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Boletín Informativo2

ÍNDICE

Editor ResponsableP. Daniel Panduro Fregoso, MG

CoordinaciónAntonia HIdalgo López

Revisión y corrección de textosAlmas y Diseño Gráf ico

Diseño EditorialAlmas y Diseño Gráf ico

Impresión

Procesos Mecánicos

Consejo GeneralP. Juan José Á. Luna E., MG

Superior GeneralP. Raúl Ibarra H., MG

Vicario GeneralP. Fernando Montes L., MG

Segundo ConsejeroP. Raúl Nava T., MG

Tercer ConsejeroP. Salvador Rojas V., MG

Cuarto Consejero

Boletín Informativo MGPublicación mensual de los Misioneros de Guadalupe

Año 13. Núm. 143. Septiembre de 2010

Cantera 29, Col. Tlalpan, Del. Tlalpan, CP 14000, México, DFTel. (01 55) 5573 2500

[email protected]@gmail.com

www.mg.org.mx www.comunicacion.mg.org.mx

3 Editorial Confi anza total en el llamado del Señor Padre Rodolfo Loza Hernández, MG

5 Carta a Dios Los Rasgos de tu Cara Luis Alberto de Cuenca

7 Formación permanente La inculturación en el proceso vocacional Laura Leticia Marrufo Fang, MLA

8 Misioneros Laicos Asociados MLA en Mozambique Alma Marisa Varela Palma, MLA

20 Centro de Orientación Vocacional La presencia de los Misioneros de Guadalupe en la Diócesis de Tabasco Padre Óscar Mario Romero Becerra, MG

22 Educación Claustro Universitario Padre Javier González Martínez, MG

Educación y movilidad social Padre Emilio Fortoul Ollivier, MG

26 Club de Niños Vivir los derechos de los niños es verlos con la mirada de Jesús Lourdes Ortiz Pérez

15 Desde las Misiones Cuba: La Virgen de la Caridad del Cobre en Cuba Padre Francisco Sanabria Enciso, MG

Mozambique: Capulana Padre Ignacio Cortez Martínez, MG

Perú: Treinta años de Misioneros de Guadalupe en Perú Padre José Guadalupe Camarillo Martínez, MG

4 Agenda Septiembre

11 Desde México Misa de envío de Lizzeth Tovar Esquivel a Perú Laura Leticia Marrufo Fang, MLA

Encuentro Nacional de Pastoral Social. Comunicado de prensa CEM

Caballeros de Colón promueven Rosario Mundial Guadalupano por Bicentenario de México ACI Prensa

Septiembre 2010 27

Nosotros, como misioneros, tenemos la tarea de su formación y crecimiento es-piritual, y nos encomendamos a Dios para que nos ayude y nos guíe a educarlos en la fe, en el amor a Él y a los hombres, sa-biendo que la labor que hacemos con ellos será de trascendencia, pues un día serán los misioneros que con responsabilidad y alegría darán a conocer este amor de Jesús a otras generaciones, inclusive a sus pro-pios padres.

En la actualidad los niños viven inmersos en la cultura de los medios de comunica-ción, como la televisión y el internet, por medio de los cuales tienen mayor acceso a información que edifi ca su mente y su cuerpo, pero que desafortunadamente tam-bién puede dañar su espíritu y su corazón. En nuestro club consideramos necesaria la utilización de los medios de comunicación, para difundir los valores cristianos y lograr un acercamiento con los niños, por medio de internet, la revista Almas y otros me-dios. Se trata de una buena alternativa en

comunicación, aunque tal vez no veamos resultados inmediatos; sin embargo, serán los niños quienes el día de mañana pue-dan transmitir el mismo mensaje a futuras generaciones. De esta manera, nuestro si-tio en internet contribuye a ser un granito de arena en la comunicación, pues busca difundir, en el mundo de la información infantil, el valor del amor que Jesucristo tiene por los hombres.

Cuando transmitimos a un niño el amor de Cristo, logramos que encamine su vida hacía un rumbo de paz, consuelo y esperanza, y el día de mañana ese niño lo transmitirá a otros, cuando sea joven o adulto.

“Los niños son don y signo de la presencia de Dios en nuestro mundo por su capa-cidad de aceptar con sencillez el mensaje evangélico. Jesús los escogió con especial ternura y presentó su capacidad de acoger el Evangelio (cf. Mt 19, 14) como modelo para entrar en el Reino de Dios (cf. Mc 10, 4; Mt 18, 3)” (DA, núm. 438).

Miembros del Club de Niños en un encuentromisionero en Tonatitla, Edo. de México


Vivir los derechos de los niños es verlos con la mirada de Jesús

Lourdes Ortiz Pérez

CLUB DE NIÑOS

Los niños son el futuro de un nuevo mundo y nosotros, como adultos, estamos llamados a tener conciencia de su digni-dad, sus necesidades y nuestros deberes con ellos: otorgarles las herramientas y el ejemplo necesario para ayudarlos a cono-cer el amor de Jesús en cada una de las etapas de su crecimiento.

Los niños tienen muchas necesidades, es-tán ávidos de amor, atención y reconoci-miento, pero también tienen el deseo de dar. Por eso, en el Club de Niños buscamos fomentar en ellos la conciencia de hacer el bien, de conocer sus derechos en la socie-dad y en el mundo; de ser solidarios y pro-

curar el bienestar de los niños del mundo, en especial de aquellos menos favorecidos, que viven realidades distintas. Los niños en nuestro Club aprenden a descubrir el amor universal, que los une con todos aquellos que quieren conocer a Jesús en su vida y en su corazón.

Lo que muchas ocasiones necesitan nues-tros niños de nosotros, de la sociedad y es-pecialmente sus padres es que los veamos con la mirada de Jesús: con ojos de amor y de ternura, que los abracen como Jesús abrazó a los niños de su tiempo, que los curen con amor de sus heridas de desen-canto y frustración a lo largo de su vida.

Miembros del Club de Niños en un encuentromisionero en Tonatitla, Edo. de México

Septiembre 2010 3

EDITORIAL

Padre Rodolfo Loza Hernández, MG

Confi anza total en el llamado del Señor

En todo llamado vocacional existe la respuesta del hombre que ha escuchado la invitación de Dios para un servicio específi -co, con un carisma propio y un ideal soña-dor que marca el rumbo de la respuesta.

En el proceso de formación, el que ha res-pondido, conociendo las exigencias del lla-mado y su condición humana, se pregunta con frecuencia: “¿Por qué yo?”, mas va en-contrando como respuesta que el Señor nos pide apertura y confi anza totales en que la llamada es de Él y la respuesta es nuestra, personal. Esto nos ayuda a reforzar más los valores de la esperanza y la confi anza total en Dios, para realizar la Misión a la que Él nos ha invitado.

