repsol se lanza al desafío del hidróg eno con energía solar · autonomía) movida por lo digital...

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ENERGÍA La nueva tecnología propia de la multinacional española consigue generar hidrógeneo limpio con un alto poder energético y una huella de carbono un 90% menor Uno de los laboratorios del Centro de Tecnología de Repsol, en Móstoles. R epsol presentó 16 solici- tudes de patente en 2018, según el último balance de la Oficina Europea de Patentes (EPO). Un dato que en realidad supone un descenso, res- pecto a las 24 del año anterior. Sin embargo, con una media de 21 soli- citudes en los últimos cuatro años, es una de las pocas compañías privadas españolas persistentes en patentar (otras dos son Telefónica y Labora- torios Esteve). Pero, si las solicitudes españolas en Europa crecieron un 6,3%, en España cayeron un 31%. «Nosotros patentamos en los países que enten- demos que tenemos que patentar y en aquello que creemos que va a haber una apuesta de futuro», argu- menta, por la parte que le toca, Adriana Orejas Nuñez, directora de proyectos de tecnología para downstream de Repsol. Afirmándose en que los datos europeos son «muy buenas noticias sobre lo que España está haciendo en innovación», Orejas expone que «hay que buscar el foco». «No paten- tar por patentar, sino para producir realidades. La propiedad intelectual lleva unos procesos largos, costosos y complicados». El foco de Repsol está hoy en el hidrógeno. «Todo lo relacionado con cambio climático y transición energética es uno de los grandes drivers tecnológicos dentro de la compañía», explica Orejas a INNO- VADORES. «Para producir com- bustible limpio necesitas grandes cantidades de hidrógeno. Y los pro- cesos actuales para producir hidró- Repsol se lanza al desafío del hidrógeno con energía solar Apuesta de futuro por la transición energética «En su último plan estratégico, Josu Jon [Imaz] presentó la tecnología como una de las grandes palancas, muy alineado con todo lo que supone reducción de huella de carbono, e intentar productos cada vez más limpios», subraya Orejas. «Repsol considera que su apuesta para el futuro está en la transición energética, el cambio climático. Manteniendo la competitividad dentro de un entorno cambiante, cada vez más responsa- ble, pero también más exigente». Una exigencia que se traduce en más dinero para I+D: «De 2017 a 2018, hemos crecido un 16%. Ahora mismo hablamos de unos 84 millones de euros, que en 2017 eran 72». geno tienen unas emisiones impor- tantes». Según Repsol, esa huella de carbo- no se reduce usando «energías reno- vables». ¿Han llegado a acuerdos de suministro con alguna eléctrica o van a montar un parque propio para hacerlo? «No, esta tecnología se basa en energía solar, directamente de los fotones», responde Orejas. «Es una tecnología en desarrollo, no sé cuán- do será comercial, pero es comple- tamente nuestra, basada en energía solar». Entonces, ¿están desarrollando su propio sistema de células y paneles solares? «Habrá que esperar para contar un poco más despacio eso, porque es una patente. No es un producto comercial todavía», repli- ca. «Espero que en unos años lo veamos hecho realidad a escala real». «El hidrógeno tiene para nosotros una importancia extrema desde el punto de vista industrial, porque lo usamos en todo nuestro sistema de refino y de química», aclara Orejas, que por ahora descarta hablar de la célula de combustible. «En Oriente, en Japón, el hidrógeno es una de las grandes apuestas. En Europa, no tanto. Pero tiene su interés industrial o de enriquecimiento del poder ca- lorífico. Por eso establecimos la alianza con Enagás, para este pro- yecto de generación de hidrógeno limpio, con un alto poder de energía y una huella de carbono práctica- mente nula. En este proceso reduci- mos la intensidad de carbono en casi el 90%. Hidrógeno a partir del Sol». Casi parece asomarse a la utopía que proponía Jeremy Riin, pero... «ahora mismo las prioridades y las soluciones con un coste-eficiencia parece que van por otro lado. Euro- pa lidera la lucha contra el cambio climático, pero tenemos que ser sensatos en buscar soluciones que permitan a la gente seguir accedien- do a una energía de manera razona- ble, con un coste razonable. Que nuestra innovación termine en in- versiones y en cosas reales». En el caso del Centro de Tecnolo- gía de Repsol, en Móstoles, eso sig- nifica estar «muy orientados a pro- yectos que nos ayuden a reducir las emisiones. Por ejemplo, recupera- ción de calores residuales, como en el tubo de escape. Aprovechamos ese calor, que se perdería, para mejorar la eficiencia del proceso de combus- tión. Reduces el consumo y, por tanto, las emisiones». «En movilidad, analizamos todo tipo de lubricantes, combustibles, sistemas de inyección, motores...», añade. «Tenemos que estar al tanto de todo lo que se mueve para aseso- rar a nuestras líneas de negocio. Probamos muchísimas cosas y tra- bajamos mucho con otros laborato- rios para conocer cómo evolucionan las alternativas de combustible. No- sotros hemos desarrollado un com- bustible único, de bajas emisiones, del que se habla poco, el autogás [un GLP]. Tiene muchas menos emisio- nes y una autonomía impresionante, con unas modificaciones en los mo- tores relativamente fáciles... Buscar alternativas a la movilidad siempre es una máxima en nuestro Centro de Tecnología». 7 DE ABRIL DE 2019 Nº 54 JULIO MIRAVALLS INNOVADORES HANNOVER MESSE De la fábrica automatizada a la fábrica autónoma P. 2 y 3 DESDE EL EXTERIOR 5.500 millones para crear el nuevo tabaco P. 4 y 5 EVENTO Creaciones 'made in Spain' que triunfan en IF Awards P. 8

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Page 1: Repsol se lanza al desafío del hidróg eno con energía solar · autonomía) movida por lo digital resulta, cuanto menos, confuso; cuanto más un engaño comercial. Por no comentar

ENERGÍA La nueva tecnología propia de la multinacional española consigue generar hidrógeneo limpio con un alto poder energético y una huella de carbono un 90% menor

Uno de los laboratorios del Centro de Tecnología de Repsol, en Móstoles.

Repsol presentó 16 solici-tudes de patente en 2018, según el último balance de la Ofi cina Europea de

Patentes (EPO). Un dato que en realidad supone un descenso, res-pecto a las 24 del año anterior. Sin embargo, con una media de 21 soli-citudes en los últimos cuatro años, es una de las pocas compañías privadas españolas persistentes en patentar (otras dos son Telefónica y Labora-torios Esteve).

Pero, si las solicitudes españolas en Europa crecieron un 6,3%, en España cayeron un 31%. «Nosotros patentamos en los países que enten-demos que tenemos que patentar y en aquello que creemos que va a haber una apuesta de futuro», argu-menta, por la parte que le toca, Adriana Orejas Nuñez, directora de proyectos de tecnología para downstream de Repsol.

Afi rmándose en que los datos europeos son «muy buenas noticias sobre lo que España está haciendo en innovación», Orejas expone que «hay que buscar el foco». «No paten-tar por patentar, sino para producir realidades. La propiedad intelectual lleva unos procesos largos, costosos y complicados».

