EL PEYOTE COMO MEDICINA TRADICIONAL Introduccin El objetivo de este librillo es dar una visin general y sinttica de la situacin actual del peyote en Mxico y el mundo, como medicina y planta sagrada; sus orgenes mticos y culturales, su trasfondo espiritual, cientfico, medicinal, y la situacin legal y ecolgica que lo envuelve en estos das. Cuenta una antigua leyenda que "Tatewari", el Abuelo Fuego, condujo a los dioses ancestrales en la primera bsqueda ritual del peyote. Tatewari apareci cuando los dioses ancestrales se hallaban en un templo wirrrica (Huichol), sentados en crculo, quejndose de distintos males. Preguntaron entonces al Gran Dios Fuego cul era la causa de sus padecimientos. ste les respondi que sufran porque no haban ido a cazar el "venado divino", hikuri o peyote a Wirikuta (localidad situada al noroeste del territorio Wirrrica, (entre San Luis Potos y Zacatecas) y por eso haban sido privados de la "carne divina". Los dioses ancestrales, en asamblea, decidieron tomar sus arcos y flechas y seguir a Tatewari para "encontrar sus vidas" en la tierra del "venado divino" o "amo de la especie de los venados" Los dioses ancestrales, en ayunas y en continencia sexual, despus de confesarse para volverse espritu, llegaron a Wirikuta y encontraron, bajo arbustos apenas visibles sobre el

suelo, las cabezas verdes del peyote (que pasan inadvertidas para ojos inexpertos). Atribuyeron su origen a huellas de pata de venado. Lo llamaron "venado divino" o "amo de los venados". Buscaban un venado de 5 puntas (peyote con 5 costillas), lo que corresponde, segn ellos, a los 4 puntos cardinales y el zenit. Hundieron en el hikuri sus flechas ceremoniales con adornos, alrededor del "hermano mayor". Muchos sollozaban, todos rezaban en voz alta. Dividieron el peyote entre todos los participantes. Con el cargamento de peyote regresaron caminando a sus pueblos.

Es as como muchos de los pueblos indgenas mexicanos han sostenido una relacin estrecha con el peyote, donde ste ocupa un lugar trascendental en sus vidas y constituye la Medicina principal que sustenta el equilibrio de la salud de sus pueblos. La inspiracin que reciben con esta planta lo podemos ver representado hasta hoy, en las innumerables y hermosas obras artsticas que realiza el pueblo Wirrarica (Huicholes) con cuentas de chaquira y estambres, donde en muchas de ellas representan al hkuri como a un gran sol. Un sol que esperan siga brillando para sus futuras generaciones.

Biologa, etnografa e historia del peyote El peyote es un pequeo cactus conocido cientficamente como Lophophora williamsii, que contiene ms de cincuenta alcaloides aislados hasta ahora (Hofman & Schultes, 1979/1992), siendo la mezcalina el componente psicoactivo ms estudiado por la farmacologa moderna. Es endmico del desierto mexicano y se estima que su uso ceremonial data de varios miles de aos. La evidencia mas antigua del uso del peyote data de 5700 aos, por indgenas americanos habitantes de lo que ahora es el Estado de Texas, en la cueva de Shumla (Bruhn & al., 2002). En Mxico, todo vestigio de su influencia cultural y cientfica quedo prcticamente extinto por ms de quinientos aos de persecucin y castigo. Las crnicas de la conquista y la temprana colonia atestiguan el uso comn tanto del peyote como de otras plantas psicoactivas en ceremonias y ritos de los habitantes del Mxico Antiguo. El uso ritual del peyote entre los indgenas centro y norteamericanos fue considerado un pecado por la Iglesia Catlica, que prohibi su consumo en 1620 a travs de un Edicto de Fe publicado en todos los territorios espaoles de la poca. La persecucin del peyote era extrema y en ciertos manuales de la Inquisicin se inclua esta planta entre las preguntas imprescindibles sobre los pecados abominables para la confesin de los conversos (Stewart, 1993). La Iglesia Catlica no se hubiera molestado de publicar dicho decreto si el consumo de peyote fuera aislado y slo por

