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EL MUNDO, SAN JUAN, f. I - DOMINGO 31 DE JULIO DE 1938. EL AÜNDO VERDAD V JUSTICIA ratora: rtTBtTo sioo iLornuoo me. : Joa4 0*11 Vidal. Administrador: Ángel R* ofitinu: roincio P CHITO aico OiOtriuoo Apartada dt Cernea SU reacio é$ euacrtpeióa astados Caldos y pal- Para al extranjero: tneiuyendo aabatlao ? dentro da) Trata» de Paatal: Aa0 _ ¿, a 17.00 Camastra 9.00 Trlmaatra 71 doniAical •avaatra «. « t.M *amtatra _ _ 7.M AAo lfl.M Aflo 14.00 Diríjase la eorraapondancí» informativa r literaria a la dirección. Pira anuncioa, oorauntcadoa. ato.. dlrljaM al Administrador. REVISTA DE CIENCIAS Maravillas, beneficios y horrores de los inventos Por el Dr. JULIO CÁNTALA L.V INTERESANTE INFORME SOBRE LA NIÑEZ DESVALIDA EN PUERTO RICO La Alambica Legislativa de Puerto Rico aprobó en el , año 1930 una resolución conjunta por la cual ordenó que se hiciera un censo de todos los niños abandonados que exis- ten en la Isla sin hogar apropiado y designó una comisión compuesta de los Comisionados de Sanidad, Interior, Agri- cultura y Comercio, Trabajo e Instrucción para que prepa- rara los estudios y planos necesarios para la construcción de una granja agrícola donde cotos niños abandonados pudieran aer alojados y recibir una educación práctica en los oficios propios de su sexo y en el cultivo de la tierra. La recopilación de datos se llevó a cabo durante los me- ses de marzo, abril y mayo de 1936. En la mayoría de los pueblos los trabajadores sociales hicieron la investigación. El Departamento de Inatrucción Pública acaba de publicar ' el estudio en su boletín oficial. "El problema de la infancia abandonada y sus concomi- tancias —el vicio, la delincuencia y la prostitución— dice •1 doctor Gallardo en el prefacio del trabajo, tiene en nues- tro país trascendencia social de vastísimos alcances. El ni- ño realengo es un delincuente en gestación. Si no se salva a tiempo, su paso al crimen es seguro y vertiginoso: del des- amparo a la mendicidad, de la mendicidad al vicio, del vicio - al pecado: esto es, de la casa a la calle, de la calle al pros- tíbulo, el prostíbulo a la penitenciaria. Como tenemos mu- cho* niños abandonados, también tenemos muchos crimina- . les precoces. Un estudio de ambos, realengos y delincuen- tes, nos lleva a la conclusión de que un gran número de es- tos menores se incubaron en hogares irregulares, fueron lan- zados temprano al arroyo, tuvieron la tara de padres alco- hólicos o sifilíticos, y vivieron en un ambiente propicio a todas las miserias, a todos los vicios, y a todas las prevari- caciones.. ." v El informe publicado no es un censo, propiamente di- cho, de los niños abandonados de Puerto Rico, en el sentido de que no abarca la totalidad de la infancia desamparada I en la Isla. Sólo fueron investigados tres mil quinientos dice y seis caaos de niños abandonados en distintas poblaciones. La zona rural fué prácticamente excluida. No obstante, los caaos que comprende el informe son representativos de la mayoría y aportan lucea bastantes para un cabal estudio del problema que plantea a nuestro pueblo y a nuestro Gobier- ' no la niñez desamparada. El Comité del Censo informa que, de los tres mil qui- nientos diez y seis casos examinados, el setenta y uno por ciento son varones y el veinte y nueve por ciento, hembras. El estudio demuestra que no siempre los niños abandonados son producto de uniones ilegales. El sesenta y dos por cien- to de los niños y niñas investigados son hijos legítimos: el veinte y nueve por ciento, ilegítimos, y el número de hijos naturales y reconocidos, relativamente bajo comparado con el de loe legítimos. En lo que respecta al grado de instruc ción, se anota que un quince por ciento de los varones y un catorce por ciento de las niñas no ha asistido nunca a la es- [ euela. Entre loa que han concurrido a loa planteles de en- señanza, el mayor número se queda en primer grado, aun- oue de los examinados llegaron hasta el tercer grado un ca- torce por ciento de loa varones y un once por ciento de las hembras. En cuanto al estado de salud de los niños aban- donados, consigna el informe un dato satisfactorio: un cin- cuenta y ocho por ciento de los varones y un cincuenta por . ciento de las hembras gozan de buena salud. El porcentaje de niños cuya salud es pobre sólo aseiende a veinte y uno per ciento, y en el caso de las niñas a veinte y ocho por ' Ciento. Al afrontar el estudio de las causas que motivan el aban- dono de menores, el Comité del Censo señala las siguientes en orden de frecuencia: situación económica de la familia, orfandad del niño, deserción del padre, enfermedad de los padres, ilegitimidad del niño, deserción voluntaria del niño, deserción de ambos padres del niño, deserción de la madre, crueldad de loe padres y estado mental de éstos. De acuerdo con eata investigación, la extremada indi- gencia ea el principal motivo por el cual muchoe padrea abandonan a sus hijos. La violenta crisis que produce en el hogar el desempleo prolongado obliga a los padres a pe- dir auxilio a sus vecinos, llevando "el hijo hambriento y he- rapoeo a rastras"; o a entregarlos a familias o personas que se apiaden de ellos y quieran tenerlos en sus hogares, don- de no siempre reciben la mejor dirección, o a dejarles que , pidan limosna de ropa o de comida, coca que al principio hacen por necesidad y que, a fuerza de coatumbre, degenera en mal hábito. Después de realizada la labor de investigación, y de ha- cer el análisis de loa datoa recopilados, el Comité entiende AU*~al total de niños abandonados en Puerto Rico no podría 'acomodarse en una granja agrícola, como la propuesta por la Asamblea Legislativa en la resolución conjunta en que 'dispuso la formación del censo. La colonia tendría que ser ; necesariamente pequeña por loa gastos que ocasionaría al f Góbferno su funcionamiento. Además, hay condiciones in- i dispenaablea al bienestar de un niño que exigen el calor del ; hogar. Otra atinada observación es la de que los niños com- ! prendidos entre las edades de menos de uno a diez y seis año* no podrían agruparse en una sola colonia, ya que a sus diversas edades necesitarían distintos cuidados. Entiende el comité que en su gran mayoría los proble- mas* de los menorea desamparados podrían resolverse faci- litando ayuda económica a uno de los padres, a ambos, o a i loa pariente* que se han hecho, o en el futuro quieren ha- , cerae cargo del niño. Recomienda el establecimiento de ho- ! ¿aret adoptivos como medida permanente para los casos de ' menores huérfanos que hayan quedado al cuidado de fami- llares o personas particulares que no tienen interés en el nifto ajeno, y para aquéllos que tienen padrea irreaponaa- Visité con un amigo, hace anos, una exposición da heráldica en Bath i Infla terral. Allí repasamos la historia de las familias y "Klans" i que han formado al Imperio Bri- j ttnleo Poco después nos encontré- '. mos en al Japón. Recorrimos una ' exhibición en donde sa mostraban , uniformes y armas da loa antiguoa ¡ "samurais" feudal»». La semana pa- ! seda me reuni de nuevo con el com- panero que de,, mbu id en mi compa- ; Ala a travéa do museos y galerías He les viejos continentes... Me in- vito a repasar una exposición re- cién abierta en Nueva York el dia ocho de julio... Las primeras 200,000 patentas Una "exhibición heráldica ameri- cana" ... Les emblemas en esta nue- va jalarla, son "máquinas", instru- mentos Uslocados" fórmulas de re- acciones químicas, productos sinté- ticos, en una palabra, todos lee es- calones que han contribuido al avan- ce de la ciencia y de la invención en los ¿nados Unidos... Cuarteles y escudos de América que al triun- far hacen del modesto inventor un señor feudal, y a veces un "millo- nario aunque él no quiere"... La Exposte.nn Inaugurada en el Museo de Clencas e Industrias en Nueva ye-rk. tlone por objeto revelar la historia de las 200,000 primeras patentes que con máa éxito se han desarrollado en los últimos tiempos. En las Inmensas galerías hay unas vitrinas en non de se guarda el "pro- ducto 4> la substancia gris cerebral" de cientos y miles de humanos. La mayoría de los Inventores sin du- platlno. cobre, plata y cobalto. tle-¡ manales... ¿Dónde fué a parar el clna han aumentado seis veces en nen la particularidad de activar la filosófico y men zapatero...? Roger número desde 1890 a 1930, y el sa- edad '.a las bebidas alcohólicas y Bacon, es cierto que nació hace mu-¡ iarlo medio, es de 21 dólares por para industrializar este proceso, el en os anos (1214) pero es quizá el semana. El hombre, por el mismo inventor presenta unos recipientes; Originador de esta filosofía de la in-1 trabajo es pagado 42 dólares sama- ron une cap. interior metálica que | venció Industrial. Leonardo de Vin- nales. Paralek al movimiento de activa la vejez. Si la madurez de la ci (1452-1519) tuvo esta manie «rea*: "emancipación femenina" está el bebida quiere acelerar, los "reci- pientes" tienen sedimentos metal!