad del índice ponderal neonatal para determinar alteraciones del crecimiento fetal, existen escasas referencias sobre curvas de crecimiento intrauterino de índice ponderal para la edad gestacional (13).

En nuestro país no existe una curva de IP neonatal a nivel

nacional, siendo nuestro propósito, establecer una curva de

referencia nacional del IP neonatal según la edad gestacional de un grupo de recién nacidos sanos, hijos de mujeres peruanas sin patologías, nacidos en la costa, sierra y selva del Perú en el año 2005.

mATERIAL Y mÉTODOS

Se realizó un estudio retrospectivo, transversal y descriptivo. La información se obtuvo indirectamente de la base de datos del Sistema Informático Perinatal (SIP) de 29 Hospitales del Ministerio de Salud del Perú en el año 2005, los cuales están ubicados en la región de la costa, sierra y selva del país (Tabla 1). Esta base de datos ha sido empleada por los autores para realizar investigaciones anteriores relacionadas al crecimiento fetal en el Perú (2, 14, 15).

En una primera etapa, se calculó el IP neonatal de todos los embarazos de mujeres sanas con feto único que presentaron parto vaginal espontáneo (eutócico), y que tuvieron un niño sano al nacer. En la segunda etapa, se calculó el IP neonatal de todos los embarazos de mujeres sanas con feto único que presentaron parto distócico (parto inducido, estimulado con ocitocina y parto por cesárea) y que tuvieron un niño sano al nacer. Se excluyó a las madres con edad menor de 15 y mayor de 35 años, primíparas, con más de tres partos, fumadoras, desnutridas (índice de masa corporal materno menor de 20 kg/m2), obesas (índice de masa corporal mayor de 29,9 kg/m2), con gestación múltiple, con diagnóstico

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Curva de referencia peruana de Índice ponderal neonatal para la edad gestacional

antenatal de restricción del crecimiento fetal, hipertensión arterial crónica, hipertensión arterial inducida por el embarazo, cardiopatía, anemia, diabetes mellitus, intervalo genésico menor de un año y mayor de 5 años, neonatos con malformaciones congénitas mayores y aquellos embarazos donde existía una diferencia mayor de + 2 semanas entre la edad gestacional por FUM y por examen físico del RN.

Para la elaboración de la curva de IP para la edad

gestacional, se seleccionaron 8 844 registros de ambos sexos correspondientes a las semanas 34 a 42 de edad gestacional por FUM confiable.

Con el peso y talla al nacimiento, se calculó el IP [peso al nacimiento en gramos/(talla en centímetros)3 x100)]. Se calcularon los percentiles de las distribuciones del mencionado índice para cada edad gestacional, desde la semana 34 a la 42 de edad gestacional según FUM. Posteriormente, se elaboró la tabla y curva con los percentiles 10, 50 y 90, alisadas con el polinomio de tercer orden, empleando el programa Microsoft Excel. Se elaboró la tabla y gráfico de IP según sexo del RN. Se comparó las curvas de IP neonatal de parto eutócico (vaginal espontáneo) y distócico (inducción o parto operatorio).

Tabla 1. Distribución de la población (n = 99 439) según establecimientos del Ministerio de Salud, Perú 2005.

Hospital (ciudad) Nacimientos

Costa 59 897

H. de Apoyo de Sullana (Sullana) 4 151 H. Belén (Trujillo) 3 488 H. Regional Docente (Trujillo) 3 661 Instituto Materno Perinatal (Lima) 17 575 H. San Bartolomé (Lima) 7 050 H. Nacional Hipólito Unánue (Lima) 8 834 H. María Auxiliadora (Lima) 8 897 H. Regional de Ica (Ica) 1 876 C.S. Kennedy (Ilo) 646 H. Hipólito Unánue (Tacna) 3 719 Sierra 24 492

H. Regional de Cajamarca (Cajamarca) 2 416 H. Hermilio Medrano (Huánuco) 1 031 H. Víctor Ramos (Huaraz) 2 001 H. Daniel A. Carrión (Huancayo) 2 815 H. El Carmen (Huancayo) 1 868 H. de Apoyo de Huancavelica (Huancavelica) 693 H. Regional de Ayacucho (Ayacucho) 2 931 H. Subregional de Andahuaylas (Andahuaylas) 1 292 H. Antonio Lorena (Cusco) 1 810 H. Regional del Cusco (Cusco) 2 792 H. Goyeneche (Arequipa) 2 395 H. de Moquegua (Moquegua) 845 H. M. Núñez Butrón (Puno) 1 603 Selva 15 050

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H. de Apoyo de Iquitos (Iquitos) 3 623 H. Regional de Loreto (Iquitos) 2 725 C. Materno Perinatal (Tarapoto) 2 175 H. de Apoyo Yarinacocha (Pucallpa) 2 184 H. Regional de Pucallpa (Pucallpa) 2 840 H. Santa Rosa (Puerto Maldonado) 1 503 Nacional 99 439

RESULTADOS

De un total de 99 439 nacimientos, se encontró 8 844 (8,9%) RN sanos de madres sin patología. Debido a que el número de neonatos debe ser mayor de 20 en cada edad de gestación para incluirlo en la curva propuesta de IP, se excluyó a los neonatos menores de semana 34.

De la población neonatal seleccionada, el 2,5% tuvieron edad gestacional menor a 37 semanas. Se observó que el 95,8% (8 474/8 844) de los nacimientos ocurrieron entre la semana 37 y 41; mientras que, en edades gestacionales extremas, el número de casos tiende a disminuir.

La tendencia de los valores del IP es de aumentar con la edad gestacional hasta estabilizarse entre las semanas 37 a 41.

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Manuel Ticona Rendón y col.

Los valores del IP de 8 844 neonatos de ambos sexos según la edad gestacional se muestra en la Tabla 2. La gráfica 1 muestra los valores del IP neonatal en percentiles para cada edad gestacional en ambos sexos.

El IP de RN masculino y femenino se muestra, en la Tabla 3. No se encontraron diferencias significativas en el IP neonatal entre el sexo masculino y femenino, ya que el promedio de IP de los neonatos masculinos fue 2,71 g/cm3 y el de femeninos 2,72 g/cm3 (p>0,05). Estos valores se compararon en la Gráfica 2.

La Tabla 4 y Gráfica 3 muestran los valores de IP en RN de parto eutócico (vaginal espontáneo), donde no se empleo ocitocina y se compara con el IP en RN de parto distócico (inducción o parto operatorio). Los percentiles del IP de los neonatos que nacieron vía vaginal espontáneo difieren del neonato sano que nació de parto distócico. El IP promedio de los RN de parto eutócico fue 2,71 g/cm3, y de los RN nacidos de parto distócico 2,80 g/cm3, siendo esta diferencia estadísticamente significativa (p< 0,01).

La Tabla 5 y Gráfica 4 muestran los valores del IP neonatal del percentil 50 de RN a término de estudios realizados en varios lugares por diferentes autores. Los valores del IP neonatal en el Perú son menores a los valores de otros estudios reportados.

Tabla 2. Índice ponderal neonatal en 8.844 recién nacidos sanos de madres sin patología en 29 Hospitales del Ministerio de Salud del Perú. Año 2005.

Edad Casos PERCENTIL Gestacional No. 10 50 90 34 24 2,15 2,45 2,78

p90

34 15 2,17 2,45 35 33 2,19 2,49

35 59 2,18 2.50 2,85 36 141 2.23 2,55 2,90 37 550 2,28 2,59 2,95 38 1 952 2,33 2,63 2,98 39 2 807 2,37 2,67 3,00 40 2 391 2,40 2,69 3,00 41 774 2,41 2,69 2,99 42 146 2,40 2,68 2,96

Gráfica 1. Indice Ponderal para la edad gestacional (ambos sexos)

Tabla 3. Índice Ponderal de recién nacidos de sexo masculino (n=4 544) y femenino (n=4 300). Hospitales del Ministerio de Salud del Perú. 2005.

EG mASCULINO FEmENINO n p10 p50

Page 48: Revista pediatria interior

P90 n p10 p50

2,82 9 2,14 2,44 2,82 2,85 26 2,20 2,49 2,85

36 77 2,22 2,54 2,89 64 2,25 2,55 2,91 37 297 2,27 2,58 2,93 253 2,30 2,60 2,95 38 1 053 2,32 2,62 2,96 899 2,35 2,64 2,99 39 1 421 2,37 2,65 2,99 1 386 2,39 2,67 3,01 40 1 218 2,40 2,67 3,00 1 173 2,42 2,69 3,02 41 359 2,41 2,67 2,99 415 2,45 2,70 3,00 42 71 2,39 2,65 2,95 75 2,47 2,70 2,96

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Curva de referencia peruana de Índice ponderal neonatal para la edad gestacional

Gráfica 3. Percentiles 10, 50 y 90 de índice ponderal neonatal de

Gráfica 2. Percentiles 10, 50 y 90 de índice ponderal neonatal de

fetos sanos de parto eutócico y distócico en Hospitales del Ministerio

fetos femeninos y masculinos sanos en Hospitales del Ministerio de

de Salud. Año 2005.

Salud. Año 2005

Tabla 4. Comparación de índice ponderal de recién nacidos sanos de parto eutócico y distócico. Hospitales del Ministerio de Salud. Año 2005.

EG PARTO EUTóCICO PARTO DISTóCICO n p10 p50 p90 n p10 p50 p90 34 24 2,15 2,45 2,78 17 2,05 2,49 2,87 35 59 2,18 2,50 2,85 33 2,16 2,55 2,95 36 141 2,23 2,55 2,90 68 2,25 2,60 3,01 37 550 2,28 2,59 2,95 266 2,32 2,65 3,07 38 1 952 2,33 2,63 2,98 834 2,38 2,69 3,11 39 2 807 2,37 2,67 3,00 793 2,42 2,73 3,15 40 2 391 2,40 2,69 3,00 552 2,45 2,77 3,19 41 774 2,41 2,69 2,99 206 2,46 2,80 3,24 42 146 2,40 2,68 2,96 36 2,46 2,82 3,29

DISCUSIóN

El estado nutricional del RN puede evaluarse mediante métodos antropométricos, clínicos, bioquímicos, físicos e imagenológicos (1). La antropometría neonatal consiste en la valoración clínica del crecimiento fetal mediante el registro de las mediciones somatométricas, tales como el peso, la talla, el perímetro cefálico, y los diferentes índices derivados de la combinación de estas variables cuando se relacionan con la edad gestacional. La antropometría neonatal en relación a la edad gestacional es un instrumento práctico, económico y eficaz de valoración del desarrollo somático fetal (11).

La relación peso/talla se usa para juzgar si el peso de un individuo es apropiado para su talla. En neonatología es muy usado el IP, también llamado índice de Rohrer (peso

al nacimiento en gramos/talla en centímetros al cubo por 100), el cual nos permite detectar estado de malnutrición fetal (desnutrición u obesidad) (13). El IP neonatal incorpora a la evaluación antropométrica del RN indicadores de proporcionalidad y composición corporal, los cuales reflejan las alteraciones de las reservas energéticas y proteicas del feto, permitiendo mejorar el diagnóstico y estimar las necesidades para su adecuado crecimiento. Así, el IP nos permite distinguir a los RN como desnutridos u obesos simétricos y asimétricos (13, 20, 21). La mejor manera para evaluar la relación peso y talla del RN, es mediante el IP, este cálculo es más fidedigno para demostrar malnutrición fetal (12). El IP con percentil debajo del 5 identifica al desnutrido fetal asimétrico, el IP entre los percentiles 5 y 10

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señala al desnutrido fetal simétrico, el IP entre los percentiles

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Manuel Ticona Rendón y col.

10 y 90 señala al feto de crecimiento normal, el IP entre los percentiles 90 a 95 identifica a los obesos simétricos y el IP mayor del percentil 95 identifica a los obesos asimétricos (21). Así, de un total de 47 147 nacimientos registrados en el SIP del Hospital San Bartolomé en Lima entre los años 1991 y 1999, 40 767 neonatos tuvieron peso AEG (86,4%). De los neonatos con peso AEG, 592 (1,45%) eran obesos y 3 141 (7,7%) eran desnutridos según el IP. Presentaron peso PEG 3 485 neonatos (7,4%). De los neonatos con peso PEG, 58 (1,66%) eran obesos y 1 323 (38%) eran desnutridos según el IP. Presentaron peso GEG 3 239 neonatos (6,9%). De los neonatos con peso GEG, 149 (4,6%) eran obesos y 23 (0,7%) eran desnutridos. Usualmente, el 7% de los RN con peso adecuado para la edad de gestación son desnutridos y el 6% son obesos cuando se aplica el IP. Por lo tanto, en los RN con peso adecuado para la edad de gestación, el 13% presenta algún grado de malnutrición fetal que solo puede ser identificado con el empleo del IP (3).

Desde un punto de vista práctico, los neonatos con restricción en el crecimiento fetal pueden distribuirse en dos grandes grupos: 1) Armónicos o simétricos, constituido por los neonatos con IP normal pero peso, perímetro cefálico y talla por debajo del percentil 10 (33% de niños con retraso de crecimiento intrauterino, RCIU) y 2) Disarmónicos o asimétricos, constituido por los neonatos con IP bajo y peso por debajo del percentil 10, pero talla y perímetro cefálico adecuados (55% de los niños con RCIU) (22).

Si bien el sexo es un factor que modifica los valores antropométricos, nosotros hemos encontrado que el IP no se afecta según el sexo fetal. Por lo tanto, los recién nacidos de sexo masculino y femenino pueden ser evaluados empleando una sola curva estándar. Este hallazgo concuerda con lo reportado en la mayoría de estudios (1, 3, 8, 13).

El resultado del presente estudio señala que el feto sano, hijo de una madre sana, en el Perú, crece en forma simétrica conforme aumenta el tiempo de gestación manteniendo IP entre el percentil 10 y 90. El 95,8% (8 474/8 844) de los neonatos sanos nacieron entre la semana 37 y 41 y el IP se mantuvo entre 2,28 y 2,99 g/cm3 (Tabla 2). En esta tabla observamos, además, que los neonatos que nacen antes de la semana 37 presentan menor IP, y cuanto menor es la edad de nacimiento, menor son los valores del IP y menor es la posibilidad que estos niños nazcan sanos. Estos resultados nos señalan que el recién nacido prematuro se asocia a la desnutrición fetal; y cuanto más prematuro es el recién nacido, es más probable que el niño se encuentre enfermo debido a que la prematuridad es consecuencia de un insulto crónico a la unidad materna-fetal (24). Así, no hemos encontrado RN sano antes de la semana 34 en el Perú. Por lo tanto, los valores de IP menores a 2,3 g/cm3 nos permiten

diagnosticar desnutrición fetal, y valores mayores de 3,0 g/ cm3, nos permiten diagnosticar obesidad fetal.

Los percentiles del IP de los neonatos que tuvieron nacimiento por vía vaginal espontáneo fueron estadísticamente menores (p<0,01) que los neonatos que nacieron de parto distócico, (Tabla 4, Gráfica 3). Esto obedece a que los nacimientos

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por cesárea, o los partos donde se emplea la ocitocina, son el resultado de desproporción feto-pélvica. Con mayor frecuencia la desproporción feto-pélvica es consecuencia del mayor tamaño fetal, macrosomía u obesidad fetal (21, 24). Los fetos obesos tienen 3 veces mayor probabilidad de tener parto distócico que los fetos normales (25).

