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UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA DE LA SELVA ESCUELA DE POSTGRADO MAESTRÍA EN CIENCIAS EN AGROECOLOGÍA MENCIÓN GESTIÓN AMBIENTAL PROYECTO DE TESIS Título : Modelos de biomasa aérea y foliar en una plantación de bolaina blanca (Guazuma crinita C. Mart.) en Tingo María, Huánuco. Ejecutor : Bach. Ruiz Tello, Analiz Lola Asesor : Ing. Ruiz Rengifo, Ladislao Lugar de ejecución : CIPTALD – UNAS (Tingo María, Huánuco) Duración del trabajo : Mayo 2016 – Noviembre 2016

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Proyecto de tesis de biomasa aerea

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UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA DE LA SELVA

ESCUELA DE POSTGRADO

MAESTRÍA EN CIENCIAS EN AGROECOLOGÍA

MENCIÓN GESTIÓN AMBIENTAL

PROYECTO DE TESIS

Título : Modelos de biomasa aérea y foliar en una

plantación de bolaina blanca (Guazuma crinita C.

Mart.) en Tingo María, Huánuco.

Ejecutor : Bach. Ruiz Tello, Analiz Lola

Asesor : Ing. Ruiz Rengifo, Ladislao

Lugar de ejecución : CIPTALD – UNAS (Tingo María, Huánuco)

Duración del trabajo : Mayo 2016 – Noviembre 2016

Tingo María – Perú

2016

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PROYECTO DE TESIS

1. Título: Modelos de biomasa aérea y foliar en una plantación de bolaina

blanca (Guazuma crinita C. Mart.) en Tingo María, Huánuco.

2. Autor:

2.1. Nombre : Ruiz Tello, Analiz Lola

2.2. Grado Académico : Bachiller en Recursos Naturales Renovables

– Ciencias Forestales

2.3. Título Profesional : Ingeniero en Recursos Naturales

Renovables mención Forestales

3. Asesor (es):

3.1. Nombre : Ruiz Rengifo, Ladislao

3.2. Grado Académico :

3.3. Institución : Universidad Nacional Agraria de la Selva

3.4. Dirección Institucional : Av. Universitaria S/N Km. 5 – Tingo María

4. Tipo de investigación:

4.1. De acuerdo al fin que se persigue : Aplicada

4.2. De acuerdo al diseño de investigación : Descriptiva

5. Localidad e institución donde se desarrolla el proyecto:

5.1. Localidad : CIPTALD - Santa Lucia

5.2. Institución : Universidad Nacional Agraria de la Selva

Page 3: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

I. INTRODUCCIÓN

Ante el cambio climático global las plantaciones forestales de

rápido crecimiento adquieren mayor importancia como reservorios de carbono.

Por ello, el estimar confiablemente la biomasa (cantidad total de materia

orgánica presente) es vital para una determinación adecuada del potencial de

secuestro de carbono (GARZUGLIA y SAKET, 2003).

Con frecuencia, tales estimaciones involucran una importante

fuente de incertidumbre en los modelos de flujo de carbono (HOUGHTON et

al., 2000), sobre todo cuando se utilizan relaciones alométricas poco

apropiadas. La distribución de biomasa aérea de los árboles en sus diferentes

órganos está influenciada por las condiciones ambientales y de manejo

silvícola.

A pesar que la biomasa foliar sólo representa de 4% a 6% de la

biomasa total del árbol, es uno de los componentes más importantes en la

productividad de un rodal, porque es donde ocurren muchos procesos

fisiológicos fundamentales para el crecimiento, como intercepción de luz,

fotosíntesis neta, transpiración, respiración, eliminación de CO2 (MARGOLIS et

al., 1995), y es donde se genera la productividad primaria neta (GHOLZ y

CROPPER, 1991).

Page 4: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Puesto que el follaje presenta estacionalidad con los patrones

climáticos y es muy sensible al manejo silvícola, la biomasa foliar debe ser

estimada con precisión para explicar la productividad de un rodal.

Ello indica que los modelos futuros de crecimiento y rendimiento

del rodal deben incluir a este componente, porque involucrarían ecuaciones

más específicas para un determinado sitio. En consecuencia, los modelos

generados para estimar el follaje deberán ser también sensibles a los factores

del ambiente y de manejo, así como superar la inherente dificultad para medir

este componente con precisión, pues a medida que el tamaño de los árboles se

incrementa, su evaluación consume más tiempo y recursos.

Guazuma crinita C. Mart. es una especie maderable de corto

crecimiento, encontrada en forma natural en bosques primarios de la Amazonia

peruana y a orillas de los ríos en la mayor parte de la región amazónica del

Perú. Alcanza dimensiones de hasta 45 m de altura y 50 cm de Dap, debido a

la demanda por madera, es difícil encontrar árboles más grandes que 20 m de

altura y 30 cm de Dap. Su tronco es circular, sin aletones o con aletas

pequeñas y su copa es pequeña y rala, con épocas de defoliación parcial en

época seca.

La madera es una materia prima ampliamente utilizada, aun siendo

muy heterogénea y extremadamente variable. Esta variación se presenta tanto

entre árboles como dentro del árbol (LARSON, 1967). El tronco de un árbol

maduro posee un cilindro central de madera juvenil cuyas características

Page 5: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

anatómicas, físicas y mecánicas son más variables que en la madera madura

más externa.

I.1. Objetivo general

Determinar los modelos de biomasa aérea y foliar en una plantación de

bolaina blanca (Guazuma crinita C. Mart.) en Tingo María, Huánuco.

I.2. Objetivos específicos

Generar, ajustar y probar modelos de biomasa fustal de árboles de

bolaina blanca.

Generar, ajustar y probar modelos de biomasa ramal de árboles de

bolaina blanca.

Generar, ajustar y probar modelos de biomasa foliar de árboles de

bolaina blanca.

Page 6: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

II. REVISIÓN DE LITERATURA

II.1. El cambio climático

El cambio climático es un fenómeno expresado como desviación

del tiempo metereológico promedio esperado o de las condiciones climáticas

normales (temperatura y precipitación) para un tiempo y lugar dado. En la

actualidad, el cambio climático global se atribuye a la concentración en la

atmósfera de los GEI por arriba de los niveles históricos (FAO, 1996; IPCC,

2007).

