reformas del s. xvi en el sistema defensivo de portezuelo f.j. garcia mogolln f.m. sanchez lomba

8/8/2019 Reformas Del s. XVI en El Sistema Defensivo de Portezuelo F.J. Garcia Mogolln F.M. Sanchez Lomba

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Reformasdel siglo XVI en el sistemadefensivode Portezuelo.Una traza de Pedro de Ybarra

Florencio Javier GJZcIMOGOLLN Francisco Manuel SNCHEZ LOMBA

Cuniversidad de Extremadura)

Uno de los abandonos msdignosde compasion,que yo ba i lo por quantas partes he viajado> y voyviajando en Espaa, es el de estas fortalezas, y casti -los, cuyo respetable aspecto daba los pueblos, yc iudades (puescasi todos, y todas los tenian) un ayrede magestad, y decoro, que so lo puede concebir loquien haya caminado nuestras Provincias, y se figurequ tal parecerian antiguamente coronadas cadapaso sus eminencias con estas suntuosas fbricas.(Antonio PoNz, Viage de Espaa, VIII, Madrid> Ed.

Atlas,1 9 7 2 ,p. 5 1 . )

1. INTRODUCCIN GEOGRFICA

La fortaleza de Marmionda, de Pontezuelo, Pontichuelo o del Por -tillo, que con estos nombres se ha conocido a lo largo de la historia,est situada en un escarpe de las sierras que recorren la parte cen -tral de la extensa provincia de Cceres, entre las cordilleras Carpe-tovetnica y Oretana. Estos montes> que suelen considenarse comoun ramal de la Oretana en prolongacin de la sierra de la Estrella,reciben el nombre de Cordillera Central de San Pablo y > partiendo

1 El nombrede Marmiondaderivade una leyenda medievalsegnla cualuna princesa rabe de ese nombre se enamon de unnoblecautivo cristiano.Libre ste,y coaccionada Marmiondapor su p a dr e p a ra que se casara con unmoro, envi emisarios a su amado,que se presentante los murosde la for -talezaseguido de sushuestes el mismo da de la boda.Rechazada suproposicinde matrimonio, comenz el combate en el que fue herido el joven cristiano.Creyendo Marmionda quehab la muer to , se tir desde loms altodel castillo; y,cuando el leons se recuper,subia lo alto de la fortaleza y se arroj alvaco,cayendo su cuerpodestrozado al lado de su amada.

Le Cindad Hispnica... Editorial de la UniversidadComplutense. Madrid,1985.


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de Coria y de Zarza la Mayor, con la sierra de Coria y de la Garra -pata, de la Solana, de la Venta o de la Perdiguera, de Portezuelo,de Pedroso, de Caaveral, de Santa Catalina o de Casar de Elvira,Zapata y Mirabel, por Serradilla, van a unirse con las del Montfra -ge, de las Corchuelas, de Piatones, del Espejo y de Miravete y stacon el macizo central de las Villuercas. Tiene, pues>su explicacinque precisamente en esta lnea divisoria natural casi toda ella alnorte del Tajo se encontraran importantes recintos defensivos:Peafiel (Racha-Rachel), Acebuche, Ceclavn, Portezuelo, Alcontar,Mirabel>Montfrage, Miravete y otros.

En plena sierra de Portezuelo>en la mitad occidental de la pro -vincia, al norte del Tajo, se halla el castillo de su nombre, en unpicacho rocoso que domina el desfiladero por donde pasaba la anti -gua va romana de la Dalmacia, ramal de la calzada de la Plata que,partiendo de Alcontar (Turmulus), pasaba por Coria y llegaba hastaCiudad Rodrigo, siendo una de las ms importantes rutas de penetra -cin en tiempos de la Reconquista.

Domina en la zona el sistema cmbrico, pizarroso> como se apre -cia en las zonas bajas en estratos inclinados bien visibles, si bien elsilrico-ordovcico forma la parte ms alta de los oteros a base deduras cuarcitas. Es en este paisaje abrupto donde se encuentra elcastillo que seorea la comarca, el pueblo de Portezuelo, el paso delTajo, la lejana inmensa y la salvaje serrana cubierta de madroerasy de cornicabras, de acehuches, de zarzas y lentiscos, de encinas,alcornoques y jaras; castillo que todava, aunque decrpito y muti -lado, desafa el peso insoportable de los siglos, las inclemencias delas lluvias y de los hielos y la destruccin de los hombres.

TI. NOTAS SOBRELA FUNDACINDE Pokmzurnzo

La zona en que se encuentra enclavado el castillo estuvo habitadaya desde poca prehistrica, ponindose as de relieve el alto valorestratgico y econmico que siempre tuvo la comarca. En este sen -tido, se pueden citar algunos dlmenes en las proximidades y lascuevas neolticas denominadas Cancho de la Gulera o Cueva de laColumna, reseada por Mlida 2 as como la de la Pea o del Por -tichuelo, mencionada por el mismo investigador ~. Parece, pues, claroque desde muy antiguo, desde los tiempos prehistricos, estos terre -nos fueron escogidos como lugar de asentamiento natural.

2 Jos RamnMLIDA>Catlogo Monumental de Espaa. Provincia de Cce -res, 1 , Madr id , 1 9 2 4 ,p . 8 .

Ibidem, 1, p. 5.


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Tambin Roma se fij en el enclave , y no slo porque era el sitioapropiado que enlazaba Alcontar con las ciudades de Coria y Mi -rbriga, sino porque el territorio era rico en metales frricos. Dehecho, en los parajes que hoy llaman los lugareos Fraguas y Ferre -ras por las abundantes escorias de mineral de hierro que all exis -ten, aparecieron en el alio 1851monedas romanas que nos hablan

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de posibles minas y de una industria metalrgicaLos visigodos, desde luego>asentaron sus reales en estas tierras,

como prueban los vestigios y materiales que de dicha poca inven -tari Mlida ~. Se encontraron los citados restos en la Dehesa de losValdios de Portezuelo y consistan, esencialmente, en huellas de unapoblacin, junto a la derruida ermita de Santa Ana,y ms de veintesepulcros que contenan diversos ajuares. Son>por tanto, serios ar -gumentos en pro de la existencia de una villa visigoda, aunque nodebi tener demasiada importancia.

Poco tiempo despus de estos descubrimientos de Mlida se en -contraron ms restos arqueolgicos en la llamada Dehesa del Prado,muy cerca de los Valdios, en el cerro denominado Macailla, concre -tamente fragmentos de muros de cantera que llegaban a alcanzarhasta un metro de altura 6, El seor Velo y Nieto se inclina a pen -sar, de acuerdo con Mlida, que el poblado de los Valdios pertenecia la poca visigoda, pero seran los rabes los que fundaron la po -blacin de Macailla, probablemente con materiales procedentes delantiguo castro visigodo. De esta aldea de Macailla, sigue diciendo

Velo> slo se conoce su corta existencia y poca importancia. Elloimplicara que, al levantarse la fortaleza> los habitantes rabes deMacailla abandonaran este asentamiento y se trasladaran a la sombray tajo la proteccin del castillo, fundando la actual villa de Porte -zuelo. Es, pues, un ejemplo ms; entre los mltiples que se podrancitar en el medievo hispano> de aldeas que nacieron como consecuen -cia de la construccin de una fortaleza. Aldeas o urbes que surgieronpor una relacin simbitica de interdependencia: el castillo les dabauna proteccin real, fsica, en tiempos dc guerra, mientras que lapoblacin campesina, que se encontraba a su pie, proporcionaba ala guarnicin las necesarias vituallas para la supervivencia de lamisma.

Federico REAOOSUNA,Monografa histrica de la villa y del castillo dePortezuelo, Revista del Centro de Estudios Extremeos, VIII (1934),p. 325.