- lización del concepto», y asi cons- problema da la máquina, no obs- truyó canalea. aeroplanos y piezas ¡ tanta loa optimista» opinan que esta dominio mecánico he favorecido el aumento de: trabajo. Los que tal opinan afirman que los hombres que actualmente monean las máquinas, suponen una fuerza Industrial más grande o.ue todas las industrias de hace 100 ano*. En el "Daily Mlrror" del pasado mayo 23, *e da un gráfico de este aumento, y se afirma, además, que, desde el 1870, en virtud de la in- fluencia de la ii.áqulna, se han crea- de en es Estados Unidos "quince Industrias magnas". De éstas, sólo trece dan trabajo e quince millones de hombrea. En el ano 1927 la in- dustria del automóvil empleó seis millones de personas. El ejemplo gráfico que de el articulista al co- mentar estos problemas, ea el si- gulenti: Para adquirir el coche de un bebé en 1914 se «acesltaban 41 horaa -le trabajo según los salarios de aquellos dias. Hoy se puede con- seguir con lo que producen catorce horas de labor... ¿Y entonces dón- de está la causa de eses doce mi- llones >e desocupados...? Los monos inventan también Ralph Henry. en su libro titule- do "The Story of Descovery and Inventisn" sostiene que eún en los monos antropoidea existe en forma elemental la tendencia del "Inven- En cantando los gallos Por fc varíelo Kibera Chevremonl r tado. de -rhlfiadní'Av.m2. t!"' •—WodHo d»l primer plano SUelnway. ft-Ua primera» ametralladoras I tor". ata como ejemplo a doa chlm- e^Wir«l¿^t^>..Ct,.7^!l^ lüeaUlsT *n Estados Unidos. %—IA primera máquina registradora, p.ncés. Sultán y Nueve. El prime- pera ella, e huidos la "pr"sent2 revolucMi!i Ir!i ¡ *" Vn ,nv "" ta Hw,t *- M *»** d * """«»* «• éwhaa. ro cuando no podía conseguir la co- madre y pa rtu.tri.1" que afecta .1 mund*. ro ,„, por m . fllrt ft vlhraeione. arquitectónica. ' atr.vld... G.llleo. ¡ ff^^^JSZat M1M SeVKs Azúcar sintética Nos detuvimos ante las últimas Invenciones registradas dentro del campo de la química. Uno explicaba la manera de obtener "azúcar slnté- setúan ron más intensidad en los'Newton y la creación de la Royal Soclety en Londrea en 1662. forma- ron el verdadero emhrión de le pre- sente revolución industrial. James líquidos... Paté de foie al galope Watt on el 1759. estudió el vapor de agua y las leyes, físicas que le go- biernan y dio con la máquina, ele- Pohr^s gansos alsaclanos... El fa- moso "paté de foie" es el produc- tica". Está señalada bajo el nombre »o de una degeneración gresienta mente primordial de la "reforma" de Eugenio Alberto Prudhome. najen el hígado del ganso domesticado,; mecánica. S. Ingleterra no hubiera vecino de Blcetre (Francia). El pro-'que por exceso de comida y falta'podido explotar carbón, quizá este cedimiento se base en tratar el des-I de ejercicio se convertía en une movimiento social hubiera tomado Cuando Pedro Juan abrió los ojos, después de ocho horas de sueno, vio que la luz del amanecer entra- ba por las rendijas del bohío. A su lado dormían aún su madre, ya vieja, y sus dos hermanos, uno de sieve y otro de once aAos. El sen- tía, entre las cuatro frágiles pare- des del bohío, la respiración de aquello* seres tan amados por él. y sentia. slmujtánesmenta. gozo y congoja. El aire de la madrugada, de Inmenso frescor, entraba por las mismas rendijas que utilizaba la luz para bañar la miserable vivienda. Oiase."afuera, el despertar del cam- po. Pedro Juan pensó en su novia: María Isabel. Era una linda mucha- cha trigueña, la cual diputábanse los muchachos más enamoradizos del pueblo Pedro Juan dejó la ha- maca en que yacía y se asomó s la única pueita del bohio. Un trozo de verde, alumbrado por la clari- dad del dlá. lo deslumhró. Los pas- tos aparecían empapados de roclo. El cielo mostraba nubes entintadas de un tenue rosado. En la lejanía, con graciosa curva, dibujábase una colina. En esa colina levantábase un bohío. Allí ae alojaba su novia. Pedro Jusn sonrió. Próxima a la casa de la novia, brillaba la rica mansión o* Don José. Don José era el amo de las tierras que contem- plaban sus ojos ilusionados por la edad. Don Joaé era el amo. y el. Pedro Juan, nada más que el últi- mo de los empleados de Don José: un peón. Pero, por virtud de su em- pleo, le era posible sostener, aunque fuese privándose de todo y en gran- de pobreza, a su madre y a sus her- manaos. Aí.uel día iba él a pedir a María Isabel. Le hablarla con serie- dad a la madre, mujer que gustaba mucho del dinero. Pero él le diría que era hombre y que trabajaría como trabajaba para su ra sus hermanitos. Ga- pero él era Jibaro, y el hacer milagros. La mi- punta "horquillada, t "Nueve", más | serla enseAóle a realizar inteligente, se entretenía en los ra- los de >rio en 'tejer con las pajas" de su cama, ino* entrelazados rudi- mentario* que sin 'duda fueren los mismos que hicieron los hombres con escasos medios. Pedro Juan trabajó aquel día con •rulclón: y cuando terminaron las Taenas se dirigió a la casa de su novia. A unas yardas del hohlo, «aba en su hamaca del ajetree del día. María Isabel y su madre eran las encargadas de hacer la limpieza y lavar la ropa en la casa de Don José. NO le cocinaban. El séflor ha- bía traído un buen cocinero de la Habana, y la pagaba rumbosamen- te. Pedro Juan miró,- arrobándose, a María Isabel, e indagó: —¿Y tu madre. María Isabel? —Está descansando. -¿Podemos hsblar? -SI. —Vengo a pedirte. Tu madre no me negará tu mano. —Creo que no. —Yo te amó María Isabel, y has de pertenecérme. —Yo soy tuya. Pedro Juan. L* voz de María Isabel se derra- maba en azucarados acentos. Boni- ta era Su cara; bonito era su cuer- po. A través de la tela rameada del trajecito barato se notaba la ape- tecible riqueza de sus senos apre- tados, llenos de ardiente vibra- ción, de apasionante brie. Pedro Juan le enlató el talle finísimo con sus brazos fuertes y la besó en la boca. La boca de María Isabel era una boca modelada exclusivamen- te para el beso. El beso fuá de fie- bre pasional, de ansias de posesión. Ambos eran jóvenes y deseaban el enlace por el cual es glorioso «l hombre cuando se cumple ron amor y con limpieza de «entimlentos. Pe- ro, ¿se amaban ambos con la Mis- ma lealtad? Cuando Pedro Juan ae entrevistó con la madre de Maris Isabel, pare formalizar el noviazgo, la madre, con astucias largas, le hizo algunas observaciones al galán en le rela- cionado con el dinero y concluyó aconsejándole que desviase sus In- tenciones, Habla otras muchachas más sccesibles a su anhelante cor- teja Alicaído, retornó a au alber- gue. Lágrimas que él contenia con varonil freno, quemábanle los Oíos Cuando su madre le preguntó en' le pasaba, él no respondió. Se ten- dió en la hamaca y simuló que dor- mís. No comió esa tarde; y cuan- do la noche. acompaAada de esta- llas y de cnqules, se extendió sehr» Infectante llamado "formaldehldó" de le misma forma que la natura- leza trata las células de las plan- tas por medio de la luí para la crea- ción de los almidones. Por un tubo provisto da un filtro cromático, pa- sa un rayo de luz que toma un co- lor naranja. Esta va a parar a un recipiente en donde radica el "for- maldehldó" en estado gaseoso. Des- bolsa de grasa. Un Inventor fran- céa, se le ocurre sllmentar los po- bres gansos con una máquina, y, naturalmente, bajo esta "alimenta- ción forzada", la "cirrosis hepática" del animalito se produce con más rapidez... Asi comeremos a un pre- cio reducido este exquisito manjar que no es otra cosa que una aspe- el carbón de las profundidades, ele de 'libado alcohólico cómo el que otros derroteros. En un principio so- lo podia extraerse el combustible' que se encentraba en la superficie por las venas de agua que Inunda- ¡ ban las minas, pero el capitán The-! mea Savery introdujo le bombe me-'' canica en los pozos, y asi el mine-1 /o, libre del agua pudo explotar' pues de