Modelos climáticos desarrollados en los años 90 han demostrado

que la temperatura de la superficie global puede aumentar de 1.4 a 5.8 °C al

final del siglo (IPCC, 2001). Recientemente el IPCC (2007) informó con mayor

precisión un aumento de temperatura de 1.8 °C a 4 °C.

El CO2 es un gas de efecto invernadero más abundante y primer

agente del calentamiento global, constituye el 72% del total de los gases de

efecto invernadero de origen antropogénico, causando entre 9 a 26% del efecto

invernadero de origen antropogénico, causando entre 9 a 26% del efecto

invernadero (KIEHL y TRENBERTH, 1997). Durante los últimos 20 años, la

mayoría de la emisión de los GEI es atribuida a la quema de combustibles

Page 7: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

fósiles, mientras que el 10 al 30% se atribuye a cambios de uso de suelos y

deforestación (IPCC, 2001).

II.2. Efecto invernadero

Es un fenómeno que ha permitido el desarrollo de la vida en el

planeta, producido por ciertos gases presentes en la atmósfera, y que son los

responsables de mantener el planeta a una temperatura apta para la vida

(PNUMA, 1992).

La energía solar al planeta como radiación de onda corta y una

fracción de ella es reflejada por la superficie terrestre y la atmósfera, otra

proporción significativa atraviesa la atmósfera y calienta la superficie terrestre,

ésta absorbe cierta porción y la otra es reenviada a la atmósfera en forma de

radiación infrarroja (PNUMA, 1999).

El efecto invernadero se debe a la presencia de ciertos gases en la

atmósfera que impiden que la mayor parte de la radiación solar incidente

penetre a la superficie del planeta, cuanto mayor parte de la radiación solar

incidente penetre a la superficie del planeta, cuanto mayor es la concentración

de los GEI menor es la cantidad de radiación infrarroja que el planeta remite

libremente al espacio exterior.

De esta manera, al aumentar la concentración de GEI se

incrementa la cantidad de calor atrapado en la atmósfera, dando origen el

incremento de la temperatura superficial del planeta (BARROS, 2007).

Page 8: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

II.3. Los bosques y el cambio climático

La importancia de los bosques como sumideros de CO2 y

estrategia para reducir la concentración de GEI es incrementar la biomasa

forestal, lo cual permite almacenar el carbono en los tejidos de las plantas

(SEDJO, 1990).

Según BROWN (1997) los bosques participan potencialmente al

cambio climático global gracias a su influencia sobre el ciclo global del carbono,

dado que almacenan grandes cantidades de carbono en la biomasa y el suelo.

La biomasa vegetal ha sido definida como la cantidad total de materia orgánica,

existente por arriba y por abajo del suelo, expresada como peso anhidro por

unidad de área (FAO, 2004).

La cantidad de biomasa de un bosque es el resultado de la

diferencia entre la productividad primaria bruta que se obtiene a través de la

fotosíntesis, respiración y mortalidad. Los cambios en la acumulación de

biomasa son el resultado de actividades antropogénicas, procesos de sucesión

natural, calidad de sitio, exposición, condiciones climáticas y degradación

(GAYOSO y SCHLEGEL, 2001).

Por lo que la estimación de la biomasa se puede emplear para

comparar la estructura y atributos funcionales de los ecosistemas forestales en

un intervalo similar de condiciones climáticas (SCHOROEDER et al., 1997).

Page 9: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

La biomasa forestal es un elemento importante en investigaciones

sobre cambios que ocurren a nivel mundial. A partir de la biomasa se puede

calcular la concentración de carbono en la vegetación, la cual es, encargada de

incorporar el carbono atmosférico al ciclo biológico por medio de la fotosíntesis,

las plantas absorben el CO2 y lo transforman en carbohidratos que se

incorporan en el tejido vegetal (biomasa) en forma de follaje, ramas, fuste y

raíces (aproximadamente el 50% de biomasa es carbono), por consiguiente, es

posible hacer estimaciones sobre la cantidad de dióxido de carbono que se

emite a la atmósfera (FAO, 2007).

El cálculo de la biomasa es el primer paso para evaluar la

productividad de los ecosistemas y la contribución de los bosques en el ciclo

global del carbono (CASTAÑEDA et al., 2005).

Los principales componentes en donde los árboles almacenan la

biomasa son fuste, ramas, hojas y raíces. El IPCC (2001) menciona que el CO 2

se almacena aproximadamente 70% por encima del suelo y 30% por debajo.

PACHECO et al. (2007) encontraron que la biomasa de árboles de Pinus

greggii se encuentra fraccionada en 25, 24 y 51% en hojas, ramas y fuste,

respectivamente; LÓPEZ et al. (2011) reportan que la biomasa por árbol de

Pinus halepensis 14, 32 y 54% en hojas, ramas y fuste, respectivamente;

MÉNDEZ et al. (2011) para P. devoniana 39.8% en hojas – ramas y 61% en

fuste y en P. pseudostrobus 41.6, 58.3% en hojas – ramas y fuste,

respectivamente.

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II.4. Métodos para estimación de biomasa aérea

Para la estimación de biomasa aérea y CO2 existen métodos como

son:

II.4.1. Método tradicional

Es basado en los datos de volumen comercial (a partir de

información básica de inventarios), densidad de la madera y factor de

expansión de la biomasa (FEB). Que puede aplicarse en bosques densos,

secundarios o maduros (correspondientes a climas húmedos y semiáridos). La

biomasa se estima a través de siguiente ecuación (BROWN, 1997):

BA = VC*D*FEB

Donde:

BA : Biomasa aérea (t/ha)

VC : Volumen comercial (m3)

D : Densidad de la madera (t/m3)

FEB : Factor de expansión de la biomasa

II.4.2. Método destructivo

Consiste en seleccionar árboles en pie de diferentes categorías de

diámetro y altura, se derriban, posteriormente, separarlos en sus diferentes

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componentes (hojas, ramas y fuste), continuando con pesado de componentes,

obtención de una muestra de cada componente para determinación de

contenido de humedad, finalmente, biomasa. Este método proporciona un valor

exacto de la biomasa (BROWN et al., 1989). Adicionalmente, el método

destructivo permite formular relaciones funcionales entre biomasa y variables

de fácil medición como diámetro normal y altura total (GAYOSO et al., 2002).

