la revolución fue un punto dramático y lleno de intriga que revindicaría el curso del país a...

Desmenuzando la Revolución Mexicana de 1910

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La revolución fue un punto dramático y lleno de intriga que revindicaría el curso del

país a partir de las condiciones iniciales.

Comenzando a partir de uno de los personajes más polémicos de la historia del

país, Porfirio Díaz, que después del derrocamiento de Lerdo de Tejada mediante el

Plan de Tuxtepec, ascendió a la presidencia de la república, elegido con el ideal de

“no reelección”. Contrario a este ideal, se adjudicó la reelección por seis ocasiones

y aumentando el periodo presidencial modificando la constitución.

Si bien, impulsó un crecimiento económico e industrial sin precedentes, en conjunto

con un grupo de ilustres positivistas, conocido como los cientificos, como la

implementación de líneas de telégrafo, minas y ferrocarriles; impulso de artes,

cultura y ciencia y acabo con los levantamientos nacionales, trayendo “paz” al país.

Excluyendo a las comunidades pobres y a la nueva clase media de opinión

democrática y política, de quien eran participes los porfiristas. Toda acosta de

represiones a través de fuerza militar contra quienes no se subordinaron, fue como

se logró la “paz” antes mencionada. Las condiciones de trabajo eran infrahumanas,

para entonces la ley contra la esclavitud era letra muerta, como claro ejemplo, están

los casos donde los individuos de los pueblos yaquis eran llevados al sureste del

país con fines de trabajo, por engaños y a la fuerza; existe un suceso escalofriante

acerca de esto: el suicidio masivo de los yaquis, que prefirieron ahogarse que

someterse a su futuro. Otro ejemplo claro son las represiones violentas durante las

huelgas de la localidad minera de Cananea y la zona industrial de Rio Blanco.

Todo lo anterior, despertó un sentimiento liberal, que llevaría poco a poco a la

revolución, que iniciaría con el derrocamiento de Díaz.

Un hecho importante. En 1908, ocurrió una entrevista entre Díaz y un periodista

estadounidense, James Creelman, donde Díaz admitía que el país estaba listo para

la democracia, y para un nuevo presidente. La noticia causó revuelo, por lo que se

formaron partidos políticos para las próximas elecciones.


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Aquí es donde aparece otra figura famosa de la historia de México, Francisco

Ignacio Madero, quien tenía ideas liberales y había ganado el apoyo popular para

ocupar la presidencia.

Madero encabezó grupos antireeleccionistas, y además, escribió en 1908 el

polémico libro “La sucesión presidencial”, donde principalmente criticaba el gobierno

de Díaz y demandaba una política democrática. Posteriormente creó el Partido

Democrático Antireeleccionista.

En días de las elecciones, Díaz había tomado la candidatura, y puesto a que Madero

había conseguido muchos adeptos y seguidores, concluyo en encarcelarlo en San

Luis Potosí, bajo los delitos de rebelión y ultrajo a las autoridades.

Gracias a fraude electoral, Díaz surge electo.

Era 1910 y Díaz celebraba su renovación de poder, México era considerado ya por

extranjeros como una nación progresista y moderna.

Madero, que había logrado escapar de prisión, escribió en Texas el Plan de San

Luis, donde exigía la destitución de Díaz, el establecimiento de un sistema político

de conciencia y participación social, y para ello convocaba a levantarse en armas

contra el régimen porfiriano el 20 de noviembre de 1910.

Así, surgieron levantamientos, principalmente en el norte, comandados por Pascual

Orozco, Emiliano Zapata, y Francisco Villa. Tras los varios triunfos contra Díaz, este

toma la decisión de marcharse del país con destino a Francia.