Los valores del IP neonatal en el Perú, encontrados según este estudio (2.28-2.99), son menores a los reportados por Buzzio (13) en el Hospital San Bartolomé en Lima (2.42-3.03), Caiza (3) en el Hospital de Clínicas en el Uruguay (2.40-3.17), Juez en el Hospital Clínico de la Universidad Católica de Santiago de Chile (2.43-3.10) (16) y Gonzales (17) quien revisó los certificados del Registro Civil de Chile (2.38-3.06), Martins

(18) en la Maternidad Santa Mónica de Alagaos en Brasil (2.25-3.10); y son mayores a lo reportado por Ticona (19) en el Hospital Hipólito Unánue de Tacna (2.18-2.98). Creemos que estas diferencias se deben, principalmente, a la diferente metodología utilizada en la selección de la población de estudio. En este estudio se han considerado a RN sanos, provenientes de madres sin patología y de partos vaginales espontáneos. Este último criterio de selección no ha sido considerado en ninguno de los estudios mencionados; y creemos que es muy importante considerarlo debido a que de esta forma excluimos a los fetos que nacen de parto distócico por desproporción feto-pélvica debido a trastorno del crecimiento fetal. Además, los estudios reportados hasta el momento provienen de poblaciones con características diferentes. Estas diferencias también han sido encontradas por Carbajal y col. (25) en Chile, quienes demuestran diferencias en el diagnóstico de RCIU mediante el índice ponderal por debajo del percentil 10, al emplear dos curvas diferentes: la de Gonzales (17), que considera a población no seleccionada y la de Juez (16), que considera población seleccionada de madres y RN sanos. Nosotros proponemos que esta curva de IP neonatal sea empleada en el país para determinar con mayor certeza el estado de nutrición del RN en el Perú. La Organización Mundial de la Salud recomienda que cada población establezca sus propias tablas de crecimiento intrauterino de referencia (26).

Los neonatos aparentemente sanos de gestaciones pretérmino (<37 semanas) y los nacidos despues de la semana 41 presentan menores valores de IP. Este hallazgo

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Curva de referencia peruana de Índice ponderal neonatal para la edad gestacional

nos revela tres mensajes de utilidad en la práctica clínica: 1) que los fetos nacidos a término de parto vaginal espontáneo entre la semana 37 a 41 se asocian a un estado nutricional normal; 2) los fetos prematuros (<37 semanas) y los fetos postmaduro (>41 semanas) se asocian a desnutricion fetal y 3) que el concepto de normalidad del niño luego del nacimiento no debiera basarse solamente en cálculos estadísticos (percentiles), sino en la evaluación clínica a largo plazo del ser humano. El concepto de normalidad debe contemplar el seguimiento a largo plazo del individuo, debido a que la mayoría de las anomalías congénitas son de naturaleza funcionales, las cuales se manifiestan durante el desarrollo del niño. Así, se ha reportado que, al primer año de nacimiento, la tercera parte de los neonatos a término con restricción del crecimiento fetal y/o PEG presentan anormalidades neurológicas (27, 28).

De un total de 99 439 nacimientos ocurridos el año 2005 en 29 hospitales del MINSA situados en la región de la costa, sierra y selva del Perú, hemos encontrado que la depresión neonatal (Apgar menor de 7 en minuto 5) y la frecuencia de reanimación neonatal fueron significativamente mayores en los nacimientos antes de la semana 38 y luego de la semana

41. La asfixia perinatal fue dos veces mayor a partir de la semana 42 con respecto a los nacimientos ocurridos entre la semana 38 a 41 (29). Esta información apoya el concepto de inducir los embarazos a partir de la semana 41 si es que el parto no se ha producido espontáneamente a fin de disminuir la morbilidad y la muerte perinatal. La revisión de 19 ensayos clínicos randomizados apoya esta propuesta (30). En conclusión, el feto sano en el Perú crece en forma simétrica, conforme aumenta el tiempo de gestación. El índice ponderal normal en el RN a término varía entre 2,3 y 3,0 g/cm3. Valores fuera de estos límites nos permiten determinar estados de malnutrición fetal. El índice ponderal del feto sano no es influenciado por el sexo.

AGRADECImIENTO

Los autores agradecen la colaboración de los médicos que laboran en los hospitales del Ministerio de Salud que participaron en este estudio: COSTA: Víctor García, Gina Rossi (Hipólito Unanue, Tacna); Karina Flores, Yulino Soto (Centro Referencial Kennedy, Ilo); Julia Neyra, William Valdez (Apoyo Departamental, Ica); Wilfredo Ingar, Percy Pacora (San Bartolomé, Lima); Teófilo Jara, Rosmary Hinojosa (Instituto Materno Perinatal, Lima); Andrés Kobashigawa, Victoria Reto, Carlos Mejía (Nacional Hipólito Unanue, Lima); Luz Parra, Sonia Hermoza, Ovidio Chumbe (Apoyo María Auxiliadora, Lima); Gonzalo Caro, Silvia Ayquipa (Regional Docente, Trujillo); Roger Costa, Segundo Cruz, Humberto Liu (Belén, Trujillo), José Oña (Apoyo, Sullana).

SIERRA: Martha Bejar, Daniel Reynoso, Walter Lazo (Apoyo, Moquegua); Luis Enriquez (Regional Manuel Núñez, Puno); Yuri Monteagudo, Ludgardo Astorga (Regional, Cusco); Hermógenes Concha, Andrea Rondón (Apoyo Lorena, Cusco); Walter Altamirano, Roberto Montoya (Apoyo,

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Andahuaylas); Percy Bellido, César Solórzano (Goyeneche, Arequipa); Víctor Salcedo (Apoyo, Huamanga); Félix Campos, Karin Fernández (Apoyo, Huancavelica); Enrique Huamán, Evert Huayanay (El Carmen, Huancayo); Edwin Tito, Luis Chirinos (Daniel A. Carrión, Huancayo); Edwin Bauer, Mauro Miraval (Regional, Huánuco); Amelia Pajuelo, Juan Cerna (Víctor Ramos Guardia, Huaraz); Iván Aurazo, Carmen Sagastegui (Regional, Cajamarca). SELVA: Pio Cárdenas, José Miguel Basurco (Santa Rosa, Puerto Maldonado); Luis Makiya, Hugo Noriega (Regional, Pucallpa); César Arana, Norma Riva (Apoyo, Yarinacocha); Juan Carlos Mata, Enrique Obeso (Centro Materno Perinatal, Tarapoto); Miguel Mestanza, Javier Vásquez (Regional, Loreto); Hermann Silva, Víctor Torres (Apoyo, Iquitos). Y a todo el personal de obstetricia y cómputo que procesa el Sistema Informático Perinatal. Nuestro agradecimiento especial al Instituto Nacional de Salud por su apoyo técnico y financiero.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Correspondencia: Manuel Ticona Rendón [email protected]

Recibido: 07-08-08

Aceptado: 13-04-09

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Curva de referencia peruana de Índice ponderal neonatal para la edad gestacional

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

TEMAS DE REVISIÓN Solución salina hipertónica en el tratamiento de la

enfermedad pulmonar en fibrosis quística Treatment of cystic fibrosis pulmonary disease with hypertonic saline

solution

Manuel Arteta 1

RESUmEN

La fibrosis quística es una enfermedad multisistémica con afección predominante de vías respiratorias. La causa predominante de morbi-mortalidad es el compromiso respiratorio. Uno de los fenómenos fisiopatológicos primarios en fibrosis quística es la depleción de la capa líquida de la superficie de las vías respiratorias. La enfermedad pulmonar se debe a la incapacidad del epitelio de las vías respiratorias para mantener hidratada su superficie. La causa fundamental del daño pulmonar es la obstrucción de bronquios y bronquiolos por secreciones espesas, infección endobronquial y enfermedad obstructiva progresiva. El mecanismo de acción de la solución salina hipertónica sería la restauración de la capa de líquido superficial del epitelio respiratorio por medio de la introducción de un gradiente osmótico en la superficie de las vías respiratorias. La presente revisión enfoca el uso de la solución salina hipertónica, y nos da la oportunidad de revisar un aspecto fundamental de la fisiopatología de la enfermedad y entender la importancia relativa de una de las terapias menos costosas en el manejo crónico de enfermedad pulmonar en fibrosis quística. Palabras clave: Fibrosis quística, solución salina hipertónica

AbSTRACT

Cystic fibrosis is a multisystemic disease that predominantly affects the airways. The main cause of morbidity and mortality is the respiratory compromise. The depletion of the airway surface liquid is felt to be one of the main pathophysiologic events. The pulmonary disease is caused by the inability of the airways to keep their surface hydrated with airway plugging, infection and progressive

Medico Pediatra -Neumólogo Pediatra. Assistant Professor, University of Michigan. Pediatric Pulmonary Division obstructive lung disease. The mechanism of action of hypertonic saline is felt to be the restoration of the airway surface liquid with the introduction of an osmotic gradient on the surface of the airways. This review focuses on the use of hypertonic saline because it gives us the opportunity

to discuss a fundamental pathophysiologic aspect of the disease and understand the relative importance of one of the less expensive therapies for the pulmonary disease in cystic fibrosis. Key words: Cystic fibrosis, hypertonic saline solution.

INTRODUCCION

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La fibrosis quística (FQ) es una enfermedad autosómica recesiva causada por una mutación en el cromosoma 7 del gen que codifica la proteína CFTR (Cystic Fibrosis Trasmembrane conductance Regulator). Hasta la fecha se han identificado más de 1400 mutaciones patogénicas de este gen (1). La proteína producida funciona como un canal de cloro (2, 3) presente en la membrana citoplasmática de células epiteliales (4). Además de participar en la secreción de cloro, esta proteína tiene como función secundaria la regulación de la absorción de sodio en el epitelio bronquial (5), manteniendo así la homeostasis del volumen del líquido periciliar.

La FQ es una enfermedad multisistémica con afección predominante de vías respiratorias y el páncreas. La causa predominante de morbilidad y mortalidad en FQ es el compromiso respiratorio; por esta razón, la mayoría de intervenciones terapéuticas se han concentrado en disminuir la enfermedad broncopulmonar. La función pulmonar, específicamente el Flujo espiratorio en el primer segundo (FEV1), es un poderoso índice predictor de supervivencia (6). La expectativa de vida ha mejorado tremendamente en las pasadas 2-3 décadas a pesar de la falta de un tratamiento dirigido a la falla metabólica primaria; esta mejoría se debe, principalmente, a un mayor entendimiento de la fisiopatología de la enfermedad y a un tratamiento sistematizado. Actualmente, la expectativa de vida media en los Estados Unidos es de 36.9 años (7). La FQ tiene mayor prevalencia en la población caucásica, pero está presente en otros grupos raciales como poblaciones hispanas/latinas, negras y asiáticas.

En las vías respiratorias normales existe una capa líquida entre la superficie citoplasmática del epitelio respiratorio y la capa

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Manuel Arteta

de moco superficial. Los cilios del epitelio respiratorio realizan su movimiento sincrónico en la capa líquida y mueven la capa de moco en sentido proximal, produciendo un transporte mucociliar óptimo que elimina elementos extraños, incluyendo microorganismos patógenos de la vía respiratoria. Uno de los fenómenos fisiopatológicos primarios en FQ es la depleción de la capa líquida de la superficie de las vías respiratorias

(8, 9)

, a causa de la incapacidad del CFTR defectuoso para controlar coordinadamente la absorción de sodio y secreción de cloro en el epitelio respiratorio. Esta depleción isotónica del líquido superficial del epitelio respiratorio produciría colapso de la zona ciliar y subsecuente inhabilidad para movilizar las secreciones endobronquiales. La enfermedad pulmonar en FQ se debe a la incapacidad del epitelio de las vías respiratorias para mantener hidratada su superficie. El transporte mucociliar se ve sumamente disminuido en las vías respiratorias deshidratadas con la consecuente adherencia del moco a la superficie de las mismas. La causa fundamental del daño pulmonar es la obstrucción de bronquios y bronquiolos por secreciones espesas y deshidratadas con la subsecuente infección endobronquial que produce una reacción inflamatoria piogénica, daño pulmonar irreversible y enfermedad obstructiva progresiva (10, 11).

Tratamiento de la enfermedad pulmonar:

El régimen terapéutico habitual en el manejo de la enfermedad pulmonar en FQ consiste en medidas para optimizar la remoción de secreciones endobronquiales (fisioterapia respiratoria y alfa dornasa), disminuir la carga bacteriana que coloniza las vías respiratorias (antibióticos inhalados como tobramicina y colistin) y modular la respuesta inflamatoria (azitromicina e ibuprofeno) (12). La adición más reciente a este régimen terapéutico es la solución salina hipertónica nebulizada.

El mecanismo de acción propuesto para el uso de la solución salina hipertónica es la restauración de la capa de líquido superficial del epitelio respiratorio por medio de la introducción de un gradiente osmótico en la superficie de las vías respiratorias de pacientes con FQ (13, 14). Si la hipótesis de la depleción isotónica del líquido superficial del epitelio respiratorio en la patogénesis de FQ es correcta, esta sería la primera intervención terapéutica a gran escala que actuaría sobre la causa subyacente de la enfermedad pulmonar. El manejo de la infección e inflamación de las vías respiratorias está dirigido a contrarrestar el efecto posterior de dicha depleción.

En pacientes con FQ, la nebulización de solución salina hipertónica produce un incremento del trasporte mucociliar e incrementa la expectoración de esputo (15). Eng et.al. llevaron a cabo un estudio para evaluar el efecto del uso de solución salina hipertónica en la función pulmonar de pacientes con FQ (16). Estos investigadores estudiaron el efecto de 14 días de tratamiento con 10 ml de solución salina hipertónica al 6%

vía nebulizador ultrasónico dos veces al día en 58 pacientes,

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la mayoría en edad pediátrica que reportaron un incremento de 15% en FEV1 en el grupo que recibió tratamiento en comparación con un incremento de 2.8% en el grupo placebo. Es de notar que dos semanas después de descontinuar el tratamiento el FEV1 retornó a los valores iniciales. Este estudio demostró que la administración de solución salina hipertónica mejora temporalmente (a corto plazo) la función pulmonar en pacientes con FQ. Investigaciones subsiguientes no lograron demostrar un beneficio de magnitud semejante en la función pulmonar. La revisión Cochrane más reciente sobre el uso de solución salina hipertónica en FQ concluyó que su uso produce una mejoría en la función pulmonar en comparación al placebo, pero la mejoría no es tan marcada como la obtenida con alfa dornasa (17).

El estudio multicéntrico más grande hasta la fecha fue llevado a cabo por Elkins y colaboradores (18). Estos investigadores estudiaron el efecto de 48 semanas de tratamiento con 4 ml de solución salina hipertónica al 7% o solución salina al 0.9% dos veces al día sobre la velocidad de pérdida de función pulmonar, frecuencia de exacerbaciones y calidad de vida en 164 pacientes con FQ. Este estudio demostró un modesto efecto beneficioso en la función pulmonar, pero una disminución en 56% en la frecuencia de exacerbaciones pulmonares en el grupo de tratamiento en comparación con el grupo control. Esta disminución en la frecuencia de exacerbaciones en el rango del 50% con el uso crónico de solución salina hipertónica en FQ es similar al efecto del uso crónico de azitromicina (19, 20) y superior al efecto de alfa dornasa y tobramicina nebulizada que es de una magnitud de 30 % (21, 22) y 25% (23), respectivamente.

