proletarios de todos los paises y pueblos ...biblioteca.ccoo.cat/intranet-tmpl/prog/en/local...prez...

20
1 PROLETARIOS DE TODOS LOS PAISES Y PUEBLOS OPRIMIDOS IUNAMONOSI .443ERVIR AL PUEBLO PERIODICO DEL MOVIMIENTO COMUNISTA Ov> i N.° 156 9 de enero de 1981 25 Ptas CRISIS DE L UCD ¿CRISIS DE LIA REFORMA? ENTREVISTA CON EUGENIO DEL RIO, SECRETARIO GENERAL DEL MOVIMIENTO COMUNISTA

Upload: others

Post on 27-Jan-2021

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 1

    PROLETARIOS DE TODOS LOS PAISES Y PUEBLOS OPRIMIDOS IUNAMONOSI

    .443ERVIRAL PUEBLO

    PERIODICO DEL MOVIMIENTO COMUNISTA

    Ov>

    iN.° 156 9 de enero de 1981 25 PtasCRISIS DE L UCD¿CRISIS DE LIAREFORMA?

    ENTREVISTA CONEUGENIO DEL RIO,

    SECRETARIO GENERALDEL MOVIMIENTO COMUNISTA

  • Y_

    SIRENASCada viejo cuento manno contaba

    con su sirena, hija de algun rey de lasprofundidades aceenicas. para ameni-zar el corazón del previa° de turna.Hay ciudades, corno Copenbague, queIncluso han hecho de la figura de la s -mna todo un ~bolo.

    La actual capital del alada lambeneste cerca de poder considerar la sirenacomo su mejor sirnbolo. Sólo que estasirena no esta poéticamente sentadaen ninguna orilla marina, sino férrea-mente situada en el techo de mil ve-/Mulos. Sonando. Circunstancialmen-te pueden ser bomberos, o ambulan-cias. La inmensa mayorie, sin embar-go, son sirenas policiales, a La america-na, pitando a tope.

    Cada vez que hay oil atasco, cadavez gue la dotación correspondienrequiere ir al bar a solazarse con su cañade cerveza, cada ve, incluso que. sen-cillamente, se aburre, hace sonar la'ene. Ya man las cuatro de /a tarde olas tres de la maBana. en Madridsiempre suena alguna sire..

    Debo reconocer que a ml, personal-mente, esas sirenas me Pa recen conso

    -ladoras. Cuando lm oigo, doy en pen-sar que hay por lo menos algunospolleras que en ese preciso instante noessen pegando a nadie ri FerrnIn IbaPrez

    Emano y dibujo. Egul. LAC

    Redricoe. Adnenatrao. e mula-clanes Montaban 0-4' Medrel- 14

    Telefonee Reclamen 231600070 Admi-nistre.. o smcnpcomas 232 2005

    Sumnpu. anual Tarda norme 600leas Larda de apoyo 1 COI Enuesenombre chnmoon y forma de pago a SPSUSCRIPCIONES Montaban. 7-4 ° Madrvi 14

    Imprime A. G. GRUPO. S.A.

    °trocaremos pus P.aen relataron cm PAC

    EUSKADI Sede ~anal Sao Marcar° Landa Tel 42 1608 y 42 83 11 San

    Sebastián.

    CATALUNVA Sede Nauonek Gran Ma,534 2 ° I • Tel 253 14 00 y253 14 09 Barcelona

    PAIS VALENCIA Sede Nacional Bona..16 bao Té. 321 83 le y 321 83 62vserrnaaRUS Raerlas. 1 D. tuya Tel 22 74 50Castro de Mallorca

    GALICIA Sede Nacional Norreo. 1°Eral,. Vxar,riaaesc D. I • A andaTel 56 95 19 Santugo.

    ARAGON. Sede Regio./ Coso. 57-2'C LB 39 95 13 Zaregoza_

    Asna/16. Sede Regar. APedado deCiemos 352. TeL 22 26 18 Oviedo.

    CASllUA LEON. Sede Regaue Apa,lado de Coneos /68 ValladolidANDALUCLA Sede Nacional- Sopes70 22 Tel 2l 12 22. Sevilla.

    0 10347 Caballares, 37 3' Té_ 22 07 03t jugmajo

    REG1O8I MURGANA Paseo de Corva,7.1' A Murcia

    EXTREMADURA Macerada de Mea..29 Nevalmorel de le Meta.

    ALBACETE. Cae de Le Lene 45-1°.

    EUROPA 7, Av de b Fóre/ Naire 67.030Streabourg IMannaal

    MADRID Sede Provreut Atocha 32-2'mida Tel. 228 60 56

    SEDE CENTRAL Montaban. 7-4', Re232 20 04 y 232 2003 Medrid-44.

    D L M 321 139 1977

    Pág. 2

    TerrorismoInstitu-cional

    Queridos Camaradas.Como seguramente recorda-

    réis, el 25 de junio de 1979 caíaherido de muerte por un dispa-ro de la policía el jóvenValentin González, militantede la CNT y trabajador del mer-cado de Abastos de Valencia.Como respuesta ante ese cri-men. el MCPV de Vinarós con-vocó a todas las fuerzaspolíticas y sindicales —PSOE,PCPV, CNT, PSAN, PC

    UGT, CC.00.— para lapublicación, en el semanariolocal de Vinarós, de un escritodenunciando a las FOP, exi-giendo la investigación de loshechos y pidiendo la dimisióndel gobernador civil de Valen-cia.

    El 7 de agosto de ese mismoaño, Neus Olives, firmante ennombre del MCPV, y los sietecompañeros restantes fueronllamados a declarar y celes ins-truyó auto de procesamientoSe les acusaba de propagandailegal. En noviembre eran re-queridos nuevamente, esta vezpara comunicarles que queda-ban en libertad provisional y laobligación de pagar una fianzade quince mil pesetas. El PSOEy la UGT acudieron, rompien-do la actitud unitaria manteni-da entre todos desde un princi-pio, a pagar religiosamente lafianza, a la vez que buscabansus propios abogados. Los de-más, después de un interesan-te debate sobre la situación«democrática» del , momento,se declararon insolventes y de-cidieron llevar el proceso demanera unificada.

    Los abogados del PSOE y laUGT presentaron tres recur-sos, y perdieron otros tantos.De nada les sirvió declarar queano estaba en su ánimo in-juriar a /as FOP», »que la pre-mura de tiempo no permitió ha-cer otra cosa», »que alguien /o/levó escrito y que verdadera-me n te /es pareció muyfuerte»... Por contra, los de-más decidieron llevar a cabouna campaña con el objetivo

    de concienciar al pueblo sobreeste nuevo atentado contra lalibertad de expresión.

    En julio de 1980 se comunicaa los firmantes que el fiscal pi-de un año de cárcel para cadauno de ellos. Como respuesta,se da comienzo a una campañaya preparada de antemano.Carteles con la figura deSuárez, de azul y coronado,cortando el hilo del que pendela -palabra democracia; botasfascistas pisoteando la libertadde expresión... llenan las pare-des de Vinarós. Todo ello, jun-to a los nombres de los proce-sados, a excepción de los delPSOE y UGT que exigieron suretirada de los carteles /no estábien que la alternativa de Poderse vea en la calle como si deterroristas se tratara). Los pro-pios procesados pintaron ungran mural contra la represióncomo una muestra más de rea-firmación en la postura mante-nida.

    La campaña cumplió sus ob-jetivos: despertar la solidaridaddel pueblo y lograr que el juiciose convirtiera co algo suma-mente incómodo para losrepresentantes de la «ley».

    Una vez más, la lucha habíadado sus frutos. Se habialogrado una importante victoriaante los intentos de acallar lasdenuncias contra el terrorismoinstitucional. Cabe destacar,por último, las iniciativas toma-das por el MCPV, con los que,como resultado del largo pro-ceso de reuniones, se ha pro-ducido un acercamiento enotros frentes, sobre todo en elsindical. Otro dato a destacares la continuación de lasreuniones semanales por partede todos los partidos con el ob-jetivo de consolidar un ComitéAntifascista a nivel comarcal.

    R. Puig, Vinarós(País Valencia)

    Falsaneutralidad

    Queridos camaradas:Os escribo para cantares un

    hecho que viene a corroborar,una vez más, la falta «neutrali-dad» de los medios de comuni-cación y de las FOP.

    El pasado 15 de octubre eradetenido en Benilloba, pueblocercano a Alcoi, un joven acu-sado del incendio de la Serreta.El único argumento esgrimidopor la policía es que pasaba poralli, camino de su domicilio, enei momento de producirse el in-cendio. Pese a la inexistenciade pruebas —motivo por elcual tuvo que ser puesto en li-bertad días más tarde— fueconducido al cuartel de laGuardia Civil de Alcoi. Allí fueobjeto de malos tratos y ame-nazas de tortura si no confesa-ba su culpabilidad.

    Al poco tiempo, el programaAitana le señalaba comomiembro de la CNT y autor in-discutible de los hechos, cosaque no se han molestado en

    rectificar cuando fue puesto enlibertad.

    Todo este asunto es aún másescandaloso si tenemos encuenta que la policía de estazona no hace, en realidad, ab-solutamente nada por en-contrar a los verdaderos cul-pables de estos hechos. Deuno de estos incendios —bas-tante frecuentes de un tiempoa esta parte— se confesó autorun policía municipal de unpueblo vecino. Una investiga-ción a fondo Heyaria a otro tipode culpables, y eso no pareceinteresar a nuestras autorida-des.

    Hechos como éste son elreflejo del aumento de la repre-sión que venimos sufriendo,del envalentonamiento de lapolicía que se permite maltratary detener a personas de iz-quierda, mientras no da un solopaso en descubrir a los verda-deros culpables. Por otra parte,hechos como éste demuestranel empeño de los medios infor-mativos —Aitana viene siendo,en este sentido, un modelo—en desprestigiar a las personasy organizaciones de izquierda,incluso, como en este caso,con los métodos más sucios. •Angel, Benilloba (Alacant).

    Las expro-piacionesde ENDESA

    Queridos: as camaradas.Las pretensiones de ENDE-

    SA (Empresa Nacional deElectricidad) de ampliar, unavez más, las instalaciones de lacentral térmica que posee enCubillos del Sil —poblaciónpróxima a Ponferrada —ha rea-vivado una antigua lucha entrelos vecinos y la citada empresa.

    Al poco tiempo de la entradaen funcionamiento de la citadacentra/, y debido a la alta con-taminación, se produjo lamuerte de numerosas reses—la cabaña se redujo a algomenos de la mitad en pocotiempo— asi como la pérdidade buena parte de las co-sechas.

    Como ya sabréis por la pren-sa diaria, ante los intentos deesta nueva ampliación, los ve-cinos de Cubillos se han opues-to a la ocupación de sus tierras.Han dicho que ya están hartosde que se les paguen dosperras por las expropiaciones.A cambio de ceder sus tierraspara la ampliación exigen unpuesto de trabajo por cada fa-milia perjudicada con la expro-piación. La empresa, comoúnica respuesta, ha seguidomanteniendo su postura de pa-gar de 37 a 200 ptas. —segúnsean tierras de secano o de re-gadío — el metro cuadrado. Es-te precio equivale a la mitad desu valor real.

    Una vez tomada la decisiónde que la empresa no ocuparasus tierras, los vecinos deci-dieron montar guardia día y

    noche en ellas. Y así fue comoconsiguieron que los días 26 y27 de noviembre y 10 y 11 dediciembre, en los que secongregaron más de cuatro-cientos vecinos y vecinas, laempresa no pudiera llevar aefecto las expropiaciones.

