los 16 factores del liderazgo

Autor: Rolando Quintana, para CRISTO TÚ Y YO WEB

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LOS 16 FACTORES

DEL LIDERAZGO PARA EL HOMBRE Y LA MUJER DE DIOS

Amor y autoridad

El carácter, la autoridad y el amor son una de las cosas más

importantes que un líder debe tener. Este libro le dará a usted

una visión más clara de lo que necesitan sus discípulos de

usted. Dieciséis factores necesarios para su vida como creyente

y como dirigente, tanto el hombre como la mujer de Dios.

Autor: Rolando Quintana

Os Cristitos Rekord’s 2009

Libro de capacitación abalado y respaldado por: Ministerio DERRIBANDO FORTALEZAS, pertenece a la misión del mismo nombre. Pastores: Jorge Flores y Ana Alarcón. Dirección: esquina Ushuaia y Piedra Buena – Barrio San Javier – Garín – Escobar - Buenos Aires – Argentina.


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INTRODUCCIÓN Lo que quiero lograr con este libro es un entendimiento general de algunos principios para que puedas ser un buen "guía espiritual". Los Dieciséis factores del liderazgo no son habilidades, son características. Estoy hablando de los puntos y no de los pasos a seguir para un objetivo. No puedo saber el propósito o la visión que Dios le puso a usted o qué le pueda dar. Cuando me refiero a metas, lo que no puedo es indicarle los pasos que usted debe seguir. El liderazgo es una responsabilidad grandísima. Por eso debemos desarrollar el poder que Dios no ha conferido. Preside, prohistemi. Prohistemi significa estar a la cabeza de, gobernar, dirigir, administrar o brindar liderazgo. Se usaba a menudo para las personas en posiciones de superintendencia, líderes en algún ejército, estado o en algún partido político. Otra palabra podría ser «facilitadores». Las personas de Romanos 12.8 tienen el don de coordinar a la gente para que lleve a cabo actividades y metas. Están particularmente dotadas para presentir problemas generales, estudiar necesidades, reclutar a otros para realizar trabajos, evaluar el tiempo que requiere completar una tarea, organizar recursos, proseguir a pesar de la oposición y las presiones, y delegar autoridad. Proporcionan el ingrediente necesario para que el pueblo de Dios se organice eficientemente y lleve a cabo sus metas y son sobre todo ayudadores del pastor, aunque puede ser el pastor mismo. 1. FACTOR LLAMADO Dios quiere líderes que sepan compartir y no líderes que se apoderen de un puesto que no les pertenece. Dios llama a líderes amorosos y no a manipuladores autoritarios. a. Crisis en el liderazgo Estamos viviendo tiempos en donde los líderes verdaderos casi son escasos. Hay muchos dirigentes hoy en día que se apoderan de los puestos y los lugares y no dan el lugar a otros por miedo a que se lo quiten, líderes egocéntricos que quieren todo para ellos. Esto hermanos es una realidad, Lideres celosos, envidiosos que no soportan que los hermanitos nuevos tengan mejores talentos que ellos. Muchas iglesias están estancadas y hasta se han deshecho por esta causa y lo peor es que los pastores no se dan cuenta o no se hacen responsables o no les interesa o bien es un familiar del pastor o es amigo de fulano o hijo de quien sabe quién y pareciera que son inmunes en el liderazgo y nadie los puede tocar. b. Qué es el liderazgo

El liderazgo es una disciplina que transporta su influencia a los demás con la finalidad


