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OBSERVATORIO UNIVERSITARIO DE MEDIOS OUM ESCUELA DE CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN Realidades y construcciones mediáticas. Escenarios y actores. Un acercamiento al conflicto social a partir del Acuartelamiento policial. Córdoba, Diciembre de 2013.
En el marco de los graves sucesos ocurridos en Córdoba el 3 de diciembre de
2013 y dada la trascendencia de los mismos en la vida social cordobesa, el
Observatorio Universitario de Medios (OUM) de la Escuela de Ciencias de la
Información, decide monitorear la cobertura que realizó el medio gráfico más
representativo de la Pcia: La Voz del Interior.
Tomaremos los tres días posteriores a lo ocurrido: 4, 5 y 6 de diciembre, dicho
recorte se basa en la importancia que el medio le dio a los acontecimientos, hubo
concentración de información y análisis, abocándose el medio, especialmente lo días 5
y 6, casi exclusivamente a los hechos acontecidos.
En la edición del 4/12/13, las notas acerca del conflicto (a esa hora el diario
estaba en edición son mucho menores que los dos días sucesivos: De 47 notas en
diferentes secciones del cuerpo principal, solo dos hablan de los hechos ocurridos en
Córdoba y otras dos notas relacionadas. Ni la editorial ni las notas firmadas, hablan del
tema
El día 5/12, en cambio, la cobertura fue total, registramos 33 notas firmadas
incluyendo editorial y cola de editorial. Casi la totalidad tanto de la edición del 5 como
la del 6, se compone de columnas firmadas por periodistas del medio. Se hacen
diferentes análisis dando la sensación de una pluralidad de voces al respecto, pero se
fue definiendo un posicionamiento claro a partir del análisis y la opinión.
Como ya dijimos, el 5/12, casi la totalidad del diario se relaciona con los
lamentables hechos. Además de las 33 notas que ya hicimos referencia encontramos,
dos páginas centrales: 1) Infografía con las siguientes referencias: saqueos grandes,
saqueos chicos, intento de saqueo, vecinos armados o guardia comercial y barricadas,
acompañan ocho imágenes de diferentes espacios afectados de la ciudad. 2) Retratos
de una barbarie: crónica fotográfica que comienza con el reclamo de las esposas de los
policías y pasa por saqueos, jóvenes defendiendo sectores de Nueva Córdoba, la
imagen emotiva de un ferretero llorando por la pérdida total de su negocio, policías
armados intentando frenar los saqueos, propietarios de negocios saqueados
protestando en el Centro Cívico y como epílogo una foto de policías festejando el
acuerdo salarial, recibiendo el saludo de familiares y vecinos. En la portada del día
06/12/13 se puede observar que 17 de 25 titulares hacen referencia a los saqueos del
martes 03/12. Y dentro de estos 17 hay 3 que tocan el tema del accionar de los vecinos
durante los saqueos. Luego, en el interior del diario existen 5 notas que tocan la
temática del accionar de los vecinos.
Nos interesó tomar ciertos ejes para determinar cómo el medio construye
discursivamente los siguientes actores del conflicto,: “saqueadores“-“ delincuentes”,
“defensores armados”, Policía; Gobierno Provincial y Nacional. Para trabajarlos los
delimitaremos caracterizando como se definen sus roles y relaciones entre si.
Se analizará la cobertura informativa y algunas columnas significativas a
nuestro análisis.
POBRES ERAN LOS DE ANTES`
De acuerdo al análisis discursivo, llegamos a las siguientes construcciones discursivas:
La palabra más utilizada por los diferentes periodistas del diario La Voz para adjetivar a
los que realizaron supuestamente robos es “delincuentes.” También se utiliza
“saqueadores” al punto de dividir a la sociedad cordobesa entre “vecinos por un lado y
“saqueadores” por el otro.
En este sentido es importante considerar que se intenta estigmatizar a la
juventud, diciendo que estas personas en su mayoría eran jóvenes. Se recupera el
comentario de una persona que insinúa que el joven que falleció, “aparentemente
vendría de barrio Ciudad Evita.” Un barrio carenciado en términos socio-económicos
de la localidad cordobesa. Pero es un comentario que carece de comprobación y
veracidad.
También se construyó un discurso de contraposición estableciendo una
dicotomía: `pobre` - `no pobre`: ¡Cómo se extraña al pobrerío de antaño! ¡Esos sí
que eran pobres con códigos! Se conformaban con ganar para comer, con enviar sus
hijos a la escuela pública y con recibir los juguetes usados donados a Cáritas en
Navidad. Ahora son ladrones que andan en motito y “chorean” lavarropas, televisores,
inodoros, antenas satelitales y muebles. (Pobres eran los de antes. Por Edgardo
Litvinoff 6/12).
En otra nota se utiliza la pregunta retórica ¿quién nos cuida? Pero no se hace
referencia de qué en términos explícitos, lo que podría suponer que otra vez subyace
la división entre vecinos y saqueadores o delincuentes de los que hay que cuidarse.
Algunas adjetivaciones son explícitamente discriminatorias. Por ejemplo
“Hordas de forajidos” o…” los forajidos cambiaron al sombrero por la gorra, a los
caballos por motos, y a las armas por... más armas.” O… “un par de veces vi a esa nube
de langostas arrasar con todo.” O… están criados en tribus con una concepción
primitivista. “hordas enardecidas”, “depredadores”, “vándalos”, “furiosos se arrojaron
como “carroñeros” sobre la mercadería”.