    Los habitantes de Cubillosson conscientes de que ENDE-SA no va a dar marcha atrás asus pretensiones, y que, por lotanto, tienen que continuaralena y buscar nuevas formasde organización. Sólo CC.00,y el MCC-L han estado presen-tes en la lucha de Cubillos. ElPCE se ha limitado a sacar uncomunicado de apoyo en laprensa. El PSOE, por su parte,sigue sin dar señales de vida.

    De los seiscientos trabajado-res que emplea ENDESA en es-ta central, sólo diez pertenecenal pueblo —Cubillos tiene enestos momentos más de milhabitantes—. Estas cifraspueden dar una idea más apro-ximada del por qué de las exi-gencias de los vecinos de Cu-billos. Los engaños y presionesde ENDESA no parece que va-yan a tener ahora los mismosresultados que en épocas ante-riores.

    S. C. Ponferrada (León)

    Nota de laRedacción

    SERVIR AL PUEBLO falta a su pasadacita quincenal. El número que debla ha-ber salido a la calle el pasado 17 de di-ciembre hubo de sar aplazado en rae dode la huelga desarrollada en aquellasfechas por los trabajadores da la empresaque se encarga de su imprmión.

    Los trabajadores de COSOL no son,sin embargo, culpables de estos proble-mas. Su huelga ha sido la respuesta ne-cesaria y imta a una situacion desespera-da, a la que la empresa ha llegado porculpada la mala gestión de sus sucesivosequipus de dirección, caracterizados porle incompetencia, la desorganización y lachapucerla por sistema. La nueva direc-cien de COSOL —otro más— afirma queva a «saneara y a «racionalizara la empre-sa, y para ello no encuentra mejor siste-ma que plantar en la calle a casi la mitadde la plantilla.

    Sellare una vez más, del arrua y habi-tual sistema de componer platos rotos acostado quien no /os rompió. Que no losrompió porque tenla que comer en ellos.La huelga de los trabajadores de COSOLcuente, en consecuencia, con todanuestra simpaba y solidaridad.

    Lectores y lectoras hablan decomprender que este número paga lam-bido el precia da esa solidaridad necead-rie Le no aparición del número anteriorhace que nos veamos obligados a incluiren éste algunos articulas que se hanquedado descabalgados deis actualidad;otros, cuya publicación es.ba anun-ciada, han tenido que ser suprimidos pa-tada, paso a otras dictados por /a urgen-cia. El conjunto del número se resientede /a consiguiente incoherencia y Miss deunidad.

    Cuando e/ periódico estaba a punto deentraran imprenta, porque aparente-mente estaban salvados los últ.es im-pedimentos materiales, la dirección deCOSOL nos ha comunicado el cierretemporal de la empresa, lo que ha venidoa sumar nuevas dificultades, derivadasde/ cansigurente cambio precipitado deimprenta parlo que el número veré la luzcon mayor retraso aún.

    Nos disculparnos anticipadamente porello y nes acogemos a lo excepcional delas circunstancias l• Le redacción

    Nuestrobuzón

    SERVIR AL PUEBLO N.° 156

  • IIIIII 111111111111

    1111 I 111111 111[

    Ante el nuevo año

    COMO

    26 y11 dee seJarro-▪ laJBr a

    billosNIDE-irás a90( lo:inuar

    2ormas.00.esen.

    los. Elsar unan latone,

    ida,ijade-

    en es-recenre ene milrif rasagro-

    s exi-le Cu-sionesJe va-SMOSante-

    5n1

    'asadaola ha-de di-ruar%

    lucraos',presa

    o son,rroble-ala ne-opera-do poresivoslos porbri y laMuro-

    na quemrpre-r sisre.mitad

    habi-utos eno losellos.

    :OSOLroda

    o dea tam-ocesa-

    anteriora inditase han

    Ion pa-urgen-n'entealta de

    nt0 degente-Os in,ión de

    cierrevenidoruedasido dee la luz

    rte pormal desn.

    1

    L

    A entrada del nuevo año es siempre época propicia para lasreflexiones más o menos generales, para los balances delpasado reciente y los vistazos hacia las tendencias posibles

    del porvenir inmediato. La entrevista con Eugenio del Rioque incluye el presente número de SERVIR AL PUEBLO, sin aspirara abarcar todos los aspectos destacados de nuestra actualidadpolítica, pasa revista a algunos de los más notables. En ella cabeencontrar las señas de identidad de la política con que elMovimiento Comunista se sitúa en la arena del combate político.

    pODRA apreciarse en su lectura que no nos auguramosun futuro de rosas. Es cierto que corren malos tiempos paralas fuerzas partidarias del avance político y social; es cierto

    que corren malos tiempos para la causa del socialismo. Cornomarxislaa, debemos empezar flor ahí • por hacernos cargo con lucidez y realismo del suelo que estamos obligados a pisar. Saberdonde estamos.

    N

    O se trata de sembrar pesimismos. Menos aún pasividades.Al contrario, se trata de situarse en aquel punto único desdeel cual puede plantarse cara a las fuerzas reaccionarias de

    la burguesía y obtener éxitos: desde el terreno de la apreciacióncorrecta de las fuerzas ajenas y propias. El pesimismo y lapasividad suelen nacer frecuentemente de lo contrario: de losbatacazos recibidos tras haberse hecho ilusiones fantasiosas, delas decepciones resultantes de esperanzas utópicas, de las

    \s....promesas finalmente diluidas en agua de borrajas.

    L

    A valoración de los muchos problemas, de las graves dificultadescon que tropieza el desarrollo inmediato de las fuerzasrevolucionarias, no nos conduce, en efectoj ni al pesimismo

    ni a la pasividad. La Historia muestra que situaciones comoésta que hoy vive el Estado español se ha producido másde una vez y en más de un sitio, y ninguna se prolongóindefinidamente. Y es que el proceso de la lucha de clases y eldesarrollo de las contradicciones del sistema politico, económico ysocial tienen su propio camino y su propia lógica, que acaban porimponerse. También aquí se impondrán.

    p

    ERO para ello se exige el concurso de las fuerzasrevolucionarias. De unas fuerzas revolucionarias que, serena ypacientemente, hagan frente a las dificultades, saquen

    provecho de las contradicciones en que se asienta el orden socialexistente y abran la via deja revolución. Tarea sin duda lenta y dificil.Tarea en la que habrán de sufrir golpes, reveses. acosos.

    A opción es ésta. Donde hay explotación y opresión hayresistencia. Se impone decidir si tomar el camino de laorganización tenaz de esa resistencia, por difícil que sea de

    momento, o quedarse al margen, permitiendo que la explotación yla opresión del pueblo trabajador hagan hoy su agosto, enfrentadasa una oposición puramente espontánea y dispersa. Os invitamos atomar la primera opción. Es la nuestra

    Organizar la resistencia

    2

    fenortArreniar

    Por Javier A. Dorronsoro

    El pasado día 31, José Maria Sagardía fue asesina-do en Biarritz por uno de esos comandos anti-ETA queactúan en territorio del Estado francés, sólo unas sema-nas después del atentado del Bar Hendayais ejecutadopor un comando que, según todos los indicios, actuababajo las órdenes directas del Jefe de la Comisaría Gene-ral de Información, Manuel Ballesteros.

    Entonces el Ministro del Interior inventó una histo-rieta increíble para explicar la puesta en libertad de lospresuntos asesinos. Nadie podía escapar al presenti-miento de que tal gesto tenia que tener por fuerza otrasrepercusiones' suponía un aval del Sr Rosón a las ar -tvidades de los comandos naranoliciales lo policiales,lo mismo da, si actúan programados y dirigidos por lasaltas instancias de los cuerpos de Seguridad del Esta-do). Era como decirles: sNo os preocupéis por los ries-gos que deriven de nuevas operaciones, es dificil in-currir en mayores errores que los que cometieronvuestros compañeros que actuaron en Hendaya, y yaveis como los tratamos...» A lo que Rosón podio muybien haber añadido: «Además, habréis visto que elParlamento está dispuesto a creerse lo que yo le cuen-te, pues están empeñados los Grupos Parlamentariosen demostrar que tienen mejores recetas para terminarcon ETA, que es dificil que se decidan a criticar afondo

    \ssiuestros métodos».

    Rosón no estaba tallo de razón. Los asesinos si-guieron actuando y esta vez acertaron. Y como no lohicieron tan chapuceramente como en la ocasión ante-rior apenas se susurran algunas criticas desde los Gru-pos Parlamentarios. A propósito del crimen de Henda-ya, el diputado del PSOE Marin denunció al Gobiernoen el Parlamento porque lo de Hendaya se «habíahecho muy a lo bruto», de tal forma que «se noshabía visto el plumero», lo cual iba a «privamos defuerza moral para exigir a los franceses mayor ri-gor contra ETA». Como verá el PSOE, Rosón ha to-mado buena cuenta de sus consejos. Ahora no tendráde qué quejarse.

    Por otra parte, cada vez resulta mas lamentable elcontemplar ese periodismo sucio con el que la prensacomplementa la «guerra sucia» que el Ministro del Inte-rior y la policía han emprendido en Euskadi.

    «El Palo, comentando en un editorial e/ atentadocontra Sagardia, tras afirmar que «sólo la mera sos-pecha —y puede haber más que sospechas— deque el asesinato en Biarritz del dirigente etarraSagardia puede ser obra de mercenarios a sueldode algún servicio "paralelo" español, más o me-nos controlado, echaría por tierra este espontá-neo movimiento contra la violencia que se advier-te en la sociedad vasca», añadía: «El Estado debeprocurar con exquisito cuidado que el terror seaexclusivo de-íos -terroristas de ETAJt Esto es lo querealmente le preocupa a «El Pais»: que el Estado, porlo menos aparentemente, no se vea envuelto en la gue-rra «sucia», para que no sea cuestionada la «legitimidad»en la que basa el ejercicio de la «violencia legal». Por lodemás se trata, para el citado diario, de arrojar espesassombras de dudas sobre unos hechos en las que las evi-dencias cantan y apuntan como autores de los mismos

    a los servicios policiales vinculados a la dirección de laSeguridad del Estado. El medio que utiliza para ello essutil: consiste en resistirse a dar crédito a algo que todapersona con sentido común intuye: que el asesinato deBiarritz es una prolongación del de Hendaya. Procuraluego desviar la atención, refiriéndose a los autores delatentado como vinculados a algún «servicio paralelo,mas o menos controlado» o «sufragado por si-niestros organismos españoles», fórmulas que noviene al caso utilizarlas en este contexto, cuando apare-ce con mucha mayor claridad su procedencia, la no serque »El País» acostumbre a denominar habitualmente«organismos siniestros» al Ministerio del Interior o ala Comisaría General de Información, franqueza esaque no suele ser su fuerte).

    Pero no queda tampoco ahi la cosa. »El País»,»D-16» y «Cambio», como puestos mutuamente deacuerdo, arremeten en estos días contra Francia Iznos-talgia del ya conocido hábito franquista?), para induciral Gobierno francés a llevar un auténtico progromcontra los refugiados vascos afincados en territorio delEstado francés.

    Evidentemente les duele a los animadores de la cam-paña «antiterrorista» que muchas personas, ante el es-pectáculo de los mercenarios de la Dirección Generalde Seguridad lzquién, si no, podría sufragar sus cuan-tiosos honorarros?) matando etarras, se empiecen apreguntar si todo esto de la campaña antiterrorista noes un timo y hay que empezar de una vez a prestaratención a los auténticos terroristas, a esos Que de unplumazo pueden hacer peligrar de verdad la seguridadde todos los demócratas de este Estado y también aaquellos que arrojan al paro a mas de 1.500 trabajado-res por dia, poniendo en drficiles condiciones de super-vivencia a miles y miles de familias trabajadoras.