que el gas ha recibido la' padecen los bebedores de cerveza. , Pintarse en vea acción de la luz finaliza en un tan- que repleto de egua con cierta so- lución de cal. En presencia del ra- yo de te. las moléculas del desin- féctente se juntan con el objeto de edifiear un cuerpo más complejo cuyo final resulte ser "sacarosa". A medida que este azúcar se for- ma, es precipitado por la cal del agua y al fin de aaparar emboa cuer- pos, se les trata ton dióxido de carbono que tiene la propiedad de dejar en libertad la cal. Ladrillos de diarios viejos y vinos envejecidos con plata Patente a nombre de Mr. John Knote de New Jersey: Manera de hacer ladrillos de les diarios vie- jos... Mister Knote acénsele "gol- peer" s los diarios hasta conseguir que se vuelvan «lamentos. En este estado se mezclan con cierta eanti- dad de yesce y esta mezela se colo- ca en unos moldes a presión direc- ta que forme un ladrillo esponjoso, lleno de vacuoiaa que no dejan pa- sar ni la hu nadad, ni el frío, ni el calor... Por aquí ha llegado Herr Alexander Krause, de Munich, con un "invento" que consiste en "ave- Jentar" los vinos y les licores como si estuvieran guardados en laa clá- sicas bodegas de Burdeos, él Rhln o Andalucía. El procedimiento está basado en tratar los caldos aleonó, lieos por medio de cantidades Ínfi- mas de plata... u otros maules. Según Herr Krause. el iridio, oro, Aprovecher la energía eléctrica I v é vestirte del cuerpo humano era un proble-, ma de los médicos. Por un aparato En este Museo neoyorquino se que se llama electrocradlograma", puede ver la evolución de muchas toman la electricidad que se origi- máquinas través sólo de unos na en el corazón y un galvanómetro provisto de una aguja marca unaa gráficas que, según su tipo dlag cuantos aAos. La máquina "regís tradora" treinta aAos ha, era un calón destartalado que recuerda el nostlcan la enfermedad. MI amigo costurero de muestras de nuestras observa que en la Exposición hay abuelas. Loa primeroa "pinceles me- un aparato que recoge las vibracio- nes de la- voz al chocar en contra del micrófono que ostentan los telé- fonos, y de esta forma se origina una corriente eléctrica con poder suficiente para haeer funcionar el mismo teléfono. A través de las galerías del Mu- seo hay un derroche de máquinas. Máquinas para fabricar máquinas. El ejemplo mas demostrativo la revolución industrial que empezó en forma alarmante hace ciento seten- ta y cinco aAos... El zapatero, Roger Bacon y la Royal Society de Londres ¿Cómo pudo realizarse tal fenó- meno? Nuestros abuelos necesita- ban un par de zapatos, y el zapa- tero del lugar los construía. El ar- tífice elaboraba un par en una se- mana. Luego para fabrlear ese par se reunieren 20, 30 ó 100 hombres y cada uno fabricó un "fragmento" del úpate. Con una máquina pudie- ren fabricar cientos, miles de pie- zas diarlas, .ue unidas dieren mi- les y miles de pares de tapates se- bles o incapacitadoe por su conducta inmoral, o porque son crueles, explotan a sus hijos o los emplean en ocupaciones que ponen en peligro su vida y su salud. Otras soluciones que apunta el Comité para caios específicos son las de pro- porcionar empleo adecuado al menor, asilarlo en alguna ina- titueión benéfica del Estado, inatituir hogares adoptivoa co- mo medida proviaional en tentó ae logra el reajuate aocial del nifto al ambiente hogarefto y proveer trabajo a loa fami- lieree. También recomienda le conveniencia de preparar un programa de bienestar de la nifteg para toda la Isla, inclu- yendo la zona rural, en el que ae eonceda eepecíal énfasis al tratamiento individual en la solución del problema de loa nifloa abandonados, procurando al miamo tiempo mejorar las condicionee sociales existentes en cada c munidad y des- pertando la conciencia pública hacia los problemas de aban- dono y descuido de menorae. Como medida complementa- ría. sugiere que se geetione la extensión e Puerto Rico de la Ley Federal de Seguridad Social, cuyo título IV provee esistencia a los niños menoree de diez y seis aftoá que care- cen del soetén del padre, y cuyo título V asigna diez mil dólares o máa a cada eatado para eetablecer. extender o for- talecer aquellos servicios que aseguren el bienestar de los niños abandonados, de los dependientes y de los que están en peligro de ser delincuentes. Estimamos de justicia hacer llegar nuestro aplauao al Comité del Cenao y a sus colaboradores por tata interesan- te informe sobre la niñez desamparada, que tan valiosos da- toa y tan acertadas observaciones contiene pare él eficaz afron tamiento da este grave problema social. Éi de esperarse que laa autoridadea legislativas y ejecutivas de nuestro Gobierno tomarán buena nota de sua conclusiones para llevar a la prác- tica a la brevedad posible loe remedioe que allí ae apuntan y hacer cuanto eeté a au alcance para aaegurer adecuada pro- tección a la infancia desvalida. cánlcos" (pulverizadores), largabsn la pintura liquida como el aparato de regar de un jardinero. En el Mu- seo hemos vistos estas "Brochas a presión de aire" largando molécu- las de color, mezclando dentro de una recamare loa colores y hasta liquidando por altas temperaturas la plata, el ore y el estaño que sir- ven de materias colorantes. Una de estas brochas de delicada construc- ción, sirve para "pintar las piernas" de las artistas y simular en el esce- nario finísimas medias y mallota de seda. En el "stand" en donde se exhiben, hay una pintura que mues- tra come el principio científico de estos aparates es tan antiguo como el hombre. Un habitante de las ca- vernas prehistóricas pinta un bison- te sobre una roca, lanzando a tra- vés de la tibia del animal un soplo cergado de color vegetal... Un torpedo y un flotador ¿Dónde están los Inventores bé- licos...? Actualmente hay miles de hombres que deben tener en su ce- rebro los aparatos fantásticos para destruir hasta ios ejércitos del Cé- sar. John Hay Hammonds exhibe la patente de "un torpedo que no puede errar el blanco..." El apara- to tiene una "cola" suplementaria en le que ve montada un aparate receptor de ondea El torpedista co- locado »n tlerre o a bordo de un buque, dirige por radio la máquina infernal como si estuviera dentro de ella gobernándola con un timón Un pontón .nsumergible. aunque sea ta- ladrado por las ametralladoras, tiene el nombre uel Dr. Dudiey Roberts, de Nueva York. Si los aviadores caen sobre el mai y au "flotador" es per- forado >or la metralla se hunde. El doctor loberta construye el pontón con un grueso tubo metal finí- simo qi-e naturalmente fleta. Está relleno de goma esponjosa que no sufre en su "principió de Arquiml- des" aunque sea perforeda por les proyectiles. La máquina y 10 millones de mujeres asalariadas frente a 11 millones de hombres desocupados Eata Exposición hace meditar so- bre dos léñemenos Interesantes* La "amenaza" de la maquinaria y la fácil manipulación de estos apara- tos para qué sean gobernados por la mujer. k> decir, les dos factores que en el criterio de ciertos soció- logos, han desplatado al hombre del trebejo. Según las estadísticas del Gobier- no .os Estados Unidos, actual- mente exlster más de dies millo- nes de nujeres que trabajan e suel- do o salario. En el trabajo de ofl- Tal etll eom« hoy Tal dia como hoy Julio 31. ocu- rrieron los siguientes hechos histó- ricos- Julio 31.