liber tad

Upload: anapatriciaroche

Post on 10-Jul-2015

25 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

El concepto de libertad. Con carcter general, el concepto de libertad - especialmente a nivel personal presupone la disposicin de una posibilidad de elegir. Esa posibilidad de elegir presupone a su vez la de disponer de elementos de juicio que conduzcan a la eleccin; lo que requiere la posesin del conocimiento de los componentes de esos elementos de juicio, y de la inteligencia adecuada para valorarlos debidamente y discernir acerca de la conveniencia de la eleccin. Al mismo tiempo, la libertad no es absoluta. el hombre no dispone de una posibilidad absoluta de elegir: no es posible elegir en contra de lo que disponen las leyes de la Naturaleza; ni es admisible ejercer una supuesta libertad en perjuicio de otros. Por lo tanto, la idea de libertad lleva implcito el concepto de sus lmites. Su ejercicio requiere la posesin del conocimiento por una parte, y de la inteligencia por otra; que habilitan para determinar el mbito de la libertad en el marco de los lmites de indole material y moral que la circunscriben. La libertad en la filosofa de Grecia clsica. En trminos filosficos, la cuestin de la libertad encierra primeramente la de determinar si el hombre posee una libertad, y tambin la de definir en qu puede ella consistir. Los griegos, en funcin del rgimen imperante en su poca, contrapusieron el concepto del hombre libre al de esclavo. Distinguan por una parte la condicin de libre en el sentido poltico como aquella del que ingresaba en la polis como ciudadano libre; as como por otro lado la que podra traducirse por liberalidad o condicin espiritual por la cual la capacidad de creacin se encontraba plenamente activa. En tal sentido, el hombre libre era el que no estaba sometido; de manera que posea por un lado la plena capacidad de decidir que comprenda una autodeterminacin respecto de s mismo pero tambin en los asuntos de la comunidad, lo que a su turno implicaba un concepto de responsabilidad hacia la comunidad en cuanto a ese ejercicio de su libertad. Por tanto, en este concepto, el hecho de ser libre significaba asimismo asumir obligaciones. Existen tres rdenes en que es aplicable la idea de libertad. La libertad frente a la Naturaleza. Se entiende como la posibilidad de eludir el encontrarse sometido a un orden csmico predeterminado e invariable; ya sea que ste sea considerado como emergente de un Destino (el Hados) que condiciona el desenvolvimiento de la vida y las acciones del individuo, o como producto de una

Naturaleza en la que por efecto de sus leyes inexorables todos los acontecimientos estn directamente impuestos por una relacin de causalidad. En la concepcin griega antigua, solamente eran libres frente al Destino aquellos que no haban sido elegidos por l para realizarlo. De tal manera, aquellos que podan eludir a su Destino eran libres, pero en el sentido de que carecan de importancia; mientras que los elegidos por el Destino, si bien no eran libres en el sentido de poder hacer lo que quisieran, en cambio s lo eran en un sentido superior, en cuanto se considerara la libertad como la capacidad de realizar sin ningn gnero de impedimentos aquello que era necesario realizar, por acto de su voluntad. Considerado el orden csmico como equivalente al orden natural, la cuestin de la libertad consiste en establecer en qu grado el hombre - sobre todo cuando exista un deber para ello - puede sustraerse a la causalidad que interrelaciona los acontecimientos naturales. En este sentido, los antiguos griegos consideraron el punto a partir del concepto de que el alma, si bien integrante de la realidad de la Naturaleza, dispona de una condicin distinta a la de los cuerpos y por tanto era susceptible de una libertad de movimientos. Tambin consideraron que en el campo de la realidad, la libertad era una condicin propia del orden de la razn, de modo que el hombre es libre en cuanto es un ser racional y se disponga a actuar como tal. De tal modo, si bien todos los hombres tienen la capacidad de ser racionales y de actuar racionalmente, siendo as libres; la libertad es una condicin especialmente propia de los sabios - los filsofos - puesto que son ellos los que disponen del medio adecuado para actuar racionalmente. La libertad frente a la comunidad humana. Esta forma de libertad - que puede calificarse como poltica o social - consiste fundamentalmente en la autonoma, o la independencia que permite al individuo regir su propio destino dentro de la comunidad; as como a las propias comunidades sin tener imposiciones o impedimento por parte de otras comunidades. Respecto de la libertad poltica del individuo, ella no consiste sin embargo en la capacidad de eludir las leyes de la polis; pero s en elegir sus propias conductas dentro de las que no las infringen. La libertad personal. Esta forma de libertad se manifiesta como la disposicin de la autonoma del individuo frente a las presiones o imposiciones originadas en la comunidad que integra. En el concepto griego, si bien el individuo se deba a su polis, se reconoca su derecho al ocio; su derecho a distraerse al menos temporalmente de sus obligaciones cvicas para dedicarse a cultivar su propia personalidad individual.

En la evolucin del pensamiento filosfico de la Grecia clsica, se advierte la tendencia a identificar el concepto de libertad, cada vez ms, con el ltimo de los significados; esto es, el de la libertad como una condicin personal. Especialmente a partir de los estoicos, la libertad fue fundamentalmente considerada como la capacidad de disponer de s mismo; en tanto que todo lo exterior al individuo, ya se trate tanto de las instituciones e imposiciones de la sociedad como las propias pasiones o necesidades, es considerado como un equivalente a la opresin. El hombre aumenta su libertad en la medida en que logra prescindir de aquello exterior a s mismo; de modo que atienda en la forma ms exclusiva a aquello que est en nosotros, como expresaba Sneca. La libertad, en esta concepcin, consiste en una capacidad de ser uno mismo. Los neoplatnicos consideraron que la libertad consista principalmente en la contemplacin; en una ausencia de accin, a la cual se restaba importancia. Para otros pensadores, la libertad equivala a tener el conocimiento de lo inexorable, del Hados; comprensin del Destino que permite al Sabio aceptar ese orden csmico, y en consecuencia actuar no por efecto de una coaccin sino por su voluntad consecuente con ese conocimiento de su Destino. Tanto para Platn como para Aristteles, la concepcin de la libertad estaba estrechamente ligada a la idea de la autonoma, es decir, la capacidad de decidir por s mismo. Pero, especialmente para Aristteles, la cuestin de la libertad queda directamente referida al respeto, no solamente del orden natural, sino tambin del orden moral. Para el Estagirita, todos los procesos de la Naturaleza operan en funcin de una finalidad que les es propia, tienden a sus propios fines. Pero en el hombre, si bien sus acciones siempre tienden a un mismo fin - consistente en la bsqueda de la felicidad - ellas estn caracterizadas por un poder de ejercicio de la voluntad. En el hombre, las acciones slo son morales cuando estn gobernadas por la voluntad frente a una posibilidad de haber elegido - el libre albedro; pero esa posibilidad slo puede existir cuando el hombre no est sujeto a la coaccin de la ignorancia. Aristteles consider que el ejercicio de la libertad es esencialmente una obra de la razn; as como que toda vez que el hombre llega a conocer el bien solamente puede actuar de acuerdo con l. La actuacin del hombre es libre, cuando su finalidad racional conduce a la realizacin del bien. El concepto aristotlico de la bsqueda de la felicidad fue includo entre los principios esenciales de la concepcin liberal del Estado, por los padres de la Constitucin de los Estados Unidos; entendido en el sentido propiamente griego. Ese concepto tiene un sentido mucho ms adecuado en su expresin en ingls, ya que la palabra happiness no significa solamente una felicidad en sentido

subjetivo; sino un estado espiritual resultante de lograr una plena realizacin personal, como resultado del propio esfuerzo al desenvolverse en un ambiente que permita el completo desarrollo de todas las potencialidades individuales, en todos los rdenes de la vida, como solamente es posible en un sistema poltico donde exista una verdadera libertad individual que lo habilite. Libertad y Cristianismo. Naturalmente, el desarrollo del cristianismo llev a que la cuestin de la libertad se planteara, en el plano filosfico, en funcin de las afirmaciones del dogma; especialmente en cuanto pareca surgir una contradiccin entre el concepto de libertad del hombre y la condicin de Dios como poseedor de todo el saber y de todo el poder, de lo cual resultaba la idea de la predestinacin divina. El concepto religioso del pecado, la admisin de la existencia del mal, implicaba necesariamente suscitarse a nivel filosfico la cuestin de si, para hacerse merecedor del castigo, el hombre al pecar ejerca una forma de libertad; si es concebible que el hombre disponga de la libertad para elegir optando por el mal. Frente a estos planteamientos, los grandes pensadores cristianos de la antigedad - sobre todo Agustn de Hipona (San Agustn) y Toms de Aquino (Santo Toms) - acudieron a los conceptos del libre albedro y de la gracia. Para San Agustn, debe distinguirse entre el libre albedro consistente en la existencia de una posibilidad de eleccin, y la libertad, que consiste en la efectiva realizacin del bien con un objetivo de alcanzar la beatitud. Se percibe claramente la afinidad con las ideas antes expuestas por Aristteles. Siendo el libre albedro una mera posibilidad de eleccin, est admitido que la accin voluntaria del hombre pueda inclinarse hacia el pecado; cuanto se acta sin la ayuda de Dios. La cuestin de la libertad, entonces, consiste en determinar de qu modo puede el hombre usar su libre albedro para realmente ser libre, es decir, para escoger el bien. Naturalmente, ello conduce directamente a la cuestin relativa al modo en que puede conciliarse la posibilidad de eleccin constituda por el libre albedro, con la predeterminacin divina. San Agustn, en definitiva, se refiere a esta cuestin como el misterio de la libertad; y considera que si bien Dios tiene el conocimiento previo (presciencia) de qu elegir el hombre, ello no determina que de todos modos sea el hombre el que elige, con lo que sus actos no son involuntarios. La Gracia se presenta como un don, un algo que se tiene o no se tiene, y que se recibe como una concesin y no se obtiene como retribucin de un mrito. Es un concepto especialmente perteneciente a la filosofa religiosa, tanto del cristianismo como del judasmo y del islamismo.

