MIÉRCOLES 18 DE MARZO DE 2020juventud rebelde 03NACIONAL

por LETICIA MARTÍNEZ HERNÁNDEZ digital@juventudrebelde.cu

EL Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, convocó a trabajar con serenidad y seguridad en el enfrentamiento a la COVID-19, del que ya se han confi rmado siete casos en la Isla, según se dio a cono-cer en la reunión gubernamental que dio seguimiento este martes al Plan para la Prevención y Control del nuevo coronavirus.

El mandatario insistió en que la se-guridad de Cuba se basa «en la expe-riencia que tenemos, en el potencial institucional y en que hemos enfren-tado presiones como estas en otras ocasiones».

Hay que tener serenidad y confi an-za, todo el mundo tiene que apoyar y aportar. Hay que seguir llamando a la disciplina y a cortar todos los rumo-res malintencionados, afi rmó el Jefe de Estado, quien aseguró además que

las decisiones se irán aplicando de manera gradual, en la misma medida en que se va apreciando la situación epidemiológica.

Según detalló el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, los dos nuevos casos confi rmados de la COVID-19 son cubanos: uno resi-dente en el municipio de Camagüey y trabajador de un crucero; y el otro de Guanabacoa, cuya hija regresó recien-temente de Milán, Italia. Ambos se encuentran estables, con una evolu-ción satisfactoria y la hija del paciente de la capital está en estos momentos bajo estudio.

De los siete diagnosticados con la enfermedad, seis presentan una evolución clínica estable y continúan asintomáticos. Sus contactos perma-necen en vigilancia activa. Precisó el titular de Salud Pública que el turista italiano, de 61 años y con anteceden-tes de asma bronquial, hasta la no-che de este martes seguía en estado

crítico, con peligro para la vida. Espe-cialistas de terapia intensiva del Insti-tuto de Medicina Tropical Pedro Kourí mantienen un seguimiento constante al paciente.

Al actualizar la situación nacional, Portal Miranda informó que están ingresados para vigilancia epidemio-lógica 389 pacientes, de ellos 147 extranjeros y 242 cubanos. Además, se encuentran bajo chequeo por la atención primaria de salud 24 853 personas en todo el país.

El Ministro explicó que la propaga-ción del nuevo coronavirus se com-plejiza en la región de las Américas, con 27 países y seis territorios de ultramar afectados, que representan el 77% de su área total. Los mayores números se concentran en Estados Unidos con más de 4 600 casos, Ca-nadá con 442, y Brasil con 234.

En la reunión se conoció sobre la de-cisión de suspender, posponer o rea-lizar en composición reducida actos,

Díaz-Canel: Hay que trabajar con serenidad y seguridad frente a la COVID-19

Al encabezar la reunión que da seguimiento al Plan para la Prevención y Control de la COVID-19, el mandatario convocó a la disciplina y al aporte de todos en el enfrentamiento al nuevo coronavirus,

del que ya se han confi rmado siete casos en la Isla

eventos y conmemoraciones históri-cas, tanto a nivel nacional como terri-torial. Entre los encuentros aplazados se mencionó particularmente el XI Con-greso de la Unión de Jóvenes Comunis-tas, que se celebraría en abril.

Díaz-Canel reiteró la prohibición de hacer eventos culturales y deporti-vos que supongan aglomeración de personas, así como limitar las reu-niones de grandes auditorios. Esta batalla la ganamos, dijo, evitando la propagación y cortando cadenas. De ahí que insistiera el mandatario en intensifi car al máximo la pesquisa de casos con síntomas respiratorios en centros de trabajo y de estudio de toda la Isla.

El país evalúa otras medidas para fortalecer el enfrentamiento a la COVID-19, que ya se reporta en 144 países, con 180 159 casos confi rma-dos y 7 103 fallecidos, para una le-talidad de 3,94%, según datos de la Organización Mundial de la Salud.

por MONICA LEZCANO LAVANDERAmonica@juventudrebelde.cu

«CUBA, con respecto a otros países, cuenta con la ventaja de tener un sistema de atención primaria de salud donde hay un médico y una enfermera de la familia que se responsabiliza con la atención de los adultos mayores», refi rió este martes Alberto Fernández Seco, jefe del Departamento de Aten-ción al Adulto Mayor, Asistencia Social y Salud Men-tal del Ministerio de Salud Pública.

