lorier, eduardo - según the economist, la economía mundial está en peligro (2005)

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  • 7/24/2019 Lorier, Eduardo - Segn the Economist, La Economa Mundial Est en Peligro (2005)

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    ::portada::Amrica Latina y Caribe::Uruguay. Millones de columnas

    30-07-2005

    The Economist: "la economa del mundo entero est en peligro"Eduardo LorierRebelin

    Lo del ttulo lo expresa, ni ms ni menos, que el principal vocero periodstico de la burguesa aescala planetaria. Si, lo dice The Economist, refirindose a las consecuencias globales del estallidoinevitable de la mayor burbuja inmobiliaria de la historia. Segn la revista, el desinfle de laburbuja no pasar de este ao. El efecto riqueza provocado por el aumento del valor de sus casasy que mueve a los estadounidenses a endeudarse y gastar podra desaparecer, y losconsumidores podran parar de gastar.

    Asimismo, varios analistas internacionales han llegado a la conclusin de que tambin seaproxima un irremediable ajuste de los desmedidos dficits en EE.UU., tanto en materia fiscal (eldficit pblico creciente fue de ms de 600.000 millones de dlares en el 2004) como comercial. O

    un ajuste del precio de los commodities (materias primas) que tambin estn bajo sospecha. Entreoctubre del 2001 y abril del 2005, su precio aument 64%. Entonces, no deja de ser importante analizar las causas de esa rotunda afirmacin delperidico ingles, abrevadero de informacin calificada hasta para el mismsimo Carlos Marx. Y ello,en primer lugar, porque el Uruguay, como tantos y tantos pases dependientes -y como siempre-,vamos a pagar muy duro y caro las consecuencias de esos ajustes en las economas imperiales.

    En segundo lugar, porque a muchos -adems de los tradicionales y consabidos cipayos- les haentrado un respeto brbaro por las recetas de los organismos multilaterales de crdito y por lasperspectivas que nos brindan las economas "desarrolladas" o "centrales" o del "primer mundo",eufemismos todos para no pronunciar la vieja -y ms que nunca vigente- palabra que lascaracteriza: imperialistas.

    Y, en tercer lugar, porque nos parece que desde una visin de izquierda, desde el bloque

    poltico-social alternativo, este dato que surge de las relaciones de produccin capitalistas debeestar presente cuando hacemos los anlisis nacionales y/o regionales y establecemos lasperspectivas. No nos alejamos del Uruguay y sus problemas, sino todo lo contrario. Pero, adems,no olvidemos que estos anlisis tienen que ver con cosas muy puntuales que estamos debatiendoen estos das en Uruguay. As, por ejemplo, el economista Jorge Caumont titulaba de esta manerauna nota en el suplemento Economa y Mercado de El Pas: La opcin es Estados Unidos, que siguea otra -y no es casualidad- titulada: Abandonemos ya el MERCOSUR. Todo lo cual podraparafrasearse en Firmemos el Tratado de Inversiones ya. The Economist esta verdaderamente alarmado -y con razn agregamos nosotros- por lo quedenomina "burbuja inmobiliaria". Obsrvese esta conclusin: "el boom inmobiliario mundial es lamayor burbuja financiera de la historia. Cuanto mayor sea el auge, mayor ser el derrumbe,cuando ello ocurra... La forma como llegue a su fin el auge inmobiliario actual podra marcar el

    curso que seguir la economa de todo el mundo en los prximos aos". Tambin lo esta el FMI, que en un informe indicaba que una crisis inmobiliaria afecta el dobleque un "crack" burstil. La burbuja inmobiliaria sustituy a la burstil, y el menor coste delendeudamiento hizo el resto. Aclaremos que la burbuja inmobiliaria no solo afecta a Estados Unidos, sino a otrosmuchos pases. Es que en varios pases (por ejemplo, Espaa, Gran Bretaa y Holanda) los valoresse duplicaron desde 1995, y en Irlanda casi se triplicaron. Ni China se a escapado. La venta depropiedades inmobiliarias representa un 25% del PIB de Pekn y el 20% del de Shangai, lo que daidea de la magnitud del negocio que se est generando. Pero, al mismo tiempo, eso estocasionando una igualmente espectacular subida de precios que se traslada a otros sectores. EnShangai, por ejemplo, los precios de la vivienda suben una media del 20% anual desde 2001. Lagran inversin que se realiza en China est tirando a su vez de la economa mundial. El gigante

