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Los servicios de urgencias, tanto públicos
como privados, se encuentran cada vez
más saturados, lo que repercute en una
merma evidente de la calidad asistencial a
los pacientes.
Como consecuencia, los sistemas de triaje
se convierten en elementos indispensables
para el personal de los servicios de
urgencias, ya que ayudan a mejorar la
calidad asistencial, la eficacia y a reducir la
congestión del servicio.
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Introducción
Los servicios de urgencias, tanto públicos como
privados, se encuentran cada vez más saturados, lo
que repercute en una merma evidente de la calidad
asistencial a los pacientes. Se trata de un fenómeno
ampliamente extendido y que ha sido objeto de
análisis en numerosas ocasiones.
La masificación junto al uso indiscriminado e
inadecuado de estos servicios, lo que empieza a ser
un problema crónico en los centros sanitarios,
provoca un desequilibrio entre demanda y
recursos disponibles que genera largas esperas por
parte de los pacientes que llenan día tras día las
salas de espera.
En ocasiones, esta congestión puede provenir,
entre otros motivos, de ineficiencia de los
procesos de consulta externa, en los que algunos
pacientes deben esperar varios días desde que
solicitan la cita hasta que acuden a la consulta en su
centro de salud. Por esta razón, cada vez más
personas deciden “tomar un atajo” y acudir a
urgencias para ser atendidos por un facultativo.
No obstante, esa masificación no debe en ningún
caso ser obstáculo para atender en primera
instancia a aquellos pacientes que requieran una
atención más urgente, especialmente en el caso de
los niños, con los que resulta indispensable evitar la
demora en su asistencia, admitiendo que tienen
unas necesidades únicas y especiales y de mayor
complejidad desde el punto de vista de la
valoración clínica.
Los servicios de urgencia están concebidos para
prestar atención oportuna a pacientes que
presenten enfermedades o cuadros clínicos que
pongan en riesgo inminente la vida o la
funcionalidad de algún órgano, y que, por este
motivo, requieran una intervención inmediata. En
el caso de la pediatría, existen estimaciones que
indican que aproximadamente el 70-80% de los
pacientes infantiles que acuden a los servicios de
urgencias podrían ser atendidos en atención
primaria.
Esto hace necesario contar con mecanismos de
filtro y priorización que garanticen que las
enfermedades no urgentes no interfieran en las que
realmente sí lo son. Es en este marco de actuación
donde los sistemas de triaje adquieren su
protagonismo.
Así, los sistemas de triaje pediátricos permiten, a
través de una valoración clínica preliminar ágil,
exhaustiva y rigurosa, basada en protocolos
establecidos o en el criterio profesional del
personal médico del servicio, clasificar de manera
rápida y eficiente a los pacientes, priorizando la
atención del niño según su gravedad, así como
facilitar su ubicación en el área de tratamiento
adecuada.
Como consecuencia, estos sistemas se convierten
en elementos indispensables para el personal
integrante de los servicios de urgencias, ya que
ayudan a mejorar la calidad asistencial, la eficacia y
a reducir la congestión del servicio.
En el uso de estos sistemas, el papel del
enfermero/a resulta clave, siendo imprescindible
una preparación adecuada, con el fin de que estén
perfectamente capacitados para priorizar a los
pacientes pediátricos y poder brindarles la primera
atención basada en protocolos establecidos.
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OBJETIVOS
Mejorar la calidad asistencial del servicio de urgencias, garantizando la equidad en la asistencia
a través de la valoración del nivel de gravedad y del tiempo de espera.
Diferenciar los casos realmente urgentes de aquellos que no lo son, a partir de una
valoración clínica preliminar, basada en signos, síntomas, constantes y factores de riesgo, en la que se
utilizan protocolos establecidos con el fin de clasificar a los enfermos según criterios de gravedad.
Reducir la ansiedad del paciente y de su familia, al establecer una comunicación inicial y facilitar
información sobre el proceso de atención y tiempo de espera estimado.
Aplicar, si se considera procedente, ciertas técnicas iniciales y básicas propias del ejercicio
profesional.
Determinar el área más adecuada para ubicar y tratar a un paciente que acude al servicio de
urgencias.