    156 SERVIR Al PUEBLO N.° 156 Pág. 3

  • .TICA

    H

    AY ciertas victorias quedescalifican a quienes lasobtienen. Que lejos de

    -,er un motivo de satisfacción para05 vencedores, constituyen unaPoderosa razón para sentirse a yer-ilonzados. El Estatuto gallego per•renece a este tipo de victorias. HaSido legalmente aprobado en las:urnas pero... ¡de qué manera!Porque de_let.S_2-123.629 posibles ilectores, sólo han acudido a vo-lar un total de 612.528, y de éstostan sólo 449.098 han depositado lapapeleta del SI al Estatuto. Total:clj• cada 5 personas, sólo una apo-..ya el ata rt-78. Y además, hay121.458 gallegos y- a / legas que /ohan rechazado explícitamente vo-tando inc en el referéndum.

    Con la ley en la mano, el Estatu-to sigue adelante porque ha habi-do más síes que noes. Pero unasimple comprobación de las cifrasno deja lugar a dudas sobre su ca-rácter claramente minoritario: sólouna quinta parte del electoradogallego respalda este Estatuto. Seha cumplido con creces lo que al-gunos veníamos diciendo: el Esta-tuto gallego ha nacido muerto.

    CURIOSAS EXPLICACIONES

    La abstención fue, sin duda, lagran protagonista del día 21. Ytodavia lo sigue siendo, gracias ala curiosa polémica desatada entrelos partidos que defendieron el si.Todos tratan de sacudirse elmillón y medio de abstencionistasdiciendo que la culpa es de losotros. Hay explicaciones para to-dos los gustos y demagogias detodos los colores. El secretario ge-neral de la_VQ, de Galicia, MiguelSanmartin,-Ti llevó la palma a lahora de dar su versión: e...Losgallegos somos tradicionalmenteescépticos. Esta caracteristica nosviene de los celtas. Asi como elgallego es un león cuando defien-de sus intereses particulares, nopone la misma intensidad cuandose trata de participar en la cosaPública. Insisto, esta indiferenciatal vez tenga ralees celtasa Va-mos, que los gallegos llevamos laabstención en la sangre: el abs-tencionista no se hace sino quenace.

    Los dirigentes del PSOE. PCG Partido Garegata quisieron buscarunas causas más modernas y cre-yeron encontrarlas en UCD y AP.Según aquéllos, estos últimos nohan hecho nada por el Estatuto. ElPG en un increíble comunicado,

    Pág. 4

    se lamentaba de que ucedistas yaliancistas no hubiesen caciquea-do más votos: rr. „Na hicieron enabsoluto campana partidaria nimovilizaron sus resortes tradi-cionales de poder caciquihr. PSOEy PCG son rotundos en susconclusiones: el Estatuto ha salidoadelante gracias a sus votantes yalos del PG, porque los del partidodel Gobierno se han abstenido ensu gran mayoría y muchos de losde AP han votado no.

    Los razonamientos de,unos y deotros coinciden en algo muy signi-ficativo: no aportan ningún datoconcreto que pruebe su veraci-dad. Y, sin embargo, las cifras es-tán ahí, a la vista de todo el mun-do, y hablan por sí mismas. El Es-tatuto ha obtenido casi 500.000votos afirmativos menos tele losAtenidos por la Constitución xspesar de contar con el apoyo de las mismas fuerzas políticas, Sicomparamos, por otra parte, losvotos si de ahora con los votosobtenidos en las últimas elec-ciones genera/es por los partidosdefensores del Estatuto, llegamosa una conclusión parecida, UDperdido de entonces a acá casimedio millón de votos, práctica-mente la mitad de los que teníanPor el contrario, las fuerzas de u quierda y nacionalistas que pro pugnamos el voto negativo hemosmantenido el 87% del electoradrique nos apoyE- el 1 de Marzo de

    ¿Cómo se ha repartido esa Péidida de 500.000 votos entre UCD,AP, PSOE, PCG y PG? Imposiblesaberlo, siquiera de forma aproxr

    sobre ese argumento, tan queridopor ellos, de que la relación defuerzas resulta tan desfavorableque no permite ir más allá de loque quiere UCD. Porque, ¿quéhubiese sucedido sin! Estatuto só-lo fuese apoyado por UCD y AP?¿Por quién doblarían las campa-nas: por e/ pueblo gallego o porlos herederos del franquismo?

    El referéndum del Estatuto ha permitido constatar dos fenóme-nos de sing ¿lar importancia. Porun ¡ x la confirmación de que el arir—jo social al régimen político actual es relativamente reducido y, además, en descenso (la Cons-titución y el Estatuto no alcanza-ron, cada uno, el 50% de votosafirmativos sobre el total del elec-torado). Algunos deducen de estoque Galicia es una buena reservapara los fascistas porque, dicen,no quiere saber nada deautonomías y mucho de la vuni-dad de España». Para comprobarla falsedad de esta afirmación bas-ta recordar que Unión Nacionalsólo obtuvo 8.184 votos en las úl-timas elecciones y que FuerzaNueva apenas hizo campaña porel voto negativo en el presente re-feréndum.

    El se un fenómeno que me-rece anotado es la existenciade un apreciable sector de nuestropueblo que apoya explícitamentela demanda de un régimen verda-deramente democrático basadoen ef reconocrintento del derechode autodeterminación y dz lasoberanía nacional gallega.

    Ambos hechos abren un cami-no de esperanza para el futuro dela lucha por nuestros derechos na-cionales. Porque, como decía elComité Nacional del MCG en unaoctavilla editada inmediatamentedespués del referéndum: eEl dia21 de Diciembre fue el dla máscorto del año y pasará a la historiacomo el dla más corto del caci-quismo en nuestra tierra. Ellos vanretrocediendo y el pueblo gallegova avanzando. En esta ocasiónperdieron muchos votos pero al-gún dio perderán algo más impor-tante.. perderán el poder. Para queesto ocurra, los miles de gallegasy gallegos que no apoyamos el Es

    -tatuto tenemos que seguir luchan-do, cada dia más unidos y más or-ganizados». Efectivamente, lalucha continúa. Pero hoy, somosmás fuertes. • X. VEGA

    El pasado día 21 de diciembre, Galicia vio pasar por delante unreferéndum. Sólo la quinta parte de los posibles votantes fueron alas urnas a dar su apoyo al proyecto de Estatuto de Autonomíapatrocinado por el conjunto de los partidos parlamentarios. MiguelSanmartin, jefe de la UCD gallega, encontró rápidamente la razónde la indiferencia popular: «A /os gallegos, el escepticismo nosviene de los celtas», afirmó sin pestañear. El peregrinar etnológicono sólo muestra la estupidez esencial del individuo; subrayatambién ei estupor y la tribulación de toda una «clase política» quese encuentra con que su engendro suscita, cuando no indignación,indiferencia total. La crónica de Xesiis Vega hace el balance de estasituación.

    Galicia: un muerto de Estatuto y...

    Un Estatutomuerto

    mada: esto era un referéndum yno unas elecciones. En todo caso,el tema es absolutamente secun-dario en relación al hecho mismode que medio millón de personashan dado la espalda a los que has

    -ta ahora venían apoyando. Ello esmás relevante todavía si tenemosen cuenta que los cinco partidoscitados han tenido todo a su fa-vor: se han gastado casi 300 millo-nes en la campaña propagandísti-ca (de ellos, más de 100 han sidosacados de los fondos públicos yutilizados por la Xunta en la llama-da campaña favorable al voto si),han dispuesto -en aplicación dela nueva y antidemocrática LeyOrgánica sobre modalidades deReferéndum - de la práctica tota-lidad de los espacios gratuitos deTVE y RNE y han contado con elapoyo de todos los periódicos quese editan en Galicia.

    UNA EXPLICACION Y UNAESPERANZA

    La cosa no tiene vuelta de hoja:el Estatuto no ha despertado elentusiasmo popular sino el desen-canto. El fracaso polltico de susdefensores ha sido estrepitoso y laresponsabilidad, lógicamente, de-be repartirse colectivamente. Por-que de nada vale que ahora, a to-do pasado, PSOE, PCG y PG lan-cen sus dardos contra UCD y AP.¿Por qué no los lanzaron ante¿Por qué se metieron en el mismobarco, si ya sabian que el autono-mismo de Suárez y de Fraga erade pacotilla? El voto de censurapopular que han recibido estostres partidos el Pasado día 21debería hacerles reflexionar sobresu politice de consenso con la de-recha centralista. Y tambiéndebería servirles para recapacitar

    SERVIR AL PUEBLO N .° 156

  • Calatayud (Aragón)

    Resbalón anti-terroristaJose Maria Cebrián es conce-

    jal del Movimiento Comunista enel Ayuntamiento aragonés deCalatayud. José Maria hizo re-cientemente una intervención enel pleno de la Corporación queresultó problemática. El alcaldepropuso que se aprobara unadeclaración haciendo constar elsentir de la institución municipalbilbilitana por el atentado quedias atrás había sufrido un militaren la capital aragonesa. JoséMaria tomó la palabra para anun-ciar su intención de abstenerse

    en la votación correspondiente ala propuesta del alcalde. DtiuCebrián que el Ayuntamiento deCalatayud ha dejado pasar en otras ocasiones sin condena di-versas acciones de extrema de-recha, quema eludido pronun-ciarse sobre las razones de fondoque provocan la violencia en la sociedad y que, en fin, tampoco ha mostrado su oposición alarrinconamiento en que se en-cuentran laslibertades democrá-ticas en el Estado espanol. En ta-les condiciones —concluyó— nopodía en modo alguno dar suapoyo a un acuerdo de esas ca-racterísticas.

    Escándalo mayúsculo, Al pun-to, la Guardia Civil de Calatayudconvoca a J. M. Cebrián. Este,sabedor de que no existe manda-miento judicial alguno contra él,se niega a acudir al cuartelillo ypresenta denuncia contra el te-niente de la Guardia Civil por in-tento de detención ilegal. El jefelocal del benémerito instituto sesube a la parra y, montando untan absurdo como aparatosodespliegue, detiene a José M.Cebrián, haciéndolo ingresar, sinorden judicial alguna, en la cár-cel de Torrero.

    Llega el turno del gobernadorcivil. Haciendo una audaz incurMi en el tereno de las presun-ciones jurídicas - vocación deJuez por libre, la suya—, dapublicidad a una nota en la quesostiene que las declaracionesdel concejal comunista frpodianconstituir un delito de apologiadel - terrorismo». Esto IUStitICaba,naturalmente, que se le aplicarala Ley de Seguridad Ciudadana,prevista —ya se sabe— para larepresión de los terroristas.

    Final lamentable: en menos desetenta y dos horas, un telegra-ma del juez instructor de laAudiencia Nacional ordenaba lainmediata puesta en libertad, sincargo alguno, del concejal bilbili -tano. Palmo y medio de naricespara el Gobierno Civil y la Guar-dia Civil, no demasiado civiles enla ocasión, y que ya empezabana sospecharse que algo no ibabien, viendo dómo crecra el movimiento de protesta dentro yfuera de Calatayud.

    ¿Explicación? Un concejal per-manentemente molesto para laderecha y unas autoridades drs-puestas a hacer méritos" en, lavanguardia de la lucfirerle,),viene por añadidura.

    Han pasado ya varias semanas desde la publicación delinforme de Amnesty lnternational sobre las torturas en elEstado español. Catorce casos de tortura descritos con tododetalle y minuciosamente verificados. El informe lo conocíael Gobierno desde el mes de septiembre.

    Se podía esperar que el Gobierno de Suárez reconocieraunos hechos tan abrumadoramente comprobados. Pero,¿es posible tal cosa? Este Gobierno no es sólo el jefe supe-rior de los presuntos torturadores; es también su represen-tante y defensor ante la sociedad.

    Cabía pensar que el Gobierno negaría las acusaciones deAmnesty lnternational. Pero eso también tenía sus riesgos;suponía entablar una prueba de fuerza ante la opinión públi-ca en un terreno minado; podían sa/ir todavía muchos másdatos de los que han sido hechos públicos.