El foco de Repsol está hoy en el hidrógeno. «Todo lo relacionado con cambio climático y transición energética es uno de los grandes drivers tecnológicos dentro de la compañía», explica Orejas a INNO-VADORES. «Para producir com-bustible limpio necesitas grandes cantidades de hidrógeno. Y los pro-cesos actuales para producir hidró-

Repsol se lanza al desafío del hidrógeno con energía solar

Apuesta de futuro por la transición energética

«En su último plan estratégico, Josu Jon

[Imaz] presentó la tecnología como una de

las grandes palancas, muy alineado con todo

lo que supone reducción de huella de

carbono, e intentar productos cada vez más

limpios», subraya Orejas. «Repsol considera

que su apuesta para el futuro está en la

transición energética, el cambio climático.

Manteniendo la competitividad dentro de un

entorno cambiante, cada vez más responsa-

ble, pero también más exigente». Una

exigencia que se traduce en más dinero para

I+D: «De 2017 a 2018, hemos crecido un 16%.

Ahora mismo hablamos de unos 84 millones

de euros, que en 2017 eran 72».

geno tienen unas emisiones impor-tantes».

Según Repsol, esa huella de carbo-no se reduce usando «energías reno-vables». ¿Han llegado a acuerdos de suministro con alguna eléctrica o van a montar un parque propio para hacerlo? «No, esta tecnología se basa en energía solar, directamente de los fotones», responde Orejas. «Es una tecnología en desarrollo, no sé cuán-do será comercial, pero es comple-tamente nuestra, basada en energía solar».

Entonces, ¿están desarrollando su propio sistema de células y paneles solares? «Habrá que esperar para contar un poco más despacio eso, porque es una patente. No es un producto comercial todavía», repli-ca. «Espero que en unos años lo

veamos hecho realidad a escala real».

«El hidrógeno tiene para nosotros una importancia extrema desde el punto de vista industrial, porque lo usamos en todo nuestro sistema de refi no y de química», aclara Orejas, que por ahora descarta hablar de la célula de combustible. «En Oriente, en Japón, el hidrógeno es una de las grandes apuestas. En Europa, no tanto. Pero tiene su interés industrial o de enriquecimiento del poder ca-lorífi co. Por eso establecimos la alianza con Enagás, para este pro-yecto de generación de hidrógeno limpio, con un alto poder de energía y una huella de carbono práctica-mente nula. En este proceso reduci-mos la intensidad de carbono en casi el 90%. Hidrógeno a partir del Sol».

Casi parece asomarse a la utopía que proponía Jeremy Ri* in, pero... «ahora mismo las prioridades y las soluciones con un coste-efi ciencia parece que van por otro lado. Euro-pa lidera la lucha contra el cambio climático, pero tenemos que ser sensatos en buscar soluciones que permitan a la gente seguir accedien-do a una energía de manera razona-ble, con un coste razonable. Que nuestra innovación termine en in-versiones y en cosas reales».

En el caso del Centro de Tecnolo-gía de Repsol, en Móstoles, eso sig-nifi ca estar «muy orientados a pro-yectos que nos ayuden a reducir las emisiones. Por ejemplo, recupera-ción de calores residuales, como en el tubo de escape. Aprovechamos ese calor, que se perdería, para mejorar la efi ciencia del proceso de combus-tión. Reduces el consumo y, por tanto, las emisiones».

«En movilidad, analizamos todo tipo de lubricantes, combustibles, sistemas de inyección, motores...», añade. «Tenemos que estar al tanto de todo lo que se mueve para aseso-rar a nuestras líneas de negocio. Probamos muchísimas cosas y tra-bajamos mucho con otros laborato-rios para conocer cómo evolucionan las alternativas de combustible. No-sotros hemos desarrollado un com-bustible único, de bajas emisiones, del que se habla poco, el autogás [un GLP]. Tiene muchas menos emisio-nes y una autonomía impresionante, con unas modifi caciones en los mo-tores relativamente fáciles... Buscar alternativas a la movilidad siempre es una máxima en nuestro Centro de Tecnología».

7 DE ABRIL DE 2019 Nº 54

JULIO MIRAVALLS

INNOVADORES

HANNOVER MESSEDe la fábrica automatizada a la fábrica autónomaP. 2 y 3

DESDE EL EXTERIOR5.500 millones para crear el nuevo tabacoP. 4 y 5

EVENTOCreaciones 'made in Spain' que triunfan en IF AwardsP. 8

Page 2: Repsol se lanza al desafío del hidróg eno con energía solar · autonomía) movida por lo digital resulta, cuanto menos, confuso; cuanto más un engaño comercial. Por no comentar

Un robot

industrial

colocando

una pieza en

un chasis de

vehículo en

la Hannover

Messe 2019

A. IGLESIAS

HANNOVER MESSE La mayor feria industrial muestra los avances del sector en materia de inteligencia artifi cial y sensorización avanzada, pero denota todavía una gran confusión sobre cómo será el abordaje de las TIC dentro de la planta

De la fábrica automatizada

a la fábrica autónoma

ALBERTO IGLESIASHANNOVER (ALEMANIA)

Con alrededor de 200.000 visitantes y más de 6.000 empresas exposi-toras, la Hannover

Messe es la cita obligada del sector industrial a escala global. Una feria donde esta parte oculta de nuestra vidas se viste de gala y muestra las principales innovaciones que pro-meten una fabricación más efi ciente, sostenible e inteligente. Avances que, conforme pasan los años, tienen más que ver con las tecnologías digitales que con la propia técnica o la maqui-naria industrial.

Sin ir más lejos, uno de los princi-pales temas de conversación este curso es la inteligencia artifi cial o, si lo prefi eren, la automatización de las fábricas que, en última instancia, han de llevar hacia la plena autonomía de

las plantas. Un campo en el que re-sultado muy relevante la entrada en juego de players TIC ajenos al sector, como Intel (cuyo chip para redes neuronales, Movidius, permite entre otras cosas reconocer objetos que han de ser seleccionados y categori-zados por los brazos robóticos), o Cisco (redes IoT inteligentes). Eso sí, distinguir entre automatización al uso, como la que se viene producien-do en este entorno desde hace años y la verdadera automatización (o autonomía) movida por lo digital resulta, cuanto menos, confuso; cuanto más un engaño comercial. Por no comentar que la mayoría de estas aplicaciones, mostradas a bom-bo y platillo en la feria, no están to-davía disponibles para su uso y sus impulsores tampoco lo esperan en el corto plazo.

Mismo efecto de 'bomba de humo' que vivimos en el torno a una de las palabras favoritas de los fabri-

cantes industriales: el 'edge com-puting'. Partiendo del hecho de que las fábricas fueron pioneros en la dotación de capacidad de cómputo a dispositivos distribuidos, el uso de este término como equivalente a cualquier elemento con un chip o a un sensor con cierta capacidad de ejecución repetitiva resulta peligro-so, máxime cuando se trata de una tendencia en auge que aún no está asentada en el imaginario colectivo. Álvaro Esteve, director de Automa-

Gemelo digital, IoT blockchain son los 'treding topic' de la Hannover Messe 2019

tización Industrial en Siemens, co-incidía al señalar que «muchos fabri-cantes venden como 'edge' cosas que solo son IoT», si bien él mismo ad-mitía a INNOVADORES que su defi nición de 'edge computing' no se corresponde a la estándar aplica-da a esta tecnología, «sino a una vi-sión industrial de la misma», mucho más generosa en su acepción.