Tras la rendición de Díaz, Madero pudo tomar la presidencia. El pueblo estaba

seguro que las demandas sociales, por fin quedarían satisfechas, pero Madero tomó

las decisiones menos acertadas. La que provocó la mayor critica de sus

compañeros y de los periodistas fue que mantuvo toda la estructura del gobierno

porfirista, tardando mucho en cumplir sus promesas. En consecuencia, varios

grupos se levantaron en su contra. Fue cuando Zapata, sintiendo traición a la

revolución por parte de Madero al no haber cumplido la promesa de devolver las

tierras robadas por los millonarios al pueblo morelense, lleva a cabo el Plan de

Ayala, donde Zapata exigía la salida de Madero, la devolución inmediata de las


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tierras antes mencionadas y la repartición de territorios a los campesinos del país.

De igual manera, en el norte se rebela Pascual Orozco, con el Plan de la

Empacadora, que básicamente exigía algo similar al plan de San Luis y de Ayala.

Además, en el centro, se inició una revuelta encabezada por los generales Félix

Díaz y Bernardo Reyes. En el intento de tomar el palacio nacional, en el intento,

Reyes murió y Félix quedó atrincherado en la ciudadela, dejando la contienda en un

punto muerto. Madero bajo a la ciudad con intención de reorganizar la defensa, ahí,

al caer herido el general Lauro Villar, Madero toma la contraproducente decisión de

que Victoriano Huerta tomara su lugar como comandante militar para defender la

posición. Posteriormente, Huerta contactó con Félix Díaz, que, conjunto con la

intervención estadounidense del embajador Henry Wilson, se acordó el

desconocimiento del gobierno de Madero, y la presidencia provisional de Huerta.

Acto seguido se arrestó (y posteriormente asesinó por un ataque simulado) a

Madero y al vicepresidente Pino Suárez, consecuentemente como lo dictaba la

constitución de 1817, en caso de faltar el presidente, el ministro de relaciones

exteriores tomaría la presidencia interina, sería Pedro Lascurain. Su mandato duró

45 minutos, lo suficiente como para nombrar vicepresidente a Huerta y renunciar,

de esta manera, Huerta ascendería a la gubernatura. Poniendo fin al periodo hostil,

denominado “Decena Trágica”. Este hecho, es considerado como uno de los peores

actos de traición en la historia Mexicana.

En el norte, el gobernador de Coahuila, Venustiano Carranza, desconocería el

mandato de Huerta, proclamando el Plan de Guadalupe, que un inicio indicaba

remover del poder a Huerta y posteriormente Carranza tomaría el poder ejecutivo

hasta convocar elecciones. El plan no tenía una agenda ordenada, y no establecía

una respuesta hacia las demandas sociales del pueblo.

Por otro lado, uno de los personajes más emblemáticos de la historia de México se

levantaba en armas, el general, Francisco Villa.

El gobierno de Huerta fue totalmente opresor, usurpador, tal es el caso del senador

Belisario Domínguez, que después de pronunciar un discurso en la cámara de

senadores en contra de Victoriano Huerta, fue “arrastrado” al cementerio de Xoco


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en Coyoacán donde sería torturado y asesinado cruelmente, también fue cortada

su lengua y enviada a Huerta. Posteriormente Huerta disolvería el Congreso de la

Unión y arrestaría a los diputados. Este sería un factor decisivo para la caía del

régimen de Huerta.

Esta parte de la revolución contra el gobierno de Huerta, estallaría con dos frentes,

en el norte, encabezada por Carranza, a quien se unió Villa y su división; y en el

sur, Zapata. Se estima que en este periodo fue el que hubo más muertes. La batalla

definitiva sería en Zacatecas (centro principal de producción y sociedad), cuando

Villa decide tomarla desobedeciendo las órdenes de Carranza. La victoria del los

revolucionarios abriría el camino hacia la Ciudad de México, puesto a que después

de la batalla los federales no pudieron continuar, así, Huerta se vio obligado a

abandonar el país. Posterior, fueron firmados los Tratados de Teoloyucan donde se

establecía el desconocimiento del gobierno de Huerta y la disolución del ejército

federal.

Ahora, con Huerta fuera, era el momento de decidir quién asumiría la presidencia,

y quién más que Carranza, deseaba ese puesto, así, como lo decía el Plan de

Guadalupe, convocó una convención en Aguascalientes para tal motivo. Tal fue su

descontento, cuando, por carácter provisional fue elegido presidente de la república.