algunos cuantos grupos tnicos localizados. La impresionante campaa que emprendi la Iglesia Catlica para erradicar el consumo del peyote es indicativa de que el uso de este cactus era prevalente en todo Mxico. El Archivo General de la Nacin de Mxico cita noventa juicios de la Inquisicin por posesin de peyote en 45 localidades documentadas en territorio Espaol a lo largo de un periodo de 265 aos. En Mxico, estos sitios incluyen lugares como Tehuacan, Tepoztln, Huejotzingo, Zacualpan, Taxco, Puebla, Atlixco, Cuautla y Chalco, entre otros, aun cuando estos lugares no forman parte de los territorios que hoy se documentan como zonas de consumo tradicional. Tres citas llaman la atencin porque corresponden a lugares remotos: Antequera en el Caribe, Nuevo Mxico en EUA y Manila, en las Filipinas. El extenso alcance que tena este pequeo cactus en los tiempos de la Colonia es evidencia de la prevalencia del consumo del Peyote por su influencia en los usos y costumbres de diversas etnias mexicanas de la poca, algunas que hoy da han perdido prcticamente por completo su tradicin peyotera, como por ejemplo el pueblo Otom y entre otros.

El Peyote: medicina tradicional mexicana o droga ldica? La cosmovisin indgena tanto en Amrica del Sur como del Norte ha definido a las plantas medicinales psicoactivas como sagradas, reconocindolas y venerndolas por su espritu maestro. Han sido empleadas como herramientas para acceder a la fuente del conocimiento y se les atribuye el ms alto grado de Maestras por las enseanzas implcitas en el trance de comunin con el espritu de la planta. Diversas plantas denominadas psicotrpicas (como la Ayahuasca, el Yopo, el San Pedro, el Peyote, Daturas y Hongos), que hoy da estn en listas que prohben su posesin para consumo, han sido pilares fundamentales de los sistemas mdicos y religiosos de diversas culturas indgenas desde el Amazonas y los Andes, hasta las selvas de Mxico y planicies de Norteamrica. El uso del peyote en la actualidad Hoy, en Estados Unidos como en Mxico, est prohibido el consumo del peyote, ya que la mezcalina est catalogada junto con la cocana o herona como una droga con un alto potencial de abuso, cuyo uso es inseguro y que carece de valor teraputico aceptado. Estos criterios de clasificacin del peyote son claramente etnocntricos desde la perspectiva de la medicina indgena y debatibles desde una perspectiva cientfica. Sin embargo, a pesar de las estrictas restricciones legales, se ha autorizado el uso del peyote en Mxico a ciertas poblaciones indgenas que han empleado este cactus psicoactivo de manera tradicional: Wirrarikas, (Huicholes), Raramuris (Tarahuamaras), (Nayeri) Coras y Tepehuanes. En los EEUU, a su vez, indgenas asociados a la Iglesia Nativa

Americana (INA) pueden usarlo ceremonialmente en sus reservaciones. En las ceremonias de la INA el peyote es utilizado como sacramento religioso en ceremonias de velacin de un fuego, por lo general en un tipi alrededor de un altar con una media luna, a lo largo de toda la noche (Anderson, 1980). Se estima que por lo menos existen 300,000 miembros activos de la Iglesia Nativa Americana en los Estados Unidos; sin embargo, su nmero aumenta considerablemente al incluir a la poblacin internacional no indgena que participa en ceremonias de peyote dentro del modelo del altar de la media luna utilizado por la Iglesia Nativa Americana en diversos pases del mundo. Existen asociaciones culturales y religiosas en Espaa, Alemania, Francia, Ecuador, Per, Brasil, Uruguay, Chile, y Colombia, entre otros, que sostienen que el peyote es una medicina ancestral que debe ser reconocida como un sacramento de libre culto dentro de las formas ceremoniales. Cada ao, ms de dos millones de peyotes son distribuidos legalmente dentro de los Estados Unidos y Canad para uso religioso, dato que pone en duda la creencia generalmente aceptada de que el peyote es una droga peligrosa e impredecible para el consumo humano. Utilizado en el contexto de la Iglesia Nativa Americana, los efectos adversos del peyote son prcticamente nulos. En un estudio que evalu la seguridad del uso del peyote entre los indgenas Dine (Navajo) se calcul que la probabilidad de una reaccin adversa al consumo del peyote es de uno a 70,000 (Bergman, 1971). El hecho de que el peyote est culturalmente integrado y validado por el grupo social es determinante en proveer un contexto psicolgico de mayor seguridad, debido a que los participantes no se perciben cometiendo un acto ilegal o sancionado por el grupo social como inmoral.

