noticia histórico-geográfica

26
r. J. VERGARA y VELASCO ELJAPON (DAI-NIHJN) lWT;CI A HI.STORI C O-GEOCKAFIC A ,oalieulr¡;t, lotr ja: l' 0nfl'fr fI; t i, lh'n 1mrd .. ' lil e Tt "' ut'rnau las bruscas variadofl(" dt: .,11 ,'liOle HU. Il JUtob, su., tifones, tolla inundat ionp8. Ut' altm\ dt' lirtititn, Min a n a 1m pat rio, p or hf"rnWRtII a C'uJ).,:( :h uft l' 'l dt"lwT, la memor ia dt.' InlR nntl pÜl!ondf1 1l . .,. ti t, da ) IOT& ('stAn Jil! t Ofi á morir por t'l !tUL"" 1 \1t.' l li nA oa4 dullal .... 20 <le Julio (le 1907 BOGOTÁ IMPRENTA 10 , 1/l8 'rEd . FONO 769 BANCO DE L A RE.PUBLlCA IIILIOTiCA LUIS-ANGEL ARA

Upload: others

Post on 01-Jul-2022

12 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: noticia histórico-geográfica

r . J . VERGARA y VELASCO

ELJAPON (DAI-NIHJN)

lWT;CI A HI.STORICO-GEOCKAFIC A

Sf'r\'io~08, ,oalieulr¡;t, lotr ja:l'0nfl'fr fI; t i, lh'n 1mrd .. ' lile

Tt"' ut'rnau las bruscas variadofl(" dt: .,11 , 'liOle HU. tt' n ~4

Il JUtob, su., t ifones, tolla inundationp8. Ut' altm\ dt' lirtiti tn,

Mina n a 1m patrio, por ~u hf"rnWRtII a C'uJ).,:(:h uft l' dí' l

dt"lwT, ~U8 Tdau la mem or ia dt.' InlR nntl pÜl!ondf1 1l . .,. ti t , da

) IOT& (' stAn Jil! t Ofi á m orir por t'l !tUL"" 1 \1t.' l li l'Ull~t nA oa4

dullal ... .

20 <le Julio (le 1907

BOGOTÁ IMPRENTA ELI~CTRICA-CALLE 10 , 1/l8

'rEd. FONO 769

BANCO DE L A RE.PUBLlCA IIILIOTiCA LUIS-ANGEL ARA

Page 2: noticia histórico-geográfica

FRAGMENTOS LITERAa,IOS , ,

W.\SOlHE o EL GULlVERO JAPONES

E~ta novela satírica (( 774) resump. todas las miserias de la brillante época de los Takuga \V.l. \Vasobie visita las comarcas misteriosas del globo. En el IJals de los gigantes les reprocha su ignorancia en filosofía. Uno d~ los gigantes, que le tenía sentado en un dedo, le da la siguiente lección:

"Los grandes comlJrenden tácilmente á los pequeños ; en tanto que los pequeños no comprenden á los grandes. PIgmeos de cuerpo y de inteligencia, vosotros 01 vidais en el estío que IJuede hacer frío en el invierno; en el invierno olvi(i<:iis que J.>uede hace r calor en el estío. H¿ ahí pur qué el cielo os envía esos agitadores que llamáis sabios. ¿ Yesos vuestros fi ló:.ofos qué hacen sino adu­laros como si fueseis niños? Doctrinas buenas para inteligencias mezquinas. En cambio nosotros J.>ensamos con rectitud y obramos con sinceridad. Ritus, certmonias, vanos si~temas cuya nece~iJad no sentimo~."

Arrastrado luégo Wasobie por una tempestad, llega á la i!>la de la Inmortalidad, don1t! los hombres no pueden ni sufrir ni mo­rir. y sin embargo ese IJaraíso se les trueca en un infierno de te­dio, de tal manera que si por acaso alguno de ellos tuviera J.>I'Ll ­habilidad de morir, tudos le envi lial ían como aquí se envidiarla aL que no pudiera morir. Para vivir estudiamos la ciencia; e lllls se retiran á los montes á estudi<lr día y noche el arte de no vivir ; no US'ln sino manjares venenosos. Cuando un convidado se ~i e nte trastornado, exclama: "á e~to -'e debe parecer la muerte," y bai­la ebrio de júbilo. El día de aiíonuevo todos escriben en sus tar­jt'tas de saludo: "mis condulencias ~inceras." Sería una injuria f.· licitar á una madre por el buen aspecto de un bebé; pero si se dice: "parece que va á morir." los padres saltan de gozo excla­manclo: "si eso fuera verdad." Y el autor concluye.

"Túdos los seres aman la vida, todos odian la muerte. Y sin embargo si se llega hasta el fondo de las cosas no se puede hallar ninguna buena razón para comiJerar la muerte como una desg ra ­cia, ni una larga vida como una feliz fortuna. Cuando el hombre envejece no cesa de sufrir en su cuerJ.>o y en su alma ; pe ro cuan­do duerme descansan el cuerpo y el espíritu. Y á juzg-ar por ana­logía, paréceme, después de haber analizado todos nuestros g r ilOs de espanto y nuestros suspiros, que la muerte, una ve z llegada, debe ser una cosa deliciosa, lan deliciosa que en seguida lamen­taremos no haberla conocido antes y no haber hecho más pronto amistad con ella.

" La luna y las flores hacen Id delicia de los ojos ; pero sólo porque las flores se mare hitan pronto y porque pronto pasa la luna llena. Si las flores vivieran todo el año y la luna brillara todas las noches, ó la nieve cayera todos los días, quién se ocuparía de tal t s sucesos? Así la vida humana : inmortales no hallaríamos placer en vivir. " ,

Page 3: noticia histórico-geográfica

DAI-NIHON (J';L GRA.NDE (imperio del) SOL LEV ,\NTE)

¡j I E.r.:cmo. Sr. General Rafael RI!//eN

El Japón de los occidentales, el Jeupen de los chinos, y en la actualidad una de las ocho grandefl potencias mun­diales) recibirá en breve plazo la visita de Colombia, en forma de un agente diplomático que irá á establecer relaciones de amistad y comercio entre el famoso archipiélago asiático y la antigua tierra de los muiscas. El actual Jefe del Gobierno, al adoptar espontáneamente la mencionada reSOlllCi()n, pres­ta nuevo s~rvicic al país cuyos intereses dirige con tánto acierto y energía.

En efedo, para demostrar Jo afirmado bastará un solo hecho: vV. T. Stead, el gran publicista inglés, acaba de publicar un sensacional opúsculo sobre las causas de la gran­deza del Japón, para presentar á los patriotas ingleses el ejemplo de patriotismo práctico que da el Imperio mikado­nal, á fin de que lo imiten los hijos de la soberbia Albión y aseguren así el cumplimiento de sus grandiosos destinos. Y si eso dicen los ingleses, ¿ qué diremos los sllramericanos, que tan mal solemos entender el patriotismo?

Por tal motivo paréceno~ oportuno reunir en estas pá­ginas algunos datos sobre la geografía y la historia de ese país, mal conocido todavía hasla en Europa, según resulta de novísimas publicacIOnes sobre la materia, las que nos han servido para compilar el presente trabajo.

r-Geografía.--

Fue en 67 J cuando los chinos dieron el Hombre de .(eupen al archipiélag.o situado al E. de su Imperio, y los Japonese~ adoptaron dlcho nombre modificando la pronun­ciación. Nihon significa origen de la luz; Dat"-N,'/wn: ,,1 grande Imperio del Sol Levante.

El Imperio del Japón, situado al NE. del Océano Pací­fico, está comprendido entre 1 dO y 157.12' long. E. (París) y entre 21 0 18' Y 500 56' lat. N. Se compone de cinco y media gran~es islas, quinient~s pequeñas y millar,es de 'rocas y arreCIfes. Las grandes Islas son: Hondo, Slukoku, KYlls1w,

'~

BANCO DE LA REPUBUCA 1M8LlOT&CA lUIS· ANGEL ARAtoIGO

Page 4: noticia histórico-geográfica

- 2-

flokatdo y Taiwan; ]a media es l(araj'uto, ó sea la mitad meridional de Saghalien. El suelo de las islas es montañoso y volcánico, los ríos cC'rtos y torrenciales; las costas dilata­das (27,000 ks.) y admirablemente recortadas para]a nave­gación. El volcán más célebre, el Fagi (3,780 m.) ha sido glorificado por todos los artistas y literatos. La superficie del Imperio es de 417.500 ks. O (cálculo oficial), y su población se eleva hoy á más de cincuenta millones de habitantes (1), ó sea 120 por k. O, Jos cuales se reparten en 5,200 kwa::oku (nobles), 2.228,000 slú::okll (antiguos samurai) Y'~!~8)ooo,000 heimin.

El Japón se divide en 10 grandes regiones que compren­den 88 provincias y 44 Dcpartamentos,"á saber: Go-Kinat (Provincias Yamashlro, con Ja an ligua ('afilal, Yamato, Ka­wachi, IZl1mi, Scltsu ; Departamentos Kyoto, Nara, Osaka, Hyogo); Tokaidó (Iga, Ise, Shima, O,yari, Mika,va, Totomí, Suruga, Kai, Jzu, Sagamí, Musashí, A wa, Kazusa, Shimosa, Hitachí; Departamentos Mie, Aichí, Shizuoka, Yamanashi, Tokyo, Kana,g'awa, Saitama, Chiha, Ibaraki); Tosandó (Omi, MillO, Hiela, Shinano, Kosuke, Shimotzuke, Iwaki, Iwashiro, Rikuzen, Rikuchu, .M utsu, U zen, Ugo, Departa­'mentos Shiga, Gifu. Nagano, Gnmma, Tochigi, Fllkushima, Miyagi, 1 wate, Akita, Aomori, Yamagata); Hol'wrokudó

, (\Vakasa, Kaga, Noto, Echizen, Etchu, Echigo, Sado; Depar­tamentos Fukui, Ishikawa, Toyama, Niigata); Sanz'ndo (Tam­ba, Tango, Tajirna, Inaba, Hoki, Izumo, Iwaní, Oki, De­partamentos Totlorí. Shimane); San-yo-do (Harima, Mi­masaka, Bizen, Bitchu, Bingo, Aki, Suwo, Nagato; De-

I partamentos Okayama, Hiroshima, Yamaguchi); Nanh.-aidó (Kin, Awaji, Awa, Sanuki, Iyo, Tosa; Departamentos Wa­kayama, Tokushima, Kagawa, Ehime, Kochi, Mie); Salkaldó (Chikusen, Chikugo, Buzen, Bungo, Hizen, Higo, Hyuga, Osumí, Satsllma, Iki, Tsushima, Ryukyu; Departamentos Fu­kuoka, Oita, Nagasaki, Saga, Kumamoto, Miyasaki, Kagos­hima, Okina'wa); IIokkaído (Oshima, Shiribeshi, Ishikari, Teshio, Kitamí, lburi, Hidaka, Tokachi, Kushiro, Nemuro, 'Chishima, Departamento Hokkaído) ; Talluan (Taihoku, Tai..., chu, Tainan).