“Son habitantes de las periferias del corazón, definiría el papa Francisco. Desconocidos
u ocultos, están criados en tribus con una concepción primitivista: la ruptura del orden
establecido es lo que mejor “garpa”, lo que posiciona“. (Perotti Julio `Papá, ¿el futuro
existe? 5/12)
Se remarca constantemente la caracterización de estos supuestos ladrones,
haciendo referencia a que eran personas que andaban en moto por toda la ciudad. `los
forajidos cambiaron al sombrero por la gorra, a los caballos por motos, y a las armas
por... más armas`(5/12).
También en varios textos se pone el acento en que no robaban alimentos o
comida sino tecnología y demás. A continuación con distintos recursos se intenta
fundamentar la idea de que no robaban por “necesidad” como en la columna firmada por
Juan Carlos Carranza ̀ Smart TV, aires acondicionados y ningún libro saqueado ̀ Cientos de personas
cargaron con dificultad enormes televisores LED, aires acondicionados, lavarropas o
cajas de bebidas alcohólicas, pero nadie captó imágenes de gente llevándose libros.
En una nota se hace referencia a la utilización de las redes sociales por parte de
quienes “relataban” todo lo que iba sucediendo, pero en ningún momento se hace
mención o se muestra preocupación por los comentarios con contenido racial que
también circularon por las redes sociales y que fueron visiblemente notorias por todos
los que utilizamos estas redes.
“Negras y negros” son términos que escucharemos toda la noche, en todos los
barrios, pronunciados con asco y natualidad (dijo Sergio Carreras, 5/12).
Todos modos de nombrar están en las antípodas con la designación de aquellos
que salieron a la calle a defenderse: “vecinos”, “comerciantes”, “joven propietario” .
DEFENSORES ARMADOS
La Voz del Interior otorga relevancia a la población civil que salió armada a las
calles de la ciudad de Córdoba para defender sus negocios o a los vecinos; varias notas,
todas ellas bajo la volanta: CORDOBA INDEFENSA
Los titulares y las imágenes al respecto muestran una Córdoba que se parece
bastante a las películas de western, haciendo “justicia por mano propia”. Titulares,
copetes e imágenes que reflejan la violencia de los vecinos y aunque en algunos
análisis hay cierta crítica a esa actitud violenta, los titulares y las bajadas impactan por
la naturalización de esos hechos.
Algunas muestras de esto: Calles sin efectivos, locales robados y vecinos
armados
A nosotros, nadie nos cuida. A mí me va a cuidar ‘esta’”, dice Raúl, un almacenero de
barrio Alberdi, mientras señala una pistola 22. (4/12/13)
“El problema es que nos estamos quedando sin balas” ( 5/12/13 Sección Política)
En todos los barrios, varios vecinos decidieron proteger sus propiedades con sus
armas. Se vieron muchas pistolas, revólveres y escopetas de distinto calibre.
` listo para la defensa. El propietario de un bar de Ruta 20 se muestra preparado por si
lo saqueaban`. (Epigrafe).
La nota comienza con una cita de esa persona: “Gringo, ¿no tenés balas?. De
cualquier calibre, cartuchos de escopeta del 12 o 16. Estamos buscando en todas las
casas, porque anoche usamos casi todo lo que teníamos. Es un problema que no
tengamos más balas, porque si esto sigue…”
Un recuadro en la pequeña nota, otro titular: Un arsenal para defenderse de
los saqueos en ruta 20 (refiriéndose al mismo hecho).
Comerciantes les dieron batalla a los saqueadores (5/12/13 Sección Política). Crónica
firmada por Héctor Brondo
Bajada: Armas de fuego, cuchillos y machetes fueron algunos de los elementos usados
por los propietarios de los locales para repeler los saqueos de los delincuentes.
Las dos imágenes en una misma nota muestran la construcción de las dos caras de una
misma realidad.
Cordobeses que defendieron al de al lado (5/12/13 Sección Política)
Bajada: En algunos barrios, los vecinos adoptaron medidas defensivas contra los
saqueadores/Colocaron barricadas para impedir la circulación de las
motos/Repelieron los saqueos con botellas, macetazos y tiros al aire/También
lincharon a delincuentes. (El subrayado es nuestro).
Dos motocicletas ardían ayer en la Av. Fuerza Aérea con dos cuadras de
diferencia: la primera en Tronador y la segunda en Vieytes. “los vecinos los agarraron,
estuvieron toda la mañana robando”, comentó un vecino. “Grupo de los ocho” se
designaron los vecinos en guardia de San Vicente, “entre los 8 que hicimos guardia,
tiramos más de 40 tiros” (5/12).
Debajo dos columnas: 1) firmada por Natalia García se titula “Gracias vecinos
de Nueva Córdoba, por defendernos”, tomada de un cartel que apareció en un
comercio de ese barrio y que acompaña la nota en una foto. Su bajada: En Nueva
Córdoba, a la madrugada, cientos de vecinos salieron a las calles a atacar delincuentes
y defenderse con barricadas.
En contratapa (Córdoba indefensa 20 A) Una gran foto de jóvenes limpiando las
calles. Ep.: Solidaridad. Ayer algunos jóvenes ayudaron a limpiar calles de Nueva
Córdoba.
En toda la edición y en el registro fotográfico hay una estigmatización del joven
de clase baja esteriotipado y los jóvenes de Nva Cba, bien vestidos, valerosos y
solidarios.
Entre los artículos registrados en el día 6 se destacamos en este apartado:
Aumentaron las consultas para comprar armas de fuego También para adquirir
municiones. El mercado de armamento está fuertemente regulado. En Córdoba, hay
unas 100 mil armas legales, e igual número de ilegales
“Postal para no repetir. Una escopeta en primer plano y dos pistolas detrás. Fue en la
noche del martes”. En este epígrafe el periodista valora negativamente el uso de armas
para defensa personal.