    Solución: guardar sdencio. Los ministros callan; losgrandes partidos —de derecha e izquierda callan; la casitotalidad de la prensa calla u olvida pronto el enojoso asuntode las torturas.

    Y sigue .sonando la música de moda: el director generalde la Guardia Civil diagnostica que «el terrorismo es una es-pecie de sarampión. El que haya unos cuantos locos asesi-nos hace que la curación de esta enfermedad sea máslenta». El obispo de Orense continúa sus ataques contra eldesdichado divorcio. El rey nos pide encarecidamente que«sintamos el orgullo de ser españoles». Adolfo Suárez con -tiesa en Ceuta que «su misión es vender ilusionesa. Nada detodo esto parece que vaya a ser un remedio eficaz contra lastorturas.

    ¿Quién tortura ? Dónde se tortura? Por qué se tortura?Las respuestas a estas preguntas retratan al régimen actualNo será el mismo quien las vaya a dar. Este no es un régi-men democrático auxiliado por sus fuerzas de seguridad.Este es un régimen recuhierto Por Un Parla-meo to Y un Gobierno de civiles III

    11)

    p

    OR fin, y corno era de temer,los acusados del llamado«caso Scala» fueron con-

    denados a graves penas de pri-sión. «La verdad sobre el "casoScala" ya no se sabrá nunca»,declaró al finalizar el juicio uno delos abogados defensores, En efec-to, el juicio ha conseguido impo-ner unas condenas, pero no haconseguido convencer a nadieque pretendiera adoptar una acti-tud seria e independiente ante loshechos.

    Y no es que no hubiera víasabiertas a la investigación. No esque se careciera de cabos sueltospara tratar de desmadejar el con-fuso ovillo del incendio de la salade fiestas barcelonesa. Es, sen-cillamente, que no se ha querido irmás allá.

    La policía tenia, pocas horasdespués del incendio, su propiaversión de los hechos. ¿Cómo, dedónde la habia obtenido? LaPolicía detuvo a un grupo de mili-tantes libertarios. ¿Por qué aellos? La Policía consiguió que fir-maran, pese a carecer de pruebasinca/patonas, unas amplias yentradas confesiones. ¿De quémodo arrancó esas Cbnfesiones?Como ya explicó detenidamenteSERVIR AL PUEBLO Iver núm.154 1 , la versión policial hacía aguapor todas partes. Las pruebas pe-riciales fueron retrasadas y dificul-tadas, cuando no boicoteadasabiertamente por la autoridades

    gubernativas. ¿Qué se trataba deencubrir y por qué? Los propieta-rios del «Scala» obtuvieron su in-demnización por medio de extra-ños recursos, antes de que hu-biera una sentencia judicial sobrelos hechos... En suma: todo haquedado sumido en la confusión.En una más que sospechosa con-fusión.

    Pero la confusión —según to-dos los síntomas deliberada— noimpide que algunas cosas, pocasquizá, pero importantes, hayanquedado claras.

    Ha quedado claro que el/lama-do «caso Scala» ha sido una pro-vocación organizada por el Minis-.terio del Interior (regentado en elmomento de los hechos por Ro-dolfo Martín- Villa), que no preten-dió otra cosa que el desprestigio de/a CNT y el movimiento liberta:

    "Tia quedado claro también que

    Joaquín Gamhin confirinisto

    agente provocador a sueldo de la Policia, es la pieza clave de todo elasunto: a él ase le ocurrió» que

    alrue fabricar cócteles molo-tov, él fue quien sugirió lanzarloscontra la puerta del «Scala»...ha quedado claro que si Gambinno ha comparecido siquiera en eljuicio es porque cuenta con unaprotección especial.

    Ha quedado claro asimismo,que el juicio se ha celebrarlo sinque fueran presentadas verdade-ras pruebas contra los acusados.Sólo las declaraciones hechas porellos mismos ante la Policia, arran-cadas mediante la intimidación yla tortura, han servido para incul-parles.

    Son cosas nie han quedadomeridianamente claras a lo largode todo el proceso y, aún más,durante las sesiones del juicio. Unjuicio en cuyo curso la Policía pu-

    do permitirse el lujo de maltratar a/os detenidos ante /os absortosojos de un juez que no quena dar-se por enterado de nada. Un juicioen el que el ,tscaLpudo permitirseel recochineo7UTeconocer nume-rosas irregularidades tanto en lainstrucción del sumario como enel desarrollo de la propia vista:nn .Pero las leves las hac», padres de la Patria er, e/ Padamen-f0, y yo no puedo hacer otra cosa que pedir que se cumplan Nonomi culpa si la Ley de SeguridadCiudadana existe...».

    Pocas cosas claras, pero impor-tantes Y fácilmente resumibles en

    el desenlace: unas personas con-denadas sin mas prueba que unasconfesiones obtenidas bajo pre-sión; un grupo de provocadores,torturadores y encubridores en li-bertad y a sus anchas.

    Todo un retrato del actual Est,(do español. al

    Ir) Este articulo llega a la calle con unmas que considerable retraso, producto dela no apanden de nuestro número antena,Pese arre retraso, hemos considerado ine-ludible su publicación por la importanciadel tema y lo insuficiente ne las voces quese han levantado nao hace; sentir su pro .

    Las condenas del «caso Scala» (1)

    Lo que sí está claro

    eridon derabiede lo¿qué

    do só-AP?

    r•ripa-0 por

    to haaSme-. Por

    qte_al,oliticoWT57.ons-anza-votoselec-

    .) estoserva

    deaunaTobar

    a 1 bas-rcionalas

    berzaa porle re-

    3 cre-encia«estroLee,erda-37370

    fe la

    cami-iro deSS na-

    acta eln una

    rnenteE/ día

    á masristoriaI caci-'os vanpliegocesiónro a»',por

    Ifa quellegasel Es-chanas Or-e, la

    somosVEGA

    156 _SERVIR AL PUEBLO N.° 156 Pág. 5

  • 4'4

    Sito mande el guión.

    Mundo ¿QUédel Trabajo sindicalismo

    de clase?Recientemente, dejamos constancia en estas páginas de las muyencontradas reacciones desatadas a raíz del conflicto de Olarra. Pornuestra parte, después de los dos últimos artículos publicados enSERVIR AL PUEBLO (ver n.° 154 y 155) sobre las «Luchas obrerasradicales», no pensábamos insistir, de momento, con nuevasreflexiones generales acerca del tema, Sin embargo, un articulorelativamente reciente aparecido en La Calle, de Nicolás SartofiusIV, dirigente de CC.00,, nos ha hecho cambiar de opinión. No tantoporque el articulo en cuestión encierre argumentos especialmentenovedosos, como por cuanto se extiende en dos puntos de graninterés.

    E

    L articulo de Sartorius -pla-gado de afirmaciones gra-tuitastas, verdades a me-

    dias y falsedades descaradas-,persigue el no escondido propósi-to de enfrentar al grueso d-ei rnov»rento obrero -y en especial a lamas—z-i—drinliados y afibarlac a

    contra sus sectores mas combativos, tomando a los militantes del MC como blanco principal

    No vamos a entrar aqui en to-das y cada una de las cuestionesque plantea o sugiere el articulode marras, ni a refutar cada false-dad y cada afirmación gratuita enél contenidas. Una cuestión, sinembargo, merece especial aten-ción. Nos referimos a la valoraciónque N. Sartorius hace de lasluchas obreras duras y los juiciosque emite sobre el MC y sobre susmilitantes en su articulo Sarto-rius afirma lo siguiente: «Losmétodos de acción suidica/ queutilizan los dirigentes del EMK(MC) en ésta como en otras huel-gas son contraproducentes, divi-den a /os trabajadores y hacen elluego a /os sectores más duros dela patronal; conducen sistemática-mente los conflictos a .un callejónsin sa/ida, pudren las situacionesy, como ha sucedido en otros ca-sos, a/ final tienen que intervenirlas centrales «traidoras» para sal-var lo que pueden de/ desastre...Hay que decir, de una vez por to-das, guetos miembros del MC queconducen huelgas son como elcaballo de Atila, pues por dondee//os pasan tarda en crecer /a hier-ba del auténtico sindicalismo declase».

    Que nosotros recordemos,conflictos en los que se han em-pleado formas de lucha particular-mente duras, y en los que el MC

    Pág. 6

    ha tenido una directa responsabili-dad, además del actual de Olarra,están el de la Duro -Felque ' tv -el

    dMichelin erleVile\tjolacZe's beer*doelaspecto común a los tres casosfue ef alto grado de unidad de lostrabajadores en lucha durante el transcurso de la misma. Especial-mente en los casos de la Duro-Felguera y Nervacero, se vio ir co-do con codo a los militantes deCC.00. y de UGT que desoian,estos últimos, los llamamientos ala pasividad que les hacían sus di-rigentes locales.

    LA FRAGIL MEMORIA DESARTORIUS

    Ciertamente, tales luchas noconsiguieron acabar con lacompleta consecución de lasreivindicaciones planteadas. Perotal cosa nono achacable a los mé-todos empleados en ellas, sino to-do lo contrario. ¿No seria mascorrecto atribuirlo a la intransigen-cia patronal y a la insolidaridad, alabandono total de esas luchas porparte de los dirigentes sindicalesreformistas?

    Habría que recordarle a N. Sar-torius el yernormoAri mane/ j nn 0./-fopor la dirección de CC.00. en losconflictos citados. No está deifias, sobre todo cuando pareceque su memoria es tan frágil, re-cordarle esto, y más aún cuandotiene el descaro de afirmar que aalfinal tienen que intervenir lascentrales "traidoras -(2) Para sal-var lo que pueden del desastre».

    Pero vayamos al meollo de lacuestión. Afirma Sartorius que por donde pasantes miernbros del MC conduciendo !lupinas «tardaen crecer la hierba del auténtico

    sindicalismo de clase», Sin dudac/TiTUraWrinfá-115Z-TrIZ-F-la Oresse desmoralizan, abandonan la ac-ción sindical, se refugian en la pa-sividad y dan la espalda a sus anti-uos die entes.Veamos oEn la e Gijón,

    después •e . slitectilanregional de CC.00 toma reme-silliais-Y-läuelkeltis-662awas-sklagerrión sindical,. Meses despuéslos afiliados vuelven a elegir a loscompañeros represaliados. Antelat elecciones sindicales últimasvuelve a producirse el fenómeno.En este caso los afiliados hacenoídos sordds yla candidatura de lasección sindical -fclungda_tQclaella por «caballos de Atita»- gana las elecciones y obtiene mayoriae - • riP FinprAsa.I' ttjat. la dirección deCC.00. trata de imponer a la sec-ción sindical una candidatura en laque quedaban excluidos los «at-las» -según Sartorius- dirigen-tes de la lucha de hace meses. Talpropósito recibe el abrumadorrechazo de la sección sindical .ZAS fecha« antes de las eleccioneSla dirección del Sindicato riel Me-

    ctaLlenAriyá c..g1Q,1/1,cjI -sautoriza a la sección sindical Ynombra «democráticamente» unacandidatura. Los ríanlas» se ven obligados a ir a la, otra diferente y sin las s'olas deCC.00_. Pues bien, pese a la con-fusión creada nor esa maniobra,tal candidatura sobrepasa holga-damente en votos y delegados a lade CC.00.., recibiendo el apovpde la tercera parte de los trabaja-dores.

    , los sindicalistas ex-wils—ligeCC.0Q. tras la huel-ga que habia tenido lugar mesesatrás, junto con otros trabajadores

    de izquierda, forman una candida-tura que supera en votos y delega-dos a las de CC.00. y UGT.

