La tira de atrs

La Tira de Buky - Idea Argumental

Un hombre solitario descubre en una tira de un diario, un personaje con excesiva semejanza fsica a su persona. Obsesionado con la situacin comienza una meticulosa investigacin sobre este personaje y no bastndose con eso, pone en marcha una desenfrenada lucha contra la direccin editorial del diario en el que se publica la tira reclamando mas protagonismo en la tira y consiguiendo as mas protagonismo en su vida.

La Tira de Buky - Historia Breve

Un domingo por la maana, como todos los dems, Claudio se dispuso a recoger el diario que cada da depositaba el diariero en su puerta. La emocin del domingo consista simplemente en leer las tiras cmicas en la parte de atrs del diario. En una en particular, se detuvo Claudio, sorprendido, cuando logr reconocer sus facciones en la cara de un personaje secundario que cruzaba una cerca, en uno de los tres cuadritos de la tira.

Al poco tiempo busc una lupa, compr varios ejemplares, hizo ampliaciones de copias, y colg una en la heladera, en ese momento se sinti algo orgulloso y busc inconscientemente, en vano, hacia sus lados, algo de agradecimiento, sin percatarse de esa ausencia y de su soledad.

Al domingo siguiente esper temprano la llegada del diariero, recogi el diario y mir rpidamente la contratapa, la tira estaba en el mismo lugar, tambin, estaba la cerca, pero el no estaba all.

La siguiente semana, ahora menos esperanzado y casi olvidado del asunto, suspir al verse avanzar nuevamente por detrs de la cerca, ahora en sentido opuesto. Para l este se pareca mucho mas a l que el anterior y obseso con ello, al da siguiente, llam al diario y concert una cita con el creador de la tira.

Al finalizar la cita, ceida e incomoda, Claudio coment si saba algo de la presencia del personaje que tanto se le pareca, y Buky, o Miguel como se haba presentado, neg total y sinceramente haber tenido la intencin de utilizar su rostro para el papel del vecino, ya que nunca lo haba visto. Claudio no prest demasiada atencin a la mayora de las palabras, pero se admir al saber que tena una funcin en la historieta, era el vecino.

Ahora, despus de mucho tiempo, Claudio tena mucho trabajo por hacer, recolect y fotocopi todas las tiras de Buky que pudo encontrar en archivos y coloc muchas de sus grandes apariciones en cuadros en las paredes y otras en la heladera junto a su primer gran descubrimiento, en ese momento, al mirar en torno suyo, si sinti la falta de compaa, lo que no le fue evidente la vez anterior.

Al correr el tiempo se vea en las tiras de cada domingo y dej de estar satisfecho de sus caminatas atrs de la cerca. Un domingo volvi a hablar con Miguel, lo cit para hablar de la tira y este acept con gusto.

Durante la charla estuvo demasiado ansioso, y habl mas que nunca, le propuso nuevos chistes, que el mismo haba hecho y unas participaciones del vecino, que podra interactuar mucho mas con los dos jvenes protagonistas de los chistes. La respuesta, fue sincera, le pagaban por continuar con la monotona de la tira, en realidad a Miguel le encantaba coleccionar estampillas y no encontraba forma de vivir de eso. Claudio se exalt como nunca se lo haba visto antes, no poda entender como el hombre le hablara de estampillas en ese momento. Le surgi la desesperada idea de hacerle un juicio, por incluir su cara en la tira sin su consentimiento. Y se fue gritando ofendido de la mesa del caf.

Claudio lleg enojadisimo a su casa y recorri sus paredes y su heladera, no se poda reconocer en las historietas que haba encuadrado ni en las de la heladera, busc un espejo y se compar con una fotocopia ampliada del dibujo, no le importaba ya si se parecan o no, qued mirndose al espejo. Al da siguiente llam a Miguel y se disculp por todo lo que le haba dicho, nunca haba hablado as en su vida, le agradeci por haberlo ayudado a reconocerse as mismo, y finalmente Miguel le dio las gracias l, sin razn aparente.

El siguiente domingo, Claudio, fue directamente al puesto de diarios y not que ya no estaba la tira de Buky, pero no le import. El diariero le ofreci una oferta opcional de un diario, que ojeaba una anciana, que ahora vena con unas estampillas. La anciana se present como su vecina, la cual emiti que nunca lo vea pasar por detrs de la cerca que divida sus casas, y el dijo que haba credo pasar muchas veces por ah, pero ahora seguramente lo empezara a ver mas seguido. Claudio emiti unos chistes y convers cmodamente, finalmente comenz a contarle a la anciana de que trataba una historieta que ya no existe, sobre dos chicos revoltosos y un vecino que al fin y al cabo era lo mas gracioso y rescatable de la historia.

Federico Loyato 29.454.994