En conferencia de prensa, explicó las medi-das que ha tomado el país para asegurar la pre-vención de la COVID-19 en los adultos mayores, teniendo en cuenta que la capacidad inmunoló-gica disminuye y el número de comorbilidades asociadas con esta población, como la hiper-tensión, la diabetes o trastornos respiratorios, entre otros.

En ello también se tiene en cuenta que Cuba es una nación con más del 20 por ciento de la pobla-ción envejecida, aseguró el directivo, quien añadió que «actualmente nos encontramos en una etapa de pesquisa activa, fundamentalmente de aquellos que viven solos, que representan el 15 por ciento de los adultos mayores.

«En cuanto a las 293 casas de abuelos que existen en el país, tenemos trabajadoras sociales capacitadas con los temas relacionados con la en-fermedad, y son las que todos los días reciben a los trabajadores y adultos mayores para detectar cualquier tipo de sintomatología respiratoria», co-mentó Fernández Seco.

En los casos de los círculos de abuelos se toman también medidas como la realización de ejercicios a dos metros de distancia y la ac-tualización sobre la enfermedad y sus formas de contagio, por lo que no ha sido necesario suspender ninguna de sus actividades. «Tene-mos 155 hogares de ancianos que poseen un médico y una enfermera de la familia, lo que representa una ventaja en la atención», indicó el funcionario.

Diariamente se examina al personal que labora en estos centros, y en caso de presentar alguna sintomatología no ingresa al hogar. De igual ma-nera, se chequean a los ancianos seminternos, de forma tal que el virus se mantenga lo más alejado posible de este tipo de institución.

«Otra manera de prevenir es disminuyendo el número de visitas a los ancianos, siempre que esto no implique una ruptura en la comunicación con sus familiares. Asimismo sucede con los fa-miliares que hayan estado fuera del territorio na-cional en los últimos 14 días; para estos casos

el director de la institución garantiza que la visi-ta se realice en una sala de estar donde pueda existir la distancia necesaria entre los familiares y el anciano», recalcó Fernández Seco.

En sentido general, se garantiza la seguridad de la atención médica a nuestros adultos mayo-res tanto por los consultorios como en las insti-tuciones sociales. «Esta es una de las particu-laridades de nuestro país, que dedica especial atención a los más ancianos, situación que no sucede de la misma manera en otros países», precisó.

Una atención de calidad a los adultos mayores

Cuba es un país con más del 20 por ciento de su población envejecida, grupo de mayor riesgo ante la COVID-19. Foto: Tomada de Radio Rebelde

MIÉRCOLES 18 DE MARZO DE 2020 juventud rebelde04 NACIONAL

Que cada uno vele por su salud

por ANA MARÍA DOMÍNGUEZ CRUZanamaria@juventudrebelde.cu

DE la COVID-19 nada se sabía hasta que en diciembre de 2019 comenzaron a diagnos-ticarse en China los primeros casos. Estadísticas reveladas durante la Mesa Redonda de este martes dejan ver que más de 180 000 casos de esta enfermedad han sido confi rmados en 144 países y han fallecido más de 7 000 personas. En la nación asiá-tica, donde se logró contener con medidas restrictivas, se registró la mayor cantidad de casos y se tuvo una letalidad de cuatro muertes por cada cien enfermos.

Con esta información ele-mental y necesaria, el doc-tor Francisco Durán García, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), comenzó su inter-vención en el programa tele-visivo, en la que ratifi có que Cuba adoptó medidas de prevención y control de la epidemia desde enero, con-cebidas en el Plan nacional que, como debe ser, requiere de la intersectorialidad para su éxito.

