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P A R T E D E L A S O P E R A C I O N E S

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E N LOS DIAS 1 2 V 1 3 D E S E T I E M B R E P E 1 8 4 7

Al Exnio. Sr. general en gefe di-I ejército, benemérito de la patria D. Antonio Lopez de Santa-Anna,

E L DIA 15 DET. MISMO MES V A f f O

III P R ESO P O R ( ¿ C I J A N O Y O A M . O

UA lo03

F O N D O F E R N A N D O D IAZ R A M I R E Z

.3 y T E R C E R A B R I G A D A D E I N F A N T E R I A

DEL EJERCITO MEXICANO.

G e n e r a l e n g e f e .

i

T e n g o la honra de dar A V. E. el parte correspondiente, de las opera-ciones ejecutadas en losdias 12 y 13 del presente por ta brigada de mi mando.

El dia 12 al amanecer, rompió el fuego el enemigo hacia la garita da la Candelaria y dispuso V. E . á esta hora, que se situase de reserva toda esta Brigada en la calzada de la Viga; y al ejecutar este movimiento, mandó V. E. que retrocediésemos á la Ciudadela, y apenas acabábamos de llegar allí , cuando ordenó V. E. marchásemos con la mayor velocidad para Cha-pultepec, en donde comenzó el bombardeo

En esta fortaleza me ordenó V. E. colocara á la derecha de su entrada, en el puente de Chapultepec, al batallón de Matamoros de Morelia, y á la izquierda al de San Blas, encargándome del mando de la línea de la derecha, y quedando de reserva el resto de la Brigada.

El enemigo quiso establecer una batería, según los partes que recibí le los es-ploradores, en el rancho avanzado de la Condesa, que disloba del hornabeque poco mas de doscientas varas .Para impedirlo avanzó en guerrilla, por órden de V. E . , la Compañía de Cazadores de San Blas, y no habiéndolo logrado, se hizo uso de la pieza de á cuatro que pn la espresada obra se hallaba á barbe, ta y cons igu iere nenie proporcionaba fuegos en toda dirección: las punterías del Oficial de Marina que mandaba esta pieza fueron dirigidas con tan buen écsito, que al primer tiro ejecutó la órden que di. de derribar una pilastra, á fin de que viniese abajo un tejado, de lo que resultó que el enemigo abanto, naso su proyecto; y aunque á las diez de la noche volvió a aprocsunaise al mismo punto, bastó la Compañía de Sao Blas para hacerlo retroceder, la ue permaneció allí establecida como gran guardia.

— 2 — ~ La batería que por sobre el ornabequo díríjia sus proyectiles al edificio

del cerro, arrojó algunos sobre dicha ODra, visto lo cual por V. E. dispuso se lé contestase con una pieza de á doce, colocada en la parte mas elevada de di* cho puente. Y o mismo dirijí este fuego que hizo callar á la balería ene-miga por algunos minutos, y no continué cuando volvió á romperlos, por* que V. E. destinó esta pieza á otro punto mas importante.

El resto del dia se pasó así, hasta que al aprocsimarse la noche dispuso V. E. que la Brigada del Sr. Gral. D. Simeón Ramírez, relevas.! los cuer^ pos empleados de la raia, menos el de Matamoros de Morelia y la Compañía de San Blas, y que esta Brigada pernoctase en la casa de Alfaro.

A las diez de esta noche se puso en movimiento, con motivo de la alarma producida por la pretensión del enemigo de ocupar el rancho de la Condesa, según he referido antes.

A las cinco de la mañana del 13, dispuso V. E . que el batallón de S. Blas volviese á ocupar su puesto; dos compañías de Santa-Aona la entrada del bosque, dos reforzando al Batallón de Matamoros, y dos que se colocaran en la arquería, quedando el batallón do Granaderos de reserva.