    asitico compra ya el 40% del cemento mundial, el 25% del aluminio y entre el 20 y el 50% deotras materias primas vinculadas a su desarrollo industrial. The Economist considera que "en siete

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    pases desarrollados Espaa, Reino Unido, Holanda, Australia, Irlanda, Nueva Zelanda y EEUU seha generado una burbuja inmobiliaria que acabar sufriendo una correccin mediante una cada delos precios de la vivienda". Un perodo largo de bajas tasas de inters (como el que se ha dado en estos ltimos aos)impuls la demanda de crditos hipotecarios y, por ende, de viviendas, generando una espiral

    ascendente de precios de casas y departamentos, ya que la oferta no pudo cubrir esta demandaque creci muy rpido. Otro elemento que dispara los precios en el sector inmobiliario son losenormes beneficios obtenidos por los pases productores de petrleo, gracias al alza del crudo, losque suelen ser "reciclados" en el sector inmobiliario. "Los ladrillos" se han convertido definitivamente en EEUU y otros pases en un refugio para lariqueza de las familias y en un activo interesante para los inversores privados. Esto provoc una"burbuja inmobiliaria" -o sea, la oleada de aumento en los precios de las casas-, que hizo que lospropietarios se sintieran ms ricos porque sus viviendas pasaron a tener un mayor valor, lo quetermin estimulando el consumo. Todo esto a generado una serie de consecuencias muy importantes. Veamos algunas:1. El aumento -mucho mayor que el de las casas- de la deuda de los ncleos familiares. Por

    qu? Porque al aumentar los precios de las viviendas sus propietarios sacan prstamoshipotecarios -muy extendidos o comunes en EE.UU. y otros pases-, o sea, dinero en efectivo quepueden gastar. En suma, los propietarios han estado utilizando sus casas como un cajeroautomtico para extraer dinero.2. Esto ha repercutido fuertemente en el enorme gasto en consumo (gasto que explica dos

    tercios de la economa yanqui), lo que se relaciona, como veremos ms adelante, con el enormedficit comercial de EE.UU. Aprovechando el aumento de valor de sus viviendas y la disminucindel coste del endeudamiento, las familias han podido obtener grandes sumas de su patrimoniofamiliar -sea mediante la venta de viviendas, la refinanciacin y las segundas hipotecas-desempeando as a plena satisfaccin el papel que se les haba asignado en el impulso a laeconoma de mantener el crecimiento del consumo. Entre 2000 y mediados de 2003 el aumento delos gastos de consumo reales alcanz el 2,8 por 100 anual, pese a que las retribuciones totales

    reales disminuyeron de hecho durante ese mismo periodo.3. El aumento sostenido del consumo, gracias al incremento paralelo del endeudamiento de

    los hogares, ha sido el factor determinante del crecimiento del PIB a partir de 2000, limitando elprecipitado declive de la economa en 2001, estabilizndola en el invierno de 2001-2002 yestimulando el crecimiento que ha tenido lugar desde entonces. En trminos de contabilidadnacional, el aumento de los gastos de consumo personal fue responsable de casi todo elincremento del PIB verificado entre 2000 y el primer semestre de 2003, debindose a l uncrecimiento un 16 por 100 por encima del que tuvo efectivamente lugar durante ese periodo. 4. Otra consecuencia ha sido en la generacin de empleos. Dice The Economist: "El 40% detodos los empleos generados en Estados Unidos desde 2001 son en sectores vinculados con lavivienda, como la construccin, los prstamos inmobiliarios y las agencias inmobiliarias." 5. Algunos expertos creen que es la banca comercial, que ha nutrido sus cuentas de