No es saludable apoyarnos y confi ar sólo en nuestras propias habilidades, talentos o esfuerzos. Debemos hacer conciencia de nuestras limitaciones y poner nuestra es-peranza y total confi anza en aquel que no ha fallado y siempre acompaña. El apóstol san Pablo nos dice: “Llevamos este tesoro en vasos de barro, para que esta fuerza so-berana parezca cosa de Dios y no nuestra” (2 Cor 4, 7).

En mi corta experiencia en Cuba he visto cómo niños, adolescentes, jóvenes, adultos y ancianos, a pesar del poco acompaña-miento y escasa formación religiosa, acuden al sacerdote y hacen un gran esfuerzo por conocer, prepararse y comprometerse en las

actividades que les propone la parroquia. A nosotros como misioneros nos corresponde estar atentos a estos signos visibles de las comunidades que acompañamos y, puesta nuestra confi anza en Él, que nos ha llama-do, crecer junto con ellos desde su cultura, desde su idiosincrasia religiosa, desde sus sueños y, sobre todo, desde su amor y con-fi anza en Dios y en la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona y madre de todos los cu-banos. En la actualidad, los fi eles de la isla se preparan para celebrar, en el año 2012, los 400 años del hallazgo de la bendita ima-gen de la Virgen de la Caridad.

Sabemos que en esta Misión no estamos solos, que ustedes nos acompañan con sus oraciones.

Padre Rodolfo Loza con feligresesen Cuba


AGENDA

SeptiembreEventos

Actividades

XXX aniversario de la Misión de Perú

XXV aniversario de Ordenación Sacerdotal del Padre Gerardo López Vela, MG

Bicentenario de la Independencia

XXV aniversario del fallecimiento delPadre Javier Chávez Urbina, MG

Retiro de padres de familiadel Seminario Menor de Guadalajara

Reunión de la Dirección de Promoción

Reunión de la Dirección de Evangelización

Colecta Texcoco

Colecta Querétaro

Ejercicios espiritualesde los Padres MG en Guadalajara

miércoles 15

martes 14

jueves 16

domingo 19

domingo 5

martes 7

jueves 9

domingo 12

domingo 19

del lunes 20 al viernes 24

Septiembre 2010 25

con estudios de licenciatura no han logra-do empujar sus hijos a un nivel superior; lo más que alcanzaron fue que conservaran el mismo nivel que ellos ya tenían.

En resumen:• A los padres/tutores que tienen estudios de secundaria les resulta no muy difícil lograr que sus hijos accedan a la preparatoria.• A los que sólo tienen estudios de prepa-ratoria les resulta muy difícil hacer que sus hijos accedan al nivel de licenciatura.• A los que tienen estudios de licenciatura, les resulta relativamente fácil hacer que sus hijos también cursen dicho nivel, pero difí-cil que accedan a un nivel de posgrado.

Entiendo que los especialistas defi nen esto en términos de “movilidad social”; este concepto, en resumen, expresa los cambios favorables que una persona logra obtener y conservar en su situación social y econó-mica para sí y para sus familiares más cer-canos. Un padre con estudios de secundaria que logra que sus hijos estudien la prepara-toria ha experimentado la movilidad social.

Esta clase de cambios, entre más profundos, suelen tomar más tiempo. Algunos se logran

en una generación, pero muchos requieren de plazos más prolongados.

Se discute mucho el peso e infl ujo real de la educación en la movilidad social. Hay teorías que la ponen en la cúspide de los factores de cambio; otras la matizan, dan-do peso a otros ingredientes como: la ma-yor o menor riqueza, el grado de salud, los confl ictos sociales, la aparición de eventos fortuitos como temblores, erupciones vol-cánicas, etcétera. Sin embargo, queda claro que en todos los casos el grado de edu-cación juega un papel fundamental, cuyos efectos pueden ser tardados, pero que em-pujan a las nuevas generaciones a un nivel de vida más satisfactorio.

Me siento orgulloso de poder colaborar con otros MG desde hace algunos años en las instituciones educativas del Instituto en México, que han sido —y espero seguirán siendo en el futuro—, factores de movilidad social, o, como solemos decir más comúnmente, promotores de un mayor bienestar para muchas familias.


Educación y movilidad social

Padre Emilio Fortoul Ollivier, MG

Tengo sobre mi escritorio un estudio que, entre otras cosas, indica el grado de escolaridad de los padres/tutores de los as-pirantes a nuestro Bachillerato UIC.

Se preguntó abiertamente a los padres/tu-tores de dichos aspirantes acerca del nivel escolar máximo que alcanzaron. Las res-puestas obtenidas señalan que unos po-cos concluyeron la licenciatura; la mitad aproximadamente terminó la preparatoria y 40% se quedó a nivel de secundaria.

Sin embargo, ellos se han acercado a noso-tros con la intención de inscribir a sus hijos a nivel bachillerato. Para mí fue una grata sorpresa que 40% de los padres/tutores es-

tán dando a sus hijos un nivel de educación superior al que ellos tuvieron.

Ese es un gran logro para nuestra sociedad mexicana. En una generación los padres han logrado empujar su descendencia al si-guiente nivel educativo.

Si preguntamos al estudio que nos diga si el mismo fenómeno ocurre con los padres/tu-tores de los aspirantes a licenciatura, la res-puesta será menos alentadora: unos pocos padres/tutores cuentan con estudios de pos-grado (doctorados, maestrías), pero la gran mayoría (90%) sólo tiene estudios de licen-ciatura; entre 7 y 8% no pudieron exceder el nivel de bachillerato. Es decir, los padres

Alumnos del CAMEE

Septiembre 2010 5

CARTA A DIOS

Los Rasgos de tu Cara*

Luis Alberto de Cuenca

Querido Dios:Conforme van pasando los años, más te me desdibujas en el recuerdo, pero eso no quiere decir que hayas desaparecido para siempre por el desagüe de mi desengaño, sino más bien todo lo contrario. Cuando alguien quiere a alguien con in tensidad y una pizca de desmesura —el amor es así—, y ese al guien a quien se quiere se ha ido a un lugar muy lejano de donde es muy difícil regresar, los rasgos de la cara del ser amado se van desdibujando poco a poco hasta di-fuminarse en el olvido. Y tanto más se difu-minan cuanto mayor es el es fuerzo con que se trata, inútilmente, de retenerlos.