    E lan s fin, en las elec-ciongTrairadas en la primavera,meses más tarde de una importan-te huelga, 14 candidatura deCC.00. -formada íntegramente por «atilasy- barre a Sus adversa,.nos y prácticamente copa el comi-LL

    A cualquier observador impar-cial, los datos anteriores lel levarían a la conclusión de que las experiencias vividas en esasempresas han fortalecido glespirita de luç) j5ombatjpj l•de amplios -sectores de trabaiado -res. Dicho de otro modo, han for-talecido el sindicalismo de clase.Para Nicolás Sartorius ocurre locontrario, por lo visto.

    Pero no basta con refutar lasfalsedades de Sartorius. Estamosante una persona con importantesresponsabilidades sindicales.C ando sostier/elasráfigssindicales de los miembros delMC agostan el sindicalismo declase, está diciendo también quela polltíca de CC.00 -de la cuales directamente responsable - Jo_alimenta y fortalece.

    Parece que Sartiarius se «olvi-da» de algunos pequeñosla •érdida •or • arte den los tres últimos anos de sus afiliados; la profunda des-movilización que afecta a amplísimos sectores del movi-miento efircito; el constante recru-decimiento de la ofensiva de la de-recha y de la patronal; la desmora-lización y la tendencia a la pasivi-dad que dominan hoy entre la cla-se obrera...

    EL CAMINO DE LA LUCHA

    Señor Sartorius, de todos esosmales es directamente respon-sable la política de pactos yclaudi-caciones, la nolifira reformista sumisión al cápital que Vd. anima

    en CC.00. Si tamaño conjuntode desgracias suponen para Vd,un indudable crecimiento del «sin-dicalismo de clase», tranquila-mente le decimos que se lo guar-de, y que nosotros -los sindica-listas de/ MC- vamos a seguirluchando sin tregua para que laclase obrera se aparte de el y tomeel camino del verdadero sindica-lismo de clase: el de la lucha y lacombatividad, el del enfrenta-miento a la derecha y al capital.

    Los sindicalistas del MC nobuscamos conducir a los trabaj,a-dores a «callejones sin salida ni a luchas estériles Pero menos aúnestamos dispuestos a seguir lasenda de la conciliación y de /adesmovilización permanente de laclase obrera. Estamos dispuestosa volcar todos nuestros esfuerzosen organizar la resistencia obrerafrente a la creciente agresión capi-talista, en animar la lucha obrerasin arrugarnos ante la utilizaciónde estos o los otros métodos delucha. escogemos el camino de lalucha y lo asumimos con todassus consecuencias Estamos con-vencidos de que éste es el únicocamino que lleva a la reanimacióndel movimiento obrero y, además,los hechos nos dan la raze. Sucamino ya ha demostrado a dondeconduce. •

    Paulino RODRIGUEZ

    uOlarra y la mecha delpolvorin». Le Calla, n.° 141.

    121 Sartorius se confunde: en losescritos del MC no encontrará nuncael término u centrales traidoras». En-contrará, eso uf, alusiones a los dirigen-tes apoltronados que, corno él, sondébiles en la defensa de los interesesde la clase obrera y sumisos a las exi-gencias del capital; alusiones a los diri-gentes reformistas que se han puestolas orejeras de la conciliación con elcapital, y no tienen otro norte que elque aquéllas les señalan. Y no nos fal-ta razón para seg. usando esos calificatnros.

    Contestando a Nicolás Sartorius

    ,agibrnd

    SER HR Al PUEBLO N.° 156

  • untoVd.

    »sin,ala -tuar-lica-3guirie laornelica-d y laanta-tal.

    no

    nia6qa": •

    aúnir lade lade la3stosDrZOS

    breracapi-breraeciónis dede laodascon-

    inicoación'más,r. Suonde

    EZ

    3 del

    en losnuncas. En-Vean-

    soneresesas exi-os din-puestocon elque elos fal-s cali-

    56

    En libertad los tres mineros del pozo «Nicolasa»

    Fin de la 1.a parteAl fin, Javier Alvarez Carnicero, Pablo Ramirez y Manolín Méndez, minerosdel pozo «Nicolasa», afiliados a CC.00. y militantes del MC, salieron de laCárcel de Oviedo el pasado 17 de diciembre. La prensa regional ilustraba lainformación al día siguiente con una fotografía tomada a la salida de la prisiónen la que aparecían cansados y demacrados —era su décimo día de huelga dehambre—, pero animosos cantando la Internacional entre el centenar largo defamiliares y amigos que se enteraron de su puesta en libertad. Atrás quedabancuarenta y nueve días de cautiverio y una historia de lucha que dista muchode haber acabado, Ha sido el fin de la primera parte. La segunda comenzó conla manifestación del día 20 donde se exigía su readmisión.

    Huel a en la cafeteria de TVE

    Un conflictosilenciado

    D

    ESDE el pasado 10 de no-viembre, sesenta y setstrabajadores —de un to-

    tal de cerca de noventa de lacafetería de 'TVE, pertenecientese la plantilla de Elca - empresaconcesionaria - están en huel-ga.Tras unos primeros incidentes,

    la Dirección abrió expediente acuatro de los cinco miembros delCornité de Empresa por haberparticipado en una asamblea. Elexpediente concluyó con el des-pido de los cuatro, lo que motivóun primer paro, secundado Porel boicot a la cateterla por partede lös trabajadores da RTVE LaIntransigencia cíe la empresa ensu postura de mantener los des.pidos originó el inicio de la huel -

    ga que rnencioriäbarnos al princi-pm, Al día sinuiente la sEnnrAs4despidió a todos los trag,ljarirae.sque secundaron la hitekLa.

    La dirección de R TVE sedeclaraba neutral en el conflicto,a la vez que negaba el acceso alComete de Huelga al servicio demantenimiento de la cateteria.

    Le huelga continua pese a los

    esquiroles y al silencio informati-vo establecido en torno a esteconflicto (el director de los seno-cros informativos del 'I . ' Tele-diario puede ser sancionado porpublicar una resella del conflic-to!. En un próximo numero ofre-ceremos una información másdetallada sobre los pormenoresdel mismo

    L

    OS primeros dias del mesde diciembre estuvieron re-pletos de acciones de so-

    lidaridad con los tres mineros delpozo riNicolasas, presos en lacárcel de Oviedo. En Mieres seconstituyó un comité ciudadanode apoyo, cuyo objetivo funda-mental era la convocatoria de unamanifestación legal para el 20 dediciembre.

    El día 4, festividad de SantaBárbara, patrona de la minería,catorce mineros se encadenaroncortando el tráfico durante casiuna hora en la calle principal deMieres. El 6, CC.00. empieza arecoger firmas de apoyo en los po-zos. El día 7, aparece en la prensaun escrito de solidaridad firmadopor siete políticos e intelectuales,entre ellos el alcalde de Gijón. Poresos mismos días diputados so-cialistas acuden a la cárcel, por

    ifliCiatisa -ros. Antes lo había hecho Fernan-do Sagaseta, de paso en Astu-riasir en un mitin deLcorrarcái-vtrefÄN.

    ti día 9 los tres encarcelados ini-cian la huelga de hambre. Y conti-núan las acciones de solidaridad.El 10 se celebra en la magistraturade Mieres el juicio laboral sin lapresencia de los despedidos: seproduce un paro de solidaridadmuy amplio en aNicolasa», sin elapoyo pero también sin la oposi-ción frontal del PCA, y un grannúmero de trabajadores se con-centran en los alrededores de Me.gistratura obsequiando a los inge-nieron denunciantes con un fuerteabucheo.

    Dirigentes de CC.00., que araiz ..elos acontecimientos hablanhecho declaraciones en la prensacontrarias a los encarceladosdeclaran ahora a su favor. El mis-

    mo día 10, por vez primera. CC.00. saca una nota de apoyo a losdespedidos. El 12 hay un encierroen el Palacio Arzobispal de Oviedoen solidaridad con los presos deaNicolasaa y con todos los reclu-sos de la cárcel testos últimoshablan realizado un motín el díaanterior, pereciendo uno de ellosen scircunstancias» no aclaradas!.El encierro estuvo organizado porla LCR, el PTA, el PCU. el MCA eindependientes y tuvo una dura-ción de veinticuatro horas.

    EL día 16, el alcalde de Mieresacude a /a cárcel a visitare los tresdetenidos. En Mieres, cinco mili-

    tantes del MCA se encierran enuna iglesia, en huelga de hambre.El 17 se produce la puesta en liber-tad- ,

    Más de tres mil personas acu-dieron el dia 20 a la manifeärarihnque se convocó en Mieres para exigk la readmisión de los didos

    EL DESPERTAR DE LA SOLI-DARIDAD

    La lucha llevada a cabo por elMovimiento Comunista y otrossectores de izquierda, a /o largo de

    este mes y medio que duró la de-tención, cambió la situación deapatía y desmovilización en otrade solidaridad y actividad en favorde los encarcelados y despedidos.En efecto, la postura de CC.00. yUGT, contraria a todo tipo de mo-vilizaciones de apoyo consiguiócortar, al poco de iniciarse, el mo-vimiento de solidaridad en laminería. Sus declaraciones ini-ciales a la prensa fueron tales queincluso se utilizaron por la acusa-ción en el juicio de Magistratura...A esa posición activa por su parte,se unió la situación general de pa-sividad en que se encuentra el

    mundo del trabajo, fruto, enbuena medida, de las actitudesclaudicantes de las direcciones delas centrales sindicales.

    La lucha emprendida en mediode estas dificultades ha demostra-do que con tenacidad, con cons-tancia, con espíritu combativo esposible calar entre sectores relati-vamente amplios de trabajadores,despertar su solidaridad, conse-guir su movilizaciön, y, con ello,obligar a las direcciones de lascentrales sindicales a modificar,siquiera sea parcialmente, sus po-siciones. En este sentido, hay quedestacar la posición adoptada,desde un principio, por los propiosencarcelados. Emne7aron sor aprovechar su estancia en la cár-cel para denunciar las condicionesei las que se encuentran los rec t e-sos, que van desde la falta de cris-tales en las ventanas de las celdasa la ausencia de agua caliente enlas duchas, la suciedad de patios y

    Y lucharon, asimismo, con grancoraje por su propia libertad: des-de la cárcel dirigieron una »carta alos mineros» (ver S. al P. n.°1551. Y en aquel momento ini-ciaron su huelga de hambre.

    Fuera, el MC no cejó en su ba-talla de agitación constante, aún—y sobre todo— en los momen-tos de mayor aislamiento. Y fueesto, unido a la prolongación tangrande de la detención, lo queconsiguió movilizar a tanta gente,lo que sirvió para sacarlos de lacárcel de Oviedo.

    Y LA LUCHA CONTINUA...

    Con la puesta en libertad de lostres detenidos, el 17 de diciembre,se Cerró una tase de la lucha y seinició una nueva. Ahora pasa aprimer plano el conseguir su read-misión, misión ésta que encontra-

    Javier Alvarez Carnicero, Pablo Remire, y Mandan Mendaz, a u salida de la arce!, can-tando la Internacenal

    rá gran resistencia por parte de laempresa que los despidió, precisa-mente, porque deseaba desemba-razarse de todos aquellos quepuedan obstaculizar sus planes. Yentre estos planes se encuentra elde sreconversión», entre cuyosobjetivos, confesados a primerosde diciembre, se encuentra elcierre de varios pozos.

    Es, por otra parte, un combateque enlaza con otros en Asturias:los últimos meses ha habido des-pidos en Galenas Preciados y enDuro-Felguera (cosa curiosa, enambos casos la dirección ha anun-ciado duras medidas contra /os

    trabajadores), en Perfrisa... Es lapatronal, que se prepara para mi-nar la resistencia obrera ante susplanes. Contra ellos, por la read-misión, para evitar nuevos despi-dos, para conseguir que sus pla-nes no sigan adelante hemos decontinuar levantando la banderade la unidad y de la lucha. La ex-periencia de este duro mes y me-dio en Asturias nos confirma quese está en el camino, que así escomo se logra la solidaridad y lamovilización de los trabajadores yel retroceso de la patronal y la de-recha.

