licenciatura en desarrollo sustentable
TRANSCRIPT
PLAN DE ESTUDIOS
LICENCIATURA EN DESARROLLO SUSTENTABLE
CRUZ DURAN ANTONIO GUADALUPE
I- FUNDAMENTACIÓN
1.1- DEL CONTEXTO ACTUAL Y SITUACIÓN DE LA PRÀCTICA DEL DESARROLLO SUSTNTABLE A NIVEL NACIONAL
En la actualidad pocos de los Estados que forman parte de los Estados Unidos Mexicanos
manejan y practican el uso racionado de los recursos naturales con que cuenta, es por ello
que tampoco cuentan con una cultura para el desarrollo sustentable.
Pocas instituciones educativas de nuestro país ofertan esta Licenciatura, a sabiendas que es
importante incluirlas como una nueva fuente de empleo y conservación del medio, todo
esto debido a la utilización irracional que le estamos dando a los recursos con que cuenta
nuestro país, de los cuales, se obtiene un beneficio económico y de sustento.
1.2- HISTORIA DEL DESARROLLO SUSTENTABLE EN MÉXICO
México cuenta desde 1988, con la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al
Ambiente, en la que el desarrollo sustentable se concibe como: “El proceso evaluable
mediante indicadores de carácter ambiental, político y social que tiende a mejorar la calidad
de vida y la productividad de las personas, que se funda en medidas apropiadas de
preservación del equilibrio ecológico, protección al ambiente y aprovechamiento de
recursos naturales, de manera que no se comprometa la satisfacción de las necesidades de
las generaciones futuras” (Nebel y Wright,1999).
México adquiere el compromiso de adoptar medidas nacionales de sustentabilidad al
formar parte del Acuerdo de Río en 1992, del Programa de acción para el desarrollo
Sustentable o Agenda 21. Esto incluyó el sumarse al compromiso para el desarrollo de
indicadores, por medio de los cuales se puedan medir las políticas y estrategias de
desarrollo sustentable de un país.
En abril de 1995 la Comisión de Desarrollo Sustentable CDS de las Naciones Unidas
aprobó el programa de trabajo sobre Indicadores de Desarrollo Sustentable 1995- 2000, a
instrumentarse en diferentes etapas.
México se unió voluntariamente a este plan a partir de 1997, y en 1998 participó en un plan
piloto, junto con 21 países del mundo entero, para desarrollar dichos indicadores.
Antecedentes
Al adherirse al Programa de Acción para el Desarrollo Sustentable o Agenda 21, suscrito
durante la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, México se comprometió a adoptar
medidas nacionales y globales en materia de sustentabilidad, como también acciones
orientadas a la generación de indicadores a través de los cuales se puedan medir y evaluar
las políticas y estrategias de desarrollo sustentable.
De acuerdo con el párrafo 40.4 de la declaración de la Agenda 21, «los indicadores de
desarrollo sustentable necesitan ser desarrollados para proporcionar bases sólidas para la
toma de decisiones en todos los niveles y contribuir a autorregular la sustentabilidad de los
sistemas integrados del ambiente y el desarrollo». Estos indicadores constituyen un punto
de referencia para la evaluación del bienestar y de la sustentabilidad de un país.
En abril de 1995, la Comisión de Desarrollo Sustentable (CDS) de Naciones Unidas aprobó
el Programa de Trabajo sobre Indicadores de Desarrollo Sustentable 1995-2000, a
instrumentarse en diferentes etapas. Si bien México comenzó Su participación de manera
informal desde el arranque de la convocatoria, fue a partir de marzo de 1997, durante el
tercer taller sobre el tema celebrado en Costa Rica –los anteriores fueron en Estados Unidos
y Bélgica (1995 y 1996) – cuando se sumó formalmente a otros 21 países que, de manera
voluntaria, habían decidido participar en la prueba piloto mundial para desarrollar dichos
indicadores. En 1998, el número de países participantes llegó a los siguientes 22:
África: Ghana, Kenya, Sudáfrica, Marruecos y Túnez.
Asia / Pacífico: China, Filipinas, Maldivas y Paquistán.
Europa: Alemania, Austria, Bélgica, Finlandia, Francia, Reino Unido y República
Checa.