El enemigo continuó su bombardeo á la fortaleza del cerro con mayor acti-vidad que el dia anterior, y en este intermedio el Exmo. Sr. Gral. Bravo pidió se le aumentase la fuerza que allí tenia á sus inmediatas órdenes. Cuando llegó V. E . me ordenó le hiciese presente al Exmo. Sr. Gral. Bra-vo, do un modo reservado y eficaz, que no pensaba mandar mas tropa sobre el cerro hasta que se acercase el asalto, para evitar que se acobardase y dis-persase antes de servir en el momento crítico, como habia sucedido á cerca de mil hombres que guarnecían esta fortaleza. Cumpliendo y» con esta orden de V. E , mande pedir al Exmo. Sr. gral. Bravo, un gefe de toda su confian-za con quien hacerle esti comunieacion, y bajado que hubo este, el Sr. Gral. Peña y yo le espusimos minuciosamente todo lo quo V . E. habia te-bido la bondad de encargarme.

E l bombardeo calmó, á la vez que el enemigo movió sus columnas de ataque, y V. E . dispuso con este motivo que el batallón de San Blas, menos la compañía de cazadores, entrase al bosque á impedir el «saín» del cerro. E n el puesto que cubría el batallón de San Blas, destinó V. E. al de Gra-naderos, y el Sr. Gral. D. Matías do ta Peña ordenó que pasuse la 4 ? com-pañía al bosque, con el mismo objeto que el batallón de San Blas. La co-lumna que el enemigo movió contra el punto de mi mando, se detuvo á mas de tiro de fusil, comenzando á desfilar en dispersión por derecha é izquierda, haciendo retroceder á vivo fuego hasta el parapeto, á la compañía de caza-dores de San Blas, con gran pérdida de sus oficíales y de cerca de la mitad de su número, por haber sostenido el fuego un buen rato.

Retirada ésta, rompí el fuego sobre el enemigo, con artillería y fusilería, tan nutrido como V. E . advertiría; desgraciadamente en los momentos en que mas necesidad tenia yo de la pieía que enfilaba la calzada, por haberse aprocsimado el enemigo á su vuelta, se quedó en el fondo del ánima una feminela, por haberse roto el escobillón, la que no fué posible sacar, pues en esta operacion hirieron gravemente al oficial que la mandaba, y mataron á otros de los artilleros que la servían, quedando reducida la dotacion á tres, por haber ausiliado con el resto al E x m o . Sr . Gral. Bravo.

Pasadas tres horas de un fuego tan activo como acabo de recordar á V. E . , «I comandante del batallón de Matamoros de Morelia D. Juan Bautista Tra»

— 3 — conis me dió parte de que sus fusiles se estaban inutilizando por haber tirado mas de ochenta tiros, y no contando ya do reserva con el batallón de Grana-deros por haberlo destinado V. E. en la fortificación de la izquierda, ocurrí á V. E, por el ausilio que necesitaba, y me dio al 3 P Ligero.

Antes de que se pudiera loprar que este cuerpo se colocase sobre las ban-quetas en relevo de los hombres que ya habian inutilizado sus fusiles, el enemigo habia logrado subir al cerro de Chapultepec y se veia á los defen-sores de este punto descender hasta por las ventanas, lo cual ocasionó que aunque hice tocar á armar la bayoneta, no fué posible resistir el asalto, por-que de dentro del mismo bosque venian las balas pue dieron por la espalda á algunos soldados.

N o me quedó otro recurso que el de retirarme, con tres piquetes; uno de Granaderos como de catorce hombres, otro de Matamoros de Morelia de cerca de cien, y otros tantos del batallón Santa-Anna. en solicitud de mi bar tallón de Granaderos, que habia yo visto retirarse con el Sr. Gral. Peña; menos la 4 ® compañía que aun quedaba en el bosque.

En la calzada de la Verónica logré alcanzarlo, encontrando á su cabeza al Sr. Gral. D. Matías Peña y con el mando particular á s u primer ayu-dante D. Antonio Mañero. Luego que lo alcancé lo mandó formar en coi lumna por mitades.

El e n e m i g ó n o s perseguía con unos cuantos infames que sostenían artilla-ría ligera, haciéndonos foego ambas armas avanzando terreno.

Llegamos en buen orden, reunidos con el I 9 Ligero hasta la fortificación dtl puente de Santo Tomas .

