World PopulatioaJfear

LA POBLACIÓNDE

PANAMA

C.I.CRED. Series

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LA POBLACIÓN DE PANAMA

Vilma N. Médica

Demógrafo de l a D i r e c c i ó n de E s t a d í s t i c a

y Censo de Panamá

ERKORIS ADVERTIDOS

PáginaNo.

PárrafoNo.

3

6

1

Cuadro 16

3

1

4

4

5

2

3

3

3

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(26)

LíneaNo.

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Llamada

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52

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54

67

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S3

83

99

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144

147

147

. . . . descenso. De ú l t i -

En e l cuadro 12 . . . .

. . . . en e l cuadro 13 . . . .

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. . . . alcanzándose valorea

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. . . . 5 años, siguándole muy . . . .

Carniza, Sulma C

. . . . preparatorio", reuniones sobre

descenso. De este ú l t i -

En el cuadro 13 . . . .

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El cuadro 19, . . . .

El cuadro 20

.... según el cuadro 19.

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.... alcanzándose los valores

.... a formar parte de la

.... o convivientes (el 84%), ....

- legalmente (el 69%)

tes (el 15%)

varones y superior al 10 por ciento

. . . . basándose en la distribución . .

La estructura por rama . . . .

. . . . de bienes y servicios.

. . . . 5 anos, siguiéndole muy . . . .

Carniza, Zulroa C

. . . . preparatorio", reunión sobre

Cuadro 12

PANAMA. CAMBIOS EN LA ESPERANZA DE VIDAAL NACER: AÑOS 1942 - 1970

Período de años

1941-1943 (1942)

1950-1960 (1955)

I960

1970

Esperanza de vidaal nacer

Total

51.86

59.81

61.83

65.78

Hombres

58.54

60.47

64.26

Mujeres

61.24

63.37

67.50

Ganancia de vida anual

Total

0.61

0.40

0.40

Hombres

0.39

0.38

Mujeres

0.43

0.41

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\ I

INTRODUCCIÓN

La presente monografía forma parte del programa de actividades delComité Internacional para la Coordinación de Investigaciones Nacionalesen Demografía (CICRED) , creado en 1972, como consecuencia lógica de unareunión de directores de Institutos Nacionales de Investigación Demográfica, convocada en Lyon (Francia), por iniciativa de la Organización de lasNaciones Unidas.

Atendiendo a la invitación que nos hiciera este Comité, la Direcciónde Estadística y Censo de Panamá, con la colaboración del Centro Latino-americano de Demografía, con sede en Santiago de Chile, se responsabilizópor la preparación de este documento, en el cual se resumen los aspectosmás relevantes vinculados con la evolución demográfica pasada, presente yfutura del pals.

Se ha procurado reunir en este estudio, gran parte del conocimientoque se tiene sobre la estructura y evolución de la población del Istmo,los factores determinantes de su actual composición demográfica y los cambios experimentados a través del tiempo, además de formularse algunas hiTpótesis sobre el comportamiento futuro de la población. Finalmente, seresaltan algunas de las significaciones de tipo económico-social y polí-tico que puedan derivarse de estas tendencias.

Los conceptos anteriormente emitidos convierten a este documento enun valioso material de consulta, no sólo para satisfacer las demandas deinformaciones de los'participantes en la Conferencia Mundial de Pobla-ción, sino de todas aquellas personas cuyas acciones estén encaminadas aafianzar la autonomía política y económica del pals, y consecuentemente,a elevar el nivel de vida de los habitantes del Istmo, en un plano deverdadera justicia social.

INDICE

Capítulo Páginanúmero número

INTRODUCCIÓN iii

X EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN Y COMPONENTES DE SU CRE-CIMIENTO 1

a) Breve descripción geográfica y política-admi-nistrativa del país 1

b) Evolución histórica de la población 2

1. Antes del Siglo XX 22. En los 70 aflos del presente Siglo......... 5

c) Evolución actual de la población (en la décadade 1960) 8

1. Población total 82. Urbana-rural 123. Area Metropolitana y ciudades principales. 14

d) Fecundidad 15

1. Tendencia histórica (últimos 30 aflos) 152. Nivel actual (en la década de 1960). 20

i) Nivel general 20ii) Diferenciales de fecundidad,por áreas

geográficas 23

Según estado conyugal ', 26Según distribución por edad 27Algunas diferencias observadas en la

ciudad de Panamá 28

e) Mortalidad 30

1. Tendencia histórica (últimos 30 aflos) 302. Nivel actual (en la década de 1960) 34

i) Mortalidad por sexo y grupos de eda-des 34

ii) Mortalidad infantil 39iii) Mortalidad por causas de muerte, dis.

tribuidas por grupos de edades.... 41iv) Nivel y estructura de la mortalidad,

en el principal centro urbano delpaís (la ciudad de Panamá) 45

Capitulo Página

número número

f) Migración internacional 53

1. Tendencia histórica en e l s ig lo XX 532. Características de la población nacida en

el extranjero, censo de 1970 553 . Saldo migratorio internacional, 1960-1970. 57

II COMPOSICIÓN DE LA POBLACIÓN 61

a) Sexo y edad - grupos funcionales 61b) Educación (nivel de instrucción y aprovecha-

miento escolar) 67

1. Analfabetismo 692. Nivel de instrucción 713. Acceso y promoción en la educación prima-

ria 724. Acceso y aprovechamiento en el nivel medio 755. Acceso y desarrollo en la enseñanza univer.

sitarla y profesional superior 77

c) Estado conyugal y nupcialidad 77

1. Estado conyugal 77

2. Nupcialidad femenina 80

i) Metodología 80

ii) Resultados 82

d) Familia y yivienda 83

1. Características de la familia 832. Características de la vivienda 87

III FUERZA DE TRABAJO 93

a) Nivel de participación de la población en la. fuerza de trabajo 93

b) Nivel de desocupación 98c) Características económicas de la población (Ra

ma de Actividad) 99

IV DISTRIBUCIÓN ESPACIAL DE LA POBLACIÓN Y MIGRACIÓNINTERNA 101

a) Distribución espacial y urbanización 101b) Migración interna 105

Capitulo Página

número número

V PROYECCIONES FUTURAS 110

a) Metodología 1101. Fecundidad 1102. Mortalidad 1143. Migración internacional 1194. Población por sexo y grupos quinquenales

de edades 121

b) Proyección de la población total de la Republicca, por sexo y grupos de edades: años 1960al 2000 129

VI ALGUNAS IMPLICACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLI.TICAS 139

NOTAS MARGINALES 146

- vii -

I. EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN Y COMPONENTES DE SU CRECIMIENTO

a) Breve descripción geográfica y político-administrativa delpals (1):

Una sucinta presentación de las características más sobre-salientes que identifican la geografía nacional, se hace necesa-ria para explicar, en algunas oportunidades, el comportamientode la población que ha habitado el Istmo de Panamá desde la épo-ca de la Colonia hasta nuestros días.

Este se encuentra localizado en el eslabón de istmos queunen la América del Norte con la América del Sur, entre el Tró-pico de Cáncer y el Trópico de Capricornio. Posición que ha de-terminado la mayor parte de sus caracteres biogeográficos y an-tropogeográficos. Limita al Norte con el Mar Caribe y al Surcon el Océano Pacifico; por el Este con Colombia y por el Oestecon Costa Rica, países con los cuales tiene marcadas fronteraslnterestatales.

Su situación geográfica lo incluye dentro de las zonas tro-picales de elevadas y uniformes temperaturas, sin cambios esta-cionales sensibles. Con fuerte humedad durante todo el año,abundantes lluvias, pero libre de violentas tormentas y huraca-nes.

Integra la gran Región Botánica denominada Neo-intertropi-cal, que se inicia en el litoral pacifico mexicano y se proyec-ta hasta los Andes ecuatoriales y las islas de los Galápagos.En el dominio que comprende el Istmo de Panamá se distinguen cuatro sectores: El Atlántico (Mar Caribe), donde la asociación do"minante es la selva densa de tipo ecuatorial; el sector Paclfi-""co, que abarca las zonas bajas, donde predomina la selva tropi-cal, las sabanas y los bosques-galería. Históricamente, estesector ha sido el más atractivo para el establecimiento humanopor su variado paisaje y clima. Finalmente, se distinguen elsector Oriental, también ubicado sobre la vertiente pacifica:con selva densa de tipo ecuatorial; y las zonas de Altitud, co-rrespondientes a las "tierras templadas" de la Cordillera Cen-tral, en el sector occidental del pals.

El estudio del sub-suelo destacó, en el pasado, la importancia del Istmo por el hallazgo de yacimientos auríferos. En los""días del descubrimiento colombino, en 1502, éste gozó de granprestigio por su riqueza en oro, lo que motivó la denominaciónque le confiriera Fernando II de España: "Castilla de Oro".Pero este nombre fue abandonado posteriormente, al percatarselos conquistadores de que la riqueza mineral del Istmo era casinula.

La flora y fauna de sus mares está determinada por el con-tacto de las aguas tibias de la corriente marina sur-ecuatorialcon las frías aguas de la llamada corriente de Humboldt, lascuales crean un medio favorable a una extraordinaria variedad deformas de vida marina.

- 1 -

Panamá tiene una superficie de 77,082 Kms^, incluyendo lafaja que ocupa la Zona del Canal de Panamá, que abarca 1,432Kms^ del territorio nacional. Sus costas suman 2,880 Kms, locual determina la elevada relación entre su perímetro costero yla superficie interna (1:27).

De acuerdo con la división político-administrativa vigentea la fecha del último censo (1970), el territorio nacional loconstituyen 9 Provincias y una Comarca Indígena. Las primeras,que representan la principal division política del país, se sub-dividen a su vez en distritos y corregimientos, los que suman65 y 485, respectivamente (2).

Las provincias más antiguas son las de Panamá y Veraguas,creadas en 1719. La primera se extendía desde la provincia delChoco (Colombia) hasta el límite con la actual Veraguas; y la segunda comprendía el resto del Istmo. ' ~

Después de la independencia de Panamá de España, en 1821, ydurante el período de unión a Colombia, se segregó el "territo-rio de Bocas del Toro". En 1850 nacieron las provincias de LosSantos (con el nombre de Azuero) y la de Chiriqul.

La primera fue eliminada en 1855 y de ella se formaron dosdepartamentos: Los Santos y Herrera. En 1864 éstos fueron re-fundidos bajo la denominación de "provincia de Los Santos", yasí subsistieron hasta 1915, en que, por disposición legislati-va de la República (independiente de Colombia a partir de 1903),volvieron a ser separadas.

También en 1855, se crearon los departamentos de Coclê yColón. Finalmente, en 1922 surgió la provincia de Darían y en1938, la Comarca de San Blas.

b) Evolución histórica de la población:

1. Antes del Siglo XX (3):

La escasa información disponible hace imposible preci-sar cuál era la población de Panamá cuando se inició la co-lonización, por parte de los españoles, en los primeros añosdel Siglo XVI. El historiador colombiano, General Acosta,citado por Justo Arosemena en su conocido "Estado Federal dePanamá", dice: "Carecemos, respecto de la población del 1stmo a la época del descubrimiento, de datos seguros, y sólopuede inferirse el número de habitantes por el de las tribus

independientes Algunas presentaron a los españoles másde cuatro mil combatientes y aunque en ello es de suponersealguna exageración, no deja de ser cierto que para detenery perseguir, por días enteros, tropas de castellanos bien armados, y de más de doscientos hombres algunas veces, eranciertamente menester millares de indios desnudos y despro-vistos de armas eficaces No parece, pues, aventurado,pensar que la población del territorio que hoy comprende lasprovincias de Panamá y Veraguas pasaba de 300,000 almas".

- 2 -

La cifra citada por Acosta podría parecer exagerada cuando se observa que ésta es ligeramente inferior a la suminis-trada, 400 años después, por el censo levantado en la era republicana, en 1911. Sobre el particular, conviene señalar ~algunos hechos que caracterizaron la colonización española,por su influencia determinante en la demografía latinoameri-cana. Felipe Pérez, en su "Geografía General Física y Polí-tica de los Estados Unidos de Colombia", al referirse a lacolonización de lo que hoy constituyen las repúblicas deColombia y Panamá, expresa: "Ningún español vino a los Es-tados Colombianos, como tampoco a punto alguno de la Améri-ca Latina, con los sentimientos de filantropía y de progreso

que trajo Guillermo Penn a Nueva Inglaterra Procedersemejante no tardo en dar sus amargos frutos, y en pocosaños los diez millones de indígenas que habla al tiempo dela conquista en nuestro país, diezmados por la guerra, elmaltrato y las enfermedades importadas de Europa, quedaronreducidos a menos de 200,000 La guerra que se hizo alos americanos fue guerra a muerte, de ahí la despoblaciónrapidísima de los países descubiertos".

A fines del siglo XVII, la población del Istmo tuvo queenfrentarse al terror que esparcieron los filibusteros in-gleses por nuestras costas. Encabezados por Henry Morgan,arrasaron las principales ciudades de entonces: Panamá yPortobelo. La primera, fundada en 1515, llegó a ser el centro del comercio colonial entre los galeones españoles y lacosta occidental de la América del Sur. La segunda, fundadaen 1597 en el litoral del Caribe, sirvió por muchos años como terminal Atlántico del tráfico ístmico. ~"

Todavía a mediados del Siglo XVIII, Portobelo se veíaafectado por los ataques de los piratas, lo cual obligó a laCorona española a abrir otros puertos al comercio y a des-viar el tráfico de la costa occidental de Sur América porla vía del Cabo de Hornos.

El decaimiento del comercio, la incidencia de las enfermedades, los frecuentes incendios y las perturbaciones polïticas, contribuyeron al agudo abatimiento que el Istmo su."fría al finalizar el Siglo XVIII.

Tan rápida fue la reducción de la población del Istmo dePanamá en aquella época, que en 1789, Francisco Silvestre,Oficial Mayor de la Secretaría del Virreynato de Santa Fe deBogotá, estimaba la población del Istmo en sólo 60,000 habi-tantes. La misma fuente informa que de este total, 14,000eran indios. No obstante, es de suponer que esta cifra debeestar algo sub-estimada, ya que por esa fecha aún existíangrupos aborígenes que no hablan sido sojuzgados por el con-quistador español, y que, por tanto, no entraron en este re-cuento.

- 3 -

Los movimientos de liberación de las colonias latinoame-ricanas se inician en 1810 con la independencia de "NuevaGranada" y culminan en Panamá con el movimiento separatistade noviembre de 1821 y nuestra anexión a la Gran Federaciónde Colombia, bajo el nombre de "Departamento del Istmo". Enel censo general de población de Nueva Granada, levantado en1835, las provincias que integraban entonces el Istmo registraron 115,000 habitantes. Al comparar esta cifra con la población estimada para 1789, se deduce una tasa promedio de ~~crecimiento anual de 2 por ciento, aplicable a los 46 añosdel periodo 1789-1835.

No obstante, durante la época en que el Istmo estuvounido a Colombia, se sucedieron acontecimientos de Índolepolítica y económica que afectaron en forma más profunda queen el periodo anteriormente analizado, el desarrollo de nuestra población. ""

Aunque el descubrimiento de las Minas de Oro de Califor-nia vino a inyectar, transitoriamente, nueva vida a las provincias del Istmo, así como la construcción del ferrocarrilde Panamá, que se inició alrededor de 1850. Ocasión en quela avalancha de pobladores europeos y asiáticos que se pro-dujo en ese momento, asi como el flujo de mercaderías y'metales, le devolvieron a Panamá su puesto de crucero de las ru-tas comerciales del mundo; sin embargo, el censo general depoblación levantado en 1851, sólo registraba 138,000 habi-tantes en el Istmo, determinando una tasa de crecimientoanual inferior a la observada en los primeros aflos de unióna Colombia (1.25 por ciento).

La reducción de la velocidad de crecimiento de la pobla-ción en esta época, debió estar determinada, en gran medida,por los efectos de las terribles plagas que azotaban al territorio panameño en aquel entonces. A manera de ejemplo, sedestaca la epidemia de cólera que tuvo efectos devastadoresen la población istmeña durante los aflos 1849 y 1850. A elloes preciso agregar los reiterados intentos separatistas delIstmo durante su periodo de anexión a Colombia, asi como lasconstantes luchas internas que azotaron el territorio colom-biano, y que en nuestro pals tuvieron consecuencias desastro-sas.

La iniciación de los trabajos de excavación del Canal dePanamá en 1880, encuentra a nuestro pals con una poblaciónaproximada de 220,000 personas (censo de 1871), lo cual de-termina la tasa de crecimiento más alta del periodo en estu-dio (3 por ciento), semejante a la actual velocidad de crecimiento de la población del Istmo.

Afectada aún por los acontecimientos económicos y polltieos a los cuales se ha hecho referencia, la población delpals siguió creciendo en los años posteriores a 1870, pero aun ritmo más lento que el indicado para el periodo 1851-1871.

- 4 -

Si se consideran aceptables las estimaciones dadas por Fran-cisco Posada, en el "Directorio General de la Ciudad de Pana-má y Reseña Histórica Geográfica del Departamento", publica-do en 1897, nuestro país tendría por el año 1896, alrededorde 311,000 habitantes, y una tasa de crecimiento anual, apro-ximada, de 1.65 por ciento.

Instaurada la República en 1903, el país parece abocarsedefinitivamente a una era de estabilidad, pero aún hay queconsiderar el efecto que en nuestra población tendría la construcción y apertura del Canal de Panamá, cuya responsabilidadfue adquirida por los Estados Unidos de Norteamérica a partirde 1904, después de haber fracasado en su intento la SociedadCivil Internacional del Canal Interoceánico, radicada en Pa-rís. Aunque la construcción y funcionamiento del Canal no p£rece haber afectado fundamentalmente el ritmo del crecimientototal de la población istmefia, sí afectó, como se verá másadelante, la distribución de la población dentro del territo-rio nacional.

Cuadro 1.

PANAMA. POBLACIÓN TOTAL E INCREMENTO ANUAL, AÑOS 1500 A 1896 (3)

AfloPeríodo(años)

PoblaciónPorcentajede cambio

anual

1500

1789

1835

1851

1871

1896

(289)

(46)

(16)

(20)

(25)

300,000

60,000

115,000

138,000

220,000

311,000

(-) 0.28

(+) 1.99

(+) 1.25

(+) 2.97

(+) 1.65

2. En los 70 años del presente siglo:

La evolución de la población del Istmo de Panamá, a partir de 1896, cuando aún formaba parte del territorio colomTbiano,'destaca su acelerado crecimiento durante la presentecenturia, a través de dos hechos altamente significativos:Mientras a principios de siglo debieron transcurrir 44 años

- 5 -

para que la población del istmo se duplicara, ya en 1930,ésta solo necesitó 25 años para volver a doblarse, es decir,en 3/5 partes del tiempo anteriormente empleado.

Esta velocidad de crecimiento dio lugar a que la pobla-ción del Istmo se cuadruplicara en los 70 años del presentesiglo; llegando a alcanzar la cifra de casi millón y mediode habitantes, según el Censo de 1970. Panorama este muydiferente al que se produjo durante los 400 años anterio-res, cuando la República vivió una época de accidentadosacontecimientos que repercutieron en forma dramática en supoblación, haciendo que ésta prácticamente no creciera, ymás aún, que estuviera a punto de sucumbir a fines del si-glo XVIII. Por el contrario, la población que se perfilaen el siglo XX se caracteriza por su fuerte incremento, queva en ascenso hasta la década del 60, en que comienza a no-tarse un leve freno, motivado por la bajada del nivel de lafecundidad.

Aunque no existen cifras adecuadas sobre las cuales bal-sar el conocimiento de los nacimientos y las defuncionesque se produjeron en la población, en las primeras décadasdel presente siglo, los datos disponibles para los últimosaños permiten asegurar que el incremento que la poblaciónha experimentado a través de estos 70 años, se ha produci-do, particularmente, por el alto nivel de la fecundidad,que ha mantenido un comportamiento constante durante variasdécadas, y a una baja mortalidad aún en descenso. De últi-mo factor cabe destacar la influencia que tuvieron en elmismo, las actividades de saneamiento ambiental, realizadascon motivo de la construcción del canal interoceánico, yque han sido continuadas hasta nuestros días. Ello habríade repercutir, de manera decisiva, en el rápido descensodel nivel general de la mortalidad, beneficiándose, princi-palmente, las ciudades de mayor concentración de población:Panamá y Colón.

En cambio, puede asegurarse que la migración interna-cional ha sido un factor de carácter secundario en la diná-mica de la población del istmo en el presente siglo. Losdatos suministrados por los censos revelan una notable dis-minución de los nacidos en el extranjero que residen en elpals. Mientras éstos representaban el 12% de la poblacióntotal en 1911, el último censo sólo enumeró 3 extranjerospor cada 100 personas empadronadas. Por otro lado, el envg.jecimiento que ha experimentado este grupo constituye otroindicio de que la inmigración de extranjeros en Panamá seha descontinuado de manera significativa.

- 6 -

Cuadro 2

PANAMA, POBLACIÓN TOTAL E INCREMENTO ANUAL,AÑOS 1896 A 1970 (4)

Año

1896 (3)

1911

1920

1930

1940

1950

1960

1970

Período(anos)

(15)

(9)

(10)

(10)

(10)

(10)

(10)

Pobla.ci6n

censada

311,000

336,742

446,098

467,459

622,576

805,285

1,075,541

1,428,082

Porcen-taje deaumentoanual

0.55

3,61

0,48

3.32

2.93

3,36

3.28

Número deaños en

que se du.pilcó lapoblación

44

32

33

25

25

Los censos que se sucedieron durante la vida república,na, el primero de los cuales se realizó en 1911, permitenapreciar el acelerado crecimiento de la población del Istmodurante el presente siglo. De allí que las tasas correspon.dientes a los dos primeros periodos intercensales (1911-1920 y 1920-1930) deben tomarse con reservas, ya que sin lu.gar a dudas han de estar afectadas por deficiencias muy mar.cadas, que se evidencian en el censo de 1920, dando lugara la falsa impresión de que el crecimiento de la poblaciónentre 1920-1930, se frenó drásticamente. Tal hecho signifi.caria que en dicho periodo, no sólo se habría producido laemigración del total de extranjeros radicados en el palssino también de nativos, dando lugar a la anulación del sal.do positivo entre los nacimientos y las defunciones (creci-miento vegetativo), de lo cual no se tiene indicio alguno.

Cuando las obras del Canal fueron iniciadas por la Com.paflla Francesa en 1888, ésta tenia casi 20,000 personas em-pleadas, la mayoría, procedentes de otros países. "De 1904a 1914, cuando los norteamericanos se encargaron de lasobras, introdujeron al país más de 30,000 negros antillanos;12,000 sudeuropeos y 2,000 centro y sudamaricanos. Al ter-minarse la construcción en 1913, las autoridades repatria-

- 7 -

ron una gran parte de los oriundos de Las Antillas y lascompañías fruteras absorbieron varios miles de ellos, parasus trabajos en Centro y Sur América"(5). Lo cual hace prg.ver que en 1920 deberla sentirse el efecto de esta emigra-ción masiva, en un crecimiento más moderado de la poblaciónque el que se insinúa durante el periodo 1911-1920. Por elcontrario, en 1930, el incremento de la población deberlaser mayor o al menos semejante, al periodo anterior, a pesarde que en la década del veinte se produjeron serios ajusteseconómicos y todavía un número considerable de extranjerosemigró, cuando las oportunidades de empleo generadas por laconstrucción y funcionamiento del Canal, dejaron de existir.Ya el pals entraba en una etapa de niás estabilidad demográ-fica, con efectos cada vez menos importantes, de la pobla-ción foránea.

En 1940, podría decirse que, a causa de las obras dedefensa del Canal, iniciadas en 1937, y a la entrada de losEstados Unidos de Norteamérica a la Segunda Guerra Mundial,las condiciones de trabajo en el Istmo eran similares a lasque existían en el periodo 1911-1915, cuando culminaron lasobras del Canal Interoceánico: Ello determinarla una nuevaola inmigratoria de trabajadores extranjeros, pero de menorimportancia relativa que en el periodo antes mencionado, lacual también habría de frenarse por las restricciones lega-les al ingreso de extranjeros, que fueron incluidas en laConstitución de la República, del año 1941.

A partir de 1940, se puede asegurar que la poblacióndel istmo crece a una velocidad constante, alrededor de 3por ciento anual, tasa de incremento que se traduce en unaduplicación de la población en sólo 25 años. Determinadaen forma significativa por el alto nivel de su fecundidad,que inicia un descenso moderado en los últimos cinco años,y a una baja mortalidad aún en descenso.

c) Evolución actual de la población (en la década de 1960):

1. Población total:

La dinámica que ha caracterizado a la población que ha-bita la República de Panamá durante las siete décadas del pre_sente siglo se puede apreciar de manera más precisa al anali-zar la evolución que ha experimentado la misma en los diezaños transcurridos entre los censos nacionales de poblaciónde 1960 y 1970.

El último recuento enumeró en todo el territorio del Is£.mo a 1,428,082 personas, cifra que se ha alcanzado como conse.cuencia de un incremento anual de 3 personas por cada 100 quehabitan la República. En el transcurso de los últimos 10años, esto ha significado agregar, aproximadamente, 35,000personas cada año.

- 8 -

PoHodon•nIOOO

Gráfico 1.

PANAMA. EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN TOTAL:ANOS 1500 A 1970

•

^

I I I I I I I I I71 96 Oll 20 3340 90 60TO

Mol

- 9 -

Dentro de la América Central, Panamá es el país que po-see el menor número de habitantes, de acuerdo con los resulta,dos de los últimos censos, seguido muy de cerca por Costa Ri-ca y Nicaragua. Se caracteriza por poseer una de las tasasde natalidad y mortalidad más bajas de la sub-region, pero con.tinúa manteniendo una tasa de crecimiento vegetativo relativa,mente alta.

Dentro del continente latinoamericano, es mayor en núme-ro que varios países ubicados en el área del Caribe (7).

Al comparar la tasa de crecimiento global de la pobla-ción del país, durante el último período intercensal (3.1 porciento), con el crecimiento vegetativo para un período simi-lar, es decir, el saldo de los nacimientos después de haber-se deducido las muertes (3.2 por ciento), se observa gran si.militud entre a-nbos índices. Tal hecho permite asegurar queel incremento que experimenta la población istmeña en la dé-cada 1960-1970, se debe, casi exclusivamente, a la prevalen-cia de una elevada tasa de natalidad (39 por mil) y una reía,tiva baja mortalidad (7 por mil).

La migración internacional, que constituye el tercercomponente de la dinámica de la población, casi no deja sen-tir sus efectos en el caso de Panamá. En un análisis que sehace más adelante, de este factor, se puede apreciar que,aunque el país sigue recibiendo inmigrantes, y a la vez, haypanameños y extranjeros que dejan el país para vivir enotros lugares, el. saldo que deja este movimiento es negativoy, lo que es más importante, es insignificante. Vale decir,que más que contribuir al incremento de la población, moti-va una pequeña disminución de la misma, lo cual se puede per.cibir en la tasa del crecimiento vegetativo, promedio de losúltimos 10 años, que resulta ligeramente superior a la delcrecimiento global observado en la década del 60.

Si dividimos la población del país en grupos que seidentifican por su origen étnico-cultural, vemos que la diná-mica de la población del Istmo es decidida por las personasque han nacido en el territorio nacional, donde han continua.do generando su descendencia. Pobladores que constituyen uncrisol de razas, surgidos de las mezclas de aborígenes y fo-ráneos que vinieron a este territorio en distintas épocas yprocedentes de diversos continentes, en búsqueda de fortunao trabajo, y que se radicaron en el Istmo, contribuyendo deesta manera a forjar la nacionalidad panameña.

Al remontarnos en el pasado, a fines del siglo XVIII,se observa que la Sociedad Colonial de Panamá estaba consti-tuida, básicamente, por "cuatro grupos sociales: los espafio.les europeos; los criollos, hijos de aquellos pero nacidosen América; los indios (aborígenes) y los negros, libres oesclavos"(6).

- 10 -

En nuestro siglo, los censos de 1911 y 1940 suministrancifras relativas a la composición étnica de la población.De acuerdo con los mismos, esta se clasificó en cuatro cate-gorías: blancos de norteamérica y europa; negros; mestizosy otras razas. Lógicamente, los grupos mestizos y mulatosfueron los que presentaron mayores dificultades en los inten.tos de esta clasificación racial, que se acentúa con la ten-dencia creciente de estos grupos a mezclarse aún más, dandoorigen a una numerosa variedad de tipos raciales. De mane-ra que se optó por agrupar bajo una sola denominación, la de"mestizo", a toda esa heterogénea que trajo el cruce de loshombres de diversas razas, que, por centurias, han pasado pornuestro Istmo. Con lo cual, el vocablo perdió su significadoclásico, es decir, mezcla de'español e indio.

En los 30 afios transcurridos desde 1911 hasta 1940, sepone en evidencia la marcada diferencia en el incremento dela población de los grupos étnicos anteriormente descritos.Mientras los blancos aumentaron en un 49% y los negros en un69%; el grupo mestizo tuvo un aumento del 112%. Este últimogrupo, que en 1911 constituía el 66% de la población delpals, llegó a abarcar el 72% en 1940. Aunque en esta fechaaún el 28% de los pobladores del Istmo, aparentemente, conti.nuaban su reproducción dentro del grupo étnico de origen, yael censo de 1940 revelaba que sólo el 87» de los pobladoresdel pals hablan nacido en el exterior. Y esa relación se re.duce al 3%, de acuerdo con el censo de 1970.

Los aborígenes del Istmo, es decir, los que lo poblabanen exclusividad a la llegada de los españoles a América, deacuerdo con el censo de 1970, apenas representan hoy día el5% del total de la población del país, siendo su velocidad decrecimiento la mitad de la experimentada por el total de lapoblación (1.7 por ciento). Este índice nos está sugiriendovarios hechos: En primer lugar, puede explicar este bajo ere.cimiento de la población la prevalencia de una mortalidad másalta en estas areas, que la que suele observarse en la gene-ralidad de los sectores rurales del pals. Por otro lado, laincorporación de algunos de estos grupos aborígenes a la vidanacional puede estar encubriendo la verdadera dinámica de es-ta población. Ya que, según la definición censal, se consi-dera indígenas sólo a aquellos aborígenes que viven bajo unaorganización tribal, en lugares poblados situados en regioneshabitadas, principalmente, por ellos, y que, por.lo general,hablan un dialecto y conservan sus tradiciones y costumbres.'

Resumiendo, de todo lo dicho anteriormente se desprendeque hoy por hoy, el país tiene una dinámica propia, determi-nada casi en su totalidad por los nacidos en el pals. Y co-mo un adelanto a las predicciones del futuro, que se analizanen un capitulo posterior, se señala que, de continuarse conel incremento actual de la población, nuestro pals alcanzarlalos tres millones de personas, cerca del año 1995.

- 11 -

PANAMA.

Cuadro 3

POBLACIÓN DE CIERTOS GRUPOS CULTURALES, REGIONES YLOCALIDADES: AÎJOS 1960 Y 1970

Area o grupo

REPÚBLICA

Ciudad de Panamá.. .Ciudad de C o l o n . . . .Dto. San Miguel i to .

Poblacióncensada

1960

1,075,541

445,213629,328

430,388260,465

59,59812,97562,18744,978

1970

1,428,082

679,446748,636

650,905348,70467,69568,40073,02648,351

Distribuciónporcentual

1960

100.0

41.558.5

40.024.2

5.51.25.84.2

1970

100.0

47.652.4

45.624.44.74.85.13.4

Tasa anual decrecimiento por100 habitantes

1960-1970

Global

3.1

4.02.2

4.53.21.4

19.31.7

Vegeta-tivo aj

3.2

3.03.3

c/ 3.0b/ 2.9

2.7c/ 3.0d/ 3.3

Ç/

Promedio de los años 1963-1970. Antes de 1966, en los componentes de esta tasa sólo se incluían las informaciones de los nacido-vivos y las defunciones de la población indígena de Bocasdel Toro y Darién.Incluye el d i s t r i to especial de San Miguelito.Se adopta la tasa del sector urbano.

d/ Se adopta la tasa del sector rural.

2. Urbana-rural:

Una agrupación que viene siendo clásica en el estudio delos diferenciales de la población de un país, es aquella quela divide en urbana y rural.

El área urbana, en el caso de Panamá, se ha definido enforma muy similar a partir del censo de 1940. Está constituí,da por aquellas localidades de por lo menos 1,500 habitantes,que reúnen ciertas condiciones que ofrecen a la comunidad unavida mas higiénica, funcional y creativa, tales COMO: losservicios públicos de energía eléctrica, agua potable, siste-mas de desecho y calles pavimentadas; acceso a colegios denivel medio, centros comerciales, sociales y recreativos.Las características señaladas, obviamente pueden abarcar to-da la localidad definida como urbana, o al menos una gran par.te de ella.

- 12 -

Por el contrario, los sectores rurales son aquellos quecarecen en su totalidad, o la mayor parte de su población, deestos beneficios; y se destacan porque la actividad económicaestá casi totalmente concentrada en trabajos vinculados alsector primario de la economía, la agricultura.

