CIEN DE CINE

Hace unos años me puse a la tarea de hacer una reseña escrita de cada obra de

teatro, conferencia, exposición de arte a la que asistiera, básicamente respondiendo a la pregunta ¿qué aprendí de esta obra? Y como muchas de las tareas que me propongo, se fue difuminando en algunos papeles arrugados. Pero después llegó la época del internet donde abrí un blog personal

(www.felipechavez.tk) donde escribo y publico observaciones, reflexiones y artículos académicos sobre el acontecer cultural, político y social del país. Y en ese pequeño espacio virtual con mas de quinientos artículos publicados y que permite tener un archivo ordenado por fechas y un diálogo permanente con algunos lectores; se fue armando una lista de reseñas y críticas sobre películas. Entonces me interesé por conocer los rudimentos técnicos del crítico de cine y

descubrí que hay mucho de erudición y engreimiento en el estrecho círculo de los críticos de cine colombianos, pero además confirmé que la crítica de cine como género literario (menor y vilipendiado) ha perdido presencia en los medios de comunicación. Por un lado la crítica de cine ha perdido el nivel profesional en cuanto los usuarios de

internet producen mucha información sobre las películas y por otro lado, los medios de comunicación simplemente reproducen la información comercial de los grandes distribuidores del séptimo arte, entonces la sección de cine de los grandes medios impresos se reduce a cortas reseñas publicitarias y a recomendaciones con estrellas para llevar público a las salas. Así, el género de la crítica de cine tan necesario para comprender el funcionamiento

de esta sociedad mediatizada por la pantalla, está en crisis como lo reconocen los más importantes críticos de cine latinoamericanos en la edición 93 de la revista Kinetoscopio. Hace unos meses vi la película La sangre y la lluvia del director colombiano Jorge

Navas y me sorprendió la calidad del relato en una noche lluviosa en Bogotá, es una obra densa pero compacta, que desarrolla los conflictos de los dos personajes centrales y logra construir una atmósfera de la Bogotá nocturna con su violencia e inseguridad. Pero lo que mas me llamó la atención fue la locación casi permanente en la localidad

de Los Mártires, especialmente en la zona de tolerancia de la Caracas con Av. 19 y los barrios Santa Fé y Samper Mendoza como sinónimos de la desesperanza de los personajes. Recordé que lugares como “La piscina” se han convertido en locación casi obligada

para un prostíbulo de cualquier película colombiana, pero en La sangre y la lluvia

mas allá de ese lugar, las calles permanentemente mojadas de la localidad 14 le daban el marco simbólico a la tristeza y la decadencia de la película. Obviamente los productores y directores del cine colombiano no están inmersos

en las retóricas de la participación comunitaria de los “artistas” de que trabajamos sumando acciones en el Sistema Distrital de Cultura y Patrimonio, esos artista (tal vez del mainsteam) no tienen esos “arraigos locales” que tanto esgrimimos los artista locales para defender nuestro trabajo “de base”; pero viendo la película sentí una conexión simbólica y estética con los productores de La sangre y la lluvia. Resulta que hace unos años yo ejercía como coordinador del Festival arte en los

Mártires con presupuesto de la Alcaldía Local y el alcalde del momento nos solicitó apoyar un evento que se realizaría en la zona de tolerancia. Era el día de la mujer y el equipo de la alcaldía quiso llevar una serenata y una brigada de salud al sector. Entonces ahí estaba yo con un mariachi de quince músicos montados en un camión

cama baja, con un equipo de sonido dándole serenata ambulante a las dos de la tarde a las trabajadoras de la zona de tolerancia. Por razones de seguridad de esa experiencia no queda ni una foto ni un video, pero

sí me queda el recuerdo del extraño performance de la serenata en camión en la zona de tolerancia más representativa de la ciudad. Entonces, decía que viendo la película La sangre y la lluvia recordé esta anécdota y