Al l í con estos coerpos y piquetes se coronaron las obras que habia, sin romperse el fuego de los parapetos, por seguir sosteniéndolo las guerrilla» que traia yo á mi retaguardia.

En esta fortificación no ericontré ni infantería ni artillería, y únicamente caballería al mando del Sr. general Torrejon.

Hice presente á este Sf . general la poca fuerza con que me venia persi. guiendo el enemigo, y lo fácil y conveniente que seria darle una carga con su caballería; este Sr. general se prestó desde luego á mi solicitud, oponién-dose fuertemente el Sr. general Pavón, por creer no era el terreno á propó-sito, ni la distancia oportuna; pero al fin el Sr. general Torrejon, en unión del Sr. general Peña y coronel Ramiro se decidieron á dar esta carga eoq el 2 de caballería.

Le hice advertir á la caballería que no rompiese su marcha hasta que el enemigo descargase su batería, y así lo hizo, mandando y o entretanto que las bandas de infantería y caballería tocasen carga y degüello.

Por una desgracia bien'lamentable, el fuego que s iguió de artillería hizo algún estrago, y cerca ya del enemigo le faltó impulso á la caballería, re-sultando herido el Sr. coronel Ramiro, dividido un dragón, y muerto un caballo.

Por el conocimiento que tenia yo del terreno, sospeché que entre este punto y la garita de San Cosme podíamos ser cortados fácilmente, y con tal motivo se quedó mandando el punto el Sr. general Torrejon, y fui personal-mente á hacer un reconocimiento en unión del Sr. general Pavón.

En la garita de San Cosme me encontré con el Sr. coronel Cadena que puso S mi disposición algunos dispersos, y con quien mandé pedir á V. E . alguna artillería. Con éstos dispersos ocupé las avenidas de la calzada del

resguardo, entrada á la de San Cosine, y la del Cebollon; pero no ronside, randa bien cubierta In línea, lo manifesté así ni Sr general Torrej. n.

Vinieron á dar parte á e¿te señor general, de que el enemigo veoia ame-nazando cortar nuestra retirada por el camino de la Blanca y de la Teja á San Cogme: de resultas de este aviso, con vino el Sr. general Torrejou <ñ que debía yo retirarme á esta garita.

Este movimiento lo verifiqué en columna per mitades cc.n el mayor or-den, y con una guerrilla á letaguardia que hacia un fupgo vivísimo para contener al enemigo.

La columna fué formada en el orden siguiente: batallón de Granaderos mondado por su primer ayudante D Antonio Mañero; paite del e Matamo-ros de Morelia y del de Santa-Anna, mandado po reí Sr. coronel D. José Vi-r- mi» González; parte del 3. ® Ligero uiBndado por su teniente coronel D-Miguel M. Echagaray, y el 1. ° Ligero mandado por su comandante de ba-tallón D. N . Márquez.

Esta columna l legó á la garita de San Cosme, tomando posesion de ella en la portada y las alturas; y sus guerrillas en el parapeto avanzado á dicha garita.

El enemigo cargó é Inzo retroceder á las guerrillas hnsta la misma gari-ta, la cual sostuve sin permitirle dar un paso adelante, hasta que llegaron tres piezas de artillería que V. E . me mandó, con las cuales se hizo retirar hasta el parapeto.

Hallándose mi batería enteramente á descubierto, mientras que la del eiie-irtioo se cubria con el parapeto próximo, que desgraciadamente no unía fo-so y por la mismo se sirvió de él con mucha facilidad, calculé que dándole una carga podría tomarme el tiempo necesario para cubrir mi batería quo constaba, de un obús de á 24, dos piezas de á 6 y una culebrina de á 4.

Para conseguir esta ventaja encargé aISr. general D. Matías de la Peña y Barragan diese esta carga con dos compañías del 1. ° Ligero, la cual eje-cutó con el mayor acierto y valor hasta arrojar al enemigo á mucha distan-cia del parapeto.

En éste se sostuvo todo el tiempo que yo emplée para levantar unos mer-Idne3 construidos con los adoves de los arreates que cubrían los árboles do la casa del Sr . arzobispo Irizarri; habiendo sido dirigida esta obra por el Sr coronel D. José López Acevedo, y por el sobrestante mayor D. Agustín B'sier», y ejecutada por varios paisanos que voluntariamente se prestaron a es'«' trabajo.