Los Departamentos más poblados son: Niigata, (1.882,000), Hrogo ,(I.776,OOO), Aichi (1.692,000), Tokyo (1.668,000), é Hlros]nma (1.517,000). El menos poblado Tottorí (439,000).

(1) lié ~quí los censos del Japón en dos siglos: 1721 , :.>!).ooo,ooo; 1750, 29.000,000; 1800, 28.800,000; 1846~ 30.ooo~ooo

1871, 33. 110 ,82 f¡; 1880, 36'358,944; J 890, 40.453,46 J ; J goo, 47 .G5G,853. ' I~OG, 51.74,1,948. :~nualmente hay unos !~oo,ooo matrimolJios, nace Illl-

1I0n y mecho de lllnos~ muere un millón de personas y aumenta la pobla­~·jón en medio millón de almas.

Page 5: noticia histórico-geográfica

Los JIIás extensos hHllt' (J :~, 68 k. O), N n~'a ll [3 1 ti7 Y Fukllshillla (13 o,ln); el m,is peqll no KnO'a,,"H l 750.. .

Pnr grandes islas /loflshu mid 26,579 k. O on ;~(j I1H-

11011 S de Illlhilantes' ... hikoku I , 10 (' n 3i' l(ljllSlw ~3,oJ4 con 7:. Ilokkaido 9/1,0 (l on 1 Té" al/ 3'1 97 Il 3 mili -ue (1).

Las ciudades prjll ' ipaks l'1\ 19°3: Tokio (1. 190(0)

O. aka'(n9(j 000 , I,'/'vlo (:~()O lhlO ,l"okohama 26 o ), Na­goya (, t 8,oon), A'obe (. Ss on ),.' agasa/d (153 o ° sh¡'m.a (r 12,000 "...,'ellda; 1 on,oon) y " -ana ::G(oa (lOO Entr' );¡s poblaciones hil," m¡\s dt, 200 qlle ex cden d' 1 000 haLi ta n les.

Administl'atinlllll' lIte SI' di,'id(' el .Japón en 31u (pre­f·<.'tur;ls, t:~ lú>n (dt'partamrnt s)) . eho (rrobi"rno~) con 622 1.'0"; (distrilos), G7 sf¡¡" (ciudades) I 163 machi ("jIJas) y 14 34 lIlura aldeas).

CllllJO dalos estadít'ticns principal '8 pueden seiínlar e lüs si~'lIi 'ntcs:

Hay V millones dI' BlIkyo (Ulldistas) con 79 000 tem­plo.' (/(,I'a),' ,l' ooolH)[lzn ; ~r 20,00 ,o o d shintoi,tas n J 63,000 templos y 1 (¡,ono padres. Amba relig iones en pI '~a d cadell 'ia.

Senadorcs, 3' 7; diputado:, 379' ele lores (para la C:.i­JlHll'3) , 757,78K.

Con 'ejos g'{>lIel'H lt's, 115; l'lIl1srj >ros 1 59~ ' 'le tores, ',OOg,ggl; cOllsejos d dc,pnl·tamC1lto,53Ij nnseJ '1' s 1',5 5; 'onscjos mUlli ipales, l' A5:!; cOJls'jeJ'os, Jt~7 645.

Puestos de policía, J 6,3:'lD' comisarios y tl"'Cnle8 398[) ; ./11l""skl~'1I/(l, , 00,99 J.

Hospi tales, H5 ; médicos, 3G,66o, Oficillas ele OJ'I'eO:-1, 4,r/17; de t lég-rafo 633' mixtas,

1 ,4GB' empl 'ados . 5,' 64; carteros, 23,251; kiIóll1 tros de de línea, 145,086' tl'leg- ramas, 2 1 :1 millones; pieza d' correo, 1.200,000.

Oficinllso' tel'follo, ISO; ·stacioue., 3 ,4o~' kilóm~­tros de línea, 18r,600; telef melltls T45 millones.

Es ,Ut'las primarias, :\7,1 68; alumnos, 5.137,600; c. 'ue­la .v oleg'ios, t"39' ; alumno , 1118,167'

1 iarios )' rc,' istas J 3' ). hX,lranjcl'os, 15,6G,) (" J S7 111 o'] ses, 1 604 n rleamcri­

C'1Il0S, 657 alemanes, etc,

(1) J[okkl1idó si¡..rnili '/1 lil'l'I'a tlt'IIll:lr del Norle: .. aikado I't''''íón d~'1 IlW\' orl'id;lIlal; ""'/tikol,'.ú,,l~~ I¡ JlI'l1\'il~cin~; A'!JllSIt~/, las 9 J1I'~~'illt­CIaS; lIondo \l lIollshll SI' dl\'ldw ('n !;l~ SigUI Iltes rt'glOlles: Tos(1lld6 (Illontnñas (/r! K)' Tocnído (milI' de! K); JlOklll'oklllJó (tiCI'I'3S del N.) · Sanjodó (Il11HlIt'S ilulllllllldos): Sanulldó (nlonll's el1 In SOJllOI'II); N[ln~ knidó lIlar' ti ! S.)

Page 6: noticia histórico-geográfica

-4-

.F~rrocarriles del Esta?o, 3,337; de compañías, 7,717; mOVImIento anual de pasajeros, 110 millones; taros, 99 .

. B';1ques: de vapor, 1,995.: de vela,l~,130; juncos, 19,800; mOVImIento de puertos, 15 mIllones de toneladas.

El Japón moderno está caracterizado por el ponderado desarrollo de la agricultura, ]a industria y el comercio, des­de el cua1 punto de vista supera á todas las demás naciones. Las tierras útiles para la agricullura cabrían con huelgo en un cuadro de 30 leguas por lado, y sin embargo, de ellas vi­ven 50 millones de seres. Produce al año 9 millones de tone­ladas de arroz, 3 de trigo y cebada, 30,000 de té, 50,000 de seda, 10,000 de carbón, 36,000 de fierro, 33,000 de cohre, 3,0~0 kgs. de oro, etc. El ~ulti,·o utiliza 5 mill ones de hec­~áreas, la ganadería 1 i (3 Imllon.es d~ cabezas) y 7 ocupan los bosques explotados. La Industria prIvada, qu e oc upa 200,000

.' obreros, elabora 13,000 toneladas de algodón (1.200,000 husos) por valor de 75 millones de pesos. La seda es la principal riqueza. La pesca prod uce 15 millones de pesos. El comer­cio con 103 Estados Unid os pasa de 100 mill ones de pesos y de 35 con Ing laterra.

Comercio deexporlación, 210 millones; de impor tación, 230; rentas, 200 millones ; deuda públ ica, 495 millones; Bancos, 390 millones.

Pie de paz, 320,000 hombres; buques de guerra , 1 2q. Cuanto á Corea (Chosen), mide 21 8,000 k. O , con 15

millones de habitantes. El nombre es un a corr upción de Korie (chino Kaoli, japonés Korai). Desde el siglo XIV se llama Tchas-sien (japonés Chosen). El nombre oficial es en China Han-/(ouo y en japonés /(an-/(oku ó llora no JÚmí. Se divide en 13 prefecturas y 8 provincias (chin o, tas j japo­nés, do) .. Las ciudades pr incipales son: Seul (Syou-ouen, lIangyang-tcheng, Kan-yo-jo) con 200,000 habi tantes; Kai­song, Songdo, Shoto, antig ua capital (60,000) y Fousan, Fu-san (l~8,000). · .

El idioma japonés (uralo-altaico) es de un a dulzura ex­traordinaria, todas las palabras termin an en vocal, y vocaJes y consonantes se armonizan de una manera agradable. Nm­guna otra lengua tiene tantas palabras tan d ulces y poéticas. El pueblo japonés se dis ting ue por su amor á la pa lria y á la naturaleza, el valor J los sentimientos caballerosos, la abne­gación, el gusto de la descripción precisa y el poder ele evo­car los paisajes (1).

NOTA- De acuerdo con las prácticas corrif'ntcs, para la pronunciación. de los nombres geográficos : e = e; h siempre

(1 ) Hoy se encuentran europeos que sostienen que los jnponcse;; SOIl eur opeos . __ _ idos por Corea. 1 P oder de la victoria!

Page 7: noticia histórico-geográfica

-5-

aspirada i s = Si w como en inglés, ei = ei; ch = tche suave; n siempre nasal; ó=oo i ú =uU; sh =ch suave i u= u sorda; j=dj suave; g=siempre fuerte;-no=de.

I1-Historia

La historia del Japón se divide naturalmente en tres grandes períodos: el primero, desde ,los orígenes hasta el Shogunado de Kamakura, abarca 18 sIglos (600 A. C-l 192

D C), durante los cuales la autoridad estuvo en manos de los Empr.radores (1); el segundo, mucho más corto (1 I92-1868),. es el del feudalismo militar (Shogunado de los Ml'namoto y de los Tokllqawa) ; el tercero, el moderno, el de Id Reslallra~ión Imperial, aun cuando apenas abarca 40 años, es el más Im­portante, porque en él se modifican las instituciones seculares del Japón, se europeísa su administración y gana puesto en­tre las grandes naciones del globo.

1. PERÍODO AUTOCRÁTICO (660 A C-I 182 D. C)

Según las tradiciones japonesasiue en el siglo VII antes de la éra cristiana, cuando una tribu-probablemente de ori­gen malayo-desembarcó y se instaló en Kyushu (Kiu-Siu) (2), avanzó hacia el N. sometiendo los aborígenes á su autoridad y, después de varios años de lucha, escogIó la región de Ya­mato para su definitiva residencia. El jefe de esos aventure­ros, Hasanu no Mikoto, fue el primer Emperador del Japón (Jimmu-Tenno), y su coronación, fijada en el año de 660, se considera como el principio del Estado y de un::! dinastía de soberanos que reina desde hace 25 siglos y subsiste hoy en el 122.° Emperador (!), hecho sin igual en los anales de la humanidad.