Aunque el "crecimiento vegetativo revela que la poblaciónurbana del Istmo aumenta a una tasa anual de 3 por ciento, 1¿_geramente inferior a la que se dá en el area rural (3.3 por cien,to), demostrándose con ello que ambas áreas contribuyen, enmedida semejante, con el crecimiento de la población total delpaís. El aumento global de los habitantes de las ciudades esdel 4 por ciento anual, o sea, el doble de la velocidad en queaumenta la población del sector rural (2.2 por ciento).

La diferencia entre el crecimiento vegetativo y el incrg_mentó global de la población de estas dos áreas, sólo se ex-plica por el traslado de las personas de un lugar a otro, den.tro de las fronteras nacionales, lo cual dá lugar a que 1/4del incremento real de la población que habita en las locali-dades urbanas sea motivado por las personas que dejan el campo,donde han nacido, para radicarse en los centros urbanos. Y,por el contrario, el sector rural pierde 1/3 de su crecimien-to natural, debido a las personas que abandonan su pueblo deorigen y se trasladan a las ciudades en búsqueda de una mejorforma de vida y de la realización de sus aspiraciones.

Si nos remontamos al afío 1940, en que la población urba-na censada constituía el 34% de la población total del pals,podemos apreciar cómo ha venido creciendo la población de es-te sector a través del tiempo. Es así como el censo de 1970muestra, 30 años después, que los habitantes de las ciudadesya constituyen el 48% de la población total que habita elIstmo. Y las cifras absolutas revelan que, en este lapso, lapoblación urbana se ha triplicado.

Es de esperar que, dada la velocidad del crecimiento queexperimenta la población urbana, muy pronto ésta habrá deigualar o sobrepasar a la población rural, puesto que la co-rriente de inmigrantes procedentes del campo habrá de seguirinvadiendo las ciudades, con igual intensidad que en el pasa,do si no se crean incentivos en las áreas de éxodo, que fre-nen esta tendencia. Si tan sólo se mantuviera la relación dela población urbana observada en 1970 (487.), en el año 1995,cuando se espera que, de seguir las tendencias actuales, lapoblación total volverá a duplicarse; los habitantes de lasciudades llegarían a constituir, aproximadamente, 1,800,000personas, cifra superior a la actual población de todo elIstmo,

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3. Area metropolitana y ciudades principales:

En este estudio^ en que se aislan grupos dentro de la po.blación total del país, para observar en qué medida contribu-ye cada uno de ellos a nuestro incremento demográfico, es deinterés resaltar el papel que, en este proceso, le ha cabidoal area que se ha calificado COTIO "Metropolitana"; la cual secaracteriza por extenderse a ambos lados de la Zona del Canalde Panamá, y tener como centros de influencia las ciudadesmás pobladas del pals: Panamá (capital de la República) y Co.lón. Comprende 10 distritos (segunda división administrativa)perteneciente a las provincias del mismo nombre de las loca-lidades, que constituyen la columna vertebral de este sectordel país. En la demarcación de esta área ha privado el crite.rio establecido por la Dirección General de Administración yPlanificación de la Presidencia de la República.

De acuerdo con el censo de 1970, en el área Metropolita-na se empadronaron más de 650,033 parsonas, las cuales repre-sentan cerca del 477o del total de la población del pals. Alrelacionar esta cifra con la población radicada en el áreaurbana, se habría de concluir que gran parte de ésta se con-centra en el área Metropolitana.

Al igual que en el sector urbano, el crecimiento vege-tativo es, aproximadamente, del 3 por ciento anual, no obstan,te, dada la gran atracción que ejercen en el resto del país,no sólo los centros urbanos ubicados en esta area, sino tam-bién las extensiones de tierras fértiles existentes en elsector,las que han animado al campesino a buscar su sustentoen ellas. Ello ha dado lugar a que 1/4 de la tasa de creci-miento del área metropolitana (4.5 por ciento), se nutra delsaldo positivo del movimiento migratorio que hemos citado.

Los centros de influencia del área Metropolitana, o sealas ciudades de Panamá, Colón y el distrito especial de SanMiguelito (éste último segregado recientemente de la Ciudadde Panamá), absorben 3/4 partes de la población que habitaeste sector de la República.

La Ciudad de Panamá es la principal localidad urbanadel país, en donde se centra la vida política y administrât!va de la nación, así como la mayor parte de las actividadeseconómicas de los sectores secundarios y terciarios de laeconomía. En ella vive una de cada 4 personas que habitanel territorio nacional. Su incremento vegetativo es ligeramente inferior al valor alcanzado por toda el área urbana(el 2.9 por ciento), el que, al ser comparado con su tasaglobal de crecimiento (el 3.2 por ciento anual), revela queuna de cada 10 personas que viven en la capital proceden deotro lugar de la República.

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En la Ciudad de Colón, segunda localidad en cuanto aimportancia de población, se da una situación significativa-,mente distinta. En primer lugar, su tamaño dista mucho delde la ciudad capital, ya que sólo posee el 5% de la pobla-ción de la República, y a pesar de tener un crecimiento vegstativo relativamente alto (el 2.7 por ciento), su tasa glo-bal de crecimiento sólo es del 1.4 por ciento. Vale decir,que esta ciudad pierde cada afio, aproximadamente, la mitadde la población que genera, por efectos de la emigración ha-cia otras áreas del país, en particular, hacia la Ciudad dePanamá; a causa, entre otras razones, de que su área de ex-pansión prácticamente se ha agotado.

En cambio, el distrito especial de San Migue lito es unlugar de una dinámica extraordinaria. Actualmente concentrauna población superior a la de la Ciudad de Colón; su creci-miento vegetativo es similar a la de cualquier otra locali-dad urbana del pats, pero la afluencia de migrantes a estesector es de tal magnitud, que 4/5 partes de su incrementoglobal (el 19.3 por ciento) se debe exclusivamente a la lle-gada de nuevas personas al sector. Es de esperar que estasituación prosiga por mucho tiempo, ya que aún abundan numerosos terrenos baldíos en el distrito. Por otro lado.se trata de un área en donde el Estado desarrolla programas deconstrucción de viviendas; además^ colinda con la capital delpaís, de manera que el migrante de ciudades menores y delcampo que llega aquí, vislumbra las posibilidades de acercarse a la urbe y a todos los beneficios y oportunidades que lamisma puede ofrecerle.

d) Fecundidad.

1. Tendencia histórica (últimos 30 años):

El estudio de la fecundidad humana adquiere cada día mayor importancia, al constituir el factor más decisivo en laevolución y estructura de la población de casi todos los pa_£ses del mundo, en particular de los de América Latina.

Tal hecho justifica los ingentes esfuerzos que se realizan con el fin de conocer la verdadera magnitud y cambios ensu nivel, sus características fundamentales, así como los d£terminantes de su evolución en el tiempo.

Para la medición de la fecundidad, se pueden emprenderdistintos enfoques, los cuales dependen de los datos básicosdisponibles. En nuestro caso, fue posible encarar su cálcu-lo en las dos formas convencionales: A través de los indicadores basados en los sucesos de un año y mediante el estudiode historias reproductivas, basadas en informaciones retros-pectivas, de mujeres sobrevivientes.

- 15 -

Las tasas de natalidad obtenidas de los registros vita-les, desde 1941 hasta nuestros días, destacan dos hechos fundamentales. Por un lado, el relativamente alto nivel de lafecundidad que ha prevalecido en nuestro pafs, y por el otro,las deficiencias por omisión en el registro de los nacimien-tos, que parecen haber sido superadas en la década del 60.

Cuadro 4

PANAMA. TASAS BRUTAS DE NATALIDAD REGISTRADAS: AÑOS 1941 A 1970

(Por mil habitantes)

Ano

1941194219431944194519461947194819491950

Tasa

37.437.037.737.837.737.037.235.632.833.3

Afio

195119521953195419551956195719581959I960

Tasa

32.436.037.939.339.439.340.539.340.839.9

Año

1961..196219631964196519661967196819691970

Tasa

40.441.140.239.639.238.938 838.938.037.1

Fuente:- Las tasas correspondientes a los años 1941-1959 fueron extraí-das del "Informe de la Encuesta de Fecundidad de la Ciudad dePanamá, año 1964", Araica Hildebrando, 1966. Las de 1960 enadelante se obtuvieron del boletín "Panamá en Cifras", años1967-1971, editado en 1972.

De acuerdo con las cifras del cuadro que antecede, lafrecuencia de los nacimientos en la población se mantuvoalrededor del 37 por mil en la mayor parte de la décadadel 40. El aparente descenso que se observa, entre 1948 y1952, responde más bien a un deterioro en la captación delos nacimientos durante ese período, el cual, una vez sup£rado, permite que la tasa de natalidad vuelva a su ante-rior nivel y, lo que es más importante, que tienda a acer-carse a su verdadero valor en el universo, gracias a losefectos de una campaña intensiva y permanente, de mejora-miento de los registros vitales.

Es as£ como durante gran parte de las décadas del 50y 60, la tasa bruta de natalidad se mantiene alrededordel 40 por mil. No obstante, en un intento por mejorarel nivel de esta tasa en la década del 50, se estiman losnacimientos de los años 1951-1960, corrigiendo los regis-trados en un 47., para los años 1951-1955 y en un 3%, losdel periodo 1956-1960 (8). La tasa promedio obtenida, abase de los nacimientos corregidos, es del 41 por cada

- 16 -

1,000 personas que habitaban el país, en la década del 50.En el período 1960-1970 no se introdujo corrección algunaen las tasas de natalidad por haberse calculado un porcerjtaje de omisión relativamente pequeño para los nacimien-tos ocurridos durante esos años (9).

El análisis de la tendencia de las tasas brutas denatalidad, en los últimos 5 años del período intercensal1960-1970, observa el inicio de un cambio importante enel comportamiento de este indicador, el cual sugiere elcomienzo del descenso de la fecundidad en nuestro país,al variar la tasa de natalidad del 39 por mil en 1965 al37 por mil en 1970.

A fin de comprobar la veracidad de esta afirmación,se efectuó un estudio sobre la fecundidad del país (10),en el cual se hace uso de la información relativa a losnacimientos ocurridos en un año, clasificados según elorden de paridez y edad de las madres, proporcionado porlos Registros Civiles, y se aplica el método propuestopor el profesor William Brass para derivar estimacionesde la fecundidad con estos datos (11).

Al hacer la distinción de los nacimientos por ordende paridez, se puede conocer mucho mejor la composicióndel índice sintético que se deriva de esta información:la tasa de fecundidad total por mujer de acuerdo con elorden de paridez F(P); y consecuentemente, la medida quese obtienen de la suma de las mismas, es decir, la fecundidad total por mujer en edad fértil (F).

Cuadro 5

PANAMA: RESUMEN DE LOS VALORES DE F(P) REGISTRADOS: ANOS 1955,1960; 1965 Y 1970 Y F"(P), CENSOS 1950 Y 1970 (10)

Tasas de fecundldad por orden de

paridez: F(P)

F<1>F(2)F(3)F(4)F(5)F(6)F(7)F(8)F(9)F (10 y +)

¿T} F(P)

Registros

1955

0.890750.807400.724300.635000.502200.421150.309900.244750.172850.28015

4.98845

1960

0.903100.804950.739250.660850.544550.445650.348650.252800.190800.32510

5.21570

1965

0.857300.807200.738700.644550.532950.453100.351900.270200.201500.34760

5.20500

1970

0.938200.808800.685550.567700.479250.401800.334900.265150.205400.37670

5.06345

Censos

1950

1

0.87410.76800.66910.58110.49380.41610.33900.27060.20320.1461

4.7611

1970

0.84890.74140.6434•0.55310.47000.39230.31890.25540.19550.1427

4.5616

Fuente:- FS(P): Valores determinados a partir de las mujeres de 50 añosy más, Censos de 1950 y 1970, respectivamente.

- 17 -

En el análisis cronológico de las tasas de fecundidadpor orden de paridez F(P), se revelan muy pocas variacionesen las tasas de los primeros nacimientos F(l), confirmándo-se, una vez más, la estabilidad que suele observar la pro-porción de mujeres que llegan a ser madres en la población.Esta varió entre el 86 por ciento y el 94 por ciento, du-rante los últimos 20 años, sin marcar tendencia alguna.

Las tasas correspondientes a los segundos nacimientosF(2), mantuvieron constante su nivel a través del tiempo;sin embargo, a partir de los nacimientos de orden tres F(3)a seis F(6), se observa un leve aumento de éstas, entre1955-1960, para luego descender, particularmente en el últj,mo lustro del periodo de estudio. Este descenso, como erade esperar, se refleja en la tasa global de fecundidad (F)que se obtiene al sumar dichos valores, la cual cambia de5.22 en 1960 a 5.06 hijos nacido-vivos en 1970.

Este mismo análisis realizado con los datos proceden-tes de los censos de 1950 y 1970, a base de mujeres de fe-cundidad completa (con 50 aflos y más de edad), permite apr£ciar que, efectivamente, el nivel de la fecundidad en Pana-má experimentó un leve descenso durante los últimos 20 afios.

Cuadro 6

PANAMA: RESUMEN DE LOS VALORES DE F(P) OBSERVADOS:AROS 1955, 1960, 1965 Y 1970 (10)

Tasas deorden de

F(l)F(2)F(3)F(4)F(5)F(6)F(7) . ..F(8)F(9)F(10 y más).

(Valores

fecundidad porparidez F(P)

TOTAL

relativos^

1955

17.916.214.512.710.18.46.24.93.55.6

100.0

1960

17I1)141?10864

6

100

.1

.4

.2

.7

.4

.6

.7

.8

.7

.2

.0

1965

16.515.514.212.410.28.76.75.23.96.7

100.0

1970

18.516.013.511.29.58.06.65.24.17.4

100.0

Un análisis colateral, en el mismo sentido, se realizacomparando los valores relativos de F(P) procedentes de losregistros de un año con respecto al que le sucede inmediata

- 18 -

mente. En estas confrontaciones se observa un alineamientobastante perfecto de los puntos, entre los años 1955-1960 y1960-1965 (véaS« el gráfico 2), lo cual sugiere la constan-cia del nivel de la fecundidad en dichos años, y la persis-tencia de errores similares en los registros.

Por el contrario, en la comparación de los años 1965-1970, es notable cómo varios puntos se alejan de la línearecta, hecho que se interpreta como el inicio de un cambioen el comportamiento de la fecundidad del país, en los ültimos años del periodo de estudio, el cual se manifiesta porun marcado descenso de la importancia relativa de las muje-res con paridez 3 a 6 (véase el gráfico 3).

1959

%F(P)20|-

G r â f l c o 2 .

PANAMA. COMPARACIÓN SE LA DISTRIBUCIÓN DE LAS TASASESPECIFICAS DE FECUNDIDAD POR PARIDEZ

DE LOS ANOS 1955 Y 1960

©

I20

neo% F (P)

- 19 -

G r á f i c o 3 .

PANAMA. COMPARACIÓN DE LA DISTRIBUCIÓN DE LAS TASASESPECIFICAS DE FECUNDIDAD POR PARIDEZ

DE LOS ANOS 1965 T 19701965

%F(P)

• o

© .

®

2. Nivel actual (en la década de 1960):

i) Nivel general:

El análisis de la fecundidad en los últimos 30años, reveló un comportamiento constante de la tasabruta de natalidad, que sólo experimentó un cambio im-portante durante la década de 1960, cuando varió del39 al 37 por mil, insinuando el principio del declivede la fecundidad en nuestro medio; particularmente enel quinquenio 1965-1970. Esto fue confirmado, a suvez, mediante el estudio de las tasas de fecundidadpor orden de paridez F(P).

- 20 -

A continuación se hará uso de otras medidas de lafecundidad, referidas a la década del 60, a fin de profundizar en la identificación de aquellos grupos de lapoblación que mayor influencia han ejercido sobre elcomportamiento de este factor.

Con tal fin, se calculan las tasas de fecundidadpor edad de la madre (nfx) > e n tres momentos de la dé-cada; las que permiten apreciar cómo se distribuyenlas frecuencias de los nacimientos entre las mujeres,de acuerdo con la edad de éstas. Representan un granavance en cuanto a la precisión de la medición de lafecundidad, porque estas tasas no se ven afectadas aconsecuencia de las variaciones en la composición poredades, sean éstas en la población total o entre lasmujeres en edades reproductivas.

Finalmente, las tasas de fecundidad por edades seutilizan para calcular otras medidas de importancia enel estudio de la fecundidad, como son: las tasas bru-ta (R1) y neta (R) de reproducción.

Cuadro 7

PANAMA. TASAS ESPECIFICAS DE FECUNDIDAD POR EDAD ( f ) Y TASAn x

BRUTA DE REPRODUCCIÓN (R1 ) : AÍÍOS 1960, 1965 Y 1970 (9)

(Observadas)

Grupos de edades

1960

Tasaspor

1,000

Propo_rción

1965

Tasaspor

1,000

Proporción

1970

Tasaspor

1,000

Propojrción

TOTAL.

15 - 1920 - 2425 - 2930 - 3435 - 3940 - 4445 - 49

R 1 . . .

176

143296279193127

429

100.0

13,27,25,17,11,3.90.8

175

14229627218713141

8

100.0

13.227.525.217.412.23.80.7

166

134274246

a/ 192a/ 117

449

100.0

13.227.024.218.911.54.30.9

(2.66) (2.63) (2.48)

£/ Valores suavizados gráficamente.

Las tasas que se presentan en el cuadro 7 fueronobtenidas al relacionar los.nacimientos registrados,

- 21 -

que ocurrieron en los años indicados, con la poblaciónfemenina en edad fértil (15 a 49 años).estimada el lo.de julio de cada año, de acuerdo con los censos de1960 y 1970.

La estructura que ofrecen las tasas de fecundidadpor edad de la madre, en los tres momentos de la déca-da 1960-1970, se caracteriza por observar la tasa máxima, las mujeres de 20 a 24 años, siendo ligeramente inferior el nivel de la tasa correspondiente al grupocontiguo (25-29 años).

En la identificación de los países según el tipode fecundidad, definido por el grupo de edades que co-rresponde a la tasa máxima (12), Panamá queda calificado dentro de los países de alta fecundidad, en la categoría de "Cúspide temprana - tipo B", siendo una delas excepciones en la región latinoamericana, en quela curva más común es la de "Cúspide dilatada". Esasi como las mujeres entre los 20 y los 24 años deedad contribuyen con casi 1/3 de los nacimientos quese producen durante un año calendario, en todo el te-rritorio nacional.

„f. PANAMA. TASAS E S P E C I F I C A S DE FECUNDIDAD POR EDADDE LA MADRE, AflOS I 9 6 0 Y 1 9 7 0

J L

- 22 -

El análisis cronológico de estas tasas, a travésde los 10 años de la década, permite también apreciarque son precisamente las mujeres áe 20 a 30 años lasque experimentaron la reducción más importante en elnivel de las tasas de fecundidad, en especial, las delgrupo de 25 a 29 años.

En cuanto a la tasa bruta de reproducción (R1),que se obtiene al sumar las tasas de fecundidad de lasmujeres de 15 a 49 años, y que indica el número de hi-jas que se esperarla que tuvieran las mujeres someti-das a una ley fija de fecundidad, en el caso de que nomuriera ninguna de ellas. De acuerdo con la misma, enel año 1960, 100 mujeres sometidas a las condicionesantes enunciadas tendrían 266 hijas a través'de todasu vida reproductiva. Pero» ya en 1970, al haber des-cendido el nivel de las tasas de fecundidad correspon-dientes a algunas edades del periodo fértil de la mu-jer, esta relación se redujo a 248.

ii) Diferenciales de fecundidad, por áreas geográficas (13)

Si comparamos los niveles de la fecundidad entrecada una de las regiones del país, habremos de consta-tar que existen marcadas diferencias, las que se producen como consecuencia de la influencia de una multiplicidad de factores, que condicionan el comportamientode la fecundidad dentro de la población.

En la región del país donde se estima que se danlas condiciones de vida más precarias, el sector indí-gena, alrededor de 1960 se calculó para esta poblaciónuna tasa de natalidad de 50 por mil. Nivel que-desta-ca una importante diferencia con la tasa de 33 por mil,registrada en la segunda localidad más importante delpais, la ciudad de Colón.

En la comparación de las tasas de los sectores urbaño y rural, poblaciones que presentan grandes dife-rencias de tipo cultural, social y económico, la tasadel sector rural alcanza a 44 por mil habitantes, mientras que en el medio urbano, ésta es del 38 por mil,dando lugar a una diferencia del 14 por ciento, entreambas.

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Cuadro 8

PANAMA. TASAS BRUTAS DE NATALIDAD PARA ALGUNASDIVISIONES GEOGRÁFICAS: AÑO 1960 (13)

Tasas por 1,000habitantes

Division geográfica

IndígenaRuralUrbanaCiudad de Panamá (capitaldel país)

Ciudad de Colón

Se usó, como población tipo, la estructurapor edad de las mujeres del área rural.Su cálculo se basa en la estimación de unjuego de tasas de fecundidad por edad, abase de los datos del censo de 1960; em-pleando para ello el método de Lorimer.Luego, la relación de estas tasas con elnúmero de mujeres en edad fértil llevó aobtener, finalmente, la tasa bruta de natalidad de este sector de la población, quedispone de registros muy deficientes.

Al analizar la composición de la tasa bruta de natalidad por región geográfica, se aprecia que los nacimientos corresponden a mujeres residentes en el áreade estudio, mientras que la población representa a laspersonas enumeradas en dicho sector por un censo defacto, cifra que, sin embargo, se asemeja bastante ala población que suele residir en el área.

Sobre la población radicada en las distintas re-giones del país, cabe resaltar que ésta se encuentraconstantemente afectada por los movimientos demográfi-cos internos y las diferentes oportunidades que tienea su alcance la población, los que suelen afectar es-tructuras tales como la edad, el estado civil, el ni-vel educativo y otros componentes de la población, quemantienen distintos grados de relación con la fecundi-dad.

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Otro elemento que suele afectar la comparacióndel nivel de la natalidad, por área, es el distintogrado de omisión en el registro de los nacimientos, encada uno de estos sectores del pals. Si se tiene pre-sente que la omisión en el registro de los hechos vitales suele ser más importante en las áreas rurales queen los centros urbanos y que por otro lado, es posibleque las diferentes oportunidades y la migración inter-na contribuya a determinar una tasa más alta que lareal, en el área urbana; el efecto contrario de estosdos elementos podrían dar lugar a diferenciales míni-mos de fecundidad entre ambos sectores de la población.

La tipificación de las tasas brutas de natalidadde los distintos sectores estudiados, adoptando comopoblación tipo, en cuanto a la estructura por edad, ladel área rural del pals, dio por resultado tasas de natalidad en las localidades urbanas ligeramente mayoresa las registradas, dándose el mayor cambio en la ciu-dad de Colón (10 por ciento de aumento), quedando sunivel equiparado al de la ciudad de Panamá. En cam-bio, en el total del sector urbano sólo se produjo unaumento de 3 por ciento en la tasa, de manera que losdiferenciales urbano-rural, en este caso, se redujeronen un grado insignificante.

A fin de eliminar en este análisis comparativo,las perturbaciones que son ocasionadas por las diferencias antes enunciadas, en este caso, la estructura poredad dentro del grupo de mujeres en edad fértil (15 a49 años), a continuación se usa un procedimiento análogo a la tipificación, el cálculo de la tasa bruta de ""reproducción (R1). Este indicador vuelve a marcar di-ferencias en la fecundidad regional, pero de mayor tras_cendencia.

Cuadro 9

PANAMA. TASAS BRUTAS DE REPRODUCCIÓN POR ESTADO CONYUGAL, PARAALGUNAS DIVISIONES GEOGRÁFICAS: ANO 1960 (13)

UrbanaCiudadCiudad

dede

División

Colón

(Observadas)

geográfica Total

3 .42.22.02.2

Solteras2./

3 . 32 .01.82.1

Casadas

4 . 23 . 63.53.2

¿3/ Se refiere a las mujeres realmente solteras y en unión consen-sual.

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Los resultados indican que cada 100 mujeres quetuviesen la misma ley de fecundidad que la experimentada en el sector rural en el año 1960, y que no estuvieran sometidas a ninguna causa de muerte desde el naci-miento hasta los 49 años de edad, darían nacimiento a340 hijas. Tal magnitud de la tasa bruta de reproduc-ción asegurarla la triplicación de la población ruralen el lapso de una generación, si el patrón de fecundj.dad que se observa en 1960, permaneciese constante enel tiempo.

En cambio, la tasa bruta de reproducción del sec-tor urbano asegura la sucesión de 220 hijas por cada100 mujeres, tasa menor que la del sector rural, enaproximadamente 1/3. Respecto a la ciudad de Panamá,la diferencia con el sector rural es un poco mayor(42 por ciento).

Con la tipificación por edad de la fecundidad re-gional, se ha deseado demostrar que, aún eliminandolos efectos de los factores relativos a la composiciónde la población, que interfieren en la comparación dela fecundidad por ¿reas geográficas, se puede apreciarque realmente existe una correlación inversa entre elnivel de la fecundidad de la población y el grado deurbanización que ha experimentado un área.

Según estado conyugal:

Para este tipo de análisis, hubiera sido conve-niente disponer, no sólo del nivel de la reproducciónhumana en los núcleos familiares donde media una uniónlegal, sino también de aquéllas en que la unión es dehecho, ya que esta última constituye una práctica muygeneralizada en nuestro medio, especialmente en lossectores campesinos. Sin embargo, tal propósito no sehizo posible porque las estadísticas de nacimientos nosuministran dicha información. Por lo tanto, se hizosólo una comparación entre el grupo de mujeres casadasy el denominado "soltero", integrado por mujeres céli-bes y las que mantienen una unión de hecho.

De acuerdo con los resultados obtenidos, en todoslos sectores geográficos estudiados, el nivel de la reproducción es más alto entre las casadas que entre elgrupo global de solteras y unidas, lo cual ha de explicarse por el hecho de que en el último grupo está in-cluido un importante porcentaje de solteras, no expuestas al riesgo de concebir. (Véase el cuadro 9).

Las diferencias por estado conyugal son superio-res en las localidades urbanas que en las rurales. Latasa bruta de reproducción de las casadas es de un 80por ciento y un 94 por ciento superior a la de las

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"solteras", en el sector urbano y ciudad de Panamá,respectivamente; mientras que en el sector rural latasa de las casadas sólo supera en un 27 por ciento alas de las solteras. Como es de esperar, en este dis-tinto comportamiento ha de influir la proporción de mujeres solteras, cuyo peso de un 47 por ciento en elsector urbano, determina una tasa más baja entre lasno casadas de este sector que la que se da en el árearural, donde el porcentaje de solteras es menor (el 39por ciento).

Finalmente, y como una confirmación del análisisque se hizo anteriormente sobre el nivel de la repro-ducción por área geográfica, se observa que, tanto enel grupo de "solteras" como de casadas, las tasas dereproducción son más altas en el sector rural que enel urbano.

La tasa bruta de reproducción del grupo de "soltéras" y casadas, del sector rural, es superior a la ur-bana en un 65 por ciento y un 17 por ciento, respecti-vamente. Tal resultado sugiere que el patrón de la fecundldad en las mujeres casadas no es muy diferente enambos sectores.

Según distribución por edad:

La estructura de la fecundidad de acuerdo con laedad de la mujer, en los sectores urbano y rural, ofrece una distribución muy semejante.

El grupo de edades 20-24 años constituye la clasemodal, seguido muy de cerca por el grupo 25-29 años.

La sobrefecundidad de la mujer del sector ruralcon relación a la de las localidades urbana, prevale-ce a través de todas las edades. Las diferencias máspequeñas se observan en las edades donde es más altala fecundidad (20-24 y 25-29 anos), el 29% y el 38%,respectivamente. Y éstas se van acentuando a medidaque se reduce el nivel de la fecundidad, al aproximarse a las edades limites de la vida fértil. Es asi cömo, en el grupo de 15 a 19 años, la tasa de fecundi-"dad rural es superior en un 90 por ciento a la urbanay a partir de los 35 años, las tasas del sector ruralllegan a doblar las del área urbana, hasta ser 4 ve-ces superior, en el grupo de los 45-49 años.

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Cuadro 10

PANAMA. TASAS ESPECIFICAS DE FECUNDIDAD POR EDAD ( f ) ,

U X

SEGÚN AREA: ASO 1960 (13)

(Observadas)

Grupos de edades

TOTAL

15 - 1920 - 2425 - 2930 - 3435 - 3940 - 4445 - 49

Tasa por milmujeres

Urbana

142.9

105.2273.2247.5155.783.425.4

2.7

Rural

227.5

200.6353.5341.0249.7178.3

61.214.9

Tal comportamiento es una confirmación, no sólode que la fecundidad en las localidades rurales es su-perior a la de los centros urbanos, sino que además,el periodo de procreación se inicia más temprano y seprolonga hasta edades mas avanzadas en el campo que enlas ciudades. Todo lo cual está condicionado por lascostumbres del medio, por el grado de instrucción ypor toda la gama de factores que influyen directa o indirectamente, en distinta magnitud, en los niveles dela fecundidad de la población, en un momento dado. Amedida que la urbe ofrece mayores posibilidades de cambio a la población que se radica en ella, la magnitudde la diferencia de la fecundidad con respecto al cam-po se acentúa.

Algunas diferencias observadas en la ciudad de Panamá(14):

En los diversos estudios que se han realizado so-bre la fecundidad humana, se ha podido observar laexistencia de cierta correlación entre el nivel de és-ta y los factores socio-económicos que rigen en el me-dio. De allí que no sea ninguna novedad aseverar queaspectos tales como la edad del matrimonio, el nivelde la educación y la actividad económica, constituyen,entre otros, factores que influyen en el nivel de lafecundidad; así como la práctica de ciertas costumbresy tradiciones, derivadas de los cultos religiosos, dela organización familiar, etc.

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Sobre la base de estas apreciaciones se puedeafirmar que el ascenso socio-económico de la mujerguarda una relación inversa con su nivel de fecundi-dad. Al menos, esto es lo que sugieren algunos resul-tados obtenidos en la Encuesta de Fecundidad realizadaen la ciudad de Panamá, en el año 1964, en la cual fueron entrevistadas mujeres con edades entre los 20 y 50años, inclusive.

En primer lugar, cabe destacar que las mujeres nacidas fuera de la ciudad de Panamá, principalmente lasoriundas del sector rural, declararon un número mediode nacido-vivos superior a las nacidas en la capital,3.39 y 2.44, respectivamente. Tal hecho viene a con-firmar lo que se dijo anteriormente, que los nivelesde la fecundidad son mayores en el campo que en la ciudad. En este mismo sentido, es digno de destacarseque mientras las mujeres inmigrantes a la capital, an-tes de cumplir los 10 años de edad, declararon tener2.92 hijos nacido-vivos; las que llegaron después dehaber cumplido los 40 años, presentaron un promedio denacido-vivos de 5.42.

En esta investigación, se pone de manifiesto laestrecha correlación negativa que existe entre la fe-cundidad y la educación. Mientras el número medio denacido-vivos, declarados por las mujeres que no habíancursado ningún año de estudio, era de 4, las que terminaron la "primaria" declararon 3.14 hijos y las que finallzaron la "secundaria", 1.65.

En lo que respecta a la actividad económica, acontinuación se transcribe lo que se declara en el in-forme mencionado: "Los resultados de la investigaciónseñalan una fecundidad menor en las mujeres que traba-jan, las cuales presentan un promedio de 2.24 hijos nacido-vivos".

Otro ejemplo de la correlación negativa que exis-te entre el nivel de la fecundidad y la participaciónde la mujer en la actividad económica, se observa cuando sólo el 24% de las mujeres que trabajan ha tenidomás de 3 hijos, mientras que tal proporción es del or-den del 38% en las mujeres que no integran la fuerzalaboral.

A través de la Encuesta de Fecundidad de la ciu-dad de Panamá, se ha podido apreciar cómo los factoresque propenden a elevar el status de la mujer en la so-ciedad guardan una relación inversa con la fecundidad.Si se considera que, en el futuro, esta corriente iráen aumento, es de esperar que actúe en medida semejan-te en los patrones de la fecundidad. Y esa influencia

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ya se ha podido notar en la década del 60, a travésdel leve descenso que ha experimentado el nivel de lafecundidad en el pals, particularmente en el últimolustro.

e) Mortalidad.

1. Tendencia histórica (últimos 30 años):

La mortalidad ha venido ocupando el segundo lugar, comofactor decisivo del tamaño y de la composición por sexo yedad de la población de numerosos países, entre los cualesse incluye Panamá.

El estudio de la forma en que una generación de perso-nas se extingue a través de la edad es materia de interés tarito para la demografía como para la medicina y la salud públi-ca. No obstante, mientras a las dos últimas les motiva el conocimiento de la etiología de las enfermedades y las causasde muerte, a fin de prolongar la vida del hombre; a la demo-grafía le interesa encontrar la relación que pueda existirentre la mortalidad y las características físicas o biológi-cas de la población, su organización social y el medio am-biente.

Al considerar que la demografía no dispone de mayores informaciones acerca de la constitución de los individuos, elaspecto biológico de su estudio generalmente se limita al se-xo y a la edad y a lo que pudieran aportar, en este sentido,las causas de muerte.