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de alcanzar objetivos que fomenten el crecimiento de la iglesia y de las personas que por supuesto son parte de ella. Uno de los puntos más importantes es mantener unido a un grupo que seguramente tiene gustos, pensamientos, problemas, carácter y puntos de vista diferentes. El líder debe mostrar a Cristo y no a sí mismo. Mientras más honres a Dios, más beneficias a los demás. En estos últimos tiempos de rebeldía, insumisión, falta de respeto, libertinaje, etc. ¿Quién habrá de enseñar todo lo contrario? Sólo un líder que ejerza la autoridad de Jesucristo podrá mostrar el camino que nos conduce a los buenos valores morales y espirituales. 2. FACTOR VISIÓN El liderazgo comienza cuando hay un propósito, un objetivo y una visión en particular. “Proverbios 29:18…sin visión el pueblo perece”. a. Entender y saber la visión Tener visión significa, tener una imagen vívida de lo que se espera del grupo. No alcanza tener una visión, si no hay una entrega y un deseo de alcanzarla. A eso se le llama misión u objetivo. Nehemías tuvo una visión de una muralla reedificada que rodease a Jerusalén. Su misión era realizar la visión. Hay otros casos como el de David que tubo la visión de construir un templo donde se adore a Dios, y su visión fue alcanzada a través de otro (en este caso su hijo Salomón). La visión debe transmitirse, para que sea lograda, primeramente a Dios, porque ese es el ejemplo bíblico, y luego a los demás. b. Entender de dónde viene la visión Todo proviene de Dios (Stg. 1:17) c. Comprender por qué una visión es importante No se puede dirigir si no hay entrega a la visión de Dios. Sin una visión no habrá una misión adecuada. Sin metas no hay liderazgo. 3. FACTOR META Las metas como toda visión, requieren la decisión de trabajar, ese compromiso se llama misión. Debemos diseñar una serie de pasos a seguir, específicos y predecibles que permitan que realicemos la misión, esos pasos se llaman metas; que son la brújula que nos guía en este viaje hacia nuestro propósito. a. Metas inteligentes


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El fijarse unas metas requiere sencillamente poner por escrito (literalmente hablando) los pasos que debemos seguir para llevar a cabo la visión. Puede llevar días, meses o años, pero es preciso llevar la visión por pasos. De manera que usted pueda saber lo que tiene que hacer en cada aspecto a medida que pasa el tiempo, por Ej.: a. Haga que sus metas sean específicas. b. Haga que sus metas sean apreciables. c. Haga que sus metas sean alcanzables. d. Haga que sus metas sean realistas. e. Haga que sus metas sean tangibles. f. Deje que su mente vuele, no limite a Dios. b. Los conflictos en las metas. El tener que poner por escrito sus metas es algo que le obliga a establecer unas prioridades, porque con frecuencia dos metas que son igualmente deseables entrarán en conflicto, pero si tienen en claro lo primordial y saben discernir lo que es más conveniente empezarán por ahí, pero se entiende que escribir las metas no es una ley, hay líderes que saben muy bien lo que quieren alcanzar y hacia dónde van, eso les da seguridad en su desarrollo. Aunque también debemos tener en claro que las dos metas o tres o cuatro que tengamos pueden alcanzarse sin necesidad de abandonar o dejar para después las otras, todo depende también del tipo de líder, y el tiempo que tenga el líder para dedicarle a las cosas. Por eso el liderazgo es la habilidad de inspirar a otros para que trabajen juntos en equipo bajo su dirección, a fin de alcanzar uno o más objetivos, tanto si se trata de los negocios, la política, la guerra o en el campo de fútbol. Nadie puede conseguirlo por sí solo. El dirigente tiene el poder de desafiar a la gente para que se esfuerce por alcanzar esas metas que pueden haber considerado que estaban por encima de ellos. c. Una constante Las metas son una constante para el verdadero dirigente. Aunque todos cometemos errores es imprescindible enseñarle al grupo a través del ejemplo y las palabras a soportar las equivocaciones de todos y a aprender de ellas para mejor y no para criticar y desmoralizar al hermano. Porque en muchos casos el fracaso destruye la confianza de los seguidores y puede quitarle credibilidad al líder. 4. FACTOR AMOR Cristo hace que los dirigentes sean al mismo tiempo intrépidos y fuertes, además de amorosos y sacrificados. (2ª Ti. 1:7) a. Qué es el amor