La administración de solución salina hipertónica en el tratamiento de la enfermedad pulmonar en FQ produce una baja tasa de reacciones adversas. El efecto adverso más común es tos, y en algunos pacientes también se ha reportado broncoespasmo transitorio; por esta razón, es recomendable la administración de un broncodilatador de acción rápida, como el salbutamol, antes de la administración de solución salina hipertónica (24). El sabor salado puede considerarse también una reacción adversa especialmente en la población pediátrica más joven donde pudiera impedir el uso crónico de esta forma de tratamiento.

La solución salina hipertónica al 3%, 7%, y 12% produce un efecto beneficioso dosis dependiente en el transporte mucociliar en este rango de concentraciones (25), pero se produce mayor irritación de la vía respiratoria superior con la solución al 12%. Actualmente la dosis habitual es de 4 a 5 ml de solución salina al 7% dos veces al día. El tratamiento de la enfermedad pulmonar en FQ requiere de una serie de intervenciones que muchas veces incluyen más de una terapia inhalatoria. No existe consenso en la secuencia en la que deben aplicarse estas terapias, pero la

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Solución salina hipertónica en el tratamiento de la enfermedad pulmonar en Fibrosis Quística

siguiente secuencia es una forma práctica de administrarlas: broncodilatador inhalado, solución salina hipertónica, alfa dornasa, fisioterapia respiratoria y antibióticos inhalados (12).

Recientemente, una solución salina hipertónica lista para ser nebulizada ha sido introducida al mercado en los Estados Unidos. Antes de la introducción de este medicamento la solución al 7% se obtenía al mezclar 6 ml de NaCl al 10% con 3 ml de NaCl al 0.9% (26). Debido a que no existe información concerniente a la estabilidad y esterilidad de esta solución es recomendable desechar la solución restante después de producir cada dosis para minimizar el riesgo de contaminación.

Pautas para el tratamiento de pacientes con FQ publicadas recomiendan el uso de solución salina hipertónica en pacientes de 6 años o más en quienes se sabe que el uso crónico de solución salina hipertónica mejora la función pulmonar y reduce las exacerbaciones(12). Esta forma de tratamiento no es tan costosa como otros medicamentos usados en el tratamiento de la enfermedad pulmonar en FQ, no necesita refrigeración y es bien tolerada, pero siempre debe ser precedida por la administración de un broncodilatador inhalatorio. Como se ha mencionado líneas arriba, esta forma de tratamiento conceptualmente trata el fenómeno inicial (deshidratación de las vías respiratorias), pero debe ser usado en conjunción con el resto de intervenciones terapéuticas para la enfermedad pulmonar conforme estén indicadas en cada paciente con FQ. Aún no existen reportes del uso de la solución salina hipertónica en infantes y niños menores con FQ. De momento se sabe que la solución salina hipertónica al 7% es bien tolerada en este grupo etario (27), pero aún no existen estudios del impacto de esta forma de tratamiento en el transporte mucociliar, función pulmonar o frecuencia de exacerbaciones.

En conclusión, la solución salina hipertónica es la primera forma de tratamiento a gran escala que intenta corregir el fenómeno fisiopatológico inicial en FQ. Es una forma de terapia efectiva y no muy costosa para el tratamiento de la enfermedad pulmonar y, por lo tanto, más fácilmente adoptable que otras intervenciones terapéuticas en las cuales el costo es un factor limitante, especialmente para aquellos pacientes que viven en zonas en las que los sistemas de salud tienen

severas limitaciones económicas.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Page 65: Revista pediatria interior

Manuel Arteta

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Recibido: 15-02-09

Aceptado: 19-03-09

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

Adenopatías cervicales en niños

Neck ´s adenopathies in children

Gloria Paredes Guerra 1, Fernando Huerta Mesones 2, Jenny Gerónimo Meza 3, Mónica Oscanoa Gutiérrez 4 Ciro Liberato Ramón 5

RESUmEN

Las adenopatías constituyen uno de los hallazgos más frecuentes en la praxis pediátrica, resultado de una combinación variable de hiperplasia e hipertrofia, que pueden presentarse en forma aislada o formando parte de un contexto clínico complejo y de amplio espectro causal. Evidenciando la causa maligna en el 15 a 20% de los casos. Palabras clave: Adenopatías, hiperplasia, hipertrofia, leucemia, linfomas.

AbSTRACT

The adenopathy is pathology very frequently in paediatric area. These adenopathies can increase by hypertrophy and hyperplasic, alone or in group by different causes. The malignancy is present for 15 to 20 % of children. Key words:Adenopathy, hyperplasy, hypertrophy, leukemia, lymphoma.

CONCEPTO DE ADENOPATíA PATOLóGICA

Es el aumento de tamaño, número y consistencia de los ganglios linfáticos. Puede ser el ganglio que se vuelve visible

o palpable y no tiene sensibilidad, no hay dolor. Los criterios más aceptados están basados en la combinación de la edad, localización y tamaño (1).

CRITERIOS

Se considera adenopatía patológica:

� En el RN de cualquier localización mayor de 0.3 - 0.5 cm. de tamaño. � Si es cervical o inguinal mayor de 1.5 - 2 cm. en edad inferior a 14 años. � Si es de otra localización superior a 0.5 �1 cm en cualquier CLASIFICACIóN DE LAS ADENOPATíAS CERVICALES POR SU ORIGEN edad (1).

1. Adenitis agudas: 1.1. Adenitis agudas inespecíficas 1 Pediatra Oncóloga. Máster Economía de la Salud. Hospital 1.2. Adenoflemones Nacional Edgardo Rebagliati-Oncosalud-Clínica Tezza 2 Cirugía de Cabeza y Cuello Maxilofacial. Hospital Nacional

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2. Adenitis crónicas:Edgardo Rebagliati. Clínica Stella Maris

2.1. Adenitis crónicas infecciosas:3 Oncóloga Pediatra. Hospital Nacional Edgardo Rebagliati.

Clínica Santa Mónica 2.1.1. Tuberculosis 4 Oncóloga Pediatra. Hospital Nacional Edgardo Rebagliati 2.1.2. VIH 5 Médico Residente de Oncología Pediátrica. Hospital

2.1.3. Mononucleosis infecciosaNacional Edgardo Rebagliati

2.1.4. Toxoplasmosis 2.1.5. Enfermedad por arañazo del gato 2.1.6. Rubéola

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Gloria Paredes Guerra y col.

2.1.7. Sífilis 2.1.8. Brucelosis 2.1.9. Tularemia 2.2.Adenitis crónicas no inflamatorias

2.2.1. Colagenosis, lupus eritematoso diseminado 2.2.2. Poliartritis juvenil. 2.2.3. Enfermedad del suero 2.2.4. Tesaurismosis (enfermedad del suero) 2.2.5. Secundarias a ingesta de hidantoinas (anticonvulsivantes) 2.2.6. Enfermedad de Gaucher 2.2.7. Enfermedad de Niemann-Pick CLASIFICACIóN DE LAS ADENOPATÍAS POR SU PATOLOGÍA:

1. A)Adenopatía Cervical tumoral benigna: Histiocitosis (2, 3)

2. Adenopatía cervical tumoral maligna de localización primaria cervical: Leucemia aguda Linfoma Non Hodgkin Enfermedad de Hodgkin (consistencia semejante al caucho) (4, 5)

3. Adenopatía cervical tumoral maligna metastásica: Neuroblastoma

Cáncer de tiroides (se acompaña de disfonía)

Sarcomas

Retinoblastoma.

mETÁSTASIS

Constituyen un 85% de las tumoraciones malignas del cuello. Un 85% tiene su origen en tumores de cabeza y cuello (por arriba del nivel de las clavículas) y sólo un 15% se origina por debajo del nivel de las clavículas. Las adenopatías cervicales constituyen la primera manifestación de un tumor de cabeza y cuello en 1/3 de casos.

Las exploraciones a realizar dependerán de la sospecha diagnóstica, teniendo en cuenta la edad, características, número y localización (1-5)

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CLASIFICACIóN POR SU EXTENSION

Generalizadas: se presentan a nivel cervical, axilar, inguinal, popliteo, mediastino y/o abdominal. Regionales: en cabeza y cuello, en tórax, en abdomen y/o en extremidades.

CARACTERÍSTICAS DE LAS ADENOPATÍAS

CERVICALES

� Las más frecuentes en niños. � La región comprende unos 300 nódulos linfáticos. Gráfica 1 � Todos los grupos están íntimamente relacionados. � La causa más frecuente es la virosis. � Etiología maligna en un 15 � 20 %. � 50% detrás del músculo ECM son malignas. (6-8) Gráfica 1. Cadenas ganglionares cervicales

NIVELES GANGLIONARES

Los ganglios cervicales se distribuyen en diferentes áreas del cuello, para ello existe una clasificación anatómica a través de la cual se localizan y ello contribuye a una disección más específica y segura. Dicha clasificación la utilizan los cirujanos pediatras y cirujanos de cabeza y cuello. Tabla 1 y Gráfica 2.

Tabla 1. Niveles ganglionares

Nivel I : Ganglios submentonianos y submandibulares. Nivel II: Ganglios yugulares superiores o yugulodigástricos, suboccipitales y mastoideos. Nivel III: Ganglios yugulares medios o yugulocarotideos medios. Nivel IV: Ganglios yugulares inferiores, yugulocarotideos inferiores o Supraclaviculares mediales. Nivel V: Ganglios del triángulo supraclavicular o triángulo posterior. Nivel VI: Agruparía a los ganglios del compartimento

anterior

Nivel VII: Estaría constituido por los ganglios traqueoesofágicos y mediastínicos.

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Adenopatías cervicales en niños

Gráfica 2. Niveles ganglionares del cuello

CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS DE LAS ADENOPATIAS CERVICALES POR PATOLOGÍA mALIGNA

ADENOPATÍAS EN LEUCEMIA AGUDA

Ocurre en los primeros cinco años. Las adenopatías son de tamaño variable, indoloras, bilaterales consistencia firme pero elásticas, móviles. No afectan piel ni planos profundos.

Afección generalizada. Asociada a síndrome febril, síndrome hemorrágico, hepatoesplenomegalia, mal estado general (7,8).

ADENOPATÍAS EN LINFOMAS NON HODGKIN

Están presentes en el 30 � 40 % de los casos. Son bilaterales y tiene iguales características de los de la leucemia.

90% son cervicales superiores y en 10% supraclaviculares

(4,6,7,9).

ADENOPATÍAS EN ENFERMEDAD DE HODGKIN

80% debutan con ganglios cervicales, luego: inguinales, axilares, epitrocleares, preauriculares. Son unilaterales, de consistencia gomosa, conglomerados, no infiltran piel. De larga evolución, fluctuaciones de tamaño (5,6,8).

CRITERIOS DE GRAVEDAD DE LAS ADENOPATÍAS

� Pérdida de peso (10%) � Localización supraclavicular � Aumento progresivo de tamaño � Consistencia dura � Adherencia a planos adyacentes � Síndrome hemorrágico(1, 8-10) � Nula respuesta al tratamiento antibiótico después de 15 días de tratamiento � Hepatoesplenomegalia � Radiografía de tórax con afección hiliar ENFOQUE DIAGNóSTICO DE LAS ADENOPATÍAS

Para el diagnóstico es importante

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� Una buena anamnesis � Exploración � Exámenes complementarios mANEJO DE LAS ADENOPATÍAS CERVICALES

Es importante considerar la edad en que se presentan, ya que en la niñez en general representan procesos infecciosos de cavidad orofaríngea, a diferencia de pacientes adultos, especialmente sobre los 50 años, en los que pueden estar relacionados con un cáncer de la región orofaríngea o del cuello.

En los niños también pueden corresponder a neoplasias, pero son en general de origen hematológico (leucosis o linfomas).

Toda adenopatía cervical que permanezca sin variación durante más de 15 días debe ser estudiada en base a examen otorrinolaringológico completo, exámenes hematológicos, radiografía de tórax, ecografía cervical, biopsia del ganglio

(7, 9,10).

bIOPSIA DEL GANGLIO

La biopsia puede hacerse por el método de biopsia por aspiración con aguja fina (BAAF) y/o biopsia a cielo abierto.

bAAF

La BAAF sirve para el estudio morfológico y/o cultivo. Puede asociarse con ecografía. Grafica 3

Es útil para confirmar que es cáncer, pero no para especificar la etiología del cáncer. Ejemplo: dice es Linfoma Non Hodgkin, pero no específica que subtipo y en la actualidad los tratamientos son específicos de acuerdo al subtipo de la lesión.

Gráfica 3. Pasos a seguir en la biopsia

bIOPSIA A CIELO AbIERTO

Es escisional y nos permite el examen anatomopatológico, inmunohistoquímico, cito genético, bacteriológico.

bIOPSIA DEL GANGLIO CERVICAL

Debe extirparse el ganglio completo de lo contrario no se podrá especificar el tipo de cáncer y se debe escoger al ganglio más voluminoso y de fácil acceso.

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Gloria Paredes Guerra y col.

Se corrobora el diagnóstico con estudio de inmunohistoquímica.

Se reserva para cuando se han agotado otros métodos de diagnóstico y la citología es benigna o no concluyente en presencia de una tumoración sospechosa de malignidad.

Se realizará preferiblemente bajo anestesia general por dos motivos:

� La anestesia local puede enmascarar la tumoración. � Aveces la tumoración es de mayor tamaño de lo apreciado por palpación. Se efectuarán incisiones que permitan ser ampliadas si fuera necesario y puedan permitir un amplio campo quirúrgico.

Los tipos de incisión que se realizan para extirpar un ganglio cervical dependen a qué nivel pertenece el ganglio, el cual debe ser el más representativo y de más fácil acceso. Gráfica 4 y 5.

Gráfica 4. Tipos de incision

Gráfica 5. En esta foto se puede apreciar el momento en el cual se está extirpando un ganglio cervical (Cortesía Dr. Fernando Huerta Mesones).

DIAGNóSTICO DIFERENCIAL

Debe considerarse en las siguientes entidades como diagnóstico diferencial:

1. Ganglio inflamatorio o TBC 2. Nódulo tiroideo 3. Ganglio metastásico 4. Tumoración maligna 5. Tumoración de glándula submaxilar 6. Lipomas 7. Neurilemomas 8. Angiomas 9. Tumor cuerpo carotídeo 10. Tumor paratifoideo 11.Divertículo esofágico 12. Parasitosis ganglionar 13. Absceso cervical (1, 8, 10) 14. Quiste tirogloso 15. Abceso cervical, 16. Quiste dermoide (1, 8, 10)

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Absceso cervical

Patología que puede expresarse semiológicamente como una, más bien, masa cervical. Sus signos inflamatorios son característicos. Su diagnóstico es básicamente clínico. Es de utilidad eventual la ecotomografía para confirmar y localizar una colección de pus, y la tomografía axial computada para evaluar su extensión. Su tratamiento es médico-quirúrgico.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Page 74: Revista pediatria interior

Adenopatías cervicales en niños

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Recibido: 03-02-09

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

CASO CLÍNICO Síndrome Weaver: crecimiento postnatal acelerado con edad ósea avanzada Weaver syndrome: postnatal overgrowth with increased bone maturation

Jorge Arturo Aviña Fierro 1, Daniel Alejandro Hernández Aviña 2

RESUmEN

El síndrome Weaver es una rara enfermedad de etiología desconocida, caracterizada por un crecimiento postnatal acelerado, con facies distintiva. Reporte de un lactante con crecimiento incrementado y edad ósea acelerada, con retraso psicomotor moderado, hipertonía con limitación en movimientos de extremidades y cara peculiar característica. Caso clínico de carácter esporádico sin transmisión genética; primer caso reportado en Latinoamérica y número 28º mundial. Palabras clave: Síndrome de Weaver; maduración ósea acelerada; dismorfia craneofacial.