Comentó que el Plan se ha ido ampliando en la medida en que la situación mundial ha cambiado y los aspectos científi cos exigen su actuali-zación. «Cuba tiene la ventaja de no poseer fronteras terres-tres, por lo que aún hoy no te-nemos transmisión del virus en el país, y justamente con un buen control en frontera se minimiza el riesgo».

NO HAY TRANSMISIÓNEl Director de Epidemiolo-

gía del Minsap aseguró que no tenemos transmisión por-que este término se emplea cuando encontramos perso-nas diagnosticadas, con o sin síntomas, sin haber tenido relación con alguien del ex-terior. «Los siete casos con-fi rmados de la COVID-19 en la nación, hasta el momento, son personas que han viaja-do desde países con transmi-sión o que han tenido contac-to estrecho con alguien que ha venido del exterior».

Insistió en que, aunque algunos viajeros arriben al país sin presentar síntomas, el dominio de la información relacionada con su estancia es fundamental para darles seguimiento y mantener la vigilancia. «Algunas personas creen que no fueron contro-ladas en el aeropuerto, pero no es así.

«Los pasajeros no ven el control que realiza el escáner

de temperatura, por ejem-plo, y es primordial que co-laboren con el personal de sanidad que trabaja en las terminales aeroportuarias», subrayó Durán García, antes de precisar que hasta aho-ra se han ingresado en el IPK cerca de 500 personas para la vigilancia estrecha, y se mantienen casi 25 000 en las áreas de salud, aten-didos por el personal de la atención primaria.

«El país está atento. Mu-chos se cuestionan por qué Cuba no se declara en cua-rentena, cuando esa es una decisión soberana que toma cada nación en dependencia de la complejidad del esce-nario que viva, y no según se exprese la situación a nivel internacional.

«En Cuba se han adoptado las medidas pertinentes en la temporada actual, como la suspensión de actividades pú-blicas. Ni el número de casos ni la nula transmisión justifi -can declarar el país en cuaren-tena, sabiendo de antemano que ello genera una situación de estrés que incide en la ca-pacidad del sistema inmuno-lógico y, por consiguiente, el riesgo crece», señaló.

CONOCIENDO LOS CORONAVIRUSMaría Guadalupe Guzmán

Tirado, jefa del Centro de In-vestigación, Diagnóstico y Re-ferencia del IPK, reveló que entre tres y cinco millones de muertes al año en el mundo tienen su causa en las infec-ciones respiratorias agudas, y Cuba no escapa de un análi-sis similar, teniendo en cuen-ta que inciden signifi cativa-mente en la mortalidad.

Precisó que las infeccio-nes respiratorias agudas son causa de hospitalización, de ausentismo laboral y escolar, así como de uso incorrecto de

antibióticos porque la mayoría son virales y no bacterianas.

La gama de síntomas es amplia, algunas afectan el tracto superior, como el co-nocido resfriado, y otras afec-tan el tracto inferior, como la neumonía y la bronquioli-tis en los niños pequeños, agregó la especialista, quien acotó que diferentes virus pueden producir la misma sintomatología, tales como la infl uenza A (fue pandémi-ca), la B, otros virus emergen-tes, y los coronavirus, cuya familia es amplia.

Guzmán Tirado explicó que los coronavirus, identifi cados en la década de los 30 del siglo XX, se manifestaban en aves, murciélagos, cone-jos, caballos, ratones y cer-dos, produciendo cuadros de diarrea, respiratorios y neu-rológicos, en el caso de los ratones. En los años 60 se re-conocen los coronavirus que afectan al hombre, entre ellos cuatro zoonóticos presentes en Cuba.

«Es necesario destacar que aunque ahora desarrollamos una vigilancia más proactiva por la situación de emergen-cia mundial, la Mayor de las Antillas mantiene vigilancia sobre infecciones respirato-rias virales y bacterianas du-rante todo el año. Por ello, hemos detectado los corona-virus endémicos que produ-cen cuadros de resfriados.