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El amor al que me refiero no es un sentimiento emocional, sino que es un sentimiento espiritual más allá de nuestro entendimiento. Es la manifestación de nuestra vida para el “total” beneficio y ayuda de otros. El amor ágape es el amor que procede de Dios, la palabra ágape es esencialmente una palabra cristiana que está rodeada de una aureola de gloria que Dios le ha dado; él la utilizó para expresar su propia actitud hacia los hombres. El amor está relacionado con las verdaderas necesidades. El amor no pierde el tiempo fijándose en aquellas necesidades que no son de verdad. El dirigente sabe bien cuáles son las verdaderas necesidades del grupo porque ama a las personas que forman dicho grupo. Cuando un hombre cojo clamó a Pedro y a Juan pidiéndoles dinero, no le dieron dinero, sino que le sanaron. Lo que hicieron fue suplir la verdadera necesidad, no una necesidad aparente. El dirigente que se asemeja a Cristo ama a Dios, a sí mismo y a su prójimo. Esta emocionalmente sano porque su vida espiritual es completa. (Mt. 22:36-39). b. Amar a Dios (Éxodo 20:3) El amor hacia Dios debe ser exclusivo y total. O sea, todo o nada. Con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Jesús está diciendo: tu amor hacia Dios debe ser al cien por ciento, que este por encima de tu inteligencia, de tus emociones y de tu voluntad. c. Amar al prójimo Amar a Dios es la base de todo. Y el amarnos a nosotros mismos es la base para amar a nuestro prójimo, porque el debido respeto hacia nosotros mismos nos libra de tener que dedicar nuestras energías intentando mejorar la confianza en nosotros mismos mediante juegos de poder y el desprecio a otros. I. Debemos proponernos hacer amistades. II. Requiere un esfuerzo consciente que alimente el autentico interés en los demás. III. Cada uno de nosotros es una creación única. IV. Dedíquese a aprender a escuchar. V. Esté ahí sencillamente con el propósito de dar su cariño, tanto si sabe lo que debe hacer como si no. VI. Trate siempre a las demás personas como a iguales. VII. Sea usted generoso. VIII. Haga que sus amigos sean el número uno prefiriéndoles a ellos por encima de usted mismo. IX. Aprenda a amar a Dios con todo su corazón y luego a su prójimo como a usted mismo. X. Enfatice los puntos fuertes y las virtudes que encuentre en los demás, no sus pecados y debilidades. d. Amarse a uno mismo


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Debido a que el Espíritu Santo mora en nosotros, amarse a uno mismo implica, evitar conversaciones que contaminen nuestra mente, alejarnos de todo vicio sea cual fuere. Nos da confianza y el debido respeto hacia nosotros mismos. e. El amor y el dirigente (1ª Co. 13:13) El dirigente que es semejante a Cristo, expresa el amor con elocuencia. El gozo (Jn. 15:11). La paz. La paz es el acuerdo del amor (Stg. 4:4). La paciencia. El amor también se manifiesta por la paciencia, es decir, soportando a los demás (1ª Co. 13). La amabilidad. La amabilidad es el servicio del amor. Es el amor en acción. La bondad. La bondad es el comportamiento del amor. Es la manifestación de las virtudes semejantes a las de Dios en una persona. La fidelidad. La fidelidad es la medida del amor. Tiene que ver con el hecho de que el dirigente se mantenga leal a lo que se le ha confiado, a su entrega a los demás, a sí mismo y sobre todo a Dios. El amor también es saber reprender, exhortar y corregir con paciencia y doctrina. El liderazgo basado sobre este fundamento no puede fallar. 5. FACTOR HUMILDAD Al contrario de los que muchos creen, la humildad fortalece el liderazgo. Si usted abriga la esperanza de alcanzar su potencial como dirigente, hará bien en aprender a enfrentarse con las críticas con calma y de una manera agradable. La humildad o la mansedumbre es el estado de ánimo del amor. La persona que es humilde está libre de orgullo y de arrogancia. Se somete a otros, les presta su ayuda y es cortés. La persona humilde no considera que sea autosuficiente. La persona humilde no se ofende ni quiere vengarse. La humildad no tiene conciencia de sí misma, por eso el hombre que es humilde no sabe que lo es. La persona humilde acepta consejos de quien sea y considera a otros como superior a él mismo sin salirse de su lugar de autoridad. a. La falsa humildad

Lo que es aun peor que la falta de humildad en la vida de una persona es, la falsa humildad de la cual la persona está sumamente orgullosa pensando que ha actuado con humildad.