II.4.3. Estimación de biomasa a través de sensores remotos

Las imágenes satelitales registran el comportamiento de la

superficie terrestre a través de diferentes regiones del espectro

electromagnético, proporcionando datos espacialmente contiguos entre si y

distribuidos a lo largo de extensas áreas geográficas (PEÑA, 2007).

Los sensores remotos proveen datos respecto al ciclo dinámico de

la biomasa, y posibilita la evaluación frecuente de cambios de cobertura

boscosa en grandes extensiones (BROWN y LUGO, 1992). Mediante el uso de

sensores remotos es posible obtener información de las propiedades del

bosque y hasta cierto nivel es posible separar bosque en regeneración de

bosques maduros (FOODY et al., 1996).

II.4.4. Modelos alométricos

Los modelos alométricos son funciones que estiman las relaciones

entre biomasa, volumen y carbono total del árbol en función de variables de

fácil medición comúnmente utilizadas: altura, diámetro a la altura del pecho

Page 12: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

(1.30 m) (ACOSTA et al., 2002); asimismo, pueden considerarse no solo

variables morfológicas, sino también fisiológicas o bioquímicas (LÓPEZ, 1995).

Para estimar la biomasa y carbono por componentes del árbol para

diferentes tipos de vegetación y la distribución de la biomasa se han empleado

relaciones entre las dimensiones del fuste y cantidad de biomasa a través de

ecuaciones alométricas (LÓPEZ et al., 2011) estas relaciones constituyen una

herramienta importante para construir modelos de crecimiento forestal

(ACOSTA et al., 2002) que han resultado útiles para predecir el incremento y

fijación de carbono.

Loa anterior es fuente de información importante para los proyectos

de servicios ambientales que cada día se hacen más frecuentes (MÉNDEZ et

al., 2002).

II.5. Fotosíntesis y fijación de carbono

De acuerdo con la primera ley de la conservación de la

termodinámica, cuando un fotón con una cierta longitud de onda golpea una

molécula de clorofila (cromóforo), que absorbe luz de su longitud de onda, la

energía del fotón excita a los electrones, a un nivel más alto de energía, la

energía del cromóforo es incrementada por la energía del fotón, el cual resulta

en un estado excitado de la molécula cromófora (ALLEN et al., 2008).

Después de la absorción de la energía, un electrón del sistema

conjugado es elevado a una órbita más alta y llevado a través de la cadena de

Page 13: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

transporte de electrones, para que actúen las clorofilas y las butadinas, quienes

constituyen los cromóforos. Las clorofilas requieren tan solo de luz roja,

mientras que las butadinas requieren luz ultravioleta que es de alta energía

para su excitación (ALLEN et al., 2008).

Posteriormente, en una serie de reacciones, la energía se convierte

en ATP y NADPH, el agua se descompone en el proceso, liberando oxígeno

como producto secundario de la reacción. El ATP y el NADPH se utilizan para

fabricar los enlaces carbono, en la etapa oscura de la fotosíntesis. En ésta, el

anhídrido carbónico de la atmósfera, es capturado y modificado por la adición

de hidrógeno para formar carbohidratos. La transformación del anhídrido

carbónico en un compuesto orgánico se conoce como fijación del carbono.

La energía para ello proviene de la primera fase de la fotosíntesis.

Los sistemas vivientes no pueden utilizar directamente la energía de la luz,

pero pueden a través de una complicada serie de reacciones, convertirla en

enlaces de carbono y esta energía puede ser luego liberada por la glicólisis y

otros procesos metabólicos (BLANQUENSHIP, 2002).

El fotosistema I, usa la clorofila en una forma denominada P700. El

Fotosistema II usa una forma de clorofila conocida como P680. Ambas formas

"activas" de la clorofila funcionan en la fotosíntesis debido a su relación con las

proteínas de la membrana de los tilacoides. El Ciclo de Calvin se desarrolla en

el estroma de los cloroplastos. El anhídrido carbónico es fijado en la molécula

ribulosa 1,5 bifosfato (RuBP). La RuBP tiene 5 carbonos en su molécula. Seis

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moléculas de anhídrido carbónico entran en el ciclo de Calvin y eventualmente,

producen una molécula de glucosa.

El primer producto estable del ciclo es el ácido 3- fosfoglicérico

(PGA), molécula de tres carbonos. Globalmente 6 moléculas de RuBP (ribulosa

bifosfato) se combinan con 6 de anhídrido carbónico y dan 12 de 3-

fosfoglicérico. La enzima que cataliza esta reacción es la RuBP carboxilasa (la

rubisco), posiblemente la proteína más abundante del mundo y se encuentra en

la superficie de las membrana de los tilacoides (HELD, 2005).

La energía del ATP y el NADPH generados por los fotosistemas, se

usan para "pegar" fosfatos (fosforilar) al 3-PGA y reducirlo a fosfogliceraldehido

o PGAL, también de tres carbonos. Del total de 12 moléculas transformadas,

dos moléculas de 3-PGAL salen del ciclo para convertirse en glucosa. Las

moléculas restantes de PGAL son convertidas por medio del ATP en 6

moléculas de RuBP (5 carbonos), que recomienzan el ciclo (WILKINSON,

2006).

II.6. Fijación de carbono en los bosques

Los bosques, en particular, juegan un papel de gran importancia en

el ciclo global del carbono, puesto que permanentemente intercambian CO2 con

la atmósfera a través de la fotosíntesis y respiración. Además, se transforman

en fuentes de emisión de CO2, cuando son perturbados por causas naturales o

antrópicas.

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Los bosques, almacenan grandes cantidades de carbono en su

biomasa, tanto en los componentes aéreos (tronco, ramas, corteza, hojas),

como subterráneos (raíces finas y raíces gruesas). Igualmente, acumula

carbono en suelo mediante su aporte orgánico a través de la necromasa. Por

tanto son considerados como sumideros, puesto que hacen transferencia neta

de CO2, del aire a la vegetación y al suelo, donde son almacenados (HUGES,

et al., 1999).