La historia del Japón durante los primeros 500 años del imperio, en los cuales se supone reinaron 9 soberanos, es esenóalmente legendaria y tradicional; pero bajo el gobierno de Sujin (97-30 A C) y de Sumin (29 A C-70 D C) ya se esboza una primera civilización. Después sigue la leyenda del héroe Yamatotakeru (81-II3) que explora las provin­cias occidentales y somete á la a 1I toridad im perial las tribus autóctonas que las ocupaban. El hijo de Yamatotakeru (Ch.i­nai; J 92-200) no hace sino pasar por el trono; pero su viuda,

(1) En japonés Emp~rador es ienno; tam,bién se usa m~kado Cpuer La noble), que ha prevalecIdo enLre los extranjeros. El aballlco, el espejo y la corona son los tres emblemas de la autoridad imper ial. Ca es partí­cula que expresa repetición del nombre.

(2) Según la leyenda, fue al monte Taleadiro á donde bajó del cielo Nimii, padre de los nipones; fue también á esa is la á donde en J 542 lle­garon los primeros europeos,

Page 8: noticia histórico-geográfica

-6- ,

la emperatriz Tenga, gobierna después de él : ~as crónicas le .atribuyen la conquista de los tres pequeños remos (Sankun) que ocupaban entonces el Sur de la península de Corea, pero ni los anales de China, ni los de Corea, hablan de tal expedi­ción. A su regreso de dicha campaña da á luz de un modo maravilloso á Ojl'n, que gobernó 110 años, fue el civilizador del país, y después de su muerte se ha honrado como dios de la guerra con el nombre de flachiman.

Su hijo Nintoku gobernó 87 años, y su reinado (313-399) es mirado como la edad de oro de una corta éra pa­triarcal. Por causas de competencias y rivalidades se multi-

, plican los dramas sangrieiitos en ]a familia imperial durante el ' siglo IV, hasta que la descendencia de iVl'ntoku desapa­rece con el Heliogábalo japonés, con Bllretsll-tenllo, joven y furioso loco, de pie muy pequeño, á quien se halló un día asesinado en su palacio (506).

Una rama lateral, descendiente de Ojúz, ocupó entonces el trono con líelal, y bajo el cuarto monarca de dicha dinas­tía (lílmmú: 540-571), fue importado el budismo al Japón por unos bonzos idos de Corea (552). Desde el primer día -se empeñó una lucha religiosa entre los ministros, celosos unos de otros; los lIfonoóe, los mantenedores de l shintoísmo nacional, fueron vencidos, y Jos Soga, en tusiastas adeptos del nuevo culto, ascendieron al poder, en el cual no retroce­dieron ni aun ante el asesinato de un Emperador (Sllshun, 592 ), bIen que con tal conducta levanlaron contra ellos Ja animosldad de torla la nobleza, v cincuen ta años málS tarde (644) . fueron dl:!gollados y reem'plazados por los Fll(Jiwara, cuya Influencia duró mu chos años.

Con todo, la Introducción del blldismo produjo cambios profundos en las ideas)' las costumbres: los honzos impor­ta~on Ja civilización continental (de China) (1), Ja literatu.ra chIna, las artes, las ciencias, la arquitectura, el calendarIO, etc. El ~ríncipe Sholokll (G73-621 ), á quien se llama el

.' COI?stanllno del budismo japonés, favoreció sus progresos y mejoró la ad ministración, tor/avía m uy rudimentaria en. Sll

época(I); pero fue Kolo/.'u (645-6¿/~) quien Jlevó á t. érrnlllo ~sa obra con Stl famosa reforma principio de la éra de Tatlaoa.

-Entonces todo fue calcildo sobre el modelo chino : mi nisterios, administración, r/ignidades, etiqueta, períodos (nengo), im­puestos. }' el nuevo sistema duró en vio'or en lo ese ncial hasta el pasado siglo. 1:)

En la siguiente centuria Ja Emperalriz Gemmei (708-7 14) mudó la capital á Nara, donde residió el Gobierno 75 Míos: esta es la época .de la compilación de las dos más an-

. (1) yéase el apéndiee. Estú demos1rado qur Chim fue riv ilizaela por eml~raelOnes de Caldea.

Page 9: noticia histórico-geográfica

¡

7

tiguas obras históricas, Koji-ki y J\'tl/O/'i-shoki (720). ~I bu­dismo prosperó más y más, y la poesía nacIOnal produ.!o sus primeros cantos, que fueron conservados en la antolog'Ia lla­mada Man-yo-shll.

El 50 .0 Emperador, J(wammll (782-~05), constrll.v~ á la moda china la capital llyolo (794), aSlento del Golnerno hasta la resta u ración i m peria \. Los f'lljiwar a II c()'an en tonc~s al auge de su poder: la Emperatriz es siempre de ~u famI­lia; son tíos, abuelos, cuoados de los Emperadores; ejercen la regencia (sessho) du ran te las minorías, y luégo, con el tí­tulo de f(wampakll, continúan gobernando aun después ele que el Soberano ha entrado en su mayor eelad.

Entretanto los príncipes de la familia imperial aumen­tan sin cesar en número, y su m'lnutención gra\'a pesada­mente un tesoro que apenas alcanza para los g-astos de la Corte. Para obviar el inconveniente se les da un nombre de familia (Taira, lJft'namoto) y el Gobierno de alguna provin­cia, en las cuales sus descendientes acaban porconstituír una casta militar, que muy pronto prevalece sobre la afeminada nobleza de palacio, la que, olvidando el oficio de las armas, -apenas se OCII pa en j l1<;tas litera rias y frí volos pasatiem pos (1).

Por causa de dicha decadencia de la autoridad imperial, el desorden asoma por todas partes; las revuellas son fre­cuen tes (Masakado, 940, Abe róritoki, r °56, !úgowara, 1087) con la mira de constituÍr principados inrlependien­tes; hasta los bonzos (le los graneles templos sllstt'ntan sus reivindicaciones con las armas en la mano. La Corte, im­potente para triunfar de esos rebeldes, apela á los grandes clanes militares, la paz se restablece, pero por natural re­compensa se les aumentan sus dominios y su poder se hace másy más formidable.

En especial dos familias (Taira, Jhnamoto), descendien­tes (le !os emperador-es Júoamnw .y Se/va, conquistan una in­fluenCIa constderablc : ambas qllleren la preponrlerancia, y dll.ra~t~ 3;) .años su ri,:ali~larl em~ng.rienta tu~o el país .. i\t ~rulClplO ~rall~~¡}n los .Talra, graCias a la ener~la de sus Jefes Tadamorl y Illyomorl (~.I.r8-1 18r), y. al éxito en las g'uerras llamadas Iloflen y fle'jl (r r59). PIensan entonces haber triunfado para siempre de SIlS rivales; pero apenas mllere Kiyomori cuando los Minamútn leyantan de nuevo la cabeza yen unos p~cos afios de lucha aniquilan completamente J. sus adversariOs (rr85)' El vencedor, Yorüomo, coloca en­tonces sobre el trono un nioo de cuatro años (Go-Toba-

(¡) En el .siglo x la literata Mu~'a S~ki-Shikibu escribió el genji-monn gala:l, conSiderada com? la mas celebre obra clásica japonesa. En se.g-ulda entra la decadenCia en la llamnda edad de 01'0 di' la liter t ' nIpona. 11 ur.l

,

,

,

,

Page 10: noticia histórico-geográfica

8 --

lellllo), y le arranca el título de Sei-t"-la/s/togult (Gen~ral en Jefe). Desde ese día el régimen de GobIerno se cambIa por completo, y una nueva éra se abre en la historia del Japón.

JI-PERíODO FEUDAL (1182-1868)

La autoridad del gobierno de Kiolo sobre las provincias orientales y septentrionales había sido siempre nominal:. en­tre esa región y el reslo del Imperio todo era diverso: chma, raza, costumbres. El Occidente era la tribu invasora que al aceptar ]a civilización china se había refinado y perdido su vigor; el Oriente era la raza autóctona, atrasada quizás, pero de ener~ía un tanto feroz. El lazo que unía las dos porciones era débil, y todas las grandes revueltas civiles surgieron en ese Oriente. Esa rivalidad explica los puntos oscuros de ]a his­toria japúnesa (1), y "Yoritomo supo aprovecharla para afir­mar su autoridad. Nombrado Sho,qun illstaló en I(amakura el centro de su gobierno, y distribuyó el dicho Norte y Orien­te entre sus compaI1eros de armas, en tanto que en el Oe8te y el Sur estableció sus parientes, y sus fieles aliados los Fugi­ruara. De esta suerte, en vez de provincias coil un goberna­dor nombrado por lú'olo para un período de tres á cinco años, resultaron feudos hereditarios, algunos de los cuales perma-:­necieron hasta siete siglos en poder de una misma familia.

En seguida emprendió Yorilomo la obra de reorganiza­ción administrativa que debía concentrar" en sus mallOS toda la autoridad (2) . Desgraciadamente para su causa murió muy pron to (1199), v los dos hijos que le sucedieron, como no te­nían sus capacidades, dejaron pasar la iniluencia política al dan maternal, el de los lIojo. Estos, que no se atreven á atribuirse la cltgnidad ShogunaJ, ~l.e~n á ella ¡ín niño de la família Fuguuara (1219), más tar~~'<ll~an un príncipe impe­rial (1252) en cuyo nombre gobieHHi. n á su a otojo con el tí­tulo de regentes (Shikken), y saben conservare!' mando du­rante uo siglo, rrne fne de Jos m.1 s p/"()speros en la historia del .Japón. (3)

(1) Esa rivaliJad, seo"úu mod erno auLOl' j ,lponés, no ha desaparecido aún y es ~no de los hechos IlH'tS, imporlanles de la hislO!'i,1 del I mpe¡'io; pero segun otros ha desaparec ido de tal modo, que en lodo el nfch ipié­lago se habla idénLÍcamente el mismo idioma,

(2) Fue este estado de cosas el que hizo creer r.ITadnl1lenle á los eu­ropeos que en el Japón había dos Emperndores, un n retirado en Kiolo uonde no se ocupabn sil'lo de nsunlos religiosns, y olro, verdadero sobera~ no temporal, que gobernaba el país á Sil anlqjo.