Los telogos cristianos distinguen una gracia santificante de una gracia carismtica. Por la primera, segn Santo Toms, el hombre se une a Dios, santificndose. La Gracia carismtica es un don de Dios, que lleva a los cristianos a perseverar en su F y a los infieles a creer en l, haciendo que el hombre plazca a Dios. Tambin designada como gracia actual, corresponde a las criaturas por el mero hecho de su existencia, y es la luz intelectual y determinacin de voluntad que conduce al hombre a vivir conforme con Dios. Pero la Gracia por s sola no produce efecto, sino que requiere el consentimiento y la cooperacin de quien la recibe. Segn San Agustn, la gracia es lo que posibilita la libertad, al otorgar al hombre la voluntad de querer el bien y realizarlo. Fuera del campo teolgico, existe un concepto de la Gracia en sentido esttico, surgido especialmente a mediados del Siglo XVIII. Platn haba ligado la Gracia a la idea de la belleza; considerando que algo es bello y a la vez es bueno, si tiene Gracia. Pensadores como Burke asociaron la Gracia a la belleza del movimiento; en tanto que Schiller consider que la belleza del movimiento continuo y pausado deriva de la libertad, y que la gracia es una sntesis de la belleza esttica o natural, y la belleza dinmica o moral. San Agustn consideraba que el liberum arbitrium era la facultad de la razn y de la voluntad por medio de la cual es elegido el bien, mediante el auxilio de la gracia; y el mal por la ausencia de ella. Santo Toms - cuya obra principal es la Summa Theologica - consider que el hombre goza del libre albedro como capacidad de eleccin, como un poder listo para obrar; y asimismo posee la voluntad, que necesariamente se presupone no sujeta a ninguna coaccin, ni siquiera de la presciencia divina. Pero si bien estar libre de coaccin es una condicin de la existencia de la voluntad, no es suficiente; sino que junto a ello debe estar presente el intelecto - la inteligencia y la razn como instrumento para el conocimiento del bien, a fin de que ste pueda constituirse en objeto de la voluntad. En consecuencia, el libre albedro es un poder cognoscitivo. Tambin es perceptible la clara influencia del pensamiento aristotlico. No hay libertad del hombre sin posibilidad de eleccin, su libre albedro; pero de todos modos el ejercicio de la libertad no consiste meramente en el hecho de elegir, sino que consiste en elegir lo trascendente. El hombre, enfrentado a la instancia de elegir, puede caer en el error; sobre todo, si elige exclusivamente por s mismo, sin auxiliarse con Dios.

Para Santo Toms, por tanto, el hombre dispone de una completa libertad de eleccin, ya que - afirma - por su libre albedro el hombre se mueve a s mismo a obrar; pero ello no significa que exista la libertad de indiferencia a que alude la conocida paradoja del asno de Buridn. La paradoja del asno. La paradoja del asno, atribuda a Juan Buridn, fue formulada para demostrar la dificultad de la cuestin del libre albedro, cuando conduce a la situacin de la libertad de indiferencia. Un asno, que encontrara dos montones de heno exactamente iguales, ubicados en distintas direcciones pero a la misma distancia, no podra elegir por uno de ellos, y morira de hambre. La conclusin sera que, predominando en el asno la preferencia por no morir de hambre, terminara eligiendo cualquiera de los montones de hecho; con lo cual se evidencia que la eleccin no est necesariamente fundada en motivos razonables. La paradoja pone en cuestin los conceptos de libertad, eleccin, razn, preferencia y voluntad. En realidad, el ejemplo es muy anterior a Buridn. Ya Aristteles haba examinado el problema de las motivaciones equivalentes. La idea de la libertad de equilibrio o libertad de eleccin indiferente, parte del concepto de que, si el libre albedro es meramente la posibilidad de elegir, es un elemento solamente negativo; se trata solamente de la posibilidad de elegir o de no elegir, pero no proporciona los fundamentos para realizar un eleccin efectivamente acertada y definitiva. Al no disponerse de un criterio que permita explicar la razn para optar por una eleccin, resulta imposible ejercer ninguna accin verdaderamente libre. La idea de la libertad indiferente ha sido fuertemente cuestionada, sobre todo por filsofos modernos como Descartes, Spinoza y Leibniz, que rechazaron la idea meramente negativa de la libertad. Libertad y determinismo. En los Siglos XVI y XVII el tema de la libertad gir especialmente en torno a la discusin de la compatibilidad o incompatibilidad de la libertad del hombre con la presciencia divina. Luego de examinarse ampliamente las cuestiones de si Dios mueve o no la voluntad del hombre de un modo completo o si simplemente colabora con l en el ejercicio de su libre albedro; desde el Siglo XVI, a partir del desarrollo creciente

de la ciencia y consecuentemente de la creciente comprensin de las Leyes de la Naturaleza, el problema central pas a ser el de si el concepto de libertad puede subsistir frente a la idea del determinismo. El centro del problema de la libertad, se desplaz as del campo teolgico al campo de la filosofa no religiosa. La realidad pas a tener un componente muy perceptible con el desarrollo de la ciencia y su principio de causalidad. El concepto de la existencia de los fenmenos de produccin necesaria, suscit con nuevos bros el problema de Libertad versus Naturaleza. Ms modernamente, pensadores como Spinoza y Leibniz y tambin Hegel, consideraron que la libertad consiste esencialmente en obrar en conformidad con la naturaleza, que se encuentra en armona con la realidad. Con variable intensidad, los filsofos de este perodo intentaron conciliar la idea de libertad con el determinismo, tendiendo a considerar el libre albedro como conducente a elegir en conformidad con la naturaleza. El determinismo, en general, consiste en la afirmacin de que en el mundo de la realidad lo que ha existido, existe o existir, como lo que ha ocurrido, o ocurre y ocurrir, est absolutamente prefijado. Las doctrinas deterministas son resultantes de la concepcin mecanicista del Universo. Se trata de una doctrina que no es susceptible de prueba de tipo cientfico, en cuanto obviamente slo podra probarse conociendo el futuro de antemano. Por lo tanto, funciona en condicin de hiptesis; ya sea considerada como una hiptesis de ndole metafsica o de ndole cientfica. Emmanuel Kant, abord el problema de la libertad y el determinismo desde el punto de vista de considerar que la necesariedad existente en la Naturaleza no impide la libertad; y considerar la posibilidad de su coexistencia. Afirm Kant que el determinismo existe en relacin con el mundo de los fenmenos pero que la libertad existe en el nomeno. Noumenn es un trmino griego antiguo, cuya traduccin ms aproximada sera la que lo refiere a las cosas que son pensadas. Fue Platn el que ms claramente distingui el mundo inteligible, o mundo de lo racional, del mundo sensible o mundo de los fenmenos materiales; afirmando que la nica realidad metafsica, el nico mundo cognoscible o susceptible de conocimiento real en vez de objeto de mera opinin, es el mundo noumnico. Kant analiz en su Crtica de la Razn Pura el concepto de las apariencias como los objetos pensados que corresponden al mundo de las categoras, designados fenmenos; en tanto que los objetos pertenecientes meramente al entendimiento, accesibles mediante la intuicin no sensible, son designados nomenos.

Para Kant, en el reino de la Naturaleza, que es el reino de los fenmenos, rige un completo determinismo; pero la libertad existe en el reino de los nomenos, reino de lo moral, de tal modo que la libertad es un postulado moral. El hombre es libre, no porque pueda apartarse de las leyes que rigen el mundo de lo natural, sino porque l no es enteramente una mera realidad natural. En sus relaciones empricas, el hombre debe someterse a las leyes de la Naturaleza; pero como ser inteligente, en sus relaciones inteligibles, el mismo individuo que debe someterse a aquellas leyes, es libre. La libertad, por lo tanto, es esencialmente un concepto propio del individuo, y se ejerce por el individuo. Hegel considera que la libertad es, fundamentalmente, la libertad de la Idea; pero no consiste en el libre albedro que constituye apenas un momento en el desenvolvimiento de la Idea rumbo a su propia libertad. La libertad, en sentido metafsico, es la autodeterminacin, que no se asimila al azar, sino que es resultante de la determinacin racional del propio ser. El pensamiento de Hegel conduce la cuestin de la libertad hasta el terreno de la Historia. En el Siglo XIX, el debate filosfico en torno a la cuestin de la libertad se deriva hacia el tema de si el hombre puede ser libre tanto de los fenmenos de la Naturaleza, como de aquellos de la sociedad. Surgi una corriente materialista, para la cual el determinismo tiene una vigencia universal; y otra corriente liberal, conforme a la cual no solamente la libertad es posible, sino que es el elemento esencial del hombre, tanto en el orden moral o psicolgico como religioso o moral, y asimismo en la sociedad. John Stuart Mill aparece como expositor del tema de la libertad desde el punto de vista emprico, no como una cuestin de especulacin terica o filosfica, sino como una cuestin de hecho. Henri Bergson sostuvo que el yo (o la conciencia) es libre, precisamente porque no se rige por las leyes de la mecnica, mediante las que se regulan las relaciones de los fenmenos naturales. La corriente materialista extrem el concepto del determinismo, llegando a afirmar que no solamente los fenmenos naturales estn sometidos a un determinismo universal, sino tambin las circunstancias de la Historia. Carlos Marx sostuvo el determinismo histrico, conforme al cual la Historia est sujeta a un proceso, si bien no de carcter mecnico s de carcter dialctico siguiendo las ideas de Hegel - de tal manera que en su doctrina tanto filosfica como poltica, resultaba intil tratar de oponerse a la Marcha de la Historia. Marx y Engels unieron a la concepcin del determinismo de la Historia la confeccin de una ideologa de carcter utpico y voluntarista, equivalente a la creada por Platn, que a su criterio constitua el objetivo hacia el que avanzara esa Marcha de la Historia: el socialismo.

