paper - cambios en la memoria asociados al envejecimiento

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Gerlátrlka 2006; 22(5):179-185 Original Ca mbios en la memoria asoc iados al envejecimiento Memory changes related to old age S. Blasco Bataller, J. C. Meléndez Moral Resumen  Ab st r ac t En el presente trabajo analizamos los principales cambios que se producen en la memoria en fun- ción de la edad, centrándonos en la etapa del envejecimiento. Así, plantearemos cuales son los principales cambios que se producen en cada uno de los diferentes almacenes de la memoria, observando que del mismo modo que en algunos casos se produce un decremento de su rendimiento, otros aspectos quedan preservados aunque aumente la edad. Por último también mencionaremos algunas pautas para la estimu- lación de la memoria con la edad, pues como ca- pacidad que es, es susceptible de aprendizaje. In this project we shall analyse the main changes that take place in memory related to age, focusing on the ageing stage. Therefore we shall deak with the different ways in which memory is stored, noticing, in some cases, that in spite of a decline in performance, other aspects are preserved even with an increase in age. Lastly we shall also mention some norms on memory simulation linked with age, as on memory stimulation linked with age, as it is an hability capable of being leamt. Key words: Ageing. Memory. Change. Palabras clave: Envejecimiento. Memoria. Cambio. Introducción DEPARTAMENTO DE PSICOLOGÍA EVOLUTIVA y DE LA EDUCACIÓN FACULTAD DE PSICOLOGÍA UNlVERSITAT DE VALENCIA. VALENCIA (ESPAÑA)  A lo largo de nuestro desarrollo, las personas, po- demos experimentar episodios en los que nuestra memoria parece no funcionar de una forma tan eficaz como lo puede hacer normalmente, produciéndose pequeños olvidos a los cuales generalmente no damos importancia y a los que atribuimos expli- caciones tan sencillas como la acumulación de tra- bajo, tener mil cosas en la cabeza, etc. Pero, cuando nos adentramos en la edad adulta y nos encami- namos hacia la vejez, el sentido de estos sucesos suele cambiar, existiendo una tendencia a atribuirlo a la edad. Si bien, el aumento de la edad produce una serie de declives naturales en muchas funciones, sólo en la vejez la memoria se convierte en un aspecto des- tacado por convertirse en una elemento de juicio, así, mientras que en la juventud, estos fallos de memoria se entienden como algo circunstancial, ajeno a la persona y por tanto irrelevante, en los ancianos 21

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  • Gerltrlka 2006; 22(5):179-185

    Original

    Cambios en la memoria asociados al envejecimiento Memory changes related to old age

    S. Blasco Bataller, J. C. Melndez Moral

    Resumen

    Abstract

    En el presente trabajo analizamos los principales cambios que se producen en la memoria en fun-cin de la edad, centrndonos en la etapa del envejecimiento. As, plantearemos cuales son los principales cambios que se producen en cada uno de los diferentes almacenes de la memoria, observando que del mismo modo que en algunos casos se produce un decremento de su rendimiento, otros aspectos quedan preservados aunque aumente la edad. Por ltimo tambin mencionaremos algunas pautas para la estimu-lacin de la memoria con la edad, pues como ca-pacidad que es, es susceptible de aprendizaje.

    In this project we shall analyse the main changes that take place in memory related to age, focusing on the ageing stage. Therefore we shall deak with the different ways in which memory is stored, noticing, in some cases, that in spite of a decline in performance, other aspects are preserved even with an increase in age. Lastly we shall also mention some norms on memory simulation linked with age, as on memory stimulation linked with age, as it is an hability capable of being leamt.

    Key words: Ageing. Memory. Change.

