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Facultad de Filosofía y Letras, UBA Literatura brasileña y portuguesa - Cátedra Gonzalo Aguilar 1° cuatrimestre 2014 Comisión Práctica: Laura Cabezas Alumno: Genaro Joaquin Felipe Gatti Consignas: 1) En “Algo urgentemente”, analicen cómo el saber y el no saber determinan: el lazo entre el padre y el hijo. el gasto improductivo del hijo en relación con su carencia. 2) Analice en qué sentido la presencia del hombre en harapos pone en cuestión las nociones de economía, estética y modos de vida a partir de una lectura del texto. 1

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Facultad de Filosofa y Letras, UBA

Literatura brasilea y portuguesa - Ctedra Gonzalo Aguilar1 cuatrimestre 2014Comisin Prctica: Laura CabezasAlumno: Genaro Joaquin Felipe Gatti

Consignas:1) En Algo urgentemente, analicen cmo el saber y el no saber determinan: el lazo entre el padre y el hijo. el gasto improductivo del hijo en relacin con su carencia.

2) Analice en qu sentido la presencia del hombre en harapos pone en cuestin las nociones de economa, esttica y modos de vida a partir de una lectura del texto.

En el cuento Algo urgentemente de Gilberto Noll tenemos a un padre como portador de un relato, un saber humanista que pretende dar una idea de totalidad y un sentido que no pueden ser transmitidos; es esta la idea de crisis de la experiencia benjaminiana. Ante esta imposibilidad de transmisin - y por lo tanto este no saber en el hijo - resultar que el narrador haga un quiebre con la experiencia de su padre para hacer tabla rasa - idea similar a la de nueva barbarie postulada por Benjamin - a la vez que su accionar estar desprovisto de un fin determinado - idea que nos recuerda los Medios sin fin propuestos por Agamben - dndole un fuerte carcter de antihumanista. A su vez, este no saber en el narrador le impide un modo de vida consciente y programtico; puesto que su accionar se vuelve improvisado, espontanesta y desorientado, de modo que se prioriza el instante por sobre el proyecto a futuro. Veremos al gasto improductivo como el reflejo de este accionar de tendencia irracionalista.

En el cuento Algo urgentemente de Gilberto Noll vemos que padre e hijo terminan siendo dos modos de vida que se contraponen. El primero se construye como el arquetipo de hombre moderno, anclado en una visin totalizante del mundo devenida en una voluntad de transformacin; el segundo se presenta como el posmoderno desorientado, lee mundo por fragmentos y su necesidad de actuar es un medio sin fin. El lazo que existe entre ellos es el de la familia; la causa de esta disonancia entre uno y otro es un relato que no ha podido ser transmitido.En el padre el saber aparece como una posibilidad de dar cuenta del mundo, esto se articula con una prctica poltica: es un militante y tiene un proyecto social. Es portador de un relato - un metarrelato en el cuento -, una narracin total con base utpica. En relacin al hijo aparece una imposibilidad de transmitir ese relato. El saber y el no saber determinan el lazo que tienen al punto de que esa imposibilidad provocar un quiebre entre uno y otro. La imposibilidad de transmitir ese saber humanista, hace que el narrador tenga que construir su propio saber fragmentado, libre de totalidad y de sentido. Lyotard ha sealado como la tcnica y la cultura de masas le quitan centralidad al sujeto y a la cultura letrada. Ante este panorama es que Benjamin y Agamben aparecen como teorizadores de una crisis que se suscita en el siglo XX, de la experiencia en el primer caso y del gesto en el segundo. Estas lecturas han sido tomadas por la condicin posmoderna, ambas presentes en el narrador de Algo urgentemente. Dice Benjamin Sabamos muy bien lo que era la experiencia: los mayores se la haban pasado siempre a los ms jvenes[footnoteRef:0], es la idea de que con la autoridad de edad se transmite un saber, que es lo que intenta hacer el padre al narrador en el cuento de Noll. Enseguida Benjamin seala: Una pobreza del todo nueva ha cado sobre el hombre al tiempo que ese enorme desarrollo de la tcnica. Y el reverso de esa pobreza es la sofocante riqueza de ideas que se dio entre la gente, o ms bien que se les vino encima[footnoteRef:1] esta crisis de la experiencia es la que sufre el narrador de Algo urgentemente quien no puede recibir la experiencia de su padre, es el relato humanista que no llega a su destino. Ante esto aparece la idea nueva barbarie: A dnde le lleva al brbaro la pobreza de experiencia? Le lleva a comenzar desde el principio; a empezar de nuevo, a pasrselas con poco; a construir desde poqusimo y sin mirar ni a diestra ni a siniestra[footnoteRef:2] este concepto de Benjamin es similar al que se presenta en el cuento, al quiebre que debe hacer el narrador con su padre puesto que no ha podido apropiarse de su experiencia. [0: Benjamin, Walter. Experiencia y pobreza en Discursos interrumpidos I. Filosofa del arte y de la historia. Madrid, Taurus, 1982. Trad.: Jess Aguirre, pgina 166.] [1: Ibid, pgina 167.] [2: Ibid, pgina 168.]