    SERVIR Al PUEBLO N.° 156

  • n n 1

    L 6 flitTgl?gs VP/unk,

    1-0621>

    y Nos DICEN:

    MUJER rN Pde —

    JNÓ Di CS-Z1

    Mujeres:

    El paroque no se ve

    L

    Aprimera batalla que unamujer sin trabajo remune-rado se ve obligada a afron-

    tar es la de exigir que sea consi-derada parada, sobre todo si yaestá casada. Es tal el peso de laideologia dominante y de las cos-tumbres, que cuesta romper conla identificación «mujer = ama decasa». Que por otro lado no es pu-ra imaginación, porque sontoday ia contadisimas las mujerescasadas de los medios popularesque no sean hoy amas de casa, esdecir, responsables, en última Ins-tancia. de la casa y de los hijos.Porque aunque trabaje fuera decasa —decisión meritoria y hastaheroica, diria yo— tienen que car-gar con su supuesto destino deamas de casa. Ni hay guardarlas aprecios populares, ni comedores,ni lavanderías..., ni el marido seda por aludido.

    PARADOS Y PARADAS

    Con esta aclaración por delan-te, partimos de la base de que hay muchas mujeres, gtortunadamen-te_cada día más que quieren tra-bajar fuera de casa Al margen desu condición de joven o adulta,soltera o casada, con o sin res-ponsabilidades familiares, «¡comolos hombres!» Mujeres que exigenque el gran principio del derechoal trabajo sin discriminación de se-xo, sea algo que se vaya practi-cando.

    Claro que la primera observa-ción que se puede hacer de entradann este asunto es que, en la ac-tual Apoca de cnsis, tampoco se cumple el principio del derecho al trabajo de cara a los hombreS•Cierto, el capitalismo no se andacon muchas delicadezas en épocade vacas flacas y los trabajadoresson tratados sin contemplación.Pero hay diferencias; sin duda lashay. Porque nadie pone en duda la justeza de la reivindicación un puesto de trabajo para un hon_.21 .11 que no lo haya se considera una calamidad, una desgra-cia o un lastre del sistema capita-lista. Se puede decir que ocurrelo mismo de cara al trabajo paralas mujeres? Me temo que no. Esbastante generalizada la opinión

    Pag. 8

    de que son lujos para épocas 1,6,peras, o de guerra. Que las muje-res quieran trabajar, vale. Pero loprimero es lo primero. Es decir: loshombres primero. Claro que notodo el mundo es consciente deque ponerle peros al derecho altrabajo de la mujer, es al fin y alcabo, dar por buena la división deltrabajo en función del sexo segúnla cual, el hombre sale a ganarse elpan y la mujer cuida de los hijos ymantiene la casa. División que re-cibe la bendición de la Iglesia y delcapital.

    UN TEMA PARA DEBATIR AFONDO

    Creo que hay que discutirmucho sobre este tema en las

    fábricas y asambleas porque nosllevará tiempo resolverlo ade-cuadamente. También en épocade crisis y de dificultades para laclase obrera debe ser posible tratar correctamente el problema.Sin caer en la tentación —tanarraigada y fácil — de colocarnos alas mujeres en el último lugar en lacandidatura a un puesto de traba-jo-

    paro serían necesarias medidas deotra índole.

    Pese a todo, se abrieron listasde inscripción en las Oficinas deEmpleo y en fos Ayuntamientospara el reparto de esos puestos détrabajo coyu ntu rafes.

    Y aqui surge lo novedoso: el o:ro le la mujer. ¿Cómo anunciar alos cuatro vientos que la mujersufre el paro con toda crudeza?

    ¿Que no se ve porque se nos acos-tumbra a ver una mujer trabajandocomo si de un capricho pasajerose tratara?

    Nosotras vimos en esto unaOportunidad para sacar a la luz,Pueblo por pueblo, el número demujeres que están paradas y quehay que sumar al número dehombres que se encuentran igual.

    P orque ha y q ue llamar a las cosaspor su nombre y acabar con tantoeufemismo que sólo sirve para en-cubrir la realidad. Una mujer para-da es eso y no otra cosa, como,por ejemplo, una mujer dedicada arcsus labores».

    Así pues, la primera batalla era la de llamar a inscribirse. V la se-gunda, la de impedir que hubiera discriminaciones en la adjudica-ción de empleo.

    COMO SEGUIR ADELANTE?

    Un primer obstáculo ara llegar alas mujeres desde el sindicato. Siya lo es para llegar a los hombresparados, en el caso de las mujeresocurre que en la mayoría de loscasos no tienen conciencia de ta-les y por tanto sus vínculos con elsindicato son inexistentes.

    Por ello nos planteamos la ne-cesidad de que se convirtiera en una tarea del conjunto del movi-miento feminista Y en concreto,de las vocallas del barrio y gruposde mujeres de los pueblos. Quefuera un tema en el que investigar,agitar, explicar, etc.

    Trabajando en este sentido, es-tán surgiendo por aquí y por alláalgunas iniciativas concretas quepueden ser de interés, como sonel realizar una encuesta para co-nocer la situación del paro femeni-no en un barrio y el grado de con-ciencia que huiste, el dar charlas,o quedar en grupo para ir juntas ainscribirse a las listas de parados.

    Surgen problemas de todo or-den I ¡cómo sol/ pero nopodíamos quedarnos a /a expecta-tiva. Las listas innominadas nonos convenían, por las discrimina-ciones que pueden comportar.Tampoco queremos que se asig-nen los puestos de trabajo segúnla división tradicional de «trabajopara chicos» y xtrabajo para chi-

    cas». Sobre todo si hay mujeresdispuestas a romperla con su deci-sión.

    Aunque todavía se mantienencláusulas tan ridiculas como laprohibición de las mujeres —en laConstrucción— a subirse a un an-damio (Cambien el vértigo tienesexo?) hay mujeres con moral depelea para aceptar un empleo enObras, como ha ocurrido en Olesade Montserrat. O de celadoras enTelefónica, paseándose con esca-lera al hombro y flamante buzo,ante el asombro general. Ejemplosadmirables a seguir. ro, aquello de que las situaciones materialescrean conciencia, pienso que nohay mejor forma de hacer valernuestras proclamaciones que abrir brechas en ese sentido Por la vilPractKa.

    Las Secretarias de la Mujer deCC.00, nos hemos dirigido enCatalunya a los Ayuntamientos ya las Oficinas de Colocación paraexigir una serie de condiciones enla contratación de nuevo personal(ver cuadro).

    Pero una lucha de este tipo exi-ge también movilizaciones y orga-nización. Y la conciencia clara deque vamos contra corriente, quehemos de basarnos fundamental-mente en nuestras propias fuerzase imponer nuestro derecho indis-cutible al trabajo. Contra la patro-nal, contra la UCD, y aqui enconcreto también contra sus ami-gos catalanes, los Pujol y cia.

    Se hace camino al andar. Haga-mos el nuestro.

    Noria CASALS

    Ahora tenemos una Oportuni-dad para empezar a hacer una ex-periencia. En Catalunya, han sido asignados por enmara vez 1 30Qmillones de pesetas Para e l E M-pleo Comunitario, para las cuatrocomarcas más afectadas not problema del oaz.

    Aunque migajas, que no lleganni a parche siguiera, estos millo-nes han sido debidos a las pre-siones que en bastantes zonas sehan venido ejerciendo. De estemodo. el Ministerio intenta apagarla creciente movilización obreracontra el paro. Y de paso, intentaentretenemos en la labor de ges-tionar la miseria. Huelga decir quelo que han destinado no sirve nipara abrir boca y que para afrontarde verdad el grave problema del

    Las exigencias planteadaspor las Secretarias deja Mujerde 'Comisiones Obreras a losAyuntamientos y las Oficinasde Colocación son las siguien-tes:

    1. Que dentro del necesarioconocimiento del censo de para-dos, se contabilice el número demujeres Laradas inscritas y quese dé a conocer el porcentaje querepresentan respecto al total deparados contabilizados en la loca-lidad.

    2. Que, a la hora de contratarel personal, es necesario respetar

    das gua-oergraeremtrettejererrta-el po enta¡e de mujeres contrate

    tuatubresócreete—gge—e—guren eorarservograrite--er---rieerséag,--es—aaLlaó.

    3. Que no se de por sentado,sin antes haberlo preguntado a las „,"interesadas, que no quieran traba-jar en tareas hasta ahora destina-das a los hombres, puesto que aquien corresponde la decisión es a

    4. Que conociendo, no obs-tante, las dificultades para que lasmujeres se animen a trabajar en laconstrucción, los ayuntamientostengan presente la creación depuestos de trabajo más acce-sibles, a la hora de elaborar unproyecto para ocupar al personalcontratado.

    SERVIR Al PUEBLO N.° 156

  • adasWer

    3 lossirtesu ien-

    manopara-ro de

    r quee queal deloca-

    tratar2.2 r

    erra-las—ee:34.., efta io,LATAtra pa-

    aLl

    Leis.2

    obs-ue lasen la

    lentosin deecce-ar U rl

    rsonal

    156

    jer 9Sde

    erresy laen la

    an-

    tieneal deo en)lesa3S ensca-

    'uzo,ep/ daU9.112..

    ri@Jeelovaler

    aor

    er deD entos y

    Para?S ensonal

    exi-orga-ra de

    queental-erzasndis-etro -

    enami-

    iaga-

    LS

    Crisisde la UCD¿Crisis dela reforma?Entrevista con Eugenio delRío, secretario general delMovimiento Comunista

    La U.C.D. se ha puesto de Congreso y le ha subido lafiebre. Se le han desatado a la vez los muchos virusacumulados en el último trienio de caciquerías,favoritismos y caudillajes. Landelino no traga aFernández-Ordóñez; éste se enfrenta al nuevo jefe delgrupo parlamentario, Herrero de Milión, que a su veztrata de enseñar los dientes al gran jefe, Suárez, alque el propio Camuñas hace muecas de enfado.Entretanto, doscientos jefecillos firman cartas abiertasy se asustan con el enfado de Martín-Villa, que tomaaires de ir a por todas, y probablemente también a portodos, que experiencia no le falta.La cacareada y manida «crisis de la UCD» tiene sinembargo una raíz nada anecdótica. La principal fuerza

    _SERVIR AL PUEBLO N.° 156

    de la derecha hace en ella el balance de sus sucesivosreveses: Andalucía, Galicia, Euskadi, crisiseconómica... Torpezas y tortazos que, añadidos a losbamboleos del sistema de representación política delEstado mismo, a las fisuras existentes entre losdiversos poderes que conforman el Poder, conmayúscula, al descontento popular y la penuriacreciente, acaban por ofrecer un panoramadecididamente problemático. Coincidiendo con elcomienzo del año, SERVIR AL PUEBLO haentrevistado a Eugenio del Rio, secretario general delMovimiento Comunista, y ha recogido sus opinionessobre estos temas que habitan el centro de laactualidad.

    Pág. 9

  • 1E3

    beno-.. °"'71r.4 r,'"•

    —¿Cómo definirias la cri-sis política actual?