    Palabras clave: Envejecimiento. Memoria. Cambio. Introduccin

    DEPARTAMENTO DE PSICOLOGA EVOLUTIVA y DE LA EDUCACIN FACULTAD DE PSICOLOGA UNlVERSITAT DE VALENCIA. VALENCIA (ESPAA)

    A lo largo de nuestro desarrollo, las personas, po-

    demos experimentar episodios en los que nuestra memoria parece no funcionar de una forma tan eficaz como lo puede hacer normalmente, producindose pequeos olvidos a los cuales generalmente no damos importancia y a los que atribuimos expli-caciones tan sencillas como la acumulacin de tra-bajo, tener mil cosas en la cabeza, etc. Pero, cuando nos adentramos en la edad adulta y nos encami-namos hacia la vejez, el sentido de estos sucesos suele cambiar, existiendo una tendencia a atribuirlo a la edad.

    Si bien, el aumento de la edad produce una serie de declives naturales en muchas funciones, slo en la vejez la memoria se convierte en un aspecto des-tacado por convertirse en una elemento de juicio, as, mientras que en la juventud, estos fallos de memoria se entienden como algo circunstancial, ajeno a la persona y por tanto irrelevante, en los ancianos

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    se consideran como algo interno, intrnseco y estable (1). Esto, puede resultar algo caro, ya que si las personas mayores prescinden de actividades men-tales estimulantes e enriquecedoras, bien por la idea de que tienen poca memoria, bien por la falta de refuerzos, el abandono puede producir por s mismo un declive acelerado.

    En este trabajo pretendemos analizar cuales son los principales cambios que se producen en la me-moria segn nos adentramos en la etapa del enve-jecimiento; cambios, para los que existen mltiples causas como la gentica, el grado de educacin ad-quirido, el nivel de actividad fsica desarrollada, el entrenamiento profesional, el entorno estimular, el estado de salud fsica y psquica, las prdidas sen-soriales (2) o los aspectos biogrficos y de persona-lidad (3), o como los propios cambios de carcter in-volutivo que se producen en el sistema nervioso a partir de los 60 70 aos y que van aumentando con el transcurso del tiempo, incrementndose a partir de los 75-80 aos (4). As, analizaremos la memoria desde un punto de vista lineal, siguiendo los cambios que se producen en los distintos almacenes que se plantean desde la perspectiva del procesamiento de la informacin.

    Tal y como veremos, parece ser que independientemente de la variabilidad existente en la poblacin mayor respecto al rendimiento en las diferentes tareas cognitivas, algunas de estas tareas en las que se ve involucrada la memoria, sufren cambios orientados hacia la disminucin del rendimiento, entendindose esta disminucin como la obtencin de puntuaciones significativamente menores que los jvenes. Quizs, lo que debemos clarificar es qu es lo que se entiende por la obtencin de puntuaciones significativamente ms bajas.

    Hay un envejecer sano y otro patolgico, pero los lmites entre ambos no son claros. El envejecer pa-tolgico no permite a la persona llegar con pleno uso de sus facultades a la edad avanzada, pero el envejecer sano tampoco, pues en muchos casos se presentan anormalidades en diversas habilidades cognitivas y mentales y en algunos casos tambin en habilidades funcionales. Por ejemplo, el enfermo de Alzheimer, presenta alteraciones cognitivas en la memoria, atencin, funciones ejecutivas y velocidad de procesamiento de la informacin, pero tambin el anciano sano presenta alteraciones de este tipo, por lo que establecer la lnea de corte entre el sano y el enfermo es de gran dificultad (4).

    Tomando como instrumento de medida la escala GDS (Global Deterioration Scale o Escala de Dete-rioro Global) (5) para las demencias, se puede ob-servar como en el nivel 2 (disminucin cognitiva muy leve), la persona puede quejarse de que su memoria no es como antes, y presentar quejas subjetivas de defectos de dficit de memoria en aspectos tales como olvidar los lugares donde ha dejado objetos o olvidar nombres previamente muy conoci- 22

    dos. As, incluso teniendo en cuenta que al realizar tareas cognitivas los resultados sern inferiores a los de las personas ms jvenes, se indica que este nivel es el normal para las personas de cierta edad.

    De esta manera, nos encontramos en una situa-cin en la que el deterioro leve se convierte en lo normal, as, se hace necesario determinar los cam-bios reales y en que partes del proceso se producen para posteriormente poder desarrollar intervenciones de cara a preservar el mximo tiempo las funciones cognitivas con el mayor rendimiento posible.