La captura de carbono se realiza únicamente durante el estado de

desarrollo de los árboles. Los árboles absorben CO2 atmosférico, junto con

otros elementos en el suelo y en el aire, para convertirlos en biomasa

expresada principalmente en forma de madera. La cantidad de CO2 que un

árbol captura durante un año, consiste sólo en el pequeño incremento anual de

la biomasa en el árbol, multiplicado por la biomasa del árbol que contiene

carbono.

Las plantaciones forestales, por la gran cantidad de biomasa que

producen por unidad de área, fijan anualmente una alta cantidad de CO2 que

permanece acumulado en las plantaciones por largos periodos de tiempo. Para

cuantificar la cantidad de carbono que se logra eliminar de la atmósfera

mediante el establecimiento de plantaciones, es fundamental contar con

herramientas adecuadas, como los modelos para la cuantificación de biomasa,

los cuales permiten estimar con relativa precisión, la biomasa de cada

componente del árbol. Otras herramientas son el muestreo y análisis en

laboratorio para determinar la fracción de carbono para la especie. El carbono

Page 16: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

en la biosfera terrestre está distribuido entre la atmósfera, la biomasa y el

suelo. El 80% del carbono en las plantas, se encuentra en los árboles y los

ecosistemas forestales contienen el 40% del carbono terrestre (MELO et al.,

2009).

Tanto en bosques como en plantaciones forestales, el carbono se

acumula en cuatro fuentes principales: la biomasa arriba del suelo que

corresponde a tallos leñosos o fustes de árboles y arbustos, junto con la

biomasa de la vegetación herbácea.

Biomasa por debajo del suelo, que corresponde al sistema radical o

rizósfera, constituida principalmente por las raíces finas y gruesas, tanto de

árboles como de arbustos.

La hojarasca y otra materia vegetal muerta depositada sobre el

suelo, que constituye la necromasa del sistema y finalmente el carbono

contenido en el suelo, como resultado de la humificación de la materia orgánica

(ROY et al., 2001).

A pesar de que existen varios tipos de métodos para la estimación

de la biomasa tanto aérea como subterránea, los métodos directos son los más

ampliamente utilizados, por su precisión y confiabilidad. Estos métodos

proporcionan un valor exacto de la biomasa ya que consiste en cosechar los

árboles, para calcular su peso seco o biomasa. Adicionalmente, el método

permite formular relaciones funcionales entre la biomasa y las variables del

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rodal de fácil medición, como el diámetro a la altura del pecho, altura comercial,

altura total y otras.

Considerando la dificultad de la medición de los flujos gaseosos

que son parte de la dinámica de carbono entre la atmósfera y los ecosistemas

forestales, se ha determinado el carbono que se almacena en forma sólida en

los bosques. En este sentido, la cantidad de carbono total almacenado, se

determina a través de la medición por componentes (RAVINDRANTH y

OSWALD, 2008).

II.7. Fijación de carbono y área foliar

Independientemente del patrón de asignación de carbono fijado en

la fotosíntesis a los diferentes órganos (hojas, tallos y raíces), el crecimiento y

el funcionamiento de la planta depende, sobretodo de la adquisición de

carbono.

Tanto la síntesis como la ganancia de carbono (a nivel de toda la

planta), dependen de una serie de propiedades del individuo como un todo,

entre ellas la disposición de las hojas, el área foliar total, la dinámica foliar y la

forma en que se encuentra repartida la biomasa en la planta. Las tasas

fotosintéticas dependen también de la relación que exista entre las propiedades

de la hoja, las propiedades de la planta y el entorno (FAGERIA et al., 2006).

En ecosistemas naturales, la expansión foliar está condicionada

por factores ambientales como luz, temperatura y agua, pero en sistemas de

Page 18: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

producción, es optimizada por la fertilización y la inclusión de reguladores de

crecimiento. Éstos, al estimular el aumento de clorofilas, incrementan la tasa

fotosintética y como consecuencia de un balance de carbono favorable, permite

una mayor expansión foliar.

La determinación del área foliar de las plantas tiene gran

importancia en los estudios relacionados con su crecimiento y desarrollo, dado

que en las hojas, se sintetizan los carbohidratos que van a repartirse en los

diferentes órganos. El área foliar permite efectuar la estimación de la cobertura

foliar y el índice de área foliar (IAF), parámetros o indicadores básicos para

estudios ecofisiológicos y de bioproductividad de las plantas, bajo condiciones

de campo para cada especie (PESSARAKLI, 2002).

Las hojas de los árboles varían enormemente tanto en estructura

como en composición, generando diferencias funcionales que permiten la

coexistencia entre las diferentes especies.

La gran diversidad en las características estructurales de las hojas

son generadas por patrones filogenéticos o por estrategias de adaptación a su

entorno ambiental, de tal forma, que muchas características de las hojas

relacionadas con la economía del carbono, están estrechamente coordinadas

dentro y entre los entornos ambientales, por ejemplo el área foliar especifica

(AFE), está positivamente relacionada con el período de vida de la hoja y

negativamente relacionada con las tasas fotosintéticas y de asimilación de

nitrógeno por unidad de masa foliar.

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Relaciones similares son frecuentemente reportadas entre

características clave y la resistencia hidráulica de las hojas (Ri), que es la

fuerza conductora del potencial de agua requerido para una tasa de flujo dado,

desde el peciolo hasta el sitio de evaporación, lo que es considerado como un

determinante de gran importancia para las funciones de la planta. Ri

correlaciona negativamente con la densidad estomática y el índice estomático,

al igual que con las máximas tasas de intercambio gaseoso. También en forma

negativa con el grosor de la hoja pero independiente del AFE.

Igualmente, la venación foliar es una característica de gran

importancia, puesto que gran parte de la Ri, sucede dentro del xilema foliar. La

venación foliar correlaciona positivamente con el grosor del mesófilo de

empalizada y esponjoso (SACK y FROLE 2006).