—En 1762 murió don Luis Vicente de Velasco. El comandante del castillo del Morro, durante el sitio de la Ha- bana, por les Ingleses. Luis Vicen- te de Velascu, nació en la villa de No.ia. en le provincia espaAola de Santander, el 9 de febrero de 1711. de padres que se Jactaban de traer su descendencia ae Fernández de Velasco. condestable de Castilla y duque de Frías. Llevado por su gran vocación a la marina, "«entó plata el joven Ve- lasco, de cuyos primeros aAos de vida se conoce muy poco, de guar- dia marina, en uno de les bajeles de la armada, en el aAe de 172*. Jun- tamente con José Antonio de la Co- lina. Recibió su bautismo de fuego en el sitio que, en 1727, puso el ejér- cito español i la formidable plata de Gibraitar, y después pasó a pres- tar servicie en la escuadra a las órdenes del teniente general Fran- cisco Xavier Cornejo, que en 1732 condujo la expedición del duque de Montemar a la conquista de Oran. Desde este ano hasta el de 1738, en que se renovaron las hostilida- des entre la Gran BretaAa y Es- rafta. Velasco ocupó diferentes des- tinos en la armada que operaba asi en aguas del Mediterráneo, como tn el Atlántico, y ocupó por méri- tos de servicio, los grados Inferio- res de su carrera, desde Alféret de fragata a teniente de navio. En 1741 fué ascendido a capitán fragata, como recompense al va- lor demostrado en los muchos en- cuentros que la armada espaAola tu- vo con ls inglesa en el Mediterrá- neo, asi como en el transporte de trepas a Italia. En 1742 fué desti- nado al mando de una fragata que hito varios viajes a las Antillas puertos de la América Central, es- pecialmente de Veracrut a la Ha- bana. En junio de 1742 fué sorprendido e la altura de Matanzas por una fragata Inglesa de superior tonela- je y artillería, seguida de un ber- gantín de la misma bandera. Ve- lasco, aunque sólo disponía de su buque de treinta cañones, la atacó con gran coraje, y no obatante el viento desfavorable, la abordó y capturó antea que él bergantín pu- diese llegar én su socorro. Velasco, ruando el bergantín se le hubo acer- cado, le hizo eaAonear con tatito e.elerto, que se fué a piqué s los po- cos minutos. En 174*. repitió esta hazaña cap- turando una fragata inglesa de 36 <anoncs y ISO tripulantes. No obs- tante tan vallossó servidos, no fué ascendido al grado de capitán de na- vio sino en 1734 (20 de marzo. En 17A1 al mando de la fragata "Rei- na", llevó, desde Veraeruz a Cádiz, ni teniente general Blas Barreda, regresando a la Habana a principios de 1762. Al atacar la plaza la escuadra inglesa del almirante Pocock. fué designado comandante de la forta- leza del Morro, en la cual se con- dujo con gallardía. El 13 de Julio tuvo que resignar el mando, por en- fermedad, pero el 24. volvió a asu- mirlo, sin estar aún del todo re- puesto de sus fatigas. El 29 de julio fué revestido de poderes extraordi* narlos en virtud de la proximidad del asalto decisivo del enemigo. El 30 después de haber pasado todn la mañana examinando el campe In- glés, se encontraba descansando en unión de su segundo capitán de na- vio, Marqués González, en la sala de armas, le sorprendió la noticia de haber estallado la mina que. con gran sigilo, los Ingleses hablan so- cavado. Aunque en los primeros momen- tos, por la esrasa intensidad de la explosión, no se dló Importancia al ucaecmiento, los Ingleses, entrando por la brecha, donde no hallaron defensores, se colaron en la forta- leza, después de arrollar en la ra-n- pa a los primeros soldados de la guarnición. Velasco. con atronado- ra voz y espada en mano, a la ca- beza de tres compañías, trató contener el asalto, pero, a las prl- mersa descargas británicas, cayó herido de un balazo en el pecho, entre los dos pulmones- Cayó al punto —dice un historia- dor— y a pesar de su dolor, cuando lo llevaban a curar al cuerpo de guardia, la sola recomendación de aquel espíritu altivo y despechado, era que no se confiase a ningún cobarde la defensa del pabellón que aún seguía ondeando. Marqués González, que asumió la dirección de la defensa, en tan crí- ticos Instantes, pereció Juchando co- mo un león, y a su lado los me- jores oficiales, por lo que fué me- nester Izar bandera blanca. Slr Kep- peí, después de aceptar la rendi- ción en términos honrosos, acudió a toda prisa a la sala «donde cura- han a Velasco, y después de abra- zarle afectuosamente le dejó en li- bertad de pasar e curarse a la pla- za o por ios mejores cirujanos de »u campamento. Velasco pidió ser trasladado a la Habana, como lo fué en efecto, en una lancha con bandera de parla- mento. El balazo que habla recibi- do no afectaba a los pulmones ni a otras visceras importante. Pero, acometido de violenta fiebre, en glande parte, ocasionada por el co- teje que le habla producido la pér- dida la fortaleza, juzgaron los médicos necesaria la extracción de la bala. Hubo para ello que son- dear demasiado y como consecuen- cia de esta dolorosa operación que Velasco soportó sin exhalar una queja, sobrevínole el tétano. Expiró a las nueve de la noche del 31 de julio de 1762. El ejército in- ales, lo mismo que el de la plaza, supendiéron ese día las hostilidades hasta que el cadáver fué exhuma- do, el primero agosto, en el Con- vente de San Francisco. El Gobier- no español, la «rigió una estatua en su villa natal, y otorgó a su hermano, lAlgo José de Velasco el titulo de Marquéa Velasen del Morro, y una pensión anual de vein- te mil reales. J. CABUt Julio 31.-En 1750 fué proclama- do Rey de Portugal José I, hijo de Juan V que murió en la Indicaba (Continúa página 13 columna 3> primitivos cuando surgió la "cultu- silbó. María Isabel salló a recibirle. J(| |ft Ml1rt rt# , a htmáeá y aban . ra" de laa artes textiles. 'La madre de María Isabel desean- ^^ „, hon , ft A| pifap (> (lfmt del batey, se estremeció. Ests^n descalro. La Herr* le trasmitió sus humedades y experimentó una sen- sación de suavidad Jamás alcan- zada por él. Esto lo animó. Iría a' bohío de María Isabel y trataría d* comunicarse con ella para propo- nerle la fuga. Cruzó el campe, qu* exhalaba perfumes. Las estrellas radiaban ampliamente. 3 Los coquie* cantaban con tono sagrado, cómo ji expresa r en el espíritu de la no- che. Cuando llegó al hohlo de María Isabel, vio luz en su interior. Silbó, según su costumbre, y aguardó. Ma- ría Isabel no acudió a su llama- miento. Aprisionábale la angustia. Inquietóse cuando, en el silencio de la noche, escuchó pasos de leve re- sonancia. Alguien avanzaba hacia el bohio. Pedro Juan- se ocultó de- trás de unos arbustos. Loa paso.s-,* precisaban. Una figura de hombr» pasó frente a él. Pedro Juan re- conoció en aquella figura caute- losos movimiento*, a Don José- Er* el Don José siempre. Era el tipo lúbrico, el estuprador de mucha- chas pobres, el que se dedicaba a deshonrar hogere* y familia*, va- liéndose de su posición económica, de tus Influencias. Don José pene- tró en el bohío de María Isabel Unos minutos después la vieja s*- escurrió del bohío y se sentó en * ] batey. La luz del bohío se apajó Pedro Juan tembló de pies a cabe- za. Se acercó al bohío sin que le Id virtiese la madre de la novia. Hu blera querido traspasar las frár'- oaredes de la vivienda de Mari* Isabel para cerciorarse de lo qur ocurría dentro. Estaba en la parf posterior del bohio y no le descu- brían. Su aliento era fogoso y le quemaba la faz. Cuando más tem- bloroso se hallaba, sonó un bese. A este beso sucedieron otros. Erin besos voraces, mordientes, que he clan gemir a la muchacha. Pedr" Juan se aoarto furioso del lugar en que se encontraba. Atravesé el can po corriendo y pronto estuvo en «" bohío. Su madre y sus hermanlto» dormlsn. pero esta vez no se ocu- él de su respiración. Cuidadosa- mente, tomó un machete que pen- día de un clavo, tujeto por un cu- rricán. Regresó al sitio donde su •mor lo traicionaba, decidido a ex- terminar a todos los que en aquel momento estrujaban su corazón. Se adelantaba con sigilo para caer su bitangamente sobre sus presas. La noche habla avanzado: las es- trella* llameaban, y el aire, un aire mojado y blenóHente, sacudía ls r - hojas de los árboles, que se afán- tasmaban en la sombra. Repentina- mente, cantó un gallo. Tan cerca cantó, que su canto la* colmó el e<- dq. Numerosoa gallos cantaron en seguida. El canto de lee gelloe inun- daba ei campo, dilatábase hasta el horizonte. La tierra se estre- mecía al eanto de loe- tallos. Pedro Juan se paró. El canto aquel l# irensformaba. como si estuviese do- tado de mágicas potencias. Obliga balo a retroceder en su a homicida? planes Iluminado de cerebro y ée alma. Pedro Juan reflexionó. SI ma- taba, su madre y sus hermanitoí perecerían de hambre y de pena. ¿Que merecía la mujer que lo engañaba tan bajamente? No era digna de una tragedla. Tiró el machete con aseo y se alejó del bohío qué Den José manchaba. El alba, blanca como la leche de la vaca, se filtraba por el déle. Las estrellas se volvian aapectrales: y *n *l campo, que exhalaba perfu- mes, se repetía. eo n insistencia, él canto de ios gallos. LOS HA i- JULIO 28 PLAZA SAN JUaVN FORMIDABLE UÜLIDACIUIV DE CALZADÍJ Les MA ZAPATOS FLOREADOS, BLANCOS Y EN COLORES A PRECIOS SENSACIONALMENTE REDUCIDOS. JAMAS HEMOS OFRECIDO UNA OPORTUNIDAD IGUAL PARA COMPRAR ZAPATOS I0NIT0S A PRECIOS TAN POPULARES. HAY MUCHOS TAMAÑOS GRANDES PARA ESCOGER... TAMIIEN HAY MUCHAS MUESTRAS FINAS A PRECIOS I AJOS. SOLAMENTE DOS SEMANAS SAN JUAN . LOS DIABLOS DE LA PLAZA SAN JUAN MUCHOS TAMAÑOS GRANDES Hs^ssssssssssssssaesi