Los efectos del peyote en la salud mental A pesar de la limitada investigacin, existen algunos estudios cientficos que apuntan a la seguridad toxicologca del uso ceremonial del peyote y que sus efectos pueden contribuir al bienestar psicoemocional de quienes lo consumen regularmente. Un estudio reciente de buen diseo metodolgico, evalu el impacto del peyote en la salud mental de miembros de la Iglesia Nativa Americana y concluy que la ingesta peridica de peyote no conduce a ningn impedimento psicolgico o cognitivo sino que, por el contrario, contribuye positivamente al bienestar psicolgico de los sujetos que lo consumen en este contexto (Halpern & al, 2005). Los participantes en este estudio fueron miembros activos de la Iglesia Nativa Americana que han ingerido el peyote entre 150 a 500 veces. El consumo total de peyote a lo largo de la vida de los sujetos no se asoci de manera negativa a indicadores de funcionamiento neuropsicolgico. Los resultados de las pruebas psicomtricas del grupo experimental (consumidores regulares de peyote en contexto de la INA) fueron inclusive mejores que los del grupo control en diversas pruebas de funcionamiento neuropsicolgico, sin presentar dficit en ninguna escala del inventario de salud mental (RMHI), pudiendo concluir as que el uso del peyote no conlleva secuelas psicolgicas o cognitivas en este contexto estructurado. El peyote en el tratamiento del alcoholismo y la drogadiccin El peyote es considerado por muchas tribus nativo-americanas como una de las medicinas ms fuertes y poderosas con un

amplio espectro de aplicaciones incluyendo el tratamiento del alcoholismo y la drogadiccin (Anderson, 1996). La efectividad del peyote en propiciar la recuperacin exitosa del alcoholismo ha sido reportada por numerosos etngrafos de la Iglesia Nativa Americana. En un extenso estudio de campo realizado en la poblacin indgena Din (Navajo), Calabrese reporta: para muchos, la Iglesia Nativa Americana es el pilar que sustenta su recuperacin del alcoholismo, drogadiccin y de otras condiciones de orden psicolgico y conductual (Calabrese, 2007). El psiquiatra Karl Menninger lleg a una, conclusin similar: El peyote no representa dao alguno para esta gente, por lo contrario, les inspira, es benfico, confortante y parece ser espiritualmente nutritivo ha sido un mejor antdoto contra el alcohol que cualquier otro remedio ofrecido por los misionarios, el hombre blanco, la Asociacin Mdica Americana y los Servicios de Salud Pblica (Menninger, 1971). En efecto, la participacin indgena en servicios de atencin a la salud publica regionales se increment de 20% a 80% cuando las juntas de Alcohlicos Annimos fueron reemplazadas por ceremonias de la INA como alternativa teraputica (Stubben, 1997). As mismo, las ceremonias de peyote han demostrado jugar un papel crucial en el tratamiento y la planificacin de estrategias de post tratamiento para problemas adictivos (Calabrese, 2007). Cabe resaltar el hecho de que el gobierno federal de los EEUU le ha otorgado al peyote la categora oficial de alternativa teraputica, con su propio cdigo de servicios al cliente, en los manuales gubernamentales de los Servicios de Salud Indgena (IHS) para el tratamiento de la drogadiccin y alcoholismo. La eficacia teraputica de las ceremonias de peyote observada en indgenas norteamericanos en el tratamiento del alcoholismo