“Las principales armerías de la ciudad de Córdoba percibieron un aumento en las
consultas para la compra de armas de fuego como consecuencia de los saqueos que
hubo entre la noche del martes y la madrugada y la mañana del miércoles.”
La nota en general habla de un aumento en las consultas para adquirir
armamento en la ciudad de Córdoba “como consecuencia de los saqueos”. El
periodista no realiza valoraciones en el cuerpo de la nota sobre la compra de armas
por parte de civiles.
Convivir con una tragedia en potencia (Jorge Londero, 6/12)
Fuera del ámbito policial, la creciente tenencia de armas de fuego en la población civil
multiplicó la incidencia de homicidios y heridos en el marco de la denominada
violencia urbana.
Desde el título y bajada se valora negativamente la tenencia de armas por parte
de la sociedad civil.
“Comprar un arma de fuego con la intención de estar seguros es una contradicción.
Miles de casos en todo el mundo demuestran que llevar una pistola, un revólver o una
escopeta a la casa es instalar en ella un drama en potencia.En pocas palabras: las
armas en casa no persuaden, es poco probable que podamos defendernos con ellas e
implican poner en riesgo a quienes más queremos.”
Durante la nota se hace hincapié en los accidentes que pueden ocurrir en un
hogar donde existan armas, pero no se hace referencia a que también es negativo
utilizar armas contra otras personas haciendo uso de la justicia por mano propia.
Pobres eran los de antes
El título ironiza sobre la imagen que quedó en gran parte de la sociedad sobre los
autores de los saqueos.
Cuando el primer cordobés tuvo que sacar un arma para defenderse de su vecino, se
consagró el fracaso estrepitoso de toda la sociedad. No se trata de echarle la culpa
sólo al comerciante que intenta defender el producto de toda una vida –nadie puede
detenerse a reflexionar sobre la pobreza mientras le hacen pedazos su negocio–, pero
sí de mostrar el enfermizo tejido en el que nos relacionamos.
En este párrafo el periodista valora negativamente la utilización de armas en defensa
propia pero de algún modo la justifica cuando dice que “nadie puede detenerse a
reflexionar sobre la pobreza mientras le hacen pedazos su negocio”.
Adolescentes convocados por Facebook fueron a ayudar
Mientras que muchos jóvenes fueron detenidos durante los saqueos, otros se
solidarizaron con las víctimas.
“No tenemos plata pero podemos ayudar con esto. Fue terrible lo que pasó”, cuenta
uno de los chicos. Una chica se corta al levantar unos vidrios y le pide una curita a la
farmacia de la esquina. El local fue saqueado por completo, pero socorren a la chica.
Entre tanto bajón, los comerciantes se alegran al ver que hay gente desconocida que
ayuda.
En este caso el medio hace referencia a la ayuda de los jóvenes luego de los saqueos
pero destaca que así como unos se solidarizaron “ muchos jóvenes fueron detenidos
durante los saqueos”, creando una dicotomía entre jóvenes saqueadores y jóvenes
solidarios.
La Justicia dirá quién apretó el gatillo
El policía no descarta que a Rodríguez lo haya acribillado “alguien que sufrió un robo
domiciliario o de su negocio. ¿Sabía que en Villa Bustos y Ampliación 1º de Mayo no
sólo ingresaron a comercios sino también a casas de familia?”, interrogó al cronista.
“Es un sector donde hay muchos civiles armados”, reconoció.
En esta nota “Una fuente policial dio a La Voz del Interior, de manera extraoficial” una
versión sobre la que el joven muerto durante los saqueos podría haber sido alcanzado
por una bala de algún comerciante en defensa personal.
“SON SALARIOS DE MISERIA”
Consideramos fundamental ver como el medio discursiviza a la variable “Policía”,
actor que se construye tanto de forma institucional (colectiva) como individual (a partir
de ciertas voces particulares, como ser la de alguna de las esposas de los uniformados).
En relación a esto último, es notorio como, en el discurso, las mujeres de los
policías (las esposas) tienen más voz, o se las cita más seguido que a los propios
agentes:
“No se equivoque, acá no queremos que se vaya nadie. Lo único que pedimos son
sueldos como los de Epec”, respondió la mujer de un policía de Córdoba, en pleno
acuartelamiento” (Un antes y un después para las peleas gremiales 5/12:
“(…)centenar de policías se acuarteló en el comando CAP en Cerveceros. También
llegaron esposas de efectivos policiales que no dejaban salir a los móviles de
patrullaje.” (El acuartelamiento de policías derivó en una ola de inseguridad 4/12)
También es notorio, en las citas (sobre todo en la segunda), como las mujeres, son
planteadas sino, como causa de los hechos, como responsables de una gran parte de
las decisiones tomadas por el actor “Policía”. En este sentido, la siguiente cita es
ilustrativa con respecto a lo anterior:
“(…)Las esposas de los agentes tuvieron un papel determinante para que miles de
uniformados abandonaran el servicio y dejaran indefensos a los cordobeses.(el
subrayado es nuestro).
(…)La presencia de las mujeres se convirtió en una postal cotidiana y el lunes
irrumpieron en la Guardia de Infantería, sin permitir el ingreso o egreso de vehículos.
Ese fue el comienzo de la huelga. Existía un acuerdo entre las manifestantes y los
hombres de Infantería, que tenían la excusa perfecta para autoacuartelarse” (el
subrayado es nuestro) “Acuerdo, luego de 35 horas de caos 5/12”.