Jos Ramn MuDA,ob. cit., 1, PP. 221-224.Vid, tambin el informe del flustrearquelogo en Boletn de l a Real Academia de l a H i s t o r i a > ,LII (1908)>p. 1.

Federico REAOOSUNA,ob. cit., PP. 3 3 0 - 3 3 1 ;Gervasio VELOY NIETO,Castillosde Extremadura> Madr id , 1 9 6 8 ,P P. 4 72y s s .

Gervasio VELOY NIETO,ob. cit., p. 4 7 4 .


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XII. VALORESTRATGICODE LAFORTALEZAD EPORTEZUELO

En estas circunstancias surgi el castillo de Portezuelo> segura -mente en los albores del siglo x, edificado por los musulmanes, yafuera de nueva planta, ya aprovechando algn resto del torren oatalaya que existiera en el lugar desde los tiempos romanos paradefender la Va de la Dalmacia 8 Pero dicho baluarte no naci solo,sino dentro de un contexto defensivo de amplios vuelos. Hay quepensar en que era la llave de la ciudad de Coria por el sur, sirviendo,tanto de elemento ofensivo para repeler ataques, como punto de en -lace con la propia ciudad cauriense. A este propsito, debemos hacerla observacin de que en Torrejoncillo, pueblo intermedio entre Por -tezuelo y Cor ia> situado en un altozano, debi existir alguna torrede observacin, como parece indicar el propio nombre de Torrejon -cillo (torre pequea). Esta edificacin servira para transmitir a Coriacualquier tipo de seales que se le hicieran desde Portezuelo paraavisar de posibles ataques o movimientos de tropas enemigas.

Al norte, Coria estaba defendida por el castillo de Milana, cercade Moraleja, erguido en la confluencia del ro Arrago con la Riverade Gata y, ms arriba, por Santibez el Alto y la Almenara. Estasfortalezas no slo servan para defender determinadas lneas de lasincursiones musulmanas o cristianas, segn los casos, sino que tam -bin eran formidables bases de partida y puntos de apoyo tcticopara las razzias, tan frecuentes en los siglos de la Reconquista. Poreso muy pronto, el territorio del Kars o Al-Garb, del que Coria eracabeza de waliato, entre el Tajo y el Ana, se eriz de castillos y defortalezas. Las sierras del norte aadieron a lo abrupto del terrenola mole grantica de Salvalen, el fuerte de Trevejo y los castillosde Eljas y Rapapelo, por occidente; la ciudadela fortificada de Gata>el bastin de Almenara, el baluarte de Cadalso y el fuerte de Trbel,en la hurdana sierra de la Hoya, por el centro; los de Granada, Soto -fermoso y Palomera, por oriente. Ms al sur, Benavente, Castel Ber -nardo, Racha-Rachel y Ceclavn, hacia la frontera portuguesa; Santi -bez avanzado en el empinadsimo otero, Galisteo, la Atalayaalfonsina> Milana y Xerit, junto al arroyo Morcillo, en retaguardia>

protegen los accesos desde el norte a la Coria amurallada y agarena.Y el antiqusimo castillo de Godos, en la confluencia del Arrago conel Alagn, y ms abajo, a uno y otro lado del Tajo, el formidablecinturn defensivo que forman las fortalezas de Piedras Albas (Elbo -coris?), Alcntara, Lucillos, Portezuelo, Cabezn y Al-Mofrag,que secompletan al sur con la Cabeza del Esparragal, las murallas y elalczar de Cceres que los almohades de Al-Mumin reconstruye-

8 Ibidem, p. 470.


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ron, la ciudad-baluarte de Trujillo y los impresionantes castillosde Montnchez y Santa Cruz, entre otros menores, constituyen unconjunto articulado y estratgico de primersimo orden que habrade dificultar en gran manera las operaciones militares de reconquista.

Como vas fundamentales de penetracin en este intrincado, pe -ligroso y despoblado territorio, existan las calzadas romanas llama -das la X/ia Lata (conocida por Camino de la Plata o de la Guinea),que iba de Mrida a Astorga, pasando en nuestra tierra por Sorores, Norba (Cceres)> Alcontar y Cparra; la de Alcontar (Turmulus) aCiudad Rodrigo, llamada de la Dalmacia, que comunicaba Coria conla antigua Mirobriga; la de Cceres a Alcntara y Portugal> por elfamossimo puente; la de Mrida a Zaragoza, tocando los actualesAbertura, Truj i l lo y Jara ice jo , y alguna otra de menor consideracin.Para nosotros, las ms importantes son la de la Plata, que entrabapor los puertos de Bjar y Baos, con desvo a Granada y Cparra,y la de la Dalmacia, a travs de los puertos de Perosn y Acebo, dela que derivaba una secundaria de Coria a Alcntara, en seguimientodel Alagn, por Ceclavin ~.

Aquellos castillos y fortalezas, entre los que se encuentra Porte -zuelo, y estas vas de acceso, que tuvieron ya su historia> fueron du -rante la Reconquista piezas fundamentales de una complicadsimapartida de ajedrez> larga y sangrienta> con inacabables avances yretrocesos, que culminara con la victoria total de Fernando III elSanto.

IV .DEScRIPcIN DEI CASTILLOComo ya hemos adelantado en la introduccin geogrfica, el cas-

tillo tiene una posicin privilegiada> pues desde l se divisan grandesextensiones de tierras, y, por su ubicacin, es prcticamente inexpug -nable. Situado en lo alto de un cerro, con pendientes muy speraspor las laderas norte y oeste, no as por el. sur> de ascensin mscmoda, asienta directamente sobre grandes rocas o formaciones cuar -cticas cortadas a pico, lo cual contribuye a aumentar su fortalezay capacidad disuasoria ante cualquier ataque. Precisamente esta mex -pugnabilidad natural contribuy sin duda a que los primitivos cons -tructores realizaran una edificacin muy simple: careca de fuertesbarbacanas exteriores, de gruesos muros y de grandes cubos ofensivo -

lodefensivos en las esquinas

JosManuel ROLDANHeavXs,Iter ab Emerita Asturicam. El Camino de laPlata, Salamanca, 1971.

10 Gervasio VELOY NIETO,ob. cit, p . 4 7 5 .


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4 8 2 F. J. Garca Mogolln y F. M. Snchez Lomba

La construccin, pues, es muy sencilla. Se trata de un edificiocuadrilongo irregular (ver plano); los muros no estn perfectamentealineados, puesto que, en sus intersecciones no forman ngulos rectos.Incluso el muro norte, aproximadamente a su mitad, tiene una pe~quea inflexin en ngulo obtuso, y en esta misma zona, en la es -quina noreste presenta una chafln que le une con el muro oriental(dicho chafln hoy se encuentra arruinado). El lienzo de levante, ensu unin con el norte tiene un cubo, probable aadido posterior, ydesde aqu la muralla contina recta hacia el sur; luego se produceuna inflexin>y el muro meridional sigue, muy abierto, en direccinoeste, para en su tercio final producirse otra violenta angulacinque toma camino sur-suroeste. En este punto la cerca est rota sederrumb poco antes de comenzar el siglo xx y, por observacionesque hemos realizado sobre el propio te rre no , parece como s i en e st erecodo que seala el muro sur con el trozo del lienzo procedente dela esquina suroeste, se hubiese dispuesto la puerta principal de en -trada al castillo con la clsica estructura islmica de eje acodado,pues, desde luego>as se prestaba mejor a la defensa. El costado oc -cidental es perfectamente recto hasta su unin con el septentrional,y en este lugar se encuentra el otro torren cilndrico de la fortaleza,en la esquina noroeste; prec i samentee st e cubo fue el que sufr i unasreformas, a mediados del siglo xvi, que comentaremos ms adelante.