América: Barbados, Bolivia, Brasil, Costa Rica, México y Venezuela.
2. Nociones en torno al desarrollo sustentable
A partir de la Conferencia Mundial de Naciones Unidas sobre el Medio Humano
(Estocolmo, Suecia), del 5 al 16 de junio de 1972, se manifestaron, por primera vez, las
preocupaciones de la comunidad internacional en torno a los problemas ecológicos y del
desarrollo. En 1976, con motivo de la Conferencia Mundial de Naciones Unidas sobre
Asentamientos Humanos, conocida como Hábitat (Vancouver, Canadá), se consideró la
necesidad de mejorar la calidad de vida a través de la provisión de vivienda adecuada para
la población y el desarrollo sustentable de los asentamientos humanos.
En 1987, la Comisión Mundial de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el
Desarrollo adoptó por unanimidad el documento Nuestro futuro común o Informe
Brundtland, que constituye el acuerdo más amplio entre científicos y políticos del planeta y
que sintetiza los desafíos globales en materia ambiental en el concepto de desarrollo
sustentable. Éste se definió como «aquel que satisface las necesidades esenciales de la
generación presente sin comprometer la capacidad de satisfacer las necesidades esenciales
de las generaciones futuras».
Para ilustrar la presencia de los componentes de la sustentabilidad en un marco conceptual,
los tres ámbitos fundamentales involucrados en tal concepto fueron plasmados en un
esquema sinóptico: el bienestar humano, el bienestar ecológico y las interacciones. Se trata
de un enfoque integrado del desempeño económico y ambiental, que conforma un área de
factibilidad, donde el crecimiento económico debería ser suficiente para resolver el
problema de la pobreza y paralelamente sustentable para evitar una crisis ambiental,
considerando además tanto la equidad entre las generaciones presentes como la equidad
inter-generacional que involucra los derechos de las generaciones futuras.
1.3- SOBRE LA SITUACIÓN ACTUAL DEL DESARROLLO EN EL ESTADO DE SINALOA
Sinaloa es uno de los estados más ricos de nuestro país, cuenta con grandes extensiones de
valles para la producción de hortalizas, En Sinaloa la actividad económica se sustenta
principalmente en su agricultura. Desde hace cuatro décadas practica la agricultura más
tecnificada y moderna del país, su alta productividad le permite participar en los mercados
internacionales como exportador de productos frescos de origen hortofrutícola, las que
representan más del 65 % de las exportaciones totales que realiza Sinaloa.
Aproximadamente el 97 % de las exportaciones de hortalizas, legumbres y frutas que el
estado realiza son enviadas a Estados Unidos, el resto es para cubrir parcialmente los
mercados de Canadá, España, Francia, Italia, Suiza, Argentina, Alemania, Holanda,
Bélgica, Japón y Colombia.
Sinaloa también es importante como productor agrícola nacional, se producen más de 8
millones de toneladas anuales. A nivel nacional participa en los primeros lugares en
hortalizas (pepino, tomate, calabaza, chile y berenjena), frutas (mango, melón y sandía),
maíz, frijol, soya, cártamo, arroz, trigo y sorgo.
Existe en Sinaloa, una población económicamente activa que asciende a 745 mil personas,
de las cuales el 97 % se encontraba laborando en 1996. El 44.5 % de la población ocupada
se encontraba en 1995 ubicada en el comercio y en la prestación de servicios diversos; el 38
% en las actividades primarias y el 17.8 % en la industria.
El trabajo, el empuje y la constancia de los productores sinaloenses colocan hoy en día y
con toda justicia a la ganadería de nuestro estado en primer plano nacional. La ganadería en
el estado es una actividad de vital importancia. Casi 3 millones 700 mil hectáreas del
territorio sinaloense son de pastos y agostaderos, con una población de 2 millones 228 mil
bovinos, ovinos y caprinos, mismos que producen más de 63 mil 538 toneladas de carne. A
tal producción se suman 54,271 toneladas de carne de pollo, todo ello permite que Sinaloa
sea autosuficiente. Gradualmente se ha logrado disminuir el déficit en la producción de
leche y carne de ovicaprino.