El desarrollo lgico de la concepcin determinista de Marx, condujo a la concepcin poltica del Estado totalitario; y consecuentemente al sometimiento a la voluntad colectiva de toda autonoma individual en todos los mbitos de la vida. El surgimiento histrico del Estado totalitario - inicialmente en la U.R.S.S., y luego en la Italia fascista, en la Alemania nazi y en otras naciones - fue consecuencia de la concepcin de la filosofa materialista y de doctrina del determinismo histrico. l condujo a una situacin en que, estando los gobernantes de esos Estados convencidos - o afirmando estarlo - de que se encontraban en posesin de una verdad absoluta resultante de ese imperativo determinista, era lgico suprimir toda discrepancia, y no solamente en el plano de lo poltico o lo econmico, sino incluso en el mbito de la filosofa, la literatura, el arte, e incluso la ciencia. El trasplante de la concepcin determinista del universo fsico al mundo de lo social, no podra haber sido en la prctica sino consecuente con su concepto de la inexistencia de toda libertad. No es de sorprender, entonces, que puesto en evidencia lo trascendente de los conceptos filosficos acerca de cuestiones aparentemente reservadas al campo de mero anlisis intelectural, en su relacin con la vida real de las sociedades humanas, esa concepcin haya sido sustento de los totalitarismos polticos, que suprimieron hasta los ltimos vestigios de libertad.

INTRODUCCIN El presente trabajo tiene como objeto explorar un tema sumamente complejo que ha sido centro de discusin para filsofos de todos los tiempos. Hablo de la libertad, esta facultad que los hombres se atribuyen considerndola una de las caractersticas esenciales que los diferencian de los animales, convirtindolos en seres superiores. El hombre cree ser el nico ser de la creacin esencialmente libre pero antes de tan hipottica afirmacin (y digo hipottica, porque el desarrollo siguiente nos llevar a confirmarla o refutarla) es conveniente abordar el respectivo anlisis del tema, para formarnos as, una opinin propia al respecto. Es as que, saber que es la libertad, conocer sus limites y sus formas, pero fundamentalmente saber si podemos ser libres o no, me parece que es lo menos

que como individuos pensantes podemos hacer. En este caso, convendra preguntarnos si todo lo que hemos realizado desde que tenemos uso de razn o lo que tenemos planeado realizar como proyecto de vida ( si es que lo tenemos), fue o ser producto del ejercicio de nuestra libertad o tristemente resultado de los designios del destino, la voluntad de Dios, la naturaleza o como suela llamrsele. En este sentido es fundamental saber que es la libertad y si realmente existe. En la bsqueda de tal conocimiento he recopilado abundante material que espero resulte satisfactorio a la hora de desarrollarlo.. CONCEPTO DE LIBERTAD Como forma de introduccin al concepto de libertad, me pareci conveniente explorar la etimologa de esta palabra. El termino latino liber (relacionado con libertas, libertad) del cual proviene "libre", tuvo el comienzo, el significado de " persona en la cual el espritu de procreacin se halla naturalmente activo", de donde cabe la posibilidad de denominar liber o libre al joven cuando al alcanzar la madurez sexual, es incorporado a la sociedad como hombre capaz de asumir responsabilidades. En esta acepcin latina, el hombre libre es aquel que goza de una condicin no esclava o sometida. Como se trataba de un reconocimiento social o jurdico, ser libre consista, sobre todo, en poder hacer. Pero tambin se aplicaba el sentido de autodeterminacin, entendindose que se era libre para hacer algo por si mismo. La libertad se convierte as, en la posibilidad de decidirse, y al decidirse, de autodeterminarse. Como se puede observar, la nocin de libertad ya en su origen apunta en dos direcciones, una de condicin no esclava y la otra, de autodeterminacin. Teniendo esto en claro, es el momento oportuno para comenzar a exponer una serie de definiciones del concepto de libertad necesaria para que formemos nuestra propia opinin al respecto. Es as que iniciaremos la exposicin, con una simple definicin de diccionario. "Libertad: poder inmanente al sujeto, en el orden de su realizacin, que puede definirse como la capacidad de decidirse o autodeterminarse." Continuamos con Rene Descartes para quien la libertad...: "...consiste solamente en que nosotros podemos hacer una misma cosa o no hacerla, afirmar o negar, perseguir o evitar una misma cosa. O mas bien consiste solamente en que, para afirmar o negar, perseguir o evitar, las cosas que el entendimiento nos propone, obramos de tal manera que no sentimos que ninguna fuerza fuerce." Sigue el orden E. Rabier quien afirma que el hombre tiene libertad cuando...: "tiene el poder de hacer lo que no hace y de no hacer lo que hace." Es el turno de Carlos Vaz Ferreira. Segn el...: "la verdadera definicin de libertad es cuando el hombre... no depende totalmente de lo que no es el." Continua la exposicin A. Herzen considerando que...: "por libertad..., se entiende una facultad que permitira al hombre querer una cosa mas bien que otra, independiente de toda causa o motivo, externo o interno, que venga a determinarlo a tal o cual resolucin o decisin." Cambiamos de libro, pero no de tema. Segn Fernando Svater: "No somos libres de elegir lo que nos pasa..., sino libres para responder a lo que nos pasa de tal o cual modo." En su mismo libro, Svater nos brinda una cita de Octavio Paz, la cual transcribimos con gusto: "La libertad no es una filosofa y ni siquiera es una idea:

es un movimiento de la conciencia que nos lleva, en ciertos momentos, a pronunciar dos monoslabos: si o no." Continuamos con una afirmacin de Jaime Barylko, quien nos aclara que...: "...si se pretende hablar de libertad, todo el discurso ha de girar previamente en torno a los determinismos varios que nos sellan durante toda la vida. El resto, si algo queda, es libertad". Antes de concluir la exposicin, dar lugar a dos definiciones pertenecientes al material informtico consultado. La primera corresponde a A. Lalande, quien afirma que la libertad es un...: " Estado de aquel que, tanto si obra bien como si obra mal, se decide tras una reflexin, con conocimiento de causa. Es el hombre que sabe lo que quiere y porqu lo quiere, y no obra mas que en conformidad con las razones que aprueba.". La segunda pertenece a Spinoza quien nos dice a travs de E. Coreth que es...: "Libre lo que existe nicamente por necesidad de su naturaleza y solo por ella se determina a la accin..." PERSONA Y LIBERTAD "Todo hombre vive eligiendo, y al elegir se construye a si mismo"1. Todos sabemos que el hombre se distingue de los dems seres de la naturaleza por una serie de caractersticas especiales. Entre ellas encontramos el atributo de la libertad. Resumiendo podramos decir que "...el hombre es el nico ser de la creacin esencialmente libre."2. De igual modo, comprendemos que una piedra no es un ser libre. Lanzada al aire, no tiene otra posibilidad que caer hacia el suelo obedeciendo la ley de gravedad. La piedra no puede decidir, revelarse y no acatar la ley de la gravedad. No puede actuar de otra forma de la que esta determinada. No es libre, al igual que los dems seres de la naturaleza. En cambio el ser humano posee libertad y la utiliza para elegir el tipo de vida que desea, la que mas le convenga, que este de acuerdo con su forma de pensar y sentir, que cumpla los dictados de su vocacin, que construya su persona. "El hombre no solo es, si no tambin se hace; es fruto de si mismo, de su libertad, de sus acciones libres."3. Las acciones libres son consideradas como una propiedad de los actos voluntarios. Sin embargo el acto libre proviene en realidad del ser humano completo, de su persona, puesto que es un acto cuya causa se encuentra en la voluntad pero que tambin interviene en l la inteligencia. Considerando la estrecha relacin entre el acto libre y el acto voluntario, brindaremos un anlisis de este ultimo para poder situar mejor la libertad en el lugar que le corresponde. Anlisis de acto voluntario Las fases interiores que integran el proceso volitivo puede distinguirse en: 1) Conocimiento intelectual del objeto o fin que queremos alcanzar. Por ejemplo, comprar un regalo, concurrir al liceo, llegar a ser abogado, etc. 2) Control o freno sobre toda reaccin espontnea inmediata o consiguiente "orden" dirigida al entendimiento para que examine los actos que me propongo realizar

3) Deliberacin racional teniendo en cuenta los pro y los contra de mi futura accin. Examino las ventajas y desventajas y analizo las posibles maneras de actuar. 4) Decisin, que es el acto de la voluntad que corta la deliberacin y escoge el acto. Tomo la determinacin de ejecutar el acto concebido, me decido a actuar. A esta fase tambin se le llama eleccin o resolucin. 5) Ejecucin del acto elegido, por medio de las acciones externas e internas necesarias para ello. Es la realizacin efectiva del acto que he decidido. Segn Cuellar4 para entender plenamente este anlisis es necesario tener en cuenta lo siguiente: 1- La primera y tercera fase pertenecen al entendimiento; la segunda y la cuarta a la voluntad. La quinta fase a la voluntad y otras facultades. Ahora bien, nos explica, esta distincin entre lo que pertenece al entendimiento y lo que pertenece a la voluntad no debe llevar a su separacin. En la cinco fases estn implicados ambos; solo se trata de un predominio o de un papel mas relevante del uno o de la otra. As, en la primera fase el entendimiento no captara una situacin como debiendo ser examinada si de alguna manera no estuviera presente la voluntad; el control de la segunda fase, es un control inteligente; en la tercera fase, el entendimiento examina los motivos bajo la influencia de la voluntad que solo debiera querer lo que realmente sirve, en la cuarta fase, si el entendimiento no estuviera presente, justificando racionalmente la eleccin, esta seria ciega ( y por lo tanto no seria una verdadera eleccin); en la quinta fase, el entendimiento acta como orientador para que la voluntad haga ejecutar lo decidido. 2- El acto voluntario, continua Cuellar, es fruto de la persona total, puesto que en el estn implicados inteligencia, voluntad y toda la vida tendencial, emotiva y orgnica del sujeto, as como sus decisiones anteriores que influyen en el presente. De ah que el acto voluntario exprese de una manera concreta la totalidad de la persona humana. 3- El autor aclara adems, que no hay que identificar la cuarta con la quinta fase. Se puede dar una decisin que no se pueda ejecutar a causa de impedimentos externos o internos. 4- Por ultimo nos dice, que el proceso deliberativo no se ejerce de una manera neutra con respecto a los valores morales. Toda conducta concreta del ser humano implica su compromiso para con el valor moral, que interviene as, tambin, en el mbito de la deliberacin. TIPOS DE LIBERTAD Resultado de los mltiples significados que ha ido abarcando, el termino libertad tiene diversas acepciones que desde la antigedad se han orientado fundamentalmente en dos direcciones: libertad de ejercicio y libertad de eleccin. Como vimos al estudiar la etimologa del concepto de libertad, ya en el mundo romano se observaba esta diferencia. Entendindose, una libertad que consista en poder hacer, o libertad de ejercicio; y una libertad que se basaba en la capacidad de autodeterminarse liberndose, por ejemplo de las pasiones, era una libertad interior que como se identificaba con el ideal de autonoma se trataba de la bsqueda de una libertad de eleccin para si mismo, colocndose por encima de la libertad de ejercicio.

