premios literarios ies auringis

33
23 de abril de 2013 XXXI Certamen literario del IES Auringis Trabajos premiados XXXI Certamen literario del IES Auringis Trabajos premiados IES AURINGIS. JAÉN Página - 21 -

Upload: biblioauringis-ies-auringis

Post on 18-Mar-2016

219 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

literatura

TRANSCRIPT

Page 1: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

XXXI Certamen literario

del IES Auringis

Trabajos premiados

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 2: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Primer Premio de Bachillerato y ciclos formativos

Aquel Lugar

Esther Sierra Fernández 2º CFGM Atención sociosanitaria

AQUEL LUGAR Al llegar a aquel lugar, una horda de cartas y revistas, a las que ella estaba suscrita, yacían vagabundas en el felpudo de la entrada, con las páginas amarillentas y los bordes doblados por la humedad. Habían pasado más de tres años desde la última vez que subí por estas escaleras, y ahora había que jugar a la rayuela con los escalones o coger el ascensor, algo imposible desde el incendio de 1985.

Me enfrento al crujido de una puerta que nunca ha sido engrasada, a la luz de la luna pegándome en la cara desde un ventanal y a mil recuerdos que desfilan por el salón en traje de luto. Las paredes desconchadas y los cristales moteados por las gotas de lluvia susurraban ese "mañana" cuando hablábamos de limpiar, éramos unos alocados a los que les faltaba el tiempo. La cama seguía deshecha desde que decidimos pasar un invierno entero metidos dentro. Ahora es primavera y el edredón de plumas que compramos por tus pies helados me hace menos falta que echarte de menos, llega la temporada en la que no me dejas dormir.

Y estas ojeras, tu regalo de despedida, qué bien me sientan ahora que ya no estás, con todo este tiempo para pasarlo conmigo.

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 3: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Solo quedan cintas anticuadas manchadas de pintura y amasadas detrás de la puerta, al lado de un regimiento de botellas de vino y ron, vodka, tequila y algo de whisky. Desapareces poco a poco bajo los focos de tu gran escenario, aunque yo sigo saltando con el mechero encendido pidiendo un bis. Soy un gran fan de esos que se quedan después del concierto para conocer a las estrellas, sin saber que ya llevan apagadas mucho tiempo. Quiero escuchar esas canciones antiguas en un radio-casete gigante, como solíamos hacer la mayor parte del tiempo mientras nos dejábamos crecer el pelo con un pañuelo pirata colgado de alguna parte. El mío era rojo y a ti te encantaba. El tuyo era morado. Me lo quitaste y te lo pusiste como una cinta del pelo cuando lo dejé en el bolsillo del pantalón para ducharme. Te hiciste mil fotos con tu cámara polaroid, las colgaste por todo el cuarto de baño y escribiste en todas con tu pintalabios en formato beso. Ahora, a la pared del cuarto de baño le faltan 22 azulejos, y a las cortinas de la ducha, le faltan las cortinas (a mis cortinas lo único que les falta eres tú detrás de ellas), solo quedan las anillas balanceándose por la barra como una stripper de pole-dance. Joder con el día en que las arrancamos tú contra la pared y yo escurriéndome por tu espalda por no comprar patitos de goma, recuerdo que no parabas de reírte de esa forma que solo tú sabías hacer. 

Ahora este lugar es solo un mausoleo para las polillas que se quedaron atrapadas dentro de los armarios, muriendo encima de libros que hacen de esquelas y de cajas de zapatos vacías. Y los gatos más macarras maúllan en el tejado para hacerme compañía, y una familia de arañas ha salido de su escondite para preguntarme dónde estás, incluso la vecina del tercero está subiendo para quejarse del ruido que siempre hacemos, pero no eres tú quien abre la puerta y se da cuenta de que solo soy yo y mi silenciosa soledad. De algún modo siempre supe que acabaría volviendo con las manos vacías, y que una banda de grillos cantautores tocarían boleros para darme la bienvenida mientras acaricio una cerveza que llamaría por tu nombre, a su boca la tuya y su sabor tu piel. Pero hoy no es Octubre, ni lunes, ni tú te llamas tristeza, porque todas las vocales de tu nombre son abiertas, ni tengo cerveza, ni luz, ni gas, ni nevera. Nunca tuvimos nevera, decías que la comida tenía fobia a los espacios cerrados, y

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 4: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

me hacías salir a comprar comida china para toda la semana, nunca entendí esa gilipollez. En su lugar hay una maceta con una amapola de mentira… como todo lo demás.