La ruptura del hijo con el padre va a romper con la idea del saber como verdad, como totalidad, como portador de un sentido que conduzca los actos propios del intelectual comprometido como es el caso del padre. Producto del quiebre el mundo se presenta ahora de manera fragmentada, no se puede dar cuenta de lo real, no hay una verdad absoluta en oposicin a una mentira: la caracterstica que predomina es la ambigedad. El narrador le cuenta a su padre que ya sabe leer y escribir, el cual responde: Entonces va a llegar el da en que vas a saber de todo [footnoteRef:3](171), esta es una ideologa dicotmica de la realidad en trminos de verdad y falsedad y de saber y no saber que el hijo va a romper. La manera en que lo va a hacer es mediante el fingimiento, acto que va a ser una constante en el narrador a lo largo de todo el relato: No le crei nada pero me hice el crdulo como corresponda a un chico. Pues que pasaria si yo le dijese que todo aquello era una mentira?[footnoteRef:4] (170); el fingimiento aparece como un quiebre frente esta perspectiva dicotmica. Se podra pensar esto como una crtica a ese pensamiento moderno excesivamente seguro de su verdad, un cuestionamiento a ese saber y esas certezas que terminaron en un fracaso simbolizado por el hombre torturado y mutilado agonizando en la cama. El saber racional del padre aparecera como una materia peligrosa, como en el grabado de Goya Los sueos de la razn producen monstruos. El conocimiento no aparece como un asunto atractivo: No me gustaba constatar cunto me atormentaban algunas cosas (171). Aparece ms bien como un malestar, varias veces va a estar asociado a la idea de peligro: Quiero saber - le dije a mi padre. Puede ser peligroso - respondi (171). En realidad, son ciertos aspectos de la sociedad lo que impide la transmisin de ese saber. Con sus mltiples dispositivos obstaculizan cualquier posibilidad de comunidad humanitaria. El de represin aparece como uno de los dispositivos ms fuertes: [3: He trabajado el texto establecido por Claudia Solans. Las citas pertenecen a esta edicin.] [4: Benjamin, op. cit, pgina 169.]

Vine para morir. Mi muerte va a hacer un poco de alharaca en los diarios, la polica me odia, hace aos que me busca. Te van a descubrir, pero no hagas ni una sola declaracin, dec que no sabs nada. Lo que es verdad. (173)

La polica aparece como un factor fundamental, es la que separa al padre de su hijo, es el agente del mal que ha triunfado sobre el humanismo. El director del colegio que no le deja leer la carta al narrador, esto tiene que ver con ese bloqueo para con la transmisin del saber. Sociedad e instituciones se encargan de quebrar el relato familiar y de all que el narrador carezca de un sentido que lo oriente. Y ante esto la posicin no es continuar con la lucha sino, como seala Vidal, reemplazar el sentido y la crtica por una paradjica inadecuacin adaptativa:Todo indica que lo que le interesa a Noll no es tanto reproducir una crtica de los efectos perversos de la mundializacin, sino insistir en una cierta inadecuacin que es una forma diferente de estar en el mundo y, quin sabe, de estar con el otro, y a la vez sealar, refirindose a esa voz, otra forma de comunicacin distinta a la del sentido.[footnoteRef:5] [5: Vidal, Paloma: Comunidades inadecuadas: la narrativa reciente de J.G. Noll; revista Grumo num.5, Buenos Aires/Ro de Janeiro, 2006, pgina 20.]