En cambio, las relaciones que puedan existir entre lamortalidad y los factores relativos a la organización socialy el medio ambiente del hombre, pueden ser mejor investigadospor la demografía. Entre los que se incluyen aquellos elementos derivados de su forma de vida, tales como la ocupación,los ingresos, los hábitos alimenticios, el tipo de comunidaden que se vive, etc.

En este sentido, se ha podido apreciar en los últimos 30años, que el aumento de la longevidad de la población del Ist-mo puede atribuirse, en orden de importancia, a los avancesde la medicina, al mejoramiento y extensión de la asistenciamédica, pero ante todo, al saneamiento del medio ambiente. Yen segundo término, a la elevación del nivel de vida de los h¿hitantes del país.

Al igual que en el caso de la fecundidad, para analizarla evolución que ha experimentado la mortalidad se usará el índice más genérico para este fin, es decir, la tasa bruta demortalidad, que mide la frecuencia relativa de las muertes enla población, durante un ano, respecto a la población mediaen dicho período. Siguiendo un principio semejante, se puede

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medir la mortalidad de cualquier segmento de la población, tales como su distribución por sexo, grupos de edades, estadocivil, etc.

Antes del cálculo de estas tasas, conviene tener presejite que "La obtención de medidas satisfactorias de la mortali-dad depende, fundamentalmente, de la existencia de un sistemade registro civil y de estadísticas vitales que aseguren unaenumeración relativamente completa y oportuna de las muertes"(15). En Panamá, el sistema de registro civil y de las esta-dísticas vitales surgió en el presente siglo, y han ido mejorando progresivamente tanto en cobertura como en calidad.Sin embargo, es necesario reconocer que, aún en nuestros díasel registro de las muertes en el país adolece de omisiones importantes.

A través de diversos estudios analíticos, en los cualesse ha hecho intervenir a las cifras de los últimos tres cen-sos nacionales de población, la omisión de las muertes se haestimado, aproximadamente, entre un 15% y un 20%, para los p¿ríodos intercensales 1950-1960 y 1960-1970 (9).

Cuadro 11

PANAMA. TASAS BRUTAS DE MORTALIDAD REGISTRADAS:

1930 A 1969AÑOS

1930 - 1934.1935 - 1939.

1945 - 1949.

1955 - 1959.1960 - 19641965 - 1969.

(Por mil

Período de

habitantes)

años Tasa

12.912 9

10.9

9.17.87.1

Fuente:- Las tasas correspondientes a los períodosde los años 1930 - 1959 fueron extraídasdel "Demographic Yearbook" - Naciones Unidasjl966. Las de 1960 en adelante, se ob_tuvieron del boletín "Panamá en Cifras",años 1967-1971, editado en 1972.

A pesar de las limitaciones de cobertura que caracteri-zan a las cifras de muertes, que sirvieron para calcular lastasas precedentes, se puede apreciar claramente como el nivelde la mortalidad ha venido descendiendo en forma sostenida através del tiempo, tendencia que parece haberse acelerado enel período de la post-guerra ;. hecho no sólo suscitado en nue_s

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tro país, sino en gran parte de las naciones latinoamericanas.Tal comportamiento trajo como consecuencia que el nivel de lamortalidad de la década del 30 se redujera casi a la mitad,30 aflos después, en el decenio 1960-1970.

No obstante haberse admitido que, en el pasado, la omi-sión en el registro de las muertes debió ser superior a la delos últimos años, no debe sorprendernos mucho una tasa de mojrtalidad del 13 por mil en la década del 30. Si recordamos quedurante la construcción del canal interoceánico (1904-1914) sedesplegó una actividad de gran envergadura en materia de saneamiento ambiental, que dio lugar al exterminio de enfermedadesmortales como la fiebre amarilla y a la sustancial_reducciónde la malaria.

Un caso que sirve de comparación, aunque suscitado en unaépoca más reciente, es el de Ceilán. "Alrededor de 1946, estepaís tenía una tasa de mortalidad cercana al 20 por mil, perola aplicación de modernas medidas sanitarias de acción contrala malaria permitió reducir dicha tasa al 14.3 por mil en 1947y al 12 por mil, en 1952" (15).

En el momento actual, el país ha llegado a alcanzar unatasa bruta de mortalidad muy baja, que se caracteriza por noexperimentar mayores variaciones anuales; lo cual puede serun indicio de que se está llegando al momento en que la mort¿lidad tenderá nuevamente a ser constante, hasta tanto no selogren nuevas conquistas en el tratamiento de las enfermedadesque siguen cobrando un alto número de vidas. Por otro lado,debe tenerse presente que el aumento de los arios de vida, eldescenso de la natalidad, que ya se insinúa en los últimosaflos, contribuirán a aumentar el número de personas de mayoredad, lo que obviamente determinará un giro en la tendenciade la tasa bruta de mortalidad, aumentándola de nivel.

Pero este cambio, tal como se acaba de expresar, sólo sería la consecuencia del aumento del número de personas viejas,que, como es sabido, tienen una probalidad de muerte muy superior a la de las personas jóvenes; y no necesariamente a unretroceso en la gestión de preservar la vida humana.

A causa de la interferencia de la edad en la interpreta-ción del índice antes comentado, el estudio de la mortalidadse mejora mediante la observación del comportamiento de laesperanza de vida al nacer, que no es otra cosa que el núme-ro promedio de años que se espera que vivirá un recién nacidosi se mantienen las condiciones de mortalidad observadas enuna fecha o período de tiempo dado. Esta medida tiene la ventaja de ser independiente de la estructura por edad de la po-blación. Además, su deducción implica la construcción de unatabla de vida, para la cual se hace necesario disponer de ci-fras fidedignas de muertes, o, de lo contrario, introducir correcciones que mejoren su calidad.

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Cuadro 12

PANAMA. CAMBIOS EN LA ESPERANZA DE VIDA AL NACER: ANOS 1942 - 1970

Periodo de años

Esperanza de vidaal nacer

Total Hombres Mujeres

Ganancia de vida anual

Total Hombres Mujeres

1941-1943 (1942)

1950-1960 (1955)

1960

1970

51.86

59.81

61.83

65.78

58.54

60.47

64.26

61.24

63.37

67.50

0.61

0.40

0.40

0.39

0.38

0.43

0.41

Fuente:- Los datos de 1941-1943 proceden de la Dirección de Estadísti-ca y Censo de Panamá. "Tablas de vida abreviadas, 1941-1943".Los restantes valores fueron tomados del documento "Estima-ción de indicadores demográficos de la República de Panamá para el período 1950-1970 y proyecciones de población por sexoy grupos de edades, aflos 1960 al 2000". Médica, Vilma N.,CELADE, 1973.

En el cuadro que antecede, se vierten los resultados ob-tenidos de cuatro tablas de vida elaboradas para la Repúblicade Panamá en distintas fechas, las cuales, aunque siguen pro-cedimientos distintos en su preparación, pueden ser compara-das para suministrar un orden de magnitudes sobre la tenden-cia de la mortalidad en el país durante los últimos 30 aflos.

Vemos así cómo, durante los 13 años transcurridos entre1942 y 1955, se pasó de una esperanza de vida al nacer de 52a 60 aflos, lo cual significó una ganancia promedio de vidaanual de 0.61 aflos, la más alta en todo el período de estudio.

Después de 1955, la esperanza de vida siguió aumentandoen el país, pero a una menor velocidad, representando sólo2/3 de la ganancia del período anterior, es decir, 0.40 aflosde vida anual.

En este aspecto, la mujer supera al hombre, no sólo alexperimentar un incremento más rápido en su esperanza de vida,sino también, por lograr una mayor longevidad. En 1970, seestimó para los hombres una esperanza de vida al nacer de 64años, mientras que para las mujeres se elevó a los 67 aflos.

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En la diferencia de la mortalidad por sexo, como se verámás adelante, influyen los distintos grados de riesgo a queestán expuestos los hombres y las mujeres en su medio, frenteal cuadro de enfermedades que prevalecen en el país, así comoa los diferentes niveles de avance que se han logrado alcanzar,en el tratamiento de las enfermedades.

2. Nivel actual (en la década de I960):

i) Mortalidad por sexo y grupos de edades:

La mortalidad varía con la edad de las personas, laque fundamentalmente es una característica biológica delhombre; pero, aparte del proceso de desgaste de la vidapor el envejecimiento, otros aspectos confieren interésal estudio de la mortalidad según la edad al morir.

Ciertas causas de muerte afectan a los humanos só-lo en determinados períodos de su vida o son más frecuejrtes, como las enfermedades contagiosas, que suelen pre-sentarse en la primera infancia; los accidentes del tra-bajo y del tránsito, cuyo riesgo es mayor en los adultosjóvenes y de mediana edad, o los procesos degenerativosque aparecen en las edades avanzadas.

Otro tanto corresponde decir respecto al sexo. Laexistencia de una mortalidad diferencial de hombres ymujeres está motivada por el diferente riesgo de muerte,asociado a ciertas causas.

I Para apreciar mejor los cambios en el tiempo de lamortalidad según la edad, lo más indicado parece ser elanálisis de las probabilidades de muerte para edadesexactas, procedentes de una tabla de vida, calculadas,en este caso, para los afíos 1960 y 1970.

En el cuadro 12 y gráficos correspondientes, se pr¿sentan las probabilidades de morir (5ix) en cinco años,a partir de edades seleccionadas. A fin de facilitar laobservación del cambio de estos valores a través deltiempo, se presentan los niveles que tendrían las proba-bilidades de muerte en 1970, si se asignara un valor de100 a las probabilidades correspondientes a 1960.

Las tablas de vida elaboradas para la República dePanamá en 1960 y 1970, fueron construidas con base en lasmuertes registradas anualmente, que se corrigieron mediarite un factor de ajuste derivado de una tabla elaboradapara la década 1950 - 1960, mediante el método de Mor- .tara (8) (9).

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Cuadro 13

PANAMA. PROBABILIDADES DE MORIR EN LOS CINCO ANOS QUE SIGUEN AL MOMENTODE ALCANZAR LA EDAD EXACTA X, POR SEXO: ANOS I960 Y 1970 (9)

Edad x

1960 1970

Valores relativosconsiderando a q^2i

1960 1970

05

1015202530354045505560657075,80

05,

10,15,20,25,30,35,40,45,50,55.60,65.70.75.80.

0.063920.009960.007620.012970.017890.018790.020070.023020.027980.036210.049780.069700.106060.158750.257530.391680.54548

0.059810.009290.007100.012110.016710^017560.018770.021550.026220.033990.046840.065790.088930.122450.173280.246410.37282

HOMBRES:

0.047360.007670.005880.010060.013960.014760.015850.018320.022440.029320.040810.058070.090340.139190.234630.372270.53647

• MUJERES :

0.041250.006950.005340.009160.012770.013550.014620.016970.020880.027430.038440.055150.076430.108360.158570.233770.36657

100100100100100100100100100100100100100100100100100

100100100100100100100100100100100100100100100100100

7477777878797980808182838588919598

6975757676777879808182848688929598

Fuente:- Estos datos proceden del documento: "Estimación de indicadoresdemográficos de la República de Panamá para el período 1950-1970 y proyecciones de población por sexo y grupos de edades,años 1960 al 2000" Médica, Vilma N., CELADE, 1973.

- 35 -

La comparación de las probabilidades de morir encinco años, entre 1960 y 1970, tanto en hombres como enmujeres, revela un descenso sistemático en este riesgo,a través de todas las edades. La velocidad de este des_censo varía de acuerdo con la edad; resulta más marcadoen los primeros cinco años de vida, particularmente enlös menores de un año, donde el descenso fue del 26% enlos hombres y del 31% en las mujeres.

También resultan de importancia los descensos de lamortalidad entre los niños de 5 a 15 años, los adolescentes y los adultos jóvenes; pero este se va haciendo cadavez menos importante, a medida que se avanza en la edad.Ya, a los 65 años, las diferencias entre 1960 y 1970 só-lo alcanzaron el 12%, tanto en hombres como en mujeres.

Otro aspecto sobresaliente en este análisis, loconstituye el hecho de que el riesgo de muerte, en todaslas edades, es superior en los hombres que en las muje-res; y, por el contrario, la velocidad de descenso de este riesgo es mayor en las mujeres que en los hombres,particularmente en las edades jóvenes. Con el avance dela edad, aproximadamente a partir de los 40 años, el descenso en las tasas de muerte es muy semejante para ambossexos.

Las probabilidades de morir a través de las edadespermite apreciar que, al inicio de la vida, este riesgoes muy elevado en los 5 primeros años, donde sobresalepor su magnitud, la muerte de los niños que no alcanzana cumplir un año de vida. Después, entre los 5 y 10años, el riesgo de muerte baja drásticamente hasta aleanzar su nivel mínimo a los 10 años. Luego comienza a au-mentar lentamente hasta los 50 años, en que la probabilidad de morir se eleva rápidamente, a medida que aumentala edad de las personas.

- 36 -

por 1000 Gráf i co 5a .

PANAMA. PROBABILIDADES DE MORIR A LA EDADEXACTA X, AROS 1960 Y 1970

(Hombres)

(Tasas por m i l )

— I960

_ _ . 1970

65 70Edodat

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por IOOO

Gráf i co 5b .

PANAMA. PROBABILIDADES DE MORIR A LA EDADEXACTA X, ASOS 1960 Y 1970

(Mujeres)

(Tasas por m i l )

y

,.' y

63 70Edod«

- 38 -

ii) Mortalidad Infantil; .

Dentro del estudio de la mortalidad por edad dela población, adquiere especial interés aquélla queocurre en el primer año de la vida. Diversos motivosle confieren esta importancia. En primer lugar, unavida que se troncha apenas se inicia, es de lamentardesde todo punto de vista, más cuando, en múltiplesocasiones, ésto les ocurre a criaturas que han nacidorelativamente sanas.

Dentro del grupo de los menores de un año, se dis_tinguen las muertes que ocurren en los primeros 28días de vida del niño (menores de un mes), que suelendenominarse Mortalidad Neonatal; y aquéllas que ocu-rren entre el 1er. mes de edad y antes de cumplir elaClo, denominadas, Mortalidad Postneonatal. Tanto lastasas de mortalidad neonatal como postneonatal, se cal_culan relacionando las muertes ocurridas en los respe£tivos tramos de vida, con los nacimientos ocurridos enel mismo afío calendario.

Aparte de las muertes que se producen en el pri-mer mes de vida, que suelen ser motivadas, en gran paj_te, por causas endógenas (nacimientos prematuros, mal-formaciones congénitas, etc.), la casi totalidad de lasmuertes infantiles son provocadas por enfermedades detipo infeccioso (parasitosis, diarreas, enteritis,etc.).

Siendo éste un campo en que la medicina y la sa-lud pública han logrado sus mayores avances, variospaíses han conseguido reducir su mortalidad infantil aniveles muy bajos. De manera que constituye motivp degran preocupación el hecho de que en numerosas regio-nes del mundo sigan prevaleciendo altas tasas de muer-tes infantiles. Tan importante es el nivel de este lndice en el desarrollo social de un pals, que llega aser decisivo en la medición del nivel de vida de lospueblos.

Respecto al riesgo de muerte en el primer mes de .vida, se ha observado que, a una mayor tasa de mortal^dad general, corresponde una menor proporción de defunciones de menores de un mes y adquieren mayor importancia las muertes de 1 a 11 meses de edad. Y lo contra-rio ocurre cuando la mortalidad general ha bajado sus-tancialmente. Esto sucede porque las enfermedades in-fecciosas, que son las principales responsables de lasmuertes de nidos entre 1 y 11 meses, han sido controla^das en mayor medida que las enfermedades de tipo endó-geno, lo cual se refleja en un descenso importante delas muertes ocurridas en el tramo de vida antes indica_do.

- 39 -

Cuadro 14

PANAMA. MORTALIDAD INFANTIL, NEONATAL Y POSTNEONATAL, EN LAREPÚBLICA Y CIUDAD DE PANAMA: AÑOS 1960, 1965 Y 1970

1 9 6 0 . . .1 9 6 5 . . .1970

A fio

(Por 1,000 nacidos-vivos)

MortalidadInfantil

Repú-blica

56.944.740.5

Ciudadde

Panamá

46.336.230.6

MortalidadNeonatal (me-

nores de 1 mes)

Repú-blica

24.923.720.8

Ciudadde

Panamá

23.022.917.7

MortalidadPostneonatal(1-11 meses)

Repú-blica

32 021 019.7

Ciudadde

Panamá

23 313 312.9

Fuente:- Serie B.-Estadísticas Vitales (Estadística Panameña), aflo 1970,1967 y 1964.

Las tasas que se presentan en el cuadro 13 seña-lan para nuestro pals la muerte de .57 niños menores deun aílo por cada 1,000 nacimientos vivos ocurridos en1960, nivel semejante al de Canadá, 20 años antes, en1940. El mismo Índice para 1970 se reduce a 40 muer-tes infant i les por 1,000 nacido-vivos, cifra aproxima-da a la del pais antes mencionado, en 1950. Estos va-lores comentados nos están sugiriendo que Panamá ha experimentado un descenso en su mortalidad infant i l en-t r e 1960 y 1970, muy similar a l que se dio en Canadáentre 1940 y 1950.

Dadas las limitaciones de cobertura que presentanlas cifras de muertes en nuestro pals , en este anál i -s is se admite la magnitud del cambio experimentado porlas tasa, no as i sus niveles , que seguramente habránde ser mayores.

Respecto a las tasas de muerte observadas paralos menores de un mes, en 1960, resultan inferiores ala mortalidad postneonatal, lo cual es de esperarse enun país como Panamá, en que la mortalidad infant i l aúnes moderadamente a l t a . No obstante, a p a r t i r de 1965,se comienza a observar una tasa neonatal ligeramentesuperior a la registrada para el tramo de 1 a 11 meses.

En el caso de la ciudad de Panamá, se admiten tanto los niveles como las tendencias que marcan las ta-sas re la t ivas a las muertes de los menores de un año.

- 40 -

Los registros vitales en la capital del país están ga-rantizados por el cumplimiento de normas que propugnanpor un registro bastante completo y de calidad acepta-ble.

La muerte de 46 niflos menores de un año por cada1,000 nacido-vivos ocurridos en la ciudad de Panamá en1960, nos revela que la pérdida de vidas infantiles enesta localidad es 1/5 inferior al total del pals. Y10 años después, es decir, en 1970, esta diferencia au_menta a 1/4.

En cuanto al contraste que presentan las tasas demuertes de los menores de un mes con aquellas que co-rresponden a niílos entre 1 y 11 meses de edad; las di-ferencias entre la República y la ciudad de Panamá sonmuy pequeflas, en lo que respecta a la mortalidad neona_tal. En cambio, en la postneonatal, las tasas de lacapital son significativamente inferiores a las del to_tal del pals, lo cual constituye un firme indicio delmayor control que han tenido las enfermedades infeccio_sas en esta ciudad, con relación al resto de la nacióndando lugar a que, en la capital del pais, la importan_cia relativa de la mortalidad neonatal sea muy supe-rior a la postneonatal, en los últimos 5 afíos de la de_cada del 60.

iii) Mortalidad por causas de muerte distribuidas por gru-pos de edades:

El análisis de la mortalidad por causas de muertereviste un serio problema en nuestro medio, debido ala escasa certificación médica, particularmente en lasáreas rurales del pals, lo cual es motivado, entreotras cosas, por la dispersión en que vive gran partede la población, lo que aunado a la escasez de mediosde comunicación, dificulta el acceso del servicio mêdi^co a las distintas regiones del pals. Por otro lado,el incumplimiento de las normas legales en materia deentierros y la inadecuada distribución de los galenosdentro del territorio nacional, agrava la situación anteriormente revelada. Vemos así como, mientras en laprovincia de Panamá se concentran 11 médicos por cada10,000 habitantes (1970), en el resto del pals esta r¿lación no alcanza siquiera a 5.

De manera que, mientras en las localidades urba-nas casi el 100% del total de las muertes cuenta conun diagnóstico médico adecuado, en los sectores rura-les sólo 1/3 de las defunciones posee una causa debida_mente certificada.

Dadas las limitaciones apuntadas sobre las causasde muerte, a nivel de la República, a continuación se

- 41 -

presentan sólo las defunciones certificadas por médi-co, las cuales representan aproximadamente 2/3 del to-tal de las muertes ocurridas en todo el territorio na-cional; a fin de conocer en una fecha reciente (aflo1970), cuáles son las enfermedades que han venido ocu-pando los primeros lugares como causas de decesos enla población total y en los distintos grupos de edades.

Otra limitación que debe tenerse presente en lainterpretación que se les dé a estas cifras, es que lafalta de certificación médica afecta, en distinta medi_da, a las diferentes causas de muerte, lo cual puededar lugar a que en ocasiones se sobre-estime o, por elcontrario, se sub-estime, la importancia relativa dealgunas enfermedades como causas de muerte.

En este sentido, las causas más notables por subaja certificación médica, dentro del total de las en-fermedades, son, en orden de importancia: influenza(11%), tétanos (28%), sarampión (32%), bronquitis, en-fisema y asma (34%) y enteritis y otras enfermedadesdiarreicas (51%).

En la descripción que se acaba de hacer, es nota-ble cómo las enfermedades de tipo infeccioso son lasmás afectadas por la falta de certificación médica, locual nos hace suponer que, en el ámbito nacional, es-tas enfermedades deben ocupar posiciones más importan-tes que las que se insinúan en el cuadro que se presenta a continuación.

PANAMA.

Cuadro 15

IMPORTANCIA RELATIVA DE LAS PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTECERTIFICADAS POR MEDICO: AÑO 1970

Código

(a)

281932

E47-50304

5 y 644

Edad y causa (a)

TOTAL

Enteritis y otras enfermedades diarreicas

Otras causas de mortalidad de menores de un

Porcentaje

100.0

15.39.99.08.37.35.93.6

3.5

- 42 -

Cuadro 15

PANAMA. IMPORTANCIA RELATIVA DE LAS PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTECERTIFICADAS POR MEDICO: ANO 1970 (Continuación)

Código(a) Edad y causa (a) Porcentaje

43

42

3244

43

32414

E47-50324

E47-505 y 6

19

E47-5019

5 y 6

Lesiones al nacer, partos distócicos y otrasafecciones anóxlcas e hipóxicas de menoresde un arlo

Anomalías congênitasLas demás causas

Menores de un año

NeumoníaOtras causas de mortalidad de menores de un

a fíoLesiones al nacer, partos distócicos y otras

afecciones anóxicas e hipóxicas de menoresde un a fio ,

Las demás causas

1 - 4 aflos

NeumoníaEnteritis y otras enfermedades diarreicas...,SarampiónLas demás causas

5 - 1 4 aflos ,

"Accidentes, suicidios y homicidios ,NeumoníaEnteritis y otras enfermedades diarreicas...,Las demás causas ,

15 - 24 años ,

Accidentes, suicidios y homicidios ,Tuberculosis (todas las formas) ,Tumores malignos (cáncer) ,Las demás causas ,

25 - 44 aflos ,

Accidentes, suicidios y homicidios ,Tumores malignos (cáncer) ,Tuberculosis (todas las formas) ,Las demás causas ,

15.849.9

100.0

23.418.29.7

48.7

100.0

24.97.46.9

60.8

100.0

41.96.76.3

45.1

100.0

26.613.09.4

51.0

- 43 -

Cuadro 15

PANAMA. IMPORTANCIA RELATIVA DE LAS PRINCIPALES CAUSAS DE MUERTECERTIFICADAS POR MEDICO: ARO 1970 (Conclusión)

Código

<»)

281930

281930

281930

Edad y causa (a)

65 - 74 años

Las demás causas

Porcentaje

100.0

21.619.810.448.2

100.0

30.517.513.438.6

100.0

35.8, 15.1

11.237.9

(a) Según la Lista de 50 grupos de causas de la Clasificación Esta-dística Internacional de Enfermedades, Traumatismos y Causas deDefunción (Octava Revisión). Organización Mundial de la Salud.

Fuente:- Serie B. - Estadísticas1970.

Vitales (Estadística Panameña), año

En el total de la población, las enfermedades is-quémicas del corazón ocupan la primera posición en elesquema de enfermedades certificadas por médico, si-guiéndoles un poco alejadas, en las cuatro posicionessiguientes: los tumores malignos, la neumonía, lasmuertes violentas y las enfermedades cerebrovasculares.

De las 5 enfermedades que ocupan las primeras po-siciones como causas de muerte, sólo tienen un altoporcentaje de certificación médica las enfermedadesque podríamos llamar degenerativas: "isquemia del co-razón", los "tumores malignos" y. las enfermedades "ce-rebrovasculares"; no así la neumonía y las muertes vi£lentas, lo cual abona a favor de la idea de que la es-

- 44 -

tructura de causas de muertes que se presenta serlasusceptible de cambio si un porcentaje importante deotras enfermedades, que se dan particularmente en lasareas rurales, fueran certificadas por médico.

Pese a las limitaciones de la información que seestá analizando, la estructura de las muertes por cau-sa, dentro de cada grupo de edades, permite una apre-ciación más clara de la situación. Vemos asi cómo la"neumonía" es la responsable del mayor número de muer-tes entre los menores de un ano y en los nifíos de 1 a4 años de edad, el 18% y el 23%, respectivamente. Re-salta, además, el hecho de que, en este último grupode edades, la "enteritis y las enfermedades diarreicasasi como el "sarampión", sean las responsables del 28%de las muertes.

A partir de los 5 hasta los 44 años de edad, las"muertes violentas" ocupan el primer lugar entre lascausas de muerte que afectan a esta población, provoca^cando el 25% de los decesos entre los 5 y 14 años; el42% en la primera juventud (15-24 años) y el 27% delas muertes entre los 25 y 44 apios de edad. También,en este tramo de la vida, siguen siendo importantes a\_gunas enfermedades infecciosas, y los tumores malignoscomienzan a ocupar el tercer lugar entre los 15 y los24 años de edad, manteniéndose como segunda causa demuerte desde los 25 años en adelante.

A partir de los 45 años, como es de esperarse, lacausa de muerte que provoca el mayor número de decesosson las "enfermedades isquémicas del corazón", acompa-ñadas, en tercer lugar, por las "enfermedades cerebro-vasculares".

iv) Nivel y estructura de la mortalidad, en el principalcentro urbano del país (la ciudad de Panamá);

Si se hace abstracción de la influencia de losfactores biológicos, cuyo efecto se manifiesta en re-lación con la edad de los individuos, las diferenciasque suele presentar la mortalidad pueden explicarse,en gran parte, en función de factores vinculados alambiente económico y social de una región o país.

"Aunque se tiene conciencia del ambiente económi-co-social como expresión compleja de múltiples elemen-tos, es difícil establecer, definir y medir los compo-nentes esenciales de dicho ambiente. También debenconsiderarse las costumbres sociales, la religión y,en general, las expresiones culturales que conformanvalores que influyen en las actitudes de los miembros

- 45 -

de la comunidad, incluyendo aquéllos que se relacio-nan con los hábitos higiénicos, la preparación de losalimentos, la cooperaciön con los programas de SaludPública, etc." (16).

El conocimiento de la influencia relativa de losfactores antes enunciados se enfrenta con serios pro-blemas de mediciön. Tales dificultades surgen de doshechos que imponen una importante limitación al estu-dio de esta materia: la falta de información estadís-tica y la estrecha interdependencia de los diversosfactores aludidos.

En el caso de Panamá, aunque podría intentarse lamedición de la mortalidad para ciertas divisiones re-gionales, tales como el área urbana-rural, las provin-cias (primera división administrativa) y ciudades, surge nuevamente el problema del diferente grado de inte-gridad del registro, que favorece a las ciudades y l i -mita el aprovechamiento de las informaciones proceden-tes de los sectores rurales.

Se ha dicho, en numerosas ocasiones, que en Améri_ca Latina existe un marcado contraste entre las condi-ciones de vida de la población de las ciudades impor-tantes y la forma de vida de la población rural y delos pequeños pueblos. Que los beneficios del desarro-llo económico experimentado por muchos países latino-americanos, en las últimas décadas, han recaído, casienteramente, en las poblaciones urbanas.

Atendiendo a esta premisa, a continuación se ana-lizan los resultados de un estudio sobre la mortalidad,efectuado para la capital del país (17), la que concentra, aproximadamente, 1/3 de la población total; a finde contrastar estos resultados con el nivel general dela mortalidad de toda la población que habita el Istmo.

Para obtener los diversos indicadores de la mortjilidad, que se presentan más adelante, fue necesariocontar con cifras de población, nacimientos y defuncio_nes de residentes en la ciudad de Panamá, que refleja-ran, en la forma más precisa posible, la realidad deestos hechos, alrededor del año 1960.

De la bondad de las informaciones de la ciudad dePanamá, se da garantía, por los resultados obtenidosen la evaluación a que fue sometida la cifra del censode población de 1960, (el 1% de omisión). Por otro lado, el hecho de que alrededor del 977. de los nacimien-tos de la capital sean atendidos en instituciones hos-pitalarias y casi el 100% de las muertes declaradasfueran certificadas por médico, son garantía de una c£bertura y calidad aceptable del registro de nacimien-

- 46 -

PANAMA.

tos y defunciones. Asimismo, la codificación de losdiagnósticos realizados por los médicos se rige por laClasificación Uniforme de las Causas de Muerte, de laOrganización Mundial de la Salud, que garantiza la comparabilidad de las cifras a nivel internacional.

Para contrastar el nivel general de la mortalidadde la ciudad de Panamá con el del total del país, afin de apreciar los diferenciales que, al menos, ha-brían de esperarse entre este centro urbano y el restode la población, se analizan los valores de la esperanza de vida al nacer, obtenidos para ambas áreas, endistintas épocas.

Cuadro 16

COMPARACIÓN DE LA ESPERANZA DE VIDA AL NACER DE LA CIUDAD DEPANAMA CON EL TOTAL DEL PAIS: ANOS 1942 A 1960

(Ambos sexos)

Año

Ciudad de Panamá(17)

Esperanzade vidaal nacer

Gananciade vida

anual

Total del paísa/

Esperanzade vida

a l nacer

Gananciade vida

anual

1942

1953

1960

y 53.01

b/ 65.02

68.59

1.09

0.51

51.86

cj 59.81

61.83

0.61

0.40

a/ Proceden del cuadro 11.b/ Tabla de vida abreviada, 1941-1943 y Tabla de vida detallada,

1952-1954. Dirección de Estadística y Censo de Panamá.çj Centrada en el año 1955.

Al comparar la esperanza de vida obtenida para laciudad de Panamá en los años 1942 y 1953 con la calcu-lada para 1960, se aprecia el notable descenso que haexperimentado la mortalidad en este núcleo urbano, enun lapso de 20 años. Al estimarse casi 69 años de ex-pectativa de vida para 1960, significa haber logradouna ganancia de un poco menos de un año de vida (0.9)anual, desde 1942, siendo esta ganancia mayor entre1942 y 1953, que en la década del 50.

En cambio, el mismo indicador obtenido para la República denota una ganancia de vida anual de 0.55 años,durante el mismo período, que es, aproximadamente, la

mitad de l aumento logrado en l a ciudad de Panamá. Y,lo que es más importante, a medida que aumenta la esp.eranza de vida en ambos s ec to r e s , las d i ferencias se hacen más grandes. En 1942, l a esperanza de vida estimada para l a ciudad de Panamá y la República, d i fer íanen un año de vida, en 1953 la diferencia era de 5 añosmás para l a ciudad de Panamá y en 1960, de 7 años.

Cuadro 17

CIUDAD DE PANAMA. CAMBIO DE LAS TASAS DE MORTALIDAD POR EDAD,EN CADA SEXO, ENTRE 1950 Y 1960 (17)

Grupos deedades

TOTAL

Menores de 1

1 - 45 - 14

15 - 2425 - 4445 - 64

Hombres

Tasa por 1,000

1950

9.5

66.14.11.1

. 1.83.1

18.0102.1

1960

7.3

59.13.10.61.02.3

11.069.4

Porc entaje decambio

(-) 23.2

(-) 10.6(-) 24.4(-) 45.4(-) 44.4(-) 25.8(-) 38.9(-) 32.0

Mujeres

Tasa por 1,000

1950

7.2

52.33.40.70.92.9

12.670.8

1960

5.4

46.63.20.60.41.87.5

47.0

Porcentaje decambio

(-) 25.0

(-) 10.9(-) 5.9

(-) 14.3(-) 55.6(-) 37.9(-) 40.5(-) 33.6

Al analizar la mortalidad de la ciudad de Panamáen dos momentos de la década del 50, se observa, en t£dos los grupos de edades, tanto en hombres como en mu-jeres, que las tasas de mortalidad decrecieron durantelos 10 años de dicho período, siendo muy importante,por el peso que tiene en el nivel general de la morta-lidad, el descenso de las tasas de los menores de unaño y el de la población de más de 45 años.

En cuanto al cambio experimentado por las tasasen cada sexo, el descenso de las mismas en la pobla-ciön juvenil (1-14 años), fue mayor en los hombresque en las mujeres; en cambio, estas últimas se vie-ron favorecidas con un mayor descenso de la mortalidaden las edades activas y fért i les (15 a 44 años).