Para tratar adecuadamente el tema que nos interesa, convendra desarrollar estos dos tipos de libertad. Libertad de accin o de ejercicio Por lo que dijimos anteriormente se puede deducir que esta libertad, es una libertad exterior, que consiste en un obrar que carece de coaccin externa.En este sentido, se puede denominar libre a una accin cuando puede llevarse a cabo sin obstculos o impedimentos externos. O sea, obramos sin que nadie nos ponga ningn tipo de trabas para hacer lo que queremos hacer. Es as que hoy en da se habla del reconocimiento de las "libertades", incluyendo en ellas; una libertad fsica que es la capacidad de actuar sin limitesmateriales, sin vallas que impidan el movimiento o desplazamiento del hombre (por ejemplo, un hombre encarcelado carece de esta libertad); una libertad civil, que es la capacidad de fundar una familia, elegir un trabajo, elegir la residencia, etc; una libertad poltica o cvica que consiste entre otras cosas, en participar en la eleccin de las autoridades que regirn los destinos del pas; una libertad religiosa que es la capacidad de elegir la religin a seguir, as como no seguir ninguna; una libertad de pensamiento que consiste en sacar a luz nuestro pensamiento ya sea a travs de la expresin, laprensa o la enseanza, etc. Libertad de eleccin Cuando hablamos de libertad de eleccin nos referimos a un tipo de libertad esencial en el individuo. Se podra decir que consiste en la ausencia de determinacin interna previa a una accin, o tambin, en el reconocimiento de nuestro poder para decidir, en una situacin dada, entre las diferentes posibilidades que se nos presenten, eligiendo la cual deseamos poner en practica. Este acto seria libre pues no esta predeterminado, sino que, por el contrario, es la voluntad del individuo quien se determina a si misma al ejecutar el acto, o tambin a no ejecutarlo. Cuellar1 considerando esta libertad interior como "autodeterminacin", o " poder que la voluntad tiene de determinarse a si misma de acuerdo con motivos racionales", la divide, a su vez, en dos formas: Libertad de especificacin, que consistira, segn l, en poder hacer esto o lo otro, es decir, ejecutar este acto u otro; no estar determinado solamente a una cosa, si no tener la posibilidad de elegir entre varias. Libertad de ejercicio, o sea, poder actuar o no actuar, poder ejecutar una accin o no ejecutarla; no estar determinado a ejecutar un acto. Para este autor, de estas dos formas de libertad interna, la mas importante es la segunda, pues implica no solo un dominio de las alternativas posibles, sino incluso el dominio de acto de tal forma que tenemos la posibilidad de ejecutarlo o no. En el mbito de la filosofa, cuando se trata el problema de la libertad se hace referencia a la libertad de eleccin, porque es la fundamental entre todas las dems, es la esencial. Por otra parte, en otros mbitos y en la vida cotidiana, cuando se habla de libertad, se lo hace refirindose a la libertad de ejercicio. Es til tambin decir, que ambos tipos de libertad estn estrechamente relacionadas, por un lado, si se careciera de libertad de eleccin, la libertad de ejercicio perdera en gran parte su significado, de poco servira tener condicin de libre si se tiene alma de esclavo, o como dice Stuart Mill,

" nadie es libre para hacerse esclavo voluntariamente"2. Por otro lado, si el hombre no tuviera libertad de accin, terminara por olvidar que es un ser libre, puesto que al no poder exteriorizar sus elecciones, acabara por pensar que no tienen importancia alguna. Ya nuestra condicin humana, que es corprea y espiritual a la vez, exige una objetivacin externa de las elecciones internas. En este sentido, es muy importante la existencia de libertades externas que hagan posible la realizacin del hombre como ser libre. Finalmente, cabe recordar, que lo realmente valioso y decisivo en el mbito de la libertad, es la libertad de eleccin. OBSTCULOS DE LA LIBERTAD La libertad humana no es absoluta. Existen varios obstculos que disminuyen y, a veces, nulifican nuestra libertad. Es as que el estudio de cada uno de estos obstculos, nos proporcionara mayor claridad para comprender la manera de llevar a cabo nuestras acciones en la vida cotidiana. Se pueden distinguir cinco obstculos que de alguna forma condicionan nuestra libertad. 1- La ignorancia: consiste en la ausencia de conocimientos, es un obstculo ya que para elegir algo, es preciso conocerlo. La mejor manera de vencer este obstculo es abrir los horizontes de nuestro conocimiento teniendo en cuenta nuevas posibilidades. Un ejemplo de este obstculo, son los fracasos de las carreras profesionales resultado de una eleccin incorrecta por ignorar otras especialidades que estaran mas de acuerdo con las cualidades del individuo que las elige. 2- La violencia: la cual es una fuerza externa, fsica o psquica, ante la cual es difcil o imposible resistirse. Esta puede debilitar la libertad del hombre hasta el grado de suprimir toda responsabilidad en lo que se refiere a la conducta realizada en esos momentos. 3- El miedo: consiste en la perturbacin emocional producida por la amenaza de un peligro inminente y es un obstculo ya que en casos extremos como el pavor, puede producir el colapso de las facultades superiores, y todo lo que se ejecuta en ese momento pierde el carcter de responsable, pues el individuo no puede responder de ello. 4- Los trastornos psquicos: los trastornos psquicos, entre los cuales sobresale la neurosis, debilitan la libertad debido a que la persona se siente atada a ciertos patrones de conducta, a mecanismos de defensa, a lo que dicta la autoconciencia, a las emociones exageradas como la ansiedad, la angustia, etc. 5- La clera y otras pasiones: la clera, tambin llamadas ira, enojo o coraje, al igual que otras emociones y pasiones producen una fuerte limitacin en nuestra capacidad de elegir libremente. Las emociones como el odio, la alegra, la tristeza, los celos, la envidia, y el enamoramiento, son respuestas orgnicas ( de adecuacin o de inadecuacin, de aceptacin o rechazo) por parte del hombre cuando percibe un objeto afn o discordante. La emocinllevada a los extremos recibe el nombre de pasin. La palabra sentimiento expresa siempre lo mismo que emocin, cuando de trata de un fenmeno persistente. LIMITES DE LA LIBERTAD Como toda cosa que encontremos en el universo, la libertad tiene sus limites. Vimos anteriormente los obstculos de la libertad, que serian limites ocasionales, pero ahora veremos los limites fijos propiamente dichos.

Sabemos que todo objeto fsico tiene sus limites que lo distinguen y lo separan de otro objeto fsico. Incluso todo objeto psquico tienen tambin sus limites que lo definen. Por ejemplo, si hablamos de la tristeza, sus limites estaran donde comienza la alegra. Si hablamos de un acto determinado, tambin tiene sus limites que lo separan de otro acto cualquiera. Del mismo modo comprendemos que la libertad tiene sus propios limites. Cuando definimos la libertad, muchas veces lo hacemos por oposicin al encierro, prisin, privacin, etc. As mismo, tenemos una idea clara y concreta de lo que es el color blanco, oponindolo, por ejemplo, al color negro. Si solo existiese en el universo un color, si todo fuese blanco, ni siquiera nos daramos cuenta de que eso es blanco, porque no tendramos otro color para compararlo. Esto significa que si el blanco no tuviera sus propios limites, ni siquiera sabramos que es blanco. Lo mismo ocurre con la libertad. La libertad humana tiene limites naturales y artificiales. Los limites naturales, se pueden distinguir en: Un limite natural de mi libertad de ser, es mi propio cuerpo. Yo no tengo la posibilidad de cambiarlo por otro, tengo que aceptarlo, porque yo soy mi cuerpo, ya vengo con l a la vida. Otro de los limites naturales de mi libertad es mi pasado. Yo no puedo renunciar a l, no puedo borrarlo, no puedo hacer que mi pasado no halla existido, porque precisamente existi. Como cada hombre es lo que es, gracias a lo que antes fue, cada hombre se apoya necesariamente en lo que ha sido, esto es, en su pasado. Si mi pasado hubiese sido distinto, yo seria hoy un hombre distinto. El ncleo familiar, es otro de los limites de mi libertad, as como tambin mi ambiente nacional. Yo no puedo dejar de haber nacido uruguayo ni de tener la familia que he tenido. Finalmente encontramos un limite natural, que es el propio mundo que me rodea y en donde existo, y dentro de l, precisamente, estn los dems hombres que conmigo forman la humanidad, a los cuales tengo que respetar. Los limites artificiales son los que el hombre ha ido creando y organizando para realizar con eficacia lo que llamamos, convivencia social. As, los hombres se han impuesto una serie de normas que limitan la actividad de cada cual, para permitir que el prjimo pueda disfrutar tambin de su libertad. Estos limites, han sido creados por va del establecimiento de costumbres, hbitos, y usos sociales, normas de convivencia, y lo que esta mas organizado y concreto, que actualmente llamamos orden jurdico. EL LIBRE ALBEDRO "El libre albedro y la libertad, son ilusiones necesarias " Jorge Luis Borges, agosto de 19761. La expresin libre albedro se identifica con la libertad de eleccin y se la pude definir como: el ... " poder que en virtud del cual el hombre puede elegir entre acciones contrarias sin ser determinado por ninguna necesidad."2 O como dice Sebastin Snchez Rincn ... " el libre albedro es un poder moral de romper los vnculos morales que me constrien"3. Es, en fin, la posibilidad de elegir entre el bien y el mal. Considerando esto, cabe sealar que la expresin liberum arbitrium, fue fundamentalmente usada por filsofos cristianos. Desde el momento que se