(;l) Epoca de la li t.eratlll'a Kananllll "¡¡ J dp I:t f~ 1IIi1.lcres Il'ovad ore s aún glori ricadas en el J a pón,

.,IUIIJI

Page 11: noticia histórico-geográfica

- - 9-

. Después, la autoridad de los Hojo se hizo tiránica y aun Insoportable á más de un Emperador; pero. todos los esfuer­zos tentados para derribarlos fracasaron, y la historia del país se redujo á la de soberanos destronados ó desterrados. Para prevenir toda veleidad de independencia en la corte, que vigilaban de cerca por medio de sus Rolt'uhara, cuidaron de no elevar al trono sino niños. Además, Jos ayudaron po­derosamente las disensiones en la familia imperial, las que l~e garon hasta produe;il' el más singular compromisu que regIS­tra la historia: los Emperadores no debían reinar sino diez a!i0s y ceder en seguida el puesto á un miembro de la rama rIval. Corno los Fagiwara eran poderosos en la Corte, para aminorar esa influencia se acuerda que los Sessho y los lúvampakll se turnarían alternativamente en las cinco ramas de la familia, las que por lo mismo se tornan rivales unas de otras. Fue por entonces cuando la invasión tentada dos veces por los mogoles fracasó ante la energía de flojo Toklinune, figura de indiscutible mérito, ayudado por el heroico valor de sus soldados (1) .Y por una tempestad providencial que destruyó la flota de Gengis Kan (1281).

Mas, también los Hoja, como tántas otras familias sho­gunales, después de producir algunos hombres de verdadero genio político, decaen, se di viden, debilitan la usurpada au­toridad y preparan un renacimiento del poder imperial. Fue el Emperador Go-Daigo (1319-1338) el instrumento de esa obra de restauración: entronizado á la edad de treinta años consagra todos sus esfuerzos á la ruina de los poderosos Shikken. Ayudado por leales servidores abrió la lucha, y en menos de dos años acabó con la su premacía de los de I(ama­kllra. Desgraciadamente apenas recobra Go-Daigo su inde­pendencia y principia la obra de la reorganización del país, surgen las rivalidades entre sus Generales. En Oriente se subleva el Clan de los Ashikaga, su Jefe Takauji se discier­ne á si propio el título de Shogun, eleva al trono un Empe­rador de su agrado, y funda una nueVd dinastía shogunaI (Ille conserva el poder durante 200 años (1336-1573)' El destronado Emperador se defiende valientemente contra el súbdito rebelde; sus descendientes prosiguen la lucha, y al cabo de 56 años de combates se ve el singlllar fenómeno de dos Em peradores coexisten tes, el uno oculto en las mon tañas de Yamoto, cuna de la nación, y el otro sostenido por los Ashikag'a, sentado en el trono de Kyoto, pero sin los sagra­dos emblemas ele la dignidad imperial. Con todo, la partida era muy desigual, y el Sur se vio oblig-ado á ceder: en 1392 se firmó UIl pacto entre las dos ramas ri vales de Emperado-

(1) Por primera vez veían cañones los japoneses, y sin embargo los hatallones aclararlos por las halas no cedie¡'on en el combate.

Page 12: noticia histórico-geográfica

- 10-

res, conforme al cual debía 'el Soberano ser escogido alterna­tivamenteentre ellas, y la convención, aun cuando no fue cumplida, como era natural, con todo puso término al cisma y afi.rmó el poderío de los Ashikaga (1) .

Como se comprende, el espíritu belicoso desarrollado por modo natural en la clase militar á virtud de esas prolon­gadas Im'has civiles, no podía desaparecer en un instante. Los primeros Shogun Ashikaga con su autoridad personal pudieron contenerlo dentro de justos límites; pero sus suce­son's, más débiles, fueron bien pronto desobedecidos. De nuevo el Orieute fue el primero en alzarse en armas: la ra­ma menor de la familia shogunal, que goberr.aba en K wanto, quería elevarse al primer puesto; la mayor confió su defrl1sa á los grandes vasallos, ]0 que originó nuevas complicaciones y rivalidades. A partir de la trrrible guerra civil dicha de Onin '(I467), ya no cesó el conflicto, y durante un siglo ínte­gro e] Imperio fue présa de horrible lucha civil. El desorden llega á su colmo; ]a miseria del puehlo es espantosa. Hasta el palacio im peria] sufre el contragolpe de ]a situación: se suprimen las tradicionales ceremonias de la corte por falta de recursos (2); no se encuentra el dinero necesario ni aun para celebrar los funerales de los Emperadores difuntos . A su tur­no Jos Shogun 110 son sino juguete en manos de los grandes feudata rios (Ilosokava, Shiba, l-latakeyama), que los deponen y reemplazan á su antojo, hasta que todos, señores y va­sallos, desaparecen arrollados por la misma tempestad (3)·

En Jos momentos en que se hundían los Ashikaga, un pequeño daimio, vflsallo de los Shiba, aprovecha la sit ut1ción para ensanchar sus dominios. A su muerte (1 S4g) recoge su herencia un joven de quince afios: se llamaba Oda ¡Yobllnaga .

(1) Esta es la época de la literatura llam ada llIll rontQ('!t¡ y la edad de oro del artejapoués: Kano JJlotollobá (1477-1559) es el rnús notahle pintor del archipiélago y uno de los más célebres en el ~lobo.

(2) El emperador Ogimaclti estuvo tres años sin celebrar la fiesta de la coronación por falta de dinero, hasta que la costeó un vasallo.

(3) En 890 el emperlldol' Uda hacía cubrir de salÍn blanco el lon;o del moute que domina á Kye,to, para simular nieve eu una fiesta de esUo: unos pocos siglos mús tarde íute.qra ]a n?bleza se arruinó ap~stand,o fruslerías en las famosas ceremomas del te (Glza myn j . En 14°7 Ca¡ll Kyoto en poder de dos tropas~ de más de J 00,000 hombres cada una, I a~ cuales convirtieron las calles en campo de reyertas; file entonces una lu­cha espantosa, noche y día; soldados, bandidos y monjes se s?rprenden ~­se asesinan sin piedad. Por la noche, á la luz de los lOcend los, el esrec-táculo de las riñas es verdaderamente infernal por lo vario de los trnJes. Poco á poco el fuego aniquila la ciudad, los habitantes hllyen Ó perec~n. y, por último, al calJO de siete años de semejlmte trajíu , único en la hIS­

toria, no queda si no un montón de ruinas que abandonan los co?tendores p¡:tra continuar la guerra en C'amp0 abierto y extenderla a todo el país .... Hoy Kyoto (oficialmente Saill'!lo) es la cimbd de los reruerdo~, Moscu del .Tapón.

Page 13: noticia histórico-geográfica

11 --

Algunos alios más tarde ya era duei'ío de varias provincias, y como la reputación de su hravura y energía llegara á oídos del Emperador Oglmaclu", éste le enví~ .u~ mensaJer? para encargarle restablezca el orden en el dIvIdIdo Impeno. No­bunaga acepta la difícil misión, y después de la~ga luch~ su­jeta á los daimios más turbulentos? depone al últI!flO Aslllk~ga (1573), toma en sus manos las nendas del GobIerno, sUjeta los revoltosos honzos y se aplIca resuelto á reparar los daños causados por un siglo de guerras civiles; por desgracia deja inconclllsa la obra porque un vasallo (Akechi) que le debía cuanto era, le asesina tra idoramen te en 1582. Aún los japo­neses le honran como á héroe; todavía tiene templos y al­tares.

La sucesión del muerto fue recogida por un sold;Hl0 de fortuna, que por su inteligencia y sus victorias se había eleva­do al ran~o de primero entre los generales de Nobunaga; lIa­tnábase J-/ide,ljoshi (1) : supo descartarse de los hijos de su se­ñor, pero no pudiendo esperar la dignidad de Shogun, se hizo discernir el título de f(t"uamyal,:u, el más elevarlo de la jerar­quía civil. Continúa y termina la obra de pacificaCIón; pero llegado al apogeo del poder y de los honores, de tal modo le ciega el orgullo, que sueDa extender su dominio á Corea y hasta á la misma China, :-1 menos que sólo pretendiera des­viar hacia otro campo de acción el ardor belicoso de sus gue­rreros. Sea de ello lo que fuere, es 10 cierto que in vade la Corea, y aun cuando al principio obtiene triunfos, la campa­ña acaba en desastre. Al caho se dio cuenta de que tentaba una empresa irrealizable, y sus últimas palabras (1598) fue­ron la orden para repatriar Jos restos del ejército japonés, diezmado por la miseria y los combates. o

Hideyoshi, antes de morir) encargó á cinco grandes dai­mios la tutela de su hijo Htdeyort", niño aún; pero entre esos cinco personajes se con taba Tokugawa !e!Jasu (r 5l~2- 1616), descendiente de Jos Minamoto, á quien no placía el segundo puesto en el g"obierno. Desde 1590 gobernador de llwanto, á la m uerte de H ideyosll i se separa de sus com pañeros fieles á ]a memoria del Taiko y entra en guerra con ellos. A decir verdad, fue otra vez la lucha entre el Oriente y el Occidente, y también otra vez triunfó e'I primero, en la JIanura de Sekt"­gahara (Mino) (210,000 combatientes), donde reconquistó la oansiada supremacía para dos y medio siglos.

(1) Nobullnga, Hideyoshi, Ie'yasu, los tres g-randes a\Oentmcros del Henacimiento japonés, militaron juntos. Dícese que una ocasión les pre- ' guntó alguien" ¿ qué debe hacerse cuando el ruiseñor no quiere cantar?" Nobunaqa dijo: «torcerle el pescuezo;" Hydeyoshi, u obligarlo á can-

o tal'; " Tokllqawa, «3!\'uardar á que cante." Y las rCspllestns sintetizan hien la concluctn polit ica cle tales personajes.

Page 14: noticia histórico-geográfica

- 12 -

Tres ai'íos después de esa victoria, leyasu, inJ udablemen­te hombre de genio, recibía el título de Shogun (r 603) y da­ba comienzo á esa línea de los Tukl1gawa que supo adueñar­se de una autoridad que no habían conocido ni los Minamo­lo ni los Ashikaga. Dos años más tarde transmitió el Shogu­nado á su hiJo, se retiró á Sumpu, y antes de morir tuvo .el placer de acabar, en el asedio de Osaka, con la descendencia de los Hideyoshi (1615), con lo cual aseguraba el podel' en su familia. Sus sucesores inmediatos IJidetada (1605-1623) é lemltsu (1623-1651)continuaron la obra del abuelo é hicieron más pesado aún el pesado yugo de hierro que aquél impu­siera á su patria: Ruptura de toda relación con el Exterior, clausura del país al comercio extranjero (menos con Holanda y China) ; feroz persecución al cristian ismo; fiscalización de la conducta de daimios y samUralSj espionaje sagaz de la corte de 1\:10tO; leyes draconianas sobre la prensa, la ense­ñanza y la predicación. Durante dos siglos, daimios, samu­rais, la plebe, todos en una palabra, al parecer aceptaron voluntariamente un régimen que les aseguraba la paz y el progreso después de tantos horrores y miserias (1).