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  • EL MUNDO, SAN JUAN, f. I - DOMINGO 31 DE JULIO DE 1938.

    EL AÜNDO VERDAD V JUSTICIA

    ratora: rtTBtTo sioo iLornuoo me. : Joa4 0*11 Vidal. Administrador: Ángel R*

    ofitinu: roincio P CHITO aico OiOtriuoo Apartada dt Cernea SU

    reacio é$ euacrtpeióa astados Caldos y pal- Para al extranjero: tneiuyendo aabatlao ? M« dentro da) Trata»

    de Paatal: Aa0_ — ¿, — a 17.00

    Camastra — — 9.00 Trlmaatra — — ♦ 71

    doniAical

    •avaatra «. « t.M *amtatra _ _ 7.M AAo lfl.M Aflo 14.00

    Diríjase la eorraapondancí» informativa r literaria a la dirección. Pira anuncioa, oorauntcadoa. ato.. dlrljaM al Administrador.

    REVISTA DE CIENCIAS

    Maravillas, beneficios y horrores de los inventos Por el Dr. JULIO CÁNTALA

    L.V INTERESANTE INFORME

    SOBRE LA NIÑEZ DESVALIDA EN PUERTO RICO

    La Alambica Legislativa de Puerto Rico aprobó en el , año 1930 una resolución conjunta por la cual ordenó que se

    hiciera un censo de todos los niños abandonados que exis- ten en la Isla sin hogar apropiado y designó una comisión compuesta de los Comisionados de Sanidad, Interior, Agri- cultura y Comercio, Trabajo e Instrucción para que prepa- rara los estudios y planos necesarios para la construcción de una granja agrícola donde cotos niños abandonados pudieran aer alojados y recibir una educación práctica en los oficios propios de su sexo y en el cultivo de la tierra.

    La recopilación de datos se llevó a cabo durante los me- ses de marzo, abril y mayo de 1936. En la mayoría de los pueblos los trabajadores sociales hicieron la investigación. El Departamento de Inatrucción Pública acaba de publicar

    ' el estudio en su boletín oficial. "El problema de la infancia abandonada y sus concomi-

    tancias —el vicio, la delincuencia y la prostitución— dice •1 doctor Gallardo en el prefacio del trabajo, tiene en nues- tro país trascendencia social de vastísimos alcances. El ni- ño realengo es un delincuente en gestación. Si no se salva a tiempo, su paso al crimen es seguro y vertiginoso: del des- amparo a la mendicidad, de la mendicidad al vicio, del vicio

    - al pecado: esto es, de la casa a la calle, de la calle al pros- tíbulo, el prostíbulo a la penitenciaria. Como tenemos mu- cho* niños abandonados, también tenemos muchos crimina-

    . les precoces. Un estudio de ambos, realengos y delincuen- tes, nos lleva a la conclusión de que un gran número de es- tos menores se incubaron en hogares irregulares, fueron lan- zados temprano al arroyo, tuvieron la tara de padres alco- hólicos o sifilíticos, y vivieron en un ambiente propicio a todas las miserias, a todos los vicios, y a todas las prevari- caciones.. ."

    v El informe publicado no es un censo, propiamente di- cho, de los niños abandonados de Puerto Rico, en el sentido de que no abarca la totalidad de la infancia desamparada I en la Isla. Sólo fueron investigados tres mil quinientos dice y seis caaos de niños abandonados en distintas poblaciones. La zona rural fué prácticamente excluida. No obstante, los caaos que comprende el informe son representativos de la mayoría y aportan lucea bastantes para un cabal estudio del problema que plantea a nuestro pueblo y a nuestro Gobier-

    ' no la niñez desamparada. El Comité del Censo informa que, de los tres mil qui-

    nientos diez y seis casos examinados, el setenta y uno por ciento son varones y el veinte y nueve por ciento, hembras. El estudio demuestra que no siempre los niños abandonados son producto de uniones ilegales. El sesenta y dos por cien- to de los niños y niñas investigados son hijos legítimos: el veinte y nueve por ciento, ilegítimos, y el número de hijos naturales y reconocidos, relativamente bajo comparado con el de loe legítimos. En lo que respecta al grado de instruc ción, se anota que un quince por ciento de los varones y un catorce por ciento de las niñas no ha asistido nunca a la es-

    [ euela. Entre loa que han concurrido a loa planteles de en- señanza, el mayor número se queda en primer grado, aun- oue de los examinados llegaron hasta el tercer grado un ca- torce por ciento de loa varones y un once por ciento de las hembras. En cuanto al estado de salud de los niños aban- donados, consigna el informe un dato satisfactorio: un cin- cuenta y ocho por ciento de los varones y un cincuenta por

    . ciento de las hembras gozan de buena salud. El porcentaje de niños cuya salud es pobre sólo aseiende a veinte y uno per ciento, y en el caso de las niñas a veinte y ocho por

    ' Ciento. Al afrontar el estudio de las causas que motivan el aban-

    dono de menores, el Comité del Censo señala las siguientes en orden de frecuencia: situación económica de la familia, orfandad del niño, deserción del padre, enfermedad de los padres, ilegitimidad del niño, deserción voluntaria del niño, deserción de ambos padres del niño, deserción de la madre, crueldad de loe padres y estado mental de éstos.

    De acuerdo con eata investigación, la extremada indi- gencia ea el principal motivo por el cual muchoe padrea abandonan a sus hijos. La violenta crisis que produce en el hogar el desempleo prolongado obliga a los padres a pe- dir auxilio a sus vecinos, llevando "el hijo hambriento y he- rapoeo a rastras"; o a entregarlos a familias o personas que se apiaden de ellos y quieran tenerlos en sus hogares, don- de no siempre reciben la mejor dirección, o a dejarles que

    , pidan limosna de ropa o de comida, coca que al principio hacen por necesidad y que, a fuerza de coatumbre, degenera en mal hábito.