Retomando, en el párrafo anterior podemos ver, aparte de lo mencionado con
respecto a las esposas, cómo se plantea al actor (Policía), primero, como causa del
conflicto (basta ver lo marcado en negrita). Al respecto de esta característica, es
interesante hacer un repaso por algunos de los titulares que abarcaron nuestra
cobertura:
“Un reclamo que dejó a los cordobeses sin seguridad” (del 04/12)
“El acuartelamiento de policías derivó en una ola de inseguridad” (del 4/12)
“Calles sin efectivos, locales robados y vecinos armados” (del 4/12)
“El acuartelamiento de policías derivó en una ola de inseguridad” (del 04/12)
Los titulares nos muestran la relación de causalidad que plantea el medio, entre el hecho del
acuartelamiento con respecto a los saqueos. De esta forma se plantea al actor “Policía” como culpable y
responsable de los acontecimientos de violencia y delictivos. Cabe aclarar que no sería una culpabilidad directa, o
sea no se plantea que los policías salieron a saquear, sino que se construye una idea de que producto del paro
policial se iniciaron los hechos de violencia. En otras palabras, desde el discurso se preconiza que la idea de orden,
estaría íntimamente vinculada a la de cohersión física, en pos de la paz social. Quizá las siguientes frases tomadas del
medio sean ilustrativas al respecto:
“(..), los policías pusieron a la Capital al borde del abismo (y a muchos de sus
habitantes, un paso más adelante). Pusieron la democracia en pausa durante un día y medio y
dinamitaron todos los diques que, a duras penas, suelen contener cada día la violencia extrema
y evitar el robo en masa(…)”“Un antes y un después para las peleas gremiales¨ 05/12
“(…)La Policía dejó a la ciudad librada a su suerte. Vandalismo y actos de pillaje, más
espontáneos que organizados, se sucedieron en la ciudad.” (“La noche de las escopetas” 05/12)
“Una grave ola de saqueos y robos a supermercados y comercios de toda la ciudad, que
continuaba al cierre de esta edición, se desató ayer ante la ausencia policial por el
autoacuartelamiento producido por reclamos salariales(...)” (“Violencia, saqueos y robos en
supermercados y negocios” 04/12)
Lo llamativo, con respecto a lo dicho anteriormente, es que el actor “Policía “, no es sólo planteado
como causa del conflicto, sino que al finalizar la cobertura del hecho, es planteado también como
solución. Volvemos a vislumbrar, la idea de que una sociedad sin policía es una sociedad sin paz ni
tranquilidad. Desde la firma del acuerdo, el día 5/12/13 se dilucida en los artículos una especie de cambio
de ángulo o enfoque, con respecto al actor “Policía”. O sea, se reafirma el carácter punitivo de la
institución y la consecuencia social que esto implica:
“Se espera que hoy sea normal del todo. Al cierre de esta edición, no había
reportes sobre nuevos saqueos a comercios ni robos a mansalva. Tampoco se oían
tiros.” (“Acuerdo, luego de 35 horas de caos” 5/12)
“Vecinos sacaron a la calle, heladeras, cocinas y otros productos robados, ante el paso de los
patrulleros” : (“Por la presión policial, muchos devolvieron lo que saquearon” 6/12)
También, son ilustrativos al respecto los siguientes titulares:
“Tras la furia, lenta vuelta a la normalidad” (del 5/12/13)
“Tenemos 122 detenidos por los saqueos, y seguimos trabajando” (del 6/12)
Cabe destacar que el reclamo por las condiciones laborales, de parte de la
Policía, es trabajado, únicamente, desde el ángulo salarial. Los ejemplos son
numerosos y variados, pero son icónicas, al respecto, las siguientes citas:
“(…)la policía se acuarteló en reclamo de una mejora salarial(…)”(“Algo que se veía
venir” 04/12)
“La protesta policial comenzó por un reclamo de $13 mil de salario básico.
Se entregó un escrito con 14 puntos, pero el principal era el salarial: un básico de 13 mil
pesos.” “El acuartelamiento de policías derivó en una ola de inseguridad” 04/12
Así, la protesta se banaliza, omitiendo los reclamos respecto a las detenciones
arbitrarias y las condiciones de las comisarías. Reclamos que sí se reprodujeron en
otros medios, a través de la voz de las esposas (ítém trabajado en los primeros
párrafos)
Para finalizar y en relación a lo anterior, es notable, en ciértos artículos, cómo
se victimiza a los uniformados en función del aspecto salarial:
“(…)los miembros de la fuerza “están al borde de la indigencia”(…) La madre de un
agente de la caminera vociferó que su hijo gana 4.400 pesos por mes, está
“sobrecargado” de trabajo, y con su esposa y sus dos hijos viven con ella, porque no les
alcanza el alquiler (” En Río Cuarto, fuerte respaldo del SEP a policías” 04/12)
En la cita anterior aparece otra voz: la de una madre. Es notable cómo en el
medio la voz de la Policía aparece citada en forma indirecta, mientras que la de los
“familiares” (“esposas”, y “madre”, en este caso) aparece reproducida en su totalidad
o bien de forma mixta. Es necesario aclarar también, que los artículos analizados son
principalmente de opinión, lo que en cierta forma también se condice con los métodos
de citación; pero al notar una característica que se veía repetidas veces en nuestro
corpus, nos pareció importante recalcarlo.