Permitir la evaluación continua de los pacientes que garanticen que sus necesidades de
atención son satisfechas, asegurando la reevaluación periódica de los pacientes que no presentan
condiciones de riesgo vital.
Facilitar confort al paciente pediátrico y a sus acompañantes en la medida de lo posible,
aumentando su satisfacción.
Disminuir la congestión de las áreas de tratamiento de los servicios de urgencias.
Crear un lenguaje común para todos los profesionales que atienden los servicios de urgencias.
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La respuesta de Ibermática en
este ámbito
En los últimos tiempos, el sector sanitario se
encuentra inmerso en un profundo proceso de
transformación que está revirtiendo en una
mejora de los procesos asistenciales, a través
de la supresión gradual de barreras que pueden
impedir a los ciudadanos disfrutar de una óptima
calidad asistencial, proporcionando la información
necesaria para mantener la salud, desarrollar
hábitos saludables y disfrutar, en definitiva, de una
mayor calidad de vida.
En este escenario, desde Ibermática entendemos
que la tecnología debe contribuir a garantizar el
bienestar y la calidad de vida del paciente y a
optimizar la eficacia del profesional clínico.
Por esta razón, nos encontramos inmersos, de
manera constante, en la búsqueda de soluciones
que optimicen la calidad de la asistencia al
paciente y que mejoren la eficiencia de los
profesionales, apoyándonos en conceptos
innovadores basados en la experiencia adquirida y
aportada por los propios usuarios/as de dichas
herramientas.
Nuestra contribución en el ámbito sanitario se
enmarca en una línea de soluciones que incluye una
amplia y diversificada oferta de productos y
servicios líderes en el mercado, de contrastada
calidad y desarrolladas por y para los profesionales
clínicos.
Para garantizar la efectividad de estos sistemas, es
necesario disponer de herramientas
innovadoras y potentes, de uso intuitivo y
amigable, que realmente contribuyan a maximizar
la eficiencia en la prestación del servicio médico y
que redunden, además, en la excelencia en la
calidad asistencial a los pacientes.
Entendemos que la clave del éxito de nuestras
soluciones radica en la estrecha colaboración que
mantenemos, durante su desarrollo e implantación,
con el personal médico, con los gestores
sanitarios y con los propios pacientes.
La contribución de estos tres agentes que
intervienen e interactúan en nuestros procesos de
diseño y desarrollo de soluciones resulta vital para
ofrecer productos y servicios líderes en el
mercado, que presentan una utilidad y
aplicabilidad real adaptada a las necesidades de
nuestros clientes.
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¿Qué es TRIAXIA?
TRIAXIA es una herramienta innovadora de
ayuda inteligente que, a través de una interfaz
de uso muy intuitiva, facilita al personal de
enfermería de un servicio de urgencias de pediatría
el triaje de los pacientes, con el fin de garantizar
una óptima calidad asistencial y la máxima
eficiencia en las actuaciones clínicas.
Con una sólida y potente base científica, está
concebida para optimizar y agilizar el proceso de
identificación, por grado de urgencia, de aquellos
pacientes que requieren una atención inmediata y
para facilitar su ubicación en el área de tratamiento
adecuada.
Esta herramienta de triaje está consensuada con
unos criterios homogéneos, científicos y
coherentes, aplicables por igual a todos los
pacientes, para poder ofrecer una asistencia
adecuada a las necesidades de los usuarios.
Los criterios utilizados en TRIAXIA se enmarcan
en el modelo canadiense de triaje y gravedad para
los servicios de urgencias, denominado CTAS
(Canadian Emergency Department Triage and
Acuity Scale), que para el ámbito pediátrico ha
desarrollado un complemento específico, adaptado
a las especificidades de este colectivo, y que se
denomina PaedCTAS o CPTAS (Canadian
Paediatric Triage and Acuity Scale).
El modelo canadiense en el que se basa
TRIAXIA estructura la prioridad de asistencia a
través de una escala de cinco niveles, en función de
la gravedad identificada en el paciente, que están
relacionados con los tiempos de espera máximos
para la asistencia médica.