Entre los distintos conceptos y casos de uso incluidos en esta rein-terpretación generosa del término encontraríamos «una notifi cación push para el móvil que avisa de una caída en la planta» gracias a la sen-sorización básica de la misma, o una aplicación de inventario «que permi-te una visión comprehensiva de qué componentes de automatización están siendo usados en cada máqui-na». En ambos ejemplos, la única tecnología empleada es una serie de sensores que envían dicha informa-ción al usuario fi nal, quien es el que

tiene que decidir cómo la interpreta o gestiona. Reducir el «hype» del 'edge computing' en este sector y aclarar convenientemente lo que signifi ca esta tecnología se anotja un imperativo urgente para que los ac-tores industriales no caigan en im-plementaciones vacías o falsas sen-saciones de innovación que resulten un lastre para su operativa a medio plazo.

Gemelo digitalComo en años anteriores, el gemelo digital fue nuevamente protagonista de la Hannover Messe, aunque sin grandes avances ni de fondo ni de forma respecto al curso anterior. Quizás la que más hincapié ha hecho en la materia fue, nuevamente, Sie-mens, que puso sobre la mesa varios casos de uso de estas representacio-nes virtuales de las máquinas, proce-sos y plantas industriales: desde una ropa hecha de maíz gracias al traba-jo de los gemelos digitales que dieron con la clave de crear estas telas en una centrifugadora, hasta el modelaje y perfeccionamiento de la fabricación de vehículos en plantas automatiza-das hasta las herramientas de Virtual Commissing que permiten convertir cualquier diseño CAD en un una simulación sobre la que realizar toda clase de pruebas (colisiones, caídas, movimientos, etc.) para probar la calidad de los conceptos de diseño, no sólo del producto fi nal, sino tam-bién del proceso de elaboración. Modelos virtuales que, a diferencia de los que llevan existiendo en el sector desde hace décadas, pueden modifi carse en tiempo real con toda

2 Domingo. 7 de abril de 2019 • LA RAZÓN

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clase de parámetros y conectarse a los datos verídicos de la planta sobre la que se está operando.

Quizás el ejemplo más curioso fue el presentado por la fi rma alemana junto a la compañía de maquinaria Trorud Engineering. Esta última ha integrado la tecnología de virtualiza-ción y automatización de la primera para desarrollar la máquina de pac-kaging más rápida del mundo, con capacidad de procesar hasta 300 paquetes por minuto con un coste de ingeniería un 50% menor.

Más allá de la técnicaHasta aquí los elementos más dis-ruptivos o que más llamaban la atención en el ingente recinto ferial de Hannover, pero las innovaciones en el ámbito industrial van mucho más allá. O más acá, según se mire, porque la revolución digital también se vive en los elementos más básicos de la fábrica.

Sirva como muestra el trabajo mostrado por la española Eurecat en este evento: un sistema que permite aplicar diseños complejos a piezas de chapa de metal, hasta ahora estaba circunscrita a productos cuyas altas tiradas productivas absorbiesen la inversión en matrices de estampa-ción o embutición. Su propuesta, llamada Incremental Sheet For-ming, permite que -con tal solo una contraforma o molde sencillo- los fabricantes puedan abordar proce-sos de fabricación de gran compleji-dad en materiales tan diversos como madera, pasta master o metal.

Volviendo al stand de Siemens, la casa germana no ha dejado pasar la oportunidad de mostrar avances en cosas tan básicas como las fuentes de alimentación (dotadas ahora de protocolos avanzados de comunica-ción entre máquinas y con las salas de control, así como protecciones electrónicas de nuevo cuño contra cortocircuitos o sobrecargas) o la identifi cación mediante radiofre-cuencia (con cámaras extremada-mente veloces a la hora de reconocer los objetos que pasan por la línea de producción o que salen de la cadena logística).

Todos estos avances los hemos conocido en una edición de la Han-nover Messe especial por varios motivos. El primero de ellos, se trata de la primera ocasión en que se re-unifi ca esta feria con su antaño fra-casada escisión CeBIT, centrada en el mundo digital. Por otro, por el papel destacado que las empresas no germanas tienen en la muestra: Chi-na copa gran parte de los pabellones especializados en manufactura y materiales, mientras que Suecia -país invitado- ha hecho un extraordina-rio desembarco con grandes nom-bres como Ericsson, ABB, Tetra Pak o SKF.

Blockchain busca su

hueco en la fábrica

El sector industrial abraza el Blockchain, aunque de forma tímida y sin afrontar los retos de esta técnica

A pesar de las advertencias de la fi rma de análisis Gartner, que ya alertó

hace unos meses de que no debía-mos «sobreestimar» el potencial del blockchain porque apenas el 1% de las grandes compañías a escala mun-dial ha adoptado el blockchain en su seno y únicamente el 8% tiene plani-fi cado hacerlo a corto plazo, el sector industrial ha abrazado esta tecnolo-gía como el gran hito de las Hanno-ver Messe 2019. Curioso cuanto menos, ya que el sector industrial no es mencionado por ninguna consul-tora como uno de los más interesan-tes para esta técnica (recientemente IDC apelaba al sector fi nanciero, salud y Administración Pública, por ejemplo).

¿Hasta qué punto se trata de una burbuja más? Si nos atenemos a los proyectos que se presentaron en la feria alemana, lo que queda claro al menos es que, hoy por hoy, no hay nada tangible ni disponible para los fabricantes. Otra cosa es que pueda tener cierto sentido lógico y que al-gún día vaya a convertirse en una realidad, pero esa balanza de expec-tativas se está inclinando demasiado en favor del marketing y poco hacia la realidad.

Uno de los principales expositores de la cita en Hannover, Siemens, ha dado vida a su particular escaparate de proyectos basados en blockchain:

ALBERTO IGLESIASHANNOVER (ALEMANIA)

desde el control de los proveedores de piezas dotando de trazabilidad a toda la cadena de valor y detectando a los culpables en caso de incidencia hasta la trazabilidad de productos alimentarios, desde el campo hasta la planta de procesado y, posterior-mente, su distribución en el punto de venta. Ambas iniciativas denotan un gran potencial y responden a una necesidad clara del sector industrial (por no añadir que son pioneras en un ámbito tan reticente a cambios críticos como éstos), pero el jarro de agua fría llega al hablar de plazos: ninguna de estas soluciones está disponible en el mercado e incluso portavoces de la compañía señalan plazos de «más de dos años» para su incorporación comercial. Si tenemos en cuenta que los actores TIC clási-cos, como IBM, disponen ya de propuestas como estas (el último caso de uso mencionado resulta calcado al de la multinacional nor-teamericana con Walmart), nos en-contramos ante una muestra más de la diferencia de velocidad entre el mundo industrial y el digital. Tam-poco abordan con claridad los fabri-cantes industriales el reto de la esca-labilidad del blockchain, apostando todo a pequeñas cadenas permisio-nadas o privadas, que obviamente no extraen todo el potencial prometido de esta tecnología. No hay duda de que el sector industrial tiene una gran oportunidad por delante abor-dando blockchain y otras tecnolo-gías, pero necesita una hoja de ruta mucho más clara que la actual...

A. IGLESIAS

Una imagen de la Hannover Messe 2019

CUANDO CONVERGE LA TI CON LA OT

Por mucho

que les pese a

muchos

actores

clásicos del

mundo

industrial, la

convergencia

entre las TIC y

la OT es una

obligación.

Siemens

defendió en

este Hannover

Messe que

esta integra-

ción se

producirá «en

todos los

niveles: desde

la planta hasta

la gestión de

la cadena de

suministro, la

planifi cación

de recursos

empresariales,

etc».