sentí una conexión simbólica con los artistas que la rodaron en esas mismas calles, seguramente esforzándose mucho para lograrla. ¿Por qué un director, un productor, un director de arte, un director de fotografía

deciden tomar las calles de la Localidad 14 como locación para representar el desarraigo, la desesperanza, la violencia de la ciudad?. Supongo que es porque esas calles representan esas y otras situaciones de Bogotá. Entonces la localidad de los Mártires tiene por sí misma una gran carga simbólica que muchos artistas, desde diferentes ángulos deciden resignificar en sus obras. Entre tanto yo he seguido anotando observaciones sobre las películas que veo,

siempre preguntándome ¿qué puedo aprender de esa narración?, ¿cómo se construye un relato audiovisual?, ¿cuáles elementos técnicos se usan en la película?, ¿Es coherente el uso de recursos narrativos con el argumento y los personajes propuestos?. Y así cada crítica, más que un documento para pontificar sobre lo bueno y lo malo de una producción, es un momento de aprendizaje para quien lo leo y para mí mismo. Entonces si armara un paquete de treinta críticas, tendía un Mes de cine, como

invitación al lector para que disfrute las películas y tenga un punto de vista de referencia, no para estar de acuerdo conmigo sino para formar su propia lectura crítica.

Con todo esto y dada la característica tan amplia de la convocatoria Localidades

Culturalmente Activas, considero que puede ser un buen ejercicio de creación literaria escribir, corregir, diseñar y publicar un libro con treinta reseñas de películas de cine y compartirlas con los estudiantes de la localidad como el público mas amplio del lenguaje audiovisual, obviamente mediante cine conversatorios donde se motive a los estudiantes a analizar críticamente los discursos audiovisuales y proponer nuevas lecturas de las películas y contenidos audiovisuales que ven casi a diario. Las ideas que sustentan el proceso creativo son: a) La crítica de cine como expresión literaria: la crítica exige un manejo técnico

del lenguaje literario y un manejo técnico e histórico del lenguaje del cine, así como conocimiento de semiótica y teoría del arte, que se proyectan en textos breves que sirven para acompañar al espectador a “leer” una obra cinematográfica. Es importante anotar que la crítica no es un compendio de adjetivos o sentencias

sobre una creación; sino un análisis racional y argumentado sobre los aspectos formales de una obra, dejando espacio para el análisis personal del espectador-crítico. b) El derecho a la crítica como espectador: el oficio de la crítica tiene muchos

detractores. Hay quienes opinan que la crítica debe ser ejercida “por un artista de mejor calidad que el criticado” como si la crítica fuese un ejercicio de poder. Otros opinan que la crítica es un oficio del fracasado que proyecto en sus textos su

propia incapacidad, como si la crítica fuera un enjuiciamiento. Pero otros pensamos que la crítica es también un derecho del espectador, así como el autor de la obra cinematográfica tiene el derecho a crearla, producirla y contarla, yo como espectador de la obra tengo derecho a referirme a ella, a ver qué aprendí, a desmenusarla en sus detalles, a anotar sus imágenes y frases memorables como una estrategia de construir memoria colectiva sobre la creación artística y audiovisual. c) La crítica como ejercicio pedagógico: reivindico la crítica como ejercicio

pedagógico, como un diálogo entre el creador y el observador, si el artista habla con su obra, el espectador no puede quedarse solamente en el aplauso, puede pasar a la argumentación. Además, en una sociedad tan determinada por la pantalla y por lo medios

audiovisuales, es importante formar lectores críticos de las imágenes en movimiento. Un espectador crítico ayuda a formar criterio colectivo. En una sociedad donde la pantalla educa a los niños, se debería trabajar más en formas a los niños y jóvenes sobre la pantalla, sobre cómo se arman las narrativas de la televisión, el video y el cine, para que la nueva generación sea más crítica frente a los discursos de poder que se esconden tras las pantallas.