En estos momentos l legó V E y me dió sus órdenes respecto del modo de sostener aquel punto, colocando dos compafiias en la casa contigua á la .del Sr. arzobispo Irizarri. Al mismo tiempo, el Sr. general Peña me man-dó pedir mas fuerza de infantería y dos gefes y algunos oficiales de esta ar-ma: V. E. entonces puso á mi disposición dos de sus ayudantes, siendo uno de ellos el coronel D. Francisco COSÍO; y yo mandé dos capitanes, siendo uno de ellos el capitan Tel lo . La tropa que V. E. destinó fueron dos compañías del 11. ° regimiento.

E l enemigo, reforzado considerablemente y con artillería á la Paixans, careó al Sr. Peña , quien se replegó hasta la garita á donde ya tenia y o es-peditas tres piezas de artillería que enfilaban la calzada. La cuarta pieza que quedó allí á mi disposición y que intenté colocarla por el interior de los arcos; por hallarse la calzada del otro lado del foso con nivel superior al sitio

de la pieza, no fué conv«nicnte rebajar la tronera, y era ini^wpeniable for. marle una esplanada, que en el resto del dia no pude conseguir, ni vigas, ni puertas á propósito, aunque las solicité por diversos conductos. Persoual-mente hubiera podido arregiar esta obra; pero el enemigo aprovechaba loa instantes para entrar, á la capital, y los deseos de impedírselo me hicieren siempre estar al pié de las piezas que contenían sus movimieuios.

Estos quedaron circunscriptos al parapeto inmediato, cuya construcción, que autes he descrito, lo ponum á cubierto de los grandes estragos que debió haberle hecha tu: artillería.. • i

E l referido parapeto teuiu una tronera en el centro, y para hacer un fuego, tan vivo, como hubieran proporcionado lies ó cuatro, discurrió, el enemigo cargar sus piezas á Retaguardia é irlas metiendo en batería según iban ha-, ciendo fuego; pero luego qne advertí yo esta maniobra, dispuse que mis tres piezas una despuesde otra, y con solo el intervalo de cargar, hicieran fuego contra la tronera, ¿on lo cual conseguí apagar inmediatamente los cbñtránófe, «o sé si desmontándoles alguna pieza. LOÍ fuegos continuaron de fusilería por on largo intervalo.

A este tüiiipii volvió V. E . y mandó que bajase de la azotea de la garita una compañía de granaderos, que habia yo colocado allí, proporcionando la fuerza que debiu reemplazarla.

E l euemigo provisto de una nueva batería ó habilitando la anterior, s e -g u n advertí á V. E . , por la llegada de sus carros, empeñó un nuevo comba-te de artillería, arrojando muchas granadas que me inutilizaron varios arti-lleros, cutre.ellos al valiente capitan D. Gervasio Torre«, hasta el grado de tener que completar con infantería que pedí al teniente coronel Ecbagaray el personal de la artillería; y habiéndole sido al enemigo imposible cargar-me de frente, tomó el partido de flanquearme por entre los casos. :

Al verificarlo sobre mi derecha, se retiraron las dos compañías qúe W f?. dejó establecidas en fa casa del Sr. Irizarri, lo que me obl igó á mandar otras dos del I. ° Ligero que, pasando el foso á cubierto de los fuegos de l ' enemigo, esptorasen su proximidad.

Advertido de ésta, por las compañías que se retiraron de su exploración, le mandé hacer fuego por entre las mismas casas con el obús de á 24, logran-do hacerlo retirar.

A esta hora que serian como las cuatro y media, se inutilizó este obusdo á 24, escoreándose su fogón por el fondo del ánima, de rpodade no dejar pp-sar el pumon, despucs de haber arrojado ciento cuarenta y una granadas y algunos botes de metralla.

Luego que el enemigo observó la falta de esta pieza, redobló los fuegos do su batería; pero se sustituyó en lugar del espresado obu?, la culeb/ina de á 4.