«Los coronavirus son virus grandes, envueltos… por ello se insiste en el lavado correc-to de las manos y en el uso de elementos de apoyo como el cloro, el alcohol y el gel bac-tericida. El cuidado personal es primordial para evitar la propagación», puntualizó.

La especialista del IPK se-ñaló que a partir del exudado nasofaríngeo se diagnosti-ca la COVID-19 mediante el

El doctor Francisco Durán García, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, aseguró que en el país no existe transmisión hoy, pues este término se emplea cuando se encuentran personas

diagnosticadas, con o sin síntomas, sin haber tenido relación con alguien del exterior

uso de técnicas moleculares avanzadas, empleadas in-cluso para el diagnóstico de otras enfermedades, y que no son baratas, porque una prueba puede costar entre 40 y 50 dólares en otros países.

«Esta tecnología no solo está presente en el IPK, sino también en el Centro Provin-cial de La Habana, en Villa Cla-ra y en Santiago de Cuba. Para el diagnóstico de la COVID-19 también se introdujo el equipa-miento dada la situación inter-nacional, el personal está ca-pacitado y disponemos de los reactivos para ello», destacó la doctora, quien reconoció el es-fuerzo de nuestro Estado por desarrollar la microbiología en el país.

EL IPK ES REFERENCIAGuzmán Tirado precisó que

el IPK tiene tres funciones vi-tales: la investigación en en-fermedades infecciosas, la capacitación o docencia y la de ofrecer servicios altamente especializados, dígase aten-ción a pacientes, la vigilancia, la referencia, el seguimiento a los estudios.

«Es uno de los centros nacio-nales que asume a los pacien-tes sospechosos y confi rmados de la COVID-19, respetando los protocolos establecidos según recomendaciones de la Organi-zación Mundial de la Salud, las experiencias de China y nacio-nales, pues en el país tenemos experiencia en el manejo de cuadros respiratorios graves.

«Se han capacitado esta semana entre 1 700 y 1 800 personas del Sistema Na-cional de Salud, con lo que apoyamos el Plan del país para el enfrentamiento a esta emergencia. No solo se ha capacitado al personal de salud, sino también de otros sectores.

«Mantenemos intercambio

con científi cos de otros países y con organizaciones interna-cionales, así como una cons-tante investigación, porque esta es una enfermedad nueva en el mundo y reque-rimos ampliar nuestros co-nocimientos. Agradecemos además el apoyo de orga-nismos internacionales en la obtención reactivos, el fortalecimiento de capaci-dades, el entrenamiento de especialistas, entre otras acciones» resaltó.

QUE LA PESQUISA SEA ACTIVAEl doctor Pablo Feal Cañi-

zares, director de la Unidad de Promoción de Salud y Pre-vención de Enfermedades, in-sistió en que en los policlíni-cos, sede fundamental de la atención primaria de salud, se ha organizado el servicio para que la atención sea di-ferente y más esmerada, y se trabaja para que el médico y la enfermera de la familia identifi quen los grupos vulne-rables y realicen la pesquisa activa en busca de síntomas respiratorios en la población para el control de focos.

Instó a la confi anza y se-guridad de la población en la preparación del país para el enfrentamiento de esta epi-demia, pero enfatizó en la necesidad de que cada uno vele por su salud y por el cumplimiento de las medidas higiénicas. «Lo importante es que cada cual reconozca el riesgo, actúe en consecuen-cia con ello y acuda al médi-co si presenta síntomas de infecciones respiratorias».

Por su parte, el doctor Jorge Delgado Bustillo, director de la Unidad Central de Colabo-ración Médica, informó que 28 760 cubanos cumplen mi-sión solidaria en 59 países, y en más de 30 de ellos (en los que existen 5 900 colabo-radores) refi eren casos de la COVID-19.

Aseguró que todos los pro-fesionales de la salud que se encuentran en el exterior están capacitados con la in-formación necesaria, saben cómo deben protegerse y que cada brigada se mantiene en permanente intercambio con nuestro país.