    Después de realizada la labor de investigación, y de ha- cer el análisis de loa datoa recopilados, el Comité entiende AU*~al total de niños abandonados en Puerto Rico no podría 'acomodarse en una granja agrícola, como la propuesta por la Asamblea Legislativa en la resolución conjunta en que

    'dispuso la formación del censo. La colonia tendría que ser ; necesariamente pequeña por loa gastos que ocasionaría al f Góbferno su funcionamiento. Además, hay condiciones in- i dispenaablea al bienestar de un niño que exigen el calor del ; hogar. Otra atinada observación es la de que los niños com- ! prendidos entre las edades de menos de uno a diez y seis año* no podrían agruparse en una sola colonia, ya que a sus diversas edades necesitarían distintos cuidados.

    Entiende el comité que en su gran mayoría los proble- mas* de los menorea desamparados podrían resolverse faci- litando ayuda económica a uno de los padres, a ambos, o a

    i loa pariente* que se han hecho, o en el futuro quieren ha- , cerae cargo del niño. Recomienda el establecimiento de ho- ! ¿aret adoptivos como medida permanente para los casos de ' menores huérfanos que hayan quedado al cuidado de fami-

    llares o personas particulares que no tienen interés en el nifto ajeno, y para aquéllos que tienen padrea irreaponaa-

    Visité con un amigo, hace anos, una exposición da heráldica en Bath i Infla terral. Allí repasamos la historia de las familias y "Klans"

    i que han formado al Imperio Bri- j ttnleo Poco después nos encontré- '. mos en al Japón. Recorrimos una ' exhibición en donde sa mostraban , uniformes y armas da loa antiguoa ¡ "samurais" feudal»». La semana pa-

    ! seda me reuni de nuevo con el com- panero que de,, mbu id en mi compa-

    ; Ala a travéa do museos y galerías He les viejos continentes... Me in- vito a repasar una exposición re- cién abierta en Nueva York el dia ocho de julio...

    • Las primeras 200,000 patentas

    Una "exhibición heráldica ameri- cana" ... Les emblemas en esta nue- va jalarla, son "máquinas", instru- mentos Uslocados" fórmulas de re- acciones químicas, productos sinté- ticos, en una palabra, todos lee es- calones que han contribuido al avan- ce de la ciencia y de la invención en los ¿nados Unidos... Cuarteles y escudos de América que al triun- far hacen del modesto inventor un señor feudal, y a veces un "millo- nario aunque él no quiere"...

    La Exposte.nn Inaugurada en el Museo de Clencas e Industrias en Nueva ye-rk. tlone por objeto revelar la historia de las 200,000 primeras patentes que con máa éxito se han desarrollado en los últimos tiempos. En las Inmensas galerías hay unas vitrinas en non de se guarda el "pro- ducto 4> la substancia gris cerebral" de cientos y miles de humanos. La mayoría de los Inventores sin du-

    platlno. cobre, plata y cobalto. tle-¡ manales... ¿Dónde fué a parar el clna han aumentado seis veces en nen la particularidad de activar la filosófico y men zapatero...? Roger número desde 1890 a 1930, y el sa- edad '.a las bebidas alcohólicas y Bacon, es cierto que nació hace mu-¡ iarlo medio, es de 21 dólares por para industrializar este proceso, el en os anos (1214) pero es quizá el semana. El hombre, por el mismo inventor presenta unos recipientes; Originador de esta filosofía de la in-1 trabajo es pagado 42 dólares sama- ron une cap. interior metálica que | venció Industrial. Leonardo de Vin- nales. Paralek al movimiento de activa la vejez. Si la madurez de la ci (1452-1519) tuvo esta manie «rea*: "emancipación femenina" está el bebida j» quiere acelerar, los "reci- pientes" tienen sedimentos metal!-

    lización del concepto», y asi cons- problema da la máquina, no obs- truyó canalea. aeroplanos y piezas ¡ tanta loa optimista» opinan que esta

    dominio mecánico he favorecido el aumento de: trabajo. Los que tal opinan afirman que los hombres que actualmente monean las máquinas, suponen una fuerza Industrial más grande o.ue todas las industrias de hace 100 ano*.

    En el "Daily Mlrror" del pasado mayo 23, *e da un gráfico de este aumento, y se afirma, además, que, desde el 1870, en virtud de la in- fluencia de la ii.áqulna, se han crea- de en es Estados Unidos "quince Industrias magnas". De éstas, sólo trece dan trabajo e quince millones de hombrea. En el ano 1927 la in- dustria del automóvil empleó seis millones de personas. El ejemplo gráfico que de el articulista al co- mentar estos problemas, ea el si- gulenti: Para adquirir el coche de un bebé en 1914 se «acesltaban 41 horaa -le trabajo según los salarios de aquellos dias. Hoy se puede con- seguir con lo que producen catorce horas de labor... ¿Y entonces dón- de está la causa de eses doce mi- llones >e desocupados...?

    Los monos inventan también

    Ralph Henry. en su libro titule- do "The Story of Descovery and Inventisn" sostiene que eún en los monos antropoidea existe en forma elemental la tendencia del "Inven-

    En cantando los gallos — Por fc varíelo Kibera Chevremonl

    r

    tado. de -rhlfiadní'AHí v.m2. t!"' •— WodHo d»l primer plano SUelnway. ft-Ua primera» ametralladoras I tor". ata como ejemplo a doa chlm- e^Wir«l¿^t^>..Ct,.7^!l^ lüeaUlsT *n Estados Unidos. %—IA primera máquina registradora, p.ncés. Sultán y Nueve. El prime- pera ella, e huidos la "pr"sent2 revolucMi!i Ir!i ¡ ■    *"Vn ,nv""ta ™Hw,t*- M *»** d* """«»*■«• éwhaa. ro cuando no podía conseguir la co- madre y pa rtu.tri.1" que afecta .1 mund*. ro„ ,„, por m.fllrt ft vlhraeione. arquitectónica. ' atr.vld... G.llleo. ¡ ff^^^JSZat M1M SeVKs

    Azúcar sintética

    Nos detuvimos ante las últimas Invenciones registradas dentro del campo de la química. Uno explicaba la manera de obtener "azúcar slnté-

    setúan ron más intensidad en los'Newton y la creación de la Royal Soclety en Londrea en 1662. forma- ron el verdadero emhrión de le pre- sente revolución industrial. James

    líquidos...

    Paté de foie al galope Watt on el 1759. estudió el vapor de agua y las leyes, físicas que le go- biernan y dio con la máquina, ele-

    Pohr^s gansos alsaclanos... El fa- moso "paté de foie" es el produc-

    tica". Está señalada bajo el nombre »o de una degeneración gresienta mente primordial de la "reforma" de Eugenio Alberto Prudhome. najen el hígado del ganso domesticado,; mecánica. S. Ingleterra no hubiera vecino de Blcetre (Francia). El pro-'que por exceso de comida y falta'podido explotar carbón, quizá este cedimiento se base en tratar el des-I de ejercicio se convertía en une movimiento social hubiera tomado

    Cuando Pedro Juan abrió los ojos, después de ocho horas de sueno, vio que la luz del amanecer entra- ba por las rendijas del bohío. A su lado dormían aún su madre, ya vieja, y sus dos hermanos, uno de sieve y otro de once aAos. El sen- tía, entre las cuatro frágiles pare- des del bohío, la respiración de aquello* seres tan amados por él. y sentia. slmujtánesmenta. gozo y congoja. El aire de la madrugada, de Inmenso frescor, entraba por las mismas rendijas que utilizaba la luz para bañar la miserable vivienda. Oiase."afuera, el despertar del cam- po. Pedro Juan pensó en su novia: María Isabel. Era una linda mucha- cha trigueña, la cual diputábanse los muchachos más enamoradizos del pueblo Pedro Juan dejó la ha- maca en que yacía y se asomó s la única pueita del bohio. Un trozo de verde, alumbrado por la clari- dad del dlá. lo deslumhró. Los pas- tos aparecían empapados de roclo. El cielo mostraba nubes entintadas de un tenue rosado. En la lejanía, con graciosa curva, dibujábase una colina. En esa colina levantábase un bohío. Allí ae alojaba su novia. Pedro Jusn sonrió. Próxima a la casa de la novia, brillaba la rica mansión o* Don José. Don José era el amo de las tierras que contem- plaban sus ojos ilusionados por la edad. Don Joaé era el amo. y el. Pedro Juan, nada más que el últi- mo de los empleados de Don José: un peón. Pero, por virtud de su em- pleo, le era posible sostener, aunque fuese privándose de todo y en gran- de pobreza, a su madre y a sus her- manaos. Aí.uel día iba él a pedir a María Isabel. Le hablarla con serie- dad a la madre, mujer que gustaba mucho del dinero. Pero él le diría que era hombre y que trabajaría

    como trabajaba para su ra sus hermanitos. Ga- pero él era Jibaro, y el hacer milagros. La mi-

    punta "horquillada, t "Nueve", más | serla enseAóle a realizar inteligente, se entretenía en los ra- los de >rio en 'tejer con las pajas" de su cama, ino* entrelazados rudi- mentario* que sin 'duda fueren los mismos que hicieron los hombres

    con escasos medios. Pedro Juan trabajó aquel día con

    •rulclón: y cuando terminaron las Taenas se dirigió a la casa de su novia. A unas yardas del hohlo,

    «aba en su hamaca del ajetree del día. María Isabel y su madre eran las encargadas de hacer la limpieza y lavar la ropa en la casa de Don José. NO le cocinaban. El séflor ha- bía traído un buen cocinero de la Habana, y la pagaba rumbosamen- te.