d) La creación literaria como ejercicio del pensamiento libre y creativo: la idea fundamental que fundamente el proyecto Mes de cine es el ejercicio de la libertad del pensamiento mediante la creación literaria. Pocas veces se tienen los recursos para “sentarse a escribir con disciplina”, siempre hay una excusa para no escribir: el trabajo, el estudio, la falta de tiempo, la falta de dinero. Pero la profesionalización en la literatura exige una dedicación de tiempo de calidad

al oficio de la creación, a la lectura y a la corrección. En este sentido se busca tener los recursos para poder terminar una obra inconclusa: 30 reseñas de cine y un prolegómeno de interpretación del lenguaje audiovisual, además se busca tener los recursos para imprimir el documento y ponerlo a cirular entre el público local y después entre el público nacional. e) Una propuesta literaria y gráfica alternativa: Generalmente los concursos

de literatura distritales y locales suelen ser sobre los géneros tradicionales de novela, cuento, poesía y algunas veces de ensayo e investigaciones, en ese contexto considero un riesgo artístico proponer un género como la crítica de cine para un estímulo local. Como se ha manifestado, el género de la crítica de cine ha perdido especio en los medios impresos en contravía a la proliferación de producción audiovisual en el mundo y en Colombia específicamente a partir de la ley del cine. Mes de cine es una alternativa para le reflexión sobre el cine, las obras audiovisuales

de los creadores colombianos y en general algunas películas que han estado en cartelera los últimos res años. No se trata de un estudio histórico de los clásicos del cine, ni un estudio semiológico del cine colombiano, es un compendio de treinta críticas sobre películas recientes, colombianas, norteamericanas, europeas, latinoamericanas que cualquier ciudadano ha podido ver en las salas en los últimos años. En ese sentido, es un referente de la historia audiovisual reciente sin enfrascarse

en el manido debate de “cine arte Vs. Cine comercial” pues se hablará simplemente del cine, de las películas que hemos visto en Colombia de géneros tan disímiles como comedias, tragedias, experimentos latinoamericanos o animaciones digitales. Realmente el centro de la críticas que se publicarán es el componente narrativo intentado responde a la pregunta que sirvió de título para uno de los libros del taller de guion de la escuela de San Antonio de los baños dirigidos por Gabriel García Márquez: ¿Cómo se cuenta un cuento?. Las treinta reseñas conceptualmente forman un mes de cine y así la propuesta

grafica del libro se basa en la idea del mes, como si el lector se sentara a ver una película diaria durante un mes ¿Cómo cambiaría su vida?. El diseño gráfico incluye: las reseñas, el afiche promocional de la película, la ficha técnica y un par de enlaces a páginas web oficiales. Al final del libro habrá un índice temático por autor, género y país que facilite la consulta. Con todos estos elementos Mes de cine es un ejercicio de creación literaria desde la

crítica de cine que se proyecta como un ejercicio pedagógico para los estudiantes de la localidad, para los lectores ocasionales del libro y obviamente, para el autor.

“Al no especializarme en nada y al no tener profesión, seré siempre un diletante”. Héctor Abad Faciolince"El cine es metafísica, podría haber dicho Besson. El cine es una interminable historia de

amor, dijo Truffaut. Y así, encima de la mesa de las tres patas -cine, poesía, amor- se juega, se aprovecha el plano (primera vez que entiendo la palabra plano), lo que se sostiene sobre esos tres puntos. Ya enviciado, como con la religión, empiezo a entender el cine como una cosmogonía que todo lo ofrece: las hojas de los árboles, las llantas de los carros, las balas de los vaqueros y las lágrimas de las damas. Así se puede contar la vida..." MAYOLO, Carlos, ¿Mamá qué hago?. Bogotá: Oveja Negra, 2002 pag. 146 “No es necesario que conozca el lenguaje y la teoría del cine para apreciar debidamente una