Al hacerse esta maniobra bajo mi inmediata dirección, rebotó en las pare-des de la garita una granada, que no reventó, pero que me hirió la pierna izquierda.

Se me dió aviso de que entre Nonoalco y la casa de D. Atilano Sán-chez se movía una fuerza amenazando mi retaguardia; para observar y con-tenerla, dispuse que todo el resto del 1 . ° Ligero, que permaneció todo eent> dia conmigo, al mando de su comandante d£ batallón, ocupase una casa fron-teriza i este rumbo.

Habiéndole salido mal al enemigo estas operaciones intentó flanquearme por

y¿> a o o o c - ^ y

la izquierda, en donde tenían dos entradas; una, la da la calzada interior de los arcos; y la otra, la calzada antigua del resguardo por el puente de loa Insurgentes. Necesitaba yo artillería para contenerlos por la primera, pero ya he dicho á V. E . que no logré colocar la pieza que debia enfilar esta cal-zada, por falta de una esplanada: de hay resultó que el enemigo pudiese pe-netrar por dichas calzadas, se posesionase de las zahurdas que se hallan en la antigua calzada del resguardo y amenazase mi flanco izquierdo por la huerta del Molinito.

E n vista d e la imposibi l idad de usar d e la artillería para enfi lar In c a l z a d a interior de S a n C o s m e , c o l o q u é en el parapeto de e s t e lado c e r c a de 100 h o m b r e s d e l 11. ° que rompieron i n m e d i a t a m e n t e e l f u e g o sobre la infantería e n e m i g a , y para impedir el a c c e s o á la casa del Mol in i to ó a su c e r c o , m a n d é abrir la puerta de esta casa c o n un c a ñ o n a z o , y q u e el S r . c o r o n e l D . Luis Manuel d e H e r r e r a c o n u n a c o m p a ñ í a del 3 . ° L i g e r o - p e n e t r a s e á hacer un r e c o n o c i m i e n t o .

E s t e g e f e vo lv ió á p o c o m a n i f e s t á n d o m e que la fuerza de q u e «e habin serv ido no habió e j e c u t a d o sus ó r d e n e s y se habia d i spersado d e m a s i a d o .

En vista d e é s t o o r d e n é al t en iente corone l E c h a g n r a y , q u e a p o y a -ba la espalda d e su c u e r p o á la cBsa d e la garita, s i rv iendo c o m o d o r e s e r v a , que c o n t o d o el resto d e él entrase por la m i s m a puerta y o c u p a s e las alturas y la huerta.

El fViego do la fusi lería e n e m i g a arrebataba ya por e t t e flanco á q u e m a ropa á los arti l leros que tenia yo á mi lado m a t á n d o m e t a m b i é n las muías d e las pieza?, l o q u e m e ob l igó á retirar é s tas dentro d e los a r c o s d e la portada, y m e puso en la n e c e s i d a d d e c e r c i o r a r m e per-s o n a l m e n t e , d e la e j e c u c i ó n del m o v i m i e n t o d e la infanter ia , que c o m o l l e v o d i c h o , m a n d é situar en el Molinito-

A falta d e infantería, de que no m e quedaba ni un so lo h o m b r e , por haber e m p l e a d o los 5 0 0 q u e c o m p o n i o n los c u e r p o s y p i q u e t e s de q u e he hablado, en los puntos a m e n a z a d o s que he referido, h ice bajar á c o s a d e 1 0 0 h o m b r e s q u e tenia en la azotea d e la garita do S . C o s -m e , c o n s i d e r a n d o q u e el e n e m i g o no tardaba en d a r m e la últ ima car» ga , puesto que habia c e s a d o sus f u e g o s de artillería, y m a n d é al e sp i -tan g r a d u a d o de c o m a n d a n t e de batal lón que m a n d a b a e s ta fuerza , q u e p e n e t r a s e e n las zahurdas s i tuadas sobre la ca lzada del resguar-do para contener lo : el re fer ido capitán m e h izo o b s e r v a c i o n e s de q u e c o n tan corta fuerza no le seria posible e jecutar e s t e m o v i m i e n t o ; y o c o n o c í la justicia de e s ta representac ión; pero no t eu iendu y o t i empo d e qué d isponer pata sol ic i tar de V . E. que a v a n z a s e e l batol lon d e Granaderos , q u e se m a n d ó retirar sin mi c o n o c i m i e n t o á la rasa d e la PiniHo*, repe l í la orden al e s p r e s a d o capi tón do un inwdo posit ivo, quien salió por la portada a o b e d e c e r l a , y apenas pudo llegar al a r c o q u e du la e n t r a d a á las refer idas zahurdas , en d o n d e rompió el fuego , c u a n d o f u é repel ida su infantería por la del e n e m i g o , qu ien se a l entó c o n es te re troceso y c a r g ó ya do una manera dec i s iva , no s i é n d o m e