Pongo un ejemplo personal: siempre que Rita —mi pri mera novia, muerta en un acci-dente de tráfi co cuando aún no tenía vein-te años— se iba a Cataluña con sus padres a pa sar el verano, yo olvidaba sus rasgos nada más despedirla en el andén de la es-tación, y me dolía no saber reconstruir su cara en mi memoria, pero sabía que iba a suceder de ese modo, y también era cons-ciente de que, cuando volviese a verla, me daría la sensación de que la estaba viendo por pri mera vez, y tendría que acariciar, muy despacio, sus meji llas y mirarle a los

ojos claros y luminosos para darme cuenta de que era ella, la auténtica, la verdadera Rita, quien volvía a mi vida y a mis brazos después de pasar el verano con su familia en la Costa Brava.

De manera, Dios mío, que no recuerdo tu cara ni tus facciones, como me ocurría con Rita cuando se iba a la playa. Tú te fuiste también a la playa hace ya muchos años. Y digo a la playa porque no me gustan las playas, y la gente a la que yo quería siem-pre se iba a la playa, dejándome ti rado en Madrid cuando más necesitaba su compa-ñía, y desde entonces pienso que es a la playa a donde se van todos aquellos que yo hubiese querido conservar a mi lado, a una playa ignorada cuyo rasgo esencial es la ausencia, el vacío, la ignorancia de mí, a la playa donde no soy, ni he sido, ni seré más que ese «sueño de una sombra» de que nos habla Píndaro en su Pítica octava.

Debió de ser hace cuarenta años cuando te marchaste a esa playa. Yo era un adoles-cente, pero ya salía con chicas o, mejor di-cho, con chica, porque Rita ya era mi novia in illo tempore. Tanto la educación que re-cibí en el colegio como la fe indomable que

* Las “Cartas a Dios” pretenden ser un espacio para mejorar nuestra refl exión, oración y comunicación con el

Dios de la vida, por quien nos movemos, nos debemos y somos, y así estrechar nuestra relación con Él. A lo

largo de algunos meses compartiremos cartas de varias personas que ya se atrevieron a hacerla. La siguiente

carta fue tomada del libro 50 cartas a Dios, varios autores, PPC, España, 2005.


exhibía mi madre me habían acercado a tu círculo. Fueron años gloriosos. Conversaba contigo en cualquier circunstancia, fuese o no favorable, dirigías mis pasos hacia la santidad con la displicencia benévola de quien se sabe imprescindible. Y, de repen-te, un terremoto interno, una especie de maelström furibundo de los que salen en los tebeos sacudió mi conciencia violentí-simamente y me alejó de ti.

Con el paso del tiempo, uno adquiere men-talidad etiológica y tiende a buscarle causas a todo. La culpa en este caso yo creo que la tuvo Shakespeare. La clave me la ha dado Tolstoi. He leído hace poco el ensayo que dedicó, al fi nal de su vida, al «dulce cisne del Avon» (que, según el autor de Guerra y paz, no pasaba de ser un pajarraco disol-vente y odioso). Para Tolstoi, Shakespeare es un fementido debelador de lo espiritual, y su teatro un nauseabundo nido de mate-rialismo militante. Creo que el viejo Liev Nikoláievich tenía razón, y que fue la lec-tura de Shakespeare lo que propició aquel tremendo remolino que me apartó de ti, que rido Dios. ¡También fue mala suerte que

me dieran aquella matrícula de honor en la reválida de cuarto y que mis pa dres deci-dieran celebrar mi matrícula regalándome las Obras completas del viejo Will en la vie-ja edición encuader nada en piel de Aguilar! Fue en las páginas de ese libro, donde olvi-dé gozosamente que existías, mi Dios.

Te digo todo esto porque ya empiezo a echar de menos nuestras charlas de antes de la re-válida de cuarto, tus entra ñables regañinas en la capilla del colegio, siempre regidas por el buen sentido, la ternura con que me corregías un gesto despectivo hacia el pró-jimo o la fi rmeza con que me mostrabas el camino a seguir en la carrera de los buenos modales y de los nobles sentimientos. Me es imposible —ya lo he dicho— reconstruir tus facciones, pero si aprieto los puños y me concentro con ahínco y te recuerdo con mucha intensidad, a lo mejor un día vuel-ves de la playa a donde yo nunca estoy, y yo vuelvo de Shakespeare por un rato, y nos tomamos algo juntos antes de que me muera y te olvide del todo.

Un abrazo muy fuerte.

Luis Alberto de Cuenca

Septiembre 2010 23

Luego vino la parte más larga del evento: los informes de las tres direcciones, bajo la coordinación del señor rector. Esta vez los informes llevaron alrededor de dos horas. Por cierto, no podemos olvidar la inten-sísima lluvia que, durante buena parte de este tiempo, se abatió sobre esta parte de la ciudad; casi se nos caía el cielo.

En seguida, el maestro de ceremonias anunció la lección magistral que estuvo a cargo del licenciado Eric Torrescano Valle, del departamento de Formación Humanis-ta (dependiente de la Dirección de Forma-ción Integral), quien presentó su refl exión sobre la calidad de vida.

Posteriormente, ante el Consejo de Gobier-no de la UIC, el CP Arturo Castillo González tomó protesta como nuevo titular de la Di-rección Administrativa y Financiera.

Fue inmediatamente después que el maes-tro de ceremonias anunció la entrega de

reconocimientos, lo cual generó aplausos de una gran parte del auditorio. Ya había-mos cruzado la barrera de las dos horas y media, y nos acercábamos a las tres; los invitados habían esperado pacientemente todo este tiempo y llegaba, por fi n, para ellos, el momento principal. Se entregaron reconocimientos al mérito laboral, a la an-tigüedad de varios empleados, a la buena docencia (mérito docente), al buen traba-jo de muchos estudiantes (presea “Ducit et Docet”) y, por fi n, los reconocimientos deportivos y especiales (varios de ellos, de desempeño artístico y de medios).

Así dio por concluida esta ceremonia del Claustro. Se invitó al brindis, sirviéndo-se un exquisito vino blanco acompañado de panecillos. Creo que los organizadores debieron haber dedicado muchas horas a esto. Finalmente, podemos decir que la UIC salió orgullosa de este compromiso.


Claustro Universitario

Padre Javier González Martínez, MG

EDUCACIÓN

Cada año la Universidad Intercontinen-tal (UIC) celebra el llamado Claustro Uni-versitario. La organización de este evento es algo compleja y condensa todo lo que la UIC es y desarrolla.

Este 18 de agosto, a las 19 h, fue celebrado el XL Claustro Universitario. Primeramente, reunió a todas las autoridades, mayores y menores. Antes de dar inicio, el personal del Consejo de Gobierno, los titulares de la Dirección Académica, de la Dirección de Formación Integral y de la Dirección Admi-nistrativa y Financiera, así como todos lo que directamente colaboramos con ellos,

nos reunimos en el comedor de ejecutivos para organizar el ingreso hacia la expla-nada del domo.