Ya nada es lo mismo desde que tú no cuidas de mi jardín.

Llevaba tanto tiempo flotando por los tenebrosos pasillos de mi castillo que ha amanecido mucho antes de que empezase a darme cuenta. Aquí por las mañanas huele a lavanda y a café recién hecho, y el perro del vecino de enfrente sale detrás de la fiera en cuarenta y cinco grados con el suelo, tiene un dogo alemán que pesa más que él. Invoco al abogado del diablo para pactar su muerte a cambio de mi alma ¡¡kiki, miliki, likli, ama Tiro-Evgún, Regle-makla, Laga, boga, segle, sahi-sohi-belle!!  ¡¡Aika-muti!! ¡Larga vida a Evgún!, le pido que calle esos ladridos nocturnos y melancólicos que mantiene en vela despierta a toda una avenida, y a los vagabundos que intentan descansar entre cartones y penumbra y latas de atún. Tú antes te levantabas e ibas a visitar al vecino casi en ropa interior, le pedias por favor que se callara y él obedecía sin protestar, pero ahora que ya no estás el vecindario se ha convertido en una callejuela de noctámbulos y adictos a las pastillas sin receta.

La bruma vespertina vacía las calles de cualquier epifanía sobresaliente y las deja inundadas de la más absoluta normalidad mediocre, amontonando bajo las farolas a parejas besuconas que se despiden entre besos y dientes. A estas horas las cloacas se tragan el amor de garrafón que se derrama siempre en esta época del año. Los carteles de neón se apagan y los carteristas empiezan con su jornada laboral.

Las terrazas se llenan de desayunos y novelas y chicas que salen de sus portales siendo divas y modelos, princesas imposibles que sonríen en tono carmín y vestidos de flores azules. Pero son las mañanas francesas las que te roban el protagonismo, y no sus estampados. Tú tenías el mejor

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 5: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

desnudo del mundo y la ropa siempre te sentaba de más, nadie podía hacerte frente. Cualquier otra solo empeoraría las cosas, sería como beber agua del grifo después de haber probado la de botella.

Siempre hablo de ti en tu máximo exponente, como si fueras la última página de un libro muy gordo, un final épico de cierre de saga… cuando en realidad nuestro final fue de los de suburbio y con prisas por terminar. Cruel, despiadado y poco creativo. Como aquella vez que fingí mi muerte con un bote de kétchup en medio del salón, aguanté la respiración más tiempo del que pude contar y cerré los ojos esperando a que pasaras. Cuando no pude más luché por mi resurrección y allí estabas, tumbada a mi lado dibujando corazones en el charco de kétchup, como si no pasara nada, evitando entender el porqué de esa situación, como si yo no pudiera abandonarte.

Hace ya más de tres años que desaparecimos sin dejar rastro de este paraíso, dividiendo el mundo en dos mitades prohibidas que prometimos no volver a pisar, dejando París en aguas internacionales, lugar de nadie, aunque yo no soy de ninguna parte, y tú nunca has tenido dueño. La tierra parecía gritar y llorar al mismo tiempo, y el corazón me latía como una bomba de relojería cada vez que me acercaba a una sombra que se pareciese a ti… y el último día de cada mes, te ignoraba. Antes nada era suficiente, antes de eso, antes de quererte.

Cuando llegué a este lugar las malas lenguas ya hablaban sobre ti (Cuando te conocí los chicos hacían cola solo para verte). Por aquél entonces yo era un antihéroe de barrio enamorado de la vida y de los atardeceres. Impulsivo, maniático, mentiroso y un irresponsable. Solía bañarme desnudo en tu piscina cuando se hacía demasiado tarde para beber, esperaba que bajaras a hacerme compañía, pero en tu lugar venían Batman y Superman para llevarme a su cueva secreta. Cabrones. Y tú puteando por la ventana, enseñándome el escote y a tus estúpidas compañías, me encantaban todos esos cualquiera que te llevabas a la

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 6: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

cama, te miraban embobados sin perderte de vista, se podría decir que jamás pestañeaban. Quizás yo hice lo mismo y no me di cuenta.

Pero un día te diste conmigo de frente y no pudiste dejarme escapar y que fuera por libre. Me obligaste a firmar mi propia sentencia de muerte y endeudaste mi piel con la tuya, y ahora cumplo condena. Pero quién se habría negado a romper las distancias sin saltarse las normas de seguridad. Tú expandiste el círculo de peligro haciéndome creer que ya no había de qué esconderse.

Y tú y todas estas exigencias, ¿a qué venís? ¿a molestarme?