Este que hemos descrito someramente es el recinto principal delcastillo y est constituido por muros de considerable altura> levan -tados slidamente con tcnica de tapial, pues se notan las sucesivas

tongadas. El sistema es el siguiente: un encofrado de fuerte mam -postera recubre un ncleo de duro hormign. Los grosores, medidospor noso t ros en varios puntos , var ian entre los 2,50 metros, en losmuros nor te y oeste, los 2,60 metros del muro sur y los 2,70 del lienzoeste, pues>lgicamente, es la zona ms dbil de la fortaleza. Estecerramiento iba totalmente almenado, con merlones de estructuraprismtica, planta rectangular y chapitel piramidal, suficientes paracubrir el cuerpo entero de una persona (2,50 > < 1,50 x 0,50metros).Hoy da falta la mayor parte de ellos; slo se conservan algunos,sobre todo en el muro nor te , t res o c u a t r o e n el oeste y unos pocosen el sur. No presenta ventanas ni saeteras, salvo algunas que seabrieron posteriormente en la parte ms elevada y medial de loslienzos norte y sur, y nos referimos concretamente a dos ventanalescuadrangulares, con derrame hacia el interior y bancos laterales, quedeban proporcionar iluminacin a dos salones de respeto en la se -gunda planta de la edificacin interior.

Lo precedente corresponde a la parte ms primitiva de la forta -leza y, en un principio, no debi tener ni siquiera torreones esqui -neros, ya que los dos que al presente existen se edificaran poste-


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Fo. 1. Elpueblo de Portezuela desde el castillo.

Fio.ZLa fortaleza desde el lado norte.


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riormente. Al igual que se aadieron estos torreones, con el tiempotambin se construy una barbacana o tapia externa que refuerzalas defensas, sobre todo en las zonas ms necesitadas: el lado estey el sur. Dicha barbacana crea un adarve o camino de ronda muyestrecho, angostura que se manifiesta ms claramente al norte y aloeste. En este ltimo lugar queda interrumpida. La barbacana estacasi totalmente arruinada en la actualidad, fundamentalmente al nortey al oeste, siendo la parte mejor conservada la que protege la zonade saliente, puesto que al sur ha desaparecido casi por completo,aunque se adivina la direccin que tomaba a travs de los restos decimentaciones. Precisamente en el lado oriental de dicha barbacanay en el recodo que se produce en su unin con el lienzo sur> es dondese abre la puerta de entrada al baluarte; construida a base de ladrillorojo, se perfila en arco apuntado y ofrece una clara disposicin gtico-mudjar. Est constituida por dos arcos, ambos de ladrillo, uno ex -terior, muy destruido, y otro interior, de iguales caractersticas, perobastante ms elevado y ms ancho; este ltimo es el que sustentael camino de ronda o andn de la muralla. Tras la puerta hay unaespecie de pequeo patio que va ascendiendo por una calzada em -pedrada hasta el portn principal de la fortaleza. La portada descritay la barbacana son obras relacionables con algn intento de mejorarel sistema defensivo, llevado a cabo, muy probablemente> por la Ordende Alcntara en el siglo xiv. A mediados del siglo xv se efectuaronobras de restauracin en el muro norte de la barbacana> dentro delcontexto general de las reformas proyectadas por el maestro Pedrode Ybarra.Hay quien afirma que el castillo tuvo tambin un acceso por elnorte, pero ello es muy improbable, pues son escasos los indiciospara sustentar tal aserto. Del mismo modo>es rechazable la hiptesissegn la cual el enclave defensivo dispona de triple muro , puesni un solo vestigio ha aparecido que confirme tal suposicin.

El interior del castillo est totalmente en ruinas, de tal modo quees prcticamente imposible conocer la primitiva disposicin de lasestancias. La longitud mxima de este espacio intramuros es de49,30 metros por unos 26,30de latitud. Considera Velo12 y acepta -mos la sugerencia que dicho interior deba estar dividido en dospartes fundamentales, fraccionadas por un muro de separacin. Lamitad occidental constituira una especie de gran patio de armas,en cuyo subsuelo se sita un aljibe, an en buen estado, para recogeragua de lluvia. Tiene dos brocales, pero la parte interna se organizaen una sola oquedad, cubierta posiblemente con bveda de can.

Feder i coREAOOSUNA,ob. cit., p. 3 4 5 .12 Gervas ioVELOY Nzro ,ob. cit., p p . 4 7 6y s s .


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F e . .3Angula noroeste.

Fut 4.El castillo desde el lado norte. (Fotograf ade Ge rvas io Ve loy Nieto.)


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486 Y. 1. GarcaMogollny F. M. Snchez Lomba

En la esquina suroeste se aprecia una arcada de ladrillo a la alturade] andn de la muralla> probablemente para ensanchar sta y cons -truir as una plataforma desde la cual se pudiera defender mejor estaparte, ante la imposibilidad material de elevar un torren por las

dificultades que ofrece el terreno> con rocas cortadas a pico.La zona oriental de la fortaleza, dada la cantidad de escombrosy restos de paredes que en ella subsisten, debi estar destinada avivienda y alojamiento de los soldados de la guarnicin, del alcaide,caballerizas y dems edificios requeridos en una construccin de estetipo. Las habitaciones debieron estar dispuestas en dos pisos, ya quese observan los correspondientes mechinales en donde estaban encla -vadas las vigas de madera que sustentaban la segunda planta; ade -ms, en los muros norte y sur se aprecian dos ventanas, ya mencio -nadas, que por estar dispuestas a considerable altura requieren esepiso superior. Es palpable la existencia de este piso> porque, abun -dando en lo dicho, se conservan huellas de al menos una escalerapara ascender a l. Aproximadamente en el centro de esta zona devivienda habra un pequeo patio y, posiblemente, otro aljibe o talvez alguna estancia abovedada, ya que en un hueco practicado enla gruesa capa de cascotes es visible lo que decimos. Alrea de vi -vienda hay que aadir las dos habitaciones que se construyeron amediados del siglo xvi sobre el torren noroeste, citadas ms ade -lante, y de las que hoy no queda prcticamente ningn rastro, ya quela estructura se ha desplomado casi en su totalidad. De su confor -macin exterior queda constancia por algunas fotografas antiguas 13y de ellas se deduce que se amoldaba en todo a la traza y condicionesdadas por el arquitecto Pedro de Ybarra.

Del anlisis y estudio de esta fortaleza colegimos que respondeal tipo de alcazaba musulmana de estructura cudrangular, sin torredel homenaje y sin baluartes esquineros elementos tpicos de la ar -quitectura militar cristiana medieval y, por tanto, erigida por losrabes en los comienzos del siglo x (como indica Velo)>o quiz enpleno siglo ix, puesto que existen referencias que mencionan a Por -tezuelo en tan temprana poca.

V. LAS REFORMAS DEL SIGLO xv

El fin de las campaas militares en suelo hispnico debi ser fac -tor determinante en el declive de las fortalezas. Con los Reyes Ca -tlicos, y a raz de la toma de Granada, se haca innecesario el man-

Federico REOOSUNA,ob. cit.; PublioHURTADO>Castillos, torres y casas fuertes de la provincia de Cceres, C ce re s,1 9 2 7 ,l m. XII , nm. 4 0 ; GervasioVELO Y NIETO,ob. cit.