ALGORITMIA Y VIOLÍN

Eugenio Mallol

Candidato, ¿qué es un algoritmo?

¿Sabe lo que es un algoritmo? ¿Sabe cómo van a afectar los desarrollos futuros de la inteligencia artifi cial a la vida de los ciuda-danos? ¿Cuál es su estrategia? Invito a los colegas que se van a sentar cara a cara con

Sánchez, Casado, Rivera e Iglesias, a formularles esta cuestión. Durante las últimas semanas, las compa-ñías tecnológicas, al igual que el resto de actores de la sociedad, vienen sentándose de manera informal con los responsables de los partidos para exponerles su visión y conocer sus propuestas. «Hoy como con tal de Ciudadanos, mañana he quedado con tal del PSOE». La impresión es que todavía se desconocen aspectos clave de la revolución tecnológía, y hasta el impacto de la trasposición de normativa europea a nuestro ordenamiento jurídico. «¿PSD2?, ni idea» Y el desconocimiento no es inocuo: ahí tienes la ini-ciativa Madrid Central lanzada en su día con esque-mas analógicos, primitivos, que han forzado al Ayuntamiento a pedir a Everis una solución de ur-gencia adaptada a la era digital (reconocimiento del sexo del conductor incluido). Una incómoda mues-tra de que la política vive al margen de la revolución tecnológica que suena menos divertida si se traslada al ámbito de la sanidad, la dependencia o la educa-ción, donde también hay ejemplos dramáticos a cuenta de los algoritmos.

Cierto que el número dos del PP, Teodoro García Egea, es ponente en eventos sobre inteligencia arti-fi cial, pero mucho tendrá que trabajar para mejorar la imagen que dio su partido en la etapa de Rajoy con perfi les tan insustanciales como los de Carmen Vela, José María Lasalle y Begoña Cristeto. Hubo, sí, un diputado popular que daba muestras de querer entrar en la pomada, Juan Bravo. Hoy es consejero de Hacienda de Andalucía. Sólo veía obstáculos en su propio Ejecutivo, y le daban margen para abordar la política sobre innovación sólo desde la perspecti-va tributaria, o sea que nada. No deja mejor sabor de boca la breve etapa del PSOE, con un Francisco Polo aferrado a un discurso sobre innovación inclu-siva que parece ignorar que sobran ganas de inclu-sión, pero faltan muchas de innovar, y un ministro Pedro Duque sin peso político y, por tanto, sin ca-pacidad para tomar iniciativa, puro marketing.

En los años del boom inmobiliario, se debatía sobre si queríamos ser la California (base tecnológi-ca) o la Florida europea (servicios). Si no innovamos -y no innovamos por mucho que se quiera vender que sí-, vamos a ser Florida tecnológicamente ha-blando, un país de servicios, sin iniciativa, dedicado a desarrollar soluciones ideadas y patentadas en otros países, con algún destello en investigación. De modo que la pregunta inicial se puede reformular así: Señor candidato, ¿quiere ser la California o la Florida europea en la nueva era postdigital, caótica? Eso sí merecería aparecer en la campaña electoral.

EUGENIO MALLOL es director de INNOVADORES

3LA RAZÓN • Domingo. 7 de abril de 2019

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Neuchâtel es un pequeño pueblo suizo, de poco más de 30.000 habitan-tes, situado a orillas del

tranquilo lago de mismo nombre. Un castillo sobre la roca y el aura constan-te de vivir en la «Belle Époque» copan la atención del visitante. Nada haría pensar al visitante que se haya desvia-do de Ginebra o Berna hasta este desconocido enclave que, entre toda la calma que se respira en la localidad, también se esconde uno de los centros de innovación más importantes de la industria tabacalera.Se trata de 'El Cubo', una impresio-

nante edifi cación compuesta de tres bloques diferenciados, unidos por puentes y protegidos por una misma cubierta. Philip Morris, la empresa responsable de marcas como Marl-boro, invirtió en este centro unos 100 millones de euros hace justo diez años. El objetivo de la fi rma no era otro que investigar opciones sin com-bustión para los fumadores, alterna-tivas menos dañinas respecto a los cigarrillos de toda la vida. Un plan que, más allá del edifi cio en sí, ha su-puesto un antes y un después en la forma de operar de esta multinacional presente en 180 mercados, así como un importante desembolso en materia de I+D. No en vano, Philip Morris ha invertido nada menos que 6.000 mi-llones de dólares (unos 5.300 millones de euros al cambio actual) en el desa-rrollo de estas nuevas modalidades de productos con tabaco.La compañía parte de una premisa

básica: a pesar de los esfuerzos de las autoridades por evitar el tabaquismo, la propia OMS estima que en 2025 seguirá habiendo la misma cantidad de fumadores en el mundo que en la actualidad. O lo que es lo mismo, 1.100 millones de personas que segui-rán expuestas a los nocivos efectos del

cigarrillo. En este contexto, las empre-sas del sector han decidido comenzar a explorar propuestas que, siguiendo con el negocio, les permitan poten-cialmente reducir el daño que produ-ce los miles de compuestos tóxicos que conforman el tabaco. Y, para Philip Morris, la clave estaba en eliminar el humo producido en la combustión del cigarro. Con otros dispositivos, que calienten el tabaco en lugar de quemarlo, aseguran, puede reducirse en hasta un 90% la cantidad de sustan-cias tóxicas presentes en el vapor frente al humo del cigarrillo. Ahora queda corroborar ese porcentaje con más estudios independientes y que también se confi rmen los resultados preliminares de la empresa que anti-cipan menores (que no nulas, por supuesto, ya que la única propuesta sana es dejar de fumar o nunca ini-ciarse en este hábito) consecuencias para la salud, especialmente en lo re-ferido a enfermedades cardiovascula-res o capacidad respiratoria.En cualquier caso, Philip Morris ha

articulado toda una estrategia comer-cial basada en esta nueva categoría de productos. Hablamos de cuatro pla-taformas de dispositivos, dos con ta-baco (IQOS y TEEPS) y dos que simplemente contienen nicotina (los cigarrillos electrónicos al uso). En el caso de IQOS, la estrella de la cartera, estamos ante una suerte de «horno» que calienta el tabaco tratado con glicerina para producir vapor. En la actualidad, alrededor de nueve millo-nes de personas en todo el mundo usan esta tecnología, según los datos del fabricante, con una cuota de mer-cado del 1,7% sobre el total de las ventas de productos con nicotina en la Unión Europea. La expectativa es superar los 40 millones de usuarios en 2025, solo tirando de la propia base de fumadores actual de Philip Morris. Y es que, como su propio CEO ha repe-tido en numerosas ocasiones desde 2016, el objetivo de la fi rma es que «todos los fumadores que quieran

seguir fumando opten por productos sin humo tan pronto como sea posi-ble». Una velocidad de crucero la que está tomando esta propuesta en un sector tan clásico como el del tabaco que no ha sido nada sencilla de alcan-zar. No en vano, Philip Morris lleva trabajando desde principios de los 90 en esta clase de alternativas, con sono-ros fracasos comerciales tanto con el primigéneo invento de la casa (EHCSS, comercializado en Estados Unidos y Osaka) y Heatbar (que solo estuvo disponible en Australia, Ale-mania y Suiza).¿Qué ha cambiado entonces? ¿Qué