Ojalá tuviera conexión directa con mis pulmones, algún modo de respirar por las costillas, alguna forma de que los malos gestos y los pestañeos lentos girando la cara fueran suficientes para no convertirme en piedra, que ese “no me importa” de trasfondo fuera la realidad, “who cares?” pero ese no es mi estilo, y tener fruncido el ceño todo el día y parecer un ignorante despreocupado, no, ponerle el dedo en la boca a ese no tan profundo y con tantas exclamaciones, y perderte en una O eterna que cae al vacío sin remedio ni esperanza, como si fuera una lágrima de esas que tienen los que usan gafas cuando se las quitan, tú eras mis gafas, y ahora no veo una mierda más allá de ti.

Empiezo a encharcarme con tanto tú y tanto drama, y justo cuando empiezo a disfrutar del sol a través de las nubes grises que empañan el cielo, me avisa el camarero de que lo peor está por llegar, hace señas hacia un lado como si fuera el capitán de un barco y estuviésemos a punto de naufragar. A estribor. Yo, que me río de los temporales y de las tempestades y del frío polar, Yo, el mago de Oz, y tú, Dorothy, qué vienes a pedirme esta vez. Cansado de tu ausencia y aburrido de tu compañía,

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 7: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

empotro tu mirada contra la mía y le pido al camarero que me sirva otro café.

Había olvidado el sonido que hacían sus labios al hablar. Ella miraba de medio lado, asombrada por la curiosidad de cualquier detalle perdido. Aunque no dijo nada yo sabía que algo andaba mal, aunque no había memoria en todos estos años, y los anteriores habían quedado demasiado atrás. Éramos dos desconocidos con el mismo pasado, dos ancianos más. El tiempo había acabado con las últimas palabras que nos quedaban por decir, y ahora más que nunca sentía cómo todo se alejaba. Consumí el último trago con tu nombre, y te dejé marchar.

Nada mejor que no echarte de menos

Mis recuerdos me han dado acceso y tiempo ilimitado para desplazarme a través de ellos. Solo hoy. Lo que no me han permitido ha sido elegir el destino, que irremediablemente a su antojo, no ha sido ni será nada bueno. En vez de recordarme ese lugar que tanto me gusta del planeta o esa canción con la que pego brincos de alegría, me hacen ver proyectado en las paredes de mi habitación, todo el pasado que a día de hoy ni si quiera intento olvidar, porque si no, lo recordaría. Y aquí entre sollozos y lagrimas en éste turbio salón con cuatro paredes blancas, decoradas al gusto del consumidor y con olor a cerrado, viejo y desconocido, me dedico a escribir esta mierda que sale de mi cabeza al tener un mal día o una consecución de los mismos, más bien lo último.

No creo que me influya el día gris o la lluvia, tampoco el frío, lo que me hace estar así es este agobio que me encadena a todo lo inútil que hay aquí, en mi cabeza; el estrés de mi día a día, por no dar abasto con nada y mi cenicero lleno de muerte y delirios que saben bien, pero sientan mal. Casi como tus recuerdos, aquellos que no me dedico a proyectar nunca por gusto.

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 8: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Hoy es un día más en el que intento que nada sea mejor que no echarte de menos.

Esther Sierra Fernández

2º de TASS , IES Auringis. Jaén

Segundo Premio de Bachillerato y ciclos formativos

Tierras de libertad

Pedro Casablanca Gallo 1º Bachillerato F

Miraba a la ventana, la fría estampa del invierno se cernía sobre el paisaje, centrado en las entrañas de una España cada vez más quebrada de fraudulentos negocios, ira reprimida en hogares sin necesidad de destacarse y lágrimas desoladoras del triste paraje helado propio de esta estación.

Y es que, por estas fechas, solo se ven tristezas, gente en casa y braseros calentando las piernas de ancianos esperando su hora, enojados o

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 9: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

contentos, sin embargo, a la espera. Algunos ojos tienen la capacidad de ver distintas posturas, depende de la edad, dice mi padre, yo, aun habiendo puesto en entredicho esa hipótesis, tengo otra, basada en el estado de ánimo.

Es verdad que hoy no estoy “para tirar cohetes”, regalar sonrisas, hacer buenos actos, en resumen, feliz.

Para esto, para expresarme y no pagarla con nadie, propongo escribir una especie de relato que quizás pueda ayudarme en esta fase, espero que se me dé bien ajustar un personaje que ni siquiera yo conozco al tiempo que me dure la nostalgia que padezco. Corro el riesgo de que no cobre sentido, de que tenga un final abierto, de que no consiga reafirmar mi teoría, pero esto, básicamente es para divertirme, aunque como siempre, acabaré llorando. Estoy preparado.