La producción pesquera obtenida hasta el mes de agosto de 1997, ascendió a 121,625
toneladas, lo cual representó un avance del 79.08 % respecto a lo obtenido en 1996;
sobresalen en la producción de 1997 el atún con 49,193 toneladas, el camarón con 9,334
toneladas, especies de escama con 1,663 toneladas y la producción en presas embalses y
diques con 1,904 toneladas.
El crecimiento relevante de la actividad pesquera en el estado y el país, está sin duda en la
acuicultura. En Sinaloa, esta actividad ha adquirido gran importancia y ha arrojado
beneficios sociales y económicos de gran magnitud entre la población, lo cual se ha
traducido en una fuente de alimentos con un elevado valor nutricional y generación de
empleos, que han evitado conflictos sociales en las comunidades pesqueras por falta de
trabajo. La acuicultura mantiene a Sinaloa como el principal productor de especies marinas
del país.
La industria alimenticia sinaloense es un importante eslabón entre los sectores primario y
secundario de la actividad económica. A finales de 1997, el valor de la producción
industrial fue de aproximadamente 7,743 millones de pesos.
Los establecimientos que conforman el sector comercial, constituyen una amplia gama de
actividades. Los principales giros son la venta de artículos alimenticios y bebidas, le sigue
la operación de restaurantes y fondas, loncherías, servicios de reparación en general,
establecimientos que se dedican al arrendamiento de inmuebles, talleres mecánicos, boticas,
farmacias y droguerías, carnicerías y pescaderías. El resto aunque numeroso, se refiere a
establecimientos de variadas actividades de menor importancia.
La afluencia turística registrada en el estado se incrementó al pasar de 1 millón 549 mil 210
turistas en 1996, a 1 millón 683 mil 189 en 1997, representando un incremento del 8.6 %.
Asimismo, la derrama económica generada durante 1997 fue de 5 mil 600 millones de
pesos, que comparativamente con la derrama de 3 mil 323 millones 700 pesos de 1996
representa un incremento del 50.4 %.
1.4–UN MARCO CONCEPTUAL PARA LA FORMACIÓN DEL LICENCIADO EN
DESARROLLO SUSTENTABLE
Es necesaria la inclusión del Licenciado en desarrollo sustentable porque como pudo
observarse anteriormente, Sinaloa cuenta con mucha actividad económica, por lo tanto el
incremento de la explotación de recursos también. Además de ello, se están presentando
serios problemas ambientales, estos van desde la contaminación del medio ambiente en las
tres formas distintas: agua, tierra y aire; la constante tala inmoderada de árboles que día a
día deja a más especies animales sin un hogar.
Es por ello, la importancia de tener personas interesadas por el desarrollo de nuestro estado
pero teniendo en mente que ese desarrollo incluirá la práctica racional del uso de recursos
naturales con que contamos.
Claro está que para que pueda existir un buen desarrollo se debe partir de políticas por parte
del gobierno del Estado y particularmente por el resto de las instituciones educativas que
dicen preparar a personas capaces para la utilización racional de los diferentes recursos con
que se cuentan en el Estado.
¿Realmente están preparando las instituciones de educación superior a personas capaces de
utilizar los recursos naturales con los que cuenta el Estado de Sinaloa de manera racional y
con la finalidad de obtener beneficios de los mismos? Como podemos observar, de acuerdo
a los hechos, las diversas licenciaturas e ingenierías que se ofertan en nuestro estado tienen
más interés por explotar los recursos presentes, pero lo que pasa, que no se interesan por
cuidarlos y darles una equitativa explotación, de tal manera que al realizar esa explotación
no se dañe al medio ambiente ni se terminen los recursos moderadamente.
Debido a un análisis previo de las carencias con que cuenta nuestro Estado Libre y
Soberano de Sinaloa se deduce que la Licenciatura en Desarrollo sustentable sí es necesaria
a lo largo y ancho del Estado de Sinaloa por la gran cantidad de recursos para el desarrollo
económico con que se cuenta y que si no sabemos aprovecharlos de manera racional, al
agotarse estos, el desarrollo del Estado no sería el miso, debería aprovecharse la inclusión
de esta Licenciatura; de esta manera, el impulso al campo económico del Estado sería aún
mejor.