AbSTRACT

Weaver syndrome is an extremely rare disease with unknown etiology, characterized by an accelerated postnatal growth, and special face. A case of male infant with overgrowth, increased bone maturation, moderate psychomotor retardation, hypertonic with limited movements of the limbs, and craniofacial anomalies. This is a patient with sporadic transmission, without genetic inheritance. First case reported in Latin America and number 28th world-wide. Key words: Weaver syndrome; accelerated bone maturation; craniofacial anomalies.

INTRODUCCIóN

El síndrome Weaver es una enfermedad genética sumamente rara, más frecuente en varones (con una relación de 3:1), existiendo en la actualidad solo 27 casos reportados a nivel mundial. La primera descripción fue realizada por Weaver y colaboradores en 1974 como síndrome de crecimiento acelerado y maduración ósea

1 Médico Pediatra. Dismorfología Pediátrica Unión Mexicana de Agrupaciones Espeleológicas. Instituto Mexicano del Seguro Social IMSS. Centro Médico Nacional de Occidente. Guadalajara, México.

2 Urgencias Médico-Quirúrgicas. Cruz Verde Municipal. Guadalajara, México. incrementada, cara peculiar, llanto ronco de tonalidad baja, hipertonía y camptodactilia (1). En 1980 se le denominó síndrome Weaver-Smith añadiéndose que existía un crecimiento somático excesivo, retardo psicomotor y datos radiológicos de maduración

ósea adelantada; actualmente prevalece la denominación de síndrome Weaver (2). En 1985 se descubrió que cursaba también con hipertonía y espasticidad de las extremidades (3). Los pacientes suelen mostrar macrosomía al nacer y continúan

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teniendo un incremento acelerado de peso y talla, pero con retardo mental y psicomotor, además hay manifestaciones de limitación en la extensión de brazos y piernas y deformación de los pies en valgo (4, 5). La etiología es desconocida aunque se considera que existe una pequeña mutación en el gen NSD1 (receptor nuclear de unión al dominio de proteína-1) (6,

7) de

localización en el brazo largo del cromosoma 5 (5q35) que también se encuentra alterada en el síndrome de Sotos (8).

REPORTE DEL CASO

Paciente masculino 2 años de edad, producto de primer embarazo a término, matrimonio joven no consanguíneo, madre 22 años de edad, padre 25 años, ambos sanos, sin toxicomanías. La gestación cursó normal, llevó adecuado control prenatal, cursó con una infección urinaria a los 5 meses de embarazo; ultrasonografía a los 7 meses sin hallazgos patológicos. El incremento de peso materno fue de 20 kg cursando con pre-eclampsia en el último trimestre del embarazo.

Nacimiento por cesárea, recién nacido con talla de 55 cm y peso de 3,800 g; Apgar 8,9; se detectó persistencia del conducto arterioso, pero sin complicaciones neonatales. Recibió alimentación al seno materno, ablactación a los 6 meses de edad. El cierre quirúrgico del conducto arterioso se realizó a los 10 meses de edad. El paciente mostró retardo en el desarrollo psicomotor: sonrió a los 6 meses, sostuvo la cabeza a los 9, se volteó a las 16, alcanzó objetos a los 18 y logró sentarse a los 22 meses de edad, pero aún no se sostiene ni camina. Presenta espasticidad e hipertonía. El crecimiento corporal fue muy acelerado, a los 6 meses pesaba 8 kg y medía 72 cm de talla, a los 12 meses pesaba 12 kg y la estatura era de 80 cm; actualmente a los 2 años de edad, está fuera de percentiles 99a en todas sus mediciones, con un peso de 16 kg, talla de 95 cm y perímetro cefálico de 52 cm, correspondientes a percentiles 50a de una edad biológica de 4 años de edad, doble de la correspondiente edad cronológica. Las radiografías de columna vertebral fueron normales, TAC

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Síndrome Weaver: crecimiento postnatal acelerado con edad ósea avanzada

craneal sin alteraciones y el cariotipo fue normal 46 XY.

La exploración física reveló un lactante de complexión robusta, con cara peculiar, dismorfia craneofacial caracterizada por braquicefalia, occipucio ancho y plano, zona frontal amplia y prominente; cabello delgado, fino y escaso; puente nasal deprimido, nariz ancha con narinas antevertidas; pabellones auriculares grandes de inserción baja, moderadamente prominentes; ojos con hipertelorismo y telecanto, fisuras palpebrales de inclinación descendente antimongólica; filtrum prolongado, boca entreabierta con glosoptosis y paladar alto ojival, micrognatia relativa (Figura 1). (Se obtuvo el consentimiento de las familiares para publicar estas fotos). Manos anchas, dedos cortos y gruesos, camptodactilia y pulpejos digitales almohadillados; pies deformados en cavo, primeros ortejos sobresalientes. Paciente con espasticidad e hipertonía de extremidades con limitación de movimientos de extensión principalmente en codos y rodillas, hombros huidizos en posición anormal respecto al eje, angulación de 120º. (Figura 2).

Figura 2. Hipertonía y limitación de extensión, principalmente en codos y rodillas.

Figura 1. Dismorfia craneofacial con frente amplia y prominente, puente nasal deprimido, nariz ancha, pabellones auriculares de inserción baja, hipertelorismo y telecanto. Figura 3. Núcleos de osificación carpales: grande, ganchoso, piramidal, semilunar y epífisis metacarpianas.

Figura 4. Núcleos de osificación tarsales: astrágalo, calcáneo, cuboides; navicular y los tres cuneiformes.

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Jorge Arturo Aviña Fierro y col.

DISCUSIóN

Se sospechó genopatía por las múltiples malformaciones congénitas, alteración del crecimiento y retraso del desarrollo psicomotor (9), pero al compartir signos comunes a númerosos síndromes no se lograba orientación clínica diagnóstica hasta que casualmente encontramos una fotografía de dos pacientes con síndrome Weaver en el libro de Cohen Michael

M: �The child with multiple birth defects� (10) en la página 159 que mostraba el patrón de recurrencia con la similaridad física entre pacientes no relacionados; la peculiaridad facial era idéntica al paciente en estudio (la foto correspondía al artículo original del Dr. Weaver DD). A partir de entonces el enfoque fue como síndrome de crecimiento acelerado (11), lográndose el diagnóstico al encontrar edad ósea muy incrementada, mostrando las radiografías a nivel de mano los núcleos de osificación: grande, ganchoso, epífisis metacarpianas, inicio de pira-midal y semilunar, además de epífisis radial (Figura 3); en el pie se encontraron: astrágalo, calcáneo, cuboides, navicular, los tres cuneiformes y las epífisis de tibia y peroné (Figura 4); la maduración ósea radiológica correspondió a un preescolar de 4 años de edad, se concluyó síndrome Weaver (12). Los síndromes de crecimiento desmedido descartados fueron: síndrome Sotos de gigantismo cerebral, por no tener macrocefalia, prognatismo ni hipotonía; el de Marshall-Smith pues corresponde a cara pequeña, órbitas superficiales con ojos prominentes y coloración azulada en escleróticas, que no poseía el paciente, tampoco presentaba delgadez; para Bannayan-Riley-Ruvalcaba carecía de angiomatosis, pseudopapiledema o máculas pigmentadas en genitales; Beckwith-Wiedemann y Simpson-Golabi-Behmel se excluyeron por no cursar con macroglosia, visceromegalia, hernia umbilical, hemihipertrofia, alteraciones metabólicas de hipoglucemia o alteraciones renales (13). El caso no tiene sugerencia de transmisión hereditaria, los padres son sanos no consanguíneos, sin antecedentes familiares de malformaciones, por lo cual la posibilidad es de

una afección estructural genética esporádica de mecanismo fisiopatológico desconocido, aunque anteriormente se han referido casos de herencia autosómica recesiva y dominante(14, 15); el fenotipo es de gran expresividad con manifestaciones en varios órganos y sistemas, pero guarda un patrón repetitivo que hace que los pacientes parezcan idénticos, por lo que el difundir imágenes del síndrome puede facilitar el diagnóstico de otros pacientes afectados por síndrome Weaver. La literatura mundial señala que los casos previos reportados no requirieron tratamiento especial, por lo que el pronóstico suele ser favorable excepto por el retraso psicomotor; la expectativa de vida suele ser normal, peso corporal y talla finales son generalmente mayores que las normales pero no excesivos. Algunos pacientes pueden tener alteraciones en columna vertebral y se han reportado tres casos aislados con desarrollo posterior de neoplasias: neuroblastoma, tumor ovárico y teratoma coccígeo en forma aislada. El paciente tiene atención de terapia física y seguimiento pediátrico integral, sin hallazgos clínicos actuales de deformación de columna vertebral o evolución a neoplasias, continuándose con observancia estrecha (16, 17). Los padres recibieron consejo genético con especificación de probabilidades muy bajas de repetición del síndrome en otros

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hijos. Es el primer caso reportado en Latinoamérica y número 28º mundial.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

1. Weaver DD, Graham CB, Thomas IT. Smith DW. A new overgrowth syndrome with accelerated skeletal ma-turation, unusual facies, and camptodactyly. J Pediat. 1974; 84: 547552. 2. Gemme G, Bonioli E, Ruffa G, Lagorio V. The Weaver-Smith syndrome. J Pediatr. 1980; 97: 962-964. 3. Echenne B, Ferran JL. Spasticity of the lower limbs and the Weaver-Smith syndrome. Pediatrie. 1985; 40: 313-317. 4. Cole TRP, Dennis NR, Hughes HE. Weaver syndrome. J Med Genet. 1992; 29: 332-337. 5. Ardinger HH, Hanson JW, Harrod MJE, Cohen MM, Tibbles JAR, Welch JP et al. Further delineation of Weaver syndrome. J Pediat. 1986; 108: 228-235.

Page 80: Revista pediatria interior

Síndrome Weaver: crecimiento postnatal acelerado con edad ósea avanzada

6. Rio M, Clech L, Amiel J, Faivre L, Lyonnet S, Le Merrer M et al. Spectrum of NSD1 mutations in Sotos and Weaver syndromes. J Med Genet. 2003; 40: 436-440.

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16. Kelly TE, Alford BA, Abel M. Cervical spine anomalies and tumors in Weaver syndrome. Am. J. Med. Genet. 2000; 95: 492495. 17. Derry C, Temple IK, Venkat-Raman K. A probable case of familial Weaver syndrome associated with neopla-sia. J. Med. Genet. 1999; 36: 725-8. Correspondencia: Jorge Arturo Aviña Fierro [email protected]

Recibido: 14-01-09

Aceptado: 12-03-09

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

Características clínicas de un adolescente con obesidad e inicio de debut de diabetes mellitus tipo 2 con cetoacidosis. Reporte de un caso

Clinical characteristics of a teenager with obesity and an early debut with type 2 diabetes mellitus ketoacidosis. A case report

Helard Manrique Hurtado 1, Pedro Aro Guardia 2, Carlos Calle Müller 2, Giancarlo Romero Rivas 2

RESUmEN

Se reporta el caso de un paciente adolescente de 14 años, obeso con síntomas de poliuria, polidipsia, baja de peso y antecedente de gran consumo de dulces y alimentos azucarados, antecedente familiar de diabetes y que debuta con cetoacidosis diabética y anticuerpos antidescarboxilasa del ácido glutámico (anti GAD) negativo y que al seguimiento a los tres meses está controlado con dieta e hipoglicemiantes orales. Esta entidad clásicamente se encuentra relacionada a diabetes mellitus tipo 1, sin embargo, estudios muestran la incidencia elevada en diabetes tipo 2 (DM 2), en su mayoría adolescentes obesos afroamericanos e hispanos. Palabras clave: Cetoacidosis diabética, diabetes mellitus tipo 2, obesidad.

AbSTRACT

It is report the case of a teenager patient 14 years old of age, obese with symptoms of polyuria and polydipsia, loss of weight and history of great food consumption of sweets, with a family history of diabetes whose debut is diabetic ketoacidosis and anti GAD negative and that the follow-up to three months is controlled with diet and oral agents. This entity is traditionally linked to a type 1 diabetes mellitus, however studies show the high incidence in type 2 diabetes (DM 2) mostly teenagers obese of African Americans and Hispanics race. Key words: Diabetic Ketoacidosis, type 2 diabetes mellitus,

obesity.

1 Médico Endocrinólogo. Asistente del Servicio de

Endocrinología, Hospital Nacional Arzobispo Loayza. Lima, Perú. 2 Médico Cirujano. Facultad de Medicina Alberto Hurtado. Universidad Peruana Cayetano Heredia. Lima, Perú. 3 Médico Cirujano. Facultad de Medicina Alberto Hurtado. Universidad Peruana Cayetano Heredia. Lima,

Perú. INTRODUCCIóN La cetoacidosis diabética (CAD) es la principal causa de morbilidad y mortalidad en niños con diabetes mellitus tipo 1, también puede ocurrir en niños con diabetes mellitus (DM) tipo 2, particularmente en adolescentes

obesos afroamericanos e hispanos (1, 2).

En los últimos años, la incidencia y prevalencia de DM tipo 2 en niños se ha incrementado en todos los grupos étnicos, y un grupo de niños con DM tipo 2 puedan presentar cetosis o CAD, en especial los adolescentes

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obesos afroamericanos e hispanos (1, 3, 4).

La CAD se caracteriza por un cuadro de hipercetonemia, acidosis metabólica e hiperglucemia, cuya patogenia está dado por déficit absoluto de insulina y aumento de hormonas contrarreguladoras (3).

�Ketosis -Prone Diabetes Mellitus� (KPD) es un síndrome emergente, heterogéneo caracterizado por pacientes que presentan CAD o una cetosis sin que mediara factor descompensante, la cual no necesariamente presenta el fenotipo de la diabetes tipo 1 autoinmune (5) KDP que se ha informado se presenta en el 25% a 60% de los casos nuevos de CAD en EE.UU. en afroamericanos y pacientes hispanos

(6).

El tratamiento inicial es el mismo con que se trata a los pacientes con diabetes tipo 1 y cetoacidosis, sin embargo, los resultados a largo plazo y las necesidades de insulina de estos pacientes son diferentes. La remisión de la hiperglicemia está descrita y el excelente control metabólico (descrito como HbA1c menor de 6,5 % y glucosa en ayunas menos de 6,6mmol/L o menos de 120 mg/dl); se ha informado control en un 40% a 70% de los pacientes luego de tres meses de su presentación. El uso de metformina o dosis bajas de insulina se ha recomendado. La recaída y la eventual dependencia de insulina son más probables en pacientes con autoanticuerpos positivos y en aquellos con una disminución en respuesta a la aplicación de glucagón intravenoso para evaluar la reserva pancreática (6).

Existe una experiencia limitada en la evaluación y diagnóstico en relación a esta patología, por lo cual nosotros reportamos el caso de un adolescente de 14 años que hizo su debut de

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Características clínicas de un adolescente con obesidad e inicio de debut de Diabetes Mellitus tipo 2 con cetoacidosis: Reporte de caso

DM tipo 2 con un cuadro de CDA.

