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Page 1: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja
Page 2: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por

montera!

Y como era de esperar, la Bruja aburrida las castiga, transportándolas al interior de uno de los libros que les

ha caído encima

Page 3: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Estamos en Castilla, en un lugar de la Mancha de cuyo nombre no queremos acordarnos. Una tierra con

grandes extensiones de campos de cereales y molinos de viento

Page 4: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Llegan voces del interior de una casa. Un hombre recita poemas subido a una butaca. Es Don Quijote,

gran aficionado a la lectura.

Page 5: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

¡De pronto, descubre a las Tres Mellizas entre sus libros!

Page 6: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Don Quijote les cuenta su drama a las niñas:

El pobre ha perdido su armadura y sin ella no podrá ser nombrado caballero

Las mellizas ponen manos a la obra, tienen que construir una y deprisa!

Page 7: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Cuando llega Sancho Panza, amigo de Don Quijote, les ayuda

Page 8: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

¡La armadura está acabada!

Page 9: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Teresa, con toda solemnidad y en nombre de las torrijas de Santa Teresa, nombra caballero a Don

Quijote

Page 10: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Don Quijote promete defender la justicia y buscar a su amada, Dulcinea del Toboso, a quien confunde con la

Bruja Aburrida

Page 11: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Empieza la aventura

Pese a las protestas de Sancho, que cree que los cuatro están como una regadera, se ponen en marcha

¡Empieza la aventura! -grita Don Quijote-,

¡Adelante!

Page 12: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Don Quijote y el rebaño

De pronto Don Quijote embiste a un

grupo de cabras, convencido de que

lucha contra un ejército de

musulmanes

Page 13: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Cuando el pastor ve lo que pasa, se lleva

las manos a la cabeza

Y ahuyenta a Don Quijote con su honda

Page 14: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Pero Don Quijote, ni se entera y satisfecho de haber

vencido al enemigo, continua

su camino

Page 15: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

UN EJÉRCITO DE GIGANTES

Y una vez más, Don Quijote confunde a la Bruja con su amada Dulcinea, se arrodilla a sus pies y le recita un

soneto

Page 16: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja
Page 17: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Las mellizas acaban subidas a las aspas de un molino como si fuera la noria de

una feria

Page 18: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Pero después de la batalla llega el reposo. Se ponen en camino para ir a buscar un lugar

donde dormir

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Las botas de vino

Al llegar a un hostal, don Quijote anuncia que se va a la cama sin cenar. ¡La

batalla le ha dejado rendido!

Page 20: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Mientras las niñas y Sancho Panza cenan..

Unas extrañas goteras les hacen sospechar

Y suben alarmados a ver lo que pasa

Page 21: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

¡Don Quijote se está pelando con unas botas de vino y las agujerea con la espada!

Page 22: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Se niega a dejar de luchar hasta que liberen a Dulcinea, la mujer mas bella del mundo. Está

fuera de sí, en cuanto la ve se trastorna

Page 23: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

La moto y el sombrero

La Bruja está hasta el moño de que la confundan con Dulcinea. No puede mas y tiene una idea

genial.....

Page 24: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Regala una moto a Sancho con la condición

de que lleve su sombrero

Don Quijote cabalga tranquilo, convencido de que pasea junto a su amada Dulcinea.

Está tan contento que quiere darle un beso

Page 25: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

La despedida

Ante la amenaza de un beso, Sancho acelera la moto mientras Don Quijote le persigue,

enloquecido de amor.

Page 26: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

¡Que situación más divertida! Pero como siempre, la Bruja llega en el mejor momento... -¡Se acabó la diversión,

niñas! Volvemos a casa

Page 27: Las Tres Mellizas han vuelto a las andadas. Esta vez ha sido en la biblioteca. ¡Se han puesto los libros por montera! Y como era de esperar, la Bruja

Fin