Cuando, al parecer, la revolución había llegado a su fin, Carranza parte a Veracruz

para organizar un ejército, con el afán de tomar la presidencia por la fuerza.

Ahora, los líderes revolucionarios se enfrentarían, por un lado se encontraba

Carranza y los constitucionalistas, y por otro la alianza temporal firmada en el

Tratado de Xochimilco, donde Villa y Zapata acordaron combatir a Carranza.

Comenzó con la toma de la Ciudad de México y la instalación del gobierno de

Carranza en Veracruz a causa de la presión de los revolucionarios.

Con vuelta de Zapata con su guerrilla a Morelos y Villa al norte del país, Carranza

decide enfocarse en Villa. Haciendo uso de las habilidades superiores de su

general, Álvaro Obregón, que batalla tras batalla y victoria tras victoria finalmente

tras vencer en Celaya obligó a Villa a retirarse a la vida privada, todo a costa de un

precio alto, su brazo derecho (por el que estuvo a punto de cometer suicidio). Ahora,


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con Villa fuera y la debilidad militar de Zapata, Carranza pudo avanzar hacia la

Ciudad de México, y completar su victoria.

Con el afán de hacer legitima su posición, en 1916, convoca a los estados para

nombrar diputados que conformarían el nuevo Congreso Constituyente, cuyo

objetivo era promulgar una nueva constitución, debido a la pluralidad de sujetos

involucrados, tuvo muchos tintes sociales, como la educación, materia laboral y

reformas agrarias (con lo que obtuvo adeptos zapatistas). Finalmente, la creación

de la nueva Constitución de 1917, sería una estrategia para consolidar el poder de

Venustiano Carranza, quien, al día siguiente de la promulgación, se convocó a

nuevas elecciones, donde obviamente, seria “electo” como presidente de la

república.

Carranza, ahora en el poder, estaba decidido a acabar con sus opositores,

primeramente, con Zapata. Envía a un militar, Jesús Guajardo, a llevar a cabo esta

siniestra. Tras varios días ganándose la confianza de Zapata, Guajardo y sus tropas

rendirían un homenaje al revolucionario, quien no esperaba lo que estaba a punto

de suceder, fue sorprendido y acribillado, muriendo así el 10 de abril de 1919.

El gobierno de Carranza (con el reconocimiento de Estados Unidos) se procuró

principalmente traer paz al país y hacer valer la constitución, y, cuando ya era tiempo

de dejar al puesto a en manos de alguien más. Álvaro Obregón había ganado apoyo

popular y de Carranza debido a sus proezas, y él deseaba ser el sucesor, pero,

pareciera que todo volvería a repetirse. Carranza eligió y ayudoó como candidato

por parte a de su grupo al embajador de México en Estados Unidos, Ignacio Bonilla.

Obregón, al sentir la terrible traición, en conjunto con Plutarco Elías Calles y Adolfo

de Huerta firmarían el Plan de Agua Prieta, que proponía el derrocamiento del

gobierno de Carranza para tomar el poder, so pretexto de la supuesta de

intervención de la federación con el gobierno sonorense.

Se había reanudado la lucha. Carranza se percató el apoyo y simpatía popular que

tenía Obregón y su grupo, por lo que decidió huir del palacio nacional hacia

Veracruz, pero habría de ser interceptado, su ferrocarril fue descarrilado e


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incendiado, primeramente logró escapar, pero fue atrapado y asesinado, el 21 de

mayo de 1920 en Tlaxcalantongo.

Primeramente, Adolfo de la Huerta tomaría el poder por un breve tiempo, con la

intención de calmar la situación de algunos movimientos armados, posteriormente

Obregón tomaría el poder en una aparente paz.

El gobierno de Obregón tomaría papeles, más que ideológicos, administrativos,

convencido de que debía atender las demandas de los grupos como la CROM, el

ejército, de trabajadores, intelectuales, sindicales y, de los Estados Unidos, para

evitar sufrir el mismo destino que sus antecesores. Además, con el temor de más

levantamientos revolucionarios, principalmente por parte de Villa, que para Obregón

actuaría como una amenaza latente, de este modo, en conjunto, con su general

Calles, envió una emboscada a la hacienda de Villa entregada por sus labores a la

revolución, Villa fue asesinado el 20 de julio de 1993.