REPORTE DEL CASO

Varón de 14 años de edad, natural y procedente de Lima, con antecedente de artritis reumatoide juvenil hace dos años, estable con tratamiento irregular con indometacina, acido fólico y metrotrexate; tres meses antes de su ingreso pesaba 95 kilogramos, un mes antes del ingreso baja 6 kilos de peso, se agrega polidipsia, poliuria y 3 días antes del ingreso presenta náuseas y vómitos. Paciente polipneico con dificultad respiratoria, ingresa por emergencia. Funciones biológicas: el paciente presenta sed aumentada, apetito disminuido, frecuencia y volumen de orina incrementado. Dentro de los antecedentes personales y familiares tenemos que su abuela tiene diagnóstico de DM tipo 2 y madre con obesidad.

En la exploración física presenta presión arterial 130/70, frecuencia cardíaca: 150 x minuto, frecuencia respiratoria: 56 x minuto y temperatura 36.5 grados centígrados, peso: 87 kg., talla: 1.79 cm, índice de masa corporal (IMC) 28, paciente en mal estado general, somnoliento, obeso, con respiración rápida, piel pálida, mucosas secas (Figura 1), ojos hundidos, acantosis nigricans en cuello (Figura 2) y axila, tejido celular subcutáneo aumentado, aumento de volumen en rodilla izquierda y dolor con limitación funcional de dicha rodilla.

Figura 1. Mucosas secas

Figura 2. Acantosis nigricans en cuello

En la analítica; hemograma: leucocitos 22,400, segmentados 80%, abastionados 9%, eosinófilos 0%, basófilos 0%, monocitos 4%, linfocitos 7%, Hb 15 g/ dl, plaquetas: 582,000, glucosa: 722 mg/dl, úrea: 65 mg/dl, Creatinina 1.41 mg/ dl, ph 7.08, HCO3 4.02, Na 165 mEq/L, K 3.1 mEq/L, Cl 129 mEq/L, anión GAP 30, cuerpos cetónicos en orina

++, HbA1c:9.2, anticuerpos antiGAD (-), VSG 62, Proteína C reactiva 1.08, el paciente fue catalogado con CAD cetoacidosis diabética severa de acuerdo a los criterios de la Asociación Americana de Diabetes (ADA), por lo cual se inicio tratamiento respectivo y pasa a UCI general para monitoreo y manejo. Paciente recibe hidratación, insulinoterapia en infusión, manejo de electrolitos; en 16 horas sale de evento de CAD, pasa al servicio de pediatría permaneciendo 20 días hospitalizado. Al alta el paciente recibe insulina NPH 10 UI y 5 UI dos veces al día y metformina 850mg/día; luego de un mes de remitida la cetoacidosis, el paciente suspende la insulina, en ese momento valores de glucosa:102 y HbA1c

6.1. Posteriormente, a los tres meses es evaluado en consulta externa y se encuentra recibiendo dieta y metformina 850 mg al día no presenta sintomatología alguna, el dolor de rodilla ha cedido, peso 80 kg, glucosa 86 mg/dl, HbA1c:5.9, con último hemograma en: leucocitos 9.140, segmentados 61%, abastionados 0%, eosinófilos 1%, basófilos 0%, monocitos

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0%, linfocitos 34%, Hb 13,50 g/ dl, plaquetas 445,000 y VSG:13. DISCUSIóN

Es importante considerar los reportes existentes en la literatura sobre la mayor prevalencia de CAD en pacientes con DM tipo 1. La prevalencia de DM tipo 1 en nuestro país es una de las más bajas a nivel mundial 0.40/100000 habitantes

(7).

La prevalencia de DM tipo 2 en niños y adolescentes se ha incrementado en la última década. Las características

clínicas de nuestro paciente es típica de un paciente con

DM tipo 2 adulto, cursa con obesidad, acantosis nigricans cervical y axilar (Figura 2), y antecedente familiar de DM (8-10). Es evidente que la obesidad infantil se ha incrementado en nuestra población, así como lo demuestra Pajuelo (11) en sus publicaciones nacionales que llega a 13.9%; es evidente que estas enfermedades emergentes, como la obesidad infantil, se convierten en un factor de riesgo de importancia para DM tipo 2, así como lo demuestra la publicación de Libton (12).

El factor asociado a la obesidad es el incremento de alimentos azucarados y bebidas azucaradas, así como lo presentó nuestro paciente que tomaba 3 a 5 bebidas soda por día; en nuestra población infantil se hace cada día más frecuente el consumo diario de estos productos que son hipercalóricos y de elevado índice glicémico.

En el año 2008 hemos tenido la oportunidad de ver tres casos de DM tipo 2 en adolescentes, pero lo que hace revisar este caso en forma especial es la forma de debut de la misma, con una CAD severa, cuadro típico de un debut de una diabetes tipo 1; existen publicaciones que en ciertas etnias como la afroamericana (1, 3, 9, 12) se presenta la CAD como forma de debut en jóvenes. En nuestra población la forma de presentación de CAD en diabetes tipo 2 en adultos es frecuente (13, 14) y un 50% eran su

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Helard Manrique Hurtado y col.

forma de debut de la DM. El hecho que nuestro paciente esté catalogado con DM tipo 2 y tenga un evento de CAD podría ser explicado por múltiples hipótesis. Es así, que inicialmente este paciente estuvo cursando con hiperglicemias crónicas, lo que sería un factor condicionante de glucotoxicidad sobre la célula beta, ocasionando una disfunción de dicha célula y la disminución de la secreción de insulina, si se relaciona

a un estado de resistencia a la insulina condicionado por

la obesidad del paciente y de algún factor precipitante no hallado, que podría llevar a un incremento de hormonas contrarreguladoras y ocasionar una deficiencia absoluta de la acción de la insulina sobre sus receptores, lo que produce una nula acción de la insulina y una CAD. Luego de aplicar la terapia con insulina y al disminuir la glucotoxicicidad y controlar el factor precipitante, mejora la función de la célula beta y la sensibilidad a la insulina, llevando a un control de las glicemias como sucedió en nuestro paciente. Entonces: ¿por qué pensar que estamos con un paciente con DM tipo 2?, al inicio de la discusión nombramos las características clínicas asociadas a DM tipo 2 y los anticuerpos anti GAD fueron negativos, es cierto que un 15% de pacientes con DM tipo 1(9) tiene anticuerpos negativos, pero el fenotipo de nuestro paciente es el de una DM tipo 2 y es importante mencionar que el seguimiento nos ayuda a tipificarlo. La remisión de la hiperglicemia y el control metabólico está descrito como Hb A1c menor de 6,5% y glucosa en ayunas menos de 6,6mmol/L (120 mg/dl), nuestro paciente a los tres meses está controlado metabólicamente. Lo que contribuyó al control metabólico de nuestro paciente fue el cambio de su estilo de vida, recibió charlas educativas sobre el control de la diabetes, de su dieta balanceada y se le hizo conocer que el exceso de azúcares refinados había sido un factor que desencadenó la enfermedad, se le recomendó utilizar un sensibilizador de la insulina como metformina (15, 16) la misma que mejora la sensibilidad periférica de la acción de la insulina.

La recaída y la eventual dependencia de insulina son más probables en pacientes con autoanticuerpos positivos y en aquellos con una disminución en respuesta a la aplicación de glucagón intravenoso para evaluar la reserva pancreática, la que no se pudo realizar en nuestro paciente (14).

Su dolor de rodilla cedió, lo más probable es que esté relacionado con su baja de peso, y sus marcadores inflamatorios fueron negativos.

El seguimiento de nuestro paciente nos permitirá evaluar su función de célula beta en el transcurso del tiempo. La evaluación integral de la célula beta se completaría con un dosaje de péptido C y/o una prueba funcional con glucagón.

En resumen, este tipo de presentación que se observa con cierta frecuencia en adultos con debut de DM tipo 2 se puede presentar en nuestros adolescentes con sobrepeso y obesidad; y en el futuro observaremos otros casos similares a éste, porque la incidencia y prevalencia de obesidad continua incrementándose y nuestra labor es plantear programas de prevención para obesidad. Es verdad que el manejo inicial en

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la emergencia es idéntico a una CAD en diabetes tipo 1, la diferencia es la terapia futura, siendo el pilar del tratamiento: la educación, el enseñar a comer correctamente y controles metabólicos.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

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Características clínicas de un adolescente con obesidad e inicio de debut de Diabetes Mellitus tipo 2 con cetoacidosis: Reporte de caso

Cetoacidosis diabética: una complicación frecuente de la diabetes tipo 2 en hispanoamericanos. Av Diabetol 2003; 19: 141-147.

14. Manrique H., Ramos E., Medina C., Talaverano A., Pinto M., Solís J. Características epidemiológicas de las crisis hiperglicémicas. Rev Med Soc Per Med Int 2007; 20(1):22-25. 15. Lee K.,Arslanian S.,Peterokova V.,Park J.S, Tomlinson M.Effect of metformin in pediatric patients with type 2 Diabetes. Diabetes Care 2002;25:89�94. 16. Gottschalk M., Danne T., Cara J., Vlajnic A.Glimepiride versus metformina as monotherapy in pediatric patients with type 2 Diabetes. Diabetes Care 2007; 30:790�794. Correspondencia: Pedro Aro Guardia [email protected]

Recibido: 11-02-09

Aceptado: 19-03-09

Page 88: Revista pediatria interior

Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

SALUD MENTAL Estudio fenomenológico en 90 pacientes menores de 18 años con trastorno obsesivo compulsivo Phenomenological study in 90 patients younger than 18 years old with obsessive compulsive disorder

Roxana Vivar 1, Zoila Pacheco 2, Cecilia Adrianzen 3, Beatricce Macciotta 4, Giannina Moron 5

RESUmEN

Objetivo: Determinar manifestaciones clínicas del trastorno obsesivo compulsivo en niños y adolescentes peruanos. Materiales y Metodos: Se presenta un estudio fenomenológico en 90 pacientes menores de 18 años con diagnóstico de trastorno obsesivo compulsivo en Psiquiatría de Niños y Adolescentes de 3 hospitales de Lima, desde enero del 2000 hasta enero del 2003. El diagnóstico se realizó usando los criterios de DSM

IV. Se clasificó el tipo de obsesiones y compulsiones con la lista de chequeo de la escala de Yale Brown. La gravedad del cuadro clínico se midió con la escala del Yale Brown para niños y con la Escala de Funcionamiento Global. Se determinó la incidencia de trastorno obsesivo compulsivo entre los familiares de primer grado, mediante la entrevista clínica a los padres y hermanos. resultados: El 62.2% fueron varones y el 37.8% mujeres; la edad promedio fue de 13.72 años ± 2.61 años. La edad de inicio promedio fue de 11.5 años ± 2.78. El valor promedio del C-YBOCS al momento del diagnóstico fue 25.44 ± 6.24 (trastorno obsesivo compulsivo severo); mientras que el valor promedio de funcionamiento global fue 60-51. El 78 % de pacientes tuvo un episodio único de enfermedad, con un

tiempo promedio de enfermedad de 16 meses. Las obsesiones más frecuentes fueron las de agresión (66%), las de contaminación (60%) y las de

contenido sexual (28%). Las compulsiones más comunes fueron: limpieza (57%), rituales involucrando a otros (28%) y los rituales de repetición (24%). Más del 72% de pacientes tenían por lo menos dos

obsesiones y dos compulsiones. El 27.5% de los pacientes tenían por lo menos un pariente de primer grado con trastorno obsesivo compulsivo. conclusión: La mayoría de manifestaciones clínicas del trastorno obsesivo compulsivo en niños y adolescentes peruanos son similares a las encantaradas por otros autores en otros contextos. Palabras claves: Fenomenológico, trastorno obsesivo compulsivo, niños, adolescentes

1 Psiquiatra General y Psiquiatra de Niños y Adolescentes. Instituto Nacional de Salud Mental �Honorio Delgado-Hideyo Noguchi�. Profesora de la Universidad �Cayetano Heredia�.Lima, Perú.

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2 Psiquiatra General y Psiquiatra de Niños y Adolescentes. Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen. Profesora asociada de la Universidad Mayor de �San Marcos� Lima-Perú

3 Psiquiatra General y Psiquiatra de Niños y Adolescentes. Gerente de Investigación Clínica en Neurociencias Laboratorios Eli Lilly & Co Región Andina-Centro América. Lima-Perú.

4 Psiquiatra General y Psiquiatra de Niños y Adolescentes. Hospital Central de la Fuerza Aérea. Profesora asociada de la Universidad Nacional �Federico Villarreal�. Lima, Perú.

5

Psicóloga Asistente del Área de Niños y Adolescentes del Instituto Nacional de Salud Mental �Honorio Delgado Hideyo Noguchi�. Lima - Perú

AbSTRACT

Objective: Determine clinical demonstrations of the Obsessive Compulsive Disorder (OCD) in children and Peruvian adolescents. Material and Methods: It is presented a phenomenological study in 90 patients younger than 18 years old with obsessive compulsive disorder diagnosis in children and adolescents psychiatry in Lima, since January 2000 to January 2003. The diagnosis was made using DSM-IV criteria. It was classified the type of obsessions and compulsions using the check list from the Yale Brown scale. The severity of the disorder was valued using the Child Yale Brown scale and Global scale. It was determined incidence among first grade relatives, by means of interviewing parents and brothers. Results: The 62% were male and the 38% female. The average age was 13.7 years old ± 2.6 years. The beginning

Page 90: Revista pediatria interior

Estudio fenomenologico en 90 pacientes menores de 18 años con trastorno obsesivo compulsivo

age of the disorder was 11.5 years old ± 2.9. The Yale Brown scale middle value at the moment of the diagnosis was 25.4 ±

6.2 (Severe obsessive compulsive disorder); while the global functioning middle value was 60 � 51. The 78% from these patients had an unique episode of illness, with an illness average time of 16 month. The most frequent obsessions were aggressions obsessions (66%), contamination obsessions (60%) and sexual content obsessions (28%). The most frequent compulsions were cleanness compulsions (57%), rituals which involved others persons (28%), and repetition rituals (24%). More than 72% of these patients had at least two obsessions and two compulsions. The 27.5% from these patients had at least one first grade relative with obsessive compulsive disorder diagnosis. Conclusion: The majority clinical demonstrations of the obsessive compulsive disorder in children and Peruvian adolescents are similar to the found by other authors in other contexts. Key words: Phenomenological, obsessive compulsive disorder, children, adolescents. INTRODUCCIóN

El Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) es un trastorno de presencia universal y puede presentarse a cualquier edad. Las primeras descripciones del TOC en niños datan de 1903, cuando Pierre Janet realiza la primera descripción del trastorno en un niño de 5 años (1). En 1935, Kanner reportó 3 casos de TOC en niños y reveló el aislamiento social, sus rasgos de personalidad premórbidos de tipo �constreñidos� y el involucramiento de los familiares en los rituales de los pacientes (2). La predominancia del TOC en varones fue observada por Flament en 1988 y confirmada por Swedo en

1989 (3 , 4)

.

Hasta hace menos de 20 años, el TOC era considerado un trastorno sumamente raro; no obstante, en 1983, el Epidemiologic Catchment Area Survey (ECA), encuentra que la prevalencia de vida de TOC era de 2.5% y la prevalencia de seis meses de 1.6%(5). Este hecho es comprobado a diario en la evaluación de pacientes en el programa de atención de niños y adolescentes con diagnostico de TOC, que realizamos en nuestros departamentos de psiquiatria de niños y adolescente (6).