ha supuesto 'El Cubo' para que parez-ca que estos productos tienen por fi n una entrada en el consumidor? Igna-cio Gonzalez-Suarez, biólogo mole-cular y una de las cabezas visibles de la división científi ca de Philip Morris, nos explica algunas de las claves: «La industria tabacalera apenas había evolucionado en los últimos siglos, por lo que esto está siendo un cambio ingente, pero tenemos una visión muy clara y cómo este paso a los productos sin combustión afecta a todos los ni-veles de la empresa, desde la comer-cialización hasta el propio producto o la relación con los clientes». Se ha trabajado mucho no solo en la parce-la de la salud, sino también en la de perfeccionar la experiencia para el fumador; asegurarse de que le resulte atractiva esta opción. A ello se le suma el trabajo de 450 investigadores en este centro suizo, «de múltiples disciplinas desde la ingeniería hasta la medicina, lo veterinarios para las pruebas con

animales [realizadas en Singapur], genetistas, químicos, etc.», así como el propio avance de la ciencia que les ha permitido a sus profesionales «dispo-ner de mejores técnicas para la evalua-ción del daño y, en los casos que no existían métodos de medición, hemos tenido la capacidad de desarrollarlos por nosotros mismos». De hecho, un simple paseo por 'El

Cubo' da muestra de esta multdisci-plinariedad y la extraordinariamente compleja variedad de pruebas reali-zadas antes del lanzamiento de un nuevo producto vinculado al tabaco. Así, nos encontramos desde labora-torios de calidad del aire (para com-probar las sustancias presentes en el humo de una habitación donde hay fumadores, tanto de cigarros tradicio-nales como de las nuevas alternativas), laboratorios de prototipado de los dispositivos electrónicos (algunos de los cuales se hacen conjuntamente con la universidad local), instalacio-nes para el estudio de la genotoxicidad y de toxicología avanzada (basada en mecanismos o sistemas, que busca averiguar las relaciones entre distintos

fenómenos producidos por un deto-nante como el humo del tabaco) o salas donde máquinas automatizadas fuman cigarrillos sin parar para gene-rar humo del tabaco que pueda ser estudiado. Todo ello en una particular simbiosis con espacios de ofi cina y de reunión al más puro estilo 'Google'. Por no contar con la excentricidad de guardar en una urna de cristal miles de chips de expresión génica, a 1.000 euros la unidad, que suman un valor total de diez millones de euros.En total, Philip Morris ha solicitado

más de 6.000 patentes y cuenta con otras 6.300 concedidas en relación a esta propuesta de tabaco sin humos. Como confi rman fuentes de la empre-sa, alrededor del 80% de su presupues-to anual de I+D va destinado a esta categoría de productos. Y la multina-cional ya ha inaugurado algunas fá-bricas destinadas en exclusiva a estos formatos (en Italia y Grecia) y ha re-convertido otras tantas para producir tanto tabaco tradicional como aquel destinado a ser calentado (en la propia planta de Neuchâtel, Corea, Rumanía o Rusia).

ALBERTO IGLESIASNEUCHÂTEL (SUIZA)

INNOVADORES

POR DENTRO Entramos en 'El Cubo', el centro de innovación de Philip Morris en Neuchâtel (Suiza), donde la tabacalera busca reinventarse para un mundo sin humo

5.300 millones de euros para crear el tabaco sin humos

Philip Morris cuenta con 4.300 patentes ligadas a su tabaco sin humos

4 Domingo. 7 de abril de 2019 • LA RAZÓN

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Imagen de 'El Cubo', el centro de innovación de Philip Morris en Suiza.

CERÁMICA PARA EL VINO. El proyecto

Govalmavin del ITC desarrolla nuevos

envases cerámicos técnicos para aportar cali-

dad a la maduración y envejecimiento del

vino. Se trata de 'tinajas tecnológicas' con las

que se pretende, además, demostrar el valor

de los materiales tradicionales.

RESIDUOS AGRÍCOLAS. El proyecto euro-

peo AGROinLOG, coordinado por el centro de

I+D CIRCE, aumenta la productividad y

diversifi ca la actividad de tres agroindustrias

al transformar sus residuos en nuevos biopro-

ductos de alto valor. El reto es crear nuevas

líneas de negocio a partir de sus residuos.

CERO DEFECTOS. El proyecto europeo

Stream-0D, coordinado por el centro

ITAINNOVA, trabaja en integrar modelos de

simulación en la línea, alimentarlos con los

datos obtenidos e implementar sistemas de

control. Usa valores calculados por algorit-

mos para reducir la variabilidad.

OPTIMIZAR LA FABRICACIÓN. Eurecat

desarrolla una nueva tecnología, denomina-

da Incremental Sheet Forming (ISF 3D), para

fabricar piezas de chapa con formas comple-

jas para prototipos o formas únicas con la

deformación por control numérico. Es para

sectores como automoción o aeronáutica.

ESCAPARATE DE IDEAS

IMPRESORA 3D 'DOBLE' PARA LA NASA Y EL MIT

¿Qué tienen en común BMW, Sam-sung, Louis Vuitton, la NASA o el MIT? Que todos necesitan prototipar rápidamente y al mejor coste posible. Y que todos han encontrado la mejor solución en la tecnología de la joven-císima startup española BCN3D, que acaba de consolidarse como spin off de la Universidad Politécnica de Ca-taluña (UPC) gracias a los 2,7 millones de euros que ha levantado en una ronda semilla de los fondos JME VC, Accurafy4 y Victoria. «Somos la em-presa de impresoras 3D de escritorio que ha recibido mayor inversión en el país».Que no engañe su corta edad

como empresa, BCN3D lleva traba-jando desde 2012 como grupo de investigación del CIM-UPC. Sus primeros años se centraron en divul-gar la tecnología a través de unos kits propios que permitían al usuario ensamblar en casa su propia impre-sora 3D. Después llegó el boom de esta tecnología y vieron una oportu-nidad clara. «Éramos de los pocos ofrecían un coste asequible al públi-co», recuerda el CEO, Xavier Martí-nez Faneca.En 2015, se lanzaron a desarrollar

una máquina propia plug and play (enchufar y encender). El resultado fue una impresora 3D «única» en el mercado: gracias un doble extrusor independiente, podía trabajar con dos materiales. «Desbloqueó muchas de las limitaciones que tenían entonces las máquinas», señala el CEO. «Este sistema existía en el mundo industrial, pero no en sobremesa». Así llegó el éxito. El equipo expan-

dió sus operaciones a través de una red de distribución con más de 60 puntos activos por medio globo, especial-mente en Europa (Alemania y Espa-ña) y en Estados Unidos. Crecieron

en facturación hasta el punto de em-pezar a «comerse» al grupo de inves-tigación. «No tenía sentido tener la actividad dentro del centro». Necesi-taban consolidarse como empresa, algo que han conseguido hace apenas unas semanas gracias a su primera ronda de inversión de 2,7 millones de euros. La tecnología de impresión 3D de

BCN3D no pretende competir con las máquinas industriales, sino que se presenta como un complemento para agilizar y abaratar los procesos, espe-cialmente, en la fabricación de proto-tipos y utillajes o la validación de pie-zas funcionales. Encaja en la gama de sobremesa, una inversión que no su-pera los 10.000 euros frente a los cientos de miles de euros de un equi-pamiento para fábricas. Así democra-tiza su acceso a pymes, que pueden usar la impresora en despachos o ta-lleres pequeños. Por eso, su cartera de clientes es de

lo más variopinta posible. Desde una modesta empresa de extrusión de aluminio de Girona hasta las plantas industriales de SEAT, BMW, Nissan, o Louis Vuitton. Sin olvidar los cen-tros tecnológicos más prestigiosos del planeta como son la NASA y el MIT. Todos encuentran en BCN3D la mejor solución precio-pieza a la máxi-ma velocidad posible. «SEAT, por ejemplo, puede producir utillaje con nuestra máquina a un coste 10 veces menor que con una industrial». Y eso lo consiguen con su tecnología de doble extrusión. La disruptiva arquitectura de su

impresora 3D permite que los dos extrusores trabajen a la vez con el mismo material. Eso signifi ca que es capaz de fabricar dos piezas al mismo tiempo. «Actualmente ya hay otras máquinas de escritorio con doble extrusor, pero los cabezales no son independientes».