parece residir en una combinacin de diversos elementos; por un lado, se han propuesto acciones farmacolgicas, que presentan propiedades que disminuyen el apetito por el alcohol (anti craving). Esto se puede explicar en parte por que se han encontrado isoquinolinas como metabolitos del peyote. Algunos estudios neurofarmacolgicos implican a las isoquiloninas por sus preferencias a receptores dopamnicos y endorfnicos como efectivas en disminuir el apetito por el alcohol y los opiacios (BlumFuttermann & Pascarosa, 1977). Por otro lado, existe una compleja dinmica psicosocial en torno a las ceremonias que puede transformar la conciencia de sus participantes (inclusive sin haber ingerido peyote). En una ceremonia de peyote la persona se encuentra entretejida en una narrativa de auto transformacin y renacimiento. El peyote altera los procesos de sugestionabilidad, atencin, y auto-conciencia, de tal manera que facilita aperturas que pueden conducir a cambios en la vida cotidiana. La estructura cuidadosamente calibrada de la ceremonia, hace a la mente ms sugestionable para recibir mensajes curativos e induce un estado espiritual de auto-reflexin que permite una reestructuracin cognitiva y emocional. No existen investigaciones clnicas controladas sobre los efectos teraputicos del peyote, sin embargo, s hay numerosos estudios de caso que han documentado sus aparentes efectos positivos. Las experiencias curativas reportadas por consumidores de peyote incluyen: elaboradas visiones interpretadas como enseanzas de orden superior, mensajes divinos o advertencias, realizaciones importantes sobre uno mismo, catarsis emocionales, experiencias de transcendentales acompaadas por un deseo de transformar comportamientos de desadaptacin. Muchas personas reportan tambin haber

vivenciado experiencias de muerte, renacimiento y autorreflexin profunda que han sido fundamentales para lograr cambios de patrones disfuncionales (Calabrese, 2007). Un periodo de traslape o de permanencia duradera del efecto, casi imperceptible, descrita como una sensacin prolongada de bienestar generalizado, se observa frecuentemente y es reportado por varios grupos indgenas. Este bienestar prolongado puede durar de 7 a 10 das y est marcado por un aumento en la sensacin de apertura y una gran disposicin hacia la comunicacin (Albaugh & Anderson, 1974). Este efecto del peyote debe ser mejor estudiado en el contexto de la salud mental y programas de mantenimiento de abstinencia. El peyote parece inducir cambios positivos duraderos, particularmente en aquellas personas que participan en varias ceremonias consecutivas, con intervalos apropiados entre cada ceremonia, factor que tambin debe de ser tomado en cuenta en el diseo de un tratamiento. Aplicaciones del peyote como medicina herbolaria Como parte de la amplia farmacopea herbolaria de los pueblos indgenas, el peyote parece tener mltiples aplicaciones y sus propiedades curativas son consideradas efectivas para los ms diversos casos clnicos. Por ejemplo, la pomada de peyote aplicada como ungento puede ser utilizada para aliviar quemaduras, reumatismo, insolacin e inflamacin muscular o trauma por golpe. Las compresas de peyote son tambin aplicadas en el caso de mordeduras de insectos ponzoosos o de vbora. El peyote parece estimular el sistema inmunolgico y tener efectos anti-tumorales (Franco- Molina & al., 2003). Tambin puede ser utilizado como antisptico y se le reconocen efectos antibacteriales y antiparasitarios (Anderson, 1996; Raetsch, 1987). El peyote es recetado por mdicos indgenas

tradicionales para curar enfermedades como tuberculosis, cncer, artritis, sfilis, etc. Se recomienda tambin para fortalecer el corazn y como tnico cardiovascular. Para aquellos pueblos indgenas que utilizan al peyote en un contexto ceremonial y lo definen como sacramento divino, este cactus lo cura todo. Diversas etnias entienden al peyote como un tipo de panacea, una medicina sagrada que es todapoderosa y puede ser utilizada para curar cualquier enfermedad. Todas estas atribuciones que se le reconocen al peyote como planta medicinal no han sido comprobadas cientficamente debido a las restricciones legales. Sin embargo, tampoco se puede determinar que el peyote no tiene estas cualidades curativas, precisamente, porque eso tampoco se ha comprobado cientficamente. Ms an, s existen suficientes datos etnogrficos, psicolgicos, sociales y de la medicina indgena institucionalizada que sostienen empricamente el estatus del peyote como una legtima medicina herbolaria. . Falta mucha investigacin para seguir conociendo los efectos teraputicos de esta planta y su potencial como agente curativo y preventivo de enfermedades fsicas y mentales.