I. La persona que posee una falsa humildad se está engañando a sí misma.

II. La humildad fomenta la serenidad. III. Leer (Sal. 22, 113:5, 6, 119:165; Is. 53; Col. 2:18, 23; 1ª Jn. 4:18). IV. La humildad tiende a echar fuera el temor. V. La humildad nos permite alcanzar el éxito. El orgullo y la arbitrariedad prohíben el crecimiento espiritual y el avance


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intelectual. El hombre que todo lo sabe, no aprende nada, de manera que es la actitud humilde la que prepara la escena para recibir el saber y el cómo hacer las cosas para que nos conduzca al éxito. Es un principio divino que la fortaleza se perfecciona en la debilidad. La persona que no comprende este factor deshonra a Dios. (Fil. 4:13). b. ¿Cómo se alimenta la humildad? ¿De qué manera se alimenta la humildad? He aquí cinco caminos diferentes: I. Hacer que Cristo ocupe el trono de nuestro corazón. II. Obedecer a Cristo. III. Asumir la actitud y el comportamiento de un niño pequeño. IV. Seguir el ejemplo de Cristo en la oración. V. Seguir el ejemplo de Cristo en las relaciones personales. 6. FACTOR DOMINIO PROPIO a. El dominio propio El dominio propio se basa en el amor. Saber cuándo hablar, qué hablar o qué decir. Cuando actuar y de qué manera, cuando quedarnos callados, controlar la ira, las malas palabras, etc. La palabra griega para dominio de uno mismo procede de la raíz que quiere decir agarrar o aferrarse a…, lo cual describe la fortaleza de la persona que se apodera de sí misma, que es capaz de controlarse totalmente. El control de uno mismo es una actitud esencial y una de las características más importantes del que dirige. Sin él, el líder pierde su efectividad y además perderá también el respeto de sus discípulos. Cuando el líder no tiene control alguno sobre su propio espíritu, la más insignificante consecuencia le irrita. La más mínima provocación lo pone furioso y victima de sus propias pasiones indisciplinadas y perdiendo el control con frecuencia; el dirigente pierde la confianza que en él había depositado su grupo.

El control de uno mismo da valor necesario para salir adelante a solas. No debe desviarse de su visión por causa de la opinión y de las sutiles presiones que ejerce la multitud que le rodea. El control de sí mismo hace que el dirigente tenga el valor necesario para salir adelante por sí solo. b. ¿Cómo desarrollar y ejercer el dominio propio? I. Dependencia de Dios. II. Vida disciplinada. III. Decisiones por adelantado.


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IV. Dar gracias por las adversidades. V. Gobernar nuestro espíritu. VI. Controlar nuestros pensamientos. Lo que consigue el dominio propio: La libertad. La confianza. El gozo. La estabilidad. El liderazgo. 7. FACTOR COMUNICACIÓN El liderazgo necesita visión, metas, misión, etc. Pero no se hace esto en una manera solitaria, la labor del que dirige consiste en comunicar el objetivo a seguir, la misión y la metas. El líder debe ser un comunicador. La comunicación es al mismo tiempo un arte y una ciencia. Es un arte que requiere la misma atención, la práctica persistente y las cuidadas técnicas como puedan requerir el pintar un cuadro, el hacer una escultura o el tocar un piano. Es una ciencia que se basa en los principios de la psicología. El aprender a comunicarse de manera efectiva es de gran importancia para usted como dirigente, porque usted no alcanzará nunca su potencial como tal sin ella. La comunicación efectiva vence el aislamiento, es un factor en la reproducción, tiende a proteger la libertad de expresión y presenta debidamente los pensamientos que valen la pena. 1) Evalúe su grupo El líder debe saber cómo tratar a las personas en particular, no todas son duras, no todas son suaves. Algunas personas son muy sentidas y todo les duele, algunos son más dispuestos, etc. Cada persona en particular necesita una palabra en particular. El líder debe tener ese discernimiento para saber cómo tratar con las personas, porque cada una necesita un cuidado especial y diferente de las demás. Ser muy cuidadoso al corregir y al dar lugares u oportunidades. Ver quién puede hacer… y quién no puede, quién está listo para… y quién no. Y todo esto se necesita saber comunicar con inteligencia para no dar lugar a malos entendidos, hacerles ver a los discípulos que no hay privilegios para unos y para otros no. El líder debe conocer la vida de sus discípulos para evaluarlos y darles a ellos una descripción de cómo está trabajando y creciendo.