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Fm .5El torren del ngulo noroeste antes del desplome. (Fotografa deF. Reao Osuna.>


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tenimiento de estos recintos como enclaves vitales. Unamos a ello eldescubrimiento de la artillera y el recorte que los propios reyeshicieron a las prerrogativas de las Ordenes Militares. Juntos estosmotivos explican el progresivo abandono y deterioro de estas defen -sas que, careciendo de un valor estratgico inmediato> van a ser> sinembargo, mantenidas y restauradas en previsin de las conflagracio -nes que pudieran plantearse frente a las armas del vecino reino dePortugal.

En este ambiente deben incardinarse las reformas acometidas enPortezuelo a mediados del siglo xv. A travs de un documento ha -llado en el Archivo Histrico Nacional deducimos que, ante el estadoruinoso de la edificacin, el a la sazn comendador de Portezuelo,don Fadrique Enrquez de Guzmn, solicit del emperador Carlos Vautorizacin para emprender tareas de reconstruccin. No aparece

en el legajo la solicitud, pero s una carta de poder del comendador,fechada en Zamora en 1550,para que, en su nombre, acte don Lopede Villalobos en todo lo concerniente a la obra ~.

Por medio de la carta que Carlos y envi al gobernador y juezde residencia de la Orden de Alcntara conocemos algunos detalles dela ruina de la fortaleza, que se haban mencionado en la solicitudde reparos. As, se habla de una barrera de piedra y barro que seha empezado a caer, de un portillo que se est desmoronando y deque existe un gran peligro porque una de las esquinas del baluarteque cae a la parte de la syerra alta esta hendida en dos partes>.Enconsecuencia, mand que se reconstruyera la referida barrera y que,en la esquina ruinosa, un cubo nuevo abrazase la torre primitivauniendo los dos lienzos de muralla. Estas tareas habran de realizarsebajo las trazas y condiciones del maestro mayor de la Orden, Pedro deYbarra, poniendo en pregon e publica almoneda la obra del dhocubo para sy obiere alguna persona e personas que quyera tomara hazer a destajo e rresgibir las posturas e baxas que en ello se hi -zieren e los rremateis en quyen los pusyese en mas baxo pregio conque sean maestros de las dhas obras e no de otra manera de losquales rresgiban obligagin e fiangas bastantes de vezinos de tierrasde la dha orden5.

Recibida la provisin real, el gobernador nombr a Pedro deYbarra y al maestro de carpintera y albailera, vecino de Galisteo,Francisco Garca, para que acudiesen a Portezuelo y, visto el estado

4 Archivo Histrico Nacional, Seccin Ordenes Militares, Archivo Judicial dela Orden de Alcntara, legajo 31.532,s/f,

Carta de poder del Comendador, Zamora. 29 de enero de 1 5 4 4 . La de 1 . 5 5 0es un traslado de e l l a en los mismos trminos.

5 Ibidem, Provisin Real de Carlos 1, vid.: Apndice Documenta l ,documentonm. 2 .


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Fw. 6.Lienzo oriental del castillo. (Fotografa dc Publio Hurtado.)

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f l c . 7La fortaleza desde e! ser. (Fotografa dc Jos Ramn Mli da. )


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490 1KJ. Garca Mogollny F. M. Snchez Lomba

del castillo, dijeran qu obras eran necesarias y presentasen trazasy condiciones para su realizacin. El mandamiento del gobernador,fechado en la villa de Brozas el 6 de febrero de 1550,se cumpli sindilacin. Y as, el 9 de febrero, en Alcntara, ambos maestros pre -

sentaron una declaracin ante el escribano> actuando como testigosSebastin de Aguirre, aparejador del convento de San Benito de Al-cntara, y Felipe Rodrguez, vecino de Plasencia, en la que indicabanque toda la obra costara 880.000maravedes: 230.000para recons -truir la barrera y el resto para solucionar el problema de la torreruinosa, que est hendida por dos partes dende lo alto a lo baxot iene nesiesidad que en todo el ancho del sentimiento se abragasecon un cubo nuevo que tiene de ancho este cubo de ~intrel diez eocho pies e de alto hasta el mysmo alto de la torre ochenta pies masque puesto en este alto se haran dos pie~as de aposento y entranbastorre e cubo e tasada la costa deste capitulo e cubo y rreparo dela dha torre con sus aposentos por menudo a toda costa yendo de cale canto vale y suma seisgientos e ginquenta myll maravedis 16

Junto a esa informacin, Pedro de Ybarra present un plano dela obra a realizar, y las condiciones a que se haba de ajustar el can -tero en quien se rematase. Son veinte las condiciones reproducidasntegramente en el apndice documental de este trabajo-, varias re -feridas a) proceso constructivo y a las caractersticas de la edifica -cin: altura y grosor de los muros, cimientos, puertas y ventanas,remates, etc.; otras, a los materiales que se haban de utilizar, y lasrestantes, al contrato, formas de pago y plazos de finalizacin, entrelas que se inclua, lgicamente, el pago al maestro Ybarra de cuatroducados por hacer las referidas condiciones.

Entresacamos de ellas aquellos aspectos que consideramos msrepresentativos. En la condicin 3, al hablar de la apariencia internay externa de la construccin, lo hace con los vanguardistas trminosarte y razn, lo cual nos permite adscribir al maestro Ybarra alas corrientes plenamente renacen t i s t a s . En la nmero 7 se refierea la cal, indicando que sta haba de ser de Cceres. Nada de extraotiene> ya que desde tiempo inmerorial l a s ca le ras de Cceres tuvieronextraordinaria categora> aunque en el siglo xv tenan una fuertecompetencia con las de Serrejn y Malpartida de Plasencia en lapropia provincia> y, sobre todo, con las salmantinas de Fuenteguinal -do, cuya presencia se ha podido documentar en bastantes construc -ciones del norte de Cceres. Insiste en el tema de la cal en la con -dicin 12, aludiendo a la calidad de las mezclas, de cuya vigilanciahace responsable al propio alcaide de la fortaleza.

Th ibdem, Alcntara, O d e f e b r c r o d e 1 5 5 0 ,Declaracin de los maestros Pe -dro de Ybarra y Francisco Garca.


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F is .8.rorren del ngulo nordeste.

Fm. 9Interior de la fortaleza lacia el oeste.


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Una previsible intervencin del maestro carpintero y albail>Fran -cisco Garca, puede suponerse en las condiciones 5, 6,8 y 18,relacio -nadas con las labores de ladrillo y madera: puertas> ventanas> esca -leras, andamiajes> haciendo especial mencin de las calidades de lamadera, que habra de ser de roble o encina.

En cuanto a las condiciones que afectaban especficamente al con -tratante (nmeros 9, 10y 13),nada hay de especial relieve, pues sonclusulas que aparecen constantemente repetidas en todo tipo decontratos de trabajo. Ilustrativa, de alguna manera> es la nmero 9,en la que se delimitan las circunstancias por las que se regiran lascinco pagas en que se haba distribuido el monto total de la obra.

Otras cuestiones a destacar son las de fijacin de plazo para elremate de las posturas> sealado para el da 1 de noviembre de 1550,y el del fin de las tareas constructivas, situado dos aos despus derecibir la primera paga. Y, como nota curiosa, la exigencia, manifes -tada en la clusula 16,de hacer una chimenea francesa de ladrilloen la primera estancia del cuerpo superior. Extraa peticin sta,cuya funcin exacta no nos atrevemos a asegurar. Calefaccin, s, parala habitacin, pero desconocimiento de los beneficiarios de este lujola chimenea francesa implica una perfecta salida de humos pormedio del tiro, a diferencia de los hogares tradicionales, que inundande humo la sala donde se encuentran; puede pensarse en el deseode mejorar las condiciones de los hombres que ejercieran funcionesde vigilancia o, mucho ms probablemente, en la satisfaccin de uncapricho por parte del alcaide o comendador, que gustaran de tenersus dependencias privadas lo ms confortables posible.

