GUÍA INFORMATIVA

Aprovechamiento, rentabilización y reutilización de residuos agrarios

generados por la industria agroalimentaria, las explotaciones

agropecuarias y forestales en Extremadura

RESITEX

Residuos agrarios

Marco Legal

Soluciones

Experiencias

RESIDUOS Y TECNOLOGIA DE EXTREMADURA

La Federación Empresarial Cacereña elabora

esta guía sencilla e ilustrativa, en el marco del

proyecto formativo RESITEX, con el que se

pretende dar nuevas salidas empresariales y

laborales a las zonas rurales de Extremadura

de forma sostenible e intentando mejorar el

territorio de la región minimizando la

acumulación de residuos generados por las

explotaciones agroganaderas y forestales.

Dentro de este proyecto, se estudian los

sectores industriales y las posibles líneas de

trabajo: sectores empresariales, situación actual

de las empresas, cómo gestionan sus residuos

y actividades de valorización que se estén

realizando en la actualidad, etc., que les servirá

para identificar nuevas líneas de negocio y

empleo nacidas del aprovechamiento de los

mismos a través de iniciativas empresariales

para nuevos emprendedores, o por parte de

empresas ya establecidas en el territorio,

creando nuevas líneas de producción o

aplicando el aprovechamiento de los propios

residuos generados en sus explotaciones o de

los recursos endógenos existentes en sus áreas

de trabajo.

Las iniciativas del proyecto RESITEX estarán

orientadas a la generación de EMPLEOS

VERDES, (creación de nuevas empresas y

nuevos puestos de trabajo). Partirán de

iniciativas relacionadas directamente con la

mejora del medio ambiente y basadas en el

desarrollo sostenible de todos los territorios de

nuestra región.

Febrero 2012

PRINCIPALES ACTIVIDADES GENERADORAS DE RESIDUOS AGRARIOS

Las actividades generadoras de

residuos agrarios se enmarcan en el

sector primario de la agricultura, la

ganadería y la explotación forestal.

Si bien algunas industrias que emplean

materias primas de origen orgánico,

producen residuos caracterizados

como agrarios, como es el caso de la

industria agroalimentaria o la industria

forestal.

RESIDUOS Y SUBPRODUCTOS AGRARIOS

DEFINICIONES Y CONCEPTOS BASICOS

Por residuo agrario se entiende cualquier sustancia o resto

agrícola, forestal o ganadero, de los que su productor o

poseedor se desprende o tiene intención u obligación de

desprenderse.

En cambio, muchos tipos de residuos agrarios pueden

recuperarse como materia prima. Se entiende entonces que

residuo deja de tener tal condición y pasa a ser subproducto

agrario, que es aquel residuo agrario que puede reutilizarse

como materia prima y aprovecharse por el propio productor o

terceros.

RESIDUOS DEL SECTOR

GANADERO

En nuestro territorio, la estructura basada en

el aprovechamiento del pastizal herbáceo y la

bellota de la Dehesa, permiten el desarrollo

del sector pecuario o ganadero, entre los que

destaca la cría y engorde del porcino, seguido

del ovino, avícola, vacuno, equino y la

ganadería de lidia.

Los principales residuos agrarios generados

por la actividad de este sector son los

producidos por el ciclo biológico del animal:

• Purines

• Estiércol

• Gallinaza

En ocasiones, también se consideran

residuos agrarios el material orgánico con el

que aparece mezclado, como es el caso de

las camas para los animales de paja o serrín.

TIPOLOGÍA DE RESIDUOS AGRARIOS En función de la actividad origen de estos residuos, se

pueden clasificar en:

• Residuos agrícolas

• Residuos ganaderos

• Residuos forestales

• Residuos industriales de sector agrícola, ganadero

y/o forestal

Los residuos agrarios representan el 35% de la cantidad total

de residuos generados

RESIDUOS DEL SECTOR AGRÍCOLA

Extremadura es una región eminentemente agrícola, con un

sector de producción basado en un sistema de

aprovechamiento principalmente basado en el cultivo de

secano (cereales) y en menor medida de regadío (hortalizas y

frutas), principalmente asociado éste último a las vegas del

río Guadiana.