Mas como siempre sucede en tales casos, con el andar del tiempo se descompuso el movimiento regular de la má­quina: después de hombres de energía y de grandes dotes, el Shogunado cayó en manos de niños, y subalternos me­diocres gobernaron en su nombre; la corle de Edo se afemi­nó como antes la de Kyoto y la decadencia fue rápida, con las consecuencias que Jllégo se anotan. Los Shogunes Toku­gawa tuvieron bajo su férula una docena de Emperadores, y de aquéllos amos deben nombrarse fcl~~uma, que man tu vo la prohibición de los libros extranjeros; Tsumayoshi, favorecedor de las letras; Yoshlmune (1677- 17 5 1), hombre progresista que introdujo el culti vo de la papa y la caña de azúcar, dig­nificó los estudios y se granjeó el amor del pueblo. En suma, la segunda mitad del siglo XVII y la primera del XVIII fue una éra de grandeza para el Japón (2). Ya en tiempo del Em­perador Iíokaku (1780-1816)- en cuyo período un incendio .destruye á Kioto (1788), puesto que consume 190,000 casas, y los rusos pretenden ser admitidos en el archipiélao'o -em­pieza el gobierno legítimo á querer sacudir la pesala tutela;

(1) La época de los Tokugawa es además la edad clásica de la lIte­ratura y el arte japon~s. También ellos quisieron establecer r elaciones ('o~e~c~ale~ ,con E.spana y América y recibir por intermedio de los latinos la clvIl,lzac~o?- occld~nt~J : la madre patria jug'ó entonces mal juego al ne­garse a rectlHr tal dlSClpulo.

r2 ) ~n 16~0 el Japón dis~onía de 547,000 soldados y las rentas as­('end13~ a ,95 m¡/lon~s que subIeron á 150 al terminar el feudalismo. Para ser dalmlO se necesItaba poseer una renta mínima anual de S 5,000 Y sostener 5 soldados.

Page 15: noticia histórico-geográfica

- 13 -

con sus sucesores Ninko y J(omei se acentúa el choque, agTa­vado por la llegada de los e:xtranjeros con amenaza de abril' á cafionazos el cerrado archipiélago, si no se hace de grado, porque obligado el Shogun á recibirlos (1), el Emperador im­prueba esa conducta y en 1863 aquél tiene que ir á Kiotó á recibir instrucciones del Soberano, el que arrebatado por la viruela no logra ver concluida la Restauración Imperial, con firmeza comenz:lda por él, pero que la termina con éxito su hijo Mutsuhito. . En esta evolución de la historia japonesa juegan papel Importante los clanes del Oeste y del Sur, que aun cuando due­ños de grandes feudos no tenían participación ninguna en el Gobierno y por ende miraban mal á los Tokugawa. Con an­siedad seguían el movimiento imperialista, y cuando lo juzga­ron suficientemente avanzado para que no pudiera retroce­der, se quitaron la careta y se lanzaron á la lid. Como no podian pretender sustituírse al régimen que intentaban des­truír, alzaron como pendón la bandera imperial é hicieron de la restauración de la autoridad en manos del Emperador el primer artículo de su programa, siendo el segundo el aisla­miento nacional. Algunos nobles de la corte apoyaron eJ movimiento con toda su influencia; además, el Gobierno Shogunal había tenido la audacia de concluír tratados con los bárbaros extranjeros y de profanar e] país de ]os dioses admitiéndoles á vivir en él, ¿ Y esto no era un crimen inex­piable? Sonno-joi (venerar el Emperador y echar lós ex­tranjeros) fue el grito de guerra y de reunión de los impe­rialistas. En vano el Shogun intenta dividir á sus adversa­rios; en vano afloja en Sil severidad con los daimios: es tar­de; ya nada puede detener el comenzado movimiento. El último Shogun (Kezl.'lj, después de batallar un año contra tantas dificultades, se ve obligado á presentar su dimisión al Emperador (2). Sus partidarios luchan todavía algunos me­ses más; pero el ejército imperial (samurais del Sur y el Oeste) triunfa de toda resistencia, y vencido el Oriente, el Shogunado desaparece de la historia y la 'Restauración Im­perial es un hecho cumplido (1868).

III-LA RESTAURACIÓN IMPERIAl. (I868-?)

Muerto Komei (Febrero 3 de 1867) en plena juventud, le reemplazó Sil hijo Mutsuhito, apenas de quince años de edad (3),

(1) En 1853 una flota americana hizo tal amenaza é impuso luégo un (eonino tratado comercial. ¿ Por qué admirarse de lo que hoy sucede?

(2) Retirado de la escena política muchos años, volvió á la vida pú­blica en 1897; hecho Duque en 1902, sirve con celo al país.

(3) Nació en K.'I0to el 3 de Noviembre de 1852; en 1860 fue declara­do heredero pl'esnn livo. El 9 de Febrero de 1869 casó con lIara-leo,

Page 16: noticia histórico-geográfica

- 14-

verificándose la ceremonia de la coronación el 17 de Octu­bre del año siguiente, en Kioto ; en Abril dI" 1869 la capital se transfirió á Edo, cuyo ,nombre se , cambió por el de Tokio. En efecto, el nuevo emperador, h ombre de g ran tal ento, com­prendió que como la nación es taba acostumbrada hacía dos )' medio siglos á que todas las leyes y decretos se expedían en Edo, era en esa ciudad donde debía in stalarse para ma­nifestar al pueblo que toda la autoridad quedaba rea lmen­te entre sus manos. Conforme lo requcria la situación, Ínte­gro el sistema de gobierno fue cambiado, y lo mismo que antes se copió á China, ahora se imitaba á Europa: se su­primen los feudos y se divide el país en departam entos; no­bles de todo género se reúnen en la clase llamada K wazoku ; el servicio militar, privilegio de los samura i, se ext iende á todos los hombres válidos; se pone término á las persecucio­nes religiosas. Empero, como el nuevo gobierno no se sien­te con fu erzas para resi s tir á los extranjeros, lleva el espíri­tu de conciliación con ellos hasta el último límite: hasta la débIl Corea, antes considerada co mo Estado vasa ll o, puede mostrarse insolente, sin que se le pida cuen ta el e semejante proceder.

Sin embargo, dado el origen de la R estau ración, mu­chos d e sus promotores consideran que se ha hecho falsa ruta: no era eso lo que soña ba n Jos patriotas ardientes que ayudaron á derribar el Shogunaelo. La ferm entación crece, y por fin la rev uelta estalla formidabl e e n Satsllm ( r 877), y durante largos meses el país pudo preguntar e si no iba á retornar al gobierno de los samurai, ahora co n un a dillastía Shogllnal salida del Sur. Por fortuna el ejército imperial triunfa, y e,sa ultima tentativa de reacción da por resu ltado el afianzamiento ddinitivo del nuevo gobierno, el que puede proseguir con ardor sus planes de reforma)' de desarrollo de todas las fuerzas vivas de la Nación. Cumplida la trans­formación en breve tiempo, consciente y agradecido el país de la obra de su Soberano, éste pl,ede acometer la empresa soñada por Jos patriotas: asegllrar la soberanía nacio nal. En efecto, co mienza por de mostrar á C hina que no s6lo no

tercera hij a tle Ichijo T adaka, y lué/Jo con la hrl'll1osa )"ul!ogúl'Il/'(l.ti­leo, madre del actua l Príncipe imperial, Yoshifo llam , qlle fu e nombra­do heredero presu nti vo el3 de NoviemlJre de J 8~!), y el lO dc Mayo de 1!)00 contrajo matrimonio con Sada-ko, cuarta hij a del Duque Jfichi­laka, la cual la ha hecho padre de (res hijos. Aun ('liando lod os escriben el nombre como queda tramcl'ito, dehe observane que el dicri onario his­tórico japonés publicado rccientemen 1 e en Tokyo (c n inglés) 11','1' ;\1 lisl~­hi to como nombre del monarca. Adem¡ls 1\1Ulsll es non¡\JJ'e de una [;'l1liha samuray. En todo caso, este nombre no es s ill o el p ef[l/eíto 1/01/1/';1',', e" decir, el del vivo, porque el oficial no lo recibcn lo , Em¡:eraJores ~inl\ de pués de murrIo,>, y entonces nunca se ,,"plvp ;, P['oI['llflt' ial' 1' 1 011'0,

Page 17: noticia histórico-geográfica

- '5 -

es s u vasallo sino que' e corre:;ponde guiar al antiguo maes­tro por las ~ías de la cÍvihzación contempor~nea; y luégo, á la asombrada Europa, no sólo que no admite su tutela y sus exig'cncias, sino que tiene dcrecho á ser el defensor de .los asiáticos, por cuanto pucdc ganar el rango de gTan naCIón con brillantes victorias en la tierra y en el mar.

Me(j{ (Nengo) llaman Jos japoneses ésta para ellos éra de la Restauración Imperial (~868), de la cual 1.907 es el 40° año, y dada su importancia anotamos en seglllda, deta-1/adamente, sus principales acontecimientos, que ~on:

1868, Abolición del Shogunado y Restauración Impe­rial. 186.9, Edo declarada c~pital,del J mperio co~ el ~ombre de Tokyo; término de la rrslstencla de los partIdarIOS del Shogun, con la capitulación de IJakodate (Junio). 1870, apertura de Tol.-yo y oe Múgala á los extranjeros. 1871, Abolición de los feudos de los daimios y división del terri­torio en departamentos, d?72, Jnauguración del primer fe­rrocanil, de Tokyo á Yokoharna (Junio 12). Leyestable­ciendo el servicio militar obligatorio. Primera exposición nacional en Tokyo. 1873, Adopción del Calendario grego­riano. Incendio del palacio imperial. Abrogación de los edic­tos contra el Cristianismo. Creación de las escuelas prima­rias. 1874, Insurrección de Saga. Expedición á Formosa. 1875. El Japón cede á Rusia sus derechos sobre la isla Shagalien (Karafuto) en cambio de las islas Kuriles (Chi­shima). 1876, Tratado con Corea. Prohibición de usar dos sables. Motines en Kumamoto (l-ligo) y en Hagi (Nagato). 1877, Insurrección de Satsuma (Febrero, Septiembre). 18797 Acexión de las islas RyukYll (Okinawa-ken). (1) 1881, Prome­sa de una constitución para 1890. Organización de los parti­dos políticos. /883, Primeros tranvías. Creación del diario oficial (Jíwampo). 1884, Creación de Jos cinco títulos de no­bleza: ko (d ~quc), ha/fU (c?nde), sh~' (vizcondc )', dan (barón). 1885, CreacIón del ConscJo de MInIstros (Nalkaku): diez carteras. Primer Ministerio Ito. Fundación de la Compañía de Navegación Yusen Kwaisha. 1887, El Emperador se muda al nuevo palacio, principiado en 1882. 1888 Creación del Consejo Privado (Suml'tsu-l'n). Ministcrid J(uroda (Abril). ~rup,ción de~ Bandazsan (J u'lio). 1889, [Jromúlgase la ConstIlucIOn (11 Li ebrcro). Asesinato del vizconde .Mori. A~il1:0r{, .Ministro de Instrucción Pública. Prohíbese el duelo. MlnIsterlO Yamagatc: (Diciembre). d?90) Primera sesión dcl P.arJa~ento (2:,) NOVIembre). di,?], Incendio del palacio le­gIslatIvo (19 Enero). Atentado de Tsuda Sa nzo contra el

(1 ) Hubo dificultades con China por lal lloexion y f le :iJ'hilro el ex-Presidenle am ericlmo 1 1, C.'nnl.