d a b l e retirar m a s d e una sola culebr ina d e á 4 y un c a r r o d e muni-c iones , por baber q u e d a d o Ins o t r a s sin muías y sin arti l leros.

R e u n i d a e s ta p i e z a c o n mi batal lón d e Granadero« en ia casa d e la Pini l los , á d o n d e h i ce alto mientras q u e p u d o bajar es te , se m e o r d e n ó ret irarme á la C iudade la .

L o verif iqué así , p o n i é n d o m e á la c a b e z a do mi .bata l lón , y e n c a r -g a n d o la c o n d u c c i ó n d e la pieza y del carro , al Sr . D . A n t o n i o H a r o , q u e f u n c i o n a b a d e a y u d a n t e de V . E .

En e s t a for ta leza c o l o q u é mi batal lón en su cuarte l y pasé á p e -dirle á V. E. permiso para h a c e r m e a lguna curac ión e n la herida q u e rec ib í en la gari ta; y no habiéndolo e n c o n t r a d o e n la C i u d a d e l a , m e dirigí á Pa lac io c o n el S r . Gra l . D B e n i t o Quí jano , á d o n d e se m e a s e g u r ó que V . E . se había vue l to para d icha Ciudade la , y por lo minino sup l iqué al e s p r e s a d o S r . Gral . d i e se c o n o c i m i e n t o a V . E . d e l lugar á d o n d e habia ido á c u r a r m e .

C o m o el g o l p e q u e m e d ió la granada f u é bastante p r o f u n d o hasta tocar t i hueso, n c m e p u d e ya m o v e r d e la e n m a , y all í supe q u e V . E. y el ejército se habían ret irado para esa vjllu.

L a 3 ? B r i g a d a , E . S . , s e ha cubier to do g lor ia por h a b e r l l enado sus d e b e r e s c o n inte l igencia y valor, dando puntual y e f i c a z c u m p l i -m i e n t o á lodas las ó r d e n e s q u e l e d ió V. E .

D e los cuatro c u e r p o s q u e c o m p o n i a n e s ta B r i g a d a , e l do S a n .Blas se batió, su c o m p a ñ í a d e c a z a d o r e s d e s d e la» se i s d e la m a ñ a n a por hal larse a v a n z a d a d e l a n t e del o r n a b e q u e -situado e n e l p u e n t e d e T a c u b a y a por d o n d e a s o m a r o n lo» pr imeros rifleros, y el res to d e e s t e batal'on d e n t r o del bosque , d isputándole e l p a s o al e n e m i g o c u a n -d o d ió el asalto, á d o n d e s u c u m b i ó por el m a y o r n ú m e r o q u e le car -g ó , q u e d a n d o muer tos la m a y o r parte de sus o f ic ia les y soldados, y e l resto pris ioneros .

El Bata l lón de M a t a m o r o s de Morei ia , s o s t u v o el o r n a b e q u e antes d icho , d e la ca lzada de T a c u b a y a , c o n pérdida de m a s d e la t ercera parte d e su fuerza y degpues de c e r c a de tres horas d e fuego , no se ret iró, e n buen órden, hasta que c o m e n z ó á ser fus i lado por la e s -p a l d a .