proclamo que la naturaleza del hombre haba sido completamente corrompida por el pecado original, se tuvo claro que el hombre mediante el libre albedro poda elegir el bien o elegir el mal, por lo que los pensadores cristianos trataron de fundamentar que, solo con la gracia o auxilio de Dios, se poda elegir el bien y encontrar la salvacin eterna. Por una parte, San Agustn expone su fundamentacin distinguiendo el libre albedro, de la libertad propiamente dicha. Para l, el libre albedro es " la facultad de la razn y de la voluntad por medio de la cual es elegido el bien, mediante el auxilio de la gracia ( de Dios), y el mal, por la ausencia de ella."4. En cambio la libertad seria para l, el buen uso del libre albedro , o sea, la eleccin del bien. As mismo se entiende que el hombre no es libre cuando posee libre albedro, sino que depende del uso que haga de l. A su vez, Santo Toms dice que en la eleccin en la cual el hombre usa el libre albedro, puede haber error, puede elegir mal. Y si el hombre elige por si mismo y sin ayuda ninguna de Dios, elegir ciertamente mal. De esta forma afirma que hay libertad de eleccin completa, ya que tal libertad es "la causa de su propio movimiento, ya que por su libre albedro el hombre se mueve a si mismo a obrar".5 Adems, nos dice que el hombre realmente posee libre albedro, porque de otra forma, los consejos, premios y castigos careceran de sentido. Para Erasmo, el libre albedro es "... un poder de la voluntad por medio del cual el hombre puede consagrarse a las cosas que conducen a la salvacin eterna o puede apartarse de ellas"6. Segn Lutero, esta definicin de Erasmo es independiente de la Biblia, y por lo tanto, contraria a ella. Teniendo como base la Biblia, Lutero sostena, que nadie puede ser salvado si solamente confa en el libre albedro, pues un demonio es mas fuerte que todos los hombres juntos. Para l, no solo la palabra de Dios es necesaria, sino que lo es absolutamente. Considero que lo expuesto ha sido til para dilucidar nuestras dudas con respecto al libre albedro. FUNDAMENTACION DEL LIBRE ALBEDRO EN PRO DE LA LIBERTAD HUMANA. Sebastin Snchez Rincn, en su libro " Sntesis Filosfica"1 expone cuatro argumentos o fundamentacines que tiene el " libre arbitrismo" en pro de la libertad humana. Esto son: el argumento de la conciencia, el argumento moral, el argumento social y el argumento meta fsico. Con su ayuda, nos proponemos desarrollar cada uno. Argumento de la conciencia ( experiencia interna) Se subdivide en tres aspectos: En el momento de la deliberacin ( hablamos del proceso volitivo), cuando analizamos las ventajas y desventajas que tenemos para obrar hacia una u otra cosa, "nos intuimos que podemos tomar uno u otro partido, sin que nos sintamos forzados fatalmente hacia uno de ellos determinados". En el momento de la decisin ( nos aclara Snchez Rincn, que se denomina "fiat"), nuestra conciencia nos atestigua que podramos efectivamente seguir un camino diferente al elegido. Por ejemplo, si decido ir a un lugar, concretamente al cine, tengo claro tambin por intuicin de mi conciencia que poda haber decidido ir a otro lugar.

En el momento de la ejecucin, nuevamente nuestra conciencia nos atestigua que podramos dar marcha atrs aun luego de haber comenzado la accin. Argumento moral Este argumento se fundamenta en tres elementos esenciales: La obligacin moral presupone la libertad de nuestra voluntad; porque si nos sentimos obligados a seguir las leyes, hacer el bien, etc., es porque nos consideramos libres de hacerlo o no. Si nos obligan a hacer una cosa, es porque no podemos hacerla. La responsabilidad moral, solo tiene sentido si somos libres. Es claro que si alguien se siente responsable de haber actuado mal o haber cometido un delito, es porque esa persona se da cuenta de que tuvo la posibilidad tambin de no haber actuado mal o no haber cometido el delito. La culpa. Segn Hartmann cuando el hombre acta mal, su conciencia moral lo reprende, y frecuentemente surge en el individuo el arrepentimiento por haber actuado as. Esto atestigua la libertad o auto determinacin de la voluntad humana, pues ninguna hombre se sentira culpable si considera que ha actuado forzado y contra su voluntad, o sea, que no ha actuado libremente. Argumento social El ordenamiento jurdico de un pas, las sanciones, las multas, las crceles, los monumentos a sus hroes, los consejos, las amenazas, las promesas, y una infinidad mas de cosas, atestiguan, por consentimiento universal que el hombre es libre. "Porque qu sentido tendra el monumento a Artigas, y que valor tendra ste como fundador de la Patria y la democracia Americana si hubiese nacido fatalmente obligado a hacer lo que hizo? y que culpa tiene un preso en la crcel si ya estaba fatalmente determinado y obligado a perpetrar el delito que cometi?". Si un pas levanta monumentos a sus hroes y asegura en las crceles a los delincuentes, es porque el pas y la sociedad estn convencidos de que sus hroes podran no haberlo sido y sus delincuentes podran no haber cometido sus delitos. Argumento metafsico Esta es la argumentacin de Aristteles y Santo Toms para probar la libertad moral de la libertad humana: ellos afirman que la voluntad, guiada siempre y naturalmente por la inteligencia (o entendimiento), tiene siempre y naturalmente al bien como la flecha al blanco, porque es su objeto propio. El objeto propio del odo son los sonidos, el de la vista la luz, los colores; el odo no tiende a los colores, ni la vista a los sonidos; cada rgano tiende a su objeto propio. Es as que, la inteligencia tiende a la verdad, como la voluntad lo hace al bien. Pero aclaran, que en la vida cotidiana la inteligencia humana no conoce en forma perfecta el bien supremo, y en consecuencia la voluntad tampoco lo conoce, o sea, que no puede entender a el; todos los bienes que conoce son relativos, imperfectos, limitados. Si conociera el bien supremo este arrastrara necesariamente a la voluntad. Ante este bien la voluntad humana no seria libre, seria arrastrada por el, porque colmara todos sus anhelos por ser su objeto propio. Por otro lado, los bienes imperfectos, relativos, no arrastran necesariamente a la voluntad humana, pues solo la atraen en cuanto tiene algo de bien y no la atraen en cuanto tienen algo de limitados, imperfectos. Es as que somos libres de elegir entre los bienes que se nos presentan. La eleccin, supone

una deliberacin y esta la libertad de decidirnos por uno o por otros, pues hay muchas posibilidades que se nos presentan igualmente buenas o igualmente imperfectas. LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD "La libertad, como el agua, es peligrosa cuando se desborda" Jaime Barylko1. "Hombre libre es aquel que puede prometer, y aquel que puede traicionar." G. Marcel2. Se dice que una persona es responsable cuando esta obligada a responder por sus propios actos. La libertad, en cierta forma, es definida por la responsabilidad, as tambin, el fundamento de la responsabilidad esta en la libertad de la voluntad humana. En efecto, en un mundo cuyos fenmenos estuvieran todos enteramente determinados, la responsabilidad no tendra sentido. El sentimiento de responsabilidad es un sentimiento personal, que compromete a cada persona y le hace comprender que no puede simplemente abandonarse a sus conveniencias individuales. La presencia de dicho sentimiento supone una sociedad bastante organizada donde existen la ley y la sancin. Mediante la ley se establece lo que llamamos derechos y deberes. Los derechos nos marcan hasta donde podemos usar con tranquilidad, con paz, y con autenticidad, nuestra libertad. Los deberes nos marcan las obligaciones que tenemos que cumplir para que nuestra conducta no viole las libertades de los otros. Si todos los hombres fuesen buenos, si todos fuesen morales, si todos fuesen correctos, si todos fuesen consientes del uso de su libertad en relacin con los dems, en fin, si todos fuesen responsables no habra necesidad de que las sociedades estableciesen de un modo forzoso, los derechos y deberes que constituyen todo ordenamiento jurdico. Pero como no sucede as, no ha habido otra solucin que imponer esos limites en el uso de nuestra libertad, para evitar la prepotencia de todos aquellos inclinados al desborde de la libertad (o libertinaje) a atentar contra la libertad del prjimo. En el uso de mi libertad yo realizo un acto determinado; y todo acto produce inevitablemente una consecuencia. En conclusin, si uso mi libertad tengo que ser responsable de las consecuencias que produzca mi acto. Pero muchas veces, no todos estamos dispuestos a asumir esa responsabilidad por las consecuencias del uso de nuestra libertad, por eso, es necesario que exista un ordenamiento jurdico que organice el uso de las libertades. Como dijimos anteriormente la libertad es esencial al hombre. Pero del mismo modo, no puede existir libertad sin responsabilidad, sin conciencia moral suficiente para sumir las consecuencias de nuestros actos. La libertad para ser autentica precisa los limites que impone la convivencia social. Esta libertad efectiva solo existe plenamente cuando hay un equilibrio dinmico entre lo que podemos llamar el poder y la responsabilidad, es decir entre el derecho y el deber. As mismo ese equilibrio debe estar regulado por la conciencia moral de los hombres que viven en una sociedad. Conseguir el equilibrio para el uso suficiente de la propia libertad, asumiendo nuestra propia responsabilidad como individuos que somos, es llegar a ser verdaderamente hombres dignos de convivir socialmente entre los dems. EL PROBLEMA DE LA LIBERTAD DE NUESTRA VOLUNTAD