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Tabla 1. Clasificación de pacientes según el modelo canadiense de triaje
Nivel Denominación Definición
Tiempo
atención
I Resucitación
Situaciones que requieren resucitación, con riesgo vital
inmediato Inmediato
II Emergencia
Situaciones de emergencia o muy urgentes, con riesgo
vital previsible, la resolución de las cuales depende
radicalmente del tiempo
<15’
III Urgencia Situaciones de urgencia, con potencial riesgo vital <30’
IV Semiurgente
Situaciones de menor urgencia, potencialmente
complejas, pero sin riesgo vital potencial <60’
V No urgente
Situaciones no urgentes, que permiten una demora en
la atención o pueden ser programadas, sin riesgo para
el paciente
Hasta 120’
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Principales
funcionalidades
TRIAXIA incorpora un proceso estructurado
altamente intuitivo para que el personal de
enfermería pueda valorar de una manera ágil y
rigurosa la gravedad del paciente, a través del
análisis protocolizado de una serie de signos,
síntomas, constantes y factores de riesgo.
A medida que se ejecuta el proceso de valoración,
que tiene un carácter gradual y escalado, la
aplicación va asignando al paciente, en función de
los resultados obtenidos en cada paso, un nivel de
gravedad, que se identifica por un color de fondo
distinto, el cual podrá ir variando a medida que se
desarrollan las fases secuenciales del protocolo de
evaluación del paciente.
Durante el proceso de valoración, la aplicación
genera, de manera automática, una adecuación del
nivel de urgencia en función de la edad, de las
constantes y del grado de dolor identificado.
En esta imagen se muestra la estructura general de
pantallas de TRIAXIA.
TRIAXIA presenta una serie de funcionalidades,
materializadas en una secuencia de fases o etapas,
que se deben seguir en la valoración clínica
preliminar del paciente:
Indicador de secuencia de
pantallas
Ruta resumen de resultados del
proceso de triaje realizado
Zona de actuación profesional en la que deben introducirse los datos de la valoración.
Se produce un cambio automático de color en esta zona según la gravedad identificada a medida que
avanza el proceso
Nivel provisional de urgencia asignado
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1. Impresión
En esta fase el profesional debe efectuar, en base a
su experiencia y desde el punto de vista de la mera
observación, sin efectuar ningún tipo de prueba
diagnóstica, una valoración inicial muy elemental
que estará basada en la primera impresión que
recibe al ver al paciente. Para ello debe valorar
aspectos como la apariencia, estructurada en una
serie de parámetros, el esfuerzo respiratorio o el
tono de la piel del paciente, que aparecen
recogidos en una tabla.
Cada una de las columnas de la tabla hace
referencia a un aspecto en el que un paciente
puede tener problemas. Estas columnas están
referenciadas en los lados de un triángulo, que
aparece en el extremo superior izquierdo de la
pantalla, iluminándose para identificar la tipología
de problemas que el paciente padece.
De esta manera, si el triángulo tiene el azul
iluminado, indica que la apariencia no es la
considerada normal en un paciente sano; en caso
de estar el verde iluminado, se tratará de un
problema en el esfuerzo respiratorio y, si es el
rojo, el problema se refiere a la circulación.
Un paciente podría tener problemas en uno, varios
o ninguno de los aspectos citados, de manera que
podrían iluminarse uno, dos, tres o ninguno de los
lados del triángulo, según corresponda.
El nivel de gravedad que la aplicación asigna al
paciente variará en función de la iluminación de los
lados del triángulo, de manera que, como se parte
de un nivel de gravedad entre el nivel IV y V, si
existe un lado del triángulo iluminado pasará a ser
nivel de gravedad III, si son dos los lados
iluminados, será nivel II y, si tiene los tres lados
iluminados, el nivel asignado será el I (el más
grave).
Por otra parte, el personal de enfermería del
servicio puede proceder a realizar al paciente la
toma de constantes básicas como la frecuencia
cardíaca y respiratoria, la temperatura, la tensión
arterial o la glucosa, así como su registro en el
sistema.