En lnea con este quiebre del sentido aparece la idea de hacer algo urgentemente, es decir, no obrar con un objetivo programtico sino con un medio sin fin, con un gesto que priorice la inmediatez. Es esta la reivindicacin agambeniana: En el gesto lo que se comunica a los hombres es la esfera no de un fin en s, sino de una medialidad pura y sin fin[footnoteRef:6] . Mientras el padre es un hombre con un proyecto utpico anclado en el futuro, el hijo est desprovisto de todo fin y acta con un anclaje en el presente. Vemos ac bien clara la diferencia entre modernidad y posmodernidad en relacin a la proyeccin sealada por Jameson: [6: Agamben, Giorgio: MEDIOS SIN FIN, Valencia, PRE-TEXTOS, 2001, pgina 55.]

debemos adems examinar, brevemente, los objetivos distintivos de la situacin o de la condicin postmoderna, los cuales son desfavorables para el pensamiento utpico. Los quiero resumir bajo dos ttulos: la prdida de sentido de historia, y la creciente incapacidad para aprehender el cambio mismo. [footnoteRef:7] [7: Jameson, Fredric, Utopa en el posmodernismo, Buenos Aires, Imago Mundi, 1991, pgina 46.]

Esta idea es una caracterstica de la obra de Noll el presente es lo que me inspira. El presente inmediato, el espacio en que estoy.[footnoteRef:8]. Y en este sentido de inmediatez entra en juego los lazos con los cuerpos, veremos un seguimiento del desarrollo fsico-social del narrador. Mientras que en el padre aparece la posibilidad de comunidad, el lazo orgnico en la poltica, en el hijo hay una ausencia de posibilidad de comunidad ms que en el lazo casual de lo corpreo. Este carcter del posmodernismo ha sido bien sealado por Moriconi El punto de partida en el mundo posmoderno es la fragilidad de las referencias comunitarias y la ausencia de lazos orgnicos entre los individuos. La prostitucin es el acto instintivo, inmediato, que aparece como un punto de fuga, es el acto de desterritorializacin deleuziano que sirve como salida a las normativas de lo social. Ante esto el padre le dice que haga otra historia con su vida, es decir pensar la vida integralmente con la realidad y el tiempo. A Noll no le importa la historia No soy un escritor que vuelve hacia el pasado, hacia la reconstruccin histrica de hechos o de pocas [footnoteRef:9]. [8: Noll, Jo Gilberto. A literatura muito perigrosa, entrevista con Manuel do Rosrio y Bruno Dorigatti. In:http://bagatelas.net/contos/novembro/entrevistajgnmr.html Acceso en 08/04/06] [9: NOLL, op. cit.]