El líder debe: Informar.


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Impresionar. Convencer. Entretener. Activar. Leer Santiago 1:22 2) Dejar de preocuparse: Hay que pasar la barrera de la preocupación. 3) Referirse a lo conocido. La experiencia. La comunicación no significa descargarse frente al público. La comunicación implica la idea de interesarse íntimamente en los demás, y el dirigente es una persona que tiene que involucrarse con las gentes. La palabra comunicación tiene su raíz en la palabra communis, que significa común. A fin de ser una persona que se comunica de forma efectiva, usted debe imponerse una disciplina mediante la cual pueda ver las cosas tal y como las ven las demás. En algunas ocasiones se valdrá usted de: a. Acumulación. b. Repetición de una afirmación. c. Exposición. d. Comparación. e. Ilustración general. f. Caso específico. g. Testimonio. 8. FACTOR INVERSIÓN No estoy hablando sólo del dinero. Me refiero al tiempo de su vida. Nuestra vida es el tiempo, hay personas que dicen: “mi familia nunca está feliz, les doy dinero, les compro todo lo que necesitan y sin embargo no son felices. La respuesta a este dilema es que lo necesitan a él. De nada sirve la inversión material. El líder debe invertir su tiempo que es su vida en los demás. Si el líder no sabe invertir, poca ganancia tendrá. Si usted invierte o da algo lo recibirá multiplicado y las escrituras repiten esto una y otra vez. (Gal. 6:7) (Lc. 6:31) (2ª Co. 9:6). 9. FACTOR OPORTUNIDAD

El líder es una persona que está capacitada para preparar a otros líderes y a personas que ayuden en la iglesia y que sirvan de columnas en el ministerio. El líder ve lo que otros no ven y sabe lo que otros no saben. El líder esta para dar más que para recibir. Dar oportunidad a los miembros fomenta la confianza, el apoyo y la


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comunión con dichos discípulos. El dirigente debe saber que el puesto que tiene no es suyo, que él también está aprovechando una oportunidad que Dios le dio y eso debe transmitir a los demás. La oportunidad nos hace ver que la vida es una serie de obstáculos. 10. FACTOR ENERGÍA El dirigente sin energía es como un pianista sin manos. La energía produce entusiasmo y transmite motivación. El apóstol Pablo y su compañero Silas, languideciendo en una cárcel de Filipos, oraban y cantaban himnos de alabanza a Dios a media noche. Estaban llenos de energía que da vitalidad porque Dios es la fuente inagotable. 11. FACTOR PERSEVERANCIA No importa cuántas veces lo intente no deje de seguir adelante, porque la actitud que usted tenga con sus discípulos es la que tendrán ellos el día de mañana. Es mejor morir intentando que vivir frustrado. No siempre las cosas salen como uno quiere, el líder debe saber eso y todo lo que precisa es la fuerza de la voluntad y no hace falta que usted espere a mañana. 12. FACTOR AUTORIDAD La autoridad no tiene nada que ver con autoritarismo. La autoridad le da al dirigente la capacidad de decir lo que se va a hacer y cómo se va a hacer. Pero también tiene el derecho de escuchar y elegir propuestas de trabajo. La autoridad sin amor es como címbalo que retiñe o como metal que resuena, la autoridad se ejerce en la iglesia para fomentar el respeto a los demás y mantener orden en las cosas sagradas. La autoridad externa es la que causa que la persona ejerza su influencia sobre otros en virtud de símbolos o del lugar que ocupa. La autoridad interna es el amor de Dios. 13. FACTOR CONOCIMIENTO Dice La Biblia en Oseas 4:6 “Mi pueblo fue destruido porque le falto conocimiento”. El conocer las escrituras nos llevan a entender la verdad divina, nos guían por el camino correcto e impide que otros falsos maestros nos desvíen de la luz de Cristo. El líder está obligado a enseñar las verdades de la Palabra de Dios, sus discípulos deben saber donde están parados, deben conocer a Dios, se les debe inculcar la doctrina desde temprano, meterles en la cabeza a los oyentes que el evangelio no es un camino de pétalos de rosas. El conocimiento es lo que fortalece la espiritualidad, la comunión, la ayuda mutua y el amor.