Habiendo llegado al lugar que se nos ha-bía señalado, estando todos de pie, el pre-sidente del Consejo de Gobierno hizo la oración, ya previamente preparada, para dar gracias a Dios por un año más de vida y para pedir luces que nos ayuden a en-tender y a comprometernos con los retos que diariamente se nos presentan; pidió también por nuestros estudiantes. Acto se-guido, se rindió honores a la patria, fi ja nuestra mirada en la bandera nacional.

Maestros, alumnos y empleados de la UIC en el Claustro Universitario

Septiembre 2010 7

FORMACIÓN PERMANENTE

La inculturaciónen el proceso vocacional

Laura Leticia Marrufo Fang, MLA

Cuando me pidieron que asumiera la co-ordinación de los Misioneros Laicos Aso-ciados, donde una de las funciones es la promoción vocacional, me enfrenté a la realidad de no sentirme lo sufi cientemen-te preparada para asumir este proceso de acompañamiento vocacional.

Después de estar en la Misión de Guate-mala durante casi siete años, reinsertarme nuevamente a nuestro país me confrontó con la cultura, la cual presentaba muchos cambios provocados por nuevos conoci-mientos y descubrimientos de la ciencia y de la tecnología, mismos que debía descu-brir para conocer, entender y comprender a los jóvenes y poder inculturar la fe. Al inicio me pregunté ¿qué hacer y cómo ha-cer ante un pluralismo cultural y religioso propagado fuertemente por una cultura globalizada, que propicia el individualis-mo y la crisis de la familia?

Esta pregunta nos llevó a los miembros de la coordinación a buscar una formación que nos diera los elementos necesarios para el acompañamiento, donde la peti-

ción principal que nos hacen es refl exio-nar sobre la persona de promotor, es decir, el promotor mismo, y replantearnos cómo nos encontramos ante nuestra vocación, si la consolidamos ante quienes acompa-ñamos. Frente a este autoconocimiento y refl exión personal, redescubrí que cons-truir el respeto a la dignidad y a la liber-tad de cada uno nos lleva a que el joven reconozca su dignidad de ser imagen y semejanza de Dios, y acepte la vocación otorgada por el Hijo, quien lo ha llama-do a compartir su vida por siempre con los diferentes estilos de vida, pues esto es inculturar el Evangelio. Y es importante comenzar con sus propias vidas, ya que muchos de ellos llegan frágiles, desinte-grados e inestables.

También redescubrí lo importante y ne-cesario que es esforzarnos por fortalecer nuestro ser humano y cristiano a través de la formación integral, de manera personal y comunitaria, para ofrecernos más au-ténticamente a aquellos a los que hemos sido enviados para extender el Reino.

“El anuncio del Evangelio no puede prescindir de la cultura actual. Ésta debe ser conocida, evaluada y en cierto sentido asumida por la Iglesia, con un lenguaje comprendido por nuestros contemporáneos. Solamente así la fe cristiana podrá aparecer como realidad pertinente y signifi cativa de salvación”. (DA, núm. 480)


MLA en Mozambique

Alma Marisa Varela Palma, MLA

Sin duda los grandes proyectos de la humanidad comienzan en un sueño que, con esfuerzo y dedicación, llega a ser una realidad. El Centro de Formación Chikweia nació en el corazón de un gran Misionero de Guadalupe, el Padre José Enrique Her-nández T.; del anhelo de esparcir la Pa-labra de Dios en un pueblo naciente a la religiosidad católica; de la necesidad de contar con trabajadores propios de las mieses africanas; de ver el sufrimiento de los adolescentes africanos por su educa-ción. El proyecto Chikweia, con la ayuda generosa de nuestros Padrinos, hoy en día es un sueño hecho realidad, está dando sus primeros pasos con el trabajo de MLA Mozambique.

El Centro de Formación Chikweia se en-cuentra en medio de las bellas montañas mozambiqueñas del distrito de Manica, cerca de la frontera con Zimbabue: es un lugar para quienes gustan de tranquili-dad, silencio, contemplación y meditación. Realmente uno aprende a ver la presencia de Dios en los paradisíacos amaneceres y atardeceres, bajo un rojo candente que des-pierta pasión por la Misión; la sencillez de la gente, su apertura y alegría de recibir a los musungos (blancos) está a fl or de piel, y ni se diga de los niños, que con mucho gus-to nos miran y nos hacen parte de su vida.

MISIONEROS LAICOS ASOCIADOS

El Centro está integrado por tres grandes rubros: el centro de formación para agentes de evangelización, que es el objetivo central del proyecto, y dos vertientes paralelas: un internado para jovencitas y una escuela secundaria. En cuanto a las instalaciones físicas, cuenta con una sala de estudio (palhota) destinada a los cursos de formación, un comedor, dos dormitorios para internas y tres palhotas para huéspedes o ponentes, un molino para maíz y una tienda en donde se expenden productos básicos a bajos precios con la fi nalidad de ayudar a la economía familiar de la comunidad; fi nalmente, también está la escuela secundaria anexa, aún en construcción, con la ayuda generosa de un Padre de Corea.

El objetivo del internado es apoyar a las niñas que viven en las comunidades más alejadas de la zona de Machipanda, don-de se localiza la escuela secundaria más cercana, además de acompañar integral-mente a las internas con herramientas de formación para su crecimiento psicosocial y académico. El internado comenzó a fun-cionar en el ciclo escolar anterior y sólo con seis niñas de la comunidad de Chad-zuca; actualmente contamos con 40 inter-nas, 31 niñas que cursan el primer grado de secundaria y nueve el segundo. María

Septiembre 2010 21

hasta la fecha, las reuniones o encuentros vocacionales son mensuales y se realizan los segundos fi nes de semana en la Casa de los Padres MG, en la colonia Atasta.

Algunos de los Padres que han prestado su servicio en el COV de Villahermosa han sido: Jaime Palma C., José Carlos Romero R., Gregorio Martínez M., Arturo Arreguín G., Miguel Ángel Varela C., Salvador Sán-chez D., además los diáconos Víctor Piñón S. y Marco Antonio Navarro L., y el enton-ces seminarista Alfonso Arceo L.

Actualmente se atienden jóvenes de la Diócesis de Tabasco, tanto del centro como de los diversos municipios, pero también participan jóvenes del sur de Veracruz, del sur de Oaxaca, de Campeche, Yucatán y Chiapas.