Aceptadas las trazas y condiciones> las obras salieron a subastaen la plaza pblica de Alcntara el 8 de octubre de 1550,continuandocada dos das sin que aparecieran posturas hasta el 1 de noviembre,fijado como da del remate. En esa fecha se presentaron FranciscoRedondo, vecino de Garrovillas, y Sebastin de Aguirre, de Alcntara,que se comprometieron a realizar el trabajo por 650.000maravedes ~es decir, con una notable baja respecto a lo presupuestado por Yba -rra. Ms tarde, es Sancho Ortiz, que propone concluir la obra por636.000 maravedes ~ rematndose posteriormente en Gaspar Lpez,que sita el coste final en 630.00019

Ibidem, Alcntara,1 de noviembre de 1 5 5 0 ,Postura de Francisco Redondo y Sebastin de Aguirre: paresqio presente Francisco Redondo vezino de lasGarrovillas e Sebast ian de Aguir re entallador e d ixo que ponya e puso l a dhaobra en se iscie ntase 9inquenta myll mrs conforme a la traga y condig ionesde Pedro de Ybarra.

18 Ibideni, Alcntara, 1 de noviembrede 1550,Postura de Sancho Ortiz: Eluego paresgio presente Sancho Ortiz vezino de la dha villa maestro de canteriae dixo que ponya e puso la obra en seiscientas e treynta a seis myll maravedisconforme a l a tra g a e cond ic i one s .

19 Ibidem, Alcntara, 1 de noviembre de 1550,Postura de Gaspar L pez:


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Fm. 10.Esquina suroeste> donde se hallara la puerta de ingreso.

a Fm. 11.Portada de la Barbacana (exterior).


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Es importante sealar la presencia de estos maestros en la su-basta, pues todos ellos, salvo Redondo, son piezas notables dentrode la arquitectura extremea del siglo xvi. Sebastin de Aguirre, apa -rejador del convento de San Benito de Alcntara y segundo de a bordo

en las actividades del maestro Ybarra, est vinculado a importantesedificios en territorio cacereo, como las iglesias de Casar de Cce -res, Zarza la Mayor, Malpartida de Cceres, Brozas, etc. No de menosrelieve, Sancho Ortiz se relaciona con las reformas del coro y torrede Santa Mara la Mayor de Cceres y las iglesias de Torrejoncillo,Villa del Campo, Valverde del Fresno y Piedras Albas. Menos cono -cida es la personalidad de Gaspar Lpez, pues, a pesar de que sunombre se menciona en numerosos documentos, como testigo, comofiador, o presentando posturas, slo disponemos hasta ahora de prue -bas fehacientes de su trabajo en el templo de Rocamador de Valenciade Alcntara y, naturalmente, en la fortaleza objeto de nuestro es -tudio.

Debieron comenzar las obras con prontitud, de modo que en 2 deseptiembre de 1551, Gaspar Lpez present un escrito ante Diegode Buzianos, juez de residencia y justicia mayor de la villa y par -tido de Alcntara> solicitando se le abonara la segunda paga> paralo cual pidi que se llamara a Pedro de Ybarra maestro mayor yveedor de las dhas obras para que acudiese a ver y, consecuente -mente, a declarar si lo realizado se ajustaba a las trazas, porqueyo tengo abiertos los gimientos y juntos los materiales y comencadoa hazer la obra e trabajo en ella ~. As lo hizo Ybarra, informandoel 4 de septiembre.

Para la tercera paga> present Gaspar Lpez un memorial del es -tado de la obra el 16 de agosto de 1552. Ybarra acudi a Portezueloy a continuacin dio el visto bueno para que se efectuara el abono.Y de manera similar, el 26 de noviembre de 1553para la cuarta paga,es decir, habiendo llegado ya la obra a la mitad de su altura.

A partir de noviembre de 1553debieron surgir problemas, pues>en fecha sin precisar dentro de ese decenio, falleci Gaspar Lpez,interrumpindose las tareas constructivas durante un largo perodo.Como consecuencia de la muerte de Gaspar Lpez, Catalina Gmez,su mujer, asumi las responsabilidades del marido; pero, alegandosu extrema pobreza, solicit le fuera adelantada la quinta paga. Lapeticin, fechada en Alcntara a 15de septiembre de 1559>indica queGaspar Lpez hizo en vida la mayor parte de la obra, e lo que queda

E luego paresgio presente Gaspar Lopez maestro de manpuesto e canteriavezino de la dha v i l l a e dixo que ponya e puso l a dha obra en seysgientas etreynta myll mrs para la hazer conforme a l a t ra9a e co ndi g io ne s .

~ Ibidem, Alcntara, 2 de sept iembre de 1 5 5 1 , Carta dc Gaspar Lpez al Juez de Residencia y Justicia Mayor de la Villa y Partido de Alcntara.


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Frs.12.Portada de la Barbacana (interior).

F r s . 13.Traza de Pedro de Ybarra.


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496 F. J. Garca Mogollny F. M. Snchez Lomba

por hazer se acabara con ciento e veynt myll mrs que le den de lapostrera paga y son pobres y no lo pueden acabar sy no se le pa -gase ~ La respuesta de Felipe II es satisfactoria para Catalina G -mez>pero el cumplimiento se debi demorar, pues todava en 1565aparecen textos relacionados con el tema. Ignoramos cundo se lle -gara a una solucin, pero sta se llevara a efecto en el ltimo terciodel siglo, bajo la direccin de alguno de los hijos del maestro, talvez su homnimo Gaspar Lpez, que lleg a ser, en la transicin delas centurias> maestro mayor de la orden alcantarina.

No debemos finalizar estas lneas sin hacer una referencia, siquie-ra sumaria, sobre al autor de la traza. Poco conocido hasta ahora,con menciones que lo situaban en varias construcciones salmantinasy en las cacereas de la catedral de Coria y del convento de SanBenito de Alcntara, Pedro de Ybarra, que est siendo objeto de unestudio exhaustivo, pronto pasar a ser distinguido como uno de losms importantes arquitectos espaoles del siglo xvi. No es ste lugarpara hacer una valoracin de su pretendida filiacin con Juan deAlava,y tampoco para resear las obras en que intervino en las di -cesis de Salamanca, Zamora, Ciudad Rodrigo o Plasencia. Nos interesams bien resaltar la gran tarea desarrollada a lo largo de casi treintaaos en el territorio cacereo de la dicesis de Coria, dentro de cu -yos lmites se inscriben la mayora de las villas pertenecientes a laOrden de Alcntara. Ybarra es, sin exageraciones, el arquitecto dela transicin del gtico al renacimiento en la dices is caur iense , ylo es porque consigui unir en su persona los dos cargos ms impor -tantes, el de maestro mayor del obispado y el de idntica denomina -cin de la orden alcantarina. En funcin de esos nombramientos,Ybarra ser el encargado de presentar las trazas y condiciones paratoda obra de reforma o de nueva planta que se pretenda erigir, pre -cisamente en los momentos de mayor auge constructivo en estos te -rritorios. Actividad doble tambin, porque no slo se trata de cons -rucciones religiosas> sino que, como uno de sus principales comitentesera una orden militar, la restauracin de los enclaves defensivos al -cantarinos supondr una ingente labor.

Resumiremos sus intervenciones citando slo las obras ms repre -sentativas a las cuales aparece vinculado: catedral de Coria, iglcsiasde Santa Mara la Mayor y San Mateo de Cceres, convento de SanBcnito de Alcntara, iglesias de Santa Mara y Santos Mrtires deBrozas, Rocamador de Valencia de Alcntara, Torrejoncillo, Acebo,Torre de Don Miguel, Casar de Cceres, Estorninos, etc., en cuanto aarquitectura religiosa, y, entre otras muchas de arquitectura cvico-

21 Ibidem, Alcntara, 13 de septiembre dc 1 5 5 9 , Peticin de Catalina Gmez,viuda del cantero Gaspar Lpez, vid. Apndice Documenta l ,documento nm. 3 .