Esta prdida del sentido, de las posibilidades de proyeccin, van a estar reflejadas en el gasto improductivo del hijo en relacin con su carencia. Al ser el presente lo importante, va a aparecer la idea de despilfarro con el narrador pidiendo un costoso cognac para luego tener que prostituirse ante la falta de dinero. Vemos cmo el narrador ante una ciudad globalizada o posmoderna que empieza a diseminar una madeja de puntos de encuentro o desencuentros cambiando radicalmente la vida del habitante de estos espacios y cuyo "consumismo" lo desconectar de su propia conciencia capaz de pensar y actuar dentro de este marco de multiplicidades culturales-sociales que le ha tocado vivir y sobre la cual debera actuar. De all el fuerte simbolismo que tiene la escena final del cuento en referencia a la pornografa, dice el narrador: todo el da sin nadie que me atormente con clases y trabajos en grupo, slo yo y mis revistitas (176), es esta la idea de que la cultura de masas ha vencido al saber humanista. El consumo pornogrfico est cargado de simbolismos que nos remiten a ese carcter posmoderno. Es el medio sin fin por excelencia: no hay sexo para procrear (fin que el posmodernismo problematiza) y ampliar la comunidad, sino para entretener, alejar de los libros en este caso. En la pornografa no hay narracin, ese faltante que Benjamin ha sealado de la mano con la crisis de la experiencia; el sujeto pierde completamente su identidad y se transforma en un objeto, con lo cual se anula la idea de totalidad. Est fuertemente el acto de fingimiento, el quiebre con el pensamiento dicotmico; est la vida desnuda tal como la expuso Agamben, como una zona de indistincin entre la vida humana socialmente reconocible y la vida meramente biolgica.

En conclusin, tenemos una sociedad en que el saber humanista entra en crisis a la hora de ser transmitido. Como seala Vidal vemos definirse en esta narrativa una apuesta por la comunidad fuera de un orden mundial que pretende unir a travs de la guerra permanente o de los lazos humanitarios[footnoteRef:10]. El saber aparece como un privilegio peligroso, de all que el hijo tenga que buscar una forma de adaptarse a ese mundo hostil. La forma de hacerlo es rompiendo con la tradicin de su padre, con un accionar que privilegie la inmediatez por sobre los fines. De all su gasto improductivo, es la imagen del posmoderno alienado por la cultura de masas alejado de los libros y de cualquier voluntad revolucionaria. [10: Vidal, op, cit, pgina 21.]

Bibliografa utilizada:

- Agamben, Giorgio: MEDIOS SIN FIN, Valencia, PRE-TEXTOS, 2001

- Benjamin, Walter. Experiencia y pobreza en Discursos interrumpidos I. Filosofa del arte y de la historia. Madrid, Taurus, 1982. Trad.: Jess Aguirre

- Jameson, Fredric, Utopa en el posmodernismo, Buenos Aires, Imago Mundi, 1991.

- Noll, Joo Gilberto: Algo urgentemente, en Vereda Tropical. Antologa del cuento brasileo, Buenos Aires, Corregidor, 2005.

- Noll, Jo Gilberto. A literatura muito perigrosa, entrevista con Manuel do Rosrio y Bruno Dorigatti. In:http://bagatelas.net/contos/novembro/entrevistajgnmr.html Acceso en 08/04/06

- Vidal, Paloma: Comunidades inadecuadas: la narrativa reciente de J.G. Noll; revista Grumo num.5, Buenos Aires/Ro de Janeiro, 2006.

El presente trabajo intentar demostrar que en el cuento La bella y la bestia de Clarice Lispector el hombre en harapos se presenta como un modo de vida que viene a simbolizar una herida en la ciudad del proyecto civilizatorio poniendo en tela de juicio el sistema econmico capitalista y resignificando una serie de valores de esa sociedad mediante una representacin esttica del despojo.Para ello se mostrar, mediante el anlisis de algunos pasajes del texto, al personaje de Carla resignificar su identidad y ciertos valores sociales a partir del montaje que aparece en ese mundo estetizado con la aparicin del hombre en harapos. Luego, se mostrar que esta resignificacin del mundo en trminos estticos est asociada a una resignificacin del mundo en trminos socioeconmicos, exponiendo como estos campos dialogan en las reflexiones de Carla y mostrando que se conjugan en determinados modos de vida, en conjunto con las ideas de amenaza y fingimiento. Por ltimo, apoyaremos nuestro anlisis con la idea de ruina en Benjamin y de montaje en Didi-Huberman.