En el nivel general, el descenso de la mortalidaden las mujeres ha sido ligeramente superior al de loshombres, comportamiento t£pico de una mortalidad quetiende a alcanzar niveles relativamente bajos, como esel caso de la ciudad de Panamá.

- 48 -

Respecto al análisis de las causas de muerte, és-te ofrece varios aspectos de interés, uno de los cua-les, el que tiene relación con la investigación del nivel general de la mortalidad, es objeto de nuestraatención.

En el descenso histórico del nivel de la mortali-dad, ha tenido un papel dominante el cambio de la inci.dencia de determinadas causas de muerte, especialmentela de "enfermedades infecciosas y parasitarias", lascuales han tendido a reducirse. Por el contrario, lamortalidad debida a otras enfermedades, como los procesos degenerativos o propios del envejecimiento del serhumano, si bien han tendido a descender, lo han hechocon un ritmo relativamente lento. Este comportamientodiferencial en el progreso de la lucha contra las cau-sas de muerte conduce, necesariamente, a cambios en lacomposición relativa de las muertes clasificadas porcausa.

En esta oportunidad, se utiliza un esquema de composición relativa de las muertes clasificadas por cau-sas, que se presenta en un estudio de las Naciones Uni_das (18), el cual contiene tasas (medias) por grandesgrupos de causas de muerte, tipificadas por edad, co-rrespondientes a distintos niveles de mortalidad en elmundo.

Con tal propósito, las causas de muerte fueronclasificadas en los siguientes grandes grupos:

Grupo I. Enfermedades infecciosas y parasitarias ybronconeumonia.

Grupo II. Tumores malignos (cáncer).

Grupo III. Enfermedades del corazón y cardiovasculares.

Grupo IV. Accidentes, suicidios y homicidios.

Grupo V. Las demás.

Para que fuera posible la comparación de la mortalidad de la ciudad de Panamá en 1960, con este esquema,fue necesario calcular, para esta localidad, tasas es-pecificas por causas, tipificadas por edad, utilizandola misma población tipo que se empleó en el esquema dereferencia.

Los resultados obtenidos se compararon con los valores teóricos de las Naciones Unidas que más se leaproximaban, y que corresponden a una esperanza de vi-da al nacer (ambos sexos) de 68 años (véase el cuadro17). Como se puede apreciar, las tasas globales demortalidad de la ciudad de Panamá y del modelo, el 6.8y el 6.9 por mil personas, respectivamente, apenas di-fieren en 1.4 por ciento.

- 49 -

Cuadro 18

PANAMA. COMPARACIÓN DE LAS TASAS DE MORTALIDAD, POR GRUPOS DE CAUSASDE MUERTE, TIPIFICADAS POR EDAD, DE LA CIUDAD DE PANAMA Y EL

PROMEDIO DE PAÍSES CON eg = 68 ANOS a/ (17)

(Ambos sexos)

Grupos de causasde muer te

TOTAL

Grupo I I IGrupo IV

Tasas por 100,000 h a b .

Ciudad dePanamá

(1959-1960)

683.3

87.484.4

195.434.6

281.4

e° = 68

sJ

690

9591

20444

256

Porcentaje

Ciudad dePanamá

(1959-1960)

100.0

. 12.812.328.6

5.141.2

e°o = 68

a/

100.0

13.813.229.66.4

37.1

United Nations: Population Bulletin of the United Nations, N°6.,1962, Table V.33.

Las tasas específicas de los primeros 4 grupos decausas presentan porcentajes más bajos en la ciudad dePanamá que en los respectivos grupos del esquema teóri^co; y ocurre lo contrario en el grupo V, el cual incluye la mortalidad por "enfermedades propias de la primera infancia" y "gastro-intestinales".

Del examen de los grupos I al IV, se podría dedu-cir que corresponde a la ciudad de Panamá una esperan-za de vida al nacer un poco superior a los 68 años, p¿ro la tasa del V grupo más bien corresponde a una esperanza de vida más baja. En síntesis, si este tipo decomparación es válido, puede asegurarse que la esperanza de vida de la ciudad de Panamá, para 1960, quedabien encuadrada entre 67 y 69 años. Estos resultadosconcuerdan muy estrechamente con la esperanza de vidaque se obtuvo en una Tabla Abreviada de Mortalidad confeccionada para la ciudad de Panamá, relativa a dichoaño (68.6 años).

El cuadro 18, que se presenta a continuación, su-ministra datos comparativos de varios países (18), en-tre los cuales se inserta la ciudad de Panamá. .Segúnse puede apreciar, al aumentar la esperanza de vidadisminuyen tanto la tasa como la importancia relativa

- 50 -

de los grupos de causas I y V, mientras que aumenta laimportancia relativa de los grupos II, III y, con me-nor intensidad, el IV grupo.

COMPARACIÓN DE LAS TASAS DE MORTALIDAD, POR GRUPOS DE CAUSAS DE MUERTE, T I P I F I C A D A S POR EDAD,DE LA CIUDAD DE PANAMA ¥ OTROS P A Í S E S , AMBOS SEXOS ( 1 7 )

País y ano dereferencia

El Salvador (1950)

Chll . (1952)

México (1956)

Portugal (1956)...

Icalla (1951)

CIUDAD DE PANAMA(1959-1961)

Canadá (1950-52) . .

Noruega (1954-56).

b / 46 .5

51.9

y 53.9

61.5

65.4

68.6

6S.6

73.0

Porcentajede caueasmal definídas y atrlbuidas asenilidad

§/

ç/ 27.8

ç/ 6.6

e/ 11.6

c/ 13.6

i¡ 7.6

d/ 1.0

0

0

Total

1.773

1,479

1,395

1,051

798

683

651

452

Tasa

I

648

457

430

213

127

87

68

37

por 100,000 a/

I I

53

112

56

82

76

84

89

85

I I I

102

305

170

309

216

195

242

161

IV

105

77

96

53

37

35

59

42

V

865

529

643

394

342

281

193

127

Total

100.0

100.0

100.0

100.0

100.0

100.0

100.0

100.0

I

36.5

30.9

30.8

20.3

15.9

12.8

10.4

8.2

PorcentaJ e

I I

3 .0

7.6

4 . 0

7 . 8

9 .5

12.3

13.7

18.8

I I I

5 .8

20.6

12.2

29.4

27.1

28.6

37.2

35.6

IV

5.9

5.2

6 .9

5.0

4.6

5.1

9.1

9.3

V

48.8

35.7

46.1

37.5

42.9

41.2

29.6

28.1

a/ A excepción de la Ciudad de Panama, las clfraa fueron tomadas de la Tabla V. 32, pag. 108 del "Population Bulletin of the United Nations" n"6t 1962.

b/ Eitlmadss.

çj Las defunciones por causas mal definidas o atribuidas a senilidad se repartieron entre las diversascategorías (grupos de causa).

á/ Lea defunciones por causas mal definidas o atribuidas a senilidad se incluyeron en el V grupo decausas.

Al comparar las cifras de Panamá (1960) con lasdel Canadá (1950-1952), que presentan una esperanza devida semejante, se advierte que en este último pals,el grupo de causas I (Enfermedades infecciosas) tienemenos importancia que en la ciudad de Panamá, lo mismoque el grupo IV (accidentes); en tanto que hay una di-ferencia en sentido contrario, en los grupos de causasII» II I y IV, la cual se hace más importante en el grupo I I I (enfermedades del corazón y cardiovasculares).Es posible que esta distinta incidencia de las causasde muerte esté relacionada con factores de caráctergeográfico.

- 51 -

Para completar este análisis, se investigan loscambios de la mortalidad por causas de muerte, en laciudad de Panamá, durante los 7 años anteriores a 1960.El cuadro 19 presenta las tasas correspondientes a 3momentos de ese período, cada uno de los cuales se re-fiere a dos años contiguos.

La característica general es un descenso de lastasas, particularmente acentuado en el grupo I (enfer-medades infecciosas y parasitarias). No hay una expli_caciön inmediata del leve descenso de la tasa del gru-po II (tumores malignos) entre 1953 y 1957; generalme£te debería esperarse un aumento, entre otras razones,por el mejoramiento de los diagnósticos de esta enfer-medad.

La tasa del grupo V experimento un pequeño aumen-to, el cual debe atribuirse a la importancia que si-guen teniendo las enfermedades que afectan principal-mente a los niños menores de 5 años (sub-grupos I yII ) , en particular, el aumento observado en las "en-fermedades gastrointestinales" (sub-grupo I I ) . Antesde atribuir este comportamiento de las enfermedadesaludidas a un posible empeoramiento de las condicio-nes sanitarias de la ciudad, cabria pensar también enla posibilidad de un cambio en las prácticas del diag-nóstico médico, lo cual podría dar lugar a que muchasmuertes por diarrea y enteritis se atribuyeran en elpasado a las "enfermedades infecciosas y parasitarias"(grupo I ) , y, por tanto, no fueran incluidas en el grupo V de esta clasificación.

. En cuanto a las categorías III y IV, aunque se ot>serva un leve descenso en estas tasas, no es de muchasignificación. De esta forma se confirma, para la ciudad de Panamá, un comportamiento similar en la tenden-cia de las causas de muertes, al que suele observarsea nivel mundial, según el cuadro 18.

- 52 -

Cuadro 20

CIUDAD DE PANAMA. - TASAS DE MORTALIDAD, POR GRUPOS DE CAUSAS DEMUERTE TIPIFICADAS POR EDAD, EN EL PERIODO 1953-1960 (17)

(Ambos sexos)

Número a/

1-17, 30, 31 y 3218

22 y 24-29E47 - 50

41 - 4436

Grupos de causasde muerte

TOTAL

Tasa por 100,000

1953-1954

669.3

104.683.2

186.338.9

256.3

81.248.6

126.5

1956-1957

653.7

85.075.7

181.529.2

281¿3

89.059.8

132.5

1959-1960

627.3

82.975.3

168.433.8

266.9

89.771.5

105.7

a/ Nomenclatura abreviada de la "Clasificación Estadística Interna-cional de Enfermedades, Traumatismos y Causas de Defunción".

b/ Incluye la mortalidad por senilidad y las de causas mal defini-das.

f) Migración Internacional:

1. Tendencia his'tórica en el siglo XX;

A diferencia de los cambios que suelen producir losprocesos vitales relativos a la natalidad y a la mortalidad,las migraciones alteran en períodos de tiempo relativamen-te cortos, las diversas estructuras de la población, ya seaésta la de origen o destino.

Por otro lado, cabe destacar que los movimientos detraslación de la población están íntimamente ligados a fe-nómenos de tipo económico y acontecimientos nacionales im-portantes, siendo, por tal motivo, el factor de más preocu-pación en la situación demográfica de diversos países.

Al definir este concepto, se hace necesario distin-guir dos tipos de movimientos migratorios: los que se pro-ducen entre regiones o divisiones geográficas dentro de lasfronteras nacionales de un país y aquéllos que dan lugar ala salida y entrada de personas a través de las fronterasnacionales. Este último será el tipo de movimiento que se

- 53 -

analizará, con el propósito de determinar la importancia númarica y estructural que ha tenido el mismo en la poblacióndel país.

Para lograr dicho conocimiento, se procederá de acuejrdo con las informaciones disponibles, las que en su mayo-ría son suministradas por los censos nacionales que se hanlevantado en el país, en los últimos años, ya que las esta-dísticas que pudieran elaborarse a base de los registros deentradas y salidas de pasajeros al país, son muy incomple-tas y limitadas, en cuanto a variedad de informaciones.

Por otro lado, también nos vamos a limitar a los efe¿tos que la migración internacional ha tenido en la pobla-ción que habita el país, casi exclusivamente a través delos inmigrantes, puesto que no se dispone de mayores infor-maciones sobre aquellas personas que dejan el territorio nacional para radicarse en otras regiones del mundo. Sobreeste último aspecto, se intentó obtener una medida, median-te métodos indirectos, utilizando las informaciones de losúltimos dos censos levantados en el país, cuyos resultadosse analizan al final de este capítulo.

PANAMA.

Cuadro 21

POBLACIÓN NACIDA EN EL EXTRANJEROCENSOS 1911 A 1970

Censo

1911

1930

1940

1950

I960

1970

Número

38,972

47,144

50,713

50,271

44,978

48,351

Porcentaje"

11.6

10.1

8.1

6.2

4.2

3.4

Tal como se comentó anteriormente, en el punto rela-tivo a la evolución histórica de la demografía panameña, enel cuadro 20 se puede apreciar la poca importancia numéricay relativa que han tenido los extranjeros en nuestro país,en el período de tiempo transcurrido en la presente centu-ria.

En cifras absolutas, su numero no ha pasado de 51,000personas, alcanzándose valores máximos en los años cercanos

- 54 -

a la segunda guerra mundial, cuando las medidas de seguri-dad intensificadas en esa época, para garantizar la conser-vación física y el funcionamiento normal del canal intero-ceánico, atrajo temporalmente a nuestro pals un número reíativamente importante de inmigrantes de otros países.

Sin embargo, a este respecto las cifras relativas sonmás elocuentes. Vemos así cómo el porcentaje de personasnacidas en el exterior se ha reducido del 12% en el año1911, cuando se concluían las obras del canal de Panamá, al3% en 1970. Vale decir que, en el transcurso de 60 años,la importancia relativa de este grupo de población se hareducido en más de 2/3, con respecto a 1911.

2. Características de la población nacida en el extranjero,censo de 1970 (19) :

El país de nacimiento de los extranjeros radicados enPanamá, señala a Colombia, país limítrofe y al cual estuvoanexado el Istmo durante 80 años, antes de obtener su inde-pendencia en 1903, como el más importante en cuanto al número de inmigrantes aportados a la nación. Constituyen lacuarta parte de los extranjeros censados en Panamá en elaño 1970, siguiéndole, en importancia numérica, Norteaméri-ca (el 14%), Costa Rica, el otro país limítrofe con Panamáy la Isla de Jamaica, ambos con el 8% cada uno.

Una comparación del país de procedencia de los extranjeros censados en 1970 con respecto a 1960, revela que, enestos 10 últimos años, la población colombiana ha continua-do siendo el núcleo extranjero más importante dentro de lapoblación istmefla. Sin embargo, se ha producido un cambioimportante en cuanto a los países que han venido ocupandoel 2 2. y 3 — lugares. La población jamaicana dejó de ocu-par el 2Í£ lugar, al reducirse su número casi a la mitad,en 1970. Esto se explica por el hecho de que la migraciónprocedente de este país fue importante a principios de si-glo, de manera que los sobrevivientes actuales son, en sumayoría, población vieja, que se reduce en forma notable,por efecto de la mortalidad, tal como se ha podido apreciaren el último período intercensal. E igual fenómeno se ob-serva con la población procedente de Barbados, aunque su número es muy pequeño, comparado con el de los nativos de Ja-maica.

Fenómeno contrario se aprecia con la población proce-dente de los Estados Unidos de Norteame'rica. Del cuarto lugar que ocupaban en 1960, se elevaron al segundo lugar, du-plicando su volumen en los últimos 10 años. Este últimocambio, lógicamente, habrá de tener su explicación en elauge que ha experimentado la inversión de capital nortéame-ricano en nuestro país, puesto que se trata de un movimien-to migratorio poco común, ya que lo habitual es el trasladode personas de países menos desarrollados hacia nacionesque han alcanzado un mayor nivel de vida.

- 55 -

El resto de los inmigrantes llegados en los últimosaños proceden, principalmente, de países centroamericanos,en particular, de Nicaragua y Sur América. También han lijegado ciudadanos españoles y chinos, pero en número insigni-ficante, al ser comparados con la migración colombiana yestadounidense. Por otro lado, estas últimas son migracio-nes que parecen haberse estancado en la década del 60.

La población que ha llegado al país, como en la mayo-ría de los casos, ha sido preferentemente masculina, locual ha dado lugar a que en 1970, el índice de masculinidadde los extranjeros (relación de hombres por cada 100 muje-res) sea de 129; mientras que en el total del país este in-dice es de 103 hombres por cada 100 mujeres. Marca tambiéngrandes diferencias estructurales, la distribución por edadde esta población: en 1970 la mediana de los extranjerosascendía a 41 años de edad, mientras que en el total delpaís este índice sólo alcanza los 18 años, lo cual signifi-ca que la mayor presión de la población extranjera se ejer-ce en las edades activas (15 a 64 años), dando lugar a que7 de cada 10 extranjeros se encuentren ubicados en este tramo de edades.

De acuerdo con el censo de 1970, más de la mi-tad dela población extranjera de 10 años y más de edad era econó-micamente activa. De las 24,000 personas que integraban elgrupo trabajador, el 47% ejercía alguna actividad en el se£tor terciario, es decir, en servicios de tipo comercial, f¿nancieros y personales. Uno de cada 5 tenía un trabajo re-munerado en la Zona del Canal de Panamá y otro quinto desa-rrollaba actividades, posiblemente de tipo técnico, en elsector primario de la economía nacional (la agricultura).Finalmente, se observó que sólo el 137o se encontraba traba-jando en actividades industriales.

En cuanto a la formación académica de la población f<>ranea, no muestra mayores diferencias respecto al nivel educativo observado en el total de la población del país. Elcenso de 1970 señala que, aproximadamente, la mitad de losextranjeros de 10 años y más de edad había aprobado de 4 a9 años de estudios; 1 de cada 4 tenía menos de 4 años de estudio y sólo 1 de cada 5 había aprobado 10 años o más.

La estructura por estado civil de la población de 10años y más, también es muy semejante a la del total delpaís: tres de cada 5 personas mantenían una unión legal ode hecho; 1/5 eran solteros y el resto mantenía otro estado,tales como separado de matrimonio o unión, viudo o divorciado.

Donde, si se observa una diferencia que podríamos ca-talogar de significativa, es en el nivel de la fecundidad;medida a través del número promedio de hijos nacido-vivos,tenidos por las mujeres de 15 años y más de edad. El cen-

- 56 -

so de 1970 revela que las mujeres extranjeras de las edadesindicadas declararon tener un promedio de 2.6 hijos por mu-jer. Esta misma relación, para las mujeres de 15 años ymás de todo el país, se eleva a 3.2 hijos por mujer (mues-tra del censo de población de 1970).

3. Saldo migratorio internacional, 1960-1970 (9):

Con el propósito de lograr un conocimiento más completo sobre el efecto real que pueden tener los movimientos internacionales de personas, en el tamaño y en algunas de lascaracterísticas de la población que habita el país, se pro-cedió a estimar el volumen de la emigración de nativos panamenos (E) y de los inmigrantes extranjeros (I), durante elúltimo período intercensal, y determinar finalmente el sal-do migratorio neto (I-E). Con tales propósitos, se utilizaron las cifras de población de los censos de 1960 y 1970,proyectadas al lo. de enero, utilizando para ello la tasade crecimiento intercensal. El supuesto en que se funda-menta este cálculo es que la omisión en ambos censos es nu-la, o lo que es lo mismo, que la omisión es semejante y,por tanto, se compensan numéricamente.

El método consistió en proyectar la población nativay extranjera, separadamente, del lo. de enero de 1960 al lo.de enero de 1970, utilizando las relaciones de superviven-cia intercensales (,QP ~ !u¿ t promedio de las establecidas

en las tablas de vida elaboradas para los años 1960 y 1970.La población obtenida representa, en un caso, los sobrevi-vientes de la población nativa, mayores de 10 años,.al lo.de enero de 1970, que, al compararse con la población nati-va censada (llevada a la misma fecha), da lugar a diferen-cias que se interpretan como el número de emigrantes (E) duran te el período. En el caso de los extranjeros, la pobla-ción obtenida representa a los sobrevivientes de este grupode población, mayores de 10 años, al lo. de enero de 1970,que, al compararse con la población extranjera censada (lievada a la misma fecha), da lugar a diferencias que se inte_rpretan como el número de inmigrantes (I) durante el mismoperíodo.

En el caso de los menores de 10 años, se supone igualnúmero de entradas que de salidas, dando lugar a un saldomigratorio igual a cero. Con tal fin, se utilizó la cifrade extranjeros en dichas edades, empadronados por el censode 1970, que ascienden a cerca de 2,800 niños de ambossexos.

Los cálculos anteriores dieron como resultado una es-timación de emigrantes a 1970, de 19,592 hombres y 19,570mujeres. La inmigración estimada a la misma fecha fue de13,481 hombres y de 9,844 mujeres, lo cual da un saldo mi-gratorio negativo (I-E) de 6,111 hombres y 9,726 mujeres.

- 57 -,/

Cabe resaltar que las estructuras por edad que se ob-tuvieron eran muy Irregulares, lo cual puede ser causado,en gran medida, por la mala declaración de las edades en elcenso. Por tal motivo, se hizo necesario corregir los sal-dos obtenidos; para los inmigrantes se estima la estructurapor edad con base en estadísticas disponibles sobre extran-jeros en Panamá y para los emigrantes, se utilizo la estruçtura por edad de los panameños que se han radicado en losEstados Unidos de Norteamérica, en los últimos años, porconstituir el principal pals receptor de este movimiento depoblación (véanse cuadro 21 y el gráfico 6).

Los hechos más sobresalientes proporcionados por es-tos resultados, de cumplirse los supuestos en los cuales sefundamenta el método aplicado, son, que el saldo migratoriointernacional establecido para el país en la última décadadio lugar a una pérdida de, aproximadamente, 16,000 habitantes, es decir, 1,600 personas por año. Esta pérdida ha si-do mayor en las mujeres que entre los hombres, ya que salieron 2 hombres por cada 3 mujeres. Y, finalmente, otro ras-go importante en este saldo migratorio negativo, lo consti-tuye el hecho de que casi el 100% de las pérdidas se produ-cen dentro de las edades de la vida activa, lo cual hace suponer que profesionales calificados pueden ser los mayoresintegrantes de este contingente de población, apreciaciónque se refuerza, en parte, al observar que esta emigraciónestá casi totalmente dirigida hacia un pals de alto desarr£lio tecnológico y económico, como es los Estados Unidos deNorteamérica.

Cuadro 22

PANAMA. SALDO EMIGRATORIO ESTIMADO, POR SEXO Y GRUPOS DE EDADES:PERIODO INTERCENSAL 1 9 6 0 - 1 9 7 0 ( 9 )

EdadValores crudos a/

E - I

Valores ajustados

E - I

0-4.5-9.10 - 14.15 - 19.20 - 24.25 - 29.30 - 34.35 - 39.40 - 44.

1,3711,6115,3475,1892,9101,1602,175

(-) 643509

HOMBRES

1,3711,611961751

2,0901,7371,188939720

00

4,3864,438

820(-) 577

987(-) 1,582(-) 211

1,4871,6632,7713,2532,8312,2281,446964843

1,4871,6631,2571,5771,8471,5221,139732662

00

1,5141,676984706307232181

- 58 -

Cuadro 22

PANAMA. SALDO EMIGRATORIO ESTIMADO, POR SEXO Y GRUPOS DE EDADES:PERIODO INTERCENSAL 1960-1970 (9) (Conclusion)

EdadValores crudos aj

E - I

Valores a jus tados

E - I

45 - 4950 - 5455 - 596 0 - 6 4

TOTAL.

0 - 45 - 9

10 - 1415 - 1920 - 2425 - 2930 - 3435 - 3940 - 4445 - 4950 - 5455 - 5960 - 64

TOTAL.

59146

84454

19,593

1,4251,5455,2171,609

(-) 912,4893,469

4091,3171,587

4121,013

56

19,570

616452483284

13,481

(-) 25(-) 406

361(-) 230

6,112

MUJERES

1,4251,545

826933

1,7031,433

94762736010012014522

9,844

00

4,391676

O 1,7941,0562,522

(-) 218957

1,487292868

34

9,726

723662482241

19,594

1,2351,5441,8302,7733,6093,3481,779

941785628523366209

19.570

553511351180

13,481

1,2351,544

9921,2511,4901,256

8305492711291049994

9,844

17015113161

6,113

00

8381,5222,1192,092

949392514499419267115

9,726

a/ Los totales incluyen valores para las edades de 65 años y más.

/ i

I l

(E-I)

3000

HOMBRES" — ™ Crudo*

Apntodo»

S 10 IS 23 25k / 3 0

Edod

_ G r S f i c o 6 . PANAMA. SALDO EMIGRATORIO ESTIMADO, POR SEXO Y CRUPOS DEEDADES: PERIODO INTERCENSAL 1 9 6 0 . 1 9 7 0

(E - I )

i i \ I I I I I \ / I I I

MUJERES^ " Crudof

Ajoto*»

O S 1 0 15 2 0 2 5 3 0 3 5 . 4 0 4 5 K ) » 6 0 6 3

- 60 -

II. COMPOSICIÓN DE LA. POBLACIÓN

Las personas que integran la comunidad poseen características1 propias que pueden ser de naturaleza biológica, como el sexo y laedad, o adquiridas en el medio donde se desarrollan sus vidas, comoel estado civil, el nivel educativo, la actividad económica, yotras tantas, que guardan algún tipo de relación con la situacióndemográfica del pals.

Es fácil apreciar cómo el equilibrio entre los sexos, la configuración de la edad y el nivel de instrucción de las personas influyen en el comportamiento de la fecundidad y la mortalidad. La mi-gración, que constituye el tercer factor determinante del volumen yestructura de la población, también se encuentra relacionada con caracterlsticas similares.

De manera que los datos relativos a la composición de la población proporcionan informaciones útiles a la investigación de granparte de los fenómenos demográficos.

a) Sexo y edad - grupos funcionales:

El sexo y la edad, que hemos dado en llamar los componen-tes biológicos de la población, son probablemente las caracte-rísticas más importantes, por sus repercusiones en el cambionumérico de la misma. Tanto la mortalidad como la fecundidad,factores decisivos de ese cambio, dependen de ambas caracterlsticas. Por otro lado, las alteraciones que se producen en elnivel de la mortalidad, particularmente en la fecundidad, de-terminan la composición por sexo y edad de la población. Ydonde la migración es importante, también se deja sentir suefecto en dichas estructuras.

Otro tanto ocurre respecto a diversas características dela población, con las cuales el sexo y la edad mantienen diversos grados de relación, como el estado civil, la ocupación, laasistencia escolar, etc.

Por sí sola, la estructura de la población por sexo y edadpermite identificar grupos dentro de la sociedad, que respon-den a situaciones y necesidades muy semejantes, tales'como losniños en edad de asistir a la escuela, aquellos que forman parte de la mano de obra potencial, las personas que por su avan-zada edad deben retirarse de la actividad económica, las muje-res que constituyen el grupo fértil para la reproducción de laespecie humana y los que alcanzan la edad en que pueden haceruso de sus derechos civiles.

Los datos relativos a la distribución de la población dePanamá por sexo y edad proceden de los censos nacionales de p_oblación que se realizan cada 10 años, el último de los cualescorresponde al año 1970.

- 61 -

La evaluación de estas informaciones se hicieron medianteuno de los métodos más usuales, recomendado en el Manual II deNaciones Unidas (20).

En el caso de Panamá, satisface observar que el indice deNaciones Unidas se ha reducido de 1950 a 1970 en una aprecia-ble magnitud, lo cual permite depositar mayor confianza en lacalidad de los dos últimos censos levantados en 1960 y 1970,en cuanto a las informaciones del sexo y la edad.

Cuadro 22

PANAMA. INDICE GLOBAL DE NACIONES UNIDAS: CENSOS DE 1950 A 1970

Detalle1950(8)

1960(8) 1970

índice regularidad de sexos.,índice regularidad de edades;

HombresMujeres

índice global ¿/

4.5

8.88.4

30.7

2.9

4.44.1

17.2

2.8

3.03.3

14.7

_a/ Es igual a la suma de 3 veces el índice de regularidad de sexos,y el Índice de regularidad de edades, de cada sexo.

~ El censo de 1970 revela, una vez más, a un país eminente-mente joven, en lo"relativo a su estructura etaria. Los meno-res de 15 años constituyen el 44% de todos los habitantes delpaís, dentro del cual se cuentan 231,000 niños en edad presco-lar (0-4 años) y casi 390,000 que requieren de inmediato losservicios de la enseñanza elemental (5-14 años). Se trata deun grupo de habitantes dependientes, que deben recibir de losadultos todos aquellos elementos que hagan posible su desarro-llo normal. Además de la educación, debe suministrárselesalimentación y asistencia médica adecuada, medios de recrea-ción, etc., es decir, hay que formarlos integralmente, de manera que logren incorporarse a la vida de los adultos en las me-jores condiciones.

A través de la estructura por edad se puede apreciar que,potencialmente, la responsabilidad de este 44% de la poblaciónrecae sobre los que tienen de 15 a 64 años de edad, grupo queconstituye el 53% de la población total del país. Al final dela escala de edades se encuentran 53,000 personas de avanzadaedad que, al igual que los menores de 15 años, requieren de unrespaldo económico y social, que en parte logran recibir a través de los servicios de la seguridad social instituida en elpaís.

- 62 -

Al contrastar la estructura de la población lstmeña porsexo y edad con la de un pals que ha alcanzado uno de los niveles de vida más altos del mundo, los Estados Unidos de Norte-américa, se destacan los siguientes hechos. En los EstadosUnidos, la importancia relativa de los niños de 0-4 años es lamitad del Índice que se da para Panamá. Mientras en el palsnórdico se encuentran 28 menores de 15 años por cada 100 persoñas, en Panamá esta relación se eleva a 44.

Estas diferencias tan marcadas en la importancia relativade las edades juveniles en ambos países se reflejan en el conocido Índice de dependencia, en que se relacionan a los menoresde 15 años y personas de avanzada edad, con aquéllas que se encuentran dentro de los límites de la vida activa (15 a 64años). Dando lugar a que mientras en Panamá hay 44 jóvenes(menores de 15 años) por cada 53 personas en edades activas(15-64 años), en los Estados Unidos esta misma relación es de28 por 62. Desde el punto de vista económico, esta situaciónmarca para Panamá un esfuerzo muy superior al de los EstadosUnidos, para sostener y desarrollar a su población juvenil.

Sin embargo, después de los 65 años de edad, los nortéamericanos tienen una población, en términos relativos, tres ve-ces superior a la de Panamá, lo cual exige a nuestro país metióres inversiones de seguridad social, respecto a dicho pals, pjra proteger a aquellas personas que por su avanzada edad handejado de participar en la vida activa de la nación.

En Panamá, de acuerdo con el último censo, el Índice demasculinidad es de 103 hombres por cada 100 mujeres, mientrasen los Estados Unidos, esta medida favorece a las mujeres,pues tienen 95 hombres por cada 100 mujeres.

A través de las edades, en Panamá se mantiene este índicepara jóvenes y adultos, hasta descender al 99 por ciento des-pués de los 65 años. En cambio, en los Estados Unidos, el ín-dice de masculinidad sólo es superior a 100 para los menoresde 15 años, pero en las edades adultas y avanzadas la presen-cia de las mujeres supera en forma sustancial a los varones.

En el caso de nuestro país, la estructura de la poblaciónpor sexo y edad está determinada por una fecundidad que se hamantenido a altos niveles en las décadas pasadas y a un descejjso paulatino de la mortalidad. En cambio, en los Estados Uni-dos de Norteamérica una fecundidad decreciente junto con unamortalidad baja, y el ingreso de fuertes corrientes inmigrato-rias de extranjeros,han sido los factores que han configuradolas estructuras antes analizadas.

- 63 -

Cuadro 23

DISTRIBUCIÓN DE LA POBLACIÓN POR GRANDES GRUPOS DE EDADES E INDICE DEMASCULINIDAD PARA PANAMA Y SU COMPARACIÓN CON LOS ESTADOS UNIDOS

DE NORTEAMÉRICA: CENSO 1970

Grupos de edad

TOTAL

0 - 45 - 14

15 - 64

Panamá a/

Población

Numero

1,428,082

231,430389,024

620,454

754,72952,899

Porcentaje"

100.0

16.227.4

43.6

52.83.6

índicemascu-linidad

102.8

103.0102.4

102.6

103.298.7

Estados Unidos b/

Porcentaje

100.0

8.420.1

28.5

61.69.9

índicemascu-linidad

94.8

104.0103.9

103.9

94.972.2

_a/ Censos Nacionales de 1970 - "Resultados Generales" (Dirección deEstadística y Censo, Panamá, 1971).

b/ Naciones Unidas - "Demographic Yearbook 1971" (Censo abril de1970).

Es interesante apreciar, dentro del territorio nacional,las variaciones que sufre la estructura de la población poredad, variaciones motivadas, en su mayor parte, por la intensj.dad de los movimientos internos. La comparación de éstas en-tre las ciudades (áreas urbanas) y el campo (áreas rurales),permite apreciar una mayor proporción de niños (menores de 15años) en el campo que en las ciudades, siendo más marcadas lasdiferencias en el caso de las mujeres. Lo contrario acontececon la población en edades activas (15 a 64), siendo tambiénmayor el contraste en el caso del sexo femenino.

Como se dijo anteriormente, esta situación se produce porla gran cantidad de personas adultas jóvenes que abandonan sulugar de nacimiento en los sectores rurales para buscar mejo-res oportunidades, de diversas Índoles, en las localidades ur-banas, fenómeno que adquiere mayor importancia en el caso delas mujeres.

