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“no sale de su habitación,
solo nos vemos en las comidas”
Café virtual los lunes
Amanda Meliá de Alba (psicóloga)
No sale de su habitación, solo nos vemos en las comidas
Será por perezaSerá por estar estudiandoSerá por estar conectadoSerá por estar de conversaciónSerá por estar en las redesO también por estar desubicado, sin saber qué hacerIncluso puede estar triste o melancólico
…y una larga lista de posibles razones
ante esta situación¿quién dirías que está más preocupado?
adulto joven
Estar encerrado en su habitación puede generar las siguientes emociones y pensamientos
- Incertidumbre ▪ Por lo que podrá estar haciendo▪ Por cómo se sentirá▪ Por si estará bien▪ Por si estará haciendo lo que debe
- Echamos de menos a nuestro hijo
- Desconectar de un ambiente asfixiante y repetitivo,
- Liberarse de la sensación de que nos vigilan,
- Evitar que aprovechen la mínima para recordarme cosas que ya sé que tengo que hacer pero que no me apetece
- Evitar no ser comprendidos
▪ Solos▪ Aislados▪ Con miedo a perder los amigos▪ Con miedo a perder a las personas que
les gustan (posibles parejas, parejas, etc.)▪ Con miedo a que se olviden de ellos▪ ¿Me dará vergüenza cuando les vuelva a
ver? Inseguridad ante el reencuentro▪ Agobiados por no poder librarse de los
padres▪ Agobiados por los estudios
Reconocer esto puede dar
mucha vergüenza
¿Cómo se pueden estar sintiendo los jóvenes?
Puede que sean temas que directamente nunca hemos hablado con ellos
¿y cómo sé que lo está pasando mal?
¿o bien?
¿Por qué no es recomendable exigirles a la fuerza que salgan de su habitación?
▪ Crea un conflicto, que en situación de confinamiento será difícil resolver
▪ Crea malestar en ambas partes (adultos y menor)▪ No tiene en cuenta las emociones que le pueden llevar a ese
enclaustramiento▪ Crea distancia emocional con el adulto de referencia▪ Crea desamparo en el menor porque podría interpretarse que las
personas que se supone más me quieren, me agreden con su incursión
Por todo ello vamos a crear un nuevo
clima de comunicación
Empecemos a hablar… ¿pero cómo?
▪ No agobiar a preguntas sobre la otra persona (“tú”), evitaremos que suene a interrogatorio
▪ Plantear siempre preguntas en primera persona del singular (“yo”)
Hoy me he levantado con ganas de ….Hoy me apetece hacer….
Tengo unas ganas tremendas de…Voy a intentar aunque no sé si me saldrá….
He decidido que hoy…Hoy no me siento capaz de…
¿Cómo empezamos a hablar?
1º en forma de yo
2º centradas en el hoy
3º puedo plantear incertidumbre y cómo la voy a abordar, sin expectativas altas de éxito, el intentarlo es el éxito
Pero quiero saber sobre él, no contar sobre mí…
¿Por qué es interesante empezar a hablar sobre nosotros en lugar de preguntar directamente?
▪ Las preguntas directas pueden vivirse como bruscas y pueden provocar respuestas defensivas
▪ Las preguntas directas pueden vivirse como una invasión a la intimidad y pueden provocar respuestas evitativas
▪ Las preguntas directas pueden confundirse con un ataque o reproche y convertirseen el inicio de una discusión
va en contra de nuestro propósito
Entendido, ¿cómo se hace eso natural?
Estrategias para comenzar a conectar
▪ Mejor preguntar en espiral = hablar de un tema en genérico, en abstracto, e ir concretando desde algo lejano a algo que me podría estar pasando a mí
“¿qué pasaría si …?” “he leído una noticia sobre… y no sé muy bien cómo interpretarla ¿qué opinas sobre…?”