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militar, las de las fortalezas de Santibez el Alto, Portezuelo, Zarzala Mayor, Valencia de Alcntara, Moraleja y Herrera de Alcntara ~.

VI. LATR A ZADE PEDRODE YBARRA

Incorporado a los textos de condiciones, pregones y escritos variosrelativos a la construccin, se encuentra un dibujo, a tinta y sobrepapel, que servira de pauta al maestro que se encargara de la obra.No existen en l indicaciones de orientacin, aunque, por incluir elngulo formado por los lienzos de muralla, se deduce fcilmente quese trata de la esquina del noroeste. Sobre el dibujo se relacionananotaciones nominales y numricas que informan de las caracters -ticas que deban respetarse en la edificacin.

En la traza se representan los dos niveles del edificio, es decir, elcubo in fer ior, de perfil circular, que abraza los dos paos del muro,y el cuerpo prismtico, que se elevara sobre el cubo; es, pues, unaplanta tomada al nivel del andn de la muralla.

Comenzando por el cuerpo cilndrico de la base> debe hacerse no -tar la ausencia de anotaciones numricas de grosor, pero si unaspalabras que las sustituyen: retraymiento de los relexs, trminoeste ltimo muy utilizado en ingeniera para expresar la disminucino escarpe de los muros hacia la parte superior.

A continuacin, por medio de finas lneas, poco separadas> a modode sombreado, se marca la transicin del cubo al prisma superior>indicando con el trmino alanborado que tal transicin se resuelveen talud. En este nivel confluyen las distintas partes de la estruc -tura: los lienzos de muros sealados con las palabras anden y mu -ralla>,el cilindro de base ya reseado y el cuerpo superior, cuyacomunicacin se establece mediante una puerta abierta en el lienzonorte.

22 La bibl io g raf a sobre l a obra de Ybarra en Extremadura, co n div e rsasmenciones de Sancho Ortiz, Sebastin de Aguirre, Gaspar Lpez y otros maes -tros del siglo xvi>puede resumirse en los siguientes ttulos: Jos Buono Ro -ChA, Consideraciones en torno ql arquitecto Pedro de Ibarra y su obra en ladice -sir de Coria. Actas d e l V Congresode Estudios Ext remeos . Ponenc iaIV , Arte ,Badajoz, 1 9 7 6 , Pp . 6 1 - 6 8 ; Florencio Javier GARA MOCOI. .LN,La intervencindel maestro Pedro de Ybarra en las reformas de la iglesia de Santa Mara la

Mayor, de Cceres> ,XXXV ( 1 9 7 9 ) >Pp . 5 7 - 1 1 5 ;idem, El retablomayor de la iglesia parroquial de Acebo,Alcntara>,CXCV( C ce re s,1 9 7 9 ) ,p p . 3 - 1 2 ;Toms MARTfNGIL,La iglesia parroquial del Casar deCceres y su retablo mayor, Revista del Centro de Es tudios Extremeos ,y(1931) ,Pp . 3 9 - 5 8 ;Jos Ramn M L ID A >ob. cit.,; Francisco Manuel SNcHEzLOMBA, Notas sobre la construccin de la iglesia parroquial de Nuestra Seora de los Angeles,de Acebo,Estudios dedicadosa Carlos Cal le jo ,C ce re s,1 9 7 9 ,Pp . 6 6 3 -669; idem, La iglesia parroquia! de Ma!partida de Cceres, Norba, 1 (Cceres>1980),pp. 87-98;idem, Arquitectura eclesial del siglo XVI en la sierra de Gata, No rb a> ,II ( C ce re s,1 9 8 1 ) , p p . 6 7 - 7 6 .


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498 F. J. Garca Mogolln y Y. M. Snchez Lomba

Las aclaraciones referentes a este segundo cuerpo son ms abun -dantes; se nos da el grosor de las paredes, tres pies y medio (IP),la longitud y anchura de la estancia, veintids y diecisis y mediopies, respectivamente (XXII>XVIO,,),y se sitan las ventanas, de las

que no se mencionan su luz y flecha, aunque s se dibujan unos pe -queos puntos al exterior que pueden interpretarse como modillonespara sustentar un alfizar.

En el interior de este recinto se incluyen dos diseos ms, unode tres paos rehundido en la pared del norte, donde se coloca lachimenea francesa de ladrillo, cheminea, citada en las condiciones;el otro, corresponde a una escalera de madera en tramos rectos (es -calera>)que, arrancando desde el muro sur junto a la puerta (en -trada descalera), ascendera al segundo piso, en el que se reprodu -ciran las medidas> disposicin de ventanas y, tal vez, chimenea, del

inferior.En la parte final de la pgina, cerrndose con la firma de Pedrode Ybarra, se incluyen unas l neas que no se restringen a una simpleexplicacin de la traza, sino que modifican ligeramente algunas pecu -liaridades expresadas en las condiciones:

Yten se entyende que puesto e l cubo en e l peso (en la horizontal)de l anden como dizen l a s condiciones que aunque en las condiqionesdize que del anden para arryba se helijan las pie9as se entyende quean de ser helegydas en quadra conforme a esta traQa y no a las con -div ione s / en quan to a la quadra en quan to a l a l to y ventanas y lodernas conforme a las condi~iones y en el quadrado conforme a estatraga y sumas que son veynte y dos pies y diez y seys pies y medio dehueco lo que resta del redondo questa matizado a de quedar enchapadoy alanhorado dendel mysmo anden hasta en baxo de los antepechosde las ventanas con su manpuesto y cal / las quatro esquinas an deser de pyedra dc grano y entyendan las dos que poco mas de un pyese a de yr ganando con dos tondos y es te capytulo y t ra9a se a deguardar y poner e st e capytulo co n l a s condi9 i o n e s y s y la trag a fuerea l a cor te que se huelva y como e l tejaroz andava en redondo andeen quadrado.

Pedro deYbarra.

VII. HEcnos HISrRIcoS RELACWNADOSC~N EL CASTILLOD EPORTEZUELO

Ao 866.Antes de esta fecha mandaba en Coria, dentro de cuyoslmites estaba Portezuelo, que no se cita en las Crnicas, un reymoro llamado Zeth ~.

23 Fray Enrique FLREz,Espaa Sagrada, XIII,Madrid, 1816,p. 492;apareceinserto esto> con motivo de la toma de Coria por Ordoo 1, en el Chronicndel Obispo de Salamanca Sebastin,


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Reformas del siglo XVI en el sistemadefensivo... 499

Ao 877.Alfonso III atac Coria, cercndola. La guarnicin del cas -tillo de Portezuelo auxili a los sitiados haciendo levantar el ase -dio a los cristianos 24

Ao 881.Termin la campaa de Alfonso III, pero en las Crnicas,

pese a lo que dice Velo, no se cita a Portezuelo; s, en cambio,se menciona a Coria y la victoria de dicho rey ~.Ao 886.Al morir Muhamad se produjo la rebelin casi general

contra el califato de Crdoba. As, Aben Takit penetr en Mridadesalojando a los berberiscos de la tribu Ketama> erigindose en

jefe de la parte norte de la provincia de Al-Garb y dominando lasfortalezas de Santibez, Alcntara, Coria, Alcontar y Portezuelo,

26como las ms importantesAo 914.Incursin de Ordoo II. No conocemos la suerte que corriel castillo de Portezuelo, aunque, evidentemente, debi caer en

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manos de los cristianosAo 997.Almanzor cruz el puente de Alcontar, tom Coria y lleghasta Santiago de Compostela. Debi conquistar Portezuelo ~.Ao 1166.Fernando II de Len, El Baboso>,tom Alcntara y des -

pus se apoder de Portezuelo, que cedi a los Templarios> y de29

otros muchos baluartesAo 1196.Despus de la victoria de Alarcos sobre Alfonso VIII (15 de

julio de 1195),Abu Yusuf Yacob al-Mansur, emir almohade> recon -quista la Transierra y con ella Portezuelo. Ya aos antes se habanresentido estas tierras con las campaas protagonizadas por estemismo caudillo (117420.