Para terminar, reproducimos un fragmento que nos parece representativo de
nuestro seguimiento, y en ese sentido, en pocas líneas, plantea la construcción
discursiva, que La Voz del interior hace, alrededor del actor “Policía”:
“Lo único incuestionable es lo que muestran los recibos de sueldos de los policías: son
salarios de miseria`.
Años sufriendo los insultos, las pedradas y las bombas de estruendo que
sistemáticamente les lanzan, en cada conflicto, otros gremios tan dependientes del
Estado como ellos, pero con sueldos tres o cuatro veces más altos,
`No inventaron nada. Hicieron lo que hacen todos los demás: dejaron de prestar servicios” (“Un
antes y un después para las peleas gremiales” 5/12)
“EN ESE CHANGUITO SE LLEVAN EL ESTADO”
En cuanto a la variable Gobierno Provincial, durante el día 4 de diciembre, se
destacan las siguientes referencias.
Hay 4 notas informativas y 3 notas de opinión. Algunas de las más destacadas son:
“Durante todo el día de ayer ni el Gobierno provincial como institución, ni
ninguno de sus funcionarios brindaron un solo comunicado a la población en todo el
día”. Haciendo referencia a las principal tarea que debería tener tal institución, se
destaca en la misma nota la única información oficial hacia los cordobeses: “La
Municipalidad de Córdoba, anoche pasadas las 22 anunció que no habría clases en sus
38 escuelas y que se había resuelto la interrupción del servicio de transporte urbano,
luego de que se registraran ataques a colectivos de Coniferal y Ersa. También se
suspendió la recolección de residuos”.
La opinión de Julian Cañas destaca negativamente la posición provincial. “El
Gobierno y los uniformados se tiran la pelota por la responsabilidad del conflicto, pero
la solución no aparece”. A su vez critica al gobernador por no estar presente en la
provincia “¿Nadie le avisó que el conflicto se agudizaba? ¿O el gobernador hizo caso
omiso a la advertencia? Cualquiera de las dos situaciones es preocupante”.
Se plantea en una nota titulada El acuartelamiento de policías derivó en una ola
de inseguridad, una bajada significativa “La protesta policial comenzó por un reclamo
de $13 mil de salario básico. El Gobierno hizo una oferta y fue rechazada. Urgente
regreso de De la Sota”. Una destacada síntesis de la situación pasadas las 22 horas, con
De la Sota varado en Panamá y tratando de encontrar un vuelo para regresar a
Córdoba, los funcionarios provinciales –en contacto telefónico con el gobernador–
pergeñaron una propuesta: mil pesos para diciembre y otros mil pesos para enero.
En cuanto a las imágenes del día se repiten en constantes fotos de los saqueos
y los locales vacíos posteriores a los robos. Con epígrafes como “Las persianas forzadas
del supermercado de Santa Ana y Felix Paz abren el camino a uno de los numerosos
grupos de saqueadores que asolaron la ciudad”.
Durante el día 5 de diciembre, hubo 30 notas de opinión. Con un día posterior
al conflicto, las opiniones y pensamientos de los periodistas eran de las más variadas.
Entre algunas citas, se pueden destacar: “De ningún modo fue casual que ayer el
gobernador De la Sota, el intendente Mestre y los mediadores religiosos insistieran en
lo mismo: una ley nacional que ordene servicios mínimos durante los paros de policías,
choferes y la Justicia. Sería algo. Hoy es ceder o la nada” (M.Virginia Guevara). “El
momento más crítico para el delasotismo” es un titular que sintetiza en una opinión la
critica hacia el gobierno provincial, muy similar en toda la edición del día, con frases
como: “De la Sota tenía planificados retoques en su gabinete, pero los últimos
acontecimientos obligarían a que esa “oxigenación” se convierta en una
reestructuración profunda de su equipo gubernamental”. “De la Sota tenía la intención
de recuperar la relación institucional con la Nación. Pero sus ácidas declaraciones de
ayer y las respuestas destempladas desde la Rosada no dejan margen para el diálogo”.
Los títulos son muy gráficos y significativos de la situación tales como: Convivir
con la tristeza, Verle la cara al fondo, Che, en ese changuito se llevan el Estado, La
noche de las escopetas, Se rompió algo que llevará mucho tiempo reconstruir.
Duras críticas hacia el gobierno provincial como “En Córdoba, el Estado nacional
está desaparecido hace rato. La provincia que tal vez más contribuye a la recaudación
nacional viene olvidada desde décadas”; “Cada provincia, nos dice la Constitución, se
dictará sus normas bajo el sistema republicano, para asegurar la administración de
justicia. Bajo esas condiciones, el Gobierno federal es garante del goce y ejercicio de
las instituciones. Ni el gobierno de José Manuel de la Sota proveyó la seguridad ni el
de Cristina Kirchner cumplió su garantía. Se imputaron mutuamente esa simétrica
carencia”.
Bajadas criticas como “Una explosión inesperada iluminó algunos de los
conflictos que siguen atravesando hoy a la Provincia y el país. La madrugada de ayer
será recordada como una de las peores manifestaciones de esas pugnas. “Tour”por un
infierno de caos y violencia”; “En una sociedad fragmentada, irrumpen discursos
violentos, segregacionistas. Se padeció el Estado ausente y los funcionarios nacionales
y provinciales mostraron su costado más mezquino”; “¿Es tan clara la distinción entre
actos de delincuencia y estallido social, como lo expuso el gobernador José Manuel de
la Sota en el discurso con el que ayer anunció el fin del conflicto salarial con la Policía
en huelga?” “Justificada o no, la mora en el envío de la Gendarmería Nacional no hizo
más que devolver a un punto de difícil retorno la relación de enemistad entre la Casa
Rosada y el gobernador José Manuel de la Sota”, “El gobernador preparó un acto en el
Centro Cívico, con clima festivo y fuerte presencia del PJ. Los opositores presentes se
vieron sorprendidos e incómodos”.