    resultados con las refinanciaciones hipotecarias, la que se ve obligada a sostener los tipos de ladeuda para evitar una eventual explosin de la morosidad que podra producirse si los tipos deinters a largo siguieran el camino alcista introducido por la FED en los de referencia. 6. Crecimiento de la deuda de las familias, las que han podido incrementar suendeudamiento, a pesar de la desaceleracin de la economa real, la disminucin del salario realpor hora y el aumento del desempleo. Las familias estadounidenses estn altamente endeudadas,no slo por causa de la vivienda. Los datos de la Reserva Federal exhiben una deuda total porarriba de los 35 millones de millones, unos 450 mil dlares por cada familia tpica de cuatromiembros, a causa de tarjetas de crdito, automviles y otros bienes que alcanzan niveles rcord(a agosto de 2004). Y aparecieron nuevas formas exticas de financiamiento hipotecario quepermitieron tomar mas dinero, como los prestamos "slo de intereses". Segn la NAR, unaasociacin inmobiliaria de EE.UU. el 42% de todos los que compraron casa por primera vez el ao

    pasado no pagaron anticipo. Y para los crditos hipotecarios se piden cada vez menos certificadosde empleo y otros documentos de solvencia.

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    Aprovechando el aumento de valor de sus viviendas y la disminucin del coste delendeudamiento, las familias han podido obtener grandes sumas de su patrimonio familiar -seamediante la venta de viviendas, la refinanciacin y las segundas hipotecas- desempeando as aplena satisfaccin el papel que se les haba asignado en el impulso a la economa de mantener elcrecimiento del consumo.

    7. Se esta en presencia de un exceso de ahorro a escala mundial, que no encuentra canalesde inversin de envergadura equivalente. Los ahorros del mundo, calculados por el FMI en 24,9%del PBI, estn muy por encima de su promedio de largo plazo. Esa novedosa situacin estllevando a algunos "economistas lderes" a diagnosticar que el mundo est bajo los efectos de unasobreoferta mundial de ahorro (concepto que habr que registrar, ya que en las ltimas semanasse ha convertido en la frmula standard para describir la actual situacin econmica del mundo).Por eso, se observa "un mayor apetito por el riesgo", lo que agrega fragilidades al sistemafinanciero internacional. Lo que antes era local, ahora adquiere dimensiona global (Steneri) Enotras palabras ms directas, estamos en el reino de los capitales especulativos. Hoy pululan loshedge funds y estn a punto de sacar credenciales de respetabilidad, cuando en realidad soncapitales mafiosos que recorren el planeta cual piratas, incrementando todos los riesgos propiosde su carcter altamente especulativo.

    Qu pasara si estallar la burbuja?

    El Fondo Monetario Internacional compar el efecto de un crack inmobiliario frente a uno deorigen burstil. Un crack burstil, definido como una cada superior a 30% en los precios de lasacciones, "cuesta" el equivalente a 4% de crecimiento del PBI en 2 aos. Mientras que un crackinmobiliario, definido como un cada en los precios superior a 14%, produce daos similares a unacada de 8% en el PBI . Y encima sus efectos duran mucho ms: hasta cuatro aos.

    Segn el especialista John Rubino, autor de How to profit from the coming real estate bust(Cmo aprovechar la prxima depresin inmobiliaria), el valor de todas las viviendas en EEUUalcanza los U$S 14 billones, por lo que una cada en los precios de 20% representara una prdidade valor cercana a los U$S 3 billones, lo que superara ampliamente (en valores y cantidad de