    Memoria y envejecimiento

    Respecto al concepto de memoria, el uso de un nico trmino puede indicar que la memoria es un sistema unitario, aunque complejo, pero obviamente, esta no es solo un sistema, sino muchos. Este planteamiento viene dado porque los sistemas varan en duracin de almacenamiento, desde fracciones de segundo hasta una vida entera; y en capacidad de almacenamiento, desde pequeos almacenes momentneos al sistema de memoria a largo plazo, el cual parece exceder largamente en capacidad y flexibilidad al mayor ordenador disponible. As, la memoria, queda conceptualizada como un sistema donde se recogen las experiencias y la informacin que recordamos y como un proceso de retencin de las experiencias aprendidas, estando involucrada en todas las actividades mentales que desarrollamos (6).

    De esta manera, partimos de que la memoria es un sistema funcional complejo, activo por su carcter, que se despliega en el tiempo en una serie de escalones sucesivos y que se organiza en diferentes niveles. Y en lo que no parece haber ningn tipo de dudas es en que el envejecimiento va acompaado de cambios en este sistema que se asocian con el deterioro.

    Para entender cmo funciona la memoria segui-remos el planteamiento establecido por Perlmutter y Hall (7), en el cual distinguen entre lo que denominan capacidades y contenidos. Las capacidades son concebidas como las estructuras y procesos, mientras que los contenidos aluden al conocimiento o informacin almacenada. As, en las estructuras encontramos la memoria sensorial, la primaria (MCP), la secundaria (MLP) y la terciaria, de las cuales, tal y como veremos, no todas evolucionan en el mismo sentido. Por otra parte, en los contenidos, encontramos la memoria procedural y la declarativa, subdividida en episdica y semntica, dentro de las cuales parece que pueden existir tanto declives como incrementos. De esta manera, el deterioro no est presente en todos los tipos de memoria, por ejemplo no existen diferencias de edad en las tareas que no precisen un gasto sustancial de recursos cognitivos (8).

    Centrndonos en las estructuras, el primer alma-

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    cn que encontramos es la memoria sensorial. Este, es el almacn que tiene la duracin ms breve (entre 0,5 y 2 segundos), y corresponde a la retencin inmediata de los efectos sensoriales producidos por una estimulacin y que, incluso, se puede borrar antes de que la persona tenga conciencia de su contenido. La funcin esencial de los registros sensoriales consiste en permitir que el estmulo ini-cial se prolongue el mayor tiempo posible, con el fin de asegurar el tratamiento de la informacin. Dentro de ella se diferencia bsicamente la memoria icni-ca, para el sistema visual y la ecoica para el sistema auditivo.

    La diferencia ms importante que se establece en la memoria sensorial con la edad es un aumento del tiempo requerido para transferir la informacin desde este primer sistema a la memoria primaria y se-cundaria, as como el resultado de la posible in-fluencia de deficiencias visuales sobre la ejecucin mnsica.

    El siguiente almacn de informacin es la memo-ria primaria o memoria a corto plazo (MCP). Este, es un sistema de recepcin temporal con capacidad limitada que mantiene la informacin en la concien-cia durante unos segundos (15 a 30 sg.) tras el aprendizaje.

    Una hiptesis sobre el dficit en este tipo de me-moria, es la incapacidad de separar los estmulos no deseados de los deseados, es decir, debido a ciertos cambios fisiolgicos que se producen en la parte del cerebro que favorece la atencin, los pensamientos irrelevantes para la tarea importunan, y dejan menos espacio o energa en la memoria de trabajo para procesar lo que deseamos recordar y memorizar (1).

    Por otra parte, las diferencias entre jvenes y an-cianos se manifiestan claramente cuando las tareas exigen mayor atencin, flexibilidad mental y proce-sos de reorganizacin del material (9). As, encon-tramos problemas en el registro y procesamiento de la informacin, pero adems la recuperacin mues-tra un empeoramiento, ya que se vuelve ms lenta, de manera que los mayores cometern significativa-mente ms errores que los jvenes cuando realicen este tipo de tareas. Por otra parte, parece importan-te indicar que estas diferencias se pueden ver dis-minuidas si los estmulos presentados son familia-res.