A lo largo de estos años han pasado más de 300 adolescentes y jóvenes en la búsqueda

de la voluntad de Dios en sus vidas. Sólo algunos de ellos han ingresado a nuestro Seminario y se forman actualmente como futuros misioneros. Sin embargo, se pue-de afi rmar que el objetivo del COV se ha realizado a cabalidad, ya que los alumnos que han pasado se han impregnado de los valores evangélicos y del espíritu misio-nero; además sabemos que son personas valiosas para la sociedad por los valores adquiridos y viven su vida cristiana de una forma más comprometida.

Estamos ansiosos de recibir a muchos jóvenes y adolescentes que quieran comprometer más su vida en la obra del Señor. Hay un potencial vocacional grande en la región sureste, muchos jóvenes que están a la espera de una invitación o proposición vocacional para iniciar su proceso de discernimiento, y estamos dispuestos a guiarlos pues la mies es mucha y los operarios pocos.

Villahermosa,Tabasco


La presencia de los Misionerosde Guadalupe en la Diócesis de Tabasco

Padre Óscar Mario Romero Becerra, MG

La razón principal y original de la pre-sencia de los Misioneros de Guadalupe en Villahermosa, Tab., fue establecer el Cen-tro de Orientación Vocacional, el cual ten-dría como fi nalidad promover, acompañar y encauzar las vocaciones misioneras no sólo en la Diócesis de Tabasco sino de las regiones sur y sureste de nuestro país.

El convenio para el establecimiento del COV fue fi rmado, el 30 de octubre de 1993, por el Obispo Florencio Olvera Ochoa y el entonces Superior General del Instituto,

CENTRO DE ORIENTACIÓN VOCACIONAL

Padre José Navarro Navarro, MG. En el con-venio se concede, entre otras cuestiones, el permiso para la realización de actividades de animación misionera y promoción vo-cacional para la vida sacerdotal y religio-sa, de acuerdo al plan orgánico diocesano.

El COV cumple 15 años de actividades en Villahermosa, ya que inició sus actividades en marzo de 1995, con reuniones quince-nales e invitaciones a los jóvenes inquietos para asistir a retiros y encuentros en donde puedan discernir su vocación. Desde 1997

Padre Óscar Mario Romero con participantes del COV de Villahermosa

Septiembre 2010 9

Dolores Martínez M. y Norma Angélica López M., MLA, son las responsables, y se encargan de planear y organizar las ac-tividades. Las internas están organizadas por equipos para hacer limpieza diaria de las áreas verdes, recámaras, baños, letri-nas, lavaderos, comedor y cocina; hay equipos para el trabajo de campo, pues se cuenta con una huerta para consumo propio. Por las tardes tienen un horario para hacer tareas, refuerzo de materias, trabajos de campo, lavar ropa y recrea-ción. Los sábados asisten a la catequesis para recibir el Bautismo y formar parte de la Iglesia católica; de igual manera, los domingos asisten a Misa o a celebraciones de la Palabra, y el resto del día es libre.

En cuanto a lo económico el internado co-bra mensualmente una cantidad de recupe-ración para cubrir los gastos de luz y agua, y cada interna aporta una cantidad para los alimentos. Se cuenta con una cocinera que se encarga de preparar la comida y la cena; el desayuno lo preparan las mismas niñas, organizadas en equipos para cada día. Un día común comienza a las 5:30 de la mañana, con las actividades propias de cada equipo, la salida para la escuela es a las 6:00 y 6:50 de la mañana; las respon-sables se encargan de supervisar que todas vistan el uniforme limpio. El regreso de la escuela es aproximadamente a las 12:30 y 13:30 h. Después de la comida tienen un tiempo de descanso para comenzar, a las 15 h, las actividades vespertinas, que son básicamente de refuerzo académico, tareas y palestras de salud, higiene, educa-ción sexual, entre otros, a cargo de Dolores

y Norma. La jornada termina a las 21 h, cuando todas van a dormir.La escuela secundaria anexa, llamada Juan Pablo II, comenzó a funcionar en enero del presente año con “octava”, que equivale al primer año. Actualmente tiene tres grupos con 40 alumnos en turnos matutino y vespertino, cuenta con: seis salones, una dirección; la biblioteca, el laboratorio y la sala para profesores aún están en construcción. María del Consuelo Ruiz T. y Alma Marisa Varela P., como responsables del colegio, están dando los primeros pasos en la consolidación de la institución, pues está comenzando y necesita de grandes esfuerzos y trabajo para planear y organizar; en este momento se trabaja con mayor énfasis el aspecto administrativo, para organizar de manera efi ciente toda la documentación que se maneja en una escuela y para dar un mejor servicio tanto a la población estudiantil como a los padres de familia. En este sentido estamos creando nuestros propios formatos de control, así como la sistematización de datos estadísticos de cada alumno; cabe mencionar que esto es novedoso para nuestros profesores, pues desafortunadamente en las escuelas no tienen organizado nada, y creemos que en este aspecto podemos hacer algunas aportaciones. Nuestro papel es básicamente la organización y dirección, aunque también, si faltan profesores, damos clases; incluso los sábados tenemos clases de refuerzo en las materias de Matemáticas y Portugués para alumnos de bajo rendimiento.

Paralelamente al plan académico, se pretende implementar un programa cuya


visión es formar hombres con valores humanos, abiertos al crecimiento personal, capaces de responder a las exigencias del mundo externo de una manera compasiva y comprometida con la justicia y el servicio a los demás, a través de una educación integral como personas, en lo intelectual, lo emocional, el desarrollo de hábitos y la práctica de valores, de tal manera que sean capaces de redescubrir los talentos recibidos por Dios y ponerlos a disposición de otros.

Es así como la presencia de MLA va marcan-do paulatinamente la diferencia, tratamos de dar ejemplo con pequeños actos, gestos y actitudes diarios, y que esas cosas sen-cillas ayuden en la construcción del Rei-no de Dios, con la inspiración del Espíritu Santo. Estamos muy contentas por esta oportunidad de poder servir a los demás en cosas tan simples.

Norma Angélica López M., María Dolores Martínez M., Alma Marisa Varela P., y María del Consuelo

Ruiz T., Misioneras Laicas Asociadas en Mozambique

Septiembre 2010 19

en la Viceparroquia Santísima Cruz y en el Colegio Luis Vallejos Santoni.