Allá voy.

Tierras de libertad.Era una fría mañana de enero, cuando me dispuse a abrir los ojos y dirigirme al lugar donde acaecían la mayoría de adopciones de aprendizaje que teníamos los niños de 15 años como yo en este tiempo, el instituto. 1.991, bonito año decía mi madre, siempre le ha gustado la palabra capicúa, mencionada varias veces por un redactor del diario de Jaén.

Cuando me mojé la cara para espabilar un poco y abortar los sueños aún contenidos en mi cabeza, escuché la voz mañanera de mi madre avisando

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 10: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

de que mi vaso caliente de leche estaba preparado. Sequé las salpicaduras del espejo en el que se proyectaba mi reflejo soñador y acudí a la cocina, donde ella me esperaba ya.

Saludé a mi madre con un halagador beso en la mejilla que contestó con amor sincero, y contesté a las típicas preguntas que me hacía después de abrir los ojos, tales como lo bien que he dormido o si he vuelto a soñar con mi padre, fallecido en un accidente de tráfico pocos meses antes de la Navidad. A pesar de su belleza, la notaba vacía, le faltaba su presencia, su cobijo, su amor incondicional, su pasión al besarla al llegar cansado del trabajo. Verdad que tenían alguna que otras peleas, pero era ficción comparado con lo que solía haber en otras familias algo más desordenadas que la nuestra, pero ese no es mi cometido.

Cuando me tomé el vaso de leche, quise salir rápido de la cocina, pues no aguantaba un llanto más… Nunca me ha gustado ver una lágrima, síntoma de abatimiento.

Bufanda en mano, abrigo abrochado por mi fiel compañera del camino, salí de mi casa, necesitaba aire fresco, despertar de una vez. Volver a sentir el frío.

Diez minutos con una radio de propaganda escuchando las cuñas publicitarias que me otorgaban las sintonías que me colocó mi abuelo, un manitas en la tecnología, no eran nada para mí. Me encantaba cerrar los ojos cuando pasaba escuchando la radio por la perfumería donde trabajaba Loli, la vecina. Las fragancias de muestra que ofrecía danzaban en mis fosas nasales cual tango en Argentina que se puso de moda, aunque nadie en esta ciudad conocía. No sé donde vi uno, pero la verdad, me llamó la atención. Los coches antiguos y el claxon que los distinguía iban a mi paso para ir a trabajar, cada uno tenía su rol en la vida. El mío era cruzar cuanto antes las puertas del instituto, se me estaba haciendo un poco tarde... He de aligerar, pensé.

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 11: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Ya esperaba el director con su inconfundible voz recordando una vez más a los rezagados que las puertas se estaban cerrando, no sé de dónde demonios saca esta persona la energía por la mañana, seguramente el nesquik suyo, no es de marca blanca.

Siempre solía mantenerme más reservado entre las personas, no me gustaba comentar mi estado, mi forma de ser me lo impedía, espero que no acabe conmigo. Los días laborables por la mañana transcurrían serenos, tranquilos, apacibles… Lo que más me gustaba era la aglomeración que se daba en los recreos, que evitaba acudiendo a la biblioteca. Me encantaban los libros, me traen buenos recuerdos, me traen buenos momentos, aunque los leía porque me transportaban a un mundo más feliz, sosegado y sin complicaciones. No les tenía tanto miedo como a la realidad, pues yo elegía su forma, su final, su único objetivo era envolverme con su textura, sus letras…

Les tenía envidia a cada uno de ellos, la vida de cada personaje era distinta, vivían aventuras, cada página la contaba y la finalidad que tenía era que alguna vez, alguien contara la mía.

“Tierras de libertad “era mi libro favorito, escrito por Gracián Olmedo, no era muy comercial, por eso me gustaba. Despreciaba totalmente la infelicidad en ese libro, directamente cualquier sentimiento era erradicado, algo precioso y digno de leer, aunque de mis manos, no iba a salir, era como un pacto que hice con él, donde nadie lo regía, sólo yo. Algo egoísta, cierto, pero era el único souvenir que poseía. Cuando leía el libro podía tirarme horas y horas que no me daba tiempo, los estudios me daban un poco igual, mi momento feliz era sagrado, ya que no tenía muchos Por lo que no era mi intención darlo o perderlo. Lo protegía… Comencé a leer.