Delgado Bustillo añadió que se reciben solicitudes de colaboración desde diferen-tes países porque la experien-cia cubana de la solidaridad, esa fuerza única de nuestros profesionales de la salud, la necesitan en otras tierras, por lo que más de 400 profesio-nales del sector se entrenan para el trabajo de enfrenta-miento a esta enfermedad.

Es necesario seguir extremando las medidas de control en frontera. Foto: Roberto Suárez

juventud rebelde NACIONALMIÉRCOLES 18 DE MARZO DE 2020 05

por ANA MARÍA DOMÍNGUEZ CRUZanamaria@juventudrebelde.cu

CUBA se prepara para enfrentar la propagación del nuevo coronavirus, afi rman los diferentes reportes en los medios de comunicación del país tras ofrecerse conferencias de prensa, reuniones de análisis y declaraciones exclusivas de expertos en el tema, personal de la salud y directivos de entidades asociadas a las diferentes acciones del Plan para la Prevención y Control de la COVID-19 aprobado por el Gobierno.

Pero cabe preguntarse, ¿quiénes con-formamos Cuba? Es decir, ¿quiénes son los que se preparan para enfrentar la propagación de esta enfermedad que se ha diseminado por 116 países, afec-tando a más de 52 000 personas?

Evidentemente la máxima direc-ción del país lidera la capacitación y el cumplimiento del Plan, y los directi-vos en los diferentes niveles también asumen su supervisión. La industria nacional se encarga de la produc-ción de los medicamentos que se requieren para el tratamiento de los contagiados y del hipoclorito que, se-gún recomendaciones internacionales, puede emplearse en la desinfección de manos y superfi cies. Además, el personal de salud en los distintos ni-veles de atención se protege y se pre-para para actuar según los protocolos establecidos por la Organización Mun-dial de la Salud.

Pero, ¿hasta ahí llega Cuba? No, no puede ser. Es imposible pensar que la responsabilidad de enfrentar una pan-demia como esta esté sobre los hom-bros de unos pocos que, aunque ocu-pan roles estratégicos, no son magos. Cuba son ellos, claro, los decisores en sus respectivos ámbitos de acción, y de la voluntad gubernamental mucho de-pende la organización nacional y la po-lítica a seguir para evitar el caos y, por supuesto, un panorama similar al que se ha desarrollado en otros países.

Pero Cuba es también el maes-tro que en su aula les explica a sus alumnos la importancia de extremar

las medidas higiénicas para contro-lar la expansión de este virus, y es la directora o director del centro de enseñanza que, además de ser par-te del proceso de capacitación, le da seguimiento a lo que cada uno de los profesores debe hacer.

Cuba es el trabajador, jefe o no, que en su centro laboral les comenta a otros sobre las medidas para preservar la higiene del puesto de trabajo y se em-peña en hacerlas comprender para que el colectivo se preocupe por cada uno.

Si decimos Cuba, es el periodista que escribe (como yo) para que otros (como usted) estén enterados de

todo lo que concierne a la propaga-ción de la enfermedad y sepa la me-jor manera de actuar. Y es, además, su familia, su vecino, su comunidad toda… que debe velar por la sensa-tez individual en bienestar del resto.

Cuba se prepara… sí, se preparan médicos y enfermeros para transmitir el conocimiento en su área de salud, y para atender a los enfermos en las instituciones especializadas…, se pre-paran los padres del recién nacido que, siguiendo lo elemental, mantienen es-tricta higiene en el entorno de su bebé y limitan los besos, las caricias y las muestras de «afecto pegado» de todo el que llega de la calle a hacer la visita de cortesía.

Cuba es el chofer del taxi, la gua-gua y el rutero que buscó un naso-buco porque considera que es mejor precaver con antelación, y se protege en su entorno inmediato, expuesto a la aglomeración de personas… Y es el dependiente gastronómico que también lo usa mientras sirve la comi-da y la bebida, la locutora que trabaja en una cabina radial y el extranjero que llegó al país, asintomático, pero proveniente de uno con transmisión.