Page 18: noticia histórico-geográfica

Czarewitch (Nicolás 11) en OtSll (11 NIayo). Ministerio Afalsllkala (Mayo). Gran terremoto en Mino-Owari (28 de Octubre). Disolución de la Cámara (Diciembre). 1892, Segun­do Ministerio 110 (Agosto).

Nissltin-Senso (guerra con China: J 8gl,- 1 8g,;). En la rimavera de 1891~ estallan en Corea motines provocados por

os bandidos llamados Togaku-to, é impotente el Gobierno para restablecer el orden, solicita de China el envío de tro­pas; el Japón, apoyado en el tratado de 188r" envía igua l­mente soldados, Jo cual provoca la g'uerra entre los dos Imperios.

1894 (Julio, 1/,) Ruptura de Jas relaciones diplomáticas. 27, El Naniwa (crucero acorazado jap. Comant. Togo), hun­de el It"owslting (chino). 2g, Los japoneses triunfan en Ga­::an (Asan), Corea. (Agosto 1<)), Declaraciones de guerra ell' los dos Emperadores. 26 íd., Tratado de alianza entre el Japón y Corea. (Septiemhre 16), El Genrl'al NO::fl toma ú HelJo (Pyog-yang). Id. 17, El Almirante Ito gana la hatalla naval de Iía(l/o-ló (Yalu). Octubre 18, El Mariscal Yama,r¡a/a triunfa en 1V~¡-ll. Noviembre 6 y 7, El Mariscal 0!Jama loma á [únchll y á Tailenwan. Id. 22~ El mismo Jefe toma ú RyoJlln-ko (Port-Arthur).

, /895, Enero 10, El General No.?" tnma él il-a1iJ""Y. Fe­brero 2, El General Odera toma ~l I/cai-el (\Veihawe). Id. 17, La flota china se rinde al Almirante J to. Id. J g, Lleg'a ú Shimonoseki el Embajador chino Litl!1ng' Chang (llikos/'o\. Marzo 4, El General NOZll toma á Nyrzclwl1. 2', íd., l\oyama Toyataro intenta asesinar al Embajador chino. 30 íd., Ar­misticio de 21 días. Abril 17, Tratado de paz de SIl/mon oscl,,/. Mayo 8, Hatificación de dicho tratado en Cll~/;l: el Japt'¡1l recibe 200 millones de tael s. Intervención ins(Hitn de Hu!'ia, Alemania y Francia, que anula ]a ,'ictoria del Jnpún y re­vive en ese país e] odio á los extranjeros. Mayo-Junio, Los japoneses toman posesión de Formosa (Taiwan) y de las is­las P.escadores (Toko-to). Retrocesi¡'m {t China de la península de Lmoiong (Port-Arthur).

1890. Creación de la administración (lakIlShoklff/W) <,JI

Formosa-R~z. de r:narea en Rikuchll: 30,000 del inws (.lllli n ). Segundo Mllllsteno Malfiukala (Septiembre).

l~fJ7' Muerte de la Emperatriz madre (Enero ) J), A?OpCIÓn del talón de oro (Oct.uhre 1.° ). Alema"ia ocnp,1 á Iüaochao (Octubre Il~) yRusia á Por-Arthul' (Diciernhrc2o) .

. 18.9,8: Ter~er Ministerio 110 (Enero), Hevisión elel Código CivIl. MJnlsteno Okuma (Juniu). Segundo Ministerio Yam<1-gata (Noviembre).

1899' Entran .en vigor Jos nuevos I ratad( ls: npcrtun\ (!t- I Japón á los exlran.leros (Agosto).

,

I -

)

Page 19: noticia histórico-geográfica

,

,

1900. Matrimonio del Príncipe imperial (Mayo lO). Cuarto Ministerio Ito (Octubre). El Japón ayuda á libertar Jas legaciones extranjeras sitiadas en Pekín.

1901-1903. Ministerio Katsura (Junio). Primer trata­do de alianza con Inglaterra. Impolítica moscovita en Mand­eh uria y Corea. Tratado secreto con China.

Nichiro senso (guerra ruso-japonesa 1904-1905). Febre­ro 6, ruptura de las relaciones diplomáticas, la flota japonesa en Sasebo (Hizen); 8 íd., ataque nocturno á la flota rusa en Port-Arthur, desembarco de la vanguardia japonesa en Che­mulpo (Corea); 9. El Almirante Togo ataca á Port-Arthur ; el Contralmirante Uryu hunde en Chemulpo dos buques rusos (Variag, KOl'eetz); 11 í d., declaración de guerra del ' Emperador del Japón; 24 íd., primera tentaLÍva de embotella­je en Por t-Arthur; Marzo 6, la escuadra de Kamimura frente á Vladivostock; 27 íd., segunda tentativa de emb~lellaje en Port-Arthur; 28 íd., primer combate en tierra, en Chen.(¡.fu (Corea); Abril I. ° E 1 primer ejército (Kurokt) ocupa á Wi­fu; 13· El acorazado ruso Petropaulovsky hundido por una mina: mueren el Almirante Makarof y 600 hombres; 30 íd. El primer ejército pasa el Yalu; Marzo 1.0 Batalla del Yalu ganada por Kuroki; íd. 3. Tercera tentativa de embotellaje de Port-Artkur; 5 íd. El segundo ejército (Oku) desembarca en Yentoa (Liaotong); 6 íd. El primer ejército ocupa á Ki­vantiencheng; 15. Las minas hunden el Tatsuse, el Yashima .Y al Miyako; Colisión del Kasuga y el Yoshino, que resulta hundido; 19 íd. El tercer ejército (Kawamllra) desembarca en Takllchan; Mayo 26. Batalla de Nauchan: los rusos se replieg'an sobre Port- Arthur; 28 íd. Ocupación de Dalny; el General Noji toma el mando del ejército sitiador; Junio 8. Ilellmón del 3. 0 Y el Io cr ejército; íd. J 5. Batalla de Telissll : rechazo del General Stackelberg; íd. 16. La escuadra rusa de Vladivostock hunde los transportes Hitachi, humi y Sado­maru j 23 íd. La flota rusa de Port-Arthur intenta vanamen­te romper el bloqueo; Julio 3. Los japoneses ocupan los pa­sos de Motienlt'ng (Montes Ta-Iong); íd. 6. El Mariscal Oya­ma sale de Tokio con su Estado Mayor para encargarse del mando en Jefe en Mandchuria; 20 íd. La escuadra rusa de Vladivostock se avanza hasta la entrada de la bahía de Tokio; 26 íd. Los japoneses toman á Tachiquiao; 30 íd. Toma de la segunda línea de for.tificaciones de Porl- Arthur j 31 id. Los japoneses toman á Tomllching; Agosto 10. Intenta escapar­se la escuadra rusa de Port-Arthur y es desbaratada con ~randes pérdidas; 14 íd. Derrota de la escuadra rusa de Vladivostock: hundimiento del Rurik; 27 íd., 3 Septiembre. Batalla de Liao- Yang (200,000 nipones,200,000 rusos): de­rrotado el General Kuropatkine se retira 'allende el Shaho;

2 ,

,

-

Page 20: noticia histórico-geográfica

18

Octubre 9 18. 'Batalla'del Shaho : los ru~os ' rechazados se I'r­tiran sobrelJlfoukden; Noviembre 26. Asalto y toma de la Co­lina de los 203 metros (Port-Arthur).

1.905, Enero 2. Rendición de Porl-Arthlll' (General ruso Stoessel), con gTandes elementos de guerra, al General Nogi; íd. 25-29. Batalla de l/ei Kauta: ataque de Hancu del' General ruso Grippenberg rechazado por los nipones; Marzo 1 - 1 o. Batalla de lJI/oukden, la más considerable de la historia universal (rusos, 320,000; nifones, 270,000): los mos­covitas, derrotados con grandes pérdidas, se replicganlhacia el Norte; Mayo 27-28. Decisi va batalla naval de Tsushima: la gran escuadra rusa (Almirante Rojestvenla) totalmente des­truida por Togo; Julio 7-30. Los japoneses se adueñan de la isla Saghahen; Agosto 9. Apertura de las llf~gociaciones de paz en Portsmouth (Estados Unidos). Segundo tratado de alianza (ofensiva y defensiva) con Inglaterra (Agosto 12); id. 29, Paz de Portsmouth, ventajosa para el Japón. Alborotos en Tokio; Octubre 5. Ratificación del tratado de paz: Mandchu­l'Ía devuelta á China; el Japón, dueño de Liao-tung y de Ka­rafuto, entra en el nlÍmero de las grandes potencias y ocupa

. en Asia el primer puesto. Efectividad de la victoria demos­trada con lo mínimo de las pérdIdas (5°1o) durante la guerra.

1.9 06. Ministerio SaionJl' (Enero): (Relaciones Exterio­res, l/ayashi; Interior l/ara; Hacienda, Sakatani; Guerra, Teraouchi; Marina, Saito; Justicia, Matsuda; Instrucción Pública, Makino; Agricultura y Comercio, Matsnoka; Obras Pública~, Yamagata, Jefes del ejército Mariscales Yamagata, Oyama, Nodzu; Generales Oku Y, Fukusina, Kurokl, Okll , Nogi, Kawamura, Nishi, Ozhima ; Jefes de la armada Togo, Ijuin, Kamimura, Yamanonchi, Arima, Hidaka, Kataoka, Dewa'; Jefes del parlamento Tokllgawa, Kuroda, Sllgila, l\1inoura: las nuevas elecciones serán en J 908.