II- DE LOS OBJETIVOS
2.1- OBJETIVO GENERAL
Apoyar los recursos sociales económicos y naturales del Estado de Sinaloa a través
de proyectos de desarrollo social y productivo que procuren y promuevan una mejor
calidad de vida humana.
2.2- OBJETIVOS ESPECÍFICOS
Formar profesionales, intelectuales e investigadores especialistas en desarrollo
sustentable cuya labor se fundamente en los principios de interculturalidad,
sustentabilidad y cooperativismo fortaleciendo a la vez los valores de solidaridad,
equidad y respeto.
Formar profesionales capaces de educar al resto de la población en el cuidado del
medio ambiente fundamentado en el respeto y utilización racional de los recursos
naturales con que contamos.
III- PERFILES ACADÉMICOS
3.1- PERFIL DE INGRESO
Los aspirantes a ingresar en la Licenciatura en desarrollo sustentable deberán tener:
Capacidad para trabajar en equipo
Disposición a las diversas formas de aprender
Interés por el desarrollo sustentable de las localidades Sinaloenses.
Interés en la conservación y uso racional de los recursos naturales para el
desarrollo social, cultural y económico.
Ser egresado de un bachillerato general o de un bachillerato tecnológico afín
a la licenciatura.
3.2- REQUISITOS DE INGRESO:
Carta de exposición de motivos para ingresar al programa
Haber aprobado la evaluación durante el proceso de selección (EXANI II y
evaluación interna).
Certificado de Bachillerato
Acta de nacimiento
6 Fotografías tamaño credencial
Certificado médico
Cubrir cuota de inscripción
3.3- PERFIL DE EGRESO
Al egresar, el Licenciado en Desarrollo sustentable será capaz de:
Incursionar en cualquiera de las áreas donde se manejen los recursos naturales para
que sean utilizados racionalmente.
Reeducar a la sociedad en la educación ambiental y el cuidado de su entorno.
Crear, formular y evaluar planes de desarrollo para las empresas en las que se
contengan acciones que permitan un desarrollo sustentable.
Obtendrá las bases científicas, tecnológicas y sociales, para lograr la conservación,
el aprovechamiento, renovación y recuperación ordenado y sostenido de los
recursos de la comunidad, así como la renovación y recuperación de las zonas
degradadas.
3.4- REQUISITOS DE PERMANENCIA Y TITULACIÓN
Para permanecer en el programa el alumno deberá:
Asistir regularmente a las sesiones-clase (contar con un mínimo de 80% de
las asistencias)
Ser responsable
Cumplir con las tareas que le demande el programa
Para obtener el título de Licenciado en desarrollo sustentable:
Haber culminado el 100% del plan de estudios
No tener adeudos con la institución educativa
No adeudar materias
Haber culminado las prácticas profesionales y el servicio social estudiantil
Cumplir cualquiera de las múltiples opciones para titulación estipuladas en la Ley
Orgánica de la institución educativa.
En este apartado creo que deberías de ser mas explicito en cuanto al ingreso y
egreso asi mismo en cuanto a las cuestiones de cómo deberá de terminar sus
estudios pero teniendo siempre en cuenta las cuestiones que reglamentan a la
facultad que la va a ofertar. Si de algo te puede servir de apoyo entra a la página de
la UAS y en la de DGEP revisa algo de los programas, de manera general
considero está bien solo revisa muy bien los sustentos de lo que dices.
IV- ORGANIZACIÓN Y ESTRUCTURA CURRICULAR
4.1- DESCRIPCIÓN DE LAS ÁREAS DE FORMACIÓN
ÁREA: NATURALEZA Y RECURSOS NATURALES
En la Licenciatura en Desarrollo Sustentable, es importante que el alumno conozca la
importancia de la naturaleza en la región para que se pueda comprender y planear
estrategias que contribuyan al desarrollo planificado y racionalizado de los recursos
naturales con que cuenta.
Esta parte de la licenciatura le dará al Licenciado en Desarrollo Sustentable conocimientos
teóricos sin duda alguna, indispensables para el desempeño fiable en toda su carrera.
ÁREA: DESARROLLO SUSTENTABLE
Fundamental para el buen desempeño del Licenciado en Desarrollo Sustentable, ésta es el
área núcleo de la Licenciatura y en la que se fundamenta la misma.