pedro núñez lopez

3
 1 El profesor Pedro Núñez , recibiendo un re conocimiento en el liceo José Gil Fortoul El arraigo vallepascuense  Pedro Núñez López [email protected]  Pedro Núñez López, es un profesor valle-arraigado desde el año 1967 cuando llegó al liceo  José Gil Fortoul , a hacerse cargo de la cátedra de Geografía Económica, en relevo del profe Jesús Rodríguez Blanco, este último de fugaz estancia, pero de grata recordación. En particular, su advertencia:    Si no estudian, serán unos profesionales mediocres . Aunque es oriundo de Turmero, Estado Aragua, también vivió en La Victoria, en Caracas y en Altagracia de Orituco, Estado Guárico. En esta última localidad nos reunimos para conversar acerca de su arraigo vallepascuense, mientras nos lleva a conocer el famoso Morro de Macaira.

Upload: degnis-romero

Post on 06-Feb-2018

221 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Pedro Núñez Lopez

7/21/2019 Pedro Núñez Lopez

http://slidepdf.com/reader/full/pedro-nunez-lopez 1/3

  1

El profesor Pedro Núñez, recibiendo un reconocimiento en el liceo José Gil Fortoul

El arraigo vallepascuense 

Pedro Núñez Ló[email protected] 

Pedro Núñez López, es un profesor valle-arraigado desde

el año 1967 cuando llegó al liceo “ José Gil Fortoul”, a hacerse

cargo de la cátedra de Geografía Económica, en relevo del

profe Jesús Rodríguez Blanco, este último de fugaz estancia,

pero de grata recordación. En particular, su advertencia: –  Si

no estudian, serán unos profesionales mediocres .

Aunque es oriundo de Turmero, Estado Aragua, también

vivió en La Victoria, en Caracas y en Altagracia de Orituco,

Estado Guárico. En esta última localidad nos reunimos para

conversar acerca de su arraigo vallepascuense, mientras nos

lleva a conocer el famoso Morro de Macaira.

Page 2: Pedro Núñez Lopez

7/21/2019 Pedro Núñez Lopez

http://slidepdf.com/reader/full/pedro-nunez-lopez 2/3

  2

Cuenta que: Mi papá, Pedro Núñez Ojeda, se fue para

Valle de la Pascua, en 1946, con un contrato para instalar la

 primera planta eléctrica del pueblo. Tiempo después, trabajó

en la construcción de la carretera Calabozo-Camaguán-San

Fernando . Luego se volvió a casar y   fue vecino tuyo en la calle

Camaleones, cerca de la gallera “El Maguey” .

Estudió bachillerato en el liceo “Ramón Buenahora” y

egresó del Pedagógico de Caracas. Recuerda que el profesor

Bartolomé Marín, jefe de la Zona Educativa Guárico-Apure-

Bolívar, quien hacía labores de scout, lo contactó y le dijo, en

tono de amenaza:  –  Mira, zarandajo, ya hablé con Guillermo

Cedeño (jefe del departamento de Sociales del IPC) y te voy a

enviar a trabajar con “ La Chata ”  Ledezma, a tiempo completo .

En 1969, sustituye al profesor José Gregorio “El Negro”

González, Sub-Director ancestral del Gil Fortoul y a partir de

1983 es nombrado Director del liceo, cargo que ocupa a lo

largo de diez años. En ese lapso le tocó adelantar programas

experimentales: Bachillerato Asistencial, mención enfermería,

Contabilidad, el Régimen Semestre Crédito y el Pre-militar.

En el ínterin llegamos a su finca que queda frente al

morro y donde siembra mango Heidi. Desde ese sitio la vista

es espectacular. Explica que, en las noches despejadas, se

divisan, a lo lejos, las tenues luces vallepascuenses, lo que

agrega una nota enigmática-melancólica a la conversa.

Se sabe que el amigo Héctor Ortega, estuvo de visita en

esa casa, lo que no se sabe es por qué teníamos la peregrina

idea de que también había pasado una temporada recluido en

uno de los centros de rehabilitación psiquiátrica, en Macaira.

Page 3: Pedro Núñez Lopez

7/21/2019 Pedro Núñez Lopez

http://slidepdf.com/reader/full/pedro-nunez-lopez 3/3

  3

Ya de regreso, le solicitamos su opinión acerca de la

profesora Isaura Ledezma, dado el alto grado de confianza

que compartió con ella durante varios años, definiéndola de

esta manera: Una gran mujer, con un incansable espíritu de

trabajo y un estricto e irreductible apego a lo moral. ¡Clara y

raspá!, ya que le decía las verdades en su cara a cualquiera. 

A partir de ese momento se extiende en remembranzas

vallepascuenses. Recuerda la gran amistad de su hermana

Betsy con Alidita; a Golo y a la chispa humorística-sarcástica

de Argenis; al prematuro fallecimiento del mutuo compadre

 Juan Urquía; a Eneida Domínguez, excelentísima secretaria

del liceo; a Belkis Moreno y al reencuentro gilfortouliano 2010

en el cual también participó; a la vez que capturó un alumno

con un bolso lleno de picapica, recibiendo agradecimientos de

su representante; al Camaro verde caña con techo blanco de

la profesora Isaura; al alumno Felipe Hernández González,

quien le autografió uno de sus libros en un encuentro de

historiadores y cronistas; a las vecinas Zoraida Ruíz, Clarita y

África Aguilar; al Consejo Técnico de primera categoría con el

que contó en su paso por la Dirección del liceo; y a Salomón

Bustillos, quien estaba siempre pendiente de su presencia en

la pista de tartán, ya que comenzó a correr la media maratón

“San Celestino”, a los 44 años, llegando a agenciar crono de

1:40 y cambiando deporte por tratamiento medicamentoso.

Comparte sus días entre Valle de la Pascua y Altagracia

por la vía de Lezama. En una es “El profesor Núñez” y en la

otra sólo “El Morocho”, por su hermano gemelo univitelino. 

Damos fe de que en Altagracia lo conoce hasta el gato.