'.9°7, Dificultades con los Estados Unidos, arreg-ladas (?) por el Presiflenle Rossevelt; tratado con Francia. El General n,eyes, President.e de Colombia, resuelve crear relaciones COIl

el japón, "imperio colmado de elogi)s al presente, beatum dl:--x:erunt poplllllm CUt luec sllnt; Líen que le falta adquirir \Ina gloria ma'yor: beatus POPUlllS cly'us Domi,lllS Deus ejus!" ¡. Lo' conseguirá el gTan pueblo oriental? Ese es el secreto de lo porvenir..... '

y para concluir este opúsculo, na.da m~s á propósito qUf'

algunas líneas de la publicación de Stead, rnrncionada a l p"incipia'r1o: .

" El más rICO tesoro del pueblo japonés es Sil fervien tI' amor á la patria. ,

" El gran lazo que ha asegúrado la unidad política del Jmperio es sn patriotismo ardiente y reflexivo; por eso el

Page 21: noticia histórico-geográfica

- 19

amor de los japoneses á su tierra es una fuerza real y positI­va que se manifiesta en todos sus actos é ilumina todo su desarrollo nacional.

" Confieso francamente que el espectáculo de esa fuerza Ilacional~ en marcha con un empuje unánime hacia el preciso ideal de la prosperidad pública, me llena de admiración y lile conmueve. No puedo adivinar dónde se detendrán esos pro~resos reflexi vos y metódicos: es la primera vez que un pueblo, animado por ella, se coloca en la primera tila de las grandes potencias, y por lo tanto se trata de un nuevo pun­to de vista para considerar las cuestiones nacionales.

" Como se trata de cumplir un mism.o deber, no hay ce­los de oficio ni repugnancia á ningún servicio, incluso el mi­litar, que se presta con la mayor buena voluntad. No traba­jar todos en perfecta armonía sería cometer traición á la patria .... La grandeza militar y naval del japonés es el resul­tado de un firme y universal propósito de defender la patria y sus grandes intereses .... La nación entera se ha uncido al carl'O de la patria, y ]a tarea los entusiasma á todos, y cada lIllO se muestra orgulloso de contribuír al éxito con su esfuer­zo personal.

" Paso á paso el progreso nacional ha llevado al pueblo japonés á suficiente altura para que tenga derecho de mirar con orgullo el camino recorrido, merced á su patriotismo activo. El Japón ha demostrado con la fuerza de la victo­ria que es la única potencia que domina el Extremo Oriente. Muchos no se dan cuenta todavía de la fuerza prodigiosa de que dispone el Japón; pero antes de poco esa nación, capaz ele meditar á fondo todos los problemas y capaz de reglar s us actos con ]a mayor energía, al tenor de las conclusiones de la meditación, hará conocer su superioridad en todos los ramo~ de su actividad nacional. La fuerza que posee ese pueblo por su patriotismo activo es tan formidable, tan in­imaginable, que no es posible medirla con los patrones occidentales .

• , Que el ejemplo de ese pueblo nos anime á nosotros y á nuestros hijos á hacer toda clase de esfuerzos por el país ; ensei'iemos en la escuela los altos hechos de nuestros gran­des hombres y de nuestras mujeres ilustres del pasado, para incitar á los nii'ios á igualarlos en el presente y en el futuro. Ese culto grandioso será la fuerza salvadora del país."

De igual manera nosotros, los colombianos, debemos fundar el culto del pasado sobre cuatro fechas inolvidables: el/2 de Octubre (1492), referido á América y á la Cruz; el 6 de Abrd (1539), á la creación del organismo municipal; el20 de Julio ( 1 810), á la de la República y la Libertad; el 7 de Agosto ( 1904),.á la concordia de las voluntades {>ara extinguir la gue­rra CIvIl, todo lo cual se funde en el ferVIente amor á la Patria!

F. J. V. YV.

Page 22: noticia histórico-geográfica

APENDICE FAl\WSA PROCLAMA DEL PRÍNCIPE 1IUNRAYADO (SHOTOKU-

TAISHJ) REGENTE (593-628), y REFORl\fADOR DEL Il\IPERJO JA"PONÉS "

I-Es preciso estimar la concordia y honrar á los que se abstienen de hacer oposición sin causa grave. Como los hombres se dejan influir por los sentimientos de su cla­se, y pocos son los ilustrados, muchos desobedecen á las au­toridades y á sus padres, de donde frecuentes rencillas entre las poblacIOnes. Mas cuando los superiores gobiernan con método, los inferiores tienen espíritu benévolo, y la concor­riia preside la discusión de los negocios, entonces prevalece la justa concepción de las cosas y no hay obra que no pueda real izarse.

I1-Honrad sinceramente los tres tesoros: el Culto, la Ley y d Orden son el refugio final de todos los seres, ya salgan de un huevo, ó del seno materno, ó de la fermenta­ción, ó de la metamorfosis, como la crisálida. Los tres tesoros son el supremo objeto de la fe en todos Jos tiempos y luga­res. i Que ningún hombre en ningún tiempo falte al cum­plimiento de Ley! Pocos hombres son radicalmente malos: se puede enseñar á todos á respetar la Ley; pero si no acu­den á los tres tesoros, ¿, cómo enderezar al que se desvía?

I1I- Cuando recibáis órdenes del Soberano apresuraos á obedecerlas. El Soberano es el cielo, el yasallo es la tierra. El cielo cubre al mundo y la tierra hace germinar todo. Y así es que las cuatro estaciones siguen su curso y las fuer­zas de la naturaleza producen lo que deben producir. Mas si la tierra quisiera ser la que cubre al mundo, el cielo caería en ruinas. Es por esto por lo que el Soberano hahla'y el vasallo escucha; el superior dispone .y el inferior obedece. Por esto, cuando recibáis órdenes del Soberano, no dejéis de cumplirlas escrupulosamen te. La menor negligencia pllede causar un desastre.

IV -Los Ministros y funcionarios tendrán por primer deber conservar un porte digno, porque ]a dignidad es el principio adeOllado para gobernar un pueblo. i los supe­riores carecen de dignidad, á los inferiores faltará la decen ­cia, y si los inferiQfe~ pierden ]a deoencia, segllra me n te so~ ~revendrán los off e es. Es por estl) f 26n por l~ uo ct\ u1

Page 23: noticia histórico-geográfica

-21-

el soberano y el vasallo se comportan debidamente, nu hay confusión de categorías; cuando el pueblo es. decente, la comunidad se gobierna ella misma, por así decIr. .

V -Debéis juzgar con imparcialidad los .asuntos que ~s sean sometidos, sin pensar en tornarlos lucratIvos. Cada ?Ia el pueblo se queja mil veces á est~ respecto: ¿á. qu.é CIfra ascenderán esas quejas dentro de alguno años SI sIgue el mal? Cuando el juez obedece al cebo d 1 dinero y no atíe.nde las partes sino para recibir regalos, los procesos de los ncos son como piedra que se arroja al agua, en tanto que los del pobre sercí.n como agua que cae sohre la piedra. ¿Dónde ha­llará refugio el pobre? Obrar a í es indigno de un Ministro.

VI-Castigar el mal y animar el bién, tal fue la regla excelente de los antiguo. Por esto no pretendáis ocultar las buenas cualidades de. nadie, ni descuidar la corrección del mal cuando llegue á vuestro conocimiento. Aduladores y mentirosos forman un arma aguzada para producir la l'uina del Estado y una cuchilla cortante para la destrucción del pueblo. Los aduladores se hacen el 'riste placer de ocultar á los ojos de lo superiores ]a opinión de los inferiores y de exhibir ante éstos las faltas de los gralldes : hombres de esa clase son infieles á sus superiores y enemigos del pueblo: son dIos la causa de las más gra\'es discordias.

YlI-Que cada cual tenga misión determinada; que las esferas de acción no se confundan jamtts! Cuando se confía un empleo al que es diO'no de tal distinción, por todas parles se oye rumor de alabanzas. Cuando el nombrado es indigno, surgen desastres'y rencillas. Pocos en el mundo nacen pro­vistos de discernimiento: la sabiduría es el resultado de la meditación formal. Para cualquier negocio, si se busca el hombre adecuado, con seguridad que el negocio marchará Lien; en toda ocasión, gra ve ó nó, emplead hombres compe­tentes, que ello sabrán aprovechar las oportunidades para mejor servir. De esta manera perdura el Estado; los templos y el grano (1) no corren ningün peligro. Por estas razones los monarcas sabios de la antigüedad buscaban el hombre ade­cuado para el empleo, y no el empleo convenieÍlte para el hombre.

VIII-¡ Que ministros .Y funcionarios concurran tempra­nu al despacho y trabajen hasta avanzada ]a tarde! Los ne­gocios püblicos no admiten dilaciones, y el día íntegro ape­n~s basta par~ .evac~arlos .. Si los empleados llegan tarde, se pIerde la ocasIOn; SI se retIran temprano, la tarea queda sin concluir.

IX- La buena fe es el fundanlento de la justicia. j Que PIl todo impere la buena fe! De ella dependen ~l bién ó el

- --(1) Los tributos se pagaban en arroz.

Page 24: noticia histórico-geográfica

- 22-

mal, el éxito (¡ el fracaso. Si el señor y el vasallo son de bue­na fe uno para con el otro, no hay obra que no pueda ejecu­tarse. Si cl señor ó el vasallo usan de mala fr, todo negocio, sin excepción, scrá un fraca o.

X-Desviémonos dc la cólera y refrenemos las miradas irritadas. Guardémonos dc malquerer á los que no tienen nuestras opiniones. Porque cada hombre tiene su propio co­razón, y cada corazón sus propias inclinaciones. Si el dere­cho ajeno nos hace mal, nucs,lro dcrecho con seguridad hace mal á otro. Nosotros no podemos ser siempr'c sabios, así co­mo los otros no pueden estar iempre locos. Ellos y nosotros somos simplemente hombres y nada más. ¿Quién puede sen­tar la regla que permita siempre separar la verdad del error? Unos enfrente de otros somos á la vez sahios y locos: es una cadena que no acaba jamüs. Por esto, aun cU<lndo Jos otros /lOS irriten, lo flue debernos temer son nuestras propia fal­t.1S; y aun en los casos en qlw sólo nosolros lens'amos ]a ra­zón, si,a'amos la opinión pública)' hagamos lo que ·I/a ha(;I'.