MARÍA CLIMENT

A RITMO DE STARTUP

TRIPLE MODOLa máquina de BCN3D funciona en tres modos. Uno, los cabezales se alternan. Dos, los extrusores trabajan fabricando en el mismo tiempo el doble de piezas. Y tres, creando piezas simétricas.

5LA RAZÓN • Domingo. 7 de abril de 2019

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Suele decirse que las mejores ideas

surgen en momentos de necesidad,

cuando no queda otra alternativa

que ser creativos para sobrevivir.

También que el desorden es una

cualidad necesaria para dar vida a

algo nuevo, algo que no podría surgir en las rígidas

líneas del orden delimitado. En este libro, los autores

defi enden precisamente que una dosis de caos

controlado puede permitir que afl oren nuevas vías

de resolver los problemas de nuestros tiempos.

Innovation Concept: 'Realidad Virtual'

La realidad virtual (VR) se puede defi nir como una expe-

riencia interactiva generada por computadora que tiene

lugar en un entorno simulado. Morton Heilig desarrolló

en 1962 la máquina de inmersión Sensorama muy

avanzada para su época. Se estima que el mercado

global de realidad virtual crecerá desde los 8.000

millones de dólares en 2018 hasta los 45.000 en 2024. La

realidad virtual está abriendo múltiples oportunidades y

modelos de negocio. Algunas de las aplicaciones más

resaltables observadas incluyen: juegos, entretenimiento,

medios interactivos, bienestar, turismo, actividad social,

atracciones, salud, ingeniería, arquitectura, construcción,

inmobiliarias, educación, empresas y retail.

P.B

Por: PACO BREE, profesor de Deusto Business School

LABORATORIO DE ECONOMÍA DEL COMPORTAMIENTO. VALENCIA. Fundación Universidad Empresa. Cotec presenta los resultados del primer experimento de este laboratorio, centrado en automatización y mercado de trabajo. 8 de abril.

EL CAMINO HACIA LA MOVILIDAD SOSTENIBLE. MADRID. Embajada Suecia. La Cámara de Comercio Hispano-Sueca, Volvo, Cabify o Ericsson organizan esta jornada sobre movilidad urbana para promever soluciones de transporte sostenible. 9 de abril.

EIT CLIMATE-KIC. VALENCIA. Jardín Botánico. Presentación de las nuevas startups que pasan a formar parte del programa de aceleración de EIT Climate-KIC 2019 en su edición española. 12 de abril.

Atentos a...

¿Hace falta el caos para innovar?

«LA NECESIDAD DEL CAOS» Empresa AC. O. Brafman y J. Pollack

ALBERTO IGLESIAS

INDUSTRIA El sector productivo no puede limitarse a la fabricación de productos, dicen los CEO en España de de Siemens, Mercedes Benz o Ficosa. La servitización y los sistemas son ahora fundamentales

Los CEO de Siemens, Velatia y Mercedes Benz en España.

Esta semana Accenture ha inaugurado en Zamudio (Vizcaya) su Centro de Industria X.0, un espacio

de cocreación y desarrollo tecnológi-co industrial que se une a la red inter-nacional que conforman otros espa-cios similares que la multinacional ya tiene en Estados Unidos, Japón o Alemania. La servitización de los procesos fabriles y las estrategias para pasar al famoso as a service, ocupan el eje central de las propuestas en mate-ria de digitalización. Y precisamente de ese cambio de mentalidad dialo-garon durante la inauguración del nuevo laboratorio de Accenture los CEO de Siemens, Mercedes Benz y las españolas Ficosa y Velatia. Coin-cidieron en que el cambio de prisma sobre los procesos industriales es un requisito fundamental.

«Éramos líderes mundiales en hardware, pero a mediados de la pa-sada década empezamos un proceso de reconversión de la producción», explica Miguel Ángel López, presi-dente de Siemens, que asegura que desde 2007 su compañía se ha gastado 10.000 millones de euros y ha adqui-rido o participado en 34 empresas para lograrlo. «Conoces tu producto, pero también hay que conocer el mundo de la fabricación», dijo. Por eso, las propuestas de internet de las cosas, gemelos digitales o modelos virtuales de fábricas en 3D no dejan de crecer en la compañía. Todo, con el objetivo de favorecer la productivi-dad y reducir gastos para las compa-ñías a través de la tecnología.

En la misma línea, Emilio Titos, director general de Mercedes Benz en España, señala que la herramienta «por excelencia» para sobrevivir en este nuevo mundo de los procesos «es la digitalización y aprender a aplicar aquello que hoy ya es posible». Para Titos, el límite de las empresas ya no está en la tecnología, sino «en el saber hacer». «Lo que buscamos son exper-tos en fabricación», dijo, porque la tecnología es cada vez más accesible y no es necesario un desarrollo propio intensivo precisamente gracias a toda

La imparable reconversión industrial hacia los servicios

esa oferta de productos como servi-cio. «El reto es el cambio de mentali-dad, modifi car la estructura mental que teníamos y que en parte seguimos teniendo» para lograr así que las empresas de producción no pierdan su relevancia.

Bien lo saben en el equipo de Fico-sa, una fi rma que no hace demasiado se dedicaba exclusivamente a la fabri-cación de retrovisores para automó-viles y que se le colocó en el top 3 de los proveedores mundiales. Les fue bastante bien, sí, pero, ¿qué iban a hacer para sobrevivir en un entorno global tan complejo? De 2000 a 2010 se dedicaron a invertir «una barbari-dad de dinero sin ningún retorno», como dijo Josep Maria Serra, director corporativo y fi nanciero de Ficosa, en sistemas de visión artifi cial, conecti-vidad y coches eléctricos. Sistemas, que no productos. «Nos decían que estábamos sonaos y los bancos nos

recomendaron cambiar de estrate-gia», bromeó el responsable de la compañía. Hoy, Ficosa factura 1.200 millones de euros anuales y trabaja con líderes globales en la movilidad del futuro como Panasonic. «El 62% de nuestras ventas siguen siendo re-trovisores pero estoy convencido de que dentro de 30 años no existirán», dijo. Y ahí radica la importancia de saber mirar hacia el futuro, de subir-se a la era de los servicios para seguir siendo relevante.

Pero, cuidado. «Hay que defi nir bien el ritmo al que queremos desa-rrollar las capacidades y competen-cias. El ritmo es más importante que la velocidad», alertó Javier Ormaza-bal, presidente del grupo Velatia, so-bre la necesidad de que todos estos cambios se articulen a través de una estrategia clara para evitar así que la inversión en el futuro ahogue al pre-sente.