    Pedro Juan miró,- arrobándose, a María Isabel, e indagó:

    —¿Y tu madre. María Isabel? —Está descansando. -¿Podemos hsblar? -SI. —Vengo a pedirte. Tu madre no

    me negará tu mano. —Creo que no. —Yo te amó María Isabel, y has

    de pertenecérme. —Yo soy tuya. Pedro Juan. L* voz de María Isabel se derra-

    maba en azucarados acentos. Boni- ta era Su cara; bonito era su cuer- po. A través de la tela rameada del trajecito barato se notaba la ape- tecible riqueza de sus senos apre- tados, llenos de ardiente vibra- ción, de apasionante brie. Pedro Juan le enlató el talle finísimo con sus brazos fuertes y la besó en la boca. La boca de María Isabel era una boca modelada exclusivamen- te para el beso. El beso fuá de fie- bre pasional, de ansias de posesión. Ambos eran jóvenes y deseaban el enlace por el cual es glorioso «l hombre cuando se cumple ron amor y con limpieza de «entimlentos. Pe- ro, ¿se amaban ambos con la Mis- ma lealtad?

    Cuando Pedro Juan ae entrevistó con la madre de Maris Isabel, pare formalizar el noviazgo, la madre, con astucias largas, le hizo algunas observaciones al galán en le rela- cionado con el dinero y concluyó aconsejándole que desviase sus In- tenciones, Habla otras muchachas más sccesibles a su anhelante cor- teja Alicaído, retornó a au alber- gue. Lágrimas que él contenia con varonil freno, quemábanle los Oíos Cuando su madre le preguntó en' le pasaba, él no respondió. Se ten- dió en la hamaca y simuló que dor- mís. No comió esa tarde; y cuan- do la noche. acompaAada de esta- llas y de cnqules, se extendió sehr»

    Infectante llamado "formaldehldó" de le misma forma que la natura- leza trata las células de las plan- tas por medio de la luí para la crea- ción de los almidones. Por un tubo provisto da un filtro cromático, pa- sa un rayo de luz que toma un co- lor naranja. Esta va a parar a un recipiente en donde radica el "for- maldehldó" en estado gaseoso. Des-

    bolsa de grasa. Un Inventor fran- céa, se le ocurre sllmentar los po- bres gansos con una máquina, y, naturalmente, bajo esta "alimenta- ción forzada", la "cirrosis hepática" del animalito se produce con más rapidez... Asi comeremos a un pre- cio reducido este exquisito manjar que no es otra cosa que una aspe- el carbón de las profundidades, ele de 'libado alcohólico cómo el que

    otros derroteros. En un principio so- lo podia extraerse el combustible' que se encentraba en la superficie por las venas de agua que Inunda- ¡ ban las minas, pero el capitán The-! mea Savery introdujo le bombe me-'' canica en los pozos, y asi el mine-1 /o, libre del agua pudo explotar'

    pues de que el gas ha recibido la' padecen los bebedores de cerveza. , Pintarse en vea acción de la luz finaliza en un tan- que repleto de egua con cierta so- lución de cal. En presencia del ra- yo de te. las moléculas del desin- féctente se juntan con el objeto de edifiear un cuerpo más complejo cuyo final resulte ser "sacarosa". A medida que este azúcar se for- ma, es precipitado por la cal del agua y al fin de aaparar emboa cuer- pos, se les trata ton dióxido de carbono que tiene la propiedad de dejar en libertad la cal.

    Ladrillos de diarios viejos y vinos envejecidos con plata

    Patente a nombre de Mr. John Knote de New Jersey: Manera de hacer ladrillos de les diarios vie- jos... Mister Knote acénsele "gol- peer" s los diarios hasta conseguir que se vuelvan «lamentos. En este estado se mezclan con cierta eanti- dad de yesce y esta mezela se colo- ca en unos moldes a presión direc- ta que forme un ladrillo esponjoso, lleno de vacuoiaa que no dejan pa- sar ni la hu nadad, ni el frío, ni el calor... Por aquí ha llegado Herr Alexander Krause, de Munich, con un "invento" que consiste en "ave- Jentar" los vinos y les licores como si estuvieran guardados en laa clá- sicas bodegas de Burdeos, él Rhln o Andalucía. El procedimiento está basado en tratar los caldos aleonó, lieos por medio de cantidades Ínfi- mas de plata... u otros maules. Según Herr Krause. el iridio, oro,

    Aprovecher la energía eléctrica I vé vestirte del cuerpo humano era un proble-, ma de los médicos. Por un aparato En este Museo neoyorquino se que se llama electrocradlograma", puede ver la evolución de muchas toman la electricidad que se origi- máquinas >« través sólo de unos na en el corazón y un galvanómetro provisto de una aguja marca unaa gráficas que, según su tipo dlag

    cuantos aAos. La máquina "regís tradora" treinta aAos ha, era un calón destartalado que recuerda el

    nostlcan la enfermedad. MI amigo costurero de muestras de nuestras observa que en la Exposición hay abuelas. Loa primeroa "pinceles me- un aparato que recoge las vibracio- nes de la- voz al chocar en contra del micrófono que ostentan los telé- fonos, y de esta forma se origina una corriente eléctrica con poder suficiente para haeer funcionar el mismo teléfono.

    A través de las galerías del Mu- seo hay un derroche de máquinas. Máquinas para fabricar máquinas. El ejemplo mas demostrativo dé la revolución industrial que empezó en forma alarmante hace ciento seten- ta y cinco aAos...

    El zapatero, Roger Bacon y la Royal Society de Londres

    ¿Cómo pudo realizarse tal fenó- meno? Nuestros abuelos necesita- ban un par de zapatos, y el zapa- tero del lugar los construía. El ar- tífice elaboraba un par en una se- mana. Luego para fabrlear ese par se reunieren 20, 30 ó 100 hombres y cada uno fabricó un "fragmento" del úpate. Con una máquina pudie- ren fabricar cientos, miles de pie- zas diarlas, .ue unidas dieren mi- les y miles de pares de tapates se-

    bles o incapacitadoe por su conducta inmoral, o porque son crueles, explotan a sus hijos o los emplean en ocupaciones que ponen en peligro su vida y su salud. Otras soluciones que apunta el Comité para caios específicos son las de pro- porcionar empleo adecuado al menor, asilarlo en alguna ina- titueión benéfica del Estado, inatituir hogares adoptivoa co- mo medida proviaional en tentó ae logra el reajuate aocial del nifto al ambiente hogarefto y proveer trabajo a loa fami- lieree. También recomienda le conveniencia de preparar un programa de bienestar de la nifteg para toda la Isla, inclu- yendo la zona rural, en el que ae eonceda eepecíal énfasis al tratamiento individual en la solución del problema de loa nifloa abandonados, procurando al miamo tiempo mejorar las condicionee sociales existentes en cada c munidad y des- pertando la conciencia pública hacia los problemas de aban- dono y descuido de menorae. Como medida complementa- ría. sugiere que se geetione la extensión e Puerto Rico de la Ley Federal de Seguridad Social, cuyo título IV provee esistencia a los niños menoree de diez y seis aftoá que care- cen del soetén del padre, y cuyo título V asigna diez mil dólares o máa a cada eatado para eetablecer. extender o for- talecer aquellos servicios que aseguren el bienestar de los niños abandonados, de los dependientes y de los que están en peligro de ser delincuentes.