Era tiempo de dar paso al sucesor, y quién más que quien había sido su general

favorito y aliado, Plutarco Elías Calles, quién estaba predestinado por Obregón a

tomar el puesto. Y de nuevo, surge el descontento de Adolfo de la Huerta, quien se

alza en armas (rebelión delahuertista), pero termina vencido, y con el

establecimiento de Calles.

El gobierno de Calles tienes puntos polémicos. Ya en el poder, por sus ideales de

anticlérigo extremista. Persiguió y eliminó sacerdotes y religiosos, no permitió la

intervención de la iglesia en la vida pública, a esto, los devotos se defendieron,

dando inicio a la que se conocería como la guerra cristera.

La tensión se mantuvo hasta la sucesión presidencial, donde Obregón se decidió

candidato, recolectó apoyo y eliminó sus enemigos de manera discreta (para

entonces, la constitución había sido modificada, permitiendo la reelección con

periodos intermedios). Obregón, que había asistido a una comida en honor, fue

asesinado por un caricaturista y supuesto “fanático religioso” el 17 de julio de 1928.

Así, dando fin a la revolución armada. Posteriormente la Revolución se


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institucionalizó, dejando irónicamente a los “héroes” revolucionarios como mártires,

que sustentaría el nuevo régimen.

El asesinato de Obregón señalaba como causante a Calles, por lo que sería un

suicidio total asumir de nuevo la presidencia, decidió encomendar el puesto interino

(por dos años) hasta convocar nuevas elecciones a un obreginista, Emilio Portes

Gil, hecho que calmaría parcialmente la tensión. Y estabilizaría al país. Calles,

ostentando su participación u sustentándose bajo la lucha revolucionaria, se nombre

como Jefe Máximo de la Revolución, a su vez, fundó el Partido Nacional

Revolucionario (PNR), un partido que consagraría todos los actores políticos bajo el

mando de Calles, sentaría las bases para el Partido Revolucionario Institucionalista

(PRI). Así, tendría que postular a un candidato capaz de ser manipulado, sería

entonces, Pascual Ortiz Rubio, un político retirado en Brasil que no deseaba ser

presidente. Ganó las elecciones (conocidas como el mayor fraude) en contra de

José Vasconcelos y su grupo de estudiantes, pero en su primer día sufrió un

atentado por un disparo en la cara.

El gobierno de Ortiz Rubio, fue una estructura que Calles dispuso con la intención

de mantener su mandato en el gobierno, iniciando así, la temida era conocida como

“el Maximato”.

¿Qué trajo la revolución?, ¿Qué consiguió cambiar? Inició con una

dictadura/oligarquía casi eterna, que por el enfurecimiento del pueblo llevó a un

primer derroque, la habilidad humana para cometer errores fue tirando a cada nuevo

político en el cargo tal cual fila de dominós, concluyendo en un sistema de poder en

un solo grupo de individuos. ¿En algún momento las demandas sociales fueron

atendidas, sin ser estrategia política?, ¿Realmente terminó una revolución, o

realmente inició?

¿Para qué fue la revolución?, diría Ricardo Flores Magón.


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Bibliografía consultada

Córdoba, Arnaldo. “La ideología de la revolución mexicana”. México, D. F., 1974.

Cockcroft, James D. “Precursores intelectuales de la Revolución Mexicana”. México,

D. F.: Siglo XXI Editores, 6ª ed., 1980.

Cumberland, Charles. “Madero y la revolución mexicana”. México, D. F.: Siglo XXI

Editores, 1977.

Mayer, Jean. “La Revolución Mexicana”. 1910-1940. Barcelona: Editorial Dopesa,

1972. .

Kenneth, John. “México Bárbaro”. México D. F.: Editores Mexicanos Unidos, 2008.

la revolución fue un punto dramático y lleno de intriga que revindicaría el curso del país a...

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