NEREA CASTROZAMUDIO (PAÍS VASCO)

INNOVADORES

PONER ORDEN

«Cuatro de

cada cinco

empresas que

empiezan

procesos de

transforma-

ción no son

exitosas. Para

entrar en una

dinámica

positiva se

necesita una

clara estrate-

gia con

objetivos

claros que no

pueden ser

individuales»,

afi rma el

presidente de

Siemens

España, para

quien los

ecosistemas

de digitaliza-

ción comparti-

dos son una

gran herra-

mienta.

6 Domingo. 7 de abril de 2019 • LA RAZÓN

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para luchar contra la metástasis cerebral, «base para aplicar un tratamiento personalizado dirigido hacia mecanismos de supervivencia específi cos».

El reloj de las plantas¿Puede el reloj circadiano infl uir en el crecimiento de las plantas? Y si es así, ¿cómo podemos hacer que sea más efi ciente y mejore la producti-vidad de los cultivos? Eso es preci-samente lo que estudia Paloma Mas Martínez, Centro de Regulación AgriGenómica (CRAG). «Se trata de un mecanismo celular muy com-plicado que es capaz de controlar la mayoría de las funciones fi siológicas y metabólicas de la planta. En nues-tros estudios planteamos cambiar ligeramente el ritmo biológico de la planta para conseguir que sea más resistente a las condiciones de se-quía», explica a este medio.

En concreto, la científi ca se ha propuesto manipular la función de reloj circadiano para obtener plan-tas de tomate resistentes a la sequía, para lo que empleará herramientas biotecnológicas de edición genómi-ca (CRISPR-Cas9) y desarrollará estrategias no transgénicas lo que facilitará su posterior aplicación en ensayos de campo.

La ciencia española no tiene nada que envidiar en talento, capacidad innovadora ni conoci-

mientos a la de ningún lugar del mundo. Carece, sin embargo, de la fi nanciación que le corresponde por su calidad, dolencia que además se ha acrecentado tras la reciente crisis económica.

Precisamente por ello resultan tan relevantes programas como las Ayudas a la Investigación en Cien-cias de la Vida y de la Materia de la Fundación Ramón Areces, que van ya por su XIX edición. En total, esta institución ha adjudicado más de 5,1 millones de euros a 42 nuevos proyectos para investigar enferme-dades poco frecuentes, cáncer, es-clerosis lateral amiotrófi ca (ELA), esclerosis múltiple (EM), sepsis, seguridad alimentaria, nuevos ma-teriales y energía renovable.

Los proyectos, en los que traba-jarán 269 investigadores españoles durante los próximos tres años, han sido elegidos entre más de 600 ini-ciativas candidatas de todo el país. Una labor realmente difícil de se-lección que ha dejado algunos ga-nadores de extraordinario valor y con los que hemos podido hablar en INNOVADORES para profun-dizar en su trabajo, metas y aspira-ciones tras recibir este impulso económico imprescindible.

Célula solar de grafenoLa investigadora Elisa Antolín Fer-nández, de la Universidad Politéc-nica de Madrid, nos explica que «la sociedad necesita con urgencia tecnologías y soluciones que permi-tan implementar un nuevo sistema energético y una economía más limpia». En esa línea, ella está tra-bajando en células solares de gra-feno de portadores calientes, «más efi cientes, baratas, y con menor huella de carbono que las que se comercializan en la actualidad», lo cual no es fácil porque, como admi-te, «la tecnología actual ya es exce-lente».

El funcionamiento de los siste-mas que plantea Antolín pasa por una célula solar se basa en que los electrones de un materialsemicon-ductor (grafeno, en este caso) ab-sorben la energía de los fotones del sol y la entregan a un circuito exter-no, sin que los electrones colisionen con los átomos que forman la red cristalina del semiconductor, per-diendo así su efi ciencia. «Desde los años 80 se sabe que si dispusiéra-mos de un material en el que los electrones se mantuvieran calientes e implementáramos contactos ade-cuados para extraerlos en ese esta-

INNOVADORESESPECIAL

Ganadores de las XIX Ayudas a la Investigación en Ciencias de la Vida y de la Materia de la Fund. Ramón Areces

La Fundación Ramón Areces entrega sus ayudas a la investigación con notorios proyectos en salud y nuevos materiales para energía

Cinco millones de euros para la ciencia españolado, el límite teórico de efi ciencia subiría al 85%», defi ende.

Composites para pilas Siguiendo con los proyectos ligados a la energía y la lucha contra el ca-lentamiento global hemos de hablar del trabajo de Patricia Horcajada, jefa de la Unidad de Materiales Porosos Avanzados en el IMDEA Instituto de Energía. Esta investiga-dora, que se inició en el desarrollo de nuevos materiales para la repa-ración y sustitución de tejidos óseos, ahora está inmersa en una carrera contrarreloj para crear materiales originales que puedan generar energía de forma limpia utilizando la tecnología basada en pilas de combustible, «básicamente, conver-sión de hidrógeno en electricidad, generando tan solo agua como re-siduo», según explica a INNOVA-DORES.

Así pues, Horcajada está investi-gando materiales compuestos que permitirían realizar esta función, alcanzando conductividades protó-nicas notables, incluso superiores a las del polímero normalmente uti-lizado, el Nafi on. Un camino en el que está integrando no solo la cien-cia de materiales, sino también la química y la ingeniería, con el obje-

tivo fi nal de incorporar estos mate-riales como electrolitos en diversas matrices poliméricas, desarrollan-do pilas de combustible H2/O2.

IA para enfermedadesOtro de los proyectos escogidos por la Fundación Ramón Areces en esta convocatoria de ayudas comprende el uso de la inteligencia artifi cial para mejorar la atención primaria que se presta en el sistema de salud mediante la inteligencia artifi cial. Comandado por Pablo Lapunzina, del Hospital Universitario La Paz, la iniciativa consiste en este caso en recoger los signos, síntomas y ha-llazgos de cada una de las más de 20.000 enfermedades humanas y los efectos adversos de los más de 12.000 medicamentos y compuestos farmacéuticos para tratamientos humanos, integrarlos en una base de datos de libre acceso, priorizarlos por edad de aparición y por fre-cuencia para ser utilizados como ayuda diagnóstica en cualquier acto médico

Medicina de sistemasComo decíamos, el segmento mé-dico es el que más fondos recibirá de estas ayudas. Y así se entiende también la iniciativa de Juan Anto-

nio García Ranea, profesor titular del Departamento de Biología Molecular y Bioquímica de la Uni-versidad de Málaga, quien quiere aplicar la medicina de sistemas a identifi cación de nuevas dianas te-rapéuticas en enfermedades raras de base genética.

«La obtención de datos clínicos ha estado bastante limitada por el coste y las capacidades técnicas de cada época, hasta que a fi nales de los 90, con la irrupción de tecnolo-gías big data y de tecnologías ómicas en biología molecular, se ha produ-cido una revolución histórica en la capacidad de obtener, procesar e interrelacionar cantidades inmen-sas de datos biomédicos proceden-tes de miles y hasta millones de in-dividuos», detalla el investigador. Una oportunidad que quiere apro-vechar para estudiar las enfermeda-des raras de origen genético y su tratamiento.