Se destaca desde el punto de vista religioso, el aporte del Comité Interreligioso
por la Paz (Comipaz) desde los que se destaca “Cuando en la madrugada del miércoles
el Gobierno de la Provincia de Córdoba nos convocó para ver si podíamos acercar un
poco de luz desde nuestras distintas y milenarias tradiciones a un conflicto que ya se
había desmadrado”.
Lecturas significativas tales como: Córdoba acongojada, su noche más aciaga,
“Córdoba también es Argentina” (De La Sota), escenario de saqueos y robos, campo de
batalla, el problema policial, Pareciera que Córdoba no pertenece a este país.
Por último, en la edición del día 6 de diciembre, se encuentran 12 notas de
opinión de los distintos periodistas del diario con una mirada crítica de la situación.
Entre los que se destacan, 2 notas con opiniones acerca del uso de armas, así como
patologías psicológicas o físicas que puede tener una persona luego de vivenciar los
incidentes.
A su vez, se destacan frases en notas tales como: “ni vale la pena ya traer a
colación el juego del teléfono descompuesto en que se enredaron en las últimas 24
horas el gobernador José Manuel de la Sota y el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich”,
“Con el gobernador, en tanto, el malestar ya es poco disimulable. Le endilgan como
mínimo no haber visto a tiempo la crisis policial, pero le achacan también la parálisis
en la que ingresó la gestión, con la falta de resolución de temas varias veces
conversados”, “consecuencias políticas en el Gobierno provincial aún son una
incógnita”, “Monteoliva se vio ayer obligada a dar la cara, con la excusa de informar
que hay más de un centenar de detenidos por los saqueos”, “En el Gobierno, dan como
un hecho que la semana que viene habrá “novedades” en materia de cambios de
nombres y algunos ministerios que se transformarán en secretarías”,
Otra de las variables que se tomó en cuenta fue el Gobierno Nacional (y
las diversas formas de hacer referencia a él).
Algunos ejemplos son: 4/12: “El acuartelamiento de policías derivó en una ola
de inseguridad” ; “La medida de fuerza continuaba y el jefe de Gabinete, Oscar
González, confirmó que se había solicitado el envío de Gendarmería por el descontrol
que se vivía en la Capital. También dijo que no habían tenido respuesta de ese
organismo nacional”
Durante la jornada del 5/12 se destacan frases en las notas tales como : “La
crisis acaparó la jura de los diputados”; “Todos los líderes opositores que estrenaron
traje de legisladores nacionales aprovecharon para pedir por la paz social y repartir
culpas a las gestiones de José Manuel de la Sota y de Cristina Fernández de Kirchner”.
El mendocino Julio Cobos salió a pegarle a la Nación: “La Casa Rosada debe tomar
cartas. (Jorge) Capitanich está desperdiciando todo el crédito que le habíamos dado. (el
subrayado es nuestro). Acá hay que actuar de oficio; Córdoba pertenece a la
Argentina”, sostuvo.
En tanto, el flamante jefe de la bancada radical, el cordobés Mario Negri, contó
que habló a las 2 de la madrugada con De la Sota y que a las 6.30 lo hizo con el
secretario de Seguridad nacional, Sergio Berni, para pedirles que aúnen esfuerzos.
“Capitanich jugó al teléfono descompuesto entre dos mujeres celosas; me desilusionó”,
dijo. Schiaretti, antes de ingresar al recinto, dijo a la prensa que no sabía por qué la
Nación no había enviado a la Gendarmería y que si lo hubiese realizado en la noche del
martes, no habría habido caos. (el subrayado es nuestro).
Los dos líderes de la oposición más buscados por los flashes y las cámaras,
Sergio Massa (Frente Renovador) y Hermes Binner (FAP), centraron sus críticas en la
Casa Rosada por todo lo que demoró en anunciar el envío de gendarmes. “Córdoba es
Argentina y amerita el urgente envío de fuerzas federales, como Gendarmería, porque
hay argentinos que corren riesgo”, sentenció Massa. (el subrayado es nuestro). El
santafesino fue menos jugado: “Es necesaria la colaboración de los organismos
nacionales y provinciales”, expresó. (el subrayado es nuestro). ”Che, en ese changuito
se llevan al Estado” (…) Una sola se sigue cumpliendo a rajatabla, como es el hecho de
que tanto la Nación, como la Provincia o la Municipalidad nos cargan cada vez más
impuestos.
Con cinismo, el “jefe de Gabinete de la República Argentina Menos Córdoba”,
Jorge Capitanich, se limitó a decir que la seguridad es una competencia de las
provincias.
La muestra de la glacial indiferencia la dio la “presidenta del Área
Metropolitana de Buenos Aires”, Cristina Fernández. Ayer, ni siquiera en la asunción de
nada menos que la nueva “ministra de Seguridad de la Nación Excepto Córdoba” (el
subrayado es nuestro); “Se rompió algo que llevará mucho tiempo reconstruir”.
Pero hay responsables claros y directos que parecieron haber estado muy lejos
de la altura que las circunstancias exigían. Por ejemplo: “esa tenida entre el Gobierno
nacional y el provincial como si estuviesen en medio de un proceso electoral o –peor
aun– resolviendo una interna partidaria, seguramente no será neutra en la
consideración ciudadana. (el subrayado es nuestro).