Vuelta a casa, auriculares en mis tímpanos y la sintonía de kiss FM. Estaba preparado para el camino. Anduve durante bastante tiempo, no sé que me pasaba que el paseo se me hacía cada vez más y más largo, en otras

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 12: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

sentía que volaba, raro… De pronto, noté que algo no iba bien, había algo que no podía estar ahí, no era su sitio, negaba pero no cesaba, ¿Qué hace aquí?¿ Qué haces tú aquí?¿ Qué haces aquí… Papá?

Un escalofrío me recorrió el cuerpo, no podía ser, me había hecho trizas los ojos, los tenía colorados de tanto pulírmelos con los muñones de la mano. Aún así, él permanecía impasible al frío, al amor, al odio por haberse ido tan pronto, por habernos dejados solos, por permitirme el anhelo de su estancia, la constancia de su ausencia…

-Lo siento, hijo, lo siento muchísimo por haberme ido de tu lado, por tener que hacer mención al destrozo de tu psique, de tu sonrisa, lo siento si el edificio que constituía nuestra familia se ha derrumbado sin un cimiento que lo complemente, pienso que por eso estoy aquí, para pedirte perdón por descuidar la carretera, por perderme la vida que os queda, de verdad que fue sólo un momento, pero me jugó una mala pasada.

Quiero que guíes a tu madre, a tu miedo, a tu vida, a ti mismo, no seas un velero, por favor es lo que menos necesito, ver desde aquí cómo desaprovechas el camino que te brindé hace 15 años-.

-¿Por qué te veo?¿Estoy…?- Pregunté angustiado, aún no podía ser mi hora.

-No, hijo mío, siempre tan hipocondriaco y extremista… Tan sólo te has quedado durmiendo mientras leías ese libro que no soltabas ni cuando teníamos que comer. Siempre me he preguntado que tendrá.-

- Papá, ella ya no es la misma, la soledad ha acabado con su existencia. La efímera rutina que tenía ha volado, han violado su felicidad los fantasmas de tu desaparición. No puedo ser fuerte por los dos, no puedo corroborar

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 13: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

que siga viva del todo… Desde que te fuiste, una porción de ella se escapó contigo, cada trozo de cristal que se rompió se dividió en dos formando sus continuas lágrimas. ¿Papá, que puedo hacer? Añoro su sonrisa. Añoro mi estabilidad-.

- Sé que las marchas siempre llegan a ser duras, un hijo no debe quedarse sin su padre en una edad tan temprana como la tuya. Soy culpable de tu sin vivir, de tus marcas en el corazón por la falta de quien te dio la vida. Respecto a tu madre, cada lágrima por muy escueta que sea, es un clavo más en mi ataúd, una condena más. La anhelo más que a nada. ¿ Me preguntas qué puedes hacer? Lo que haría yo es hacer lo que hizo ella conmigo…-

-¿ Y qué hizo? Por muy difícil que sea prometo intentarlo y conseguirlo, no quiero un llanto más en la casa en la que hemos sufrido tanto ya-.

Entonces mi padre, comenzó a tartamudear, a sentir como si sus órganos quisieran salir, respirar el aire con sabor a libertad, esa libertad que para él nunca volverá. Ayudado de lágrimas, un dolor que sentía la coraza que me había creado por motivo de su huida a un lugar por ahora inaccesible para mí... Dijo las palabras que, a pesar de que fuera un sueño, una revelación, me da exactamente igual lo que fuera, me dieron motivos para pensar que mi padre, era el más romántico del mundo y el más enamorado de su vida.

-Hijo, dale la mano a tu madre, agárrasela bien fuerte, y grita con ella, disfruta con ella los años que le quedan, porque a pesar de que no esté yo, no está sola, te tiene a ti, tiene a lo más importante de la faz de la tierra por el momento. Por último, mírala a la cara, sécale las lágrimas de la cara con el pulgar y dile… Mamá, voy a salvarte la vida-.

Con lágrimas en los ojos tan sólo pude responder un simple.. Te lo prometo, papá.

-Despierta hijo, es hora de que vayas a casa y cuides de mamá. Te necesita ahí.

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 14: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

El colegio ya estaba mandando los últimos avisos para salir de clase y poder comer, acción que todos ansían desde cuarta hora, contando los profesores. Cuando alcé la cabeza del libro, estaba empapado, aunque desconocía el porqué. Mientras la profesora que le tocaba llevar la biblioteca me daba la bienvenida al mundo de los despiertos, recogía mis cosas y mi bufanda y me disponía a salir por la puerta, rellena de insultos y memeces hacia los profesores.