película. Recuerde que el cine, esencialmente, es sobre la vida. Aún las historias fantásticas son protagonizadas por personas y lo que les pasa genera sentimientos y posiciones éticas en ellas.” Oswaldo Osorio “La crítica es para mí un intento de desarmar, por medio de la razón (no importa cuán disparatada

sea), la magia que supone la proyección. Ante la oscuridad de la sala el espectador se halla tan indefenso como en la silla del dentista….Siempre de la crítica me ha gustado lo insólito, lo audaz, lo irreverente, lo maleducado. Para esto sería bueno encontrar un método que universalice lo personal. Cada gusto es una aberración”ANDRÉS CAICEDO “Definir la crítica de cine es tan azaroso como tratar de definir la felicidad, porque solo pueden ser

precisadas por carencia o reducción al absurdo y en todos los casos según la perspectiva particular de quien defina, pero vamos a pretender lo inalcanzable para seguir manteniendo la ilusión del orden y la metáfora del movimiento”JORGE NIETOAdemás, juro que como director me abstendré de todo gusto personal! Ya no soy un artista. Juro

que me abstendré de crear una obra, porque considero que el instante es mucho más importante que la totalidad. Mi fin supremo será hacer que la verdad salga de mis personajes y del cuadro de la acción. Juro hacer esto por todos los medios posibles y al precio del buen gusto y de todo tipo de consideraciones estéticas.Así pronuncio mi voto de castidad.Copenhague, Lunes 13 de marzo de 1995.En nombre de Dogme 95,Lars von Trier - Thomas Vinterber Encargado de la puesta en escena o director. No se trata de dirigir a alguien, sino de dirigirse uno

mismo (Robert Bresson)Dos clases de películas: las que emplean los recursos del teatro (actores, puesta en escena, etc)

y se valen de la cámara para reproducir, las que emplean medios del cinematógrafo y se valen de la cámara para crear. (Robert Bresson) Nada mas falso en una película que ese tono natural del teatro que remeda la vida y calca

sentimientos estudiados. (Robert Bresson)

LOS CRÍTICOSLos críticos suelen tener una jerarquía, en la base está el cine lumpen, el cine masivo,

el cine para la gente que anda en bus oyendo candela estério, se refieren a él como cine crispetero o comercial. Desde su arribismo intelectual califican a este tipo de cine como la basura del entretenimiento de la gran industria cultural norteamericana. Este prejuicio llega al extremo de decir que cualquier película con éxito comercial se convierte en una mala película.En el medio hay un cajón con películas mal hechas, casi todad. Ahí ponene a las películas

con un gran argumento y un mal montaje. A películas con una buena fotografía y una mala actuación. A películas con escelntes actores y un deficiente director. Ese es el cajón de la película inconclusa. Ahí el cine aparece como una latencia, como una imposibilidad. Nunca encuentran una película compacta, completa, redonda, siempre le falta el centavo pal peso. Frente a ellas el crítico escribe que le falto tal decisión o que se equivocó en tal ángulo,

llo que demuestra que en ese cajón no están las películas hechas sino las que los críticos consideran que se pudo haber hecho, entonces es el cajón de las películas imaginarias.Y en el pequeño cajón de arriba ponen al cine de arte, al cine culto, al cine de autor, al

cine-cine. Al describirlo configuran al cine como una iglesia de fe con iniciados, sacerdotes e iluminados. Para nombrar a un autor deben saber de memoria todas sus películas, y para nombrar a un director deben hacer un recuento de sus filmes desde la universidad hasta ahora para develar el verdadero significado de la película que nos relatan.Pero no solo los críticos han armado este imaginario, los mismos cineastas se escudan en

esta idea para esconder su incapacidad de crear empatía con el público a quienes acusan de ignorantes por no entender lo refinado o complejo de su obra.Generalmente estos críticos, que cada día tienen menos espacio en lso emdios de