    —Es una crisis en la cúspidedel régimen politico surgido dela reforma del franquismo. Lacálik, afecta muy especialmen-te a las relacione entre el Parti-do tun amenta de la derecha la UCD, y las fuerzas esen-ciales del propio sistema es-tablecido. Las relaciones entreel Partido gubernamental y elEjército se han deteriorado.Otro tanto cabe decir con res-pecto a la policia, Son visibles,aunque de menor gravedad, lastensiones con la jelarguía ecle-siástica. Tampoco acaba de es-tabilizarse una sólida unidadcon la gran patronal. Persistenlas dificultades de UCD paraentablar una cooperación delargo alcance con la derechan2cionalista catalana y sobretodo, con el Partido Naciona-lista Vasco.

    asC-5-11que se manifiesta enla cumbre del poder es tambiénuna crisis de orie ¡Quépolítica aplicar e cara a losprincipales problemas políticosy económicos? ¿Qué personashan de aplicarla? ¿Qué alianzasson deseables en las actualescircunstancias para unir a la de-recha social, política, militar,económica? Todas estas cues-tiones no encuentran respues-tas claras y aceptables para losdistintos sectores de la de-recha.

    Todo ello acelera, salta a lavista, la crisis interna de UCD.La última recomposición delGobierno no ha dado el resulta-do unificador y tranquilizadorque esperaba Adolfo Suárez.El desgaste de este último co-mo líder de su Partido y comolíder de la derecha es cada díamás evidente y acusado.

    Pág. 10

    Estos son, me parece, lostérminos en que se plantea laactual crisis dentro del poder.

    —¿Cuáles son los factoresque han contribuido más aprofundizar esta crisis?

    — Son varios; algunos deellos no muy nuevos.

    julardjuwar hay que des-tacar orine importanciaque conservan dentro del po-der aquellas fuerzas más vincu-ladas al pasado franauista. Merefiero, particularmente, a losniveles dirigentes del Ejército yde la policía, que, como es sa-

    bido, nunca han estado entu-siasmados por la reforma política, Suárez no ha acerta-do hasta ahora a sellar unaalianza sólida con estas fuerzasni ha conseguido imponerles suautoridad.

    En s_egunitaiiimr es precisomencionar la crisis económicao, más precisamente, los fenó-menos que está generando sucarácter prolongado y la faltade expectativas de superación:desmoralización y pesimismo

    crecientes en la burguesía, en-durecimiento de sus posicionespolíticas, exigencia al Gobiernode una politica todavía más fe-rozmente antiobrera.

    En tqrceriur, la persisten-cia de=itrirpoder llama elp tascp. Esta cuestiónes un auténtico atolladero parael Gobierno: no tiene capaci-dad para aplastar a la resisten-cia radical vasca, ni posee unmargen de maniobra suficientepara hacer las concesionesimprescindibles para aspirar aaislarla políticamente. La si-tuación se pudre y el Gobiernoestá dejando en el empeño la

    escasa autoridad que le queda.Hay, qi.-.L.J2fi circunstancias

    internaciors que están ace-lerando y ahondando la crisisen el Estado español. Las difi-cultades económicas por lasque atraviesan los países delbloque occidental les impidenechar una mano al régimen es-pañol y, en lo que hace a la Co-munidad Económica Europea,les impulsan a adoptar unalínea negociadora defensiva yrígida que aleja en el tiempo la

    posibilidad del ingreso español,al tiempo que le pone a ésteunas condiciones más desfavo-rables, Hechos como la elec-ción de Ronald Reagan o elgolpe de Estado en Turquía,tienden a su vez a reforzar a lossectores de la derecha quereclaman una corrección de-rechista del régimen político dela reforma.

    —En tales circunstanciasno faltan quienes pronosti-can un golpe de Estado mili-tar...

    —Las cosas están dema-siado confusas como para ha-cer pronósticos tan concretos.Lo que en todo caso es ciertoes que el centro de gravedad del poder político se estádesplazando hacia la derecha.La distribución de fuerzas enpresencia presiona, en lo inme-diato, a favor de una acen-tuación de los rasgos antide-mocráticos del régimen y de unendurecimiento de su política.

    Esto es lo que hoy podemosverificar de un modo realista.Que esta evolución derechistavaya más o menos lejos, quesea interrumpida antes o des-pués, es ya otro asunto, quedepende en buena medida dela capacidad de reacción quemanifieste la izquierda y del de-sarrollo de las luchas obreras ypopulares..

    —Pero, ¿esa evoluciónderechista podria realmentedesembocar en un golpe mi-litar?

    —El principal problema hnyno es el peligro de un orine mi-llar, sino un mal que va veni-mos padeciendo: la interven-ción directa de la alta ierarquía militar en la vida oolític.a.

    Esta intervención, casisiempre en la sombra, es unode los rasgos constitutivos delactual régimen político. El Go-bierno y el Parlamento no atreven a tomar ninguna deci-sión de cierta importancia que contraríe a los altos mandos delas Fuerzas Armadas.

    Las crecientes tendencias in-tervencionistas, militaristas,antidemocráticas, ¿podrían de-sarrollarse hasta propiciar ungolpe de Estado? No me parece imposible. Más aún, piensoque sería un grave error descar-tar tal posibilidad. F'éro, al pro-pio tiempo, háy_au_e_teue.r_aoOrienta var ias cosas.

    in-Por .4..treverne.un

    seriosse

    de

    Estconvenientes para sus autores. Sometería a un nuevo desgasteal bastión último del Estado, alEjército, y, aún en el caso deque inicialmente alcanzara al-guno de sus objetivos, no po-dría destruir la oposición ra-dical en Euskadi, uno de susblancos principales, ni el movi-miento revolucionario en elconjunto del territorio estatal.Lejos de eso, engendraría reac-ciones hostiles, antimilitaristas.

    antifascistas; incitaría a luchar,y a luchar unidas, a gentes hoyinactivas o desanimadas por ladivisión y desorientaciónreinantes dentro de la izquier-da.

    F.12.1r.ikige, la situaciónactu"Sio Pocas ventaiasa los posibles autores de un gr2lpic_eEstclo. Casi siempreconsiguen que se cumpla su voluntad sin tener ase dar la.cara públicamente y además,bajo el manto de un régimenparlamentario aceptado por laderecha y por la izquierda insti-tucional.

    Antes de echar por tierra to-do esto se lo pensarán bien.Hay que tener en cuenta, asi-mismo, que sin llegar al golpede Estado existe una variadagama de fórmulas y combina-ciones que pueden ser intenta-das por las fuerzas en el poder,todas ellas con el denominadorcomún del incremento de larepresión y la reducción de laslibertades democráticas.

    —Has hablado del refor-zamiento de las tendenciasmilitaristas. ¿A qué te le-fieres en concreto?

    —A lo largo de la historia delEstado español, y muy singu-

    1

    Hay circunstancias internacionales que aceleran lacrisis del Estado español. Las dificultades

    económicas del bloque occidental le impiden ayudaral régimen español. Hechos como la elección deRonald Reagan o el golpe de Estado de Turquíatienen a su vez a reforzar a los sectores de laderecha que reclaman un golpe de timón a la

    derecha.

    SERVIR Al PIJESIO N.° 156

  • to-en.así-upe3dana-da-lar,dor

    lalas

    re-

    1del3u-

    El llamado «terrorismo» sirve de chivo expiatoriopara achacarle todos los males habidos y por haber.La campaña contra él oculta problemas como el delparo, justifica la represión y fuerza la asociación de

    la izquierda institucional a las actividadesantidemocráticas del Poder.

    / £11,:s

    .P0,7ittoptRMINACIONf

    56 SERVIR AL PUEBLO N.° 156

    ar,

    ir lai 6 nliar-

    rón

    gas

    presu

    iäs,nenr lasti-

    larrnente en los dos últimossiglos, el Ejército aparece comouna fuerza política, con perso-nalidad propia y con unaautonomía considerable, quepesa, ¡y de qué manera!, sobrela sociedad. No en vano la pa-labra castellana pronun-ciamiento ha sido incorporadaa varios idiomas.

    La acción del factor militarsobre la sociedad no es Mes,nac_.11.3113 Lo_ En la transición,sin embargo, y durante algúntiempo, especialmente en1977, el Ejército se encontrabasin brújula, dividido, sin unaorientación politica dominante

    dentro de sus filas. Esto le im-pidió jugar un papel político de-cisivo en todo momento. Supresencia condicionaba la re-forma política, no hace falta de-cirlo, pero era más su presenciamisma que una acción determi-nada y clara sobre los distintosproblemas en juego

    Después se ha registradouna evolución que tiende a de-volver al Ejército su categoríade fuerza política impuesta a lasociedad civil y a la que le im-pone sus grandes opciones.Hoy la situación no es la de1977. El Ejército está más unidoy lo está en base a una línea,

    nfflmente derechista.

    .,•••n••••

    Este proceso político de /unidad del Ejercito en tornoa ideas y posiciones de-,rechistas se hace mas rapi:do tras la sentencia de laOperación Galaxia...

    — La sentencia más nIIP I una condena del golpismo es unpremio para los conspiradoresreaccionarios. A partir de en-tonces, el activismo franquistadentro de las Fuerzas Arma-das es ya un activismo abierto,arrogante, conocido y tolera-do,

    El Ejército está, como decía,mas unido políticamente. Launidad reposa sobre posicionesaparentemente menos fascis-tas pero muy peligrosas preci-samente por ello: pueden ga-nar a sectores no resueltamen-te fascistas. La oposición a laslibertades es más matizada; notodas las instituciones políticasson criticadas por igual; laMonarquía es aceptada de unmodo bastante generalizado; laConstitución se considera unpunto de partida aceptable...

    Al mismo tiempo, y del mo-do más reglamentario, se tra-zan planes de intervención del.Ejército, se dan instruccionespara situaciones de exce_pción,se prepara, en suma, al Ejército

    Su desgaste como fider de ((CO se acerquepor momentos.

    para salir de los cuarteles llega-do el caso.

    L rra_largjna norepresión, de los minoritariossectores demócratas acomoa-Fba inevitablemente esta evoly-cjO.g. La negativa a readmitir alos miembros de la UlvlDcontrasta con la benevolenciacon que son tratados los milita-res manifiestamente contrariosal actual ordenamiento consti-tucional.

    En estas condiciones es par-ticularmente lamentable la acti-tud de aquellos partidos de iz-quierda que han admitido im-portantes imposiciones antide-mocráticas, que prefieren callarante las conspiraciones fran-quistas, que no cesan de adulara los que consideran defenso-res armados de la democracia,que han cedido el terreno mili-tar al franquismo, otorgándole,eso si, la etiqueta de demócra-ta por respeto al uniforme.Inclinarse ante los enemigos dela libertad no hace a estos masdébiles y si a quienes doblan la

    —La presente situaciónda un renovado valor a lalucha democrática, a la de-fensa de los derechos de-mocráticos, a la profundiza-ción de las libertades. e Có-mo ves este tema?

    — La lucha democrática hade desplegarse en trei trames,todos ellos funda=es

    11461, contra la represiónque se realiza al amparo de lalegalidad, La nueva Ley anti-terrorista es el signo más gravedel ascenso de esta represión.Con ella, se puede ampliar lapráctica de la tortura, y laexpresión de opiniones revolu-cionarias en ciertos terrenospuede ser considerada comodelito de apología del terroris-mo.

    móesg. la intervención del_o, contra el Militaris-r''cito en los asuntos de la so-ciedad, contra las maniobras

    [ande/a-ro Gavilla uno de los que disputana Subtes le clisplde de/partid» en el Go-bierno y uso de /os represen/entes del ele

    nuis deredus«.

    antidemocráticas dentro de lasFuerzas Armadas, contra larepresión de los sectores de-mocráticos del Ejército.

    Ter o, contra las organiza-ciorgr gscistas, contra su ac-ción terrorista, contra las ban-das armadas fascistas y para-policiales Para ello, hay queunir todas las fuerzas que seaposible unir y hay que impulsarlas formas de autodefensa po-pular que pueden ir surgiendofrente a las agresiones fascis-tas.