La aparicin del hombre en harapos aparece como una revelacin ante Carla, de ese modo van a surgir una serie de resignificaciones que van a poner en tela de juicio determinados valores sociales e identitarios al punto de que este personaje femenino tenga un quiebre en su nocin esttica de la vida. El cuento comienza con una construccin de un ambiente moderno y estetizado y del ostentoso personaje de Carla. Ella afirma ser nica y darle brillo y resplandor a toda esa oscuridad[footnoteRef:11] (531). Esta idea se va a resignificar con la aparicin del hombre en harapos, pues es aqul que con su revelacin viene a esclarecer ese mundo de tinieblas. El artificio es parecido a la aparicin de los Morlocks en La mquina del tiempo: a diferencia de lo que cree Carla, no es ella lo que resalta entre la masa sino este mendigo que viene a poner de manifiesto la perversidad de un sistema econmico. La aparicin del hombre en harapos est cargada de resonancias sobre las diferencias de clases, justamente Carla estaba reflexionando sobre su condicin social cuando aparece esta alteridad, perteneciente a la otra clase. En la avenida donde sucede el encuentro vemos ilustrada la idea de Sennet de que las diferencias identitarias que emergen en la ciudad, con la concepcin del cuerpo en movimiento y el desarrollo capitalista, no son un obstculo para el contacto de los individuos entre s[footnoteRef:12]: Pero en la avenida Copacabana todo era posible: personas de toda clase. Por lo menos de clase diferente a la de ella De la de ella? Qu clase de ella era para ser de la de ella?(532) es decir, si bien podramos matizar a Sennet puesto que en un principio Carla siente un rechazo con esa identidad diferente, vemos una resignificacin de este rechazo cuando Carla problematiza su pertenencia a una clase y su relacin con ese otro. Estas resignificaciones van a venir de la mano con el quiebre que se plantea al principio del cuento en la idea que tiene Carla de ser alguien que se opone a lo dems: Ella, los otros. Pero, pero la muerte no nos separa(532) la concepcin de antagonismo aparece desestabilizada. Esta idea persiste: Una cosa los una: ambos tenan vocacin por el dinero (533), vemos ac como esta perspectiva de enfrentamiento aparece matizada en el inters que tienen ambos por el dinero, otro reflejo ms de Carla en el mendigo por lo que ese apego tambin debe ser resignificado. Ella se descubre a s misma como mendiga, emparentndose con el hombre en harapos. Otro de los aspectos ms importantes que luego se resignifica es el espanto y el miedo. Vemos en Carla: Ella estaba espantada: como prcticamente no andaba por la calle - iba en coche de puerta a puerta -, lleg a pensar: l me va a matar? (532), la mujer aparece aterrorizada ante la alteridad, se siente amenazada. Pero el hombre en harapos tambin va a tener la misma sensacin: El mendigo la mir espantado (533), de vuelta aparece este reflejo que vendra a desestabilizar una serie de valores en la relacin con el otro. En realidad, Carla est expuesta al peligro de dejar de ser ella misma, porque para ser ella misma tiene que vivir en un espejo y en este caso el espejo se rompe. La reflexin social va a estar ligada a la reflexin identitaria: Yo no soy mala! Soy un producto de no s qu, cmo saber de esta miseria del alma! (536). Carla se quiebra, deja de ser un sujeto pleno que tiene conciencia de s y una conciencia con identificadores con la clase pudiente. Carla ya no puede pensarse a s misma porque encontr una mirada que miraba otra cosa. Incluso la identidad de Carla aparece cuestionada por el mendigo, quien piensa que Carla es una prostituta. Ms que una mirada lo que le entrega el mendigo es una herida, esa carnalidad que viene a romper el cuerpo social. De all que podramos decir que termina una primera parte del cuento con una resignificacin de ese mundo maravilloso: inverta en la herida grande en carne viva y purulenta. No, la vida no era bella (533). La herida del hombre viene a poner en tela de juicio la identidad de Carla y los valores de esa sociedad. El dispositivo es esttico, del saln de belleza se pasa al hombre en harapos con su enorme herida que resignifican en el personaje femenino la valoracin del mundo en trminos de belleza. Carla no nos dice que la vida ha dejado de ser justa, sino que ha dejado de ser bella. [11: He establecido el texto establecido por Siruela. Las citas pertenecen a esta edicin.] [12: Vase al respecto Sennet, Richard: Carne y Piedra, Madrid, Alianza, 1997. ]