- 64 -

El análisis de la distribución por edad a través del tiem-po nos revela que nuestra población se mantiene joven, con unaleve tendencia a rejuvenecerse aún más, lo cual no es más quela resultante de una sostenida alta fecundidad, que inicia unleve descenso en los últimos cinco años de la década del 60.

Cuadro 24

PANAMA. POBLACIÓN POR GRANDES GRUPOS DE EDADES, SEGÚN SEXO Y AREASURBANA-RURAL: CENSOS 1950 A 1970

(Distribución porcentual)

Grupos de edades yárea

Hombres

1950 1960 1970

-Mujeres

1950 1960 1970

República

Menores de 15.15 - 6465 y más

Urbana

Menores de 15.15 - 6465 y más

Rural ¿/

Menores de 15.15 - 6465 y más

100.0

41.355.33.4

100.0

100.0

43.453.13.5

100.0

100.0

43.453.13.5

100.0

100.0 100.0

41.854.83.4

100.0

43.453.03.6

100.0

36.060.43.6

100.0

44.652.23.2

39.956.14.0

100.0

45.451.43.2

40.056.43.6

100.0

34.361.83.9

100.0

46.250.23.6

47.149.83.1

36.958.74.4

100.0

48.948.13.0

100.0

43.752.63.7

100.0

37.558.14.4

100.0

49.447.33.3

_a/ Los años 1950 y 1960 excluyen a la población indígena.

Fuente: Censos Nacionales de Población de 1950, 1960 y 1970 (Direcciónde Estadística y Censo, Panamá).

El mayor éxodo de las mujeres del campo se puede apreciarcon mayor claridad mediante la observación del Índice de mascuUnidad de las áreas urbana y rural. Mientras en la primerase encuentran 94 hombres por cada 100 mujeres, en el campo es-ta misma relación es de 112 y, como es de suponer, las grandesdiferencias se dan después de los 15 años cuando la migracióninterna comienza a ser importante.

- 65 .-

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- 66 -

Cuadro 25

PANAMA.. INDICE DE MASCULINIDAD POR GRANDES GRUPOS DE EDADES, SEGÚNAREAS URBANA-RURAL: CENSO 1970

(Hombrea por cada 100 mujeres)

Grupos de edadesRepú-blica Urbana Rural

TOTAL.

Menores de 1515 - 6465 y más

102.8

102.6103.298.7

93.6

99.990.976.4

112.0

104.6118.8123.3

Fuente: Censo Nacional de Población de 1970 (Dirección de Estadística yCenso, Panamá).

b) Educación (Nivel de instrucción y aprovechamiento escolar):

El conocimiento de la situación educativa de un pals cons-tituye un aspecto trascendental en la evaluación del desarrollosocial de los pueblos, al constituir uno de los pilares más só-lidos en que se apoya el cambio que proyecta reducir las dife-rencias de oportunidades en la vida de los hombres.

La formación académica, asi como la orientación en materiade civismo, relaciones humanas, actividades artísticas y demásconocimientos, son factores determinantes de la capacidad pro-ductiva del hombre y la mujer, cuando entran a formar parte devida activa de la nación, y de sus actitudes, hábitos de viday relaciones con las demás personas que integran la sociedaddonde viven.

Conscientes de la importancia que reviste la educación enla comunidad, las autoridades responsables de que este serviciocumpla debidamente su cometido se han esforzado porque un mayornúmero de personas reciban los beneficios de la educación y queésta se acople a los requerimientos de las instituciones y em-presas donde el individuo habrá de aplicar y desarrollar los conocimientos adquiridos en sus estudios.

El logro de un equilibrio entre la oferta de una mano deobra convenientemente adiestrada y la demanda de ésta constitu-ye un aspecto que debe atenderse, con el fin de prever oportunamente las necesidades futuras de adiestramiento profesional ytécnico que permita satisfacer las necesidades del sistema eco-nómico del país, como un medio de lograr su desarrollo y el cumplimiento de las aspiraciones básicas del trabajador.

- 67 -

En los últimos 10 años que han transcurrido desde 1961, enel pais se ha visto aumentar el número de escuelas en un 50 porciento; el personal docente se ha duplicado para atender una matrícula que ha crecido en un 78 por ciento. Estos cambios, sinduda alguna, justifican la importante cifra que absorbe el sec-tor educativo en el presupuesto de gastos del gobierno nacional.

Las características educativas de la población interesanen los estudios demográficos por la participación que tienen enel comportamiento de la población. Las condiciones de salud,la mortalidad, la natalidad, la nupcialidad, la estructura ocu-pacional, entre otras, presentan una distinta fisonomía en po-blaciones con diversos niveles educativos.

Las fuentes de datos relativos a la educación de la pobla-ción son suministradas por los censos nacionales de población,tales como las relativas al alfabetismo, el nivel educativo yla asistencia escolar. Esta última información también es obtenida de las estadísticas continuas de educación.

El sistema educativo en Panamá está sub-dividido en cincograndes categorías, cada una de las cuales, de acuerdo con ellugar que ocupan, cumplen un fin especifico y coordinado, a suvez, con los otros niveles del sistema.

El nivel pre-primario no constituye un tipo de enseñanzaobligatoria, más bien es una práctica de tipo urbano, motivadapor la necesidad de las madres que trabajan de dejar sus hijosal cuidado de personas competentes, que a la vez inicien al ni-fio en la disciplina del estudio y a actuar en grupo.

De acuerdo con las disposiciones legales vigentes, en elterritorio nacional, la educación primaria es obligatoria y gratuita. No obstante, una diversidad de factores obstaculizan esta meta, lo cual trae como consecuencia lógica que existen per-sonas marginadas de la educación elemental.

En el nivel medio (secundaria) los estudiantes tienen dosopciones: por un lado, lograr los conocimientos que los preparen para ejercer una profesión tan pronto egresen del últimoaño de este nivel o adquirir la formación básica necesaria paracontinuar estudios superiores en la universidad.

La educación suplementaria viene a constituir una comple-mentación de la educación media, dedicada a ramas de enseñanzaartística, lenguas y cursos vocacionales de tipo manual, que requieren de uno a tres años de estudios.

Y, finalmente, se completa el ciclo educativo con la ense-ñanza superior o universitaria, en la cual se forman los profe-sionales que requieren mayores estudios para ejercer una actividad.

- 68 -

1. Analfabetismo:

Las cifras del último censo de población señalan que elnivel educativo de los habitantes del Istmo es de los más aJLtos en amêrica latina, y se ha venido observando un mejora-miento gradual a través de los años, sin embargo, es justoreconocer que nuestra situación está aún muy por debajo delo deseable.

Al considerar la población total que habita el istmo(incluye indígenas), en 1970 existían en el pals más de200,000 personas repartidos equitativamente entre hombres ymujeres, de 10 años y más de edad (el 217o), que no teníanla habilidad requerida para leer y escribir un párrafo sencilio en un idioma cualquiera.

En la población que excluye a los aborígenes, que representan el 5 por ciento de la población total del país, elporcentaje del analfabetismo se reduce un poco, al 18 porciento, tal como se puede apreciar en el cuadro que se inserta a continuación.

Cuadro 26

PANAMA. PORCENTAJE DE ANALFABETAS EN LA POBLACIÓN, POR SEXO Y EDAD:CENSO 1940 A 1970

(Excluye la población indígena)

Grupos de edades

1940

Horn,bres

Mujere's

1950

Horn,bres res

1960

Hom-bres

Mujeres

1970

bresMujeres

TOTAL.

10 - 1415 - 1920 - 2425 - 293 0 - 3 435 - 3940 - 4950 - 5960 - 6970 y más

34.9 37.5 27.7

27.929.627.229.534.440.443.243.852.959.8

25.829.02833404549525965.6

20.421.022.32320.925.336424756.0

28.9

23.828.240.8

21.9

47.53,60.4

161317202021223542.649.1

21.6

13.012.015.319.720.723.125.038.445.850.8

18.1

15.08.5111316202225.0

43.1

17.4

11.67.5

10.613.315.820.823.426.6

44.3

Fuente: Censos Nacionales de Población de 1950, 1960 y 1970 (Direcciónde Estadística y Censo, Panamá).

Se pueden señalar como factores obstaculizadores de es-te proceso de alfabetización en las áreas rurales, la impor-tante dispersión demográfica que dificulta el acceso a la e_scuela a un número de niños; problemas de Índole familiar que

- 69 -

evitan o postergan el ingreso del niño a la escuela; la asístencia a escuelas primarias incompletas que no tienen losseis grados reglamentarios, lo cual trae como consecuenciauna alfabetización parcial que se va perdiendo con el tiemposi el individuo no continúa la práctica de la lectura y es-critura.

Como medida complementaria a la enseñanza primaria, desde hace numerosos años, se establecieron en Panamá los cur-sos de alfabetización para adultos, los cuales suministran aéstos las herramientas de la lectura y escritura, cuando notuvieron ocasión de lograrlo dentro de la edad escolar.

Aunque, a nivel nacional, 21 personas de cada 100 quetienen 10 años y más de edad no saben leer ni escribir, elanálisis regional de este problema revela marcadas diferen-cias. En la Provincia de Panamá, donde se encuentra locali-zada la capital del pais, s61o el 8 por ciento de estas per-sonas son analfabetas. Por el contrario, en provincias debajo nivel de desarrollo económico y de alta dispersión demográfica, como Darién, Veraguas y Bocas del Toro, esta rela-ción es 5 veces mayor que la de Panamá, elevándose a más del40% la proporción de analfabetas de 10 años y más de edad.

La tendencia histórica indica que la importancia relativa del número de analfabetos ha venido disminuyendo en elpais en forma sostenida. En los últimos 30 años, es decir,en el lapso de una generación, la proporción de analfabetosse ha reducido a la mitad, al pasar del 37 por ciento en1940 al 18 por ciento en 1970 (excluye indígenas), dándoseun comportamiento muy similar en todas las nueve provinciasque constituyen el país.

No obstante este descenso relativo, el número absolutode personas que no saben leer ni escribir ha seguido aumen-tando, lo cual es un fenómeno motivado por el acelerado cre-cimiento de nuestra población, que sobrepasa los esfuerzosque se realizan para incrementar el número de escuelas y personal docente, frenando en cierta medida los efectos positi-vos de las inversiones que se realizan en el sector educati-vo.

El análisis del analfabetismo por sexo y grupos de eda-des a través de varios censos, permite también apreciar eldescenso experimentado en la importancia relativa de esteproblema, el cual se ha hecho más notable en las últimas ge-neraciones (edades jóvenes). Este descenso, a su vez, se haproducido con mayor intensidad entre las mujeres que entrelos hombres.

En el año 1940, el porcentaje total de mujeres analfabetas era mayor que en los varones, hasta lograrse un equili-brio que se inició en el año 1960. Ya en 1940, en el tramode los 10-19 años de edad, los niveles de analfabetismo femeniño eran inferiores a los de varones, proyectándose estecomportamiento hasta los 34 afios en 1970.

- 70 -

2. Nivel de Instrucción:

Cuadro 27

PANAMA.. NIVEL DE INSTRUCCIÓN DE LA POBLACIÓN, POR SEXO YGRUPOS DE EDAD: CENSO 1970

(Porcentajes)

Nivel de instrucción

TOTAL

Primaria incompleta ¿/

Hombres

20-24

11.6

88.4

100.0

100.0

30.533.616.414.55.0

25 y más

24.175.9

100.0

100.0

45.625.012.210.76.5

Muj eres

20-24

13.087.0

100.0

100.0

28.133.316.017.35.3

25 y más

25.774.3

100.0

100.0

44.627.211.811.64.8

_a/ Se refiere a los que han aprobado de 1 a 5 años de primaria.

NOTA: Se excluyen los casos en que no se ha declarado el año más altoaprobado, que constituyen menos del 0.5%.

Fuente: Censo Nacional de Población de 1970 (Dirección de Estadística yCenso, Panamá).

En el cuadro que antecede se presenta, en términos reíativos, el nivel de instrucción más alto alcanzado por la po-blación que integra las edades 20-24 y 25 años y más. Seseleccionaron estos grupos porque es de esperar que, a estasedades, una persona ha tenido ocasión de cursar en forma completa su instrucción primaria y secundaria e, inclusive, pueda haber ingresado a la universidad. Además, se considerandos grupos sucesivos de edades, a fin de apreciar la tenden-cia que marca el nivel educativo de la población en el tiem-po, comparando una generación más joven (20-24 años) conotra de más edad, integrada por personas con 25 años y más.

En primer lugar, el análisis de la población "sin ins-trucción" confirma lo observado en el cuadro 26, es decir,que el analfabetismo se ha reducido sustancialmente. Tantoen los hombres como en las mujeres, este descenso ha sidodel orden del 50 por ciento, sólo que en este cuadro las mu-jeres revelan un nivel superior de analfabetismo porque es-tos últimos datos incluyen a la población indígena.

- 71 -

En cuanto a la población que ha recibido algún grado deinstrucción, el aumento en cada nivel ha sido superior enlos hombres, en lo que respecta a la primaria completa, y s_imilar para ambos sexos, hasta los 3 años de la secundaria.Pero, en el tramo de 4 a 6 años del nivel medio, una mayorproporción de mujeres logra llegar a este nivel.

Las cifras de la población que ha cursado algún año universitario destacan una participación numérica de hombres ymujeres muy similar. La mujer tiende a ingresar a la universidad a una edad más temprana que el hombre, lo cual explicala mayor proporción de hombres con algún grado universitario,en el grupo de 25 años'y más de edad, respecto a la genera-ción más joven (20 -, 24 años).

Otro cambio importante de destacar en el grupo de persoñas "con instrucción" consiste en que el nivel "primario in-completo" absorbe el mayor porcentaje de las personas con 25años y más de edad, mientras que en el grupo más joven(20-24), el porcentaje más alto corresponde a la categoríade "primaria completa".

3. Acceso y promoción en la educación primaria:

En la población que tiene de 7 a 15 años de edad, si sedescuentan aquellas personas que han terminado la escuelaprimaria y los que han ingresado a la secundaria o a otro t¿po de institución, el censo de 1960 reveló que, aproximada-mente, el 88%,de la población en esas edades debía asistir aalgún grado de enseñanza del nivel primario. En el año 1970se empadronaron alrededor de 332,000 niños entre esas eda-des. Si la relación censal antes comentada se mantuviera in.variable, es de esperar que cerca de 292,160 niños de 7a 15 años debían asistir a la escuela primaria; no obstante,las estadísticas de educación señalan que en julio de 1970se hablan matriculado 246,000 alumnos de esas edades, es de-cir, que dejó de ingresar el 16%, cifra semejante a la obser.vada 10 años atrás.

La diferencia que se aprecia entre la población censaday la matriculada de 7 a 9 años de edad, destaca una margi-nalidad neta de la educación primaria, puesto que en esasedades sólo se puede estar en una escuela elemental. Estasdiferencias son semejantes para hombres y mujeres, y oscilanalrededor del 12%.

Con base en la matricula por grado, registrada en loscolegios primarios de la República, se puede apreciar, encierta medida, el aprovechamiento por parte de los estudian-tes.

En el caso hipotético de que ingresen al primer grado,cada año, 100 varones y 100 niñas, si estos alumnos son pro.movidos en su totalidad, en los años venideros su volumen s¿

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lo deberla reducirse por los efectos de la mortalidad, lacual no afecta mayormente las edades entre los 5 y los 14años, donde se dan las tasas de muerte más bajas del país; yel otro factor influyente seria la importancia que en estasedades pudiera tener la migración internacional, la cual esinsignificante en el caso de Panamá.

De manera que la reducción del volumen de alumnos a me-dida que aumentan de grado, se debe más que nada, a dos fac-tores: a los aumentos anuales de la matricula del primer gra.do motivado por el crecimiento de la población y a los ret¿.ros, o sea, deserciones que se producen en los colegios. Lacomparación de esta situación entre hombres y mujeres favorg.ce ligeramente a estas últimas, ya que, como se puede obser-var en el cuadro que se presenta a continuación, a partirdel tercer grado, la relación porcentual de las mujeres esligeramente superior a la de los varones y el Índice de mas-culinldad desciende en forma sostenida hasta el sexto grado.

Cuadro 28

PANAMA. MATRICULA EN LAS ESCUELAS PRIMARIAS DE LA REPÚBLICA, PORSEXO Y GRADO: AÑO ESCOLAR 1970 â/

Grado

TOTAL

Primero

TerceroCuartoQuintoSexto

Hombres

Número

132,815

34,45927,11322,78918,93316,13513,386

Porceu.taje

100.0

25.920.417.214.312.110.1

Mujeres

Número

122,472

30,14424,30021,72918,06315,33612,900

Forcen.» taje

100.0

24.619.817.714.712.510.5

índicede ma s cu.Unidad

108.4

114.3111.6104.9104.8105.2103.8

â/ Se refiere al promedio del mes de julio, e incluye alumnos de 5a 18 años de edad.

Fuente:- Departamento de Estadística, Dirección Nacional de PlaneamientoEducativo, Ministerio de Educación.

Respecto a la edad en que se cursan los estudios en ca-da uno de los grados del nivel primario, en el cuadro 29 seha encerrado en un cuadrante el porcentaje de alumnos, paracada sexo por separado, que estaban matriculados dentro dela edad correspondiente a cada grado, es decir, que consti-

- 73 -

tuyen los estudiantes que ingresaron a la primaria a los 7aflos de edad, de acuerdo con la disposición legal vigente en.tonces, y no repitieron grado alguno.

La comparación por sexo deja ver cómo resulta más fre-cuente entre los hombres la postergación de los estudios deacuerdo con la edad. Mientras 54 de cada 100 niñas se ma tri.cularon en el primer grado a los 7 años de edad, en los varo,nes esta relación fue del 49 por ciento. Asimismo, mientrasel 47% de las niñas cursan el sexto grado después de los 12años de edad, en los varones esta relación se eleva al 56%.

Cuadro 29

PANAMA. DISTRIBUCIÓN PORCENTUAL DE LA MATRICULA DE U S ESCUELASPRIMARIAS DE LA REPÚBLICA, POR SEXO Y EDAD, EN CADA

GRADO: AÑO ESCOLAR 1970 a/

Sexo y edad(años)

Hombres:

78. ,9

1011 ' . . . .12131415

Mujeres:

789

101112131415

Primero

[48.8|21.2

9 .45 .42 . 81.91.00 .50 .3

19.27.94 . 32 . 01.20 .60 . 30 . 1

Segundo

9.2

21.113.6

8.04 .62 .51.40.8

12.0|43.7[20.711.4

6 . 13.21.60 .70 .2

Tercero

0 . 37 .6

|34.8[22.414.8

9 . 55 . 53 .01.3

0 . 312.0

|39.9[22.012.4

7 . 33 .51.70 . 6

Cuarto

00 . 3

10.3133. 3j21.514.6

9.85.92 .7

0 .00 . 4

12.1138.7122.613.4

7 . 33 . 41.4

Quinto

0 .00 . 3

10.1|31.9[22.116.410.2

5.7

00 . 4

13.1[37.5|23.014.0

7 . 33 . 3

Sexto

0.00 .3

10.9[32*77123.515.510.1

0.00 .4

14.5|38.0|24.312.4

7 . 1

§J Se refiere al promedio del mes de julio y sólo incluye a los alúanos de 7 a 15 años de edad.

... El caso no es aplicable al grupo.

Fuente:- Departamento de Estadística, Dirección Nacional de PlaneamientoEducativo, Ministerio de Educación.

- 74 -

El aprovechamiento escolar medido, una vez más, a tra-vés del porcentaje de alumnos que son promovidos de grado yaquéllos que al llegar al último año del nivel reciben sucertificado de terminación de estudios primarios, nuevamentevuelve a colocar a la mujer panameña en una situación venta,josa respecto al hombre.

La relación de los promovidos con la matrícula al finaldel año escolar es del 86 por ciento para las mujeres y del83 por ciento para los varones. La de la matrícula de sex-to grado con los graduados es del 95 por ciento tanto paralas mujeres como para los varones.

Finalmente, conviene referirse a la resultante final deuna cohorte o grupo de niños que ingresan al primer grado enun año determinado para recibir su certificado de culmina-ción de estudios primarios 6 años después. Si efectuamos es,te análisis con los alumnos graduados en el año escolar 1970,habremos de relacionarlos con la matrícula del primer añode 1965.

Efectivamente, en 1965 ingresaron al primer grado de lasescuelas primarias del país 25,827 niños y 22,904 niñas. Seisaños después, o sea, en 1970, egresaron de sexto grado 12,676varones y 12,314 mujeres. La relación porcentual de estasdos cifras puede interpretarse como el aprovechamiento efecti.vo de la enseñanza primaria dentro de los 6 años reglamenta-rios, que es del orden del 49% para los hombres y del 54% pa-ra las mujeres.

4. Acceso y aprovechamiento en el nivel medio:

El Ingreso al nivel medio de la población que termina sa.tisfactoriamente su educación primaria, vuelve a indicar queno todos los jóvenes tienen las mismas oportunidades en su ca.rrera educativa.

En el año 1970, el 24 por ciento de los alumnos que ter-minaron sus estudios primarios el año anterior no ingresarona la secundaria inmediatamente, sino que lo postergaron paraaños futuros, lo cual parece lograrse en algunos casos ya seaporque la necesidad de un trabajo mejor remunerado lo exija opor las mismas aspiraciones de mejoramiento del individuo.

Al recordar una vez más que la población total de la Re-pública se incrementó en un 33 por ciento en la última década,cabe resaltar que el crecimiento de la población con algúngrado de educación media duplicó el incremento de la pobla-ción total y superó al de la población con educación primaria(el 44 por ciento de aumento), en más del 50 por ciento.

Es así como en los últimos 10 años, el número de perso-nas con nivel de instrucción secundaria creció en un 73%,siendo mayor el aumento en las mujeres, con el 76%.

- 75 -

Desde el primer año, en los colegios secundarios suelematricularse un número mayor de ñiflas que de varones, y a me.dida que aumentan los años de estudio, esta situación se man-tiene, tanto en cifras absolutas como relativas, excepto enel último año, en el cual el porcentaje de la matrícula delos varones es de la misma magnitud que el de las mujeres.

Tal como se indico en el punto referente a la educaciónprimaria, la reducción en el volumen de alumnos a medida queaumenta el año de estudio, puede ser ocasionado por dos ti-pos de factores: a los aumentos anuales de la matricula delprimer año y los retiros, que, en este caso, evidentementeresultan mayores en los varones, puesto que hacen bajar enforma sostenida el Índice de masculinidad, a medida que au-menta el año de estudio, excepto en el sexto nivel.

Cuadro 30

PANAMA. MATRICULA EN LAS ESCUELAS DE NIVEL MEDIO DE LA REPÚBLICA,POR SEXO Y ANO DE ESTUDIO: AÑO ESCOLAR 1 9 7 0 a /

Año de estudio

TOTAL

Primero

TerceroCuartoQuintoSexto

Hombres

Número

37,667

11,8168,9047,2664,0283,1672,486

Porcen.taje

100.0

31.423.619.310.78.46.6

Mujeres

Número

40,799

11,9999,7818,1174,4883,7222,692

Porcen.taje

100,0

29.424.019.911.09.16.6

índicede mascaUnidad

92.3

98.591.089.589 885 092.3

a./ Se refiere al promedio del mes de julio e incluye alumnos de 10a 23 anos de edad.

Fuente:- Departamento de Estadística, Dirección Nacional de PlaneamientoEducativo, Ministerio de Educación.

Al finalizar el año escolar de 1970, se graduaron enlos segundos ciclos y cursos vocacionales de las escuelas se.cundarias de la República, cerca de 9,000 estudiantes, co-rrespondiendo un poco más de la mitad al sexo femenino.

- 76 -

5. Acceso y desarrollo en la enseñanza universitaria y profe-sional superior:

A través de las informaciones suministradas por el úl-timo censo nacional de población, se ha podido determinarque alrededor de 55 de cada 1,000 personas de 25 aflos y másde edad, que viven en el territorio nacional, han cursadoalgún año de enseñanza universitaria.

La misma fuente de información permite apreciar el no-table incremento que ha experimentado en los últimos 10años la población con instrucción universitaria", el cual hasido del 1107. para los hombres y del 156% para las mujeres.

Los datos estadísticos suministrados por las dos uni-versidades que imparten esta enseñanza permiten apreciar,para el año 1971, una matricula de 15,102 alumnos, de loscuales un poco más de la mitad corresponde al sexo femeni-no. En igual sentido, la graduación que se produjo en eseaño suministró al pals 780 nuevos profesionales de los cua.les el 53% eran mujeres.

c) Estado conyugal y nupcialidad: /

1. Estado conyugal:

El estado conyugal de la población (estado civil) cons,tituye una de las características de vital importancia enlos estudios demográficos, por sus implicaciones en la fe-

" - cundidad y la mortalidad infantil. Además, en otros camposse requiere conocer el estado civil de la población por larelación que guarda con la formación de la familia, la par-ticipación de la mujer en la mano de obra, en los serviciosde asistencia social, en los proyectos de construcción deviviendas, etc.

A su vez, como ocurre con otras características demo-gráficas, la composición por estado civil depende estrecha-mente de la distribución de la población por edad y sexo.

El censo de población de Panamá del año 1970 nos sumi-nistra una información detallada sobre el estado conyugalde las personas que, además de darnos a conocer un mayor de.talle del mismo, que los censos anteriores, intenta un me jaramiento en la calidad de los datos. De esta forma, el cen.so de 1970 diferenció 7 categorías de estado conyugal: sol-tero (célibe), casado (civil y/o religioso), unido (sin con.siderar el nivel de estabilidad de la unión), separado dematrimonio, separado de unión, divorciado (separación le-gal) y viudo.

' 77 -

Cuadro 31

PANAMA. ESTRUCTURA POR ESTADO CONYUGAL DE LA POBLACIÓN DE LA REPÚBLICA,POR SEXO, PARA ALGUNOS GRUPOS DE EDADES: CENSO 1970

Sexo y estadoconyugal

HOMBRES

Separados de matrl

Separados de union

Viudos

MUJERES

Unidas

Separadas de matrl

Separadas de unión

Viudas

De 15

Número

407.756

157,578

106,590

111,227

6,032

15,255

1,907

9,167

396,535

98,939

107,930

120,758

9,340

30,4263,766

25¡376

y más

Porcentaje"

100.0

38.6

26.1

27.3

1.5

3.8

0.5

2.2

100.0

25.0

27.2

30.4

2.4

7.70.9

6.4

De 25

Número

275.364

49,109

99,410

96,559

5,654

13,724

1,837

9,071

262,091

24,487

90,852

86,087

8,196

23,8513,546

25,072

y más

Porcentaje

100.0

17.8

36.1

35.0

2.1

5.0

0.7

3.3

100.0

9.334.7

32.8

3.19.1

1.4

9.6

De 35

Número

182,808

23,065

73,520

61,109

4,473

10,455

1,472

8,714

170,570

13,260

60,208

47,204

6,181

16,6592,750

24,308

y más

Porcentaje

100.0

12.6

40.2

33.4

2.5

5.7

0.8

4.8

100.0

7.835.3

27.7

3.69.81.6

14.2

45-49 anos

Número

27.998

3,435

11,537

10,036

663

1,508

215

604

25,400

1,750

10,329

7,952

1,001

2,398457

1,513

Porcentaje

100.0

12.2

41.2

35.8

2.4

5.4

0.8

2.2

100.0

6.940.7

31.3

3.99.41.8

6.0

Fuente:- Censos Nacionales de Población de 1970 (Dirección de Estadística y Censo,Panamá).

En el-cuadro que antecede, se presenta, para cada sexopor separado, la distribución porcentual de la población se.gún su estado conyugal, al momento del censo.

A partir de los 15 aflos, edad en la cual suelen ini-ciarse en Panamá las uniones legales o de hecho, se declarasoltero el 39% de los hombres y el 25% de las mujeres, locual sugiere la entrada de la mujer al matrimonio a una edadmás temprana que el hombre. Más de la mitad de la poblaciónde 15 aflos y más se declaró casada o unida al momento delcenso: el 53% en el caso de los hombres y el 58%, en las mu-jeres.

Lasr separaciones y divorcios sumaron un poco menos del6% en los hombres y el 11% en las mujeres. Finalmente, losviudos representan 2% en los varones contra un 6% en el casode las mujeres, situación que está determinada por la mayormortalidad de hombres que de mujeres, y por otro lado, pare-ciera que el hombre permanece menos tiempo en este estadoque la mujer.

- 78 -

Como es de esperar, a medida que aumenta la edad de laspersonas, disminuye el porcentaje de hombres y mujeres céli-bes y aumenta la proporción de casados y unidos. No obstan-te, este último estado tiende a experimentar una baja en lapoblación de 35 años y más lo cual podría explicarse por unatendencia a legalizar las uniones de facto mediante el matri.monio después de varios años de convivencia, práctica quefue impulsada en Panamá hace más de 10 aflos, por grupos demisioneros católicos.

En el tramo de los 45 a los 49 años, dejan de producir-se cambios importantes en el estado civil de las pers.onas.A estas edades, el 41% de los hombres y las mujeres se man-tienen casados; y casados o unidos, el 77% de los hombres yel 72% de las mujeres. Estas pequeñas diferencias en lasuniones, por sexo, a una edad en que la estructura del esta,do civil tiende a ser constante, se explica por el hecho deque a esas edades un 9% de los hombres se mantiene separadoo divorciado de sus respectivos cónyuges, mientras que enlas mujeres.esta relación se eleva al 15%. Finalmente, laImportancia relativa de las viudas (el 6%) sigue siendo su-perior a la de los varones (el 2%), por las razones antesapuntadas.

Cuadro 32

PANAMA. PROPORCIÓN DE "NO SOLTEROS" DE CADA SEXO, POR GRUPOSDE EDADES, EN LA REPÚBLICA: CENSO 1970

Grupos de edades

15 - 1920 - 2425 - 2930 - 3435 - 3940 - 4445 - 4950 - 5455 - 5960 - 6465 - 6970 - 7475 --7980 - 84

Proporción de"no solteros" a/

Hombres

0.040.340.660.800.850.870.880.890.880.880.880.890.880.880.90

Mujeres

0.250.660.850.910.930.930.930.920.910.910.900.890.900.900.90

Diferencia

Mujeres-hombrea

(+) 0.21(+) 0.32(+) 0.19(+) 0.11(+) 0.08(+) 0.06(+) 0.05(+) 0.03(+) 0.03(+) 0.03(+.) 0.02

0(+) 0.02(+) 0.02

0

QJ Se refiere a casados, unidos, separados de matrimonios o unión,divorciados y viudos. Del total de cada edad se excluyeron laspersonas para las cuales no se especificaba el estado conyugal,que es de una magnitud insignificante.

Fuente:- Censos Nacionales de Población de 1970 (Dirección de Estadísti-ca y Censo, Panama).

- 79 -

Para apreciar en forma más clara el comportamiento delestado civil de acuerdo con su distribución por sexo y edad,se divide a la población de cada sexo en dos grandes grupos:los solteros y los no solteros. Integran la última catego-ría todas aquellas personas que han adquirido un vínculo dematrimonio o union, en algún momento de sus vidas.

En el supuesto de que la nupcialidad mantiene un compor.tamiento constante a través del tiempo, lo cual es bastantecierto en el caso de nuestro país, el análisis de la pobla-ción "no soltera" a través de la edad permite apreciar laevolución de este grupo a través del tiempo.

De cumplirse la premisa antes enunciada, vemos que enel tramo de los 15-19 años sólo el 4% de los hombres habíacontraído algún tipo de unión, mientras que en las mujeresesta relación se eleva al 257.. En el grupo siguiente (20-24) el 34% de los hombres dejó de ser soltero mientras queen las mujeres este índice es el doble (667.). Todo ello nosestá señalando el inicio de la mujer en el matrimonio a unaedad mucho más temprana que el hombre.

En las siguientes edades, como es de esperarse, la pro-porción de los "no solteros" sigue aumentando hasta llegar aun punto en que su nivel se mantiene constante, lo cual ocu-rre a los 40 años en las mujeres y a los 50 en los hombres.Es decir, que la nupcialidad en las mujeres se inicia y ter-mina a una edad más temprana que en el caso de los varones,y adquiere -niveles más altos en las primeras.

Respecto al valor más alto que alcanzan los "no solte-ros" de cada sexo, 89% en los hombres y 93% en las mujeres,debe interpretarse que, en todo el país, permanece célibe el11% de los hombres y el 7% de las mujeres.

En esta diferencia del nivel de nupcialidad alcanzadoen cada sexo, conviene tener presente la importancia quepuedan tener los movimientos migratorios internacionalesque en la década del 60 arrojaron un saldo negativo de ma-yor cuantía en el caso de las mujeres. Si es cierto quelos solteros son los que integran en mayor número a los mi.grantes, tal hecho pudo haber contribuido a que se dierauna menor proporción de solteras, en el caso de Panamá.

2. Nupcialidad femenina (21):

i) Metodología:

Básicamente, el estudio corresponde a un análi-sis por cohortes mediante datos provenientes de doscensos de población, los de 1950 y 1960. El análisisse realizó por separado para cada quinquenio del pe-ríodo intercensal.

- 80 -

El disponer de dos censos de población separadospor un intervalo de 10 aClos permite contar con la cía.sificación de las mujeres por grupos quinquenales deedades según estado civil para dos momentos: al co-mienzo y al final del periodo intercensal.