Los principales residuos agrarios generados por la actividad

de este sector son los restos vegetales originados en:

- Operaciones de mantenimiento del cultivo

Ej: podas en caso de cultivos leñosos como frutales y olivar,

entre otros.

- Operaciones de preparación del terreno

Ej: restos vegetales no aprovechables de la cosecha anterior,

como ocurre en el maíz.

- Operaciones de limpieza y desbrozado de márgenes

Ej: malas hierbas y restos vegetales ruderales.

RESIDUOS DEL SECTOR

FORESTAL

Algo más de la mitad de Extremadura es

terreno forestal, principalmente gracias a las

grandes extensiones que ocupa la Dehesa,

compuesta principalmente de encina y, en

menor medida y extensión, de alcornoque; no

siendo despreciable la superficie de pinar

existente en zonas más elevadas de nuestra

geografía.

Los principales residuos agrarios generados

por la actividad de este sector son los restos

vegetales originados en:

-Tratamientos silvícolas de

mantenimiento del monte

Ej: podas de formación, de producción,

clareos, apostados, etc.

-Operaciones de aprovechamiento del

monte

Ej: restos no maderable en cortas y

sacas del arbolado (hojas, ramas,

ramones, etc.)

-Operaciones de limpieza, preparación,

defensa y mantenimiento del monte

Ej: restos del desbrozado de matorral,

restos de quemas autorizadas, etc.

MARCO LEGAL I Tanto la producción,

obligaciones, gestión,

eliminación, valorización,

aprovechamiento y transporte

de este tipo de residuos, viene

regulada por las siguientes

disposiciones legales

nacionales y autonómicas:

Ley 5/2010 de 23 de junio.

RD 81/2011 de 20 de mayo.

Decreto 54/2011, de 29 de abril.

Ley 22/2011 de Residuos.

Ley 10/1998 de Residuos.

Orden MAM 304/2002.

Plan Integral de Residuos de

Extremadura 2009-2015 (PIREX).

Real Decreto 1310/1990, de 29

de octubre.

RESIDUOS AGRARIOS DEL SECTOR INDUSTRIAL La industria de transformación en mucha ocasiones

también produce residuos categorizados como

agrarios, sobre cuando su materia prima es resultado

de la actividad del sector primario agrícola, ganadero

y/o forestal.

De esta forma, en Extremadura la industria

generadora de este tipo de residuos es

fundamentalmente la industria agroalimentaria, como

transformación de productos agrícolas y ganaderos:

Producción de conservas vegetales

Producción de frutas y concentrado de frutas

Producción de quesos y derivados lácteos

Producción de aceite de oliva

Producción de embutidos.

Producción de vino, etc.

En este tipo de industria, los residuos generados

agrarios son normalmente lodos de depuración y

restos (cáscaras, vinazas, alperujo, semillas, pieles,

destríos, etc.).

MARCO LEGAL I I

Real Decreto 824/2005, de 8 de

julio, sobre productos

fertilizantes.

Reglamento (CE) nº 1069/2009.

Decreto 132/2010, de 18 de

junio.

Orden de 7 de marzo de 2003.

Orden de 13 de junio de 2003.

En menor medida, también se identifican

otras actuaciones industriales generadoras de

residuos agrarios como los mataderos

(purines y estiércol) y la industria de

transformación de productos forestales,

principalmente de aserraderos, carpinterías y

tratamiento y procesado de productos de

corcho (serrín, virutas y recortes).

SOLUCIONES En este apartado se resumen las soluciones

permitidas para su gestión como residuos y

las principales alternativas existentes para su

aprovechamiento y reutilización como

subproductos.

GESTIÓN COMO RESIDUO NO PELIGROSO

Los residuos agrarios descritos en caso de no

aprovecharse como subproducto agrario,

deberán ser tratados como residuo no

peligroso de acuerdo a la normativa sectorial

aplicable, lo cual implica que el productor o

poseedor deba:

Separar el residuo de otros de distinta

tipología y clasificación

Almacenar temporalmente el residuo en

condiciones adecuadas

Transportar adecuadamente el residuo

Eliminar el residuo en condiciones

controladas

Controlar documentalmente dicha gestión

La normativa crea la figura del gestor de residuos no peligrosos, como entidad

autorizada por la administración encargada de llevar a cabo dichas operaciones en

cumplimiento de los requisitos legales que las rigen.