"El hombre es libre de hacer lo que quiere; pero no de querer lo que quiere" Schopenhauer1. El planteamiento filosfico de la libertad de nuestra voluntad tiene como fin averiguar si sta procede o acta necesariamente obligada, o sea, determinada, impulsada por antecedentes a realizar sus actos, o bien si acta sin sta determinacin, sin estar obligada. En otras palabras, si se determina a si misma y por si misma, aun en contra de los antecedentes y aunque se oponga a ellos; si lo hace porque quiere, porque ella decide, porque ella elige, porque ella es "arbitro de su accin"2. En otro aspecto; cabe aclarar que como la esencia de la voluntad es el querer, y querer es preferir, el hombre no se halla arrastrado por sus tendencias, si no que se halla frente a ellas, en un continuo preferir o descartar. A su vez, lo que el hombre quiere se convierte en un elemento integrante de su propia realizacin. El querer no deja intacta la vida humana, sino que la va constituyendo en un carcter. No se puede querer siempre lo que se quiere, si no lo que se puede querer. Y lo que se puede querer puede cultivarse hasta llegarse a un dominio de si mismo, o puede angostarse hasta llegar a una esclavizacin de si mismo. El dominio de si, que es producto del cultivo, hasta el mximo de la posibilidad de querer, es la libertad. Esta no aparece desde afuera como un postulado tico, si no que surge desde dentro, como caracterstica de la voluntad. La libertad se halla fundada en la volicin y; como la volicin es tendente, se halla a si mismo fundada en las tendencias, las cuales no constituyen un obstculo para su libertad, si no que son la condicin que la hace posible. Para Kant, la libertad de nuestra voluntad consiste en poder producir efecto sin ser determinada por ninguna cosa que no sea ella misma. Adems, destaca el aspecto moral de la voluntad; dice as que, la voluntad es autnoma cuando da origen a la ley moral y no se halla subordinada a prescripciones dependientes de fines ajenos a ellos. Este seria el sentido primario y mas importante de la voluntad, a la cual Kant, denomina buena voluntad. En cambio, para Fichte, la libertad se ejerce a travs de la voluntad pura, y aclara que, sta no solamente vence los obstculos, sino que inclusive los crea para vencerlos. A continuacin, pasaremos a desarrollar el problema planteado en un principio, la eterna batalla entre deterministas e indeterministas. DETERMINISMO "Una inteligencia que conociera en un momento dado todas las fuerzas que actan en la naturaleza y la situacin de los seres humanos que se compone, que fuera suficientemente vasta para someter estos datos al anlisis matemtico, podra expresar en una sola formula los movimientos de los mayores astros y de los menores tomos. Nada seria incierto para ella, y tanto el futuro como el pasado estaran presentes en su mirada". Laplace1. En un sentido general, la doctrina determinista afirma que todo lo que ha habido, hay y habr, y todo lo que ha sucedido, sucede y suceder, est de ante mano fijado, condicionado y establecido, no pudiendo haber ni suceder mas que lo que esta de antemano fijado, condicionado y establecido. El determinismo es considerado como un condicionamiento previo de todos los fenmenos del universo y adems esta asociado a la idea de casualidad que rige el universo

entero. Tambin se afirma que habiendo un encadenamiento riguroso de los fenmenos, la existencia misma, de la libertad humana, se desvanecera. Tratando de encontrar una solucin a este problema, Kant diferenciaba el mundo de los fenmenos (fenomnico), donde si hay determinismo, del mundo noumnico de la libertad, donde no se podra explicar el determinismo. Sin embargo los deterministas han concentrado sus argumentos no solo en poner en duda la libertad, sino tambin en negarla. Dicen que tal vez nuestra libertad se trate de una creencia, de una ilusin que se debera a la imposibilidad que tenemos de conseguir un conocimiento completo de todo lo que sucede en el universo. Como todo lo que hacemos, lo hacemos por un motivo, nuestras acciones acabaran siendo resultado de la tendencia dominante. Como todo lo que sucede tiene una causa anterior, en realidad acabara imponindose la necesidad. Todo estara perfectamente determinado, todo seria previsible porque todo lo que hagamos estara rigurosamente regido por leyes. En conclusin, como dice Cuellar2, ... " nuestra experiencia de libertad se reducira a ser una ingenua ilusin de libertad." La doctrina determinista no es susceptible a prueba; por cuya razn el determinismo es habitualmente considerado como una hiptesis. Una hiptesismetafsica o cientfica. Frente a esto, los deterministas aducen que aunque su doctrina no puede probarse, ello se debe al carcter finito de la mente humana y a la imposibilidad de tener en cuenta todos los factores, o mejor dicho, estados del universo. A continuacin expondremos los diferentes tipos de determinismo, como manera de ayuda para entender mejor esta doctrina. Tipos de determinismos El determinismo ha tomado diferentes formas segn sea el factor juzgado como determinante de nuestra libertad. Es as, que pueden distinguirse en: Determinismo fisiolgico, el cual es defendido por muchos psiclogos y filsofos materialistas; y que afirma que nuestra libertad, no es mas que el resultado de fuerzas fisiolgicas, sobre todo las del funcionamiento del sistema nervioso, que entran en juego al obrar. Seria igual a un acto reflejo pero extraordinariamente mas complejo. Aclaran, que as como las maquinas de la ciberntica se autorregulan y parecen tomar decisiones partiendo de datos informativos que reciben, de igual forma los actos considerados libres por nosotros no serian mas que un producto necesario de un complejsimo proceso nervioso-cortical absolutamente determinante. Como critica a este determinismo se ha subrayado de que no deja de ser sorprendente que un acto reflejo sea vivido no de un modo pasivo, sino en forma activa, como fruto de nuestro esfuerzo personal. Nos sentimos protagonistas del mismo y no solo un escenario pasivo del juego de fuerzas fisiolgicas que provocaran el acto al margen de nuestra eficaz iniciativa personal. Adems, se ha hecho observar que la conducta humana no esta totalmente dominada por fuerzas fisiolgicas, pues el hombre a veces obra sacrificando su propio instinto de auto conservacin para conseguir valorescomo la verdad, el bien, la justicia, etc, que juzga insoslayables. Determinismo psicolgico, el cual se divide en dos formas principales: el psicoanaltico y el intelectualista. El primero afirma que el obrar del hombre adulto

esta determinado por el inconsciente formado en la niez. Esta forma completa psicolgicamente al determinismo fisiolgico y pone en manifiesto que la constitucin del inconsciente infantil es obra del medio social, tambin relacionndose de esta forma con el determinismo sociolgico que mas adelante veremos. El determinismo intelectualista sostiene que la voluntad, precisamente por ser una facultad orientada al bien, elegir necesariamente la alternativa que la inteligencia presente como la mejor, de forma que quede determinada por sta. Como critica se podra decir que quizs esta concepcin no tenga suficientemente en cuenta que la inteligencia delibera (en la tercera fase del proceso volitivo) bajo la influencia de la voluntad, por lo cual el acto libre es en efecto conjunto de ambas facultades. Determinismo sociolgico, segn el cual la sociedad es considerada como una conciencia colectiva que cada individuo interioriza de un modo particular, por lo que las reglas de conducta social ejercen una presin irresistible sobre los individuos. En otras palabras el ambiente social que nos rodea nos fuerza a obrar de determinada forma. Esta tesis estuvo representada especialmente por la " Escuela Sociolgica Francesa" de los filsofos positivistas E. Durkheim y LevyBruhl. De esta forma de determinismo, muchos de sus representantes encuentran serias dificultades al tratar de explicar las novedades y el progreso histrico, es decir, la creatividad innovadora e incluso revolucionadora del hombre. Determinismo teolgico, representado por los filsofos pantestas como, Spinoza, sostiene que un mundo distinto a Dios y capaz de ser y obrar aparte de El es contradictorio. Por esta causa Dios y el mundo se identifican y as el hombre es una parte de El. Consecuentemente, las decisiones humanas voluntarias, son en realidad sus decisiones. El problema que este determinismo presenta es la dificultad de conciliar la infinita perfeccin de Dios y su atemporalidad, con las imperfecciones fsicas y morales de este mundo y con la sucesin temporal de los hechos que suponen un ir adquiriendo y perdiendo perfecciones. Una modalidad de este determinismo es el predestinacionista; el cual es defendido por muchos pensadores protestantes y se apoya en dos razones fundamentales. En la primera razn argumenta que Dios conoce infaliblemente todo lo que hacemos, por lo tanto haremos necesariamente lo que Dios ha dispuesto y en conclusin no somos libres. La segunda razn, nos aclara que la causa segunda, (el hombre) recibe el ser y la operacin de la causa primera (Dios), por lo tanto nuestra libertad depende de la voluntad divina y en conclusin tampoco somos libres. Como critica al primer argumento los pensadores catlicos sealan, que por ser Dios atemporal, o sea, eterno, no prev nuestros actos antes de que ocurran. Dios tiene una visin intuitiva e igualmente presente de todos nuestros actos, tanto presentes, como pasados y futuros, pero aclaran que, estar viendo nuestros actos no equivale a estar determinndolos, o sea que no nos quita de forma alguna nuestra libertad. Con respecto a la segunda razn, objetan que Dios efectivamente concurre en la actividad de los seres creados, pero que este concurso respeta la manera de obrar de los seres que ha creado. As, Dios impulsa de un modo natural la voluntad