La aparición del jefe de Gabinete de la Nación, Jorge Capitanich, a primera hora
de la mañana hablando de las deudas de Córdoba con la administración central,
mientras los cordobeses estaban en medio de palos, balas y barricadas, desmoronó la
figura que había construido el chaqueño como el nuevo rostro tolerante y dialoguista
de un gobierno que jamás se hace cargo de nada. El risueño silencio de la presidenta
Cristina Fernández en la jura de la ministra de Seguridad, María Cecilia Rodríguez, fue
lacerante.
“Fin de un enfrentamiento, inicio de un desafío” Ni el gobierno de José Manuel de la
Sota proveyó la seguridad ni el de Cristina Kirchner cumplió su garantía. Se imputaron
mutuamente esa simétrica carencia. La puja fue presentada como una suerte de
guerra santa, heredera de tiempos inmemoriales, entre un nacionalismo obcecado y
una no menos pertinaz autonomía.
En la Casa Rosada, era ayer un secreto a voces que el jefe de Gabinete, Jorge
Capitanich, pretendía acceder en la madrugada a ese pedido. Que hubiese querido
viajar al frente de la delegación antitumultos para exhibir los nuevos vientos que en
teoría soplan en los pasillos de Balcarce 50, desde el ingrato temporal de octubre.
La presidenta de la Nación tuvo, para el padecimiento de los cordobeses, algo
menos que una decisión oportuna. Ni siquiera una tardía palabra de consuelo.
“La oposición prefirió castigar a la Rosada”: La oposición nacional, que ayer
hizo de la crisis cordobesa el tema dominante del Congreso, prefirió poner sus ojos en
cómo el gobierno de José Manuel de la Sota y la Casa Rosada manejaron las calientes
horas de violencia en “La Docta”.
También Mauricio Macri, el otro “gran opositor” con ansias presidenciales, se
sumó al pedido de envío de gendarmes. Lo hizo a primera hora de la mañana, cuando
el kirchnerismo no lograba decidir el envío de fuerzas, algo que se formuló demasiado
tarde.
`¿Punto de no retorno?` No faltó ayer la interpretación de que, sobre la
voluntad de diálogo y colaboración de Capitanich, se impuso la orden del secretario de
Legal y Técnica, Carlos Zannini, que es lo mismo que decir la presidenta Cristina
Fernández, de cobrarlefacturas pendientes a De la Sota y dejarlo que se arreglara por
su cuenta.
“Opositores, de la moderación a la crítica total a De la Sota”: Por su lado, el
kirchnerismo no se hizo visible durante el conflicto, y salió a marcar posición una vez
que se hicieron palpables los reproches entre Provincia y Nación por el nunca
concretado envío de gendarmes para suplir la falta de policías.
“La Rosada culpó a De la Sota y justificó el no envío de gendarmes”
El Gobierno nacional cargó sobre José Manuel De la Sota toda la
responsabilidad política por los hechos de violencia en Córdoba, hizo hincapié en la
ausencia del gobernador en el país al momento de iniciarse la protesta de la Policía y
justificó su decisión de no enviar fuerzas de la Gendarmería Nacional para restablecer
el orden en la capital provincial. De todos modos, los sucesos en Córdoba causaron
profunda inquietud en la Casa Rosada, perceptible desde primeras horas del día y
hasta el atardecer, cuando la presidenta Cristina Fernández, esta vez definitivamente
sin luto (vestido y saco blancos), volvió por segunda ocasión a la sede gubernamental
durante su convalecencia.
“De la Sota, sin autocrítica, y con duros cuestionamientos a la Nación”
De la Sota tuvo un discurso encendido, en el cual no hubo autocrítica y sí un
duro cuestionamiento al Gobierno nacional. “Pareciera que Córdoba no pertenece a
este país”.
El gobernador confirmó que el martes próximo concurrirá a una audiencia con
el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, pero remarcó que no espera resultados de ese
encuentro. “Le diremos con firmeza que Córdoba quiere cobrar lo que le deben”,
exclamó, generando otra ovación de los dirigentes peronistas.
El gobernador agradeció al obispo de Córdoba y al resto de integrantes del
Comipaz local, como a dirigentes nacionales, como Sergio Massa, Mauricio Macri,
Daniel Scioli, Julio Cobos y Antonio Bonfatti. Todos sus dardos fueron dirigidos a la
Casa Rosada, donde el martes próximo ingresará para resolver alguno de los tantos
diferendos que mantiene con la administración K.
José M. De la Sota (gobernador de Córdoba)
“Por la falta de respuesta de la Nación, es como si los cordobeses tuviéramos que
quemar nuestro DNI, porque pareciera que algunos no nos consideran parte de la
República Argentina”.
“Hay que hacerse responsable” El Gobierno nacional también debe asumir su
responsabilidad, ya que aportó su cuota de mezquindad al dilatar las gestiones para
enviar a Córdoba efectivos de Gendarmería Nacional. Otra consecuencia nefasta de la
pelea política sin destino que mantiene el poder central con la administración
provincial.
6/12/2013
“Preocupados por el rumbo de Córdoba” (…) pero el caos fue en parte también
producto del obcecado enfrentamiento entre la Provincia y la Nación. Primero por la
dilatada disputa por los fondos que Córdoba reclama; luego, por la falta de ayuda
concreta en medio del caos.
“La prevención, un lujo sólo para los amigos” (…) los ciudadanos de segunda del
interior, ni un gendarme. A los sufridos bonaerenses que sí saben lo que es lidiar con el
flagelo de la inseguridad, 10 mil efectivos bien pertrechados, como para que no queden
dudas de las diferencias entre una Argentina y otra.