▪ Plantear las preguntas o afirmaciones en forma condicional o incluso plantear escenarios hipotéticos y cómo reaccionaríamos
“si me pasara a mí eso, creo que me sentiría…”“creo que si eso me sucediese a mí me sentiría …, igual eso algo parecido lo que te
sucede a ti”
ellos también se asustan y no
saben lo que se espera de ellos, o
lo que les espera,
y podemos hablar de ello y
reconocerlo
en una situación de emergencia
necesitan a alguien que esté calmado, que transmita seguridad
dentro de todo el marco de inseguridad e incertidumbre en el
que nos encontramos
en una situación de emergencia
la mejor persona que puede cubrir ese papel es la persona de referencia que tenga el menor
▪ Podemos lanzar ideas de lo más absurdas, pasando por las simples y alguna de las crudas que podrían estar afectando al joven, como trampolín para sacar esos temas delicados
▪ No importa que acertemos a la primera con el tema que le ronda
▪ Lo que importa es que nos vean y nos escuchen cómo nos podemos sentir como adultos, y cómo nos las ingeniamos para afrontar lo que quiera que sea
▪ Eso facilita que el joven se sienta no tan lejano al adulto y es más probable que nos cuenta alguna cosa. Si ve nuestra vulnerabilidad, es más fácil que muestre la suya
¿y esta forma de hablar por qué funciona?
Los jóvenes necesitan adultos que muestren tanto fortalezas como debilidades
es un buen ejemplo de cómo
ser en la vida
Cuando nos cuente lo que sea, por gordo que sea, no podemos escandalizarnos, ni alarmarnos, ni comenzar
a gritar, ni comenzar a increpar de ningún modo
¡ojo!
solo deberíamos escuchar y acompañar (1º)y
ayudar como podamos si nos deja (2º)
▪ Conversar con otra persona no solo implica expresar nuestro punto de vista, sino también saber escuchar
▪ La escucha activa permite atender plenamente a lo que nos quiere decir la otra persona
▪ No se debe confundir con no opinar, no entender, no participar, acatar
▪ Se trata de escuchar ya tender a los argumentos de la otra persona, simplemente, sin imponer ni argumentos ni emociones (ej. eso no te tiene que provocar enfado)
¿y cómo se hace eso de escuchar sin saltar?
La escucha activa, sin juzgar, es respetuosa con las emociones de quien nos habla
es una herramienta útil siempre, no solo
en confinamiento
Cuando NO escuchamos…
▪ ¿Cuándo me toca hablar? (pensamos en lo que tenemos que decir, que no se nos olvide, y dejamos de prestar atención a lo que nos dicen)
▪ Solo escuchamos lo que nos interesa, lo que queremos oír
▪ ¿Por qué te lo tomas así a la tremenda? (exagerando)
▪ Si ya sé lo que me vas a decir
▪ Si ya sé cómo te sientes
▪ Hacer comentarios distractores que interrumpen el hilo
El que habla y siente que NO es escuchado…▪ No me interrumpas, espera a que acabe
antes de interrumpir
▪ Ahora me he perdido, ya no recuerdo lo que iba a decir
▪ ¿Por qué te quedas solo con eso? ¿y el resto de cosas que te he dicho?
▪ ¿Cómo puedes saber lo que te iba a decir sino he acabado?
▪ ¿Cómo puedes saber cómo me siento si nohe acabado?
▪ Si llego a saber que te lo tomas así, no te cuento nada
Cuando sí escuchamos…▪ Tómate tu tiempo, estoy escuchando, no hay prisa (incluso puedes rectificar)
▪ No sabía que te sentías de ese modo
▪ Ahora puedo ver que esto te está afectando de ese modo
▪ Como si fuéramos una audiencia fresca, que estamos descubriendo a la persona que escuchamos
▪ Hacemos preguntas interesantes sobre el tema que escuchamos
▪ Hacemos reconocimiento explícito del valor del contenido expresado, del ingenio con el que se ha dicho, del humor expresado, etc., antes de expresar nuestro punto de vista personal
▪ Nos concentramos en lo que la persona trata de decir y no nos fijamos en exceso en las palabras que emplean, la idea general sobre detalles específicos
▪ Permitir que la persona se queje sin entrar en discusión (ponerse a la defensiva, comprender su punto de vista exclusivamente mientras escuchamos; aceptar críticas sin ponerse a la defensiva)
▪ La escucha genuina implica anular la memoria, el deseo y el juicio, y por unos momentos al menos, existir solo para la otra persona
¿qué podría pensar la persona de nosotros si siente que la
escuchamos?
¿qué podría pensar la persona de nosotros si siente que NO la
escuchamos?
¿y qué podemos preguntar?
Preguntas efectivas Preguntas NO efectivas¿qué tal ha ido la clase que acabas
de tener?
¿cómo les va la gente con la que te conectas?
¿con quién te has conectado?