En la puerta principal podía ver las gotas de agua precipitándose al vacío, una sinfonía de colores plasmados en paraguas con brillos inigualables por el sol que salía esporádicamente. Podía escuchar las risas de los recién entrados de la escuela primaria. A los más mayores y fanfarrones fumando por el estrés que le suponía dar clase. Podía ver como todo me rodeaba, me invitaba a ser feliz y a seguir para adelante, notaba que él velaba por mí, por mi madre, por ambos.

Corrí hacia mi casa, mi vida la sentía rápida, feliz y sin miedo a nada. Todo pasaba a mí alrededor, las gotas inundaban mis ojos, el frío me hacía ir más veloz para calentar mi cuerpo, eufórico por lo que había experimentado en un sueño, sin embargo tan real como la vida misma. Esta vez los diez minutos fueron cuatro, uno para pensar en mí, otro para pensar en mi padre, otro para mi madre, y el último para la perfumería de Loli.

Cuando abrí la puerta, miré el cascabel que mi padre tenía en su llavero y recordé la felicidad que me recorría el cuerpo al escucharlo subir por las escaleras del portal. Llegar a casa.

Abrí y me encontré a mi madre, me miró, y la miré. Estaba radiante, preciosa como siempre, como una rosa, como la mujer que era. La miré, y me miró, me vio empapado, pero feliz, con la sonrisa y la cabeza bien alta.

Me secó un poco con la manga de su albornoz, y sonrió.

-¿Sabes? He soñado algo muy raro, hijo mío.-

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 15: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Le pregunté qué había soñado con muchas ganas y sin preámbulos.

-Te he visto hablando con papá, desde tu perfumería favorita, te decía cosas tan propias suyas, alentando su recuerdo, desvaneciendo los malos momentos que hemos pasado sin él. Te decía que…

En ese momento, y sin que sirviera de precedente, interrumpí a mi madre, la tomé de la mano, y salí a dar un paseo con ella.

-Que te salvara la vida de esta manera mamá, que no quiere que te sientas sola. Mamá, la vida nos sigue sonriendo, y debemos mostrar a papá, se encuentra en la comisura de tus labios cuando sonríes, mostremos que aún sigue vivo, que vela por nosotros-.

-Hijo…-

-Mamá, no digas nada, sólo cierra los ojos y nota su presencia.-

Cuando la llevé hasta donde quería, le dije que abriera los ojos, que quería mostrarle una cosa.

Pude leer “Aquí yace Gracián Olmedo, Escritor. Fallecido en un accidente de tráfico. Tu mujer y tu hijo no logran olvidarte”

Arrojé el libro a la tumba de mi padre, el libro que él escribió y del que no pudo disfrutar todo lo que quiso. Supongo que es eso lo que lo hace especial… Lo que tendrá es eso, papá. Pensé.

-Gracias por darme esta alegría de leer tus palabras plasmadas en un libro, gracias de verdad, papá. Ahora cuidaré yo de mamá, te lo prometo-.

Mi madre sonrió soltando las últimas lágrimas que le quedaban y dijo con la boca llena de pasión… Te amé, y nunca dejaré de hacerlo.

Abracé a mi madre y me despedí de él sonriendo, mientras poco a poco, le daba la espalda a la lápida que visité durante el resto de mis días.

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 16: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Pedro Casablanca Gallo

1º Bachillerato F. IES Auringis. Jaén

Accésit de Bachillerato y ciclos formativos

El latido africano

Elvira Marín Caba 2º Bachillerato G

EL LATIDO AFRICANO

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 17: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

Yacía sobre los lazos entre las hojas y las ramas arbóreas que simulaban una cama para la tribu africana. Los risueños niños me rodeaban, me rozaban la piel (que parecía nieve al lado de la suya) con flores silvestres, impregnándome de un delicado olor a miel y a trigo. Me acariciaban y me cantaban. Ahora eran ellos los que cuidaban de mí. En seguida me desperté, y no pude evitar sonreír. Tuve que echarme un rato porque el día de ayer fue muy agotador. Una niña quedó atrapada por una trampa que, en realidad, iba dirigida a una cebra. Los hierros injustamente cazaron su pierna, atravesándola. Cuando nos avisaron, Seda y yo cogimos el único material del que disponíamos para operar y corrimos hasta el lugar donde la pobre chica había sido víctima de la indeseada intrusión de los blancos. Tardamos cerca de veinte interminables minutos. Cuando llegamos, encontramos a la pequeña inmóvil, sin si quiera estremecerse de dolor. En cambio, sus ojos negros como el azabache gritaban el sufrimiento que su cuerpo no podía expresar.