Estamos muy agradecidos con Dios por per-mitirnos colaborar en Perú, por hacernos partícipes de su Misión. A lo largo de estos 30 años, sacerdotes Misioneros de Guadalupe, sacerdotes asociados, seminaristas y Mi-sioneros Laicos Asociados hemos logrado dar testimonio como familia misionera en Perú. A cada uno de ellos les agradecemos por todo lo que han hecho y le pedimos a Dios que los siga bendiciendo en donde quie-ra que se encuentren. Esta labor misionera no sería posible sin la ayuda espiritual y económica de nuestros bienhechores, que mes con mes colaboran para que la cons-trucción del Reino de Dios sea posible. Confi amos en que Jesucristo, el Señor de los Milagros, nos dará las fuerzas y gracias necesarias para seguir llevando a cabo la Misión ad gentes entre los cristianos y los no cristianos, que lograremos colaborar en la promoción y formación de agentes de evangelización y, sobretodo, en la promo-ción del clero local y en la maduración y autosufi ciencia de los trabajos que se nos han encomendado.

Gracias por las oraciones y los buenos de-seos. Dios camina con nosotros y nosotros seguiremos caminando en Perú, porque el Señor nos acompaña y se manifi esta a pe-sar de nuestras limitaciones como perso-nas, y Santa María de Guadalupe intercede por nosotros para que podamos mostrarlo a este pueblo peruano.

Oración

Gracias, Padre Nuestro,porque cada día tu Hijonos envía a proclamar

el Evangelio de salvaciónen el mundo.

Al celebrar 30 añosde ser familia misionera en Perú,

nuestro Instituto quiereseguir cumpliendo el mandato

de la Misión ad gentesen la costa, la sierra y la selva peruanas.

Te ofrecemos, Señor, nuestros logros, sueños y experiencias.

Nos comprometemos nuevamentecon el deber fundamental

de anunciar la Buena Nuevade Jesucristo,

a los que aún no te conocen y presentarte con gozo renovado

a los que te encontraron,pero se olvidaron de ti.

Por intercesiónde Santa María de Guadalupe,

te pedimos, Señor, que nuestra entrega

como discípulos misionerossuscite en Perú

vocaciones capacesde participar activamente

en la construcción de tu Reino.Amén.


Perú: Treinta años de Misionerosde Guadalupe en Perú

Padre José Guadalupe Camarillo Martínez, MG

Al conmemorar 30 años de trabajo mi-sionero de nuestro Instituto en Perú no nos queda más que agradecerle a Dios por tan-tas maravillas que ha hecho en su pueblo a través de nosotros.

Fue en 1980 que empezó nuestro caminar misionero en Perú. Los Padres Antonio Hernández R. y Tomás Ramírez T. iniciaron labores en la Diócesis de Chachapoyas, en la ciudad de Bagua Chica, para atender la parroquia y predicar el Evangelio en in- numerables comunidades. El trabajo pastoral en este lugar poco a poco se fue conformando por sacerdotes, seminaristas, laicos y religiosas de diferentes congregaciones, con lo que se dio testimonio de comunión y Misión en este lugar de la ceja de selva de Perú. Fueron 18 años de promoción y formación de agentes de evangelización en este lugar, y ante la madurez cristiana de las comunidades se entregó la parroquia a la Iglesia local.

En 1987 llegaron al Vicariato Apostólico Pucallpa, tierra colorada, los primeros Mi-sioneros de Guadalupe, para colaborar en la selva del Perú. Actualmente seguimos colaborando con el Vicariato Apostólico de Pucallpa, en las parroquias de Virgen del Carmen, San Pedro y San Pablo, y Sagrada Familia. El trabajo misionero en este lugar

de Perú no es fácil, pero poco a poco se es-tán conformando comunidades cristianas conscientes de su compromiso y participa-ción en la Iglesia.

En 1988 se enviaron misioneros laicos a la Diócesis de Camaná, quienes con su fe, testimonio y profesión apoyaran en la construcción de la Iglesia en la costa de Perú. Durante 10 años el pueblo católico de México preparó y envió a diferentes grupos de laicos que colaboraban en la pastoral y trabajos administrativos para la diócesis.

También en 1988, a petición del Cardenal Augusto Vargas Alzamora, de la Arqui-diócesis de Lima, se encargaron a los Misioneros de Guadalupe las parroquias de San Juan Bautista y San Pedro y San Pablo, del barrio del Rimac. El trabajo misionero que se realizó en estas parroquias nos permitió acompañar a una Iglesia que afronta la problemática de las grandes urbes y formar comunidades misioneras conscientes de su labor evangelizadora.

En 1998 llegaron a la Arquidiócesis de Cus-co, ombligo del mundo, los primeros Mi-sioneros de Guadalupe, para colaborar en la sierra de Perú. Actualmente sacerdotes y Misioneros Laicos Asociados seguimos co-laborando en la Parroquia Sagrada Familia,

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DESDE MÉXICO

El día 1 de agosto de 2010, en la Parroquia Padre Nuestro, de la ciudad de Saltillo, Coah., se llevo a cabo la emotiva Misa de envío de Lizzeth Iboon Tovar Arriaga, nueva misionera laica asociada, quien es licenciada en Trabajo Social y estuvo en el año de preparación a misioneros laicos asociados (Premla), de agosto de 2009 a junio de 2010.

La Misa fue presidida por el Padre Manuel Fernando Pachicano Llaca, y concelebraron el Padre Raúl Nava Trujillo, MG, consejero y encargado de la Subdirección MLA, el Padre Basilio Sánchez G., MG, el Padre José Alejandro Molina L., MG, y el Padre Adolfo Fermín Parra G., MG.

El día de la Misa, en el rostro de Lizzeth, lleno de emociones y sentimientos encon-trados, predominaba la alegría; era un rostro resplandeciente y lleno de paz, a pesar de los nervios que siempre están presentes. Estuvo rodeada por el cariño de sus fami-liares, y aquella parroquia se engalanó con la fi esta misionera.

Ella nos comparte lo siguiente: “Llegó el gran día. Después de que días antes corrí de un lado a otro con los preparativos, el coro, la ofrenda, además del cambio re-ciente de párroco que se había dado en la catedral; era tanta presión que ya que-

Misa de envíode Lizzeth Tovar Esquivel a Perú

Laura Leticia Marrufo Fang, MLA

ría que pasara, pues la situación producía mucho estrés. Pero a pesar de todo sería el gran día, el día tan esperado. Al fi n sabría a dónde me iría de Misión y con ello dar el ‘sí, estoy dispuesta…’. Era una emoción indescriptible, ver a mis papás, hermanas, amigos y demás familiares. Verlos a todos ahí y saber que nos uniríamos en oración para emprender este camino me llenaba de ánimo e impulsaba a seguir adelante. Cada palabra que pronunciaba el sacerdo-te me llenaba de fortaleza, y con ello me sentía muy consentida por nuestro Señor, y le agradecí en todo momento el haber puesto sus ojos en mí”.