Ao 1212.AlfonsoIX de Len conquista definitivamente Portezuelo,que en 1213cedi a la Orden de Alcntara. Este hecho desatlas airadas quejas de los Templarios que, como sabernos, fueronsus antiguos propietarios. Se acallaron las tensiones en 1310 conla supresin de la Orden del Temple. A partir de entonces fuecabeza floreciente de la encomienda alcantarina de su nombre.

24 Gervasio VELO Y NIETO, ob. cit., pp. 480481.2 5 Fray Enrique FLdREZ, ob. cit., p. 455,nm. 62, y p. 456, mira. 64, en donde

hace un traslado del ChronicnAlbeldense. La noticia referente al ao 877debitomarla Velo dc esta misma fuente;

vid.etiam, M. R.

MARTNEZ,Historia del Reino de Badajoz, Badajoz> 1904,p. 71 y nota de la p. 72.

26 Gervasio VELOY NIETO>ob. cit., p. 481,en donde cita a Abenayan, Pp. 18 y 99, segn M. R. MARTNEZ,ob. cit., p. 74, nota 1.

~ Getvasio VELO Y NIETO, ob. cit., p. 481.28 R. Dozy, Historia de los musulmanes en Espaa, III, Madrid, 1941,p. 205;

vid. etiam, Gervasio VELOY NIETO, ob. cit., p. 481.29 A. Hisc, Historia poltica del imperio almohade, 1, Tetun, 1956,p. 236;

Julio GONZLEZ,La reconquista espaola y la repoblacin del pas, Zaragoza,1951,p. 189;Crnica latina de los reyes de Castilla,inserta en Antonio C. FEo-mANO CUMBREO,Estudiosde historia de Cceres (Desde los orgenes a la Re-con quista), 1, Oviedo, 1957,p. 232;Gervasio VELOY NIETO, ob. cit., p. 482.

~ Gervasio VELOY NIETO, ob. cit., p. 482.


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500 Y. J. Garca Mogolln y Y. M. Snchez Lomba

Ao 1486.El17de enero el maestre de la Orden de Alcntara, donJuan de Ziga, celebr captulo en Portezuelo ~.En siglos posteriores sabemos del auge de la encomienda, enorme -

mente rica, que llegaba a producir hasta 40.000ducados de rentaanual, repartidos paritariamente entre el comendador y la mesa maes -tral. Sin embargo> esta misma riqueza fue la ruina del castillo, yaque los comendadores se dedicaban a cobrar las rentas y se despreo -cupaban totalmente del estado de conservacin de la fortaleza, a pesarde que en los mismos estatutos de la Orden, llamados definiciones,se estableca que parte de las rentas deba destinarse a la reparaciny conservacin del patrimonio inmobiliario de la Encomienda. Poreso, ya en el siglo xviii, comenz su lamentable peregrinar a travsde diversos estados de ruina, hasta llegar a nuestros das. As, el 25 de

julio de 1784,don Luis de Urbina, a la sazn comendador de Porte -zuelo, hizo la siguiente descripcin del mismo:

Est en la eminencia de la sierra a la embocadura del Portezuelo ysu puerto, mirando al medioda, es obra muy antigua y slo se mantie -nen sus paredes principales, por todas las cuatro bandas de piedra degorrn y tapia muy altas> y una torre, la mitad fabricada a modo decubo, y lo restante a cuatro esquinas de cantera, con su ventana, queuno y otro miran al norte> hacia cuya parte tienen dichas paredes dosboquerones, y por la de medioda otro, y los cimientos defalcados, conla continuacin del mucho tiempo y las aguas> todo lo interior del cas -tillo-fortaleza est destechado> desmantelado e inhabitable> y sus cis -ternas enteramente confundidas, como otras muchas obras que hoyno se conocen y sirven para refugio de ganado, ni se encuentra ya enl armamento alguno, de modo que slo permanece para memoria 3z.

El castillo fue abandonado, segn afirma Reao ~, con toda pro -babilidad en la segunda mitad del siglo xvii, puesto que an en 1617se le comunicaba al alcaide de la fortaleza que haba sido nombradovisitador de la iglesia de Portezuelo don Felipe de Trejo Carvajal.

f l Publio HURTADO,ob. cit., p. 207.32 Archivo Histrico Nacional, Encomiendas de Alcntara, legajo 5.749,citado

por Gervasio VELOY NIETO>ob. cit., pp. 478-480.~ Federico RrsxoOsuNA,ob. cit., p. 341.


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APENDICE DOCUMENTAL

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1550, febrero, 9. Alcntara

Condiciones de Pedro de Ybarra para la obra del castillo de PortezueloArchivo Histrico Nacional, Archivo Judicial de la Orden de Alcntara:

legajo 31332, s. f.

1. Primeramente se entiende que este cubo que se a de hazer a detener de gintrel de la parte de afuera dende la esquyna de la mysma paredque esta hendida a fuer que abrage cada parte veynte pies y este el gintrelpor afuera y estos veynte pies se entiende en la elegin del dho cubo ydende su fundamyento hasta el anden a de subir de cal y canto y en estacantidad hasta este dhoanden se a de rretraer en quatro vezesel dho cubodos pies por manera que el peso del anden este en diez e ocho pies de gin -trel dende la esquyna a todas partes.

2. Yten que primeramente antes que se elija el dho cubo se a de ponerel suelo a nyvelaunque sea pea ponerlo e que el maestro que tomareesta obra comyenqe a quitar hasta que sea visto el suelo como esta puestopor el maestro pedro de ybarra e por otros que su magestad tenga puestoen la orden.

3. Yten que toda la obra del dho cubo hasta el peso dl dho anden ede alli para arriba lo que se capitulare que a de subir a de ser muy bienguardado por la parte de afuera el gintrel e por de dentro lo rnysmopormanera que no aya ny entradas ny salidas syno puestos arte y razon.

4. Yten que el dho cubo del en quatro y quatro pies vaya travado conlas paredes rroqandolas las mysmas paredes y eleve sus perpiaos dequando en quando y la rripiada muy bien hecha e asentada.

5. Yten puesta la obra del dho cubo en alto del anden e retraydoslos dos pies se an de eligir sus paredes de tres pies de grueso en toda larredonda por todas partes tanbien hazia el anden dexando un paso de dospies e medio hazia el anden e dexar una puerta bazia el anden dexandoen la pared para que se entre a esta piega y suban estas paredes de losdhos tres pies catorze pies e dexar una ventana o dos y en este peso hecharun maderamyento tosco con sus quartones e tablagon labrada la tabla junta dexando una escalera de madera para subir engima deste suelo etecho lo susudho de dos pies y medio de grueso se eligeran las paredes esubiran doze pies de alto con un tejaroz e todo se a de hechar de ladrilloa la rredonda del cubo que buele con una moldura fuera de la pared unpie e quedara dentro desta altura hechado su suelo conforme al de abaxoy engima hechado su maderamyento de tejado y tejas asentadas con susboquyllas y caballetes de cal e dexar hechas una o dos ventanas comoabaxoy estas ventanas altas e baxasan de ser de ladrillo.