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2. Valoración
Una vez realizada la impresión, en caso de que el
nivel de gravedad identificado sea alto (por norma,
nivel I y nivel II), el profesional puede realizar una
valoración inicial más detallada, basada en una
valoración ABC, que considera tres aspectos del
paciente: Vía aérea-Aerial, Ventilación-Breath y
Circulación-Circulation.
La aplicación, para facilitar esta labor, incorpora
una tabla, en la que cada uno de los aspectos que
recoge conlleva una serie de procedimientos a
realizar, de cara a solventar el problema que el
paciente padece. Se podrá elegir uno de los
problemas de cada uno de los aspectos y tantos
procedimientos como se crea necesario realizar.
Estos procedimientos vienen parametrizados en el
orden en que deberían ser abordados y se volcarán
en el último paso como actuaciones que debe
realizar el servicio de enfermería en el tratamiento
inicial del paciente.
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3. Dolor
Posteriormente, si es necesario, el sistema guía al
profesional en la valoración del dolor del paciente,
a través de una pantalla altamente intuitiva, que
ofrece diversas alternativas, basadas en diferentes
tipologías de valoración.
Por un lado, la herramienta facilita una tabla
escalada de dolor, orientada principalmente a la
valoración de pacientes de entre 0 y 2 años, en la
que se recogen, de manera estructurada, los rasgos
que caracterizan a cada nivel, de cara a facilitar la
valoración.
De esta manera, en función de la percepción del
profesional sobre una serie de aspectos físicos a
valorar del paciente como el llanto, la expresión
del rostro, la posición de las piernas, el nivel de
actividad o la facilidad de obtener consuelo, podrá
disponer de diversos elementos de juicio en los
que basar su evaluación.
Asimismo, la aplicación incorpora otros sistemas
adicionales que ayudan a valorar el dolor, como el
facial, orientado fundamentalmente a pacientes de
entre 2 y 7 años, y que está basado en la
identificación y valoración de los rasgos de la cara,
o el analógico visual, para la valoración de
pacientes de más de 7 años.
En función del resultado obtenido, el sistema
genera una orden inmediata de analgesia, que
establece diferentes pautas a seguir, que varían en
función del nivel de dolor identificado.
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4. Problema
En esta pantalla, el profesional debe proceder a
identificar el problema principal por el cual el
paciente acude al servicio de urgencias y necesita
ser tratado.
Para ello, la aplicación ofrece, en un primer nivel,
15 agrupaciones de problemas, cada uno de los
cuales incorpora, en un segundo nivel, una tabla en
la que se detallan los diferentes rasgos que pueden
caracterizar a ese problema concreto, asociados a
su nivel de urgencia a través de colores.
En este apartado, la aplicación facilita también,
cuando es necesario, ante determinados motivos
de consulta y según la gravedad evaluada por el
profesional, órdenes inmediatas de actuación.
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5. Constantes
En esta etapa se puede realizar por parte del
profesional clínico la toma de las constantes del
paciente y proceder a su registro. Puede efectuarse
introduciendo directamente los valores numéricos
o a través del desplazamiento de las barras
mostradas en cada categoría, de gran utilidad
cuando la valoración se realiza a través de
dispositivos como tablets, etc.
Así, en función de los datos registrados para cada
constante y de su desviación con respecto a la
normalidad, se asociará, a través de un color, un
nivel de urgencia que, posteriormente y de manera
agregada, contribuirá a la identificación del nivel de
urgencia global del paciente.
Las constantes que aparecen en la herramienta
para cada proceso del triaje son siempre
parametrizables, pudiéndose añadir aquéllas que se
crea conveniente para el centro y/o para el servicio
concreto de que se trate.
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6. Enfermería
El último paso supone una recapitulación de las
acciones de enfermería que se deberían realizar.
Estas actuaciones están ligadas a diferentes
motivos/problemas de consulta, subniveles de
problemas, al dolor o a los procedimientos que
hayan sido seleccionados del protocolo ABC.
Una vez finalizado el proceso de triaje, si no existe
ninguna acción asociada por defecto a la valoración
realizada, este paso saldrá vacío.
No obstante, si es necesario realizar una o varias
actuaciones, el sistema las mostrará en una lista
con campos de comprobación (check), con el fin
de poder marcar si se van a realizar o no, ya que
existen casos en los que el profesional, debido a su
experiencia y capacidad, puede considerar
oportuno no abordarlas al considerarlas
innecesarias.