Lizzeth fue enviada a la Misión de Perú. Oremos al Dueño de la mies para que siga concediéndole todo lo que ella necesite para extender su Reino, y para que siga suscitando auténticas vocaciones laicales ad gentes.

Lizzeth Tovar E. (al centro) en su Misa de envío


Encuentro Nacional de Pastoral SocialComunicado de prensa

CEM

En la Casa Lago, Sede de la Conferencia del Episcopado Mexicano, nos hemos con-gregado, procedentes de distintas Diócesis de la República, 170 personas, Obispos, pres-bíteros, religiosos y religiosas, laicos y lai-cas para tener nuestro Encuentro Nacional de Pastoral Social 2010. Además de quienes participan con su presencia, hemos compar-tido la riqueza de este encuentro con mu-chas personas que nos siguen en México y en otras partes del mundo a través de nuestra transmisión en línea del canal en internet de caritas.tv

El tema que ha ocupado nuestra atención es el Cambio Climático, realidad que preocu-pa a mujeres y hombres de nuestro tiempo. Queremos fortalecer e impulsar la respuesta de la Pastoral Social a los desafíos que el cui-dado de la creación presenta a la misión de la Iglesia en México.

Estamos abordando este tema con una acti-tud de escucha, atentos a un concierto mul-tidisciplinario de estudios y opiniones de personas conocedoras que nos han ayudado a acercarnos con seriedad a la realidad del Cambio climático, compartiendo con noso-tros información acerca de las causas, de los riesgos y de las consecuencias que las ciencias identifi can; al mismo tiempo nos estamos abasteciendo de elementos para

una refl exión ética sobre la acción huma-na y las formas en que se relaciona con el medio ambiente; hemos compartido también horizontes de acción en los intercambios de experiencias que alientan nuestra esperanza al constatar cómo se suscitan iniciativas que impulsan la responsabilidad social hacia la creación y sus bienes.

Los participantes en este Encuentro, en el estu-dio, la oración y el intercambio de experiencias que hemos compartido encontramos motivos para construir conocimiento, difundir nues-tra visión religiosa de la Creación como Don de Dios y promover acciones que favorez-can la mitigación y adaptación al cambio climático.

Asumimos esta tarea con esperanza; no sen-timos temor ni compartimos ideas catastró-fi cas. La naturaleza no es nuestra enemiga, tampoco es cierto que nunca perdone. Somos nosotros, los seres humanos, quienes defor-mando nuestra conciencia hemos alterado la armonía original de la relación del hombre y la mujer con el medio ambiente.

Hay signos evidentes de que nuestro planeta no goza de buena salud y, en gran parte, la huma-nidad ha sido responsable. No hemos sido jus-tos con nuestra madre Tierra, hemos fi ngido sordera a las voces de las creaturas; hemos

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En las diferentes esferas sociales existió la expresión: “Luisa Diogo es una mujer de capulana fi rme”, simbolizando el poder y la dignidad de la antigua Primera Minis-tra. En los momentos de grandes desafíos se le aconseja a la mujer mozambiqueña amarrarse bien la capulana, pues en los éxitos logrados se dice: “se amarró bien la capulana”. En estos casos, la capulana simboliza el poder femenino. La capulana, es símbolo de castidad: durante la adoles-cencia las mamás aconsejan a sus hijas ce-ñir bien la capulana para caminar segura y de piernas cerradas. Otra expresión inte-resante es: “esta señorita no sabe amararse la capulana”, y se refi ere a aquellas mujeres

que no se dan a respetar y se entregan a cualquiera.

La capulana es barata, accesible a cual-quier bolsillo, refresca el alma y torna a la mujer más bella. Según la tradición, el valor del hombre se refl eja en la capulana de su mujer. Sin la capulana la mujer no tendría encanto ni música en el cuerpo; es símbolo de belleza y amor, representa respeto y dignidad, valores y educación. En la tradición europea el hombre regala fl ores a su mujer, en la tradición mozam-biqueña regala capulanas. Hay una razón para esto: la fl or se marchita, la capulana perdura.

Mujer de Mozambique con capulana


Mozambique: Capulana

Padre Ignacio Cortez Martínez, MG

Desde los tiempos más remotos la ca-pulana inspira los más bonitos poemas de amor, y las voces que cantan la capulana transmiten una dulce melodía con sabor a pasión.

El diccionario de la lengua portuguesa de-fi ne a la capulana como un simple lienzo que cubre a las indígenas de Mozambi-que desde la cintura hasta debajo de las rodillas; este signifi cado dado puede ser correcto, pero le falta el lado romántico de las cosas.

El encuentro entre árabes y europeos so-metió a los pueblos africanos, pero les tra-jo la capulana. De donde quiera que haya venido, nos conquistó. Los colonizadores ya se fueron, pero la capulana perdura. Ella es nuestra, muy nuestra. Atravesó espacios, tiempos y generaciones, marcó nuestra historia, memoria y momentos. La capulana no envejece y se renueva cons-tantemente, es el mejor lienzo del mundo.

Ella nos acompaña en cada momento de nuestra vida: con ella recibimos al recién nacido y amortajamos a los difuntos; se hacen trajes para todas las ocasiones; con ella se ciñe la mamá al bebe en la espal-da; se hace un manojo de leña; se cobija, etcétera. La función práctica que da este pedazo de lienzo es una característica muy peculiar. Además, la capulana es el símbolo

de la mujer mozambiqueña, es el símbolo de la mujer africana.

Existen dos tipos de capulanas. La capula-na vemba es de uso común, de diferentes medidas: 1.50 m para las mujeres delgadas y las adolescentes; 1.80 m para las mu-jeres de porte normal y de 2 m para las más corpulentas. La capulana mucume es especial para ceremonias, sus medidas son mucho más grandes y tiene un cintilla blanca en el centro de ella. No importa el número de capulanas que se tengan, una mozambiqueña de verdad debe tener al menos una, pues ninguna es igual a otra y nunca está de más. Así como las mu-jeres, las capulanas tienen un nombre y cuentan una historia; siempre fue así. Ya hubo en tiempos pasados una llamada Gue-gué (nombre de una artista), otra llamada Rosita wa ndambi (“Rosita de las inunda-ciones”, por haber nacido debajo de un árbol, en la inundación del año 2000). En cualquier mercado del país podemos en-contrar diversas capulanas con motivos y recuerdos de acontecimientos importantes, así como de personajes políticos y religiosos (Armando Guebuza, presidente de la Repú-blica; el Papa Juan Pablo II en su visita a Mozambique, la corredora Maria de Lurdes Mutola, etcétera); existen especiales para cumpleaños, compromiso, noviazgo, ma-trimonio, etcétera.

