monición para el décimo séptimo domingo del tiempo ordinario

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Monición para el Décimo Séptimo Domingo del Tiempo Ordinario Monición de entrada: Buenos días hermanos, sean bienvenidos a la casa del Señor en este décimo séptimo domingo del tiempo ordinario. En las lecturas de hoy, la Iglesia nos invita a reflexionar sobre la oración. La Misa es la oración suprema donde como comunidad oramos con Cristo, realmente presente en medio de su pueblo, en la acción de gracias al Padre. De pie, iniciamos nuestra celebración cantando. Primera lectura: Génesis 20-32 La lectura tomada del libro del Génesis nos habla de la bondad y generosidad de Dios para la conciliación; también se destaca la fuerza de la intercesión humana. Escuchemos. Segunda lectura: Colosenses 2, 12-14 Por nuestro bautismo fuimos sepultados y resucitados con Cristo. La cruz de Jesús fue el instrumento que nos salvó de todos los males, también de los pecados. Si estamos identificados con Cristo Jesús, podemos pedir y rezar al Padre en su nombre. Escuchemos.

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Page 1: Monición para el Décimo Séptimo Domingo del Tiempo Ordinario

Monición para el Décimo Séptimo Domingo del Tiempo Ordinario

Monición de entrada:

Buenos días hermanos, sean bienvenidos a la casa del Señor en este décimo séptimo domingo del tiempo ordinario. En las lecturas de hoy, la Iglesia nos invita a reflexionar sobre la oración. La Misa es la oración suprema donde como comunidad oramos con Cristo, realmente presente en medio de su pueblo, en la acción de gracias al Padre. De pie, iniciamos nuestra celebración cantando.

Primera lectura: Génesis 20-32

La lectura tomada del libro del Génesis nos habla de la bondad y generosidad de Dios para la conciliación; también se destaca la fuerza de la intercesión humana. Escuchemos.

Segunda lectura: Colosenses 2, 12-14

Por nuestro bautismo fuimos sepultados y resucitados con Cristo. La cruz de Jesús fue el instrumento que nos salvó de todos los males, también de los pecados. Si estamos identificados con Cristo Jesús, podemos pedir y rezar al Padre en su nombre. Escuchemos.

Santo Evangelio: Lucas 11, 1-13

San Lucas nos da una verdadera catequesis sobre la oración. Cristo, modelo de orante, nos enseñó la mejor oración: el Padrenuestro. Insistió, además, en la necesidad de perseverar en la oración. Se ponen de pie y alabamos al Señor cantando el Aleluya.