En 1988, Flament y col. (3), realizaron un estudio epidemiológico en 5 596 probandos adolescentes de una población rural de New Jersey; Utilizaron el Childhood Leyton Inventory y encontraron una prevalencia de 1.9%. En 1994 Valleni-Basile y col.(7) estimaron la prevalencia de TOC en 2.95% en una muestra de adolescentes; mientras que Zohar y col.(8) encontraron una prevalencia de 3.6% en adolescentes reclutados de 16 a 17 años.

Actualmente se sabe que entre el 50% á 80% de adultos con TOC iniciaron su enfermedad antes de los 18 años, que

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los síntomas obsesivo-compulsivo varían con la edad y el nivel de desarrollo de las funciones cognoscitivas, que los niños pequeños tienen dificultades para observar y describir sus pensamientos, por lo que es más probable que no comuniquen sus obsesiones y en cambio presenten múltiples compulsiones con patrones motores que pueden semejar tics motores complejos lo que complica el diagnóstico (4, 9).

Los síntomas clínicos manifestados en niños son idénticos a los observados en adultos; las obsesiones más frecuentemente reportadas son las de contaminación, mientras que la compulsión más común es la de lavado. La presentación de los síntomas tiende a ser ondulante, con una tendencia a una variación de los síntomas a través del

tiempo(9, 10)

. El estudio sistemático de serie de casos de niños con diagnóstico de TOC, publicados antes de 1970, es escaso, según refiere Grados (10). En 1973, Adams publica una serie de 49 casos de niños con diagnóstico de TOC; 39 eran varones y 10 niñas con edades comprendidas entre los 5 y los 15 años. Fue un estudio retrospectivo de niños atendidos por el autor (11).

mATERIAL Y mÉTODOS

El presente es un estudio descriptivo prospectivo de una

serie de casos que pretende ampliar nuestros conocimientos clínicos del TOC en niños y adolescentes peruanos. Se evaluaron a los pacientes con diagnóstico de TOC según criterios DSM-IV (12) que acudieron al Departamento de Psiquiatría de Niños y Adolescentes del Instituto Nacional de Salud Mental �Honorio Delgado-Hideyo Noguchi�, Servicio de Psiquiatría Infanto Juvenil del Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen Es-Salud, y del Servicio de Psiquiatría del Hospital de la Fuerza Aérea del Perú, en la ciudad de Lima, Perú; desde enero de 2000 hasta enero del 2003.

La evaluación incluyó entrevistas por separado tanto al paciente como a sus padres. La severidad del trastorno se determinó mediante las escalas C-YBOCS (13, 14) y Funcionamiento Global para niños (C-GAS) (15). La clasificación del tipo de obsesiones y compulsiones se realizó con la lista de chequeo de la Escala de Yale Brown.

Se evaluó clínicamente a los padres y hermanos para determinar la incidencia del trastorno entre ellos. Debido a que en la serie estudiada habían varios hermanos, solo se consideró a uno de ellos para evitar errores estadísticos; siendo el total de pacientes evaluados para este fin, 90.

Los datos se recogieron usando un formato de informe de caso semiestructurado y se creó una base de datos usando el programa SPSS10 (Statistical Package Of The Social Sciencies). El análisis estadístico se realizó determinando el porcentaje, valores promedio y la desviación estándar.

RESULTADOS

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Roxana Vivar y col.

Durante el período de estudio se evaluaron 97 casos; tres fueron retirados porque tenían otros diagnósticos y dado que la severidad de ambos diagnósticos, fue similar, no fue posible determinar el diagnóstico primario (uno con Fobia Social y TOC, otro con Trastorno Bipolar y TOC y un tercero con Fobia Simple y TOC). Los otros cuatro pacientes fueron retirados porque no permanecieron en el estudio el tiempo necesario para confirmar el diagnóstico.

La muestra estuvo constituida por 90 niños y adolescentes peruanos de raza mestiza; 80% estudiantes y 20% desocupados. La distribución por sexos fue de 56 varones (62%) y 34 mujeres (38%). La edad promedio fue de 13.7 ±

2.61 años; No se observó diferencias importantes entre la edad promedio de varones y mujeres (13.86 ± 2.74 y 13.5 ± 2.39). La edad mínima fue de 8 años y la máxima de 18 años. El 72% de la muestra eran menores de 16 años. Tabla 1. Tabla 1. Distribución de los casos por edad actual y sexo.

(n=90) Edad Actual SexoF M Total N % 8 - 11 12 - 15 16 - 18 6 20 8 13 26 17 19 46 25 21% 51% 28% Total Promedio 34 13.50±2.39 56 13.50±2.39 90 13.72±2.61 100%

La edad de inicio de la enfermedad osciló entre los 5 y 17 años, con un valor promedio de 11.5 ± 2.78. Los varones presentaron una edad promedio de inicio de la enfermedad de 11.61 años ± 3; mientras que en las niñas fue de 11.3 años ± 2.4. Tabla 2.

Tabla 2. Distribución de los casos por edad de inicio de

enfermedad y sexo. (n=90)

Edad Sexo Total %

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Fm

5 - 7 2466 % 8 - 11 16 26 42 47 % 12 - 15 16 19 35 39% 16 - 18 0 7 78%

Total 34 56 90 100% Promedio 11.32±2.40 11.61±3.00 11.50±2.78

La gran mayoría de pacientes (78%) tenían un solo episodio al momento del diagnóstico; 13% tuvieron dos, 8% tres y solo 1% tuvo cuatro episodios. El tiempo promedio de enfermedad fue 16 meses.

El puntaje promedio de C-YBOCS hallada al momento del diagnóstico fue de 25 ± 6; mientras que los puntajes en la escala de funcionamiento global oscilaron entre 11 a 80 puntos con un valor promedio de 60-51. Tabla 3.

Tabla 3. Medicion C-YBOCS y EFG

Medición Pacientes Mínimo Máximo Promedio Desv.

estándar

C-YBOCS 90 7 39 25.44 6.24 EFG 90 11 80 60-51

Las obsesiones de agresión se presentaron en el 66% de los pacientes; las de contaminación en el 60%, las de contenido sexual en 28%; la duda patológica en el 26%; las de contenido religioso en el 22%; las supersticiosas en el 13%; las de tipo somático en el 7% y las agrupadas en el grupo de otras (atesoramiento, ideas intrusivas de números, miedo de decir ciertas cosas, preocupación por el desorden) en el 8% de los pacientes. Gráfica 1.

8%

Otras

7%

Somáticas

Supersticiosas 13%

Religiosas 22%

Duda patológica 27%

Sexuales 28%

Page 94: Revista pediatria interior

Contaminación 60% 66%

Agresivas

Gráfica 1. Distribución de pacientes según tipo de agresiones (n=90)

Con respecto a las compulsiones, encontramos que las compulsiones de limpieza se presentaron en 57% de los pacientes; los rituales involucrando a otros en el 28%; los rituales de repetición en el 24%; las compulsiones de chequeo y conducta supersticiosa en el 23%; los rituales mentales en el 19%; las compulsiones de ordenamiento en el 14 %; la necesidad de confesar en el 4% y las compulsiones agrupadas como otras (tocar, contar, dibujar edificios, medidas para prevenir daño a uno mismo) en el 11 % de los pacientes. Gráfica 2.

Page 95: Revista pediatria interior

Estudio fenomenologico en 90 pacientes menores de 18 años con trastorno obsesivo compulsivo

Otras 11% Necesidad de confesar 4% Ordenamiento 14% Rituales mentales 19% Conducta supersticiosa 23% Chequeo 23% Rituales de repetición 24% Rituales involucrando a otros 28% 57% Limpieza

Gráfica 2. Distribución de pacientes según tipo de compulsiones. (n=90)

Más del 72% de pacientes tuvo por lo menos dos obsesiones y dos compulsiones. el 25% tuvo una obsesión, el 38% tuvo dos obsesiones, el 31% tuvo tres obsesiones y solo el 5% tuvo cuatro obsesiones al momento del diagnóstico. Así mismo el 28% de los pacientes presentó una compulsión; el 48% dos compulsiones; el 20% tres compulsiones y el 4% presentó cuatro. El número promedio de obsesiones y compulsiones fue 2, con una desviación estándar de 0.95 para obsesiones y de 0.86 para compulsiones. Gráfica 3 y 4.

4

1

5%

25%

3

31%238%

Page 96: Revista pediatria interior

Gráfica 3. Distribución de pacientes por N° de Obsesiones

pacientes por compulsiones

4

31

4%

20% 28%

248%

Gráfica 4. Distribución de pacientes por N° de Compulsiones Cuando se correlacionó entre sí cada una de las obsesiones

con las compulsiones, se halló que el 53% de los pacientes que presentaron Obsesiones de contaminación, presentaron también Compulsiones de limpieza y que el 19% tuvieron rituales involucrando a otros. Mientras que en el grupo de pacientes con Obsesiones de Agresión, se observó que 20% tenía Rituales de Repetición, otro 20% tenía Compulsiones de Chequeo y 17% Conductas Supersticiosas. Tabla 4, 5, 6, 7 y 8.

Tabla 4. Relación entre Obsesión de Contaminación y Compulsión de Limpieza (n=90)

Contaminación Limpieza Total

No Sí

No 37% 3% 40% Sí 7% 53% 60%

Total 43% 57% 100%

Tabla 5. Relación entre la obsesión de contaminación y compulsión de rituales involucrando a otros (n=90)

Contaminación Rituales involucrando a otros Total

No Sí

No 31% 9% 40% Sí 41% 19% 60%

Total 72% 28% 100%

Tabla 6. Obsesiones de Agresión y Rituales de Repetición. (n=90)

Agresión Rituales de Repetición Total

No Sí

No 30% 4% 34%

Page 97: Revista pediatria interior

Sí 46% 20% 66%

Total 76% 24% 100%

Tabla 7. Relación entre obsesiones de agresión y compulsiones de chequeo (n=90)

Agresión Compulsión de Chequeo Total

No Sí

No 31% 3% 34% Sí 46% 20% 66% Total 77% 23% 100%

Tabla 8. Relación entre obsesión de agresión y compulsión de conducta supersticiosa (n=90)

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Roxana Vivar y col.

Agresión Conducta Supersticiosa Total

No Sí

No 28% 7% 35% Sí 49% 17% 65% Total 76% 24% 100%

El 27.5% de los 80 niños evaluados (pues se consideró solo a un hermano con TOC, en los casos en que más de un niño de una misma familia estuviera en el estudio) tenía por lo menos un pariente de primer grado con TOC; mientras que si se considera también al TOC Subclínico, este valor asciende a 39%. Es importante observar que en algunas de las familias estudiadas se encontraron a más de dos hijos afectados, como el caso de una familia con cinco hijos, que tenìa cuatro hijos con TOC. Tabla 2.

Tabla 9. Pacientes con al menos un familiar con TOC y TOC Subclínico (n=90)

TOC TOC Subclínico Familiar Nº % Nª % Madre 9 7.5% 9 7.5% Padre 4 5% 1 1.25 Hermano/a 12 15% 2 2.50 Total 22 27.5% 12 11.25

DISCUSIóN

La naturaleza prospectiva del presente estudio ofrece la ventaja de que las características clínicas han sido recogidas más fidedignamente. La distribución por sexo que hemos hallado en nuestra muestra (62% varones y 38% mujeres) corresponde a lo descrito por la literatura desde 1988, cuando Flament(3) reportó una relación de 3 niños / por 2 niñas y es corroborado por Geller en 1998, (16) cuando realizó un estudio de revisión de toda la literatura escrita hasta entonces sobre TOC juvenil y asume que el 60% del total de niños y adolescentes con TOC son varones.

La edad promedio al momento del diagnóstico de 13.7 años con una D.S de 2.61, hallada en este estudio, es similar a lo reportado por Swedo (4) en su estudio de 70 casos durante un intervalo de 10 años en el Instituto de Betesda (13.7 años D.S. 2.67) y a lo informado posteriormente por Riddle (9) en 1990

(12.2 años; D.E. 3.1) y por Geller (16) en 1998, (13.2 años) al evaluar 11 estudios basados en muestras clínicas. La edad promedio de inicio de enfermedad que hallamos

(11.5 años) es ligeramente superior a la reportada por Geller (10.3 años) en su estudio de revisión de 11 investigaciones clínicas(16); sin embargo, se halla dentro del rango de edades, de 7-12 años hallados en diferentes estudios(4,9,17). Otro aspecto que llama la atención es que en nuestros pacientes no se evidencie la diferencia de edad de inicio entre varones y mujeres, reportada por otros autores(4, 16). Es posible que la razón de tales diferencias puedan ser explicadas por el análisis de diferentes tipos de muestras; no obstante, sería necesario realizar un

Page 99: Revista pediatria interior

estudio más exhaustivo para aclarar dicha duda.

Con respecto a la naturaleza de los síntomas clínicos,

nuestros resultados corroboran lo reportado por una serie se

investigadores sobre la similitud con los síntomas observados en los adultos(10, 16, 18); sin embargo, difieren en que la obsesión más prevalente en nuestro grupo (niños peruanos de raza mestiza) es la de contenido agresivo; mientras que en niños y adolescentes de raza caucásica es la de contaminación(4, 8, 17). Además, es interesante notar que la diferencia de porcentajes entre los que presentan obsesiones de contenido agresivo en nuestro grupo, es casi el doble de lo reportado por Swedo y por Riddle (4,9 ).Consideramos que una explicación plausible podría ser que los niños y adolescentes de nuestra muestra hallan estado más expuestos a experiencias adversas; sin embargo, este aspecto ameritaría un investigación futura.

Pauls y colaboradores en 1995 (19), Black (20), Bellodi (21), hacen notar que el inicio en la niñez del TOC, parece indicar una vulnerabilidad genética mayor, en comparación a lo reportado en probandos que iniciaron el TOC después de los catorce años, quienes tienen una presentación de TOC en familiares de primer grado de 2.5-7.4 %. Estos datos son fielmente corroboradostanto por nuestros hallazgos de 27.5% de parientes de primer grado, afectados por la misma enfermedad, que se incrementa hasta el 38.75% si se considera tanto al TOC como el TOC- subclínico, como lo reportado por otros autores (4, 8).

Por otro lado, fue interesante observar que la gran mayoría de los pacientes de nuestro estudio presentaron más de una obsesión y más de una compulsión; dato que se corresponde fielmente con lo descrito por Geller en su revisión de 11 estudios clínicos (16). Así como que, el 53% de pacientes con obsesiones de contaminación presentaban también compulsiones de limpieza, lo que confirma lo señalado por Yaryura en 1997 (22), cuando intenta clasificar a los pacientes tratando de hallar bases clínicas para diferencias en pronóstico y tratamiento.

El tiempo promedio de enfermedad hallada (16 meses) y el hecho de que el 78% de nuestros pacientes presentaron un solo episodio, apoya el conocimiento de que el TOC en niños y adolescentes, al igual que en adultos, es un trastorno

crónico (16 - 21)

.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

1-Janet P, Raymond F. Les obsessions et la psychasthénie. Paris: Felix Alcan; 1903.

Page 100: Revista pediatria interior

Estudio fenomenologico en 90 pacientes menores de 18 años con trastorno obsesivo compulsivo

2-Kanner L. Child Psychiatry. In Ollendick TH, Neville JK, editores. Phobic and Anxiety Disorders in Children and Adolescents. 3rd Ed. California: Springfield II;1962. p. 210-217.