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atentado contra el aire, el agua y el suelo, cor-tamos, arrancamos pero no plantamos; pisotea-mos, contaminamos, destruimos, nos mueve el ansia de consumir y desechar; hemos per-dido el sentido de administradores y hemos olvidado que la Creación nos fue entregada para cuidarla y cultivarla, lamentamos que aún se sobreponga una falsa concepción de dominio y libertad sobre los bienes del planeta a costa de prácticas depredadoras y abusivas de los recursos naturales que si-mulan un desarrollo humano, pero no hacen más que responder a intereses mezquinos de corrupción y muerte.

El Cambio Climático es un signo que nos da incertidumbre; pone al descubierto lo vulne-rables que podemos ser, nos presenta un pa-norama en el que las emergencias serán cada vez más frecuentes y de mayor intensidad; reconocemos una vez más que la pobreza y desigualdad son la mayor catástrofe para los pueblos; no abonemos más los riesgos, no construyamos los desastres con nuestro descuido y apatía, no los agudicemos con la corrupción e impunidad; si caminamos a favor del bien común y hacemos nuestro el principio universal de los bienes, podremos reducir los riesgos; si somos más solidarios y subsidiarios seremos menos vulnerables a los huracanes, sequías. La inversión que hoy se haga en educación, en la promoción de nuevos estilos de vida y en acciones preven-tivas. Implica costos que son mínimos con los que se hagan para reparar los daños de

los desastres, que son una construcción so-cial y que pueden tener su origen en eventos climáticos. Es necesario actuar ya, ante esta realidad no podemos ni debemos quedarnos con los brazos cruzados creyendo que nada nos va a pasar.

Asistimos a un cambio de época en el que con mayor razón debemos despertar nuestra imaginación; innovar responsablemente en el uso de las energías; diseñar nuevos mode-los de desarrollo en el campo y en la ciudad, pero sobre todo debemos tocar nuestra con-ciencia y dar el paso a reconciliarnos con la creación.

Los sentimientos que ahora habitan en no-sotros son la solidaridad y fraternidad con la Tierra, no tenemos miedo y sí ponemos toda nuestra esperanza en trabajar por nues-tra casa común. Nos unimos a todas aquellas iniciativas personales, comunitarias, de ins-tituciones sociales y de gobierno, que traba-jan por la gestión de riesgo, por iniciativas y políticas a favor de un desarrollo humano integral con relación al medio ambiente, por la mitigación de los efectos, por propuestas de adaptación y cambios de estilos de vida para hacer una relación en justicia, verdad y caridad con los bienes y creaturas de nuestro planeta.

Sitio ofi cial del Encuentro: www.caritas.tv/cambioclimatico


Caballeros de Colón promuevenRosario Mundial Guadalupano

por Bicentenario de México

ACI Prensa

Los Caballeros de Colón anunciaron que en ocasión del Bicentenario de la In-dependencia de México, promoverán la realización de un rosario mundial a la Vir-gen de Guadalupe para el día 8 de septiem-bre de 2010.

Durante la clausura de la 128° conven-ción suprema de la orden realizada en la capital de Estados Unidos, los Caballeros de Colón dieron a conocer que como par-te de las celebraciones del Bicentenario de México y junto a la Arquidiócesis de México y el Instituto de Estudios Guada-lupanos, han organizado un evento lla-mado “el Día Universal de Nuestra Señora de Guadalupe”.

“El propósito de este evento es honrar a Nuestra Señora de Guadalupe como ‘Escu-do y Patrona de Nuestra Libertad y como la Madre de la Civilización del Amor’”.

En este evento, se rezará un especial “Ro-sario al Amor Guadalupano” en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe entre las 8:00 y las 9:00 p.m. del 8 de septiembre.

Una de las resoluciones de la convención suprema de los Caballeros de Colón explica

que el “Rosario del Amor Guadalupano” es una oración especial diseñada para conec-tar los mensajes que la Madre de Dios dio a San Juan Diego con los siete sacramentos de la Iglesia y la Iglesia como sacramento de salvación.

“Este evento debe celebrarse mundialmente, uniendo en oración a todos los miembros de los consejos de los Caballeros de Colón y sus familias, y en todas las diócesis de la Iglesia universal en todo el mundo”.

La intención para ese día en el rosario será: “para que por intercesión de Nues-tra Señora y su hijo llegue la unidad y la paz para que la nueva evangelización genere el fl orecimiento de la Cultura de la Vida en todos los continentes y todos los pueblos”.

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DESDE LAS MISIONES

Cuba: La Virgen de la Caridaddel Cobre en Cuba

Cada año, el día 8 de septiembre, los cu-banos recuerdan y celebran a su patrona, la Virgen de la Caridad, signo de cubanía. Des-de el año pasado la Iglesia cubana inició un triduo de tres años para prepararse a cele-brar los 400 años del hallazgo de la imagen en la Bahía de Nipe, en la provincia de Holguín.

Somos conscientes de que un hijo sin su ma-dre se siente huérfano; siempre acudimos a nuestra madre en cualquier momento de di-fi cultad. Los cristianos sabemos que María es nuestra madre; siempre acudimos a ella, que es la mediadora de todos los fi eles.

El Papa Juan Pablo II, en su Exhortación Apostólica Postsinodal Ecclesia in America, nos dice: “Por medio de María encontramos a Dios” (núm.11). La santísima Virgen “de manera especial, está ligada al nacimiento de la Iglesia en la historia de los pueblos de América, que por su guía llegaron al encuen-tro con el Señor” (núm 11). La presencia de María ayuda a la primera evangelización, pues el Evangelio ha sido anunciado presen-tando a María como su realización más alta.

Desde sus orígenes, y en sus advocaciones de Guadalupe, Aparecida y de la Caridad del Cobre, María constituyó el gran signo de calor maternal y misericordioso, de la esen-cia del Padre y de Cristo, con quienes ella

nos invita a entrar en comunión. A lo largo del tiempo, en los fi eles ha ido creciendo cada vez más la conciencia del papel des-empeñado por la Virgen en la evangeliza-ción del continente. Esa conciencia mariana en el pueblo cubano va despertando cada día más. La fe de los cristianos en Cuba es sostenida por la gran devoción a la Virgen de la Caridad; por eso, al menos cada año se le recuerda con fervor y amor, y es motivo de renovar la fe en el hijo de María, Jesu-cristo, ya que es más fácil llegar a Él por su intercesión.

Que María nos aliente en el caminar de nuestra fe, no sólo a los cubanos, sino a to-dos sus hijos. ¡A Jesús, por María!

Padre Francisco Sanabria Enciso, MG

Virgen de la Caridad del Cobre

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