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Ventajas y beneficios
Al informatizar el proceso de triaje, los principales
beneficios que pueden obtenerse con TRIAXIA
son:
Simplifica y acelera el proceso de triaje
pediátrico, convirtiéndolo en una labor
mucho más sencilla, al tratarse de una
herramienta desarrollada a partir de
algoritmos clínicos y basada en dar respuesta a
una serie de preguntas y obteniendo al final el
nivel de urgencia del paciente.
Disminuye la variabilidad en la
aplicación de la escala, favoreciendo el
manejo clínico de los pacientes.
Permite mantener registros
electrónicos de la clasificación realizada al
paciente, así como de los tiempos de
actuación.
Facilita la realización ubicua del proceso
de triaje, pudiéndose acceder a la aplicación a
través de diversos dispositivos (PC, tablets,
smartphones, etc.).
Permite una integración plena con los
sistemas de gestión sanitaria.
Posibilita la interconexión de la
información en tiempo real con otras
aplicaciones, lo que puede favorecer el
diagnóstico posterior y la atención al paciente.
Facilidad de aplicación y de uso, con un
tiempo medio de ejecución inferior a 3
minutos, y con una interfaz altamente intuitiva
y amigable.
Facilita la explotación de la información
y el análisis de la calidad de la atención
prestada a través de indicadores.
Cuenta con una curva de aprendizaje
muy corta para el profesional clínico.
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Características
generales
Como se ha comentado en el apartado
correspondiente a las funcionalidades principales,
TRIAXIA es una solución de fácil aplicación y uso
que, con una interfaz intuitiva y amigable,
sistematiza el triaje pediátrico a través de un
proceso gradual y escalado, estructurado en una
serie de pantallas secuenciales, por las que el
profesional clínico debe ir navegando de cara a
realizar la valoración clínica preliminar del paciente
en un periodo de tiempo muy corto.
A medida que se avanza en el proceso, el sistema
va asignando un nivel de gravedad al paciente a
través de colores, según el grado que va
adquiriendo durante la valoración. Así, al finalizar el
proceso, la aplicación facilita un resumen detallado
de la valoración asociada al color que corresponda,
dependiendo del nivel definitivo de urgencia
identificado.
Para facilitar y simplificar la actividad a realizar por
el profesional, TRIAXIA incluye en su configuración
funcionalidades para la valoración sistemática del
dolor y de otros parámetros de una manera
sencilla y efectiva. Además, la aplicación genera una
adecuación automática del nivel de urgencia en
función de la edad, de las constantes y del grado de
dolor.
Así, entre sus principales características se
encuentran las siguientes:
Dispone de pantallas secuenciales que van
guiando ágilmente al profesional clínico
en el proceso de valoración.
Proporciona al profesional una asignación de
niveles de gravedad por colores, según el
grado que se va adquiriendo durante la
valoración, hasta la identificación definitiva del
nivel de urgencia.
Incluye medidas de valoración ABC del
paciente.
Incorpora un sistema muy intuitivo para la
valoración sistemática del dolor, que se
personaliza según la edad del paciente.
Dispone de una funcionalidad que adecúa de
manera automática el nivel de urgencia
del paciente en función de la edad, las
constantes y el grado de dolor identificado.
Incorpora un resumen de la valoración del
triaje, una vez finalizado el proceso, que facilita
la valoración diagnóstica y terapéutica
posterior a desarrollar.
La información recogida se integra con
otros sistemas de gestión sanitaria.
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Aspectos
diferenciales
Construida en base a la experiencia de los
profesionales clínicos y concebida bajo un
concepto vanguardista, TRIAXIA se presenta como
una innovadora forma de abordar el triaje
pediátrico.
Es importante destacar que en su proceso de
diseño y construcción no se han obviado aspectos
clave como la practicidad y la rigurosidad, que
adquieren especial relevancia en el entorno
complejo en el que esta herramienta debe ser
implementada, como es la valoración clínica de los
pacientes de pediatría.