No se puede enfrentar un peligro si no se está preparado, y si no se asu-me que una de las garantías del éxito está en halar parejo. De nada servirían las reuniones, los planes de acción, los spots radiales y televisivos, las no-tas de prensa, las sugerencias en las redes sociales. Cuba somos todos.

Cuba somos todos

por JULIO CÉSAR HERNÁNDEZ PERERAdigital@juventudrebelde.cu

SACUDIDOS por la amenaza de adquirir el SARS-CoV-2, hemos conversado mucho por estos días acerca de la imprescindible prevención. Y una de las acciones higiénicas más comentadas, junto con la necesaria desinfección de superfi cies y el cuida-do de no llevarse las manos a la cara, ha sido el escrupuloso lavado de manos.

Apenas se debate, sin embargo, sobre otra vía de contaminación que puede ser mucho más peligro-sa de lo que pudiera imaginarse: los teléfonos celulares. Estos dispositivos se han convertido en algo inseparable de nuestras vidas; y es así como en tiempo de epidemias y pandemias, las pantallas táctiles de los llamados teléfonos inteligentes son parte de un ciclo cerrado donde pueden ser contami-nadas con los dedos infectados, y viceversa.

Meditemos por un segundo acerca de cuántas veces en el día nos lavamos las manos, y compare-mos esa cifra con las ocasiones en que tocamos el celular, lo sacamos de los bolsillos, consultamos sus programas, nos conectamos por internet o nos lo ponemos al oído o en la cara para conversar. Re-paremos, además, en las veces en que ofrecemos ese objeto a un amigo, un familiar, o un hijo.

Una investigación perfi lada recientemente por el periódico estadounidense USA Today, aunque realiza-da en otro país, nos demuestra la envergadura del asunto traído a colación. En este estudio se concluyó que un estadounidense medio mira su teléfono una vez cada diez minutos; es decir, unas 96 veces cada día. El mismo habitante promedio de Estados Unidos, en cambio, se lava las manos solo unas 8,6 veces por día.

Hay quien manifi esta que en la contemporanei-dad somos parte de una nueva clase de personas que «acaricia» más superfi cies que cualquier otra en la historia de la humanidad. Eso indica que siempre estamos recolectando gérmenes con nuestras manos, los acopiamos en el celular, y luego los transportamos cerca de la nariz, la boca y la cara.

¿Cuántos gérmenes se ocultan en la superfi cie de un celular que casi nunca —o nunca— limpia-mos? Si hasta ahora pudiera albergarse duda al-guna sobre la contaminación que puede haber en estos dispositivos, propongo examinar los resulta-dos de otra investigación publicada este año en la revista médica Access Microbiology.

Las autoras del trabajo (doctoras Rebecca Simmonds y Emma Hayhust) estudiaron los gér-menes que podían estar contenidos en los telé-fonos inteligentes, especialmente dentro de los medios hospitalarios. Y concluyeron que el grado de contaminación de estos soportes digitales supera con creces cualquier cosa pre-viamente informada: se aislaron como promedio 198 tipos de bacterias, de los cuales 34 eran exclusivos de hospitales; todo ello sin ahondar en los virus.

Las recomendaciones que se derivan de tales datos es que no basta con el lavado de manos. No deben ser olvidados esos pequeños objetos como los teléfonos celulares que mucho se benefi ciarían con un paño suave, al menos una vez por sema-na, para quedar limpios. Así estaríamos cortando con seriedad la llamada «transmisión móvil del ger-men», causante de la COVID-19 y de otros culpa-bles de dolencias que, con un poco de tiempo y de preocupación, podríamos evitar.

Transmisión móvil de gérmenes

No se puede enfrentar un peligro como el nuevo coronavirus si no se está preparado, y si no se asume que una de las garantías del éxito está en halar parejo

Enseñar a nuestros niños cuáles son las medidas higiénicas que deben aplicar en el momento de toser es una acción imprescindible. Foto: Armando Contreras Tamayo