Si el empadronamiento de las mujeres en las eda-des consideradas fue completo y si no existieron errores de declaración de la edad y del estado civil, se-rla posible, mediante un análisis por cohortes, esti-mar las tasas anuales medias de nupcialidad general yde nupcialidad legal, por edad, para el periodo inter_censal. En el primer caso, bastarla calcular paracada cohorte la diferencia entre las proporciones demujeres solteras al comienzo y al final del períodointercensal y dividir el resultado por el tiempo du-rante el cual las mujeres estuvieron expuestas a pa-sar de la condición de solteras a la de no solteras.

En el caso de la nupcialidad legal, el procedi-miento serla análogo, con la única diferencia de quelas proporciones corresponderían al conjunto de lasmujeres solteras más las que viven en unión consen-sual. Y las tasas anuales de convivencia se obten-drían fácilmente restando las tasas de nupcialidad le_gal de las de nupcialidad general.

Aceptando que se cumplen, en grado aceptable,las condiciones hipotéticas enunciadas en relación ala calidad de los censos, las limitaciones más impor-tantes que podrían tener los resultados, serían lasprovenientes del no cumplimiento, en el sentido es-tricto, de los supuestos implícitos en el procedimiento, basado fundamentalmente en un análisis por cohoj_te.

Otra manera de abordar la investigación de lanupcialidad femenina serla utilizando los datos provenientes de los matrimonios registrados. En este caso,las limitaciones que se hallarían al estudiar la nup-cialidad, también serian importantes.

Por tales motivos, en el presente estudio se hacombinado el uso de la información censal con los da-tos de los matrimonios registrados, con el propósitode hacer posible la realización de los dos tipos deanálisis a que se hizo referencia en párrafos anterio-res: estudiar la nupcialidad general y sus componen-tes a través de los datos censales, previa correcciónde los errores más groseros del empadronamiento.

La estimación de las tasas de nupcialidad, me-diante el uso de datos censales, exige tener presen-te, además de las limitaciones que pueden provenir

- 81 -

de la calidad de la información, las que se derivande los supuestos que deben formularse. Ellos son:

- El riesgo de muerte por edad es independien-te del estado civil.Los cambios de estado civil se producen enforma uniforme a través del periodo intercen,sal.

- La población en estudio puede asimilarse auna población cerrada.

ii) Resultados:

Cuadro 33

PANAMA. TASAS ANUALES MEDIAS DE NUPCIALIDAD LEGAL, DE NUPCIALIDADGENERAL Y DE CONVIVENCIA, POR EDAD E INDICES SINTÉTICOS

(Tasas a j u s t a d a s por mil mujeres ) (21)

1950-1960

Grupos de edades

15.0 - 17.517.5 - 22.522.5 - 27 527.5 - 32.532.5 - 37 537.5 - 42.542.5 - 47.547.5 - 50.0

índice sintético

Nupcialidad

general

90.8268.9730.0511.256.003.372.001.37

838.67

Nupcialidadlegal

29.3432.1126.4219.5815.3713.3711.129.30

686.45

Convivencia

61.4836.863.63

(-) 8.33(-) 9.37(-) 10.00(-) 9.12(-) 7.93

152.22

Nota: La información fue extractada del cuadro 6, del trabajo mencionadocon la nota marginal (21).

Entre los 15 y los 17 aflos y medio, se presentala tasa de nupcialidad general más alta. Como prome-dio anual, por cada mil mujeres pertenecientes a esetramo de edades, aproximadamente 91 ingresan al estadomatrimonial, ya sea mediante una unión legal o una coiivivencia.

En Panamá, la nupcialidad general es decrecientecon la edad y puede observarse que entre los 15 y los22 años y medio se concentra el 75% de la nupcialidadtotal de las mujeres, resultando un tipo de nupciali-dad que podríamos denominar "precoz".

- 82 -

Si se analiza el tipo de unión que caracteriza lanupcialidad en las edades en que se inicia, se apreciaque las tasas estimadas para la nupcialidad legal sonsensiblemente inferiores que las estimadas para lasuniones consensúales, particularmente entre los 15 ylos 17 arlos y medio. En estas edades, por cada mujerque se casa legalmente hay 2.1 mujeres que ingresan auna convivencia.

En Panamá, las tasas de nupcialidad legal estima-das para el período intercensal 1950-1960, correspon-dientes a los últimos grupos de edades se consideranbastante elevadas. Tal situación refleja la legaliza-ción de un importante número de uniones consensúales,explicación que surge cuando se analiza la serie anualde matrimonios registrados durante el decenio, pues en1959, el número de matrimonios registrados fue, aprox¿madamente, cuatro veces mayor que para los demás afíosdel periodo, por la campana impulsada en este sentidopor grupos de misioneros católicos. De alli que aun-que se ha visto que las uniones consensúales represen-tan un importante aporte a la nupcialidad general,principalmente en las dos primeras edades, las tasasnegativas que se observan a partir de los 27 afíos ymedio podrían sugerir la edad en que tienen lugar lassalidas de la condición de convivencia, ya sea por di-solución de la unión o como consecuencia de un matrimp_nio legal, la última de las cuales parece ser la explJLcación más acertada en el caso de Panamá, durante ladécada 1950-1960.

Los Índices sintéticos que se incluyen al finaldel cuadro 33 deben interpretarse como la proporciónde mujeres que llegarían a los 50 afíos de edad en lacondición de casadas o convivientes el (84%), o en lacondición de casadas legalmente el (69%) o convivien-tes el (15%), supuesta una cohorte hipotética que, apartir de los 15 años y en ausencia de mortalidad, es-tuviese expuesta al comportamiento de las tasas de nup-cialidad por edad, estimadas para la población femeninade Panamá durante el período 1950-1960.

d) Familia y vivienda:

1. Características de la familia:

A manera de información, en este documento se hace unabreve referencia a la constitución de la familia panameña,por ser el eslabón que media entre el comportamiento de lasociedad y del individuo, siendo ambos factores decisivosde los cambios experimentados por la población.

La familia, unidad básica de toda sociedad, en la cualse genera la población, juega un papel muy importante enlos estudios demográficos. Su tamaño y composición son de-

- 83 -

terminados por el crecimiento de la población, por sus fac-tores dinámicos tales como la fecundidad y la mortalidad,asi como por las características que posea la misma.

Finalmente, cabe agregar, que la familia es el baróme-tro donde interesa medir los resultados alcanzados con lasactividades que proyectan mejorar el .nivel de vida de la po_blación en su conjunto, a través de las características queidentifican a sus miembros.

El censo de población y vivienda de 1970 aporta una riqueza de datos sobre la materia, algunos de los cuales, porsu gran importancia, se destacan en este comentario.

En primer lugar, cabe resaltar que casi el 100% de lapoblación de la República vive en hogares particulares. Larelación del número de hogares con la población que los ha-bita señala un promedio de 4.9 personas por hogar, elevando^se este índice a 5.2 en las áreas rurales del país.

Esta relación se ha mantenido a un nivel constante enlos últimos 20 años, acusando más bien una leve tendenciaal aumento. Para el total de la República, si hacemos unadescomposición de este Índice de acuerdo con el sexo del j¿fe de la familia, se aprecia que el tamaño del hogar es ma-yor cuando el jefe es un hombre (5.1) y es de 4.2 cuando eljefe es una mujer.

En un intento por detectar, dentro de las viviendas,el número de núcleos familiares o familias biológicas exis-tentes, es decir, aquellas unidades familiares integradassólo por uno o los dos padres, con o sin hijos solteros,haciendo exclusión de aquellos hogares que están habitadossolo por hermanos, amigos o personas que viven solas, sepudo apreciar que el 88% de las viviendas particulares esta_ban habitadas por familias que constituyen un núcleo fami-liar, de acuerdo con la definición antes mencionada. Elresto, es decir, en el 12% de las viviendas, habitan fami-lias integradas por dos o más núcleos; unidades familiaresque se ha dado en llamar familias complejas o extendidas,de acuerdo con las variedades que presenta su constitución,fenómeno este que responde a costumbres de la sociedad, afactores de tipo económico, a limitaciones en la oferta deviviendas, etc. (22).

- 84 -

PANAMA.

Cuadro 34

ESTRUCTURA DE LOS HOGARES DE LA REPÚBLICA, SEGÚN SEXO DELJEFE, POR AREAS URBANA Y RURAL: CENSO 1970

Detalle

Población en hoga_res

Número de hogaresTamaflo del hogar

(personas porhogar)

Sexo del jefe (%)Jefe hombre conesposa o compa-ñera (%)

Promedio de hijos

Promedio de otraspersonas por ho_gar

República

Hombre

1,165,993228,944

5.180.0

78.2

2.5

, , 0.9

Mujer

244,80258,155

4.220.0

2.0

1.3

Urbana

Hombre

513,713105,987

4.874.2

79.2

2.2

0.9

Mujer

151,87736,876

4.125.8

1.8

1.3

Rural

Hombre

652,279122,956

5.385.2

77.4

2.7

0.8

Mujer

92,92521,279

4.414.8

2.1

1.2

. . . No se aplica.

Fuente:- Censos Nacionales de Población y Vivienda de 1970 (Dirección deEstadística y Censo, Panamá).

En cuanto a la estructura de la familia panameña, caberesaltar los siguientes aspectos sobre los miembros del ho-gar y su vinculación con el jefe de la familia: en 1970, el80% de las personas que se declararon como jefes del hogareran varones, el resto, es decir el 20% de los jefes de ho-gares de la República pertenecían al sexo femenino. Estarelación varia un poco de acuerdo con el área de residencia:en las localidades urbanas, la proporción de jefes mujeresse eleva al 26% y en el área rural la proporción de jefesvarones sube al 85%.

Los jefes de familia del sexo masculino, que declara-ron convivir con su esposa o compañera, constituyen el 78%del tota l , es decir, que el 22% restante eran solteros, se-parados, divorciados o viudos. Este índice se eleva ligera_mente al 79% en las ciudades, vale decir que no presenta diferencias significativas entre las áreas urbana y rural.

- 85 -

Con relación al resto de los miembros del hogar, seaprecia que el promedio de hijos por hogar varia entre 2.5(cuando el jefe es varón) y 2.0 (cuando el jefe es mujer).Como es de suponerse, por las diferencias en el nivel de lafecundidad, en los sectores rurales este promedio es ligeramente superior al observado en las áreas urbanas. Respectoa l resto de los parientes que constituyen los hogares pana-meflos, el promedio varia entre 0.9 (cuando el jefe es varón)y 1.3 (cuando el jefe es mujer). Es decir, que la relaciónpromedio entre hijos y otros parientes dentro del hogar esde 2 a 1, aproximadamente.

Cuadro 35

PANAMA. NIVEL DE INSTRUCCIÓN DEL JEFE DE HOGAR, POR SEXO YTAMAÑO DEL HOGAR EN LA REPÚBLICA: CENSO 1970

Nivel de i n s t r u c c i ó n(apios aprobados)

TOTAL

Menos de 44 - 67 - 9

10 - 1213 y más

(Excluye indígenas)Hombres

Porcentaje

100.0

40.635.610.08.75.1

Tamañohogar a/

. 5.0

5.25.04 .74 . 64 .6

Mujeres

Porcentaje

100.0

38.639.510.68.33.0

Tama (lohogar s/

4^

44413.

?

11076

aj Personas por hogar.

Fuente:- Censos Nacionales de Población y Vivienda de 1970 (Dirección deEstadística y Censo, Panamá).

Finalmente, se hace mención a una de las característi-cas personales más importantes del jefe, su nivel educativo.En términos relativos, éste continúa siendo bajo. Los quetienen 7 aflos y más de estudios, es decir, que han logradocursar por lo menos un año del nivel secundario, oscilan en-tre el 24% (en los varones) y el 227. (entre los jefes muje-res).

Sobre esta característica del jefe del hogar, convienetambién destacar la correlación inversa que existe entre elnivel educativo alcanzado por éste y el tamaño del hogar.El promedio de personas por familia, donde el jefe es un va-rón varía de 5.2 para los que han cursado menos de 4 aflos deprimaria a 4.6 para los que tienen aprobado algún año uni-versitario. En los hogares donde el jefe es una mujer, es-ta misma relación es más baja y varía de 4.3 a 3.6.

- 86 -

2. Características de la vivienda:

Al igual que en el caso de los hogares particulares,los censos nacionales de 1970 nos suministran una gran va-riedad de datos relativos a las condiciones estructurales yfuncionales de la vivienda en el país. En nuestro análisisnos vamos a referir exclusivamente a las viviendas particu-lares ocupadas, destacando el tipo de vivienda, los materia-les con los cuales están construidas, los servicios públi-cos que tienen a su alcance, el equipo doméstico disponible,y ante todo, a la relación existente entre el número de peí:sonas que habitan las viviendas y el tamaño de éstas.

Las viviendas particulares ocupadas aumentaron en un307o en la última década, es decir, que han tenido un incre-mento ligeramente inferior al de la población que habita enel pais, lo cual hace pensar en que el déficit habitacionalque pudiera tenerse alrededor de I960 no haya sido superadoen mayor medida, a pesar de la gran cantidad de construccit)nes efectuadas durante la década.

No obstante, complace destacar que los servicios pú-blicos de agua potable, sanitarios y luz eléctrica de quedisponen las viviendas, ha mejorado en forma notable, asícomo el tipo de construcción. En orden de importancia, seseñala, para 1970, el número de viviendas particulares quedispone de los servicios antes aludidos: el 72% de las vi-viendas tenia algún tipo de servicio sanitario, el 67% dis-ponía de un piso de cemento o madera, 64% tenía acceso aagua potable para beber y el 52% lograba hacer uso de laenergía eléctrica.

Las viviendas particulares ocupadas que fueron censa-das en 1970 se clasificaron de acuerdo con el año en que seconstruyeron. Esta información nos permite ver en mayor detalle los cambios experimentados por éstas en los últimos10 aflos. Aunque dicha información tiene la limitación deque no siempre se recuerda con precisión la fecha de con¿trucción de una vivienda, especialmente cuando se trata decasas alquiladas, los datos obtenidos proyectan situacionesde interés que vamos a comentar más adelante.

- 87 -

Cuadro 36

PANAMA. VIVIENDAS PARTICULARES OCUPADAS SEGÚN ALGUNASCARACTERÍSTICAS FUNCIONALES: CENSOS DE 1960 Y 1970

Detal le

Viviendas p a r t i c u l a r e s ocupadas aj . . . .

Distr ibución porcentual :

Viviendas con agua potableViviendas con se rv ic io san i ta r ioViviendas s in p i so de t i e r raViviendas con luz e léc t r ica

1960

244.483

219,420

56.361.659.542.3

1970

315,421

285.321

64.371.767.351.9

a/ Excluye locales no destinados a habitación pero usa-dos como vivienda.

Fuente:- Censos Nacionales de 1970. VoL II. "Característicasde la Vivienda" (Dirección de Estadística y Censo,Panamá, 1973).

Al dividir el número de viviendas en dos grupos: lasconstruidas antes de 1961 y desde 1961, se aprecia que el43% de las viviendas empadronadas en 1970 fueron construi-das en los últimos 10 anos. La diferencia que se apreciaentre este porcentaje y el incremento neto de las viviendasentre los dos últimos censos (el 30%), debe atribuirse aaquellas viviendas que fueron construidas para reemplazar aaquéllas que eran inhabitables, las cuales absorberían el137o de las viviendas construidas durante este período.

- 88 -

Cuadro 37

PANAMA. VIVIENDAS PARTICULARES OCUPADAS, SEGÚN ALGUNASCARACTERÍSTICAS ESTRUCTURALES Y FUNCIONALES,

DE ACUERDO CON EL PERIODO DE TIEMPO ENQUE FUERON CONSTRUIDAS: CENSO 1970

Detalle

Viviendas particulares

Promedio de cuartos por

Material predominante enparedes exteriores....

Bloque, ladrillo, pie-dra . ... '.

MaderaOtro material...-.

Abastecimiento de agua

Pozo sanitarioOtro. .

Servicio Sanitario

Alcantarillado y tan-

Alumbrado

Total(Porcentaje)

(2.23)

100.0

37.428.833.8

100.0

52.212.235.6

100.0

40.131.628.3

100.0

52.347.7

Construidas antesde 1961

Número

162,084

Porcen_taje

(2.22)

100.0

35.435.429.2

100.0

61.411.127.5

100.0

51.228.220.6

100.0

61.638.4

Construidas desde1961

Número

123,237

Porcentaje

(2.25)

100.0

40.120.239.7

100.0

40.013.546.5

100.0

25.436.238.4

100.0

40.159.9

Fuente:- Censos Nacionales de 1970. Vol. II "Características de la Vivien,da" (Dirección de Estadística y Censo, Panamá, 1973).

- 89 -

El promedio de cuartos por vivienda aumentó muy pocoen las construcciones de los últimos 10 años respecto alas viviendas ya existentes en 1960. En cuanto al mate-rial predominante en las paredes exteriores de la vivienda,hubo un mejoramiento, cuando se aprecia que en las construí^das desde 1961, el 40% fueron hechas con bloque, ladrillo opiedra. Sin embargo, también se produjo una importanteconstrucción de casas confeccionadas con materiales de cor-ta duración como la quincha o adobe, paja, penca y cada("otro material").

Al detallar el tipo de abastecimiento de agua para be-ber, vemos que la disponibilidad de agua potable en lasconstrucciones de la última década se ha visto favorecida,en gran medida, por la construcción de pozos sanitarios,pero el acueducto sigue siendo el sistema de agua potablemás importante. Mientras las viviendas construidas a par-tir de 1961, con acceso a pozos sanitarios, cambiaron suimportancia relativa del 11% antes de 1961 al 13.5 despuésde ese aClo, la importancia relativa de las viviendas conacceso a acueducto cambiaron del 61% al 40%, a lo cualtambién ha contribuido la gran cantidad de casas surgidasa partir de 1961 y que no se aprovisionan de agua potable.

En cuanto a la disponibilidad de los servicios sanita-rios se da una situación semejante a la del "agua potable".De las viviendas construidas después de 1960, las conecta-das a alcantarillado o tanque séptico representan el 25%,mientras que las que disponen de servicios de hueco o letrina constituyen el 36%. Y también se repite el fenómeno dela construcción de un gran número de viviendas que no dis-ponen de ese servicio.

Tanto el análisis del abastecimiento de agua para be-ber como la disponibilidad de servicio sanitario, nos per-mite apreciar que los cambios observados en el cuadro queantecede han favorecido más a los sectores rurales, dondeel agua potable debe suministrarse mediante la construcciónde "pozos sanitarios" y el servicio sanitario de factibleconstrucción es el de "hueco o letrina".

Respecto al alumbrado eléctrico, aunque ha habido unsaldo positivo en el incremento de este servicio, no debepasar desapercibido el número de viviendas construidas enlos últimos 10 afíos (el 54%), que no tienen este servicio.

- 90 -

Cuadro 38

PANAMA. VIVIENDAS PARTICULARES OCUPADAS SEGÚNDISPONIBILIDAD DE ALGUNOS EQUIPOS

DOMÉSTICOS: CENSO DE 1970

(Porcentaje)

Detalle

Estufa de gas o eléctrica

Con refrigerador

Con máquina de coserCon televisor

1960

9.134.017.039.6

1970

45.99.8

32.167.733.332.1

... No se obtuvo la información en esa ocasión.

Fuente:- Censos Nacionales de 1970. Vol. II "Caracterís-ticas de la Vivienda" (Dirección de Estadísticay Censo, Panamá, 1973).

La comparación de las viviendas censadas en 1960 y1970 en lo que respecta a equipos domésticos básicos, quehablan en cierta medida del confort de que disponen los hogares panameños, señalan cambios de importancia en los úl~timos 10 años. Vemos así como las viviendas que tienen es_tufas (cocinas) de gas o eléctricas aumentaron su importan^cia relativa del 9% al 467., lo que obviamente ha sido pro-ducido, en gran parte, por el reemplazo de la cocina dequeroseno por éstas.

La importancia relativa de las viviendas con refrige-rador se ha duplicado, pasando del 17% en 1960 al 32% en1970. El aumento en medios de difusión como es la radio,también ha logrado duplicarse del 40% en 1960 al 68% en1970. Y, finalmente, cabe resaltar que en 1970, 1/3 delas viviendas particulares ocupadas disponían de, por lomenos, un televisor y una máquina de coser.

- 91 -

Cuadro 39

PANAMA. VIVIENDAS PARTICULARES OCUPADAS SEGÚN LARELACIÓN DE PERSONAS POR CUARTO: CENSO DE 1970

Tipo de vivienda

TOTAL

Individual (permanente o semi-

Casa de vecindad

Promedio per_sonas porcuarto

2.2

2.21.32.93.3

Porcentajede la po_blación

100.0

74.010.013.03.0

Fuente:- Censos Nacionales de 1970. Vol. II "Característi-cas de la Vivienda" (Dirección de Estadística yCenso, Panamá, 1973).

Finalmente, nos referiremos a la relación de personaspor cuarto, como medida del grado de hacinamiento en quehabita nuestra población, haciendo un análisis de acuerdocon el tipo de vivienda.

En 1970, el promedio de personas por cuarto ascendióen toda la República a 2.2. Pero, como es de suponer, presenta una importante variabilidad de acuerdo con el tipode vivienda, pasando de 1.3 personas por cuarto, en los de_partamentos, a 3 personas por cuarto, en las casas de ve-cindad y a 3.3, en las improvisadas. Ello da lugar a que,aproximadamente, un 16% de la población habite en casas enque esta relación se califica de elevada.

Ahora, si fuera factible separar las casas individua-les en permanentes y semipermanentes, donde se da un prome_dio global de 2.2 personas por cuarto, es posible que unmayor número de viviendas presentarán un mayor hacinamien-to. Este pensamiento se reafirma cuando observamos que el34% de la población habita viviendas que no disponen dedormitorio, es decir, que se trata de casas donde casi to-das las reparticiones de una vivienda se encuentran localjtzadas en una sola habitación.

- 92 -

III. FUERZA DE TRABAJO

El.conocimiento de los recursos humanos constituye una necesidad básica en los programas económicos y sociales de los países, yaque representan el elemento que impulsa el desarrollo y, a su vez,hacia el cual deben estar dirigidos los beneficios de la labor queejecutan.

De acuerdo con el informe de las Naciones Unidas referente alos principios y recomendaciones para los Censos de Población, elgrupo "población económicamente activa", al cual nos referimos eneste capítulo, está constituido por todas las personas, de uno uotro sexo, que suministran la mano de obra disponible para la producción de bienes y servicios en un país. De acuerdo con el Ceni*ode 1970, a diferencia de los recuentos anteriores, se estableció eltipo de actividad ejercida para cada persona durante la "semana an-terior" a la fecha del censo. En los censos anteriores, el tiempode referencia fue el mismo día del censo.

Las interrelaciones existentes entre los diversos aspectos querigen la vida del hombre en la sociedad nos permiten ver con clari-dad la importancia que tiene la estructura y dinámica de la pobla-ción en la constitución de la mano de obra. Como se dijo anterior-mente, Panamá es un país eminentemente joven, con una poblaciónmenor de 15 años sumamente elevada y con un importante contingentede personas dentro de los límites de la vida activa. Pero, porotro lado, la influencia de factores de tipo socio-económico-cultu-ral, como es la educación, la alimentación, la asistencia médica,la seguridad social, la oferta de trabajo, el desarrollo tecnológi-co, complementan la influencia de los factores puramente demográfi-cos, en la determinación del volumen y estructura de la poblacióntrabajadora.

En Panamá, se dispone de diversas fuentes de datos, útiles pa-ra el estudio de la mano de obra. No obstante, en nuestro análisisposterior sólo se hará uso de las informaciones emanadas de los censos nacionales de población, a fin de proyectar la imagen más re-ciente y completa de los recursos humanos del país y, en la medidade lo posible, su evolución en los últimos años.

a) Nivel de participación de la población en la fuerza de trabajo:

La medida denominada "tasa refinada de actividad", en lacual se relaciona la población económicamente activa, de acuer-do con la definición anteriormente suministrada, con la pobla-ción total en las mismas edades, permite conocer la participa-ción que la población efectivamente expuesta al riesgo de trabajar tiene en la actividad económica. En Panamá, el límite inferior de edad para este estudio está marcado por los 10 años.

- 93 -

Cuadro 40

PANAMA. TASAS REFINADAS DE ACTIVIDAD POR SEXO Y GRANDES GRUPOS DEEDADES: CENSOS 1950, 1960 Y 1970

Edad (años)

TOTAL

10 . 14

15 - 19

20 _ 64

(Por cien

1950 a/

Total

50.2

11.5

45.4

61.7

39.3

Hom-bres

78.7

17.4

68.2

96.4

70.0

Mujeres

20.3

5.3

23.4

24.3

8.3

habitantes)

1960 a/

Total

48.2

9.2

43.2

61.5

32.3

Hom-bres

74.3

14.3

63.2

94.9

57.5

Mujeres

21.0

3.8

23.5

26.6

6.6

1970 b/

Total

49.7

8.6

45.6

64.0

30.3

Hom-bres

72.9

11.9

60.9

94.6

53.4

Mujere's

25.8

5.4

30.6

31.6

7.9

aj Censos Nacionales de I960.- Vol. V. "Características Económicas".(Dirección de Estadística y Censo, Panamá, 1964).- (Excluye lapoblación indígena).

b/ Censos Nacionales de 1970.- (Dirección de Estadística y Censo, Panamá).

En el cuadro que antecede, se pueden apreciar varios hechosque, en cierto grado, nos permiten establecer el estado de desarro-llo económico del país y su evolución en el tiempo.

En primer lugar, se destaca la marcada diferencia entre la pa£ticipación económica de hombres y mujeres que en 1970 es del 73 porciento para los hombres y del 26 por ciento para las mujeres.

La observación de estos índices en los tres censos consecuti-vos nos revela que a medida que la participación de las mujeres enla fuerza de trabajo ha ido en aumento, en los hombres ocurre locontrario, es decir, se opera un leve descenso en su tasa de participación. ~

- 94 -

En cuanto al comportamiento del nivel de las mismas tasas, sellama la atención sobre los cambios que se operan en las edadesmarginales; en los menores de 20 años y en la población de 65 añosy más de edad, cambios que obedecen al grado de organización delas actividades, al nivel del ingreso, a la escolaridad y al sistema de retiro profesional, entre otras. El descenso que se observaen las tasas de participación en estas edades, tanto en hombres como en mujeres, a través de los 20 años que se analizan, habla de ~~un aumento en el desarrollo socio-económico del país, ya que sepuede deducir que obedece a que una mayor proporción de personasmenores de 20 años postergan su entrada al trabajo por razones deestudios, y en el otro extremo de la pirámide, el descenso puedeexplicarse por una proyección cada vez más extensa del sistema deseguridad social que permite a un mayor porcentaje de trabajadoresretirarse de la vida de actividad, de acuerdo con las disposicio-nes legales vigentes en el país. En cambio, en las edades medias,de los 20 a los 64 años, donde se dan las tasas máximas de activi-dad, las variaciones en el tiempo son menos notables; sólo se des-taca el importante aumento de la participación de la mujer, queincluso se deja sentir en todas las edades, durante la década del60, lo cual puede producirse, entre otras razones, por el aumentodel nivel educativo de la mujer, que, en términos relativos, hallegado a superar al de los varones y a la probable mayor ofertade trabajo para este sector de la población.

- 95 -

(Tosas)lOOr

90

80

70

60

50-

40

30

2 0 -

10

Gráfico 8

PANAMA. TASAS DE ACTIVIDAD POR SEXO Y EDAD:CENSOS 1950, 1960, 1970

(Por c ien h a b i t a n t e s )

HOMBRES

1950I9601970

MUJERES

O 5 10 15 20 23 30 35 40 45 50 55 60 65 y mo»(Edad)

- 96 -

El análisis comparativo de la participación económica de hom-bres y mujeres en el total de la República con la de las localida-des urbanas, revela los siguientes hechos: las tasas de participa-ción de los varones en las áreas urbanas son inferiores, en todaslas edades, a las de los hombres del campo, lo que obviamente esmás notable en las edades marginales. Mientras en las ciudadestrabajan tres de cada cien niños de 10-14 años y un 43 por cientode 15-19, en el total del país esta relación es del 12 y el 61 porciento, respectivamente. En el grupo mayor de 65 años el contrastees del 35 por ciento en el área urbana contra un 53 por ciento enel total del país.

Respecto al sexo femenino, la situación es diametralmenteopuesta, con excepción del grupo menor de 15 años. En todas las demás edades, las tasas de participación femenina del sector urbanoson superiores a las del total de la República, dando lugar a dife-rencias bastante importantes en las edades de mayor actividad, esdecir, de los 20 a los 50 años. Por ejemplo, en el grupo 20-24,donde la tasa femenina alcanza su máximo valor, en las ciudades trabajan 56 mujeres por cada 100, mientras que en el total del paísesta tasa es de un 40 por ciento.

Cuadro 41

PANAMA. TASAS DE ACTIVIDAD, POR SEXO Y EDAD, EN LA REPÚBLICA YAREAS URBANO-RURAL: CENSO DE 1970

Grupos de edades

República

Hom-bres

Mujj!res

Urbana

Hom-bres

TOTAL.

10 - 1415 - 1920 - 2425 - 2930 - 34 ,35 - 39 ,40 - 4445 - 4950 - 5455 - 59 ,60 - 6465 y más

72.9 25.8

11.60.93.496,9797.496.996.193.689.677.253.4

5.430.640.335.632.931.831.29.25.20.14.

67.6

3.242.689.995.796.596.495.994.91.85.65.

7.9 35.2

36.5

4.836.956.052.48.48.46.42.36.428.620.19.8

Fuente: Censos Nacionales de 1970 (Dirección de Estadísticay Censo, Panamá).

- 97 -

b) Nivel de desocupación:

Al considerar como desocupadas a las personas que a la fe-cha del censo (1950 y 1960) y en la semana anterior al releva-miento censal (1970), se encontraban buscando trabajo, ya seaque hubieran trabajado antes o que desearan ejercer una actividad por primera vez, se aprecia cómo la importancia relativa "áela mano de obra desocupada aumentó de 9 a 11 por ciento entre1950 y 1960 hasta lograr una leve recuperación en los últimos10 años, al registrarse como desocupados en 1970, un poco menosdel 10 por ciento de la población económicamente activa.

No obstante, al igual que en los censos anteriores, al ha-cer el desglose por sexo, de la mano de obra desocupada, el por-centaje de mujeres desempleadas y que buscan una actividad es eldoble del índice que se da para los varones 16.5 por ciento y7.3 por ciento, respectivamente.

Cuadro 42

PANAMA. POBLACIÓN DESOCUPADA EN LA POBLACIÓN ECONÓMICAMENTE ACTIVA,POR SEXO Y GRUPOS DE EDADES: CENSO DE 1970

Grupos de edades

TOTAL

10 - 1415 - 1920 - 2425 - 2930 - 3435 - 3940 - 4445 - 4950 y más

Hombres

Número

26,620

1,0027,1666,1972,9681,8891,5101,2561,2293,403

Porcentajerespectoa la población económicamentéactiva

7.3

9.516.410.66.04.64.14.14.65.1

Mujeres

Número

20,669

9706,3725,6942,6691,3701,025786644

1,139

Porcentajerespectoa la población econSmicamenteactiva

16.5

21.628.722.414.810.29.08.68.78.5

Fuente: Censos Nacionalesñama).

de 1970 (Dirección de Estadística y Censo, Pa

Finalmente, al analizar el índice de la desocupación a travésde la estructura por edad, se aprecia que ésta adquiere su máximonivel en el tramo de los 15-19 años, tanto en hombres como en muj£res y no deja de ser importante en los menores de 15 aflos, particu-larmente entre las mujeres. Estos altos niveles de desocupación a

- 98 -

edades tan tempranas, nos están señalando dos hechos: en primer lugar, la presión que sufre la oferta de mano de obra con las gradua-ciones anuales de los jóvenes de secundaria, que suelen terminarsus estudios medios alrededor de los 18 y los 19 años y, por otrolado, a la importante mano de obra no calificada que se debe dar enestas edades, lo cual es motivo de obstáculo para el logro de un empleo, premisa que se aplica especialmente a las mujeres menores de15 años.

Después de los 20 años, la proporción de desocupados siguesiendo superior al 5 por ciento hasta los 30 años de edad para losvarones y al 10 por ciento hasta los 35 años, para las mujeres.

c) Características económicas de la población:(Ramas de Actividad)

Históricamente, los cambios más significativos, en lo queatañe a las ocupaciones por rama de actividad, se han producidodesde el sector primario (especialmente en la agricultura) endirección al sector secundario de la economía (industria manu-facturera, construcción, producción de electricidad, etc.) y fjtnalmente estos cambios han repercutido en el desarrollo del tercer sector, que integran los servicios de diversa índole, talescomo el comercio, los transportes, etc.