LLORENS et al. (2002) aseguran que el estrés por sequía genera

cambios morfológicos en las hojas de las plantas, relacionadas con el tamaño

de la hoja y la fluctuación asimétrica foliar (FA), lo cual hace que se convierta

en una medida integrativa del estrés durante el desarrollo de la hoja y el

intercambio gaseoso foliar.

La FA foliar relativa, es la diferencia absoluta ente las áreas o

ancho de la hoja tanto del lado izquierdo como del derecho. Investigaciones

sobre este aspecto, han demostrado que a medida que se incrementa la

sequía, se incrementa la FA foliar relativa, de tal forma que las variaciones

entre la disponibilidad de agua y variación de la temperaturas afectan la FA, lo

Page 20: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

que lo convierte un indicador de gran sensibilidad al estrés fisiológico. En las

plantas, factores de estrés ambiental que han sido asociados con el desarrollo

de la asimetría foliar incluyen elevadas altitudes, contaminación, radiación UV,

competencia, herbivoría, ataque de patógenos, altas concentraciones de boro,

baja disponibilidad de luz y presencia de campos electromagnéticos. El efecto

del calentamiento y la sequía sobre el desarrollo foliar, ha sido poco estudiados

en contraste con la gran cantidad de trabajos relacionados con el efecto de los

cambios de temperatura y la disponibilidad de agua en el intercambio gaseoso

foliar.

También, se han evaluado el efecto de sequías prolongadas, como

las generadas por el fenómeno del niño, sobre individuos juveniles de especies

de bosques tropicales estacionales. CAO (2000) demostró que en la sequía la

mayoría de las especies evaluadas muestran una fuerte reducción en la

conductancia estomática, frente a una corta exposición al sol, igualmente, bajas

tasa de fotosíntesis neta en comparación con los períodos húmedos.

El cambio climático puede afectar la productividad de los árboles,

principalmente por afectación de la morfología (tamaño y características de la

superficie) y función (capacidad de intercambio gaseoso) de las hojas,

principalmente por el incremento en la concentración del CO2 y los incrementos

de la temperatura. La estructura foliar y la función estomatal afectan las

relaciones del agua y el carbono en toda la planta, al controlar el flujo de CO2

entrante y el flujo de vapor de agua saliente del interior de la hoja (CAEM,

2014).

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II.8. Bolaina blanca (Guazuma crinita C. Mart.)

La bolaina blanca presenta una densidad básica media, presenta

un buen comportamiento al secado y es una madera estable. La resistencia

mecánica de esta especie se clasifica como mediana. Todas las propiedades

mecánicas se clasifican como medianas, lo que hace que Guazuma crinita sea

una madera con aptitud para carpintería y muebles.

II.8.1. Taxonomía de la especie

Según CRONQUIST (1981) la clasificación taxonómica de la

especie bolaina blanca se divide de la siguiente manera:

Reino : Plantae (Haeckel, 1866)

División : Magnoliophyta (Cronquist, Takht. & Zimmerm., 1966)

Clase : Magnoliopsida (Cronquist, Takht. & Zimmerm., 1966)

Subclase : Dilleniidae (Takht., 1966)

Orden : Malvales (Lindl., 1833)

Familia : Sterculiaceae (Bartling, 1830)

Género : Guazuma

Especie : Guazuma crinita (C. Mart.)

Nombre común: Bolaina blanca

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II.8.2. Procedencia

Se encuentra distribuida en la amazonia peruana y brasilera, en

bosques bajos inundables y no inundables (riveras de ríos y quebradas

respectivamente). En el Perú se encuentra en las regiones de Amazonas,

Huánuco, Junín, Loreto, Madre de Dios, Pasco, San Martín y Ucayali.

Habita dentro de las zonas ecológicas de bosque húmedo pre

montano tropical (bh-PT), bosque seco tropical (bs-T) y bosque muy húmedo

sub tropical (bmh-ST). Se ubica en altitudes de hasta 1,000 msnm, en zonas

planas y onduladas con pendientes suaves. Se la encuentra en purmas y

bosques secundarios, pero también formando rodales puros o en manchales a

las orillas de los ríos zonas inundables (CITEMADERA, 2008).

II.8.3. Descripción del árbol en pie

Árbol monopólico de especie codominante y abundante, con copa

plana o aparasolada, abierta. Su fuste es recto y cilíndrico, con ramificación

monopodial. Altura total de 20 a 25 m, altura comercial de 25 m, diámetro

normal de 50 cm, generalmente sin raíces tablares o estas muy pequeñas,

extendidas y ramificadas.

Corteza externa lisa y luego agrietada afirmada superficialmente,

de color grisáceo pálida o casi negruzca. Corteza interna laminar, se puede

desprender en grandes tiras, de color crema y oxida a marrón oscuro, exuda

mucílago incoloro y escaso (CITEMADERA, 2008).

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II.8.4. Descripción de la madera

La madera de Guazuma crinita presenta las siguientes

características (CITEMADERA, 2008):

Color: Blanco

Brillo: Medio.

Grano: Recto.

Textura: Media y homogénea.

Veteado: En corte radial la especie presenta reflejos

plateados en bandas estratificadas y desordenadas. En corte

tangencial manifiesta arcos superpuestos poco pronunciados,

no tan claros.

Olor: Ausente o no distintivo.

II.8.5. Propiedades físicas

La madera de Guazuma crinita presenta las siguientes propiedades

físicas (CITEMADERA, 2008):

Densidad Básica : 0.41 g/cm³

Contracción Volumétrica : 10.75%

Relación T/R : 1.60

Contracción Tangencial : 5.50%

Page 24: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Contracción Radial : 3.50%

II.8.6. Propiedades mecánicas

La madera de Guazuma crinita presenta las siguientes propiedades

mecánicas (CITEMADERA, 2008):

Módulo de Elasticidad en flexión : 97.86 tn/cm²

Módulo de Ruptura en flexión : 507.00 kg/cm²

Comprensión Paralela : 270.60 kg/cm²

Comprensión Perpendicular : 50.61 kg/cm²

Corte paralelo a las Fibras : 50.59 kg/cm²

Dureza de lados : 303.43 kg/cm²

Tenacidad : 0.98 kg-m

II.8.7. Características de la troza

La madera de Guazuma crinita presenta las siguientes

características de troza (CITEMADERA, 2008):

Diámetro: Promedio de 21 pulgadas.