comunicación, ESCRIBIR SOBRE CINE No me puedo definir como un cinéfilo, no tengo la memoria de los comentaristas de fútbol

que para nombrar a alguien deben recitar toda su filmografía. Tampoco soy crítico de cine, no tengo la formación para ejercer ese oficio. No soy juez para

determinar lo bueno, lo malo, lo correcto o incorrecto. Si tuviera que definirme para poder presentar este libro, diría que son un espectador de cine. Alguien que vá a cine un par de veces por mes, alguien que aluila películas e incluso las compra en refinadas copias piratas con carátula a color.Como parte del público anónimo entiendo el arte como un proceso de comunicación. El

director y los realizadores me cuentan una historia y yo tomo notas con varias intensiones. En primer lugar dejar registro de lo que veo, en segundo lugar, seguirle la pista a los creadores audiovisuales, dejar migajas de pan para después devolveme en en camino a revisar la trayectoria de un actor, de un director de un diseñador. Y en tercer lugar y fundamentalmente, escribo sobre lo que veo para aprende cómo se cuenta una historia. Hago una disección de la película, separo el argumento, intento adivinar los recovecos del guión, obsrvo detenidamente los elementos técnicos de la narración y la fotografía. A veces hago valoraciones éticas sobre los personajes y las historias y el final emito un diagnostico sobre la coherencia de esos elementos en el todo de la historia, pero así como el estudiante hace la disección a un sapo inocente, yo hago la diesección para aprender cómo se cuenta una historia. Me interesa el oficio del narrador, en el teatro, en la literatura o en el audiovisal. Creo que

las historias nos siguen convocando para hacer comunidad. Hace siglos nos reuníamos en torno a la fogata para que un viejeo nos contaras la historia del origen del mundo, pero ahora

nos reunimos alrededor de la luz de la pantalla para ver historias que nos muestren otros lados del mundo, otras formas de vivir o la nuestra propia. Hay gente que colecciona estampillas, yo empecé una colección de reseñas de cine y las

releo y las acomodo como quitándole el polvo al archivo de mi colección y en ese sentido este libro es como llegar a la casa de un coleccionista de miniatruas para escucharle la ehistoria de cómo consiguió cada pieza, o como la visita a casa del que llegó de vacicones y nos muestra una a una las dos mil quinientas fotos explicándonos cada anécdota del viaje. QUE ES EL CINE Para algunos el cine es una industria que mueve miloones de dólares al año. Una fábrica

de imágenes para vender camisetas, juegos, crispetas, es decir la gran industria del entretenimiento. Algunos le llaman a eso “la industria”. Para otros el cine es un lenguaje del arte, de un poco mas de un siglo de nacido, es un arte

joven que se consolidó en el siglo XX como un arte popular que mueve imaginarios y dinero.Para otros el arte es un lenguaje artístico muy íntimo para expresar el mundo interior de un

autor. Es también un arte hobie costoso y por eso algunos lo consideran un lujo para un país como

el nuestro. LITERATURA VS CINE CRÍTICO VS. ESPECTADOR CINE DE ARTE VS CINE COMERCIAL PELICULA BUENA VS. PELÍCULA MALA CINE COLOMBIANO VS CINE HECHO EN COLOMBIANo hay industria, hay gente que hace cine CINE VS VIDEOEs increíble auq aún queden nostálgicos del cine que añoren la época de los trucos de

cámara y la necesidad de contratar mil extras para una escena y que consideren a los magos del mause como un atentado al cine verdadero. El cine es producto de la tecnología y ésta ha evlucionado vertiginósamente en menos de un

siglo y el cien ha evolucionado con ella. Igual que en la fotografía, el formato digital es una evolucioçón necesariao, abaratadora y democratizadora de la fotografía, así mismo el cine potr medio de lo digital es vuelve mas accequible para quien desee contar una historia.CINE VS TV CRITICA ESPECIALIZADA VS PUBLICO