Tendría unos siete años y el color de su piel se camuflaba con la tierra húmeda de aquí. Su cuerpo estaba consumido por el hambre que había pasado en los últimos días. Le dimos agua porque tenía los labios resecos. Seda iba a destornillar la trampa para poder separar los perversos hierros más lenta y cuidadosamente, cuando me di cuenta de que sería más efectivo amputar la pierna. La palabra me golpeaba perniciosamente la cabeza, pero no quedaba otra opción. Le pregunté cómo se llamaba y Seda le contó en su idioma lo que le iba a ocurrir, con su voz angelical. Le hice beber un líquido para que no notase cómo se quedaría sin el motor que le permitía andar, correr, saltar, huir. Al menos, la operación fue exitosa. Seda la cogió entre sus brazos y la llevamos a su hogar, perdido entre la naturaleza salvaje. La dejamos a salvo con sus padres y les advertimos de que tuviesen cuidado con las trampas. Fabriqué rápidamente una muleta con fuertes ramas y se la tendí a la pequeña, ya despierta. Me dio un beso y entonces yo la abracé con fuerza. Los padres estaban muy agradecidos y nos suplicaron que nos quedásemos a pasar la

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 18: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

noche. Les explicamos que no podíamos ausentarnos por mucho tiempo así que les dejamos agua y pan y nos fuimos.

A la vuelta, los dos estábamos muy callados. Un sentimiento de indignación nos absorbía. Pero, sí que nos sentíamos muy ufanos de haber podido salvar aquel latido africano. No sabía si quiera por dónde íbamos ni qué dirección estábamos tomando. Los ojos de la niña era lo único que veía, en el suelo, en las flores, en los árboles, en el cielo.

Las miles de luciérnagas lívidas retenidas por aquella descomunal sábana negra me trajeron de vuelta, deleitándome. Allá en el occidente no tenía casi ninguna oportunidad de disfrutar del cielo como aquí, pues siempre una luz azafranada procedente de la superficie urbana tapaba cualquier atisbo de estrella. La luz de la plomiza farola congénita daba color a lo que nos rodeaba, calmando todas mis preocupaciones. De repente, Seda me dijo que no nos moviésemos. Había un león cerca. Pasó justo delante de nosotros, nos olisqueó y se fue. La tensión acumulada nos hizo romper a carcajadas cuando el león ya no podía oírnos. La estancia aquí es mucho más llevadera junto a Seda. Ahora que era de noche, casi no podía distinguir la silueta de su cuerpo. Se había levantado una brisa fresca y él aún así solo llevaba puesto sus pantalones de seda negros que le llegaban hasta las rodillas. Hablábamos en un delicioso inglés y él traducía a su entrañable idioma lo que yo le decía a los pacientes.

Cuando llegamos al poblado, todos dormían apaciblemente y él me acompañó hasta mi cabaña. Estaban hechas con ramas, hojas y paja y era lo suficientemente grande como para caber tumbado. Se quedó mirándome con esos atrayentes ojos, transmitiéndome una inmensa paz que recorrió todas las células de mi cuerpo, me sonrió y se fue.

Tuve que enjuagarme con el agua del pozo que había para toda la tribu y quitarme la sangre reseca. Caí exhausta sobre la manta que me habían regalado las mujeres. Era roja carmesí y tenía tejida una jirafa difuminada

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 19: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

en tonos pardos, que con su cuello alcanzaba el Rey Sol.Fue entonces cuando soñé que los niños me atendían a mí. En realidad solo había dormido unas cuatro horas cuando tuve que despertarme para ir a la consulta. Allí, recetaba los escasos medicamentos de los que disponía y ponía vacunas, escena que me reflejaba una semejanza con los rudimentarios artilugios que utilizaba el fantástico cirujano barbero Rob de El médico, en plumas de Noah Gordon.

Lo que más me gustaba era hablar con la gente de allí, que me enseñasen su cultura, y que me acogiesen. Pasaba la mayor parte del tiempo con un niño pequeño en brazos y cogiendo a otro de la mano, y los demás me seguían a donde fuese. Sentía una profunda angustia cuando pensaba que me tendría que ir de allí tarde o temprano, pues sería enviada a otro remoto lugar. La inolvidable imagen de los chicos a mi alrededor me recordaba a la mujer del protagonista de El jardinero fiel.

Cuando quedaban unas horas para el anochecer, cerré la consulta y me dirigí a mi cabaña, para descansar otro poco. Durante mi estancia aquí había aprendido a vivir con lo necesario, hecho que ansiaba descubrir cuando vivía en el derrochador occidente, que terminaba por depravar a algunos. También aprendí a comer lo necesario e incluso a pasar hambre y sed.