El Gobierno de Extremadura dispone de un registro normalizado de gestores autorizados

de residuos no peligrosos que pueden operar en el territorio extremeño:

www.extremambiente.es

Tipo de residuos agrario

Actuación Restos vegetales

Purines, estiércol y gallinácea

Lodos de depuradora

Segregación Empacado Apilado Tamizado

Rejillas y arquetas Saneamiento y lixiviado Recogida con medios mecánicos o manuales

Almacenamiento

Silos Secaderos Plataforma Calles, vías de saca

Depósitos estancos Fosas sépticas Balsas impermeabilizadas Estercoleros cubiertos y con solera impermeable

Depósitos circulares de homogeneización

Transporte Camiones Remolques

Camiones cisterna

Eliminación

Quema autorizada en campo Vertedero autorizado Incineración

Vertedero autorizado Vertido autorizado

Vertido autorizado

Control documental

Documentos de aceptación, transporte y eliminación

Plan de gestión Libro registro de gestión Documentos de aceptación, transporte y eliminación

Documentos de aceptación, transporte y eliminación

Requisitos en operaciones de gestión como residuo no peligroso

LA REGLA DE LAS “3 RS” Reducir: la producción de residuos en origen (prevención) Reutilizar: volver a utilizar los residuos aprovechables con otros fines. Reciclar: someter al residuo a una transformación para darle el mismo uso.

Las actuaciones de reducción en origen se consiguen por medio de planes de

prevención de la producción del residuo, lo cual vendrá determinado por mejoras en la

planificación de las operaciones y actuaciones generadoras del residuo, mejoras en

rendimientos y eficiencia, o lo que comúnmente se conocen como buenas prácticas o

mejores técnicas disponibles (MTD), documentos sectoriales elaborados por

organismos públicos y disponibles al público.

REUTILIZACIÓN: APROVECHAMIENTO AGRARIO. Una de las mejores técnicas y más viables

económicamente para el productor del residuo

agrario es transformarlo en subproducto y

volver a incorporarlo al proceso productivo de

su actividad o comercializarlo como materia

prima de terceros, pudiendo no sólo ahorrar

costes sino obtener ingresos de dicha gestión.

USO AGRÍCOLA. COMPOSTAJE Y FERTILIZACIÓN DEL SUELO. El compostaje es un proceso bacteriano de

transformación de la materia orgánica para

obtener compost, un abono agrícola natural.

Los residuos agrarios contienen un alto

porcentaje de materia orgánica, que puede ser

reciclada y retornada a la tierra en forma de

humus para las plantas y cultivos. De cada

100kg de residuos orgánicos suelen obtenerse

del orden de 30 kg de compost.

Se conoce como compostaje al ciclo aeróbico

(con alta presencia de oxígeno) de

descomposición de la materia orgánica, y

metanización al ciclo anaeróbico (con nula o

muy poca presencia de oxígeno) de

descomposición de la materia orgánica.

Existen dos métodos para el compostaje:

1) Activo o en caliente, en el que se controla la

temperatura para permitir el desarrollo de las bacterias

más activas, matar la mayoría de patógenos y

gérmenes, y así producir compost de forma rápida.

Es el proceso más empleado en el compostaje

industrial.

2) Pasivo o en frío, en el que no se controla la

temperatura, los procesos son naturales y más lentos.

Es el compostaje tradicional. Para realizar un buen

compost se deben aportar materiales húmedos (ricos

en Nitrógeno, como purines o estiércol), y materiales

secos (ricos en Carbono, como restos de vegetales y

cultivos: ramas, hojas secas, etc.).

La forma tradicional de compostaje requiere el simple

amontonamiento de estos materiales en capas (capa

seca, capa húmeda) o manteniendo la pila con una

mezcla homogénea, realizando una acción de mezcla

periódicamente.

La relación más adecuada de Carbono/Nitrógeno está

en 25 ó 30 veces más carbono que nitrógeno.

Tendremos que controlar la humedad de la pila para

permitir que los microorganismos trabajen de forma

adecuada. Para saber si la humedad es adecuada se

puede coger un puñado del material y apretarlo. Si está

húmedo y solo gotea una o dos gotas, tiene la humedad

correcta.