    Estas tres facetas de la luchademocrática son sumamenteimportantes. Si cualquiera deellas es descuidada, las res-tantes también se resentirán.Quienes apoyan la Ley anti-terrorista con la esperanza deamansar a la fiera están come-tiendo una grave equivocación.Para que la fiera esté quietahay que pegarle en la cabeza yno darle instrumentos con losque puede actuar más salvaiemente.

    —En los últimos mesesestá arreciando la campañallamada antiterrorista...

    —Asi es. Cuantas mas difi-cultades encuentra el Gobier-no, cuantos mas fracasos co-secha, más le interesa en-contrar un chivo expiatorio alque hacer responsable de to-dos los males habidos y por ha-ber. El llamado terrorismo esmuy socorrido para estos fines.1,2__QaMpabencubre nrahlerna, r ,orno Pi de(paro, justifica el incremento delarepresi6n —.que eso si Que esauténtico terrorismo—te asociar a la izquierda instity-ciore-MQLáliCa-

    - La cuestión vasca eshoy uno de los temas quesuscitan posiciones másenfrentadas. Los sectoresmás reaccionarios reclamancada vez más airadamentemedidas de fuerza a gran es

    Pág.11

  • , , ,rnenr,de Sualer lue sulocente para sellar su ahanza con los sectores mas 53, npilltleS de fa maquoana estatal

    Los ~n'os levannscos que recorren algunos sectores del Ejército no son de antes deayer Escenas como éste poderon verse hace un par de años en e/ ennerro de un militar

    muerto a Oros.

    PC), 4 vogAn.h.): .1E -

    No rEN60niá PARO ORRER

    - RA lA

    cala. Se habla de una po-sible intervención militar enEuskadi...

    — Euskadi concentra hoyuna oposición al régimen muyradical, que éste no puedeneutralizar. ¿Intervención mili-tar? Si lo intentan se van a en-contrar con una resistencia su-perior a la actual y con un pueblo vasco que sabria res-ponder unido a tal agresión. Llama la atención el silencioque se observa sobre este te-ma, a pesar de su indudableimportancia. Si un día se pro-duce una intervención militaren Euskadi, ¿que postura adop-tarán los diferentes partidos deizquierda? ¿Considerarán quetal iniciativa es justa o la de-nunciarán? ¿Estarán con los

    agresores o con los agredidos?No estaría de más que fueranrespondiendo ya a estas pre-guntas.

    —El M. C. ha hecho espe-cial hincapié en los últimosaños en /a necesidad de unaactitud solidaria con Euska-di por parte de la izquierdade todo el Estado español.¡Quieres resumir el sentidode esta postura?

    —Tal postura se basa en dos consideraciones. eser reconocimiento nodel pueblo vasco a luchar por laautodeterminación • y pordesprenderse de la dominacióna que le somete el Estado mo-närquico-suarista y sus fuerzasrepresivas. Es una causa justa

    que tenemos el deber de apo-yar sin reservas. Pero, en

    unis_djkalágov, Euskadi esieSITZT5bones más débi-les de la cadena de la reformao, dicho de una forma más cla-ra, de la actual dictadura bur-guesa-parlamentaria. Si unsector significativo del ipbehlgvasco sigue sin someterse al rä-gimen actual todos los pueblos dvi Fstadn español en-contrarán mejores condicionespara reforzar su lucha contra sus enemiaos comunes. Si porel contrario, la lucha obrera ynacional vasca retrocede, to-dos los pueblos del Estadoresultarían perjudicados.

    —GlItimamente, el Movi-miento Comunista ha apare-cido asociado a algunasluchas obreras de las califi-cadas de duras. ¡Respondeeso a algún tipo de espe-cialización?

    — Desde luego que no. En elúltimo año ha disminuido el nú-mero de luchas obreras conrespecto al año anterior. Ahorabien, varias de ellas han sidorelativamente duras o radicalesen cuanto a los medios que hanutilizado para hacer frente a lapatronal. Esto refleja la exaspe-ración de algunos sectores dela clase obrera particularmenteamenazados por la crisis capi-talista y que tienen que vérse-las, a menudo, con empresa-rios como °Jarra, del más puroestilo franquista.

    EHV,_„pr2yá_e_us_lucbas_ytrata de impulsarlas Isägelíalo, porque son muy iustas.Y Permiten mantener iirla ten-sión combativa y reforzar la so-lidaridad_ilhreta. tan r_es.esaupl

    jas_c n liciones_ac-tuales.Ahora bien, un partido revo-

    lucionario no puede limitar suactividad a ese tipo de luchas.

    Ha de estar allí donde es po-sible alentar las luchas obreras •randes o °entrañas radicales o no radicales, frente al paro, ala represión patronal a la degradación del nivel de vida.

    —El movimiento revolu-cionario ¿estará a la alturade las circunstancias?

    —Haremos cuanto esté ennuestra mano para que así sea.Pero no ignoramos que el mo-vimiento revolucionario es aúnbastante minoritario en el Esta-do español, salvo en Euskadidonde cuenta con apoyos másamplios. No obstante, en los

    últimos años, se han clarificadolas filas revolucionarias se hahecho más patente la demarca-ción con respecto al reformis-mo, se ha consolidado un áreade influencia social revolu-cionaria que está pesando yaen muchas ocasiones. Pornuestra parte, trataremos decontribuir a que las distintas or-ganizaciones y tendencias del campo radical y revolucionarioactúen de acuerdo con unespíritu unitarjo —varias vecesya lo hacen sistemáticamen-te— que permita multiplicarnuestras fuerzas y hacer progresar la causa dala revolu-ción comunista.•

    A5E

    E

    A

    e

    LI pafo es Id U, (I, Id pulifIcd lefodInet n lu dtaroffiedd de la bu, idtd,id didr . di ,IISIS ec011hfm, d

    Pág. 12

    SERVIR AL PUEBLO N.° 156

    45111‘ •

    Quienes apoyan la Ley Antiterrorista con laesperanza de amansar a la fiera están cometiendo

    una grave equivocación. Para que la fiera estequieta hay que pegarle en la cabeza, y no darle

    instrumentos con los que puede actuar mássalvajemente,

  • Att

    s de

    adoe3arca-mis-área

    volu-o ya

    Pors deis Or -LdLnejo

    1.22eres

    en-ihcar

    erToki-

    -ife :5GcriCrl -

    9 Ni RSCL1 NI vreoEuris . Egek

    Ce concentreckk nuclear dala Ribera den, Ebro he sido luerretnntrn , contestada. ttnn. de/ Asuntatt,e,net A, Assn hecontribuido notablemente a ello.

    A mediados de octubre pasado la Generalitat de Pujol decidiósuprimir de un plumazo el Ayuntamiento de Ascó, lugar en el queestá emplazada una central nuclear próxima a entrar enfuncionamiento. Una gestora nombrada al efecto, en la que figurandos miembros de Fuerza Nueva, se hará cargo del gobiernomunicipal. Tambiéh de un plumazo quedaba barrida la laborantinuclear que desde la Corporación venia realizando laCandidatura de Defensa Popular, mayoritaria en las elecciones de laprimavera del 79.Joan Carranza, viejo luchador antinuclear y alcalde destituido deAscó, cuenta para los lectores de SERVIR AL PUEBLO lospormenores de la maniobra, así como sus consecuencias de cara alfuturo de la comarca.

    Entrevista con Joan Carranza, alcaldedestituí de Ascó (Tarragona)

    Si tuAyuntamiento

    te ofende...

    S

    ERVIR AL PUEBLO.—¿Qué tal, para empezar,una breve historia de los

    acontecimientos?

    Alcalde. —Los resultados delas elecciones municipales 15 con-cejales para la Candidatura Anti-nuclear, 2 para t/CD, 2 para CDC,

    para ERC y un independiente lnos dieron la Alcaldía y también lamayoría en la Comisión Perma-nente 13 antinucleares, 1 UCD y1 CDC). Desde el primer momentonuestro trabajo municipal en-contró una fuerte oposición. Nohay que olvidar que tres de losconcejales nucleares al resultarelegidos obtuvieron de manos deFECSA un puesto de trabajo fijoen la central nuclear.

    La oposición al cartapacio mu-nicipal elaborado por nuestra can-didatura seguía en aumento hastaque el 19 de abril de este año ce-lebramos un Pleno extraordinarioal que asistió el director general deAdministración Local de la Gene-ralitat (provisional). Nosotrosíbamos al Pleno con el ánimo deremodelar el cartapacio y dar algu-na competencia a los opositorespara conseguir salir del estanca-miento. Aunque todo ello supedi-tado a Ja asamblea pública quehabla de celebrarse por la nochepara que el pueblo de Ascó diesesu opinión sobre las líneas de tra-bajo que cada grupo había de ex-poner.

    La asamblea f un la más masivade las celebradas hasta entonces yen ella el pueblo refrendó total-mente nuestra posición, desauto-rizando las nucleares. 91 22 de esemismo mes en un concurrido Ple-

    no extraordinario celebrado paravalorar la asamblea I s rags_presentaron su dimisión, asen,rando que dimitían «porque velan que e/ pueblo no les aceptabas.

    Ante la situación creada el di-rector general de AdministraciónLocal se manifestó partidario desustituir a los dimisionarios porpersonas de nuestra lista. Pero da-do que se estaba er, momento detransición entre la Generalitat pro-visional y la de Pujol, dejó el asun-to para que lo resolviese el equipoentrante.

    S. al P. —¿Y cómo lo resolvió?

    Alcalde. — De la manera quetodos nos temíamos. Quienesmandan en la actual Generalitatvieron que todo este llo podía seruna buena ocasión para quitarnosde enmedio. No se olvide que enAscó tenemos dos nucleares, queel ConsepS-Ejecutivo de la benera-litat está en mano de Convergid),cia Democrática, y que este parti-do tiene fuertes intereses en la banca y las multinacionales.

    Así que decidieron poner ma-nos a la obra. Quien toma el man-

    do de la operación en un primermomento es el presidente de la Di-putación de Tarragona (ya dimiti-do) Sr. Calla (CDC). Dice que va anombrar una gestora. Dice y rápi-damente se desdice. Porque antelas primeras reacciones popularesy de la prensa empieza a caertierra sobre el asunto, presentadopor CDC como una decisión per-sonal del presidente, que se apar-ta de la Ilnea del partido.

    912 de julio tenemos una entre-vista con el consejero de Goberna-ción, Vida/ i Gayola en la que éstemanifiesta que han desautorizadoa Calle y se llega a un acuerdo cu-yos puntos básicos son: la Gene-ralitat no tomará ninguna decisiónsin consultar al Ayuntamiento deAsco:), la entrevista realizada seconsidera como un primer contac-to: cualquier paso deberá ser con-sultado con el pueblo de Ascó: Noa la Gestora, por ser una soluciónantidemocrática, y sustitución delos seis concejales cesantes. Almismo tiempo nos comunica quePujol quiere tener resuelto esteproblema antes de las vacacionesdel verano.

    Pare el prestdent de la Generaldat - y,'delta de Banca Catalana - , Jorch Puiol,era mtolerable que una alcaldía se dedicasea obstaculizar los iarneses del gran cendal.

    Tras las vacaciones, el 4 de sep-tiembre, me citan para ir a Mora,un pueblo a seis kilómetros de As-c6. En la entrevista iba a estar eldirector de Administración Local.Me entero de que la citación tam tan ha sido entregada a loshombres a quienes había consul-tado Calla en su pd-mer intento deformar la Gestora. Ello motiva unnuevo viaje nuestro a la Generali-tat para pedirle explicaciones a Vi-dal i Gayola quien tras poner difi-cultades para recibirme, me diceque el motivo de la visita a Moraera comunicar la decisión de ce-lebrar un referéndum en el pueblode Asc6 para cubrir las seisconcejalías vacantes. En la visita aMora, la Generalitat ya traía lossobres del referéndum preparados. Pero consultadas las perso-nas citadas por