    En este sentido, el dficit asociado a la edad en los recursos de procesamiento de la memoria puede paliarse mediante "apoyos ambientales" (10). Es tos son apoyos que se le dan a la persona mayor para que el esfuerzo de procesamiento sea menor y as rindan mejor en la tarea, por ejemplo, en una encuesta con respuestas alternativas presentadas por escrito (apoyo ambiental elevado) o presentadas auditivamente (bajo apoyo), el rendimiento del anciano sera mejor en el primer caso.

    En resumen podemos decir que los resultados

    pueden mejorar en las tareas de memoria a corto plazo siempre y cuando el material sea significativo as como su organizacin y el desarrollo de estrate-gias mediacionales y, adems, se d en contexto adecuado. Mientras que la adquisicin de informa-cin en medios no familiares y/o con condiciones de estrs y situaciones exigentes harn que el individuo decremente sus resultados (3).

    Dentro de la memoria a corto plazo, Baddeley (11) defini un subsistema que denomin como memoria de trabajo y que tiene tres funciones bsicas. En primer lugar permite el almacenamiento y proce-samiento simultaneo de la informacin, lo cual exige, por un lado, mantener activos en un estado ac-cesible los contenidos mentales y, por otro lado, transformar los contenidos a travs de las operacio-nes mentales. Adems tiene una funcin de super-visin, lo cual supone tutelar y controlar las opera-ciones y acciones mentales. Por ltimo tiene una funcin de coordinacin, que pueden suponer tres cosas: coordinar la informacin de diferentes fuen-tes, coordinar operaciones mentales sucesivas en una secuencia y, coordinar los elementos en estruc-turas.

    Los ancianos muestran un particular impedimento en las operaciones de memoria de trabajo que re-quieren realizar (12): Una coordinacin del procesamiento cognitivo en tareas de procesamiento mental complejo, as como la realizacin de simples operaciones menta-les aritmticas. La supresin de las estrategias de recuerdo ha-bituales y la produccin de secuencias alfabticas no familiares. Una actualizacin eficiente en la memoria de ciertos elementos de la prueba, particularmente cuando el sujeto se encuentra sometido a una pre-sin de tiempo.

    Segn parece, las dificultades de integracin de la informacin de los ancianos vienen dadas por el enlentecimiento de la memoria de trabajo (13). Este dficit se ha relacionado adems con el deterioro de los lbulos frontales (13).

    La siguiente estructura que encontramos es la memoria secundaria o memoria a largo plazo (MLP), a la cual y a travs de la investigacin se han atribuido la mayor parte de diferencias debidas a la edad (14).

    La memoria a largo plazo tiene capacidad ilimita-da, y en ella se encuentran almacenados todos nuestros conocimientos, recuerdos, habilidades e incluso la informacin sobre el funcionamiento de los procesos cognitivos. Este sistema no slo mantiene de forma permanente la informacin, sino que tambin interviene activamente en todo el proceso de recuerdo.

    Una ejecucin pobre en tareas de memoria se-cundaria podra ser debida a diferentes factores, ta-les como fallos en la codificacin o asimilacin del

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    Parece ser que el deterioro cognitivo del enveje-cimiento se pone de manifiesto tanto en el proceso de aprendizaje, como en el de almacenamiento y el de recuerdo, pero depende bastante del tipo de ta-rea. Por ejemplo, en tareas de condicionamiento clsico o de condicionamiento operante, el rendi-miento en ancianos se ve disminuido, pero en tareas como el aprendizaje de un instrumento musical o una leccin de historia, si se les proporciona mayor tiempo no hay diferencias con los jvenes (2).

    En cuanto a la codificacin, es importante el pro-ceso de atencin llevado a cabo por el sujeto, pues cuando la informacin es tratada profundamente deja una huella mnsica que permanece durante ms tiempo. Para el tratamiento profundo de la in-formacin es necesario focalizar la atencin, salvo cuando el estmulo es muy conocido o sobreviene de forma inesperada.