Consideraciones en la aplicacin del peyote como medicina psicosocial En un contexto ceremonial, el peyote ha demostrado ser una medicina efectiva para diversos padecimientos psicoemocionales, como por ejemplo: depresin, ansiedad, trauma y diferentes condiciones de crisis existencial o momentos crticos de vida que requieran de apoyo y direccin. Sin embargo, como se ha mencionado, los efectos teraputicos de las ceremonias de peyote no se pueden explicar exclusivamente por la accin farmacolgica del cactus y es por eso que sus efectos en un contexto hospitalario no podran ser replicados y seran diferentes. El contexto estructurado de las

ceremonias, las intervenciones del facilitador, la dinmica social, los smbolos y las metforas del ritual son elementos inseparables que coadyuvan conjuntamente a generar la experiencia subjetiva en aquellos que participan en las ceremonias de peyote indgenas. Esta interrelacin simbitica entre planta y ceremonia no puede ser discretamente separada. La efectividad del peyote como medicina psicosocial depende de la ceremonia misma y del manejo instruido de todos los elementos del ritual por facilitadores capacitados. Esto representa un reto metodolgico para los sistemas de salud pblica, ya que es imperativa la colaboracin entre mdicos, terapeutas y hombres o mujeres del camino de la medicina ancestral. Falta mucha investigacin para seguir conociendo los efectos teraputicos de esta planta y su potencial como agente curativo y preventivo de enfermedades mentales. La medicina tradicional indgena puede ofrecer nuevos conocimientos a la medicina occidental moderna para encontrar alternativas teraputicas tanto para poblaciones indgenas como no indgenas. En un mundo plural y democrtico todos los ciudadanos tienen derecho a la salud y deben poder elegir el tratamiento de su eleccin. Las medicinas complementarias pueden, as como el conocimiento ancestral, ofrecer un mayor nmero de opciones de cuidado y tratamiento. Esto es particularmente relevante en el campo del tratamiento de las adicciones. El reto est en empatar dos paradigmas parametricamente diferentes con aparentes polaridades conceptuales. Lo que para la medicina indgena representa una medicina prestigiada, para la medicina occidental alpata es una droga ldica sin valor teraputico. Esta notoria discrepancia radica, por un lado, en la actitud culturalmente adoptada hacia los estados modificados de conciencia y hacia la

definicin que el grupo social adopta y proyecta a sus objetos de consumo. Las sociedades industriales no valoran la transformacin de la conciencia como un valor positivo o adaptativo, sino que la entienden slo desde una ptica ldica, como el alcohol y las drogas narcticas. En cambio, las sociedades indgenas han recurrido frecuentemente a la transformacin de la conciencia para cumplir con diversas funciones al servicio del colectivo o sus miembros, y ha sido un valor frecuentemente institucionalizado. As mismo, la sociedad occidental ha definido al peyote como una droga recreativa con escaso valor teraputico y extremadamente nocivo para la salud, mientras que para decenas de diversas tribus indgenas en todo el continente, este cactus es definido como una planta sagrada y como medicina prodigiosa. La definicin adoptada por las autoridades internacionales y difundida al pblico en general merece ser cuestionada, validando el conocimiento de la medicina tradicional indgena y tomando en cuenta los efectos teraputicos documentados en mltiples estudios de campo. Aspectos Jurdicos de Peyote La Convencin nica en materia de psicotrpicos entr en pleno vigor de ley internacional el 16 de Agosto de 1976 y ha sido el modelo de clasificacin adoptado por la mayora de pases en la comunidad internacional, siendo determinante en las polticas adoptadas por Mxico. El artculo 245 de la Ley General de Salud clasifica al peyote por contener la mezcalina. El ejercicio de esta clasificacin incluye en nuestro pas la aplicacin del Cdigo Penal con penas de hasta 10 o ms aos de prisin, por ser su posesin considerada un delito contra la salud. Debe de llamar la atencin cmo estas plantas, que