Se trata de una solución flexible y configurable, que
permite al profesional clínico ejecutar el proceso
de valoración clínica preliminar del nivel de
urgencia de un paciente pediátrico de una manera
extremadamente ágil, intuitiva y científicamente
rigurosa.
Los principales elementos diferenciales de
TRIAXIA son los que se detallan a continuación:
Diseñada por los propios profesionales
clínicos involucrados en la ejecución de
procesos de triaje pediátrico y totalmente
orientada a sus necesidades.
Carácter innovador y pionero en el
mercado.
Construida sobre una sólida base
científica, basada en la aplicación rigurosa del
modelo canadiense de triaje, validado
internacionalmente.
Vanguardista y tecnológicamente
avanzada.
Diseño atractivo, dinámico, visual y de
elevado pragmatismo de cara a la ejecución
de los procesos de valoración.
Información presentada de manera
altamente intuitiva y personalizada.
Posibilidad de acceso ubicuo al sistema
desde diferentes dispositivos táctiles e
inalámbricos, contando asimismo con una
ergonomía adaptada a ellos, lo que puede
favorecer la movilidad de los profesionales
durante el proceso de valoración.
Totalmente integrable con otros sistemas
de gestión sanitaria existentes.
Alta escalabilidad para futuros
requerimientos.
Certificado tecnológicamente por Microsoft.
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Tecnología
Entorno tecnológico
.NET Framework 3.5.
WPF (Windows Presentation Foundation).
IoC (Inversion of Control).
WCF (Windows Communications
Foundation).
Patrón MVVM (Model - View - ViewModel).
Actualización con las vanguardias tecnológicas,
garantizando la evolución.
Arquitectura
Multicapa con desacoplamiento total.
Framework propio de base sobre el que se
incrustan los módulos principales mediante
plug-ins.
Mashup (extensión de aplicaciones).
Patrón de proveedores.
Interoperabilidad
Arquitectura orientada a servicios (SOA).
Código embebido en biblioteca de enlace
dinámico (dll) para llamadas desde cliente
externo
Acceso a datos desde funciones de la
biblioteca de enlace dinámico (dll) para
entornos .NET
Garantía Ibermática
Ibermática es una de las principales empresas de
consultoría y servicios TI en el mercado español.
Creada en 1973, su actividad se centra en las áreas de
consultoría TIC, servicios de infraestructuras,
integración de sistemas de información, outsourcing e
implantación de soluciones integradas de gestión
empresarial. Ibermática ayuda a la transformación de las
empresas, instituciones y organizaciones para mejorar
su competitividad mediante la aplicación de la
tecnología y el conocimiento. Para ello, cuenta con
soluciones y servicios especializados para los sectores
de finanzas, seguros, industria, servicios,
telecomunicaciones, sanidad, utilities y administración
pública. Completa su oferta con soluciones
tecnológicas como Business Intelligence, ERP y CRM,
gestión de procesos (BPM), portales y negocio digital,
gestión documental, Social Business, gestión de
personas (HCM), movilidad, accesibilidad, seguridad e
inteligencia artificial, así como servicios Cloud
Computing.
Ibermática cuenta con un equipo de más de 3.000
profesionales y dispone de las más exigentes
certificaciones de calidad existentes en la industria del
software. La compañía, que representa un volumen de
negocio de 225,5 millones de euros, dispone de 25
centros operativos repartidos en los mercados de
España, Portugal, Andorra, Argentina, Brasil, Chile,
Colombia, México, Perú y Estados Unidos.
Colaboración con Osakidetza
Fruto de la estrecha e intensa colaboración entre
Ibermática y el Servicio Vasco de Salud –
Osakidetza para el desarrollo y despliegue de sus
pioneros Sistemas de Información, hemos
conformado una innovadora, vanguardista y
diversificada oferta tecnológica que define la nueva
generación de herramientas para el ámbito
sanitario.
Persona de contacto:
Juan Liedo
Gerente área de negocio HCM
Tlf: 902 413 500 – 94 4310 200
e-mail: [email protected]
Persona de contacto:
Juan Carlos del Álamo
Responsable área Sanidad
Tel.: (+34) 943 413 500
www.ibermatica.com