    Estimamos de justicia hacer llegar nuestro aplauao al Comité del Cenao y a sus colaboradores por tata interesan- te informe sobre la niñez desamparada, que tan valiosos da- toa y tan acertadas observaciones contiene pare él eficaz afron tamiento da este grave problema social. Éi de esperarse que laa autoridadea legislativas y ejecutivas de nuestro Gobierno tomarán buena nota de sua conclusiones para llevar a la prác- tica a la brevedad posible loe remedioe que allí ae apuntan y hacer cuanto eeté a au alcance para aaegurer adecuada pro- tección a la infancia desvalida.

    cánlcos" (pulverizadores), largabsn la pintura liquida como el aparato de regar de un jardinero. En el Mu- seo hemos vistos estas "Brochas a presión de aire" largando molécu- las de color, mezclando dentro de una recamare loa colores y hasta liquidando por altas temperaturas la plata, el ore y el estaño que sir- ven de materias colorantes. Una de estas brochas de delicada construc- ción, sirve para "pintar las piernas" de las artistas y simular en el esce- nario finísimas medias y mallota de seda. En el "stand" en donde se exhiben, hay una pintura que mues- tra come el principio científico de estos aparates es tan antiguo como el hombre. Un habitante de las ca- vernas prehistóricas pinta un bison- te sobre una roca, lanzando a tra- vés de la tibia del animal un soplo cergado de color vegetal...

    Un torpedo y un flotador

    ¿Dónde están los Inventores bé- licos...? Actualmente hay miles de hombres que deben tener en su ce- rebro los aparatos fantásticos para destruir hasta ios ejércitos del Cé- sar. John Hay Hammonds exhibe la patente de "un torpedo que no puede errar el blanco..." El apara- to tiene una "cola" suplementaria en le que ve montada un aparate receptor de ondea El torpedista co- locado »n tlerre o a bordo de un buque, dirige por radio la máquina infernal como si estuviera dentro de ella gobernándola con un timón Un pontón .nsumergible. aunque sea ta- ladrado por las ametralladoras, tiene el nombre uel Dr. Dudiey Roberts, de Nueva York. Si los aviadores caen sobre el mai y au "flotador" es per- forado >or la metralla se hunde. El doctor loberta construye el pontón con un grueso tubo dé metal finí- simo qi-e naturalmente fleta. Está relleno de goma esponjosa que no sufre en su "principió de Arquiml- des" aunque sea perforeda por les proyectiles.

    La máquina y 10 millones de mujeres asalariadas frente a 11 millones de hombres desocupados

    Eata Exposición hace meditar so- bre dos léñemenos Interesantes* La "amenaza" de la maquinaria y la fácil manipulación de estos apara- tos para qué sean gobernados por la mujer. k> decir, les dos factores que en el criterio de ciertos soció- logos, han desplatado al hombre del trebejo.

    Según las estadísticas del Gobier- no dé .os Estados Unidos, actual- mente exlster más de dies millo- nes de nujeres que trabajan e suel- do o salario. En el trabajo de ofl-

    Tal etll eom« hoy Tal dia como hoy Julio 31. ocu-

    rrieron los siguientes hechos histó- ricos-

    Julio 31.—En 1762 murió don Luis Vicente de Velasco.

    El comandante del castillo del Morro, durante el sitio de la Ha- bana, por les Ingleses. Luis Vicen- te de Velascu, nació en la villa de No.ia. en le provincia espaAola de Santander, el 9 de febrero de 1711. de padres que se Jactaban de traer su descendencia ae Fernández de Velasco. condestable de Castilla y duque de Frías.

    Llevado por su gran vocación a la marina, "«entó plata el joven Ve- lasco, de cuyos primeros aAos de vida se conoce muy poco, de guar- dia marina, en uno de les bajeles de la armada, en el aAe de 172*. Jun- tamente con José Antonio de la Co- lina.

    Recibió su bautismo de fuego en el sitio que, en 1727, puso el ejér- cito español i la formidable plata de Gibraitar, y después pasó a pres- tar servicie en la escuadra a las órdenes del teniente general Fran- cisco Xavier Cornejo, que en 1732 condujo la expedición del duque de Montemar a la conquista de Oran.

    Desde este ano hasta el de 1738, en que se renovaron las hostilida- des entre la Gran BretaAa y Es- rafta. Velasco ocupó diferentes des- tinos en la armada que operaba asi en aguas del Mediterráneo, como tn el Atlántico, y ocupó por méri- tos de servicio, los grados Inferio- res de su carrera, desde Alféret de fragata a teniente de navio.

    En 1741 fué ascendido a capitán dé fragata, como recompense al va- lor demostrado en los muchos en- cuentros que la armada espaAola tu- vo con ls inglesa en el Mediterrá- neo, asi como en el transporte de trepas a Italia. En 1742 fué desti- nado al mando de una fragata que hito varios viajes a las Antillas puertos de la América Central, es- pecialmente de Veracrut a la Ha- bana.

    En junio de 1742 fué sorprendido e la altura de Matanzas por una fragata Inglesa de superior tonela- je y artillería, seguida de un ber- gantín de la misma bandera. Ve- lasco, aunque sólo disponía de su buque de treinta cañones, la atacó con gran coraje, y no obatante el viento desfavorable, la abordó y capturó antea que él bergantín pu- diese llegar én su socorro. Velasco, ruando el bergantín se le hubo acer- cado, le hizo eaAonear con tatito e.elerto, que se fué a piqué s los po- cos minutos.

    En 174*. repitió esta hazaña cap- turando una fragata inglesa de 36

    primitivos cuando surgió la "cultu- silbó. María Isabel salló a recibirle. J(| „|ft Ml1rt rt# ,a htmáeá y aban. ra" de laa artes textiles. 'La madre de María Isabel desean- ^^ „, hon,ft A| pifap (> (lfmt

    del batey, se estremeció. Ests^n descalro. La Herr* le trasmitió sus humedades y experimentó una sen- sación de suavidad Jamás alcan- zada por él. Esto lo animó. Iría a' bohío de María Isabel y trataría d* comunicarse con ella para propo- nerle la fuga. Cruzó el campe, qu* exhalaba perfumes. Las estrellas radiaban ampliamente.3 Los coquie* cantaban con tono sagrado, cómo ji expresaren el espíritu de la no- che.

    Cuando llegó al hohlo de María Isabel, vio luz en su interior. Silbó, según su costumbre, y aguardó. Ma- ría Isabel no acudió a su llama- miento. Aprisionábale la angustia. Inquietóse cuando, en el silencio de la noche, escuchó pasos de leve re- sonancia. Alguien avanzaba hacia el bohio. Pedro Juan- se ocultó de- trás de unos arbustos. Loa paso.s-,* precisaban. Una figura de hombr» pasó frente a él. Pedro Juan re- conoció en aquella figura dé caute- losos movimiento*, a Don José- Er* el Don José dé siempre. Era el tipo lúbrico, el estuprador de mucha- chas pobres, el que se dedicaba a deshonrar hogere* y familia*, va- liéndose de su posición económica, de tus Influencias. Don José pene- tró en el bohío de María Isabel Unos minutos después la vieja s*- escurrió del bohío y se sentó en *] batey. La luz del bohío se apajó Pedro Juan tembló de pies a cabe- za. Se acercó al bohío sin que le Id virtiese la madre de la novia. Hu blera querido traspasar las frár'- oaredes de la vivienda de Mari* Isabel para cerciorarse de lo qur ocurría dentro. Estaba en la parf posterior del bohio y no le descu- brían. Su aliento era fogoso y le quemaba la faz. Cuando más tem- bloroso se hallaba, sonó un bese. A este beso sucedieron otros. Erin besos voraces, mordientes, que he clan gemir a la muchacha. Pedr" Juan se aoarto furioso del lugar en que se encontraba. Atravesé el can po corriendo y pronto estuvo en «" bohío. Su madre y sus hermanlto» dormlsn. pero esta vez no se ocu- pó él de su respiración. Cuidadosa- mente, tomó un machete que pen- día de un clavo, tujeto por un cu- rricán. Regresó al sitio donde su •mor lo traicionaba, decidido a ex- terminar a todos los que en aquel momento estrujaban su corazón. Se adelantaba con sigilo para caer su bitangamente sobre sus presas.

    La noche habla avanzado: las es- trella* llameaban, y el aire, un aire mojado y blenóHente, sacudía lsr- hojas de los árboles, que se afán- tasmaban en la sombra. Repentina- mente, cantó un gallo. Tan cerca cantó, que su canto la* colmó el e