la unam confías no es nada nuevo en loso transgénic s

1
www.unamiradaalaciencia.unam.mx LA UNAM presenta el quehacer de los científicos al alcance de nuestros lectores al transgénico estrella: El arroz dorado 2 Los organismos genécamente modificados han estado entre nosotros desde hace dos décadas, sin embargo, algunos consumidores aún los consideran peligrosos. P arece una historia ficcia de superhéroes: en un laboratorio una araña pica a un joven, su ADN se combina con el del arácnido; el resultado es Spiderman, un personaje transgénico parte humano y parte araña. Camina y habla como una persona, pero produce telarañas y puede trepar por las paredes. En la realidad, sí existen organismos que en su ADN pueden tener parte de la información genéca de otra especie. Se llaman organismos genécamente modificados (OGM) y hay un gran debate cienfico en torno a ellos. Mientras algunos los desprecian, considerándolos extremadamente peligrosos para la salud y el medio ambiente; otros exaltan sus virtudes y los contemplan como una solución universal a los problemas de hambre en la humanidad. “Un organismo genécamente modificado es cualquier célula animal o vegetal, una bacteria u hongo al que se le ha manipulado la información genéca ulizando las herramientas de la biología molecular moderna. Ya sea porque se le agregó material genéco que no tenía (generalmente uno o dos genes); porque se alteró modificando la estructura de un gen (mutación); o porque se eliminó algún gen de su genoma original”, explica el doctor Agusn López Munguía, del Instuto de Biotecnología de la UNAM. Cienficos del Instuto Federal Suizo de Tecnología en Zurich, y de la Universidad de Freiburg crearon este arroz transgénico; lo modificaron con un gen del maíz y un gen del narciso para que fuera capaz de producir beta-caroteno, un componente para la síntesis de vitamina A. Esto es fundamental, ya que en el sureste asiáco, cada año 250 mil infantes padecen enfermedades visuales graves e incluso ceguera por la deficiencia de esta vitamina. En México contamos con la Ley de Bioseguridad de Organismos Genécamente Modificados que ene como finalidad regular todo manejo de OGM para reducir los eventuales riesgos que estos pudieran ocasionar a la salud, al ambiente o a la diversidad biológica. Esta ley contempla un régimen de protección especial para el maíz. No es nada nuevo El invesgador aclaró que no hay por qué que temer a la modificación genéca. El ser humano ha manipulado organismos en su beneficio desde hace miles de años. La fabricación de alimentos, como lácteos o vino, implicó seleccionar organismos que naturalmente han modificado sus genes y que por lo mismo adquirieron nuevas propiedades. Otro ejemplo es la transformación del teocintle, que después de una planta no comesble y que arrojaba las semillas al suelo, terminó siendo el maíz que hoy usamos para hacer torllas. Todo ello, gracias a la intervención humana. Información genética de una especie a otra Agusn López Munguía recuerda que a mediados del siglo pasado los doctores James Watson y Francis Crick descubrieron la estructura de la molécula de ADN, en la que se encuentran las instrucciones que las células necesitan para construir a cada ser vivo. Paralelamente se desarrolló la ingeniería genéca, es decir, toda una serie de metodologías para extraer ese material, leerlo, cortarlo e idenficar las instrucciones para usarlas en incontables aplicaciones, por ejemplo, llevarlo a otra especie viva. Con la metodología tradicional, modificar un organismo podía tardar más de una década, mientras que ahora, gracias a la ingeniería genéca, un organismo como un culvo vegetal puede mejorarse en menos de la mitad del empo, tal vez 5 años. En una planta se puede encontrar el gen responsable de la resistencia a una plaga y transferir esta cualidad a otra que sea muy producva, pero suscepble a ser infectada. Así, la nueva planta transgénica tendrá ambas propiedades: resistencia a la plaga y alta producvidad. El especialista destacó que la tecnología no es ni buena ni mala, lo que puede calificarse así es el uso que se haga del conocimiento y de las herramientas. En el caso de los transgénicos, dijo, no se trata de transformar todo, sino de pensar bien qué organismos son los que requieren este proceso para resolver problemas específicos, que pueden ser de producvidad agrícola o de propiedades nutrimentales, ya sea para mejorarlas o para eliminar un componente tóxico. transgénicos ¿ Confías en los ? Director General: Dr. José Franco, Director de Medios: Ángel Figueroa, Edición: Alfonso Andrés Fernández, Asistente: Alejandra Encinas, Documentación: Xavier Criou, Soporte Web: Aram Pichardo © 2016 DGDC - UNAM Escríbenos a [email protected] o llámanos en el D.F. al 5622-7303 Texto: Naix’ieli Castillo Diseño: Susana Tapia

Upload: others

Post on 16-Jul-2022

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: LA UNAM Confías No es nada nuevo en loso transgénic s

www.unamiradaalaciencia.unam.mxLA UNAM presenta el quehacer de los científicos al alcance de nuestros lectores

al transgénico estrella: El arroz dorado 2

Los organismos genéticamente modificados han estado entre nosotros desde hace dos décadas,

sin embargo, algunos consumidores aún los consideran peligrosos.