Estos cambios han sido motivados, en gran medida, por laintroducción de nuevas técnicas en el proceso de producción queha alcanzado altos niveles de desarrollo en el sector indus,trial, haciéndolo atractivo a la mano de obra que busca mejorarsus ingresos y beneficios sociales. En cuanto a la agricultura,problemas relacionados con la tenencia de la tierra y limitaciones de acceso a los implementos que permiten aumentar su productividad, han dado lugar a que cada vez más este sector se con-vierta en área de éxodo, dando lugar a una disminución de la población dedicada a estas actividades. "~

A pesar de algunas diferencias introducidas en la clasifi-cación de ramas de actividad, en Panamá se puede apreciar cómoha venido evolucionando esta característica desde 1950, cuandoel sector primario comprendía el 51 por ciento de la poblacióneconómicamente activa del país, para bajar al 47 por ciento en1960 y al 40 por ciento en 1970.

En relación al sector secundario, éste ha cambiado muy poco en la década del 50, pasando del 12.4 por ciento en 1950 a~concentrar el 12.7 por ciento de la población activa en 1960.En cambio, en los últimos diez años su incremento ha sido ma-yor, llegando a tener el 15 por ciento de la población económicamente activa. ~~

En cambio, el sector terciario ha evolucionado de un 28por ciento en 1950 a un 34 por ciento en 1960 hasta alcanzarel 40 por ciento de la población económicamente activa en 1970.No obstante, a pesar de su importante magnitud, en este últimogrupo hay que tener muy presente la importancia relativa que

- 99 -

representan las empleadas domésticas, actividad de baja renta-bilidad, las cuales constituyen el 27 por ciento de las mujereseconómicamente activas.

En el cuadro que se presenta a continuación, se puede apreciar cómo se distribuye la población económicamente activa, porsexo, de acuerdo con las tres grandes ramas de la actividad económica, y su comparación entre las áreas urbana y rural delpaís.

Cabe resaltar que, en el total del país, los varones dedi-cados a la actividad agrícola suman el 50 por ciento. "Si seacepta que el grado de desarrollo económico de un país está enrelación inversa con la importancia relativa de la poblacióneconómicamente activa ocupada en la agricultura" (23), Panamáquedarla calificado como un país "semidesarrollado", porque supoblación masculina agrícola queda dentro de los límites del 30y el 59 por ciento dedicado a actividades extractivas.

Cuadro 43

PANAMA. DISTRIBUCIÓN DE LA POBLACIÓN ECONÓMICAMENTE ACTIVA,POR SEXO Y AREA, SEGÚN GRANDES SECTORES DE LAS

ACTIVIDADES ECONÓMICAS: CENSO DE 1970

(Porcentaje)

Sectores de actividad

TOTAL

Primario alSecundario" b/Terciario ¿JZona del Canal de PanamáActividades no especifi-

cadas

República

Hom-bres

100.0

50.416.327.74.9

0.7

Muje_reu

100.0

7.711.676.03.7

1.0

Urbano

Hom-bres

100.0

9.227.851.410.3

1.3

Mujeres

100.0

0.710.782.84.6

1.2

Rural

Hom-bres

100.0

81.77.79.60.8

0.2

100.0

29.114.455.01.1

0.4

NOTA: Excluye los trabajadores nuevos.a/ Agricultura, caza, silvicultura y pesca.b/ Explotación de minas y canteras; Industrias Manufactureras; Cons"" trucción; Electricidad, gas y agua. ~c/ Comercio al por mayor, menor, restaurantes y hoteles; Transportes,~ almacenamiento y comunicaciones; Servicios personales y Otros Ser

vicios.Fuente: Censos Nacionales de 1970 (Dirección de Estadística y Censo, Pa-

namá ) ,

- 100 -

IV. DISTRIBUCIÓN ESPACIAL DE LA POBLACIÓN Y MIGRACIÓN INTERNA

a) Distribución espacial y urbanización:

Como complemento a la información suministrada en el punto(c) del capítulo I, relativa a la evolución de la población ur-bano-rural, área metropolitana y ciudades principales del país,a continuación se analizará una información más completa sobrela distribución geográfica de los habitantes del istmo, hacien-do referencia a las posibles causas y consecuencias de esta sj.tuación, que se produce a través de los movimientos internos dela población.

Para tal fin, se hará uso de los datos relativos a la distribución del número de localidades (lugares poblados) y de lapoblación, de acuerdo con la magnitud del lugar poblado, loscuales son sintetizados en el cuadro que se presenta a continuación.

Cuadro 44

PANAMA. DISTRIBUCIÓN DE LAS LOCALIDADES Y LA POBLACIÓN DE ACUERDO CONLA MAGNITUD DEL LUGAR POBLADO: CENSOS DE 1950 A 1970

( P o r c e n t a j e )

Magnitud del lugarpoblado

TOTAL

50 - 99100 - 499500 - 999

1,000 - 4,999

5,000 - 9,999

10,000 - 24,999

25,000 - 99,999

100,000 y más

1950

Localidades

100.0

" 61.618.018.01.50.8(52)0.1(5)0.0(2)0.0

(1)0.0(1)

Población

100.0

10.410.428.98.4

12.4

4.0

3.1

6.5

15.9

1960

Localidades

100.0

66.015.616.21.40.7(61)0.1(4)0.0(3)0.0

(1)0.0(1)

Población

100.0

9.88.825.77.89.8

2.8

4.4

5.5

25.4

1970

Local_idades

100.0

63.316.417.22.01.0(88)0.1(6)0.0(3)0.0(4)0.0

(1)

Población

100.0

7.77.6

22.48.7

11.2

2.8

2.7

12.4

24.5

Nota: La cifra en paréntesis indica el número de localidades, para la magnitud del lugar poblado señalado.

Fuente:- Censos Nacionales de 1970 - Vol. I "Lugares poblados de la Repú-bl ica (Dirección de Estadística y Censo, Panamá, 1972).

- 101 -

Por un lado, vemos cómo han proliferado las localidades con menos de 50 habitantes, que siempre han constituido más del 60 porciento de los núcleos poblados del pals y donde se encuentra viviendoalrededor del 10 por ciento de la población total del istmo. Sóloen la década del 60 se nota un leve freno en esta tendencia de dis-persión demográfica, que es de esperar se acentúe en los aflos futu-ros.

Si consideramos ahora a las localidades de menos de 500 habi-tantes, que siguen aún siendo centros muy pequeños de población,la situación de la dispersión demográfica reviste caracteres aúnmás dramáticos, cuando apreciamos que el 98 por ciento de las localidades del país no pasa de este tamaño, y que absorben la mi-tad de la población del istmo, en 1950. No obstante, a través delos 20 años transcurridos hasta 1970, se deja sentir una tenden-cia lenta pero sostenida, hacia la concentración de la poblaciónen localidades más grandes, al descender esta proporción al 38 porciento en 1970. í

Sin embargo, esta concentración de la población no se ha pro-ducido precisamente en las ciudades de mediano tamaño (500 a 25,000habitantes), ya que a pesar de haber proliferado numerosas locali-dades dentro de estos limites, la población que habita en las mismasha descendido del 28 por ciento en 1950 al 25 por ciento en 1970.

Vale decir que, más bien, la concentración de la población aque hicimos referencia anteriormente se ha volcado en las ciudadesde 25,000 habitantes y más, que tenían el 22 por ciento de la población total del país en 1950, elevándose esta cifra al 37 por cien-to en 1970 entre las cuales sobresale la capital (grupo de 100,000habitantes y más). Mientras en 1950 vivían en esta ciudad 16 de cada 100 personas del territorio nacional, actualmente habitan en ellauna de cada 4 personas que residen en el país.

Como se dijo anteriormente la forma de asentamiento de la po-blación istmeña debe estar motivada por factores de diversa índole,entre los que pueden ocupar un papel preponderante, en lo que res-pecta a la concentración de la población en pocas ciudades, los detipo económico y cultural. La búsqueda de una fuente de trabajo yel logro de una educación más completa, mueven a numerosos paname-ños a trasladarse, a diario, a ciudades donde esperan tener accesoa estos beneficios, en particular, hacia la ciudad de Panamá.

En el otro extremo, el exorbitante número de pequeñas localidades insinúa la importancia que en este fenómeno puedan tener losproblemas vinculados con la tenencia y forma de cultivo de la tie-rra, que convierte al campesino en un migrante permanente, en busqueda de tierras cultivables, lo que insinúa la necesidad, de unasistematización, orientación y organización del sector agrario dela economía, más a tono con la realidad nacional, para que este problema pueda superarse en nuestro país.

La consecuencia lógica de este fenómeno es que, mientras en lapoblación dispersa se dificulta la elevación del nivel de vida delos habitantes, ya que resulta sumamente oneroso y, lo que es aún

- 102 -

más importante, poco factible, poner al alcance de estas comunida-des los elementos básicos de dicho cambio, como son la educación,la asistencia médica, los medios de comunicación, la organizacióndel trabajo, etc., en el otro extremo, que caracteriza la concentración de la población en pocas localidades, se hace cada día más di-fícil proveer a los nuevos pobladores de los elementos vitales queexige una vida decorosa: acceso pleno a los colegios y a las fuen-tes de trabajo, vivienda higiénica, servicios de agua potable, luzy alcantarillado, transporte, etc.

Cuadro 45

PANAMA. DISTRIBUCIÓN DE LAS LOCALIDADES Y POBLACIÓN URBANADE LA REPÚBLICA: CENSOS DE 1950 A 1970

(Porcentaje)

Año

X950 '.

I960

1970

Numero delocalidades

19

22

33

(En

Población

Número

289697

446213

679446

Porcentajedel total

36.0

41.5

47.6

20 años)

Porcentaje decrecimiento

54.0

52.3

. 134.5

Fuente:- Censos Nacionales de 1970 - Censos Nacionales de 1960 - "Vol. IVCaracterísticas Generales" (Dirección de Estadística y Censo, Panamá).

Aunque a través de los años hemos visto aumentar, en forma sostenida, nuestra población urbana, lo cual habla de una serie de be-neficios de índole socio-económico para la población que llega a formar parte de.la misma, sin embargo, tenemos que lamentar que un por-centaje importante de las personas que habitan las localidades defi-nidas como tales, vivan en condiciones materiales quizás más preca-rias que las que dejaron en el campo o localidad más pequeña que ha-bitaban anteriormente.

En el cuadro precedente, se destaca cómo la importancia relativade esta población ha variado del 36 por ciento en 1950 al 48 por ciento en 1970, habiéndose más que duplicado en los últimos 20 años. Es-te crecimiento acelerado de la población urbana es un factor que de-be tenerse muy presente en las proyecciones futuras de las ciudades,

. en cuanto a los planes de expansión de servicios. Los cambios estruçturales que se introduzcan en ciudades como Panamá y La Chorrera ,quese ven afectadas por fuertes corrientes de inmigrantes, deben ser previstos para satisfacer necesidades a largo plazo. Además de hacersenecesario la creación de incentivos en otras áreas del país, que peí:mitán frenar la presión demográfica en pocas localidades del terri-torio nacional.

- 103 -

b) Migración Interna;

La importancia que tienen en el crecimiento global de la poblaciön los factores relativos a la fecundidad y la mortalidad,han sido estudiados ampliamente en el capitulo I de este documento. A continuación nos vamos a referir a los movimientos inter_nos de población, por el papel trascendental que juegan no sóloen la determinación del volumen sino de la estructura demográfi-ca y socio-económica de los habitantes del istmo, según el áreao división política administrativa donde residen.

No se pretende en este comentario establecer las causalesni las consecuencias de tales movimientos, ya que no existen es_tudios que permitan obtener tales informaciones, en el caso denuestro pais. No obstante, los censos nacionales de población,en particular el de 1970, han hecho factible el cálculo de alguñas medidas sobre la intensidad de este fenómeno y sus líneasde procedencia y destino, así como el conocimiento de algunasde sus características más sobresalientes.

Como es sabido, los cambios de residencia de la poblacióndentro de un país responden, más que cualquier otro de los fa£tores dinámicos de la población, a la estructura socio-económica que opera en las diversas regiones de un país, dando lugaral surgimiento de sectores de atracción mientras que otros seconvierten en áreas de rechazo. El análisis que se hizo an-teriormente sobre la forma de asentamiento de la población panameña no es más que la consecuencia del movimiento migratorioque se ha dado dentro del país en las últimas décadas, en res-puesta a las condiciones estructurales a las cuales se hizo alusión.

Se hace necesario destacar que este es un fenómeno que puede resultar muy positivo en el desarrollo de un país, siempre ycuando sea orientado adecuadamente y por el contrario, puede serun factor restrictivo. En cierta forma, en Panamá se han dadolas dos situaciones, pero la última se ha dejado sentir con mayor fuerza, en la dispersión creciente de un importante porcen-taje de nuestra población campesina y en la presión demográficaque se ejerce en escasas localidades del país.

Generalmente, el tema se ha abordado presentando la situa-ción entre los sectores ciudad y campo i por ser el movimientointerno de población de mayor significación. Las cifras han si-do elocuentes al destacar una fuerte corriente migratoria proce-dente de todas las regiones del país, cuyo destino principal hasido la capital del istmo y su área metropolitana. No obstante,en esta ocasión se destacará más bien la importancia de tales movimientos entre las nueve provincias en que está dividido el país(primera división administrativa), por ser las células a base delas cuales suelen plantearse los programas de desarrollo de la nación.

- 104 -

D I S T R I B U C I Ó N G E O G R Á F I C A D E P O B L A C I Ó N » A N O 1 9 7 0

C E N T R O S U R B A N O S

10.000-14,999 »

B.OOO- 9.999 ..

1,000-4.999

CADA PUNTO EQUIVALE A 100 HABITANTES

Un análisis de la población nacida en otra provincia distinta a la del empadronamiento o residencia en 1960 y 1970, destacauna proporción importante de personas que abandonaron su provinciade nacimiento en algún momento de su vida. La información obtenida para 1970 es más apropiada para dicho análisis, ya que se establece la relación con la provincia de residencia al momento delcenso, excluyéndose en esta forma a aquellas personas que estaban"de paso" en la localidad donde fueron empadronadas.

En 1970, más de 255,000 personas declararon haber nacido enuna provincia distinta a la de residencia a la fecha del censo.El análisis provincial señala, en primer lugar, a la provincia dePanamá, sede de la capital del país, donde, aproximadamente, unade cada tres personas no habla nacido en ella. Le siguen en impo£tancia relativa: Bocas del Toro y Colón, con un quinto de población migrante al área.

Cuadro 46

PANAMA. PORCENTAJE DE LA POBLACIÓN NACIDA EN OTRA PROVINCIA DISTINTA A LADE EMPADRONAMIENTO 0 RESIDENCIA: CENSOS 1960 Y 1970

(Pob lac ión nacida en l a Repúb l i ca )

P r o v i n c i a a/

1960 b/

Empadronados

Nacidos enotra provincia

NúmeroPorcentaje

1970

Residentes

Nacidos enotra provincia

NúmeroPorceritaje

TOTAL

Bocas del Toro..

Coclé

Colón

Chiriqul

Darién

Herrera

Los Santos

Panamá

Veraguas

968,619

17,141

92,628

74,983

165,880

11,508

61,426

70,423

346,567

128,063

149,586 15.4

17.8

7.5

22.1

3.5

12.1

6.5

3.4

29.6

5.4

1,378,804

41,774

117,644

125,511

234,029

19,368

72,484

' 72,710

543,220

152,064

255,539

8,777

11,919

24,395

8,491

2,957

7,507

5,343

175,321

10,829

18.5

21.0

10.1

19.4

3.6

15.3

10.4

7.3

32.3

7.1

a_/ De empadronamiento en 1960 y de residencia en 1970.

b/ Excluye la población indígena.

Fuente:- Censos Nacionales de 1960 y 1970 (Dirección de Estadística y Censo,Panamá).

- 107 -

La medida de la migración interna obtenida a través del por-centaje de personas nacidas en otras áreas, sólo da una idea delefecto acumulativo de los movimientos de población a una fechadeterminada (la del censo). Para poder apreciar realmente la intensidad de este fenómeno a través del tiempo nos referiremos alnúmero de personas que cambiaron su residencia en los cinco añosanteriores al censo de 1970.

Cuadro 47

PANAMA. MIGRANTES IHTERPHOVINCIALES, SEGÚN PROVINCIA DE RESIDENCIA EN 1965 T 1970: CENSO DE 1970

Res idenc ia en 1965

Bex

Cof.hDaHe

Fa

mi d e l Toro

r l q u l

ama

Boca»

Toro

6423,699

3198

723

191720 ?435

_ 29725

2,529

531604

[l03,8O6|

165309

3.&O9

ResldencU en 1970

qui"

SOI287271

123

2,466558

41940

281

581

15294

68173

¡58,0911

1,117563

Santo«

1739571Î7

540

287

1,2498,6145,9729,7694,0064,533

{421,1141

10,771

gua»

95447171660

44687

11 ¡1-316|

Total

1

1

11

a

Î.7403,711

,694,570,424,896

,31S,207

,760

NOTA: La población en loa cuadrantes fuá la que no migra en los ú l t lnos c inco atloa (1965-1970).

Fuente: Censo Naclonel de Población de 1970 (Dirección de Eetadietlca y Censo, Panamá).

En el cuadro que antecede se puede apreciar, con suma claridad, el número de personas que declararon residir en cada provincia en el año 1965 y no haber migrado (cifras encerradas en loscuadrantes) y aquéllas que salieron de la provincia en cualquierfecha del periodo 1965-70 (cifras en líneas horizontales) asícomo las que llegaron a dicha provincia dentro del mismo perío-do (columnas verticales). De manera que en la última columnadel cuadro aludido se suma el total de las personas que emigra-ron de la provincia donde residían en 1965 y en la última líneahorizontal se suma el total de las personas que llegaron a laprovincia que declararon como residencia en 1970.

Obviamente, Panamá fue la provincia que recibió la mayorcantidad de inmigrantes durante el período (52,000), lo queda un promedio de entrada a la provincia de 10,500 personas,anualmente. Le siguen a gran distancia, en cuanto a volumen,las provincias de Colón y Bocas del Toro, con 6,900 y 5,500 inmigrantes, respectivamente. Para el resto de las provincias,la entrada de personas en los últimos cinco años fue inferiora 5,000.

- 108 -

Se estima que en los movimientos internos de población influye notablemente la cercanía territorial, la existencia devías de comunicación adecuadas, el tipo de actividad que sedesarrolla en el área, las oportunidades de empleo, las fuer-zas que impulsan al éxodo desde el lugar de origen, en fin, unsinnúmero de factores que no podemos precisar en el caso de Panamá, pero que, sin embargo, podemos intuir en algunos casos.

En la provincia de Panamá, se observa que no sólo ejercesu atracción sobre los sectores que se unen fácilmente a laurbe por la carretera nacional, sino que son también de impor_tancia aquellos factores íntimamente vinculados al desarrollo,los cuales determinan que sean los procedentes" de Veraguaslos principales inmigrantes a esta provincia, siguiéndole enorden de importancia: Chiriquí, Codé y Los Santos. En cam-bio, en Bocas del Toro, más de la mitad de los inmigrantes proceden de Chiriquí, provincia vecina, caso semejante al de Co-lón, donde la mitad de las personas que llegan son de la Provincía de Panamá.

El cuadro que nos da una mejor información del volumen eimportancia relativa de los movimientos de población y saldo migratorio producido en los cinco años anteriores al censo, es elque se presenta a continuación.

Cuadro 48

PANAMA. IMPORTANCIA RELATIVA DE LA MIGRACIÓN INTERPROVINCIAL, Y SALDOMIGRATORIO, POR PROVINCIA, ENTRE 1965 Y 1970: CENSO 1970

Provincia

Bocas delToro....

CocléColónChiriquí..Darién....Herrera...Los SantosPanamá....Veraguas..

TOTAL..

Inmigrantes

Total deresiden-

(1)

35,48096,128110,700193,75317,44061,22762,357

473,476125,810

1,176,371

Inmigraron

Número

(2)

5,4994,9216,8944,7361,2093,1362,70952,1624,494

85,760

Por-cen-taje

(3)

15.55.16.22.46.95.14.311.03.6

7.3

Emigrantes

Total deresiden-

tes en1965

(4)

32,721101,918111,500204,58720,65564,98768,851

435,629135,523

1,176,371

Emigraron

Número

(5)

2,74010,7117,69415,5704,4246,8969,203

14,31514,207

85,760

Por-cen-taje

(6)

8.410.56.97.6

21.410.613.43.310.5

7.3

Saldomigratorio(2) - (5)

(7)

(+) 2,759(-) 5,790(-) 800(-) 10,834(-) 3,215(-) 3,760(-) 6,494(+) 37,847(-) 9,713

0

Fuente:- Censo Nacional de Población de 1970 (Dirección de Estadística yCenso, Panamá).

- 109 -

Donde se destaca la intensidad de los movimientos de poblaciön dentro del territorio nacional a fin de señalar la importancia relativa que tienen los mismos en las localidades que dan oreciben migrantes. De acuerdo con este criterio, ocupan los pri.meros lugares en cuanto al recibo de migrantes, en orden de im-portancia, las provincias de Bocas del Toro, Panamá, Colón y D¿rién. En 1970, por cada 100 personas residentes en Bocas del Toro, 16 procedían de otras provincias y en Panamá esta misma re-lación era del 11 por ciento.

Respecto al movimiento de salida o pérdida de habitantes,destacan, en orden de importancia: Darién, Los Santos y, ocu-pando el tercer lugar, tres provincias: Herrera, Veraguas yCoclé. En el caso de Darién, el 21 por ciento de las personasque residían en 1965 abandonaron la provincia en el transcursode cinco años.

A pesar de que la totalidad de las provincias han tenido unaimportante participación en este proceso de intercambio, el sal-do migratorio resultante señala que los movimientos provincialesde población sólo favorecieron el aumento demográfico de la pro-vincia de Panamá y muy alejadamente, Bocas del Toro. El restode las provincias perdió población durante los cinco años de e_studio. , ~

A continuación se da a conocer, en términos generales, al-gunas de las características de las 63,000 personas de 15 añosy más de edad que cambiaron su provincia de residencia entre1965 y 1970. Obviamente, estas características son las quetenían las personas al momento del censo.

Respecto al estado civil, el 45 por ciento eran solteros eigual porcentaje declaró estar casado o unido. Casi la mitad d_ijo no tener educación o haber cursado la primaria incompleta; untercio habla terminado su educación elemental y el 26 por cien-to restante había cursado algún año de secundaria o universita-ria. Con relación a la actividad económica, dos tercios se de-clararon económicamente activos.

En relación a las características puramente demográficas,sexo y edad, el índice de masculinidad global fue de 105 hom-bres por cada 100 mujeres y en cuanto a la estructura por edad,alrededor del 75 por ciento tenía entre 15 y 34 años de edad,destacándose el grupo de 15 a 24, que concentraba el 56 porciento de los migrantes mujeres y el 44 por ciento de los mi-grantes varones.

- 110 -

V. PROYECCIONES FUTURAS (9)

a) Metodología:

Las estimaciones de población que se presentan a continua-ción desde 1960 hasta el año 2000 son la consecuencia de un analisis individual de los factores que determinan el crecimientoy la estructura etaria de la población del pals, es decir, losnacimientos, las defunciones y el movimiento migratorio inter-nacional.

Previamente se realizó una evaluación de los datos básicosdisponibles, entre los cuales se incluyen, además de los facto-res antes aludidos, las cifras de población por sexo y edad delúltimo censo nacional de población de 1970. Se procuró conci-liar los censos de 1960 y 1970 con los registros de nacimientosy defunciones, y la migración internacional estimada para el ûltimo periodo intercensal. ""

En la proyección de población de la República de Panamáhasta el año 2000, de acuerdo con la tercera hipótesis adoptada,se continúa la tendencia histórica de la fecundidad observadaentre los años 1962 y 1970, que.se caracteriza por marcar un leve descenso en el nivel de la misma. En este sentido, cabe reTsaltar que el aumento sostenido del nivel educativo de la mujerpanameña mantiene una relación inversa con.la fecundidad; el aumentó en el uso de medidas tendientes a regular el número de ni"cimientos y otros factores asociados con el proceso de moderni-zación dan firme apoyo a la hipótesis de descenso de la fecundidad formulada para los próximos años. ""

Respecto a la mortalidad, se aplica una hipótesis única dedescenso, la cual frena, en cierta medida, la tendencia decre-ciente de las muertes en los últimos 20 años. Este comporta-miento es esperado cuando la población logra alcanzar un nivelgeneral de mortalidad, relativamente bajo, como es el caso dePanamá.

Finalmente, el saldo migratorio internacional que se esta-bleció para el período 1960-1970, se mantiene constante en losaños de la proyección, al considerar más razonable que el nivelreciente se mantenga, a suponer que va a cambiar, sin tener losdatos básicos suficientes que permitan establecer una buenaaproximación de su tendencia futura.

1. Fecundidad:

Se comienza por conocer el grado de caballdad en el registro de los nacimientos ocurridos durante los años I960-""1964, utilizando la población de 5-9 años censada en 1970,que suele presentar la mejor enumeración en el censo. Enesta forma, se consigue estimar un número de nacimientossensiblemente igual a los registrados, ocurridos durantelos años 1960-1964, dando lugar a un porcentaje de omisióninsignificante: el TI». Por lo tanto, los nacimientos que

- 111 -

sirven de base a la estimación de los niveles de la fecun-didad en la década del 60, no se corrigen.

De esta manera, los nacimientos registrados que ocu-rrieron entre los años 1957 y 1970, sin corregir, clasifi-cados según la edad de las madres, fueron relacionados conla población femenina en edad fértil (15-49 años) estimadaal lo. de julio de cada año, de acuerdo a los censos de1960 y 1970 también sin corregir, lo cual permitió calcularlas tasas de fecundidad por edad de la madre (nfx) y la ta-sa bruta de reproducción (R1), para los años en referencia.Los resultados permiten apreciar, con bastante claridad,una leve pero sostenida tendencia al descenso de la fecun-didad, particularmente a partir de 1962. Antes de esa fe-cha, el aumento que se aprecia fue motivado por un mejora-miento sostenido en el registro de estos hechos, más que aun aumento real de la fecundidad.

No obstante, que las tasas de fecundidad fueron calcu-ladas usando la población censada sin corregir, para hacer-las compatibles con la población inicial de las estimacio-nes, la cual fue corregida en su cobertura y estructura, como se verá más adelante, los nacimientos registrados en ~~1970 se relacionaron con la población femenina en edad fér-til del censo de 1970, corregida y llevada al lo. de julio.Esta segunda relación dio lugar al cálculo de nuevas tasasde fecundidad para el año 1970, elevándose la tasa bruta dereproducción (R1) de 2.48 a 2.53.

Finalmente, para los quinquenios de la proyección, seadoptó la tercera hipótesis del comportamiento futuro dela fecundidad, que establece que las tasas (nfx) descende-rán en igual forma que entre 1962 y 1970, es decir, que latendencia histórica se proyectara en el futuro, alcanzandoen el año 2000 una tasa bruta de reproducción (R1) de 1.78.

El estudio del cual se ha extractado el contenido deesta publicación analiza las siguientes cuatro hipótesisestablecidas sobre el nivel de la tendencia futura de lafecundidad:

Hipótesis:

1. Las tasas de fecundidad determinadas para el año 1970se mantendrán constantes hasta el año 2000, con unatasa bruta de reproducción (R1) de 2.53.

2. Las tasas de fecundidad descenderán más lentamenteque la tendencia histórica, alcanzando una tasa bru-ta de reproducción en el año 2000 (R1) de 2.22.

3. Las tasas de fecundidad descenderán en igual formaque entre 1962 y 1970, o sea, que la tendencia histó-rica se proyectará en el futuro, alcanzando en el año2000 una tasa bruta de reproducción (R1) de 1.78.

- 112 -

4. Finalmente, la cuarta hipótesis indica que las tasasde fecundidad descenderán más rápidamente que la ten-dencia histórica, alcanzando en el año 2000 una tasabruta de reproducción (R1) de 1.23.

Cuadro 49

PANAMA. TASAS DE FECUNDIDAD CALCULADAS PARA LOS QUINQUENIOS DEPROYECCIÓN: 1970-1975 A 1995-2000

Grupos de edades1970 a 1975 a 1980 a 1985 a 1990 a 1995

1975 1980 1985 1990 1995 2000

Hipótesis 1. R1 constante hasta el año 2000-2.53

15 - 19.20 - 24.25 - 29.30 - 34.35 - 39.40 - 44.45 - 49.

R1

Hipótesis 2. R' en 2000=2.22

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

2-53

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

2.53

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

2-53

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

2.53

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

2.53

15 - 19.20 - 24.25 - 29.30 - 34.35 - 39.40 - 44.45 - 49.

15 - 19.20 - 24.25 - 29.30 - 34.35 - 39.40 - 44.45 - 49.

152025303540

- 19.- 24.- 29.- 34.- 39.- 44.

45 - 49.

0.1330.2860.2510.1900.1160.0430.008

2.51

0.1280.2810.2470.1860.1130.0420.008

2.45

0.1230.2750.2430.1820.1110.0410.008

2.40

0.1180.2700.2380.1790.1090.0400.008

2.35

0.1130.2650.2340.1750.1060.0390.007

2.29

Hipótesis 3. R1 en 2000-1.78

Hipótesis 4. R1 en 2000=1.23

R".

0.1320.2790.2470.1880.1140.0430.008

2.47

0.1250.2640.2340.1790.1090.0410.008

2.34

0.1180.2480.2230.1710.1040.0380.008

2.22

0.1110.2320.2110.1620.0990.0360.007

2.09

0.1040.2160.1990.1530.0940.0340.007

1.97

0000000

.125

.277

.245

.184

.112

.042

.008

2.42

0 .0 .0 .0 .0 .0 .0 .

2

106255227168102038007

. 2 0

0.0870.2340.2110.1520.0920.0350.005

1.99

0000000

.068

.212

.193

.136

.082

.032

.004

1.77

0.0490.1900.1770.1200.0720.0280.003

1.56-

0.13550.28790.25290.19200.11700.04370.0087

0.1080.2600.2300.1710.1040.0380.007

0.0970.2010.1870.1440.0890.0310.006

1.84

0.0290.1680.1590.1040.0620.0250.002

1.34

- 113 -

fi <»

rr

- 114 -

2. Mortalidad:

Coa relación a las muertes, el análisis realizado ba-sándose en la población por sexo y edad censada en 1960 y1970 llevo a determinar un porcentaje de omisión en el re-gistro de las muertes del período, que se considero muyelevado, al comparar estos resultados con evaluaciones he-chas para este factor en la década del 50. Por tal moti-vo, se decidió revisar uno de los supuestos del método"ausencia de movimientos migratorios internacionales", afin de llegar a la determinación de un nivel de omisión delas muertes en la década del 60, acorde con la tendenciahistórica.

Con tal fin, se elaboraron tablas abreviadas de vida,para hombres y mujeres, alrededor de 1950, 1960 y 1970, asícomo para el período 1950-1960 y se compararon con tablaselaboradas anteriormente para estos mismos momentos; llegandose finalmente a advertir un porcentaje de omisión en el ~~registro de las muertes de 18.97« en 1960 y de 7.5% en 1970,concentrándose la mayor parte de las correcciones en lasmuertes de personas de 5 años y más de edad.

Una vez obtenidas las tablas de vida "plausibles" paralos años 1960 y 1970, y a fin de facilitar la proyección dela mortalidad futura, se las suavizó mediante el uso delSistema Logito ideado por William Brass (24).

Para estimar tablas de vida que representen la morta-lidad que podría experimentar Panamá durante el período1970-2000, se procedió entonces a determinar una tabla devida para el año 2000, por sexo, que cumpliera las siguien-tes condiciones:

a. Implicar naturalmente una mortalidad inferior a la estimada para Panamá en el decenio 1960-1970, de forma que~la esperanza de vida aumentara anualmente un promediode años como el que han experimentado países que haceunos 30 años estaban en las condiciones de mortalidadque tenía Panamá alrededor de 1965.

b. Implicar una mortalidad superior a la que reflejan lastablas de vida elaboradas por Bourgeois-Pichat, como 11mites de mortalidad (25). ~

c. Imponer una mortalidad femenina, en todas las edades yperiodos, inferior a la mortalidad masculina.

La hipótesis de evolución de la mortalidad para elaño 2000, obtenida de acuerdo con los supuestos antes enunciados, implica una ganancia media anual de 0.25 años de ""esperanza de vida para las mujeres y de 0.24 para los hom-bres, durante los 30 años de la proyección. A continuación

- 115 -

se presenta, además, en los gráficos 11 y 12, las repercu-siones que estos descensos en la esperanza de vida al nacertienen en las probabilidades de muerte ( q ) de los años deproyección.