Pero esa desestabilizacin de la valoracin esttica est estrictamente ligada a una desestabilizacin de una valoracin del mundo en trminos econmicos. Carla aparece dotada de sensibilidad, capacidad que va ir volcndose desde lo esttico hacia lo socioeconmico, para que luego estos dos objetos dialoguen entre s estableciendo una relacin dialctica. En una segunda parte del cuento podemos ver una serie de reflexiones que van y vienen entre lo esttico y lo econmico. Del descubrimiento de Carla de que la vida ha dejado de ser bella pasamos a un pensamiento social: Se desesper tanto que le lleg el pensamiento hecho de tan slo dos palabras: Justicia Social. (...) Qu mueran todos los ricos! (534), su sensibilidad se vuelca de lo esttico a lo socioeconmico. Luego va a conjugar estas dos cuestiones con la idea de triunfadora: Sera ella, por casualidad, triunfadora? Si triunfar fuera estar en plena tarde clara en la calle, con la cara embadurnada de maquillaje y lentejuelas doradasEso era triunfar? (534): el triunfador no est solamente asociado a una idea de clase sino que aparece simbolizado con una cuestin esttica. Aparece resignificada as la valoracin de esas normas estticas y modos de vida impuestos por la clase pudiente y su relacin con un concepto de una vida que se reivindique. Esta combinacin va a volver a aparecer en relacin a su entorno: Compaeras de qu? De vestirse bien? (536). Carla reflexiona sobre su ascenso social, pero se da cuenta de que no es ms que un cambio esttico y no un avance en trminos de riqueza vivencial. El modo de vida de sus compaeras es el modo de vida opuesto al del hombre en harapos, con lo cual tenemos la exacerbacin de dos estticas que conviven en la ciudad capitalista. Esta idea nos lleva al rechazo de Carla por ambos extremos, La belleza puede ser una gran amenaza (536). La amenaza es que mediante dispositivos culturales el sistema econmico capitalista asume perpetuarse, y para que esa clase pudiente mantenga esa vida estetizada y de lujos es necesario que exista, como asegur Marx[footnoteRef:13], una tasa de desocupados que sufran la miseria. El sistema capitalista se viste de gala hasta que una herida abierta viene a iluminar el tenebroso rostro que se esconde tras ese disfraz. Esta idea est presente cuando Carla vuelca su sensibilidad a lo puramente esttico con el objetivo de desviar la mirada de esta herida, cuando recuerda el libro LAGO DE TIBERADES. Este uso de la esttica va a reaparecer en el final del cuento con el baile al que asistir Carla exhibindose como remedio a ese malestar que le ha provocado el encuentro con el hombre en harapos. Pero la imagen de la herida se ha asentado definitivamente en su cabeza: Nunca ms sera la misma persona (539). El encuentro con la herida es determinante en su resignificacin identitaria y de la realidad, tener una herida en la pierna: es una realidad (541): la figura ha venido a revelar el aspecto indecoroso e injusto del sistema capitalista. [13: Si la existencia de una superpoblacin obrera es producto necesario de la acumulacin o desarrollo de la riqueza sobre base capitalista, esta superpoblacin se convierte a su vez en palanca de la acumulacin capitalista, ms an, en una de las condiciones de vida del modo capitalista de produccin. Constituye un ejrcito industrial de reserva, un contingente disponible, que pertenece al capital de un modo tan absoluto como si se criase y se mantuviese a sus expensas. (Marx, Karl: El Capital, Crtica de la Economa Poltica, I, Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1974, pg. 535)]