    Se ha observado que el recuerdo difiere entre j-venes y ancianos cuando la tarea requiere un pro-cesamiento elevado, siendo superior en jvenes; mientras que si la tarea no requiere de tal no hay apenas diferencias. Esto sugiere que la explicacin que ms peso tendra en cuanto al dficit de memoria en ancianos sera la de un fallo en el proceso de almacenamiento (en la atencin dirigida a los est-mulos), pues si fuera en la inaccesibilidad, en el mantenimiento de la informacin almacenada o en los procesos de interaccin entre codificacin y re-cuperacin (como anteriormente se ha mencionado) no se producira tal diferencia. Adems la informacin una vez depositada en el almacn a largo plazo se mantiene tan eficientemente en personas jvenes como en ancianas (9).

    En cuanto a los fallos en la recuperacin se ob-serva que son ms en las tareas de recuerdo libre, pues en tareas de reconocimiento o en tareas de recuperacin con seales o indicios mejoran su eje-cucin, hacindose menor la diferencia existente entre jvenes y ancianos.

    En cuanto a la interaccin entre codificacin y re-cuperacin se ha hipotetizado que los mayores pre-sentan un dficit en la organizacin espontnea del material que se les presenta pero que, si se les pro-porcionan estrategias como instrucciones acerca de cmo organizar la informacin, mejoran en su eje-cucin. No obstante en los ancianos persisten estos dficits para las listas organizadas, posiblemente porque codifican menos tems que los jvenes por categora y no porque sean peores codificando in-formacin de orden superior.

    En cuanto a la memoria terciaria, muchas perso-nas mayores evocan recuerdos que han permanecido en la memoria desde su infancia; suelen ser he-

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    chos o eventos que marcaron su vida. A pesar de los esfuerzos realizados en investigacin, la meto-dologa cientfica empleada ha sido incapaz de veri-ficar y controlar las fases de adquisicin y codifica-cin de los recuerdos autobiogrficos y, por tanto, los resultados tienen poca consistencia (15).

    Craik y cols. (13), indican varios motivos de por-qu los ancianos recuerdan mejor los sucesos leja-nos que los recientes: Que los eventos remotos normalmente estn cargados de una mayor valencia emocional que los cotidianos. Que los eventos remotos son seleccionados por el sujeto (y no por el evaluador). Que no estn siendo recuperados desde el mo-mento en que ocurrieron, sino desde la ltima vez que fueron evocados o repasados.

    As los recuerdos mejor conservados seran los ms importantes para el sujeto y los dotados de ma-yor carga emocional (16).

    Siguiendo con el planteamiento anteriormente in-dicado de Perlmutter y Hall (7), y por lo que se refie-re a los contenidos, la memoria puede dividirse en memoria procedural o implcita y memoria declarati-va o explcita, la cual a su vez se divide en episdica y semntica. Parece ser que la memoria procedural o implcita no sufre deterioro (ni si quiera el dao cerebral suele afectarla) mientras que en la declarativa o explcita si existen cambios (13, 17, 18).

    La memoria procedural no necesita ningn acto intencional ni para su adquisicin ni para su recuer-do, pero su establecimiento no es inmediato, sino progresivo, mediante la repeticin de sus elementos. Este tipo de memoria se referira a las habilidades que se han practicado mucho, convirtindose en automticas, de forma que las recordamos sin necesidad de reflexionar ni de pensar de forma consciente. Pueden ser de tipo cognitivo, como leer o involucrar un componente motor, como ir en bici-cleta, conducir, tocar un instrumento o escribir a maquina. Este tipo de memoria no se ve deteriorada por la edad, siendo tan eficientes en este tipo de actividades las personas mayores como las jvenes.

    La memoria declarativa se refiere a nuestro cono-cimiento sobre el mundo, almacenndose en ella dos tipos de contenidos: episdicos y semnticos. Puede adquirirse con una sola experiencia e indu-cirse su recuerdo intencionadamente o mediante el contacto con algn estmulo evocador.

