LOS FESTIVALES INTERNACIONALES

DE PELICULAS

DOCUMENTALES AGRICOLAS

K. PETRI('H1 )c A. 1. D. (Alemania).

ON ocasión de celebrarse el «II Festival 111-Cternacional del Film Agrícola de Berlín», organiza-do bajo la dirección del Senado de esta capital Vdel Ministerio de Alimentación, Agricultura y Sei-vicultura de Alemania Occidental, recordemos laspalabras que el Ministro señor Werner Schwarz,pronunció en la apertura del primero de estos Fes-tivales, que tuvo lugar en el año 1960: «Concibien-do, proyectando y preparando el Festival Interna-cional Cinematográfico, hemos querido mantener yrecalcar el hecho de que el filnz documental agrícolaes un medio muy útil para informar a la vez a losagricultores y a los encargados de mejorar la agri-cultura.»

En dicho Festival de 1960 se presentaron 72 pe-lículas procedentes de 24 países. Esta exhibición,además de poner de manifiesto los problemas exis-tentes en las diferentes ramas de la agricultura enlos países participantes, demuestra el desarrollo al-canzado en la producción de esta clase de películas,tanto en su aspecto técnico como en el educativovartístim

El jurado de dicho primer Festival del Film Agrí-cola encontró verdaderas dificultades para la selec-ción de las mejores películas; teniendo muy encuenta para dicha selección tanto el fin perseguidopor cada película como el sector de público al queprimordialmente iba dirigida, que era, naturalmen-te, los agricultores; aunque también, en cierto as-pecto, al gran público, ya que se trata de unainformación visual o relacionada más o menos di-rectamente con la agricultura. Por esta razón, laspelículas que no ofrecen unas claras directrices encuanto al fin propuesto con esta clase de informa-ción, fueron quizá las menos apreciadas. Y ahora,en la clasificación por categorías presentadas al Fes-tival de 1962, se han tenido muy en cuenta lasexperiencias y conclusiones extraídas del Festival.anterior.

También fué tema de debate del jurado la pre-sentación de las películas en blanco v negro o encolor, ya que, parece ser, que ciertos ternas ofrecen

El representante de Nigeria recibe el premio otor-gado al "filni." "Enfermedades y epidemias de lasaves", considerado por el jurado corno e/ más apro-piado para su utilización en los países en vías de

desarrollo.

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«Holanda invita al mundo» (Paises Bajos).

ESCENASDF. LOSMIADOSVAL DE

DE ALGUNOS« M S» PRE-EN EL EESTI-IWRI.IN 1962

«Thanmetopoea pityocampa» (Francia).

mayor claridad presentadas en blanco y negro. Ypor lo que respecta a la duración de las películas,se estima que la mayor parte de los temas podíanser muy bien tratados con una duración máxima deveinte minutos, ya que las películas que excedende este tiempo, muchas veces se pierden en divaga-ciones que redundan en perjuicio de su eficacia de-mostrativa y persuasiva.

El jurado de este Festival está compuesto poragricultores destacados, así como por técnicos delcine; por consiguiente, las películas que concu-rren son examinadas, tanto desde el punto de vistaagronómico como del que corresponde a la técnicacinematográfica. El jurado del ario 1960 reconocióque no es suficiente con que un film «hable» casiexclusivamente con sus fotografías, aunque también

es verdad que en algunos casos los comentariosresultan innecesariamente largos. Por otro lado, seobservó, asimismo, que con frecuencia estos comen-tarios resaltaban materias que no aparecían en lapantalla. Es más, hubo películas en las que ni lafotografía ni el, comentario estaban centrados en elasunto que se trataba de divulgar, perdiéndose endetalles que no tenían más que una lejana relacióncon aquel asunto primordial. Y en otras, la intro-ducción de una secuencia emotiva en vez de favo-recer al film, obstaculizaba de una manera sensiblela comprensión del tema fundamental. Sin embargo,y por lo que se refiere a los comentarios, no cabeduda de que cuando éstos son interesantes quedanprendidos en la memoria del espectador, quizá másfácilmente que los motivos visuales por elegidosy brillantes que éstos sean. La realidad es que es-tos defectos apuntados se han apreciado solamenteen un pequeño número de películas.

No está demás el recordar, también, que el Presi-dente del tan citado Festival del año 1960, señorCyprien, perteneciente a la F. A. O., refiriéndoseconcretamente al tema acuciante y agudo del pro-blema del hambre en el mundo, se expresó en lossiguientes términos: «Para resolver este problema,el cine y la televisión pueden jugar un papel im-portante. Las películas que traten de este temadeberían dirigirse al gran público para obtener elreconocimiento y la comprensión de la gente quevive en la ciudad hacia los esfuerzos de los agri-cultores, forestales y pescadores del mundo enteró.

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Escena del film «Wagayane, $hiki», presentado porel Japón.

Hay muy buenos ejemplos de esta clase de pelícu-las y podemos esperar que el intercambio de ideasy la publicidad que este Festival ha realizado fo-menten la producción de películas similares, de lasque, como digo, existen va numerosos v excelentesejemplos. También esperamos que los organizadores

del Festival aprecien el valor de su trabajo y que se.animen, en los años venideros, a repetir este granensayo en el que acabamos de participar.»

Ahora, en este segundo Festival de 1962, ha cons-tituido una excelente experiencia el poder compro-bar que se están cumpliendo las predicciones delseñor Cvprien, teniendo en cuenta el progreso queha podido observarse con sólo dos años de dife-rencia en la producción de esta clase de películas,.en sus cinco categorías diferentes.

Los tres premio.; extraordinarios—Espiga de oro,.Espiga de plata y Espiga de bronce—fueron otor-gados a las tres mejores películas de cada categoría.Asimismo, se concedió un premio especial al filmmejor adaptado para su difusión en zonas en vías.de desarrollo.

Es de esperar que este segundo «Festival delFilm Agrícola» habrá contribuido, como el primero,a una mejor apreciación del valor que tienen laspelículas agrícolas documentales, para los educa-dores de todas clases, para los divulgadores y, na-turalmente, para los propios agricultores a los cua-les van dirigidas.

Resista FATIS, núm. 1-2, 1962.

El «Kongresshalle» de Berlín, donde han tenido lugar las proyecciones.

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