El compost estará maduro y listo para ser utilizado

cuando no distingamos los materiales de partida

(excepto aquello más duros, como ramas, piñas o

huesos de fruta). No debe tener malos olores, será de

color oscuro y tendrá escasa humedad. Además tendrá

una temperatura ambiente, lo cual es indicativo de la

bajada de la actividad microbiana.

Será por tanto un material estable y estará listo para su

uso como abono, aunque antes se debe proceder al

cribado, para utilizar sólo el material más fino.

USO GANADERO: ALIMENTACIÓN Y BIENESTAR ANIMAL De forma menos frecuente, el residuo

agrario procedentes de materia vegetal

suele emplearse en la preparación de

compuestos alimenticios para el

ganado, presentándose así como el

alimento más natural de las reses, que

facilita el cierre del ciclo. De hecho

gran multitud de piensos proceden del

procesado industrial de residuos

orgánicos agrarios.

USO INDUSTRIAL: FABRICACIÓN DE PRODUCTOS MADEREROS Y DERIVADOS Otra parte de los restos agrarios de

origen vegetal son transformados y

reutilizados en el proceso productivo

de industrias madereras, carpintería y

del mueble, ya que muchos de los

subproductos y restos pueden ser

aprovechados por éstos para la

fabricación de utensilios de madera,

contrachapado, aglomerados, etc.

A la hora de realizar una gestión

completa de los residuos se debe

establecer el siguiente un orden de

prioridad:

1º Prevención

2º Reutilización

3º Reciclaje

4º Valorización energética

5 Eliminación

APROVECHAMIENTO COMO SUBPRODUCTO

Otro de los usos ganaderos más

frecuentes del residuo agrario es en la

preparación del material adecuado para

conseguir el bienestar de los animales en

las explotaciones agropecuarias y

estabulamientos, ya que las camas en las

que descansan suelen estar compuestas

de paja, serrín o mezcla de éstos.

Una de las principales propiedades de los

residuos agrarios es su potencial energético, y

por ello, el uso más atractivo de dichos residuos

es la generación de energía térmica (calor) o

electricidad, por medio de procesos de

valorización energética.

El origen de este tipo de aprovechamiento surge

en el aprovechamiento de los gases que

emanan los vertederos de residuos urbanos

orgánico, los cuales compuestos principalmente

por metano, se empezaron a canalizar y

controlar para su combustión controlada para

generación de energía.

Las tecnología en este campo han avanzado

considerablemente, dando lugar al desarrollo de

plantas a gran para la producción de energía

térmica y/o eléctrica a partir de biomasa que

vierten a la red eléctrica, existiendo hoy en día

una tendencia al diseño e implantación de

instalaciones a menor escala para

principalmente el autoabastecimiento de

empresas, explotaciones y procesos internos

que requieren energía.

En su definición biológica, la biomasa es la energía

solar convertida por la vegetación en materia

orgánica; esa energía la podemos liberar por

combustión directa (quemándola) o transformando

la materia orgánica en otros combustibles.

Una definición más energética de la biomasa es la

referida a todo material vegetal (incluidos los

residuos agrarios) que en un determinado momento

y lugar no tenga un mercado alternativo mejor que

el de la energía.

La Biomasa supone el 3,5 % del consumo del mix

energético español.

El potencial energético como biomasa de residuos

agrarios en Extremadura es de 688.000 Tn/año, lo

que equivale a 382.000 Tn de petróleo/año.

Si se aprovecha este potencial, se dejan de emitir a

la atmósfera del orden de 1,5 millones de Tn de

CO2. El coste de producción de Biomasa se

encuentra, en función de la logística y método de

extracción del campo a la planta, en el rango de 50

a 80 euros/Tn (con 30% de materia seca).

A partir de la biomasa extraída se produce energía

en la planta de biomasa o bien se destina para la

fabricación de combustible sólido a partir de

residuos agrarios, para su posterior

comercialización y distribución para su consumo de

uso industria y/o doméstico, siendo en este sentido

el mercado de los pellets y la biomasa torrefactada

los más destacados.

Los pellets se emplean para alimentar

calderas domésticas y sistemas de ACS,

mientras que la biomasa torrefactada ha

proliferado más en el uso industrial para

la producción de energía a gran escala.