hacia el bien, pero deja en manos la concrecin que dar a dicho impulso. En este sentido, afirman que es Dios quien hace que seamos libres. Vimos as, los principales tipos de determinismos, as como tambin las principales criticas contra sus argumentos INDETERMINISMO ... " El hombre esta condenado a ser libre" JeanPal Sartre1. Generalmente se denomina indeternimismo a la doctrina segn la cual los acontecimientos de cualquier ndole que sean no estn determinados. Como vimos anteriormente, segn el determinismo, todo sucede necesariamente, en cambio, el indeterminismo afirma que nada sucede en forma necesaria, o algunos acontecimientos por lo menos tienen lugar de un modo no necesario. En este sentido podemos decir, que el indeterminismo se contrapone totalmente al determinismo, dependiendo ambos conceptos de su mutuo sentido. Tambin cabe sealar que el indeterminismo suele negar no solo que los acontecimientos estn determinados, sino tambin, la razn de la supuesta determinacin. Adems, se puede distinguir entre un indeterminismo general e indeterminismos especiales. El primero se refiere a cualesquiera acontecimientos; en todo caso, abarca por igual los acontecimientos fsicos y los psquicos. De los indeterminismos especiales se destacan dos: uno denominado indeterminismo fsico, y otro, llamado segn casos, indeterminismo psicolgico o psquico, o espiritual o espiritualista. Estos ltimos tipos de indeterminismo son los que nos interesan, pues han planteado y defendido argumentos en pro de la libertad humana, cuando sta ha sido objeto de cuestin. Pero cabe sealar, que con frecuencia se ha distinguido entre el indeternimismo y la afirmacin de la libertad, pues estos solo la defienden cuando la libertad es entendida como un acto radical de ponerse a si mismo, de auto afirmarse en cuanto a la existencia. Como podemos observar en la cita introductoria, segn Sartre el hombre se ve forzado a ser libre, y en cierta forma tiene razn, pues sabiendo que nuestra vida consiste en tener que elegir lo que vamos a hacer y por lo tanto lo que vamos a ser, no podemos eludir esta tarea. Aun en el caso de "no elegir", al hacerlo, aunque no nos demos cuenta, hemos elegido. O sea, que hemos elegido no elegir. De esto podemos deducir que nos hallamos siempre en la necesidad de ejercitar nuestra libertad para poder elegir, y como siempre nos vemos forzados a elegir, Sartre afirma que estamos forzados o condenados a ser libres. Para el somos tan libres que no podemos renunciar a nuestra libertad del mismo modo que no podemos renunciar al cuerpo que nos ha tocado. Aun cuando existiese un hombre que quisiera renunciar a ser libre y pidiese que lo encierren en una crcel, aun en este caso el hombre seguir siendo libre, pues, si bien, su cuerpo estara encerrado, su alma y su mente seguirn siendo libres. Queda as expuesto, el pensamiento de un filsofo indeterminista como Jean-Pal Sartre. DISTINTOS ARGUMENTOS EN PRO DE LA LIBERTAD HUMANA A continuacin expondr los principales argumentos aducidos por los filsofos indeterministas. En primer lugar, nos dice que solo admitiendo la realidad de nuestra libertad psquica podemos explicar en forma satisfactoria el testimonio de nuestra conciencia, de sentirnos dueos y autores de nuestros propios actos. Si fuera una

ilusin que se origina por nuestro desconocimiento de las causas que nos determinan a obrar, no tendra sentido que ese desconocimiento fuera vivido y sentido como iniciativa y dominio activo- reflexivo sobre el acto. Lo lgico seria que nos sintiramos como espectadores pasivos del acto y no sus protagonistas activo. Esta experiencia vivida por nosotros estara en absoluta oposicin a la realidad. Concluyendo trascribimos una cita de Bergson, quien afirma que " la libertad es un hecho y, entre los hechos que observamos, no hay otro mas claro"1. El segundo argumento dice que si el hombre no tuviera libre albedro no tendran sentido los consejos y las exhortaciones, las prohibiciones y los preceptos, los castigos y las recompensas. Tampoco tendran sentido las promesas, los contratos, y las dems formas de compromiso, porque "constituyen la esencia de una promesa el que pueda ser quebrantada" G. Marcel2. Adems, se aclara que esta prueba tiene un alcance limitado, pues no es propiamente una demostracin de que el hombre es libre, sino, solo una demostracin de que los hombres siempre se han credo libres. Hablamos entonces de una creencia universal, que induce a pensar que lo mas probable es que le hombre sea libre. En tercer lugar, argumentan que el hombre es capaz de obrar rompiendo con necesidades y tendencias biolgicas tan importantes como su propio instinto de auto conservacin, sacrificando su vida, por ejemplo, por ideales o valores. Finalmente los filsofos indeterministas, nos aclaran que la voluntad solo puede querer lo que ha sido previamente conocido. Si el objeto conocido es bueno, absolutamente y en todos sus aspectos, la voluntad tendera necesariamente hacia l. Si el objeto, en cambio, no es bueno, absolutamente, puede ser juzgado no bueno y no amable. La voluntad en este caso no tiene necesidad de quererlo. Pero como ningn objeto en el mundo es absolutamente bueno, o sea, no es bien perfecto, la voluntad no esta determinada por ningn bien en particular. Si lo quiere, es porque lo elige, es decir, se auto determina a si misma. Cabe sealar que los argumentos expuestos por los indeterministas son similares a los que vimos anteriormente como razones que tenia el libre albedro a favor de la libertad humana. LA LIBERTAD COMO POSIBILIDAD HUMANA "Se puede ser indeterminista o determinista; pero hay que creer en la libertad" Carlos Vaz Ferreira1 . Frente a los defensores y detractores de la libertad humana se puede hallar tambin a lo largo de la historia de la filosofa quienes han intentado explicarla a travs de una va intermedia. Encontramos as, en la filosofa clsica, a los estoicos, quienes hablaron de la libertad de indiferencia en el ser humano, que se fundamentara en el conocimiento y la aceptacin de los acontecimientos tal y como vienen impuestos por el destino o la necesidad, pero no como resignacin sino para obrar de acuerdo a ellos, tomando conciencia su racionalidad; para los estoicos este el ideal del hombre sabio y en consecuencia, nico que podra ser libre. Tiempo despus en el cristianismo San Agustn habl de la libertad de conciencia, la que consistira en que aunque Dios impulsa nuestro obrar, nos experimentamos libres y responsables de nuestros actos en nuestro interior.

Los escolsticos medievales, a su vez, defendieron la libertad humana para poder reafirmar as, la responsabilidad del hombre como ser racional, caractersticas distintivas de los dems seres de la naturaleza. Luego Santo Toms, en el siglo XIII, habl del libre albedro, doctrina que ya hemos desarrollado. En el siglo XVI, los escolsticos espaoles para defender la libertad del hombre de las criticas efectuadas por la reforma luterana, la cual afirmaba que era incompatible la libertad humana con la presciencia divina o determinacin del obrar humano por parte de Dios, introdujeron el concepto de cienciamedia explicando as el concurso simultaneo de Dios y el hombre en el obrar humano. La filosofa moderna del siglo XVII en su concepcin secularizada, que contemplaba al hombre en su estado natural, expone a travs de ThomasHobbes la idea de un estado autoritario como garanta del ejercicio la libertad del hombre; aclaraba que solamente dentro de las leyes del estado el hombre puede ser libre. Por otro lado John Locke, exiga, a diferencia de Hobbes, que el pacto social fuera un pacto igualitario por el cual el hombre entrega su voluntad a el estado para que el, la mantenga y la haga posible. En el siglo XVIII, Immanuel Kant, aclaraba que "... en el transcurso de nuestra propia vida, en este mundo sensible de los fenmenos, cada una de nuestras acciones puede... y debe ser considerada, desde dos puntos de vista distintos. Considerada como un fenmeno que se efecta en el mundo, tiene sus causas y esta determinada ntegramente. Pero, considerada como la manifestacin de una voluntad, no cae bajo el aspecto de la causa y la determinacin, sino el aspecto del deber: y, entonces, bajo el aspecto de lo moral o lo inmoral..."2, o sea, bajo el aspecto de la libertad. Kant habl de una libertad formal que a su vez abri las puertas a planteamientos tan opuestos como los materialistas (libertad contra la alineacin humana) o los idealistas (libertad de espritu). A lo largo del siglo XX, se ha ido gestando una nueva imagen del mundo, apoyada por los avances cientficos como la teora de la relatividad de Einstein, el principio de indeterminacin de Heisenberg, la fsica quntica o la teora de la evolucin de Darwin, que han permitido la superacin del modelomecanicista de la fsica de Newton. Admitiendo as, la probabilidad de explicar los fenmenos naturales, posibilita conjugar las categoras de indeterminacin y necesidad permitiendo nuevos planteamientos a la comprensin de la libertad humana. CONCLUSIN GENERAL La libertad es la condicin ms preciada del hombre, caracterstica esencial que lo diferencia de los otros seres de la naturaleza. Como dice E. Rabier "... los hombres creen en su libertad, y se atribuyen con razn o sin ella, el poder de elegir entre varias resoluciones..."1. Esta experiencia que todos compartimos est ntimamente ligada a la ejercitacin de nuestra voluntad. Es mediante el acto volitivo que el hombre efectivamente hace uso y lleva a la practica su libertad. "La libertad es entonces una fuerza positiva, en el nuevo y creador sentido que se introduce en el mundo en el cual activamente participamos y cuya maravillosa sntesis el hombre, es el nico ser privilegiado que tambin puede expresarlo, en la armoniosa dinmica de las leyes que lo rigen..."2. El hombre es persona y como persona se perfecciona moralmente si su eleccin la realiza como tal. En este mundo donde nuestro actuar esta condicionado y