    La memoria episdica almacena hechos y acon-tecimientos que nos han ocurrido a lo largo de la vi-da, movilizndose de forma consciente y recuperan-do eventos vinculados a un tiempo y un lugar. Es decir, implica el recuerdo de hechos concretos y se refiere a recuerdos que forman parte de la experien-cia personal y que son activamente recuperados uti-lizando informacin contextual sobre cundo y c-

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    mo se ha dado un determinado acontecimiento. Por ejemplo, cuando nos preguntamos dnde hemos dejado las llaves? o cmo ocurrieron aquellos he-chos?, necesitamos reconstruir el contexto donde se dio la experiencia original para contestar a la pre-gunta.

    Referente a este tipo de memoria, al reducir el soporte ambiental, y por lo tanto incrementar el grado de procesamiento intencional requerido por la tarea, los grupos de personas mayores rinden ms pobremente que los ms jvenes, es decir, les cuesta ms retener y recordar sucesos a las personas mayores cuando la informacin o el material a recordar no tiene significado para ellos, no resulta familiar, y se requiere mayor esfuerzo para codificar y recuperar dicha informacin.

    En este sentido, hemos de tener en cuenta que, adems, las personas mayores codifican menos da-tos contextuales (19), de forma que no pueden re-cordar tantos datos sobre el contexto en el que se produce el acontecimiento como los jvenes, a no ser que este les sea familiar. Siendo as, la diferencia entre jvenes y ancianos disminuye por requerir menor procesamiento intencional.

    La memoria semntica constituye un conocimiento objetivo que ha sido acumulado y organizado, a lo largo de la vida, ms conceptual mente que con-textualmente. Este tipo de memoria recupera hechos y conceptos sin hacer referencia explcita al contexto en el que fueron registrados inicialmente. Se moviliza de forma inconsciente y evoca conceptos, smbolos, palabras, etc., que son necesarios para el lenguaje.

    Este tipo de memoria, est bastante preservada durante la edad adulta avanzada (20) y se postula que, en el caso de haber diferencias atribuibles a la edad, stas sera ms probable que fueran debidas al modo en el cual se organiza este tipo de memoria (21 ).

    Sin embargo, segn estudios recientes pueden existir disminuciones relacionadas con la edad en algunas tareas relacionadas con este tipo de me-moria: vocabulario, fluidez y encontrar palabras en el discurso espontneo (9). No se conoce cual es la fuente de deterioro que provoca estos efectos, pero se hipotetiza que ms que estar en la estructura o en el contenido de la memoria semntica, se encuentra en el detrimento de algunos procesos semnticos debidos al envejecimiento.

    Las diferencias entre memoria episdica y se-mntica son ms pronunciadas cuando las caracte-rsticas contextuales son codificadas con indepen-dencia del contenido (20). Conclusiones

    El deterioro cognitivo es algo normal con el paso de los aos, siempre y cuando ste no sobrepase los lmites de lo patolgico. Aunque estos lmites es-

    tn formados por lneas confusas en las que es muy complicado establecer un punto de corte concreto que diferencie lo sano de lo patolgico, nosotros he-mos pretendido hacer un estudio del envejecimiento considerado normal, centrndonos en el aspecto de la memoria.

    As pues hemos concluido que un anciano sin de-mencia, ante todo, tendr una velocidad de proce-samiento menor que un joven, lo cual influir en as-pectos como la recuperacin de la informacin o en la asimilacin del material presentado por primera vez; por otra parte la atencin y la concentracin tambin se ven disminuidas con el aumento de la edad, lo cual afecta de nuevo a la asimilacin de in-formacin novedosa y tambin a la memoria en ge-neral. Aunque diferenciando tipos de memoria, cabe decir que en el envejecimiento normal no se ven de-teriorados ni el recuerdo de los sucesos lejanos, ni el conocimiento del mundo acumulado a lo largo de su historia, ni las habilidades que se han practicado mucho.