Forma: Recta y ahusada.

Defectos: No presenta defectos característicos.

Page 25: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Conservación: Presenta una resistencia moderada al ataque

de hongos e insectos por lo cual es necesaria una rápida

evacuación del bosque después del tumbado.

II.8.8. Aserrío y secado

Es una madera de fácil aserrío. Se comporta bien al cepillado,

mucho mejor cuando se reduce el ángulo de ataque en los tres planos de corte.

Tiene un buen comportamiento al lijado, taladrado y moldurado. La

trabajabilidad es moderada. Es una madera estable y de buen comportamiento

al secado (CITEMADERA, 2008).

II.8.9. Durabilidad natural y usos

La madera de Guazuma crinita C. Mart. presenta las siguientes

características de durabilidad y usos (CITEMADERA, 2008):

Durabilidad natural: Es moderadamente resistente al ataque de

hongos y de insectos.

Preservación: Es una madera moderadamente difícil de tratar.

Usos: Como madera redonda para la construcción de viviendas,

revestimiento de viviendas y en cielo raso, se asierra para construcción de

interiores. Carpintería en general: Cajonería, laminado, juguetería, palos de

fósforo, paletas de consultorios médicos, palitos de helados.

Page 26: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Pulpa para papel: La corteza se usa para ataduras diversas.

II.8.10. Plantaciones

Se ha iniciado recientemente el cultivo de bolaina en plantaciones a

gran escala en las regiones de procedencia de esta especie.

El cultivo en plantación tiene varias ventajas, siendo una especie

de rápido crecimiento es exigente en suelos planos aluviales, algunas veces

inundables, lo que hace tener en cuenta algunas restricciones para su manejo

en aéreas de colinas drenadas (ARÓSTEGUI, 1982).

II.8.11. Productividad y rentabilidad

En función de las condiciones de establecimiento se puede

apreciar grandes diferencias en el crecimiento. Estas diferencias se basan en el

régimen de humedad, la fertilidad y la textura del suelo, y el antecedente de las

parcelas (pastizal, bosque secundario maduro, bosque descremado).

En las parcelas establecidas en la zona aluvial de los alrededores

de Pucallpa, por ejemplo, se observan crecimientos muy aceptables, pudiendo

llegar en los mejores casos a los 30 m3 ha-1 año-1.

Con tasas de crecimiento promedio entre 25 a 35 m3 ha-1 año-1, a

un distanciamiento de 3 m x 3 m en suelos adecuados, se calcula una rotación

comercial entre 7 a 9 años (ARÓSTEGUI, 1982).

Page 27: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

II.9. Antecedentes de estudios

En México, NÁJERA (1999) ajustó ecuaciones para predecir la

biomasa aérea por compartimento, el volumen fustal, el crecimiento e

incremento en biomasa aérea y captura de carbono en diez especies. Los

resultados mostraron al nivel espacial que la biomasa aérea en pie fue de

51.45 Mg ha-1 distribuida en follaje (4%), ramas (61%) y fustes (35%). Los

volúmenes fustales alcanzaron 20.66 m3 ha-1.

Las tasas de crecimiento se ubican dentro de 2.25 kg año -1 y una

producción anual de biomasa aérea de 4.11 Mg ha-1 año-1 para las diez

especies. Este reporte enfatiza la necesidad de cuantificar la biomasa que se

incorpora al suelo y las raíces como un complemento en los estudios de

almacenamiento y captura de bióxido de carbono por la vegetación del Matorral

Espinoso Tamaulipeco del nordeste de México.

En Cuba, BENÍTEZ (2006) obtuvo un modelo matemático partiendo

de una muestra de 194 árboles de Casuarina equisetifolia Forst. que permite

determinar el peso de la biomasa total aérea de los árboles en pie, utilizándose

151 valores para el análisis de regresión y 43 mediciones, distribuidas en todo

el rango diamétrico, a fin de realizar la validación de la ecuación seleccionada.

Los datos fueron obtenidos de 30 parcelas temporales de muestreo

de 500 m2 ubicadas en el área mediante un muestreo aleatorio simple. El

procesamiento de la información se realizó por medios computarizados con el

Page 28: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

paquete estadístico SPSS. La ecuación seleccionada estima los valores reales

con gran precisión: Ln PT = –3,28992 + 2,07569 × ln dtoc + 0,82816 × ln h

En Argentina, FERRERE et al. (2008) ajustaron funciones de

biomasa de árboles individuales y determinar la biomasa en diferentes

compartimientos de la planta y el sotobosque. Se identificaron rodales de

Eucalyptus viminalis Labill. cuyas edades oscilaron entre 4 y 14 años. Se

apearon 21 árboles con diámetros entre 9.2 y 32.5 cm. Se desarrollaron

regresiones simples y múltiples y se estimó el volumen, la biomasa en ramas,

hojas y fuste.

Las ecuaciones de volumen de mejor comportamiento son basadas

en modelos lineales en su forma normal, y el modelo más adecuado fue el que

incorporó al d2 (R2 = 0.92). Para la estimación de la biomasa en hojas, ramas,

copa y fuste se recomienda los modelos ln-ln que consideran el d y h o solo el

d.

El componente de la biomasa en hojas presentó una estimación

más débil. La distribución de la biomasa en los individuos sigue el patrón de

desarrollo que se encuentra en la bibliografía. La proporción de la biomasa en

la copa disminuye con la edad, contrariamente a lo sucedido con el fuste.

En Costa Rica, FONSECA et al. (2009) construyeron modelos para

estimar la biomasa del árbol en plantaciones de Hieronyma alchorneoides,

Vochysia guatemalensis y para un grupo de 35 especies. En cada plantación

se extrajo un árbol de diámetro promedio a la altura del pecho (d) y en bosque

Page 29: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

secundario un árbol de d promedio de la especie de mayor índice de valor de

importancia por clase diamétrica. Se utilizó un muestreo destructivo, separando

cada componente del árbol y tomando una muestra de campo para determinar

la materia seca.