3-Flament, M. F., Whitaker, A., Rapoport, J., et al: Obsessive compulsive disorder in adolescent. An epidemiological study. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry, 1988; 27: 764-771.

4- Swedo S, Rapoport J, Leonard H, Lenane M, Cheslow D. Obsessive compulsive disorder in children and adolescents: Clinical phenomenology of 70 consecutive cases. Arch Gen Psychiatry. 1989: 46: 335-341.

5-Robins L, Helzer J, Weissman M, Orvaschel H, Gruenberg E, Burke J et al. Lifetime prevalence of Specific Psychiatric Disorders in three sites. Arch. Gen. Psychiatry, 1984; 41: 949

958. 6-Vivar R., Adrianzen C, Macciotta B, Moron G. Programa de Atención de Niños y Adolescentes con Trastorno Obsesivo-compulsivo en el Instituto Nacional de Salud Mental �Honorio Delgado-Hideyo Noguchi�, Lima. Perú. Anales de Salud Mental.1998; XIV: 45-64.

7- Valleni-Basile L, Garrison C, Jackson K, et al. Frequency of Obsessive Compulsive disorder in a community sample of young adolescent. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry. 1994;

33: 782-791. 8-Zohar A, Ratzoni G, Pauls D, et al. An epidemiological study of Obsessive Compulsive disorder and related disorder in Israeli adolescents. Journal of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry. 1992: 31: 1057-1061.

9- Riddle M, Scahill L, King R, et al. Obsessive Compulsive disorder

Child. Adolesc. Psychiatry 1996; 35: 1265-1273.

19-Pauls D, Alsobrook J, Goofman W, et al. A family study of Obsessive-compulsive disorder. Am J Psychiatry 1995; 152: 76

84. 20-Black D, Noyes R, Goldstein R, et al. A Family study of Obsessive-compulsive Disorder. Arch Gen. Psychiatry 1992;

49: 362-368. 21-Bellodi L, Sciuto G, Diaferia G, et al. Psychiatric Disorders in the families of patients with Obsessive �Compulsive Disorder. Psychiatry Research, 1992; 42: 111-120.

22-Yaryura T. Trastornos Obsesivo-Compulsivos en la infancia. España: Harcourt Brace; 1997.

Correspondencia:

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Zoila Pacheco [email protected]

Recibido: 25-04-09

Aceptado: 27-04-09

in Children and Adolescent: Penomenology and Family History. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry. 1990; 29: 766-772.

10-Grados, M, Labuda M, Riddle M, et al. Obsessive Compulsive Disorder in Children and Adolescent International Review of Psychiatry 1997;9: 83-97.

11-Adams PL. Obsessive children. New York: Penguin Books; 1973.

12-American Psychiatric Association. Diagnostic and Statiscal Manual of Disorder. Fourth Edition, Washington D.C. American Psychiatric Press. 1994.

13-Scahill, L., Riddle, M.A., Mcswiggin-Hardin, M., et al. :`Childrens Yale-Brown Obsessive Compulsive Scale: reliability and validity. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry,1997; 36:844-852.

14-Adrianzen C., Pacheco Z., Vivar R, Macciotta B. Validez y confiabilidad de la Escala de Yale Brown versión niños y adolescentes (CY-BOCS) en el Perú. Rev. peru. Pediatr. 2008; 61:68-75.

15-Shaffer D, Gould MS, Brasic et al. Achildren�s Global Assessment Scale (CGAS). Arch Gen Psychiatry, 1983, 40: 1228-1231.

16-Geller D, Biederman J, Jones J, et al. Is Juvenil Obsessive Compulsive disorder a developmental subtype of the disorder? A Review of the Pediatric Literature. J Am. Acad. Child Adolesc. Psychiatry. 1998, 37:420-427.

17-King, R., Leonard, H., March, J. :Summary of the Practice Parameters for the ssessment and treatment of children and adolescent with Obsessive Compulsive Disorder. J. Am. Acad. Child. Adolesc. Psychiatry, 1998; 37: 1110-1116.

18-March J, Leonard H. Obsessive Compulsive Disorder in children and adolescent: A Review of the past 10 years. J. Am. Acad.

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Roxana Vivar y col.

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

ÉTICA Ética y medicamentos

Ethics and drugs

Hugo Peña Camarena 1

RESUmEN

Utilizando los principios de la ética médica se analizaron las distintas fases del desarrollo de los medicamentos, encontrándose las siguientes faltas a la ética: uso inadecuado de fármacos en algunos ensayos clínicos en países en desarrollo, suspensión de la producción de medicamentos por falta de rentabilidad, información científica fraudulenta, manipulación de la información para favorecer la venta de ciertos productos farmacéuticos, promoción de medicamentos con folletos fraudulentos y la irresponsable publicidad de medicamentos en medios de información pública. Se proponen algunas alternativas de solución. Palabra clave: medicamentos, faltas éticas.

AbSTRACT

Using the principles of the medical ethics the different phases were analyzed from the development of medicines, found the following offenses for ethics: inadequate drug use in some clinical essays in developing countries, suspension of the medicine production for failing of yield, fraudulent scientific information, manipulation of information to promote the sale of certain pharmaceutical products, medicine promotion with fraudulent pamphlets and the irresponsible promotion of medicine in means of public information. Suggests some alternative solutions. Key words: medicines, ethical lack.

Al analizar la literatura médica relacionada con la investigación, información, producción, promoción y comercialización de los medicamentos, utilizando los principios de la ética, se puede identificar algunas faltas adjudicadas a muchos actores, pero prioritariamente a la industria farmacéutica

Médico Pediatra, Jefe del Departamento de Pediatría del Hospital Regional Docente de Trujillo. Docente del curso de Pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad Privada �Antenor Orrego� de Trujillo. Magíster en Investigación y Docencia Universitaria

y a los médicos, en un accionar muchas veces complementario.

Las más importantes y trascendentes son las siguientes:

Ensayos clínicos en humanos

Han sido muy criticados 15 estudios realizados en Costa

de Marfil, Uganda, Tanzania, Sudáfrica, Malawi, Tailandia, Etiopia, Zimbawe y Kenya y que fueron publicados en The New England Journal of Medicine en el año 1997(1-3), donde se evalúo la efectividad de la zidovudina en la prevención de transmisión perinatal del VIH durante el embarazo, y se

Page 104: Revista pediatria interior

administró fármaco o placebo de forma randomizada, pero el fármaco ya había mostrado ser más efectivo que el placebo en países desarrollados.

Estos ensayos son poco éticos porque niegan el uso de una droga ya eficaz en la prevención de esta enfermedad y exponen a los pacientes al riesgo de infectarse al usar sólo placebo, por lo que es necesario que el patrón que se aplica en las investigaciones realizadas en países en desarrollo sea el mismo que se aplicaría en el mundo desarrollado, destacando que sería inaceptable en los países desarrollados randomizar zidovudina frente a placebo. Por lo tanto, las

autoridades sanitarias de los países en desarrollo donde se

realizan las investigaciones, deben establecer una serie de procedimientos para evitar que las compañías farmacéuticas violen los derechos de sus residentes.

Al respecto es importante resaltar los siguientes párrafos del código de ética para estudios clínicos realizados en seres humanos, elaborado en 1964 por la Asociación Médica Mundial, conocido como la Declaración de Helsinki (4) y sus sucesivas enmiendas, mejorado por la 29 Asamblea Médica Mundial (Tokio-Japón, 1975), la 35 (Venecia-Italia, 1983), la 41 (Hong Kong, 1989) y la 48 (Somerset West-Sudáfrica, 1996):

�Los beneficios, riesgos, costos y efectividad de

un nuevo método debe ser evaluado mediante confrontación con el mejor método actual,

profiláctico, diagnóstico y terapéutico�.

�A la conclusión del estudio a cada sujeto participante en el estudio se le debe garantizar el

acceso al mejor método profiláctico, diagnóstico o terapéutico identificado en el estudio�.

�Es misión del médico salvaguardar la salud de las personas. Sus conocimientos y conciencia están

Page 105: Revista pediatria interior

Hugo Peña Camarena

dedicados al cumplimiento de dicha misión�.

�Cabe destacar que las normas redactadas constituyen únicamente una guía para los médicos de todo el mundo. Estos no quedan liberados de las responsabilidades penales, civiles y éticas que marquen las legislaciones de sus respectivos

países�.

Las compañías farmacéuticas prefieren realizar ensayos

clínicos en países en desarrollo, debido a la ausencia de

controles reguladores, la rapidez en el reclutamiento de pacientes y las bajas tasas de abandono entre las personas reclutadas. Sin embargo, se han detectado problemas en relación al patrón de cuidados mínimos, el consentimiento informado y la continuidad del tratamiento una vez finalizados los ensayos clínicos. En un estudio realizado en varios países en desarrollo se encontró que cerca del 50% de los participantes en ensayos clínicos no comprendía la información antes de firmar el consentimiento respectivo y el 60% participaba en el ensayo porque el tratamiento era gratuito (5, 6).

Otros problemas éticos en relación a los ensayos clínicos en humanos en países en vías de desarrollo con un nivel de vigilancia cuando menos dudoso, son los siguientes:

- Las compañías farmacéuticas utilizan médicos no especialistas para llevar a cabo ensayos clínicos sin estar capacitados, por la necesidad imperiosa de reclutar pacientes en los que se debe probar un nuevo producto antes de lanzarlo a un mercado tremendamente competitivo como el americano. En esto influye la posibilidad de obtener ingresos extras para estos médicos que no tienen oportunidad de participar en otros estudios usualmente limitados a grandes hospitales adscritos a universidades de prestigio. -Utilización de determinadas presentaciones de fármacos en patologías infecciosas muy graves (antibióticos orales en lugar de intravenosos en meningitis bacteriana para comprobar su eficacia por esa vía de administración) frente a otras presentaciones con eficacia probada. Todo ello utilizando poblaciones de riesgo (niños), sin solicitar consentimiento informado y sin la aprobación por un comité ético de investigación, que evidentemente nunca la daría.

-Falta de consentimiento informado; en países como Brasil se reporta que entre los años 1997 y 2002 más de un millón y medio de personas participaron en investigaciones clínicas, evidentemente sin saberlo, y en un 80% eran ensayos clínicos con medicamentos de laboratorios extranjeros (7). Según esta información, una tercera parte de la población eran niños y todos

pertenecían a la red pública de salud.

Page 106: Revista pediatria interior

Suspensión de la producción de fármacos útiles por falta de rentabilidad

En el año 1985, la firma Merell Dow de Estados Unidos desarrolló la droga eflornitina (Ornidyl) para un eficaz tratamiento contra la Tripanosomiasis Africana (5). Fue considerada como de elección por la FDAy es droga huérfana. Al comienzo fue vendida a un precio muy alto e inaccesible para la población más afectada y luego retirada del mercado por razones de rentabilidad.

Este tipo de acciones tienen consecuencias graves sobre algunas personas e incluso poblaciones numerosas, por lo que exceden la responsabilidad ética y sería más acertado que a los involucrados se los enmarcara en figuras de responsabilidad penal.

Información científica fraudulenta

En 1995, la OMS expresó su preocupación sobre los riesgos de los anticonceptivos de tercera generación en cuanto al incremento de trombosis venosa respecto a los de segunda (8). Desde entonces estudios independientes mostraban evidencias de mayor riesgo, mientras que los otros subvencionados por la industria farmacéutica no lo hacían. Finalmente, en fecha muy reciente, este oscurantismo científico quedò invalidado por los resultados finales de un metaanálisis, que demostró fehacientemente el mayor riesgo en los de tercera generación (9).

Hechos de estas características se dan con frecuencia comprometiendo la ética de los investigadores, la industria y las revistas científicas. Para evitar esos riesgos se debe exigir a los patrocinadores que cumplan estrictamente reglas que aseguren la independencia intelectual de los investigadores, y que se puedan publicar resultados desfavorables o incluso interrumpir un estudio cuando la investigación no sea científica

o ética. Manipulación de la información

En la década del 60, desde EE.UU. se impulsó fuertemente la norma de trasladar a una nurseria al recién nacido, separándolo de la madre hasta el momento de su alta, allí se lo alimentaba con biberón de leche heteróloga. Esta práctica médica fue impuesta en coincidencia con la aparición en el mercado farmacéutico, de las fórmulas lácteas infantiles. Se logró separar al niño de la madre y reemplazar el pecho materno con una endeble fundamentación científica, pero una excelente estrategia promocional. Semejante disparate era promovido por médicos obstetras y pediatras de prestigio en función de comunicadores y por instituciones médicas reconocidas, que adoptaron esta normativa (5).

Pocos años después, volvió a imperar la sensatez y el reconocimiento a lo biológico, incentivándose la lactancia

Page 107: Revista pediatria interior

Ética y Medicamentos

materna exclusiva. Al evaluar imparcialmente esta práctica no quedan dudas acerca de la influencia que ejercen algunos comunicadores científicos carentes de ética.

Promoción mediante folletos fraudulentos

La profusa folletería de promoción está plagada de información no ética, tendenciosa e incluso falseada. Estas observaciones quedan bien reflejadas en un artículo publicado en la Revista Medicina de Argentina (10), que analiza el material informativo entregado por la industria farmacéutica y concluye que la información entregada por los laboratorios para promocionar sus productos no puede ser tenida en cuenta para realizar una prescripción racional, principalmente por la sugerencia de efectos terapéuticos no comprobados y la falta de mención de efectos adversos. Sólo el 60% del material estudiado poseía referencias bibliográficas y la mitad no pudo ser recuperada, debido a estar mal citada y no se pudo intentar ni siquiera la búsqueda.

Todo lo mencionado anteriormente es considerado como no ético según los criterios éticos de la OMS para la promoción de medicamentos según resolución de la 41 Asamblea Mundial de la Salud, vigentes desde 1988 (11).

Publicidad de medicamentos de venta libre

Respecto a la publicidad en los medios de información pública sobre medicamentos de venta libre, se asiste a una constante degradación y abuso de la misma. Este tipo de avisos desvirtúa la esencia del medicamento, promueve la automedicación y atentan contra el uso racional del medicamento (5).

Las instituciones pertinentes no deben permitir esta trasgresión ética con implicancias graves para la salud de la población.

Descuentos en precio de medicamentos mediante bonos otorgado por el prescriptor

La compra de medicamentos en farmacias con significativo descuento mediante bono extendido por el prescriptor y entrega de otra unidad contra presentación del envase vacío en el laboratorio, permite conformar un listado con los pacientes y sus médicos prescriptores (10).

Lo menos que uno podría preguntarse en estos casos sería cuál es el valor real del medicamento y si es ético este tipo de comercialización que determina diferentes precios a los pacientes y que ofrece lugar a entretelones entre la industria y el prescriptor. Como responsables se pueden mencionar a la industria farmacéutica, gobiernos, colegios profesionales y prestadores de salud.

Las situaciones tipo descritas en las distintas fases del desarrollo de los fármacos ilustran la falta ética, que se reiteran con modalidades iguales o parecidas en

proporción alarmante, desquiciando cualquier posibilidad de ordenamiento conducente. Cada una de estas faltas

Page 108: Revista pediatria interior

éticas disocia el comportamiento y por ende, la relación de convivencia en la sociedad. El comportamiento no ético lesiona la búsqueda de equidad y estimula por mimetización igual estilo de comportamiento en otros. Quien transgrede éticamente es indiferente a la sanción moral y a interpretar el valor de lo logrado a través de una conducta correcta.