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14. FACTOR SERVICIO Servicio, diakonia. Diakonia aparece unas treinta y cuatro veces en el Nuevo Testamento. Su significado básico es «brindar ayuda, auxilio o asistencia personal a otros». En el griego secular se usaba para la actividad de servir las mesas, ocuparse de las necesidades de la familia o para servicios en general. Proviene de la misma raíz griega de la palabra «diácono» El Líder es un servidor de los demás y aunque está capacitado para dar órdenes, Jesús dijo: el mayor debe ser sirve <Lucas 22:26>. 15. FACTOR ENSEÑANZA Enseña, didasko. En el griego clásico el significado elemental de didasko sugiere la idea de hacer que alguien acepte algo. Se puede traducir como «enseñar, informar, instruir, demostrar o prescribir». Tiene como meta comunicar conocimientos y habilidades de manera sistemática, para lograr el desarrollo de las personas. Los maestros se entregan a los hechos y a la instrucción sistemática. En el Nuevo Testamento el enfoque de la enseñanza es cómo llevar a cabo la voluntad de Dios. Las personas que tienen este don mencionado en Romanos 12.7 son las que, independientemente de su cargo o ministerio particular dentro del cuerpo de Cristo, están motivadas por el deseo de clarificar y exponer la verdad. Disfrutan de los retos de la mente y del aprendizaje. Por lo general, son capaces de transmitir bien, y siempre sentirán la necesidad de que la verdad bíblica sea expuesta con precisión, con pruebas bien documentadas de las conclusiones a que lleguen. 16. FACTOR EXHORTACIÓN Exhorta, parakaleo. Un llamado a acercarse y ayudar, confortar, ofrecer consuelo o ánimo, apelar a, urgir o alegrar; el que exhorta ofrece un estímulo de apoyo, y sostiene a los que requieren asistencia a la vez que los urge a seguir un determinado modo de conducta. La parakiesis («exhortación») puede llegarnos por el Espíritu Santo, por las Escrituras o por otras personas que poseen este don. Si bien cada líder posee dones diferentes, todos deben tener la capacidad de saber exhortar. El líder está motivado a alentar a las personas a crecer en el Señor. Son equipados con la gracia especial de estimular o guiar a la gente (Hch. 8.31) a seguir una conducta digna y a progresar en lo personal; hacen de la doctrina algo práctico.

CONCLUSIÓN Resumiendo esta enseñanza en diez puntos entendemos que el líder debe ser:

1. Equilibrado

a. En el trabajo b. En el carácter


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2. Paciente

a. Con la gente b. Cohesivo (saber tener intimidad), sin olvidar que las personas estando a solas son diferentes.

3. Positivo

a. Elogiar b. Motivar c. Reconocer

4. Cultivar

a. Buenas relaciones b. Acercarse a la gente c. Alentar a los tímidos d. Entusiasmo

5. Saber comunicar

a. Inquietudes b. Proyectos c. Ideas, etc.

6. Ser emocionalmente

a. Estable b. Flexible c. Maduro i. Socialmente ii. Personalmente

7. Ser

a. De perdón i. Sin rencor ii. Sin falsedad b. Fiel c. Honesto d. Sujetado al ministerio

8. Dar el ejemplo

a. Trabajar b. Estar dispuesto c. Saber escuchar


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9. Ministrar

a. Interceder b. Ayunar c. Bendecir d. Contagiar

10. Te ganas el derecho de dirigir a otro por la

manera en que lo amas.

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Referencias: Una vida con propósito.

Liderazgo que perdura.

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