O t r o tanto s u c e d i ó al batal lón S a i i l a - A n n n c o n dos c o m p a ñ í a s q u e se bat ieron e n e s t e m i s m o punto, y d e las otras d o s que entra-ron al b o s q u e , fué h e c h o prisionero el g e f e q u e las m a n d a b a D . R a -m ó n Archundia y los of ic iales , h a b i e n d o m u e r t o también bas tante nú-m e r o del q u e c o m p o n í a su fuerza.

L a cuarta compartía del batal lón d e G r a n a d e r o s q u e e n t r ó tara-b i en al bosque perdió , i gua lmente , en tre muertos , her idos y prisio-n e r o s m a s de la mitad d e su fuerza; q u e d a n d o e n p o d e r del e n e -m i g o , d e I09 tres of ic ia les que t en ia , el t e n i e n t e D. J o » é Alaria Peña y el subten iente D . M a n u e l E c h e v e r r í a .

El res to del batal lón se batió d e s d e el p a r a p e t o q u e cortaba ia c a l z a d a del m o l i n o del R e y , s o s t e n i e n d o una ret irada c o n los p ique-

— s —

t e s q u e q u e d a r o n d e los otr09 cuerpo» hasta el p u e n t e de S a n t o T o -ma?, á d n n d e p e r m a n e c i ó hasta después de las d iez de la mañana; d e allí cont inuó en retirada unido al 1 ? L i g e r o hasta la garita de S a n C o s m e i en d o n d e sufr ió el f u e g o de la fusil" rio y proyec t i l e s h u e c o s del e n e m i g o , b a t i é n d o s e sus c o m p a ñ í a s en guerri l las d iversas v e c e s , V el re3to d e reserva, hasta las c i n c o d e la tarde q u e ce le m a n -d ó retirar á la casa d e la PiniMos.

D a la plana m a y o r de esta B r i g a d a , n>» hay cnsi n inguno de sus pe-fe* y of ic iales , que d e s p u é s d« un largo y n<udu<» trabajo e n el s e i v i -c i o d c e » t ' » * Hias, no haya s i d o herido. E l 2 ? g ' f í de el la mur ió e n Ja subida d e C l iapu l t epec . Su mayor de ó r d e n e s , c o m a n d a n t e de ba tal lón D . J o s é Barrreiro, rec ib ió una herid» de posta e n un bruzo. Mi a y u d a n t e d e c a m p o , c o m a n d a n t e de e s c u a d r ó n D . I g n a c i o A r r e l a . rccibió"en el parapeto del hornabeque , en la c a l / n d i ife C h n p u l t e p e c , un g o l p e d e bala fria e n un c o s t a d o Mi a y u d a n t e d e c a m p o c a p i t a o I ) . A n t o n i o Arroyo, rec ibió un pos tazo en una nalga en la gari ta d e S a n C o s m e . Mi ayudante d e c a m p o , ten iente da artillería D . S u b a s A d u n a , al ir á c o n d u c i r parque a los d e f e n s o r e s del ornabeq ue d»- la c a l z a d a N t e T a c u b a y a , rec ibió un ba lazo q u e le a t rave -ó las partes gen i ta l e s .

V . E. se c o n v e n c e r á por es te relato, y por la m a y o r parte d e las Operac iones de que fué test igo, d e que la 3 ? Brigadii l lenó sus de-beres ; y o m i s m o no tuve la fortuna d e e s c a p a r m e d e ln n u b e d e balas y g r a n a d a s que nos e s t r e c h ó d iversas v e c e s , y el g o l p e d e grí-n.ida que recibí en la pierna izquierda me l legó hasta el hueso y m e t i e n e pos trado e n la c a m a .

A cos ta d e e s t e sufr imiento , t e n g o el gus to de haber d i sputado al e n e m i g o pa lmo á p a l m o su entrada & M é x i c o , d e s d e q u e c i n p < z ó e l dia hasta que a c a b ó ; e n c u y o intento m e e s f o r c é , por la cons iderac ión d e los desas tres q u e se hubieran o c a s i o n a d o á LU capi ta l c o n MI e n trada á viva fuerza, m i e n t r a s hubiera luz.