6. Yten se entiende que estas pieqas alta e baja an de ser enluzidas muybien e sus puertas e ventanas de enzina o roble con sus qerraduras y llaves.


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7. Y las mezclas de la cal que se a de gastar en la obra a de ser unaparte de cal e dos de arena e a de ser la cal de Cagerese tener hechas laspaladas antes que se gasten diez o doze dias.

8. El maestro questa obra tomare se entiende que la ha de hazer todaa su costa que no se le a de dar otra cosa mas de solamente los desechosen que fuere rematada e mas le an de dar libre la dehesa e baldios paramadera de andamyentos e suelos e puertas e ventanas en fin toda la queobiere menester para la dha obra e quel mysmo maestro la corte e hagae trayga a su costa ny mas ny menos que los demas materiales.

9. Yten que los dineros en que esta rematada se le an de pagar enginco pagas la primera luego como ala dado las fiangas para conprar ma -teriales e la segunda quando tuviere el suelo a nybel e la terqia quandoestuviere la obra veynte pies de alto la quarta estando puesta la obra a lamytad del altura la quynta despues que estuviere acabada e dada porbuena por el dho Pedro de Ybarra.

10. Yten se entiende que por escusar gastos a los ofigiales de libran -gas e mensageros a la corte que se quexan dellose dara la libranga en tien -po e con condigin quel comendador Ovando o otro que tenga el cargode pagar no pague syno como dho es e ante el escrivano cada vez queeste cunplida la condigion.

11. Yten questa dha obra a de ser fecha e acabada dentro de dos aosdende el dia que rresqibiere la primera paga so pena que a su costa e desus fiadores se acabe caro o barato.

12. Yten se entiende y es condigion que su magestad manda agoraquel alcaide tenga quenta con las mezclascomose mezclane comose hazela obra en absengia de Pedro de Ybarra porque sy malas mezclas se hiuie -ren y

rioconforme a las condigiones que a costa del dho alcaide se torne

a hazer la obra e que para esto tenga en su poder un traslado de las con -digiones porque el dho Fedro de Ybarra no puede estar presente synoaverla de quando en quando.

1 3 . Yten el tal maestro a de dar fiangas a contento que bara la obraconforme a las dhas condigiones e a vista de Pedro de Ybarra y contentodel seor alcaide comono exgedalas condigiones.

14. El maupuesto sea de lo mas alIgado que se pudiere ayer y el aguaque no friere menester en la fortaleza que se de al tal maestro e la demasque la traya a su costa el maestro como los demas materiales.

15. Yten el maestro en quyen fuere rrematada esta obra a de dar a

Pedro de Ybarra por las condigiones quatro ducados fechos a quatro diasdel mes de otubre de myll e quynyentos e ginquenta aos.16. Yten que el maestro que esta obra tomare a de dexar fecha una

chimenea frangesa de ladrillo en la primera piega e que se remate el caoginco o seis pies por gima del texado y el tejado a de ser fecho a quatroaguas.

17. Yten el remate es para el dia de todos los santos.1 8 . Yten que la escalera que dize que sea de madera seta sobre sus

arcos de ladrillo e los pasos de tablones de rroble e su antepecho o pasa -mano de madera.


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19. Yten que a rrededor del dho cubo en lo baxo quede fecha unabarrera de piedra e barro conforme a lo demas que esta fecha.

20 . Yten que despues que estoviere hecha la primera postura y no serres9iba de las seis9ientas e 9inquenta myll maravedis para arriba todoslos que vinyeren baxando han de dar fiangas a cada baxa para la quyebra.

Pedro de

Ybarra

2

1549,agosto, 21. ValladolidProvisin Real de Carlos V dirigida al Gobernador y Juez de Residencia

de la Villa y Partido de AlcntaraArchivo Histrico Nacional, Archivo Judicial de la Orden de Alcntara:

legajo 31.532, s. f.

Don Carlos por la gragia de Dios ... me a sido hecha relaQion por supetigion que en el my consejo de las ordenes fue presentada diziendo quela fortaleza de la dha encomyenda esta muy maltratada e con gran nesQe-sidad de ser reparada espegialmente una barrera de piedra e barro quese fizo de prestado que a comenqado a caer y denuevo se a hecho en ellaun portillo e se va desmoronando e cayendo toda que ansymysmoestacomenqado a hazer el muro de piedra e cal conforme a los otros murose una esquyna de la dha fortaleza que cae a la parte de la syerra altaesta hendida por dos partes de que se vyene muy gran peligro e para loescusar e que quedase fuerte e firme convenya fazerse un cubo o torre que

abraqase la dha esquyna de un cubo a otro e la fortificase por ende queme suplicaba mandase proveer con brevedad que se fiziesen todos losdhos rreparos porque de la dilagion se recresgeria mayor costo y dapnolo qual bisto por loo del dho ray consejo juntamente con qierta ynforma -gionpor mymandado avydagerca de la nesgesidad que ay dese hazer laslas dhas obras e rreparos e quales heran mas nesQesarios y el paresqersobrello dado por vos el dho ray governador por donde a visto que lomas nesgesario que al presente convenia hazerse es un cubo nuevo quetenga de ancho de qintrel diez e ocho pies el qual a de abragar las esquynasde la torre questa hendida por dos partes en lo alto e lo baxo porqueparesge que aunque a sydo enrrajado y rrevocado a tomado a abrir e lo

alto del dho cubo a de yr del mysmo alto de la torre que tendra ochentapies y en este alto se an de hazer dos pieqas de aposentos la dha torree cubo segund se contiene en el paresqer de los maestros que vieron ladha obra fue acordado que devia mandar dar esta my carta ... e hagaysponer en pregon e publica almoneda la obra del dho cubo para sy obierealguna persona e personas que quyera tomar a hazer a destajo e rresgibirlas posturas e baxas que en ello se fizieren e los rremateis en quyen lospusyese en mas baxo pregio con que sean maestros de las dhas obras e no


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S04 F. J. Garca Mogolln y Y. M.Snchez Lomba

de otra manera de los quales rresgiban obligaqion e fiangas bastantes devezinos de tierras de la dha orden que lo haran conforme a la traga y con -digiones que primeramente mando que se hagan e dentro del termyno con -tenydo en el rrematare bien e perfetamente syn falta ny defeto algunoa vista e paresger de Pedro de Ybarra maestro mayor de las obras delconvento de Alcantara e veedor de las obras de la dha orden.

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1559,septiembre, 15.Alcntara

Solicitud de adelanto de dinero por parte de la viuda e hijos del maestrocantero Gaspar LpezArchivo Histrico Nacional, Archivo Judicial de la Orden de Alcntara:

legajo 31.532,s. f.

Muy Poderoso Seor:Ortega Rosa en nonbre de la muger e hijos de Gaspar Lopez defunto

vezinos de la villa de Alcantara digo que el dho Gaspar Lopez tomo a hazergierta obra en la fortaleza de la encomyenda del Portezuelo ques de laorden de Alcantara e se le remato en gierta cuantia de mrs e hizo la mayorparte della en su vida e lo que queda por hazer se acabara con giento exeynt myll mrs que le den de la postrera paga y son pobres y no lo puedenacabar sy no se le pagase y sobrello por una provisyon de vuestra altezase an visto Jas dhas obras con maestros para ello nonbrados por eltenyente de governador del partido de Alcantara los quales dixeron sobrellosu paresger y conforme a lo dho a V. D. suplico mande dar su provysionpara que dando fiangas para acabar la dha obra se le acudan con losgiento e veynt myll mrs.

reformas del s. xvi en el sistema defensivo de portezuelo f.j. garcia mogolln f.m. sanchez lomba

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