    Un 70% de la poblacin se muestra de acuerdo con que a partir de los 65 aos de edad se producen deterioros en la memoria, pero tambin un 69% afirma que se pueden aprender cosas nuevas, no viendo dicho dficit como irreversible (14, 22). Por lo tanto, uno de los problemas catalogados como ms conflictivo y para el que no se encuentra fcil solucin es el de los problemas de memoria, pues correspondera con una combinacin entre esta ma-yor tasa de olvidos en las actividades diarias y una mayor preocupacin por los fracasos de memoria. Los olvidos, a su vez, crean un sentimiento de pr-dida de control sobre el propio comportamiento (23), as como una inmediata atribucin a la edad, y esto de nuevo recae en una peor ejecucin mnsica.

    Todos estos aspectos que influyen negativamente en las capacidades cognitivas del anciano pueden verse en muchos casos paliados por estrategias tales como apoyos ambientales o presentacin de estmulos familiares o relevantes para el sujeto.

    En definitiva, las personas sin demencia ni ningn trastorno orgnico mejoraran sus habilidades con programas de estimulacin y el aprendizaje de dife-rentes estrategias (24).

    En algunos estudios se dice que no sirve cualquier accin que se haga con el anciano, pues se habla de un entrenamiento y no de un entretenimiento (25). As pues, con estos programas se intentar facilitar la recuperacin de una habilidad perdida hasta una ejecucin similar a la que se tena con anterioridad (contrario a los programas de entrenamiento a personas con demencia, que se trabaja con lo que todava se puede hacer y no con lo que se ha perdido). Entonces se trata de generar habilidades y crear estrategias de una forma multimodal para la posterior generalizacin de los efectos. Por lo tanto, un programa bien diseado consta con material asequible al grupo, pero personal en-

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    cuanto que va orientado a las habilidades deficitarias de la persona y consta de una duracin media de unas 10 a 15 sesiones de una hora (25).

    Estos programas, adems tienen un valor aadido a la consiguiente estimulacin de habilidades ya de-terioradas. Con ellos estamos ayudando a que el an-ciano se relacione con otras personas de su misma edad, fomentando as no solo sus relaciones socia-les, sino tambin su autoestima. Algunos autores postulan que tal vez ese incremento en el estado de nimo sea el causante del aumento del rendimiento en tareas de memoria. Aunque sin dejar de afirmar que dicho incremento del estado de nimo puede ser debido a efectos paralelos del entrenamiento (24). En la misma lnea, cabe decir que otros autores plantean que a veces tales problemas cognitivos vienen provocados por problemas de tristeza y depresin que padecen algunas personas de esta edad. La idea de la muerte, el evidente deterioro en las capacidades fsicas incluso en algunos casos intelectuales o las posibles evaluaciones negativas de la vida, hace que los mayores se entristezcan tanto que no fomenten una vida activa, lo cual a su vez provoca el deterioro mental y fsico, cumplindose as la profeca autocumplida en sus capacidades. As pues parece que la creencia que se tiene sobre las propias capacidades memorsticas est relacionada con la eficacia de la misma (26, 27). As pues, tal creencia puede estar determinada por los estereotipos acerca de la edad avanzada, la autoestima, la motivacin por recordar o algn estado emocional como la depresin.

    Partiendo de que est comprobado que en un en-vejecimiento activo las capacidades no disminuyen de forma tan drstica, se hace necesario crear pro-gramas de intervencin que tengan como objetivo fomentar esa actividad, favoreciendo la calidad de vida en la ltima etapa de la vida, y alejndonos del modelo que slo se centra en la cantidad de vida.

    Para finalizar este trabajo, cabe recordar que un envejecimiento satisfactorio supone un estado de salud con caractersticas positivas, identificables a travs de un espectro de medidas de salud y que va ms all de lo funcional y cognitiva, teniendo en consideracin el bienestar psicolgico y subjetivo del individuo.

    CORRESPONDENCIA: Dr. J. C. Melndez Moral Departamento de Psicologa Evolutiva y de la Educacin Facultad de Psicologa Universitat de Valencia Av. Blasco Ibez, 21 E-46010 Valencia [email protected]

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