N o podré conc lu ir s in menc ionar á V . E . d a s d e nhora el brillan te c o m p o r t a m i e n t o do la artillería. P o r e l l i gero detal l q u e nci íb* d e hacer á V . E . habrá a ivert ido cuan bien c u m p l i ó h a c i e n d o re-t r o c e d e r al e n e m i g o d iversas v e c e s ó a p a g a n d o mis b a t e r í a s c o n sus b u e n a s punterías y act iv idad en sus fuegos : impos ib le nie hubiera s ido

_ sin la inmensa fuerza del resorte de esta arma, impedir al e n e m i g o su entrada á la Capital , d e s d e las d i ez de la moftana que I» in tentó por la i ínea que defendí .

S i e n d o la arma q u e m a s espuesta se e n c o n t r ó , fué también la que m a s sufrió; 8i»cuinbiéndo cusí todos los o f ic ia les y arti l leros que hirvie-ron las s i e t e p iezas , que m a n i o b r a r o n c o n m i g o d e s d e la se i s de a mañana hasta las-seis d e la tarde.

E n la fort i f icación del puente d e C h a p u l t e p e c , e l Mibtcniento Martí -n e z q u e mandubu la piez» q u e enfi laba la ca lzada rfe T i i c u b a y a , c u v ó h e t i d o á m i s pies. El i n t e l i g e n t e erosntu de Artillen:« d e .Mal ina q u e m a n d a b a la \"t<\ á barbeta de la derecha , t a m b i é n f u é herid<>.

El t en iente D. J o s é María C a m e r a n i que m a n d a b a la pieza del c e n -tro, también fué herido, sus t i tuyéndolo i n m e d i a t a m e n t e el c o m a n d a n t e d e toda esta batería, t en iente c o r o n e l D . N i c a n o r F e r n a n -dez, quien se portó en e s t e punto con la m a y o r gal lardía . En la garita de S a n C o s m e , el cap i tan D G e r v a s i o Torres , q u e tan val ien-t e m e n t e se batió, h a c i e n d o sus acertadas punterías apesar de los ri-fles e n e m i g o s , que m a n d a b a el o b ú s de á 2 4 , d e b e haber m u e r t o d e la g r a v e herido q u e recibió en la cabeza . E l oficial q u e m a n d a -ba la pieza d e á sois, c o l o c a d a en el centro, f u é igua lmente herido. L o m i s m o le suced ió al guardaparque , c o n d u c i e n d o los carros c o n munic iones para esta batería. Y los o tros d o s o f ic ia les rec ib ieron varias o c a s i o n e s sobre sus cabezas , una nube de piedras ocas ionada por las g r a n a d a s e n e m i g a s q u e daban contra la portada ó p a r e d e s de la garita, e n v o l v i é n d o n o s por a lgunos i lutantes .

C u a n d o reciba los par tes correspond ien te s , t e n d r e el gus to de re-c o m e n d a r á V . E . á los Sres . G e f e s y Of ic ia les que tanto de la Bri-g a d a c o m o de los otros cuerpos que es tuv ieron á m i s ó r d e n e s , se han dist inguido; y lo haré igua lmente c o n las v iudas de lus q u e han tem d o el valor suf ic iente para sacrif icar su v ida e n la d e f e n s a de una causa tan santa .

Re i tero á V . E . las segur idades de mi dist inguida cons iderac ión y respeto.

D i o s y Libertad- M é x i c o , S e p t i e m b r e 15 de 1 8 4 7 .

E x m o . Sr. general en gefie del ejército, presi-dente de la república benemérito de la patria, D. Antonio López da Santa-Anna.

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. io» e o i ï e o id oiMisiríiiboos .«i-fMJWísb-ir1 y a-oí - ' •me. ^J «»oií-rri o J n m s ù i h s i « s l s u ñ u * o b * n t o *>•< Y o r n l ß d untít &tB(^*3o«b<aiiin ßhBii.i "Bivi ó d o n a n c ifi^xodso *u >/_• o i«sn" rènfc* p(*tffti8<r ò inainot i pi M l n o n u d « b auf' bbb'Oi'h^- a w n i ; î b H o o IVJi toni* la >m<iuuto i o q ¿onoftr.»» ,ßir»e^ fcrfwA

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