Metástasis cerebralLa metástasis es una de las causas mas comunes de muertes asociadas al cáncer. Para luchar contra este fenómeno, Manuel Valiente (CNIO) propone emplear la medi-cina personalizada, con astrocitos reactivos como diana terapéutica,

INNOVADORES

+ CIENCIA

En la entrega

de las Ayudas

a las Ciencias

de la Vida y la

Materia,

celebrada esta

semana en

Madrid,

intervinieron

el Presidente

de la

Fundación

Ramón

Areces,

Florencio

Lasaga, la

Secretaria de

Estado de

Universidades,

Investigación,

Desarrollo e

Innovación,

Ángeles Heras

Caballero y

Federico

Mayor

Zaragoza,

presidente del

Consejo

Científi co de

la Fundación

Ramón

Areces.

7LA RAZÓN • Domingo. 7 de abril de 2019

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GSMA

Diseño 'made in Spain' en la éliteGrifos más efi cientes o zapatillas 'inyectadas' en una sola pieza y sin costuras, entre los productos premiados en los iF Desing Awards

Una de las

sillas de la

colección

'Cila Go'

que ha sido

premiada

en los iF

Awards.

NEREA CASTRO

La funcionalidad no tiene por qué estar reñida con el diseño. Y la innovación, tampoco. Es más, a juzgar

por los productos premiados este año en los iF Desing Awards, unos de los premios de diseño más prestigiosos a nivel mundial, la innovación tecnoló-gica para crear productos más funcio-nales, cómodos o personalizables es una tendencia imparable en la que también cabe el sello español.

Entre los reconocimientos al diseño made in Spain de este año se encuentra el mobiliario funcional, en la categoría de ofi cina, Cila Go de la agencia de diseño catalana Lievore Altherr. La funcionalidad es la principal virtud de estos muebles que sirven como tabu-rete, silla y sillón y que se pueden intercambiar e interactuar entre sí y que cuentan además con espacio para el almacenamiento y permiten trans-formar los espacios según se combi-nen las piezas.

Con el mismo sello español ha sido premiado en la categoría de baños el plato de ducha de la fi rma valenciana McBath, que es extraplano, ligero, con base rígida y superfi cie blanda. Es recortable para adaptarse a las medi-das del usuario y además es antidesli-zante y acolchado, pensando por tanto en aplacar las caídas de mayores y pequeños. También en baños, Roca ha sido premiada por un grifo del es-

tudio Benedito que apuesta por el ahorro de energía y agua a través del diseño. La temperatura se regula mediante una palanca lateral que in-corpora un aireador que limita el caudal a cinco litros por minuto y que impide que se superen los 38º por seguridad. Además, cuenta con un grifo termostático que suministra el agua inmediatamente a la temperatu-ra deseada para reducir el tiempo de espera y ahorrar así tanto energía como agua .

Las zapatillas Infi nity, obtenidas a partir de la novedosa y patentada tecnología '3D Bonding' de la fi rma ilicitana Simplicty Works también han sido premiadas. Su técnica permite colocar en un molde todas las piezas e inyectar un fl uido (un polímero) que las une todas en pocos segundos, creando un esqueleto estable que re-duce las costuras y los procesos y tiempos de fabricación. La ilumina-ción personalizable de Faro Barcelona también ha sido reconocida. Su con-junto de luces Inviting componen un sistema de lámparas customizables en las que se puede adaptar la intensidad y el color de la luz según la situación en la que se desee utilizar.

«Hoy en día, un diseño aceptable se ha convertido en un estándar, como la exigencia de calidad en los acaba-dos. Sin embargo, es sorprendente ver que haya un seguimiento tan grande de las reglas establecidas en el diseño, en lugar de atreverse a probar algo

realmente nuevo», lamenta el presi-dente del jurado, Fritz Frenkler. A su juicio, «se precisa de mucho coraje para ser verdaderamente innovador y de la aceptación del grado de riesgo que eso supone por parte de los accio-nistas de las empresas». Pero advierte: «No se trata solo de luchar por dife-renciarse a cualquier precio: un dise-ño bueno, claro e intuitivo es lo que se debería ofrecer al usuario en cualquier disciplina de diseño».

Entre el resto de los reconocimien-tos, no españoles, destacan objetos cotidianos como una bicicleta de madera transformable que con solo 3 kilos de peso crece y se adapta a todas las etapas del niño desde que es un bebé y todavía no puede echar a rodar. El recipiente refrigerador de Hydro Flask también ha sido premiado por su versatilidad: es un vaso que enfría pero también un soporte al que en-ganchar latas y botellines para que no se calienten.

La cocina ha tenido su espacio con el primer lavavajillas del mundo con sistema que autogestiona las dosis de productos de limpieza fabricado por Miele . También ha sido galardonado un set de cuchillos personalizables mediante una tecnología patentada con un imán y un peso de equilibrio ajustable: al posicionar el peso hacia delante permite un corte fi rme, mien-tras que al moverlo hacia atrás equili-bra el cuchillo para un corte de preci-sión.

IF AWARDS

Estos son

unos de los

galardones

más reputa-

dos del diseño

a nivel

mundial. Con

66 ediciones a

sus espaldas,

un jurado

independiente

de 67 exper-

tos de 20

países han

analizado más

de 6.300

propuestas

este año de 50

países en

áreas como el

diseño de

producto o

comunicación.

La RAE defi ne la hipocresía como aquel «fi ngimiento de cualidades o sentimientos con-trarios a los que verdaderamen-te se tienen o experimentan».

Una forma de encarar la realidad que no resulta precisamente positiva y de la cual intentamos (o, al menos, deberíamos) huir más rápido de lo que el Correcaminos corre detrás del coyote. Así sucede en to-dos los campos de nuestra vida... salvo que de lo que hablemos sea de ciencia y la protagonista sea Europa.

No es nada nuevo lo que voy a plasmar en esta columna: los reguladores europeos imponen criterios en materia científi ca sin tener en cuenta los argumentos científi cos básicos, extralimitándose en base a inte-reses políticos ajenos al mundo de la in-novación y cayendo en la ironía del cruel destino de tolerar (e incluso exigir) esos mismos comportamientos que denostan públicamente.

Dos ejemplos sirven para ejemplifi car este comportamiento tan hipócrita del Viejo Continente. El primero son los transgénicos: la oposición frontal de cier-tos grupos políticos ha tumbado toda la evidencia científi ca para restringir la pro-ducción de estos alimentos en Europa... pero no se ha hecho lo propio con los piensos y otros componentes agrícolas y ganaderos que son usados posteriormen-te por el sector primario local. Dicho de otro modo, estamos consumiendo -en última instancia- alimentos modifi cados genéticamente, pero sin aprovechar el potencial económico completo de liderar esa alternativa de producción.

Más absurdo si cabe es el caso de la experimentación con animales. En Euro-pa esta clase de trabajos está prohibida, especialmente si se trata con fi nes cosmé-ticos o para el tabaco. Y las marcas, como incluimos en el reportaje de esta semana de Philip Morris, tiene que recurrir a lo-calizaciones como Singapur para llevar a cabo estos experimentos. Hasta aquí po-dría quedar como un hito europeo en favor de los derechos animales... si no fuera porque al mismo tiempo que prohí-ben estas prácticas, los mismos regulado-res exigen pruebas de haber experimen-tado con animales para dar el visto bueno a un nuevo producto. ¿Alguien le ve la lógica a prohibir algo que luego exiges por normativa? ¿Hay algún objetivo más allá de quedar bien de cara a la galería?

MUNDANAL BIT

Alberto Iglesias

La hipocresía de Europa

8 Domingo. 7 de abril de 2019 • LA RAZÓN