Cuadro 50. PANAMA. NIVELES DE MORTALIDAD ESTIMADOS (ESPERANZA DE VIDA ALNACER) Y GANANCIA PROMEDIO DE VIDA ANUAL, POR SEXO:

QUINQUENIOS 1960-1965 A 1995-2000

Quinquenio

1950 - 1960

I960

1970

2000

1960 - 1965

1965 . 1970

1970 - 1975

1975 - 1980

1980 - 1985

1985 - 1990

1990 - 1995

1995 - 2000

Esperanzaal nacer

Hombres

58.54

60.47

64.26

71.38

61.46

63.35

64.95

66.29

67.55

68.73

69.84

70.88

de vida(aSos)

Mujeres

61.24

63.37

67.50

74.40

64.45

66.52

68.19

69.51

70.74

71.88

72.94

73.93

Ganancia promedio devida anual (anos)

Hombres

-

0.38

0.24

0.38

0.32

0.27

0.25

0.24

0.22

0.21

Mujeres

0.41

0.25

0.41

0.33

0.26

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0.23

0.21

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- 116 -

GRÁFICO 11

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O»PANAMA. HOMBRES - COMPARACIÓN DE LAS PROBABILIDADES DE MUERTE ( q ) DE LAS TABLAS

DE VIDA DE LOS AÑOS 1960, 1970 Y LOS QUINQUENIOS DE " *PROYECCIÓN: 1980-1985 Y 1995-2000

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PROYECCIÓN: 1980-1985 Y 1995-2000

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- 118 -

Cuadro 51. PANAMA. ESPERANZA DE VIDA AL NACER (eS) Y RELACIONES DE SUPERVIVENCIA ( ,P M), PORSEXO, PARA LOS QUINQUENIOS 1960-1965 A 1995-2000

Grupos de edad

(e°)" o '

0 - 45 - 9

10 - 14

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45 - 49

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1960-1965

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1965-1970

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Mujerea

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1970-1975

Hombres

64.95

0.943910.980800 993590.992450.988610.986350.985420.983690.980520.975210.966340.952420.928430.889020.819480.707860.46697

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1975-1980

Hombrea

66.29

0.951150.983010 994270.993230.989750.987680.986790.985160.982200.977240.968900.955700.932690.894310.825290.712460.46806

Mujeres

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Grupoa de edad

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Hombres

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1985-1990

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Mujeres

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0.970100.988660.995980.995190.992610.990970.990150.988740.986230.982020.974800.962990,945890.920550.879520.814120.56215

1990-1995

Hombrea

69.84

0.967940.988320.995940.995170.992620.991040.990280.988960.986590.982610.975820.964800 944910.910200.843880.728680.47298

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72.94

0.974650.990130.996460.995740.993440.991940.991160.989840.987500.983560.976790.965580.949100.924230.883300.816920.56302

1995-2000

Hombres

70.88

0.972180.989710.996400.995700.993410.991970.991260.990040.987850.984170.977860.967540.948730.915360.850310.734780.47514

Mujerea

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0.978520.991430.996890.996240.994180.992810.992080.990840.988680.985020.978670.968070.952240.927930.887220.820030.56409

- 119 -

Migración Internacional:

El análisis efectuado basándose la distribución de lapoblación por sexo y edad, según los censos de 1960 y 1970,para estimar la mortalidad y conocer el posible grado deomisión en el registro de los mismos, sugirió la necesidadde analizar también, en esta ocasión, el tercer factor de-terminante del crecimiento poblacional, la migración inter-nacional.

Se procedió entonces a estimar el volumen y estructurapor sexo y grupos quinquenales de edades de la emigración denativos panameños (E) y de los inmigrantes extranjeros (I),durante el ultimo periodo intercensal, para determinar, fi-nalmente, el saldo migratorio neto (I-E), cuyo detalle apa-rece expresado en el Capítulo I.j punto f) "Migración in-ternacional".

El paso siguiente consistió en proyectar, retrospecti-vamente a 1960, el saldo emigratorio establecido en 1970.Para tal fin, se utilizaron las mismas relaciones de supervivencia intercensales 1960-1970, obteniéndose en esta forma la estimación de la población que originó el saldo emi~gratorio en 1960. Un promedio aritmético de la misma cohorte a las dos fechas, para cada grupo de edades, permitió e7timar el promedio de salidas entre 1960 y 1970, o sea en eTaño 1965, y de allí deducir el número de salidas en losquinquenios 1960-1965 y 1965-1970.

Los saldos netos de la migración internacional asi es-tablecidos, además de conciliar los censos de 1960 y 1970 conlas estadísticas vitales del periodo (nacimientos y defunci£nes) , se utilizaron en el cálculo de la población hasta elaño 2000, formulando una hipótesis de constancia en su com-portamiento futuro.

- 120 -

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Población por sexo y grupos quinquenales de edades:

Con relación a la población censada, la primera evalúaci6n suele dirigirse al grupo de personas con menos de 5años de edad, que generalmente es la afectada por omisión,en los recuentos censales.

De manera que, a partir de los nacimientos registrados,ocurridos durante los aflos 1965-1969, lo cual supone:1) que los nacimientos ocurridos durante esos aflos están ca-balmente registrados; 2) que las defunciones que ocurren en-tre esos nacimientos también hayan sido cabalmente registra-dos, y 3) que la migración internacional en esas edades es nula, se obtuvo una estimación de la población menor de 5 aflo7al lo. de enero de 1970.

Esta estimación resultó mayor que la cifra censal proyectada a esa fecha, lo cual permite apreciar una diferenciaque puede atribuirse a omisión en el empadronamiento, quealcanza al 57o en los hombres y al k% en las mujeres. La omisiön mayor se da en los menores de 1 año, que es de 10% paraambos sexos.

Estas medidas de omisión fueron consideradas paraefectuar el ajuste de la población censada en 1970, ademásde correcciones en el resto de las edades, siguiendo el procedimiento que se describe a continuación:

a. Se estimaron Índices de masculinidad corregidos por edadpara la población censada en 1960, los que constituyenun promedio ponderado de los Índices de masculinidadcalculados, en forma separada, para la población extranjera y la nativa (nacida en el pals). En el último caso, se asimiló el Índice de masculinidad de la pobla-ción estacionaria de la tabla de vida del período 1960-1970, la cual se considera que representa una aproxi-mación del Índice de masculinidad de la hipotética p£blación cerrada de Panamá.

Para obtener los Índices de masculinidad corregi-dos en 1970, se proyectó 10 años el efecto que tiene enel Índice de la población estacionaria, la incidenciade la población extranjera, a fin de hacer coherentesambos indicadores.

b. Una vez estimados los Índices de masculinidad teóri-cos, de la población de cada grupo de edades de 1960 y1970, se obtuvieron para cada grupo de edades en 1970,las siguientes cuatro versiones de la población masculina, al lo. de enero de 1970:

1) Población masculina censada en 1970, proyectada allo. de enero y cerrada por adición del saldo emi-gratorio internacional.

- 122 -

2) Población masculina al lo. de enero de 1960, proye£tada al lo. de enero de 1970, utilizando relacionesde superviviencia masculina, promedio de las esta-blecidas en las tablas de vida elaboradas para losaños 1960 y 1970.

3) Por aplicación de los índices de masculinidad ^mados para el año 1960 a la población femenina de1960, de donde se obtiene una población masculinacorregida, que a sus vez se proyecta 10 años, esdecir, al lo. de enero de 1970.

4) A la población femenina censada en 1970 y mediantela aplicación de los Índices de masculinidad esti-mados para ese mismo año, se obtiene una cuarta es-timación de la población masculina al 'lo. de enerode 1970.

Atendiendo ala procedencia de cada una de las cua-tro estimaciones antes descritas, se adoptan promediosde las cifras que aparecen subrayadas en el cuadro 53,dando lugar a la población corregida masculina al lo.de enero de 1970. La población femenina, a la misma fecha, se obtiene mediante la división de la población ~*masculina corregida al lo. de enero de 1970, por losÍndices de masculinidad estimados para 1970.

Con base en la población corregida al lo. de enerode 1970 y las relaciones de supervivencia del últimoperiodo intercensal, se obtuvo la población de hombres ymujeres corregida, al lo. de enero de 1960.

En el cuadro 55 y el gráfico 13 se pueden apreciarlos valores de la función de error censal (hx) estable-cidos para cada grupo de edades de hombres y mujeres,tanto en 1960 como en 1970. Los resultados obtenidosmarcan omisiones importantes en los menores de 5 añosy en la población de más de 55 años. Sin embargo, en-tre los 15 y 30 años, se aprecia una subenumeración enlos varones, pero en las mujeres ocurre lo contrario.

La población, estimada para 1970 es una poblacióncerrada teórica, de manera que, para tener la poblaciónreal (abierta), se le restó el saldo neto emigratorioestablecido para el período 1960-1970. Esta poblaciónreal estimada al lo. de enero de 1970 se proyectó allo. de julio del mismo año, a fin de tener la pobla-ción inicial de las estimaciones de población elabora-das hasta el año 2000.

- 123 -

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b) Proyección de la población total de la República, por sexo ygrupos de edades: anos 1960 al 2000:

Una vez que se dispuso de la población por sexo y grupos deedades al lo. de julio de 1970, se le aplicaron las relacionesde supervivencia estimadas para los quinquenios de la proyección.De esta manera, se obtuvieron los sobrevivientes de cada 5 años,a los cuales se les dedujo el saldo migratorio internacional res_pectivo, obteniéndose finalmente las estimaciones de la pobla-ción real de la República, cada 5 años.

Retrospectivamente, se estimaron las poblaciones de los años1965 y 1960, utilizando los nivelas de mortalidad, fecundidad yel saldo emigratorio establecido para el periodo intercensal1960.1970.

Por otro lado, también se estimaron los sobrevivientes delos nacimientos ocurridos en cada quinquenio de la proyección,por aplicación de las relaciones de supervivencia, en los perlodos respectivos, atendiendo a la tercera hipótesis de la fecundidad que prevé la continuación de un descenso similar a la ~"tendencia histórica observada entre 1962 y 1970.

i Las cifras de población de las proyecciones se suministranTiasta la unidad, atendiendo a la pequeña magnitud de la pobla-ción del país, ya que si estos valores se dan redondeados a miles, como es lo habitual, en ciertas ocasiones no se podríanapreciar cambios en las cifras, particularmente en aquellas re_lativas a edades especificas y grupos de edades que concentranpoca población. De manera que no debe interpretarse que elloconstituye exactitud en las cifras, ya que, por su propia naturaleza, las proyecciones son aproximaciones de la poblaciónreal, que podría existir en las fechas señaladas, si las hipótesis enunciadas se cumplieran.

Además de las estimaciones de la población por sexo ygrupos de edades que se presentan cada 5 años, se suministranlas cifras de población por edad especifica, hasta los 24 años,para los mismos momentos, y el total de la población para cadaaño calendario.

Se adicionan a estas proyecciones las estructuras por sexoy edad que se derivan para cada momento de las proyecciones,asi como la pirámide de la población resultante para el año2000 y finalmente, los indicadores demográficos que se obtienenpara cada uno de los quinquenios de proyección.

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Cuadro 63. PANAMA. POBLACIÓN TOTAL ESTIMADA POR AÑO, 1960-2000

Año Población; Año Población

1960.

1961.

1962.

1963.

1964.

1965.

1966.

1967.

1968.

1969.

1970.

1971.

1972.

1973.

1974.

1975.

1976.

1977.

1978.

1979.

1980.

1,082,684

1,116,275

1,150,935

1,186,591

1,223,153

1,260,532

1,298,654

1,337,471

1,376,968

1,417,168

1,458,125

1,499,922

1,542,661

1,586,455

1,631,415

1,677,646

1,725,234

1,774,242

1,824,707

1,876,639

1,930,024

1981.

1982.

1983.

1984.

1985.

1986.

1987.

1988.

1989.

1990.

1991.

1992.

1993.

1994.

1995.

1996.

1997.

1998.

1999.

2000.

1,984,826

2,040,992

2,098,465

2,157,180

2,217,081

2,278,115

2,340,241

2,403,425

2,467,636

2,532,839

2,598,987

2,666,015

2,733,834

2,802,336

2,871,416

2,941,009

3,011,170

3,082,183

3,154,743

3,230,207

- 139 -

VI. ALGUNAS IMPLICACIONES ECONÓMICAS, SOCIALES Y POLÍTICAS

De las interrelaciones que existen entre los diversos aspectosque rodean la vida del hombre, obviamente no escapan las variablesdemográficas.

En los capítulos anteriormente discutidos se ha podido apreciarcomo en nuestro país, factores demográficos como la fecundidad, lamigración y la mortalidad, se encuentran asociados con la estructu-ra por sexo y edad de las personas, con factores socio-económicoscomo el estado civil, la educación, la distribución geográfica dela población, la constitución de la familia, la oferta de mano deobra, etc.

Aunque en la mayor parte de estas relaciones no se ha podidodeterminar la causa y efecto entre las variables asociadas, lo quesi es cierto, es que existen diversos grados de asociación entre losfactores demográficos y aquellos que surgen de las estructuras delmedio donde se desarrolla la vida del hombre.

Panamá es un país que se caracteriza por poseer un alto nivelde fecundidad, lo cual ha derivado en un 44 por ciento de poblaciónmenor de 15 años cuya responsabilidad económica potencial recae enel 53 por ciento de la población de 15 a 64 años de edad. En cam-bio, esta misma relación en un país altamente desarrollado como enlos Estados Unidos de Norteamérica, es del orden de 28 por 62. Des.de el punto de vista económico, esta situación marca para Panamá unesfuerzo muy superior para sostener y desarrollar su población juyenil, primero, por la relación que se da en la estructura por edad yen segundo lugar, por las limitaciones de recursos que caracterizana los países latinoamericanos, los cuales se agravan cuando hay quedestinar una proporción importante para la formación que demanda lapoblación juvenil, que como se sabe, solo revierten dividendos cuandoentran a formar parte de la mano de obra.

El análisis de esta misma variable entre las regiones dentro delpaís, en este caso, áreas urbanas y rurales, permite apreciar comolas corrientes internas de población tienden a favorecer la relaciónde dependencia económica en las ciudades mientras que en el campo losmenores de 15 años y la población en edad activa tienden a ser, numé.ricamente, cada vez más semejantes, particularmente en el caso de lasmujeres. A partir de 1960 la proporción de jóvenes menores de quin-ce años es superior a aquellas que integran el grupo 15-64.

Al limitar nuestro análisis a la población económicamente acti-va, se ha podido observar a través de los años, que la importanciarelativa de la población desocupada ha experimentado un leve deseenso en la década del 60, no obstante, sigue siendo crónico el 10 porciento de personas dentro de la población, que necesitan encontraralguna ocupación que les genere ingresos. Este índice es en las mujeres el doble del que se da para los varones, 16.5 por ciento y 7.3por ciento, respectivamente, los que en cifras absolutas suman para1970, alrededor de 50,000 desocupados.

- 140 -

La estructura para rama de actividad señala a Panamá como unpaís eminentemente agrícola, en el que el Sector Primario de la eco.nomía ha evolucionado de 51 por ciento en 1950 a 40 por ciento en1970. Problemas relacionados con la tenencia de la tierra y limitaciones de acceso a los implementos que permiten aumentar su produ£tividad, han dado lugar a una intensificación en su calidad de áreade éxodo económico. No obstante, esta población no se ha volcadoprecisamente en el Sector más productivo de -la economía (Secundario)ya que el mismo ha variado muy poco en los últimos 20 años: de 12.4por ciento en 1950 a 15 por ciento en 1970. Es decir, que más bienhan venido a engrosar el Sector Terciario de Servicios, el cual hallegado a igualar, en volumen, al Sector Primario (40 por ciento).

Según la estimación de la población del país que se presenta eneste documento, Panamá alcanzará en el año 2000 la cifra de 3,230,200personas, lo cual se traduce en una duplicación del volumen de la pablación en los próximos 27 años que restan para que termine la pre-sente centuria.

El comportamiento previsto para los componentes de esta proyec-ción, dan lugar a una tasa de crecimiento que se inicia con un nivelde 28 por mil en el quinquenio 1970-1975 y que se reduce a 24 por milen el período 1995-2000; no obstante, el incremento en números abso-lutos sigue en aumento al pasar de 219,500 personas en el primerquinquenio de la proyección a 358,800 en los últimos 5 años del si-glo XX. Con esto queda revelado que una reducción en la tasa de ere.cimiento, como la que se estima para Panamá en esta proyección, nonecesariamente se traduce en una reducción en el incremento de lascifras absolutas, por el contrario, éste continúa aún en aumento por •su efecto multiplicador, hasta el año 2000.

La trayectoria que se supone habrá de experimentar la poblacióndel país en los próximos años, hace meditar sobre las implicacionesde tipo socio-económico-cultural que vienen aparejadas con este cr£cimiento.

En el aspecto económico, la proyección de población ofrece unpanorama favorable en cuanto a la relación de dependencia, o sea,aquella que se establece entre la población menor de 15 años sumadaa la de 65 años y más, con la población que se encuentra dentro delas edades limites de la actividad económica, 15 a 64 años. Dicharelación se reduce de 910 en 1970 a 724, en el ano 2000. Este girofavorable de la relación de dependencia está determinado por el canjbio que experimenta la estructura por edad de la población, la quepor efecto del descenso de la fecundidad da lugar a un'aumento en laedad mediana de 18 años en 1970 a 21.3 años en el 2000.

Como es de esperar, este cambio en la estructura trae como r£sultado que la población de 15 a 64 años de edad se incremente másrápidamente que la del resto de las edades, lo cual se aprecia al o¿servarse en dicho grupo, un aumento de 145 por ciento en los 30 añosde proyección, llegando a constituir un núcleo de 1,874,000 personasen el año 2000, número superior a la actual población de toda la Re-pública.

- 141 -

En este potencial humano, si se mantiene la tasa de participa-ción económica de 58 por ciento que revelan los últimos censos, en elaflo 2000 se habría de tener 1,086,000 personas económicamente activas,o sea, aquellas que ofrecen la mano de obra disponible para la produc.ción de bienes de servicios.

Esta población, comparada con el volumen de la población económicamente activa de 10 años y más, suministrada por el censo de 1970,destaca un aumento de 122 por ciento en 30 años; lo cual se traduceen la necesidad de crear alrededor de 20,000 nuevos empleos cada aflo,sólo para absorber la mano de obra que se genera por el crecimientodemográfico. No obstante, para lograr un análisis refinado en estamateria, se hace necesario cuantificar las entradas y salidas de laactividad, lo que obviamente reducirla la cifra antes estimada, sinembargo, también se hace necesario considerar los desplazamientosque produce la aplicación de la tecnología moderna, que tiende aacrecentar el desempleo cuando la máquina reemplaza al hombre en elproceso de producción.

La tendencia histórica indica que la importancia relativa delnúmero de analfabetos ha venido disminuyendo en el país en forma so.stenida. En los últimos 30 años, es decir, en el lapso en que suelereemplazarse una generación por otra, la proporción de analfabetosse redujo a la mitad, al pasar de 37 por ciento en 1940 a 18 por ciejito en 1970, respecto a las personas de 10 aflos y más de edad (exclu-ye indígenas). No obstante este marcado descenso relativo, en núm£ro absoluto de personas que no saben leer ni escribir ha seguido aumentando en el país, lo cual afectaba a más de 200,000 personas de 10años y más de edad, en 1970 (incluyendo Indígenas). Factores que tienen que ver con la estructura demográfica del país, como es su acele.rado crecimiento, la importante dispersión demográfica de la pobla-ción campesina que dificulta el acceso a las escuelas, y problemas deíndole familiar vinculados a la situación económica, que evitan o pos.tergan el ingreso del niño a la escuela, son algunos de los factoresque frenan, en cierta medida, los efectos positivos de las inversio.nes que se realizan en el sector educativo.

En provincias como Darién, Veraguas y Bocas del Toro, de bajo nivel de desarrollo y de alta dispersión demográfica, el porcentaje deanalfabetos es 5 veces mayor que el de la provincia de Panamá, ele-vándose el analfabetismo a más del 40 por ciento.

En la población de 7 a 15 años de edad, si se descuentan aque-llas personas que han terminado la escuela primaria y las que haningresado a la secundarla u otro tipo de institución, aproximadamen-te el 88 por ciento de esta población deberla asistir a algún gradode enseñanza del nivel primario. No obstante, en 1970, al compararla población empadronada en dichas edades, después de haberse aplicado la relación anterior y compararlas con la matricula escolar, seobserva que dejó de ingresar a la enseñanza elemental el 16 por cieijto de esta población, cifra semejante a la observada 10 años atrás.

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En cuanto al nivel educativo, cabe destacar la situación obser-vada en los jefes de familia. Alrededor de un 40 por ciento de éstosno han cursado más de 4 años de estudios en toda la República, y porotro lado, se observa una relación inversa entre el nivel educativo yel tamaño del hogar. Entre mayor es el número de personas por hogar,menor es el nivel educativo del jefe de familia.

Respecto a las proyecciones de población que se presentan en es-te documento, conviene referirse a la importancia de las personas queintegran el grupo de 6 a 15 aflos de edad, las cuales, de acuerdo alas disposiciones legales vigentes en el pals, tienen la obligaciónde asistir a las escuelas de nivel primario.

En este sentido, la estimación nos indica que dicha poblaciónse duplicará en los 30 años de proyección, lo que dará lugar a un aumentó anual en su volumen de 12,500 personas. Si se considera quealrededor del 70 por ciento de esta población se matricula en el ni-vel primario de la enseñanza, ya que deben excluirse aquellos niñosque retardan su ingreso a la escuela, los que pasan al nivel secundario antes de los 15 años y finalmente los marginados; este grupo depoblación demandará, en promedio, cada año, el aumento de la matrlcala primaria en un mínimo de 8,800 alumnos.

Estas cifras darán lugar a que la matricula registrada en lasescuelas de instrucción elemental en 1970, se duplique para el año2000. De manera que para mantener las'relaciones de 30 niños por aula y maestro, que suministran actualmente las estadísticas de educa-ción, habrá, necesidad de disponer cada año de un mínimo de 290 nuevasaulas y docentes, al servicio de la educación elemental.

Si se tiene presente que el 95 por ciento de la educación primaria está a cargo del Estado, y se utiliza además como constante, elcosto por alumno establecido para el año 1970 (B/81.00); se puedenestimar los recursos mínimos que deberá canalizar el gobierno paraatender la educación elemental en el año 2000. Esta simple relaciónnos indica la necesidad de elevar a la suma de 40 millones de Balboasel presupuesto nacional dedicado a este nivel de la educación, lo queconstituye una duplicación del mismo en 30 años. Este aumento serlautilizado solamente para financiar los gastos de la educación elemen-tal, exigidos exclusivamente por el crecimiento demográfico, o sea,sin considerar aumentos por mejoramiento en la calidad de la enseñaijza y aquellos que son pertinentes por la elevación del costo de la vida.

Obviamente que la población juvenil no sólo es motivo de interésen lo que respecta a la educación, sino también en el campo de la sa-lud, alimentación, vestuario, etc. En este sentido cabe destacar, encuanto a las necesidades de salud, a la población de ambos sexos conmenos de 5 años de edad. Esta reducirá su importancia, en términosrelativos, al pasar del 16.7 por ciento en 1970 a constituir el 13.4por ciento de la población total, en el 2000. Sin embargo, su volu-men aún sigue aumentando, de 243,600 en 1970 pasarla a constituir ungrupo de 433,800 personas a fines del siglo, lo cual da lugar a un ijicremento de 78 por ciento en 30 años.

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Las estadísticas relativas a la asistencia social en Panamá in-dicaron, para 1970, la existencia de 6 médicos y 7 enfermeras en sexvicio por cada 10,000 personas que habitan el país. Si estas relacio.nes se mantuvieran constantes en el tiempo, la proyección de pobla-ción señala la necesidad de disponer de los servicios de alrededorde 1,900 médicos y 2,300 enfermeras, en el ano 2000; lo cual significaria incorporar, anualmente, cerca de 30 médicos y 40 enfermeras,sólo para cubrir la demanda del aumento de la población, o sea, sinconsiderar las vacantes que suelen producirse en el sector por diver-sos motivos.

La distribución geográfica de la población panameña es otro delos aspectos interesantes de resaltar, por su vinculación con los ía¿tores demográficos. En 1950 las localidades de menos de 500 habitantes, que constituyen centros de población muy pequeños, representabanel 98 por ciento de las localidades del país, donde vivfa la mitad dela población del Istmo. Aunque a través de los 20 años transcurridoshasta 1970, se deja sentir una tendencia lenta hacia la concentraciónde la población en localidades más grandes, al descender en 1970 lapoblación que vive en estas localidades al 38 por ciento, la poblaciónno se ha dirigido hacia ciudades de mediano tamaño (tales como de 500a 25,000 habitantes), sino que más bien esta concentración se ha vol-cado en ciudades de 25,000 habitantes y más; las cuales tenían el 22por ciento de la población total del país en 1950, elevándose estarelación a 37 por ciento en 1970. Mientras que en 1950 vivían en lacapital, 1 de cada 6 personas de todo el territorio nacional, actualmente esta relación es de 1 a 4.

Las consecuencias lógicas de este fenómeno es que, mientras en lapoblación dispersa se dificulta la elevación del nivel de vida de loshabitantes, ya que resulta sumamente oneroso y poco factible, poner alalcance de estas comunidades los elementos básicos del cambio socio-económico, en el otro extremo que caracteriza la concentración de lapoblación en pocas áreas, se hace cada día más difícil proveer a losnuevos pobladores de los elementos vitales que exige una vida decorasa.

Entre 1965 y 1970, el último censo indicó que cambiaron su pro-vincia de residencia un poco más de 85,000 personas. Cabe destacar,en este sentido, que la Provincia de Panamá, donde está situada lacapital del país, recibió un promedio anual de 10,500 inmigrantes,siendo por tal motivo casi la única provincia que tuvo un saldo migratorio positivo en estos 5 años, siguéndole muy alejada en cuanto amagnitud, la Provincia de Bocas del Toro. Respecto a la Importanciarelativa de la emigración, en estos cinco años la provincia de Dariénperdió 1/5 de su población residente en 1965, siguiéndole en orden deimportancia: Los Santos, Herrera, Veraguas y Coclé con 1/10 de pérdida.

El aumento neto de las viviendas particulares ocupadas, en losúltimos 10 años, ha sido de 30 por ciento, es decir, ligeramente infe.rior al crecimiento de la población.

Hemos visto mejorar las condiciones estructurales y funcionalesde las viviendas. Pero a pesar de toda la inversión dirigida hacia

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este sector de la economía, hemos podido también capear como entre1960 y 1970 han proliferado un importante porcentaje de viviendas dematerial poco durable (40 por ciento), sin abastecimiento de agua potable (46 por ciento), sin servicio sanitario (38 por ciento), acon-tecimientos que han venido afectando en mayor medida a los sectorescampesinos de nuestro país.

En Panamá, el promedio de personas por cuarto asciende a 2.2en toda la República, pero este índice presenta una gran variabili-*.dad de acuerdo al tipo de vivienda, pasando de 1.3 en los apartameritos a 3.3 en las viviendas improvisadas, lo cual da lugar a que porlo menos en el 16 por ciento de la población del país (que habitancasas de vecindad e improvisadas) se dé la relación de 3 personaspor cuarto. Por otro lado, cabe resaltar, que aproximadamente 1/3de los habitantes del Istmo ocupan casas que no disponen de una ha-bitación especial para dormitorio.

El contenido de este documento ha pretendido dar una visión panorámica de la demografía panameña y sus relaciones con la vida so-cial y económica de la población. Hemos podido apreciar cambios es,tructurales positivos, pero ante todo, hemos intentado destacar losdiversos problemas que confrontan los habitantes del Istmo, y cómose vinculan éstos con la estructura y dinámica de la población.

Todo ello nos mueve a hacer énfasis en la necesidad crecientede incorporar la variable demográfica en los programas de desarro-llo económico y social del país. Y además, nos hace meditar sobrela necesidad de ser más abarcadores, en cuanto a los conceptos dedesarrollo integral de los pueblos que se han manipulado hasta aho-ra. Si como se afirma, todas las acciones del hombre están encami-nadas a mejorar su condición de vida, obviamente que el factor po-blación debe formar parte de toda actividad que tienda hacia estefin. De manera que, cuando hablemos de políticas económicas y so-ciales, adicionemos a esta expresión el término: "política demográfica."

A manera de ejemplo se inserta en este documento la definiciónque se le dio a este concepto (Política Demográfica), en un Semina-rio realizado en Latinoamérica, el cual puede servir de guía a nue.stros pueblos: "Conjunto coherente de decisiones que conforman unaestrategia racional adoptada por el sector público, de acuerdo a lasnecesidades y deseos de las unidades familiares y la colectividad, alos efectos de influir directamente sobre la magnitud probable de lapoblación, su composición por edades, el tamaño de la familia y ladistribución regional o rural-urbana de los habitantes, con el finde facilitar la consecusión de los objetivos del desarrollo. Dichapolítica deberá considerar y evaluar las influencias que sobre es-tas variables tienen los cambios en los procesos sociales, especialmente en educación, vivienda, salud y empleo". (26)

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NOTAS MARGINALES

(1) Censo de Población, 1940.- "Vol. X. Compendio General". Contraía.ría General de la República, Oficina del Censo. Panamá, octubrede 1945.

(2) Censos Nacionales de 1970.- "Vol. I. Lugares Poblados de la Repú.blica",- Contralorla General de la República, Direcciön de Esta.dística y Censo. Panamá, abril de 1972.

(3) Miro, Carmen A.- "Apuntes para una política demográfica del Esta-do Panameño". (Conferencia dictada en el paraninfo de la Univer.sidad de Panamá, 30-X-53). Panamá, febrero de 1954.

(4) Censos Nacionales de 1970.- "Resultados Generales".- ContralorlaGeneral de la República, Dirección de Estadística y Censo.- Pa-namá, septiembre de 1971.

(5) A. Grenfell Price.- "White Settlers in the Tropics. American Geo.graphical Society".- New York, 1939. -

(6) Sosa y Arce.- "Compendio de Historia de Panamá".- Ed. "El Diariode Panamá", 1911.

(7) Population Reference Bureau, Inc . - "Cifras de Población Mundial(Información sobre la población de 163 países)", 1973.- Bogotá,Colombia. Octubre de 1973.

(8) Médica, Vilma N.- "El crecimiento de la población panameña en elperíodo 1950 a 1980'.'- Suplemento de Estadística Panameña, 1967.

(9) Médica, Vilma N.- "Estimación de Indicadores Demográficos de laRepública de Panamá para el período 1950-1970 y proyecciones depoblación por sexo y grupos de edades, años 1960 a l 2000?- CELA-DE, Santiago de Chile, 1973.- (Por publicar).

(10) Médica, Vilma N.- "Uso de la información relativa a l orden del na.cimiento, proporcionada por los registros v i ta les de Panamá yChile , para derivar estimaciones de la fecundidad". Notas de PQ.blación, Vol. 4, abri l 1974.- CELADE, Santiago de Chile.

(11) Brass, William.- "Seminario sobre métodos para medir variables dg_mográficas (fecundidad y mortalidad)".- D.S.- 9, CELADE, San José,Costa Rica.- 1971.

(12) Naciones Unidas.- "Boletín de población No 7, 1963.- con especialreferencia a la situación y las tendencias de la fecundidad en e lmundo",- Nueva York, 1965.

(13) Médica, Vilma N.- "Diferenciales de la fecundidad, en la poblaciónpanameña'.'- Panamá, 1967 ( inédito) .

(14) Araica, Hildebrando. - "Informe de la encuesta de fecundidad de laciudad de Panamá, año 1964".- Suplemento de estadística panameña,1966.

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(15) Elizaga, Juan Carlos.- "Métodos demográficos para el estudio dela mortalidad".- CEIADE, Santiago de Chile, 1969.

(16) Benjamin, B.- "Social and Economie Factors Affecting Mortality". -Mouton and Co., La Haya-Paris, 1965.

(17) Medica, Vilma N.- "Mortalidad en la ciudad de Panamá, 1950-1960".-E/CN. CE1ADE/C.30.- Santiago de Chile, 1964.

(18) United Nations.- "Population Bulletin of the United Nations No 6",1962.- Tables V. 32, V.33 and figure V. 10.

(19) Naciones Unidas, CEIADE.- Programa IMIIA - "Investigación MigraciónInternacional de Latino América"., Programa Censos de 1970. San-tiago de Chile, 1972.

(20) Naciones Unidas: Manual II- "Métodos para evaluar la calidad delos datos básicos destinados a los cálculos de la población".(ST/SOA/Serie A ) . Estudios sobre población, No 23, 1955).

(21) Camisa, Sulma C. "La nupcialidad femenina en América Latina duran.te el periodo intercensal 1950-1960". (Serie AS-No 10, CELADE-Subsede, San José, Costa Rica, 1971).

(22) Censos Nacionales de 1970. Vol. II. "Características de la Vivien.da" (Dirección de Estadística y Censo, Panamá, 1973) (cuadro 9).

(23) Elizaga, J. C. y Mellon, R. "Aspectos demográficos de la mano deobra en América Latina" (CELADE, Santiago de Chile, 1971) (Pági-na 53).

(24) Brass, William. On the Scale of Mortality, contribución a "Biolog£cal Aspects of Demography", editado por William Brass, Taylor andFrancis Ltd., Londres, 1971.

(25) Bourgeois-Pichat, J., Essai sur la Mortalité "Biologique" de l1

homme, Population, 1952, No 3, Juillet-Septiembre, Paris, 1952.

(26) OEA: "Bases de acuerdo del Seminario preparatorio", reuniones sobrepolíticas de población en relación al desarrollo en América Latina.Seminario preparatorio, febrero 1967. (Tomado del documento SerieA/68, abril, 1968 - Carmen A. Miró, CELADE).

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DEC-Contraforía General

980-2100/Vìi I-1974