Así de asimétrica e injusta es la atención que la Nación dispensa a los conflictos
derivados de la inseguridad, según sea el color político del territorio.
El interés de la Casa Rosada siempre estuvo enfocado en el conurbano bonaerense,
zona caliente del delito y también bastión electoral clave.
Eso sí, ahora parece que el mal ejemplo de Córdoba puede ser contagioso. Por eso ayer,
con rapidez de reflejos increíble, se armó en Buenos Aires un despliegue “preventivo”
de efectivos, a partir de un acuerdo entre la Provincia y la Nación.
Lo dicho: para los amigos, prevención; para los enemigos, ni reacción tardía.
“Reparar la brecha social” Los hechos fueron manifestación de una profunda crisis en
la Policía y, además, dañaron aún más las relaciones entre las autoridades de la
Provincia y las de la Nación.
Es evidente que las diferencias políticas entre la administración de José Manuel de la
Sota y el equipo de la presidenta Cristina Fernández se ahondaron. Y eso no es un buen
augurio.
A MODO DE CIERRE
La Voz del Interior dio una cobertura relativamente completa de la crisis social
e institucional vivida en Córdoba en el mes de diciembre de 2013.
Los días 5 y 6 de diciembre las ediciones se construyen casi en su totalidad a partir de
diversos análisis de la situación, esto da la presunción de múltiples voces enfocando el
problema desde diferentes aristas ; sin embargo, se reflejan las subjetividades de
quienes escriben y no aparecen de manera equitativa las voces de todos los
protagonistas.
Se refuerza la sensación de inseguridad (estatal y ciudadana) y la necesidad de una
“policía presente y de mano dura”. Se estigmatiza y se margina a un sector social a
quien se nombra con valoraciones negativas: delincuentes, vándalos, depredadores,
bárbaros, etc. Silenciando las voces de dicho sector.
Se presentan a los vecinos (defensores civiles armados) como un hecho lícito y
naturalizado, en muchos casos justificando esta violencia como un acto solidario. En
algunos de estos casos, se propone a estos actores como “empáticos” justificándose a
través de actos de justicia por mano propia .
En cuanto a los Policías registramos en el medio cuatro factores: el rol fundamental de
las mujeres, esposas de los policías en el conflicto, contrapuesta a la ausencia de la voz
de los uniformados; cuando se habla del sector policial se lo hace desde el reclamo
salarial como causa lícita y natural de amotinamiento y el efecto, los disturbios
ocurridos. Se emparenta con el amotinamiento del 2005 y desde allí se justifica. Sin
embargo se refuerza la idea de que “sin policías” aparecen los desmanes, por lo tanto
se vigoriza la idea de fuerte control policial sobre la ciudadanía cordobesa.
No podemos aseverar que se construyó una imagen “heroica” del policía pero la foto
de tapa del día 5/12 con los policías festejando el acuerdo salarial parecería reivindicar
lo ocurrido silenciando las verdaderas razones políticas del conflicto. No se menciona
la crisis interna y externa de deslegitimación de la Fuerza que fue de conocimiento
público las semanas anteriores.
Se busca conmover al lector utilizando la apropiación del término “juanes” para
referirse a los más damnificados en cuanto a la situación salarial policial. Este término
utilizado para calificar los efectivos de menor rango, es utilizado frecuentemente de
forma despectiva dentro y fuera de la institución y ahora enfatiza en un carácter
humilde apelando a la emotividad para generar solidaridad ciudadana para con la
fuerza.
Con respecto a la mirada del Gobierno Provincial frente al conflicto, el medio no
escatima en duras críticas al Gobernador De la Sota y a la gestión de su Gabinete. Se
hace hincapié en la ausencia de una voz oficial que diera cuenta de los hechos y
buscara una solución, la que llegó extremadamente tarde. Consideran que el Gobierno
provincial está desbastado, “el momento más crítico del Delasotismo” y se plantea la
aguda grieta entre el Gobierno Provincial y Nacional considerando que “no hay vuelta
atrás”. Queda la sensación que La Voz del Interior, “le soltó la mano a De La Sota” en
contraste con ediciones anteriores observadas en diferentes temas por este
Observatorio.
Se cuestionó al Gobierno Nacional en su no participación efectiva en el conflicto en
una disputa de ida y vuelta dejando la sensación a los cordobeses de encontrarse
“solos y abandonados”. Es fundamental en esta “rencilla” destacar las opiniones de
Simioni (5/12/13) que culpa directamente al Gobierno Nacional de no mandar los
gendarmes a Córdoba y utiliza la ironía del olvido de Nación a Córdoba el “jefe de
Gabinete de la República Argentina Menos Córdoba”, Jorge Capitanich, se limitó a decir
que la seguridad es una competencia de las provincias. O si no, otro gran ejemplo es:
“La muestra de la glacial indiferencia la dio la presidenta del Área Metropolitana de
Buenos Aires, Cristina Fernández. Ayer, ni siquiera en la asunción de nada menos que la
nueva ministra de Seguridad de la Nación”.
Se considera que ni el gobierno de José Manuel de la Sota proveyó la seguridad, ni el
de Cristina Kirchner cumplió su garantía. Se imputaron mutuamente esa simétrica
carencia. La puja fue presentada como una suerte de guerra santa, heredera de
tiempos inmemoriales, entre un nacionalismo obcecado y una no menos pertinaz
autonomía.
Autores:
Nicolás Garayo
Franco Guerra
Marina Lerda
Julieta Orellano
Daniel Pizzi
Arlette Maya Vega Vargas
Coordinadora: Dra. María J. Villa