Parece una historia ficticia de superhéroes: en un laboratorio una araña pica a un joven, su ADN se combina con el del arácnido; el resultado es Spiderman, un personaje transgénico parte humano y

parte araña. Camina y habla como una persona, pero produce telarañas y puede trepar por las paredes.

En la realidad, sí existen organismos que en su ADN pueden tener parte de la información genética de otra especie. Se llaman organismos genéticamente modificados (OGM) y hay un gran debate científico en torno a ellos.

Mientras algunos los desprecian, considerándolos extremadamente peligrosos para la salud y el medio ambiente; otros exaltan sus virtudes y los contemplan como una solución universal a los problemas de hambre en la humanidad.

“Un organismo genéticamente modificado es cualquier célula animal o vegetal, una bacteria u hongo al que se le ha manipulado la información genética utilizando las herramientas de la biología molecular moderna. Ya sea porque se le agregó material genético que no tenía (generalmente uno o dos genes); porque se alteró modificando la estructura de un gen (mutación); o porque se eliminó algún gen de su genoma original”, explica el doctor Agustín López Munguía, del Instituto de Biotecnología de la UNAM.

Científicos del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Zurich, y de la Universidad de Freiburg crearon este arroz

transgénico; lo modificaron con un gen del maíz y un gen del narciso para que fuera capaz de producir

beta-caroteno, un componente para la síntesis de vitamina A.

Esto es fundamental, ya que en el sureste asiático, cada año 250 mil infantes padecen enfermedades

visuales graves e incluso ceguera por la deficiencia de esta vitamina.

En México contamos con la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados que tiene como

finalidad regular todo manejo de OGM para reducir los eventuales riesgos que estos pudieran ocasionar a la salud, al ambiente o a la diversidad biológica. Esta ley contempla un régimen de

protección especial para el maíz.

No es nada nuevo

El investigador aclaró que no hay por qué que temer a la modificación genética. El ser humano ha manipulado organismos en su beneficio desde hace miles de años.

La fabricación de alimentos, como lácteos o vino, implicó seleccionar organismos que naturalmente han modificado sus genes y que por lo mismo adquirieron nuevas propiedades.

Otro ejemplo es la transformación del teocintle, que después de una planta no comestible y que arrojaba las semillas al suelo, terminó siendo el maíz que hoy usamos para hacer tortillas. Todo ello, gracias a la intervención humana.

Información genética de una especie a otra

Agustín López Munguía recuerda que a mediados del siglo pasado los doctores James Watson y Francis Crick descubrieron la estructura de la molécula de ADN, en la que se encuentran las instrucciones que las células necesitan para construir a cada ser vivo.

Paralelamente se desarrolló la ingeniería genética, es decir, toda una serie de metodologías para extraer ese material, leerlo, cortarlo e identificar las instrucciones para usarlas en incontables aplicaciones, por ejemplo, llevarlo a otra especie viva.

Con la metodología tradicional, modificar un organismo podía tardar más de una década, mientras que ahora, gracias a la ingeniería genética, un organismo como un cultivo vegetal puede mejorarse en menos de la mitad del tiempo, tal vez 5 años.

En una planta se puede encontrar el gen responsable de la resistencia a una plaga y transferir esta cualidad a otra que sea muy productiva, pero susceptible a ser infectada. Así, la nueva planta transgénica tendrá ambas propiedades: resistencia a la plaga y alta productividad.

El especialista destacó que la tecnología no es ni buena ni mala, lo que puede calificarse así es el uso que se haga del conocimiento y de las herramientas. En el caso de los transgénicos, dijo, no se trata de transformar todo, sino de pensar bien qué organismos son los que requieren este proceso para resolver problemas específicos, que pueden ser de productividad agrícola o de propiedades nutrimentales, ya sea para mejorarlas o para eliminar un componente tóxico.

transgénicos¿Confías

en los

?

Director General: Dr. José Franco, Director de Medios: Ángel Figueroa, Edición: Alfonso Andrés Fernández, Asistente: Alejandra Encinas, Documentación: Xavier Criou, Soporte Web: Aram Pichardo © 2016 DGDC - UNAM

Escríbenos a [email protected] o llámanos en el D.F. al 5622-7303

Texto: Naix’ieli CastilloDiseño: Susana Tapia