Los lánguidos rayos de la esfera áurea traspasaban juguetones los huecos que quedaban entre los nudos de la paja, acariciando suavemente mi piel cobriza y tostada. Me lavé con el jabón que había fabricado con esencia de miel y cereal, me puse el único vestido blanco que tenía, y con una flor púrpura sujeté mis cabellos castaños detrás de mi oreja.

Salí fuera. Mis pies se posaron sobre una fértil tierra húmeda. Quería ver bien la inverosímil puesta del Rey Sol en aquel aloque confín asalmonado.

Un agudo olor a café y a flores silvestres envolvió el ambiente. Notaba como esos brunos ojos absorbentes se posaban en mí. Me di la vuelta y Seda estaba justo detrás. Esta vez llevaba un níveo pantalón, como si de

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 20: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

un dulce café con leche personificado se tratase. Su piel era como la madera de cerezo y su altura rozaba la copa de los sabios árboles. Una capa de pelo africano cubría su lúcida cabeza y una perilla atezada protegía su barbilla. Sus manos son de violinista. Me rodea la cintura con sus brazos y bailamos “Dance me to the end of love” en voz de Leonard Cohen, que suena en nuestros corazones: “Báilame hacia tu belleza con un violín ardiente...”

Elvira Marín Caba

2º de Bachillerato. IES Auringis. Jaén

Mención de honor de Bachillerato y ciclos formativos

El mosquito Rigoleto

Álvaro Barranco Vela. 1º Bachillerato G

EL MOSQUITO RIGOLETO

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 21: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

¿Conocéis al mosquito Rigoleto? No es un mosquito cualquiera, es un mosquito muy culto al que le encantaba la música, por eso, un día, decidió ir al Teatro Infanta Leonor de Jaén para escuchar una famosa orquesta.

Cuando llegó, se coló por debajo de la puerta, y escuchó la música, ohhh!! Era la sinfonía ``Pastoral´´ de Beethoven. Así que decidió relajarse y disfrutar de la melodía cuando, de repente, una señora que tenía calor se abanicó y Rigoleto salió volando, con tan mala suerte que cayó dentro de una trompeta. El trompetista dio tal soplido que además de salir disparado, se quedó sordo. Pero ahí no quedó la cosa, gracias a sus reflejos, esquivó un golpe con el palo del tambor.

Rigoleto creyó que se había terminado esta pesadilla pero sin querer se metió en la caja de resonancia de un contrabajo, y aunque se tapaba los oídos el sonido era fuertísimo y vibrante. Si seguía metido en aquella caja durante más tiempo se quedaría sin tímpanos y hasta sin oídos, por no decir que con tanta vibración su cuerpo no resistiría y reventaría.

Temiendo por su vida, aceleró a la máxima velocidad que podían sus alas y consiguió salir entre dos cuerdas. ¡Qué alivio!

Pero al ir a tanta velocidad no pudo frenar a tiempo y se estampó dentro del piano, entre la maquinaria, con tan mala suerte que justo en ese momento el pianista cerró la tapa y se quedó encerrado. Cuando el pianista empezó a tocar comenzó a rebotar entre las cuerdas, pensó que allí seria su funeral y solo asistiría el mismo, así que como no quería morir ahí dentro, y con un gran esfuerzo se metió por un tubo y consiguió salir por el pedal.

Respiró aliviado creyendo que ya se había acabado, pero aun le quedaba un último susto y es que el pobre Rigoleto pasó junto al atril del

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -

Page 22: Premios literarios IEs Auringis

23 de abril de 2013

XXXI Certamen literario del IES Auringis

Trabajos premiados

director, justo cuando la pieza musical terminaba y éste daba un golpe fuerte en el atril con la batuta, por supuesto, os podéis imaginar encima de quién cayó la batuta.

Como ya habréis adivinado, la batuta dio de lleno en el mosquito, que con el impacto fue a parar a las gradas donde estaba el público .

Este mosquito debe de ser gafe!! Aquí no acaba la historia porque cuando llegaron los aplausos, alguien aplaudió encima de él, de manera que el aire del aplauso fue como una respiración boca a boca.

Puede parecer extraño, pero el mosquito Rigoleto sobrevivió y decidió que, a partir de ahora nunca más iba a acercarse a una orquesta. Los conciertos los vería por la tele.

Álvaro Barranco Vela

1º de bachillerato G. IES Auringis. Jaén

I E S A U R I N G I S . J A É N Página - 21 -