limitado natural y artificialmente, hablar de una libertad total seria una utopa. La sociedad, la cultura, la educacin, las leyes, algunos factores internos como el miedo, etc limitan y a veces nulifican nuestra libertad. Pero en otro sentido, estos condicionamientos ayudan a lograr una libertad igual para todos, sin ventajas para nadie. La libertad responsable debera ser el motor de nuestro obrar, colaborando as, con la edificacin de la libertad de los dems, y dirigindonos siempre y en todos los casos a la eleccin del bien, nico fundamento de nuestra existencia. Es entendible que muchos filsofos se dediquen a defender o atacar nuestra libertad, pero esta lucha, es una lucha terica que poco importa en la realidad. Somos libres porque nuestra conciencia y nuestro obrar lo atestiguan. Pero como dice Galeano "no se puede predicar la libertad sino se empieza por practicarla"3 por eso para finalizar el consejo de Savater: "cuando cualquiera se empee en negarte que los hombres somos libres,"4 aplcale la prueba del filosofo romano. En la antigedad, un filosofo romano discuta con un amigo que le negaba la libertad humana y aseguraba que todos los hombres no tienen mas remedio que hacer lo que hacen. El filosofo cogi su bastn y comenz a darle estacazos con toda su fuerza. Le deca el otro. Y el filosofo, sin dejar de surrarle, continuo argumentando: Hasta que el amigo no reconoci que el filosofo poda libremente dejar de pegarle, el filosofo no suspendi su paliza."5 Cabe aclarar como lo hace Savater que esta es una prueba buena, pero que no debe ser utilizada ms que en ultimo caso y siempre con amigos que no sepan artes marciales. BIBLIOGRAFA Cuellar B., L.: " Introduccin a la filosofa", Casales, Barcelona, 1982. "Diccionario Enciclopdico Larousse", Agrupacin Editorial S.A., Buenos Aires, 2000. De Echano, J.; Martnez, E.; Montarelo, P.; Navlet, I.: "Filosofa Arj"; 1 Edicin, 6 Reimpresin, Ediciones Vicens Vives S.A.; Barcelona; 1997. Fatone, Vicente: "Lgica e Introduccin a la Filosofa", 9 Edicin, Editorial Kapelusz S.A., Buenos Aires 1969. Ferrater Mora, J.: " Diccionario de Filosofa", Tomos I, II, III y IV; Alianza Editorial, Madrid, 1979, 1980, 1981. Garca Morente, M.: "Lecciones Preliminares de Filosofa", 2 Edicin, Editores Mejicanos Unidos, S.A., Mjico DF., 1978. Garca Venturini, J. L.: "Curso de Filosofa", 22 Edicin, Editorial Troquel S.A., Buenos Aires, 1979. Madrioni D., H.: "Introduccin a la Filosofa", Editorial Kapelusz S.A., Buenos Aires, 1964. Massera, Jos P.: "Estudios Filosficos", Biblioteca Artigas: Coleccin de Clsicos Uruguayos: volumen 12, "Impresora Uruguaya" S.A., Montevideo, 1954. Mill, Stuart: "La Libertad", Revolucin, Buenos Aires. Obiols, Guillermo A.: "Nuevo Curso de Lgica y Filosofa", Kapelusz Editorial S.A., Buenos Aires, 2000.

Pereira Formoso, A: "Lecciones de Filosofa", 3 Edicin, 1 Tomo, Mosca Hnos. S.A. Editores, Montevideo 1978. Rosental, M. N.: "Diccionario Filosfico", Ediciones Pueblos Unidos S.A. Montevideo, 1965. Savater, Fernando, "tica para Amador". Saldaa, R. J.; y, Yeaplong, J. C.: "Filosofa Programtica", Ediciones de la Plaza, Montevideo, 1985. Snchez Rincn, Sebastin: "Sntesis Filosfica", 2 Parte: Lgica, Metafsica y Moral, Editorial Mosca Hnos. S.A. Montevideo, 1979. Vaz Ferreira, Carlos: "Los Problemas de la Libertad y los del Determinismo", Impresora Uruguaya S.A., Montevideo, 1957. Veach, H. B.: "tica del Ser Racional", Editorial Labor S.A., Barcel "Nadie puede ser obligado a hacer algo que no quiere, pues tan solo el ser humano es seor de su propio destino. Jams podr subyugar las fuerzas elementales. Est entregado a ellas cuando sus resoluciones no vibran en armona con la voluntad de la luz." Roselis Von Sass "Atlntida". Principio y fin de la gran tragedia, Ordem Do Graal Na Terra, Sao Paulo, Brasil, 1997. "Libertad es, en mi pas, el nombre de una crcel para presos polticos".

Libertad Para Sartre, la categora antropolgica fundamental, el rasgo ms tpicamente humano. En El existencialismo es un humanismo nos dice Sartre que la idea del hombre como un ser libre es una consecuencia inevitable del atesmo Compara la concepcin creacionista, la concepcin segn la cual Dios ha creado al mundo y al hombre, con la visin tcnica del mundo. En el caso de los objetos artificiales la esencia precede a la existencia; la esencia es el conjunto de rasgos que invariablemente deben estar presentes en un objeto para que este objeto sea lo que es. Cuando queremos fabricar un objeto primero nos hacemos una idea de l, nos formamos un concepto en el que se incluyen las cualidades que le van a definir y su utilidad, su finalidad; el concepto expresa en el nivel del pensamiento la esencia del objeto que vamos a fabricar. As actuamos, por ejemplo, en el caso

de un libro o un cortapapel: el artesano se ha inspirado en el concepto de libro o de cortapapel; intenta que en todo aquello a lo que llamamos libro o cortapapel estn presentes los rasgos que piensa mediante el concepto o idea correspondiente. En este sentido se puede decir que la esencia es anterior a la existencia, puesto que primero es el concepto del objeto y luego su existencia concreta; la existencia concreta se intenta acomodar a la esencia que se expresa en la definicin del objeto. Segn Sartre, los que conciben a Dios como creador lo identifican con un artesano superior, el artesano del mundo: cuando Dios crea las cosas del mundo las crea a partir de la idea que se ha hecho de ellas, del mismo modo que el artesano crea un libro a partir de la idea que de l se ha formado, y por ello el hombre individual es una realizacin del concepto de hombre que Dios tiene en su mente. En la Edad Moderna la nocin de Dios entra en crisis, pero no ocurre lo mismo con la idea de que la esencia precede a la existencia; y, en el caso concreto del hombre, se sigue pensando que existe la naturaleza humana, y a cada hombre como un ejemplo del concepto hombre, exactamente igual que cada libro concreto es un ejemplo del concepto libro. El existencialismo, aade Sartre, es un atesmo coherente, pues afirma que si Dios no existe, hay por lo menos un ser en el que la existencia precede a la esencia, un ser que existe antes de poder ser definido por ningn concepto, y que este ser es el hombre... Qu significa aqu que la existencia precede a la esencia? Significa que el hombre empieza por existir, se encuentra, surge en el mundo y que despus se define. El hombre, tal como lo concibe el existencialista, si no es definible, es porque empieza por no ser nada. Slo ser despus y ser tal como se haya hecho. As pues no hay naturaleza, porque no hay Dios para concebirla. El hombre es el nico que no slo es tal como l se concibe, sino tal como l se quiere y como se concibe despus de la existencia; el hombre no es otra cosa que lo que l se hace. ste es el primer principio del existencialismo. Con estas tesis Sartre declara la peculiar posicin del hombre respecto del resto de seres: empieza existiendo, no teniendo un ser propio, empieza siendo una nada, y se construye a s mismo a partir de sus proyectos; el hombre es lo que ha proyectado ser. De este modo, Sartre relaciona la libertad con la falta de naturaleza: tener una naturaleza o esencia implica que el mbito de conductas posibles estn ya determinadas; que algo tenga una naturaleza quiere decir que el tipo de conductas posibles que le pueden acaecer est restringida o limitada por su propio ser; pero el hombre no tiene naturaleza, no tiene una esencia, por lo que es libre y es lo que l mismo ha decidido ser. La reivindicacin sartriana de la libertad es tan radical que le lleva a negar cualquier gnero de determinismo. No cree en el determinismo teolgico, ni biolgico ni social: ni Dios nos ha dado un destino irremediable, ni la Naturaleza ni la sociedad determinan absolutamente nuestras posibilidades, nuestra conducta. Somos lo que hemos querido ser y siempre podremos dejar de ser lo que somos. Los fines que perseguimos no nos vienen dados ni del exterior ni del interior, de una supuesta naturaleza, es nuestra libertad la que los elige. Como dice en El existencialismo es un humanismo, no se nace hroe o cobarde, al hroe siempre le es posible dejar de serlo, como al cobarde superar su condicin. Estamos condenados a ser libres: condenados porque no nos hemos dado a nosotros mismos la libertad, no nos hemos creado, no somos libres de dejar de

ser libres. Aunque todo hombre est en una situacin, nunca ella le determina, antes bien, la libertad se presenta como el modo de enfrentarse a la situacin (al entorno, el prjimo, el pasado). Ni siquiera los valores, la tica, se presentan como un lmite de la libertad, pues en realidad, dice Sartre, los valores no existen antes de que nosotros los queramos, no existen los valores como realidades independientes de nuestra voluntad, los valores morales los crea nuestra determinacin de hacer real tal o cual estado de cosas. Al escoger unos valores en vez de otros, la voluntad les da realidad. La libertad se refiere a los actos y voliciones particulares, pero ms an a la eleccin del perfil bsico de m mismo, del proyecto fundamental de mi existencia, proyecto que se realiza con las voliciones particulares. Esta idea sartriana tiene dos importantes consecuencias: hace al hombre radicalmente responsable: no tenemos excusas, lo que somos es una consecuencia de nuestra propia libertad de eleccin; somos responsables de nosotros mismos, pero tambin del resto de la humanidad; lo que trae consigo el sentimiento de angustia y, en los casos de huida de la responsabilidad, la conducta de mala fe; hace del existencialismo una filosofa de la accin: de forma un tanto paradjica el existencialismo se presenta como una filosofa optimista; paradjica puesto que parecera que al declarar el carcter absurdo de la vida, el ser el hombre una pasin intil, podra fomentar la pasividad, la quietud, pero dado que el hombre es lo que l mismo se ha hecho, dado que se declara que cada hombre es la suma de sus actos y nada ms, nos incita a la accin, a ser ms de lo que somos: no existe ningn ser que nos haya creado y que dirija nuestra conducta de uno u otro modo.