Teniendo en cuenta que en nuestro medio aún persisten algunas faltas éticas en relación al uso de medicamentos, se plantean algunas alternativas de solución:

1. Propiciar un cambio profundo de la actitud personal de los médicos y otros profesionales de la salud para evitar comportamiento no éticos relacionados a los medicamentos; si nuestra actitud sólo está guiada en lograr un interés en beneficio propio, sin considerar al paciente, no encontraremos la solución al mismo. 2. Recomendar que los médicos utilicen la evidencia para prescribir medicamentos y que no se guíen por las promociones de los laboratorios: muestras médicas y otros regalos de escasa importancia. 3. Reimpulsar el funcionamiento de comités de ética en las universidades, hospitales y demás entidades que realicen investigación en salud. La vigilancia que ejerzan ofrecerá garantías a cada individuo participante de los ensayos clínicos. 4. Exigir a los patrocinadores de las investigaciones científicas que cumplan estrictamente las reglas que aseguren la independencia intelectual de los investigadores, y que se puedan publicar resultados desfavorables o incluso interrumpir un estudio cuando la investigación no sea científica o ética. 5. Exigir a las autoridades correspondientes hacer cumplir las leyes y reglamentos vigentes para evitar las constantes faltas a la ética en las distintas fases del desarrollo de los medicamentos. REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

1. Angell M: The ethics of clinical research in the Third World. NEJM 1997;337:847-849. 2. Lurie P, Wolfe S: Unethical trials of interventions to reduce perinatal transmission of the human immunodeficiency virus in developing countries. NEJM 1997;337:853-856. 3. Angell M: Investigators responsibilities for human subjects in developing countries�. NEJM 2000;342: 967-969. 4. World Medical Association: Declaration of Helsinki Edinburgh 2000 52nd WMA General Assembly, Edinburgh, Scontland, October 2000. 5. Oteo H: Ética y medicamentos. Boletín fármacos. 2003;6. 6. Verástegui E: Consenting of the vulnerable: the informed consent procedure in advanced cancer patients in Mexico. Medical Ethics 2006; 7:13-24. 7.

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Pol E: Investigación clínica en países en desarrollo. Boletín Fármacos. 2008;11. 8. Anticonceptivos orales: El riesgo cardiovascular. Drug and Therapeutics Bulletin 2000; 38.

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Hugo Peña Camarena

9. Kemmeren J: Third generation oral contraceptives and risk of venous thrombosis: meta-analysis. British Medical Journal 2001; 323: 131. 10. Mejía R, Avalos A: Material informativo entregado por los agentes de propaganda médica. Medicina (Argentina) 2001; 61: 315-318. 11. Criterios éticos para la promoción de medicamentos. Resolución WHA 41.17, adoptada por la 41 ª Asamblea Mundial de la Salud. OMS. Ginebra; 13 de mayo de 1998. Correspondencia: Hugo Peña Camarena [email protected]

Recibido: 12-12-08

Aceptado: 19-03-09

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CULTURAL Pisco sour del Perú

Pisco sour from Perú

Carmen del Pilar Lazo Rivera 1.

Si bien el pisco del Perú se produce desde fines del siglo XVI, el cóctel llamado pisco sour se originó en el Perú en los años veinte del siglo XX en el Bar Morris, en la calle Boza 847, en el Jirón de la Unión del centro de Lima, que había abierto sus puertas en 1915 y que dejó de existir en 1933, en el cual se ofrecía como una novedad el pisco sour, inspirado en el whisky sour .

Este trago fue creado agregando, a la tradición inglesa del sour, varios otros ingredientes, que en conjunto, equilibran la acidez del limón del Perú.

Desde entonces y por su sabor, este aperitivo se ha difundido sin cesar no solamente en el Perú, sino en los países a donde llegó gracias a los restaurantes de comida peruana que ahí existen.

En �Lima, la Ciudad de los Virreyes�, una guía de Lima de los años 1928-1929, escrita por Cipriano Lagos, aparece una nota promocionando el Bar Morris, en la cual se señala al pisco sour como una de sus especialidades.

Los hoteles más elegantes de la época lo imitan y así llega el pisco sour al Hotel Maury, en la esquina de los jirones Ucayali y Carabaya, y al Hotel Bolívar, en la Plaza San Martín intersección con la avenida Colmena. También se ha señalado que fueron los barman del Bar Morris, que al cerrar, difundieron la receta en los hoteles de Lima. El Hotel Maury se atribuye la creación del pisco sour en su actual formulación.

Por otro lado, Luciano Revoredo, siguiendo la hipótesis de Guillermo Toro Lira que sostiene que el origen del pisco sour sería anterior al bar Morris, ha descrito en su obra una mención que encontró en el Mercurio Peruano, sobre la preparación de pisco con limón en el siglo XVIII en Lima, a

1 Médico Cirujano -Cirujana Maxilo facial. Clínica de

especialidades mèdicas, San Borja, Perú consecuencia de la prohibición de la venta de aguardiente por las peleas que originaba cerca a la Plaza de Toros de Acho de aquella ciudad. Este periódico relata que allí nació un producto denominado Punche, vendido por los esclavos y preparado en base a pisco y limón, que según

Revoredo podría ser un antecedente del Pisco punch.

Legislación peruana reciente

� En el 2003, el Gobierno peruano dictó un instructivo para fomentar local e internacionalmente su consumo. Así, todas sus misiones diplomáticas, consulares y representaciones ante organismos internacionales, en

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sus cuentas de gastos en compras de licores, deberán disponer del cincuenta por ciento para adquirir pisco y cincuenta por ciento para otros licores. El entusiasmo de los productores locales de pisco por esta medida oficial ha sido tal que el incremento de su producción ha sido notorio. Del mismo modo, se dispuso que en las tarjetas de invitaciones oficiales ya no se mencionara el clásico �cóctel de honor� o �vino de honor� sino �pisco de honor�.

� Por Resolución Ministerial 161-2004-PRO-DUCE, con fecha 22 de abril de 2004, se instituyó �el primer sábado del mes de febrero de cada año, como el día del Pisco Sour, a nivel nacional�.

� El 18 de octubre de 2007 el Instituto Nacional de Cultura del Perú (INC) declaró al Pisco Sour como Patrimonio Cultural de la Nación basado en la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO, la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación y la Directiva sobre Reconocimiento y Declaratorias de las Manifestaciones Culturales Vigentes como Patrimonio Cultural. Receta clásica del pisco sour del Perú

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Carmen del Pilar Lazo Rivera

-3 onzas de pisco. -1 onza de jugo de limón pequeño muy verde. � EDELNOR, Un poco de historia del Pisco Sour (2006) � Redacciononline (2006), El pisco sour según Eloy Cuadros (2007) � Resolución del Ministerio de Producción del Perú, Nº 161-2004PRODUCE, sobre el Día del Pisco Sour � Andina, Agencia Peruana de Noticias (2007), Declaran Patrimonio Cultural de la Nación al Pisco Sour, Lima [2007] Correspondencia: Carmen del Pilar Lazo Rivera [email protected]

FÉ DE ERRATAS

En la edición anterior volumen 61 (4) 2008 en el articulo

Comparación de tres géneros musicales como método analgésico no farmacológico: estudio randomizado ciego simple, página 221. En autores se cometió el siguiente error:

Dice: Ana Lucia Liu Chang Debe decir: Ana Lucia Sui Chang

-1 onza de jarabe de goma. -1 clara de huevo. -6 cùbos de hielo. -1 ò 2 gotas de amargo de angostura. Esta combinación ha de agitarse en coctelera hasta que los ingredientes se combinen. Si se usa licuadora, han de licuarse todos los ingredientes, menos la clara de huevo por un minuto; apagada la licuadora agregar la clara de huevo y licuar por cinco segundos más. Esta receta del pisco sour se hace más agradable si se le colocan dos clases de pisco, uno puro y otro que sea aromático.

REFERENCIAS bIbLIOGRÁFICAS

� Huertas L. Historia de la producción de vinos y piscos en el Perú. En: Revista Universum, 2004; 19 (2). � RPP Noticias (2004), Un poco de historia, Lima, Perú (2007)

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Rev. peru. pediatr. 62 (1) 2009

Reglamento de publicación

1. DE LA REVISTA La Revista Peruana de Pediatría es la publicación oficial de la Sociedad Peruanade Pediatría, destinado a divulgar y propagar los conocimientos sobre Medicina Preventiva y Asistencial entre los médicos pediatras y profesionales interesados.Dicha acción la ejerce a través de la publicación de trabajos científicos de susasociados y profesionales médicos no asociados, nacionales e internacionales, quepor su calidad y rigor científico merezcan su publicación para ser difundidos dentroy fuera del país.

2. DE LAS SECCIONES DE LA REVISTA La Revista Peruana de Pediatría cuenta con las siguientes secciones:

2.1. EDITORIAL Destinada a aspectos doctrinarios de la Sociedad Peruana de Pediatría o a temas que por su trascendencia y actualidad requieren su publicación.

2.2. TRABAJOS ORIGINALES Comprende la sección de trabajos originales e inéditos de las diversas áreas de la Pediatría o ciencias afines. No excederá de 15 páginas. Para considerar su publicación deben reunir los siguientes requisitos:

El título debe estar en español e inglés.

� RESUMEN: En el que se expondrá en forma precisa la esencia del trabajo y deberá incluir los siguientes subtítulos: Objetivo, Material y métodos, Resultados y Conclusiones, y tendrá su respectiva traducción al inglés, la cual no deberá exceder las 200 palabras. Al final se escribirán las palabras clave en número no

mayor de cinco (http://www.nlm.nih.gov). � INTRODUCCIÓN: Que incluye la exposición de motivos del trabajo y una breve referencia de la literatura, que debe ser clara, explícita y concisa.� MATERIAL Y MÉTODOS: Se describen las características del material empleado en el trabajo y la metodología usada en el estudio en forma concreta y precisa.� RESULTADOS: Deberán ser de carácter objetivo, con el análisis estadístico en los

casos pertinentes, sin interpretación personal y serán acompañados de las tablas

y/o figuras respectivas (figuras, radiografías, fotografías).� DISCUSIÓN: Comprenderá la interpretación de los resultados comparándolos con los trabajos realizados por otros autores y las conclusiones que se derivan de ello cuando sea apropiado.� AGRADECIMIENTOS (si viene al caso). � REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS: Se harán de acuerdo a las Normas de Vancouver y serán presentadas en el orden como aparecen en el texto. Todas las referencias deberán

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estar citadas ya sea en el texto o en las ilustraciones con un número arábigo entre paréntesis, en superíndice. Estas llamadas de cita precedidas de un espacio, se colocan antes del punto, coma u otro signo de puntuación. El máximo de referencias bibliográficas permitidas es de 40. 2.3. TEMAS DE REVISIÓN Son trabajos de actualizaciones sobre temas de la especialidad, en particular de

trabajos originales o académicos o médico�quirúrgicos, no excederá de 12 páginas.Deberá acompañarse de un resumen con su respectiva traducción en inglés y palabras clave no más de 200 palabras.

2.4. CASOS O REPORTES CLÍNICOS Se considera para su publicación únicamente aquellos casos que signifiquen interés diagnóstico, anomalía de evolución, rareza de observación, evidente interés por la respuesta terapéutica. Deberá acompañarse de un resumen con su respectiva traducción en inglés y palabras clave. No excederá de 6 páginas.

Se tomarán en cuenta los siguientes puntos:a) Introducciónb) Reporte del caso clínicoc) Comentarioc) Bibliografía

2.5. SALUD MENTAL Se publicarán artículos sobre algún aspecto de salud mental del niño y el adolescente. No excederá de 4 páginas. Deberá acompañarse de un resumen con su respectiva traducción en inglés y palabras clave.

2.6. ÉTICA Se considera en esta sección algún tema de interés sobre ética médica. No excederá de 3 páginas.

2.7. CULTURAL Se consideran para esta sección artículos de interés en el área cultural. No excederá de 3 páginas.

3. NORMAS PARA SU PUBLICACIÓN Se refiere a los aspectos generales de los trabajos.

3.1. Los trabajos se reciben en el local de la Sociedad Peruana de Pediatría: Calle Los Geranios Nº 151, Urb. Jardín, Lince, Lima 14 � Perú; de lunes a viernes de 10 a.m. a 5 p.m. Teléfono Nº 4226397, correo electrónico: [email protected]. Al entregar el trabajo recibirá una constancia de recepción. 3.2. El artículo debe estar acompañado por una Carta de Presentación dirigida al

presidente del Comité de Publicaciones solicitando la evaluación de dicho artículo para su publicación y debe certificarse mediante una Declaración Jurada que no ha sido publicado en otra revista y estar firmada por el autor y coautores. 3.3. La Revista Peruana de Pediatría acepta la solicitud de publicación de contribuciones nacionales y extranjeras de la especialidad siempre que se ajusten a los requerimientos del presente Reglamento. 3.4. La Revista Peruana de Pediatría se reserva el derecho de aceptar los

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trabajos que se presenten y de solicitar las modificaciones que considere necesarias para poder cumplir con las exigencias de la publicación. 3.5. La publicación de trabajos en la Revista Peruana de Pediatría, en sus diferentes secciones, no obliga necesariamente a solidarizarse con las opiniones vertidas por él o los autores. 3.6. Los trabajos presentados para su publicación en la revista son evaluados por árbitros externos. 3.7. El trabajo deberá enviarse en original impreso y en forma electrónica debidamente grabado en un disquete o CD en el programa Word para Windows 97 o posterior, letra Arial, tamaño de fuente 10 puntos, espacio sencillo. 3.8. El artículo debe usar el Sistema Internacional de Medidas. 3.9. Las ilustraciones (tablas, figuras, fotografías y otros documentos similares) no excederán de 10 y deben estar insertadas dentro del artículo en Word, con el título correspondiente y en el orden de aparición, con letra tipo oración. Ejemplo: Tabla 1. Índices de salud. 3.9.1 Las tablas, gráficas, radiografías, fotografías, etc., deben tener untítulo breve y claro, escrito en letra arial y serán numeradas según el orden de llamada que aparece en el texto. Precisar número de fuente en negrita. Ejemplo:Tabla 1. Letalidad de acuerdo al grado de hemorragia intraventricular. 3.9.2 Las tablas y las ilustraciones serán considerados para el entendimiento del texto y no deberán ser reiterativos entre sí o con relación al texto (no trace líneas horizontales ni verticales en el interior de los cuadros). 3.9.3 Las figuras, radiografías, fotografías, etc. deben tener leyenda. 3.9.4 Las publicaciones de reproducciones a color deben consultarse con el director responsable. 3.10. En la primera página del trabajo debe anotarse.Título: breve, que represente el contenido del articulo, en español y en inglés.Nombre y los dos apellidos del autor y coautores.Grado académico y afiliación institucional.Nombre del Departamento y/o institución en que se realizó el trabajo.Dirección del autor, adonde se le dirigirá la correspondencia, así como teléfono

y dirección de correo electrónico. 3.11. Los autores que hayan presentado artículos recibirán una carta de la Secretaría de Comité de Publicación y Biblioteca, señalando la �aceptación� o �no aceptación� de dichos trabajos en un plazo máximo de 60 días. Los originales de los trabajos no aceptados serán remitidos con la carta de �no aceptación�. 3.12. Una vez aceptado y publicado el artículo, los derechos pertenecen a la Revista Peruana de Pediatría, y serán reproducidos por terceros sólo con la autorización

correspondiente.

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