Todos los modelos seleccionados tuvieron un R2aj superior al

82.6%. Las especies arbóreas de bosque secundario mostraron R2aj inferiores.

El fuste, raíz y biomasa total del árbol mostraron R2aj > 91.3%, y las hojas y

ramas, entre 82.6 y 94.1%. El factor de expansión de biomasa en bosque

secundario fue de 1.44 y en plantaciones de 1.56. Se estimó que la relación de

biomasa radical respecto a biomasa aérea total y biomasa del fuste fue 0.25 y

0.37, respectivamente, en bosques secundarios; 0.26 y 0.39 en V.

guatemalensis, y 0.3 y 0.52 en H. alchorneoides.

En México, RODRÍGUEZ et al. (2012) estimaron la biomasa de

acículas en ramas individuales y árbol completo, y ajustar modelos de partición

de biomasa aérea en árboles plantados de Pinus patula Schl. et Cham. La

biomasa de acículas por rama se estimó con un modelo lineal, que empleó

área basal de rama viva, altura de rama y el seccionamiento de copa como

variables independientes. La biomasa de los componentes aéreos se estimó

con coeficientes de determinación de 0.86; 0.92 y 0.88; para madera con

corteza, ramas y acículas, respectivamente.

Para madera con corteza se utilizó el diámetro normal (DN) y altura

de árbol (AT) en un modelo lineal; la biomasa de ramas y follaje con

Page 30: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

ecuaciones no lineales que se basaron en el diámetro de copa viva (DCV) y

área de copa para ramas; y DCV y AT para la biomasa de follaje. La biomasa

total aérea por árbol se estimó con un R2 = 0.87; utilizando DN y AT. La

biomasa a una edad de 14 años se distribuyó en 92.9%; 4.7% y 2.4% para

madera, ramas y follaje, respectivamente.

Page 31: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

III. MATERIALES Y MÉTODOS

III.1. Lugar de ejecución

La investigación se realizará en el Centro de Investigación y

Producción Tulumayo Anexo la Divisoria – Puerto Súngaro (CIPTALD), área

perteneciente a la Universidad Nacional Agraria de la Selva, que se encuentra

ubicado a la margen derecha del río Huallaga a 26 km de la carretera Tingo

María hacia Aucayacu.

La ubicación ecológica de acuerdo a la clasificación de zonas de

vida o formaciones vegetales del mundo y el diagrama bioclimático de

HOLDRIGE (1987), la zona de estudio se encuentra dentro de la siguiente zona

ecológica: bosque muy húmedo – Premontano Tropical (bmh – PT).

Políticamente la plantación de Guazuma crinita C. Mart., se

encuentra en la región Huánuco, provincia Leoncio Prado, distrito José Crespo

y Castillo y localidad Santa Lucia, referentes a las coordenadas 385517 m Este

y 8991394 m Norte.

El área total del terreno del CIPTALD se extiende en dos tipos de

topografía: planas y semiplana, en dichas áreas ocupan cultivo de cacao,

plátano, frutal, bambú, plantaciones forestales, aguajales.

Page 32: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

III.2. Materiales

III.2.1. Material biológico

Árboles de bolaina blanca.

III.2.2. Materiales y herramientas

Costales

Cinta métrica

Bolsas plásticas

Wincha de 50 m

Wincha de 05 m

Formato para la evaluación

III.2.3. Equipos

Vernier

Balanza de precisión

Brújula

GPS

Estufa

Motosierra

III.3. Metodología

Page 33: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

III.3.1. Tipo y nivel de investigación

El diseño empleado para la investigación será de carácter no

experimental, de corte transversal, de alcance descriptivo correlacional y a nivel

probabilístico.

III.3.2. Diseño de investigación

III.3.2.1. Población

La población estará compuesta por todos los árboles de bolaina

blanca (Guazuma crinita C. Mart.) existente en la plantación de una hectárea

perteneciente al Centro de Investigación y Producción Tulumayo Anexo la

Divisoria – Puerto Súngaro (CIPTALD) de la Universidad Nacional Agraria de la

Selva, políticamente localizado en el distrito José Crespo y Castillo, provincia

Leoncio Prado y región Huánuco.

III.3.2.2. Muestra

La cantidad de árboles mínima será tomada de la metodología de

SCHLEGEL et al. (2000) quienes indican que para el ajuste de los modelos de

biomasa forestal, el número debe estar comprendida entre 25 a 30 árboles en

rodales con 1 especie, y no se considerará árboles ubicados en los bordes de

la plantación por considerar el efecto de borde. En caso de la investigación se

utilizará 25 árboles de bolaina blanca.

III.3.2.3. Unidad muestral

Page 34: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

La unidad experimental estará compuesta por cada árbol de

bolaina blanca talado y extraído de la plantación forestal.

III.4. Variables en estudio

Altura total, se evaluará desde la base del árbol hasta la parte

apical de la misma, la unidad de medida utilizada será en metros.

Diámetro a la altura del pecho (Dap), registrado a 1.30 m sobre el

suelo y la unidad de medida utilizada será en metros

Altura comercial, se realizará la medición desde los 30 cm del

suelo hasta la inserción de las primeras ramas vivas ubicadas en la base de la

copa, l unidad de medida será en metros.

Diámetro de copa, se registrará cuando el árbol este caído, para

obtener esta dimensión, se realizará cuando el árbol esté talado y se colocará

la Wincha en forma transversal hacia el fuste, la unidad de medida será en

metros

Modelo del fuste, se realizará mediante el método de secciones

absolutas (KRAMER y AKCA, 1987), las cuales serán consideradas mediante

las mediciones diametrales a cada metro desde los 0.30 cm del suelo (Figura

1).

Page 35: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Figura 1. Método de secciones absolutas (KRAMER y AKA, 1987).

Biomasa, esta variable se registrará del fuste de la madera que

será cortada en cada metro de longitud, iniciada a 30 cm sobre el suelo hasta

la parte terminal del fuste; en caso de las ramas se realizarán corte de las

mismas, mientras que las hojas serán pesadas en el mismo campo. Todas las

partes del árbol se escogerán muestras para ser llevadas al laboratorio.