Los precios de mercado de los pellets a

granel oscilan entre los 150 a 180

euros/Tn, hasta los 300 euros/Tn en

sacos de 15 Kg.

Los precios de mercado de la biomasa

torrefactada se encuentran entorno a los

85 euros/Tn.

Consumo de energía primaria a nivel nacional

En la actualidad se producen tres tipos de

biocarburantes: Biogás, Biodiesel y

Bioetanol.

El biogás es una mezcla de metano y

otros gases que se desprende durante la

degradación anaerobia de la materia

orgánica por la acción de

microorganismos.

El Biogás supone el 0,2 % del consumo

del mix energético español.

El Biogás se emplea tanto para la

generación de calor mediante combustión

como para la generación de energía

mecánica o eléctrica, principalmente en

las mismas plantas donde se obtiene.

VALORIZACIÓN: APROVECHAMIENTO ENERGÉTICO

Otro de los usos importantes de la

biomasa es en la fabricación de

biocarburantes. Los biocarburantes son

combustibles líquidos o gaseosos para

automoción obtenidos a partir de biomasa.

Los Biocarburantes suponen el 1,1, % del

consumo del mix energético español.

Por lo que han proliferado plantas a escala

de explotación agropecuaria basada en un

biodigestor con el fin de aprovechar la

energía y reinvertirla en sus procesos

internos que requieren calor y/o electricidad.

El Biodiesel es producido a partir de aceites

vegetales o grasas animales y alcohol

(metanol o etanol). Los aceites más

utilizados son la colza, la soja y el girasol,

teniendo también un peso importante los

aceites usados. En la actualidad, se está

estudiando su producción a partir de algas y

cardo. El Bioetanol se produce a partir de la

fermentación de materia orgánica con

almidón como cereales y remolacha o la

caña de azúcar.

Se muestran a continuación algunas de

las experiencias más viables y exitosas

llevadas a cabo para el

aprovechamiento, valorización y

reutilización de este tipo de residuos en

Extremadura.

En la actualidad existen en

Extremadura en funcionamiento tan

sólo 3 instalaciones.

Una planta de valorización de biomasa

de residuos agrarios en Miajadas

(2011), una planta de biogás en el

Ecoparque de Badajoz (2009).

Otros ejemplos de interés destacados son

algunas experiencias llevadas a cabo en

Extremadura relacionadas con el

aprovechamiento energético de la biomasa,

como por ejemplo:

Planta de tratamiento de restos de Mérida

para fabricar pellets y compost

Se obtienen pellets y compost energía a partir

de restos de podas de jardines y parques

municipales. Planta con una inversión de algo

más de 265.000 euros, en la que los restos

son clasificados y astillados para luego

someterlos a un proceso de compostaje para

producción de abono agrícola por un lado, y

para pellets previa compactación.

Explotaciones ganaderas con

biodigestores

Uno de los usos más interesantes para el

autoabastecimiento energético de

explotaciones ganaderas es el

aprovechamiento de los lodos de depuración

y separación de purines para generar energía

primaria en forma de biogás.

EXPERIENCIAS DE VALORIZACIÓN ENERGÉTICA EN EXTREMADURA

Además existe una fábrica de pellets en

Valdetorres, una planta de cogeneración a partir

de hueso de aceituna y alperujo también en las

proximidades de Guareña y una planta de

producción de Biodiesel a partir de aceite también

la dicha zona de Valdetorres.

En fase de proyecto y autorización hay un total de

10 instalaciones, de las cuales ocho serían de

biomasa para producción eléctrica a red y dos

para producción de biogás.

Este sistema está siendo ya implantado por

algunos propietarios en Extremadura,

especialmente en explotaciones porcinas y

avícolas.

Caldera de biomasa en Balneario

Uno de los más conocidos balnearios de

Extremadura ha realizado una inversión de

114.000 euros para la compra, instalación y

puesta en marcha de una caldera de alto

rendimiento para el calentamiento de su

sistema de agua caliente sanitaria en el

establecimiento, pasando de un coste anual de

gasoil de 48.000 euros/año a un coste anual

de biomasa de 9900 euros/año, ahorrándose

al año del orden del 38.100 euros/año,

recuperando la inversión en 3 años.