    gente afectada) a la crisis de las punto com en el ao 2000. Como referencia, en Gran Bretaa, en1992, en oportunidad de la ultima callad fuerte de las propiedades, las viviendas perdieron hastaun tercio de su valor. Para el semanario especializado "The Economist", se trata sin dudas de una burbujaespeculativa que se corregira con una cada en los precios de, por ejemplo, 50% en Espaa o 25%en Holanda, para que los ratios de estos valores respecto de salarios o alquileres recuperen elnivel promedio de los ltimos 30 aos. Actualmente las tasas de inters esta subiendo y, entonces, cae la demanda de crditoshipotecarios y de viviendas, los precios se reducen y, al mismo tiempo, cae el consumo, porque lasfamilias tienen que pagar ms por las hipotecas. Si este proceso es pronunciado, el efectonegativo sobre el crecimiento econmico puede ser muy importante , porque la prdida del poderadquisitivo impacta de lleno en el consumo. Por otra parte, el ajuste del dficit fiscal traer, como

    ya se anuncio, incrementos de los impuestos y recortes en los gastos. Y para completar el ta te ti,existe el riesgo real de que una bajada de los precios de la vivienda disminuya el consumo (comopas en Holanda en 2003), con repercusiones negativas en las exportaciones de pases comoChina o Japn. stos tendran que reducir sus inversiones en EE UU con efectos muy perniciosospor la necesidad de inversin que tiene ste ltimo para sufragar su dficit de cuenta corriente(5.000 millones de dlares al da).Conclusiones

    No podemos hacer como el avestruz o pensar que el desenlace inevitable de estas

    contradicciones no nos afectar. Es un hecho que, por las malas o por las buenas, se vendr (en laterminologa de The Economist o el FMI) un gran ajuste o una gran crisis de alcance mundial (en la

    nuestra). Si se duda, no hay mas que seguir atentamente esta situacin a travs de laspreocupaciones de Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal, o de su par ingls Mervyn

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    King, gobernador del Banco de Inglaterra, o de los organismos financieros internacionales o laprensa especializada y las dudas se acaban. Que hacemos, entonces, como pequeo pas? Nos atamos ms an a EE.UU. (algo as comola versin uruguaya de los primos carnales de Menem, donde las ataduras econmicas serelacionan indefectiblemente con las polticas y militares -ir viendo lo del Paraguay-), y

    abandonamos el MERCOSUR, como quiere el superneoliberal Caumont? O buscamos la mximasdiversificacin de nuestros mercados (China, UE, Venezuela, Irn, India, pases africanos, etc.) eintentamos potenciar el MERCOSUR, sin por eso despreciar el de Estados Unidos (mientraspermanezca, antes de estallar su burbuja inmobiliaria y ajustar sus enormes dficit paralelos -fiscaly comercial-.)? Y siempre mejorando el mercado interno, ms que chico, un mercado achicadoneoliberalmente (ms de un milln de pobres, creciente desempleo estructural yprecarizacin-flexibilizacin, cada de dos dgitos del salario real y las pasividades, etc.) , esemismo mercado interno que ante cualquier desastre mundial ser -como en tantas otrasocasiones- el refugio y salvacin de las mismsimas producciones exportables, hoy tandespreciativas del mismo. Esta burbuja inmobiliaria no se da en nuestro pas, ya que la debacle de 2001 provoc unajuste muy importante en los precios de los inmuebles. A tal punto que luego de tres aos,

    solamente una parte del mercado logr recuperar lo perdido. Vista desde el Uruguay, una cada pronunciada en el poder adquisitivo de las familias deEEUU tendra efectos significativos sobre las exportaciones hacia ese pas, pero tambin haciaotros destinos, en pases ms dependientes del mercado estadounidense (como los del sudesteasitico), que incluso podran sufrir severas crisis financieras. Sin embargo, hay que recordar queeste problema de la burbuja no es exclusivo de EEUU, sino que tambin se da en varios paseseuropeos.

    Quedan para otra oportunidad analizar si seguimos siendo el patio trasero del imperialismo-o sea, si seguimos insertndonos perifricamente en la economa mundial, totalmentedependientes de la hegemona de la potencia de turno- o las contradicciones insalvables delcapitalismo, los lmites puestos por l mismo, reflejados en los crecientes procesos paralelos ymundiales de concentracin de la riqueza en un polo y de la ampliacin de las capas sumidas en la

    pobreza en el otro.* Eduardo Lorier es Senador por el Partido Comunista

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