III.5. Actividades a realizar

III.5.1. Fase de campo

III.5.1.1. Elección de la parcela de investigación

En las parcelas de investigación se establecerán 2 conglomerados

conformados por 2 parcelas cada uno.

La localización de cada uno de los conglomerados que se

establecerán se determinará eligiendo 2 puntos al azar, cuidando que esté

Page 36: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

incluido dentro de la parcela y que éstos no presenten efectos de borde, claros

grandes o accidentes topográficos significativos.

Cada parcela se delimitará usando brújula y wincha de distancia,

demarcando con una vara obtenida en terrenos los vértices y el centro

(SCHLEGEL et al., 2000).

III.5.1.2. Forma y tamaño de las parcelas

Para el caso de plantaciones, se delimitarán conglomerados

conformados por 2 parcelas circulares de 250 m2 (10 x 25 m), separadas por

una distancia de 60 m (SCHLEGEL et al., 2000).

III.5.1.3. Información registrada

A nivel de árbol se medirán todos aquellos que presenten un Dap ≥

5 cm. Los árboles se medirán primero por el lado izquierdo de la parcela desde

arriba hacia abajo, y luego el lado derecho de abajo hacia arriba (SCHLEGEL

et al., 2000).

III.5.1.4. Medición de los árboles muestra

Se realizarán 2 tipos de mediciones, las primeras con el árbol en

pie, y las segundas una vez apeadas (número de árbol, Dap, diámetro de

copa).

Page 37: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Para el apeo del árbol, el corte se realizará lo más cerca al suelo

posible. Para el desrame y trozado, los árboles se dividen en sus componentes,

fuste hasta un diámetro límite dependiente del tipo de especie, ramas gruesas

y ramas finas abajo 1 cm con hojas.

Después del apeado del árbol se medirán algunas variables tales

como altura total, altura de comienzo de copa, diámetro y altura de tocón,

diámetro con corteza cada 2 m a partir del tocón, es decir a los 0.3, 1.3, 2, 3, 4,

etc., variando levemente la medición en el caso de encontrar un muñón de

rama. Se registrará además el espesor de corteza a lo largo del fuste principal,

tomando la medición en el mismo lugar en que se realizan las mediciones de

diámetros.

Se pesarán la biomasa de ramas y hojas por separado, para esto:

se separarán ramas finas de gruesas, el de 1 cm a más. Las ramas finas se

contabilizan como hojas (≤ 1 cm), también se medirán las ramas gruesas, si

fuese necesario deben trozarse para facilitar su pesado.

Se obtendrán 3 muestras de cada componente (3 muestras de

ramas, 3 muestras de hojas y 3 muestras de ramillas más hojas) y se

determinará su peso húmedo. Estas submuestras se llevan a laboratorio para

ser analizadas y secadas hasta un peso constante a 105 °C de temperatura.

Para cada submuestra se calcula una razón de peso seco/peso húmedo

(Ps/PH).

Page 38: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Se cortará el fuste comercial en secciones y se pesa,

considerándose que cada sección no debe pesar más allá de 100 kg. Se

sacarán 4 submuestras (rodelas) de diferentes partes del fuste y se secarán

hasta un peso constante a temperatura 105 °C y se calculará una razón

promedio de Ps/Ph para la biomasa del fuste.

Para determinar la densidad de la madera del fuste se utilizarán las

4 o más muestras de madera y corteza por árbol y serán analizadas en el

laboratorio, donde cada muestras se saturará en agua y el volumen se

calculará a través del método de desplazamiento de agua (SCHLEGEL et al.,

2000).

III.5.2. Fase de gabinete

Se multiplicará el peso húmedo de cada componente por su razón

de Ps/Ph correspondiente para obtener una estimación del peso seco total del

componente. Se sumarán los pesos de todos los componentes del árbol lo que

dará el peso seco del árbol (kg). Una vez, determinado esto, se desarrollará

una función de regresión de biomasa utilizando el software SPSS v.21

(SCHLEGEL et al., 2000).

Page 39: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

IV. PLAN DE EJECUCIÓN

Cuadro 1. Actividades consideradas en el proyecto de tesis.

Actividades a realizar Ene Feb Mar Abr May Jun

Coordinaciones sobre la tala X          

Tala de árboles X        

Registro de datos en campo X        

Evaluaciones en laboratorio X X    

Redacción del informe          X X

Page 40: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

V. PRESUPUESTO

Cuadro 2. Presupuesto para la investigación.

Rubros UnidadCantida

d

Costo unit (S/.)

Costo total

Personal obrero eventual       817.5

Muestreo de suelos Jornal 0.5 35 17.5

Evaluación dasométrica Jornal 8 50 400

Tala de árboles Jornal 2 50 100

Preparación de muestras Jornal 3 50 150

Evaluación de la biomasa Jornal 3 50 150

Accesorios y/o materiales       328

Wincha de 50 metros Alquiler 1 10 10

Wincha de 05 metros Unidad 1 17 17

Vernier Unidad 1 35 35

Pintura Galón 0.25 64 16

GPS Alquiler 1 10 10

Tubo muestreador Alquiler 1 10 10

Equipos de laboratorioGenera

l1 200 200

Cámara fotográfica Alquiler 3 10 30

Herramientas       20

Page 41: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

Machete Unidad 1 10 10

Lima triangular Unidad 1 10 10

Servicios de internet       275

Internet Mes 1 35 35

Pasajes Unidad 30 8 240

Servicio de impresiones y empaste

346

Impresión del informe (borrador) Unidad 7 13 91

Artículo científico (borrador) Unidad 1 3.5 3.5

Impresión del informe Unidad 7 16 112

Impresión de artículo científico Unidad 3 4.5 13.5

Empastado del informe Unidad 7 18 126

Servicios de análisis       120

Datos meteorológicos Unidad 1 60 60

Análisis de suelos Unidad 1 60 60

Combustible       56

Gasolina Galón 4 14 56

Imprevistos       196.25

Imprevistos (10 %)Genera

l1 413.3 196.25

Costo total 2,158.75

Page 42: Py Modelos de Biomasa Aérea y Foliar - Maestría

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