forman parte de los sistemas mdicos indgenas y que son reconocidas como medicinas por ser consideradas promotoras de la salud y bienestar, pueden, a la vez, representar un grave riesgo a la salud y carecer de valor teraputico para el sistema nacional de salud. Debido a que el peyote forma parte de los usos y costumbres de los Wirrarika (Huicholes), los Raramuri (Tarahumara) y los Nayeri (Cora), las autoridades del Ejecutivo Mexicano han en efecto contemplado ciertas garantas individuales para estos grupos indgenas, exentndoles cargos de delito por consumir y portar este cactus. Sin embargo, por solamente mencionar algunos casos, apenas en el 2009, un Marakame Huichol fue detenido durante una semana por portar siete cabezas de peyote, logrando salir libre despus de haberle informado al juez sobre los derechos indgenas aplicables, pero claramente; no obstante, ni el Ministerio Pblico, ni la Polica estaban actualizados en esta excepcin a la Ley, y el Marakame y sus acompaantes fueron privados de la libertad por supuesta comisin de delito. Mas recientemente, y publicado en la el peridico La Jornada del 28 de febrero de 2010, se dio la injustificada interrupcin de una peregrinacin Wirrarika en pleno rezo por agentes de la polica estatal, agrediendo de esta forma una costumbre milenaria. Hasta ahora, el Legislativo no se ha ocupado de revisar la clasificacin actual del peyote como droga psicotrpica, sin valor teraputico a la luz de la medicina tradicional indgena y bajo los principios de libertad religiosa y de conciencia. La evidencia antropolgica y arqueolgica que seala a estas plantas como sagradas para los pueblos indgenas es vasta en la literatura etnogrfica y apunta a sus atributos teraputicos y

sacramentales. Las leyes en nuestro pas deben de considerar la complexa relacin que tiene una poblacin de un Mxico tan socialmente dinmico ante los legados culturales de los pueblos originales. El peyote, por ser endmicamente mexicano, merece su propia norma, bajo una ley especficamente diseada para un Mxico del siglo XXI, sin contraponer los intereses polticos internacionales o poner en riesgo la salud pblica. Plan de manejo sustentable de la reserva ecolgica de Wirikuta desde la perspectiva de la medicina tradicional Debido a una serie de desafortunadas circunstancias sociales en torno al desierto de Wirikuta, la depredacin y desgaste de la biota medicinal continan debido a que no existe un plan de manejo para el peyote, planta considerada actualmente como en peligro de extincin. Este plan debera de contemplar el consumo que generacionalmente ha conllevado y que probablemente siga en incremento por la demanda generada tras siglos de permanencia en un rea bien delimitada en San Luis Potos. El proyecto de la reserva sagrada de Wirikuta podra tambin contemplar la inclusin de proyectos en sitio, que permiten a las comunidades indgenas que peregrinan al desierto, as como a las comunidades rurales que all habitan, una explotacin sustentable de la biota endmica, particularmente el fomentar la investigacin sobre las potenciales propiedades teraputicas de las plantas del desierto. Ya se han realizado reuniones inter -regionales con representantes indgenas de los pueblos Wirrarika para establecer la ruta sagrada de peregrinacin y su trnsito

ininterrumpido. Sin embargo, estos acuerdos distan mucho de ser operativos debido a la complejidad del tema. Eplogo Terminamos este estudio dejando con ustedes un rezo, un pensamiento vivo de un indgena wirrarica, para quien el cactus sagrado hikuri o peyote, forma parte esencial de su sistema de vida.

"Hay quienes tenemos alguna enfermedad fsica, del alma o del corazn o simplemente no hemos podido encontrar nuestra vida. En este desierto viviente y mgico, confn del mundo, el Venado Azul se nos revelar para encontrar nuestra vida, l nos ensear, l ser nuestra medicina. Una maximizacin del espritu nos conducir hasta el punto de la transformacin temporal en transicin a la

exaltacin espiritual, para encontrar las fuerzas del equilibrio. Esa capacidad inefable para aventurarnos sin temor en el angosto puente a travs del gran abismo que separa el mundo ordinario del mundo

del ms all. Para lograr stas fuerzas del equilibrio debemos vencer nuestros miedos, quitar los malos pensamientos de nuestros

corazones y unirlos. Los peregrinos debemos de estar limpios de todo mal de sentimiento, debemos de regresar al periodo de la vida en que ramos inocentes, antes de que furamos adultos, mundanos, ya que a sta tierra madre venimos a nacer. El pasar de este mundo

al ms all podremos hacerlo, porque al recibir el Venado Azul, dejaremos de ser ordinarios, seremos transformados. Pero hay que

recordar que es solamente temporal porque somos solamente hombres y mujeres y no dioses"

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