¿ ' I-Apreciemos eon franqueza el mérito y el demérito; apliquemos á cada acción pública una justa recompensa ó un castig'o cierto. Al prescnte la recnmpensa no sin'uc al mérito ni el castigo al ';rimen. A Ito¡;: funcionario encargados de los /legocios püblicos, j cuidad de as(~gurar unas y olros!

XII-¡ Que gobernadores y noLles no cometan exaccio­nes en detrimento del pueblo! En ningún país puede haber dos soberanos, ni el pl/e.bJo puede tener uos amos. El obera­no es cl seiíor de lodo 'el país .y en lodo el país. Y nl/n cuan­do confía cargos á Jos funcionarios, éstos no dejan por ello de scr súbditos. ¿,Cómo pueden entonces, por propia aulorl­dad, imponer nlle\'os ~Tayámenes al pueblo'?

XIlI-- j<¿uc todos Jos empleados mucstren el mismo cejo al desempeñar sus funciones! Enfermedades ó misiones pue­den distraerlos de tales deheres; pero que apenas recobren 1<1 libertad del caso, que se ocupen de sus empleos, que mucstren huen I)umor y parezcan como que no se habían desinteresa­do del cargo. Que no rehusen ocuparse de un negocio so pr('­lexto de que no tienen tiempo para estudiarlo.

XIV-Ministros y empleados, ¡ cuidado con la envidia! Aquellos á quienes envidiamos, {t su turno serán envidiosos d.e nosotros. Si Jos ?tros nos sobrepujan en inteligen ci<1, sen­tlm~s desagr~d.o; SI nos sobrepujan en aptitudes y deslreza, sentI,mos enVIdIa. Es pOCo e,sta razón por la cual en cada r¡'rl­ca slglo,s n.o se encuen,tra S100 un hombre supert'or, y no har un ~abLO mno cada mtl años. Y sin hombres superiores nI sabIOS, ¡,cómo p~ed~ gobern~rse hien un pi:lÍs? .

. ' ~V -P~esc1OdId d~ l~s Inlereses pri:vados y no consId?­~'eJs SIllO los Illt~r~ses publIcas. Porque SI un hombre se deJa mfluír por sus mtereses privados

l experimenta rá re..; [1 ,

<

Page 25: noticia histórico-geográfica

23 -

timientos, y si cede á dicho resentimiento, dejará de obrar en al'monía con los demás. Si deja de obrar en armonía con los demás, . sacrifica los intereses públicos á sus cOl1veniencias particulares. El resentimiento destruye el orden y]a ley. Por estas razones dijimos en el punto primero, con distintas pa­labras, pero con el mismo espíritu: "Superiores é inferiores deben marchar de acuerdo."

XVI-Que al pueblo no se le impongan tareas sino en la estación conveniente. Es una regla vieja y una regla exce­lente. Escoged, pues, los meses de invierno en los cuales el pueblo no tiene trabajo propio; pe~o no lo ocupéis en pri­mavera y otoño cuando se ocupa de sus campos y de sus mo­reras. Porque si el pueblo descuida la agricultura, ¿de qué viviremos? Si descuida las moreras, ¿con qué se vestirá?

XVII-En los asuntos importantes que ]a decisión se confíe á un solo hombre; pero que muchos tomen parte en la discusión! En los negocios de menor cuantía es inútil con­sultar á tantos; es únicamente en los graves, cuando puede resultar un fracaso, cuando se deben recoger muchas opinio­nes para tener la certidumbre de hallar ]a justa solución.

(De una ve,:sl'ón Inglesa del japonés)

Lista cronológica de los Soberanos iaponeses (La fecha se refiere á la exaltaci6n al trono; (m), emperatriz; (reg), regen te; en

bastardilla, los que abdicaron).

A. de C. 1 Jimmu, 660. 2 Suisei'681. 3 Annei, 548. 4 ftoku, 51o. 5 Koshó,47;,' ¡j' Koan, 302. 7 Korei, 200' 8' Kogen, 2d~. O Kaikwa, 157·

lO Sujin, 97' I! Suinin,3 1 •

Después de Cristo. )~ Keiko,7 1 •

1;>,' Seimu, 131. 14 'Chuai, 102 •

Jingo (rrg'), 20 1. IS OjiD, 201. 1 ti Ni.ntoku, 313. 17 Rlchu,400. 18 Hansho, 40li. 19 Inkyó,412. 20 Ankó, 454.

21 Yuryako,457' 22 Seinei, 1~8o. 2.~ KCDSO, 485' 24 Ninken,4!:l8. ~.'í Burelsn,49f1' :!U Kcilai, S07. 27 Ankan, G34. 28 Scnkew3, 5.~tL 2f1 Kimmci, 5"0. 30 Bilalsu, S7?" '11 Yomei, S8G . P Sushul1, 588. 3?- Suiko (m), 503 · :14 J omci, (j2!l' 35 f(O[J!/O/':ll (m), G42. 3ü Kotoku, GI¡O. :n Saimei (m), liS5' 38 Tenchi, GG2. :~9 Kohun, G7 2. 40 Tcmmu, 673. Ip Jito (m), G87: 42 Mommll, 6g7'

ll~ Gemmei (m), 7°8-44 Gens/lO (m), 715. 45 S/¡omll, 72 4. 4ü Koken.(m), 74!1' In Jllnnll!,750' 48 Slzofokll (m), 7Ü!). /10 Konin, 770. !'jO Kwammu, 782. :i 1 I1eijo, 80G. .,2 Sago,81O. 5:~ JIlTJIO(l, 824. 5/~ Nimm.'J0' 834 . 1)5 Monloku,8fil. !)Ii Spúva, 859' 57 Yo::e.'J,877· 1)8 Koko, 885. PiO Uda, 888· 00 naigo, 898. 61 Shujakll,931. 62 Murakami, 947' 6~ Rei.:;ci, 968. 61~ En-flll, 970.

Page 26: noticia histórico-geográfica

ti5 /úva.:an , 98:í. 87 Shijo,12:l3' 107 Go- Yo-:-:ei, 1587' 00 lchijo,987' 88 (;o-Sa[la, 12/f3. 108 Co-ml-no-o, 161:.l tl7 Sanjo, 1012. 8g (;o-F,lhal.'llsa, 1247 log M!J0sfto (m), 1030. 08 Go:Ichijo, 1017' 0u }taml'!Jamo, 1260. 110 Go-Komy<1, 1044· 09 GO-SChlljflkll, JO;)7. (JI (To-Vda,07.-)' 11I Go-Sail"n. 1655· í O Go-Reizei, 1 o~H. 0~ Fllslu"m i, 1 ?'0H' I I ~ R",'{jl'lI, 166.3' 71 Co-Sal/jo, I O"!" g:~ GfJ-FllSh 1m /, 1 2~/f). I I;¡ Higas/ti - ya mo, 72 ,S'himkawa, 107:1· ~/If Go-i\'ijo, 13o:!' diS7' 7.'1 Horikawa, 1087. !l5 lia11 a::onu, 1.~Og. I ¡/f Nakanúkado, 17 10.

74 ]'oúa, JI 08.. !/ti Go-Daigo, . I.'P f). 11 [) Sakuramach,', 1736. 7fí Slllokfl, 1124. n7 G 0- i\l U 1'11 k [t- 110 l\IOIlJOZOIlO, 1746. 76 ]{onor, 1142. mI, r:t1f.)' 117 Go-Sakllran/{{("hi 77 Co-S h ¡ r a J: (i 1(1 a, 98 n¡'o/.,(,i, 1 ,~O!!. (m), 17°3,

1150. !)!) Co - Kameyama, 118 Clo - Momozonu, 78 lijO, 1559' 1373' 1771. 79 Rokujo, II 6i). IDO Oo-A-oma/Sll, 1302, I J H /(olmkll, 1780. 80 Takakll/'a, ]J6!!. 101 Shokó,141.3' 12U Ninko, 1817. 81 Antokll. II8!. 102 Go-flana::ollo,14?g.121 Komei, 1847· 82 Ga-Toba, 1184. 1°3 Go-Tsachimicarlo, I 22 ~fulsuhilo-descen-83 T s II e It i m i la do, 1465' cliente de Gimmu-

1199. 104 GO-KH;;hi ",aIJaro, TenDa en la 62" ge-84 Juntokll, 1211. ISO!. neración,-!8G8. ~5 Chuk.'10 ,J.221. 10,) Go-Nara, 1527' 06 G o-H o r i k al" (f, 100 0r,imac/ú, 15:í8,

J' 22,

SUOGUNES

MIl'(A~IOTO (Kamakul'a) : YoriLomo, r 1 g2; Yorii, 1202 SaneloOlu' 12°3·

FUJ1W ARA (íd .): Yori tsune, 1220; Y oritsugu, 1244. PRÍ~CIPES IMPERIALES (íd.): l\111llctaka, 1252; Koreyasll, 1200 ; Hi sa­

akira, 1289; l\Iorikuni, 13°8; Morinaga, 133.3; Narinaga, 1334· AS~1K.~(a (~yoto): Taknygi, 1338; Yo~hia~ira,. 1358; Y,oshi.milsu,

1307 ; ), osh ~IW)cbl, I ,i05; y oslu kazu, 1423; 1 osh 100rl, 1428 ; loshl kalS~, 1441 ; ":osh~JlIasa, 1440; Yoshihisa 1474; Yoshitane, rlfao; Yoshi~u,nll, 149.1; 10s1ulane, 1508; Yoshihm'lI, 1521' Yoshiterll 1545; Yoshlhlde, ) 568 ; Yoshiake, 1368. ." , .

'fGKUGAW.\, (Edv) : ~eyasll, 100,3; HiJelada, J60.i; l eJll ilSTII, 1?23; lelsuna, 1651 ; ~ sunayoshl, 1680; Ienohu, 1709 ; Ietsu!{u, 1712 ; '\ OSlliJ11U-1J f', I710; Ieshlge, 1,745; Ieharu, 1700 ; Ien:1l'i, 178G ; Ic,Y0shi , T8.~7: lesada, 185;:: ; femorhl, 1REi8; Keki, J ROO.

ji C?rte,del Norte. Kogon (1331); Komyo (J336); Suko (1349); Go.Ko~on (~~53); Go.en·\·u (J372 ); Go.Komatsu (1383 92) . T odos terminaron por abdIca' clon.

--~~-