Esta idea de la belleza como una amenaza y como un objeto que sirve para desviar la mirada de la injusticia social se asocia con una idea fuertemente presente en el cuento que conjuga las nociones de lo esttico, lo econmico, y modos de vida: la idea de fingimiento. Las resignificaciones aparecen asociadas a dejar un modo de vida que est atravesado por el acto del fingimiento. Aparece la idea de que Carla finga que no exista el hambre, este modo de vida aburguesado en que se desva la mirada de la realidad aparece perturbada por la aparicin del mendigo. Carla va a tener una serie de reflexiones en este sentido: El resorte del mundo es el dinero? Se hizo ella la pregunta. Pero quiso fingir que no era. Se sinti tan, tan rica que tuvo un malestar. (538) este es otro momento muy claro donde esttica, economa y modo de vida se conjugan. Ese modo de vida que finge mediante un dispositivo esttico aparece amenazado por la revelacin del carcter injusto de ese mundo en que se vive. En el final del cuento Carla menciona que le fingan no cantar mal, es decir aparece nuevamente el acto de disimulo para omitir una carencia, un defecto. Carla cae en cuenta de la mentira que representa ese mundo estetizado, esto est presente cuando admite la falsedad de su viaje a Nueva York, cuando admite que ha estado jugando a vivir. En Benjamin el trapero es el que condensa en s los desechos que la ciudad del proyecto civilizatorio capitalista quiere tapar. Afirma Benjamin la causa de la ruina (...) no es sin duda la transgresin moral, sino ya el mismo estado de criatura del hombre[footnoteRef:14]. El hombre en harapos es el smbolo de la ruina capitalista y de all su efecto tan potente sobre Carla, no slo es una alteridad, es tambin alguien que concentra en s todos los tiempos puesto que trasciende en un punto el propio presente, est construido por desperdicios materiales y simblicos: la basura histrica. Sucede aqu el "montaje" que propone Didi- Huberman[footnoteRef:15] en que se superponen dos tiempos: el hombre en harapos pertenece a otro tiempo y contrasta con la sociedad modernizada. Esto est ilustrado en la visin de la fiesta que tiene Carla donde se filtra el mendigo. El anacronismo del hombre en harapos viene a romper con la armona con que se presenta esa sociedad, con la idea de la linealidad del tiempo histrico. Rompe con la idea homognea de un tiempo que avanza y de progreso, puesto que se presenta como un anacronismo dentro de esa ciudad que encarna el proyecto de la civilizacin capitalista. [14: Benjamin, Walter: El origen del trauerspiel alemn, Buenos Aires, Gorla, 2012, pgina 294.] [15: Vase al respecto Didi-Huberman, George: Ante el tiempo, Buenos Aires, Adriana Hidalgo, 1999.]

En conclusin, vemos a Carla a partir de una sensibilidad esttica despertada por su encuentro con el hombre en harapos, que motoriza una serie de reflexiones llevndola a resignificar una serie de valores identitarios y sociales, al punto de trocar su concepcin del mundo en trminos estticos. Esta innovacin en su concepcin esttica del mundo deviene en una resignificacin del mundo en trminos socioeconmicos. Lo esttico aparece ligado a la idea de fingimiento, como una amenaza que soslaya los males del sistema capitalista. Se hacen pertinentes las palabras de Adorno y Horkheimer La miseria, como contraposicin de poder e impotencia, crece hasta el infinito junto con la capacidad de suprimir perdurablemente toda miseria[footnoteRef:16]. [16: Adorno, Theodor; Horkheimer, Max. Dialctica de la ilustracin, Madrid, Editorial Trotta, 2001, pgina 90. ]

Bibliografi utilizada:

- Adorno, Theodor; Horkheimer, Max: Dialctica de la ilustracin, Madrid, Editorial Trotta, 2001.

- Benjamin, Walter: El origen del trauerspiel alemn, Buenos Aires, Gorla, 2012.

- Didi-Huberman, George: Ante el tiempo, Buenos Aires, Adriana Hidalgo, 1999.

- Lispector, Clarice: La bella y la bestia, Buenos Aires, Siruela, 2012.

- Marx, Karl: El Capital, Crtica de la Economa Poltica, I, Mxico, Fondo de Cultura Econmica.

- Sennet, Richard: Carne y Piedra, Madrid, Alianza, 1997.