¿me cuentas algo nuevo que has estudiado hoy?
Más específico de la persona, de sus circunstancias, de sus intereses
¿qué tal van las cosas?
¿qué tal ha ido el día?
¿alguna novedad?
Demasiado generales, podrían servir para cualquier persona
Entonces, ¿siempre tengo que estar de conversación y no puedo ordenar nada?
Tener habilidades de escucha no implica ir de colegas y perder mi papel de padre o madre
▪ Especialmente en situación de confinamiento, los mismos adultos somos los que ordenan, riñen, juegan y comprenden
▪ Podemos buscar horas del día, espacios concretos de la casa, o algún tipo de gesto o detalle diferenciador de en qué momento estamos (la voz suele ser muy potente)
▪ Recordar las obligaciones se puede hacer desde la amabilidad también
▪ Reservemos momentos para no ver, no mirar con lupa lo que hacen (ej. deberían estar aprovechando el tiempo)
▪ Reservemos momentos para compartir cosas
¿y qué podemos compartir?
No hace falta inventar cosas espectaculares, la cotidianeidad ya nos ofrece muchas oportunidades
▪ Ordenar la casa▪ Recetas▪ Ver tv▪ Juegos de mesa▪ Lectura▪ Manualidades▪ Música▪ Etc.
El secreto está en la actitud del adulto y no en el interés de
la tarea en sí
Le propongo cosas y siempre dice no
La actitud del adulto y no desfallecer en los intentos serán clave para que el joven se enganche
1) Expresar muchas ganas de hacerlo con ellos
2) Empezar a hacerlo sin ellos, pero que se haga notorio lo bien que os lo pasáis
3) Si se enganchan a mitad, no reprocharles sino agradecerles su incorporación, y demostrar mucha alegría de que se hayan sumado, porque nos hacen falta
4) En cuanto se acabe la actividad, agradecer de forma sincera y emocionada lo genial de contar con ellos
¿Y es normal que algunas cosas que proponemos no le gusten?
¿le hemos preguntado? ¿le he contado lo que a mí me gusta?
¿le he contando por qué me gusta hacerlo con él?
▪ Pensar que nos tienen que gustar las mismas cosas es demasiado ilusorio
▪ Podemos negociar “por cariño”, lo haces por mí, pero sin chantajes
▪ Podemos crear calendario de actividades, turnos, en los que todos hacen el esfuerzo de compartir las cosas que a otra persona le gusta
¿Y si descubro que se lo está pasando mal?
Descubrir que alguien a quien queremos lo pasa mal no es fácil de llevar
▪ Debemos evitar negar las emociones (no te sientas así, eso no tiene importancia, ahora no pienses en esas cosas)
▪ Aceptaremos (validaremos) cualquier emoción que expresen
▪ No solucionaremos los problemas del joven
▪ Sí les ayudaremos a pensar en voz alta sobre el tema, a pensar en voz alta sobre cómo podría afrontar la situación, a elaborar una solución juntos, si se puede
▪ Debemos aceptar que no podemos ayudar a quien no quiere ser ayudado, en ese caso, le recordaremos que cuenta con nosotros, cuando esté listo nos tendrá
los adultos podemos transmitir seguridad de que
todo irá bien,
y eso no quiere decir que va a salir genial, sino
que lo afrontaremos como mejor sepamos en el momento
que nos toque, y reconocemos que no sabemos
hacerlo y por eso la opción que elijamos sonará a la mejor, y la llevaremos a cabo y luego podremos reflexionar (a toro
pasado) si ha sido acertada o no, pero para rectificarhacia delante y no para culpabilizar
¿Y por qué parece que se comunican con todo el mundo menos conmigo ?
Las relaciones virtuales y las relaciones reales son diferentes
▪ Las relaciones virtuales tienen una inmediatez y una libertad de expresión que las reales a veces no tienen
▪ Se pueden magnificar las emociones o confundir (dependiendo de las horas conectadas)
esta noche▪ Diferenciar imaginación y realidad implica madurez y tolerancia en la espera para el
encuentro en persona
▪ Podemos ayudarles a tener calma y no precipitarse (sexting)
Por eso puedensalir parejas en
tiempos deconfinamiento
Hábitos de comunicación que podemos practicar siempre
¡hasta el próximo café!
Café virtual los lunes
Amanda Meliá de Alba (psicóloga)
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